IMPORTANCIA DEL COLOR EN EL MUNDO EDITORIAL

El color es una de las herramientas más potentes que tiene una persona a su disposición,
afecta en cierta medida aspectos emocionales en tal grado que por medio de ellos
podemos despertar angustia, alegría, o nostalgia. Sabiamente utilizado el color es capaz
de generar respuestas casi inmediatas e intensas. En esta época su uso es utilizado de la
manera más libre que en tiempos anteriores.

“Para las primeras décadas del siglo XX, el uso del color representaba costos y problemas
de producción porque no existían los sistemas capaces de hacerlo, pero hoy por hoy el uso
del color resulta vital para una publicación” (Daniel Ghinaglia, 2009)

Cuando se hablaba de color se atribuía únicamente a expresiones artísticas. Al tomar un

libro no se le dé daba, por no decir nada, mucha importancia al aspecto visual de este. Por
suerte en la actualidad se ha tomado con
mayor seriedad el uso de los colores lo
que diversifica cada vez más lo que se ve,
se siente y se expresa. Logrando transmitir
lo que realmente se quiere o hacerlo con
una mayor fuerza, pues aparte de esto el
color ayuda a hacer énfasis en elementos
haciendo que la capacidad de captar
información sea mayor, no solo en obras de arte o productos editoriales sino también en
la vida cotidiana.

Con la llegada de la globalización al mundo, cambiaron los procesos de crear material

editorial, la escritura, el diseño y la imprenta se fueron acomodando al contexto actual,
con él iniciaron nuevos retos para que la pieza editorial funcionara y se realizara
correctamente según lo que se quisiera transmitir, uno de ellos sobre el que recae un
papel esencial es la parte cromática.
Uno de los aspectos que se debe tener en cuenta al momento de usar los colores e irnos a
la parte estética y lograr que la pieza sea funcional, es determinar el estilo que se va a
manejar.

“Si bien los medios impresos tienen gráficamente las mismas características, los estilos
varían dependiendo de la función, por lo tanto, el concepto que se utiliza para el diseño de
un libro puede ser completamente radical para una revista o un periódico.”

(Daniel Ghinaglia, 2009)

En esta medida lo que se debe hacer es saber que es mejor según lo que se vaya a realizar,
no es igual claramente, el concepto que se hace para un libro de cuentos infantiles que,
para un libro académico, o para un periódico. Esas características que deben estar en cada
pieza están fuertemente determinadas al “eje estético ligado al concepto que define a
cada publicación” esto quiere decir que cada uno de los productos tiene una personalidad
que se diferencia de las demás por lo que es.

Cabe resaltar que el color es una parte

fundamental pero no debe dominar o
estar por encima de otros elementos,
debe existir cierto balance y que no haya
una evidencia de que se tiene más peso
en algunas partes que en otras. Todo
esto va muy de la mano con la
composición de cada pieza editorial. Esto
no quiere decir que no se tenga libertad
sobre el uso de estos, pero hay que
saberlos manejar para evitar que el texto
no se destaque, o que se comunique
algo que no se quiere. Esto puede ocurrir por el mal uso o la elección errada de un color.
Más allá de lo estético, y entrando un poco en una finalidad más profunda del uso del
color como un elemento comunicacional. Se debe tener en cuenta, contexto, preferencias,
investigaciones previas para saber elegir correctamente una paleta de colores que indique
lo que realmente se quiere hacer saber a las personas.

“La combinación de diferentes tonos, son también parte de un código informativo que
ayudan a enlazar las informaciones o a resaltarlas sobre otras”

(Daniel Ghinaglia, 2009)

Para saber que colores elegir y cómo debemos combinarlos existe la teoría del color, esta
parte del principio de la teoría del color que normalmente se ve en la primaria, la cual
indica que colores son primarios
(que no resultan de la combinación
de ningún color) secundarios (el
resultado de las mezclas de los
colores primarios) y por
consiguiente vienen los terciarios
(mezcla de primarios y
secundarios). De estas tres categorías se deriva entonces la manera en cómo se debe
combinar para que sea funcional, es decir los colores complementarios o adyacentes.

Y toda esta teoría ¿para qué? Pues no es sola por capricho, va mucho más allá y tiene que
ver con la piscología, pues el color nos puede trasmitir diversas sensaciones, dependiendo
de la experiencia personal, el lugar en que vivimos, la realidad en la que estamos, los
colores y elementos que nos rodean, pueden generar gustos o estados de ánimo.

Pero eso no es todo, el color puede tener ciertas denominaciones según sus
características y estas también son de influencia en los textos. Las tonalidades, por
ejemplo, un verde puede tener una sub tonalidad amarilla y quedaría en los tonos cálidos,
mientras que si la tiene más tirando a celeste estaría ubicado en las tonalidades frías, por
eso es importante saber manejarlas.
 Además de las tonalidades,
también existe la saturación y la
brillantez de un color, no es lo
mismo poner un amarillo
saturado a uno que sea más
pastel, quiere decir un color con
mayor cantidad de blanco. Por
otro lado, la brillantez indica que
tanto estimulo de luz tiene.

Otro de los aspectos por los cuales es importante saber manejar el color en las piezas
editoriales es porque el color tiene mucho estímulo y poder de atracción, esto quiere decir
que si se elige un color que funcione para un libro en específico en la portada, captara
mayor atención, por el contrario, si es elegido un color errado, puede crear rechazo, todo
depende del uso que se le dé y la connotación que tenga el color.

“El estudio del color se plantea como un elemento formal cuya presencia influye en la
aceptación o el rechazo de la comunicación escrita”

(Jesus de Olmo,2006)

Una de las maneras que reflejan mejor la importancia del color, es cuando se es usado
para simbolizar algo, y esto
va muy de la mano con el
significado que tiene cada
uno, con la diferencia que
ya es más específico,
depende de la cultura, las
creencias y tradiciones,
entre otros muchos
factores, por ejemplo:
En China el rojo se asocia con las bodas y representa buena suerte y en la India este color
está unido a la caballerosidad. Mientras que en el occidente el blanco es el color adecuado
para ser usado en las bodas, por ello se debe estar pendiente según el contexto en el que
se vaya a realizar o comercializar la pieza editorial.

Por último y no menos importante es el costo monetario a la hora de la imprenta de los

productos, pues si se quiere una portada con los colores más saturados, brillantes o
metalizados se debe tener en cuenta la
inversión. Pero porque se debe pensar en
esto, pues es relevante porque al contar
con un presupuesto claro, desde el inicio
se sabe con cuánto dinero podemos
contar y si lo que se quiere o se está
pidiendo en el caso hipotético de que no
sea posible, el diseñador del producto
debe buscar una alternativa que sea más económica, sin abandonar la idea que al
principio se quería lograr con un color metálico o uno más saturado.

Para concluir el color como elemento de nuestro diseño, puede ser la clave de nuestro
éxito. Tanto si pensamos en ello como si no, si nos damos cuenta o no de ello, estamos
cargando de significados cuando elegimos un color.

CIBERGRAFÍA

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