Los adjetivos determinativos concretan o limitan la extensión del
sustantivo, y expresan una relación de la persona, animal o cosa respecto al espacio, la posesión, la cantidad, etc.: mi coche, muchos alumnos, esa chica.
Forman, junto a los artículos, una clase de palabras: los determinantes. Los
artículos nos indican si la persona, animal o cosa a la que nos referimos es conocida o no; y todos ellos, en general, son palabras variables, de forma que otra de sus funciones es, precisamente, indicar el género y el número de los sustantivos a los que acompañan.
También son útiles para hacer que funcionen como sustantivos los adjetivos: el móvil, lo bonito.
Los determinantes se clasifican de acuerdo con el siguiente esquema:
Determinantes
Determinados el, la, lo, los, las.
Artículos Indeterminados un, una, unos, unas.
Posesivos mi, tu, su, nuestro/a, vuestro/a, y sus plurales.
este, ese, aquel, y sus formas en femenino y
Demostrativos plural.
algún, bastante, cada, cierto, cualquier,
Indefinidos demás, demasiado, más, mismo, mucho, ningún, otro, poco, sendos, todo, varios, etc.
Numerales Cardinales un, dos, tres, cuatro, ...
Ordinales primero, segundo, tercero, cuarto, ...
Interrogativos y qué; cuánto, y sus formas en femenino y
exclamativos plural.
Relativo-posesivo cuyo, y sus formas en femenino y en plural.
Algunos determinantes tienen dos formas, una apocopada, es decir, cortada
al final, y otra plena: podemos decir primer curso, o piso primero; o decir tu amigo o un amigo tuyo, dependiendo de donde coloquemos el determinante, delante (forma apocopada), o detrás del sustantivo (forma plena).
Algunos determinantes, como observarás, son invariables: más, por ejemplo,
no varía; podemos decir no quiero más sopa o no quiero más helado. Tampoco varía respecto al número.
Hay un tipo de pronombres, los pronombres determinativos, que coinciden en
su forma con los determinantes correspondientes. Para distinguir cuándo son pronombres, y cuándo determinantes, fíjate en que los determinantes siempre acompañan a un nombre: Este libro es un tostón (determinante), frente a Pero este no me ha gustado nada (pronombre). Los pronombres de este tipo ocupan el lugar de un sustantivo que ha sido omitido porque se sobreentiende gracias al contexto (en el caso anterior, "este libro").
Tampoco hay que confundir los determinantes y los pronombres
determinativos con los adverbios de cantidad. Esto pasa particularmente con los indefinidos: si decimos, por ejemplo, Tienes que estudiar más, verás que "más" no es adjetivo determinativo, porque no viene seguido de un sustantivo; y que tampoco equivale a ningún sustantivo, por lo cual está claro que no es pronombre; por tanto, indica solo cantidad respecto al verbo "estudiar" (¿Cúanto tienes que estudiar?), y hay que concluir que es un adverbio.