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Dominique YUlairi

.<> El :encuadrecinernatográfico

Dominique Villain
En esta fascinant~ y poderosa obra, Dominique Villain intenta . ' .
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(
.' comprender lo.que ocurre durante la operación del encuadre:cinerria".
tográficO, una de las partes más decisivas de la puesta en ,~$cena de.
El encua,dre" ',' ,
( un filme, que, sin embargo, siempre resulta-un tanto misteriósapara, .
cu?lquier persona que asista por primera vez a. un rodaje, donde las
cinematográfico .'
decisiones a este respecto pasan por múltiplesrn~qiaci<mes,.,.Elliprd>

(
estábasado en un minucioso trabajodelnvestigiH~iÓn préviaCon~j,$':' '
.tente, ene.ntrevista~ con cám.ara~;'op,~ra~q!esy Jécniqos,a::lo.~q~e.':,§e "

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operación?; iCómp.:eqlaborán 'el; realizadof'e·nAafCó.inp6~iGi6n,~.::,: ....... r.'·¡: .. ~::

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y pnnclpalmente, un eo.saY9)rnP~Sclo~:hble que demuestraun·,profundo:~.;-:,:::,,,~,,:,, < '·c"::!.
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Paidós Comunicación Cine Dominique Villain (


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17: J. Aumont, A. Bergala, M. Marie y M. Vemet - Estética del cine


64. A. Gaudreault y F. Jost - El relato cinematógráfico
El encuadre o.

65. D. Bordwell- El significado del filme


1-67. F. Jameson - La estética geopolítica cineInatográfico (
'\ 68. D.Bordwell y K. Thompson -' El arte cinematográfico
. 70. R. C. Allen y. D. Gomery - Teoría y práctica de la historia del cine
7. );72. D. Bordwell- La narración en el cine de ficción
(
73. S. K.racauer- pe paligari a Hitler
75. F. Vanoye- Guiones modelo y modelos degui6n . . (
...76. P. Sorlin..;.cines europeos, sodedcid~s europeas i939~199o. .
. 78.· J: AUnlont,;;Blojointemíinable
80 R· Arnheim:-.El cine como arté
81. S; Kracauer--Teáríadel Cine
?6 V SáDcbez~Biosca':' ElnwntajecinenuÚógrá(icp .
94. D. ViIlain -'o El encua4re cinematográfico· .

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Tí¡ulo original: ¿'oei!alti camém. Le cadrage aL! cinémo. Sumario


Publicéldo en francé~ por Canien; dilcinéma. ÉditíQns de l'Étoile,París

t'raducción de Núria Pujol i Valls

E~ta obra se hn publicado con la ayuda del Mini:;terio Francés de Cultura

Cubierta de Mario Eskenazi

(.

1. ·Encuadi"e o filrhación.................................... :.......................................... 7

2. Encuadre y técnica......................................................................... ~ ..;... 17


El encuadre~ los formatos ....................... ~ ............................... ;....... ~.... 17
1" edi¿'¡ón, 1997. Los principios de filmación .......................... ;......... :...... ...................... 24
Qucd,in riáurosamenle prohibidas ~illla ¡utlori:r,ación escrita de los titulares del «Copyright», I..o8 objetivos ....... ...................... .................. ........................................ 26
b¡tjo las sa~ciones establecidtls en 'tas I.cye~, la reproducci(m total o p¿lrcial de. esta obra
. pór <:uulquier medio opl'()oodill1iento, co1l1premlidos lu n:.progruffa yel tratamiento informático. ·La cámara, el visor............... ........ ........ ........... ........ ............................ 28
yla di~trihU(;iütl de ejemplares !.le dla t\lI::\liante "Iquik!' Q pr¿~u\ino públicos. Fijaciones y movimientos de la cámara: la maquinaria'...................... 38
Éditiol1S de l'Étoile, París
todas las edit;ionc;; en clL.'itellano. 3. El trabajo de encuadre .................................................................~·....... ; 49
Ediciones Pnidós lb.<:!rica. La división del trabajo ................................. :"!'. .............: .........:....... ; ••••• ~O·

MatiarioCubí,92·08021
Y EúitoritlLPaidós, SA¡(::::F
La función del cámara.................................::.:..:...~,.;., ..... ~ .................. 52
Def<~llsa. 599 - Buenos Aires. La práctica del encuadre..................,................................................... . 58
I
\. ...
La preparación de los encuadres ........................................ ~ .............. . 70
ISBN: 84-493-03451-1
Depósito legaÍ: B-5.3()61 j 997
El encuadre, un arte marcial .............................................................. . 74
El cámara y el realizador.................................................................... ¡q

~4. ElDelencuadre
lmprel:io en LibenllJplex, t). L.,
Consütució,19 - 08014 Barcelona
del sonido" .......................................:..................................
Impreso en España - Printed in Spain ~
mudo al sonoro ......................................... :.......:......... .................. .
6 EL ENCUADRE CINEMATOGRÁFICO

. Sonido.in y sonido óff.: .....·, ................:.. :... ~ ................................... ,..... . --t4,


1. Encuadre o fihnaCÍóll
Eldispositivo de toma de'sO:ni,~os, :...... ~ .. :.:;: ....................................... ' 86 (,
'·Los planossonoros.~ ...... :..:, .. :~ ...... :... :.~ ............. ~ .. :............................. :. , -S9
Micros y escucha.:'i.:.,.:;,. .;. ~; ... ~ .. ;'...:.... :~ ;.... :.... :. ;.~.:~~; ....~ .......................... ; 90
La toma de són.ldo:'~na intérpretaci6n... :... :...................................... . 92
c.
5. Lo real, lo encuadrado ............... ;............................ ~ .......................... . 97 ('
El actor y la,¿ámara~: .................................................................... ;... .. 98
La ctlestióndel reálismo.; ..... '..'..:;'... :.. ~ .....: .......................................... .. 100
',¿Cóm()v~ la cáIIlar,a?" ..,.,: ..'.......... :... ;....................,............................... . 102
, Hi tChcock,itenoif; Cocteau .............................................................. . ,103 (
'Lo·no· encuadrable ... ;·.:·................ ,................................... ;; .................. . 105
(
'EI decorado, una reconstitución ....... ;......................... ~ ..........:.. ~ ... :.; ..... '106
(
6. COlIlposición, descomposición ...............~ ...................................'.......... 111
(
El arte 'de la ,composiéión ......,............ ;...,.. ,................. ,..... ~ ................. . 112
El cuadro,conio ócultadot ~;'.. ;." ....:........'., ............. ;.............................. . 113
. .¿Descompbsición?.~·..:... ;: ... :.:., .... ;..... ~ ................................................ . 115 (
La acción directa'en el arte .. :..,...................... ,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,, ..
,

117
, El ,pun~o'de'vista .............,............. ;....... ~ .....'.,......: .................................. . 119
:·Superfi~iey profundidad .............. '................;......... ~ ... ,................... :... . 121
",El découpa~e,:.:....... ;......': •.:......... " ......:...,....'< ......................................... . 126

7:. ,Tr~ peiíc'ulas ... ;..... ,............. ;,." .... :...... :................................................... . 131 El proceso de fabricación de las películas consta de tres grandes fases, im-
lA pasión 'de Ju~/n.~,'deArco:·el prinler p~ano ................................... .. 131 bricadas y a vétes difíciles. de separar~ Simplificando, podríamos decir que la
La soga: filmaclpn ............................................................................. .. 139'
primera fase es la de la preparación; la más tradicional consiste en establecer un
, La venianaindiscreta: er encuadre."... :!; .......................................... .. 144 guión y una sinopsis y después un découpage, es decir,. una cónstrúcción en pla k

.;::-
nos y secuencias. La segunda, el rodaje, es la fase mítica:·obviamente a causa de
8. SóÍo ·es cine ....,.................. ;; .. :...................."............................................... . 151 la presencia de los actores, de las estrellas, aunque también debido al equipo
r'
de especialistas y a un despliegue técnico que. e~ ocasiones; resulta impresionan- \
. Créditos fotográficos .....'...........................'.. ::.; .......;................................. .. 155 te. Es U11 mQmentoque contiene (y se vive con) cierta magia, en plincipio todo
puede ocurrir y,por 10 tánto, quedar fIjado en la p.elícula. La tércera fáse, la dél
montáje, es la más prestigiosa en opinión de los teóricos y de deltos cineastas
para quienes esta operación· da el rittno de ia película, su pulsación interna y, al-
gunas veces,incluso su sentido. En 1930, ~ela Balasz escribía. al respecto: ~<El
mejor encuadre no basta... para dotar a la imagen de' todo su signifIcado. En úl-
timo té~o.éste depende de.la posición de una ihlagen en el interior deJas
otras» Así. los teóricos y cineastas del montaJe Godard-taÍl1-
bién s~~ los que analizan y cuestionan la función del encuadre en el cine y at:ri-
huyen la misma gran importancia aja composición de las imágenes de sus pelí-
culas que al ritmo de su sucesión, puesto que 10 cierto es que, de todOSlllOdos,
se monta 10 que se ha rodado. Si bien también es derto que los grandes CÍneas-
8 EL ENCUADRE CINEMATOGRÁFICO
ENCUADRE O FILMACIÓN
. . 9
tas comparten ,ylseritidode hl. perfección, d~ ia per~ección del.resultado en la
pantalla, y porlbJánJo delg~ión, deleny.uadre, de la luz, del decorado, de laJn-
«operador al visor de una cámara», está tomada del naturaLE1.hecho es lo'
'bastante extraño como para que lo destaquemos y se expÜca por la personali,.
terpretación de lÓ~liCtores,etc.. y despliegan su energía, su intransigerida tánto
dad del fotógrafo, qu~ es un reportero: Marc Riboud. iQuévemos enJa foto? .
en el rodaje cornoeIl ~linontaje~Chaplin;por ejemplo, montaba sus películaS.'
prácticamente iimigen:a iÍmigel1":"':, también lo es que se les puede distinguir, y
avanzar así ellel análisis de ciertas nociones. Se podría construir lanócióll de
encuadre elÍ torno a dos grandes polos y. habría dos concepclones prác~ica:s" y
por ende también teóricas, que no Se limitarían a oponerse sino que acentuarían
unpoló u otro{ dejando claro que, a todos los efectos, existen dos nociones. Al,. . '
gunos cámaras insistirían eh la composición de .los planos, otros en lo que. ocu-
rre en el rodaje: Por ejemplo, réspecto a Chaplin, se referirían menos al encua-
dre y más a lafilinacÍ<5n~ Chaplin; lo. vimos en los programas.de l<evin
Brovvnlow y David Gill, I no sólo filmaba planos de muchas tomas ~n lo cual
Bress,?n, cineasta del encuadre doride los haya, §~ le parece- sino, lcl.que·es .
nlást(tcepcional, filmaba todas las repeticiones dtía escena a medidaqlle se las
iba inventando. Daba por supuesto que la filmación le proporcionaba ideasde
pues,ta ~n escena. ¿Pensaba hallar la inspiración porque la cámara rodaba, o era
el resultado de lo que.había rodado, y él veía durante la proyección, 10 que le
perrriitía av~nzar en su película? Simplerñ~nte filmaba y filmaba hasta que daba
cOllalgo.
Lo que ocurre en el momento del rodajeó y que denominamos filmación o
(
encú~w!í'e, constituye el· objeto de estudio de este libro; para el cual entrevisté
.

a ésp~cialistas, operadores, cámara~ -que vienen a serlo mismo-~ operado-


res-jefe y directores d~ fotografía,z fotógrafos de pIató, realizadores, etc.
í
\, Modestos, ~ veces me remitían a las películas en los siguientes términos: «El
encuadre es demasiado importante para dejarlo en manos del cámara; es la es-
critura del filme».
¿Cómo averiguarlo? ¿Adivinando lo que no se dice y que, por otra parte,
debería ser invisible IJcu'a el espectador: lo que podríamos denominar trabajo
de encuadre? ¿Acaso las fotografías de plató podrían ayudarnos a descubrir lo
que los fotógrafos de pIatá no consiguen explicarse a sí mismos: la colábo-
ración de un cineasta y su cámcu'a, sus iugares respectivos, un instante de su
trabajo?
Para muestra la fotografía anexa, q':le rep~sellta a Satyajit Ray detrás de
su operador en acción. Este último 110 sólo vÍsiQna sino que realmente filma,
(,
no es una fotografía de composición, una puesta en escena a partir de la idea

l. El Chaplín desconocido (1'he Unknown Chaplin, 19HZ).


2.. Se puede distinguir entre {{director de fotogmfía», especialista de la luz en su relación con
el soporte de película, el «operador-jefe>< resp.üllsable del equipo de imagen, técnicos y operarios.
Sin embargo, a menudo se utiliza indistintamente uno u otro término, dado que es frecuente que la Satjíajit Rayen 1956 (foto: Mm Riboud)
misma persona asuma arribas funciones. ....
( .
EL ENCUADRE CINEMATOGRÁFICO 'ÉNCUAD;REO FILMAcióN
10

Un realizador y un operadorsín libertad de movimiento, apretados hasta tal.


punto que Satyajit Ray notíe~pacio-don4:emete~ la mano, .que destaca por
encima del cargador de película, pero cuyo brazo, sm duda, strVe de muro de ('
protección de la cálIlara. Hay que tener en cuénta que la filma~ión se ~es:mo­
lla en la: lndiá, donde la gente sigue los rodajes con una temble cunosldad,
hecho que constituye uno de los obstásulos de trabajar. allá. Segú~.~~t~.~t~t
Ray: para rodar en la India hay que saber filmar a salto. de mata~}~~:d~f.iD.lti­
va, y volvíendoa l,a fotografía, en elencuad~e de la'.m:~ma vemos ~me~~s
treée o catorce cabezas que miran en la díreyción de SatyaJlt Ray, en la drrecclOn
de lá cámara, ,en nuestra direesión (es deéir,:la del fot6graf0}o hacia la ~sce..
n~l que se filma fuera de carnpo, y. que adivinamos por 1~atenci6~ de ctertas
miradas, comó la de Ray. N9S pregu~tarnos aSÍ:cólllounacarencla tan lJ,bso-
lutade espa~io vital-señalamOS la retoi:cid~ postura del cáfuara;- pue(i~ estar .
en el origen de una película aireadáy serena,aérp!, como todos losfilmes de'
Satyajit Ray. . . . . . . .•. . ¡,
Hay' otra foto qué también parecevúdadera, aunque es Illenos seguro. que
lo sea. Verdadera o trucada,la fotografía nosmuestramuchos aspectos del ro-
daje de Ciudadano Kane(Citízen Kane;1940). Vemos a Welles ya Gregg To-
land, su operador, detrás de la cámara. . .' ...... . ' ..' .
De su postura' ~stán. ambos cuerpo a. tierra tras la cámara- d.educlmo~, Orson Welles y Gregg Toland, rodaje de Ciudadano Keme
elemento importante del encuadre wellesiano, que fihnanun plano ~n contrapl-·
. cado. No .obstante. lo que·sóspechamos~.partir de esta fotografía es la .co1~bo­ dre en el que se materializará por iguallaidea dell:ealizador y la del operaoor» ..
raci6n, la cornpIlcidad. laintimidaG--rle esOs dos hombres, 'Están if6s6rto~, aisla- Misteriosa colabotaci6nla de un cineasta y un técnico, lliisteriosas rela-
dos ambos en compáñíade·la cámára,·téndidos haciala éscenaquetrans~urre , ciones de una técnica y un arte, exclusivas del cine. A pesar de que considere-
fuera de campo aquí también; en una actitud parecida: el cuerpoestirado,la.ca- mos que la pintura y el teatro ofrecen representaciQnes .del mundo a sus espec-
beza erguida, la míráda alacecho. '. ..... tadores, encuadni.das5 por el pIntor o por el autor de una pieza y el realizador;
y también es así como. irilaginamos a Eisensteiri y. a su. ?peradotEdouard a pesar de que lo que afírmaPaul Claudel de lápintura holandesa '-el pintor
Tissé3 ensu'«como'nió~ éreadora»:4«Los mOlla sílabos de' nuestro ptimeren- holandés es un ojo que escoge, que capta, y no una voluntad qUy ejecuta un
cuentro se convirtieron en una tradición eht:fe nosotros.· ¿AcaSo' se puede dis- . plan determinado- esté muy cerca de lo que EisensteÍli afirma del cine, del
.cutír, peror~ con la retina deun01Miramos.~vem()s.¿Acasóp~~etllos expli-
carle' a nuestro coraZ6n: "Latirás a tantas pulsaGiones por segundo? El cor.azórt.
I me9anismo de su encuadre. Por lo demás, Claudel emplea términos del voca-
,bulario fotográfico· -«apuntar a la .realidad con un objetivo inteligente»-
late y hace caso omiso de· tus consejos. ¿Acaso. se puede polemizar con los mientras que Eisenstein se apoya en métodos de la enseñanza del dibujo para
pulmones acerca del ritmo de su respiración cu~do la emoción nos hace un explicarse. (;
nudo en la gargaJlta? Dudo de que haya habido.jamáS "sincronización" com- . Eisenstéin, rebelándose contra el método ruso de organización espacial del
parable a la que me une a TisséenJo rel~tiyo¡aov.er, percibir o experimentar. fenómeno ante el objetivo; que consiste en «forrar uila f~stidiosacariátide»con
(... ) Ésta es la com,uniónquenos,proporcioI1a en un mismo instante elencua- una hoja de papel rectangular, sin ni siquiera tener en cuenta los márgenes, pre-
coniza el método japonés: «Los japoneses actúan del 'modo ihverso. Tomemos
3. Tissé fue operadorde Eisen*in en todas sus películas: lA. huelga (Stac~ '1924). El. aeo-
. razado Potemkin (Bronenosez, Eot~mkin, 1925),~O ~ ....:Ye (Oktjabr, 1927),. La lmca general (Sta·
una rama de cerezo o un paisaje con.ve[e¡:\I~. A partir deeste conjunto, el alum- "',
no corta en cuad~ddo o en redondo, o en rectángulo, su unidad de co,n~)()sición. (
roiei novoie 1929), ¡Qúe viva México!(¡Que viva Niéxico!,1931-1932),B,ezhin. Lud (1 935}, A1.e-'
xan:de;' Nev...ld (AJexandr Nevski, 1938) e IVlÍll el Terrible(Ivan Grozni, 1944),ep esta última en
'colaboración con Andre"iMosltvírib: . 5. La palabra «encuadre»e$ de origen reciente ~ alpareeer, de 1923 ~, ¿contemporáneo de
4. Evocado. por EiseriSrein en RefleXiones dé un cineasta. una mayor movilidad de la: cárnara'! Ciertamente posterior a la fotografía (y a la pintur1\).
I "
l

12 EL ENCUADRE CINEMATOGRÁFICO ENCUADRE O FILMACIÓN


13
¡Escoge su encuadre! CH') Nuestra 'escuela es la del agOlúzante método de la or-
ganizªción espacial del fenómelio an!~ el objetivo (.. ;) Ylo'sjaponeses repre-
sentan el otro método) el de la "aprehe.nsl6n" por parte de la cámara, el de laor,-
ganizacióri. que ésta fomenta. Conan un pedazo de realidád con los medios del
( ,objetivo».6 .
Én la vida diaria,también encuadramos, aunque sin'objetivo y sin reparar
en ello. Encuadramos con los ojos -inquisitivos, móviles, entrécerrados, es-
( ,
t~ábicós, etc.-, Una cabeza que, se vuelve, un cuerpo que seluueve, el particu-
lar íitríio de una atención por las cosas, por lagente. No todos vemos de la misma
manera, ni a la vez; siempre se: efectúa un~l elección, consciente e inconsCien-
te. Y cuando estamos encerrados, en la cárcel, por ejemplo, ¿acaso no estamos
privados, entre otras libertades, de.la de encuadrar? Es más, ¿acaso no esta-
1nos obligados a encuadrar? En un programa de te~evisión dedicado a los de~
tenidos~ con permiso penitenciario, es decir, a la ~l:lestión de la necesidad de
los ¡j' "sos, una detenida explicaba su angustia, su desazón durante la media
e hora: inIcial de.su primera salida. Ciertamente, en la cárcel su universo estaba
Íimitado: un retazo de cielo, lqs copas d~ los árboles. Cuando salió, el aspecto
<' ilimitado del mundo exterior la impresionó y la aturp:ió.' Sus referencias vi-
( suales y sonoras zozobraron; demasiados coches, demasiadas líneas, comentó
la presá.
( LibeJta<;l/confinamíento, dentro/fuera, continente/contenido, vacío/lleno, fi-
¡
~I.

nito/Íll:tiliíto~ A lo largo de los siglos, filósófosy artistas de Occidente y, de dis-


, tinto -ilibdo de Oriente, han meditado acerca de la idea deül~ite y han operado h~yya hace tie;np,o queexis~e~lós moviririentos qecámam, 8ylos perfecciona_o "
a partir de la de encuadre y fuera de encuadre. ~entos de la t~cru.c.aha.nfacilitadoel tra~ajo de Iós'cámaras . .l~rihcipalmente, el
\ . La cuestión del encuadre en el cine recupera el debate sobre los límites que los cme moderno. ha conqUl~tado una libertad de movi~niento. qu~ ha motivado que
filósofos ya habían planteado, oscilando entre dos concepciones, a saber, esque- uno deel1?s haya afirmado que el en~uadre recuerda a'urrarte rria~cial:adivinar '
máticamente, la concepción platónica según la cual los seres, los cuerpos, las co- lo que vaahacer,el~ctor; pensar, desplazarse a.lavez'queéL" ",
sas se definen por slIslímites, y la concepción estoica segtmla cual los límites de- ~rte es: marcial o no; lo~uev:oy a describir, tal como se pnlctica aquí;hor '
penden del ser, los límites van hasta donde el cuerpo, el ser, el personaje puede} en día, segun 1a& nognasde la producción de las películas de ficción seo-Úll las
Imaginamos bienIo que relaciona el cuadro y el encieno: ¿acaso en el cine reglas de la división del trabajo," , o '

no se enciena a los personajes, los espacios, es d<1cir, elementos, tierras, cielos, . Aquí porque, en otras p~s, Civilizaciones dIstintas a la n~estra P,;oducen
i aguas? ¿Por qué las películas de Bresson tienen un encuadre tan preciso, las más un enc~adre consecuentementedifer:ente.:Se ha señalado" pór ejemplo, que en

de las veces en «apretados» cuadros? ¿Por qué el tema de la cárcel'es casi cons- las películas deOzu la cámara está. situada ':muyb~Já·y explican esta particulari-
tante en sus películas? Sobre esta últimá cuestión, el cineasta respondía en una dad por el hecho de, que filmaba. a la a~tura deltatami; los tatamis son esteras'
eno'evista realizada en 1963: «No me había dado cuenta. Tal vez porque todos acolcho~adas de paja ~ue constituyen el piso de las casas japonesas y sobre las
somos presos». que se SIentan.. Ozu filma a su altura a los personajes que están sentados ha.:.
De todos modos, habría que evitar la confusión entre el encierro y el esta-,
tismo que caracterizaba los inicio,s dei cme, cuando la cámara era fija. Hoy por 8., El primero~ Eugene Promio, operador de Jos her.numos Luntiere, advirtió en Venes:ia, en
1896.~apenas un ano~espués de la invención del cinematógrafo, queJlo estaba íimitado a Jos pla~
nos fiJOS, qu: la «~scnturadelmo:i:niento»hacía honor asu nombre y no sólo porque pudiera to- ,
6. «Horscadl'e», Cahiersducinémll.,n. 215; septiembre de 1969.
7. A este respecto, GíIles Deleuz~ establece la distinción entre el encuadre geométrico y el en,.
al
marJot~grafías ammadas: ;<Me .dwgía en góndola a mi hotel, veía cómo las orillas huían paso
cU~ldre tIsico, dinámico. Véase La ima~en·m()vimiento, Barcelona, Paidós, 1991.
~el esqU1fe~ ~ensaba que SI el eme permitía reproduciL: objetos inmóviles tal vez se pudiera inver-
tirla propo~lClón y reproducir los objetos inm6viles con la ayuda del cine móvib>. '
E.NCUADRE O FILMACIÓN 15
14 ~L ENCUADRE CINEMATOGRÁFICO

Tampoco ~n el cine encuadIar es sinónimo de reproducir, pese a que la cues-


blando, comiendo, etc. ,Ciertamente, la arquitectura y el modo de vi~a d~l Japón' .
o

tión s~ complica con la introducción de, un-:aparato, de uninstl1lmento -la cá-


comportan puntos de vista distintos a los nuestros. Me atrevería a decir-.qlle abrir
lIlara y sus objetivos--- entre el artista, su visión y lo real.
'unapuerta corredera sobre un jardín zen y asom~se a una ventan¡l'notienen
nada que ver. '
\ la
¿.Cu~ es el lugar de técnica y el del técnico -del rodaje, del cámara- en (
./ la fabric~~ión;o ~n la creación de la película? A Robert Burks, por ejemplo, el
En las películasde ficción porque, en. su caso, el encuadre es un'elemento
operado~-Jef~, _,de una docena de las últimas películas de Alfred Hiichcock, le
más importante queenlaspelículasdocUIllentales, en lasque prima,el aconte- .
1l.~'1Jaban el rey-cal1wleón, '¿Cuál es la cualidad más apreciáble en untécllÍCO de
cimier~to, el documehto. kafi~ión exacerba elencuadr@.; eme: saber ser uh gran operador junto a- un gran cineasta? ¿O puede ma~ifestar
Según ciertasfimitas .([e división del trabajo, porque son raros los cineastas
autonomía artística? .
que hacen las veces de cáriiaras9 de sus películas y Johan Van der Keuken o lean.
Hay otra cuesnónque me interesa destacar: ¿qué se aprende de la técnica?
Rouch son excepcipnesde esa regla: Sin embargo, c~esta trabajo creer que el
¿~/e pare~e el encuadre cinematográfico al. arte del guerrero, requiere la preci~
encuadre sea un.á pura operación técnica de fllmación ~fijar los lfrtútesde la (
SlOn de tiro que se muestra en Kagemusha (Kagemusha, 1980), película de Ku-
imagen y apretar el botón~qú.e se pueda delegar. Y el sentido común, que atri-
rosawa? Así, elguerrero que consigue herir a_Shiugen explica su hazaña: pri-
buye virtudes de belleza,armonfáy equilibrio, tampoco lo cree. .
n:ero,demarca ---:una lllstalación destinada según él a cobijar a Shíngen--.:.;· se
El modo en que .se encuadrá,un plano, una es~a;' ¿no estará relacionado (-
e~erclta durante todo. el día,. ajusta el' tiro, «Es una cuestión de ánguloydistari-
con estructuraspersonales,cbn maneras de ver talÍto como con lo 'que se ve? Un
Cla» .:....-apoya el cañón sobre la saetera, pone un contrapeso~; y porla noche,
pintor elige conce]1trarsu atención.en un paisaje: ¿no seráque~lpaisajetmn­
por fin, tira, ni siquiera hay necesid~d de que el blanco esté 'iluminado, Y en
pién deCide elegirle~ser habitado por él? La pintura de Carpaccio está, eID.bruja-
una repetición de la escena para unos'camaradas que se lo solicitan, el tiro ~ar-
da por Venecia, la ciudad y el mar; orrmipreserites,'y no sólo cUando él las re-
te, neto, cortante,: .
presenta. Pero encuadrar ¿se limita s6lo a determinar ellugat dé la cámara?¿Visio-
" nar? ¿No se trata máS bien de inventar una ubicuidad -un ojo está en el visor
pero el otró n()-.- J.~na disponibilidad hacia lo que ocunea su alrededor, lo Que
~cl~~ . ' '~
«Todos. estaIÍl.os presos en una concepción fija de 10 que es importartte y lo
que no lo es, nos centramos en la importancia de las miradas ansiosas, mieri-
tras que, ahurtadU.l.fs, a nuestra espalda, lo insignificante libra su guerrilla qué
acabará por cambiar subrepticiamente el mundo y saltará por sorpresa sobre
nosotros.» n
Todo esto explicaría que un cámara-realizador como Johall Van Der Keu.,;
ken, ávido por captar lo importante y lo rÍo importante, loco por el encuadre, a
la. manera, sin duda, de Hokusal, al que llamaban loco por el dffiüjo, pudiera de~
elf en su película Vers le Sud: «A veCes me gUstaría: mirar normalmente»"

Johan Van der K~llk:en,rodajede V~rs le sud (foto: JIÚl WillemGeuzebroeck)

,lO, El operador-Jefe es el responsable de lo que damos en llamar la imagen de imapelícula, es


decir, de sus encuadres y de sus luces. Por lo demás, ¿no es la luz un elelnemo impórtánte del en·
9 Materialmente, realmehté,«estar a lit cámara», ,ser el' operador de sus películas~ No tenemos
o
cuadre?
equivalerite para la palabra inglesafilmmaker. personificada por Richard Leacock o Pennebaker en 11. Milan Kundera, El libro de la ¡Oisa y el olvido, Barcelona, Seíx Barral, 1993.
los años cincuenta y sesenta. .
--~- -""_
, ... ~.--" .

. EL ENCUADRE CINEMATOGRÁFICO
16

2. Encuadre y.técnica

;-

Lo~ hombres y los animales poseen 'los ojos para ver. ¿Qué hacen cuando
miran algo? Instintivamente, sin saberlo, hacen un encqadre. es decir. limitan un :
campo a partir de un ángulo de filmacióri. pero no se dan ~uentá pot:que los ojos
-y la cabeza-,--. son móviles, mientras que sus encuadres cámbhUl. Se den(mlÍ~
na focal angular al ángulo' de filmación. ~ . '

El encuadre, los formatos


En el cine, el éÍlcuadre está limitado por el cuadro que constituye la venta-
na del aparato de filmación, al que le corresponden, en principio, el encuadre de
la imagen fílinica y el de la pantalla de proyeccion. Distinguimos varias formas
de encuadre --:-=siempre rectangulares, al principio casi cuadrangulares, más tarde
y ocasionalmente muy alargadas; a lo largo de estos últimos años, en Francia,
asistimos" al regreso de un encuadre más cuadrado," el" mismo' que" el del cine
RQbelt BreSson y Phílipp~Agostinidu~ai1te elrod¡~e de Dan1.es du bois de Boulogne mudo- y varios formatos de película.
Las opciones estéticas relacionadas con la forma, las proporciones y}as di-
. mensiones dé! encuadre de la imagen cinematográfica no puedén apreciarse sin
ciertas puntualizaciones. 12 '

12. En este capítulo, me permitiré tomar prestadas las referencias sobre las características téc-
('
18 EL ENCUADRE CINEMAroGRÁFICO~,.~ ENCUAl:>Im y TÉCNICA

El formatQ de la peUcula se' caracteriza por la 10ngittÍd total' de la película eula utilizada para la filmación-,~a película utilizada para la proyección es
expresada en milímetros: 8 mm, 9,5 mm, 16 mm,35mm, 70 mm. '..:-más larga, dado que incluye las pistas sonoras estereofónicas, y tiene unalon~­
Las dimensiones de la imagen en la filmaCión 'se, caracterizan por la huella gitud de 70 mm. Dentro de este formato 65 (70 en la proyección), las imáge-
impresa hasta los límites de la ven~ana de la cámara.' Dado que esta ventana es nes desfilan 'verticalmente Ccoino en e135'mm,clásico}. Este formato conlle~
rectangular, las dim~nsiones se definen p9r1a altura'y la longitud del rect~gulo va S'perforaciones porimageri y lado. El alTastre'de la'película es bilateral y se'
impreso, expresadase¡únilímetros. As( las dimensiones de la imagen sonora que "

basa en 2 perforaciones~
,

se considera ,estándar en uI.llÍ película de 3~ mm sOIíA~ 16 mm, 1= .+2~~ Así pues, el formato de pelíc)lla no condiciona obligatoriamente ~l formato.
Esta; ,definición dimensional se ha considerado suficient~ durante muchos de la imagen, dado que se pueden colocar imágenes en una película de una lon-
años y, dado que las propox:ciones del rectángulo én el que se inscribe la imagen gitud determinada, ya sea a 10 alto o ,a lo largó, y repartit la superficie útil sobre
se basan en características estéticas prefijadas, la relación delos lados de la ima- un número más o menos grande de perforaciones. "
gen parecía inmutable. A partit del gusto, en los anos cincuenta, por las imágenes '
, más anchas, que pareCía máS conveniente para los «grandes» temas espectacula-
el
También se puede, por medios ópticos,compdrnir la imagen en sentido de
la longitud de la fIlmación, lo quepe11nite que una imagen anamórficaquepaen
res (aventuras, we$terns,peplutns, etc.), y comoconseéuenciade proced.iIWentos , un rectángulo de superficie normal, que, basta con «descomprimir» durante 'la·
especiales para la obtención de esas imágenes llama~ panorámicas, asícoqto de proyecciónparaobteneruna im~gen paJ.1orámica contenida en la pantalla dentro.
la:necesidad ante laque se hallaron de promocionar nuevos formatos de pelíeu- de un rectángulo muy alargado. Es 10 que denominanlOS procedimientos poraná-
, las,se consideró:más práctico definirla proporcionalidad de la altura ydela lon~ morfosis o procedinúentos en scope. , . • ", '
gi~d de las imágenes en relaciónindependient:e-a la superficie de las imágenes y, La filmación 'y la proyección' siempre hao estado intrínse¿amente vincula-' .
1>or10 tanto, del formato de película utilizado. F=UA. Ejemplo: 1,33' (imagen das: el cinematógrafo inventado por Lumiere era un aparato de filmación y .de:
muda en una película de35 mm) = 24 rrun!18 mm; proyección, más exactamente era un aparato «que' sirve para la obtención y la '
Todos los formatos de imágenes que no estén comprendidos entre 1,30 y visión de pruebas cinematográficas». ' .
1,37 se consideranpanorámiéos, aunque naturalmente pueden serlo más o me- (
En cuanto a la pantalla cinematográfica, consiste, desde la PP.rr~era pro.: '
nos, es decir) que su longitud puede super~ s~ alturll e~proporcionessuperi()~ yección pública -realizada el 22 de marzo de 18,95 en la parisina calle d~R~n­
res a la prdpc::ión cla.sica de 4 a 3: Es el ca'so de las'proporCiones reallza<itLs eh nes, en iília superficie de tela blanca éoncebidapara materializar l~ imagen,
Cinemas cope, cuyo fOImato es de 2,55 y; en menorproporci6n, en Vista.visión, cinematógráticaproyectada sobre ella,:colllo que expei-imenta una considera.;
'en el cual ,el fórmato alcanza los 1,85, mientras que el 'formato clásico en pelí- ble ampliación. Entre la imagen minúscula (en unlnetro depelículade 35 mm
cula de'35 mm es 211f2,65:::1,66. " , " ' de formato estándar caben 52 iniágenes), impresionada en la cámara y lá ima-
Efectivamente, el' filme de 3S mm de .largo, que durante muchoti~rnpo ha gen ampÚada que,~~reciQeeJl"lapaPtalla d~, proyección de' una. sala de, unas
sido considerado COmO la película profesional, permite por sí mi~~o distintos . dimensiones, medias, larelaciólí de amplia.ción es', de 150.000 veces su super.:.
formatos, según se considere el rectángulo-imagen en. sentido vertical u horizon- ficie.
tal. 'El formato cÜísico Sonoro comporta'Wlaimagen de 16422 mm en vertical, Los hermanos Auguste y Louis Lumiere no sólo fueron losprimei:6s en
con cuatro perforac'iones por imagen y lado (8 en total). El arrastre dé.la pelÍéu;,· concretar este principio' cinematográfico 'de la ampliación sino que" a pal'tir de '.
la es bilateral y se basa en 2,4 o a veces 8 perforaciones simultáneamente. El fil- 1900, experimentaron también con un formato ancho. En la ExposiciónUni-,
me de 35 inm de .longitud también se puede utilizar con Wl arrastre horizontal versal instalaron un «cinematógrafo gigante»:graclas a una película especial de
(formato Vistavisión, por ejemplo). En dicho easo,h~y8 perforaciones porima~ 75 mm, proyectaronimágenesvisibles para 25.000espectadores sobreuna.pan:"
gen y lado, es deéir, un total de 16. El aI'r~stre de la película es bilateral y se basa talla de 25 m d~largo por 15 m de ruto; ,
en 2 perforaciones. , , . Durante los Mos veinte tuvieron lugar otras tentativas de proyecciónsobte'
En cuanto al formato lllllll.adode 65.m.in -65 mm es·la longitud de pelí- pantalla gigante, aquellos fueron años, de experimentación, de procedimientos ' '
que se rec:u.p~~p·.(o:¡n veintiéincoaños después. La re?~siÓÍi ecÓuQmica, y eLhe-
nicas. de Claude Baílble,,,iiLtroduction ala t~chnique cinéma, publicación del Departamento .de cho de que los piopietarios de las salas aún nóhubieran amortizado los gastos
Cine 'de la UniversidaddePar(s VUI), ,de Pierre Brard (Technologie des caméras, Éditions Tech- de la instalación del equipo sonoro, frenaron la explotación de estos distintos (
niques Européennes, 1976), del volumen Il de Cinénia (Grande Histoire lllustrée du'r art, Édi- sistemas que en Estados Unidos se multiplicaron durante los años 1929-1930.
tions Atlas, 1982), a.sÍcomo de. Cintma. aparecido en EditionsBordas. en 1983,
En Francia, Abel GaÍlce inauguró en 1927, con su película Napoleón (Napo.,
l,

(
,
('

20 EL ENCUADRE CINEMATOGRÁFICO L>n'vV/"-1J~~1:l Y TÉCNICA 21

leon, 19i1), una triple'pantalla, gracias a un sistéma de películas múltiples ulti-


mado,por André Debrie. Ajo largo de esta película-había momentos e¡;J.'que se
proyectaban tres imágenes so'61'e tres pantallas, cuyo conjunto componía una '
sola imagen panorámica, en la que la armonización de tres imágenes distintas 'se '
refería aun mismo acontecimiento. Ese principio fue la base del Cinerama de
( los años cincuenta.
También en 1927, el físico Henri Chrétien imaginó el hipergonar, un objetivo
totalmente nuevo, que más tarde adoptaría el Cinemas cope, inaugurado en 1953
por la 20th Century Fax con la película La túnica sagrada (The Robe, 1953), de
Henry Kostet. 13 ' ' ,

Al parecer la televisión -los televisores se comercializaron en Estados Uni-


dos en 1945-, la {{pequeña pantalla», desempeñ6en su época una función esti-
,mulante para la búsqueda de innovaciones espectac1l;lares en.el cine, y su, conse-
cuencia fue el gusto por los grandes formatos rectangulares. El-70mm y el ~cOpe
'se geii~ralízaron, principalmente en los Estados UnIdos, pese a que no llegaron a
ser áef~precio de los:realizadores. Sabemos de la-preferencia de Nicholas Ray
por el scope, pero también noscon~ta_el desprecio de Hawks por este formato:
«Ya n9 tienes que preocuparte"'pornada, todo estáAe.n!ro del campo».
r Ei~enstein, durante su estancia en los Estados Unidos, se rebeló contra el
\
monopolio de la pantalla de 10ngitudhorizontaJ, en una conferencia que empe-
zaba con un delirante himno a la «masculina, fuerte, viril, activa composición
vertiSªft.>y concluía con un alegato en fav~r de la pantalla cuadrada, la única ca-
paz-de~tendir homenaje a las doS fuerzaS que operan en la naturaleza, a las dos
dimensiones simbolizada~ porelvecindaje del cocodrilo y lajirafa. 14
En Francia, un productor impuso el scope a Max Ophuls porque estaba de
moda en el momento en que rodó Loj(}:."fIlontes (Lola Montes, 1955). En tanto dosel cual si de una cortina negra. s~lr.al:ara, vari~baQ.las proporciones del cam-
que un pintor puede escoger las dimensiones de su cuadro y puede utilizar la lí- - po visual sobre_la pantalla en-función de las-eséenas. Cuando Lóla Montes se
nea vertical o la horizontal a su antojo ~pese a que, en principio, las dimensio- marcha del teatro, seguida de su enamorado oficial inglés, la pantalla, para se-
nes están en función del tema (figuras, escenas marinas, paisajes)-, a Ophuls ñalar su aislamiento, se eIlcoge hasta talpunto que finalmente ,se les ve en én~
le prohibieron el encuádre vértical: «¡Vaya!¿Acaso está prohibido el encuadre cuadre verticaL Por el contrario, durante la escena de la huida de Lola de Ba- -
•del campo visual en vertical, a lo alto? ¿Está proscrito? ¿Por qué ley? ¿Por el- viera, según testimonio de GeorgesAnnenkov, Ophuls gritó: «¡Cinemascope!,
undécimo mandamiento? ¡Yo he leído los diez primeros y no habla ninguna alu- ¡Cinemascope! ,¡Qué no me cuenten histonas! ¡Nó es 10 bastante: largo! ¡Nece-
sión al Cinemascope!». sitaría una pantalla el doble de larga! Un Cinemas copé cuadrad()>>. El formato
Como el zoom aún no existía, Ophuls-sevio en l~obJig~~iónde recurrir a un variable en el cine aún está por inveñtar.
,sistema de ocultadores sobre el objetivo de la cámara que, cerrándose y abrién- La próyección de estos grandes fb~matoscomportaba numerosas dificulta-
des que la Comisión Técnica Sliperiqr del Cine (en Francia) resol vía aconsejan~
13. Dicha película, fotógrafiada porLéon Shamroy-úno de los mejores operadQres dejos do que se rodaran películas cuyos encuadres tle filmación previeranuna flltllIa
_anos cincuenta para cine en color, véase Las nieves del Kilimanjaro (The Snows of Kilímanjá-
amputación de 1I3de altura, 1/6 arriba y 1/6 abajo. Justo cuando se supo1fÍaqu~
ro, 1952), por ejemplo- fue, asimismo, la primera gran producCión con sonido a cuatro pistas,
unprocedimientó que no se tard6 en abandonar a causa de sus costes y de hls dificultades técni- el pr~cedimiento podía ofrecer imágenes mayores, ¡ha~ía que empezár a enco-
cas que comportaba, ger! Esa fue; sin duda, una de las r~ones por las que Erancia adoptó un fOlma-
14. Este texto, citado por Dominique Fernández en su libro Eisenstein (Grasset, 1975) fue pu- to intermedio: el 1,66. En general, losoperadores y cineastas aprecian estefor-
blicado en Clase Up, L?lldres, marzQ y junio de 1931; - mato, menos cuadrado que el de 1,33 y,que es «muy bueno para los grupos», a
EL BNCUADRE~GINÉMATOGRÁFICO ENCUADRE,Y TÉCNICA 23

,la vez que les da «un toque más modemoa los primeros planos», según ténni- origen, se puede recordar una vez más que la televisión tuvo algo que ver en este
, nos de Néstor Almendros,15 pOr ejemplo. No obstante,pasadQs-dos o tres años. cambio. Aumentó el númerode-l:ascoproduccionescon la televisión, y el for.:
se asistió a un regreso del' 1,33', el priferido de dneastas como Rohmer, Godard mato dela pantalla'televisiva -1,37- se acerca más a la,~ dimensiones del ,(
,o Syberberg. " , ' , 1,33. Sinembargo, hoy endía las proyecciones de una película en 1,33 en una
·Independientelllegt~~~ la preferencia por unas proporcionesqne se aseme~ sala de cine son r~lativamente escasaS. En realidad, las,nuevas multisahls care-
jan a 'las de la pint~a antigua, o de] gusto personal; que podía tener uno tI' otro cen de profundidad y altura. Porlo tanto, tos cámarasse deciden por encuadrar'
enfunción dela-mutilación,probable de las 'películas: mutilaci6n de lostordes~
laterales de la imagen en el caso de una película de 1,66 emitida por televisión;
mutilación delosbórdes superior e inferior en el caso de una película en 1,33
proyectada en Una sala en l' 66. Por ejemplo, evitan poner a los-actores al borde '
se
del encuadre. Por el contrario, cuando tiene la suerte de asistir a una buena
proyección, que respete el formato, puede suce.der que descubramos micrófonos
lo
en alto de la'lmagen. '
Ciertos cámaras resuelven el problema haciendo un encuadre doble. Al-
mendros cuenta que Rohmer quería filmar Paulb~e en la playa (Pauline ala pla-
ge,1982}en 1,33 mientras'que él, personalmente; prefería el 1,66. De modo que
se dedicó a hacer un doble encuadre que pudiera «pasar» en 1,33 y en 1,66.
«Pongo los dos cuadros punteados sobre mi visor e intento encuadrar cMa ima-
gen en función de los dos cuadros, para que quede'bien en los dos formatos. Es
niás difícil pero no imposible. A veces queda mejor en 1,33, a veces es difícil,
pero yo intento que sea posible. En el interior de una buena pintura se pueden
recortar una"cantidad_considerable de buenos cuadros. Hacer dos a laveztam~
poco es ningUna-bestiaIidad,»'6 '
Syberberg, por su parte, adoptó una actitud completamente limpia,ad- ' (
virtiendo al espectador, desde el prinCipio de c'adacopia, acerca de las 'di'- ,
mensiones exactas de cuadro que debería exigir para la proyección de Parsi-
fal (1982).
En curuito. al pase de películas de formato alargado por la televisión, existen
dos pos~bilidades de conformación, ya seaalínear los bordes laterales de la pe-
lícnla con los bordes de la pantalla televisiva, ya sea llenar toda la pantallatele-
visiva, sacrificando la imagen original a derecha e izquierda; Entre estas dos so- (
luciones, todos los compromisos son igualmente posibles. Para el scope.los
americanos utilizan la técnica del scanning~ que consiste en llenarlatotalidad
de la pantalla televisiva con una palte de la imagen scope y en bruTer la imagen de
derecha a izquierda con el scanner para .obtener el resto, es decir, el 50% de la
imagen. Un diálogo en un plano fijo entre dos personajes se transforma así en
,PauJineen la playa;q.e'Etic Rohmer: la misma imagen proyectada en 1,33 yen 1,66
una 'sucesión de panorámicas derecha-izquierda. 17'

,15. Néstor Almendros fue operador-jefe de úna cuarentena de películas. Trabajó especi~­
mente pam Eric Robmer y FrÍill90isTruffaut y ftlmó la fotografía de películas americanas entre las (
cuaiespodemos citái Días del clélo (Days ofHeaven, 1978) y Kramercolítra Kramer (Kramer 16. Entrevista con N. Almendros, Cahiers du cinéma, n. 346, abril de 1983., ,
versus Kramer,1979). Fue autor del libro Días de una cámara, Barcelona, Seix Barral., 1993. 11. Véase el artículo de Alain Lasfargue, Cahiers elu cinéma, Íl.'322, áhríl de 1981.
24 . EL ENCUADRE CINEMATOGRÁFICO.
ENCuf5~~y TÉCNICA 25

Los principios de filmación

La filmación apela a conocimientos muy variados: química, mecánica,


eÍectricidad, electrónica, perspectiva geométrica, etc. Pese a todo, lo básico es
·1a óptica (parte de 1a física que trata de las propiedades de la luz: y la visión),
en la que se basa la posibilidad misma del cine y la mayoría de sus técnicas.
La óptica física estudia la luz y su propagación. La óptica fisiológica se tela..
dona con los fenómenos de la: visión humana, con la percepción de los colo-
res, la evaluación de las intensidades lumínicas por parte del ojo y con la per-
cepciÓn de los p1ovimientos reconstituidos mediante la persistencia retin~ana.
Pese a que lbs físicos no la estudiaron hasta los siglos XVII y XVITI, y hubo
que esperar al siglo XIX para asistir a la aplicación que prefiguraba el. cine (el
taumatropo), existe constancia de la persistencia re~niana desde la más ~emo~
taantig,üedad. Cuando se hace girar rápidamente u,l~Jizón en ascuas atado a la
PUtl~i~Una cadena, en plena noche, el ojo percibe'-~ápidamente un círcuÍo de
fuego 'cóntinuo, cuando en realidad en cada punto del círculo descrito sólo hay
un .punto luminoso. SiJi embargo, la sucesión rápida en despacio del mismo
~punto l~rninoso reprodúcido.en eLfondo del ojo por la retinada ulla'Sensación
de contInuidad.
La experiencia demuestra que la sensación de continuidad es completa con- a
dición d~ que las imágenes que se forman unas tras otras no se separen más de 1/10 El ancestro de la cámara, de la máquina de fotografiar, es la camera oscura.
de seg o. La grabación de 24 imágenes '8 por segundo en una cámara se cónsi- Un observador se halla en el interior de una saja completamente aoscuras, en
gU19:G binando esta duración máxima de la percepción inmóvil de una sola ima- una d~ cuyas paredes hay un pequeño agujero. Al cabo de un momento, cuando
·gen.con los imperativos de la reproducción sonora. La grabación cinematográfica sus oJo~ se acos~mbran a la oscuridad, éste constata, en la pared opuesta a la
. es una sucesión de fenómenos intermitentes, 10 mismo que la proyección, en la del aguJero, una unagen que representa lo que hay en el exterior (un objeto Jumi-
que, gracias a lapersistenciaretiIúana, el cerebro «funde» la secuencia de imág~­ ~oso o f~erteme,nte iluminado, el ejemplo más frecuente suele ser una vela),una
nes que se presentan sucesivamente en una sensación de movimiento continuo. lmagen mcreí?lemente nítida pero débil y al revés. Esta imagen está formada
En cuanto a la óptica geométrica, se puede reproducir el movimiento de los por r~yos IU.Illinosos que se propagan en línea recta a partir del objeto. La úruca .
rayos luminosos y porlo tanto analizar la formación de una imagen; ya sea a l~ :n~ada pOSIble de los rayos es el orificio llamado estenopio y, pol' lo tanto, los'
\.. vista de su recepción sobre una superficie fotosensible -es decir, susceptible U11lCOS rayos ~ue pueden ~enetrar en la habitación negra se cruzan obligatOlia- .
de conservar una huella material y permanente, incluso tras la desaparición de mente en el 11l:el del aguJero, lo que explica la inversión de la imagen. Si se
la sensación-'- , ya sea en vista de su recepción instantánea, borrándola también a~randa el agujero (algunos milímetros de diámetro) para que entre un haz lu-
instantáneamente, como es el caso de la formación de una imagen sobre una rrunoso más ampl.io, y así nos dé una imagen .más luminosa, se pierde nitidez.
pantalla de proyección o sobre una pantalla de televisión. Para obtener una Imagen perfectamente neta'conviene que los rayos proceden-
t~~ del ~bj~to converjan en U11 único y mismo plano. Ésa es precisamente la fun-

¡ \..
ClOn atnbUlda alobjetivo. 19 .
18. 25 imágenes en el caso de las cámaras de teleVIsión a fin de que estén en consonancia con
las frecuencias del sector eléctrico: 50 períodos por segundo en Europa, 60 en los Estados Unidos. El primer estudio construido en febrero de 1894 en la propiedad de Edison,
En tiempos del cine mudo, la velocidad de arrastre de la película en la cámara y el proyector era, en West Orange, para la filmación de películas destinadas al kinetoscopio tail1~
en principio, de.16 imágenes por segundo, es decir, 120 vueltas de ITmnivela por minuto, Los ope-
radores franceSes, por ejemplo. adquirieron la costumbre de canturrear interiormente la marcha 19. Se ha hablado I~ucho acerca de la falsedad de los objetivos. Hoy por hoy, un op~rador
I11ilitar San~bre et Meuse, que les daba el ritmo de la cadencia. Los operadores, que sin duda con- com.o Renato Ber.ta conSidera que con un zoom cinematográfico (Cook) és imposible obtenei' una
fiaban más en su t1uido que en el eléctrico. siguieron girando la manivela a mano hasta 1920, fe- vertIcal y ,una hOrizontal, oble~er Ifneas recta~, y que eso es trágico, RenatQ Berta ha trabajadocoll
cha en la que el motor.quehacía ya algún tiempo que ex.istía, se generalizó. . SOlltter, Tanner, Straub, ~chmld, Godard, Chéreau y múchos otros. .
BNCUAl)RE y TÉCNICA
26 EL ENCljADRE CINEMAÍOGRÁFICO

bién fue concebido como uD;a i.Íu:nensa .cámara oscura. Los actores, vestidos· y ffcil.-Según Pierre Braunberger,20 Frán~oisReichenbach21 sería el introductor de
maquillados4eblanco, evolucionabil.Ilante la cámara s~bre el, fon~Q, n~gr? que estiuevoluci6il en los ro'dajes, el primero de la Nóuvelle Vague...NéstorAlmen-
ponía sus formas éllr~lieve~ Lo apodaron el Black M~na con ID?tiV,O de. ~u.co-:­ dros22 explica qué; por su parte, se le oturrió filmar una noche de fin de año en (
l,'

lor negro -el exteriór estaba revestido de papel alqUItranado- y ~blen lf6- Nueva York con 4X, con, la única iluminación de los neones de las salas de es:.
¡ . pectáculos.
nicqmente, ya 'que' en árgot norteamericano si~fica coche celular, 8111 duda por ¡

el horror que provocaba~p~1}'arse en su interior. Más recientemente se ~lan comercializado emulsiones ultrasensib,les. Bruno
Nuytt~n23 piensa quedunto ajos objetivos de gran obeltllra (Zeissy USF Pana-
visi6n) y la aparición de JZashes llamados HMI, se. trata de una de las innova- .
, ciones fundamentales de estos últimos diez años. Los negativos se caracterizan
Los objetivos por su sensibilidad, es decir, pór la cantidad de luz'que necesita la emulsión para
. ' ' , , " "

presentar una imagen, sensibilidad que se indica correl númerO de ASA. Hoy en'
Un objeti~o se. c~acteHzapor su di~tanciafocal, la distancia entre el centro día Kodak y Fuji proponen dos emulsiones, de distinta sensibilidad: 100 ASAy
óptico de la lente y su foco. Esta <iistancia informa inmediatam~n~e acerca de su 250 ASA. Estas sensibilidades debasese.puederi dob~ar, es decir, cuadriplicar,
convergencia y, por.lot.aÍito,"sobre el ángulo de campo del obJetivo, su oberro.. mediante un. revelado especial. En ,Estados Unidos los directores de fotografía
ra angular. 'Esta 'obertura angtilarindica el campo ~ual que corta sobre d: for- utilizan Eastmancolor 93 o 94 de 1600 ASA..
mato escogido. Cuanto más ~órta es la distancia foca,l (gran angular), mayor es Señalemos que, en Francia, WilliamLubtschanskyutiiizó plincipalmente la,
la obertura angular,ymenorcuandó la distancia locales larga (teleobjetivo). , nueva Fuji 250 ASA; que facilit610s rodajes oocturnos COll películas ligeras,
Una de las normaS de la, óptica' fotogtáfíca dicta que a un objeto de dimensiones como en Ni~ve(Neige, 1981), de Juliet Berto y Jean-Henrí"Roger. (
\ .
dadas lecorrespo'ítdeÜl1~iniagen grande si la focal es larga y una .imagen pe- Apuntemos algunos detalles sobre el zoom; objetivo particular que transfor-
queña si la focal. es corta. < ' , . . . , /... .• • ' ma las características del encuadre.
. Para regular la cantidad de luz que penetra en la camara, se s1tu6 el dlafrag- El zooin es un objetivo de distancia focal variable que permite cambhu las di-
ma en el centro del objetivo. ' mensiones de la imagen sin desplazar la cámara, sin reemplazar un objetivo fijo
Si:consideramo&.gue elojo también es una cámara; podemo~es~blece~l~~ ,por otro, y sin utiliZaI-::taInpOCO la torreta de:objetivos. Tamoién permite; dunint~
siguientes equiv.arenciás: iJis/diafragma, párpados/obturador, cnstalinolobJeü- la filmaci6n, pasar progresivamente de un campo amplió (con distancia focal
vo 'y retina/emulsión. corta, por ejemplo 25 mm) a un campo restringido. (distancia focal larga, por
La profundidad de campo varía: ejemplo 250 mm) y obtener una ampliación del objeto, o a la inversa. Esteefec-
\ . ,1 '. ' to se denomina travellin.g óptico y da al espectadoda sensación de que el objeto ;:
\
-'- según la distancia focal: es mayor cuando la foc~es corta y meQ.or se acerca o se aleja de la cámara; siendo distinto así del travelling, para el cual se
cuando la focales larga; , . . aCerca la cámara al objeto. En .el primer caso, la obertura angular.varía constan-
~ según el diafragma: aumenta cuando secierra el diafragma,disrninuye temente y comporta la variación del campo y una variación simultánea dela pers-
cual1do se abre,en estudio, y varíá según la cantidad de luz qu<::!.~cibe; . pectiva. En el segundo, la obertutaaIlgular del objetivo fijo permanece constan- ,
~ según la distancia de enfoque: aumenta cuando ésta se aleja y disminu- te, y el objeto s610 se agranda dentro del encuadre .por el acercaIniento de la
ye cuando se enfoca sobre objetos cercanos; . . . cámara, que produce simultáne¡;tmente una vaIiaci6~1 de laperspectiva.
. ~ indirectamente, según la sensibilidad de la película: a igual cantidad de En otros términos; más que avanzar hacia él, el zoom aspira a su objeto. 0,
luz se puede di:;tfragmar más con una película más sensible y por lo tanto obte- como escribe Vincent Pine1,24 «en el zoom el movimiento no se efectúa en rela-
ner umi profundidad de campo mayor. ci6n a su sujeto sino en relaci6n a su ünagén».

Laelecci6n de una película para un filme está ~elacionada con las exigen- 20. En un programa monográfico de la cadena fÍrulcesa FR3 dedicado a los productores,etTli- .
tido el 9 de octubre de 1983.
cias de la luz deseada para ese filme. La elección de una película más sensible
2L Dé quien se ha dicbo que «nació con una cámara en el ojo» .
. transforma las condiclolles de rodaje y, consecuentemente, el trabajado del cá- 22. En La lefon de cinéma. propuesta pam la televisión el 23 de mayo dé '1983 ..
mara; permitiéndole rodar con un material de iluminaci6n ligero, e incluso si~ 23. VéaselapublicidaddeKodakapurecida en Cahiersdu'cütém.a, íl. 345. márZode1983;
iluminaci6n, aunque el erifoque exige mayor precisión y se hace mucho más di- 24. Citado por Michel Chion, Cahiers du ciuéma, n. 350, agosto de 1983. .
--~,-.'

EL ENCUADRE CINEMATOGRÁFICO ENCUWÍ&Y TÉCN~CA . 29


28

Dell,oom -aparecido eil1962~se ha heCho UIl uso excesivo y titubeante, Sterngerg, cineasta y operador, se consideraba además como un auténtic:o ciru-
particularmente en la televi&ión y en los reportajes. que ha P~Sl.:vE~S~~o que los _Si- - jano y para él sólo contaba el éxito de la operación, no sures~ltado (la vida pla
muerte del p a c i e n t e ) . - ._-- .. -
un y
neastas, para quienes sólo pllede existir encu~re pará cada plano que.cOnside.-·
La cámara noe& más que una cámara oscura a la que se le une el mecanismo
. ran que el zoom pone en peligm b1 coherencia del espacio fílmico, 16 desacreditén< .
. . Si bien en La coleccionistá (La Collectionneuse, i 966).,.---\llla. película cuyo que permite la filniación su~siva de una alta cadencia de fotogramas de peque~
presupuesto no permitió dispoIler d~ material para los travellings- había dos o . ñas dimensiones, que post~riormente se agrandan. Consta de una cámara oscura
tres zooms discretos,· en. süs siguientes películas, yaJueran ricas o pobres, Roh; y dos oberturas ópticas. Una, de la que acabamos de hablar, está provista de un
l)1erproscribió el uso dee~tetipo de óbjetivo. .-. - . . - . , objetivo, que tranSmite los rayos luminosos que provienen del objeto a filmar ha-
Con todo, la innovación que supuso el ioom fue importante, y Rossellini, dala superficie sensible de hl película. La otra, situada en el costado opuestoal
por citar sólo uno, lo demostfóel1sus peLí<;:ulas~ El zoom podíarevoluciónarel objetivo, es indi.spensable para el cámara: ~l visor, que sirve para encuadrar la
découpage clásico, por una parte intrbduciendoUIl método de rodaje nuev? rá- imagen, para preenc~adrarla antes de rodar, y para preparar el punto de distancia '
pido; económico, y por la Otra itál1Sf~rmal1do lareptesentación del espado y del focal. Durante el rodaje, corta el campo y el fuera de campo, el in y el' off. '
se
movimiento. «El zoom, con sus focos largos que pegan a las cosas dilatán- Offes la abreviatura de off-screen, fuera de pantalla. El cine es lo que vemos
en la pant;alla y lo que, durante el rodaje, vemos en el visor de la cámara. 27 Sin
dalas como panes demasiadqhiilchados», era uno de los medíos, según PaSoli-.
ni,25 d~cine depoesía Dlodernh practicado por Antbílioni, Bertolucci y Gddaid embargo; lo que está en la pantalla (dentro) se trabaja en relación a lo que no
efl1oiffiícios de los añOs sesenta. El zoom, aplanando las imágenes, convirtlen':' está o aún no está~ Las películas de Dreyer, Bresson· o Duras son particulares
.do ia pantalla en un espacio abstracto, rompiendo la ilusió¡1 de la profundidad muestras de ello. Se podría deCir que entre el campo y el fuera de campo existe
acentuada por el desplazamiento físico de la cámara _~neste e~pacio;x la d~la un'YÍl1culo como el de dos manos que aplauden. .•
( La historia del visora és muy' interesante y, junto con la del alIgeramiento
supue$:ta existencia de iiñespacib escenográfico estable anterior a la-filmaci6n~
marcó el irucio de la modernidad en el cine.26 Modernidad que caracteriza la es- de la cámara, la más importante para comprender las transformaciones del tra-
tética fílmica de los años sesenta y setenta.· Hoy por hoy, los cineastas ~shi­ bajo del cámará. '
ma, A~nioni, etc.- admiten el zoom como un medio más entrelos otros . Hay que retener una fecha, la de la comercialización del sistema de visor re-
.~ . flexrealizada a principios de los años cuarenta. En este sistema, se,separa uo;a
parte del haz luminoso proveniente del objeto, principalmente durante el tiem-
~o de obturación (l/50), cuando no actúa 'sobre la superficie sensible.,UneSpe-
La cámara, el visor
JO montado sobre el pala del obturador remite el haz luminoso alojo elel cáma.-
La cámru'a es el instrumento del que encuadra. Además, a éste se le llama ra. Durante~ta exposición de la película lo que se obtura es el visor pero, dada la
también ccuneraman (el hombre-cámara), el hombre de la cámara. Hombre y cá-:- persistencia retiniana, no supone ninguna dificultad. LasventC:\jas del visor re- '
( mara son inseparables, a veces literalmente. En los inicios del sonoro, con el fin ~ex son inmensas: da una imagen rigurosamenteparecida a la _que recibe la pe- .
ele que el ruido del motor de la cámara no llegara al micro, el operador se ence- lícula y está exento de los defectos de paralaje. Dado que el visor reflex es in:-
rraba con ella en una enorme caja. Las dificultades para respirar convertían el. dependiente de las distancias focales de los objetivos empleados, no hay que
rodaje en U11 auténtico ::iuplicio y, cuando habíaterminado la toma, a veces tres
27. «La primera vez que puse el ojo en el visor de una cámara me sentf fascinado. De pronto
hombres tenían que ayudarle a satir. el mundo entero se inscribió en el cuadro correspondiente ala pantalla. Hoy en día aún sigo expe-
Cameranum o caInerawo1f!lm: efectivamente; hace algunos años que las mu- rimentando.liníiisma sensación d.e. maravillamiento», Frank Capra, Lednénm américain par {ies
\. , jeres ejercen también eIoficio. El material se ha aligerado considérablemente,la auteurs, Authier, 1977..
fuerza física necesaria ya no es tan grande y, además, por otra parte, las mentali- 28. Se denomina ipdistintamerite visor o buscador de cuadro al objetivo de focal varjable,
sustituto de la cámara, del que aveces se sirven los reaiizadores en el plató para encontrar el eua:
dades discriminatorias han evolucionádo. dro de sus planos; A Resnaís. por ejemplo, o a Buñuel.se les había visto a menudo con visor ~n sus
Suponemos que la cámara es el instrumento de una operación, ya que-alcá- rodajes. Eran cineastas interesados por laprecisi6n extrema de sus encuadres. Habi"á que explicar
mara aún se le denomina de otro modo: el operador de la película. JosepbVon el ténnino plat6: plataforma sobre la que se levantan los decorados. Estudio, propiamente dicho;
y, por extensi6n. lugar del rodaje. En los grandes complejos de estudios (Hollywood, otrora Bolo~
25. Le cinéma de poésie (1965), texto recogido en L'expérience hérétique, Payot. 1976. nía) los plat6s están numerados. Se pueden reservar vanos platós para una sola película: el famo-
so Camet de baile (CarnetdeBal.1937), de Julíen Duvivier. por ejemplo. . .
26. Véase Alain Bergala, artículo en preparación.
30 EL ENCUADRE CINEMATOGRÁFICO

realizar ninguná lTIodffi~~d6n en la¡úpa delf'QtocÚando se cambia un objetivo


por otro.
Antes del visor reflex había dos solliciohes:C-:'

el visor exterior, es d~cir. i~dependienté del objetivo; con un vis~~' da-


ro,'por ejemplo;queJiene,el inc.onveniente de dar un'encuadre del objyto 1ige~
ramente distint.o;U de la imagen de la película,-sobre-todo cuando sduilla cerca
delobjetivo. Esté desfase es lo que llamarnos paralaje;' " : ' , , ,,'
el visor a través de la película: la capa sensible hace las veces del cristal
esmerilado. Así es como 1.0 describe Alain Douarinou,29 cámara que 'ha vivido
. estas transformaciones.

En los inicios del sonoro (principios de Jos años ,trein~), e!1cetraronlas cá-
maras-quehabían sido pequeños aparatos dejas marcas pebde,o É~iair(eIJ '
Francia)" notables 'por su .ligereza, y su perfecci~ mecánica, pero particular-
mente ruidososc- eU,en.onnes «arc.ones» inson.orizados, cUy.os volumen y peso
estab~ en propól:c~ón dkecta, c.on la ins.onoridád. ~sí pues, laprin~ipal cualidad
de los cámaras de esta época pasó a ser· la robustez, necesaria para manejar:esos
armarios elevados' soine plataformas3o panorámicas" sin fricción ni resortes
compensadores. ' , .
La visión se realizaba a través de la película. Habíavisore$ claros en los la-
dos de los' cajones per~:~l paralaje ~ra,tan importante ~ado el volumen.del Alain Douarinou bajo el velo negro del fotógrafo '
,apara~,.:¡tieetáninutilizables'~ Además. la p~lícül&. era muy trdnSparente y
tras una corta aéomodaci6n bajo el velo negro del que se servían losc~aras. capa de gelatina antihalo llamada grey-back, que tornaba más opaca la transpa-
c~:tnd los fotógrafos de labelle époque, veían una imagen casi nítida. .,'.. 31 rencia de la película. Y los cámaras ya no veían casi nada a través de lapelícu-
Más adelante las cámaras se aligeraron. Por aquel entonces eran cámaras la. Habían de permariecerdurante largo rato en la oscuridad antes del inicio del i
destacables desde el punto' de vista mecánico y óptico, equipadas c.on platafor- rodaje para aumentarla agudeza visual del ojo. Algunos permanecían casi todo
mas panorlamicas bastante mejor equilibradas; con resortes compensad.ores para el día bajo el velo .uegro mientras que otros, como Henri Tiquet, mantenían ce-
las pariórámicasverticates y fricciones regulélbles para las h.orizontales.Soste,.
neruna cámara se había convertido en algo casi fácil aunque, con todo, se ne-
el
rrado el oj.o destinado al visor. Douarinou adoptó uso de gaféis de soldador
cuyo~istaI derecho (porque visionabacoll el ojo derecho) era completamente
.cesitabauna cierta solidez física para amortiguar,la inercia del pes.o.de est.os -. ""opaco. Dicho procedimiento les permitía discernir la imagen, después, nafural~
aparatos con un sisteIna de palanc~. Las plataformas de manivelas. muyexten- mente, de haber ensayado y. haberse asegurado todas las garantías siguiendo la
.didas conlas pequeñas cámaras del cine mudo, habían quedado completamente escena con el cristal esmerilado.
obsoletas. . . Entonces fue cuando los fabricantes (princ$al~ente André Coutant, de lá
LamentableIriente, si bien las cámarás se hicieton más manejables, también casa Éclair) eqllÍparonlas cámaras con un sistema refléx: ya era hora, puesto
füe' el momento en que los· fabricantes de películá pensaron en dotarla de una que la comercialización de las emulsiones de colorhabí~, imposibilitado ia vi-
sión a través de la película. .
29. AlainDouarino~ fue cámara de varias películas entre las cuales podemos Citar algunas ,de
MaxOphúls:'La r01.rI;(l950),Le plaisir (1952), MlUÚlJne de ... (Madame de.... 1953), LolaMon(es. Precisemos que, al detenerse, con la cámara fija s'obre un pie, se podía po-
30. Las-plai:ál'''''':~.a.~'.son elintennediario móvil entre.la cáinam yel pie.Penniten la orienta- ~ner un cristalesm~~~)ado en el transportador en lugar de la película (ci~errillt6-
ción de lacámár-a. ' graf.o LUnllere),o reemplazar· el transportador por un cristal esmerilado (en
3 t, La Super Parvo, de la If!arcaDebrie. comercializada enJ932.ylaCamereclairJOO Pe la Francia la Super Parvo, en los Estados Unidos, la Mi tchell NC o BNC).
marca Éélair.
La primera cámara dotada con el sistema retlex que permitía verificar elen- '
32 nNcuADRw~i1iCNICA .33

cuadre y el enfoque dura,nte la toma fue la cámara Vinten, que apareció en 1937.
En 1938 se fabricÓ la_Ap:ifl~x.en Alemania, lo bastante ligera como para que lá'
sostuvieran y utilizaran conla 'Inano/y provista de un visor-obturadodncorPo-
I rado que funciona?asegún elprincipio del espéjo giratorio inaugurado por Vin-.
ten. El modelo, que los operadores de los reportajes deactualidades,alemane~
\ ,

utilizaron durante 1(1 '. segUnda ,gu(;rra mundial, fue el que, tras algunosperfec..;
cionamientos, recuperaron toa,os .los fabricantes durante los cuarenta, años' ~i­
guientes. LaCaméflexde la firma Éclair, ligera y manejable, se ,concibió más
para transportarla en el hombro ql,le en la mano~
La cuestión d~Ja: fijación de la cámara, o de su transporte (en ,el hombro, en
la mano) se la empezaI()n a plantear los cineastas a partir de la época del cine
mudo. Sabemos, por ejemplo, que para El último (Der Letze Mahn, 1924), el es-
cenógrafo Cad Méyet, deseoso de saber qué movimientos se podía realizar con ·
una.cá,mara, fue al encuentro del operador.Karl FreIJnd, y le proporcion~on,una,
cám~ portátil' a Murilau pata que pudiera respbnder a las necesidades del
(
guiÓñ'lle esta película.
En Francia, a finales de los años veinte --decididamente años de experi- ,
rnent;9ióIl~, Abel: Gance (Napoleón) y Marcel L'Herbier (El dinero,L' Ar-
gent;:4928) expel'imentaron tódo tipo de movimientos, liberando a la cámara de
. su inmovilidad con métodos audaces.
Bell y Howell fabricaron ia Eyemo a partir ,de 1926 Ysu uso se extendió mu-
cho e~la filmacióIi de reportajes y otros rodajes cámara en mano. Ésta fuela pe-
, quei1ii cámara con la qu~ Orson Welles, 32 asombrando a sus colaboradores, rodó
en 1939 planos experimentales de cámara subjetiva que quería incorporar a la
primera película que debíareálizar para Hollywood, basada en la novela de Jo~
seph Conrad El corazón de las tinieblas. ~amentablemente, dicha experimenta- ~
ción en el interiordel sis~emafue infructuosa y nos constan las dificultades que
Welles tuvo más adelante paráproducir sus películas.
A finales de los años cincuenta aparetieronlas primeras cámaras de 16 mm ti-
geras(alrededor .de seis·kilos) y con sonido sincronizado. (fue la Coutant, ante-
cesora de la Écl air 1 6). Las utilizaría la televisión y el género documental ql.le, a
:raíz de su incorporación, cambiaron radicalmente su estilo. En realidad, estába':
mos ante la hemunientá que el cinéma-vérité, elfree-cinema o el candid eye ha-
bíansoñado.Postériormente, los cineast.as suizos adoptaron el material de 16mm
para filmar fiCción. Por el contrario; Godard utiliza el 35mrucomq material «li-
gero», y fue el primero que hizo que su operador llevara una cámara de 35 mm Demostraci6n de la'cánÍaraÜgem Caméflex; André Coutatit senwdo
. (no sonora) sobre el hombro .. Veamos lo que él dijo acerca de. esta experiencia y Alain Douarinou y Christian Mal:l'as de pie
en 1983:
~<Lo cierto es que es bastante inverosímil que durante sesenta años lacáma-

32. Véaseel artículo de Bernard Eisenschitz en elllúmero especial monográfico de Cahiers du


cillénUI dedkado a WeIles, 1982.
EL ENCffA:DRE CINEMATOGRÁFICO ENCUADRE Y TÉCNICA 35

haya mantenido de pie y que la única idea quenayan tenido sea la de s0S""- .
tenerla sobre elhombm.Era una idea válida para i.lnap~Iícula, pero luego la han
~copiado tantasyeccs;·... Yo; que fui. el primero en P?nerse la cári:Iata sobre-d=
hombro, me horrórizo hoy viendo cómó todos: esos c~e:tiÍ1os de la televisi9n, Se
ponen taPíbiénla c~al hOrnbro~La éonsecUellCh\.~que:ya nadie sabe .lia~
cer unencua.dre, peúluenose encuadra a partiideI h~mbm.Se encuadra á paro:
tir de la mano, del estómagó,~del ojo" peroa.partirdel-hombroj3 nose'p~~de ha:: . :""'~.
cer ningún eñCiiadfe.,Tiescüartas:p3rtes de los operadores profesionales rriiran
con la espaldaycon: elpie.LO que habría que consegUir, ypores6n~sit(): uila
.fijaci6n, es .que la cámara se posara como ún pájaro».34 '. '. .
Hoy, pese a·la evolución tecnológica de t9dos 10s.e1eme~tos que hemos ci~ .
tado, y pese .a la comercializaciónde cámaras sonoras mellaS pesadas (en 35 mm.
las cámaras. americanas. Panavisi6n~que. destronaron.~ las .l\1itChella fina~
les de los años sesenta>, y las alemanas, Arriflex __una Antflex35·BL peSa
alrededor delos diez .kiros~; en 16 mm tambiénjenemosJasAn,1flex o'las fran-
cesas Éclair o Aat9n); aúnno:~e'haresuelto nada para un cineaStacoffi.o Godard.
Sus exigencias fundari).entales en cuanto a la cámara---unbuen visor y~ Una fi- .
jaci6n- no se'satisfacen; pt6ximamellte debería salit una cáinara AatQn35 de . ~ .
la fábrica de Grenoblecuyoprototipo había imagilladoGodarden 1976 en co:.
laboración con Jean~Pierre. Beauvíala.Las.respuestas a sus. demandas. aún no
han sido halladas.: ¿~erá'porqu~~usdeInandas vancoritracorriente del~ división
. del trabajo? Efectivame~te~ GQdardquiereque se 'pueda hacer las pequeiías pe:
lícul~sal_m~gep. deJáS~gt:andes produdoriÍ.s y conmáqUiruis pequeñas;:};! pro~
dutción,losinstrwnentos técnicos yla ínant;;¡ddeconcebir yde realizarunape~
lícula serían·estrictameriteinterdependlentes. A él le. gus~a,- en tanto tiue:
cineasta, poder enCuadrar sus,películas,filmar en los mometitósen queélásflo
escogiera, disPQnerde.l;lfl aparato operacional en pocos inmutosysinla partiéi~
pación obligada deloá:té~niCosprofesioÍ1ales. .'
ParadójicamenJe, c~ertos Qperadoresqúe constatan, collloGodard,la crisis
del encuadre (<<Ya no ~e sabe encuadiar»), acusan' de, ello a la ligerezádelequi~'
. po ya las excesivan1eriten'umerosasposibili~ades que, ofrecen las técniC3$ ac-
tuales. Les· gustaríavolver,' si no~ los excesoS de,peso, al menos.a las dificulta-
des, a las contrariedades estimulantes;
. Una historia del cine a partir de laevoluci6n del encuadreevidenciaría las
relaciones entrelatécrúcay el encuadre mosttandómomentosprivilegiad()sde

. 33. Durante el festival de cine deCannes de 1983 pudimos ver, enTF1,una interesante sem-
blanza de Raymond Depardon realizada por lean Roucho Rouch le preguntÓ a Depardon cómo fu:- Rodaje de La mujer casada, de Jean-Luc GOOard
maría él u.na estatua; Departion.cámara al hombro. se deslizaba alo largo de la ~tatuaytermina­
ba en su i'ostro, POr su P!\fte Rouch •.éoida cámara en- Is rr;;;¡lV~ "ilmaba la estatua y las nubes a
contraluz. después de haber girado entorno a ella. Dos personas, dos visiones, dos estéticas y dos
maneras de concebir lacámára.
34: «Genese d'une' caméra»,' Cahiers du cira¿m~, n~ 350. agosto de 1983,

~.
, 36 EL ENCUADRE ClNEMATOGRÁFICO '

su evolución, como por ejemplo aquellos en los que la técnica -el.tamaño de


la cámara en las primeras películas sonoras, o en los filmes en Technic~lor-:-:­
impone el enCJIJldre; ÚtfliJístÓria del podr~a partir de la.s, películas de
un cineasta, laS dé Viscoriti por ejemplo, y observar la función de dos factores:
el de la técnica (negro' y blanco o. color, material pesado o ligero, uso o ita del
zoom) y d del operador. Según Renato Berta, los Visconti más' bellos 801). los
que r~a1izó en cólabora~ió1i con Giuseppe Rotunno y, si losericuadres de E1Ga~
topardQ (H Gattopardo, 1963), tomados de uno en uno, a veces son horribles, el
c;ónjunto es extraordinariamente bello. . '
Hoy en día, entre O.tras facilidades ofreqidas'a los cámaras, se cuentael vi-
sor electrónico, que puede dejar atrás a1 visor óptico. Se tratade una minicáma-
ra de televisión qúe, montada enJa misma cámara cinematográfica, retransmite
la imagen a un monitor (un pequeño televisor), gracias al cual todo el equipo de
rodaje vela imagen durante la filmaci6n. 35 Combinado con un magnetoscopio, .
este~~ema permite que l~s actores ve~ inrnedia~m~nte el plano. que aoaban .
de rod~. Sin embargo, la Imagen obteruda ene} momtor no perIDlte controlar
estrictamente los bordes del encuadre y, porlo tanto, el cámara no puede fiarse
( realmente d€,ella. " ' , ' , " '. ' . , ,' " Jean Rouch es un buen gonocedor de este estado, extremadamente singular,
,. ' ' "J~p:y Lewür;' actor:realizádor, se había aplicado ese control a sí iÍlismo des- d,e desequilibrio completo entre un ojo derecho «sentado en una'buUlca como
de fü~Xles de los años Cincuenta. Algunos operadores lo consideran muy útil consecuencia de la buena calidad de los visores de hoy en día» ---:-acercade las
para resolver la divisiÓn luz-cuadro; dado que así los directores de fotografía cueStiones más importantes, las opiniones divergen..-- y un ojo ízquierdo. «rea-
pueden.~er sus luces en el cuadro a medida que el cámara tilma. El mismo Nés-
00" •• '.:;;~J.i;JF;.
, . .. lizador»,que ve lo que ocurre fuera del encuadre, lo que va a entrar, oaqúello
tor A~,endros 10 adoptó durante el rodaje de Kramer contra Kramer. , hacia 10 cuaL se va a dirigir. Estadivisi6n en el interior de un mismo persónaje,
'E;:fin: una última pregunta sobre los visores: ¿por que guiñar el ojo cuando más grave aún cuando se es realizador y operador a la vez, se acentúa cuando,
se encuadra? como en el caso de Rayrnond Depardon, se trabaja con el sonido. En ese caso se
El visor reflex da una gra,n precisión de encuadre, pero no da el encuadre en tiene un lado de la cara -oído y ojo- espectador, mientras que, del otro lado,
sí. Si el operador se concentra en este último corre el riesgo de tener sorpresas, el oído atiende los sonidos que vienen de afuera y el ojo realiza. ejerCIcIO
cuando el aparato se mueve, por ejemplo, por no hablar de las sorpresas duran- de e,ncuadre crea una nUeva especie de gentes, de ojos mecánicos' y oídoselec-
te los repOltajes. ¿Qué puede,qué va a entrar dentro del cuadro? Existe un visor trónicos, que se parecen a lo que Dziga Vertovllama ki1'loks. Estosoperadores, .
retlex (ligeramente) alargado que da el encuadre exacto y un ligero fuera de en- en la realidad, s610 ven la imagen cinematográfica, lo que Vertov liamaba, ha~ .
(
cuadre. ciendo un juego de palabras, cine.:.verdad. Verdad del cine, en la que se ponen
( .Loideal, para visionar, es ver el encuadre y el fuera de encuadre que está al- . en movimiento la fotogenia, las paradas, los movimientos amortigqados, etc.
rededor. A menudo, el cárnaramantiene. un ojo abierto a la realidad para ver lo «Yo soy el cine-ojÓ:'Soy el ojo mecánico~ Yo, máquina, os muestro el mun-
l queocun'e, para desplazarse. Sin embargo ese ojo abierto dificulta la vis~bili­ do como sólo yo puedo verlo. Me libero_a partir. de..ahora y para siempre deJa.
l. dad, ya que los iris de los oJos trabajan en siIíeFgfa. Cuando un ojo recibe bas- inmovilidad humana, estoydetitrodel movimiento ininterrumpido, me acerco y
tánte luz, el otro, el que mira por el visor, recibe un poco de luz, a su vez, y lá me alejo de los objetos, Irte deslizo por debajo de ellos, salto por encima, avan-
imagén del visor se ensombrece mucho. Por lo tanto, los cámaras guiñan el ojo zo junto al morrode un caballo al galope; cruzo veloz por entre la muchedum-
intermitentemente. bre, corro delante de los soldados que cargan, me t:tnnbo 'de espaldas, .me elevo
a la vez que un aeroplano, caigo y me levanto con los cuerpos que caen y se le:.. .
35. Súbitamente, no hay duili\ de que la tradición según la cual cualquier persona que no sea vantan: Hemeaquí que yo, mecanismo, me lanzo a lo largo de la resultante re~
el cámara y n:lÍre por el ojo de la cámara -doniinio reservado- debe invitar a una copa al resto volviéndome en eIcaos de los movimientos, fijando el movimiento a partir del
del equipo. se está pen:iie~ldo.
movimiento fruto de ias combinaciones más complejas» (Dziga Vertov, 1923.)
38 ÉLENCUADRE CINEMATOGRÁFICo ENCUADRE YTÉCNICA 39

Fijaciónes-ymovimientos dela-camara: la maqtilnaria amortiguadores, con~bidos para mantener la estabilidad de la imagen cuando él
. , ~ . ,
se desplaza•. uú;ámara se convielte en una prolongación articulada, pero liger~
~í, sin salir del: encuadre, !ieinos pasa<iodel vÍsoral movimiento yvolve-· del cuerpo del operador. del cual está más o menos desvinculada. El centro de
mos a Godard para quien; s·egún Pásolini,36 «tódo.lo que una cámarac.apta en gravedad, baStante bajo; del cC>njunto, el estado de casi ingravidez provocado por
movimiento es bello». _.... ... . ... .. la suspensión, y elpeso de la cámara que actúa como fuerza.deínerdá, penniten
. Pasolini constataba que, .a partir de losaiíos.sesenta, .los realizadores del correr, subir, bajarlas escaleras y párarse sin provocar tropiezos; Cuando corre, (
cineque éldenomiI1~ba ·4e poesía invertían la máxiiná vigente en: el cin~ cl~i ~ el qperac;iQr no mantiene el ojo en·él borde del. visor pero puede controlar el en:"
co: que la cámara no se n o t e . . . cuadre en una pequeña pantalla de vídeo situada debajo del aparato. Este equipo,
Concretamente, elaccesorio queperinite que la cámara no se note y que eli- si bien no exige un gran esfúerzo físico para el desplazamiento de la cámara, que
. mina las sacudidas yvibr~ciones ~poc6 discerirlbles. en la visi6nbinocular-di~ en cierto modo flota en su suspensión, necesita de un entrenamiento específico
rect~ pero considerablemfmte. ampliadas· sobre lá pan.talla; y. más insoportables para evitar el balanceo del encuadre. No obstante. es esta pérdida del equilibrio
para el espectador, que en]a $ala oscura· se ve privado del entorno ydclvolu- habitual-cuandola cámara está sobre los rru1es, nosotros; los espectadores, lo
men- es el pie~ ... . . . estamos también-la que, al servicio de la maestrí; de un cineasta corno Stahley
Los trípodes de (campo»'utilizados. en los rodajes de exteriores o a9u~1l0s, Kubrlck, provoca efectos nuevos, e interesantes. La imagen se hace, extraña, ¿po.-
más pesados, de «estudio», vait· equipados conc~tezasde cojinetes. fcón pla- dríamos decir fluida? La travesía del espacio ~favorita de Kubrick·desdé 2001;
taformas que permit((ntodos los movimientos de la cámara, laterales, verticales, unaodisea.del espacio (2001, A Space Odissey,1968}- es también la gran ca..
oblicuos. LasmafÍívelasdesrnultiplican con precisi6nlos movImientos y dismi- rrera del niño a través de los pasillos del hotél de El resplandor' (The Shining,
nuyen en un 75% el esfuerzo.'físico dél cámara. Cuando éste trabaja con unsi8- 1980), Íapérdida en eUabelinto.
tema de palancas, ~s su propia fuerza muscular la que pone la cámara en mo.vi- Hasta hoy la steadicam. ha sido utilizada sobre todo en las escenas especta-
miento. Alain Douarinou considerll. que la reaparici6n de las manivelas es un culares de las pelíéuias americanas,38 10s combates de boxeo de Í?ocky (Rocky,
progreso bastante apreciable y recuerda una· de las primeras plataformas pano.;. 1976), por ejemplo. En Francia, Bertrruld Tavernier inaugur6 su uso con La
rárnicas a inanivela (Mitchell o Warol) Introducidas en Francia. Fue durante el muerte en directq (La Il10rt en direct, 1979) filmando a RomY-..8chneiderque
rodajecde la pel(~ula tieC~istiaÍ1-JaqueLucr&e Borg{a (I952), en la que él era atraviesa un mercado corrieñdo. En· Coup de Jorchon (1981) generaliza el em-
el operador de uná de esas monstrÚosascámaras para Technicolor (desfilaban pleo dé la steadicam, que se considera más móvil que una cárnru·a de pie y más
por ella tres películas distintas). Otros operadores preferían el sistema de palan- hábil que una cámara de mano. Pensaba «acosar a los personajes y obtenerma.,.
cas yno les gustaba verse obligados a utilizar las manivelaS. Éste es un aspecto yor libertad de movimiento». En realidad parece haber perdido en intensidad io
que podría parecer «puramente» técnico pero que, por una parte, pone en juego que gan~ba en movil#:lad. Michel Chion39 explica así los.riesgosque comporta.
la relación del cuerpo del operador y el encuadre; y ~ por la otra, una vez finali- el empleo de la steadicam:· «...Elojo se hace insistellte~ articulado, protuberan-
zado el trabajo, no produce la misma sensaci6n de movimiento, el mismo efec- te, indiscreto, un pocQ ubicuo (que recuerda a un ojo montado sobre una espe-
to estético. cie de tentáculo ligero)..y ala vez un poco suelto, blando, sin esa ~'intención" de
Para estabilizar las cámaras·portátiles, existe todo un equipQJ;}.!:le los opera:- la mirada que inarcarla fuertemente la tensión del encuadre o la tensi6n del
dores de reportajes de actualidad conocen bien: el pie· de pecho .(en el que- el transporte de la cámara». Michel Chion atribuye la blandura del encuadre de .
(,
cuerpo del operador sirve de pie), lá empuñadura de hombro, etc. La steadicam Coup de torchon a la resistencia de un dispositivo (nuevo), que en este caso se
(abreviaciÓn de «steady camera»: cámara estabilizada) o panaglide (para Pana- utiliza .para otros efectos especiales puntuales.
_ visión), es un sistema moderno de cámara portátil ultimada.porunoperador, Otro dispositivo nuevo, otro ojo tentaculru:: laLouma. La Loumaes uná tube-
Garrett Brown, que comporta un cambio importante en la relación entre el ope- ría que conduce toda cámara prácticamente a cualquier lugar, hasta una altura de
rador y la cámara, entre el realiiadory el operador (correr tras de él) , y entre el 7 metros, a condici6n de que no pese más de 17 kilos. Todos los técnicos se quedan
espectador y la imagen (¿dónde estoy?).
Un sistema de arneses y decompensaci6n permite que el opeiiido:r se despla-
37. Cuyo operador fue Ganett Brown.
ce con la cárpara «montada» sobre. su cuerpo pero mantenida a distancia por los 38. AnieUe Weinberger me señala que lasteadicam penuitióa 10hn Boonnail filmar el pUQto
de vista de una abeja en El exordstaIl: el hereje (Tbe ExorCÍst II: Thellereti.c, 1977).
36. En Le cinéma de poésie, op. cito 39. Cahiersduciné/fUl, n. 330, diciembre de 1981.
(
40· EL ENCUADRE CINEMATOGRÁFICO ENCUADÍU3Y TÉCNICA 41

a ras de tierra; la imagen, transnútida por una pequeña cámara de vídeo fijada en aplausos ylos bises, 1icátriara giraba sobre sí mismá{e~tÓ era 10 divertido¡ que
visor enell ugar del ojo dei cámara, se controla en una pantalla de televisión._El . pudiera dar ulla vuelt~c<>:¡npleta)~ y Salía de iasaia,~Cori1pªD.ªhª_ªlélbaÜarilÚ\ ~L, ..
cámara manivelas. con un mando él clisrlthcia, mientrélS que el asisten- Sil carnerillo,. lateraJmente 'O preceruéndólá.; Sin GQtt~s. Yo· también pódí<l fran:.
te enfoca a dlstar¡da. Este enfoque es muy incómodo ya que no hay ningún pun- quear las pueltas c¿n elcarr042 dtdá cámara,eta uhinvento núo.>~:
to de ici~fel1CÜI eil eIesp<'lcio y, con un objetivo de 200 o de 250 mm, es realmente Por mi parte me entrevisté cOI).Pierre DUrin; operadoqieefettós éSpeciales
(
pwblemático. lo demás, el control a distancia de los efectos le impone una que, en Francia, concibió mía carretilla de. travelling ,G0nA;Urriles de garganta
CO]Gstruc:ciéii1 abstracta de su puesta en escena al realizador. Wim Wenders -;El montados sobre bujías árientables que permitían .canll¡ios;de dirección, sobre raí~
Amerikanische Freund, 1977)-:--: Y Roman Polanski les equipados con placas giratorias y con curvaS;,', P.~lre DurÍn también equipó los
. ··---El inquilino (Le Lücataire, lY76)--:- fueron de los primeros en expe~ primeros coches conpl~tafol1:nas en las qu~'pó'~ instalarse el eqtúpo de la cáIna-:.
. rimeútar la embriaguez del movirriiento que crea·la Louma. Señalemos que la ra y el estado mayor ~e la puesta.en escena...Úna suspensión muy estudiada, y re-
apadcióndela Loüma Cólncidió con la aparición del zoonz. Brian de Pálma la uti- gulable, pennitía filmar so~re la marcha sin la- menor vibración y dejaba: el campo
. lizó ccm ~lirtuosi.srno y la Íórmula de Jacque::; Síclier40 acerca de este cineasta de la de visión completamente despejado. Apartijde estas dos prpducciones de Piene
cdmara prün(ldonn.a sería particularmente cOQvepJente para la cámara Louma. . Durin las posibilidag.es. de movilidad de la camara m~joral·oN;ll1ucil0 y aportaron
que utiliza,rla Louma s610 cuando fue.l.i estrictamente.p.~cesapo~Y losmediQs para que lo~ cámaras fu~tan preciso~e~.10s m()vünientos del aparato.
en condiciones de producci6n,"se útiliza como signo externo
o como gadget, Filmar a ras de suelo· (30 cm), evitar las huellas de
los pa:.;osen la nieve (l enlaarena, seguir a un actor por la calle, entrar acto se-
( .. guido p.or. ullá venta~~a del cuarto piso de uiiédificio y salir: por!>~a, etc....
. E1~yirtuosismo no está necesariamente vinculado con la sofisticación técni-
ca. Los recu~rdos de Rochus Gliese,41 decorador de Amanecer (Suririse, 1927)
t; ínventor.del célebre en zigzag--hasta entonces los travellings .sólo
serea.ll<:8:ab'lll en línea recta-lo demuestran, «En aquella época la irriagetda ha~
arquitecto, en colaboraci6n·con el operador. Ef operador -el
oD'eraCi()l:-·~ miraba; el pintor verificaba exactamente el encuadre, el rea-
lizador controlaba y aún pedía esto o aquello (... ). Para el trayecto de tranvía del,
camQ2Jtl centro del pueblo teníamos una pequeña parte de la colina que erán te-
rrcllosde exteriores de la Fox. No podíamos k más allá porque, justo detrás,
c' TQm Mix filmaba un Iveslern. De modo que dibujé un trayecto en zigzag que
cubría'todo el espacio útil pm~autilizarlo aLllláximo. Nos parábamos a cada po:"
sidón'sucesiva de la cámara, yo miraba pot el visor y peinaba el decorado con
( el cristaL Luego lo construirnos, Todo venía determinado por los ángulos de la
\
cámara, no podíamos desmarcarnos. De ·otro modo no hubiéramos podido ha-
cerlo, no se podía situar la cámara más que corno yo lo había construido, pOf<lue
Gn,ía Unível:s~1
estaba'construido pJe~i~~aIllellte para la éámara. Naturalmente,. nos divertimos .;.
mucho.>~ Así fuécomo I{ocÍlUs Oliese empezó a trabajar con la cámara móvil en t·._ :.....:2.<". '",

.Amánécer. Un poc~ después, para Una película producida por DeMille, ultimó 42. Los travellingsse ;~ali~ gkc¡~ al carr;(1, plataforma montada sobre rueda~ neUlnátiéas
o sobre nu1es, sobre la que sé'fija;fa cámara. Bulos inicios se deilomiuabá mitWr~ma y. en elcatá~
un sistema de raíles con un sistema de cambiode agujas que le permitía tomar. 10go de Lumi~reaparece ~on ese nombre. Hemos visto que la palabra parjorámicCI tmnbién desig- ..
i'lria,s clirecciones y, gracias a Ullas placas gíratoria$ en .el plafón; instaló una cá- na los procedimientos que permiten la obtenciÓn de proyecciones de grandes dimensiqnes. Un tra-
mara dentró del ascensor. La película empezaba en un Inasic-!tall. «Durante los un
velling consiste en irde punto a otro, siguiendo aun actor (o'a otro que «act(¡e")~) que se desplaza
o, sí no se desplaza, desplazarla 9.áinanl ~in que haya cortes. Los ti'avéWflg s (H teralmente «viajes}»
pueden ser hacia adelahte, atrás ,laterales, oblicuos,asCendentes;deseendentes. La panorámica es .
40'.· Citada por Jean Tülaro, Diclionnairl! du. cinél1la, Laffonl; 1982.
un movimiento de la cáinará.sobre su piopioeJe:Se puede comparar con los movimientos dejos
4L 'Le Cinérnatographe, n, 75,febrero de 198~. ojos.o la cabeza.~ . . . . .
ENPUADRECINEMATOORÁFICO . ENCUADRE Y TÉCNICA' 43

R~éordemo8queenFranda, Aun'en lo~añ¿s cuarenta, unrodajeco:IYlistla este material a los lugares de rbdaje'y sitúa ia cámara según las indicacioües del
en poner la 9ániara'eri Wn rincón, filmar, dunbi~ de ángulo:yfUn13t éh 6tro . . cámara y según petición del realizador; Puede tratarse de un lugar y una altura
(.
sentido,. Elmaquinjsta'transportttba la· cámara; .Enrigor,instaiah4.11ti :'ú:~ve~ detenpinadas, fijas, o' puede ser sobre una gr6a l1'ióv.i1'~3 de 2,4, 6,80 12 metros
lling: lo «montaba» más 0nienos bien, poníá el qarró encima y apretaba lá «ca- establecidos bajo su responsabilidad.
rretilla», .:' . . , - . ' ':', -',~ , Puede ser sobre una grúa, un coche o un barco, o biell sobre una roca en
... En l:eaÍídad, los ral1ésdeun tri:LVell.mi-se:·~O~fanc~m9Ibsd~1$.~~t1~¿~ju.; . medio del maro en la montaña. E11 cualquier parte:.Lt~~ predso
guete: Sieltravetzing,está:ItiaÚnontadQ. el ,enctradrese desplaza;'üti'iniJ.ífuetro ~e .. la estabilidad y la seguridad del cámara y sus asistentes, Todo eso fOrtn3. parte'
desplazarrrlento ~Q~'Veinte cei1túnetr:o~'en ia' proyece~ión, yse notan:. Ai1t~s dé'la' del trabajo corriente dellnaquinista-jefe y su equipo aunque, para el cámara, lo
LoÚma existi61a gr~ cuya Ínvénción AllanDwan" ayudante ded.i.rf!éció:o'9n In- más importante es la colocación y el caladoáe los raíles del travellúzg y la ma-
telerancia (Intolerance, 1916),atribU'yeal propio Griffitli.:Ariteri({nnerit~:~Grif- nipulación del carro. EJ menor fa:llo en el calado de 10~ raíles puede provocar un:
':fith;ya había 'probado con un globo sonda qué. sé podía subir. y bajar,.~í:ó como °
choque durante el travelling una variación de nivel de la cámara, Ioqueobli~
.' .~lviento ~oplaba: endírección contraria a losdesplazaniientos;ultinlo Jn n:onta- ga a un.paro en el rodaJepa¡:á rectificar el calado. En cuanto a ia manipulación
,... ·cargascontrolado.por unétomo de mano que se deslizaba porr~es; , .:" del carro, es decir, el modOen que elmaquinista hace rodar el travelling parase-
. Dw-ante mucho tierp.po; en HolIywoodIa grúa tM.e. ún signo externo de.~que- gUir los desplazamientos de los actores Ó para efectuar determinadas. trayecto-
.za. Esta o aquella majo1:;ienfan la grúa más grande,: étc. Hoy, én día' eñ~ Francia riasde ia cámara,ahíes donde el cámara h,dla un apxiliar parucu)armenteim..
.. prácticanlente han desaparecido de los estudios. Esos aparatos, ~xces,iNamente portante.44 Consiste en arrancar suavemente cuando' es necesarió; enpantrse'
:':pesados, ~xigían laayuda'de' 10 o 12maqq.ini$tas para sus·de~plazamientbs.A suavemen.te cuando es preciso y en acompañar con exactitud los desplazamien-
. veces incluso se utilizab'clugruas pára farolas, grúas de QbtasPúblic~; lps"mo- tos del ode los actores; a véces casi imperceptiblemente, otras con gran rapidez:
vimientosde esas grúastallgrandeseJ.'an baStarttetorpés. En la:actu~HJalifs~ uti- y l.as paradas, igual.que las salidas, deben ser siempre suaves y predsas,pües-
.1íz~n gnías eléctricaS; eSpecialmente en televisión y<en espéctáculqfd::ómpleta- . to que algunos centÍmetros de en'or en el lugar de parad~l pueden' obligllf a re-
rnentc coordinados de ánterpanó. El i11aquinlsta sabe dónde tiene que ir ycol1duce petir una torna.
,'.'~ la grúa como si faeraun coche. . ". Ah()ra b.í~n,~se.c.a:qo, q~le yaesde'i)orsJ bastrultepes~~ój transport¡:l ulla'cá-
. La dol:y, más complejáyalave;z más prácticaque~l carro, se ha gerterali- mara ysu pie;'" que pesan unos 100 o 150 kilos, ai cámara y al primer asistente,
zado, Al parecer,la dolly o Crab-dolly Jlle.obrá de un maquinista; M~ñrice Ro" a veces al realizador agachado debajo. de la, cámara y;. en ocasiones, y además,
sen, y se. utilizó por primera: vez en' la película Dúdeque tefuiste{Si'nceyou un proyector de vados kilovatios (1; 3 o 5)iéon el electricista que lo regula. El e
WentAway, 1944)~ de JphnCromwell, según'9piniónde:úuQ;ae lbs'oper~dó&s conjunto puede rondar la media tonelada~ .
del filme, Stanley Córtei;La4011Yes:;una·e~p0Ciede~mo;.grúa~que;;p~í.Wté'¿l~ . A menudo,· los: maquinistas de 'filrnaciónhan sido ante? máquinistas' de
var la cámara, el operá.dQryel3:~l$tente,hªstalll1aaltllra;de.aproxiilulqime!ite montaje,45· es decir,.ellcargados del montaje de 10s,deconH.tos 'en estudios. Gra;.
2 metros. Tiene, sus iiiGOlrveniel1Ú~s: peso; y,dimensÍQnes,que ilpJéperñUt'e~~fjl­ cias a esta expedencia, cuando sobre el terreno (en localizaciones exteríores) se .
mar en ciertos dec()ra~ós>LoS' atnericanoslªudIiz~ncom()' Pie~egr6ápSra. ~a;:' . requiere<.algún trabajo de carpintería, realizan en Ul1 día 'lo' que lo~ carpinteros
_cerplanos a distintas alturas,En Fr~ncia la usa,n:Cómo' grúapé~ueña.>pofejem-· ..ttórinales tardarían quince días en hacer. Énestuüio el trabajo es dístintó; yii que
plo; dado que'entreunactorsentado~n u~abu~c~y el!pi&m~_·actor·~epíe..bay allá los suelos son lisos. Se alcanza111as escalerillas, los peldallós, gru?ias a cu:'
una diferencia de altura de alreci~dor de 80 cm: la dolly, en el caso dequ¿ ebic~ bos de la altura de un peldaño o de dos (además del trel~ de juguete, ahora tam- 1,'

. 'tor se levante, elevala cáma:raila vez y, de este modo, évita«tec;hár;>; e~decir, bién los cubos): los practicables. Practicables, madera, contrachapado, rru1es de
- '¡;V que el techo entré dentro del campo (a menudo, el techo significa proyectores que

el cine prefiere fuera de campo). Antes delaií1Ven~ióp de la dolly; las vistaspa- 43. Las grúas móviles son grandes estructufaSde cub()splega9Ie..~·¿¡ue salvan las·diferencias
norámicas se tomaban y~rtiéalmente, de abajo' an'iba (o de arri~a,' abajo), sieni~ de altura en los decorcldos.
pre desde un punto fijo. . , . .' __ _ 44. Jeanne Moreau: en un programa teievísivo consag¡:iido al fbdaje de Úl Tl'uÚe, de .]os~ph­
SigaÍnosIluestt'1S idas'y venidas en el·.tiempo y véamos~llále's'--cUárera' Losey (1982), habló de HFe\altaciÓll queproporc~ol1ala cpnsecuciólldel:¡n bue~ trul'eÍling, Para
.. ellaJ ese trabajo de équipo (aclores~técnicos) repréSénu(ur¡o de los interesesúpeeífiéos del traba-
en las años cincuenta y sesenta,-:- el trabajo de los maquinista~en.efcírie~ >:': jo cinematográfico. .
',. El maquinista-jefe ,es .eltesponsable, junto asu·equipod.emaquiriistas?de ..• : ' 45. ~inguna relación, evidentemente, con el monl:aje~I~~cndidocómootra eta¡}a, de la ürbriCa-
todos los desplazam~entósJlé l~ cfuilara y. cí~l ;Ínateiüil'defilr,na~i6n; '1Xa¡i.w.qi.t~:':? ;'. ' ción de una película.' " .
. ,.' :.'. . : ' :c""\i,?>{.~."::::;
(

EL ENCUADRE CiNEMATOGRÁFICO ENCUADRE Y TÉCNICA .:. 45


,iZO
.~.

travelling y carro, comp~neli el material del maquinista y con'él cargan un ca-


mión,de-cinco tonelad*:: . . . .
- ( El equipo de maqninistasaría en función del preSupuesto y 68tá condicjo.., .
nado por el género de la película. Antes el núnimo eran cuatro personas, lo que
hoy vendría a ser el máxi)no. Con «antes» queremos deci~ antes 4cl cierre de los
estudios. .
Indudablemente, si,:~o se hubieran mantenido durante los años de rodaj~s
tradicionales -pesados como su. material~ aunque en hOllO r. a bt verdad habría
que decir que un poco menos qu~ antes-, y si hoy por hoy no·asistiéfanios· a un
retorno del trabajo de:equip~; llubiera puesto este párráfo sobre los maquinistas
en imperfecto, Las novedadesde la Nouvelle 'Y:l'.lg~e· -Al final de la escapada'
(A. bout de souffle,* i959)f.2.: poco person~l; pocos medios, 1l1,aterial portátil y
decorados naturales,asÚ:omo hl cámara en mano de Claude Lelouch, aún. hacen
temblar a los defensor¿s':de la quaUté. Pese a tod~, y afortunadamente, los ciileas- .
(. tas rodaban, ahnargeij~e la gran industria, con pocos medios y esca:sos equipos;
es el caso de Rivette y Rohmer, entre otros. Ya los o.peradores leSgústaba pasar
de uno. a otro: Néstor Alméndtos, Pierre-WilliamGlenn, etc. Godard, la «mala
yerba del cine», COlpO le llamabael'célebre productoi'Piene Braunberger. sueña
con formar un eqúipode cuatro o cinco personas que en cierto modo funciolía~
ría como unaescúela de pintura. y hallaría su e~tilo a partir. de una investigación
que.duraríacinco.aí'íos; y no sólo en ése instante único que constituye el rodaje.
Por on:,? lad{), la~, nu~yi:lS tecnologías, los medios electrónicos,transformúrí
las metodologías. de trabajo, y átgunos fu turistas como lean ROllch imaginan la
( condena a muerte del.operador y del técnico de sonido" Según él, pronto se po-
drá hacer una escenografía a postériori a partir de imágenes y sonidos pregra-
bados. La imagen digital no/sólo permitirá modificar el encuadre geométrico de
la imagen-"-"lo' que hace latruca~si~ot~mbiénmodificar el enfoque, la pro-
fundidad de campo, hacer un zoom a posteriori,es decir, entrar en el interior de
laimagen, estando el c¡neasta encerrado en Su estudio, a sofas éon las máquinas.
En opinión de Jean-Pierre Beauviala,46 se avecina 'él momento en que incluso
podrá modificar la perspectiva con su «máquina de tratar las imágenes».
Según Syberberg, es evidente que el cine es un «arte agotado»"que el cine
al que hemos asistido desde sus orígenes tiene'que cambiar. Su peÍíctila Parsi-
¡al (1982) ~na de las pyIículas recientes que mues~ra eje~l1plannenle'que el .
encuadre es concepción y eje¡;ución/!7 qúe los mo;imientos de hl cámara son in-
separables del fuera de cuác}r~se sitúa,en cuanto a los medios se .refiere, en::
Lee 10 antiguo (rodaje en estúct¡o, playback) y lo nuevQ (extensión Y'dramaturgia
de la película., utilización del dispositivo vídeo).
El rodaje tuvo lugar en diciembre de 1981 elllos estudios Bavariá, en' Mu..:

46. Inventor y constructor. de cá;naras y de materÍld ci~em~togr~fico(MTOÑ) ..


( 47. Homenaje al cámara: Igor Luther. .
'í'
~::,

.~

.~ EL .ENCUÁÍ'>RE Cf:NÉMATOORÁFICO ENCUADRE YTÉCt:lICA


.'
nich~ en undecém;tdo .que era 'la,máscara 'l'nOi1iloria d~' Wagner (ef~~vrunente, Max Ophuls49 veía así un último dfa de rodaje: «Est&. el último día, Ías últi:- ...
Pars.ifal, su últimaópeta, súrgiÓ del c~reb!'o de Wagner) cO,Iístruido como un mas horas, qúe,nó son siquiera un día. No l1ay conclusión, no hay ap()te()imi,-nO-
puzzle numerad\:>. ,Syberberg había situado un exttañodispo.sitivo, en ~Lqu'e los . hay ftltimo acorde, ni se posa la batuta sobre el atrU: la
actores; la Y?~ de los au~énticos cantantes 9aópera pregrabada:se,~~n,t:tenplay­ pierde en la arena. Hace ya algunos días que ha empezado
b~ck) .y .el cineasta que: estab~-t disp'ers~(lt~s~eri ~el estu,dio, ,se.. t!n!átJ.;:e!e.ttrónica- La gente se va yendo de uno en uno ... De pronto ad vertimos, trm; d ne(:Of2ldü,
ll1ente,:Syberberg, désptiés déhábeflo ~ns~yado repeti4amenti¿on los a~tores, la negra pared del estudio. Depnmto vemos que una peluca no
c6ntrolaba -sus interpreta~íQnes, sus n~ovimientos;la hI:li'yeté,ncuadre:s&:htado peinada como ,el jueves anterior. .. La camarera de la cantina te presenta lacuen
ante un monitor de vídeo, lejos dela acción. .' .' . ., .' taque debes saldar y el peluquero te pide un autógrafo ... ¿Qué voy a hacer con
" . {<No tiene nada de sorpréndente ver a Syberbei-gdirigiendó así su Parsifal, mi tarde? Tendráqueag9tarse en la tristeza, en este último dla ele rodaje, sin
'ed~ondido qe,tra:sde .lasimágenes grises del vídeo. Por un lado, asíe§ como se este consuelo: tiene que haber un último día de rodaje. De 10 comrario)'hoha~
.:'¿Ürigen las 6peras. Por otro,.sé qtie él se interesl\ por el,vídeo. por su1nflnita ca- bría unpróximo primerq,ía de rodaje»,
pacidad de archiVo 'y obserVaci6n. Dé este' mo<!o se cónvielte; a'la vez, 'en di-
'rector de orquesta yen investigador' p~gado a su microscopio. El vídeo le da un
aire distinto al rodaje, relájalahisteria delequipo,Yl1 sobre todo, la de los acto-
.reS' qUE( se saben observados, pero que ya no. ven cjiíiéli lesobs.érva. El vídeo lo
enfría toao:» 4~ . ,,:-

~ste con;tftuye un ejemplo del rodaje exu'año;l11bridoi típico'ditos años


ochent.a. ¿Dónde sitliar ~trÓ ejemplo-' la expeIi~ncia de Jim McBride, ci'nea:s~
ta independiente de losañós sesenta"que halla por fin la pQsibilidadderealizar
uno de sus proyectos: el remake deAl final de la escapada? Durante este tiempo,
. los in.s,titutos detecnologíal1?Í.1·.crea~ojil1ágenes de sííi~esis COn sus'ord~nadores.
En Fr~cia coexísren'lasproduccibnesm.ás . cliversas:grandespr9d!lGtiones,
come-backs de loS. aventureros de la Nouvelle '7'¡ agUe,· primer~spelícula~ inte-
gradas en el' sistema, minlsisterrias ais,lados, etc. El conjÍlnto.·cOlliJ1imye lQ que
podríi¡mos denominar ~<el cine que tonocemos desde que existe», segl1n hí fÓr-
mula de Syl;lerberg.' ', . ' .'
", ·Es'slifícil--:7no sieridotut'\lr¿log~ prever el futurodelmediocjnel'1lat0-
.grá:ficoni,s especialistas. no han zánjadosüÍuiera la,cuesti6nde 'su sopi)rte;:¿Será
el soporte -imagen electrónica oimagen quimíca~ el que marca, mateará la
diferencia? " . l'
Orson Welles, uno de los .cineastas más. ~~perim~ntales,s6nreiaGúando le .
de
hablaban de las imágenes electrÓnicas y.de-'lapantalla· vídeo. S610 encendía
el televisor cuando no estaba en$, u 'cása: ¡para asustar aJos rateros!.
Robert Bres80nleresporidía:acualquiera que'le dijera queel1 el cine estaba
todo hecho: «El cine es inmenso, no hay nada hecho». .
Los espectadores contradijeron alos inventores del cine que locoÍísidera.:.
ban como un invento sin porvenir.. Ése es precis~ente el cil1e qué nÍe·iríter~.
sa,. cÓmo nació, cómo contiIiuó, cómo 'exIste, pe1ícnlatras pelíc'ula: Algunas,
veces los cambios imperceptibles han sido máS, irr:.lxmantes.que lasg;tandes.
ruptur;~. :" ' .;~
49. Citado por Georges A.nnenkov, creador del ves.lUario de la:; pelíclllusd(~ MuxOphuls, en
~Serge Daney, Libératioft, 2 dé diciembre de 1981;· su libro aparecido en Éditions Le. TelTain Vague, 1962.
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3. El trabajo de encuadre

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¿ Cómo transcurre el acto de fIlmación, las más de las veces conGentrado en


( ocho o diez semanas de rodaje? ' . ".
En inglés se denomina shooting al rodaje y también se utiliza el mismo tér-
mino para,·designarun til'O' oun'fusi1amientó~'Siri duda 'alguna, eSédóbté seriti:.
do corresponde a alguna realidad., Por lo deniás, en castellano .se conoce la
( expresión «mirada asesitÍa» y si Jél, .cámara es· ese «ojo 'enonúe»' que fasCina y
aterroriza a Isabelle Huppert,so'por ejemplo, cQmpre~demos que la cuestión
(
pueda tener que ver cori el asesinato. También podemos hallar metáforas de la
filmación relacionada,s con la caza y la depredaCión. En definitíva, del encuadre
se puede esperar lo peor.
Con todo, convendría matizar ,estas éonsidel~ciones: y escuchar a Godard
cuando afirina:<<Para mí la cámara no es un fusil, no es algo que emite. Es un , .;

instrumento que recibe, gracias a la luz».51

(
(,,'

50. En una entrevista de Cahier.~ du ciúéma, n. 323-324, mayo de 1981.


5J. Dossier de prensp. de Nombre: Car,?wi (Prénom Carmen, 1983).
50 . 51

Lá'división del trabajo

En los rOdaj~s de los Estado~Unidbsse'grita: «Lights, Camera;Aé~on!»;


literalmente: «¡ Lúces, c'ánwa; acción!». Lo que corresponde al trabajo del di~
réctot de fotografía (y de: sus asi.stentes), d~l cárI}~a.(y de sus asist~nteS) y de
·l~S· actores.' Sin embargo; como decía Alfted Hitchcockparaprecisar: lo que
'CoIÍsÍderabamásiíripóitante.de su trabaje~«Lights, Action... but mostly came-
rah> (¡LuceS;acción.. ·. pero principalmente·cámara!). "".'
A, excepci6n del. cine llamadoexperimenta1~ ciertos. documentales' y los
. diez .primeros" días de rodaje· de Ciudadan~ Ka11;e (por aquel entonces Orson
W~l1es igno~a:ba las tradiciones del cine y se creyó. obligado a hacérselo todo él,
.luces iÍlélnidas ~dis¿reta1néÍlte, Gregg.~ohi.ñ.d arregló Ún,poco'las cosas a sus
'espalgas2.), la fabricaci6n de, las pélículas és unalabor colectiva. lriéduso en
· Francia~ cuna dela poción dé autor, éste se rodea de té.cnicos que; asu vez... y por
.orden jetárquico , son responsables de un sector detftminado. ElencuadreIÍo es-
capa á esa regla. .
':. ¿Quién es el autor del filme; esa obra colectiva? Esta cuestión, de aétuali-
dad 52 permanente, suscitó;umer~saspolémicas' afIó largo de los años éiné~enta.
.¿Será el autor del argumento; el guionista, que a la' saión también suele. ser el ar- Robei-tBresson al visor
tífice de los diálogos? 'Impensable negar la importancia de Prévert,por ej~Íllplo,
para~l cine fr~cés: ¿Seráelproductor, que.penmtequese haga la pelíc.úlay pro-:
pone, o qUizás impone, a los técnicos ya los .actores, ha~e que reescrib~elgui6:q so~. Epstel~ L'Herbier, Duvjyi~r, etc.) puntualiza: 54 «Para mí, la fotografía en
· y que prosigan .con el montaje? ¿Débénio:s citar clpidamentei 16s'mQiiits"d~ 'Sf"ilO"~x1ste;"va"asociadaa'ulltema'o amuchas. otras cosás, l1oe.') algo que se
Hol1YWQod (los Thalberg, 'Meyer, Warner,etc~;que antaño dieron sl,lÍlorilbre a pueda enganchar en Ulla película. Las imágenes. pasan a ser parte de un decora-
, las grandes. compañías, ras májors, eimpusieronrinestilo, Un l09k/a too01.111 stu- do;de unescenari9' Alguna veznie han dicho: "¡Qué fotografía tan buenapet{)
. :dio) , los que se per11llten distribuir u~a nueva versl(jn de la pelícUla d~ Michael' : qué película tan m<l:laJ" y sólo puedo decir que era falso, lo que era malo era mi
Cimino,.La.púerta del delo{Heaven'·s.Gate, 19SPJ~.montada,el1teram.ente;Súi.,él,: . ~~,!?,,~~~g~E~~,~<!~,npE~~l~.raquefu~ra tan ma.lacomo la película. Cuando se
0, en París, Daniel'foscan.du Plantier.53 que; pOdoqemás,reivitidica ia herencü;r" advierte e~ que hay un errOD>.
· de un (iutor donde los haya, RQbertoRossellini, .que ini~iauna enttevis:ta::~nLe . También es cierto que la belleza deJas fotografías de John Alton (profundi~
Monde citando a NietzscJl.e; y al que álgunos ,consideran «la'últirna esti:élÍa del. dad de campo,' sombras, colores) en las pelíctilas de Richard Brooks, por ejeni.;
Cine francés»? " ' . . ' . .. plo, no enmascara la debilidad del guión yde la escenografía.
Dado que vamos a ver un Louis de Funes: y.;nó un Fra1l~oisGlrod,y que. " . No hay oficio más extraño que el del colaborado!' técnico y artístico: ¿cómo
cada vez es más dífícil m.antar una película e:n Fran9iasi no ,es con'Dep?J:dieu o contribuir con lo mejor de uno .mismo ala creacióq de cada película, 55 ~U8Jl­
con Delon, ¿no será ésta'la vedette? '¿No será el director de fotografía? Stanley do. s.e .está obligado a encadenar películas de serie,. grandes películas y obras
Cortez, P9r, ejemplo, se considera un artista de la mi~ma naturaleza que Beetho;.. maestras durante quince, treinta, cuarenta años? Las filmografías de los técni-'
ven y dise que podría rec:onocer elest110 de un colega con visionar.'laproYec- cos resultan muy instructivas y, a veces, JeanCocteau oJean Renoirpueden
ción de una sólit·secuentU:t.: .", . " habel; contado menos en sus respectivas vidas profesionales que Henrí Vef;"
PhiIippe,Agós'tinf'Coperador-jefe, d~ pe~é~ías de. Grémillon; Camé,'Bres-
54. En Le Cinématographe, 11."ÓS,junio de 1981 .
55. ¿Cómo consíguió Roger Corbeau 1;1 hazaña de una obr~perso!lal-el conjunto de sus fo-
52. Véase Cahiers du cinirna; n. 353, IlQviembreqc'1983.
tografías de plut6- a partir de elementos dispar~, del material de las películ:lsde óti'Qs? Por de-
53. Director general de GaUInont, la compañía de producci6n, distdbucióó y exhibici6[1 más finici6n, las fotografías de pelícúlasdistintas no deberían parecerse, dado que en cHd~ ocasión debe"
poderosa de Europá. ' .' . . '
rían reflejar el espíritu de la película
-
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52 ÉL ENCUADRE CINEMATOGRÁFICO EL TRABAJO DE ENCUADRE 53


(

( neuil. Los cineastas ~í pueden seguir las direcciones enqu~ se ,desarrolla, s':l!fabajo. decide se,guir siendo cámara para siempre jamás. Por ejemplo AlainDouarinou,
Afortunadamente, de una película a otra, según el género de la película, y a quien ya habfacitado anteriormente. O Philippe Brun,poseedorde una «habili-
también según las personas implicadas en ella, l~s roles, -los distintos roles dad diab6Iica», según Sacha Vierny, operador-jefe con quien trabajó a menudo
atribuidos al cámara, por ejempl(}-:- no están completamente fifados y las va- . en las películas de Resnais. Brun, de quien Foucard habla en los siguientes tér- -
naciones son infinitas en torno a estos-parámetros que, a Ini parecer, resumen la IIÚnos: «Tengo mucha estima para uno de mis camaradas"que ejecuta sus Il1ovi-
situaci6n:'técnicalescenogr~ffa;ejecuci6n/col1cepción; orden/libertad; prepara- 'ro/entos con una perfecci6n tal que, aunque no se advierte que la cámara se mue~ ,
ción/improvisación. v~. se nota ló que hay que nótar. Él ejemplifica una personalida.d de, cameraman
qtieaporta algo a la película».,
.', Por otra parte~ tenemos también a operadores-jefe, responsables por tanto de
La función del cámara laJuz (~rmino .más noble que el de la iluminación) de las películas, a quienes
también les gusta el trabajo en el encuadre, y ju~gan que enéuadre y luces son
Hay distintasma,neras ,de ser cámara. inseparables. Intentan conjugar ambas actividades. Pi.erte-William Glenn,' por
'De entrada, entre los cámaras· titulares tenemoS al técnico enamoradp de la' 'ejemplo,ide6"a~dado por sus asistentes, el encuadre y btluz de Una chica tan'
máq . imismo, está el cámara de paso, aquel~ el que el encuadre. es el , decente como yo .cUne belle fillecomme moi, 1972) dad9que Fran~ois Truffaut
( prefirió emplear auna sola ~rsona. Luciano Tovoli, célebre operador-jefe italia-
paso o'. ' o hacia el oficio de,operadot-jefe y que considera que la de las'luces
( es ,una labor más prestigj.osa. ,Pero también está el cámara p~a quien el encuadre su
no de películas de Antonioni, de Ferren, etc., cambia los papeles con asisten:.
(como etcontrabajo en la orquesta -las.metáforas musicales son un lqgar común te, uno encuadra mientras el otro ilumina y viceversa. "Otros, como Nurith Aviv,
( 'dellengQaje de los cámátas-:-) puede tener una import;mcia primordial y. como alternan las películas en lasque ellos (ellas) son responsables del encuadrey'en
(, 'buen «efi3niorado
. .'. .
deleg~lJ,adte»:(expresión
. :.. . ."
de uno ,de enos:
-
R01Je'11: FOll:Gard),S6 las que son responsables de la luz. .
Para ciertos operadores-jefe el encuadre es una necesidad" equiliJ)I:'~ sus lu-
". '.,-"~" . - '.' "

ces en relación al encuadre. A Néstor Almendros le gustaba instalarse, como él


( decía, en la cámara, y se comparaba a un pip.tor trábajando la.luz, las perspeeti-
vaS y los volúmenes. ,. .,:
. También' están los fotógrafos de pIató,,·otros cámaras que están entre la fo""
tografíay el cine, cu,yo trabájo consiste no en hacer una 'foto de cada uno de los
p~anos de la ,película~ es decir, en el caSo de que el apar~o se mueva, de cada
Íln6de los movimientos' del piano -asimismo, y por 10 tanto, sacar fotogramas
a partir de la película- sino en sintetizar el espíritu de una secuencia en una
sola fotografía. Sínt~is que se puede realizar desde un ángulo distinto, con un
encuadre diferente, y (tesde un punto de vista distinto al de la cámara, salvo si el
realizador, desea hallar el encuadre exacto de la.cámara en las fotografías,en
cuyo caso el trabajo de creación del fotógrafo está limitado, basta con pone[se,
en el lugar de lacám,ara cuando ,se ha rodado la escena:. ,
Roger Corbeaunarraba. en uñ.progTama de FR3 s1 dedicado a,su persona,
que Marcel Pagnolle había propuesto ser Su operador y que había hecho tres
pruebas (cuyo resUltado fue muy satisfactorio) paraEI pan y el perdón (Lafem-
n,teduboulanger, 1938)~ Sin embargo, ep. realidad prefería expresarse mediante" '
" i~genes fijas: «No 'soy, en absoluto, un hombre hecho para el movimiento,
OraneDeffiazis en A¡lgiHe, de Mareel Pagnol(foto:RogerCorpeau) sólo soy feliz cuando mis fotos no se mueven. Soy un hombre exclusi.vamehte'-
. ' hecho para las fotos muy, muy preparadas, con l~G~extremadamente pr~isas.,:' '
56. CálJUlia de las películas de:Gance. Camé, Franjú, DeViUe, etc. y de la célebre Sibila ~
DilIlanchesdeVille~d' Avray, 1962)\ de- ~rge~ourgÚignon. ' ,
57. Ciné-Regards, junio de 1980.
EL ENCUADRE CINEMATOGRÁFico EL TRABAJO'DE ENCUADRE
55 .
A partir de una imagen-fija se puede estilizar el movimiento hasta el menor de- En los Estados'Unidos, en tiempos de los pioneros, reinaba la improvisa-...
talle». Expresaba así su concepción, la de tUia estrella de la fo~ografía deplató ción, eran los viejos buenos tiempos evocados por RaoulWalsh. No lrabíá
. que, a su vez, se considera un colaborador muy estrecho . cle los actores. . guión, ·découpage todavía menos, un débil hilo conducía la jornada de trabajo ..
. En fin, los operadores de efectos especiales son responsables de trucajes en Con el cine hablado el trabajo se especializó, la carga de dirigir a los actores re-
la filmación (por oposición a los trucajes realizados en laº9.ta~ori() ).. Piérre V_u-. cayó sobr~ el «directof», la máquina hollywoodiense era 'elVilléulo entre'los'
lin, por ejemplo, ha hecho mucho ---:ya le he citado anteriormente- por la fil- responsables de cada sector. A los cineastas d~ origen europeo, numerosos
mación. Cuando le preguntaba por sus inventos me respondió que no se trataQa como ya sabemos, siempre les desconcertÓ esta estructura. Un día, por ejemplo,
más que de (~el artey la manera de de~plazar la cámara en función de lo que se . Anatole Litvak pidió un visor y Arthur Miller, su operador, le respondió:' «¿Para
muestra». Bella fórmuÍa para referirse a los raíles de los travellíngs y a las fija..; qu~? Dígame qué es lo que quiere y yo se lo haré, ganaremos tiempo». Y, al pa-
ciones especiales que perlIÚten. que la cámara se. sostenga, por ejemplo;sobre el recer, Anatole Litvak se mostró encantado alpoder consagrarse a los actores.
.ala de un avión. Asimismo, Luis Buñuel cuenta que durante una de sus estancias en Holly-
PierreDurin se vio obligado a resolver problemas de encuadre(ángQlosde wood almorzó con Joseph Von Sternberg que, a la sazón, estaba rodando El ex- ,
filmación, número de cámaras, situaCión de la cámara y velocidades de.lacf· , preso de Shangai (Shanghai: Express, ·1932). 'Este último hábía querido entre-
niara) y, a partir de éstQs, de la escenografía (se, 1, un asunto de sentido co- vistarse con éléon motivo de Un perro andaluz (Un chien andalou, Í927), que
mún) con el fin de que estos efectos especiales s maran correctamente. Un había visto, y de Cocteau, a quien había conocido. De regreso al plató, .Buñuel
efecto especial en elclne, el más genial e ingenioso, sólo :existe cuando ha sido constató que tOclaslas cámaras (una. docena) .estaban situ~dás y que;los .distintos
filmado. Si está mal encuadradp, no lo vemos, y entonces hay que suprimirlo en ángulos no habían sido elección del realizador ni del cámara sino de! deCorador
el montaje. Pierre Durin, sóÍo. ~nterviéne, evidentemente, ene~ encuadre de los según costumbre de la época (1932). Todo estaba dispuesto, Sternberg podí~
planos en los quefiguran~sus: ef~Ctos especiales, que sigue de principio a fiD:: de . trabajar con losa~tores.· '. " " , '.
su concepción, a partir de la lectUra del guión~ a la constru~ci6n del mecanismo Esta anécdota, testimoniodelodio de Buñuel por Hollywood,.s~,cOhtradice
(consistente ent{Ucajes mecánicos, no ópticos), en función;delángulo.de filma- Co~-lo que s~ sabe de ~ternberg, cineast~ europeo, maldito pót HoÜy~ood,que
Íos
~i6h deseado ~orrncl:rIente en colaboración con decoradores de lapelícu- tema reputaCIón de megalómano y que controlaba.sus películas hasta elmás mí:-
la- y, en fin, alá super'Visiónde la filmación. nimo detalle y que contó, respecto del rodaje de sullltimapelícula, TneSagaof
'. Señalemos que maquiní,SÚlS y asistentes, el primer asistente encargado del . Anatahan (1953), que él lIÚsmo 'encuadrab~ y que no soportaba que hubiera na:-
enfoque de.la imagen.y el segundo asistente que se ocupa de la película, es decir, die tras él en él plató. También podríamos citar el nombre de Alfréd Hitchcock
. de poner y quitar las cargas, cQi:npletanel equipo de filmación; El cámara es, Cla- que, no con:tentocQn controlar todo el proceso de fabricación de sris películas,
ro está, el responsable de la cámara yeljefo (eloperador.::jefe).delas luces. se jactaba, además, de teneteilsrisIlláno~ la «direcci6n de espectadores})~ '. "
Contrariamente al qperador~jefe (o director de fotografía) que suele «haceD> ,Ello no obsta para que en HolIywoo(Í:la. máquina funcionara, con artesanos; .
, la lu~ en una·gran.soledad,'el operador (al principio le llamaban «segundoopera- y que, en la mayoría delos c~os~ e~ trabajo del director no se pareciera en nada;'
dOD>, aunque no exactamenteal'principi(), ya que en el cine prilIÚtivo una sola· al del rea1iiador francés. Por supuesto, las tradi~iones -laS concepcionesylos
persona hacía la luz 'yel encu'adre) trabaja con muchos miembros del equipo. Por· métodos- siempre se han interpenetrado, se han influido mutuamente ynume-
ejemplo, con el decorador. Ycuando le pregunté a Pbilippe Brun por la cuesti6n rosos cineastas extranjeros fueron atrabajar a Franda(Dreyer, Lang, mdaron \..
de la Parte perso~, subjetiva, &1 cámara en el encuadre de un plano: «Siendo es- en París) del mismo modo que los cineastas frañceses emigraron a los Estados .',
pectador¿no le ocurre que algunas veces nota que ese plano se podía haber en- Unidos (Clair, Renoir, etc.). ' " ,
cuadrado de otra manera, que usted lo hubiera encuadrado de otro modo?». me Wim Wenders, cineastaalemánaunquehe~edero porsucinetilia' de los
respondió. que «.no se puede imaginar encuadrado de 040 modo porque no pode- americanos, se planteó la cuestión de su dOblena,cioJJ,alidad incluso antes de tra~
mos ima~os una parte· del decorado que no vemos. Las películas de calidad bajar en 10s.EstadosUnid()~.Ct!.enta:qúe s~ ha encont(ado conuu-conflicto en ..
dan una gran sensación de umrl?.d y entonces las cosasson dificiles 'de distinguiD>. cada uno de los. encuadres de MIsp~lículas y de un modp especialmente agudo.
La sensación de urudad se da de di~tinta manerá, según)a organización del en el rodaje deDie Airgst da Tormánns. BeimEljmeter(l97I). Efectjvanjente~ ,
trabajo. Recordemos que esta organización del trabajo es e!,fiutó de las ide~ re- es heredero de la tradición del cine americano pero no tiene mentalidad ameri:-
cibidas, de ,la· normativa sindical, de las le.yes establecidas a.Partir de las exi- c~ con 10 cual ~jncapaz de mostrar las cosas como los americanos. y. final.:.
'gencias técnicas y, finalmente, de las costumbres. " mente" halló el modelo en las películas japonesas de 'ozu. Otu le demostró ~ Wen~:, .
56 EL ENCUADRE CINEMATOGRÁFICO EL TRABAJO DE ENCUADRE
. " ..
' . 57
deis que se podía aceptar y transformar el lenguaje americano, que para Wenders , La his~oria nos"ellSeña que. en los inicios, el operador solía ser un antiguo '
era er1:ÍIliGo lenguaje 'del'cine~ Americail..? el?- tanto en cuanto se había elab~rado . fotógraf{)J:~e,on~iti4o,alas imágenes-animadas. Tras algUnas prácticas en ell~-'" .
en p,.mérica. b.Qt.a,tQ];io~:aGCedfaaJ. mdaJe y asumía solo todas las tareas: filmáció~nHinteni,"
Veamos lo que ocurre en la Francia actual, donde he recogido algunas im-
miento de los aParatos, rev~lado de los negativos por l~ noche positivadp, , y
( montaje, sin olvidar las numerosas invenéione~ d~ '«trucos» y de procedimien-
, presiones sobre el trabajo de em;uadre;forroulación que me recuerda lo que; du- tos, gracias al bricolaje o al azar. Bíl1y, Bitzer fue operador de David Wark Grif-
,rante los años setenta, llamaban trabajo del filme», heredero directo del tra:- fith deJ908 a 1929. Veamos, por ejemplp, cómo inventó el iris, ese cuadro den~
bajo del sueño freudiano, y que conocen cieltos cineastas atentos a los signos, tro del cuadro que tanto Se utilizó en tiempos'del arte mudo. 60 Un diaen que
coino por ejemplo Jacques Rivette. quería.fabricar un parasol para su objetivo, tuvo la sorpresa de que después de
Jean Badal 58 cuenta una historia relativa a una película de la que era operador- revelar la película descubrió un círculo negro en tomo a, .cada iiruig~n. Griffith se
jere; Había rodado durante tres días pero en los laboratorios rayáron la película que mostró entusiasmado y le preguntó cómo había ~btenido'ese efecto. Billy Bitzer
~bían flimado durante esas sesiones y estaba inutilizable, había que volver a ro- lerysp'Q~d.iPquei n~\';aba llleses,t(atJajin~o "~ ello!, Junt€>s perf'0€CiOliaron 'el
{
¡ , darlo. Rehacer Ío'quese había hecho no parecía imposiple, dado que era un roda- procedi~ntO ycon&guie¡on que el iris se pudiera alargar o ac,ortara voluntad.
jede e?Wdio. Se sjtuó lacánlanl en los mismos lugar~e) así co~o los proyeCi?reS, Los, movilnieritos del aparato eran poco numerosos y la imagen dásicá re-
lósactQf~srecuperaron sus respectivas «posiciones»; dijeron «,Motor!» y se'rehl- , presenta al operador sentado en'una silla y el aparato 'fijado permanentemente a"
/
cieronlos 'planos. Sin embargo, la pura repetición, la voluntad de recuperar sus po- una altura lo másc6moda posil:Jle. Muy pronto el tratamiento delapeIícula se '
" siciones y el automatismo de los en,cuadres, Íe habían quitado toda la vida a la pe- puso en .tl1aIl0 $ de servioiosespecializados. Como consecuencia de estos cam-
lícula~t:a> proye~ión de los núevos fushes provocó más constema,<:iÓn:en esta bios, al "Qperador se le,adjuntóún ayudantede'c4mara, quien se ,o'étipaba de ia
( oéasióilno se trataba de 1,ID error técnico pero 110 «ocurría». nada, las escenas no te- película durante el rodaje, maIl~níalos aparat()s ya!gu.nas veceslpcluso enf<h
nían alma. Elequípotuvo que intenumpirel trabajo durante varios días para po- 'caba. Comb.la,téc~cll:, qelá..fi1wapiQn,se perleccionóy se complié6, fuenec~.;;
derreemprenderlocon unespídtu lluevo. La creación artística no es mecánica, la sario'incorporar a 'especialístas' en· funciones clarám.ente definidaS~' 'El' cámara,
( filmaciójino puede ser una fotocopia. 59 . ,
~1)~J ,ª~JaM~,ei~u~,B¡,ard_"denomina,ensu :M@uel:de {'ltssistant-Opérateur ,«-el
Eriirismo Badal dio cursos en el IDHEC. Siempre llevaba consigo una pelí- colaborador encargado deasegJlfar el equilibrio de las masas y lasnneas de la
clllaque proyectaba bobina a bobina y que acto seguido a.nalizaba plano por plá- imagen, sea,n cuales fueren los qtovimient<?s relativos del aparato 'y de los acto- .
no en la mesa de IÍlontaje; luego los estudiantes escogían una secuencia ypa.. res»,' durante mucho. tiempo no fu.emás que ll.l} «segundo oPerado:b> que acarrea-·· "

,saba.n,al pIató a hacer.el remake. DispOlúande todoª_12selementos necesarios, ba el aparato y que le daba a la manivelá cuando ha~ia_ que llacer panorámicas.. ",
actores, maquillajes, proyectores, etc., así como de ampliaciones fotográficas de- '6eográficamennr;'loS"'ñisrtnfos:''l'ápeles .vanruf sensiblei.nerite.'liidudábré~':/, ,-.; ",:
los planos de la secuencia, por si deseaban poder examinar los cuadros inmovlli7 mente, por ejemplo en los Estados Unidos, aún hoy se respeta mucho la división·', .
zados con ,precisión: continente (dimensiones del plano, ángulo de la cámara) y del trabajo. '
contenido (disposidóndé los decorados, situación de los accesorios, etc.). Diez En este trabajo colectivo en el que cad,a uno es responsable de su sector
alumnos-realizadores obtenían diez imágenes distintas y ninguna de ellas se pa- , ¿cómo se reparteboyel trabajo en un sector, elqel encuadre, en un rodaje P~D~
recía·a la original. Todo· cuanto vendría a confirmar la existencia de un misterio fesional r,nedio? En otras palabras, ¿quién es el aütor de los encuadfes? VeélI110S '
de'lacreación cinematográfica ---:-en el que será mejor que no intentemos abon- la definición oficial de las funciones del cámara, tal como nos la ofrece Pierre
e dar--, un e1emerlto delafllffiaCÍÓn que es imposibledominar:fota1~eIl!~' Brard: «Cuadro técnico de laproducci6n cinematográfica.baj0 lasórcieI1es di-, '
(, rectas del operador-jefe, aunque trabaje encolabóración con el realizado;, es- .
pecialmente en 'cuarit? al ajuste -ae los IÍlovúniífntos del aparato que se necesitán"
58. Op~rador-jefe, ~ntre otras películas, de La persecu~ión (Unroi sansdivertissement, 1963),
de fram;ois Leterrier, según GionQ; de Coeurs vens(1966), de Edouard Luntz; de La novia del pi~
para la puesta en escena, es el responsable de la composición, equilibrada.d~:,lá' ,
rata (La fiancée, du pirate, 1969), de NelIy Kaplan; ~ de Playtime (Playtime, 1967), de Jacqués imagen, ya sea fija o 'en movimiento, del mantenimiento geeste equi1ibno;~ean,~, '
. :..... . ,,'.;:
Tati.
, 59. Jean Cocteau anota en su diario de rodujede La bella)' la bestia (La beUe et 11;! !Jete. i 946),
60. Y que luego desapareci6. EUris reapareci6 enlus primeras películas de la Nouvel1e Vague; ,
Éditions J.-B, Janin, 1946: «Tiemblo ante la posibilidad de una catástrofe que, me óbligara a reha-
Fran\!ois Truffatit pareci6 aficionarse al procedimiento, que hoy en día se realiza en laboratorio y
c~r lo que no se puede rehacen>. no durante la filmaci6n: ' , '
~ ,

,. ELENCUADRECJNEM~T6~*¡\FICÓ ' EL TRA.1f~C? DE ENCUADRE 59

~.GlJ~~s..füerenlos: mÓVimiehtds det;"süje,to .deinterésprin0ipal, y'desu restable- sagrado con que aveces se connota lajilmación. Por ejemplo, cmuldo Jean-Ma-
. cimiento, '~n~as()' denece$idad; c¡eandO niovip:úentos 'aparentes del, teirta,lUe- rieStraub yDrurieUe HuilletQistribuyen la entrada"--{}n el caIJ1:pofijo de su cá-
, .diañt-é::~l q'espl~amiéntQ razonapo de ,lfl cámara; desplazamiento cuyo ~dntrol mara~ de oleadas de obreros que salen de una fábrica en Egipto y las mantie:.
d~ke.! ~6,gUrarse •. oo1,1':.'éxcelentes movimientos' musculares ,de~rrnlltadq~por nén en un encuadre idéntico al de los Lumiere (Lp Sortíe des Usines á Lyon,
/ :~i;iec¡a¿;i6n., vi~ual: éil condiciones .operativas generalmentedifíéil~s:' " ,'. ' 1895) en su película Trop tot, trop tard (1981).
",:, ~ *Él es'ei,responsable, Junto al primer asistente, del fundo~artuen~o'mecáni:' También se explica por relaciones de ,fuerza rhás bien prosaicas, a menudo
code la támara: as(GÓmo ,de los otros medios mecánicos o~upadoi':~IislJ d~s:" . por una estatura física imponente. Sip. embargo, sobre todo, el cámara es el pri-
"plazamienioéontrolado dtirante la filmaci6n. búnemoria visual: la flexibilidad mero en ver la película, es el primer espectador de la película. Cuando se éstá
Y.1.i11:esistencia física del-cámara deben·s.erinfilibles». .,' tras la cámara hay que saber ampliar los detalles más pequeños a la dimensión
de una pantalla y eso exigeconcentraci6n, atenci6n. El operador responsable
del encuadre es el que primero ve la película tal como será en la pantalla. «Pri- '
mer eSl?~ctadof», lejos de ser un rol pasiyo~ implica saber tomar decisiones, de- .
. cidir que tal toma es buena y que hay que repetir tal otra. Esas decisiones son
, ..~ Er~ncuadre es el ejerciGio del cánÍara.Enla medida en que el cámaray el rea': sie~l?redecisiones depuesta en escena. Y es el motivo por el que Robert Fou-
,:;:1i~~~~on dos persol1,as distiqtas, la obra escapa. a~ autor.61 Por 10"dft7P'ás po- card•.porejemplo, «sigui6 en el encuadre», Le gustaba el actor, le gustaba el '
~~h1Q.s:'.tonsicférar qué es, uno de los aspectos apasionantes del arte ~qdemo:' en texto y le «gustab~. ser el contenído» .Legustaba hallar en la pantalla .10 qúe él
,,:,61.cm:~, la obra escapa al que no maneja la cámara. Sabemos, por,ejemplQ, que llaQí&~reíc1oq!Je,queríáel escenógrafo yJasmás de~las veces consiguió; áuran-
. ,. GoClard lleva tiempo impaciente por manejar sus cámaras. No obstanle¿áCáso no teja pr9yección,resultad6s que lessatisfacíall a ambos, al ,cámara y al escenó-
, es positiva esta ~onfrontati6ri del r~aliZ.fl,dOl; con algo qúese le es,?apá?62 grafo; auno por razones de escenografía yal otro; también. por razones de es-
El realizad.orconoO~Sllencuadregradas a ,una relación honiima~ auna rela~ ceno~#fí:í,ta:q~e ~~cualidó seestid.etrás de lacámura no se llevan oiej eras , no
,..c.~ón psico16g~ca con alguien que le inspira o no le inspiráconfianza. Pór lo tan· ¡: , sótúe;'c:v.e..lii,·"cáfuara.,Naturalmente,·l1ospagan·por eso, es lo primero que hace-
. lo el'enc~adre es,ante todo, una cuesti6nde afinidades. , . .. .'esono,,.,,,,,,,,_,,,,,d"'"
es·}()'único. Hay todo un entorno: se es seIlsibleal decorado, ,
. En-un plato existeunamítificación'tal':ent<Jrtloatoojeto tamata~qtie Jéan 1 "",,,_,,,",,,;-;",,",,"~"'"'' ,.,~"",
w"., .. ~
..,: ,. '." .' ...".: ' '" . ,. , .. ,. , .' " . '

Renoir pudo compararla con un dios al que se sacrlfÜ::aría todq,un:búda aql1ien'


presentarle actores,. a~cesorios, etc. ,Su pi-'üne,r servidor, el "cámara, está amplia- r
mente: válorado. Por 10 demás, ésa es también la raz6n de qué liaya.ocaSíÓn~s en
I e
, :que los realizadores se úeen, obligados a· fingir g~e. co,~O(;:~6.Jª·.té.<::W<;Jt91t~J.lcl9.
:,o.·':;:!h r.ealidad no les interesao la, temen. Elcáinara se impone atodoeLeqrupo.
Hay una leyenda que reza que, otrora; ¡oficiában congualltes blanc~g;1
t


f' '.

Cuando RobertFemcardera asistente de cám~a.dfH graii cámara Hemi Ti-


. ' quet,63 éste llegaba por,la mañana, se paseabapór el decorado con u~ visor: su
asistente, Foucatd. le seguía con una ti.za:y un-i:1eCámetro y, ,según sus palabras, '
las más de las vecese1.realizadorse 'limitaba a decir~<aii:tén» alas indicaciOnes.
-"'<,~:';':' -pI aspecto mític04e la figura del cámara se,.explica por'el cariz realmente t
" !. ~"~ ~~ , - ,
l
i
61. Más' o menos, según la maestrfa técnica de~ realizaaor. Rainer-Wemer Fas~b~nder, por
ejemplo, independientemeIlte de sus' cualidades, como cineasta, tenía ¡¡entido de la técnica. En su IL
'._ pélfcula Die Dritte Generation (l979),él mismo selúzo'c'hrgo de la cáma4!,.
:.... ~~; ::~;:_g2.:~n este. sentido, la realización difiere de la dirección de (ml,uesta, con la que se l~' suele
¡
¡.,
. :f.~d1lw.~ar, ya que ésta nunca' se escapa de las manos de su'aírec..tor. -.; -;...-~__ ., "¡ , '. ' , 1

.[
" •. ' ......... ~ 63. Cámara 4-eútre otras peJícula~- de La bella y la bestia. «...La ligereía y la preci~i6n de i
i
. - • Tíqu~t, éJ.!!e se mueve como si el aparato tuvierA alas. subía, bajaba, se aceleraba, fre~ápa, ise po:- '«Sí~mpre dos para una image'\l)~:'Jean-Luc Godai'd ~ R.áóul Coutard a la cámal11 .
,i
. 'saba donde él qu~ría!» (lean Cocteau). ,,~ .,
L
J.

