Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
VALORACION DE LAS
CONSTANTES VITALES
Profesora: Alumna:
María Mijares
Hay cuatro signos vitales principales que los médicos y otros profesionales de salud examinan
de forma sistemática:
Temperatura corporal
Presión arterial
Frecuencia respiratoria
Presión arterial: de 60/30 mmHg a 90/62 (igual que lactante menor) mmHg.
Pulso o frecuencia cardíaca: 120-160 (en lactante menor) o 110-130 (en lactante mayor) latidos
por minuto.
Frecuencia respiratoria: 20-40 (en lactante menor) o 20-30 (en lactante mayor) ciclos por
minuto.
Pulso o frecuencia cardíaca: 100-120 (niños de 2-4 años) a 100-115 (de 6-8 años) latidos por
minuto.
Presión arterial: 78/48 mmHg a 112/78 mmHg (en niños de 2 años); 85/52 mmHg a 114/85
mmHg (en niños de 8 años); 95/58 mmHg a 135/88 mmHg (en niños de 12 años).
Frecuencia respiratoria: 20-30 (niños de 2-4 años) a 20-25 (de 6-8 años) ciclos por minuto.
Los valores normales de la tensión varían según la edad. Pero como referencia puedes tomar
los siguientes:
Antes de analizar los mecanismos que regulan la presión arterial, se debe puntualizar los
factores más importantes de los que depende la presión arterial debido a que todos los
mecanismos de regulacion funcionan a través de ellos. Estos factores son el gasto cardíaco y la
resistencia periférica total.
Gasto cardiaco y retorno venoso: Se define gasto cardíaco o volumen minuto como la cantidad
de sangre bombeada cada minuto por cada ventrículo. De esta forma el flujo que circula por el
circuito mayor o menor corresponde a lo proyectado por el sistema de bombeo. Se calcula
mediante el producto del volumen sistólico, (volumen impulsado en cada latido cardíaco) por la
frecuencia cardiaca (número de latidos o ciclos cardíacos por minuto).
Resistencia periférica total: La resistencia vascular es la resistencia que se debe superar para
empujar la sangre a través del sistema circulatorio y crear flujo . La resistencia ofrecida por la
circulación sistémica es conocida como la resistencia vascular sistémica ( SVR ) o puede ser
llamado a veces por el mayor plazo la resistencia periférica total ( TPR ), mientras que la
resistencia ofrecida por la circulación pulmonar es conocida como la resistencia vascular
pulmonar ( PVR ). La resistencia vascular sistémica se utiliza en los cálculos de la presión
sanguínea , el flujo de sangre , y la función cardiaca. La vasoconstricción (es decir, disminución
en el diámetro de los vasos sanguíneos) aumenta SVR, mientras que la vasodilatación (aumento
del diámetro) disminuye SVR.
Los de a largo plazo o de acción lenta: Analizaremos el importante papel del sistema sistema
volumen líquido riñón, muy eficaz en dicha regulación.
Si aumenta la presión arterial se excitan los barorreceptores, estos envían señales al centro
vamosotor, produciéndose inhibición simpática y excitación vagal, ambos producen sobre el
corazón, disminución de la frecuencia cardiaca y la fuerza de contracción. Por su parte, la
inhibición simpática produce vasodilatación con disminución de la resistencia periférica total,
ambos factores disminuyen la presión arterial.
Cuando la presión arterial disminuye, como sucede cuando una persona se pone de pie,
disminuye el ritmo de descarga de los barorreceptores y con ellos los estímulos enviados al
centro vasomotor, en consecuencia se produce una excitación simpática e inhibición vagal, que
sobre el corazón producen aumento de la frecuencia cardiaca y la fuerza de contracción por su
parte el estímulo simpático sobre los vasos aumenta la resistencia periférica total. Ambos
factores aumentan la presión arterial garantizando el flujo sanguíneo a las estructura del
encéfalo y otros órganos vitales.
