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Documento

Rol: 33634-2015
Ministro: Sandoval Gouet, María Eugenia
Ministro: Aránguiz Zúñiga, Carlos
Ministro: Egnem Saldías, Rosa
Ministro: Pierry Arrau, Pedro
Ministro: Valderrama Rebolledo, Manuel Antonio
Redactor: Sandoval Gouet, María Eugenia
Tribunal: Corte Suprema Tercera Sala (Constitucional)(CSU3)
Partes: Obrasco Huarte Lain S.A. con Fisco de Chile
Tipo Recurso: Recurso de Casación en la Forma
Tipo Resultado: Acogido
Fecha: 30/08/2016
Cita Online: CL/JUR/6126/2016
Hechos:
Demandante interpone recurso de casación en la forma y en el fondo contra la sentencia de la Corte de Apelaciones, que confirmó
el fallo de primer grado, que acogió parcialmente la demanda, rechazándola en aquella parte en que se reclaman los perjuicios
provenientes de las sucesivas modificaciones y agregaciones a la obra, introducidas, de manera tardía, sin respetar el programa de
trabajo acordado en el contrato. La Corte Suprema acoge el recurso de nulidad formal deducido y dicta sentencia de reemplazo
Sumarios:
1 . La sentencia impugnada reconoce el derecho a demandar la indemnización de los perjuicios que le habrían sido ocasionados por el
mayor plazo que implicaron las modificaciones al proyecto, en razón de las reservas expresas que se estamparon en tres convenios y
por la falta de finiquito en uno de ellos. Sin embargo, arriba a una conclusión opuesta, al afirmar que en esos mismos convenios los
contratantes ya habrían acordado el monto que se debía pagar por los conceptos o rubros que ahora se demandan en sede judicial. Por
lo tanto, ante la existencia de considerandos transitorios, sólo cabe concluir que los sentenciadores de la instancia no efectuaron un
adecuado razonamiento acerca del asunto sometido a su conocimiento. Por consiguiente, queda de manifiesto que la sentencia
cuestionada se construye a partir de motivaciones antagónicas que no pueden coexistir, lo que conduce a la anulación de esos
razonamientos, quedando desprovisto el fallo de la fundamentación exigida en el artículo 170 Nº 4 del Código de Procedimiento Civil,
con lo cual se configura el vicio de casación en la forma previsto en el artículo 768 Nº 5 del mismo Código (considerandos 4º a 6º de la
sentencia de casación)
2 . El Programa de Trabajo constituye uno de los aspectos fundamentales del contrato de construcción, en tanto describe el cómo, en
qué orden y en qué período se ejecutarán cada una de las partes que componen la obra. En este orden de ideas, la recurrente ha alegado
que las modificaciones introducidas al diseño del proyecto y los atrasos en el programa de trabajo no sólo le generó gastos directos al
contratista -los que en la especie fueron cubiertos por los valores fijados en los Convenios Modificatorios- sino también costos de
sobreestadía, financieros y pérdidas de productividad (considerando 3º de la sentencia de reemplazo)
3 . En lo concerniente a los montos por pérdidas de productividad, cabe consignar en primer término, que el Reglamento para
Contratos de Obras Públicas no considera eventuales compensaciones económicas al contratista por los perjuicios asociados a pérdida
de productividad de responsabilidad del mandante (considerando 6º de la sentencia de reemplazo)
4 . De acuerdo a lo establecido en el Reglamento para Contratos de Obras Públicas de 1992, se indemnizará por mayores gastos
generales por extensión del plazo sólo en los casos contemplados en los artículos 138 y 139, esto es, cuando se aumente el plazo a
consecuencia de un atraso en la entrega de materiales de suministro fiscal o cuando el incremento del plazo se origine por causas
diversas, dentro de las que no se incluye la incorporación de modificaciones a la obra (considerando 13º de la sentencia de reemplazo)
5 . El hecho de tratarse de un contrato a suma alzada, esto es, aquél por el cual se conviene la construcción de una obra determinada
dentro de un plazo y precio prefijado, no significa que el contratista asuma dentro del precio acordado los efectos de los
incumplimientos del mandante de la obra. Al efecto, la Corte Suprema ya ha sostenido que la circunstancia de ser un contrato a suma
alzada el celebrado por las partes, no puede conllevar que el contratista deba asumir los riesgos o mayores costos cuando ellos sean
imputables al actuar negligente del mandante. En otras palabras, tratándose de un contrato a suma alzada, el contratista debe asumir el
riesgo de que la obra contratada resultare más onerosa que lo que calculó, por ejemplo, por un aumento de precios de los materiales,
equipos o mano de obra, pero no puede pretenderse que le corresponda asumir todos los gastos extraordinarios que provengan de las
condiciones diferentes en que debió ejecutarse la obra, como consecuencia de la alteración sustancial de la secuencia constructiva,
originada en las modificaciones que el MOP ordenó para solucionar las inconsistencias y errores de que adolecía la obra diseñada
exclusivamente por él. Es por ello que la actora, en los Convenios Nºs. 2, 3, 4 y 5 hizo expresa reserva del derecho a demandar la
totalidad de las indemnizaciones por los mayores costos derivados de las extensiones de plazo del contrato, ante lo cual la
Administración respondió que se pronunciaría respecto de ellas en la oportunidad que correspondiera (considerando 29º de la sentencia
de reemplazo)
6 . Atendidas las características de los conceptos demandados por el contratista, a fin de determinar su procedencia y cuantificación, la
prueba por excelencia de estos autos es, sin duda, el informe pericial, medio probatorio a través del cual se busca explicar en forma
razonada determinados hechos. Y para la apreciación de este tipo de prueba, el artículo 425 del Código de Procedimiento Civil
establece que "los tribunales apreciarán la fuerza probatoria del dictamen de peritos en conformidad a las reglas de la sana crítica". Si
bien el sistema de valoración de la sana crítica confía al juez valorar la prueba, siempre habrá de hacerlo de acuerdo a criterios
racionales. Lo anterior implica que deben darse razones objetivas que den fundamento a la decisión. En la especie, el informe pericial
del IDIEM aportó elementos objetivos que hacen posible una decisión racional sobre la controversia sometida al conocimiento de los
tribunales. Efectivamente, es categórica dicha pericia al dar cuenta que durante el desarrollo del Proyecto "Hospital Militar de La
Reina" ocurrieron una serie de eventos que afectaron el normal desarrollo de los trabajos de la obra y que se tradujeron para la empresa
contratista en costos asociados a la existencia de mayores plazos que son atribuibles al mandante (por sobre estadía, costos financieros,
etc.) (considerando 31º de la sentencia de reemplazo)
Texto Completo:
I. Sentencia de casaciónSantiago, treinta de agosto de dos mil dieciséis.
Vistos:
En estos autos rol N° 33.634 2015 sobre juicio ordinario de indemnización de perjuicios por incumplimiento contractual en contra
del Fisco de Chile, la demandante, Obrasco Huarte Lain S.A., Agencia en Chile en adelante, OHL , dedujo recursos de casación en la
forma y en el fondo en contra de la sentencia de la Corte de Apelaciones de Santiago que, confirmando la de primera instancia, acogió
parcialmente la demanda, rechazándola en aquella parte en que se reclaman los perjuicios provenientes de las sucesivas modificaciones
y agregaciones a la obra, introducidas, según estima la actora, de manera tardía, sin respetar el programa de trabajo acordado en el
contrato.
Refiere la demandante, empresa del giro de la construcción, que se adjudicó el contrato de construcción de obra pública
denominado "Construcción y Equipamiento Técnico, Médico, Clínico, Industrial y Administrativo del Hospital Militar de La Reina",
hoy Hospital Militar de Santiago, de una superficie construida de 85.000 metros cuadrados. El contrato se celebró el 12 de agosto de
2004 entre el Ministerio de Obras Públicas como mandante del Comando de Salud del Ejército de Chile, y la actora, OHL, como
contratista.
Indica que el precio original de la obra fue la suma de $72.000 millones de pesos, equivalente en esa época a US$120 millones de
dólares.
Señala que su parte cumplió con todas sus obligaciones contractuales, construyendo y equipando ese hospital, el que se encuentra
en uso público desde el año 2009.
