Está en la página 1de 63

Sara Sarmiento

MUJER SALVAJE
@patriciacuevasdesign
@sarasarmiento_psicologa 2
No tienes nada que aprender, solo algo que recordar.
Sara Sarmiento

@sarasarmiento_psicologa 3
A todas las Perfectas Imperfectas

@sarasarmiento_psicologa 4
Dentro de cada mujer alienta una vida secreta, una
fuerza poderosa llena de buenos instintos, creativi-
dad apasionada y sabiduría eterna.
Es la mujer salvaje, una especie en peligro de extin-
ción que representa la esencia femenina instintiva.

Clarissa Pinkola Estés


Psicoanalista Junguiana.

@sarasarmiento_psicologa 5
Perfectas Imperfectas
Las Perfectas Imperfectas son esas mujeres que se sienten fuera de lugar y “no pueden con la vida”. A veces se aburren
con lo que les ha tocado vivir. Sienten incomodidad, ansiedad y angustia. Como si estuvieran oprimidas, encadenadas.
Como si no pudieran sacar algo que las llama en su interior. Un potencial oculto.

Debido a que su poder está reprimido, caen en relaciones de dependencia emocional y, aunque todo el mundo les dice
“ese tipo no te conviene”, a veces no lo pueden evitar, porque evidentemente, no es tan fácil.

Muchas de ellas han criticado o critican su cuerpo y comen “en exceso” para calmarse, aunque intentan dejar de hacerlo
y ser más compasivas con ellas mismas.

A veces trabajan en exceso porque ¡oye, tenemos la mala manía de querer comer y llegar a fin de mes!. Otras veces no
les da la vida para hacer todo lo que quieren, porque el perfeccionismo y la sobreexigencia es parte de su vida, y no por
ello son malas.

La iluminación es algo que no consiguen y no sabemos si van a conseguir, tampoco si les interesa mucho. El desape-
go… Pues en ello están. Más bien ellas prefieren tener relaciones de sostén donde cuidar y que la cuiden, donde apoyar
y sentir que la apoyan, porque saben que en este mundo donde todos quieren soltar, tener espacios de calma, amor y
compasión es muy sano.

Muchas Perfectas Imperfectas se emocionan rápidamente, ya sea viendo una película, escuchando una canción, con-
templando un amanecer o (y especialmente) discutiendo con sus seres queridos. Las lágrimas no pueden evitar salir y
esto no es bien acogido por las personas que las rodean. ¡Ay, si yo os contara cuántas veces han tenido que escuchar que
son demasiado sensibles o unas dramáticas! Por ello, suelen ser mujeres que se han sentido juzgadas e incomprendidas
por su entorno.

Pero lo que ellos no saben es que Las Perfectas Imperfectas tienen una Alta Sensibilidad y mucha empatía. Puede que
muchas de ellas sean mujeres con alta capacidad, pero el sistema patriarcal las ha oprimido, porque desde tiempos
inmemorables las mujeres poderosas generan miedo. Tanto es así que las han perseguido e incluso matado para con-
trolar su poder.

Y es que las Perfectas Imperfectas somos mujeres reales, con vidas reales, pero que han nacido en un tiempo y lugar que
no estaba preparado para ver e impulsar su luz. En otras épocas fueron llamadas brujas y chamanas. Hoy, han tenido
que sacrificar y ocultar tanto su poder para encajar, que muchas de ellas creen que no lo tienen, ni siquiera “les vibra”
cuando lo ven en otras mujeres. Pero él está ahí, esperando.

Ahora, las Perfectas Imperfectas están llamadas a despertar, a sacar su poder salvaje y ancestral, porque el mundo
necesita mujeres como ellas.

Hoy, querida, te hablo a ti. Despierta.

@sarasarmiento_psicologa 6
Antes de leer este manual…

¿Qué es y cómo usar este libro? Aclaraciones importantes

¡Hola!

Soy Sara Sarmiento, psicóloga de orientación psicoanalítica, profesora de yoga y Mindfulness. Hoy quiero ayudarte a
recuperar tu poder natural. No, no voy a venderte que este libro te va a solucionar la vida en 10 sencillos pasos porque
no es así, pero sí te prometo que, si tú quieres, será una ayuda en tu día a día convirtiéndose en un lugar de autocui-
dado, compasión y autoconocimiento.

Este libro no pretende ser un manual donde encontrar las causas de tu sufrimiento porque sobre esto hablo muchí-
simo en mis redes sociales, mis talleres y círculos de mujeres. También en la Escuela Consciente y en el Club de las
Perfectas Imperfectas. Pero sí daré pequeñas pinceladas para que entiendas de dónde viene tu dependencia emo-
cional, tu baja autoestima, tu tristeza, ansiedad y miedos, entre otras cosas. Cada persona tendrá que aplicarlo a su
vida particular.

Lo que aquí sí encontrarás es algo práctico, ejercicios que quieren convertirse en tus compañeros de viaje: El de tu
vida. Unos acompañantes que puedes dejar en tu mesita de noche y leerlos cuando lo necesites, o llevarlos en tu
bolso y recurrir a mis palabras cuando sientas en tu interior que lo tienes que hacer. Te prometo que los he creado
con muchísimo amor para que te ayuden a pasar de la niña herida a la mujer (u hombre) salvaje que habita en ti, para
reactivar tu poder ancestral y cuidarte mejor.

A través del trabajo que haremos juntas podrás comenzar a verte más allá de lo que ahora crees que eres, cuestionar
tus mandatos internos y crear una vida distinta y más amplia. Te acompañaré en tu caminar, ese que todas empren-
demos, no hacia nuestro mejor yo, sino hacia un Yo más amplio, realista a la vez que imaginativo, en definitiva, un Yo
que duele menos o que tolera mejor el dolor y que puede encontrar esperanza en el vivir. También irás activando a la
mujer salvaje, la que todo lo sabe, la que camina erguida, sabiendo que tiene un papel en el mundo. A través de ella
irás sanando a tu niña herida.

Puedes hacer cada día una actividad distinta, aunque para algunas personas esto puede resultar demasiado intenso
y no darles tiempo a gestionar todo lo que se les mueva en su interior. También puedes hacer los ejercicios cuando
te diga tu intuición y cuando estés preparada. Puedes incluso quedarte en un ejercicio todo el tiempo que quieras
¡como si quieres estar una semana o un mes entero con un ejercicio antes de pasar al siguiente!

Lo que sí te recomiendo es que intentes seguir el orden que te propongo ya que los ejercicios están ordenados para
ser “seguros” pues es muy importante tener cierta sensación de seguridad o de calma, o al menos saber estar con
tus emociones, cuando vas a trabajar con la niña interior, ya que puede ser bonito o removedor. Esto sucede porque
nuestra niña interior puede no estar preparada para verte o tú para verla a ella, especialmente cuando hemos sufrido
historias traumáticas como abusos o maltrato. En estos casos mi más sincera recomendación es estar en terapia o
en un grupo de sostén, de auténticas mujeres medicina, para realizar estos ejercicios. Estoy segura que tú eres una
mujer medicina, pero necesitas una tribu, aquelarre o una guarida de mujeres salvajes para ir a ciertos lugares de
tu pasado y de tu inconsciente. Es precisamente por esto que antes de ir a ver a la niña interior activamos a la mujer
salvaje y creamos muchos recursos internos, porque podemos necesitar protección y sostén.

Por otro lado te recomiendo que no tengas prisa, siempre tienes que ir a tu ritmo, ni más rápido ni más lento. En
psicoanálisis decimos que ir despacio es ir rápido. Trabajar con la psicología profunda, el inconsciente y el pasado
necesita tiempo y hay que hacerlo con mucho respeto. A fin de cuentas estamos trabajando con lo más importante:
tu vida.

@sarasarmiento_psicologa 7
Dicho esto, si algún ejercicio te remueve, estaría bien que estuvieras en alguna terapia o círculo de sostén. Sin em-
bargo varios ejercicios están precisamente indicados para que aprendas a regular tus emociones y éstas no te hagan
caer en conductas de las cuales luego te arrepientas o te hagan daño, ni tampoco te amarguen la vida. Aprender a
estar con nuestras emociones, pensamientos y sensaciones corporales es un regalo que no podemos negarnos.

De todas formas te dejo algunas formas rápidas para evitar que el pasado o el futuro te absorban y volver a la sen-
sación de seguridad del presente. Si ves que te empiezas a poner muy nerviosa o agitada, o que empiezas a tener
mucho sueño o parálisis, sigue estas recomendaciones:

1. Busca en el lugar donde estés objetos de color rojo, por ejemplo.


2. Otra forma de volver al presente es sentir el peso de tu cuerpo contra el suelo y la firmeza de éste.
3. También puedes tener a mano olores que te lleven a recuerdos bonitos o te calmen, para ello yo confío ple-
namente en la aromaterapia, ya que los aceites esenciales además de tener un olor súper potente, son te-
rapéuticos al ser la parte más pura, medicinal, terapéutica y concentrada de la planta, aportándote instan-
táneamente todos sus beneficios. Aceites esenciales como “Valor” o “Stress Away”, así como el de Lavanda,
pueden ser de gran ayuda, pero usa lo que tú necesites. Puedes incluso crearte una mezcla personalizada
usando diferentes aceites que te gusten basándote en sus propiedades. Puedes también usar una colonia,
una bebida o algo que te traiga buenos recuerdos cuando lo huelas.
4. Hacer deporte intenso
5. El Bodyfulness y el baile
6. La respiración, pero cuidado, para algunas personas esto puede generar más ansiedad.
7. Caminar y fijarte en tus pasos, lo que se llama meditación en movimiento.

Por último decirte que este libro dispone de espacios para que escribas en él. Como pueden quedarse cortos, yo
siempre recomiendo tener una libreta para hacerlos y para usar en tu día a día y escribir las cosas que te van pasando.
Lo llamo Libreta Consciente. Al igual que le digo a mis pacientes, intenta que sea una libreta bonita, pues ella conten-
drá lo más importante: Tu mundo interior.

Por último, permitidme que durante todo el libro hable en femenino. Esto lo hago por un lado porque hablo para
personas independientemente de su sexo y género y por otro, porque es cierto que gran parte de la gente que me lee
son mujeres, pero puede ser usado por cualquier persona que lo necesite.

@sarasarmiento_psicologa 8
A quién va dirigido este libro, cómo te va a ayudar y recursos adi-
cionales

Este libro va dirigido a todas esas personas que sienten incomodidad en la vida que les ha tocado vivir, o ven que hay
algo que no funciona en su interior. A todas esas personas que notan un grito de libertad en sus entrañas pero no se
atreven a llevarlo a cabo. A esas personas que sienten ansiedad, tristeza, incomodidad o angustia sin saber por qué.
A todas las que alejaron su poder por encajar en una sociedad que no las supo entender. Si eres una de ellas, este
libro es para ti.

A continuación te dejo una seria de ítems que te indicarán si eres una de esas personas, si en alguna de ellas dices que
sí, entonces estás preparada para llamar a la mujer salvaje y sanar a la niña.

- Sufres dependencia emocional


- Eres muy exigente contigo misma
- Hay heridas en tu infancia o en tu vida
- Necesitas mejorar tu vida y tu relación contigo misma
- Buscas aumentar tu autoestima y amor propio
- Quieres sentirte más poderosa
- Deseas acrecentar tu poder personal
- Te gustaría dejar de poner en manos de los demás tu vida, pero sin convertirte en una persona que solo mira
por ella
- Necesitas encontrar un espacio dentro de ti al que volver
- Te inspira vivir de acuerdo a la naturaleza, de forma más conectada y consciente
- Tienes una mente abierta para entender que existen cosas más allá de lo que puedes ver, como es el mundo
del inconsciente
- Puedes mezclar ciencia y espiritualidad o quieres empezar a hacerlo
- Te interesa el psicoanálisis
- Te gusta la meditación
- Eres una persona que le gusta escribir y hacer ejercicios de autocuidado
- Tienes ganas de trabajar en ti y en crear una nueva forma de verte y de vivir
- Quieres empezar a romper las cadenas que te dominan desde el inconsciente

El libro te ayudará con diferentes ejercicios, digamos que es 90% práctico. Si quieres profundizar en la teoría y en las
causas de tu malestar, puedes hacerlo en otros espacios que tengo para ti. Algunas de las meditaciones las tienes
grabadas, todas las que son de libre acceso las vas a poder hacer en este mismo ebook, pinchando en los enlaces o
en mi Instagram, en la sección de IGTV, donde encontrarás muchas más que las que aparecen aquí.

El resto de meditaciones del libro que no tienen vídeo asociado, así como las explicaciones de por qué te pasa lo que
te pasa, por qué caes en relaciones de dependencia, por qué te cuesta quererte, etc. las puedes encontrar en mi Ins-
tagram, mi Youtube y mi Página Web, especialmente en la Escuela Consciente y El Club de Las Perfectas Imperfectas
que abre sus puertas el 21 de diciembre en Yule (si no sabes qué es Yule, te invito a buscarlo).

@sarasarmiento_psicologa 9
Te dejo información con la que puedes complementar este Ebook:
IG: @SaraSarmiento_Psicologa

Canal de Youtube: SaraSarmiento_Psicologa

Página web, Escuela Consciente y El Club de Las Perfectas Imperfectas:

http://www.yovivoconscientepsicologia.com

También decirte que podrás usar los ejercicios en múltiples momentos de tu vida para solucionar cosas que te
sucedan en el día a día o simplemente para vivir mejor y más consciente, conectando con la naturaleza y la sabiduría
ancestral que habita en ti.

Usalos sin miedo, confia en tu poder.

@sarasarmiento_psicologa 10
Entendiendo Nuestra Mente: Un Breve Recorrido por el Psicoanálisis
que da sostén a este Pequeño Libro

El psicoanálisis es mi gran pasión. Desde que Sigmund Freud fundó esta apasionante disciplina, aquella con la cual
entendemos la mente y ayudamos a las personas a superar su sufrimiento, muchos han sido los y las psicoanalistas
que nos han guiado y orientado con sus teorías para acompañar a nuestros pacientes.

Esta disciplina nos ayuda a entender al ser humano, por qué le pasa lo que le pasa y por qué es como es: por qué
sufre, por qué no puede cambiar ciertas conductas aunque aparentemente se haga daño con ellas, por qué repite
una y otra vez la misma historia. Pero el psicoanálisis es mucho más que eso, es una forma de terapia que nos ayuda
liberarnos de las cadenas inconscientes que dominan nuestras vidas.

Trabajar con el inconsciente es apasionante. Un lugar que habita dentro de ti donde se esconde aquello que has
olvidado o reprimido. En él se juegan vivencias pasadas de cualquier tipo, todas aquellas que tuviste que reprimir
porque no eran aceptadas por tu entorno directo. Allí habitan tus padres y tu familia con sus mandatos, puesto que
los has interiorizado y los has incorporado a ti y ahora crees que eres tú misma. Habitan también tus cosas buenas y
malas, la sociedad, la cultura y todo aquello que te ha construido y por supuesto, también contiene tus heridas. Un
lugar que domina la conducta, los pensamientos y sentimientos, dirigiendo tu vida y haciendo que repitas una y otra
vez las mismas situaciones sin saber por qué. Conocerlo y modificarlo es necesario para sanar.

No es mi objetivo profundizar en la teoría psicoanalítica, pero sí dar unas pequeñas pautas para que entiendas de
dónde viene tu dolor y por qué tienes que trabajarlo. Después de eso, pasaremos a los ejercicios prácticos.

Lo primero que tienes que saber es que en el psicoanálisis, cuando decimos “sanar”, nos referimos a integrar. Tus
heridas infantiles, el daño que te han hecho a lo largo de tu vida, las relaciones con tus seres queridos, en definitiva,
las cosas que has vivido, no las podemos cambiar, pero lo que sí podemos hacer es entenderlas desde otro lugar para
ir bajando así el nivel de sufrimiento que sientes y, al desbloquear lo que ha quedado en el inconsciente, modificar
o transformar no solo los síntomas como la ansiedad o la depresión, sino tu forma de comportarte y percibirte: tus
angustias, tus miedos, inseguridades, las ideas negativas que tienes sobre ti, tus límites… ¿Esto quiere decir que
vas a poder hacer cualquier cosa que te propongas? Bueno, quizás lo que te propongas sí, ahora bien, vuelvo a no
engañarte, no vas a poder hacer todo lo que hay en este mundo, sino que tendrás que decidir en qué cosas sí quieres
invertir tu tiempo y energía y cuáles prefieres no vivir.

Quizás no era esto lo que querías escuchar, pero el psicoanálisis no te vende sanaciones milagrosas. Nosotrxs te po-
demos asegurar que trabajamos para que tengas una vida mejor, mas consciente.

Este libro se basa en el simbolismo del psicoanálisis junguiano y también en el psicoanálisis relacional, combinado
con ejercicios de mindfulness, meditación, terapia sensoriomotriz y, por supuesto, mi propia experiencia en terapia
clínica y como facilitadora de círculos de cientos de mujeres que acuden a buscar su conexión consigo mismas. Mu-
jeres que generalmente sufren por dependencia emocional, mala relación con su imagen corporal y su autoestima,
sobreexigencia en ellas mismas, sensación de no llegar a todo o no ser suficiente, ansiedad, depresión, heridas de
la infancia, trauma, etc. Yo las llamo las Perfectas Imperfectas, mujeres que se sienten incomprendidas, raras y fuera
de lugar, pero que en realidad solo son humanas a las que les pasan cosas de humanas. La iluminación no es para
nosotras.

Dicho esto, pasemos a entendernos un poquito más y para ello vamos a tomar el modelo Junguiano, muy resumido
para no aburriros, porque como ya he dicho no me interesa tanto explicar causas sino que entendáis un poquito el
porqué y para qué de los ejercicios.

Apuntes básicos antes de meternos en harina:

En el psicoanálisis junguiano hablamos de que la mente se “divide” en diferentes partes. En realidad esta división
es imaginaria, porque somos un todo en relación con nuestro ambiente. Vamos a ver las partes que nos conforman:

@sarasarmiento_psicologa 11
Por un lado encontramos el Ego-Yo, que no es más que nuestra parte consciente, lo que nosotras conocemos de
nosotras mismas. El Yo se ha creado en relación con el entorno, principalmente con nuestros seres queridos. En el
psicoanálisis relacional estudiamos en profundidad cómo las relaciones con nuestra madre, padre, familia, escuela,
etc., nos afecta, creándonos los rasgos de personalidad que nos acompañarán toda la vida, pero que son flexibles si
se trabajan adecuadamente. Desde nuestra teoría el niño humano necesita unas “situaciones” en el desarrollo que
tienen que darse sí o sí, y en esas situaciones los padres adultos cuidadores tienen que cuidar “suficientemente
bien” al bebé. Te cuento más adelante cuáles son estas situaciones, cómo nos conforman como personas y cómo
pueden generarnos síntomas y angustias futuras.

Por otro lado tenemos la máscara, que es la forma en que nos presentamos al mundo. Nos ponemos esta máscara
para gustar, ser aceptadas, relacionarnos… A veces nos ponemos la máscara incluso con nosotras mismas. Ella tam-
poco es mala, solo nos intenta proteger.

La sombra: la sombra es ese lugar del inconsciente donde mandamos lo que somos pero no aceptamos, lo que en
realidad no queremos ser, aspectos actitudes y rasgos que el Yo Consciente / Ego no reconoce como propios. No
penséis que es un lugar donde mandamos solo la maldad, también pueden haber cosas muy buenas que no que-
remos ser: capacidades, potencialidad, etc. ¿Qué es entonces lo que mandamos a la sombra? Lo no aceptado por
nuestros adultos significativos en la edad más temprana y por nuestros iguales (y nuevamente por nuestros adultos
y sociedad) en edades posteriores. Todo lo que no nos ayuda a encajar es mandando a la sombra y posteriormente
proyectado en el mundo como cosas que odiamos o no nos gustan. ¿Estás hablando de la Ley del Espejo? No exac-
tamente. Para el psicoanálisis junguiano la realidad existe, aunque ésta sea interpretada por cada persona según su
historia. Por poner un ejemplo: si hay un atraco, una persona puede tildarlo de inmoral y no justificado en ninguno
de los casos, y otra puede empatizar con el atracador y decir “quizás lo necesitaba para comer y no supo hacer otra
cosa”. O puede que si la persona que ve el atraco también es un atracador diga: “hace bien”. Ahora bien, sea como sea
interpretado, el atraco ha sucedido. Para que esto quede más claro, un ejemplo de proyección puede ser el siguiente:
Pensamos que hemos dicho o hecho una tontería y le decimos al otro “vas a pensar que soy tonta”, o “seguro que me
deja”, cuando quizás la otra persona ni siquiera se ha dado cuenta o no lo interpreta de esa forma.

¿Cómo sé qué hay en mi sombra? Observa contra qué luchas y verás lo que hay en tu sombra, observa lo que te mo-
lesta de los demás y verás lo que escondes de ti. Para el psicoanálisis los seres humanos no somos seres de luz, sino
seres duales de luz y oscuridad. Es solo integrando estos dos polos que llegamos a nuestro Self o Esencia. Este es
parte del trabajo que haremos en este libro. ¿Por qué? Porque cuanto más integrada estés más te querrás, menos te
costará poner límites y más sabrás qué quieres y qué no quieres en tu vida.

Después está el Inconsciente Personal, que sería todo lo que no conocemos de nosotras mismas y que se ha forma-
do en nuestra historia y en relación con nuestros seres queridos y nuestra cultura. Es de lo que te he hablado ante-
riormente.

Más profundamente se encuentra el Inconsciente Colectivo, que es una sabiduría ancestral que habita en toda la hu-
manidad y que se construye y reconstruye con el paso del tiempo, cada vez que a un número suficiente de personas
les pasa algo como comunidad. La pandemia sería un ejemplo.

Dentro de este Inconsciente Colectivo estarían Los Arquetipos, figuras o imágenes que representan aspectos hu-
manos y que es fundamental conocer para liberarnos de las cadenas inconscientes que dominan nuestra vida. Entre
ellos podría citar: El Ánima y El Ánimus (femenino y masculino), La Gran Madre, El Gran Padre, La Niña Interior, El
Bebé, El Héroe, El Mago, La Bruja, Chamana o Hechicera, los Príncipes y Princesas… Normalmente, todo aquello que
encontramos en los Cuentos de Hadas, en las Leyendas, en las Religiones Antiguas, en el arte y en las tribus. Muchas
de vosotras y vosotros habréis escuchado hablar de ellos a través de los ciclos menstruales. Esos arquetipos son solo
una parte del vasto Inconsciente Colectivo.

Pero no voy a hablar hoy de todos los arquetipos porque de eso ya hablo mucho en mis círculos y talleres. Hoy solo
quiero hablar de uno en especial que las que me conocéis ya habéis trabajado conmigo: La Mujer Salvaje.

@sarasarmiento_psicologa 12
¿Por Qué Soy Como Soy? Un Brevísimo Resumen

¿Y cómo se ha construido todo lo anterior? Te dejo aquí un breve resumen que te indica cómo nos hemos construi-
do todas nosotras como personas. No he querido profundizar mucho en ello porque ya en Instagram, los círculos y
talleres y la Escuela Consciente lo vamos viendo juntas, pero sí me parecía importante hacer un pequeño resumen.
Aquí te dejo esos “momentos vitales” donde los padres tienen que hacerlo suficientemente bien. Si esto no ocurre,
comienzan los problemas.

• Existe una necesidad básica de que el bebé sea sostenido por sus padres. Que lo cuiden, tengan contacto cor-
poral, lo alimenten, lo acaricien y abracen, le hablen y vayan traduciendo sus “sonidos” y gestos en palabras
comprensivas que reflejen lo que el bebé hace y dice para que se sienta visto, en un tono que se adecúe a la
edad del niño o la niña. Esto es, si el bebé sonríe, sonreírle. Si el bebé llora, ser sensible a sus necesidades y
apaciguarlo. Si la niña se da contra una mesa, hacerle ver que sentimos su dolor, no reírnos de ella, entender
que se ha hecho daño y calmarla para que poco a poco vea que no pasa nada.
• Que el bebé sea visto por sus padres como alguien valioso y lo idealicen, esto es, le permitan ser el rey o la
reina de la casa, evitando que la realidad llegue demasiado pronto y resulte traumática. El ser humano pe-
queñito necesita que sus progenitores y necesita que estos lo adoren, le rían las gracias, lo miren con los ojos
brillantes de emoción. Si el niño más mayor baila o ríe, hacerle ver que es espectacular en lugar de decirle que
eso es una tontería. Si hace un dibujo, intentar no corregirlo, sino impresionarnos con su creatividad. Volvien-
do al ejemplo de la mesa, si se da con ella, hacer ver que fue la mesa la que es mala e ir transformando poco
a poco todo esto en situaciones más acordes a la realidad.
• Las fallas de los padres han de ser adecuadas a la edad del niño. Una madre o un padre que sostienen y cal-
man van a fallar, claro que sí. Y poco a poco, en esos fallos que van a cometer, el niño o la niña irán regulándose
solos sus emociones, esto es, irán aprendiendo a esperar a su mami que “ya viene” aunque tarde un poquito
más. La madre (o el padre) tendrá que venir y sostener, pero puede tardar cada vez más, siempre adecuando
los períodos de su a la edad de su hijo/a.
• Dejar que el/la peque sienta que pertenece a la familia y que su familia es la mejor, esto es, que idealice a sus
papis y que al mismo tiempo sienta que pertenece a esa tribu. Hacer cosas en conjunto, dejar que sienta que
todos somos “los más grandes”. Compartir momentos con él/ella.
• Aceptar que es diferente a los padres. Dejar que sea tal cuál es, siempre poniendo límites para su seguridad,
claro. Aceptar a un niño no significa ceder a sus deseos, darle toda la libertad del mundo o dejarle elegir antes
de la edad que pueda sentirse seguro. Pero sí significa entender que tendrá gustos y comportamientos distin-
tos que hay que respetar, sin ridiculizarle ni cortarle las alas.
• Dejar que explore el mundo y acogerle cuando nos necesita. Esto es de suma importancia. A medida que el
bebé crece hay que dejarle explorar. Esto puede angustiar a los padres, especialmente los que sean más pre-
ocupados. Esto no quiere decir que el niño deba ser expuesto ni forzado a explorar. Si tenemos un hijo más
retraído o miedoso, se le puede ayudar al principio, pero luego ha de hacerlo él o ella.
• No hacer las cosas por él o ella. Ayudarle cuando nos necesite, pero dejar que explore, potencie y expanda sus
capacidades.

Todo esto que he expuesto nos va conformando como persona, van creando nuestro autoconcepto y amor propio,
nuestra autoestima, la forma que sentimos, toleramos y regulamos nuestras emociones. La forma que nos relaciona-
mos con los otros, especialmente con nuestras parejas, así como la manera con la que nos vemos y creemos que nos
ven. Configura también cómo vemos a las demás personas y por qué las elegimos, cómo creemos que es el mundo y
qué capacidades creemos que tenemos para enfrentarnos a él, nuestro miedos, angustias y necesidades. Y como no
puede ser, nuestra capacidad para poner límites y auto-cuidarnos.

Cuando estas cosas no se dan adecuadamente, se presentarán diferentes problemas, entre otras muchas puedo
enumerar:

• Dependencia emocional
• Falta de regulación emocional
• Necesidad de gustar y la tristeza o rabia que se nos activa dentro de nosotras si no gustamos.

@sarasarmiento_psicologa 13
• Lejanía emocional y/o dificultad para vincular con las personas• Falta de regulación emocional
• Vergüenza y culpa por ser como somos, especialmente cuando los demás no nos aceptan, pero también cuan-
do no nos gustamos en soledad, por ejemplo cuando hacemos algo que creemos intolerable o cuando nos
miramos al espejo con una mirada crítica .
• Tristeza, ansiedad y otros síntomas
• La forma que nos hablamos y nos machacamos a nosotras mismas
• El sometimiento cuando conocemos a otra persona, ya sean jefes/jefas, parejas, etc.

Ahora que ya conocemos un poco más los orígenes del sufrimiento y cómo funciona nuestra mente, vamos a poner-
nos a crear nuestros rituales de autocuidado y poder salvaje.

@sarasarmiento_psicologa 14
¿Qué necesitas?
Realmente lo único que necesitas es a ti misma, tan fácil y difícil al mismo tiempo. Pero no te preocupes, tu poder
salvaje y ancestral sabrá llegar a tu encuentro, a tu llamada. Relájate, estarás bien. Piensa que somos muchas muje-
res (y seguro muchos hombres) al otro lado haciendo, sintiendo y viviendo lo mismo que tú, seremos tu sostén si nos
necesitas.

Si quieres, puedes entrar en la tribu para las Perfectas imperfectas y tener allí tu lugar sagrado de sostén, es gratuita.

Otras cosas que te pueden ayudar para crear tu espacio sagrado y reconectar con tu poder son:
Un cuarto tranquilo, amigable, ordenado y limpio.

Aceite esencial que te guste o relaje, lo puedes poner en el difusor o echártelo en las muñecas o detrás de las
orejas (comprueba si se puede echar en la piel directamente, no todos se pueden, sino, haz una mezcla con aceite
portador, yo uso jojoba).

Música de fondo que te conecte a ti o silencio. Yo me decanto por este último o por música de tambores o celta,
pero siempre has de buscar lo que tú necesites, confía en ti.

Velas, piedras, plantas, flores a tu alrededor.

Caja o tarro: Ten una caja cerca de ti, de algún material natural como madera, cartón, cristal... Para ir guardando
cositas que sientas que puedes guardar. Puedes reciclar alguna de zapatos, galletas o incluso un frasco de vidrio
de mermelada o similar.

Círculo: la forma más perfecta del universo. A mí me gusta crear un círculo de poder y protección que guarde den-
tro todo lo que pasa cuando hago un ejercicio. Te lo recomiendo para todo el curso, pero especialmente en medi-
taciones. Para ello puedes hacer señalando con tu dedo alrededor tuyo o caminando creando tu círculo. También
puedes usar una cuerda, hojas, flores... Siempre ciérralo y cuando acabes, ábrelo. Puedes poner símbolos en los
principales puntos cardinales: Norte, Sur, Este, Oeste, relacionados con los elementos

Meditación lugar de calma o círculo de seguridad


Antes de empezar a realizar cualquiera de los ejercicios que te propongo, necesitas crear un lugar tanto fuera como
dentro de ti que te dé calma. Este espacio será el sitio donde regreses si te alteras demasiado o si, simplemente, ne-
cesitas calmarte, cuidarte y quererte.

Para ello necesito que busques una habitación donde puedas estar cómoda, ella será tu habitación propia, el lugar
donde hacer los ejercicios, donde conectar contigo misma y con tu poder salvaje. Si no dispones de este espacio,
puedes acudir a la naturaleza. Si tampoco es posible, entonces tendrás que crear ese lugar sagrado solo dentro de ti.

Cierra los ojos e imagina un círculo que te protege, puede ser de luz, piedras, naturaleza como árboles, cristal o vidrio,
de energía, fuego… o quizás un círculo creado por mujeres salvajes como tú, las mismas que ahora están leyendo
este libro en este preciso momento, mujeres con las que tienes una conexión especial, un hilo que une sus corazones
con el tuyo. Porque sino fuera así, no estaríais leyendo estas palabras.

Tú estás en el centro del círculo, sentada o tumbada. Respira, solo respira.

Poco a poco el círculo se vuelve una esfera energética y te envuelve. Nada que tú no quieras puede entrar en este
espacio que has creado.

Poco a poco siente el contacto de tu cuerpo con el suelo (o donde estés sostenida) e imagina que el interior de tu esfe-
ra se va convirtiendo en un lugar agradable, si vas a escoger un lugar conocido tienes que tener muy claro que allí no
te pasó nada que pueda doler. Quizás lo mejor es que inventes un lugar propio: una playa, lago, bosque, habitación

@sarasarmiento_psicologa 15
con una chimenea de leña… Lo que tú elijas.
Tu animal de poder puede estar allí contigo (ver esa sección)

También pueden estar en este lugar cualquier persona, animal, imagen espiritual o cosa que necesites, siempre que
esas personas te generen sensaciones agradables. Si durante la meditación necesitas que salgan, sácalas de tu bur-
buja. Recuerda que ella te protege a ti y solo a ti.

Si durante la meditación aparecen sensaciones desagradables, imagina que ellas se van como una luz fuera de tu
esfera. Déjalas allí hasta que puedan ser miradas.

Si quieres usar esta meditación para enfrentar o afrontar cosas de tu vida diaria, puedes hacerlo. También puedes
usarla si hay algo que quieras trabajar. Imagina que tu esfera te protege y que aquello que te da miedo, ansiedad etc.,
está situado fuera de tu burbuja mientras tú estás dentro del lugar tranquilo. Si sientes angustia, puedes hacer que la
esfera crezca y separe aún más lo que te da angustia.

Cuando acabes la meditación responde a estas preguntas:

@sarasarmiento_psicologa 16
¿Cómo es tu lugar? Dibújalo aquí y describe con frases cortas cómo es:

@sarasarmiento_psicologa 17
¿Qué has sentido al estar en él? ¿Cómo estaba tu cuerpo? ¿Y tu mente?

¿Hay algo que hayas trabajado o hayas querido dejar fuera? Dibújate a ti dentro del lugar de calma y aquello que no
quieres fuera, incapaz de entrar dentro de tu esfera.

Hecho el círculo, vamos a despertar nuestra sabiduría ancestral.

@sarasarmiento_psicologa 18
El encuentro con la mujer salvaje
Desde los albores de la humanidad las mujeres han sido llamadas a ser las diosas de la creación. Ellas, en tribu, aque-
larre o comunidad se han juntado para soñar, crear, bailar, curar, sanar.

Dentro de cada mujer existe una mujer salvaje. Algunas personas la llaman la mujer medicina. Ella es nuestra sabidu-
ría ancestral, la fuerza del sagrado femenino, es puro inconsciente colectivo. Habita en nuestro interior pero gran par-
te de nosotras la hemos olvidado ¿Por qué? Porque las mujeres han tenido que guardar en secreto su poder, sacarlo
solo en lugares seguros. Han sido perseguidas, dañadas, maltratadas y hasta quemadas en hogueras por personas
que no han sabido respetarlas, personas que las han temido. Estas personas se han desviado de su energía, cayen-
do en una terrible adicción al poder, creyéndose dueños y señores de todo lo que habita en la tierra, destruyendo
a la naturaleza con su ambición y también a todos los que no son como ellos, explotando por tener más y más. Son
personas que equivocaron la razón con “tener la razón”. Las mujeres, entonces, tuvieron que esconderse. Algunas se
sometieron, otras se ocultaron y con el paso de las generaciones muchas de ellas llegaron a olvidar el legado sagrado.

Pero por suerte las mujeres están despertando y lo hacen porque el mundo está sangrando, muriendo, gritando que
necesita ayuda.

Por esta razón mujeres y hombres empiezan a despertar de nuevo esa parte natural y ancestral que escucha la llama-
da. Puede que pienses que no la has escuchado pero quizás las siguientes preguntas te ayuden a reflexionar:

- ¿Te has sentido alguna vez rara, incomprendida, juzgada o un bicho raro?¿como si no estuvieras en un lugar ade-
cuado para ti?
- ¿Sientes que tienes que ocultarte porque las personas no van a entender o aceptar cómo eres?
- ¿Alguna vez has sentido dolor en el pecho o ganas de llorar frente a una injusticia?
- ¿Te duelen las cosas aunque no te las hagan a ti?
- ¿A veces sientes ansiedad o tristeza y no sabes bien por qué?
- ¿Te encantaría ayudar a crear un mundo mejor?
- ¿Te preocupa el planeta?
- ¿Te maravillas con la naturaleza?
- ¿La naturaleza te da paz?
- ¿El arte en una o varias de sus formas te emociona profundamente? ¿No puedes evitar llorar con una canción, una
película, libro y obre de arte?
- ¿Te consideras una persona híper-empática o altamente sensible?
- ¿Necesitas espacios de calma porque a veces te sientes agotada?
- Por otro lado ¿te encanta estar con personas que te entiendan con las cuales puedas hablar de cualquier cosa?
- ¿A veces sientes la necesidad de romper con todo y empezar de cero?
- ¿Sientes hartazgo de tu vida?
- ¿Te has sentido atrapada en tu vida, como no pudiendo expresar algo que hay dentro de ti (aunque no sepas bien
qué es)?
- ¿Sueñas con vivir cosas nuevas?
- ¿Te gusta viajar y descubrir nuevas culturas?
- ¿Sueñas despierta con vidas alternativas?
- ¿Alguna vez has sentido una conexión que no puedes explicar ya sea con personas, animales, paisajes o elemen-
tos naturales como el mar, árboles o piedras?
- ¿Cambias de humor de forma cíclica?

Si has respondido mayoritariamente que sí, la mujer salvaje te está llamando y ya no sabe qué más hacer para que

@sarasarmiento_psicologa 19
la escuches. Puede que sientas que ella no habita en ti, es normal, no es fácil sacar ni potenciar el poder personal
cuando toda la vida hemos tenido que apagarlo para encajar. Pero ahora, querida, te toca renacer.

¿Quién y cómo es la mujer salvaje?


A mí me gusta decir que la mujer salvaje camina erguida, con paso firme y cabeza alta. Sabe adónde va, pero si alguna
vez se siente perdida, no tiene ningún problema en reconocer que necesita ayuda.

Honra y valora a las mujeres que encuentra y no solo a ellas, a cualquier ser vivo. Vive para cuidar y ser cuidada, para
ser libre y dar libertad, para respetar y ser respetada. Vive con bondad, pero sin renunciar a su fuerza y su poder. Se
sabe vulnerable y aprendiz, pero no por ello deja de ser maestra, maestra de su propia vida.

Es una mujer que siente y percibe, intuye y baila. Mueve el cuerpo con su sexualidad sagrada, no se pelea con él, pues
él no nació para que nadie lo admirara. Su cuerpo se creó para servirla a ella: para disfrutar, gozar, abrazar, besar,
acariciar, correr, expresar.

A través de este libro vamos a ir conectando con ella y ella será la encargada de ayudar a nuestra niña herida.

Mujeres, comenzamos nuestro viaje.

@sarasarmiento_psicologa 20
Nuestro animal de poder
Toda mujer salvaje tiene asociado un animal de poder. Los animales de poder se remontan a las sociedades totémi-
cas, donde el hombre y la mujer primitivos creían que los animales les proporcionaban sus características de forma
mágica. Muchos clanes tomaban el nombre de su animal sagrado, al que adoraban y sentían como su protector.

En este ejercicio vamos a conectar con tu animal de poder. Muchas mujeres me preguntan en mis talleres y círculos si
solo tienen uno o varios, mi respuesta es que todos los animales que vengan serán parte de ti, ya que si vienen signi-
fica que necesitas algo de ellos, alguna capacidad o característica que en ese momento deseas o te puede ayudar. El
animal aparece desde lo más profundo de tu inconsciente para guiarte y recordarte que su poder habita en ti.

La mujer salvaje lidera a sus animales de poder. Ellos la guían y protegen, pero ella es la líder de la manada, ella es
quien los ha domesticado, pero no les ha hecho renunciar a su libertad. Ellos se acercan porque quieren ser su tribu,
no se les exige quererla ni seguirla, la siguen porque es líder, la quieren porque lo merece. Si algún animal quiere
ausentarse y/o alejarse, la mujer salvaje lo respeta. Si la mujer salvaje necesita estar sola, los animales la dejan tran-
quila. Ahora bien, cuando una mujer necesita “dar un zarpazo”, “rugir”, “volar” o “cabalgar”, ahí estará su animal de
poder para darle esa energía.

Vamos a hacernos algunas preguntas para empezar a descubrir cuál es el tuyo:

- Dime, rápido, el primer animal que te venga a la mente. Escríbelo aquí:

El primer animal que he pensado es:

____________________________________________________________________________

Si sales a pasear por la calle, o si ves una película, lees libros, dibujas… ¿de qué animal no dejan de aparecerte pistas?
Por ejemplo: pasear y ver plumas por todos lados. Caminar y ver camisetas con leones. Ver películas y que siempre
los lobos llamen tu atención. Que los perros se te acerquen siempre, etc.

Apunta aquí experiencias curiosas que has vivido o “casualidades” que te han pasado con animales:

Ahora mismo en tu vida, ¿qué característica, cualidad o energía necesitarías de uno o varios animales? Ejemplo: la
agilidad de la gacela, la fuerza del oso, la fluidez de la pantera, la libertad del delfín…

Escríbelas aquí:

@sarasarmiento_psicologa 21
¿Hay algún animal con el que sientas conexión desde niña?

Escríbelo aquí:

Ahora ya estás preparada, haz la siguiente meditación. Es una meditación que suelo usar en mis talleres, la que te
dejo aquí la uso en TRANSITANDO, entre otros.

Antes de nada:

- Ponte ropa cómoda


- Escoge un lugar amplio donde te puedas mover, tengas intimidad y no seas molestada
- ... Y sigue tu instinto.

Ahora haz la meditación

Meditación animal de poder

Una vez realizada la meditación, dibuja tu animal y contesta a estas preguntas:

Dibuja a tu animal aquí:

@sarasarmiento_psicologa 22
Ahora, responde:

¿Qué me quiere decir este animal?

¿Por qué ha aparecido?

¿Qué necesito de él?

¿Qué características tiene?

¿Necesito alguna de ellas?

¿Cómo las puedo cultivar?

@sarasarmiento_psicologa 23
Aceptar y gestionar las emociones
Este ejercicio es una mezcla de mindfulness y terapia sensoriomotriz, que es una terapia de trabajo con el cuerpo,
especial para el trauma. Debemos usarla como un entrenamiento para comenzar a acercarnos a nuestro cuerpo,
porque en él habita la intuición y el instinto de la mujer salvaje. Si estamos muy separadas de él, no nos vamos a en-
terar de los mensajes que nos manda, perdiendo una fuente fundamental de información. Por otro lado, puede que
sí recibamos las señales pero no le hagamos caso y por ello acabamos en situaciones dolorosas. Si bien es cierto que
la intuición puede estar “traumatizada”, eso no quita para que no tengamos que volver a reactivarla*.

*Sobre la traumatización de la intuición hablaré en La Escuela Consciente, también tenéis un vídeo en mi IGTV en la sección 5 minutos con Per-
fectas Imperfectas.

Vamos ahora a realizar el famoso Body Scan y después de él, acabaremos con Terapia Sensorimotriz.

- Siéntate cómoda, puedes poner una música calmada, o sonidos de la naturaleza. También puedes hacerlo en
silencio.

- Respira de manera natural, sin cambiar nada

- Visualiza si quieres a tu animal de poder cerca de ti. Poco a poco, a través de la respiración, llamas a tu mujer sal-
vaje. Imagina siendo ella, cómo va vestida, cómo está sentada, etc.

- Ahora imagina un haz de luz que baja desde la cabeza a tus pies, despacio, sin prisa, como si la luz te escaneara

- Dejar que la luz “escaneé” tu cuero cabelludo, siente si está relajado o tenso, pero no intentes cambiar nada.

- Sigue bajando por tu frente: ¿cómo está? ¿La estás forzando? ¿Y el entrecejo? ¿Lo has tenido fruncido mucho tiem-
po? Solo observa. Sigue bajando hacia tus ojos y obsérvalos también.

- Pasa por la mandíbula y los dientes ¿has apretado mucho hoy? No hagas nada, solo observa.

- Sigue bajando por todo tu cuerpo, cuando bajes pasa por la parte delantera del cuerpo y en la subida ve a la tra-
sera.

Puedes seguir este esquema:

o Partes a observar por la parte delantera: labios, boca, mandíbula, cuello, hombros, brazo izquierdo
(hombro, codo, mano, dedos) y lo mismo en el derecho, pecho, diafragma, órganos internos en la zona
del vientre, útero, glúteo izquierdo, cadera izquierda, rodilla izquierda, pie izquierdo, pie derecho y
empiezas a subir por la rodilla, cadera, glúteo y empiezas a subir por el lumbar, columna vertebral,
espalda media y alta, cervicales, nuca, acabando nuevamente en la coronilla

El objetivo del ejercicio es observar qué sensaciones hay, sin reaccionar ante ellas, aprendiendo a “tolerarlas” mejor.

Hay un dicho del Mindfulness que te puede ayudar a entender esto:

Un maestro le preguntó a su pupilo:

- Si coges un vaso y le echas hasta la mitad sal y luego lo acabas de llenar con agua y bebes de ese vaso:
¿Cómo está el agua?

A lo que su aprendiz contestó: - Salada maestro

- Muy bien – Dijo el maestro – Ahora coge ese mismo vaso y vacía su contenido en un gran lado de agua
dulce. Una vez vaciado, toma con el vaso agua de ese lago ¿a que sabe ahora el agua?
@sarasarmiento_psicologa 24
- Dulce señor – contestó el aplicado alumno.- Ya no notaríamos la sal
- Muy bien, aprende a ser lago en lugar de vaso, porque la misma cantidad de sal no produce el mismo
efecto según cuál de los dos seas

Y eso es precisamente lo que intentamos conseguir con este ejercicio, ayudarte a ser lago, de forma que cuando ven-
gan las emociones o las sensaciones corporales, puedas sostenerlas sin tener que huir de ellas, sin que controlen tu
conducta o te angustien el día entero (o la vida).

¿Has encontrado alguna sensación? Dibújala o ponla en palabras:

@sarasarmiento_psicologa 25
La segunda parte del ejercicio trata de liberar al cuerpo. Una vez detectado cómo está el cuerpo, podemos simple-
mente dejar ahí el ejercicio o liberarte de lo que quedó anclado.

El cuerpo recuerda los traumas del pasado, lo que no se dijo, lo que no se pudo hacer, así que este ejercicio es preci-
samente para liberar esas energías que quedaron en él.

- Puedes hacer movimientos de “tembleque”. Este ejercicio se inspira en los animales. Cuando sufren una si-
tuación de alto peligro y “se congelan” para salvar su vida, luego descargan esas energía o estrés en forma de
pequeños temblores, de forma que el cuerpo se libera de la situación traumática. Los seres humanos hemos
perdido esta capacidad, pero si sientes una emoción potente, hacer que todo tu cuerpo tiemble, se sacuda y salte
mientras mueves piernas y brazos enérgicamente (como si tuvieras algo pegado al cuerpo que te quieres quitar)
te va ayudar a liberarte. Más adelante verás el poder del baile para conectar con nuestro poder. Es puro conoci-
miento ancestral, úsalo.

- También puedes ver qué necesita tu cuerpo y dárselo. Por ejemplo: has notado que los brazos están en tensión
¿necesitas empujar algo? ¿O quizás golpear? Coge un cojín y dale con fuerza, o quizás empuja una pared no te
avergüences, estás sanando. Intenta no pensar en nada, solo dejar que todo fluya, puedes ver si quieres decir algo
como “déjame mi espacio”, “no te acerques”, etc. También puede ser que te hayas puesto nerviosa, ¿necesitas
alejarte de la situación? Vete. ¿Notas que tus piernas tiemblan nerviosas? Quizás quieras correr. Investiga, explora
y juega. Activar el sistema de juego del cerebro nos mantiene seguras. Observar e investigar hace que “salgamos
de la emoción y la sensación”, que éstas “no nos atrapen” y podamos resolver eso que antes era terrible. De todas
formas recuerda que este tipo de ejercicios siempre hay que hacerlos en lugares seguros para ti y, si puede ser con
una terapeuta, mejor que mejor.

Bonus Espiritual: puedes hacer una tercera parte de este ejercicio incluyendo el trabajo con los chakras. Por cues-
tión de espacio no explicaré este ejercicio aquí.

Apunta lo que necesites…

@sarasarmiento_psicologa 26
Aceptar nuestros pensamientos y no asustarnos de ellos
Este ejercicio es un ejercicio adaptado del Mindfulness. Él te ayudará a no identificarte con los pensamientos que te
vienen, a no creerte cualquier cosa que puede ser catastrófica en tu mente, ya sea del pasado, del futuro o del pre-
sente. Te ayudará también a bajar la ansiedad o la tristeza por cualquier cosa que pudo haber pasado. Combinado
con el anterior, es un ejercicio muy poderoso para recuperar tu poder personal.

El ejercicio que te propongo se llama “la Mujer Salvaje que habita su espacio”

Para realizarlo ponte una música calmada, o sonidos de la naturaleza. Puedes meditar también en silencio.

Respira, no intentes modificar nada.

Llama a la mujer salvaje. Ella es capaz de sentarse y simplemente observar, pues ella es capaz de sentir curiosidad
por las cosas, sin juzgarlas. Ocupa tu espacio sagrado y observa lo que pasa a tu alrededor, o dentro de ti.

Simplemente observa tus pensamientos, imagina que son nubes que pasan frente a ti o alrededor de tu cabeza, y
tú, sentada, los miras curiosa, sin juzgar si están bien o mal, solo obsérvalos, como su fueras una antropóloga inves-
tigando una nueva civilización que acabas de descubrir. También puedes verlos como hojas que arrastra el viento o
como ramitas que el agua de un río se lleva. Observar sin juicio y sin identificarte con ellos.

Tú eres la mujer salvaje observadora, estás habitando tu espacio y nada te invade… Eres poderosa y la sabiduría
ancestral vive en ti, nunca te olvides de ello.

Apunta lo que necesites…

@sarasarmiento_psicologa 27
Tierra: enraizarnos, sentir sostén.
El trabajo con los elementos es uno de los trabajos simbólicos más bonitos y efectivos que podemos hacer. Desde
siempre los seres humanos han tenido que conocerlos y aprender a usarlos para poder sobrevivir, pero no solo eso,
sino también para expresarse. Su conocimiento ayuda al Ser Humano a predecir y modificar el mundo para hacerlo
más seguro, para tener poder. Sin embargo, en algún momento, el Hombre/Mujer se salió del camino y usó los ele-
mentos de forma dañina. Por suerte otros seres humanos siguieron respetando esa conexión con la naturaleza. Si tú
estás leyendo este libro es porque eres una de esas mujeres conectadas a lo esencial. La mujer salvaje, intuitivamen-
te, sabe usarlos para su propio beneficio y para el beneficio del planeta.

Recuerda que no hay ningún elemento mejor que otro, todos tienen poderes y debilidades, exactamente igual que
nosotras. Todos tienen la capacidad de dar la vida o de destruirla, de nutrir o de dañar, nuevamente, igual que no-
sotras. Somos seres duales y aprender de cada elemento nos ayudará a entendernos. Además nos conectan con la
infancia: mancharse de barro, hacer castillos de arena, bañarse en el río, la playa… Por lo que son fundamentales
para reconectar también a la niña.

Yo he unido cada elemento a una esfera que nos conforma como Seres Humanos y a una necesidad básica de nues-
tra vida. Éstas son: Mente, Cuerpo, Espiritualidad y Comunidad. Esto es básico porque en la terapia me encuentro
muchas veces a personas que quieren sanar solo por asistir a las sesiones, quieren controlar el dolor emocional con
la mente, o que la realidad externa no les afecte en absoluto porque todo está en su mente o todo depende de cómo
lo interpreten y, si bien es cierto que estas cosas ayudan, no se puede sanar solo desde la mente, necesitas cultivar
cada área. Es como tener frío y querer que se pase de manera mental. No, si tienes frío te pones un abrigo y no le das
más vueltas ¿verdad? Pues con esto, igual. Claro que la mente puede modificar muchas cosas pero como vimos en el
ejemplo del atraco, el atraco existe. Cultivar diferentes áreas nos libera de la exigencia de ser perfectas y sentir que
todo lo malo nos ocurre porque lo interpretamos mal. No queridas, principio de realidad.

Entonces, volviendo a las áreas y su asociación a los elementos, La Tierra puede representar El Cuerpo, lo material,
pero para nosotras representará La Comunidad, el sostén que recibimos de nuestro planeta, de la naturaleza, así
como de otros seres vivos: humanos, animales, plantas. A través de él trabajaremos La Gran Madre Tierra, arqueti-
po nutricio que nos da la vida y nos sostiene frente a aquello que es más efímero. Antes de hacer cualquier trabajo,
especialmente espiritual, tenemos que tener lo terrenal bien asentado. Y por supuesto antes de ver a la niña herida,
tenemos que poder sostenernos y sentir equilibrio.

Algunas personas creen que ser espiritual es solo cielo, éter, aquello que no se puede ver. Pero en La Tierra, en la
naturaleza, en todo lo que nos rodea hay mucha espiritualidad y belleza. La naturaleza habita en nosotras porque
somos sus hijas, somos parte de ella. Somos ella. Desconectarnos de nuestra Gran Madre nos ha enfermado, como ya
decía Jung: El Ser Humano occidental ha enfermado porque ha perdido el sentido de la vida. Y es que le hemos dado
a lo racional demasiado peso, pero la razón sin emoción camina sin rumbo, perdida. Activar lo simbólico y reconec-
tarnos a lo esencial, es urgente.

Para conectar con los 4 elementos al mismo tiempo te recomiendo hacer mindufness caminando, puedes ir a una
playa mientras sientes la brisa, escuchas el mar, notas la arena en tus pies, respiras la libertad, notas el calor del sol
en tu piel.

Puedes también caminar por bosques y campos, subir montañas, cualquier lugar natural estará bien, confía en tu
criterio.

Dicho esto, volvamos al elemento tierra. Recomiendo siempre empezar por él.

Meditación Tierra:
Siéntate tranquila y cierra los ojos, respira. Pon toda tu atención en el contacto de tu peso con el suelo y nota cómo La
Tierra te sostiene y equilibra. Quédate un buen rato notando esta sensación de estar sostenida, pues ella no te dejará
caer. Disfrútala.

@sarasarmiento_psicologa 28
Poco a poco, imagina unas raíces que salen de ti y se funden en la tierra, conectándote con ella. Estas raíces descien-
den hasta el centro mismo del planeta. Deja que todo aquello que ya no quieres en tu vida descienda por tus raíces
y se queme en el fuego del centro terrestre. Aquello que no necesitas abona la tierra, como los cuerpos de lo que ha
muerto abonan la vida. Es el ciclo sin fin.

Como la tierra, cuando lo muerto es consumido, se convierte en nuevos nutrientes y genera nueva vida. Ella va su-
biendo por tus raíces y te alimenta de cosas buenas, nutritivas, aquello que necesitas para crecer, como el roble
empieza siendo semilla.

Nota como tu cuerpo se convierte en tronco, un tronco que lleva por sus venas el poder de La Madre Tierra. Alza los
brazos y respira: tus brazos son las ramas. Mécete suave, conecta a través de ellas con el cielo, con El Padre Universo.
Siente cómo estás conectada con El Todo, con todo lo que existe en este mundo. Eres parte de él.

Siente el espacio que ocupas por propio derecho. Expándete. Tienes derecho a existir. Eres naturaleza. Eres belleza.

Poco a poco, baja los brazos y ve recogiendo todo lo que haya sucedido durante la meditación. Visualiza todo lo que
ha pasado como una luz que va hacia tu corazón y cada vez se hace más y más pequeña, hasta convertirse en semilla.

Esa semilla se planta en tu corazón y ahora tienes un compromiso contigo misma: regarla. Regarla hasta que se haga
un árbol grande y fuerte. Es la semilla de tu poder personal.

Junta las manos en tu pecho en señal de rezo para agradecerte el espacio que te has otorgado.

Os dejo de regalo otra meditación que hice en instagram con este elemento:

Meditación Tierra

Responde:

¿Cómo te has sentido?

¿Cómo estabas antes y después de la meditación?

@sarasarmiento_psicologa 29
Dibuja lo que has visto

@sarasarmiento_psicologa 30
Agua: fluir, aceptar el transitar de la vida
El elemento agua está muy asociado al inconsciente y al mundo emocional. Como gran parte de nuestra mente in-
consciente, de los recuerdos que hemos olvidado por no haber sido puestos en palabras, han quedado grabados en
nuestros músculos, células, órganos internos, usaré este elemento para trabajar con nuestro cuerpo. Además esta-
mos constituidas mayoritariamente por agua.

Para trabajar con él puedes hacer un “día del agua” y ritualizar todo tu día, o puedes empezar a hacer rutinas diarias
con este elemento. Por desgracia cada vez es un bien más preciado para la vida en el planeta, por favor, intenta no
malgastarlo.

Dicho esto, te propongo varias cosas:

- Ducha rápida por la mañana energizante. Quizás en invierno sea un poco difícil que sea con agua fría, pero aca-
ba con un buen chorro de agua templada para activar las células de tu cuerpo.
- Beber tés o infusiones: de este modo mantendrás equilibrado el nivel de líquidos de tu cuerpo, además, si sabes
usar las plantas para disfrutar de sus propiedades medicinales, gozarás de un plus de salud
- Haz deporte intenso: suda querida, porque al sudar eliminarás toxinas que tu cuerpo no necesita y segregarás
endorfinas que te ayudarán a sentirte más feliz y tranquila. Si no tienes mucho tiempo (principio de realidad) haz
por ejemplo unos sprints rápidos e intensos o ejercicio HIIT.
- Baños: sin abusar de ellos por el planeta, pero de vez en cuando no dudes en darte un momento de placer en tu
baño. Velas, flores y aceites esenciales pueden ser tus mejores aliados.
- Baños en ríos y mares: de forma que puedas conectar en la naturaleza con este elemento. Además el mar des-
prende iones negativos que nos equilibran. Recuerda no usar cremas o usar aquellas que no contaminen.
- Observar ríos y mares: Observa la naturaleza, las hojas que arrastra el río, las olas que vienen y van. Visualiza tus
preocupaciones o aquello que te hace sentir ansiosa cómo es arrastrado por la corriente o alejado por las olas.

La meditación:

Os dejo de regalo una meditación que hice en instagram con este elemento:
Meditación Agua

@sarasarmiento_psicologa 31
Responde:

¿Cómo te has sentido?

¿Cómo estabas antes y después de la meditación?

Dibuja lo que has visto

BONUS: surfear la emociones difíciles. A veces, la ansiedad u otras emociones como la tristeza, cuando son muy
intensas, nos inundan como tsunamis (yo misma estuve soñando durante años con tsunamis que arrasaban todo,
especialmente en los momentos que la realidad me desbordaba). Un ejercicio sencillo y que ayuda mucho a tolerar
mejor lo intolerable es imaginar que surfeamos nuestras emociones.

Imagina una gran ola que viene, es tu emoción. Tú empiezas a ponerte ansiosa, puede que no confíes en ti, pero te
subes a la tabla y te dejas arrastrar por ella. Poco a poco te pones de pié en la cresta de la ola y te deslizas… Surfeando
tu emoción. Pruébalo, te juro que funciona.

@sarasarmiento_psicologa 32
Aire: hablar, soltar lo que ya no queremos dentro,
poder decir lo que no fue dicho.
El elemento aire es asociado a la mente y a las palabras, es por ello que a través de este elemento trabajaremos los
pensamientos y la mente más racional.

Como el aire se asocia a la mente y a la palabra, escribe: ¿cuáles son esos pensamientos que tanto te pesan?

Ahora pasamos a esta meditación, que es muy sencilla pero poderosa.

• Siéntate de forma cómoda y respira. Imagina que el aire pasa de tu nariz a tu cabeza. Observa cómo
está allí el clima: ¿está nublado? ¿Hay mucha agitación?

• Visualiza como el aire de la respiración aparta las nubes y empieza a salir el sol.

• Puedes también recoger los pensamientos que has escrito anteriormente con el aire y sacarlos de tu
cuerpo exhalando suavemente por la boca.

• Poco a poco el aire te libera.

Haz un dibujo que represente cómo te has sentido con esta meditación.

@sarasarmiento_psicologa 33
Fuego: transformar lo que ya no queremos, calentar nuestros
deseos, recuperar el poder personal.
El fuego lo vamos asociar a la espiritualidad, a la transformación. A través del fuego transformaremos aquello que
nos hizo daño y recuperaremos nuestro poder personal.

Meditación:
Música de tambores. Puedes hacer esta meditación en movimiento.

Imagina una hoguera frente a ti. Es una hoguera que se está haciendo pequeña, apagando.

Alrededor de ti hay pequeños troncos de madera que vas recogiendo en tus brazos. Los troncos te pesan cada vez
más y más. Los quieres soltar rápido sobre el fuego, pero sabes que echarlos de golpe solo apagarían las débiles lla-
mas. Tienes que soltarlos uno a uno.

A medida que los dejas sobre el fuego, éste los consume. El fuego se hace más poderoso y cálido y tú vas sintiendo
menos peso en tus brazos, hombros, pecho y espalda. Puedes respirar con más profundidad.

Poco a poco la hoguera se ha hecho enorme. Ahora puedes solo mirarla o danzar con ella, sintiendo que sabes lo
que tienes que hacer pues tu sabiduría interna te lo dice. Estás delante de la hoguera de tu poder personal que has
alimentado con todas esas cargas que no te corresponden, con todo eso que te pesa demasiado. El fuego lo ha trans-
formado. Nota su calor, lo reconfortante que es. Disfruta. Baila alrededor de la hoguera o muévete como el fuego.

Ahora, poco a poco, toca que el fuego se vaya apagando. Imagina que llega la lluvia. Las cenizas de la hoguera nutren
a la Madre Tierra. Tus miedos e inseguridades, tu dolor, se ha convertido en alimento para la tierra. El ciclo de la vida
y la muerte se ha cerrado.

De repente una pequeña luz sale de las cenizas. Es una especie de piedra preciosa que brilla fuertemente. La piedra
se mueve y te das cuenta que en realidad es un huevo que crece más y más. Se abre y de ella, cual Ave Fénix, nace una
mujer. Una mujer que está harta de estar constreñida, una mujer a la que le duele el cuerpo por llevar tanto tiempo
encerrada. Una mujer que renace de sus cenizas.

Se pone en pie y te mira a los ojos. Te das cuenta que esa mujer, eres tú.

Tu eres la mujer salvaje que renace de sus cenizas.

@sarasarmiento_psicologa 34
Dibuja a la mujer salvaje y escribe alrededor de ella todo lo que has sentido con esta meditación:

@sarasarmiento_psicologa 35
La montaña: conservar la ecuanimidad frente al ciclo de la vida
Una de mis meditaciones favoritas y una de las más bellas que creo que existen. La tienes de manera gratuita en mi
Instagram (IGTV). En ella trabajamos la ecuanimidad, que es la capacidad de mantenerse estables aunque las cosas
de fuera se desequilibren. Evidentemente, como seres en relación que somos, tanto con otras personas como con la
naturaleza y la sociedad, las cosas que pasan fuera nos van a afectar. Esto no quiere decir que no podamos trabajar
para ayudarnos un poquito a estar más estables y a regularnos emocionalmente. Físicamente la ecuanimidad está
en el vientre o en el útero. Si intentas llevar tus piernas muy hacia el suelo y tu pecho muy hacia el cielo, notarás que
hay una parte de tu cuerpo que no se mueve, que queda justo en el centro. Ahí reside tu ecuanimidad. Ahí reside tu
poder salvaje, tu mujer.

Además de la ecuanimidad, con esta meditación trabajamos la aceptación de los ciclos de la naturaleza, el eterno ci-
clo de la vida, de la muerte y del retorno a la vida. Durante mucho tiempo las mujeres fueron las guardianas de la vida
y de la muerte, no se asustaban de ello, aunque pudiera doler, lo aceptaban. Ese conocimiento y aceptación ancestral
que hemos olvidado es el que vamos a potenciar con esta meditación.

Meditación La montaña.
Siéntate de forma cómoda. Para esta meditación no la puedes hacer tumbada. Cierra los ojos y respira, llevando tu
atención a las partes del cuerpo que estén en contacto con el suelo. Poco a poco siente que la respiración te inunda.
Te vas transformando en una montaña. Ahora ya eres una montaña.

Una montaña hija de la MADRE TIERRA, pues se ha formado en el comienzo de todo, cuando la tierra aún era niña.

En tu interior albergas la fuerza y la sabiduría de la Gran Madre, estás unida fuertemente a ella. Siente tu cuerpo como
una montaña. Fuerte, firme, sólido.

Poco a poco visualiza que en tu cima comienza el otoño (puedes empezar por la estación del año que prefieras). En el
otoño las hojas caen pues los árboles necesitan todo el alimento posible al igual que los animales, que van recogien-
do fuerzas para el duro invierno. Las lluvias se tornan agotadoras, pero limpian el alma. Todo lo que tiene que caer,
cae. Y la montaña sigue impasible, siendo montaña, observando todos los cambios sin modificar su esencia. Aunque
todo cambie en su superficie, ella sigue siendo ella.

Tras el otoño aparece el invierno. Los animales duermen, se refugian, descansan. Las plantas parecen muertas, pero
solo están dormidas. La nieve cubre la montaña, esa misma nieve que será vida en verano cuando lleguen las se-
quías. Los animales y los árboles más viejos empiezan a morir. Es su hora. Sus cuerpos nutrirán la tierra que luego
albergará la vida…

Y la montaña sigue siendo montaña

Poco a poco la nieve se derrite y vuelve la vida. La hierba vuelve a crecer, las flores aparecen de nuevo. Todo es luz y
color. Los animales se despiertan, los árboles tienen de nuevo sus brillantes hojas…

Y la montaña sigue siendo montaña

Tras la primavera llega el verano. Las flores se tornan frutos. Los animales ya tienen crías. Todo es luz y color, pero
vuelven las sequías. Nuevamente los animales y las plantas que no pueden soportar las sequías han de morir y dejar
paso a la nueva vida...

Y la montaña sigue siendo montaña

El verano con su luz y su calor vuelve a dejar paso al otoño, cerrando el ciclo y comenzando uno nuevo. Así es y así
debe ser.

@sarasarmiento_psicologa 36
Y la montaña sigue siendo montaña

Mientras todo esto ocurre la montaña sigue siendo montaña. Nada a cambiado en ella.

Su esencia es la misma aunque su apariencia cambie. Ella es ella, fuerte, impasible, sabia.

Y la montaña sigue siendo montaña

Recuerda: La mujer salvaje habita su ecuanimidad. No importa lo que pase a su alrededor, ella sigue siendo ella. No
es mejor ni peor dependiendo de su estado de ánimo, su aspecto físico ni lo que los demás digan de ella. Al igual que
la montaña, la mujer salvaje sigue siendo una mujer sabia, sensible, poderosa, integrada… Aunque todo cambie a
su alrededor.

Dibuja a continuación tu montaña

@sarasarmiento_psicologa 37
Los trabajos con la niña interior, consideraciones previas
ATENCIÓN: Cualquier ejercicio con la niña herida puede ser desregulador, especialmente para personas que han su-
frido en su infancia maltrato, abuso o negligencia. Si es tu caso, es fundamental que antes de hacer estos ejercicios
domines los anteriores ya que están pensados para la regulación emocional. A poder ser, sería bueno contar con una
terapeuta de confianza o espacio seguro como círculo o comunidad de sostén.

Nuestras heridas y nosotras mismas somos muy importantes y, aunque a veces puede parecer que son cosas bana-
les, el trabajo en terapia con las heridas infantiles es un trabajo delicado, que requiere tiempo, mimo y cuidado. En
terapia siempre respetamos el ritmo del paciente y la psicoanalista es una pieza fundamental de la sanación, no por
lo que hace, sino por lo que ES, así como en los círculos es el grupo y la facilitadora. Por favor, usa estos ejercicios con
cuidado o no los uses si no te sientes preparada.

Antes de empezar:

• Ten siempre a mano la Libreta Consciente para poder escribir cualquier cosa que pase.
• Empieza cada ejercicio con el Lugar o Espacio de Calma
• Llama a la mujer salvaje o al animal de poder para que estén cerca de ti cuando vayas a hacer estos
ejercicios
• Puedes imaginar también una caja con llave donde guardar aquellas cosas que salgan que aún no
puedes o no quieres mirar, la caja incluso puede ser real. Escribe las cosas y guárdalas en tu caja has
ta que las puedas mirar con tu analista.
• Usa la esfera de protección y manda fuera lo que no quieras tocar por ahora
• Usa los ejercicios de regulación emocional para volver a la calma
• Si lo necesitas, vuelve a tu “momento presente” buscando objetos en tu cuarto y nombrándolos en
alto.