La disminución de la presión arterial origina falta de riesgo sanguíneo con hipoxia en los
quimiorreceptores, los cuales se excitan y envían señales al centro vasomotor que desencadena
una excitación simpática produciéndose vasoconstricción con aumento de la resistencia
periférica total, además aumenta la frecuencia cardiaca y fuerza de contracción con aumento
del gasto cardíaco. Estos dos factores, el aumento del gasto cardíaco aumentan la presión
arterial. Este mecanismo solo se pone de manifiesto cuando la presion arterial media desciende
a valores de 80 mmHg.
Reflejos atriales y de la arteria pulmonar: Tanto en los atrios como en las arterias
pulmonares existen receptores de distensión denominados receptores de baja presión.
Estos desempeñan un importante papel para minimizar las alteraciones de la presion
arterial en respuesta a los incrementos del volumen sanguíneo.
Si el volumen sanguíneo aumenta, ocurre distensión de los atrios, con lo cual se produce
aumento de eliminación de orina por el riñón, a su vez se incrementa la liberación péptido
natriurético atrial y disminuye la secreción de hormona antidiurética por el hipotálamo, ambos
factores contribuyen al aumento de la diuresis. También la distensión de los atrios incrementa
la frecuencia cardiaca, recuerden que el atrio derecho se encuentra el nodo sinoatrial que
constituye el marcapaso cardíaco.
Respuesta isquémica del SNC: La mayor parte del contro nervioso de la presion arterial
se lleva a cabo por los reflejos estudiados ñ, sin embargo cuando la presión disminuye a
valores entre 15 y 20 mmHg, se compromete el riesgo sanguíneo del centro vasomotor,
con lo cual se produce una respuesta vasoconstrictora generalizada que se denomina
respuesta isquémica del sistema nervioso central, esta garantiza un aumento de la
presión arterial cuando la misma desciende a valores letales.
Sistema renina angiotensina: La renina es una proteína con carácter enzimático, producida en el
riñón que actúa sobre una proteína plasmática denominada sustrato de renina h la convierte en
angiotensina I, la cual rápidamente se convierte en angiotensina II al pasar pr los capilares
pulmonares en presencia de una enzima convertidora. La angiotensina II persiste poco tiempo
en sangre siendo inactivada por la angiotensina. Durante su permanencia en sangre la
angiotensina II ejerce dos efectos principales: vasoconstricción aumento de la presión arterial, y
en un plazo más prolongado retención de sodio y agua por los túbulos renales.
3. Mecanismos intrínsecos: Actúan en un período de tiempo más prolongado que los nerviosos
y son: El desplazamiento líquido capilar dinámica capilar: reabsorción - filtración en
dependencia del comportamiento de las presiones a nivel de los capilares sistémicos,
modificando la volemia.
Mecanismo volumen líquido-renal papel del riñón regulando el flujo sanguíneo a través
de las modificaciones en la volemia y la presion arterial. Modificaciones de las presiones
a niveles de capilares glomerulares (filtración) y a nivel de las capilares peritubulares
(reabsorción)
El brazalete se enrolla alrededor del brazo, sobre la arteria humeral, y se bombea aire
en el con la pera. De este modo se ejerce presión sobre la parte externa de la arteria.
Se sigue introduciendo aire hasta que la presión supere la de la sangre en el interior de
la arteria o, en otras palabras, hasta que esta sea comprimida.
En ese momento no puede oírse latidos mediante un fonendoscopio colocado sobre la
arterial humeral en el pliegue del codo, junto al borde interno del músculo bíceps.
Liberando lentamente el aire del brazalete, la presión desciende hasta resultar
aproximadamente igual a la presión de la sangre en la arteria.
En ese momento el vaso se abre ligeramente y pasa por el pequeño chorro de sangre,
produciendo ruidos bastante agudos, como el golpeteo, seguidos de ruidos mas
intensos que cambian bruscamente.