,.'
I
60

muclúsimo mas a la al vestuario, a la interpretación. El cámara es el primer el Illomentoen que tO~6s.se enfrentan ·a'Su .kab~o ye~ que se ponen:eneviden-'
espectador. Esquíen ve de más cer:ca, el más concentrado: El primero en ver los cía todos los eJIores,qu~arnenudose s~brayándesagradabletnente.
Guatro bordes negros de l,a cámara es ef'eámara». . .' . P~a el cáIDarR e$~#ª: eÍlQffile res¡ronsabilidad, ya querepetifuna. to~a por.
. un',ertQf'en: la ií'íiageh, puede Cdst~ rilillonesd~ pr04'uccÍón, y fue el cámara el
El cámara n.o. puede distraerse del piano que «toma» y debe desconfiar de ,que, terminada l~ toma, decidió que era «but?na». Detalles que p-qedenteneí: gra~'
aquello que amenaza el encuadre, de la lámpara que se halla a un centíme- ves consecuencias, un 'sÍfllple .micr6fonodentto del cuadro; la sombrade una
borde del encuadre y que no hay que «rozar»; ésas son las preocupaciones pértiga sobre una pared oen los ·rostros de losactbres, él reflejo deÍlnmi.~mbt~
· del cámara. En otro nivel, ve el impacto del actor, el ojo del actor, la interpretá- del equipo en un cristal, puedenrio haber SIdo adyerticlos por e¡ cámara Yeúgir' .
dóndel aCtor, dentro del encuadre; también ve sus errores. Algunas veces inc1u- que, se repita la escena. Y si ello sucede másvéces; puede ser cátastrófito para
·so le hace precisiones sobre la interpretación al realizador, precisiones que pue- la carrer¡:¡ del responsable. • , . .: "
.denconfrrmar una sensación o tranquilizar cuando el otro cree haber visto una: El vídeo transfoma ese esquema posibilitando la visualización inmediata
sacudida: «Pero, ¿te has movido? -Sí, pero no pasa mida, olvidemos la sacudi- de lo que se hafilmadoy:¡ensú éaso,el bO~radQ,perono transfonna ~emasiado
no
da, interrumpe la escena»~Ser exigente, pero no parar una escena por unaÍnl- las relaci{)Í1es jerái:qui~as d~llfleqüipo de ród~j~, así como tampoco laspledad .
perfucción téc¡úca del orden de una sacudida en un tT'avelling. Por el contrario, del cineastafrentealresllltádo deUdiJniaci6n:. $oledaqque existe incluSo si el '
( r alto cosas que parecen pasables, porqu&'eneseinstante Unqimpér· . cáitiáta, hoy.cqmo.ayer:· COl;nparte la responsabilidad de la elaboración de'los
....nica puede distraer la atención del espectador. Ahí es donde el cá:l:ha:- planOs. . , , : •.. .'. ". '. .,. ': ..
( fa. d.ebetener el reflejodesaber S1 puede continuar o no,así como la inteligencia' '.' . .EI cáti1at~ .transforma i4east ideas de puestl en escena, ideas 'ij~ g\.Ü()nes,
( , de.no~91estar al actor'parando una es~na,],unquesea mala. Cqrtardiscreta- ideas d~·~caje.eri.matetia fflmicáy, en primerlugar, las visualiza cOn la mirada
(í1'ehte;~~acerel signode que sé~corta porque laescenano fun~ioIíátpero dejar de otro, la del realizador. ,\, ¿existe en la Civilización occídental,algomás sagra-
qué eI,áctor siga~ salv,o si esunaescena en laqué se entregaafondo,.ya que.tám~ do, máspersona1(en el.gentidod~que remite a la 'persona; a sus 0tíg~~~,'a suS
· poco setrata de permifu.que se agote «poruada».En ese cáso, no se corta aun;' . estruc~ . P~~fuiidas) ,qtfé la ~clÁ? .M1Jada•. Vl~~í .visión, ,detenjllJ;lilP.lD$eh~
que . . na imperfej::cióJ:l.técnka, se lleva la toma hasta él final, el realizadQ;!; cl,ladres. Todas las opcio;ues.de encuadre están relacionadas con la manera de ver.
siem ". drá la oportunidacj:deütilizaruna patte del plano enetmontáj¡;ffinal. ~·Bil1y'Bitzet;' elCám1fi1a:tle'Gtiffi~'le ápoaa1Jru«<Ojódé'filllcÓi1;;:<ya'que, su.
Es una cuestión de juicio'per&onal, el cámara es aprobado O desaprobado al fmal cámara (¿para sus contemporárieos un tercer ojo?) podíá ver de mucho'rilás lejos
de la toma, pero serálaproyecdónla que el tema. O, tal como lo formula que el ojo humano. Otro ejemplo significativo; aunque no pertenezca a iáes:fera di.
Oouarinou: «La conductadel cárÍlara con su escenógrafo debe ser absolutarnen~ nematográfica; son las relaciones entre la vista y el encuadre: sabemos, por su hijo
teJormaly categ6rica: En general, los realizadores sient~~ 11.0J:t'()fpo~~~c~m~a, ~e.~?~~~~!!!.9E~, r!~~~~Egcl!§t~J~t~!!QjI~~níª.,\lbª,yista.extremadamente,incisiv.a.,
que, después del rodaje,. se inantiene evasivo respecto de la calidad del plano. Un Cuando señalaba, en la línea del honzonte, a un ave de presa sobrevolando el v~­
plano es "bueno" o hay que "repetirlo" y, salvo prevjo acuetdoconelrealizador. .lie dela Cagne,o a una mariquita sobre. una eriZn~ de" hlerba, Iós demás, aunq{]e
es preferible cortar en caso de imperfecciÓn. Ello provoca que, en algunas oca':' fueran más jóvenes, te~áil que buscar. concentrarse, iÍlterrogarle, para verlo: «Él
siones, haya reacciones más o menoS violentas por parte del escenógrafo o de al.., daba con todo lo qu~ le interesaba, cercano o lejano». 66 ¿Qué mejor definición del' .
gunos actores, aunque sielnpre es preferible que le griten a uno en el plató a es- . encuadre que saber dar con lo cercano o lo lejano que interesa al realizador? .
cuchar una simple reacción desagradable en la proyección de los rushes». Entre los realizadores, hay algunos que lo ven todo muy lejano y otros que lo ven' .
.• La proyección de,los ru~hes es la proyección cotidiéma de los planos roda- muy cerCano. Algunos necesitan estar muy cerca de las cosas yutiliZan distanCias fo-
anterior y que, seglÍn nos asegura el laboratorio, se han revelado 64 la cales cortas, Podemos co.nsiderar que la distancia focal dé base de unapelicul~ es la .'
víspera «a toda prisa». Esa sesión es particularmente angustiosa para todos. 65 Es que más se utiliza en la película, dado que es la que se corresponde 'c9n la idea ge:-
neral que el realizador se hace del espacio de su películá. El1 relación a'_esta distanCia
tocal de base, el uso de otras focales se percibirá como distintas v.ariacío~e..<):
64. No tod.as hlS tomas rodadas se revelan, solamente las que eligen el realizador y el equipo
técnico. Así,duranteel rodaje, se toman dos decisiones: la primera, si la toma es buena o hay que
Joseph Losey realizaba sus películas con focales que se sit6an entre 10820
.' tq>eürla} la segunda, si remanda al laboratorio a que la revelen o no_ y los 60 mm. Otros. tienen una versión parcelada de las éosas, lo ven todo en
. 65. CiertOs cineastas de nuestros días la rechazan: dice;n que Rivette no asistía a las proyec-
ciones dé .los rushes y Goda¡.-dlos veía a solas. .
66. Jean Renoir, Pie,.re~A1fgU;lte RenOir, mon pere, Gallimard, 1981 .•
.
. .EL TRABAJO DE. ENCUADlffi

, ." ,más conocidof~Ó corte ~n los tobillos (tradicionalmente, no gusta cortar a hi ,


l' g~nteaJ.aill~~ l~s tobill~s, prefieren verlos pies oCOltar de entrada mucho.
L .. --:1Ilásar1iba):.Silieilibafgo; el ~~efecto sardina» es otra cosa, un corte en las íodiH~s '
.. 1'" o ~Í11asYimtOf.tillaS' mediante el cual, dada la forma de los cuerpos o el color de los,
! se
abrigos, los cuerpos alargan ¡y parecen sardinas! Y, además, había una ol?se-:-
si6n: no cortar las manos, .obsesión «muy extraña» que señaló Philíppe Brun:,. «A
mí, que no me gusta cortar las manos, había momentos en que, ante un instante d~­
termiriado de un plano,considéraba que cOliar una mano tampoco era tan grave.
Ha~íauna inversión de los papeles habituales, solía decirle a Buñl.lel: "No, no eS'
tan grave", mientras que con otros realizadóres soy yo el que hubiera dicho: "No,
esto no está ~ien; no hay que cortar las manos"». '

Enrea1idad~ al realizador le es extremadamente difícil transInitir el se~tido, '


. la~Wiciéll·desus.en~uadres,· así como al cámara le' es difícil comprenderlos. 67

• ",' ',~' :~r&gm~ntos que acto segui~o se recomponen" en es~ caSó; pueden rodarUh ,cam;'
, " :' :PQ:~nunl1:.lgary'uncontracampo quirice 9ías.d~spuéSien·(:}trt:tiyeljuego;con- '
,~, ~ ',~;~k¡;,en recompóner otro espacioyen. «trampeaD> a 'partir del espacio. reÍll.· ¿Por
ef
. ", qué, por contn1l1o, Bernardo 'Bertolacci no filmó 'unconttaC?ampo MaSta la
'. Tragedia de un hoFnbre ridículo (La trage~adi un uomo ridocoio, .1980)? Pa-
solini se lo había comentado y .col1sidei:'ab~ que era uno de los' rasgos' d~l s<cine"
de poesla». Max Ophuls. porsup'ái.1t(Pi-efería·quelas'oosasesillVieran~eicoñ:~·
didas, detrás de enramajes, detras'de cortinaS, no le gustaba mostrw1as brutal-
. ment~~ El primer día qu;e Alain:Douarlno.utrabaj6 con él se dijo que este reali- 1
a
zador ten'ía un, modo ~. tanto extraflo de filmar los actores: ¡no se 16sveíal
Indudablemente, la visión de Ophuls pasaba por el voyeurismo. . t, ~.
A Chantal Akerroari le gusta la simetría, a menudo el personaje se halla en
medio del cuadro y~,sino está en el centro,liay algo en t?l cuadro que «equill-: Ejemplo del «efectbsardina» tan temido por Luis Buñuel.
,', bÜl»~, de modo que se cónsiga crear sensación dé simetría. Tiene que ser «recto, Foto del rodaje de Belle de Jour: Catherine Deneu ve y lean Soi-el
':::muy~ffictc>>> y'(structuradó.También tielieque haber suelo por delante 1su cá-
. mirra: BábetMangolte,lo sabe. Espontánea, perSQnalmente,ellah~a tia! en~ '67.: Pasemos a una anécdota. que he tomado prestada al.ámbito del reportaje, característica de
cuadré de tal modo. pero s~beque,a Ghantal AIs.erman le gust~á~·de·tál otro. llÍ$ dificult¿¡des d,e divj,sión del trabajo en lo que al encuadre se. refiere; Un realizador de televisi6n,
espéCjalista en progI1lmas deportivos y particularmente de fútbol, PielTe Badel. explicó un dí.1 en
Para BuñueL según Brun -elcárnirradeBelle df; Jour (Belle deJoUri1966r- Libératlonequ.e",:abí3, tenido dificultades para constituir ÚÍl equipo de filmación: «...Normalmente
había dm< 'P\" ¡es obsesiones con respecto al rodaje,loque 6111a¡naba el «efecto Sirr- . iba a dar,contip9s que no sabían nada de tütbol., Un día, antes del lanzamiento de una falta, le dije
dina»: cuando el encuadre, el «cor~», hace que los cu'etpos de'Ios actdr~s parezcan a Íln 'cánl3ra:' (áp~do; f~ala "barrerá", y el tipo se dio la vuelta con la cámara y filmó la barÍ'era
muy" 1Jlargados; cq1te particularmentedesqgradable ,que no hay que confundir con del e.stadio»~ .

e
e
(
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64 65·
(
soilido; n011Ilahrtente\ti.rig~'sus indicacioliés ..aJ .operador-jefe o al ipgeni~t~
.• ··
.. de soni~P,.~c#9.*cl<)#.~~.:,qu..e ·puedeii.ser v~Ífls~o m~y·precisas,.sobr~elam~
. bi,~,~t~:~.~~~~~.q9,~4~sea para su pelícQla. ;n el mejor de los·cásOS, hapodi-.
do escoger y ha escogido a sus' técilicossegún tal clll}.lidad, tal especialidad'
(refinamiento en los colores: 'realismo de'los ruidos~ f!lpidez .de ejecución,.: ..
etc.). Hoy por hOy se eVita una cierta unifom;lización de las imágenes -siem~ l.,
(
pre ha habido IIioda~-:-- .aunque~ a la vez! se as~ste a la revalorización 'del ope-
( rador-jefe, un reconocimiento de su trabajo, relacionados talvezcon el re- "
torno de ciertasexperi-encias, detl;llanco y negro, por ejemplo. A$Í pues,. el
operad{)r-jefe recibeinru,cª,ciones>de conjunto y, en el plató, vive su vida de:,
mago, es el únicoqup ;conoce él resultado exacto de sus kilovatios,proyect:o-
tes, temperaturas de c01ores,difusores, fIl.tros y otros refl~ctores en lapanta-
lIa.Como mi magó solitario; aYudado·por sus··asisténtes. Es raroqueunr~a..
( :1izador, p~r más iroponan.cia que le c0l1:ceda a la fotografía de su película,
dOll1Ílieésta.alquimia; . . ..

( Por el contrario, si bi~Ii ~ cierto que detodp~ modos l~ fi1.maC;ró.~, Il.~je es"
cap~ porque' hO está deU'áS .de)a cámara, 'elencuadre suele ser fruto 4~ su c?la-' '.
( .. botációilCO~ elcamar4., Éh Franci~ a partir de la Nouvelle Vagu~,:el camara:' .
,p. '''illA'''lP decir que la acción cineinat()gráfi;~ se asemejaa un monstJ;u()d~ct1a-.
. trabaja dire~tameníeC0n.ef.. ~dor:(ant~riorment~ ·e.stababaj()\au~~.~a,nesc·:;
tro <cabezas, el operado~-jefe, el cániara, ·eí realizador y el actor, .. de.lQii:~tºf~g~JQtq~~a)~y~Q.~JP:Q,i.i~]~ ii)~er.~~:d~j¿¡ d~'i;ri9:, .... . . .: ;: ..
. Si, or ejemplo; elacior hace un gesto imprevisto que el realizador quiere de izqui~J;dá. a defe(¡ha y tener Ulla relación más directa con la constfUcdón de
. . ' habrá quecambiár el.encuadre y la 1úz.Enunaentrevista.,~8 Alain 1()S"piífdüs';·<"····u"' .... ,.. '., ~ .. . ' '; :
Res1Ínaginaba la angustia del operador-jefe en el momento en que.escucha ¿Cuáresla colaboraci6ndeseable?·¿Cuál eslacolabóración rean!~tt~él cá~
( .1apc.t!abra«Motor» y en él' que debe preguntarse si las cosas ocurrirán como es- mar~ y el re¡illiaclor?·J~:vid~nte1liente~ las opt1;ño:n.es so.n múltiples.y ¿fJ$~Í'~Il.se-··.
. tán previstas, y prever, pata otra toma, las eventuales modificaciones de 10 que gún :nOS dirijamos al primero o' al segundo, Un cámara, por ejemplo, se ,ve a sí-
. se ha situado. Henri Alekan p.2EfÍa replkarle:«Nuestro oficioco~siste ~~ un m, : .~l1l2,,~,!IDlq et~s;,m~.gp!JjIª.:4~.~º~~~.•_~mi9§"ª,1.Jt~t4fºrA,Í(PWJ?J~1ªW1._,.- .
tento.constante de prever, de preverlo todo. Aunquefaí:iíDieri'me-eñchlitfqii~" por otro cámara al que le gusta trabajar «~n ~ta», es'decir,hac~r varj.a:s~pelí-
haya algún accidente. Hay que romper la banalidad. Hay rutinas de cada día qu~ .. cúlas en equipo, conelmisinO realizádor, cuan~() basta 'un gesto~. una paIabra~ el
se· repiten;. Cuando se está muy atento a los incidentes se rompe la banalidád. recuérdo de un plano rodado én la peltérii~p:reéédent~, .pan~ entenders'éa~aper-
( Ahorabien, ¡los incidentes aparecen a diario! Sólo quena hay que quedarse fección: . • • . . , ,. ', " . '~¡.

sentado en una butaca, lejos del tema, hay que acercarse a lá cámara, estar jun-· La función t el trabajo del cámara han evólucionado con laS condiciones téc-
(
toaloque se fabrica,junto a lo que se concibe, ydeCÍr de pronto: ¡esto es 10 que nicas. En los Í1;lÍcios del$~noro, la cámaraera el actor de la película, su prime~
( había que hacer!».69 . áctor; muy pesada;sepreclsab~~eso ttíatropersonas para movedá yel me-.
Todos los técnicos del cine'se enfrentan a las dificultades de la múltiple co- nor desplaZamiento había que teaIiz~l() en unagranegrúa. Esta pesadez técnica, .
e laboración,así como a las de la comprensi6n Ylá.~·ecución del «encargo» que . que imposibilitaba que se hicieran ciertas cosas, daba importancia al que estu- ..
se les. hace para cada. película. El cámara se enfrenta mucho más específica~ viera detrás deJa cárn.ata; En realidad, la «simple» ejecución exigía' tono. mus-
.rnente a ellas, por distintas razones. cular y sentido del équilibno. Dotiarinou, que conoció est;a épOca, considera que .
En el rodaje, el realizador no suele controhu'la ~uz, la «fotografía»oel la tarea de encuadrar constituía todo un g~portey piensa que el término aleDian
.' shwenker (el que maneja la cámarl:\' el' que la «equilibra» )~ es de lo' más apro- .
68. En' Le. Cinématographe, n. 69, julio de 19.81., piado. «Sólo había un freno para parar, cuando separaba, y aparte de ~o la ma~' .
n.
69: En Le Cinématographe, 68~juniode 1981. quinaria quedaba suelta..
Cuando
.
q~cíari "M:otor" ha.bía que tragarse una ess~na ; .'
-~ " . ,. ' . '., '. '..
EL ENCUADlIB CINEMATOGRÁFICO

_':=Qe'~ nliIiutO}tmeruo:Ódos"rhinutq~ 'tal vezm~. E~Cüán~'~trav~lliniique . roo es loiUáS importante en el encuadre; por ejemplo, el sentido del ritmo ínter-
no,efr:iep.ábsolutoel travelling de hoy en día, et'a"importhlltlsim<;> 'que no se za- 'no de :,la ~agen, uI,l~,m~ei'a de estar con los acto.res. Algunos no sábránen~ .
;rap:d~ara y que se parara:en seco.» ,',' ~,' , '~midric ·D.uncij' tÍatáriapsé de acompafuu' el desplaúimiento de un actor, cuan-
")faeía cámaras cuya labor les hacíll muy notablé$ como ejecutores. Ello.no ,~(felactoi'sé'l)áte, seguiránaúnunpoct) más; llloportunamente.
excllliaque pudieran intehÍeniren'lo relativo á la composición ,del en~uádte, En nuestros. días la íÍlvenéión es más' difíci¡ que la ejecución, como afirma
la
?ero eso ocurría raras veces. Despu.és de la guerra;' 4m.ante gueria para los Philippe B@n: <<LO que me gusta 'es tener ras manos en lós bolsillos, sobre todo
. ~qué.! thibaj~on:enySa época, el9átilara ~dquiri6 ciertalmpórtancia en elplªtº~ __ . naOade vjsor, andarcon los actores, imaginar las relaciones entre ellos yel-f'On"':--i-~;.c~-<
,:'G.uánA9 naciÓ el t)fició de cámara, éste encuadraba según,las indicaciones que La
do, vérlodetenidaniente.J)espués ponemos un ra.t1 acá y otIoallá. ejecución' '.'
; " le' daban y realizaba los, movimientos del aparatolo másímperceptibl~J;tlente no es' difícil, lo difícil ~ tener una buena idea».
" qpe'p~diera. 'Posteriormente, algunos de' ellos empezarona'm:t~r~sarse, JlO sólo' ¿Qué grado de Colaboración suscitan las buenas ideas, si es cierto que:ho
'por e~ platq y la: cámara, sino también por la narración., por ia película; tenían cáen del cielo? Muchos técnicos se lamentanda-que se ruedaudemasiadasp~1í­
',á.finidad~~· éon,el rciiliza.dor, con el decorador; y solían interverm:. ~gi:mos r~a~ cuIasen malas CQn:diciónes (el tetna esirr~levante,falta preparació~, los méca-.'
liz.adores les,~<liberaróIl» y~haéia 1940, los cámaras empezaron a trapajAr eIlla. . '~smos de prod:tieti6n'sou discutiblesj:Lejosdé permitliun trabajoitleal, ~na:;
situación de l()splanos •.Por otra.parte, sabíallimprovisarsolucione$~.~,lospro-·
, blemas que podía planteat un desorado. Por ejeiIf.lo, cuando unaes,cen1\se ha- '
. bfa previsto de un Inododistlnto, cuando no se há.bí~ ~OhStruidoplafon~s;~a
I
i
.-icreátividad,4 cadaun() de éilos~s()n el-,ínlto de múltiples comptómisos.y, con '
, "yse.tipp de:peücul~~IQstécnjc;osnosuperanlasensaCióhde eSta( practi"cando
'i~alvdrn.ert,tos~ ...,. " , "
.', última hora había qüe éolocar la cámara. en un lugar id6,neo para no "capta,r: la '....I;»atadójk~ente,cuando eL encargo del IeaIizadorestim~e y'piec1so es
" )ínea de fuga, o saéarse'dehi:'mangaalgún elemento de decoraCión para apro--· cUá,ndoel camarase siente libre, «a menos encargo; más indefinición» ~ Asimis.: '. /

'< vechar la perspe<;tiva r~~erida, eliminando la parte que no se debía ver. Los es
'~o, cuanto mayor la preparación. más interesante es la ejecucíÓn,másJrÚc,.
\

«~ucos» delofiéio,a~f ~Qino,unacolabOraciónestr~a ent¡:e, el cámara; e] de- tuosQsson lps ~~es YJ,nás significativos Jos accidentes: . .. .•. ' , (
'coradory.el dIrector defotogfafía; permitían sa.car el máxil.:Uopartidó, del de" ' :Lascon~~i.o?:~~d~produtd6n. fapricadóK'difierensegún las pe~í,culas~ lo
corado,por ejemplo., Eu'ese caso, el trabajo del:cámara satisfacía el sentido ar-:- mM fr.~cu~tet n.Qn.nalmel1:t~~,es que haya que.comprimiren el tien1po, enseisu
. tístic~;el d~s~o~Ae,'~rVir a un relato, de expreiar''Suimáginaci6n_ydedar '-ocho'semana.s·~todo"aque1l6·"en--lóqúé'~~ 'aficiónado poc1rla demorar -meses 0-
prueba de'll1l;i'ciertaínventivaen la SU~l'enciadeunadeterrninada puestaeñ' ~os~ «¿Vamos atenninar a 'tiempo ?»:,.ésta es la pregunta que tortura ~ loseqúi-
(
escena técnica. . -' ' ,.Pos, aunquetamJiiénha obligado a más de unapelÍculaa salir a la'Iu;!: (tefllli-
" Todo· cuanto, con el p~o de los años, ha aligeradQ la técnica, ha autorizado ' · ilarlapa.ra explotaria). No perder el tiempo, comprimir el tiempo; la presión que
.nuevas posibilidades de puesta en escena y hap~I'lllÍtido que ya no se funcione , . ,,' ~~!~~~n :~~d~J2,l.~~t~..~~r~J~~.,~~mR~()S.~~tJodaj~e~ ,flJer~ ylQs:reaU1;~:­
según las iinposíbilidades. . . .' ' ,
C".. .,~~",~,',,,,.:.:".'c,,:,,,.,,_. " .
d9resmarginales'que entran en elsistemalamentan la libertad de sus inicios ..
, Algunos realizadoreS, mientras tanto, nunca.se ax:redraron ante,las imposi-:- · Así,D.avid+.yncli,pasóde'una película muy personal en la que invirtió cinco
f bilidades técnicas; GeorgesAnnenkov cuen41, por, ejemplo; que un día, en el ro- · años Y 19 hizo I?rácticamente todo con la ayuda de unos amigos ~Cabeza bo-
'. daje de una de sus p~lículas, Orson Welles le explicaba con todo dettU,1e el efec~ rra,dor~ (Eraserhead, 1977)--:-- a El hombre elefame (The ElephantMan, 1980),
tofotográficoque deseaba-obtener.a uno,d,e sus operadores.· Tran.scutri6 uD. ':fl]rna<!a. de acuerdo con las nbrmas de producción inglesas, con equipo sindical,
minuto. de.silencio, el operador le respondió que~técniGamente, la idea~ ¡qué lás- lloranos,aétores Célebres y mucho dinero, y se sintió arrastrado por una marea,
- tima!, nO éra realizable~ «Entonces -dijo Orson Welles-enipezaréde'nuevo la. de filmar, Pero no se puede volver atrás. Chantal Akerman también 'lo sabe:
con la, . filmación cuando se encuentrenlos medios
.,'..... .
técnicos neCesarios.»
'. t.
Se mar,... «Estar fuera del sistema se há convertido en rugo muy difícil, ya no hay un' "fue-
C~.ó del estudio y48 ~oras después el problema estaba resuelto. .. ra". El fuera es el agujero, el cementerio».

la
Hoy endíá tétniCa es inás,ligera, el cine ylQsactores son más ~bres~más "PerlIUlIlezcamos, pues, d:entro del sistema, con normas e imperfecciones. Lo
rnóvll~s,¿cuáles laJunciórtdel cámara? ¿E~ m~s·fácil queantqño?; , nrás-#it~.res~te.que la división del trAbajo-pue4~J4pOliaral cámara es, en primer \.
Eri la épqca de las auténticas difi~ultiides tl:aicás; no todo,elmÚlidopodfa ; i~g~/W,1 r~~dor de talento (pongamos a'Resnais para Bl1ln; Ophulspara
eIlcuadrar pero hoy, c9moafirma un cámára,«no todQ el m.u¡ido puededéjarde JjOuaiin9~~ratl pára Badal, Rivette para Glenn) C011 el que entenderse sob;ela
·encúadrar». Las exigencias seh~desplaZado, actualmentelasensadónde tit- p~Iíc~á: ,,' '. . .
q8 .,.10"

(
\
También hayocásiones enque algunos operadores hacen'.s:us propiaspeJi-
( culas ~~útard:Hoah Binh(Hoah Binh, 1969)-; cuando me reuní con ellos,
, ~'El1JriIner pbmo4e La ro~de 09S0)dió:lugat ~todá i.ba'Jotnáda de' ensayos:
Badal y T~vQlroestában:C;;mtentando r~péctiyamente montar lª~ suyas .. Otros' en tr~s plat~~!:!~:~~t,~~¿~ce. Dóu~ollloTecuerdf1muy biel).: «SegUíamos
(
hubieran preferido pasar ala realización y,.no obstante, no tuvieron paciencia,<> al~:t:o,r~< ~~?~:,~~ói-~;entravelling. yo esta.ba de toqillas Y.la,é~:ala',
alr:u.ra del suelo. '~1 se pageaba canturreando, se paraba delante de. un tio.vivo, y._:
l un deseo lo bastante fuerte. ' ' " ,
estaban Simone Signoret)' Reggiani pistola ,en ~intQ, j.y todo eso en un: solo pla:-;;
(
.Sin embargo, estar en el encuadre. reaImente, salit de sfrnismo, ctéár algo no! ¡Aún podría rodarlo! Enelmómellto de la preparaci6n -grit6 mucho, no que~ ':{"
(
páÍa 6tro, con los ojos de otro, es lo contrario de una marca de autor. En cada pe~
lloUla ·la relación del realizador con la técnica, el equipo. el cámara, es .distinta.
I
.í ría cede~ ante la técnica. ,Le hubiera gusta~o rodar su película como La soga
(Rope~ 1948) deHitchcock, en tres planos-secuencia, sólo que nosotros estába:.'
. Dich~ relaciónesirriporúmte y queda reflejadaen la película. En el caso de ~ll mos llinitados por lo.s medios y cuando me hanaba en un ríncóndel'decórado;
rodaje de Maurice Pialat, según Glenn:«todo tiene que ir muy muy mal, que álfinru. de UD raíl detrttvelling, conIa espalda pegada~a la pared, le d~cía:."Pero.
todó el mundo esté muyneivioso, que él haya insultado a todos, para que eth~ ¿qué hago ,ahora? Tenémo.s·que cortar a la fuerza". y érme respondía: "Alam, '
piece la puesta en escena, es la regla del juego». JacquesLoiseléux, director de im~ parteS mi puestaen,escena,potlamitadJu;l. , _ , : ' .' •
, .' . . ' ' " • 71 .". < .•
fotogíafía de A nuesJrosamores (A nos amours,1983), pIensa que no se pue- ,Los ensáyó~etari lá.l1'li:í fij·á'etapa á1it~s delf6,d.aJe, se h~bían' situado elo los
de negár que Maurice Pialat es difícíl en los ro~ajes, pero basta con hacer;unes.. , desplazamtento'sde.lac~ara en función de Jos 'movini.ieiitos,' de la interpieta-
fuerzojJara seguirle y vale la pena. Este opérador e1plica la violencia-de lb~ tea-
e lizadb~~en e,! rodaje por su gnminiedo a~elegar su proyecto en manos de un
ci6n y del te~ro de lós a:ct.otes. En tal plano, había que pararse. en ~sé sitio, en
la
'tal otro retroceder. subir :cámara y por lo. tanto prever la' hecesi4lid de una
( equipo. . grqa, etc. Todoellóse'disponía al lnilúnetro, durante dos horas ogIitils :cons~
. Algunas veces, ese llÚedo se traduce en conflicto; un conflicto queplJ:~e ll~ 'truÍa su plano. 'Y no pensaba 'en nada más. Después venía laejectici6h ,Y~ hasta
gar á s~testimlilantey prodlÍCtivo. Aunque sea un conflicto entre dósmiradas O , enla película máS fi~cional, eÚéencuentro de una Cierta realidad, el dejaS per- '
deentelidimiento, los cámaras aprecian a los que les hacen trabajar,es <lec.ir~ a SO,n3s que se, .interpre~atlan, ac~ores. y té€niéos¡..:inaquinistas, indi~~llsa~les,
aquellos que no sólo les 'dan trabajo sino que les dan un trabajo ,difícil. Jacques' pata 'este citiede mov~ehtos;' , '' '~::;~::':':' , .
Loiselellx se complacía en rodar con Pialat, quien pone en' escena ~n, su cine-
mat()~existe, una ,primacía de'la escenasobréelplano,unaprúnacíade.,laiIl':'
'E1.maquhp$ta npts
ú,na máquina. Henri Chenuda Jede ello:, «¡Empuj~
5«HdtOs:'cbrquél'ens3!!":Mguttas:~s'me'4'e'Cí1t;TMí~"ltot ·iNtY·Wlí~;,~an1r~tte'. .
,terp~ffcióIl cíe los actores-:- a la cámara y al cámara: «Escucho el ritmo en que empujar! Creo, que lo: que me ha permitido, llegar 'a Ser un'maqui~~.no de- .
hablan los actores, eltono que adquieren, y filmo en el mismo tono: Me'pongo en, ' maSiadó malo ha sido, preciSáltleilte, habertenido que pa$ar muchás1?~Ii;alic;la~ ,
escena como un actor, en su misma situación. Eso es lo que dt~térrtrlnará el encua~' des al hacer.mitt~bajo. ¡He estado 8ufrie~do duran~ cuarenta añosrGiá.Cias a'
dre y el hecho dequepu~a llegar a,fIlmar algo distinto a lo que estaba preyisto».
.~ªQ~~~~~~SJt° ~~y.~~!t<?.~. ~!~_,!~,[Y~t9!!.~1~,,,~~",~,tl2~Ü!!EXJE:s:.rtt;Jísi~S~~.,,,,;,,;<,~.:,,~
Max:'Oplitils' obligó a Douadnou á cansa'rfFe,' á ponefUfcáñiáfa én'sfmació:' 'mente pero que no juzga Qorrectamente la situac¡ión. Hay ques~ber,no serdé-
nes. acrobáticas, aunque también consiguió que se demostrara a sí mismo, que masiado rígido con los pridcipios. Cuando se les pregunta a algunos por qué
eráún buen cárnara,.un virtuoso. «Él era un director de orquesta y yo su pnrner no se detuVietona tiempo y reSponden que' potquenuhabfáifll-egadtfhaSfirsl1S
violín.» Era la época en que había que llevar 80 o 100 kilos en brazos y Ophuls rnarcas,1l es pórque,píéCisrunenteentonces, no era preciso llegar aeIlas¡ sea
fllmabacomo si tuviera una cámara volante. Le explicaba la. escena a Christian porque el actor se l:tabía parado antes, sea porque el travelling se había retra-
Matras, Almn DOQarinou yHenriChenup le preguntaba a Mau'as cuánto tiem" , , sado. Se debe hacer este tipo de cosas sobre el papel pero no brutalrilen~,ino.,'
P9necesitaba ,para iluminar y se iba. Durante ese tiempo, Douarinou y, ChenU hay que foriarlo!». ' ',¡ ' . ' ,
dispOníanios raíles y las curvas, los'dobles de-los actores también se colocaban .• ,Pese a que es ,un trabajo ,muy preciso., ello~o significa qüesea mec:aruco.
en sus posiciones. 'El plano se ensayaba Una primera vez en ausencia de Ophuls, ' Hay que seguir IJ1ás al,cátllara' que ,a. ~~ indicaciones, hacerse u~ocDn él~ Hen-
que tema mucha confian.z;aen S!lS técnicos. ' rlehenu comenta: «C,uánfus veces nos h~bremos det:enido.1os unos a los otros
porque hemos, cre!doqqe había qll;e pararse. en lugar de. ir haSta ~acruique ha~,
" 10. Lapelíc.ula de Luciano Tovoli. II Generale d~ll'armata marta (1 982).'fue bien realizada, "blamos traZadp pOrque era elpunto,én qúe... Ya lo sabíamo.s~ ¡por qué? No lo;~~.,
" montada y'dístribuida.". . '
" .
, 71. Entrevista en Le Cinemátagraphe. n. 94. noviembre de 1983. 73. Marcas con tita M el suel() qué delimitan los púntos de-negada y dé partida, loS trayectqs
72, Respectivamente director de fotografía. cámara y maquinista. de la éfunara y,av~es ~e,los nllsmos actores. Hoy en día se utilizan menOs. ' '"
,í.: " : ' . '
t. .> .
,:': ' : ::.::", '. I~.>.' '.
70 . EL ENCUADRE Cl'NEMA1:'00RÁFICO BL:11!ABAJO DB'ENCUADtill 71

.. Nos mrramos¡un·g;Uiño. ·nose; eocacosa.para hacer las ·cosas bien tfene que ha':' , rilástle¡npo en su sala deproyecci6n personal, donde controlaba las películas
ber una enrerite». . '. . que ya había.roQ.ad9.:qu~ 'enlos estudios donde sus directoresdirigítullás esce-
MauriceJ.)élilíe. (primeráyud.ar,tte de cámara):« Y si elaci9i se para antes de . nasque:él había "concébido».· ."
las marcas•.1o SIentes». . . '. En úlgÍes' Se'denomina continuítyal découpage. Efectivamente, se trata de
, .. Henri Chenu: «Sí,y a. veces ni siquiera sientes que esresegur().de ~asmar- dar enti4ad, continuidad~ a la· fragmentaci6ndel gui6n eIl secuencias que, ,en,;.
. cas, laves en su interpretaci6n. Hay que pensaréi11aintérpretaci6ú del. acto!» .. tonces sí, serán réalmente fílmicas. La preparación del rodaje puede ser más o
.Maurice Delille:· ~<Ciertos:' actotes'ñOS faéilitan'hr tarea; 'se paran en' seco en · ··l!len()s-'~ttfcta. "Algunos"realizadores consIderan que 'la única funci6n del d{·
·.susmartas;Citrbs sOJiiricap~cés de hacer un movinÍiento.·El cme·es·muydisti:ó... ~oupcig~ consiste en tranquilizar a los pr()ductores; para éstos es un punto de re-
to del teatro, cuando un actor coge un vaso•.tenemos la Inmleradeagariarlo, de . ·Jerencia.: Otros se ío toman muy en serio. .
depositar1~, de no tapar lo que es~ junto' a é.L En ~ua:nto al encúacb;~,hay reali.: .. : El. aprendizaje del método de découpage técnico· de manos del decorador
zadoresque .saben exactamente lo que quieren, mient:ras. que otros no: Y res~ Max Douy~ elilas películas' de Claude Autant-Lara, fue decisivo para bouari-
peétodel técnico, es un poco complicado, le toca. e¡npezar de cero con ca4anue.. " nou, ;p~a' su labor como cámara. Las. películas se hacían exactamente COnlÓ se
va película». . '. .... . había decidido a lo largo de los tres Ocuatro meses de preparación -ubicación
Renato Bertáafirma que no hay ningún realizador que «sep~ exact!mlentelÓ 'de la cánlara, objetivos. ángulos. duración de los travellings.:-.l0.cualaparecia
. que.quiere». D~10 contrario; ¿porqué rodaría. BtF.0nseten~ toriúrsde1in.pla.. · consigna.doen 10 que ellos llamaban «la Bibliá». El decorador había dibujado
'no antes de poder decir:. «Bueno, hernos tem1Ínado»? '.. losdecótados .....,a pártir de un gui6,n dialogado- y llabia puesto,porejemplo,
La cuesti6n sigue siendo la preparación: de los encuadres: ¿Cómo.filmar en · una pue"rtaen tal parte. Si, en el cur,so de las· sesiones. de déc.oupage, el realiza-
. funci6n del montaje, en lugar de remItirse al mon~áje, de creer. 4~ los errores dor, el cámara oel decora~or notaban que ése no era el lugar conveniente, •se \.
detilnlación se <<recuperarán» en el montaje? . ,'. .cIDn1?iapa~Deesiemodo,y en principio, se evitaban las sorpresas desagradables
d~lrotlaje;Asuvez, DQuarinQu transmitió esta práctica a les realiz¡j:dores que
se:~njCiab.alren~oficío.·· . ..... ' . '. .... .:
LapreparaclÓndelQs encuadres: ; ~R,es~ais:siellll,'re tien.e ~4~c:q~p'(lges' magpífícos»: La expres"ipnes ele
:sü"caffi:ífralÍa'6ti¿af;pIiiljppe"Brun; quien explica: «¿Que c6mo se hac~? ESiliff-
. -- ¿Cuál;es sorilas. distintas maneras de pen$ar con antela.ción los eñéliadres, cildeeiplicar.El camino de Resnais es un calvario de trabajo, jamás'he visto'a
que también .tienen algo que ver con ló que se siente en ese instante? Existe nadie que trabaje tanto~ La idea de Mi tío di; América (Mon Oncle d'Amérique,
" ,todo un abanico dé posibilidades, desde la fOlmamás académica. de prepara.. ' 1979) existía ya durante el rodaje de frovidence (Providence, 1976). La cariti ..
(
. ~. ción;~ldécoupage plano a plano sobre el p~pel,,:has.t~1..~.cr~~~~~~~:~':l.~~P~.. _.dadAe.1o.caliiaciooe$r.éLcúidado-Gon"elvestuari<4;eltéx:to4tie'se escribe in"- ..
penlñg:"~' -" , .
clusop~alas'escenaS:mu~, el subtexto.dramático·, también escrito aunque
H ... ' "':":". ' . ' ' ....

Según el historiador Georges Sadoul,el inventor deldécoupag~ 'fue ,TIlo:' no:sielIlpre se entregue a los actores, la biografía ¡:le los personajes, etc. Siempre
mas lnce. Durante los años 1910-¡914. sus contemporáneos, Grifñth'en 10sEs:- tiene unosmagnífico~ décol:lpages. Ése es un aspectoén el que la diferencia en-:-
tados Unidos, o Feuill.ade en Francia, seguúinÍa normahabitu3J. de la improvi~ .tte'A.ip.éricay F.ra.n;ciaes a1?isnuli. En América se desglosa'mtiy poco, se trata
saci6n durante la fIlmación. ··mientras que el escenario seájustaba 3.llIl breve más 'bien de' una conQnuidad dialogada, con secuencias, texto y vagas indica-
,.,esquema, lnée fue el primero que atribuy6una importancia extrema a14écou.. ciones de los':en~u~es, .mientras que Resnais desglosa, ordena los planos.
page' en la fIlmaci6n de sus películas, que él mismo establecía en primerains.. Cuan9óempiezoatrabajar en una de sus películas, el découpage ya está hecho
tancia y que siempre supervisaba muy cuidadosamente. Los realizatlores con y él sabe muy bien qué es laque desea. Entre sus deseos yla realidad,.que ave;'
(
los que trabajaba tenían que seguir sus indicaciones' sobre el découpage al pie ceses algo distinta, puede ocurrir que, excepcionalmente, hagamos las cosas de
dé la letra. Asimismo, era un gran especialista del montaje; al contrario que otromo40». .
Gnffith, -que s610 rectificaba el montaje en las proyecciones, un montaje verosí.. Roberto Rossellini consideral?a ~bs\lrdo este margen en el.que se inscrib~n
~:,~,' " milmente.asegurado por su operador Bitzer, según las. cos.tumbresde,jaépoc_~: , las dimensiones de los pl~os y los movimientos de cámara, como si los nove-
. ~·A Ince se le conoce como el más'importante montador de películas: que jamás listas cortaran así suslibros: en la página 212 un imperfecto de subjuntivo¡lue-
- s'e h~ya visto eiÚa industria del cine, o el «doctor de películasenfernlá,.s~; Según .goun complemento indírecto, etc: .
Georges Sadoul~{(el mqntaje le apasionaba de tfllmaneraq~e dicén,quepasaba ,No obstante, los realizadores más opuestos a los métodos más trádiciot'üIles

(
---_. _.,~.,

"';

( dqrarite el rodaje, 'tlUnc;i de~ía: «Vay a procUrarme varias miradas». Nunca ro-
( tUiba lpiáini~, esOOn~ deSde ángulos distintos diciendo:"«Veremos ¿6nioqUé-
,da: ~n ~tnlQntaje>~. Yelmontaje subsiguientécOnsistía en jugar con los elemeh": <

( 'tos previstos. .
( Fritz Lang sabía exactámente lo que quería hacer antes de empezar el roda- ;
je de la película, hacía ya un ti'empo que vivía con sus personajes y no podía roo,..
dificarlos al llegar al plat6. El filme ya estaba completamente puesto en escena;
(. es decir, enoUadrado,sobre.el papel. ,', " ' , '
René Clair, parafraseando a Racme (<<Mi tragedia ya está hecha, s610 tengo'
que ,escribirla»), decía: ,«Mi película está hecha, sólo tengo que rodarla». Esta
( . concepci6n' estaba lejúg de sei unáI,1ime: Mareel L'Herbier, en aquella época, la
eil~ont.mha :4~lo.~.~~at8»~ datQ <<lo.!a9ínirable ,de,la improvisación en el
plató>? Téqtpn9S 9.~ PQQ:rl,an serlós de Bresson: «In.tencionadaniente.la víspera
, 'ignoro 10 qtie,h~,eldÍa,siguierite a firi de tener una impresión espoiltánea muy,'
(
'fuerte. Si el trabajo es,equiparable a fos, hallazgos, preparándolo todo eJe antema-
( no nQ hay haIl~goalgQno. Cr.eo en esta ~tantaneidad. Cuando daba;iñis prime,..
ros paSOS'61l este oficio terribie hubo algoquémé sorprendi6 i?rofund~mente y es·, '
estaC6stumbreén~~ cine de prepararlo todo, al iguarque, enel teatro, los actores ~ " ;,,1
( estudi~ susp~l~».7s Por'eso él trabajab"a COJl actores 11,0 profesiQ~~f~",. '... '
(
'lliicA9<>:ck ~li uno. de,esos, C~Ae~s :q\lehi~p: el.áéeoupage ~~f~.película :
de,antemanoywbujabalosstoryboát'as de súspelícúlas'plano ¡i'planó:'Yíbs fil-
,mª~ª=~pl1imeltW:~" . ' , ,
( Boyen,día, los jpvenes cineastas amencanos, especialmente:$.pielberg,
también practican elstotyboatd. CUrioso empeño en que todo qu~pª ~ncuadra­
( dos de papel:''¿Ilo temen.corier el riesgo de enfriar el cine, de congelárlo? Fran-
, cis Ford Coppolaestá,convenCido d~'q\le los ch.1eastas deberlan dedicar mlÚ> '
•"'imerg~1t'ia~f$é'de"pre¡rantct6tr;11'11tp1'épróllªcCí¡r,nfe]a'pel1éuliLlncruso'uñ2'~'''~''''''''
, ( ,lizó todas las novedades electr6nicas para loS bocetos. 'de'los planos de ,su pelí-
. Rodaje de The Blué Gardenia: A~n B3.?Cter; Fritz J.,ang, Nicolas Musurnca culá C:ota.zonada (Ont}fromthe Heart, 1982). pá,w ef storyboard, queenstl' pri.;,
(
mera versión estaba en fotografías polaroid, al vídeo y después lo tradujo a"
del découpage clásico tienen siempre la continuidad de sus películas presente , videodisco -:modificaddsucésivamente- y lo grabó en la·memoria de un or-'
en su espíritu y, al parecer, ruedan con los bolsillos llenos de notas. denador. El rodaje se reálizó en fúrmatode 35 mm y en vídeo.
Según Agnes Guillemot,74 Jean-Luc Godard, conocido por su capacidad de Otros ciÍleastas prueban sus encuadres en fotografías (Alain Resnais, Mar-
, íf!.l1?IOvisación ypor su aversión a losdécoupages técnicos, preparaba sus pla- cel Hanoun, eté.), sQ.b~~!~i!O en las localizaciones, a veces filmadas; Eri África~
nos con mucha preciSi6n, teniendo en cuentalo que ya hábía rodado y lo. que le Pasolini ftlmó paisajeS, cuerpos' y rostros, experimentó' duraciones' y .escogió "
proponía el decorado del momento. Estaba muy atento a las novedadesdelpre- voces que podemos ver y escuchar en Appunti per un'Orestiade africana
sente(cambios de luz, por ejemplo) en lugar defíarse del pasado (guióny dé- . (1969). Acto seguido estaS localizacioneS permiten que en el rodaje se efectúe .
coupage escritos de una vez por todas) o.del futurodelrnontaje. Su ojo escogía un trabajo inconsCiente o. en téniúnosde Godard. permite una composición en-'
trepreparación eimprovisaciólLEfectivamente. según Renato Berta, quien fue-
74, En una emisión radiofónica de la serie «Le Cinéma des cinéastes», consagrada a la reposi- ra operador dé la película Sálvese quien pueda (la vida) [Sauve qui peut (la vi~)",
ción de El desprecio {Le mépris, 1963), Guillemot mont6 casi todas la~ películas de Godard desde
El soldadito (Le petit soldat, 1960) hasta Dem:: ou frois chÓses queje saisd'elle (1966). 75. Entrevista apatecidaen Cahiers du cinJma. n.348-349,jUluo-julio oe 1983.
~ -,' .
SI!. -ENCUADRE
-.....:.....~.CINÉMATOGRÁFICO
. .. -
~.',:' "

. :·.!.2~.:~.'

1981] .paraGodáfd,ér~~8i~~··«p~sa .por el' hecli~~e que se vi{u~as:~íD.cuenta .000 aIUní~Qno~ e,s"una idea que 1ll~ interesa. Éste ei;. el motivo de que me.entu-
.' v~ces all~gar ~~ cUestión, la cincuenta y una inc~us? se lleva 9lia ~a,~ pero . sia.sine~I·~n~uadre,~~UD,~ueci610es pOSIble llegar a ~llo en algunas·películas» .. '
:no ~e ruedá; la cil!-cU~lfta ytres puede que se ru.ede., yla cincu~nta y cuafl;o, ante . , .. '~o"CQrta.r.jam.ás.'umi 'toma porque el actor esté a veinteeentímeiros de sus' .
. la obligación' de 'rodar, ,se rueda. Para Godam rodar es sinónimo ~e gr$ar:,.~ : trulrcas, puesto que en reilida,d,el trabajo del cámara consiste en saber que va'a
.ncr la película d~ntro de una cámara'y filmar. Las· decisiorieSde encuadte se to.. excederse"veinte centÍmetros (un actor puedeestarjantáStico a unlIletro <le sus
man por la fhér.za dé' las cósás: Porejemplq, si se rueda en UD, lu&~púbI¡co (~ marcas).Selltir el ritmo de Jaescenaes tareatleLcwara; asfeomo del maqui-
,finatde la, peüculá; el a.ccidente de ,D.ll;trQnC);lf~e~$ér lo 1l1~ 'discreto J?~Sl- Dista, cúándo se trata dé iÍn trav'elling. Lv que a Glenn le interesa del 'cine de
ble¡ es decir ; ubicar"Ia cáIDáfa'en lugares donde la vida lJUedá:-se~ junto a ella. nuestros días eslaposibilidad de inlprovisarconstruyendo, dellitentarc?mpo-
La cámara se someteá'los dictados de elementos ~omo. éstos». . ..... . ner a partir deuna:seIl$aciónqúe evoluciona. Por ejemplo, trabajar en Out Óne
(1971); d~Jacque~:Rivette; exigfaestar disportible respectó. de los aCtores/al
76
I)epaidonexpresa con mucha sensibilidad la nrlsma idéacmmdo habla del
encuadre en: 8upelftula Faits Divers: «Lo que dirigía y guiabal11i instinto eJ:'ala c~-, igual que en El otro señór; Klein. CMr, Klein. 1976). EstapeliculadeJoseph Lo."'
mara Ellugar.donde ubicaría seimponíainst;intivamente, jamá$he tpnido qU,e es- s~ypat~eextreU1adamel1te pensad"a~en realidad, el rod~je de plaflOsde siete:u:'
cogef'entre situaria endos lugares distintos .. Tal vez sea eso loqu~ le. da éf~pecto . pc:h() Inmutos conveintiCinco posiciones de la cámara seefeC41aba~,;inensayos
ficCioD..'al a'la. pelíc~la, hay l,l11
.. a óptica flja, tres gul.lfilY un.a.~a.ler~~a.y ~p.uer~
án.
de "crunara.·Seguíia los actor~screaba relaCiones tensas einteresantes. Paraadi;.
ta, una persona ante la"puerta, la cámara no puede Pffi1er-se ~n ,cualquIer parte». vinar 16 que esta'ge~te'(1os acto.(es) van a hacer, hay que estar en una sintorila
'. EI'margen de intprovisación en rodaje, en los enc.uá4res -'-Sise puede ha- co.mpleta,en reláci6D.enel espacio 'conellos: «Dos perSOnas que ~stán lejos Ja
blar rl:e.márgenes acerca del enéuadr~ 4epen~e delos realizadóre~,. <1epende una' de la otra deben pensar' lo 1)lismoexa.ctarilente en el inisrrioinstante', ymo~
.' de las ·pelicul3$.Pierre.,Wl1liam Glenn, tras una película muy improvlsada ~on verse 'previéndolo. :Se tratameilos détécnica que de ,telaciones absolutamente
Jacques Rlvette,que se"rod6en condicionesderepo~je -cuando.·los ;ictor~' 'paItÍculares, queh~ce~queeste tipo décqsas sean tan excitantes' paraJli'l'9áirla-
~tán listos hay quefi~arÍlrgentemettte, aunque'a veces se yu~l!an d~ espa1.~~ ra como para unactqr;Eso es 10 qlJ~'m,.ásmeinteresa; no la habilicl~cltécnica
al~ cámafa-::-~ debía' asegurar una película muy :estudiada,'comola d~. AiaID $mo la bábílidadté9ID.Ca.al servitioqe la improvisación;parahacetalgó riíuy
Comeau Serie negra (Série Noire, ··1978)~ ;~eom~tri~~,'~,~~'.~C~J:lti.!~~, ~~B~e~,:, .: CQ~tmj,~9)1.~:"., .'.~" . '. .... ..... . ..'.' , , .".... ;............. .
éoncontrac;ünpoi'd~-¡as mismas dimensiones qúé'loscaínpós,etc~:El rog.aje,el Gine ~oo:r-Ll1.Iido;m\ly preciso~ pero bas,aaoén el 'instánte; en lavidátIttstantes
encuadte, corresponden a una necesidad de la películ~ nó existenregl8$ gene- .• deJavidaaelcátÚara,instantes dela vida deLactor,a uno yotro lado·deJa'cámara.
. rales. De c~alquier modo creo que es'posible'avanzar la siguienté generaliza., '.. M~u~ce:Pialá~c~eastay actor enA nuestrosdinores, opinaque"ehsu caso;
ción: el cine centrado en el aélor,es deCir, en sus desplazamicIltos,su~le darlu" se podría ~~larno ~610 de improvisaciónsino también de sorpresa?H EstiIIla q~~. '
(
la':p~m~e$Cl'Íta:"d~:Su~pettcülas"repteseiitasiefupieeT20ó' 3()% dé'estaS:-"" .o.'"
.
gár':~H1()vi:mientos de la cámara,: más:o.:meaoo.,.impro:v.isados"perá,~o.s:,
por lo~ c~aras. :Bn este tipo ,de cine,l~s actores y los movi~ntos decán:la:ra . .

no.e~.rnnulaJl a los cámaras, SIllO a los dlrectore~ de fotog¡-afía. La precisión del encuadte no s61ojuegacon elfactor ~spaciaI,cómocabría
creer dada la utilizacióu de un decámetrO en el plató, sino también con eItem-
póral.Por ejemplo, duratlte el rodaje de su película Una, mujeres una mujer
. ,;'
(Une femme est une. femme. 1964), Jean-Luc Godard le pidió a su cámara Robert
" . " FO,~~cárd que le hiciera una panorámica que siguiera a Anna Karina desde la
Elarte del encuadre, según Gi~ri.n, tendría niupho que. ver conlas artes mar- puerta 4eelltrada hasta una m~a del coinedor y le previno de que, tres días des-
ciales, que él rusmo practica desde hace veinte años. Efectivamente,encuadrar pués~.d~bería ejecutaJ.'la misma panorámica, a la misma velocidad pero en sen-
requi~re una relación privilegiada con el actor: ~<])os personas piensanto mis- tid~yinvers~.(segpira AnIla,K~a de la mesahaSHtla pUerta): El operador hu-
bierapo&d09ontar me.cánicamente las' vueltas de la manivela,peropreflrió
, .canturreadnteriornwnte una canción t escoger unritmo que lepennitienfsabei
76. En unaentre";~taen Libétation. 9 de mayo de 1983.. ' ..
. qu~ 'en tal ,momento éínpezaba lapanorámica,.que en tal otro se paraba la actriz
I
__o

. . 77. Acerca de 'la')~~laciones entre los direptores deJotogra:t'ía y los actores, Jean Cocteau, en
el Diario de La bella y la bestia, se refiere a <<la inhwnanidad d~ 10.$ .operadores, de los ge6metras, i (
. l'
de los astrónomos». Henri Alekan se tomaba su tiempo para disponer y corregirlas'luces de la pe- 78: Así, por ejemplo, entra en una escena sin que los otros actore.o; sepan por dónde va a lJe~
, f
lícula sin.pn!oc!lparse,por ejemplo, óe que una de las ~trices. enferma, apenas se tuviera en píe; gar. Véase Cahiers du cinéma. n. 354, diciembre de 1983. . .