En lo pertinente a los recursos de nulidad, los perjuicios demandados por OHL son costos y pérdidas causados por las
modificaciones tardías al proyecto que fueron introducidas por el Ministerio de Obras Públicas, las que no habrían sido compensadas al
momento de celebrar los Convenios N° 2, 3, 4 y 5, suscritos para plasmar tales cambios y alteraciones del programa constructivo. Pone
de manifiesto la reclamante que, al firmar dichos convenios, el mandante sólo aceptó pagar el costo de aquello que agregaron a la obra
durante su ejecución, pero no reconocieron los perjuicios derivados de la alteración de la secuencia constructiva.
Se trajeron los autos en relación.
En cuanto al recurso de casación en la forma:
Primero: Que este recurso acusa que la sentencia impugnada incurre en la causal de nulidad establecida en el artículo 768 número
5 del Código de Procedimiento Civil, en relación con el numeral 4 del artículo 170 del mismo texto legal, esto es, la falta de
consideraciones de hecho y de derecho que deben servir de fundamento a la sentencia.
Expresa que dicho vicio se configura, en primer término, al contener la sentencia consideraciones contradictorias que se anulan,
circunstancia que la torna en no fundada.
Explica que existe una contradicción esencial entre los razonamientos expuestos en los párrafos primero y segundo del motivo 37°
del fallo de primer grado y la consideración contenida en el párrafo tercero del mismo fundamento. Al efecto expone que, en los
referidos párrafos primero y segundo, se reconoce que OHL se encuentra habilitada para demandar los efectos económicos asociados a
los mayores plazos otorgados en los Convenios Ad Referéndum por Modificación de Contrato N° 2, 3, 4 y 5, en virtud de haber sido
aquellos perjuicios expresamente reservados en los Convenios N° 3, 4 y 5 y, asimismo, por no existir finiquito en el Convenio N° 2.
En el mismo sentido, agrega, en los considerandos 34°, 35° y 36°, el juez de primera instancia señala el claro alcance de las
reservas consignadas en los Convenios N° 3, 4 y 5, para luego concluir en los dos primeros párrafos del considerando 37° sobre los
plenos efectos de dichas reservas, y de la ausencia de finiquito en el Convenio N° 2, en orden a que OHL se encontraba habilitada para
reclamar aquellos perjuicios que fueran consecuencia directa y/o indirecta del aumento de plazo. Sin embargo, reprocha la recurrente,
no obstante reconocer el sentenciador que los efectos económicos asociados a los mayores plazos otorgados en los mencionados
Convenios fueron objeto de reserva expresa por parte de OHL y, por ende, no se encontraban compensados y que, además, la
contratista se encontraba habilitada para demandarlos, en el último párrafo del considerando 37° se indica que todos los costos
asociados que derivan de las modificaciones extemporáneamente incorporadas por el demandado al Programa de Trabajos, habían sido
solucionados en los mismos Convenios, incluyendo aquellos expresamente reservados por OHL, los cuales corresponden a lo pedido
en la demanda.
Asevera que de lo anterior se sigue que, los hechos de la causa que son establecidos en los dos primeros párrafos del considerando
37°, luego son negados en el último párrafo. En efecto, recalca, en ese primer párrafo se estimó inconcusa la existencia en los citados
convenios de las reservas expresas de la contratista de su derecho para reclamar tales indemnizaciones, declaración que es concordante
con lo que la misma sentencia de primera instancia consigna en los considerandos 34° a 36°. A su turno, en el segundo párrafo del
motivo 37° se establece que la contratista está habilitada para reclamar de los perjuicios derivados de los cambios extemporáneos
emanados de los Convenios N° 2, 3, 4 y 5, en atención a que no existió finiquito de la contratista en el Convenio N° 2 y a que existió
expresa reserva en los Convenios N° 3, 4 y 5. Censura entonces que la decisión que se adopta en el último párrafo del considerando
37° sea la de negar los derechos que se demandan y la legitimación para reclamarlos, al concluir que las partes ya habían acordado el
monto que correspondía a OHL por los conceptos que se reclaman judicialmente.
Hace presente que los sentenciadores no explican de qué modo los derechos y acciones que consideraron plenamente vigentes en
los Convenios N° 2, 3, 4 y 5 se podrían haber perdido al suscribir esos mismos convenios. Es decir, los mismos documentos convenios
en los que los jueces se fundan para declarar un derecho y la acción para ejercerlo, inmediatamente los emplea para negarlos.
Estima la recurrente que resulta incomprensible la conclusión de dicho párrafo tercero de que todas las indemnizaciones derivadas
de las modificaciones extemporáneamente incorporadas al Programa de Trabajos, habían sido convenidas y solucionadas en los
Convenios aludidos, en circunstancias que estos últimos instrumentos sólo tuvieron por objeto regularizar tardíamente el precio de
tales modificaciones, pero no incluyeron las indemnizaciones por el retraso en la entrega de esas modificaciones, las que fueron
expresamente reservadas.
El segundo vicio en que incurre la sentencia recurrida y que también configura la causal de casación en la forma que se ha
invocado, se hace consistir en la falta de valoración de la prueba rendida, particularmente la prueba testimonial y pericial evacuada por
el IDIEM designado de común acuerdo por las partes limitándose a enunciarla.
Afirma que la referida ausencia de análisis pudo haber tenido incidencia en la verificación del vicio anterior, toda vez que es esta
falta de ponderación lo único que quizás pueda explicar la declaración que hace el tribunal en el párrafo tercero del considerando 37°
de que la totalidad de los perjuicios ocasionados a OHL a consecuencia de las modificaciones extemporáneamente incorporadas al
proyecto, fueron convenidos o solucionados, contradiciendo las reservas consignadas en los Convenios N° 2 a 5.
Segundo: Que como se advierte de lo expuesto, el primer defecto que se acusa se refiere al considerando 37° de la sentencia de
primer grado que hace suyo la del tribunal de alzada , que es el que sustenta la decisión de rechazar la acción indemnizatoria por los
perjuicios que se habrían ocasionado a la demandante a causa de actos u omisiones imputables a quien encarga la obra, por haber
afectado, impedido o hecho más oneroso o extenso su normal desarrollo conforme al Plan de Trabajos.
Tercero: Que conviene entonces transcribir los tres párrafos del citado considerando 37°, en los que se hace radicar la anomalía que
se acusa:
"Trigésimo Séptimo: Que de acuerdo a los instrumentos citados precedentemente, resulta inconcuso que en los Convenios
modificatorios al contrato números 3, 4 y 5, la actora se reservó, literalmente el derecho a las indemnizaciones y/o compensaciones que
el contratista estima le corresponden a consecuencia directa y/o indirecta (costos financieros, sobre estadía, etc.) del plazo que se
otorgue en el presente convenio.
Que, en este orden, a juicio de este sentenciador, los únicos perjuicios que la actora se encontraría habilitada para reclamar, porque
no formaron parte del finiquito, son aquellos comprendidos en el Contrato Ad Referéndum, número 2 y aquellos que pudieran ser
consecuencia directa y/o indirecta únicamente del aumento de plazo, quedando excluidos, por tanto, otros rubros que deben entenderse
se encuentran comprendidos en el amplio finiquito que las partes se otorgaron.
Que, en la demanda, se reclama por las modificaciones introducidas al proyecto, sin respetar su Programa de Trabajos, solicitando
se declare (que) la demandada debe solucionar todos los costos derivados de tal situación, cuestión que se contrapone con lo antes
razonado sí, precisamente, al suscribirse las modificaciones al contrato, las partes, de común acuerdo, establecieron las obligaciones y
derechos de cada una de ellas con ocasión de las modificaciones introducidas al contrato, acuerdo este vinculante no solamente para
dichas partes, sino que, además, para este sentenciador, debiendo, en consecuencia, desestimarse la demanda por dicho rubro desde
que correspondió a una situación mutuamente consentida".
Cuarto: Que, como es fácil constatar, el considerando transcrito es contradictorio, pues comienza reconociendo el derecho de OHL
a demandar la indemnización de los perjuicios que le habrían sido ocasionados por el mayor plazo que implicaron las modificaciones
al proyecto, en razón de las reservas expresas que se estamparon en tres de los citados convenios y por la falta de finiquito en uno de
ellos, declarándose que la contratista está habilitada para reclamar los efectos económicos provocados por dicho aumento de plazo,
incluso admitiendo que los Convenios N° 2 a 5 no cubrieron tales perjuicios. Sin embargo, en el tercer y último párrafo arriba a una
conclusión opuesta a lo razonado en los párrafos anteriores, al afirmar que en esos mismos convenios los contratantes ya habrían
acordado el monto que se debía pagar por los conceptos o rubros que ahora se demandan en sede judicial.
Quinto: Que de la existencia de considerandos contradictorios, sólo cabe concluir que los sentenciadores de la instancia no
efectuaron un adecuado razonamiento acerca del asunto sometido a su conocimiento, puesto que han declarado que los Convenios en sí
mismos supondrían la existencia de un acuerdo pleno, finiquitando cualquier desavenencia entre las partes, no obstante haber
reconocido previamente la validez de las reservas contenidas en dichos instrumentos para reclamar la compensación por los costos y
pérdidas que le produjo a la contratista las variaciones que se introdujeron al proyecto mediante tales convenios.
Sexto: Que, por consiguiente, queda de manifiesto que la sentencia cuestionada se construye a partir de motivaciones antagónicas
que no pueden coexistir, lo que conduce a la anulación de esos razonamientos, quedando desprovisto el fallo de la fundamentación
exigida en el artículo 170 N° 4 del Código de Procedimiento Civil, con lo cual se configura el vicio de casación formal previsto en el
numeral 5° del artículo 768 del mismo cuerpo legal.
Séptimo: Que, en atención a lo expuesto, se torna innecesario hacerse cargo del segundo vicio en que se cimentó este arbitrio de
nulidad formal.
Por estas consideraciones y visto, además, lo dispuesto en los artículos 768 N° 5, 786 y 808 del Código de Procedimiento Civil, se
acoge el recurso de casación en la forma interpuesto en lo principal de la presentación de fojas 1469 en contra de la sentencia de la
Corte de Apelaciones de Santiago de nueve de octubre de dos mil quince, escrita a fojas 1464, la que por consiguiente es nula y se la
reemplaza por la que se dicta a continuación, separadamente, pero sin nueva vista.
Téngase por no presentado el recurso de casación en el fondo deducido en el primer otrosí del mencionado escrito.
Regístrese.
Redacción a cargo de la Ministra señora Sandoval.
Pronunciado por la Tercera Sala de esta Corte Suprema integrada por los Ministros Sr. Pedro Pierry A., Sra. Rosa Egnem S., Sra.
María Eugenia Sandoval G., Sr. Carlos Aránguiz Z., y Sr. Manuel Valderrama R.
Rol N° 33634 2015.
II. Sentencia de reemplazoSantiago, treinta de agosto de dos mil dieciséis.
En cumplimiento a lo dispuesto en el inciso tercero del artículo 786 del Código de Procedimiento Civil, se procede a dictar la
siguiente sentencia de reemplazo.
Vistos:
Se reproduce la sentencia en alzada con excepción de sus considerandos trigésimo séptimo y cuadragésimo séptimo, que se
eliminan.
Y teniendo en su lugar y además presente: Primero: Que son hechos asentados en la causa y no controvertidos los siguientes:
1. Que con fecha 12 de agosto de 2004 se celebró un contrato entre la Dirección de Arquitectura del Ministerio de Obras Públicas
por encargo del Comando de Salud del Ejército y OHL, para la construcción, equipamiento y puesta en marcha del Hospital Militar de
La Reina. Las partes estipularon un plazo de 850 días corridos para el término total de las etapas de construcción y equipamiento del
Hospital. La fecha prevista para el término de las obras era el 21 de diciembre de 2006 (cláusula quinta).
2. Que la contratista, OHL, cumplió con todas sus obligaciones, habiéndose construido y entregado la obra encomendada, la que
obtuvo su recepción final.
3. Que el contrato se celebró bajo la modalidad de suma alzada.
4. Que, durante la vigencia del contrato, el Ministerio de Obras Públicas (MOP) introdujo una serie de modificaciones al diseño del
proyecto, las que fueron plasmadas en cinco Convenios Modificatorios que contemplan numerosas obras extraordinarias que
corresponden a enmiendas del diseño original y significativos aumentos de plazo, a saber:
a) Convenio N°1. Las partes estipularon obras extraordinarias y aumentos de obra por un total de $166.575.976 y un aumento de
plazo de 32 días, extendiéndose la fecha de término del contrato al 22 de enero de 2007. En la suscripción de este Convenio no hubo
divergencias en la compensación pagada por el MOP, por lo que se acordó una renuncia de derechos y finiquito total.
b) Convenio N°2. Las partes estipularon obras extraordinarias y aumentos de obra por un total de $756.758.062, además de un
aumento de plazo de 15 días, extendiéndose el contrato al 6 de febrero de 2007. En este Convenio las partes no suscribieron finiquito
ni renuncia de derechos.
c) Convenio N°3. Las partes estipularon obras extraordinarias y aumentos de obras por un total de $1.869.819.582, y un aumento
de plazo por un total de 206 días, prolongándose la duración del contrato hasta el 31 de agosto de 2007.
d) Convenio N°4. Las partes estipularon obras extraordinarias y aumentos de obras por un total de $2.713.952.194, aumentando el
plazo en 273 días, lo que significó una extensión del contrato hasta el 30 de mayo de 2008.
e) Convenio N°5. Las partes estipularon obras extraordinarias y aumentos de obra por un total de $785.778.972, con un aumento
de plazo de 60 días, extendiéndose el plazo del contrato al 29 de julio de 2008.
5. Que en la cláusula 5° de los Convenios N° 3 a 5, se consignó que: "En este acto OHL renuncia a todas y cada una de las
indemnizaciones a que legal, judicial, administrativa, contractual o reglamentariamente tuviere derecho o pudieren corresponderle a
esta fecha en relación directa con los precios y cubicaciones de las obras extraordinarias que se convienen y aprueban en el presente
Convenio y en relación directa con los precios, cantidades y cubicaciones de las disminuciones de obras que se convienen y que se
aprueban en el presente Convenio. A mayor abundamiento, en este caso OHL renuncia expresamente en los términos del artículo 12
del Código Civil a reclamar cualquier compensación económica respecto de los precios y cubicaciones de las obras extraordinarias y
de las disminuciones de obras acordadas en el presente Convenio.
En razón de lo anterior, las partes se otorgan el más amplio, completo, total y definitivo finiquito en relación directa de los precios,
cantidades y cubicaciones de las modificaciones de obras (obras extraordinarias y disminuciones de obras) objeto del presente
convenio. Lo anterior no se extiende a las indemnizaciones y/o compensaciones que el contratista estima le corresponden a
consecuencia directa y/o indirecta (costos financieros, sobre estadía, etc.) del plazo que se otorgue en el presente convenio. Por su
parte, la Dirección de Arquitectura hace presente que la estipulación de la reserva antes señalada no implica en ningún caso
reconocimiento o aceptación de alguna de las materias señaladas u otras similares por parte de la Dirección, quien deja constancia que
a su juicio, los gastos de sobre estadía y costos financieros se encuentran incluidos en los precios convenidos en el presente
instrumento y, en cuanto a otros conceptos, se pronunciará en la oportunidad y ante quien corresponda sobre su procedencia".
Segundo: Que como se desprende del contenido de los referidos Convenios, las modificaciones al proyecto requeridas por el MOP,
significaron que el plazo del contrato aumentara en 586 días, esto es, el plazo de ejecución de la obra se incrementó en un 69%,
representando los Convenios N° 2 a 5, 554 días adicionales.
Por otra parte, también se constata a partir de la revisión de estos Convenios, que los contratantes suscribieron un finiquito parcial,
que abarca el aumento de precio en relación directa con las cantidades y cubicaciones de las obras extraordinarias y disminuciones de
obras que se aprobaban en los respectivos Convenios. Pero también se advierte que la renuncia de OHL no se extendió a las
indemnizaciones por los perjuicios que estima haber experimentado como consecuencia directa o indirecta de los nuevos plazos
otorgados en los Convenios. A su vez, el MOP dejó constancia que entendía que los precios fijados en los Convenios cubrían todos los
costos reclamados por OHL.
Es decir, las renuncias y finiquitos de los Convenios N° 3, 4 y 5 fueron específicas y respecto de las materias acordadas, por lo que
no pueden extenderse a aspectos no convenidos, más aún cuando han sido objeto de explícitas reservas, mientras que el Convenio N° 2
no contiene renuncias ni finiquitos. En otras palabras, hubo consentimiento respecto de las obras que se agregan y se disminuyen,
acerca del precio y plazo de las mismas, pero no respecto de indemnizaciones de perjuicios por eventuales incumplimientos
contractuales que hayan podido verificarse.
Asimismo, los Convenios N° 2 a 5 tienen un anexo con un presupuesto que detalla las obras extraordinarias y aumentos de obras
estipuladas. Los precios se refieren al gasto directo de las variaciones de obras, más el recargo por gastos generales y utilidades
calculados sobre la base del gasto directo. Así consta de lo manifestado por el MOP en los decretos que aprobaron los Convenios N° 3
y 5, indicando que las partidas se pagaban conforme al inciso segundo del artículo 99 del Reglamento para Contratos de Obras
Públicas (Decreto MOP N° 15/92). Efectivamente, el citado Reglamento establece normas sobre pagos que debe recibir el contratista si
ocurren ciertos eventos que alteren el programa de trabajo, particularmente la solicitud de obras nuevas o atrasos en la entrega de
determinados elementos o antecedentes por parte del mandante.
Así, con arreglo al artículo 99 del Reglamento, el mandante puede ordenar la modificación de obras, la ejecución de obras nuevas o
extraordinarias y el empleo de materiales no considerados, pero no más allá del 30% del valor del contrato inicial. Este precepto
dispone que el mandante debe convenir con el contratista el aumento de plazo que proceda en razón de las mayores obras y sus precios
en consideración a los valores del contrato inicial. A su vez, el inciso segundo del artículo 131 regula la indemnización de los gastos
directos del contratista por el atraso en la entrega del terreno o de los planos del proyecto, ordenando su recargo en el mismo
porcentaje establecido en el artículo 99. Por su parte, el artículo 140 regula la indemnización de gastos generales al contratista por
aumentos de plazo del contrato a causa del atraso en la entrega de materiales pertenecientes al Fisco o de modificaciones al programa
de trabajo, por causas distintas a las señaladas en los citados artículos 99 y 131.
De allí que los artículos 99 y 131 se limitan a tratar el pago de gastos directos y de un porcentaje de utilidades y gastos generales
calculados sobre la base de aquéllos, mientras que el artículo 140 trata los gastos generales del contratista en los casos recién descritos,
pero no se refiere a otros costos y pérdidas que pueden afectar al contratista por los cambios introducidos al proyecto que puedan haber
generado un trastorno del proceso constructivo. Así por lo demás lo ha confirmado la Contraloría General de la República en su
Dictamen N° 40689/2013 de 28 de junio de 2013, al señalar que "La autoridad administrativa no se encuentra normativamente
habilitada para disponer el pago de la compensación a que alude (mayores costos que se habrían ocasionado por las deficiencias del
proyecto respectivo)", es decir, el Reglamento no regula los perjuicios del contratista por deficiencias en el proyecto original.
En esta misma dirección, esta Corte Suprema ha ratificado el derecho del contratista a ser indemnizado de los mayores costos y
gastos en que incurra con motivo del incumplimiento del mandante de la obra: "3° Que, por ende y existiendo perjuicios para el
demandante (contratista) por causas que no le son imputables en relación al contrato de licitación de las obras, corresponde a la
demandada que resarza los perjuicios que con su obrar negligente causó al actor, por ello y se dirá en consecuencia, se determina el
monto que el Fisco de Chile debe pagar por los mayores costos y gastos en que incurre el actor en la ejecución de las obras producto de
su incumplimiento contractual (...)" (Rol N° 8892 2009).
Tercero: Que el Programa de Trabajo constituye uno de los aspectos fundamentales del contrato de construcción, en tanto describe
el cómo, en qué orden y en qué período se ejecutarán cada una de las partes que componen la obra.
En este orden de ideas, la recurrente ha alegado que las modificaciones introducidas al diseño del proyecto y los atrasos en el
programa de trabajo no sólo le generó gastos directos al contratista los que en la especie fueron cubiertos por los valores fijados en los
aludidos Convenios Modificatorios sino también costos de sobreestadía, financieros y pérdidas de productividad.
Cuarto: Que, por solicitud del tribunal de primera instancia, la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas de la Universidad de
Chile, a través de su centro para la Investigación, Desarrollo e Innovación de Estructuras y Materiales IDIEM realizó un peritaje
técnico que debía abordar los siguientes puntos de prueba fijados por el tribunal:
"Si las modificaciones al proyecto original causaron alteraciones del plan de trabajo de construcción que afectaron, inclusive, el
normal desarrollo de la etapa de construcción y, en especial, de la etapa de equipamiento constituyendo un incumplimiento del contrato
original pactado".
"Si los costos asociados a las modificaciones al proyecto y al plan de trabajo de construcción del nuevo Hospital Militar La Reina,
fueron debidamente compensados y cumplidos oportunamente en su integridad por la parte demandada".
"Si el eventual incumplimiento de los nuevos costos en las modificaciones al proyecto original de construcción del Hospital Militar
La Reina causaron daños o perjuicios a la parte demandante".
"Existencia, naturaleza y monto de los perjuicios causados a la parte demandante".
Quinto: Que es importante precisar que conforme al tenor de los escritos de casación los conceptos reclamados por la demandante
se circunscribieron en esta etapa del juicio a "los montos derivados de la alteración del programa constructivo a consecuencia de las
obras introducidas extemporáneamente en los Convenios N° 2 al 5", que alcanzarían la suma de 1.246.456,36 unidades de fomento.
Este concepto, en lo pertinente a lo reclamado, se compone de lo siguiente: montos por pérdidas de productividad; montos por
sobre estadía; y montos de equipamiento por mayor duración de las obras.
Sexto: Que, en lo concerniente a los montos por pérdidas de productividad, cabe consignar en primer término, que el Reglamento
para Contratos de Obras Públicas no considera eventuales compensaciones económicas al contratista por los perjuicios asociados a
pérdida de productividad de responsabilidad del mandante.
Se lee en la demanda: "Pues bien, al celebrar los Convenios mediante los cuales se introdujeron las modificaciones extemporáneas
al Contrato, la Administración reconoció a OHL los efectos que tales cambios produjeron en los plazos necesarios para ejecutar la obra
(aumento de un 70% del plazo original) y, en general, los gastos directos de las obras en sí mismas (aumento en un 12% del precio
original de la etapa de construcción, y un 9% del valor del contrato). Sin embargo, la demandada incumplió el contrato al desconocer
ilegal y arbitrariamente la totalidad de los mayores costos que tales modificaciones a destiempo significaron a OHL, como
consecuencia directa de las pérdidas de productividad asociadas a tales alteraciones".
Por el ítem de pérdida de productividad, perjuicio que se habría producido por la introducción extemporánea de modificaciones por
parte del mandante durante la construcción de la obra, OHL demanda $17.666.665.024, equivalentes al 28 de julio de 2008 (fecha de
término de las obras) a 875.925,76 unidades de fomento.
Séptimo: Que según señala el peritaje IDIEM, se entiende como productividad en la industria de la construcción, al indicador que
relaciona la cantidad de recursos utilizados (personas o maquinaria) con la cantidad de producción obtenida (obra física). Y dado que
los recursos utilizados pueden ser personas o máquinas, se considera que en ambos recursos puede medirse la productividad, por lo que
se tiene: 1) la productividad laboral de la mano de obra directa, y 2) la productividad de maquinaria y equipamiento que forman parte
del costo directo.
Expone el referido informe que la pérdida de productividad laboral en obras de construcción, "es definida como un incremento de
costos en la ejecución de una obra, producto de un cambio de las condiciones, recursos o procesos, estimados o planificados
inicialmente por la Constructora. La productividad laboral puede verse afectada por varios factores que alteran la eficiencia del
desarrollo del trabajo, incluyendo: cambios de proyecto; interferencias; demoras o atrasos; alteración de la secuencia constructiva;
paralizaciones y aceleraciones. Estos factores pueden causar a la Constructora reasignación de trabajadores, recursos ociosos,
ineficiencias por sobrepoblación de trabajadores en una misma área de trabajo, bajos rendimientos; todo lo cual produce una
disminución de la productividad estimada (sin esas situaciones presentes), y por consiguiente un aumento de los costos asociados a la
producción".