Escribe otros recursos con los que cuentes en tu vida o que te han gustado/ayudado de los ejercicios anteriores. Por
ejemplo:

Llamar a una amiga, cuidar las plantas, pasear… (Escribe los tuyos)

@sarasarmiento_psicologa 38
Conociendo a la niña herida
Las que habéis hecho cursos, talleres, círculos o terapia conmigo sabéis que no solo existe una niña sino que en
nuestro interior existen múltiples según los roles, heridas e incluso experiencias positivas que hayamos vivido y acu-
mulado. Las diferentes niñas son los arquetipos infantiles, que no solo están a nivel universal como ya expliqué en
los primeros capítulos, sino a nivel personal, en nuestra vida, donde por suerte tenemos situaciones diferentes que
construyen niñas diferentes. Hoy solo os voy a hablar de la niña herida y de la niña de luz, por ser ellas las principales.

La niña herida es esa parte de nuestra mente que alberga los recuerdos negativos, las heridas que nos han hecho, las
veces que nos hablaron mal o nos miraron de forma que no nos hizo sentir bien, los gritos. Siente aún en su interior
las riñas y peleas, las humillaciones, los momentos de soledad. Guarda las lágrimas que lloramos y las que quedaron
atascadas en el cuerpo sin poder ser expresadas, recuerda las malas palabras, la invalidación emocional, o las veces
que le dijeron “eres una exagerada”.

Cuando somos bebés somos totalmente dependientes de nuestros adultos cuidadores, no solo para que nos prote-
jan y den seguridad, que posiblemente es lo más importante, sino para que nos den amor y nos digan cómo somos,
cómo es el mundo y cómo son los otros.

Las madres y los padres, o cualquiera que haga su función, necesitan ser sensibles a las necesidades de la bebé
que acaba de llegar al mundo, interpretar sus señales, devolverle que está siendo vista y comprendida, calmar su
angustia y mirarla con ojos brillantes. Necesitan, en definitiva, hacerle sentir parte de este mundo y de esa familia,
que sienta que es la reina de la casa, que puede confiar en que su entorno la va a cuidar, que la entiende y que la va
a proteger de una realidad externa, al tiempo que calma y traduce la frustración interna.

Las madres y los padres suficientemente buenos irán respondiendo de forma adecuada a las necesidades de la bebé,
construyendo así un narcisismo sano, y dentro del narcisismo la autoestima, el auto-concepto, la integración del Self
y por supuesto, la autorregulación emocional. Poco a poco los padres suficientemente buenos van a ir fallando, esto
es, no respondiendo inmediatamente a esas necesidades, van a ser más selectivos en el refuerzo a la niña, pues la
niña también tiene que desarrollar la independencia, los límites, la empatía por los demás (ella tiene que dejar de ser
la reina y darse cuenta que los demás también necesitan su espacio), etc. Pero esto ha de hacerse despacio, adaptán-
dose a las necesidades infantiles, a su edad física, mental y emocional.

Si todo este proceso se da adecuadamente, si los padres han sido capaces de amortiguar una realidad para que no
abrume a la pequeña, la niña tendrá una buena base para enfrentarse al mundo. Esto no quiere decir que no le vayan
a pasar cosas o que no se vaya a ver desbordada frente a la crueldad que le puede tocar, pero tendrá la seguridad de
tener herramientas para solucionarlo y de que, si no puede sola (que no podrá) hay unos adultos con los que contar
o puede pedir ayuda a otras personas.

Pero ¿qué pasa si este proceso no se da bien? ¿Si los padres fallan tempranamente? ¿Si la realidad toca a la niña de-
masiado pronto o demasiado abruptamente? Pasan varias cosas. Una de ellas es que deviene en trauma, algo que
aún es más importante si, después de producirse el hecho traumático, no hay sostén ni reparación por parte de los
padres o adultos cuidadores. Otra es que la capacidad transmutadora no se da, esto es, ciertas partes de la mente
quedan disociadas en forma arcaica y luego aparecerán en formas dolorosas, por ejemplo el narcisismo, creyendo la
futura adulta que el mundo ha de responder como ella espera y que si no lo hace, es que no la quieren, apareciendo la
rabia, la vergüenza o la culpa por ser como es, entre otras emociones. Más cosas que pueden pasar es tener ansiedad
o tristeza y no saber de dónde vienen, o quizás tener una mala regulación emocional (no poder calmarse sola o no
sentir nada, perder los papeles en las discusiones, etc.) y, en los casos más extremos, se producirá trauma complejo,
esto ess: se ha crecido en un ambiente no sostenedor, donde el trauma lo infligen las personas que deberían cuidar-
nos, protegernos y querernos, porque dejan a la niña en situación de desprotección y/o son agresivos y abusadores
con ella. Esto produce una paradoja que no se puede resolver: Quien me cuida me agrede. La niña no tiene salida.

Sea como sea la infancia que hemos vivido, las niñas quedan en nuestro interior y guían muchas veces nuestra vida
adulta sin que nos demos cuenta.

Por eso es importante conocer y sanear nuestra historia personal.


@sarasarmiento_psicologa 39
¿Cómo te has sentido al leer esto? Escríbelo. (Si notas demasiada activación no pases a trabajar con la niña, es una señal de que tu
cuerpo no está preparado. Continúa con los ejercicios que hay después de la niña, ya que, en principio necesitarás un terapeuta para poder
sanarla).

@sarasarmiento_psicologa 40
Mirando a la niña
Pon música suave, de calma.

Empezamos la meditación:

Vas caminando un lugar natural, no lo conoces pero te resulta familiar. Sabes que estás en calma, que nada te puede
pasar. La mujer salvaje va a tu lado o dentro de ti, lo que necesites. Ella te da calma.

A lo lejos ves una figura chiquitita. Te acercas muy suave y descubres una niña. Está jugando de espaldas a ti, tranqui-
la. No la quieres molestar. Solo la observas. La mujer salvaje sabe que la niña necesita tiempo, pues se puede asustar
si nos acercamos demasiado pronto. Primero necesitamos conocerla un poco más, ver qué necesita ella.

Observa y respira. Lo estás haciendo genial.

Preguntas

¿Cómo te has sentido al ver a la niña?

¿Cuál fue tu impulso?

Dibuja lo que has sentido/visto:

Nota: no pases al siguiente ejercicio hasta que no te sientas preparada, no hay prisa.
@sarasarmiento_psicologa 41
Hablando con la niña

Repite el ejercicio anterior. Continúa desde el momento que ves a la niña.

Ponte de rodillas/cuclillas, a la altura de la niña.

Ahora la niña se gira y te mira. Al principio no te reconoce. Pero poco a poco tú te vas acercando.

¿Cómo está la niña?

¿Y tú?

¿Qué le quieres decir? Díselo

¿Qué siente la niña cuando se lo dices?

¿Cómo te sientes tú?

¿La niña te responde algo?

Nota: no pases al siguiente ejercicio hasta que no te sientas preparada, no hay prisa.

@sarasarmiento_psicologa 42
Honrar a la niña

Haz los dos ejercicios anteriores y continúa desde la niña que ha recibido el mensaje que le das:

Ha llegado la hora de honrar a la niña. De rodillas frente a ella mírala a los ojos. Siente que tus ojos se iluminan al verla,
exprésale en la mirada el orgullo, la admiración y el amor que tienes hacia ella. Ella ha de sentir que las cosas que pasa-
ron no fueron vuestra culpa. A veces estamos solas frente al dolor, pero no es culpa de tu niña ni de tu adulta. Lo hiciste
lo mejor que pudiste

¿Cómo está la niña?

¿Y tú?

Poco a poco, muy despacito, acércate a la niña. No invadas, ve muy suave. Solo tócala si ella quiere, si no quiere está bien,
necesita hacerse respetar. Tiene que ir acostumbrándose a que eres una mujer que la va a cuidar.

¿Cómo está la niña?

¿Y tú?

Por último, para finalizar, deja que la niña te mire a ti también. Ahora es ella a la que le brillan los ojos. Está orgullosa de
la mujer que eres, porque esa mujer se ha atrevido a ir a verla, a hacer todos estos ejercicios y eso cariño, es de
valientes.

Os fundís en un abrazo. Ambas estáis juntas. Ella te dará vitalidad e inocencia, tú le darás
protección y amor.

@sarasarmiento_psicologa 43
¿Cómo está la niña?

¿Y tú?

@sarasarmiento_psicologa 44
La niña desde la sensibilidad
Ahora vamos a hacer un ejercicio de escritura terapéutica. Juntas responderemos a la pregunta ¿Qué pasaría si
viéramos a nuestra niña interior desde una perspectiva de la alta sensibilidad?

¿Por qué hacemos esto? Porque gran parte de las Perfectas Imperfectas son mujeres con alta sensibilidad. Como
ya hemos visto antes, la mujer salvaje acepta la alta sensibilidad, pues a la niña no se la destruye sino que se la
cuida, acepta e integra. Si queremos vivir siendo “solo fuertes” y “que nada nos afecte” estaremos condenadas a la
represión y como ya dijo Sigmund Freud “Las emociones reprimidas nunca mueren, están enterradas vivas y saldrán
a la luz de la peor manera”. Aceptar a la niña es fundamental porque con ella aceptaremos nuestra vulnerabilidad y
sensibilidad. Pero solo con aceptarla no basta, tenemos que querer ese rasgo de nosotras, integrarlo en nuestra vida
y aprender a crear espacios para proteger nuestra energía, expresar nuestras emociones y cultivar el noble arte de
ser sensibles. La arteterapia, la naturaleza o la escritura son formas maravillosas. Cuidar animales o estar en causas
sociales, también. Todo esto nos ayuda a encauzar nuestra sensibilidad. Por otro lado es importante saber con quién
nos relacionamos, posiblemente parejas que no entiendan este rasgo no serán buenos compañeros de vida. Tene-
mos dos opciones, elegir mejor o crear otros espacios donde juntarnos con mujeres medicina como nosotras. Ambas
están bien. No todo el mundo aceptará nuestra sensibilidad, pero lo importante no es cambiarlos o desecharlos de
nuestra vida, sino aprender a generar espacios de sostén y estar tranquilas nosotras con nuestra niña interior.

Por todo esto vamos a hacer el siguiente ejercicios, que se basa en reescribir ciertos momentos de nuestra historia,
comentarios que nos han hecho, situaciones que hemos vivido, pero entendiendo que nuestra niña era muy sensi-
ble, inocente y emocional. En lugar de verla como una dramática, caprichosa y niñata, vamos a intentar conectar con
nuestra parte compasiva, esa mujer salvaje que acepta, comprende y empatiza, que sabe que podemos ser personas
con una Alta Sensibilidad y que la Imperfección es parte de ser Humanas.

Ahora, responde a la pregunta: ¿Qué pasaría si viéramos a nuestra niña interior desde una perspectiva de la alta
sensibilidad? y re-escribe tus recuerdos desde una perspectiva sensible, imperfecta y compasiva (tienes esta página y la
siguiente para hacerlo):

@sarasarmiento_psicologa 45
@sarasarmiento_psicologa 46
Lo que la niña no pudo hacer
A nuestra niña herida le quedaron muchas cosas por vivir y hacer ya que los adultos estaban más preocupados en
“que fuera buena”, “que estudiara”, “que cuidara a sus hermanitos”, “no se rompiera los leotardos o ensuciara”, “se
portara bien” o “diera las gracias”, que en su luz natural. Si bien es cierto que poner límites y rutinas a los niños es
importante porque les da seguridad, en ciertas épocas los niños podían estar sobreexigidos o podía asumirse que
tenían que madurar antes o ser educados aunque eso costara la espontaneidad, la inocencia y la creatividad.

Por supuesto esto es mucho más cierto en las infancia donde hay maltrato, abuso o negligencia, pero estos temas
prefiero tocarlos solo en terapia o espacios más seguros.