• :! .
~.,"--~- -'---" ..

EL ENCUADRE CINEMATOGRÁFlCO
,76
( '.,: .':"',,:'

yque en otro más el que debía pararse era. él. En el segundo moviffiiento tuvo:l~:,,'r,' -cáin.a.ras qlle he COtl(l¿i<;lOi~ní~ tma-vertient~ emocional, d~ artista. "'U~J1C-I'UU\J.
impresión de haber realizado 1~ repetiCión inversa cori:toda exactitud. .t\l~UftaS no,Ílª-yql:le,ser,btusco,,'se:pue.de tener un caiáctér,algo brusco peto'no hay
semanas después Godard leconfíirh6-tras el montaje que; efectivamel'!-te, sólo serlQ:cna.ud,ui8cenduée el aparato. He eonocido a cámaras brUscos cuyos mo-
'había habido dos imágenes de diferencia entre las dos panorámicas.' vimientos jamás se pudieron igualar en dulzura, es evidente»;. .' . ,
Seguir a los actores no consiste sólo en mantenerles dentro del cuadr(j~ a la Maunce DefiUe (asistente de c~ata):: «Considero qUe éS un don». ¡i,

lIlisma. dimenSión~ mecánicáinente, sinó en centrarles o descentrarles, en: esco~ Como todos los oficios técnicos; el encuadre necesitaaptitu4es y aprendi'":
'gereIiQ:e lo que les'rode14 habida cuenta de la composición 79 de cada fot?~ zaje~ es una habilidad '
del plano. A decir de Foucaid, algunas veces el encuadre es una op~raclón ,1m- ."
perceptible: «Cuando un actor,se desplaza, a veces Se busca un elemento luz
que f!lVorezca la Í11lagen, el cúadro, algo 'que: no debe notarse pero que,
impreso».

\,

i
j
'-: -_·,~~Errttl~caso"'(te16S"téCiilcos-ae:(mi~~lañíg-aesaava de Ía mano~deu~~;a;nbi~::'"
-.",-
ción ciega: no tener subjetiViclad, especialidad, estilo, y, ser' capaz de hacerlo --
Dé<terminacióU' del encuadre por parte del rea1iza!ior. todo bien, de responder_a las peticiénes más -diversas, adaptarse,_estar dispuni-," ' ,,'
Ro~je de;Madein USA.Lazlo SZabo y lean-Lue Godard ble para todas las' aventuras. El cámara,-por ~u parte, debe ser realnumterec{~p"': -~ .'.
tivo puesto que es el «continente» de la película, debe poseer rapidez de COIQ.- _
La:s cualidades requeridas en un cámara empiezana esbozarse con fIlayor prensi6n y destreza de ejecución. -
c1áridad pero, ¿son definibles,pensables, dichas cualidades? Seg'ÚnG1enn, un '
_buen cámara, ciertamente, es «un tipo quc<puede encuadrar sin pensaren ello»,
• ig~a1que se conduce-un automóviL Se tienen',o no se tlenenbuenos reflejos. -El cáJllara y el realizador,
Preguntemos a sus' colaboradores más próximos, los que, como él, debe.n ser
,cQmoplurnd$alrededorde la cámara, desplázarse en un mismomovimiento~ rea- --Las relaciones entre el cámara y los'realizadores son tan «parrlculares» (ca-
'llzádor, pérchman, máquinist'a-jefe y asistente. ' - sospárliculares) e futimas como las relaciones cámaras:-actores. Ciertos realiza";
.' Henri Chenu (maquinista-jefe): «Por de prorito; hay que tener -una cierta dores, ttashaberlo organizado todo~ pretie~en desaparecer del rodaje y sólo rea...
vertiente rutística, eso e()tá claro;, todos los que he conocido, todos los buenos parecen poderosamente, durante la fase del montaje. Veamqs, ,por ejemplo, la
'opinión que los operadores·\YilliaII!.Lubtchansky y RobertAlazraki tienen def ...
79. Véase capítulo 4, proceder de lean-Marie Straub yDanielle Huillet:durante el"todaje de sJ~pelí~ -
: , -:'
(

,}8 EL ENCUAtiRB CINEMATOGRÁFIcO , ELTRABNO PE ENCUADRE

culaTroptói, trqbar4. PrimeipiJilto de información: unTodaje, queenlas nor-


maS de producCi6ncomentes hubiera podido durar tres dÍas. con ellos duró tres ,
semanas,tan gi"ana~es superfeccionismo.Tras haberef~tuado, solós, Ioeali- (-
\
zadones de lug~s e~t:remadámente precisos~ el día del rodaje Straut) y' Húillét
tardaron hórª-Sen decidirla situación exacta de la, eáffiara dentro de un margen
de'uhmetro cuadrado~,Sihabía qUe haceralgun movimie~to de cá.1llaia,le pe-,
dían'al-operador que 'hiciera.uria panoráÍnica de aquí a allá, COJ;l cada uno de los
dos puntos de partida yde llegada muy bien precisados. Pero, ¿a' qué'v~locidad
habíaqueefectuar esa. panorámica?, preguntó el operador. y tuvo la sorpresacle
que le respondieran:«Td eres el qu~ ve, tú eres el. que sabe»:. Efectivamente,
Straub 'y Huillet creen en el saber del~ámru;a, en su don .para captar.
, Aunqu~,Iiituralmente,: ellos nO$e desprenden dé ,su ,poder, el del montaje,
la elección entredqsto,mas rodádás a' velocidadesdistinta:s. ".
No o~tant~, c~ahd~ alguien ~~e.,no.~sr~balifVist~I?~aba,P9~~tcam~ ,
po de la cámara, permitían,110 que.fuer~ el cámara el que optara jJQr 8eguirle~ pa- ( ,

, rarse sobre él oel11P~iátde. IÍ~evo.'Sin:embargo,cuando:este algúienyahabía


pasado,rehacíáñ.la toma'poimótivos,desegu!i.da:& . ". . ,.'~.'
" Esa cuadrículá rti~delcampo,~se40minio'del dispOsltiyo,petnlltenqué
estos cineastas capten l~~murn1ullos llllÍS$perceptibles,el estremechluent0 de '.,
las hojas de losái:boles'án~s qe la t~nipestad; el aleteo del~IQ·deUnpájarp,;
«Aventura40lliinacW>:.,CaIificabaJeati'Roúchef~ine.:ASuPar~rteld6lllitJió (
del cuad~o Aurruite el rp4ajeésesend&Í"sersp. PfoPistcámatapemlÍte fM,e:~rt;t
la filmaciÓn. Su idea cons.~e eifhacefun;cine de fic§:~niIDpróvisada, en partici~ (
p?iplenamente el} tanto que cineasta~cá.rnara en la acción Cineinatográñcaque se
está desarrollandotcon·~na~cámara <<de cQntacto» ~es d.ecir~ filnÚmdodemuy cer~
ca con un gran ángulár'(Y no<~sobrevO.lando»losp1a'nos con pn teleobje'tivo). . '
'Para Jean Rouch resulta illconcebibleque'se"ptreda:nacer'este'1ntbajh~entre\
dos y cree.quelos únicos que consiguieron sUperar esa prue~a fueron Bori$ Kauf-
roan y Jean Vigo.sl " , '
Aunque tarÍlbién<loha.n hecho otros. Los cineastas suelen considerar que su'
cámara es una especie de ,segunda piel, alghlen: que les conocebieÍl y estásiem;;'

80. Indudablemente, el ijécbo de que haya sonido'sinéro~izado,inuy im.portanteen sus pelí-


culas, les impide intervenir.Bn este sentido, en los primeros éortometrajes(mudos) de David Wark
Griffith advertimos cierttis:miradasa la cámara por parte de los actores, reacciones a lasinsttuc-
tiones queimagi~a!,nospr~cedeñies del realizador, con toda seguridad situado junto a la cámara.
81; .A B.oris, Kaufman se le ocurrió fihnar cámara en mano la película que tenía que I1aij}arse
Áproposde Nic~ :«po¡j¡tdJ~uedocumenté». Así Borili Kaufman y lean Vigo, en 19~Q, fu~ron los
pliJllerosque, reacclonru,ido contra la ligid~z del trabajo de filmación, quiei,"mn conservada liber-
tad y el movimiento,despoj~do a la cámara del trípode y de otros accesuúós. «Fuimos dos, Vigo \,
y yo, siempre dmt,!'fo hábíartinguna rivalídad entrenosottos.Yo yaestabarrtuy ocupado con mi
función de operador :y, con lean; era la Visión de dos personas, la más eo¡npletaquese pueda de;.
sear» (entrevista.
. .,
CaÍliers
-
ducÜJ.ema¡
. .;.
n~- 331, enero
.
de 1982). . , ' . "
80 EL ENCUADRE CINEMATOGRÁFICO,

(
pre a su espalda. Se crean relac.iones de doble, hasta tal punto que Resnais yBrun 4. El enc~dre del sonido
se parecían físi~amente, o q\leI{()~J~9.!~ki, qlle_es~e:~~tura baja, pr~fi~re
los cámaras bajos porqueesitnp0rtantefiliñara1a alturiide ,su visión; "La entente:
no es siempre inmediata. DouariIlou~ 'que mantenía relaciones muyamistósas.cOÍl
,ciertos realizadores con los que:~ájab~'sobretodo con Qphuls,s~ acu.erda, por
(- ejemplo, de su primer encueIltro ~on Jean-Píerre1'4elville.Era el priIIlerplano del
primer día de rodaje'de la películáEl guardaespaldas(L' Mné des Ferchaux,
1963). Ya era un cámaraderenombre. <<Era un ~eñor bastante importante, no muy
hablador, cubierto 'con un somlirero "stetSon" muy.teJáno'y, además; con 'gafas
" oscuras que ocultaban sus ojos, Wfseñor cOlÍlQ' yo no. había visto ninguno ,ántes~
El primer plano: un plano'fijode'Cha.rles Vanel sentádo'en un taburete ante 1ab:i-
, rra de un bar, un plano d~ lo más tonto. En cilantose, situó la cámara y se encua~"
dró a Vanel según mi idea llaíné, á Melville para pedirle que echara un visiazoen
su cáln.aIf y me Qijera que le pareCía.MereSpondió.~movers~ de su silla:, "Ya '
(' , 10 juz, ,•• durante la proyección'~. DesPUés de aqueifo las cosas fup.cionaron bien,
y no sO,ttterminé la pelí~ula sinó que además entre Melville y yo nació una bue,.
na amistad. En cuanto 81 p~r. dontacto, nO fue muy tranquilizador;» '
e
(
(.

Del mudo al sonoro


'.
~l principió, el cine fue la reptoducciól1.del movimiento. Sus inventores
y numerosos precursores animaron a la fotográfía y no tardaron en hacerla
galopar (en los Estados Unidos las primeras películas cortas recibieron el nombre
de galloping tintypes, foiogiafías galopantes). Ni ellos mismos creían en el futu-
ro de esa nueva atracción. Sin· duda, su urgencia -se trataba de una carrera
por la patente- era proporcional a su fálta de confianza. Sin embargo; en ca-
lidád de espectáculo de feria, ~e music-hall o de teatro, el cine cuajó y lla~
JJIamos era del cine mudo a aquellll'etápa comprendida 'entre 1895 y 1929.
Nació un arte cuyas obras maestras admiramos y cineastas como Chaplin 'crea-
" ron un nuevo'lenguajeuniversal. Para éste,-eI silencloera la esenciá misma
del cine. René Clair, en Francia, a su vez autor de El silencio es oro ~ si-
- lenceestd'or, 1947), evocaba:c~ñ gran nostalgia aquellos años en los qoJ in-
ventaban literalmente el cine,plano a plano, y descubrían día a día las posi-
( bilidades de esa nueva herramienta. Gracias a un reciente interés por la
,historia de losorígenesdel Cine, sabemos hoy que el cine nuhcafue verdade-
1',' , ' '. '
82 EL ENCUADRE DEL SO;NIDO 83

ramente mudo,82 puesto que sus proyecciones siempre llev'aba.t1 acompaña-


miento' musical de orquesta o de piano. '
• Antes de que se generalizara el Cine, sonoro~ en 1929~ y después del aplas-
, tante éxito alcanzado por Al Jolson con El'cardor de jazz (TheJazz Singer,
.• 1927'), se habÚin des~¡¡ollaaornúltiP1es experieiiciá~ de sonorización. Sin duda,
las palabras que Al Jolson intercambiaba con 'la actriz que daba vida asu ma-
dre, las únicas de la película ~l padre,' por ejemplo, siempre era mudo (o sor-
do}- mara-villaron a los espectadores y con ello no sólo convencieron a los
financieros, sino también a los cineastas, tétnicos y actores que, por varios moti-
vos, se oponían a la proyeccíón SOllora. Muman; por ejemplo, rechazó el sonoro
hasta su muerte, la versión sonora de CUy girl (1929-1930) la firmó otro cineas-
ta, y Tabú (Tabu, 1931) se concibió como película muda, aunque muy tardía.
Stanley Donen, por ejemplo, describió cbnmucho ingenio e ironía las~ difi-
cultades con las que se encontró el advenimiento' d~sonido en Cantando pajo
la lluvia (Singin' bu the rain, 1952). El período de transición del mudó al sono-
ro es uno de los preferidos por los historiadores .. Podríamos decir, con cierta
nostalgia,. que supuso el fin tie una época. ,
Los inicios del sonoro sorprendieron a los realizadores en su .medio de
Rodaje de una pelícuia de Harry Béaumont, realizador
trabajo -mudo--:..., y entonces no s610 se trataba de limitarse a sonorizar la versión delasprim.eras comedias muSicales de la MGM
muda de una película. Para algunos fue una catástrofe, u.qa· película co.ncebi- (
da muda como Lafin da monde (1931), deAbel Gance, tenía tinas imágenes de- c\ladre cinematográfico: ¿qué pap~l puede tenerel sonido en el encuadte de ima-
masiado sigillficativas para que seles pudieraafiádir sonido. gén? ¿Cómo se capta el sonido en cine? .
René Clair concibió su primera película sonora, Bajo los techos de París ¿Se puede comparar el trabajo que realiza. el equípoformado pOI.el técnico
(Sous les toitsde Paris, 1930), como una película muda con música. En esa pe- (o grabador) de sonido y el perchman (el que sostiene la pérti~a)con el del equí- '
lícul~, las palabras se limitaban a sustituir a los rótulos; Recuerdo una secúen- pe de imagen, es decir, el director de fotografía y el cámara? :
cía admirable: dos personas están conversa,ndo en un café" nosotros les vemos , . ¿Qué es unplailosonoro? ¿Es el sopidedeun plano deimagen? ¿Se puede .'~
de~de fuera, a través de los cristales, y nO podemoS' oír lo. quedicen,'lo cual. re- se
decir que el sonido :ericuadracomo la imagen? La idea ,misma de circunscri-
salta suimpo~cia. ...,'. . bir un sonido, de atribuirle límites.en el espacio parece, coÍnomfnimo, paradó- .
No obstante, en un intervalo. de dos años.el cineniudo desapareció rápidamen- jica. ¿No será que la labor de asentamiento; de armoniz~ión de los sonidos en-
te de todos los países con industria cinematográfica, menos deja Unión Soyiéticit. . tre ellos mismos ---4!uracíón y. vo1umen- y también de los sonidos en relación
Más adelante analizaré lafuncí6ri deJes encuadres en el découpage de una a las imágenes se realiza después de la toma, a la hora del montaje?
película muda, La pasi6n de Juana de Arco (La passien d~ Jeanned' Are, 1928) o, Afirmar que, en el cme -salvo excepciones constituidas precisamente por las
lo que es 10 mismo; cómo Carl Dreyer consiguió crear unespacioco.n dimensiO- películás que nos interesan,l3$ de OrsonWelleS~quiena.s~guraba hallar1a imagen
nes de planos y ángulos de cámara y,en este espacio, una accióh, en la que,pa:" a partjr del sonido, las de Bresson; de Tatio de Straub-¿,el. sonido queda relega-
radójicamente, la pálabra es partrcularmente importante, puesto que se trata de un do a un segundo plano es un tópico, Algunos detalles significativos de la división
.proceso judic;ial, basado en preguntas (por parte de los jueq?S) y respuestas (por ~~l trabajo:1ós salarios de los técnicos de sO,nido son menores que los de los ope-: ,~-_.
~'-'4¡-~ de Juana de Arco). .' l'adOl:es de iÍnagen y, para dtlf prucbás del principio yel final de)a cádena, la pro-
ACto seguido abordaré el cÚiesofloro. y parlante que conocemos. bajo Jas qucción lzonnalconcede Ínenos tiempo al montaje. del. sonido que al. montaje de
p~rspectivas siguientes y con el objetivo de ayarizar enJDj.spreguntas s~bre elen-" la imagen; en cuanto a la clitica, .pocas veces, profundiza en el análiSis del sonido
de una película. 'Untéciúco como Pierre Brard, en'sü iritroducciónal Manuel de .
82. En su libro La,voix au cir¡éma:, Cahiers duCinémalÉditions de ¡'ÉtoiIe., 1982,Michel ['Assistant Opérateur,enuncia de forma inequívoca su concepción del cine: «arte
Chion,Prefiere calificar el cine mudo como cine .«sordo». gtaficQ y dinámico que nó existe más que enfunci?n de la imagen».
84 EL ENCUADRE CINEMATOGRÁFiCO

Indudablemente, debemos. acusar de ello a la hegemonía del ojo en la civi-:


lización ocCidental, civilización de lo visible y de lo ínvisiple, civilizaci6nile4a· .
:magen. Siemprev~os aver una película incluso cuando sabemolque ~e tta-\,,'
t

ta.de iinágenes y soriidos, El afic;ionado vive sus recuerdos a partir de fotogratIas, .


raramente los vive a .partir de Cintas de catlsette. Algunas veces escuchá' músi··
cas,mÍísicas dep~lículas entrajiables pero ¿y los ruídos?, ¿los ambientes?:; ¿1a.s
palabras, los diálogos? Algunos locos del cine, antes de disponer de un magne-
. toscopio, grabaron las cintas/bandas sonoras de las películas emitidas por tele-
visión, las de Marcel Paguol, por ejemplo, en las que tanta importancia tiene. el
lenguaje. RecordeIIlOsque, préCisamynte Pagno1, durante los' rodajes se ence- .
rraba en el camión de sonido, a diferencia del resto de los realizadores, quepre..:
Jier~n quedarse en el pIató para controlar el trabajo de los actores o vigilar la cá..: .
mara.. Para él, «sí era bueno en el sonido, era bueno p~a la imagen». Pag#.oI fue'
uno. sprime~oscineastas franceses que sea1e~~on de la negada dei.~ono-
( roy'. arz6 por. ello en una polémica contra los partidarios de la imagen,,:· .
. R~né elair, AbelGance y .Marcel ~'Herbier. A su vez, sus películas fuetonca-. '. ... . "".;:

(
lificacias de parlanchinas. Porotra parte, hay pocos programas rad¡of§nícos que nerse~ ya que el fuera de campo es, por defu:tición, lo que no se v~~Arinque, sin
( qeIl,~estra de iPiaginaciÓn. En Clnémath¿queen liberté (12 horas consagradas: . embargo; Sé dehe 'distiD,guir entre un fuera; de campo definitivo (im personaj~al.·
( '. aja ~storia de la cinematografía'francesa, en junio. de 19aO) ¿qué se púdo oír que no ve~emqs.nul1ca) y u,n fuera decam.pó P1Qíllentár}eo (lln,.p'~r~q!!pJ,~ªU$~~~· ..
. aparte de interesantes cOllversa.ciones? Canqiones ylas voces de algunos acto~ te 4el.p~po,ª\iIlqtl.~nosabernos d;qr~te G;uánto. tiempo).. ' ·{~r;>'· .'
. . . . . " ...¡~;~ ;:.,~':. ' .
( res fanlosos, aquellos, precisamente, de quienes se dice que tienen una voZ.
o -', i~',:1~ ,..EatadAjic.amentet',se-puedé."gr,abar-l:!n.scmid(){gffi·smc;é,lÚcá1~}-~s"deci¡:~
(
al mismo tiempo que la ii1'lagen, con el magnet6fono y la cámar~acoplados a
Sonido in y sonido off la misma velocidad. En Fortini can; (1976), una película de Straub-yHuillet,la
voz off del escritor' Franco Fortini fu~' grabada al mismo .tiempo y en los
¿Cuáles la parte del cJ=º~ qlle transmite el sonido? . mismos lugares donde se rodaron los planos que comenta. 84 Eso.es el directo.
¿Cuál es o cuál podría ser el papel delsonido en eh;ine? .. c"'ESlrVC1Z~~t6nni'tf~nrescasos':ceiitiiñetros"ae"nrcruñara, imp1fciiunitielac10n'inla:'
¿Siempre tiene que situarse en relación a la imagen? , gen/sonido distintá de tina voz decomentarísta, grabada en un auditorio varias,
¿Qué es un sonido ÍlJ? semanas después de finalizar el rodaje, con las imágenes montada.g- desfihlfldo
Responder a esta última cuestión tal vez nos permita eluCidar las primeras. en la pantalla. En este ejemplo, si bien el emi.sor Franco Fortini está off, la voz
Se denomina comúnmente83 ' está in. todo el volumen sonoro dellugat, ambientes¡ ruidos y voces, se gra- '.
bó a la vez. No se puede obtener, en un auditorio, una voz modificada por el
~ in al sonido cuya sincronización se puede verificar con la imagen. El sOM viento o por cualquier otro accidente del directo sin que el espectador; o ~
nidÓ que tiene un doble'visual; en la mayJ)IÚL4~10s casos, unos labios que arti· bien el oyente, sientaqutres,tá=doblada, borrada.' o que, pOf:el contrario, {<toma ',.
(
:culan, aunque también un portazo, manos que aplauden, etc.; ventaja». Se puede, daro está, montar esa voz en lamesa demezc1as Y'n1ez~
( . .~ off, al sonido 'cuya fuente no está presente en la image11. No obstante, el
.sonido llama,dooff se oye siempre y la simetría con la imagen no puooesoste-. '" 84; La palabra «comentario» no es la más .adecuada para esa. pelícuia. Efectivamente, no se
trata de una VOZ que comenta imágenes, ni de imágenes cuyo estatuto sea ilustr'dr, comentar un tex.;
tOo Cuando Straub y Huilletdecidieronfilmar el libéo d~Fortini en 1.976, le pidieron ál escritor que
83. Serge Daney, en un rutículo publicfldo en Cahiers dil ciné111a. n. 276-279. ágoste-sep.- leyera S11 texto ante la c4ll1áia (en el ejemplo citado, cerca de la cámara) tal como loes~ribi6 en
tiembrede 1977, recopilado en La voix du ciJiéma.propuso una redistribución de las proposiclo,::, 1967. El hecho de que el texto. sea anterior a la películaexcluye. por lo tanto, la función de ce-
nes inglesas (in, out, off, tl1roug1l) y sugirió referirse a las voces y a su ~fecto dentro o sobre la pan-· . mentarío. Por otra parte; la lectura del texto en la peiícula, en el presente de la película, inlpid~ Ja .
IaÍlá. . . . ilUstración. El texto del libro, está dentro de la jmagen: . . ..
86 EL ENCÚ.¡\DRE DEL SONIDO

,cIar Jln ~ent~:-de vie~t(n~onupa voz ~<rotá)} e inventar todo 'ti~o:de.e.fec­ 'm~~tales en las que se «tolera» su presencia, el mic~o debe permanecer .oculto al
tas,8S p~ro la séns·aciónnose!.áJá n:íism~ para el espectadot:ParamuchÓses:- espectadar. ,Por lo tantq, durante el rodaje convieneevitai que entre en el campo
pe~tadoieo--cineastas el s~Í1Ídoes unaapQesta impo¡:tante.SácbaGuitry loco- dé llú~_a.~,Par ello,lá mayoría de las veces está montado sobre el extremo· de
en
mentaba -:-ya~ humorÍ$ncamel1te: «cUando voy coche poi': una,carretera Y una pértiga que el perchman sostiene con la mano. Asirriismo,el púchman debe'
veoesaindicaci6h.formal clavada enun poste "Prohibidoadelantar", m.elllpreten- , ori~ntár el micro.haciala fuente del sonido qllese debe grabar, nonnalmente los
gq .ganas de llevármela y, colgarla en un estudio: "Prohibido doblar'~». actores,·onentándoló haCia su(s) boca(s); 'sin mover demasiado la pértiga pero si-"
, ,. No, obst~t.e, no~epuede elevareldíreqto a lacat~gónaae Uñti ley y8,tgu~ , 'guienAosus'movímientos de cabeza ysusdesplazarriientos.La fom1arnás16gi- '
~os~iealizadores. -casi t()dQs)os italianos- prefieren el, doblaje. 86Syberberg ca de captar unávoz consiste en colocar el micro encima del límite supelior del
,eligió el play-bac~ p~a P~t$ifaly lo usó deforma tQtalo:t.en~ creativa. :-: campo de la cám¡l!a a medida que, en la mayoría de los casos, la voz sube. '
, , La obligación de quedarse fuera del campo implica que el perchman preci-
se, para cada plano, una apreciación instantánea del marco de la imagen según
El dispositivode,tomadeSOIiido~
lO" , .' ;. " •••••• ,••
la focal" y conlleva, igualmente, una colaboración con el cámara;' Si' el cámara
lédi~ al perchmanque dispone de diez centímetros por encima del marco/en-
:' En el sonido, igUal qu~e1Íi~limagen, las eleccio ~oque,dutantel~~aci6n,del plano"no podrá subir la cárriara, dado que, silo
'das a las técnicas; Veamos c6mo se
desarrollala'to desoíIido;', .hiciéi'á;, provocaría que el perchman, que se halla a la distanCÍélcorr.ecta, entra~
, Menos an~güa que ,la representaci6n visuál, la ,reproducCión sonora data de " rael'l'el call1PO~ Los ensayos posibilitan que elperchm.an precise los'movimien-
aperi~s un.si~?;1o"El inventor.del fonógrafo fue Edisouy, a partir de él,.los prin- cánrara:y
, " tos de los de los actores y evite las sombras proyectadas por la pé~tiga.
Cipios .tecnológ¡cos nohanevoluqionado mucho. Sinembárgo, 10$ Progfes 9S Am~nudo;~n la preparación de un plano, el director de fotografía empieza pi-
\ocllicos han aportado dos' grandes 'cambios: , diéndple:alperchman que le muestre el recorrido que debe llev~ a c.~bo con la
",pértlga;'s4io,desPl,lésilumina, de forma que no'seproyecte sombrá'algu,naen
- el paso de la grabación sobre pellcula óptica a la gfabación s.obré cinta ningÚltladQ~Alp~rchman se le exige ,que se muev.a silenciosa y prestamente,
magnética; ," . . II1íID~meq4.o..siempreel.micf0"dirigid(}hacialosqué,~ablan")':~conseivand()la'
-::-láillvendQn del magnetófono portá.tiL distanci~ micro'-actoresl0 más constante posible.
, ,
'En ocasiones puede ocurrir que el décpupage se vea modificado por las di-
E1dis.positivode toma de sonido'consfade: fitultades halladas enila toma de sonido; que haya que fraccionar uná tomá de- ,
,IPlISiado. complicada' de rodar de WUl sola vez. ~~otros casos se utilizan micró:; \ '

- UJlI;!1icrog:rabadót, orient().do preferiblemeRtehaciala fuentedel-seÍri:de"; ·:'fOn:~~urr~d9s.éñ·eldecóradoo eillos propios actoreso, mejor aún, fijados
,que Se debe grabar; . e '
en v8iiaspéI1igas.'para obtener un campo sonoro homogéneo hay que equili-
'. ~.un magnetófono que conserva la modulaCión eléctrica.;Ja intensidad de brar los.dis;h\tos m i c r a s . ' ,'
estai:no~u:lación estácontiolada por el juego potenciométrico, visuallZadoeuoo Desde.hacedos'o tres años,los llamados micrófonos HFhan revoluciona-
potencióniétro. ', , dó la toÍIUiae 'sonidos sin que, por ello, hayan resuelto· sus dificultades. Son
--c- un casCO de escucha que une el dispositivo ,electroacústico a la'personil ' UIlaesPeciede microsinalámbricosque, por ejémplo, permiten que los actores
,que 10. manipula.E~te casco tiene un .papel comparable al del visor .de la c~- lejanOS detiiinpresión de proximidad sin crear problemas de pertiguísmo. Roh-
,ra enló que se refiere a la imagen. .' , , mer y Rivette fueron 10& primeros que experimentaroll esa transmisión del so-
nido~sus películas La mujer del aviador (Lafemmedel'aviateur, 1981) y Le
¿Cómo se reparte el trabajo de la tomá de sonido? El perchman es. el que pont du nord, (1982)por víaHF.
-materia~ente-2<capta IÓ$sonidos del rodaje. Salvo en las pelícuia$docu- , 'Bnlas pelícylas ~bajopresupuesto, el ingeniero de sonido realiza solo eltra-
.... .,.JI> ,. ' , •. ~

'bajQ•.ap~to.en banciolera, cascl"sobre los oícibs y pértiga en mano~En laspélí-


, 85; «Efectos,~.~ el térmmo utilizad0::-'1.ra désignar algunos .ruidos especiales' añadidos a la-- ,culas.depresupll~o,ÍlledÍO, bl,trabajo se reparte 'entre 'dos.y ,el eqUipo de sorndo
cinta sonora a fin de enriquecer sus matú;.;;,~. Engeneral, los 'sonidosde una película estáncom..:
I puestos por palabras, ambientes, efectos, músicas y a veces comentários.
,estáintegt1tdo;pordospersonas. Ya hemos visto cuál es el papel delperGh11um,
86. Doblar significa postsincronízar la pelIcula en un auditorio. En ese caso, el sonido graba- ¿cuál'esel delirig&1iero.de sonido? Jean-Pierre Ruh tuvo la aniabilidaddehabliu:-
do en el rodaje se llaÍnasonidc'J-testigo. . , , ' ;me', de· 3J.gunasde las películás en las que colaboró~ El técnico de sonido confec-
(
88 EL ENCUADRE CfNEMATOÓRAFICO
. .. ." . '

cionaun «clima» son()ro, un «ambiente» sonoro parala película, siempre a partir . unajoven vietnamita quenotellÍav~z alguTUl pero que llevaba uD:i:rnpe~~~6
• de las directrices del realizadoL Trabaja, también él, en función del encuadre,del pl~!!~~q'9p~~ru,j~a,x~tto,,era Un chico con una voz muy baja y quebrada;;pori;~ ..
objetivoyaet movimientó-¡fu-ia cámara y, generalmente, en función de la direc- baCo. Elingéniero de sonido debía consegwr que los ~ persoIlajes.fueramau~,.;.

ción. En la mayoría de las películas tiene que respetar la presencia de los actores, bies y, alavez~efu$ar loS problemas de reverberación de la habitaciÓn.Para,~~o3:~,':~
es, diríamos, su punto de partida más evidente. Concretamente, en el rodaje regu:' utiliz6~'por unla:do,lús microsinálái:nbricós para la pres~nci~:delas voces¡y,por "'~
la los niveles de grabación, controla la inteligibilidad d~l sónido J las «máscaras» el otro, ricros.de ambiente elevados para laprqfundidad, el campoyel volu,méU;: .
(relación sqnido escuchado/sonido oído), así como la reverberación (relación'sO;
nido drrec;to/sonido reflejado),en función dy las dimensiones del lugar donde se Los planos sonoros
desarrolla la grabacion, pues la energía sonora se dispersa propagándos~. -
Reconstituir el color de un lugar le puede llevar, por ejemplo,. en una misma , El ingeniero de sonido obedece a algunas normas habituales del cine, como"
pelí~ula, a tratar las diferentes habitaciones de un piso, una casa o un castillo.de . por ejemplo ajustar el plano sonoró ai plano de la imagen~ Coloca el micro mAs
distintas maneras. En La marquesa de O (La marquise d'O, 1976), de EricRoh- o menos lejos de la fuentésonorasegún el tamaño del plano (a un plM.o ge~e-
\ ,
mer, Jean Pierre Ruh dejó bastante reverberación en el salón, pero la supririrló en . raldebena cort~ponderle un sonido débil.con fuerte reverberación y ausencia'
la biblioteca, de forma artificial, tendiendo toldos en el techo.. . . de voces; si las hubíern.). Por'lo demás, el'poteAciómetro del volumen del ~ag-.
UtliZáesa mi-sma técnica de los toldos en otras pelícuias¡ por ejemploén el netófonoes comparable al diafragma del objetivo de la cárnani.;Aunque se
parvu1~ó de CuiedoAsilo (1979), ci~ Marco Ferreri, donde había mucha rever- cons~ que, en la práctica~ en el cine -nunca en las películas' d(l?resson, en
beración. En la película de Eric Rohmer'había que obtener un color diferente en, .Jªs que, por ejerhplo en El 'dinero (I./Argent, 198~), el micro espera ~n lugar de
cada h.a,bitación, en Cuíedó Asilo había que mejorar lá calidad mínima de la ¡,
seguir y por l0tan~o ohnoslas voces de los 'personajes a medida que se acer:- .
toma d~sonído,-su inteligibilidad. ,- can--:- sol~Ili.QS' tén~rc9flStanda. deLplanosonor~. que da sensación:4.~ 'contip\lí;.' .
AIgtnos decorados pl'ese.ntan dificultades particlllares p~ael in~I1Íetod~so-' dad, al contrariQ,de:lasililágeJies~en lasque, a partii de Pprter y Grttttm,'se¡ir~c~ .
. nido. Uno de los principaiesdecorados de la pelfcllláDiva (19.80) de..Jtfan,.htcques ticaroii caitjoÍos qéplano, y ruPwras ,del p~nto 4é~ista. Atribuible e~ ia D1ayorí~ ,',
. Beinei a una h~bitación de 70 metros de largo por 30 metros de ancho y de -deJós,.cas~D~inteiés-poria'toma·mrs~rttr;t!sta ausenciifue éam~ó's' ae pfa~. '
7 me!r' , llltura. Por ejemplo, l1abíaun diáldgo'éfiti'e tres 'iictOi;e~: tino ,óe'eI19s 'era nos s.onOras puede, por elconti:arlo, corresponderse Con una voh.lnt,~él:quen~i<ia,
( tiene que ver con la lógica y la racionalidad. Eso es lo q~e ocurre; ¡{ól',éjempló,
clÍando oímos a actotes hablandp.en.elsegundo pl¡mo 4e un decorado)' SI:lS vo- '
ces nos Ilegan con tantatlaridad c91ll0 ~t~§!y:yj~ran.~Ü:uªdQ}LeJJ~px.iroex:pl:ano.".,¿",
e;
'~""-"EstaiiTeáñaaa(Jerpianosi?D:o;o- ftreuente en el cine americano cOJ?tempo-· .
ráneó y, recientemente, la aparición de las técnicas HF ha contribuido a ello. ~in
embargQ,'tambiéns~ encuentra ~esde que~ el sonido existe-- enalgun~ pelí-.
. culas :adm1rables yabsttactas: detengámonos a.escuchar la presencia pura de las
voces in yoffenlván el Térrible,.la de las distintas fuerzas presentes enIa esce,..
( na inaugural de laconsagraci6n éti la 'catedral. .": '.: .. : '
( Kudelski confeccionó un magnetófono <fu cuatro pistªf_que permite jugar; ::':

con¿uatro planos son,oros, derecha, izquietda; adelante y atrás, así comolÍn ñii:'~
ero inteligente capaz de grabar en tres~dimensiónes. Recordemos que el sistema:'
dolby estér:eo87 actúa sobre la derecha.y.la izquierda y no sobre el primer~'yel

87. EJdolby, sistema reductor del ruido de fondó, introducido en J918: Y.experimenwdo 'parti~
cularmente en El grito (TheShout, 1978), de Skolitnovski, da unas bnmlal> de sonidó de más. «alta
fidelidad», eón más detalles y; a menudo, difundirlas a mayor volumen en las sálas. El estéreo' tiell~
de a transformar el est$.tuto de su fue.nl. de campo, localizándolo: alIado, en ninguna otra p~e~Véa-
S.M: Ei~ensteiil y .el bajo Maxime Mikhailov, rQdaje de lván el Terrible ' se, a este respecto, el artfculo de Michel Chion e~ Cahiers du cinéma, n., 329. novÍembre de 19'81.
,-
;, -":"'ÉL ENCUADRE DELso~iDo
( 90,

, '$egundo plano. GraCias:a~Ias cuátro pistas, se buscanauná correspondeilcia con niísma materia del sonido: .«Lá c~ara sólo nos da una apariencia superficial y
cada uno de los elementos de la pantalla y el universo sonorO se reconstruiría en engañosad,e losser~s. El magnetófono, en cambio, nes restituye exactamente la
las tres dimensíon~:,Loscineastas se'hallaríanaSferrlaqbligaci6n de penSar en un materia misma dé los luidos, de la Voz humana y de los aniniales».S9
découpage del soitido, en ese sentido. , " . , Cóhío 'etnrlcro lo capta todo, para él no hay fuera de campo. ¿Puede existir
Si bi~n para ,un primer plano de actor no es necésario;rÍab~jar con' cuatro , una profundidad de campo -antes de la comeÍ'Cializaci6n del nuevo invento de
en
pistas,tambi~n ese casOhay que respetar ún plaiioso~o¡'o,es decir, un exn- Kudelski..,-, se pueden crear distintas dimensiones de campos s.onaros? .
plazawjento deuriCNideal que corresponda al e:n~uadre dela'nnagen. Por ideal ." c",¿Cómo percibiínós los diferentes sonidos en nuestra vida real'? Volvamos só-
sé entiénde enrelac.ióna la película. ,Welles 6 Eisenstein, por eJemplo" jamás tU- brela preguntaqueLeÓnardo da VinCÍ formuló en susCuademos: «Me pregun-
vieron laconcepci6n del: plano sonoro de Losey en Don Giovanni (Don .Gio- to,si un ligero ruido cercano puede parecer tan alto ·como un gran ruido. lejano)~.
vanni,1979). " , ' y respondamos con la ayuda de:un especiálista, ClaudeBailblé: «Con la.distan~
cía J;lO s610dismitiuye la intensidad sino que, sobre todo, varían el timbre, ~ el co-
Jor yIa sonoridád». . . ' '
, Microsy escucha " . ':, 'Uns()ru4ocMbil (lejano) notiéne el mismo timbre que un soÍüdo alto (cercan~),
, , ;yaqúe,1.osgraves y108 agudos nó se reflejan con la mis111a intensidad en el cerebro.
Sin embargo; los microspenniten sólo muy nAos enéuadies,áI cQnttario , ' El timbre percíbido no. es el mismo puesto que, al perder su fuerza, el soni-
el
que objetivo de1íDiitado por la ventana de la cámara Un micro liamaq.o «di- 'do también pierderecept:ibilidad. La altera,ción del timbre es debida no a ladis-
recéional»lo és para los extremós agudos y los agudos t pero tiende acqnvertir- tanda sino al hecho de que el oído no tiene una curva d.e respuesta plana a las
,se eh omnidireccional con los, baJos, 10 cual aumenta loseféctos «enmascara- diferentes frecuenci~audibles. Y esa alteraci6n es precisamente la que permi-
, dos» de los so.n.!dos graves.y obliga al perchman a apuntar siempre. el micro te evaluar la distancia.
haéia la boca. de;los áctores o hacia los instrumentos, para salvaguardar la clari~ , " Movido,porla pulsiónde escuc4a, el aparatoauditivo tienela pOSibilidad de
dad del sentido orle la música. El micto caMnhiperdireccíonal debe apuntar , dis~~,unavo~,entre otras. Prestamos atención, hacemos un esfu~Fzo desm-
';'perfectaménte h~cia la fijente, pero' tampoco elinúnala pér<Uda' ~ dU'eceión de .f0n1zacióni'deaoomodaIniento"y~atrunosd~,,~imip~ el ruido de f(jful().
los gr~e¡;:, simplemente, sigile siendo dífét,u\ib, pero 'aüña' octa~,(o 'dosfuaS·: "':lfóy porñoy'ñ6~exiiite ñingúñIDic~(;que' hag; el trabajo d~ a[~nci6n propio
bajas que ei mícro direccional cl~sico: del oído. Señalemos que en vIdeo...::...campo en ei quela calidad del sonido aún,
'Si en la vida se puede comparar la escucha con la: mirada, aislando. un ele.;. , no.'esll1Q.ygr~depero en el que los progresos técnicos sonrápidos~ ha apare~
mento en ,el espacio sonoro-visual,ss en el cine, mientras queesposi'P.1e' ~)én.;. ddo. el inicroquese flja a la cámara y que tiene la particularidad de ser de
cuadre en el campo visual gracias: a,.~ ,~~!~f!!1.~c!if1j~Qºe.l<?!>je.!tY9 4~Jª"~~f!r-ª,,.~!t· "~,,,_9i1:i~~;;Y-ªl~~y-,eLmicr9,;QnmidiJ;ecciQna}y.su¡')erdireecl0nal~'emnidi~'.'" '
el campo sonoto,éon los micros, es totalrnenteimposible. La cáin:;rraes',tecno-' reccion~, es decir, que cualquier sonido de una intensidad dada,emitido a una
lógicamente máS regulable que el' dispositivo micro-magnetófono.: COÓlo elmj.. distancia deterÍninada, sea cuál~ue~y's,u direcció,n enreIaciónal micro.segraha'
ere nunca es direccional, nes vernos en la ebligacióndeexigir silencie ~nel pla- en el :mismo nivel sonoro. Superdireccional porque la: grabación es m,ás eleva-' .
t6 (el de la cámara, dé ahí elbl~mp, el de los;técnicos~_de lesa¿~oresy dl~los da en el eje delantero del mitro quedetrásoeúJos lados. E!)a, dirección variable
IIlirones: ,«Silem;io, i sé rueda!») y de acabar cOn lo.s ruidos 1lloles~os en: los ro" está.regulada por el zoom eléctrico de la cámara: el gran arigulru' pone el onini-
" ·dajes deexteri6r~s (aviones, ,obras, etc.), mieritras que, en la imagen,larque pasa dir~ion~ eIlmQvinúerito; la focal media, el direcc~onal,y la focal larga, el su~
" fuera del campo 'tomado ,porla cámara es menos importánte. ComO 'lO capta perdireccionaL Así, el cineasta aficionado puede realizar, solo, las funciones di-
todo, el micro disimula menos que el obj~tivo, per lo merlos en sorudo directo, ',' vidida,s porel trabajoprqfesional,entre ellas la de p(}rchnum.
debido a su debilidad discriminatoria. " En el cine profesioilal, a pesar de todo, se le puede sacar partido al micro:
y no sólo el micro lo capta todo sino que el dispositivo de ta toma desoru- <1Un AÚqr()p,u:edéllegar a ser inteligente, ,como un piilcel sobre la paleta, sensa-
do (micro y nÍagnetófono) restituye 'de feIma exacta ....o.{;om.o' dice Bresson-lá t~y, ~~~,sibl~», (J~an.;PíegeJS.uh). Es unacuesti6n delnterpretación. ppr~lern;;..
:, "
plo~hay que saber coordinar los mómentos sonoros de una escena.:
8.8. Welles considéra que«ei cerebro está más relacionado con el oído que. con la vista, Para
es~u.char hay que pensar. Mirar es una experiencia sensorial. másbolrlta quizás" ~ pd~tica. pero , 89. EIÍtrevistá. enCahiers d~~inéma; n. 348~349.junío..;julío de 1983.
en la que la atención ~iene ~enos impoltanciID), ,", , 90: Timbre.: la resultante de las mezclas de las distinta~ anfiQuías graves o agudas de un sonido.
EL ENCUADRE CINEMATOGRÁFICO EL ENCUADRE DlÍL SONIÍ>6
(
Unactor entra e~ unacocina~ Va. a buscar una caCerola, la llena de agua;s~ .Por el,cotÍtrario, al final del roGlaje,RO,híner y su técnico de sonido se dieron' .
( mueve hablruid~ con alguien que se supone qUy-!~)JA1l~en una há\?itación cohti- eh
Cuenta de: gu~ :~bí~4~~iado' silencio lp,&'ªºªº-9; era frío,. angustioso;'.sin"
gUa. Sin duda habráque'hállar':lI¿PUltto!iiediQ que nos pe~tirágrabarerruido '. v~~~.:~~2e~.~~er:?.n que' crear de ·nu~vo.un clima sonoro, .grabar .~J;llugares.· .
delagua (no muy alto); el de lácacerola colocaeia enCima ~e la cocina (tamJ2oco . peatonales (para eVItar el rumor de los coches), en mercados, ambientes,.frag->
muyalt6),Javoz, los pasos sobre las baldosas, etc. Es unacpmposición que hay . mentos de conversaciones en alemán, y áñadieron también ruido de carros, yun,::.
que realizar COD: el micro. i-a el~cción y elemplaZarnlento del micro es una. cues- ques, una présencia del exterior. .
.tión.de gusto; Jean~Pierre Ruh opta por la simplicidad y en este tipo de escena uti-: Según Joseph Von Stemberg, el primer sonido del cine fue el canto de un)'
tizana un solo micro; io que supone una grandestteza por parte del perclztnmi. pájaro en oi[: no había ningún pájaro en la imagem pero en el so rudo había una;,
( .<<Me dado cuenta de que cuanto más sencÍlla sea, más interesante resultará la vida que afunentaba la película. Von Sternberg siempreabord6 el sonido' de sus'
t~ína desbnidb~ .~a utilización de tres,cuatro o cinco micro s aveces empeora las películas de una forma n.o realista. En su última película, The Saga ofAnatahan, .
;cos~s.» las palabras de los personajes se consideran sonidos, frases japonésas que la voz
( off de Stemberg no traduce jamás.

(
Ifidudablemeilte,lruinociories de off einpareéen inevitables. Para Jean,:,Pie~ ..
,La)oma de sonido: una ;'nterpretación
~.~ .'. . .. .
·tteRuh ésas son. las dos dímension~s .del trabajo sonoro: in, los sonidos se cO-
(' rresponden ~n la imagen; off, los ambientes, ruidos, efectos, enriquecen: la cin~ .
.. . ti~1«bt1ena» toma. de' sonido está en consonancia can el espúitu de la peIÍ2 ::, ta sonora e.mc1uso le suman realismo.. .
(
T~arée;tecápítuio con dos éjemplos de voz in. Jean Rouch; cineasta- "•
. cula,:el clima que el realizador quiera crear,. su gusto personaL Es un interpreta';'
(/ "oión ~n:tre·elmicr(); -el acontecimiento- y J() «expresado?> enJa'cinta. . '.
:"~:'~lecC1ÓI1 del decorado es extremadamente importánte. Concretamente, se- ·cameraman. primer espectador de la mayor parte de sus filmes, minc~se priva,
( rIa precísoque el operador de sonido pudiera participar junto al realizador en la(s) a l~·hora·~ee~eu~dr~f de intetvenir en el sóhldo r~spe~to al dispositiVQqu.e sj- .
e lo<:;alización(es), para de. este modo poder opinar si un decorado es «posible» o
rio;s . 'fícil recrearel ambiente de. una casa vieja aislada en las montañas sui~
·túaenl'a'lrhi:lde' . 1-.. ··d;;.A;¡ al
,.,.,.:.,~~-n.a.!f~.vv,or .ye gunos~sonaJes..
. '. ..... . :. . :,:,:_'.~,,...',_ '.. .'
. . Encuat1to a Raymond:Dep~d()n, realizador'-cániara-técnico de s ..: d ex': .. >

.zas - . colina de Sa:ilit-CIoud, en Una s~bida por donde pasan' aufubüses cana . 'p1íca"asij\r'iIi~eréspor"esa-no~vís16n'dertrab3J~"~"~;T~~i'~~d~'~~'~;t~~q~e ,
chico Icinutosy camiones que cambian de.marcha. En ese caso, habría que bus- . C?~tro¡~~e~ s~nidofnosoy un cámara so~oo.! no hay. riesgo. de que ~~~a,esteti-_
caro soluciones que pasaran por la filtración del sonido o eDitar la calle,~que lQ . ClSIl1O,:. pp~t()S .planos aqs,tractos y gratwtO$. El Borudo no .es ini oficit(lopon-
mejor, claro está, sería cambiar de decorado. ¿Cómo crear la sensaci6nde deco- . go en PosIcIón de'automático pero.me llega al casco, y en cualquier momento
«intimista» con una reverberación 9C~i()P'?:d,l por u:nt~~noJte,~i~t.~ro~Q;:Q'§, . . - .. :~R~9,,º-Ql~~la.tla.te~t¡eJá.,imagoo"'Y,el.,gefliti6»;
de altura y un mirador? ¿Qué decir de los suelos de un «verdadero». estudio que De modo que,.p~d6jicam~nte; fue un fotógrafo. un especialista de la ima-
'cbhrlána cada desplazamiento de la dolly o .crujen al paso de los actores? . . gen, elqueun, día pens? ~~ :ls()~~ocqIt1oaIltí,clotQde la imagen.. ' .
Marco Ferreri suele trabajar en Cinecitta, en unos estudios perfectamente . Dada su forma de.fi~, De~ardpn disocia. ~escompone, en una grabación.
cuidádos yen decorados casi naturales,91 .es decir. techados para suprimir la re- . qu~~ no obstante, essmcróruca e mcluso autqmática, la 'unjdád del sonido y de
verberación, . la lmagentel famoso audiovisual. Citemos, enst;l- película Reporters,la escena
Sin einbargo, por minuciosa que sea la elección de los decorados, las 80r- en ~~ que Jacqtl~~·. Chirac, en un encuadre fijo y un plano durativo,contempla -.
:.-,-,presas no qu~dail excluidas. Rohmer eligió el castillo de La marquesa.de..Q p.or ,.,Jhacla la derecha)algo que el espectador no verájamás (que está fuera decua~
( .•. suaíslainieñto, su :~ílencio. Empieza el rodaje; A cinco kil6metros del castillo &0) Yde. lo que-alguien (también fueta d: cuadr~ J2ero al otro lado, a la izquier~
había una baseainúicana y, elprimer día de rodaje ¡coincidió con las.manio- da de Chirac) le está 'hablando. Se trata, creo. de la rehabilitación de un barrio de
brasi.Carros de combate, helicópteros,' tanques, cañonazoS. Afortunadamente, .París. Jamás ver,emos los contracampos_.esperados, .nipla.nosgenerales dei
la
tuvieron amabilidad de inten'mupir las maniobras.
'. ~ 92. Depardon parece aprovechar las ocasione.'1 en que se puede conjurar el esteticismo del tra~
Sl1..Los decorados creados tradicionalmente parad rodaje de películas no tienen lecho. ya,gue baJO de támara. En s~ película Les années-,déélic (1983), cita a Richard Leacock. para qtúen los fo-
. de este modo queda si.tio pata los ptoyectore.'l. Los dec!-:mldos:«naturales» tienen Jqstechos propios . t6~fos son los· ~eJotes operadores de cme porque no se interesan porla belleza de sus movi-.
,de los apartmi1entos o casns normales. rruentos, panorámicas' trave~lings;afJ.rmaci6n que me parec~ bastante discutible. '
EL ENCljADR1Ü.::n·mMATOGRÁFICO . ENCUADREllEL SONIDO' 95
barri<relECUestión,Íli undetál1e de la rehabilitáción,. ni iililgun-plano· delinter-
locutor.
Los:.gi1:os (sobté su eje) de la cabeza de JacqueSChirac sOlide lo máscónll'"
'Co para eI espectador y dé! mayor interés para el análisis, Con ellos está seña..
landa dos fuera de campo, ÚIlO sonoro y otro visual: alguien que no Nemas ha-.
bla de algo que no 'se ve. Bvidentemejlte, a este álgtúenho le vemos pero'se le
oye. Y creó que podemos afirrllitrqlJe_~~fiYP?; de fuera de campo es~n.

( ,

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S.. Lo real, lo encuadrado
(

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Cuando el gran público deda quenibía visto la última película de- Gabin o
a
de Arletty, naera una simple consecuencia del estrellato. Tendemos olvidar
( demasiado a menudo que el star system se impuso a"pe'sar de los productores
(que no estaban dispuestos a pagar sueldos astronólnicos a los actores de cine).
( En los inicios del cine, es decir, durante los diez primeros años del siglo XX, los
( actores eran populares pero anónimos. El público quiso nQmbréS, estrellas, yel
estrellato modificó cons~uentemente el cine.
El primer. plano permitió 'acercaralos actores y el aumento de la .duración
de la película motivó que pasaran más tiempo con ellos. Al principio, en 1908,
las películas eran escenas-o encuadres de pocos minutos y.raramente dúrabári
( . más de un cuarto de hora, mientras que en 1914 podían ser de horas de proyec-
ción. El público no se equivoc6 respecto de la importancia que podían tener los
(
actores del cin~;el teatro y la ópera ya tenían sus monstruos sagrados.' .'.
Evidentemente, 10 que vemos en lá pantalla son los actores, profesionales o
no. Lo que la cámara capta es su ser y su savoir faire, ,~n lugares, decorados, na-
turales O no. Pero ¿cómo encuadrar cuerpos y decorados?
98 ',~ EL 'E,l>{C::JJ.ADRECINÉMÁTOGRÁFICO LOREAL,LO ENCUADRAI)2.__
"
El á~t~r".y',~a:'camara dad, la rela¡;ión de ~os con otros es absolutamente improbable. Ahora b~en, la
'>:~:: ' , " - - ,- " " eventualidad según la cual ese gran artista no veía la falsedad de estas relaciones
Ii~:Híá ..,.-ésta es una anécdota narrada ,por elgranáctor buñueliano Fernan- de dimensión es totalmente descartable. De modo que rechazaba, ia naturalidad de ,
qoJt.e.y~, un día, decíamos" un actor que se hallaba en pl~no rodaje tUvo 9-ue un modo consciente y generalmente tomaba la expresividad como nonna para su
',&r'~nsalto muy peligroso e insisti6 en petmitir que lo hiciera su do.ble~Este composición.
, ,:,:saln5Y se rompi6 unapiema. ;En el hospital le pregunt6 al realizador si por lo _ _Así como el cine asocia, monta entre sí los planos de distintas dimensiones, -"'<"-~"~"'-
, "~~~erio$ la toma hábíit' queda~9' bien y si merecería la pena. Le respondieron. q~ fragmenta un' acontecimiento o una historia. Por ejemplo; podemos seguir un
'.(:;no,',que la toma era inutilizable. La toma acababa en un primer plano y, en ése primer plano de unas manos que cogen al adversario, planos medios ~ la pelea
plaÍló, no se le había ocurrido otra cosa más que reírse. En realidad SLf ros~roes- y un primerísimo' plano de unos ojos, desorbitados y su confrontación puede dar
. taba:haciendo gestos de d o l o r . ' , a luz «monstruosos absurdos». ¡Ojos el doble de grandes que un hombre de pie!
,¡:>;i'C6mo se tr~sformó el gesto de dolor en risa? La ampliaci6n que p~ovoca Según Eisenstein estas colisiones, estos conflictos son los que caracterizan tan-
láproy.écci6n ~n la pantalla, el actor aparece ampliadodediez a doce veces- to el montaje como el encuadre cinematográficos (en uno es el conflicto de los
~p.¿;rtá un elemento para la respuesta. a esa pregunta. En la pantalla las dimen- encuadres entre ellos y, ene1.otro, el de dentro del mismo encuadre). Las pro-
siones son verdaderamente inhumánas;, el cine, que es, por principio, teratológi- porciones no son los únicos elementos de conflicto, citemos las Iíneas, las ma-
'Q9, no es real. , ';'t:, sas, los volúmenes, los espacios, las velocidadéstetc.
:. ,<:S) En realidad, los cortos publicitarios se aprovechan de ~sta desnaturaliza- Ampliación en la pantalla, desriaturálizáci6n de las proporciones, expresivi-
"jj~6p :Q.e lasproporciohes, de las diferencias de escala de tainaño. entre perso- dad de los actores. En,una frase de su curso (inédito) sobre la dirección de acto-
.;;' "'fuiJ~~ y objetos. En ese caso se trata de efectos directamente relacionados con res, Nicholas Ray une los dos térmirios de la cuestión del desfase entre lo realy
" , él en~uadre: si se modifica el ángulo de la cámara, las proporciones vuelven a lo encuadrado, a saber, la cámara y el actor: <<La cámara es un microscopio y el
. 'ser nOrmales.' ~ actor es más grande que en la vida real».
',.,'. ' En la vidá real, el mecanismo qúe nos pernlite restablecer las dimensiones es Entre los actores, hay quien trabaja «más objetivamente» que otros. Han
, .>.adquirido.. En realidad, el niño que, por ejemRl~hYe vacas a 10 lejos, desde la au- , aprendido a conocer la cámara, saben, si miran el emplazamiento de la cámara
":.)ó~ista,no. las identifica, désde esa distancialas toIC(, por ti1íimalito:; ~ niño ;se re" y el objetivo, sise les ve en plano inedio o en piano americano, y, cÓnsecuen.;
:." ,"presenta las cosas en sus proporciones reales, al margen de la relati~dad, Elsens- temente~ actúan en funci6n del encuadre en que aparecen. Otros no lo tienen en
, ,' ", tem, en uno de sus artícUlos,93 pone el ejemplo. de. un dibujo infantil que ilustrala cuenta para nada; entre ellos -se comenta..,.- están Charles Laughton o Maria
leyenda «Encender la estufa». Todo está representado a partir de relaciones acep- Schneider. ¿Quizá sean aquellos a los que llamamos temperamentales?
~,
tables, y el dibujo es muy detallista,los leños, la estufa, la chimeilea... Sin embar:- . Es sabido que Robert Bresson no emplea actores sino «modelos»94 que toma ,

, gOj~~ el centro. dela habitaci6n hay tín enorme rectángulo abigarrado dezigzags. ,de la vida real~
,:¿Qtié f1S? So.nlascerillas. Efectivamente,habída cuenta dela importancia crucial Entre los grandes cineastas cada uno tiene su sistema. Que quieran (Renoir,
,. de f~ cerillas para la representación del proceso; el niño les da una diJ:p.ensión Truffaut, Rivette, etc.) u odien (Hitchcock, Stemberg) a lo.s actores es lo de me'"'
• ~.'" iguáJ. de i m p o r t a n t e . . ', . nos. Stemberg, poi' ejemplo, reco.íiOcíaque~ en última instancia, se interesaba
Con tQdp,las estampas de Sharalru -autor japonés del siglo XVIII, p~cu­ por las películas de marionetas y decía que los actores es la cosa más carente de
larmente famoso por sus retratos de actores- son 10 que permiten'queEisenstein 'interés del mundo, que se conforman conhacer ante'lacámara lo que uno. hace
emita su te,oríaacerca de la escriturajaponesa y él principio del cine (pasando por cada día sin que se hable de ello, que imitan la vida.
el problema del·encúadre).El rasgo característico de Sharaku es, precisamente, En definitiva, la cámara es la que sálda la cuestión; mo.delos, actores, co-
, .su sentido de las desproporciones. Enorrrudad de lá distancia entre los ojos, des- mediantes,95 profesionales, aficionados, la cámara decide quienes de ellos le
.' . 'prOporción de la nariz en relación a: los ojos, de la barbilla en relación a la boca.
Cuando cada detalle tomado al margen está en, e$tÍicta conformidad con la reali-
.' 'I";~ l' , 94. Lev Koulechov, realizador y fundador-del Laboratorio Experin.ental (véase la célebi~ ex-
periencia de montaje ~on el áctor --:-:el modelo--:- Mosjoukine) y posteriormente de la escuela de
93. Cuyo título traducido completo es (,El pri~cipi()- del'cine y la cultura japonesa (con una di- cine de Moscú, al parecer empleaba la palabra «modelo» en ruso. '
:kiw.6~ sobre el montaje y el plano)>>. Publicado ea Lefilm: saformelsonsens, Bourgois, 1976, y 95. JeanRenoir pensaba que existe una gran diferenéia entre un actor y. un comediante. Ponía
:'i "én Cahi~rs du cinéma, op. cito al perro-lobo Rintintín como ejemplo de, actor y a CbaplÍn c0fi}0 muestra <le comediante. '
.. ,i.
,
i).j" • . ,

·100 EL ENCUADRE CINEMATOGRÁFICO LO REAL, LO ENCUADRADO 101

( gusta que estén y cuáles son los que van a «pasar» en la pantalla: Rpbert Mit-
¡'
chum, Marlene Dietrich~p~~ o gracias a-Sternberg?), et~. Sin duda~ és~ es
". un amor compartido. Cuenta el operador James Wong Howe, responsable de las
pruebas para el come-back deja Garbo en una películ~ de Max Ophuls, La du-.
chesse de Langeais, que la actriz llegó envejecida, sin maquillaje, anónima, oyó
.el ruido de una cámara en marcha y su rostro cdmbió.
Sí, la cámara es esa mágica cámara oscura que asustaba a los prlmeros ac-
tores de teatro contratados para el cine, hasta el punto de que uno de ellos, ce-
lebre estrella de Broadway, pidió que la quitaran para que-él pudiera actUar.
Otros comprendieron mejor la relación que la cámarah~bía instaurado.
Como Yvonne Amold, esa joven actriz que, en 1908, actUó ante un aparato cine-·
matográfico: «Aunque el té~mino justo no es actuar. Se actúa en el teatro, en el
cine siempre te piden más y mejor. Hay que vivir, hay que moveI?e, hay que ac-
tuar como en la realidad. Incluso hay que aportar uná espontaneidad, úna impe:"
tuosidad ~ue deben ser sinceras-:- a esta atracciqn\ Ahora, estamos listos. Va-
mos"apoder "rodar".96 Rodar, en el lenguaje cinematográfico significa, .en suma,
actuar delante del aparato que, por otra parte, es el que rueda median1e una mani~
Ce vela~ue muevell~mano> mecánicamente».
(-

La cuestión del realismo

ehriosa cuestión, la del realismo, que surge en cuanto se analiza el cine bajo
cuáiquiera de las perspectivas desde las que se le puede abordar; en este caso la
de los actores. Bresson toma sus modelos de la vida, Sternberg considera que
los actores imitan la vida y esta actriz piensa que habría que· actuar como en la
vida, aportando al cine.una sincera espontaneidad.
Paradoja no sólo del actor sino de todo el cine desde su inicio, que hace
que sintamos como real un mundo recreado que va del documental más en
bruto (<<cine de lo real») hasta la ficción más elaborada. Aunque, én todos los
ca.sos, incluso en ausencia de cualquier montaje o efecto espe~ial, el objetivo
de la cámara aísla, destaca, transforma, encuadra lo real. A veces incluso «de . .
.masiado»: el operador de La bataille du raíl (1946), Henri Alekan, se repro-
chahoyhaber fabricado excesivament~la imagen~qe .la película que, segú~,~!,
exigía mayor soltura:. «Aunque por otra parte no era fácil: cuando se fabrica
una imagen artitl~ialmente, ~existe la tendencia a recomponerla durante el en- Greta Garbo y Robert Montgomery, rodaje de Inspiración, de CIarence BrQ~n
cuadre».
Fabricar, recomponer, encuadrar con la cámara. Eso, efectivamente, no es
fácil. Concurren a ese.proceso io que ve el ojo durante el rodaje; lo que registra

96. lean Renoir tenía una manera particular de denominar los rodajes: les llamaba toumai-
sonso
102 EL ENCUADRE CINEMATOGRÁFICO LO REAL, LO ENCUADRADO 103 (

la cám#~'yIo'que despeCtad.Orve. en la pantalhi;En principio, ya en la sala, el IDtchcock, Renoir, Cocteau


espeGtador n?debe advertir ni cámara ni el proyector.97 . la . ..
LacáIní:!tá es· uri, Ítltennediarioentre el realizador (el operador)y ,lo real (la A su vez, otros cineastas insistieron al respecto. Hitchcock, en particular,
realidad); entre el realiZador y.elespectador. El realizador .ve con SUS 'ojos fil- y conocía la cámara y creaba imágenes para la cámara. Según él, el cine nunca
ma con <dos» delacáI~ull~á:'Es importante saber cómo vela cáIlÍara. consiste en fotografiar una escena tal como se ve en,el platÓ. .Existe la obliga-
~ ~,'" (
ción de deformar la real~~ll:d, de hacer trampas para que los espectadores ló vean
, • . '• o,, , . , . : ' '. • : '

l"
¡ mejor. La verosimilltUcfdelo que se ve en el decorado no cuenta, pero síla por':'
¿ Cómo.ve laclmara?' ción del espacio que se verá en el encuadre y por ,lo tanto en la pantalla. En su
entrevista a Hitchcock, Truffaut incluso avanza la idea de que el gran cine em:"
Cuentan que Frltz Lang decidió que una seéuencia de Liliom (su película ro- pieza cuando la ubicaci6n del plano que se debe rodar parece absurdaa,los que (
dada en F~~cia ~n 1933)" se desarrollara en un súbur~io y que la~rspec:tiva están ahí, al equipo de la película. . ' . :. , ( .
desde la que'que se vena sena elojo de un abejorro posado enló alt9 de la hoja . . Efectivamente, se conocen innumerables ejemplos del desfase entrelo visto
d~ un árb(jt Su dialo·gt:J.lsta le replicó que ver por elojo de un abejoITQera una y 10 resultante, desfase que en el momento de rodar ni se sospechaba y que a ve-
id,eaquirOérica, que nadie sabía cQmo ve ~l mundo un abejorro y que, en defini-; ces se manifiesta durante la proyección de los rushes o 'cuando se tiene el ojo en
tiva J séría ,el éspectadoreíqqeverá loqúe ve ela~orro~ Langse empeiÍ6 en su el borde de pn visor(uncán1a1:a puede señalar que un encuadre que en perspec:,
idea; un miembro deleq.uipo l-ecmu6 el boulevard$aint-Míchelen busca de un tiva parece «amueblado~>, visto desde 10 alto, desde la grúa, parece vacío). Con
: .~bejon:o.La escena se rodó aUnque, al parecer,posterionnente la cortaron. De todo, curiosa facultad la de Hitchcock, que,podía visualizar erencuadre. Cuen':' (
.. modo que nUnca sabremos c6moseimaginaba Larigque veía un abejorro. Hu..; tan, entre miles de otras anécdotas, que durante un rodaje Hitchcock estaba sen..;
.~iese sido un buen' ej~Iriplode6ám,ara subjetiva, efecto consistente en poner al tadqmirando elplat6; lejos de la cámara, cuando interrumpió un· gran movi- e
·.espectador en el lugar del personaje-eneste casa del animal- y endarle la miento de grúa señalándole al cámara que estaba cogiendo un proyector encima
.' :: impresión de que ve comO este último. Este procediÍnlento, muy en boga en los de la ventana. Era cierto y el cámara aún debe estar preguntándose é6mo, desde
, años veinte en FranCi~"fuerecuperado postériórniertte de fonna menos.siste~, el lugar en el que se haIJab; el..rea~zador 10 había podido v~r. __ '"~ (
mática yávecesOrigihal;.poCejernplo en las pruebásqlie rozo Welles en 1939 Esta. facultan permitíáq ue'1Iitchcock visualizara sus planos desde 'su.' dé~
" para supelfcula basachlenElcoraz6n de'lastiniebliÍS, pruebas que incluían una coupage sobre el papel, ,antes del rodaje. Al contrario de kan Renóir, que neCe-
• exp}lcación humorísticad~lprocedimientQ (lo.qu~:losamed.canosllJunan ~a.,; sitaba sentir su decorado, sus paisajes,sus.actores y eXtras disfrazados para de-
mera eye), y alCaJlz<ssup1áxhna expresi6n en Lil dama del lago (Lady inthe cidir definitivamente dónde, colocar la cámara.
Lake, 1947). En esrapelícu~ade RobertMontgomery la Cámara es subjetiva En cine es difícil establecer reglas, categorías o clasificaciones; sin em"" ' \,
es
desde el principio.hasta el fin; él actor del drama ella (nunca::vemos al ru;:tor, bargo, Renoir y Hitchcock son representativos de dos·cines que'reflejan dos
.,. salvo cuando está frenteatinespejo; se supone que somos el actor .-el mismo concepciones de lo real y de la filmación que se pueden definir rápidamente
, Robert MontgoIllery-'7"Y.qué la imagen ya no se y,e sino que es mirada). Ante por su découpage, por la escenayel plallo~ Resulta complicado dividir elclne
esta tel1tación deabsohita subjetividad, los aotores prefieren una cáinara.má~ en dos tendencias y, en una misma película y sin que se trate de undefect~ (.
objetiva, descriptiva. Habrá que llegar a un corisensp acerca de las p'alilbras, ya -en Le testament d'Orphée (1960), por ejemplo-,- podemos hallar planos
que lean Cocteau consideraba queelobjetivo. de la cámara era «como un ser filmados. como una, secüencia de Hitchcock y escenas rodadas al estilo de
vivo, capaz de ver cam(?"nosotrQs no podemos ver»., Renoir.
En 1923, Cocteau aC()nsejóque,':paraalejar al elne francés del teatro filma- Truffaut resaltaba estas dos atribuciones en un artícul0 98 en el que analizaba los
,·do, h~bía que concentrar,lasinyestigaciones enelaparato'de fJlmaci6n en lugar distintos momentos del placer de la puesta en escena que Cocteau debió de experi-
de deiarse deslumbrarP9I el hecho de que las imágenes se movieran. mentar. Según las escenas: durante la concepción, el rodaje o el montaje. En esta
ocasión daba tres ejemplos de la transformación de una idea en cine. Primero da

97. Pese a que NoelBurch reveI6~e es~l término adecuado a nu~stro asombro como oc-
. <.identales-:- que antaño, enJap6n:Jos espectadores no miraban hachrla pantalla sino. hacia el pro-
I
i
·1
escena del encuentro de unpoeta.con su doble. Secuencia difícil de fIlmar, en la'que
" no se puede dejar nada al azar: velocidad de los pasos, paradas de los personajes,

yector. Véase Pour un observateur lointain, Cahiers du CinémalGallimard. 1982. ,98. Cahiers ducinéma, n.152,febrero de 1964.
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104 EL ENCUADRE CINEMATOGRÁFICO


LO REAL, LO ENCUADRADO
105
"
paradas de los travellings, dirección de las mi.tadas, sustituci~n de~os actores por
.

Lo no encuadrable
sus dobles, etc. Durante el rodaje, se ej~uta visualmente una Idea Vlsual: " '
. También está la escena de los enamorados intelectuales, que funcIOna básl-
, camente gracias a la inmediatez del rodaje. Tras un primer plano del poeta y de PierreDurin fue el inventor del venablo de Le testament d~Orphéet su fa-
, Cégeste, vemos lo que ven: una joven parej~abrazada, anotan~o ca~a.u~o sus bricante e impulsor: <<Ningún efecto especial6ptico o de maquillaje del gusto de .
impresiones en una libreta apoyada en la espalda del otro. La Idea lllicIal de- Cocteau podía mostrar el lanzamiento de un venablo que-acaba atravesando'tIn'
(- pende en buena medida del rodaje, de la interpretac~ón de los actores,. de sus ,~p­ cu~rpo; se necesitaban complicadísimos efectos especiales, había qué hacerlo
ciones inmediatas, de la colocación, de lospequeno~ gestos, de la Impr?;ISa- real yeso es lo que hice. -El realizador me había hecho una petición que, sobre
Ción, que materializarán el humor. No habrá sorpresas durante laproyeccIOll de el papel, estaba muy clara, pero aún había que Ver lo que saldría de la composi-
los rushes, todo se ha d~idido durante el rodaje. ción de la imagen y acto seguido pasar a la realización mecánica; después, bas- '
taría.con rodar>>. . ,

:'.

Lajabalilla de Le testament, d'Orphée, de Jean Cocteau


Decorado dePortes de la nuit, de Mareel Carné
Y, por fin, la escena de la muerte del poeta. Minerva rechaza la'flor que l~
ofrecía el poeta, él retrocede, ella blande su lanza y la tira. La lanza se hunde en
la espalda del poeta que se aleja caminando. Plano frontal, la lanza le ha atra~~­ Técnico de efectos especiales de películas buenas y malas -'-le debemos,
sado el cuerpQ~ le sale por el peCho y él cae susUlTando: «¡Qué,horror!». Tamblen entre otras cosasjel suicidio de Le prdisir (1952), de Max Ophuls, o cómo tirar
(
en este caso ,el rodaje,estuvo"sel'i:¡]5rado de dificultades'matenales, los arreos de una cámara al vacío, y el 2 CY. que:,.sehunde como se deshoja una rosa en El
Minerva, el lanzamiento del venablo, etc."y del suspense inherente a los efecto~ hombre del Cadillac (LeComiaud, 1964), que consiguióGolocandocuatrocá~
especiales: ¿funcionará en la pantalla? Sin embargo, la idea ~e esta escen~ es la maras.en el mismo ángulo con objetivos distintos, de forma que hubiera planos
aportación del sonido:, el lanzamiento del venablo s~ acompana .con el rugIdo de más o menos amplios-, Pierre Durin se·vio enfrentado a la resolución denu-
un avión al despegar, avión que en una escena antenor ha ,anunciado ~n~ ·azafata. merosos problemas de encuadre. El propio oficio de operador de efectos espe-
De, esta manera, tenemos tres transformaciones de ideas, una plasticamente ciales se enfrenta cotidianamente al paso de 10 real (trucado)a lo encuadrado~ ,
('
en planos y raccords, la otra encarnada grac.ias ála interpre~ación de los actores Cada punto de partj.daconstituye un resultado visual deseado, la petición de .
(. y la tercera que pasa por el montaje de una Imagen con somdo. talifecto en la pantalla. A menudo, la dificultad es fruto de la vague~ad con que ~ .
se formula la petición, «Cuando lo hablan, cada uno de,los dos interlocutores ve"
(
LO REAL,tO ÉNCUADRADO 107
;J06 EL ENCUADRB'CINEMATOGRÁFICO
.l,

la'ii#agen final de forma distinta, Se puede explicar uno pordibujos ,pero no de Barbes janiás hubiera podídoes~artan presente. Para obtenér ésa presencia vi-
son. ~a imagen def'lliltiva, máxime cuando está animada.--Ctiando uno explica io sual hubo que deformar el plano:-del decorado, no bastó con limitarse areprodu-
qüe dese.arí~, tiep:e una idea' de la imagen, pero no la concreta; y su interlocutor cirIo. Por lo demás, un decorado jamás es una pura reproducci6n.Muya menudo;
~n este caso, yo~ debe tratar de acertar, de realizar lá imagen, que sigue en por ejemplo, en la realidad las cosas son demasiado grandes, deberíamo,s alejar-
mi cabeza" ¡pensando que yo 'pienso que eslo que él piensa!» nos mucho para verlas, mientras que en la pantalla se redl,lce laescala, en la ima-
No se pued~ mostrar lo que,' saldfá en la pantalla antes de rod~~(),&i',después ,,gen seconceJ;ltran mUltitud d~ elementos pequeños. Por otro lado,Ja"re.cpnstruc-
yaes·deIIlasiadotardé; han derribado el decorado, los actores se hanido,~tc. éi6n ofrece la posibilidad de escoger los elementos de lo real dispersos en cafes, .
'Una vez ql:fé:se h~yásuperado esta primera dificultaq, háy que,.asegurar la fil- calles, interiores, Yunirlos en reconstrucciones concebidas para ser filmadas. El" ¡,
maci6n del efecto ;e~i?eciál, ya. que éste s6lo' existe filmado. Aún queda saber y París cinematogratico de Alex.andre Trauner es absolutamente admirable. Este
polier enc~adrarlo, que. sea encuadrable. Obvüpnénte; la cuesti6n de la 'no en- húngaro mostró París mejor de lo que aparece en muchas películas rodadas por
cuadrabilidad no ,se pl¡mtea s610con los efectos especiales. El objetivo por una parisinos el:1 esa misma ciudad. ", ,
, parte y el decorad6por otra imponen múltiples tensiones. Lo advertimos euan- Se construyen decorados para el cine, en estudios99 o en exteriores -CQI~S­
, }~o tomamos fotografíás. Ya sea de'un paisaje o de un acoJ;l~ecinúento, U1;Ul foto- truir un decorado' que corresponda a' una frase délguión enunplat6desnudo~,
. gr~~a pu~de r~~tituir el recuerdo aunque, a menu~~no pued,7 ieprodri~~ ~~sen~ porque el cine es realidad reconstruida para la pantalla; Un 'elemento puedena~
saClOn de cOIlJunto, la verdad de un momento o uii lugar, de un modo distinto a mar la atenci6n del iealizadormientras hace sus localizaciones' la torre Eiffel
una postal que hemos visto mil veces, Un estudio sobre l~s postales permitina por ejemplo, que supondría Pans en segundopíano. Pero, enla ~antalla, latort6
preguntarse sobrela repetitiv,idadde algunos encuadres y, sobre todo, por sU Biffel se verá mejor si la ~scena ha sid~!odadaen.estUdio~ y eso es lo que im-
, I
origen. Evoquelllos sencillamente los primeros planos de ramas encuadrando la , porta: lo que queda. ' " " , " '. ':, '
lejanía. Es porqüe estamos acostumbrados a ver lospaísajes dt(SdeelmiSIn0 án- , Un decorador sabe lo quequedllde UIl óbjetívQ; en35mm,porejemplo,los .
. gulo, pero la búsqueda,delángulooriginalconduce a un resultado idéntico, sise de 25; 28, o 30 deforman poco las' proporciones de los rostros y lo~ tnovÍInieil~
.juzga por la cantidad deaguj~ros, orificios, acantilados e~carbados o grutas en- tos. Para saberlo, aveces utiliza el método de las «operaciones» que, tal como
treabi.ertas que aU~9riz~~1:puntod~-vísra.¿ O es,p9rque los 9!>j~tivo~; n.9 ~uy me exp~~~,!acques Saulnler,loo consiste en remitirlas lín~ashoriiontale&-ylas
objetivos 0, por él contranof'6remasiadoobjetivos, traicionan nuesttivision?- verticales de los dibujostrazad;os a un cuadro. O también; djbujarmique~s sin
preocuparse por la realidad de las perspectivas y entonces, a partir de esasma-
quetas,deducír elplano,las alturas, mediante una operación de geometría des-
El decórado, urta reconstitución criptiva bastante sencilla. Eso es lo que, solía hacer AlelandreTrauner y con
ello conseguía un planoabsolutamenteiqéal, ya que;dabalaperspectiva que
En el cine, la cuesti6n'de loslímítes del encüadre se plantea,a.ún más,níti·· quería al dibujo, ala imagen y 'a las líneas. La;sfalsasperspectiva..<; de los techos,
damente que en fotografía, aunque s6lo seá por las dimensiones de la cáInara" por ejemplo, dan la ,~ensaci6n de lugar mucho mejor queias alturas reales, que
.que imponen una: díst8ncia míniIriade un metro veinte entre el objetivo y la es:' no tienen en cuenta el formato fílmi'co. . '
palda del cámrua.,. "., ,;" ' . ' . .. Hay que sabeH¡ue todo lo que nQ mide éntre 1 y '2 metros SO no saldrá en la
.. Poco impo,rta la tJelleza o el interés del lugar si no aparece nada en la panta- pantalla; Para ,dar la sensaci6n de altura hace falta distancia y ésta se co~sigue
lla. La arquitectura de la ciudadpla del campo no está concebida para las imáge- , reconstruyendo los lugares. No hace falta ser matemático, el fot6grafo' aficiona-
nes que se puedan sacar de ellas. De vez en cuando. por supuesto, algunas imá- do sabe, por ejemplo, lo complicado que es encontrar ellugardesde el que se
genes se elaboran a partir' de ellas pero, ¿no es más fácil reconstituirlas para verá, en el mismo encuadre, la sala de la'boda decorada por la abuela,. el rostro
ponerlas en imágenes~jncluso si se trata de un decorado realista? Citemos Un . emocionado de la novia, el testigo, porque resulta interesante, y el fondo del co-
ej~mplo famoso de esta recol1stifución-réconsl111cci6n para el cine, el de Portes
99. Estudio: en Hqllywood, la palabra significaba tanto,talfer de rodaje como gran prod\l~tora
de la nuit (1946). Marcel,Carné le encarg6 unos decorados a Alexandre Trauner cinematográfica. . __ _ . '
,que los espectadoiés no veían~-Ésros.a3ícomo los productores de la película, pu,.. 100. Decorador de las películas de, Resnais: El aiío pasado en MárienbCui (L'année Clerniere a
dieron tener la impresi6'!l de que ese trabajo yese dinero, empleados en recons:: Marienbad, 1961), Mudel (Muriel ou te temps d'un retour, ]963), Laguerra ha terminado{La
truir un lugar que hubiera bastado con filmar, .puesto que ya existía, habían sido . guerre est finie, 1966), Stavisky (Stavisky, 1974), Mi tEo de America (Mononcle d'Amérique,
un puro derroche; Noobstante; fotografiada en sure'ali~adtla estación de metro 1979), La vie est un ronuzn (1983), entre otras; .,'.

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EL ENCUADRE CINÉMATOGRÁFICO LO REAL, LO ENCUADRADO .~


108 "

rredor; con la vidriera y el jardín, en una sola foto; finalmente habrá encuadra-
doelfº§1~Itde la noviayJosdemás e1e~~ntos s~lct:án más ~ men?s borrosos.
Para inscribir la realidad en el encuadre de un.objetlVo, lo mas fácil es recons-
truirla.· Ciertamente, en fotografía se pueden aislar los. elementos, las «instantá-
neas» una tras otra. En el cine, como los..personajes suelen moverse, se tienen
que desplazar con eficiencia en' la imagen. Concretámente, el guión dicta el re- '.
comdo de los actores, trayectoria que impone el plano de un apartamento y ~e
su mobiliario más importante. Si un actor tiene que ir de una puerta hasta una
cama, el emplazamiento de la puerta y el de la cama son más importantes para
laescenografíaquee1 estilo de los muebles.

(
(
de la pelicula de Jaeques Feyder Une femme disparaít (1942), ,cuenta· que éste te.,
nía una foima muy personal cíe darle las indicaciones de decorado a Meerson:
«Feyder s6lo dibujaba lo qu~ necesitaba para la escena, un íavabo,una puerta, una
.."
"i ventana, nunca el cuadro de la habitaci6n, e~cuadrado que todo el mundo suele di-
bujar para esquematizar Una habitación, yeso permitía que el operador dispusiera
del plató tal COmo lo entendía, teniendo en cuenta sólo 10 rnás.oimprescindible».lOI
Hay otras concepciones del decorado cinematográfico. Godard, en general,
adapta sus decorados, normalmente a partir del natural, a sus encuadres, y elige"
dentro de la realidad lo que es cinematográfico: rostros, paredes, .terrazas, co-
Decorado de Percevalle Gallois, de Eric Rohmer{foto: Alain Bergala) ches. En El desprecio? por ejemplo, filmó la torre de Malaparte y el mar en Ca-:- "
pri como si fueran lienzos; la verdad es que elmar estaba realmente plano.
Si la acción. de una película como Muriel, de Resnaís, se desarrolla en un La Nouvelle Vague llegó a tiempo para otorgar rapidez y ligereza al cine.
pisomodetno, lo mássencillo para reconstruir un volumen será reconstr~r el Una de sus rupturas importantes consistió, en aquellos tiempos (principios <le
"lugar. Se deformará el plano ~eal,para que la sala de est~~_~parezca en la Ima- los sesenta), en rodar lejos de los estudios. Ya sabemos láiíilluencia que-tuvie-.
gen y se intuya la acción que se desarrolla al fondo, en el cuarto de.~año.1'atI1- ron los decoradores en las películas y su découpage en Hollywood. Elia Ka.zát1t
." biénhabrá que construir puertas más anchas que las reales, para faCIlitar el paso por ejemplo, consideraba que uno de lps motivos porIos que fracasó una de sus.
\ de la cáIllara. . primeras películas fue que permitió qt:té los decoradores lo oJ,"ganizaran todo. La'
( . "Claro está, que no se trata, y cada vez menos, de preverlo. todo sobre. el papel: . película se. titulaba Mar de hierba (Sea of Grass, 1947) y KAzán no "io ni b lIlás
ELdecoradorMax Douy, cuando realizaba los découpages técnicos de 1~ pelícu- . pequeña brizna de hierba durante todo el rodaje .
. las de Autánt-Lara., pensaba en todo. Construía sólo el lado de la pared que iba a Hoy en día -tras quince años de cine modemo- asistimos al regreso del
. .. sálir en el campo, método que sin duda heredó de su maestro, Lazare Meerson. y .
. .' apasionante en relación a la problemática del realismo. Michel Kelber, operador 101. Le Cinématographe, n. 68,junio de 1981. ..
l.\Q EL ENCUADRE CINEMAT09RÁFICO
;~~.:
cin~' «4e la falsedad'de las apariencias», 102 que reconstruye una cárcel turca en 6. Composición,descomposición
Fnmcia (Gúney), !.(usia en -Italia (TarkovslG.), Java en Nueva Zeland(i (Oshima),
VietnáÍn en la'Portede la Villette (Lam~U). unaesta~ión ~ntro de varias (CÍlé-
(
reau); sin duda; el campe6nde ~ste llusioQisrIloes R~líl Ruiz.
, De cualquier modo, si 1~ realÍdid no es lo que se yeen la ~agen, la realidad
de los rodajes existe en tánto que It).orneIlto de la corifrontación del realizador con '
'tI dinertl;'los lugares:'¡i{gente, los téCnicos y 10s.act(jres: 'y,así comóJiaydeco-,
rados naturales, tainbiénhaypefsonajés natu;ales. La: expresión es, José Gio~ ae
vanni ~ferida a: la película de Jacqués Becker La ev~ió~(4trou: 1960). Becker
recortó' una Wormaci6nde un periódico sobre ,una fuga, frustrada en elllltimo
momento. José diovanni, "lnodelos protagonistas de este sucesQ,'escribiQ un li.., .
bro sobre los hechos diez años después de que. ocrinieran.PostériOnhente, Bec;"
: ker y Giovanni trabajaron juntos en la adaptacion cinematográfica de ~ta,histo,.
riá. Giovanni presentó a otro de los protag'ónistas r~esde la historia. Becker y a (.,
éste decidió que ~<actuaraÍl». " , . ' ':. í~·., •
Al principio de ~ª película" una escena muy corta nos lo muestr3;reparando
un 2 CV; sin abandonareseiní~mo plano, avanza hacia la cámara limpiándose
las manos y dice: <<Laqué'voyacontaros es mi historia». En el segundopláno '
. ya f;~()S en la. cárcel, de la. que prácticamente no saldrerllÓsnun<1a" con sus
'ciiatr? aInigos.Entra. el qt4nto; el que seráéltraidor. Sé han hecho todas (aspre-
:'Sentaciones,A parti( de entonces Bécker deciQióródear a este hombre de «per-
sonajes natlJIaJes», eh realidad actores que empezaban, como por ejemplo Mi-
- chel Construiun.. ' ,..",.' La Íibertad c0':1cedida aJ. actor, a lavidadentrodelplano,ásí como el ~ligé,"
-La p~lícula es, eÍltreotras tosas, un documental magnífico '-COmpleta- ' ramiento de la técIÜca,coinportaron a veces exigencias mínilnaserl lo relativo
. II1enterec;onstruido~ sobre las hazañas' de una fuga, el trabajo que eso supone a
al encuadre. Álgunos cmeastasestán empezando pensar que hoy en día
ya no
y los sistemas que hay que utilizar. así como el'ambiente de ilna cárcel: el agu~ se sabe eucuadrar, que Douarinou tenía el. sentido del encuadre de O¡:ih~Ils y que
jero en el que uno está preso, el agujero que cavan para poder fugarse. ¿Porqué esta clase de colaboración se perdió con ellos. Otros,Jos máS, piensan recuperar, ' '
será que el detalle es siempre tan justo en las películas de Ja~ques Becker o en el rigor de la fIlmación impoméndose un cierto estatismo de la cárriara. La pre-
las de Jean Rep.oir? gunta que se ,planteó Martin;Scorsese103 para, porejemplo, Efreydela comecfia
(KingofComedy, 1983) es «¿DóIldecolocar la cámara?» 104 y ya no «¿Cómo
moverla?», pregunta que era la de so anterior película, Toro salvaje (RagingBull,
1980), si nCisáte}lemos a los movimientos giratorios en tomo al cuadrilátero~
¿Dónde ponerla cámara. a quién colocar en el campo, dónde debe estar el per-
sonaje, a la derecha, a la izquierda, etc.?
Yel operador RotUlUJ.o cuenta105 que, para Popeye (Popeye, 1981), Robert
Altman prefIrió olvidar la complicada técnica de tomas -utilizó el zoom y fIlmó
con dos cámaras.- para concentrarse en los movimientos 'de los actores: <<Hizo
que se moviera todo.1o que estaba delante de la cámara, pero no la cá~a."~n
j
103. Entrevista en Cinéma-Cinérnas emitida en Antenne 2 el 5 de mayo de 1983. '
I
102. Alain BergÍ!).a, «Le vrai, lefaux, le factice»¡ en Cahiers du (:inéma, n. 351, septiembre de ,104. El cine, en inglés americano, es «the movie» (lo que semueve).
1983, I 105. Entrevista enPositif, n. 266, abrilde 1983.
I
,1
&

112 EL ENCUADRE CINEMATOGRÁFICO COMPOSICIÓN; DESCO:tdPO~ICI6~ 113


El arte de l~composición'

Eterno retOrno del péndulo: movÍnÚento dentro del plano, movimiento


de laCálllara,movimiento del zoom, Illovimiento del montaje. ¿Habrá llega-
do la llora de releer:, a Eisenstein y aprender de nuevo el sentido de la composi-
, cion?' , ' ,
«El arte de 13; composición plástica consiste en llamar la atención del espec-
( .
tadorhacia la misma dirección y el mismo orden des~ados por el creador de esa
composición. Esto se aplica tanto al movimiento de la mirada a lo largo de lasu-
perficie de un lienzo. en pintura, como sobre la superficie de.la pantalla en el
casó de la imagen cinematográfica. (... ) Con un reparto SIstemático delas man-
chas, de líneas O del.J1ovimientos se puede ejercitar el ojo para una lectura vér,,:,
tical o en cualquier otra dirección deseada.» "
,Eis,énstdn componía antes, durante y después};lel rodaje~ ,El montaje de-
sempeftaba un papel preeminente' en su cine, el enC'lládre era una célula tan va-
,liosa que estaba: dispuesto a superar todas lis dificultades que pudieran aparecer
con,~uoperador:Ti~sé, e inc1usO"soportar el martirio 106 que suele suponer la bús-
queda:~el emplazarnient04eJ~. cáInant. -deIa,dfst~ciá;.delángulo,de la altura,
delobjeÜvo.Queriaenc:ontrai:lainá.xlliiaexpresividad, launiversali4ad de la'
( , imagen detrás de la'represent;acló1,l d~l fenómeno filmado, y lograba esta uni.;
( vershl,idad calculaI)do eLericuª~~; elipiendo el ángulo de filmaci6ny compo~
nier.z49 el lienzo dentro de lafuttita pantalla. ' ,
'A'Veces,todasesta.s operaciones le obligaban, a alargar,los largueros del trí-' él-y como God3r~, unos locos de la meteorología a la~h6s~ueda de una
pode de la cámara. después a acortarlos, verificar repetidamente en el visor y nube perdida o de una deternñnada luz; " . ,
probar toda la gama'deobjetiyos;filtrós, etc. , ' ¿En qué se 'asemeja el cine a la pintura, aparte de en el sentido· de la com-
, De niodo que',no:e;mlta s()tprendente que envidiara la libertad del dibujo,' posición? ': '
animado, en el que secreantodoslos contornos que se necesitan para las histp- , La pintura y el cine también tienen en común con la fotografía el hech6 de
riasque se quieren contar, y quelamep.tara,qu~ el cine natural fueratributarlp que ~acen fIgurar ~uerpos dentro de espacios delimitados por un marco. 107' y
de la realidad, por ejemplo d~nlna nube que formaba parte de la composiCión de precIsamente, Andre Bazin de~ó el matco del cine a partir del marco de un cua~
dJ;0 y los opuso en térininos ya célebres. .... :
-, .
un plano de Bezhin Ludy que el equipo de rodaje, un día, tuvo que~sperar mu-
cho rato. Cuando por fiIl aparecía la nube, tuvieron que' montar 'de nuevo~ y, a
tóda prisa, todo el material que ya estaba guardado. Rodaron cuarenta tomas
malas, malas por culpa de la ausencia'de'la nube,. El cuadro como ocultador
Esta hi&t\:}fia~de lánubepuedeevocar la película de DanielleHuíllet y Jean-
Marie Straub; Tróp tot, trop tard~ En Bretaña; donde la luz cambia particular- «L~ R~.!.~~ no es un marco como el de un cuadro, sino un' ocultador qti~ "
. mente deprisa, el rodaje consistió --:-una vez que hubieron encontrado el empla- sólo deja percd5rr una parte del acontecimiento.» '
zamiento de la cámara al milíínetro:- en esperar una nube, un soplo de viento, . André Bazin se basó de un modo privilegiado en las películás de kan Ré~
Un aguacero,. los únicos actores de suspaisajes.Troptót(demasiado pronto)~ el nOlr par~ demostrar esta teoría del encuadre como, ocultador. Según éL el ~n­
rayo de sol se ha escondido; trop tard (demasiado tarde), ya se ha ido; Si Jean- cuadre cmematográfico sólo desvela una parte de la realidad representada, rea-
MarieStraub se parece a Víncent Val1: Gogh, no todos los cineastas son, como
. 107. La~oc~ó~ de marco remite.~n primer lugar, a la arquitectura. ¿No definen algunos ar-
qUltectossu dlsclplina como el arte de Imponer marcos a un tenitorio?En este sentido una pared
106. La expresión es de Eisen5teÍ11. es un marco separador, una ventana un marco selecciQnador, dentro del conjunto arquitectónico.
ELENCUAJ)l{ECINEMAíOG~CO ' COMPOSICI6N, DESCOMPOSICI6N--

Pollock, es una de las más ·representativas en este sentido. Sin embargo, Van
Gogh ya se· preguntó cómo-situar su caballeté para. poder pintar un sol po- .
niente ,lOO .
(

¿Désc\?mpostción?

La historia de la p~ntura occidental nos muestra, asimismo, que es imposi-


ble reunir bajo un mismo término, que sería el de c01nposici6n, la multiplíci~
dad 'de elementos que los pintores han: descompuestoy vuelto a componer. Se- (
gún Deleuze,l09 eStos elementos descompuestos y recompuestos (por ejemplo
la descom,posicióÍl yh\ recomposición de la profundidad en la pintura del Re-
nacimiento, la descomposición y recomposición del movirnlento en el cubis~
mo) son deformados bajó la acción de una fuerza, y el arte (la pintura y tam-
bién la música) consiste en saber captar fnerzas. Esta captación 'de fuerzas
parece poder definir igualmente lo que sucede en el cine 'con las tomas.
Louis Hochet (Tropttit, irop tard)reeScUchatidouna'toma (fo~:Caroline é~tiei) Los elementos que el' encuadre cinematográfico compone, descompone y
la
recompone son como, por ejemplo, en pintura: luz, el color, los distintos lu-
lidad que existe fuera del encuadreque.se ha reallzadoapartir de ella.Alcon-
. '" trario que el marco deLlienzo. que poliu'iza d espacio hacia dentro ylo corta, de,
,la realidad.·qu~ represéiitá~lapantatla escentrífúga: «Á menudo se ha as~ado
.plásticamente la pantalla al marco de unlienzo Y•.clr~mátiCam.ente, al'escenario
'de Un teatro; se-ordena la materia de la imagen ~nfancióIi de estas dos .refereil-
, cías y en rela.ción a los la,dos del x.:ectángulo. Renoir. pore1: contrario. entendió
, petfectamente que la pantalla era sólo ei espacio homotético del borde ocular~
",' es decir, todo lo contrario de un. marco: un ocultador cuya función·no es otra que
la de sustraer la realidad a la mirada en lugar de revelársela; lo que enséña saca
provecho de lo que esconde, ei testigo invisible de la pelicula lleva ant~jeras,
su ubicuidí;ld ideal' está temperada por el encuadre, igual que la tiranía puede" es-
tarlo por el asesinato», . '., .
Esta teona,de Bazin, muy útil.paracomprender el funcionam1ento del en-
cuadre cineniatográficó, la diferencia de su naturaleza y de su papel en relación
a los marcos de las demás artes, no se puede aplicar a todo el cine, En las pelí-
. culas de Ozu, por ejemplo, no hay nada de la escena que se prolofi:gue más allá \
del encuadre.
Por otra parte, la píntura se ha transformado y una de las grandes rupturás
de la pintura moderna. con la antigua es, precisamente, una liberación en rela,..· lván el TerribÚ,de S.Mj~isenstein
~ ción ala forma de marco que implicaba el caballete. Los pintores han intenta.-
do, de diStintas formas, romper conlas·limitaciones del marco tradicioiÍal, la. 108 • .N1eI!cior~o por Gilles Deleuze en un curso en elque habló del hundimiento gene~aliza­
--~.
.enmarcación y :ós bordes del cuadro y con la ordenación intemaque~egplí;l':
. , do del eje vertical, (;anlcterístico de laerá moderna•. y del que se encuentran manifestaci()nesen .el
arte (danza moderna, Beckett. Michael Snow) y también en los depones y en las nuevas. enferme-
ba la COmposiCión, simétricamente yen profundidad, en relación.a iÍncentro. dades. ' . . . . .
El action painting, la pintura sobre el mismísimo suelo, all over; de-Jackson 109. Francis BacOIl': Logiquede la seJls.at¿(m, Éditionsde la Díf"fércrice,1981.
$" •

EL ENCUADRE CINEIvJATOGRÁFICO COMPOSICIÓN, DESC()~SICIÓN 117 :


•. l .; ...

_" En su peIícúlaNuméro Veux (1975), Godardescoge el ejemplo del río. Es-


tán los bordes del no, sus "alrededores, las" orillas. Siempre se" habla de lá vio-
lencia del naque se desborda~ ¿por qué olvidamos siempre la violencia de·la$ ,
orillaS que constriñen el río? .
( ¿Será qQ.e el.encuadre es opresión en, ambos sentidos~ opresor~oprimido? ,
«Todos los encuadres pacen Iguales y libres, l~ películas no s"onmás,que lahis-
í
toriir;de su op(esiQn)>,,-ei;cri,be enotra p~rte.lH, ' . "'. "
Mai'gi!erite"Dura,s'también se pJ;eguntóacerca de los límités, de Íos bordes
y de la masa del tío~ en:~u película Aurélia Steiner Melboume(1978-1979):
«Los tópicos soninevitabléS. Le dije a Pierre Lhomn:le que"el Sena en síno
significaba nada, qúette!Úamos que·filmar sus bordes. Así es como perdimos
un día entero del rodaje.. Estuvimos todo un díade tomas. Las imágenes cap-
taban demasiado lo que había en los bordes. Aparecía" un poco el Sena pero, ,
sobre todo, las riberas. Mientras que 10 que 1iecesitábamos, y fInalmente con-
seguimos, era el Sena lleno, en su masa, en la totalidad de su volumen.Y des~
pués, pasara lo que pasara,-todo lo qu~ se presentara entraríaenlapelicúla, pa-
lacios, la to~e Eiffel. el Louvre, Notr~Dame,e~trel1as, guitarras,,, gritos; los
( . . - -
senderos de la orilla, la noche, las luces. El.ejedel agua era elejecte 1~ pelícu-:-
_J1:1Ó"a.r~sde las distintas figuras (en el campo), su proximidad, presencia1 nitidez á
( ,"",.. ",," , "" e

-, 's~~:hlejamiento! su flou, el juego de los primeros planos y los segundos planos la: Y l~ película consistía en la coincidencia entre estos" dos ejes. Las orillas
'"
(enelplano), de los fondos (el decorado) y de la superficie (la pantalla), d~ los constitu~an, una pelícúla completarn~nte distirita, una peUculasobreei no y no
Pllntosdefugay de los puntos de vista, de las direcciones de la mirada, deJa re~ sobre la muerte. Debo añadir que el trabajo de Pierre Lhomme no sólo es muy
hermoso también es de una profunda inteligencia». 112 "" ,
IactPfi con el espectador, etc. ,,' t

. Hoy" por hoy, Raúl Ruiz, y particularmente en Les trois couronnes dii mate- De este modo,.,podemop habÍar de la presencia del agua en tal cineasta, de la
10((1983), sigue de fomla sistemática úna labor consistente en establecer los relación del água con el cielo, del agua Gon la tierra en tal plano o tal secuencia
elementos problemáticos de la visión y en tomar estos problemas como punto -en la última parte de Paisa (1946), de Rossellinl- co.mo'de un lienzo de Tur-
ner t por ejempio. - .
departida de sus ficciones.
" Imagina nuevasrelaeionesentre el color y el blanco y negro, entre los prime~
ros planos y los planos gener~es en encuadres absolutamente no.;convencionales
, " (primeros" planos de" una mano sujetando un cigarrillo, de pies de marineros ba- La acci6n direcÍ1\ en el arte
.... ,.
hlnce~doseentredos literas, de piernas abiertas por entre las cuales se puede ver
él 'fondo de una escena, etc.), entre los"movimientos de cámara y los rq,ecards" Si algunos cámaras piensan que su trabajo nó tiene nada que ver con la pin-
(movimientos que básculan, que se invielten, en absoluto horizontales, etc.) tura y que hay que abstenerse de a~milaciones abusivas, otros consideran, por el
, Se pregunta y hilla la respuesta a cómo poner un objeto ante la fárnara, contrario t que él conocinúento de las artes plásticas es imprescindible. Douarinou
" cómo introducir un personaje en un iugar,.perderle--y-e~eontrarle de ,nu~,vo con insistía mucho al respect? e incÍtahaa los esturuántesdel·IDHEC, a los' que im·
un único movimiento de cámara, cómo filmar paisajes, el mar, por ejemplo, que partía claSes de eilcuadry~ a visitar los museos. Afirmaba que podría se~ guía del.
exigen que se cuente una historia a partir de ellos para que se les muestre. Y Louvre, de tanto como lo frecuentaba. Se itispiraba para suS encuadres en Jos pri~
'pienso que, efec~valIlente, en el cine los paisajes plantean auténticas preguntas·: meros planos deDelacroix o de Ingres, en los paisaj~s de Cézanne, en las sime-;
de encuadre. ¿Cómo pueden un paisaje, el ambiente de un paisaje, el ambiente trías de Magritte y en lo que podía leer en laS Ílistorias del arte. Se" suele cQ.nside-
del que lo filma; i 10 imponer un" encuadre? ¿Cómo encuadrar en el cine los ele,. rar que la noción de composición implica un estatismo incompatible cOn el cine,
méntos y sus límites? " "
111. Iniroduction aune véritable histoire du cinéma; Albatros. 1980.
112. Les yeux verts, número especial de Cahiers da cinéma, n,. 312-313, junio de 19:50.
-110. Admirables paisajes de Jean"Rouchen Jaguar.
C()MPOSIGiQN~ DESCOMPOSICIÓN 119

-"qué es i:novirniento;~Nóe~-así en absoluto, por el contrario, la p4ttura-'~úgiere un He aquí algunos ejemplos de traducción de la5deade equilibrioAe Do:uari- ,
movirnieÍlto, unritmo~uñ.~uilibrio o un desequilibrio. Y si a menudo" 1á luz de- nou al~ práctica. En el ertcuadrededosprimeros plan9s sucesivos deX yder,
sempeña' un~ tbncíón'directiva, la disposición de los elementos en elencuadre es la neceSidad de desencuadfar al máximo aXh1;l.cia el interlocutor Y,de (iejar
de una gran importancia Citemos brevemente llnejemplq sencillo apuntado poi aire en dirección a la mirada de X, le parece e-videlite, Co:rrro X· vaa dirigÍr sus
Ren~ Huyghe, la diferencia entre el boceto yel cuadro de De1acroix titulado La palabras a Y,convieneencuadrar a X a~ind~ 9u~ y tengaespac~o parae~trar
b~bJ.ille 'de Nan:cy. En su ,versión' definitiva, una iglesia (vertical) del fondo a'la , en'laimagen. En un plano siguiente, menos apretado, Y entraráefectivalIlente ~n,,' •
iiquierdadesapareeey .sólo,pennanece la línea del horlzonte(<<bajo y pesado»).. la imagen, el cámara ya tieneprevi~to su lugar en el encuadre. ' ' . , ,: '
" En el encuadre c~ne~a.to~¡ffico, ~p~én ,llay q~e saber sUl:rlmir, e~~g~rJo,~ Asirnismo~ asu entender, en un desp1azatriiento delpersortaje, el que tiene
elementos esenciáles,)i:eblos::visto que 'el. cip.eüripónec'bil graúp~iPL;ip'i,o,:',~ii1~J~ " que conducir al mismo es el ellc~adre: «Siunpersonaje va de la dereehaa laii-'
imagen esté organizadá~ ~t1 funciÓn de: lá' reStltudon 'qúe se dará "en -Ía 'pantaUá... quierda, yo estaría dispuesíoadeJarel máximo de espacio a la izqui~rda; es de-
Con todo, las reglas de'laperspectlva tradicional determinan también 1áesceno- Cir, delante del pers oIlaj e, para que se vea hacia d6ndeva. Cuando tengáque pa-
gra.{íacinematográfica y se sabe, por ejemplo', que Eisenstem se inspiraba en la rarse, trataré de llegar antes que él para que ~ sitúe de nuevo en el encuadre,
famosa sección áu~ea, cuya presencia es notable en el arte de numerosas épocas, que dé su último paso solo y se ponga en ellúgar adecuado del encuadre».
empezando por la,aIltigüedad'clásica.Veamos su de~~ción en unTratad(j.~e la , .Un ejemplo',de cQntposición: cuando el cámara podía, le gustaba ~ejru.:aire ' .
divina proporción, publicado'en ltaliapof¡:<'ra Luca Facioli di Borgo a principios encima de los personajes. Un realizador como Mareel CaméprefeIja, 'pon~l :.'
del sígloXVI: «Está proporci6nes talque, aplicada aunrectángulo, pondrá al ,contrário, que los'primeros planos fueran a ras de encuadre..Una. experiencia
Jado pequeño, con respeétóal gr~de, en un~relaCi6n tal que se revelará:idéntica peligrosa porque si, durante1aproyecci6n, la paÍltalla de la sala es un pocO más '
entre ese lado grande y e!coJÍjunto delosdos~,Asípues, la sección áurea ofrece esqecha. se corre el rieSgo de cortar las frentes. .',
eSta particularidad;' distinguiéndola de,las proporciones simples establecidas Raoul Coutardi el operador, de Alfinalde la escapada, cuenta que la noche,
entre dos tamaños qa;~os; ,e in~grándol,\ ,en,ú#a serie continua»., del estreno de la·película le felicitaron por. la osadía de· sus enc,uadres, de'sus
En realidad, lo~,Cineastas no 'calculan suS plálloscon regla, y cOllipás~El cortes. Corteses el término más adecuado. En realidad, la pelíCl.1.h~ se ,había ro-
rrrlsmo Eisenstein respondió aun:estlldiarlte que le había pregunÚldo si la regu- dado en formato estándar 1,33;--yseproyect6 por_~:9uivocaci6n en una ventana~
laridadde lases'tÍuctur~, deoonip6sici6n de una de St~S pdíéúlasera premedi,.. de 1,66. En los primeros planos se cortaron bárbiHas y frentes. El cáhiarahu-
tada., que eso setíaequivocarse respecto del proceso creador. En primer lugar, la bierapodido ganarse la ira de los espectadores pero, contrariamente, se benefi..;
preparaci6n, el découpagé técnico, por muy riguroso que sea, está lejos dé re- ció de un suplemento involuntario de entusiasmo porlaNouvelle Vague.
presentar la cOnSecuci6ndel trabajo; Además, durante la preparaci6n son pocas
las veces en·las que se plantean los porqués o los cómos~ Las elecciones preli-
minares están «sublimadas, aunque no en una apreciación lógica, como en el El punto de vista
análisis efectuado justo después, sino en acCión directa».
«El artista piensadirectw:p.ente en términos de manipulación i.n.mediata de El término composición pareceuo ser siempre el,más adeclladopa:ra ex;.
. sus recursos y de su matetial. Su pensamiento se sublima en la acci6n directa, , plicar el trabajo de los ¿ámaras.Philippe Brun opina que normalmentesufre l
que formula no con una f6rmulasino con Una forma.» más que compolier, un espacio, que su única libertad consiste en encerrarlo de
Tomemos prestada la expresi6ndcci6iidirecta pata aplicarla al trabajo de cá- 'una forma o de otnl. Asuparecer, lo que importa es el puntó de vista, la dis-
mara. Antes de imaginar o derealizar imágenes, de. adornar con imágenes, como tancia que separala: cámará de los actores. En 10 que a él 'respecta. la, expe-
deda Hitchcock. uri cámara nos6lQ va a los museos o al cine a ver las cOtllposi- riencia le enseñ6cierta ley de discreción: considera preferible transmitir el
clones de los demás. Observa, aprende aver la ciudad, la naturaleza, lós hombres, mismo sentimientodeinterpretaci6n de un actor'sitüándoJa cámarauÍlpoco
etc. Y todos esos elementos, observación de la vida, cultura artística y cinéfila, más lejos .. ' ,
gustos personales, nOrm:as profesionales, sentidos mstintivos (etc.), se concretan . En cine se ,constata, a diferencia de los últimos veinte ~ños, una tendencia a
en el instante en que' el cámara, por. éjeinpr(), centra o descentli1.um actor o a un acercarse, una moda del plano cercano, del prime~' plano; del detalle. La elec~
objeto que se despHíza \coche, avión, etc.) dentro del encuadre. E1análisis surge ciólJ de,la distancia'correcta entre ,cámara y actor, la elecd6ndeunarelaci6n
más tarde. Ala pregunta «¿;Éncuadrausteden función de unaidea de Bell~za?», cuerpo.;.decórado ~úna de las mayores dificultades con las que se enfrentan los
Alain Douarinou respondi6: «No de labell~za sino del equilibrio». cineastas. Manuel de Oliveira,pof ejemplo, querría filmar el conjunto del espa-' '
(
\.

120 EL ,ENCUADRE CINEMATOGRÁFICO


COMPOSICIÓN; DESCOMPOSICIÓN 121

Superfi~ie y profundídad

Así pues, ¿c6mo crear una,re¡;cera dimensi6n"una multidimensi6n, una pro-


fundidad, una aparienCia espacial, una impr~sión de realidad a pártir de lina su-
( perficie? Ésa es la pregunta, con sus posibles vanantesde terminología, que se
hacen los cineastas y los técnicos de cine. Dependiendó de su experiencia y de
sus gustos personales,. éstos contestan: .con un fondo negro, con una masa de luz,
una mancha oscura o clara, un color, un movimiento, un sonido, el fuera de
.campo, e t c . . , .
Jean Badal 'siempre se esmeró, en su trabajo de operador-jefe y de cáma-
ra, por crear una: multidimensi6n en la imagen..Por ejemplo, en la película de
Jacques Tati Playtime (playtime, 1967), utilizó los reflejos~n las ventanas de los'
rascacielos, sus apariciones-desapariciones" cón 'este fin. Otto elemento inte-
resante de la dimensi6n de esta película es su formato. 70nm;i, que permite
que el espectador elija entre 10 que se le p~opone en un ,encuadre amplio. La
actitud más o menos directiva de un' cineasta respecto de los espectadores "
dictamina 'en buena medida la concepci6n de los encuadres de la película.
Róbert Foucm:d filma'Iós fo~oil#s~ la, batalla en Austerl~ de Abel Gance Tati n~:p~etendía dirigir la mirada, la atenci6n. Como, p()r otra parte, én esta
(
do ya iivez quejos acto~1es.tuvi~en ¿~rca,en laitÍtimidad dela cámara: «Es película había, pocos-Íno~itni.e1!!os,4~ cámara, lalabor,de·esc~nografía.con­
( difícil. Están lejos~ los guierQ cerca. EStán cerca, los quiero lejos». ' ' I sistióen organiiar laacci6n dénp:'odelencuadre: Yno,s610 la ~cci6n sino las
Encuadrar es escoger. Seleccionar, resaltarlos elementos significativos con \ "
acciones, dos o tres acCiones en la misma imagen. «Cuando·hagÓ:"im encua-
Íos qúe ~~be quedarse,elespectadQr.' • dre suelo~ncuadrar 4()s acciones;uÍla la enseño alespectadory lahlstoria si-
( gue su curso gracias ala, ~tr~ ·.acc!6n' que, :probable~ente, ~i e'l'~pe'ctaidor
. RobertFou~ard cuenta que un día había preparado un plano cercano, un pri-
., mer plap.o de una actriz para la película de Abel Gance Austerlitz (Austerlltz,
1960), de la que era c~ara. Había iIlscrito a la actriz en Un fo~do de decorado f
!
Imperio, eon dorados que daban cierto relieve al plano. De acuerdo cpn su gus-·
to, era un encuadre acertado, en oollSonanciaconel resto de la película. Éste fue
el comentario que, lebizo Gance: <<Está muy bien pero lo que importa aquí es la
. expresi6n de mi actriz y, si la pusiera usted sobreun fondo negrQ, estaría mucho
, mejor; dada laintensid~d dramática de la escena, elpiíblico no verá lo queus-
. ted ha puesto como fondo,· detrás, a la izquierda, a la derecha o abajo, s6lo se
quedará con la mirada, con la emoci6n de la actriz. Y sise pone sobre un fondo
negro -que no ~ará la atenci6n- el público ni se dará cuenta de que no está
, sobre el mismo fondo que el anteri?r plano general. Est~ f()I!g(), que en cierta es~
critilra podría confumar el impacto de la actriz. preferiría olvidarlo ahora»" .
( ,
El encuadre encierra a los personajes dentro de un decorado, rige las relacio-
, nes en~e los personajes y el decorado, así como laS relaciones de los personajes.
" entre ellos. El anterior ejemplo ilustrac6mo la" expresión de unpersonaje puede
resaltar gracias a un fondo negro, pero también se puecte trear tUl encuadre con
'. una luz. Tomemos el ejemplo de Una rela roja qUes610 se ilumina parcialmente;
'1a parte no iluminada resultará la mitad menes brillante. pe este modo~median~
te la desigualdad del brillase crea pn encuadre sobrelamisma superficie. '
ELENCUAURECINEMATÚGRÁFICO COMPOSICIÓN, DESCOMPOSICIÓN,_, 123

., haya percibido. Com¿ expresión es más fuerte que si h~go un primer plano.»l13 ,dad de campo y tengo la. irhpresión de que esta nitidez es m.uy agradable cuaÍl~ (
Playtime era realmente la película' que se correspondía con las. ideas .' del do· proviene de un objetivo 'que la posee' de nacimiento,rrÍáximesi es debida a .
(
operador-jefe Badal. un objetivo poco profundoque~ayasido diafragmado». ,... . ' . . :..
. Hemos visto cómo, e¡;¡ cierto modo, el precursor de un c,ine que prima la li- El encuadre es. ,el fragmento de espacio ~elimitadoporel objetivo, el que s~; .
bértad de los actoresfueJean.,Renoír. Constatamos que,entodas sus películas, verá en la pant~Jla)su-profiindidades úna cuestión de nitidez; La profundidad de
esta concepcióri del cine le llevaba a encontrarlos medios para vióíár el límite campo es la zona quevadelomás cercano alo más lejano de los objetos nítidos
del encuadre en todos los séntidos: en profundidad, por la profundidad de cam- 'representados. En,losinicio~d~1 cine. los. objetivos' daban una gran prOfundidad
po; en anchura, por los moviníientos de la cámara. En todas sus películas) y gra~ 'de campo, notable, p~r ejempÍo, en todas las películas d.e LoúisLumiere (J/ arri~
das a medios distintos a los formatos panorámicos, tenemoS lá sensación de que . vée d'un train en gar~, 1895, entre ottás),de FerdinandZecca odeLouis Féúilla-.
se ha dilatado la pantalla. J14 ' :'de. Por aquel eritonces la nitidez era él abecé de los operadores.y la profundidad
resultante de la técnicaforinaba parté dé los códigos de la repreSentación clásica
i

occidental,píctóricos,oteatral~s. Por atraparte, secorre$pondíacon lo que los .es* .


pectadores esperaban deldne: ia reproduccf4ndela realldad.L,a profi.mdidarl· era
uno de los escaSos factores de credibilidad de lá.imagencinematográfi,ca quejos
.perfeccionamientos ulteriores, de 'la cámara vendiían. 'ateforz#.ll~ M:0vimientos
de cámára, sonidosy'colóresdarían más'relieve a la süp~rfiéie:de !ap~tallaque
la profundidad de campo;Pot otra parte, la fecha (1927) elel paso de la película or~
tOcrOmática:á la pelíct$ pancrOmática (que ofrece una ventaja de fidelidad a los
colores naturales) Y, del mudo al sonoro «<La sensáción de realidadpKocluc~da por
el sonido hace qúe los medios i~IÍicos sean más desdeñables. La pr9Í\1Il,didad in-
sondable de ía presenda parIañie sustituye a la del campo>))li6 coinda.~'conel ini-
'. do de un período muy largo de desaparición de la profundidad de Canipo. .
Exceptuando las películas de Rertoir.~13()udusauvldes eauxl1932),por'
:.ejemplo,·y Una partida de cam{u} (Partiedecampagne. i9S6)..c...., 117itaprofundi- '
. dadde campodesaparece totalmente en las pantallas liS hasta 1941;f~cha d~ies*
treno de Ciudadano K a n e . · .
, . Efectivamente, Orson Welles"GúntO a los operadores Gregg Tolánd para
. Ciudadano· Kaney, Stariley Cortez para El· cuarto mandamiento. [The Magnifi-
: centAmbersons. 1942]) fue el que recuperó la profundidad de campo. Profun-
didadque afirmaba que, en SU,S priIneros. tiempos y en' primera instincia, ,co~ e
rrespondía a su visión exacta, ala forma en que los ojos veij las cosas y qúe, por

Veamos lo queescribió,Renoir,ya en diciembre de 1938: «duantomá.s liS. Perfeccional;nientosque,según algunos cineastas (Orson Welles), harfanretrocederel '
avanzo en mi oficio más me i~clino ahacer una eseenógrafíaen,pro.fundidaO en cine otro tanto. .~~ .'
relación a la pantalla; Ycad~ vez remlllció más a lasconfrontáciones entre dos 116" Véase Jean-LouisComolli,«Techniqueetidéologie»,Cáhiers dU Cinéma, n. 233, nO-
viembrede 1971, y André Bazin, «L'évolution du langageeinématographlque»,Qu'est-ct que le'
actoreS situados rígida.rÍl.ente.ánte la cámara como si estuvier~:aI1teunfot6gra:- .' ciné~?L Éditionsdu Cerf, 1972 (trad. cast.:¿Qué es (#1 CÜW? Madrid,RiaJp, 1990), cuy,asJe:'.
fo. Situar más libremente a riiispersonajesa.distancias cllstintas de lacamara:j- sis'discutiól-L.Comolli.
hacer que se muevan,.meresu1t~·c6modo. Para el1o~ecesitounagraíl profundi-:-,,' 117. J.~B. Brunius, asistente de Renoit y actOr de dicha película, cuenta quele fueextrelllada~
,mente difícil conseguir objetivos que le pennitierandar con la ,profundidad de campÓ pretendida
por Renojr; esos objetivos ya IÍose fabricaban." " " .
113. Jean B.adal. 118. Eri las cuales reina por completo el décou¡íágé clásicohoJIywoooien$e, basado en el or-
114.. Véase «La libertadlateral»'dela quehablaAndré Bazin. JeartRenoir. por A~Bazin,Édi- den del diálogo (campo, contracampo, raccords) y en.dar un papel deeórativo a lClS p<\isajes· de es-
tions Cbamp Libre, 1971. ' tudio. T.Jndécoupag! cuyas reglas básicas inventó pavid"Wark Griffith, véase infra.
'. ~ ,

124 EL ENCUADRE CINEMATOGRÁFlCO COMPOSICIÓN, DESCOMPOSICIÓN 125

., consiguiente, reinve~tó' en cierto modó' por casualidad. Por otra parte!' Welles dre está en el tiempo. Y e~ la pintura hay mucho d~ esto, pero no lo sabemos»:
comentaba que a Íos Cineastas les basta con ver la vida y que la pantaUªJIlues- , Godard también s~ refirió_ala' importancia de cambiar, de velocidades para '
, .trala d.m~rencia entre los que ven y los 'que no ven nada. cambiar-de encuadre '{evocó a Marey, que filmó la desc.ompo;i¿i¿;;:dela ca-
Sin embargo, esta nueva profundidad ,(por oposición a la antigua! la primi- rrera de caballos y que no hahía comprendido.el interés del invento d.e LouisLu-
tiva) estaba igualmente vinculada a10s principios de una escenografía presidida ooere, el interés de filmar ~ velocidad normal, ~~ de ,los ojo,S:;. '
, . por los actores, actol;'es (en plural) en sus entornos. Para Orson Welles y para
Jean.Renoir lo importante era lo que está ante 11.9 la cámara.
Los teóricos del cine saludaron a·Orson Welles como el inventor del plano-
.. secuencia, detd4coupage en profundidad. 120 André Bazin consideraba esta forma
de découpage como más realista que la fOrIna clásica, pues permite que la cáma- ., .... ,'.
racapte «bloques dé realidad»: «realismo en cierto modo ontológico, que resti-
tuyesu densidad de ser; su presencia específica al objeto y al decorado, realismo
dramático,que se niega a separar al actor del decorado, los primeros plan<;ls de los
fondos, realismo que pone de nuevo al espectador en las auténticas condiciones
dep~rcepci6n, que nunca está completamente detertñinada a priori».
':En uria Note sur la profondeur du champ, 121 Jean-Louis Comolli, por el contra-
rio,ve una atumulació~de efectos de lo visible en la gran y excesiva prof'lmdidad
( de8~powellesiana o renoiriaria y en el trabajo de encuadre 9j:Jerado por la luz en

( las--¡)~1ículas de Orson Welles: ~illí juego combinado de la profundidad de CanlPO y


del()sefectos de luz produce una imagen compuesta, descontinua, cortada por ocul-
tadores y velos, manchas y máscaras internas! que, en la óptica baziniana, deberían
dar la sensación de inscribir no "mayor realismo" sino precisamente "menos"». .
íiá cuestión deja dimensión~ dejas dimensiones qu~ el cine puede otorgar
á la'pantalla, ha «funcionado» en todos lo~ grandes cineastas. Eisenstein pen-
saba que el tiempo era una cuartadiménsióij. que, en el cine, se sumaba a las
tres primeras (longitud, anchura, altura O profundidad). Godard coincide con
esta.ídea y también éi realizó una incursión conceptual en la pintura. Aquí te-
nemos algunas de sus afinnaciont?s respecto del encuadre, grabadas en tiempos '.
érique se .acaba de estrenar su película Sálvese quien pueda: «Cuando con-
templamos a Van Gogh... o a los pintores [y reflexionamos acerca del momen:"
to] en que colocaban su caballete ahí y no allá, vemos que es lo oosmo que en ,
el cine, aunque de una forma totalmente distinta. El encuadre en las pinturas es
algo que pertenece completamente a la pintura, y todos los grandes pintores
sonunos extraordinarios cámaras, del estilo de Eisenstein, pero eso no es algo
que se vea así. Creo que hoy en ara;~ no se sabe encuadrar y q!le las tres cuar-
\. tas partes de las pelíclllas confunden el encuadre con la ventana de la cámara,
siendo el encuadre cuándo se empieza el 'plano y cuándo se corta. El en~ua-: .
e
, 119, Orson Welles, durante su estancia en París, en febrero de 1982, insistió acerca de este
punto: la.extrelliaimportancia de los actores para el cine~
120, En oposiciÓn ala fragmentación en planós de múltiples dimensiones del découpage clásico:
12LCahiers du cinéma; número especial, Scénographie, 1980. '
... - '
,;

·" EL ENCUADRE CÍNEMATOGRÁFICO CÓMPOSICrÓN, DESCOMPOSICIÓN 127


. \".-'

-·----:--mente, en decorados continuos (el despacho de la recepción de un hotel, ungor.:;


mitorio, la eScalera), dividllUlla pantalla y mostraban los tres decorados .en .eLmis:-,
El cine nosiempre-rnrexistido como1ó cÓllocemoshoy. Para entender la- ------roó encuadre. TahJ.bién· utilizaban ocultadores con forma de catalejo o de cerra~
radical transfo~mación que supusoel décoltpage en plan~s (y.~l Plontaje), que dura para que apareciera btro puntO dé vista de una acción, aunque sin abandonar
marc6' profundamente ál cine,con1() ~~dio de expresión yyag:ó de reproduc- la visión del teatro, o usahanla profundidad de campO para mostrar la relación. eli-
,ci6n, en tanto que arte/2l hay que retroceder. En realidad, no es'dlfícilhacer- , tre un personaje situado en el primer plano y un acontecimient~.~~s..:~rtdó
se.a la idea de c6mo podía ser el cine en sus orígenes, antes de;Da:vid~Waik ·plano.,
Griffith. m Los .cámaras que los· hermano~ Lumiere 1handaron alrededot del mundo
, ¿Qué era lo que lo caracterizaba? La no-continuidad, la 'f!dhWidad y la fij¿ para filmar escenas .de la vida real,conocían y. empleaban procedimientos (pa-,
, :za; Las reglas de lárepresentacíón teatral clásiéa;. de laesceriografíateatral al es- norámicas, travellings, planos generales, primeros planos y planos medioS) que
tilo italiano, que durante ese fin del siglo XIx sehaIlaban en su apogeo, valí~ 10sescen6grafos de las películas. de ficción no lograron que el público aceptara
para las piezas cinematográficas,do~uÍÍl.entales que; rodadas 'en exterioreS, se li- hasta mucho más tarde. La multiplicidad de puntos de vista ófloque es loinis-
beraron ·cpnmayor rapidez,dekl.Íbo'dela,es~ena teatra).~ rea.lo iniaginaria. Lacá.:. mo, la multiplicidad de los encuadres delasvístas filmadas por el operador,se
en
mata, inmóvil e inclusÓ hUnoviIizad,a, frontalmente, el~Je medioperpendicu- ' , admitía perfectamente cuando se trataba de hechos reales registrados a partir de
lar ala escena, encuadra~a la totalidad del decoradcr.rregistrab'llosmov~ntos la: realidad, en la que se suponía que el operador podía desplazarse, y cuya con-
, 'de los personajeS, siem'p~ desde ehnismo pilntode vista. (horiiontal, po\supues-" tinuidad espaciotemporalreproducíapara'los espectadores. No así cuando se (
to): el del señor de -laplátelLSi la histoIja inlpli9abacámbfos detiempo o ~ lti.;. trataba de una historia representada como en el teatro, es decir, repr~sentada'en
gares, se cambiaban los cuadros Jexá~támerite cómo en. e'¡ ttafro de Ch~télet! Los un lugar úriÍco: el escenario. . ' "
cuadros ibanpeg~ósUl~ó,'aótro y no mediante raccords-,deJorinaqtieno se Estas dostendencías del cine han podido coexistir,incluso en el interior
creaba la continui~ad~n laacd6n. Cuando Se' queríru.:i mostrar distintos aspectos, de un mismo pro'grama, durante varios aftas, pero la oposición entreLumiere
de unaÍnismaacci6n; 'elco~tracam"po recuperabap,atte de lfl acción,m~stqcta ya y Mélies nunca fue tan manifiesta como en aquella época de los inicios del
al final del campo. Estas repeticioneS, que JeallMitrylM denomina «rec,uperacio- cine.
'nes» o «encabalgruruentós», .fu~t:9ii, :hásta 19'07; elunloo Ínétoáo>nili:rativo~ara Las ~scenas de la vidareal;'asfcomo los cortos de actualidades reconstrúi-
las, películ.as de ficci6n. La. au.senciade :montaje:y de. 4~coUpage llevar()ná~gu'" das en extériores, .hánacostumbrado .al espectador a una representación más
nos escen6grafos a inventarprocedimiéntos relativos'al e!1cüadre~ Para traducir, <<realisut» y a la continuidad narrativa; elÍas. son las que han hecho posible la
por ejemplo, la simultane~dad~~o~ ,otresacciohes,:que transcu:m.an p~eia~ elaboración del découpage c~ematográfico de las películas de ficción, cuyaim-
122. Véase el texto de André MAlraux,&quissed;lPUlPsjéhologie du Cinéma..Gal~rilard, 1939. ' portancia señala André Malrauxen esto~términos: «El nacimiento del: cine
123. David W. Griffith es el héroe epónimo de-la~vo1uéi6.n del découpag~/icfc~1l1.~9$igni~ como modo de expresión dat~.de,.!a:época en que el técnico del découpagé ima.;.
fica que haya que atribuirle to4Óslo~ inventos'::dellenil#ljf! ciMm~gráfico. CUaqdodejó1a cOm;. gin6la división de su relato en pla¿os y se planteó, en lugar de fotografiar una
.pañía Biograph, se benefició de.unaampli~.campafiadeprenSa; ul:uínuIl:cioáfi~ab~POrejemplQ¡ obra de teatro, grabar una sucesi6n de instantes, acercar su aparato (y por lo tan.:-:
que había introducido lássiguientesinn~Vaciones en el dt~ cinematográpco:el priro~ipuino,él:
plano general (se ignoni""qúe, en ia may()~íade'los caso$; ap,tes '~eél, un prlm#planode ~éu~!Ío~
to ampliar a los personajes cuando fuera preciso), alejarlo; sobre todo sustituir
cella de soldados bastaba'paraque los éspeetadores éreyeran: en la,presenciáde todo un ejército eil. el plat6 de un teatro por el "campo", el espacio que estará limitado por la pan-
el campo de batalla), elflash-btUk, 'el suspense,elfundido en'negro,lacónfención erílAintérp~e-, talla, el campo en el que el actor entra, del que sale, y que el escenógrafo elige,
tación de los actores, etc., La:visiónde sus,peÍícula.s,;de sqspri~eros cortq~, siguiendo su orden en lugar de ser él su prisionero».
cronol9gico, muestra queprogresivamente-fu,edominando.la técnica de nari:arenrelat.os más lar-
gos y más elaborados. Para sus contempori¡lltWs. loS' gu{tl'abajaron con 'él, particuJ.ap:nente el ci-
Así, el découpage en planos sustituyó a la filmación frontal y el cine se
, neasta Allan Dwan; era indiscutiblemente el «~tió de la profesión»; p~ algillíos historiadores. constituyó como. medio de expresi6n,específiGo. Posteriormente -los histo-
por ejemplo Jean Mitry, si no !o: i~vel)tÓtodo,sí fue el prlrriéro que estaQled6, relacioneisipnifi" riadores S011 unánimes al respecto--.-; el CÍ'pese dividió en dos grandes bloques
cantes entre los planos, película a PelículÍl¡ y Elnacimifmto de urianaciólI¡ (Birth ofa Nátlpn, 1915) '" ' con distintas direcciones, aunque3lITlbos tienen su origen en Griftlth: p_0run
marca el inicio de invéStrgadoñds-:Y halláZgos4...~fráguaron;' ocho áñosdespués de'stÍ,:prún~(~cor- lado el cine de· montaje, practicado por las vanguardias·y en primer lugar por
to, en ~llenguaje cinemafugráfi~Q~':'" , . . .' " " ," ;
124. En un artículo titulado «LesMésáventuresd'un pompier».Le CúzématogfápÍl.e,ll;74,ene-: el cine soviético de la segunda mitad de los años veinte (se sabe la importan~
"

ro de 1982, del que tomo pÍ'estadas-:e~tasinformaqi~neshist6rlca~~' cía que el yisionado de las películas de Griffith tuvo para Eisenstein y Vertov);
I
t
128 EL ENCUADRE CINEMATOGRÁFICO COMPOSICIÓN, DESCOMPOSiCIÓN 129

por el otro'el'seine del découpage, cuyas' basesl25 elaboró .Griffith, el cine. clá- ven para la traducc;_i§Il de la pala?ra.rusa que utilizabaEisenstein. ¿Y entre toma
sico hollywoodiense, del que Hitchcocfes uno de. los exponentes. y plano, si las tomas son las 'versiones iependas del miinio(?) plano? ¿Cuál es
Es imposible trazar una historia del cine .como no sea mediante el análisis la palabra más import~nte dda expresión toma de vist'as (filmación), y qué di-
de películas, películas-:eortes, películas-meteoritos, películas de serie (A, B, Z, etc.), ferencia establecer entre fihnaciórt y encuadre, entre corte y découpage? Al pa-
películas de autores, películas de escuelaS o .de «olas», su verdadera historia no recer, se puede articular el découpage con ei encuadre, así como el découpage .
. es lineal. Lo importante en cada ocasión,con cada película, es la adecuación de con el montaje, origen de las dificultades del análisis. -
los medios del medio Cinematográfico a una historia, 126 un s~jeto o un objeto, la En los inicios del cine, las cosas eran más sencillas. Se filmaba. una esce-
organización que un cineasta hace de una materia (imágenes y. sonidos). . na a cierta distancia, las tomas eran tijas y sólo ~xistÍan dos objetivos (el f.35
No obstante, se pUf1de observar que cada un~ de las rupturas que han mar- y el f.50). Para captar la escena de más lejos o más cerca se desplazaba la cá-
mara. ' -
cado el arte del relato cinematográfico se ha producido en tomo a la noción de
e plano Y?' a partir de esta éonsider~ciórÍ, se puede inte~tar definirla. .' , Más tarde se inventó el découpage en planos.
Efectivamente, el plano es la unidad fílmica base. Cualquiera que sea su es- A continuación, el plano-secuencia 10 complicó todo, introduciendo cam-
tructura, una película se compone de planos. Unidad de tomas, .el plano ~stá' bios de dimensión en un mismo plano, jugando con la profundidad de campo y
constituido por lo que la éámara ha régistrado entre el momento del «¡Acción!» .. los reencuadres efectuados por los movimientos de. cámara; La unidad fílmica
. yel momento dei «¡Corten!». Una vez' que la p~~ula ha sido montada; 11ama- quedó destruida a partir de entonces.
( mos plano a lo: que se ha conservado, es -decir, a la extensión de película com- Lejos de signir:rtar un regreso al pre-découpage, 128 el plano-secuencia efec-
( l?!endida entre dos coiteS~ " , túa el découpage-montaje de las tomas y tiende a hacer desaparecer la noción de
"No obsla.nte~la definición ~el plano se eiúrenta a. dific\lltades (insuper~les) pl.~o. :.' ., . ' _
y esqu-éencantadáde seguir el consejo de Pascal Bonitzer,quien, en un artícu- Por últiñio, ercine moderno rompe la estructura del plruio con todos los me-
lo tituhi.do «Voici»,12!"evoc:a. a própósito.deeste tema, el peligrode establecer dios: utilización del sonido, del fu~rade campo, de la duración, de la mirada a la
definiciones de:rnasiado norinativas. Se p:ueden tener en cuenta varios paráme- cámara -desde Un verano con. Mónica (Sommaren med Monik~\1952), de
tros y! por ejemplo, la p~bra plano no tiene el mismo sentido cuando se habla Ingmar Bergman-, de los desencuadres,129 y del vídeo, incrustacibnes, des-
de pÚmofijo,.de primer plano ode plano-secue!1cia. ¿ES el plano un fragmento composición. de movimientos (Sálvese quien pueda), multiplicaCión de las pan-
. dt?l desarrollo de la pelí~ula (del mismo modo que la secuencia, cOillpuesta por tallas dentro de l~ pantalla, pantalla del vídeo en la pantalla negra del cine, hue-
varios planos registrados en un mismo lugar y que se refi~ren auna misma ac:" llasdel vídeo que dejan al encuadre y la superficie del encuadre «esnipefactos»,
ciÓll), o un fragmento del campo. (determinado por elo1:>jetivo de la cámara y la por ejemplo en las películas de Godard, desde Numéro Deux (1975).
proximidad entre el petSonajeprlncipaIy esa mislllacámaÍ:á.)? .' . Cualesquiera que sean los medios utilizados, uno de los rasgos del cine mo-
¿Dónde establecer l~ frontera entre el plano y el encuadre? U~o y otro sir~ derno es el hech? de que rompe con el espacio verosímil cread,o por el campo-
contracampo y asume la abstracciónl3() del plano; parte de la no-profundidad de
la pantalla, de su superficie, o juega con la profundidad de campo. Estas dos
125. Se suele utilizar la expresión gramática de base. ¿Se puedé 'tratar al cine como a una len-
gua, como a:un lenguaje? Algunos cineastas -Eisenstein, Vertovo'Pasolini- construyeron sis.- concepciones pueden coexistir en una misma película, por ejemplo en las de
temaS a partir de su práctica (las películas) y de su teoría (sus escritos). Sin embargo, no hay que Antonioni.
confundir estos' sistemas c~m métodos. Las asimilac;:iones .que se acostumbra a hacer entre cine y
lenguaje, découpage y sintaxis (o gramátiCa), plano y palabra, no captan en absoluto la, realidad del
. cine, especialmente la: fuerziúle las toínasfelv.ínculo entre el cine y la realidad.. 128. ~tra c~~ti?n de vo~abulario: una.p"elf~ula que ha pasado por un proéeso de découpage
re-
If6 .. A veces la hist()ria en sí tiene. pOca importaticiá, segdn suele repetirse. Godard pudo es una película diVidida en trozos,' fragmentada en gran cantidad de planos7'
sumir los :guiones de numerosas películas ameriéanas en s610 cinco palabras: «A girl andagun» - 129. Según Bonitzer (Cahiers du Cinéma, n. 284, e~ro de 1978), los desencuadres de i~ re-
(una chica y una pistola). V~, por atraparte, respeetoa este punto,ete1ogio del plagio de Jean presentación moderna introducen un nuevo suspense, de trden no narrativo, en el cine.
Renoir. O, también, el hecho de q\l~ Luis Buñuel hubiera establecido con un amigo una clasifica- 130. Realmente, ¿qué puede haber más .abstrllCto? Pasolini advirtió que el primer piano de, una
( ción ~<exacta» de los p~rson,ajes ydesussituaciones en las prim~s películas hollywoodienses, mujer mirando una llanura y unplaÍlo general de esta llanura, ocupan la misma superficie en la
\,' que les permitía adivinfH: d~r laprimera escena cuál iba a ser el desan:olIo y elfinru de las Ínis:- pantalla. Eisen.~tein, por su parte, señalaba que.una cucaracha filmada en primer plano par~e cien
mas~ .. . ' . ' ' .veces más temible que un centenar de elefantes tomados en plano generaL Ésta es la razón de que
127: «Voici,' Lanotiondt!plan et lesujetdu cinémai>,Cahiers du cin"éma. n.273,~nero-febrero recomendara si~mpre la visión en primer plano, que no hay que confundirconei hecho de filmar
,de 1977. . . únicamente primeros plan()$. .. '. '.' '.'

(
(
130 EL ENCUADRE CINEMA.TOGRÁ.FJCO

Carl Dreyer .fué' el primer cineasta de la superficie, ádniirable«pantalllsta», 7. •'Tres películas


por decirlo con una palabra: en desuso de Riciotto ¿anudo, que supongo que quié-
re decir especiali~.ta deja pantalla. Dreyerpensaba que,' cuanto más utilizaran (
sus películasJas :dos dimensiones:, antes alcanzarían la cuarta y la quinta- y pa~
sarían por encima de la tercera. Esta voluntad de aplanar la imagen iba de la
mano, no podía ser de otro modo, de una nueva función atribuida asu elJ,cuadre.

(
.'
(

lA pasión de )Uan(l de Arco: el primer plano

lA pasi6n de Juana deArC(J~orpt"ende aún en nuestros días: por, lá audacia


, de sus encu,~dres., Compuestacasr cPmpletamentea' .base ,de prim~rosplano~, '
principaImente deprimensimos planos de rostros, la película planteó de pronto ",
la cuestión de la función del encuadre dentro del relato cinematográfico. ¿A qué,
necesidad respondía esta elecCión ~a~solutimente Ul1,lsual en la época y nunca
imitada después-m de una' anipliación 'generalizada?
¿Por qué ,hacer una películáde «grándescabezas», según la expresión que
designaba los priinerosplahOS de rostrQs cuando,.aprincipiosde, siglo, surgíari .
de las películas de Mélies, por ejemPlo, entre planosuniformeniente generales?'

131. Godard incluyó UIl fragmento de La pasión de Juana de Ateo :;"""peJícula. por la que sen~
tía una inmensadevoeión---:en Vivir su vitki(Vivresavie, 1962). La trayectoria: de'sú peñsariiie¡(:~
to respecto de esta·cita fílmica'mérece una, mención: En priÍn~ra instancia pensó en citar a Robert
se
I}resson y su pelícUla F'ickpocket (1959), Jle la que st;ntfa.muy cercano en el inomento en que es-
,taba trabajando en su filme; más. tarde barajó laposíbilldaddeLe testame¡;¡tdiOrphée; Después"
volvi6a Bressori, que pór aquel ~tonces éstabáiódaJido Lt. ptdccs de Jeanne d'Arc (1961)y ob-.
. tuVo el permisO del realizadot. para citar Un pasaje de su película. FinaJmente, la películáde Dre-.
yer es la que ocupa la pantalla: Falcónetti frente a Arma Kar1na. . '
(
132 EL ENCUADRE CINEMATOGRÁFICO TRES PELÍCULAS 133

Al parecer, las diInensiones del plano estan íntimamente relacionada;:; con elpa-
pel queDreyer le_ atribuía a la pantalla, tratándose de esta película: el del ojo de
una cerradura o, Como' afirmaba en una entrevista coiítemporanea a los días del
rodaJe: <~Debemos poder darle al público la impresión de que ve la vida a través
del ojo de la cerradrirade la pantalla».
La experiencia nos muestra que cuando pegamos el ojo al agujero de una ce:-
.rrádura las cosas se ven de un modo distinto a.cuando se contemplan desde el qui-
cioq.e una puerta ábiertá de par en par. Sin las referencias habituales de conjunto;
sorprendemos detalles, fragmentos, pedazos~ nos arriesgamos~ entre otras cosas, a
quenas horroricen. A los espectadores, así como a los periodistas que tuvie-
ronque ~ cuenta de ella, la película les hOlTOrÍZó. Uno· de ellos incluso llegó a
l'
'\
afirmar que'era <<la película más horrorosa que había pasado jamás por la'pantallID).
. LossiglÍÍentesfragtnentos de un artículo firmado por Albert Flament, apare~
cidóen La Revue de Paris' y titulado «La tragédie de grbsses tetes» (La tragedia'
de las ,cabezas. grandes), nos ayudarán a comprender l~,.cQnmoción queéausó, en
la ép(j~a: <<Ante los rostros humanos escogidos por el'señor breyer, que posee el.
sentido de lo pin,tores,co, ~dvertimos con auténtico terror la poca diferencia que
(
t eKisteentre el hombre y~l paquidermo (... ) ¿Cómoemocion~se c9n personajeS
cuya:.piel está hOfildada d~ cráteres, veteada de 'inanchas=-violáceasque parecen
(
hueilasdébofetadas? Junto alas párpados, laspesuu'ias evocan los bambús deln-
" do china a lo largo de los rápidos. Y el más bello labio de mujer parece agrietado Falconetti, «cab¿za de prim~simo plano» en La. pasi6n de Juana de Arco, dé CartT~ Dreyer
y ~esquebrajado como el hielo de los arroyos cuando se áceroala primavera C... )
En Francia, Jean Epstein, Oennaine Dulac, Marcel L'Herbier estaban entu-
».La señorita Falconetti es ciertamente la Juana de Arco más emocionante
siasmados con la movilidad de la cámara 'e intentaban hacer un «cine puro»; es
. que nos hayan ofrecido jamás. Nínguna -mujer, en el cine, habíaconse~tido ja-
decir, películas dictadas para el placer del encuadre, que a veces pretendían ser .
más mostrarse de este modo, bajo los aspectos' menos halagadores, los más
acuáticas; esos cineastas vieron cómo, gracias al primer plano del rostro, se les
ofensivos, con un coraje y una abnegación que merecen todos los elogios C... )
a~!'Ía una nuevadimep.sión del cine, ya no espacial sino de expre~ión. :aasta un·
,»)No obsta11te;el abuso de cabezas. en primeros planos nos abruma. Al finaL
teféfono tomado en primer plano podía convertirse para Jé~ Epstein e~ un, mons-
de la repre~sentación,el público sale del local envuelto en el silencio que acom-
truo, una torre, un personaje, un pilar, un palomar. Efectivamente, el pdmer pla-
paña a las grandes catástrofes. y es como el recuerdo de haber asistido a deba-
no destruye la escala de los planos.
tes entre personajes antediluvianos cuyas proporciones demashtdodistintas a
, Dreyer era contemporánéó de toda esta vangÚardia pero, según él, el arte de
las nuestras hacen qué no nos lleguen al corazón».
fotografiar132 bien no era sin9 el arte de fabricar bien, tenía una idea más eleva-
da del cine: «Quie~ haya visto ~s películas -las buenas- sabrá la importan-
( Entre tanto, el piimer plano ya tenía una larga bistoria.
cia que le atribuyo pI rostro humano. Es una tierra que nunca te cansas de ex- .
La época (1901) en que el inventor inglés del découpage fí1mico, O.A.
( Sluifli, se .vio obligado._a,introducir en la ficción un artificio legitim~úior del plorar. No h~ _~~P!riencia más noble, en un estiIdi~, que ladefllmar l~:
expresión de un rostro sensible bajo la misteriosa fuerza de la inspiración., Ver:'
curso a un plano?ercano para que fuera más aceptable para el público, ya for-:
la animada desde su interior, ver CÓffi<;> se transforma en poesía». 133 '
maba.parte delpasado. También se habíacompletado -desde 1920-la época
,del íris, GÍrculo que aislaba el rostro del aCtor; ocultador que lo rodeaba de ne,.
grO al cerrarse y que al abrirse al paisaje revelaba lo contrario. 132. Fotografía parece designar la filmación, el encuadre y no, ~omo hoy, la luz de uJ~a 'peií7
cula. En coqjunto, a La pasión de .Juana de Arco se le rec~noció una «ciencia de la iluminaci6n y
Ya hacíatieI1lpoque el rostro se podía captar a todo cuadro y la starpodía
de la fotografía perfecta», es decir. una gran maestría de los distintQs componentes de laill1agen.
:hiPIl0tizar al espectador ya que, las más .de las veces, en el cine mudo, ésta era , 133. Esta cita; así como las sigtúentes, son extractos del libro de DreyerRéflex.wlis sur mon
la función del primerplano. métier, Cahiers du Cinéma$1itions de l'Étoile. 1983.
134 EL ENCUADRE CINEMATOGRÁFICO' TRES PELÍCULAS 135 -

. A su parecer; las experiencl~el d.ne fraÍúis deio~ años veinte se limita- atraído por los óbjetos enmovimíento ypasivo ante los objetos en reposo y que.,
-ban ~ arte de fotografiar, defonnaoiones de la ilnag'en y juegos malabares. Dre- . co~se¿uentemente, el ojo sigue placenteratnente los travellings y los desplaza..: __ --':="'
yer ciiU.biéil rechazqba tosotros-efec_tos, encade~dos, fundidos, montajes rápi- . nrlentos horizontales. En la pelíctila, los movimientos de cámara: son numerosos
dos o"efectos de cámara. Pensaba que había queIiberarse delacámar~'ÍlO_ y diversos. Juana suele representar el elemento fijo del découpage,o sea, lite-
dejaise-fascinár por ella, servrrse de.la cá.rnarapara·suprimirla~, ralmente, el pivote en torno al cual gira la cámara en much-'a.s de las secuencias.'
, No obstante, a Dreyer har que reprocharle unáiriútil <<tortícolis» de la cá- Por ejemplo, los movimientos rotatorios en contrapicadó sobre los que, despllé~'
mara: «En La pasi6n de Juana de Arco, deDr~yer" e.sa~JlllÚÚa de fotografiarlo de las escenas de.tortura, se presentan mediante un carl-el como «los eñviá.dos
todo de través sin que hayap.ada en el ángulo de visión de los personaJes que: del diablo para -hacermeI36 sufrir» y los movimientos rotatorios de la secuencia
justifique las inclinaciones del aparato de fiImación,~acaba consiguiendo quela final de la hoguera. Por otra prute, se suele captar a los personajes en movi-
topografía de.1a 'escena y la posición de _~os_ ~ctores~ sean completamente- indes- mierito, salvo a Juana. Al principio, el plano no está vacío, cuando un persona-
cifrables. Se trata de unaafectaCi6n' 'de estilo, de un. barroquismo fcit<?Jáfico jeentra en él, en realidad ya estaba presente ahí desde el inicio, en potencia. El
que no guarda reIacjórt:algunacon la significación'de las imágenes,'q&e no da virtuosismo del montaje -que hizo que un crítico escribiera: «Los record& O);
fe más que de laabsurdapÍ'etensi6Íl delautcir.l\1ecomplazco·en repetir aqu{, muy hábiles, crean la impresión alucinante del diáiogo»---. contribuye amplia-
una vez más, que La pasióncleluana ae Aréo es unade]as .películ inás.,h.e- mente a esta sensación de movimiento:137 Los planos, que suelen ser cortos (sal-
diondas que he visto jamás (... ).Sinembaq~óf ánte~1!e Dreyer, Ganee ya había
as vo los dé Juana que son más largos)' se encadenan dentro del movimiento. Al
,trecuentado esa costumbre yle había contagiado la'tortícolisa sus operadores. principio, por ejemplo, el. gesto de la cabeza de UIi personaje guarda una Tela;..
,'ya en 1932 vi que unode ~Uos poníaeI trípode de través cie buenas a primeras, ,ci6n de raccord con el inicio de un travellfl1g qpe acom:paña a otro personaje sa-. .
.incIus o antes de conoCer elcúlltenido de la e~cena queiba arodaD>}34 ·liendo de la habitación. Ya sea un movimiento de cámara introducido por otro
Sin llevar elodio t8.I!leJÓs,.¿tros crítlcos'se siÓ.tie~()n descon.cértadosPQr los movimiento de cámara,ya sea un movimiento de un personajeintroduciclo por
encuadres de la película, yaque-n¿ sabúma quécor~ente~tribuirla~ Enprinie~ un movimiento de un personaje, los tipos de figuras son variados:
.fa. instancia .las crítica.s tomabaÍldistancia,de la película .ide~tificándoht con' lo Iridependientémente de esos movimientos fílmicos, lo que crea el espacio y
." conoCido: teatrO o ártesplásticas,bajorrelieve,áloum de mágníficas fotogra- determina los encúadres es la dÍrecci6n de la mirada de los personajes, €nau- .
.!las, vistas de una lüitema:J;llágica, etc. Acto seguip.o ptoferlan.un<<y, pese a todo, '. sencia de planos de conjunto y de sonido.,
es cine». «Obra extt:ru1a, r~alizada casjúnic~~te Ji basederostros ep i:nimer Veamos la'puestaen marcha del dispositivo del proceso. El principia de la
plano, en la que todo queda abandonado (:lJa interpretación del ac.tor... yao obs..: pelícuJa nos presental38 lugares y persol1~jes. Posteriornlente,Jas primeras pre-
.tante es una obra maestra d~l cine,Uha creación tot~.» ' . . '
: :" ~<Tema teatr~y, sin eíi1bargo~ reálizaci6n; expresi6nyritmQ'realmeÍlteci~
nel,úatográficos» ~ . Más tarde, en su película Dies Irae (Vredens Dag, 1943):-101; travellings corresponden para
Dreyer a «primeros pIanos encadenados». Y a propósito de La palabra (Ordet), sup~lícula de
En una entrevista que se ,!emontaa 1963, Rober(Bresson ~onsideraba que
19S4,Lotte H. Eisner se. refIere a la «sabiamezc\adeplanos medios y aléjadosque aDreyerlegus"
.lápelícula era «teatral» en el sentido peyorativo dehétminopero, a la vez, no tadenominar "primerospíanosdesliz~tes"». Por fin, en 1966, en un texto corto, respondía así u 1a
podía evitar encontrarla bella. No se explicaba esa bélleza, pero constataba:!que pregunta«¿Qué podemos esperar del cine en un futuro pr6ximo?»: «No podemos esperar más que
la película de Dreyer «aún emocional?a a unaparte del público; pero con medios lo que nosotros mismos hagamos. Habrá que cultivar nt:levos telTenos, es decir, encontrar temas
no cinematográficos». ..' . . '. '. . nUeVOS, aquello con lo que elaborar los lluevos y extraordinarios guiones que. utilizaremos para
.. ' . ,Los e[lcuadres de La pasi6n de Juana de Arco,plineipalmente les pr:Ímeros producir mejores películas, intentando, con cada película, dar un paso adelante, hacia un nivel más
elevado. También es. preciso que nos esforcemos por realizar mejores primeros planos. No hay que Ji.
planos, relacionadó,s con loS' movimientos de cámara, éorresponden a dos obse- mitarse afotografiar rostros sino también, y sob're todo, los pensamientos y los sentimientos que
siories de Dreyer,el primer plano y el movimiento. Independientemente de .su están detrás de los rostros».
insistencia en el primer plano,135 Dreyer pensaba réalmente que el ajo -se si~nte 136. Juana de Arco.
137. Este virtuosisino del montaje sólo es pOi;iblea partir de un material preparado y rodado.
134. Jacques B. B1'llnius, periOdista y critico de: cill~, realizador de cine ~actor, En Marge
du meticulosamente: por ej~niplo, el ritmo qe la entrada de unpersollaje dentro del clla(jro o 1,1 de un ._.
c.inémllfr(}n~ais (libro elcI1t~p;¡J:~ptiembJ:'e de 1947yaparecido en Le Terrain Vagueen 1954). travelling no se ímpravisan dunint~ el montaje. ,
, 135. Ya en 1920 brey~r,su1~ayabalaáportaci6n del cine americano al cine en géneral: mos- 138.· TraveIling a lo largo de la sala del tribunal; travelling hacia el juez principal, ei obispo
trar cómo utilizar los p,dlllerospiáríQs; en las películas americanas, l()s primeros planos producen Callchon, que está leyendo; llegada de Juana, encadenada: yde Massieu (AntoninArtaud). Plano.
movimiento sin, en contrapartida, introducirelementosdistorsionádores en ell'elato. de los jueces y primeros r6tulos: «Jurodecirlá verdad». «MellamoJuana», etc;
( 136 EL ENCUADRE CINEMATOGRÁFICO
TRES PELÍCULAS 137

guntas del obispo C~uchon van seguidas de las primeras r~spuest~s ~e Juana en una agudeza complementaria: limitar la visión para ver mejor, escuchar mejor
un découpage simple: JuanalCauchonlrótulo. Cuando elJuez pnnclpalle pr~­ sin sonido. ,
.gunta su ,edad y Juana.iesponde:«Diec~Jl~ve años; creo», los encu~dres ,va~l­ Por otra' parte,' esta Uffiitacióti del campo visual correspond~ al trabajo de
lan al unísono con lás Certidumbres, un travelling tomado desde detras del ObIS- concentración que Dreyer había realizado con el guión: las sémanas del proce-
po Cauch<;>n alarg~ el campo, el obispo. Caúchon mra a su. ve?ino;; ~or el so de J\lana de Arco reducidas en la película a una sola jornada, la de lam:uerte,-
contrario el cont.racampo sobre Juana se hace más cerrado, el dispOSItIVO se veintinueve interrogatOlios condensados en-uno solo. Concentración que se
hape más 'preciso, es el inicio de 1<;1 auténtica «pregunta». Un monje delgado se in- ejerció igualmente en cuanto al espacio' en el que transcurre la acción: sólo
clina hacia adelante, amenazador. Los interrogadores se suceden, los que no ha- tres grandes escenarios principales, la sala grande del Tribunal.( del Pwacio dé
blan miran ala acusada con insistencia, ella tiene miedo, el encuadre que la con- Justicia de Ruá,n), una celda y una sala de tortura. Algunas escenas exteriores,
tiene cada vez es más cerrado, más cortado. en una plaza (escenas de masas, escena de la abjuración de Juana"escena final
Eldispositivo nopuedefijarse de una vez por todas puesto que, ,dáda SUTe- . de la pira).
, (
sistencia, Juana siembra el mruestar entre sus acusadores, así como entre la po- Tradicionalmente, los planos de conjunto muestran el lugar en el que trans-
tencia invasora, los ingleseS. , , curre la acción y los primeros plaJIos muestran los detalles l;lecesarios para esta
{
\
,
'. 'La lógica del découpage deLa pasión de Juana de 1rco.está dirigida: ,por el acción, así como las expresiones de los rostros de los personajes, sus reacciones.
deseo de Dieyerde hacer un reportaje (en una ép~enla que el reportaje aún Y, no obstante, en La pasión de Juana de Arco nunca v~mos los decorados,crea-
, no existía como anotó ac~rtadamente Cocteau).139, De este .modo a Dreyer se le ción de Hennann Warm l42 y de Jean Hugo (y, por-cierto. realmente suntuosos),
ocurrió p~ de las actas l40 reaJ~s del proceso y no del guión del es~ritor Joseph en su conjunto. La disposición dela sala del Tribunal y la de ia plaza de la pira
Delteil, que los productores le,propusier?~,~daptaí. D;eyerquena recrear. la no se nos indican,mediante planos frontale~'y generales. Los interiores y exte-
vida de Juana de Arco a través delIna forma cmematográfic~}.llostt;aren el c~e riores de lapelículatambjén son abstraCtos y Unútádos por cortes. Gracias a un
el cirácter de las personaS yel espíritu del tiempo, «conseguir que el público travelling rápido o en lo alto de un encuadre fijo, ve~os elementos estilizados, '
fuera absorbidoporel pasado gracias a medios multiformes y nuevos (...) Lo fondos blancos (en realidad, pintados de rosa por mor de la'fotogeniar
que primaba, ante. todo, era la técnica del proceso verbal, 'ca~a.pre~t~ :cada Hasta los primeros planos son, por su composición, «extraños»,comó de-
respue&ta exigiá el primer plano de un modo natural.. Era la UIllca pOSIbilidad. cía Dreyer, o «falsos» primeros planos, segúri expresión de B. Amen.gual. A ve-:-
Tod6 ello se desprendía de la técnica del proceso verbal. Además, el resultado ces corta los rostros, que no oc~pan la totalidad,del encuadre, o, p<>r ejemplo,
de'los prlmeros planos era· que el espectador se conmocionaba igual'q~e Juan~ son 'varios y se agrupan en la parte inferior del cuadro. Asimismo, los ángulos
al planteársele las preguntas y experimentar las respuestas. Y" en realidad, mI de fIlmación varían (picados y contrapi~a:dos).· .
intención no era sino la de obtener ese resultado».. . Una concepciQnparticUJardel~ proporciQ,ije.s-rehltivas a los persOlJ!ljes y, a
Dreyer conocía ésta técnica de los procesós'judiciale$, ya que durante mu- los decocados' .contribuye, por otra parle,a la, -sensación de extrañeza.
. cho tiempo habfu. sido periodista especializado enjuicios. Desgraciarum:ente, la. , lean Hugo' Ie·habí~ mostrado Le Livre des Merveilles a Dreyer, un .libro en
técnica cinematográfica no estuvo a la altura de sus esperanzas:. quena hacer el que los decorados se repr~entan a menor escala que los personajes. Dreyer ,
una película hablada yeso aún no era posible. Por consiguiente; ~voq~e con- . pensó en trasladar ese efectoal,cine, los personajes en primer plano aparecen así
'cebir el equivalente puramente visual de la técnica del proces9: los pnmeros en toda su grandezay, detrás & los personajes, el decorado, mucho más peque- .
planos. Efectivamente, la elección de esta.limitaéióndel campo ~isual estaba re- ño. Dicha réducción del decorado permitía jugar con fendQs distintos en los pri-
lacionada con el límite que el <<mudo» representaba para la película. Se puede ~eros planos. . ..,.. . . , ..,. .
pensarl41 _que dos-limitaciones, una visual y la· otra sonor~~ ~~!,e~an producir Dreyer siemprequisointep.tarla«éonstrucci6n de una i,!n~ge~~riteramente
nueva», suprimir las nociones de primer plano, segundo plano y plano medio,
crear una cuarta o una quintaclimensiones~niás que una tercera. Rechazó lapm-
139. Du cinématqgraphe, Belfond, 1973.-
C,' 140.. Í.óquéBresson hará en 1962. Sabiendo releído por casualidad, di.ce, las actas del'pro- fundidad~ la perspectivaenfavordelasupelficie, la de la pantalla; la deJas pa:'
ceso condenatórj'O, decidió cOnstruir su película (Leproces de Jta:!!Í1e d~Arc) a partir de las pala~ , ,

bÍ'as réales de Juana a Sús jueces.. • .' . ." . , ....'


14 L :& la tesis d~Barthélémy Amenguai en un artículo titulado «Fonctions du gros planet du c:a~ . '142. Hertnann Wannfue el deco~dor d~ películás de Fri~ Lang, F.W. Murnau, G.W~ Pabst,
etc., así como de la célebre El gabinete del doctor CaJigari (Da,; Kabinett des Dr. Caligari, 1920). de
dIage dariS La passion de Jeanne d'Arc», aparecido en la revista Étw:lescinématographiques en, 1976. , Robert Wiene. ' . ," .
EL, ENCUADRE CINEMATOGRÁFICO TRES pÉLicULAS

de fotografía. No sé riadadela ~elación entre la l~z ye! diafragma o entr~ el~bi


('
redes. blancas. y., sibien nunca llegó a realizar ninguna película en color, la po-
sibilidad de «formar una sola gran superficie abigarrada» por la disposición de - sitivo yel negativo. Pero me interesa bastante el encuadre y la composjcíó~ de. .
IQS colores le interesó siempre sobremanera. la. imagen y Creo que la condición de una buena fotografía, en geIlér:il,·re~ié.ie
Estilización y abstracción eran, para Dreyer, las más elevadas cualidades de '. '. en la buena COlaboración entre el director yeropel'ador».. . .. '.~:_ :.•'. -
ictímagen cinematográfica. Oponía la imaginación al naturfu.isnio «blando y abu- ~~-"'""~ . y a~to segcldoJas opÍJ;uones de Dreyersobre el Írábajode. suop~rador en
rrido». Así; la película, contrariamente al teatro (que ofrece a los espectadores . La_pasión de Ju,anáde Arco;:·«RudolfMaté;.que dirigía la cámara, comprendía
una imagen vista desde lejos, en el que los detalles deben ampliarse, en el que : las exigencias de la psicología dr~máticade losprirnerísimo's planos y m~' dio
todo es falso.Y en el que se trata de poner en relación los falsos detalles entre ellos exactamente lo que representabarrÍi voluntad; mi sentimiento, mi pen~ruruento:
para que produzcansensaci6nde realidad) da la posibilidad de presentar «la rea- mística hecha realidad». - - -.
lidad en símisma dentro de una estilización puramente en blanco y negro». Rudólf Maté nació enCracovia en 1898. Tuvo una brillante carrera.como
operador eÍilos Estados Unidos. Citemos algunos títulos célebres-de e~tÍelas
Los falsos primeros planos de La pasión. de Juana de Arco intentaban cap- películas en las que dirigi61afotograff~: Enyfadoespecial (ForeignCorreSpon-
tar la verdad, la realidad de los rostros de Juana y sus jueces. J,:fu el cine, y par- dant, 1940),. de Hitéhcock;Gilda (Cm_da, .1946), dé Charles Vidor; Ser Óno ser
ticularmenteen ~sta'película,abstracción y realism~on-indisociables. Qu~ me- . (ToBeor not toBe, 1942), de Lubitsch.A partirde-1946se convirti6~nprQ..
nos cuando se «imita un documental».' - ductor y realiz6 unastreÍnta películas. Mui:ió en Hollywood en 1964. '.
La belleza de l~ peJícul3:S de Dreyer es tal que no deja duda alguna respec- Así pues, en lA pasi6nde Juana de Arco la direcci6n de la cánÍara estuvo a
to de su sentido del encua~. Sin embargo, el trabajo realizado por el cámara, su cargo. Jean Mitry,en la Histoire du Cinéma muet, le asocia losoperádores
particularmente en La pcision deJuanade Arco yen Vampyr (Vampyr, 1931). Toporkov y Kotula. En Vampyr, Rudolf ~at~se'responsabilizó por igual de las
1 luces y de la filmación;algunosgénericos leasocián con Louis Née,:atquevol-
es igualmente admirable. VeatI\os: lo que Dreyer comenta de sus relaciones con l

los cámaras: ven:!O$ a encontrar en el ~quipo dé Lilio;¡( (película de Fritz Lang)odadaen'


,- «6ieinpre- ~e tenido la'~uerte de dar con operadore$ hábiles 'que comprendían :'-'Prrurcia; en 1933, en la: que Maté fue operador-jefe) yquewsterioimente-fue
mis. intenciones, las híl(;íán suyas y las realizaban.. Yo mismo no entiendo nada. unO dy 10$ grande$_ cáInatas del cin_e francés. . ,' .

lA-soga: fIlmaci6n ti
\

Ya he mencionado varias veces el nombre de ffitchcock: 10 contrario habría


es
sido sorprendente. ·FiecQ.Vaniente, su trayectoria cO$o cineasta exciusivaInen~
tecinematogiáfica;es decir, ni literaria, ni pictóric~ ni teatral. 4s .ocaSiones en
que, por ejemplo, adaptó alguna piezateatral,lohiZb reálmentepara Zapantalla.
«Usted no part~ del contenido -sino del continente», le señalaba Truffaut
como conclusi6n a la célebre entrevista143 de cincuenta horas realizada en 1966.
De esa!\Ím.a~de reflexiones a partir de la obra de Hitchcock, TÍuffautconcluia.
que ffitc:hc,~k_sedebía sentirparticularmenteatJ:aído por e,lyacio, él vací~ de
la sala de'cÍll.e (de ahí su obsesivapreocupaci6nyla extraordinariaadecuaci6n
entre S? óbra:y. su carrera) y el vacío del rectángulo d~ la-pantalla. l44

. -143. El cine según Hitc;hcock, de Truffaut, que Citaremos repetiPámenú:éii estei1fíi1ado.


144, 1~, DouchetseiíaJá:l¡ue estas trespeICculas nwcan las etapas que deIimitan~ehHitch~
. cock, la función deleSp~tadoren el espectáculo, etapas dela «tnlvesía de la pantalla» y qte son:
.LA ventana indisCreta (Rear WindQw;' 1954), Con. la muerte' en ros talones (Northby .Northwest,
1959)yLa ,trama (Family_P~ot.1976). «Cuanto más avanzamos' eh latravésía de la pantalia. ma-
yor poder Cobra la pantalla. un poder máiico, ilusorio, pero un poder mágico que en realidades un
. Relatividad de las proporciones dé los personaje$Y del decoi:ado en LA pasión deJuana de Arco .poder funerario, un pOder nocturno.» .
-----,.--.-~-,­

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( J40 EL ENCUADRE CINEMATOGRÁFICO TRES PELÍCULAS 141

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'AJfred Hitchcockrueda Pero, ¿quién mató a Harry?


142 ELEÑCUÁDRE CINEMATOGRÁFICO TRES· PELÍCULAS 143

. Si HitéhcóCk tiene renOmbre]lwndial como el maestro del suspense, hasta Con el páso del tiempo, ~einte años ,después, Hitchcock emitió un jUicio
el pUnto, como él mismo deCía, de'que si hubiera filmado la historia de la.Ceni- muy seVero sóbrelo queUamaba un: «trucO», consistente, en lugar.delafrag.:
cienta: los. espectadores hubieran' buscado mi .cadáver en ,la calabaza; támbién mentación de los planos,en utilizar los ieencúadres s,ucesivos deJ1.nincesanf;e
«és tmo'de ltis grandes inventores.de formas de tÓdalahlstoriadélcine. Tal vez. movimiento de la cámara Para obtener los caWpos yJoscontraclUIlpos, IÓ'Spli.·
los úrucos que puediÍncompararse...conél respectoal.particularsonMurnauy meros planos 'i los plan()s genetalésque la accÍón tecJamaba. ,.'. .', . .
Ei$enstein. En: su c~o,la fdrma no adorna el contenido, lo crea», como señalá~ La continuidad efe la filmación recaía ~obreel tema: Jatensión, la escáIáda: .
ron los prírnerosEric Rohmery' Claude ChabroLl45 , • la
de angustia de dos jóvenes que han matado a un 'amigó y que invitan a sus pa,.
Hitchcock, lejos· de contentarse con filmar (e í~cluso muy bien) un guión rientes y conocidos aun co~ktiJil después de haber encerrado el cadáver en un
-que es lo que muchos han creído B:.causa de su especialización en historias baúl sobre el que han dispuesto las bandejas de canapés. .
poÍicíacas-. se interesaba por el efecto final, visual, del guión y ,dela pelícu~ Imaginamos la dificultad de la ubicación de las l~ces,dadoqlie la acción '
la sobre la pantalla, hásta el extremO de tOIn,arlo como'punt.o d~ partida. empezaba' con luz diurn~ y terminaba con noche cerradá. El rodaje con sorudo
A menudo se há señalado que, en los rodajes, él no miraba jamás por el vi- directo de cada uno de los planos de diez minutos fue un~auténtica proeza)', a
sor de la cámara, tan gtandéera su conocimiento de los encuadres; con,su sex;. decir de, Hitchcock,un espectáculoeri sí nrlsmo, perfectamentesÍncromZado. ,
, to sentido infalible por «lasáueles leyesdelrectán210 de lapanta1la».l~. ' ., Trabajaban con uriadOlly y cifras escritasenAlsuel<iserVíande orientaci6n;al:
Parece que esta actitúd ~e Hitchcock tenía olfo motivo, el de que creía ,cámara, que tenía,quellegára talilúmeroal final· de tal o tal:frase. Láspared~s
-como Murnau- enJa auténtica magia de la filmación. El vis9f de lacá1l,la- que separaban las dist41íaS piezas del decorado; .así tomoJos muebles que no
ra hubiera podido funcioriar cómo un ocultador ylo que importaba er~supre­ , debían aparecef.eneLencuadie~ se desplazaban paulatinamente sob~e raíles si-
senda en los lugares, en erpl~tó,sentadodurante lafilmaCÍónen unsilla de lendosos. ¡Hasta las luces quese··veían, ah-avés·de laventaruí en los planQs ge-.·
director, como una esfinge. Mientras su ojo .:.....<J.elince-,: vigilaba. . nerales eran m6viles! El rodaje ,precisó de: diez díaS dé: ~nsayos. con la cámara, ·
Más que ninguna ot.ta;su película La sOfj" es básicaniente un juego de fil- . Jos actores y Ia iluminación, y duródiecio«ho días. ,. ,
mación. ", , , Adivina:m:os el placer que experimentó Hitchcock ál resolveresá&.dificulta-
La película es uná adaptación,de tina' obra de teatro que tenía la misma dura- ' des técnicas..~n:'Sp entrevista c6nTrüffautca~cafiÍlaln1entela péIícula iX)Íno
ción qúe la acción y que seínterpretaba en un tiempocontinuo~ desdeelleyanta- experiencia ¡ierdonable~. . ,. , ...' '.. ... .'.
miento del telón hasta su baj~da~.Ésa eS la particularidad que había interesado a H:'an90is Ttuffaut:, «Creo qúe Lasoga representa algoimportin~~;enuíla ca-
Hitchcock, que se.pregunt6cóllIO pódríatradilciresacontinuidad a1, cine, cómo rrera; es la realización de. Un sueño-quetodo.cine~tadebe atariciar en algún
fIlmar sin cortes una'historiaqueeInpiezaalas 19.30y terminá alas 21.15. Con- momento de su vida, es el sueño de querer poner: toWJs lás rosasen,relación con .
sideró que la: única m,aneraconsjstíae.JÍ.rodarencontinui~d; eÍlun'solo:plano, el fin de obtener unsolomov.illlÍento, Ysm'enibárgo;soy &; la opinión, y elÍb
un gigantesco plano-secuencia.Elfilme consta de ocho planos de diez IDinutos se verifica cuand~ .analizamos li~ra' detodo.sJos.grandesdirectores, que
(la duráción máxima de una carga de película), Pero los sieteraccortls"son 10 más cuanto más se reflexiona acerca del cine, más se tiende avolver al viejo montaje .;,.;;..--
invisibles posible: un personaJe pasa delante del objetivo,la cám.aia lé.abandona ,cláSioo con el que nO se ha dejadO de el;peJ:1nl.tntat después. de Griffitb. l4S¿Coro..
con un primer plano 4esuclÍaqueta,primer plano 'quéyolvemosa encontraral. parte usted mi puntode'vistá.?);; .; "
inicio de la. siguiente bobina. Se trata de Úfiejemplo único en la historia del cine;, , . . " . ' .'. -

una película rodada (casi) sinintetrupciones en lafiÍmaCi6n. 141 eran


las intenciones de JOs dos cineastas, nó' .exactamente.. ias misnlas, se puede relacionar su enta-,
siasmopor las posibilidades denn trabajo de éánWa que: implicara a la vezún gran riesgo y una' '
'?laestría perfecta., ' ; . :; ." : "':' . ' ,.. ' , , .. •
" 145. E. R~hmer y C. Cha&rol, Hitchc~k~ Éditions d' Aujourd'hui:1976. \ t48. Véase, a este respecto; u opi~ión dé Buñl,lel: «1:.a técnica no mesupone.im problema; Le
·146. Expresión deP. Boni~er. < ... . ' , .. '
tengo horror a las películas de. "én~uadie)\ <XJio.~o~ ángulos ·inSÓlit~; A,~Ye«es, con mi ppemdor,
, 147. lean. Rouch repitió la proeza; en 1965, con Gare du Nard, sketch de'Paris-v.upar: Esta ~.!i¡f,ÍI,,;;;'1emos unpll!Ilo sobeIbió y muy estudiado;Jo cuidiuñós todl), nos eSmeramos y en el 1'\10·
~p'elíctl¡;"'")¡ue retomaba las experien,cias precedenteS ,de Rouch (experlen<;ias básicamen:te,de/;,iné· memo de ponemósa rodar nos partimos de risay1ó desbaratamo~ todo para.rodar, simplemente;
, ma-vérlté,:én pamcularcon lA púJiition [1963]); también se rodó en tiempo real-limitado a 20 . sin efectQs·c;le cámara (•.•) Auilqu"btambiéndet~tola pu~staen yscefut ¡'tra:dicional";caliipo-con:"'
minutqs- y en un solo plano (enreaIidad dos planos, por la misma razón de la duraci6n del e~­ traq¡mpo. etc. No hayque "cu~rirse"filmand(j las escenas de dis:t'íniaman~.ra y "espabilándose"
gadorde la película). La duraci6nreaI.lossegundos que se $uman a los segundos, eran necesarios " luego durante el montljp. Me gustán losp1ano.s Iargos, lasfilmaciol)es euc6ntinuidad. Por ejem-
se
paraproducfr~'segúÍlsuautor, «algunos DÚnutos de verdad en los que"nnhomore halla frente a 'plo. me gustó nl'ucllO ei trabajo de' Hitchcock en lÁsóga.Si yo ruedo 250 planos habrá 250 pla,nos
su destino», e imponer al eSPectadorla fatalidad de la con~lusi6rí del drama (~I suiéidio). AUnque ~n mi película, nada de desperdicios, nada dé Juj<?s~, Ar.ts, 27 de julio de J 955.

c.
144 EL ENCUADRE CINEMATOGRÁFICO TRES PELÍCULAS 145

Alfred Hitchcock: «Sí, hay que montar las películas; La soga es una expe-
riencia perdonable.: El error imperdonable estuvo en obstinarme en cons~rvar
parci'aimente esta técnica en Atomteniada»,:U9 '
La soga demostró que Hitchcock era'«el hombre más hábil del cine' mun-
dial», aunque de esta experimentación no habría que" deducir que le gustara, el
(;
\ virtuosismo' en sí mismo. Según él, la técnica tenía que servir siempre a la ac-
ción y nunca se trataba de éoi:nIH~cerse, Q de complacer al'operador, con un An-
, gulo de fihnacíón, pese a que el sueño de un cámara como Alain Douarinou ha~
bría sido «hacer» Lasoga.
«Lo único que me pregunto es si la instalación de la cámara en un lugar u
otro dará ia máxima fuerza a la escena. La belleza de las imágenes, la b~lleza de",
c. los movimientos, el ritmo, los efectos, ,todo debe someterse y sacrificarse en
bien dela acción.»15o

(
e La ventana indiscreta:, el encuadre

e AlgW10s años después, el tema de LA ventana indi.screta iba a ser el lugar de


, la cánüita, el principio básico der encuadre. ' '
¿Cuál es la historia?,' La ventana indiscreta, de AÍfreti :H.itchéock: &ace KeÚYy'Jame:sSte\V~
( Un fótógrafó reportero, Jeff (James Stewárt) , ,penÍlanece ,inmovilizado en'
su casa; mi apartarilentode Nueva York, con la pierna escaYobi.da a consecuen- nes para que se traicione; la primera con una ,nota escrita: <~¿Qué ha hecho con
ciade.rin acéidente. Es verano, las ventanas ,están abiertaS, la suya y las detos ella?», yla segunda con una llattlada telefónica A partir de entonces, el hoq¡.bre
, apar:t~entos de enfrente, al otro lado delpatio interior. Observar elespectácu- se sabeob~ervado y se vuelve contra su observador: «¿Qué quiere usted de mí?»,
lo' que omcen se convierte en una ocupación apasionante (a faltade un gran re-:- le pregunta en la os~uridad. Jeff, in~apaz de responder. se defiende golpes de a
portajeen Pakistán), hasta el punto de que uno de ellos, el señor Lars Thorwald, flashesy, cayendo por la ventana, obtiene otra pierna escayolada. ' ,
,tieIle,un comportamiento que le pemrite~so~pechar que ha matado a su mujer. Al mismo tieq¡.po que la ~ci9n policial, 14 ventaná indiscreta cuenta la his-
Conffusus sospechas a su enfermer.a y a su amiga que, rápidamente, se prestan toriade amor de Grace Kel1yy James Stewart (ella quiere casarse, él no) y la de
( al juego de descrifrar indicios. Por el contrario, un amigo detective llamado las múltiples gentes de enfrente. l,51 .

l Doyie,recoge pruebas de que la mujer -,-a la que efectivamente no vemos más, La vida de Un edificio en la gran ciudad, la de una bailarina,unpianista,una
que ha desaparecid0--'- se.ha ido de viaje.Jeffy Doyle, cada uno a partir de s~s , joven pareja, una mujer abandonada, etc., se desarrollan sobreJafachada del pa-
respectivas certidumbres, llegan a conclusiones opuestas pero ni uno ni otro tio, en pantallas delimitadas por los marcos de las ventanas. Cada una de ellas
pueden explicarle la suya al otro. Entonces se omce una presunción de la cul~ está contenida en un encuadre que es, a la vez, encuadre de su vida y encuadre",
pabi1~dad_Qel señor ThElrwaId a los espectador~,<de la película y de la sala): de su ventana, aSÍ como en el encuadre dela cámara y el del teleol?}etivo de Jeff.
muere un perrito que pertenece a~~a"PatejaQe V<i~~Glel inmueble y, ante su , La.película se q.es8.n;Qlla de~<!~_ el punto de vista de James Stewart, nunca
grito de desesperación, él.es el único que no se dSo1J1.(l a la ventana. Sin' duda al- abantlon.amos la vision, de~51e su ventana, del edificie"o' de las breve~ excursio-
guna él esquien ha matado al perrito que amen:az~~ cpn desenterrar, debajo. de , nes, a la calle que á veces :realiz~ algunos personajes. Hitchcock sistematizó así
.la,sflores del patio, la cabeza de suinujer. Jeff fut~riia'~ustarle en dós ocasio-
15\. Jean Narboni señaló en lasno~elas«policíacas» de Georges Simenon, entre l~cualeS
- . .
hallamos una titulada ~s gens d'en face(LOs',de delante), la importancia de las ventanas y Jo que
,

149: En Atormentada (UndeF Capricom,l949), su siguiente Pélíc~la. Alfred Hitchcockexp¿


.;' .
éstas dejan ver.' ApuÍ1te~os, por otra parte, la interesante utilización de la fotografía (por ejemplo,
rimentó tomas un pocomás cortas, de'ún máximo de'siete minutos. " . prueba única del cñmen) en la adaptación queJulienDuvivier hizo de F~ailles de Monsieur
I5p.· Hitchcock, en el libro de T,ruffaut. ," , Hire (novela de Georges Simenon) en Panique (1916). '
EL EÑ"CUÁDRE CINEMATOGRÁFICO . TRES PELíCULAS 147

-la utilización del pciderdel cine, que consiste en adoptar el punto de vista de un escénario real, se procuraba úna d6cumentacíóri.fotográficamuy compleúi),.- (-
personaje, en hlgarde'fi1mar objetíVarJ.lente; ,en planos de conjunto más aproxi~ . , estárigúrosamente concebido en función de la: Cámara, es decir; de lasnecesi~
(
· mados a la misma escena. Pese a todo~ la cámara no se utiliza tansubjeti:va- ·dades de montaje y rió a hlinversa. .
mente'como el). LadClmadel {ago, no somos James Stewart, estamósjunto a él. En las películas de Hitchcóckeitamaño d& las imágenes está en furioión, 4~c;""»_
Una solaexcepció~enla película a esta regla del punto devtsta: en el.m,omen:;"- ~.W':' los fines dráináticosy de la emoción, y no sólQ del des~o de mostrar efdecora~
to en que muere el perrito, la cámara está en el patio y no en· el apartamento de· do. Al principio de La ventana indiscreta no aparece la totalidad.del decorado,
James Stewart. lo que constituiría una presentación banal. sino que debemos esperar ha~ta un
momento particularmente dramático,. la muerte dél perrito.
«Es una p'elícu1apuramentecinematográj'ica-deda Hitchcock~, como la Todos los elementos deben favQrecer la aCéÍón, pOI: ejemplo, no Se puede
célebre "experiencia Koulechov", él hizo funcionar los planos en relaci6nlos . . permitir derrochar un plano general que en. otro lIlomeÍlto de hi película pue..:.· .
unos con los otros.»' . . . de ser útil. «El montaje y las dimensiones del plano constituyen una labor de or-
James Stewartpresta su rostro (¿mosjouki1iiano?)a laexp~ri~ncia.Reéorde­ . questación. Nó hay que meter un primer plano a menos que te sea necesario por- .
mos que HitchcockdeSeaba obtenerlaneútralidad de.sus actof!i~:«Enmiopi.·· ·que inás tarde lo puedes necesitar», aconsejaba Hitchcock..
· nión, el actor de llillipelículadebe ser liVilijlo y,en realidád, no debe bacel abso- ~. .Otro gran principió de la filmación hitchcockiana consistía en no tener Ja-
lutamente nada. Debe. tener wlaactitud tranquila152 ;tatural :.,....Cosa que, p6fotra. · más en cuenta las contingencias del rodaje, en estar siempre en condiciones 'de
parte, tampoco es tan s~ncilla""':' y debe aceptar que lacánlaray el director :10 uti-· obtener el efecto que buscaba en lapantall~ Sihien él no miraba por el visor,
licen y 10 integre~ sober3IWIlente en la pelÍcula. Debedejat que séala cám.ara la sus c~arl:lS tenían que reproducir exactamente sus dibujos y, por otra parte, sa-.
que seencargrie de h~los:ntejoresacentos ylcis mejores puntos: culminatitéS»... · ber «que nunca debe haber -aire o espacio en torno alosperspnajes. No hay
Éste es. el contexto en .elque hay que entender la palabra ganado queHitch- ·que dejarse impresionar jamás por el espaciO' que se halla ante la cámara, dado que
cock utilizaba a propósito de los actores y que, durante mucho tiempQ, . &e con..;· debemos cQnsidérar que, para obtener laimagenfinal, podemos coger un par de
sideró un desprecio. En absoluto, explicó ~~~es Stewart con'motivo del rees- tijeras y cortar el desecho, el espa~io inÚi1Í».· ,.
treno de una de las películas de Hitchcockenlas que interviene; se ~ como Hitchcock pensaba que ~a técnica cinemato.gráfica permitía obtener todas
en Íos rebaños del western, de dejarse guiar, de no descarriarse. · las iinágenesprevistas y. deseadas: «N<;> ,existe' razQn alguna. por ·la que· haya.
,Hitchcock, además, en una entrevista grabada para Cin.éastesde notre que renunj¡:iar o IIÍstalarse ene1 .compromisoentre la intagenprevistay la
temps, reconoció que el oficio de actor de cine presenta más4ificultades que el imagen obtenida. Sino hay ninguna película rigurosa en este sentido es por-
de actor de teatro, ya que hay que interpretar igual de.bien y; además, tener un que en nuestr~ industria hay.demaslada.ge:llte que nO entiende nada de imagi-
rostro,e~presivo (dadas las dimensiQnesqueéste adquiere en lagranp,ant3lla). .nería». . .•. ,
En este sentido, enLa ventana indiscreta ..;....la segund~ Película de HitchcOck en , . y ¿qué es la imagfneria7En tod() caso no es una· ~pia. de ía re~4ad.. Un:
.la que intervenía, pósterionnente sería la heroína de Atrapa a un ladrón (T~ ejemplo tomado deLaventt1!la·indiscreta nos permite comprenderlo; Se triÍta ~
Catch aThief, 1955}-, GraceKelly tiene una:expresión absolutamente. admi- , la escena en Ja que el serior Lars Thorwald, ~l presunto asesino, tirita James Ste-
. rabIe, casi podríamos afinnar que tiene unrQstro(y no sólo Una ñ:úrada) multi- , wart.por la ventana. Eh. primera instancia HitGhc<>ckla había filmado en tono rea~
facético, cuandQ la fIlman contemplando el espectáculo del patio, y' partic11lar- lista, es decir, «entera». «Era débil,- no transmitía nada, de modo que filmé el
mente en los motD.entos en que el diálogo ~borda cub~tiones de psicología y de primer planO' de Una mano que se agitaba, un 'prlmerplanodel rostro delames '
intuición1'emetlma. . · Stewart,un primer plano destispiernas,. uIj. primer .plano del asesino y luego le
y C~ Gr~:sería el rostro hitchcOckiano porexcelericia. di ritmo; la sew;ación final fue correcta;» . .'
. Al igq.~ que l~s actores,. el. decorado --'-'que. desempeña· una. función' muy En La vent~a indiscretal~dimensiones de los planos soillógicas,correS-:-
· importante *illilpelícula (es ala vez el Iugm:de1 ~men, un espacio cerrado y ponden al punto de vista de James StewarL ea!):)"" veta los protagQnistas a la
1.m teatro' de la vida) y da sensación de- realismo (la veracidad de los decorados·· distancia real entre los dos edificios hubiera sido insoportáble; Hitchccick mos~
y el· mobiliario preocupó siempre a Hitchcock y, cuando no podía rodar en. un tró a: James 'Stewart mirando a través de unos gemelos y con ún enorme~leob­
jetivo justificado por su trabajo de fotógrafo.Asínosotrostim1bi6íi podemos ve"r .
152. Otrodneasta.Do~glas Sirle, dijo ~n un prograrnadeCtnéma, Cin¿inl1sliasta'qué punto lo que pasa enfrente.
.em importante qúe lOs. áctores de cine f;Uvi~n un rostrotra1UJ.uilo. . Hitchcock utiliza muc4as veces elhechode;q~e.JamesS~wari sea fotógra~
148 EL ENCUADRE CINEMATOGRÁFICO TRES PELíCULAS

l'\..
.fO.Jean-Alldré Fieschi153 ha escrito que el observador (sea éste James Stewart o
e el espeétador) podíarecons~ir_ «en instantáneas» 'todo un modo de vida y sus
( regias, las de un edificio dé·ap~tamentos.·-
Pel;o, ¿cómo nos enteramos de que James Stewart es fotógrafo? Visualmen-
te, gracias a mi largo movimiento déla·cámara. Veníos'el patio adonnílado~ el
/,
1:
rostro de James Stewart,su pierna escayolada, un aparato de fotografíli roto y,
en la pared, fotografías de coches de carreras volcados: está todo dicho.
Más,tarde será una diapositiva, tomada quince días antes, la que nos da la
, prueba de los cél.mbios de orden ocurridos en el patio. Quince días antes las flo-
res estaban más altas. La pel$culamuestra el presente estado del patio (el,asesi-
no ha enterrado ahílacabeútde su mujer)~ la diapositiva permite verlo de nue-
vo en el estado en que se hallaba quince días atrás, antes del crimen.
y por fm, el arma que utiliza James Stewart, siempre inmovilizado y ,por lo
. tanto indefenso, contra el señor Thorwald cuando ~1te.aeude en busca de:.~xpli­
caciories: los fogonaZos delflash. Enlanovel~ el h~oe blandía un busto de Bee-
thoveIlque tenía al a1cance de la mano y recibía, a cambio, golpes de revólver.
Otros cineastaS hubieran qtiljzado el diálogo para exponer el tema, Hitch-
cock,considerabaque los· diálogos eran recursos demasiado fáciles de laexpre-
'sióIl~'cinematográfica: «El diálogo"aebe ser un ruido éntre otros, un ruido que
sale de la boca de los personajes cuyas acciones y iniradas cuentan una historia '
. visual». J?eastas, no era una pretemfónde verosimilitud lo que ~e animaba{sinO.'iIlás bien
En'La ventana indiscreta, por mor de la distanCia que separaba el aparta- una preocupa~rónporláperfeCeión delresultado.. . , " "" .
menttr de James Stewart, 'de los de enfrente; las palabras' se escuchaban como . Sin discusi6n, Lt;lventana indiScreta'ésuna de suS películaSni~1?~rfec:tas y.
( roidbs, las entonacioneS se percibíany venían a mezclarse con «tOdo un zumbi- más analizadas,-d~pués.deCon.lamuertein los talónes-: Yesqúeel tema
do sonoro de un realismo extremadamentem~tic\llosoque suma su espacio. au'" de la película es 'SUmIsma esencia: la visión, el espectáculo; ylil teOría del es.,
ditivo a ese decorado tan preciso»}54, .' , pectáculo (fl.lma!,mirar; ufihOI;nbre que mira) va acompañada de \lna teonadel
Hitchcock insIste entodas ,BUS películas en ese realismo del ambiente sono-,;, ,espacio cir!ematogIáfico.
ro que, al igual que la iuz, nos hace sentir~ por ejemplo, la noche (los coches~ las James Stewart, impovilizado ante su ventana,~recuerda a los espectadores
bObinas, las voces se espacian y la llu.via, por el contrario, se escucha más):.En ,~ ante la 'pantalla de lásala.de ciné, está «pegado a la butaéa~) comósejÍaló Truffaut.
La soga el ambienté de un exteriO.r que no vemosjamás, pero que escuchamos, y además, él es él hombreque,en su casli, prefiere la televisión asú mujer, '
tuD.cipna un poco. de la misma manera, en relación al interior ya la acción que. duda entre uno u, otro programa (un' nlel<>d.rama, una '. película erótica; ,etc.) ,y
e en él transcurre, que en La ventana indiscreta. Cuentan que elingéniero de so- cambia de cadena v~as ~eces~ Finalmente su atención se centr~en unth~iller.
( nido., de La soga propuso utillzaruna sirena dé sonoteca como sirena de la poli- ¡más hitchcockiano queli!-tchcock! El espectáculo es tantO.m~ apasionante
cía queémpezará suavement~y luego fuera «subiendo» progresivamente a fin cuanto es verdadero~ dado que tÍo setr~ta ni de una pe1ícql~ .ni de una novela
de dar sensación de distancia. Hitchcock se negó categóricamente a usar ese sino de la vida(¡pde la muerte?) de 10,syecirios aecéiífrente~ :. ~ >.
:;::
subtelfugio,mandó alquilar una ambulancia con sirena" situar el micro en la Claro qüe, eso; «S610escine»;15s ." • ,
"
. .' .puerta del decorado' y hacer el trayecto real de la ,ambulancia: \

Ciertamente, si le juzgaII\os a.partir de sus teonas· sobre el arte cinemato- , , l'


gráfico y elhecho de que apodara irónicamentélos «ver()similes»a los otros ci-

153. En un artículo publicado por Caméra/StylQ;-noviembre'de 1981.


154; André Bazin. ' " 155. Alfred Hitchco9k en Cintastes de natre temps.
j.
_ í, }

.)50 EL ENCUADRE CINEMATOGRÁFICO


(

8•. S~lo es cine,


(
\

( \
~- j

«Sólo» es cine, y La ventana' indiséreta. «sólo» ed una película. Nada dema-


siado.impor~te, no vale la pena hablar mucho de elló, hay cosas más impor-
tantes ,en la vida,parecí~ decir IDtcl)codc, con su, peculiar humor.
Pero ¿y si~taél élque~ebUIla~a:delm~do, ytománunos su frase en se-
río? No sena difícil adivinar que, ciertamente, para: Hiichcock el cine no erala
vida, era su vida,_ Por lo tanto no era «s610»~ ló era. todo. Y, en ese «sólo» se pet'-
cibíatambién que su :Vidaha,bíasido unav~da de cine y que su cineestabarela-
, cionado con su vida. ¿Por qué, por ejemplo, en una de sus películas ~osa­
mente una de las rp.ás abstractas-- hizo que pájaros auténticos atacaran a Tippie ,
, Hedren, después de haberle deJado creerque iba a.rodar la escena con IÍlUñecos?
Acto seguido, podrúuDQs .deducir 'una observación de orden general: elcine,
es
incluso cuando'no autobiográfico, éstá vinculado a una vida, a unapersoila,
el cine no «sólo» t(S c i n e . ' .' ,
Siguiendo con ese razonamiento, ¿~mo concebiríamos el encuadre, que, se-
,.gún Hitchcock,éra una fáse decisiva dela reálización de las películas?,
Recordemos lo quedecíadelrodaj~:~'Sóbre tOdo cáIilat'ID>, príncipalmen-
~'el trabajo de C;áInara. Sabemos que súsencuá<4"e$ ~taban extremadamente, pré-
',' parados, que sl;1s cámaras. y actores también lo estab(U1. 'Por lo tanto podemos pré~
guntamos cuál era elpapeldel.«directoD>dui:ante elrodaj~,un papelque nadie
SÓLO ES CINE
152 EL ENCUADRE CiNEMATOGRÁFICO

te en la fºrma puede hacernos correr el riesgo de firmar un cuadro vacío, dep~r-


derel «fondo». .
Me gustaría concluir con un homenaje al cineasta más_magnétiCo: Fritz
Lang, quien, no sólo en Los crímenes del doctor Mabu.se. (Die Tausend Augen
des Dr.' Mabuse, 196.0), criyo tema es la hipnosis, sino en todas sus películas,
supo transmitir BU sentido del encuadre -sin duda lo más indiscutible de todo
el cine- a cada uno de sus planos.
Cuando se observan las fotografías de plató de sus películas, ya sean ale-
manas o americanas, entre las primeras y las últimas de su obra, interpretadas
por tales actores y fotografiadas por X o por Y, ya sea su tema romántico, poli-
. cíaco odirectamente político, su semejanza nos sorprende. En,cada ocasión
existe una fuerza particular y casi salvaje que imponen el encuadre (que, sin em-
bargo, no es el de la película, ni siquiera son fotogramas) y el intenot del cua-
dro: personajes en pie; m~os que ~mpuñan, sostienen, estrechan, marcos de
puerta o bordes de ventanas, violencia. ¿Es «s6lo» cine? .

(
.Deséós humanos, de FritzLang: Brodenck CraWfotd, Gloria GdmatÍ1e y Glenn Ford

podía hacer por éL. Cuentan que un día que se hallaba enfermo confió a Peggy le
Robertson la tareade sustituirle. Ella· sólo tuvo que limitarse a «dirigir» la escena,
dado·que todo estaba «hecho». sobre el papel. Pues bien, el rodaje no funcionó con
ell~y,cúando estuvo restablecido, Hitchcock tuvo que repetir la secuencia.
¿Qué hacían esos grandes a~t6resl56sino mirar (a veces con un solo ojo), o
escuchar-Pagnol, p6r'ejemplo, lejos de la cámara, dentro del camión. de soni-
d~, estar allí y trasmitir su pensamiento,suJuerza, su fluido, a un equipo ya
una película, toma a toma?
Ami parecer, podríamos avanzar la idea deunapresencia delos realizado~
res,. igual que n<?s referimos a la presencia de ciertos actores; ambas presencias
de naturaleza magnética. Ya estén en Hollywood sentados en «su» butaca o en .
Japón~ sentados en el suelo~ de pie; ansiosos o en cuclillas al pie de la cámara,
viven la toma que necesariamente ya han pensado. Para ellos el encuadré es la
\ . realización de esetra.bajo mental. Antes dela·toma, el arte del realizador con-
siste en magnetizar a los actºr~~ilpedirles mucho y en preparar los en~uadies
que den forma a lo que se «to'mará;;. El encuadre es eso, «sólo». Si nO ~e sabe
éncuadrar,«se
' .
pierde todo en.el viento» .157 Sin embargo, insistir .excésivamen-
, .

r5~ .. Louis Skoreck'i tambi~n sel~ pregunt6, a propósito dé }::Iawk:s, quien, durante sus' róda- .
jes, parecía que (s610) ponía en eSCI?~á máquinas perfectamente engn¡Sadas, y de Walsh, quien
contemp~aba el rodaje de Una tromp~ta lejana (DistantTrumpet, 1964), libération, 31. de enero
. dé J984. ...
.. 157~Wim Wenders, siempre p~~upádo por el encuadre, LiJ;;ération, 11 de enero de 1984.
Créditos fotográficos'··

~., . . .. ,

Colección Janine Bázin:'páginas 44,62,72, 121,122,125,140;149.;


. Colección Cahiersdu ciné",ª:páginás n, 13,14~16, 21, 22, 25, 35,37,41,
51,52,59,63, 64,76,79, 83, 88, 95~ 101,104~ ~05, 108,109, 113.114;-115,.
116, 133, 138, 141, 145, 150., 152.
. Colécción Alain Douarinou:páginas 31 ~ 33.
Colección Roben Foucartf.;.página 120.
Colección Alaiii Philippe: página 85.
Agencia Magnum: página 9.

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