Recalca a continuación que: "Casi todos los cambios en proyectos de construcción tienen algún efecto en los costos y plazos del
proyecto. Existen generalmente dos categorías:
1. El costo y plazo directo para la ejecución del cambio (trabajo adicional, materiales y equipos).
2. El impacto que el cambio puede tener sobre las obras no cambiadas o los trabajos originalmente contratados, debido a atrasos,
interrupciones, cambios de la secuencia constructiva, falta de recursos".
Y añade: "Para ejecutar los cambios, puede ser necesario interrumpir o atrasar el resto de las obras que no han sufrido
modificaciones, o realizarlos de una manera o secuencia diferente a la originalmente planteada, todo lo cual puede producir una
pérdida de productividad laboral y un incremento de los costos".
Octavo: Que refieren los peritos que del análisis efectuado pudieron verificar lo siguiente:
"El Mandante introdujo modificaciones de proyecto con posterioridad al término contractual original (21 de diciembre de 2006),
entre las que cabe mencionar: ingeniería de detalle de proyecto de cubrejuntas de dilatación (situación que se origina el 26 de octubre
de 2007) e incorporación de sistema de climatización en las salas UPS, Edificio B (situación que se origina a mediados de 2008).
La oportunidad en que se introdujeron algunas modificaciones de proyecto por parte del Mandante implicó la modificación de
estructuras o elementos ya ejecutados por la Constructora. A modo de ejemplo, la modificación del proyecto de cubrejuntas de
dilatación, significó entre otros, demoler obra gruesa, rehacer tabiques, ajustar pavimentos, readecuar revestimientos de fachadas; la
modificación de 72 templadores anti incendio (Tai) implicó, entre otros, desarmar cielos falsos, modificar ductos de Climatización y
rehacer terminaciones; y la incorporación de sistema de Climatización en las salas UPS implicó intervenir recintos e instalaciones ya
ejecutadas.
De lo anterior, se desprende que el Mandante introdujo modificaciones al proyecto originalmente contratado, ya sea, para resolver
deficiencias como para adecuar el proyecto a sus necesidades. Dichas modificaciones no se introdujeron en un solo acto, sino que se
realizaron en varias instancias a lo largo de la ejecución de la obra, inclusive con posterioridad a la fecha de término del contrato
original".
Considerando los antecedentes antes mencionados, la pericia concluye que el MOP alteró la secuencia constructiva originalmente
fijada y pactada con OHL, y por tanto, se generó pérdida de productividad de la mano de obra directa. En este punto, resalta la pericia
que se presentó inicialmente un programa de trabajo por un plazo de 850 días que comprendía las etapas de Construcción y
Equipamiento, pero que en virtud de los convenios modificatorios aprobados, N° 1 al 5, se introdujeron cambios al proyecto 781
presupuestos de obra por parte del mandante aprobados en dichos Convenios y se extendió su duración a 1.436 días, incrementándose
en un 69% el plazo acordado primitivamente, con el consiguiente sobrecosto para la contratista, por las modificaciones tardías exigidas
por la mandante, las que han supuesto una desviación de recursos, maquinarias y de las labores de los trabajadores que participan en la
obra.
Noveno: Que para la cuantificación de este concepto, esto es, la pérdida de productividad laboral de la mano de obra directa, se ha
estimado por el IDIEM que en la obra se empleó un total de 5.966.392 Horas Hombre (HH) en la ejecución del contrato para la etapa
de Construcción, y luego de describir circunstanciadamente el método y las variables empleadas para su cálculo, se concluyó que la
pérdida de productividad laboral generada por modificaciones de obra incorporadas por el MOP es de un 15,5% del total de Horas
Hombre empleadas, lo que corresponde a 926.584 Horas Hombre.
Y considerando el valor de Hora Hombre ponderado en 0,13 unidad de fomento según se calculará en la pericia para la obra en
cuestión , se obtienen para las 926.584 Horas Hombre un valor de 118.205,68 unidades de fomento para la pérdida de productividad
laboral de la mano de obra directa.
Décimo: Que en este mismo concepto reclamado, pero en lo atinente a la pérdida de productividad de la maquinaria y
equipamiento que es consecuencia de la pérdida de productividad del personal, pues como dice el informe "si se considera que la mano
de obra directa (personal) tuvo pérdida de productividad, la maquinaria utilizada por aquella mano de obra directa también sufrió
pérdida de productividad", su cuantificación se realiza "a partir de la experiencia de IDIEM en obras similares, la que indica que
aproximadamente un 2,5% del costo directo corresponde a maquinaria y equipamiento (moldajes y andamios)".
Y considerando que el costo directo del contrato original determinado en base a los estados de pago corresponde a
$33.851.547,432, desprende el informe que el costo directo correspondiente a equipamiento y maquinaria para el Hospital Militar
establecido en el contrato asciende a $846.288.686, valor equivalente a 49.456,15 unidades de fomento a la fecha de suscripción del
contrato.
De esta forma, concluye el peritaje, extrapolando la pérdida de productividad de la mano de obra directa 15,5% al monto
determinado previamente para la maquinaria y el equipamiento 49.456,15 UF se obtiene un valor que alcanza a 7.680,57 unidades de
fomento.
Por consiguiente, el perjuicio que estima el informe IDIEM por concepto de pérdida de productividad generada a partir de la
incorporación de modificaciones al proyecto durante el transcurso de la obra, se avalúa en 125.886,25 unidades de fomento.
Undécimo: Que, en el análisis anterior, el informe del IDIEM consideró los aumentos de plazos formalizados mediante los cinco
convenios ad referéndum, los que sumaban 586 días, por lo que confirma que se incrementó en un 69% el plazo acordado
originalmente, el cual alcanzaba los 850 días (Tabla 5). Asimismo, acudió a los presupuestos de obras aprobados en esos mismos cinco
convenios, lo que alcanzaban los 781 (Tabla 6).
Es decir, en el examen de la pérdida de productividad, a consecuencia de la alteración de la secuencia constructiva pactada
inicialmente, dicha pericia no descontó los 32 días de incremento establecido en el Convenio Complementario N° 1, sobre el cual
existía un finiquito acordado entre las partes. En efecto, en el cálculo del total de Horas Hombre (HH) asociadas a las modificaciones
de obra ordenadas por el mandante respecto de las contratadas inicialmente, dato necesario para la determinación de la pérdida de
productividad, se incluyeron las obras adicionales correspondientes a dicho primer convenio modificatorio.
De lo anterior se sigue que el perjuicio avaluado en 125.886,25 unidades de fomento por concepto de pérdida de productividad, no
puede ser aceptado porque en su cuantificación se incluyeron los cambios introducidos por el mandante de la obra a través del
Convenio N° 1, a cuyo respecto la contratista renunció a su derecho a reclamo por cualquier concepto.
Duodécimo: Que en lo referente a los montos por sobre estadía, OHL demandó los mayores gastos generales de la etapa de
Construcción, en razón de la extensión de 554 días (plazo otorgado por los Convenios N° 2 a 5) que sufrió el plazo original.
Se lee en la demanda: "El aumento del plazo de duración de las obras (69%) produjo que el período de estadía de OHL fuera
sustancialmente superior al contemplado en el Contrato, lo que causó que la compañía debiera incurrir en significativos mayores gastos
por este concepto. Éstos no fueron reconocidos por nuestra contraparte fiscal al suscribir los Convenios 2 al 5, aun cuando son de su
exclusiva responsabilidad, razón por la cual OHL tiene derecho a ser debidamente compensado".
Añade: "El monto por el cual OHL tiene derecho a ser compensado por este concepto se determina multiplicando el gasto general
diario previsto para la Etapa de Construcción del Contrato por el incremento en el plazo original que alcanza los 554 días corridos
(extensión de plazos prevista en los Convenios 2 al 5)".
"En consecuencia, los mayores gastos generales de la obra por aumento de plazo a que OHL tiene derecho a ser compensado
alcanzaron el 28 de julio de 2008 (fecha de término de las obras) la cantidad de $3.971.383.902. , equivalentes a esa fecha a UF
193.616,20...".
Decimotercero: Que cabe dejar anotado que de acuerdo a lo establecido en el Reglamento para Contratos de Obras Públicas de
1992, se indemnizará por mayores gastos generales por extensión del plazo sólo en los casos contemplados en los artículos 138 y 139,
esto es, cuando se aumente el plazo a consecuencia de un atraso en la entrega de materiales de suministro fiscal o cuando el incremento
del plazo se origine por causas diversas, dentro de las que no se incluye la incorporación de modificaciones a la obra.
Decimocuarto: Que según precisa el informe pericial, los gastos generales corresponden a aquellos costos indirectos (equipo
profesional, maquinaria y dependencias, entre otros) en que incurre la Constructora por el mero hecho de estar presente en la obra
durante el transcurso de la construcción. Así, los ítems pertenecientes al gasto general corresponden a aquellos costos que no pueden
ser asignados exclusivamente a una partida específica, y que, a su vez, no han sido considerados para determinar los costos directos de
cada una de las partidas del presupuesto de la Constructora. Para determinar el monto total del gasto general, se consideran
principalmente dos variables: el plazo y la magnitud de la obra. Es por ello que, si se producen cambios en dichas variables, se
producen variaciones en el desembolso real que realiza la Constructora por este concepto.
Decimoquinto: Que, a continuación, el informe pericial formula el siguiente análisis:
"La obra tuvo un incremento del precio y plazo de 12% y 69%, respectivamente. En este sentido, de acuerdo a los documentos
contractuales, los mayores gastos generales por mayor obra fueron compensados en addenda al contrato, dado que existe un monto,
equivalente a CLP 6.292.884.786. que corresponde a obras adicionales y/o extraordinarias; monto que incluye los gastos generales
correspondientes, cuya suma asciende a CLP 743.644.473. , los cuales fueron calculados considerando el porcentaje consignado en los
estados de pago; motivo por el cual este gasto general por mayor obra ya se encuentra convenido y pagado.
Por otro lado, de acuerdo al marco contractual, los mayores gastos generales asociados a la extensión del plazo no proceden, dado
que el mayor plazo otorgado fue motivado por mayores obras".
Agrega más adelante: "Sin embargo, el hecho que el marco contractual no considere indemnización de los mayores gastos
generales por extensión de plazo no implica que no se haya producido un perjuicio para la Constructora por el aumento de plazo que
tuvo el contrato, producto de modificaciones de proyecto que introdujo el Mandante en el transcurso de la obra. En efecto,
considerando que los gastos generales aumentan de acuerdo a dos factores: mayores obras y mayor plazo, sólo ha sido compensado por
uno de los dos conceptos por los cuales se ve afectado el gasto general, quedando el otro factor pendiente, dado lo expuesto en los
documentos contractuales".
Decimosexto: Que el cálculo de este último concepto en el informe IDIEM a partir del valor del gasto general diario, por mayores
gastos generales en la etapa de Construcción asociados a la extensión de plazo del contrato original que abarca el período comprendido
entre el inicio del plazo otorgado en el Convenio N° 2 (23 de enero de 2007) y el término real de la obra (28 de julio de 2008) , arrojó
un perjuicio a 205.571,08 unidades de fomento.
No obstante, lo anterior, el monto reclamado por este rubro por OHL se limitó a 193.616,20 unidades de fomento, suma a la que
este tribunal deberá sujetarse.
Decimoséptimo: Que, en lo referente a los montos de equipamiento por mayor duración de las obras, este rubro, en lo pertinente a
lo reclamado ante este Tribunal, comprende gastos financieros, gastos generales y operativos, más la actualización de los mismos.
Decimoctavo: Que, en cuanto al primero de esos componentes, OHL reclama que el aumento en la duración del contrato le
significó mayores gastos financieros por el retraso en los pagos correspondientes a las recepciones cualitativa y definitiva de la etapa de
Equipamiento. El costo financiero se refiere a los intereses generados para la financiación por parte de la contratista, entre la fecha de
financiamiento y el pago efectivo de los mayores costos soportados por aquéllaSe lee en la demanda: "El costo financiero por retraso
en la Recepción Cualitativa, determinado como la diferencia entre el costo real y el costo previsto, asciende a US$1.197.794,44. y el
costo financiero por retraso en la recepción definitiva, determinado como la diferencia entre el costo financiero real y el costo
financiero previsto, asciende a US$210.849,89. En consecuencia, el costo total por concepto de gastos financieros por retraso en los
pagos es de US$1.408.644,33...".
Decimonoveno: Que cabe anotar que la etapa de Equipamiento del contrato comprende la adquisición, instalación, integración,
puesta en marcha, operatividad, capacitación de personal, servicio técnico y garantía de los siguientes equipos: médicos, clínicos y
administrativos.
Vigésimo: Que en relación a los gastos financieros incurridos en la etapa de Equipamiento el informe IDIEM realizó el siguiente
análisis:
"La forma de pago de los equipos, según lo originalmente pactado, se realizaría por etapas, de acuerdo al avance en la instalación
presentada por cada equipo (recepciones cuantitativa, cualitativa y definitiva). Conforme a la programación contractual, la recepción
cuantitativa de todos los equipos ocurriría, a más tardar, el día 22 de junio de 2006; mientras que la recepción cualitativa de todos los
equipos ocurriría, a más tardar, el día 20 de septiembre de 2006.
El plazo original de la etapa de Construcción se extendió debido a la introducción de modificaciones de proyecto por parte del
Mandante, con lo cual también se extendió el plazo de la etapa de Equipamiento. Producto de lo anterior, la Constructora se vio
impedida de cumplir con las fechas antes señaladas, por motivos ajenos a OHL.
A la fecha de término contractual original (21 de diciembre de 2006), parte importante de los equipos se encontraban físicamente
en la obra; sin embargo, los pagos correspondientes a la recepción cualitativa de la etapa de Equipamiento, que debían coincidir con la
fecha originalmente considerada para la recepción provisional de la etapa de Construcción, recién concluyen en el mes de diciembre de
2008.
Asimismo, los pagos correspondientes a la recepción definitiva de la etapa de Equipamiento, que debían coincidir con la fecha
originalmente considerada para la recepción definitiva de la etapa de Construcción, se efectúan durante el mes de enero de 2010.
De lo expuesto, se tiene que la Constructora se vio impedida de instalar los equipos en las fechas programadas, por responsabilidad
del mandante de la obra, debido a que este último introdujo modificaciones de proyecto, que aumentaron los plazos de construcción.
Lo anterior significó que la Constructora no pudo presentar los cobros correspondientes a equipos ya adquiridos, que requerían de
su instalación para ser pagados.
De lo anterior, se desprende que el concepto reclamado es válido y, por lo tanto, existe el perjuicio para la Constructora, por los
eventuales costos financieros que le habría significado el retraso de los pagos correspondientes a las recepciones cualitativa y definitiva
para la etapa de Equipamiento".
Para la cuantificación del costo financiero debido al retraso de los pagos correspondientes a las recepciones cualitativa y definitiva
para la etapa de Equipamiento, se describe el método de cálculo (página 65), que permite estimar el perjuicio asumido por OHL por
este último concepto en la suma de 20.582,25 unidades de fomento.
Vigésimo primero: Que, como se indicara, el segundo componente de los montos de equipamiento, corresponde a los gastos
generales y operativos que, en lo pertinente a lo demandado en esta sede, abarca, por una parte, mayores gastos generales en la etapa
de Equipamiento por extensión de plazo y, por otra, mayores gastos generales en la etapa de Equipamiento desde el término de las
obras hasta su recepción provisional.
Vigésimo segundo: Que, en lo atinente a los mayores gastos generales de Equipamiento por mayor plazo, se lee en la demanda:
"Corresponde a los mayores gastos generales en que incurrió OHL en la Etapa de Equipamiento a causa de la mayor duración del
Contrato, los que se determinan como el gasto general diario de la Etapa de Equipamiento del Contrato, por la cantidad de días
adicionales del plazo total. De acuerdo al Contrato, la Etapa de Equipamiento tenía previsto un 5% por concepto de gastos generales y
se tenía previsto que la Etapa de Equipamiento comenzaría a partir del 21 de marzo de 2005, con lo cual el desarrollo de la Etapa de
Equipamiento se efectuaría en 21 meses (640 días). Luego, el mayor costo total a reclamar por este concepto asciende a la suma de
US$1.028.351,42".
