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La ingeniería genética
Cuando los científicos comprendieron la estructura de los genes y cómo la información que
portaban se traducía en funciones o características, comenzaron a buscar la forma de
aislarlos, analizarlos, modificarlos y hasta de transferirlos de un organismo a otro para
conferirle una nueva característica. Justamente, de eso se trata la ingeniería genética, un
conjunto de metodologías que permite transferir genes de un organismo a otro. Como
consecuencia, la ingeniería genética sirve para clonar fragmentos de ADN y para expresar
genes (producir las proteínas para las cuales estos genes codifican) en organismos
diferentes al de origen. Así, es posible no sólo obtener las proteínas recombinantes de
interés sino también mejorar cultivos y animales. Hasta el momento se ha utilizado la
ingeniería genética para producir, por ejemplo:
Los plásmidos son moléculas de ADN circulares, originalmente aisladas de bacterias y que
pueden extraerse de las mismas e incorporarse a otras, a través del proceso de
transformación. Los plásmidos fueron modificados por los investigadores para ser
empleados como “vectores”. Así, el gen de interés puede insertarse en el plásmido-vector
e incorporarse a una nueva célula. Para seleccionar las células (bacterias o células
animales o vegetales) que recibieron el plásmido, éste lleva, además del gen de interés
(por ej., el gen de la insulina humana), un gen marcador de selección (por. ej., de
resistencia a un antibiótico), que le otorga a la célula que lo lleva la capacidad de
sobrevivir en un medio de cultivo selectivo (medio con antibiótico, en este ejemplo). Las
células que sobreviven se dividen y generan colonias, formadas por bacterias idénticas.
Estas bacterias se denominan recombinantes o genéticamente modificadas. El plásmido
recombinante puede aislarse de estas colonias y transferirse a otras células.
Por esta metodología es posible introducir genes de interés en todo tipo de células,
empleando los vectores y las técnicas propias de cada sistema. Podemos entonces
generalizar los pasos de la ingeniería genética de la siguiente manera:
1. Identificar un carácter deseable en el organismo de origen.
2. Encontrar el gen responsable del carácter deseado (gen de interés).
3. Combinar dicho gen con otros elementos necesarios (vector) para que éste sea
funcional en el organismo receptor.
4. Transferir el gen de interés, previamente introducido en el vector adecuado,
al organismo receptor.
5. Crecer y reproducir el organismo receptor, ahora modificado genéticamente.
ACTIVIDAD: