Experimento para niños: Fantasmas

Espumosos
La época de Halloween nos trae una excusa maravillosa para crear utilizando toda la
inspiración que hay alrededor. En casa aprovechamos para hacer
diferentes artividades relacionadas con los personajes de esta época como este experimento
con fantasmitas espumosos. Este es uno de nuestros experimentos favoritos pues está lleno
de color y diversión.
Necesitas:

 Vasos desechables blancos

 Vinagre (suficiente para llenar cada frasco hasta la mitad)

 Bicarbonato de sodio

 Jabón líquido de lavar platos

 Colorantes vegetales, o témperas líquidas

 Marcador negro

Decora tus vasos con caras de fantasmas. Nosotros las hicimos muy amigables.
Llena cada recipiente con vinagre hasta la mitad luego agrega unas gotas de colorante
vegetal y mezcla.
Coloca alrededor de 2 cucharadas de jabón liquido y revuelve de nuevo

¡Y es hora de ver nuestros fantasmas espumosos!

Agrega una cucharadita de bicarbonato de sodio en la mezcla y….
Repite si el proceso en cada fantasmita y agrega más bicarbonato una vez haya pasado el
efecto para que la diversión continúe.

¿Cómo funciona este experimento?: El bicarbonato de sodio es considerado un elemento

alcalino y el vinagre un ácido que al mezclarse crean una reacción química para
neutralizarse que es conocido como dióxido de carbono y este forma unas burbujas que
vimos en nuestro experimento de volcanes. Al agregar el jabón líquido en esta reacción
hace que las burbujas creen mucha espuma que permite que el experimento dure por mucho
tiempo.
Puedes encontrar más experimentos caseros para niños en nuestra sección Experimentos.

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 Limón volcánico
Este experimento es muy simple pero bastante llamativo. Para
prepararlo necesitáis lo siguiente:

1. Limones de tamaño grande

2. Colorante alimentario (opcional)
3. Bicarbonato sódico
4. Cucharilla o espátula
5. Bandeja
Simplemente tenemos que cortar los limones por la mitad y colocarlos sobre una
bandeja. Lo mejor es "amasar" los limones antes de cortarlos, o si ya los habéis
cortado, con la ayuda de un tenedor, exprimir un poco el limón con cuidado que no
se vuelque.

Cuando tenemos el limón preparado, podemos añadir un poco de colorante

alimentario. No es necesario, pero hace que el experimento sea mucho más
atractivo y visual. Una vez todo preparado, solo tenemos que añadir el
bicarbonato con la ayuda de una espátula.

Veréis como poco a poco, nuestro limón volcánico entra en erupción. Gracias al

colorante alimentario, podremos observar perfectamente la reacción química. En
este caso, el bicarbonato reacciona con el ácido cítrico del limón, produciendo de
nuevo, entre otras cosas, el dióxido de carbono que provoca las burbujas que
podemos observar.
 Inflar un globo
Para hacer este experimento necesitáis:

1. Bicarbonato sódico
2. Vinagre
3. Una botella
4. Un globo
5. Un embudo
6. Una bandeja
Por un lado ponemos un poco de vinagre en una botella, y por
otro, con la ayuda del embudo, llenamos el globo con un poco de
bicarbonato (si antes de empezar este proceso inflamos un poco
el globo, es mucho más sencillo).
Con cuidado, y sobre una bandeja para evitar accidentes,
colocamos el globo en la boca de la botella, y lo sujetamos
firmemente con la mano. Luego volteamos el globo para dejar
caer el bicarbonato...y empieza la magia. Veréis como gracias al
dióxido de carbono que se genera al mezclar los dos
ingredientes, el globo se va hinchando. Hay que sujetar bien el
globo a la boca para evitar que el globo salga volando.