Vigésimo tercero: Que vuelve a precisar el Informe IDIEM que: "Los gastos generales corresponden a aquellos costos indirectos en
que incurre la Constructora por el mero hecho de estar presente en la obra durante el transcurso de la construcción. Dichos costos
dependen principalmente de la magnitud y plazo de la obra, como también de la complejidad y exigencias propias del Mandante. En
este sentido, los ítems pertenecientes al gasto general corresponden a aquellos costos que no pueden ser asignados exclusivamente a
una partida específica, y que a su vez no han sido considerados para determinar los costos directos de cada una de las partidas del
presupuesto de la Constructora".
Estima la pericia que el concepto reclamado es válido, en razón de que existe un perjuicio para la contratista en relación a la etapa
de Equipamiento, la que se vio extendida por el retraso en las obras de construcciónContinúa señalando que los gastos generales por
mayores plazos se calculan considerando un valor diario de gasto general, a partir de la oferta de la contratista 5% del costo directo
para la etapa de Equipamiento , el que se debe aplicar a los días afectos a pago, los cuales abarcan el período comprendido entre el
inicio del plazo otorgado en el Convenio Modificatorio N° 2 (23 de enero de 2007) y el término real de la obra (28 de julio de 2008).
Luego de verter el procedimiento de cálculo, determinan los peritos que la compensación por el concepto de mayores gastos
generales de la etapa de Equipamiento, asociados a la extensión del contrato original, se avalúa en 19.520,67 unidades de fomento.
Vigésimo cuarto: Que en lo que respecta a los mayores gastos generales de Equipamiento incurridos desde el término de las obras
hasta su recepción provisional, se lee en la demanda: "Si bien la obra se terminó en el mes de julio del año 2008, el retardo en que
incurrió la Administración en la recepción provisional de la obra provocó que OHL incurriera en mayores costos por concepto de
gastos generales hasta el mes de diciembre de 2008. En efecto, durante este mayor período no considerado en el Contrato, OHL debió
solventar el mantenimiento y cuidado del equipamiento médico, clínico y administrativo del Hospital Militar de La Reina, incurriendo
en un gasto que debe serle reembolsado ascendente a US$217.266,93". Conforme a la cláusula trigésimo primera del contrato, la
contratista debe asumir la responsabilidad por los equipos hasta la fecha de recepción provisoria de las obras.
Vigésimo quinto: Que se constata por los peritos que existió un total de 114 días de atraso de responsabilidad del MOP, los cuales
corresponden a la suma de 62 días de atraso en la evacuación del informe con observaciones de la comisión de recepción provisional, y
de 52 días de atraso en la emisión del acta de recepción provisional una vez subsanadas las observaciones por la contratista. Señala el
informe que dicho retraso se traduce en mayores costos para la constructora en relación a los equipos en obra, los cuales debiesen ser
reembolsados por la demandada.
A efecto de cuantificación de este concepto, los días de atraso se contabilizan a partir del término de las obras (28 de julio de
2008), desde que el gasto general anterior a esa data ya encuentra cuantificado en el ítem anterior de gastos generales por mayor plazo.
De acuerdo al cálculo efectuado, el monto del perjuicio correspondiente a las demoras en el período antes acotado asciende a
3.780,33 unidades de fomento.
Vigésimo sexto: Que finalmente OHL demanda la actualización financiera de los mayores costos incurridos en la etapa de
Equipamiento, debido a la extensión del plazo contractual, estimando que el valor por este concepto equivale a 123.220,91 unidades de
fomento.
Como ya se ha reseñado, OHL ha alegado un incremento de sus costos durante la ejecución del contrato en lo relativo a la fase de
Equipamiento del Hospital Militar, que han sido validados por el IDIEM gastos financieros (20.582,25 UF), gastos generales en la
etapa de Equipamiento por mayor plazo (19.520,67 UF) y gastos generales de Equipamiento incurridos desde el término de las obras
hasta su recepción provisional (3.780,33 UF) que obligaron a la contratista a requerir su financiamiento. Por lo tanto, corresponde a los
intereses generados por la mencionada financiación por parte de la actora.
Llevado a cabo el procedimiento de cálculo por los peritos (páginas 94 y 95), se estima el perjuicio en 2.370 unidades de fomento.
Vigésimo séptimo: Que el Fisco de Chile objetó el informe pericial rendido en la causa, argumentando que no consideró la
naturaleza de contrato a suma alzada que tiene el de autos, el cual además, se encuentra regido por una normativa especial, obligatoria
para las partes, en particular para la Administración del Estado. Respecto de lo primero, manifiesta que la contratista asumió los
riesgos financieros de la ejecución del contrato, los cuales ahora reclama judicialmente como pérdida de productividad, monto por
sobre estadía, gastos financieros, etc., todos ya valorados al acordar el monto inamovible de la obra a ejecutar. En relación a lo
segundo, puntualiza que todas las adecuaciones a la obra fueron plasmadas en los Convenios Modificatorios, los que contienen las
especificaciones de obra, plazos, precios y renuncias, modificaciones que se efectuaron de conformidad a lo dispuesto en el
Reglamento para Contrato de Obras Públicas.
Vigésimo octavo: Que, en los Convenios Modificatorios, el MOP reconoció y pagó los costos directos asociados a las obras
extraordinarias descritas en dichos instrumentos, pero no incluyó la compensación de los perjuicios que ello le pudo acarrear a OHL,
como consecuencia de la alteración de la secuencia constructiva, aduciendo que deben ser asumidos por el contratista por tratarse de
un contrato a suma alzada.
Vigésimo noveno: Que el hecho de tratarse de un contrato a suma alzada, esto es, aquél por el cual se conviene la construcción de
una obra determinada dentro de un plazo y precio prefijado, no significa que el contratista asuma dentro del precio acordado los efectos
de los incumplimientos del mandante de la obra. Al efecto, esta Corte Suprema ya ha sostenido que la circunstancia de ser un contrato
a suma alzada el celebrado por las partes, no puede conllevar que el contratista deba asumir los riesgos o mayores costos cuando ellos
sean imputables al actuar negligente del mandante (Rol CS N° 375 2013).
En otras palabras, tratándose de un contrato a suma alzada, OHL debe asumir el riesgo de que la obra contratada resultare más
onerosa que lo que calculó, por ejemplo, por un aumento de precios de los materiales, equipos o mano de obra, pero no puede
pretenderse que le corresponda asumir todos los gastos extraordinarios que provengan de las condiciones diferentes en que debió
ejecutarse la obra, como consecuencia de la alteración sustancial de la secuencia constructiva, originada en las modificaciones que el
MOP ordenó para solucionar las inconsistencias y errores de que adolecía la obra diseñada exclusivamente por él.
Es por ello que la actora, en los Convenios N° 2, 3, 4 y 5 hizo expresa reserva del derecho a demandar la totalidad de las
indemnizaciones por los mayores costos derivados de las extensiones de plazo del contrato, ante lo cual la Administración respondió
que se pronunciaría respecto de ellas en la oportunidad que correspondiera.
Trigésimo: Que cabe resaltar que el Informe Técnico de IDIEM de la Universidad de Chile pericia acordada por ambas partes , y el
Informe Técnico de DICTUC de la Pontificia Universidad Católica de Chile acompañada por la demandante coinciden en estimar que
efectivamente OHL tuvo que soportar significativos mayores costos por los conceptos reclamados: pérdida de productividad, gastos
generales por sobre estadía, costos financieros, etc., provenientes del atraso del Programa de Trabajo a raíz de las modificaciones
extemporáneas requeridas por el MOP. De modo que los costos descritos en las mencionadas reservas han sido validados por la prueba
pericial de IDIEM, y refrendados por el informe técnico de DICTUC.
Trigésimo primero: Que, en relación a lo anterior, resulta necesario puntualizar que atendidas las características de los conceptos
demandados por OHL, a fin de determinar su procedencia y cuantificación, la prueba por excelencia de estos autos es, sin duda, el
informe pericial, medio probatorio a través del cual se busca explicar en forma razonada determinados hechos. Y para la apreciación
de este tipo de prueba, el artículo 425 establece que "los tribunales apreciarán la fuerza probatoria del dictamen de peritos en
conformidad a las reglas de la sana crítica".
Si bien el sistema de valoración de la sana crítica confía al juez valorar la prueba, siempre habrá de hacerlo de acuerdo a criterios
racionales. Lo anterior implica que deben darse razones objetivas que den fundamento a la decisión.
