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Desintoxicación
El primer paso en el tratamiento de diagnóstico dual es la desintoxicación. Esto se
refiere a la auto limpieza del cuerpo del alcohol o de otras drogas durante un
período de tiempo. Dependiendo de la gravedad de la adicción, este proceso
puede tardar unos días o unas semanas antes de que el cuerpo es considerado
limpiado de estas sustancias.
Tratamiento dual
Después de la desintoxicación, doble tratamiento se inicia con el fin de rehabilitar
el individuo que sufre de un abuso y también proporcionar un tratamiento para la
enfermedad mental subyacente. Se siguen diferentes tipos de enfoques de
tratamiento durante la fase de rehabilitación. Algunos de estos enfoques incluyen:
sesiones de psicoterapia individual y de grupo, proporcionar educación sobre los
efectos nocivos del abuso de alcohol y drogas, el ejercicio físico, la nutrición
adecuada y la participación en los programas de recuperación, como Alcohólicos
Anónimos. Las terapias psiquiátricas se denominan colectivamente como terapias
de comportamiento. Al mismo tiempo, también se inicia la terapia para la
enfermedad mental subyacente. La terapia para la enfermedad mental puede
variar en función del tipo y la gravedad de la enfermedad. La terapia conductual
con o sin medicamentos se recomienda comúnmente en el tratamiento de
patología dual. La participación en grupos de apoyo, terapias de relajación y
muchas otras modalidades se recomienda para ayudar a las personas a superar
los síntomas mentales.
Recuperación
Aunque el tratamiento puede prolongarse en los individuos con “diagnóstico dual”,
la recuperación es posible. La persistencia es la clave del éxito en este tipo de
tratamientos. La probabilidad de recuperación es alta en los individuos que se
someten a los protocolos de tratamiento dual. Aunque se han descrito algunos
casos de recaída, que es mucho más fácil para los individuos para reiniciar el
tratamiento y superar la recaída. Estímulo regular de familiares y amigos en lugar
de la fuerza, es necesario para una recuperación más rápida. El apoyo adicional
se puede obtener de las personas que han tenido éxito en la superación de
problemas similares. En conclusión, el tratamiento de la patología dual depende
igualmente de las opciones de tratamiento como la persistencia bien y la
determinación de las personas afectadas para superar los problemas.
Las drogas psicoactivas son las que modifican las funciones mentales. Algunas de
ellas tienen la capacidad de producir dependencia. La manifestación característica
de la dependencia es el deseo intenso de ingerir sustancias psicoactivas. Los
fenómenos de tolerancia y abstinencia indican que se ha desarrollado
neuroadaptación. La dependencia no se "cura" cuando se revierte la
neuroadaptación, se sufre para siempre, aunque no se consuma la sustancia
adictiva. El curso más habitual de las dependencias se caracteriza por períodos de
remisión, más o menos duraderos, que se interrumpen por recaídas.
Manejo terapéutico: El problema más importante que existe en el tratamiento de
las drogodependencias es la actitud de los profesionales ante estos trastornos.
Cuando aplicamos el modelo moral de la enfermedad el profesional adopta
actitudes impropias de su papel y todo el proceso terapéutico se tambalea. La
valoración del resultado del tratamiento debe ser multiaxial. La eficacia de los
tratamientos se valora como una reducción significativa en la gravedad del
trastorno adictivo.
La neurosis podría definirse como la estrategia que desarrolla la persona para
eludir lo inaceptable (decepción, frustración, ira…), aunque con frecuencia lo que
más trata de evitar el mecanismo neurótico es el sentimiento de angustia
existencial o ansiedad. En pocas palabras, la personalidad neurótica es aquella
que mantiene elevados mecanismos de defensa para no enfrentarse a emociones,
pensamientos, o instancias de la realidad (tanto interna como externa) que le
resultan amenazantes.
La Característica principal del neurótico es que rechaza de la conciencia aspectos
de su realidad interna, tomando distancia de sus sentimientos, pensamientos o
deseos, mediante pautas rígidas de acción o estrategias psicológicas que tiene
automatizadas y por lo tanto utiliza sin darse cuenta, pese a que en algún grado es
consciente de que hay algo en su interior que no acaba de salir a la luz y que le
dificulta desarrollar una vida más plena.
En la neurosis, al contrario que en la psicosis, no hay una pérdida de realidad, en
el sentido de que no sufre alucinaciones, o dicho de otro modo, la concepción de
lo que es real se adecua a lo que la sociedad define como real y por tanto de
pensamiento “normal”
En definitiva, lo que la psicoterapia de la neurosis persigue es la comprensión de
los síntomas que se despliegan en la neurosis, su función, y la provocación de un
cambio estructural en la manera que la persona se experimenta a sí misma y al
mundo