0 calificaciones0% encontró este documento útil (0 votos)
22 vistas1 página
Este documento analiza los contratos bilaterales y unilaterales. Los contratos bilaterales son aquellos en los que las obligaciones recaen en ambas partes, como en los contratos de compraventa y arrendamiento. Los contratos unilaterales son aquellos en los que la obligación corresponde a una sola de las partes, como en el contrato de comodato donde el comodatario asume la obligación de conservar y devolver el bien prestado sin pagar nada al comodante.
Este documento analiza los contratos bilaterales y unilaterales. Los contratos bilaterales son aquellos en los que las obligaciones recaen en ambas partes, como en los contratos de compraventa y arrendamiento. Los contratos unilaterales son aquellos en los que la obligación corresponde a una sola de las partes, como en el contrato de comodato donde el comodatario asume la obligación de conservar y devolver el bien prestado sin pagar nada al comodante.
Este documento analiza los contratos bilaterales y unilaterales. Los contratos bilaterales son aquellos en los que las obligaciones recaen en ambas partes, como en los contratos de compraventa y arrendamiento. Los contratos unilaterales son aquellos en los que la obligación corresponde a una sola de las partes, como en el contrato de comodato donde el comodatario asume la obligación de conservar y devolver el bien prestado sin pagar nada al comodante.
Los contratos bilaterales son cuando las obligaciones son para ambas partes, es decir, las dos partes del contrato se obligan recíprocamente, tal es el caso del contrato de compraventa donde ambas partes se obligan recíprocamente el vendedor a dar la cosa vendida mientras que el comprador a pagar el precio. También el contrato de arrendamiento ya que una de las partes obliga a dar el uso o goce de una cosa por cierto tiempo y la otra que se obliga a pagar por ese uso o goce un precio determinado.
LOS CONTRATOS UNILATERALES
Los contratos unilaterales son cuando la obligación corresponde a una sola de las partes contratantes quedando liberada la otra de obligación alguna, tal es el caso del contrato de comodato, pues la obligación es del comodatario de conservar en buen estado el bien prestado y restituirlo al momento del plazo estipulado para que se termine el contrato, sin que tenga que pagar nada al comodante.