En la especie, el informe pericial del IDIEM aportó elementos objetivos que hacen posible una decisión racional sobre la
controversia sometida al conocimiento de los tribunales. Efectivamente, es categórica dicha pericia al dar cuenta que durante el
desarrollo del Proyecto "Hospital Militar de La Reina" ocurrieron una serie de eventos que afectaron el normal desarrollo de los
trabajos de la obra y que se tradujeron para la empresa contratista en costos asociados a la existencia de mayores plazos que son
atribuibles al mandante (por sobre estadía, costos financieros, etc.).
Sobre estos mayores gastos, que rompen el equilibrio de la suma alzada, OHL, como ya se señaló, dejó reserva explícita para
reclamarlos con posterioridad.
Como asimismo, si bien también se determinó por el IDIEM la procedencia de mayores costos por pérdida de productividad, su
cálculo consideró factores provenientes del Convenio Modificatorio N° 1, el cual no debió ser incluido por las razones señaladas en los
basamentos anteriores, motivo que impide acoger la demanda por este ítem.
Trigésimo segundo: Que la defensa fiscal también ha esgrimido que lo demandado judicialmente por OHL no se encontraría
contemplado en el Reglamento para Contratos de Obras Públicas, pretendiendo al parecer con dicho planteamiento que normas de
carácter reglamentario restringirían el derecho del contratista a ser resarcido íntegramente por los daños ocasionados por
incumplimientos contractuales de la Administración, modificando con ello el régimen de responsabilidad contractual al que debe
sujetarse el Estado.
La circunstancia que el citado Reglamento establezca de manera expresa la necesidad de compensar económicamente al contratista
en los contratos de obra pública bajo la modalidad a suma alzada cuando concurren determinados eventos, no implica que no rija el
principio de reparación integral de daño, con los límites a los perjuicios directos y previsibles establecidos en el artículo 1558 del
Código Civil en materia de responsabilidad contractual. Por consiguiente, es deber de la Administración responder por todos los costos
y/o perjuicios en los términos recién descritos que, al obrar con infracción al contrato, ha ocasionado a OHL. En efecto, que el
Reglamento no trate específicamente ciertos gastos en que incurra el contratista a causa de hechos imputables a su contraparte fiscal no
obsta a que aquél persiga judicialmente su compensación.
Trigésimo tercero: Que resulta oportuno destacar que en la cláusula quinta del contrato se estipuló la obligación de OHL de contar
con un plan de trabajo: "Dentro de los 20 días siguientes a la fecha de inicio del plazo contractual, el Contratista deberá presentar al
Inspector Fiscal el programa de trabajo constituido por un cronograma detallado (...) con los tiempos de duración de cada actividad
secuencial, de acuerdo al itemizado del presupuesto, sintetizado en una Carta Gantt". Tal como plantea la actora, el proyecto
arquitectónico del MOP debía encontrarse completa y oportunamente definido durante la ejecución de la obra a fin de que el Programa
de Trabajos de OHL pudiese ajustarse a aquél.
Sin embargo, el MOP introdujo un cúmulo de modificaciones extemporáneas que afectó sustancialmente la normal ejecución del
contrato que tuvieron como objeto subsanar diversas indefiniciones, errores e incorporar mejoras al proyecto. Así lo reconoce el
Inspector Fiscal de la Obra, Alfonso Adrove (fojas 883) quien reconoce el documento suscrito por él, que señalaba: "...que entre las
principales causas de todas las modificaciones introducidas al Contrato se encuentra la obsolescencia del proyecto original asociado a
la aparición de nuevas tecnologías, las nuevas necesidades del Mandante lo que generó la introducción de una serie de modificaciones
al proyecto contratado y los ajustes que se debieron realizar entre los proyectos de arquitectura y especialidades a raíz entre otros de las
múltiples modificaciones antes descritas".
Lo anterior queda corroborado por los dichos del Inspector Fiscal (S), Francisco Escudero (fojas 894), quien relata que, en parte,
las modificaciones introducidas al proyecto original tuvieron su origen en la obsolescencia o pérdida de actualidad del mismo a la
época de su ejecución, cambios que fueron solicitados por el Ejército de Chile.
Así también el informe denominado "Estudio del impacto en costos de los hechos ocurridos durante la ejecución del proyecto
Construcción y Equipamiento Técnico, Médico, Clínico, Industrial y Administrativo del Hospital Militar de La Reina", elaborado por
DICTUC, refiere que: "Los hechos analizados muestran que desde la entrega del sitio en adelante, fueron ocurriendo situaciones que
afectaban el desarrollo de la obra. Los análisis realizados para los distintos problemas estudiados han verificado que existieron hechos
que provocaron atrasos en la obra y/o modificaron el proyecto original, lo que inevitablemente genera mayores costos a la empresa
contratista.
Las situaciones analizadas normalmente tenían un mismo génesis: problemas de diseño, tales como indefiniciones, contradicciones
o descoordinaciones en los documentos originales de contrato tales como planos, EETT, notas aclaratorias, entre otros. Lo anterior
provoca que se hayan generado cambios de obra (término que incluye en general modificaciones, aumentos y/o disminuciones de
obras). Dichos cambios de obra producen mayores plazos, mayores costos y pérdida de productividad".
Trigésimo cuarto: Que DICTUC reconoce en su informe la alteración de la secuencia constructiva cuantificando los sobrecostos en
$19.878.516.930, mientras que el peritaje de IDIEM establece la existencia de perjuicios por los conceptos demandados: pérdida de
productividad, sobre estadía por mayor plazo, gastos financieros, gastos generales de equipamiento por mayor plazo, gastos generales
hasta recepción provisional y actualización de mayores costos, estimando su monto total en 377.710,74 unidades de fomento.
Trigésimo quinto: Que, cabe consignar que OHL le manifestó formalmente al MOP mediante tres cartas, de 10 de noviembre de
2006, 12 y 23 de octubre de 2007, los efectos económicos que su actuar le provocaba. Así, en una de ellas se señala: "Adicionalmente,
hacemos expresa reserva de nuestros derechos para reclamar los mayores plazos, costos y demás compensaciones...", con motivo de
los cambios sufridos por la obra y las alteraciones en el desarrollo de los trabajos.
Trigésimo sexto: Que, de esta forma, ha quedado debidamente acreditado lo siguiente:
Que las modificaciones al proyecto original, incorporadas a destiempo por el dueño de la obra, causaron alteraciones del plan de
trabajo de construcción, afectando el normal desarrollo de las etapas de construcción y de equipamiento, incumpliéndose el contrato
pactado.
Que estas alteraciones, que fueron plasmadas en cinco Convenios, extendiéndose el plazo original del contrato en un 69%, se
tradujeron en pérdidas para OHL por los siguientes conceptos: mayores gastos generales de construcción por mayor plazo, gastos
financieros de equipamiento por mayor duración de las obras, mayores gastos generales de equipamiento por mayor plazo y costos
financieros Que los anteriores mayores costos derivados de las modificaciones al proyecto original de construcción del Hospital Militar
de La Reina no fueron pagados o compensados por el MOP.
Que el monto reconocido por IDIEM nominado de común acuerdo por las partes por los anteriores conceptos es de 251.824,49
unidades de fomento, cuantía que este tribunal concluye se halla debidamente probada y que deberá satisfacer el demandado.
Por estas consideraciones y de conformidad además con lo dispuesto en los artículos 12, 1545, 1546,1547, 1551, 1558, 1560,1561
Y 1562 DEL Código Civil y 186 y siguientes del Código de Procedimiento Civil, se revoca, en lo apelado, la sentencia de dieciocho de
diciembre de dos mil catorce, escrita a fojas 1268 y siguientes, y en su lugar se decide que el demandado Fisco de Chile queda
condenado a pagar a la actora, Obrascón Huarte Lain S.A., Agencia en Chile, por los conceptos anotados en el cuerpo de esta
sentencia, la cantidad de 251.824,49 unidades de fomento, en su equivalente en pesos a la época de su pago, más los intereses
corrientes para operaciones reajustables que se devenguen desde que el deudor quede en mora.
Cada parte pagará sus costas. Regístrese y devuélvase con sus agregados.
Redacción a cargo de la Ministra señora Sandoval.
Pronunciado por la Tercera Sala de esta Corte Suprema, integrada por los Ministros Sr. Pedro Pierry A., Sra. Rosa Egnem S., Sra.
María Eugenia Sandoval G., Sr. Carlos Aránguiz Z., y Sr. Manuel Valderrama R.

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