Se hacen más apagados y luego desaparecen por completo. Estos ruidos se llaman
ruidos de korotkoff.
El primer ruido de golpeteo aparece cuando la columna de mercurio indica la presión
arterial sistólica. La presión sistólica es la fuerza que la sangre ejerce contra las paredes
arteriales cuando se contraen los ventrículos.
El punto más bajo en el que se pueden oír los ruidos, inmediatamente antes de
desaparecer, es aproximadamente igual a la presión diastólica o fuerzas de la sangre
cuando los ventrículos están relajados.
Retire el estetoscopio y deje que el brazalete se desinfle completamente.
Anota las medidas, con la sistólica por delante de la diastólica (por ejemplo: 130/90).
Esfigmomanómetro aneroide:
Coloque el brazalete alrededor del brazo y ajústelo. La parte inferior del brazalete debe
encontrarse alrededor 2 cm encima del pliegue del codo. El brazalete debe encontrarse
ajustado sin que apriete demasiado (de manera que usted pueda insertar uno o dos dedos
entre el brazo y el brazalete). El tubo de alimentación de aire del brazalete debe
encontrarse a lo largo de la arteria braquial hacia la palma de la mano del paciente la cual
debe estar abierta.
Cierre la válvula de la perilla, dándole vuelta al tornillo hacia la derecha. El tornillo se
verá más corto.
Coloque la campana del estetoscopio sobre la arteria braquial al nivel del doblez del
brazo y ponga los auriculares en sus oídos. El brazo del paciente debe encontrarse
estirado sin tensión ni rigidez.
Infle el brazalete presionando de manera regular la pera hasta que la presión indicada en
el manómetro se encuentre a alrededor 180 – 200 mmHg.
Desinfle el brazalete abriendo la válvula de presión. Cuando la presión del brazalete
alcance el valor de la presión sistólica, la sangre comienza a circular nuevamente y se
escucha un ruido en el estetoscopio. El valor de presión indicado en ese momento en el
manómetro corresponde al valor de la presión sistólica del paciente. Por otro lado,
cuando la presión del brazalete alcanza el valor de la presión diastólica, la sangre circula
libremente y no se escucha nada en el estetoscopio. El valor de la presión indicado en ese
momento en el manómetro corresponde al valor de la presión diastólica del paciente.
Retire el estetoscopio y deje que el brazalete se desinfle completamente.
Anota las medidas, con la sistólica por delante de la diastólica (por ejemplo: 130/90).
Técnicas:
Siéntate en una silla con la espalda recta, correctamente apoyada en su respaldo y sin
cruzar las piernas ni los tobillos.
Coloca tu antebrazo sobre una superficie plana y estate de forma tranquila y relajada.
Coloca el brazalete justo encima del pliegue del codo. Debe estar a la altura del corazón,
con la palma de la mano hacia arriba.
Cierra el brazalete con el uso del velcro.
Pulsa el botón Inicio/Star (a partir de aquí, es muy importante que permanezcas
totalmente quieto/a y sin hablar).
Comenzará el inflado automático, bombeando aire desde la unidad hacia el brazalete
por el tubo del manguito. Notará que se hace presión en el brazo, incluso puede apretar
mucho casi llegar a molestar ( forma parte del proceso).
Finalizado el inflado, se desinflará el brazalete y automáticamente aparecerán las
lecturas de presión arterial sistólica (tensión alta) y diastólica (tensión baja) en pantalla
LED.
Para utilizarlo es necesario que repose sobre una mesa o que esté colgado en la pared. De
lo contrario, el resultado no sería tan fiable.
Se utiliza un estetoscopio para escuchar el pulso del paciente debajo del brazalete, por lo
que es necesario que la persona que lo utilice tenga experiencia con ello para poder
determinar correctamente la tensión máxima y mínima.
Dentro de los tensiómetros digitales, podemos encontrar dos tipos según su colocación: