HABILIDADES FUNDAMENTALES PARA LA GESTIÓN DE CALIDAD DE
LA VIDA LABORAL.
En los últimos tiempos el mundo ha cambiado demasiado a una velocidad
que cuesta comprender, en gran parte gracias a los avances tecnológicos, por lo que las empresas u organizaciones han tenido que adatarse y cada año están más conectadas, cada vez buscan innovar y mejorar en todos los aspectos, especialmente en el servicio, lo que las lleva a querer mejorar la calidad de vida de sus colaboradores, porque es sabido que un equipo de trabajo que se siente a gusto y valorado, brinda un servicio de una mayor calidad, pero para lograr esto las organizaciones han debido llevar a cabo una serie de cambios, cambios en su cultura y comunicación organizacional , dado a que es muy importante implementar planes de bienestar que beneficien a todos y cada uno de sus colaboradores, para lograr mejorar sus condiciones y calidad de vida laboral y poder hacer de estos cambios y mejoras parte de él “ser” de la organización y mejorando la imagen corporativa, lo que puede atraer nuevos talentos que pueden llegar a ser clave y también posibles clientes, esta serie de cambios no siempre son fáciles de lograr. Para poder lograr un cambio en las organizaciones es necesario tener en cuenta que no siempre es sencillo, ya que la resistencia al cambio es común en los procesos que implican cambios, en la mayoría de los casos podemos ver presentes cuatro etapas: La negación, que se presenta cuando existe la creencia de que el cambio deseado no se va a lograr y existe el deseo de volver a las estrategias anteriores. La resistencia, cuando ya se comenzó el proceso, pero se cree que “esto no va a pasar”. La experimentación, que es el momento en el que se decide darle un voto de confianza al plan de cambio. El aprendizaje, que es la etapa en la que se pueden apreciar los resultados. Al realizar un proceso de cambio e intentar llevarlo a cabo dentro de la organización es muy necesario que la persona que promueva o divulgue este, sea alguien con la facilidad para motivar a las personas, alguien que las impulse y tenga cierto grado de influencia positiva sobre el equipo de trabajo que será parte del proceso, un líder, entre las características de un líder podremos encontrar: 1. La integridad : Es la correspondencia entre las acciones y las palabras. La honestidad y la credibilidad. 2. Empuje: Son aquellas características que reflejan un nivel elevado de esfuerzo con grandes necesidades de logro, esfuerzo constante por mejorar, ambición, energía, tenacidad y persistencia ante los obstáculos. 3. Motivación de Liderazgo: Esta se refiere a la necesidad de poder, al gusto y deseo de dirigir, a la preferencia por estar en la posición de líderes y no de seguidores. 4. Confianza en sí mismo: Esta característica es muy importante, sobre todo frente al hecho que el liderazgo es desafiante y los reveses son inevitables. La confianza en sí mismo permite al líder superar obstáculos, tomar decisiones a pesar de las incertidumbres e infundir confianza en otros. 5. Conocimiento del negocio: Los líderes efectivos tienen un amplio conocimiento en el detalle del negocio en el cual trabajan, de la industria, la técnica, el mercado y la competencia. Se requiere de una gran inteligencia para interpretar información abundante.
Se debe tener también en cuenta que el líder no es el encargado principal de
implementar el cambio en la organización, La tarea de los líderes es movilizar a la gente de toda la organización a hacer el trabajo adaptativo, es decir, a adaptar su comportamiento de manera que puedan salir adelante en el nuevo ambiente competitivo y cambiante y motivar a sus colaboradores para que acepten los cambios, que en realidad vienen a ser mejoras. Para poder llevar a cabo un cambio organizacional es necesario primero analizar las necesidades, el porqué está siendo necesario un cambio y cuáles serían sus beneficios al implementarlo. Segundo, tener claro quiénes serán las personas encargadas de apoyar este proceso en cada una de sus áreas y sus etapas, Desarrollar y mostrar los nuevos valores o las nuevas normas que hagan ver la nueva situación que se quiere lograr y dejar claro qué o cuál es la costumbre o norma que se quiere dejar atrás. Tercero, minimizar el riesgo de cambio. Quinto, por la finalización, donde se evalúan los beneficios obtenidos y el excito de cada una de las etapas. Sexto, el nuevo inicio, en este punto toda la organización ya comienza a aplicar los cambios para luego hacer evaluaciones en el mediano y largo plazo.
En conclusión, para poder gestionar una buena calidad de vida laboral, es
necesario ser un profesional con muchas competencias, como lo son la empatía, liderazgo, visión, empuje, innovación, con la facilidad de mover personas, confianza y mucho conocimiento sobre la organización, con la habilidad de aplicar la indagación apreciativa.