El gran trabajo es ayudar a la niña a hacer eso que no pudo hacer. Las adultas estamos llenas de exigencias, vergüen-
zas y culpas. Algo que no nos corresponde. Las niñas tienen que ser niñas y las adultas tenemos que ayudar a nuestra
niña interior a hacer lo que quedó sin vivir (hasta donde podamos). Por ello, déjala jugar, ensuciarse, probar cosas
nuevas. Te va a dar vergüenza, sí, pero merece la pena saltársela por sanar y hacer feliz a tu niña ¿no crees?

Las cosas que no pude hacer fueron…

1. __

2. __

3. __

4. __

5. __

6. __

@sarasarmiento_psicologa 47
En lugar de eso me mandaron hacer…

Esto me hace sentir…

Creo que a día de hoy esto me condiciona en la edad adulta porque…

@sarasarmiento_psicologa 48
Merezco hacer (recuerda, tú y tu niña merecéis hacer todo lo que os privaron, dentro de las posibilidades del princi-
pio de realidad)…

Si tengo que hacerlas ahora, tendría qué…

1. ¿Dónde las encuentro?

2. Reserva un día en tu calendario para ir a hacerlas. Si no te dejas tiempo para esto jamás podrás hacerlo

Mi día es…

3. ¿Cuánto dinero me va a costar? ¿Lo tengo? Y si no lo tengo ¿Cómo hago para conseguirlo?

4. ¿Qué más pasos necesito tener en cuenta para conseguir esos objetivos?

@sarasarmiento_psicologa 49
Lo que la niña quiso y no tuvo
Al igual que nuestra niña quiso hacer cosas y no pudo, seguro también deseó cosas que no pudo tener o que tuvo y le
arrebataron. Recupera esos deseos y dáselos a la niña, quizás algunos no puedas ya dárselos, pero seguro que otros
sí. ¿La niña quería un juguete que no le compraron? Ve a la juguetería y hazte con él, aunque sea para coleccionarlo.
¿Quiso que su madre o padre le enseñaran a cocinar? Apúntate a un curso de cocina, o mejor, pídele a una amiga o
pareja que te enseñe y comparta estos momentos contigo… ¡Incluso puedes pedírselo a tus propios padres (si pue-
des y son cálidos) a ver si ahora que quizás no trabajan tanto sí pueden hacer estas actividades contigo!

Escribe a continuación:

Lo que quise y no tuve fue…

¿Cómo lo puedo tener ahora?…

@sarasarmiento_psicologa 50
Soltar las cargas
Muchas de las niñas heridas lo están porque les pusieron etiquetas, roles o cargas que no correspondían a quien ellas
eran en el pasado, ni tampoco a su edad. Algunos ejemplos son:

• Cuidar a un hermanito pequeño


• Tener que ser ejemplo de sus hermanos
• La etiqueta de ser inútil, tonta, despistada, inquieta…
• No “llegar nunca” a ser “tan buena” como su hermana, su prima…
• Tener que ser una niña buena
• Ver que sus adultos se “deprimían”, enfadaban o decepcionaban cuando no hacían lo que se esperaba de
ellas.
• Ser “la amiga” o “la pareja” de mamá o papá
• Ser cuidadora de sus adultos

¿Cuáles son tus etiquetas, cargas y roles?

Mis etiquetas, cargas y roles son… (escríbelas aquí)

@sarasarmiento_psicologa 51
Estas personas pueden estar en el edad adulta:

• Sintiéndose inferiores
• No pudiendo tener pareja o relaciones de pareja, boicoteando las relaciones o eligiendo personas que “saben
inconscientemente” que las van a dejar, porque no pueden salir de los roles o cargas familiares, como ser “la
amiga de mamá”, su pareja simbólica, o la cuidadora de sus seres queridos.
• No pudiendo “tener el éxito” en su vida, o buscando el éxito de forma compulsiva
• No pudiendo poner límites
• Trabajar en exceso (sin necesidad real por temas económicos)
• Intentar ser perfecta y hundirse si no lo consigue
• ...

Apunta las tuyas:

¿Cómo crees que te están afectando a ti en la edad adulta?

¿Esas etiquetas, roles y cargas? ¿Las quieres? ¿Vibran contigo? ¿Son lo que tú quieres en la vida?

@sarasarmiento_psicologa 52
Soltar las cargas.
En estos 3 ejercicios vamos a hacer un trabajo simbólico para soltar estas cargas, te va a liberar pero es solo el co-
mienzo de tu sanación. Si te has identificado con alguna de estas cosas, lo mejor siempre es la terapia psicológica.

Ejercicio 1: Imagina que las etiquetas, cargas y roles son piedras pesadas que cuelgan de ti, ¿lo tienes? Ponte una
música potente, que te guste, y baila, baila mucho. Agítate todo lo que puedas, grita si así lo sientes. En el movimien-
to, visualiza que esas piedras se caen y te van liberando. Suelta todo lo que no necesites.

Ejercicio 2: Haz una meditación donde todas esas cargas sean puntos de luz que revolotean alrededor de tu cabeza.
Con tu respiración, los invitas a entrar y los llevas hasta tu vientre o tu útero. Allí está el fuego sagrado de tu poder
personal. Estos puntos de luz representan tus pérdidas energéticas por sobrevivir. Ahora, esa energía vuelve a ti y el
fuego las transforma, recuperando tu poder ancestral.

Dibuja cómo te has sentido:

Ejercicio 3: Escríbele una carta a todas las cargas, etiquetas, roles, etc. desde la compasión. Dales las gracias porque
te ayudaron a sobrevivir ¿o quizás prefieres estar enfadada? Lo que sientas está bien. Una vez acabada la carta, en-
tiérrala en una maceta y planta una semilla. Cuida esa maceta, pues representa cómo de nuestras heridas puede salir
nueva vida.

@sarasarmiento_psicologa 53
No todo son heridas: la niña luminosa
Aunque nuestras infancias hayan podido ser negativas, siempre hay momentos positivos, felices, alegres. Las niñas
tienen una gran capacidad de resiliencia, de reír y jugar. Es cierto que quizás son pocos los momentos, o quizás no te
acuerdes de ninguno y esto te ponga triste, no pasa nada, aún así la niña luminosa sigue dentro de ti. Ella no es la niña
buena ni lo que te reforzaron. Ella es la que se maravilla con un paisaje, la que le gusta el amanecer, la que disfruta
con un olor o con las flores. Ella es la que ríe, la que lee un libro y viaja con la imaginación. Está dentro de ti al igual
que está la mujer salvaje. Solo hay que reactivarla y recordarla, despertarla.

Para ello, responde:

¿Qué cosas te parecen bellas? Arte, amaneceres, la luna, ver una semilla que has plantado crecer…

¿Qué cosas te producen emociones agradables? Un baño, la lluvia, una canción…

¿Qué cosas quieres, independientemente de la pareja? Mascotas, plantas, amigas, algún deporte, un hobbie…

@sarasarmiento_psicologa 54
¿Ves? El amor está en todos lados, la niña luminosa habita en ti, porque ella es una arquetipo universal, pero hay que
despertarla. Vamos a entrenarla un poco más.

Ejercicio: entrenar la vista de la niña luminosa.


La vista de la niña luminosa es volver a mirar con ilusión, esperanza, ingenuidad, curiosidad y sorpresa el mundo.

Para ello, necesitaremos una caja, una bolsa o simplemente tu móvil. Por supuesto tu Libreta Consciente es funda-
mental.

¿Qué vamos a hacer?

Buscar. Buscar cosas que nos parezcan normales pero darle una segunda mirada. ¿No es bonita una hoja otoñal y
sus colores? ¿No es sorprendente una flor? ¿Cómo puede ser que una árbol que empezó siendo semilla ahora sea un
roble centenario? ¿No es increíble que los pájaros vuelen? Y el sonido de la lluvia ¿No es maravilloso? Y el agua fría de
un rio ¿no limpia el cuerpo y el alma?

Capta todo esto, recógelo y guárdalo en tu caja, en tu móvil o en tu libreta. Guárdalo en forma de fotografía, de poe-
sía, de escrito, reflexión, o simplemente de recuerdo. Sorpréndete con las formas, los colores, los sonidos… Como si
acabaras de llegar al mundo y todo fuera nuevo. Como lo miran los niños pequeños, con esa carita de sorpresa, esos
ojos enormes y esa boca en forma de “O” (ooooh).

Ahora busca también el amor en tu día a día. Ese café que te saluda por la mañana con su aroma, sabor y calor. Esa
persona que te sonríe. Ese camarero que te da los buenos días. Esa cama que te acoge con sus suaves sábanas. Esa
mantita y ese sofá que te sostienen y abrazan. Esa película o ese libro que te hacen viajar. Esa luna que te cuida. El
atardecer que te regala belleza.

Y siente el cuerpo. Siente las emociones que te hace sentir. Regístralas y guárdalas.

El amor está en todos lados, despertar a la niña te hará un poco más libre, pues al ver amor y sostén en lugares que
no son una pareja, te sentirás que la vida merece la pena más allá de la relación, por ejemplo.

Una de las cosas más importantes que hay que tener es esperanza en el futuro. Sé que está de moda vivir solo en el
presente, pero yo diría que tenemos que vivir presentes. Este tema lo desarrollo más en mis redes sociales y en La
Escuela Consciente.

Dibuja o pega en este espacio cosas que te generen amor, que hayas mirado con esta nueva forma de mirar.

@sarasarmiento_psicologa 55
El baile como forma de empoderamiento
En este ejercicio vamos a trabajar el poder personal a través del baile. Para ello, vamos a buscar una canción que nos
conecte con momentos esenciales o salvajes. Con el poder y si queréis, con la sensibilidad. Las que yo uso en mis
talleres y círculos suelen ser bandas sonoras o música instrumental, pero puedes usar cualquiera que tú sientas que
te conecta con lo que necesitas en ese momento. Déjate guiar por la intuición.

Canciones recomendadas:

Gladiator

Vangelis

Bravehearth

Laboratorium Pieśni

Durante el baile, te recomiendo algunas pautas:

• Conecta con cómo sientes el cuerpo, visualiza las sensaciones corporales como objetos o luces y expresa lo
que ellas necesiten. ¿Los brazos están agarrotados y quieren golpear? Golpea. ¿Las piernas necesitan pisar
fuerte? Hazlo. ¿La sensación del pecho se expende? Levanta el pecho y abre tus brazos para dejar espacio
¿Necesitas abrazarte o “ponerte en forma de huevo”? Hazlo también.
• Sé libre de explorar, juega, usa tu creatividad.
• Pisa fuerte en el suelo, siente el poder de tus piernas, camina con paso firme y ocupa el lugar que te corres-
ponde. Avanza, haz círculos, dibuja a través de tus pasos tu círculo sagrado, el lugar donde nadie te puede
invadir.
• Abre los brazos, muévelos arriba, a los lados, abajo. Siente que ocupas un lugar que te pertenece. Este es-
pacio, desde tu cuerpo hasta donde llegue tu mano, es tu espacio mínimo vital. Siéntelo a través del baile y
recuerda que nadie que tú no quieras puede entrar en él, porque tu energía más pura está ahí.
• Moviliza la columna para dar fluidez a tu energía vital, pero también ponte erguida. Cuando hemos recibido
situaciones como humillaciones, maltrato, bullying, etc. Tendemos a encorvarnos para “desaparecer” o “pa-
sar inadvertidas”. Esta postura, aunque pueda ser protectora en un tiempo pasado, a día de hoy nos deprime,
pues es la postura corporal que ponemos de forma inconsciente cuando estamos tristes. El cerebro manda
mensajes al cuerpo de cómo nos sentimos, pero el cuerpo también le manda mensajes al cerebro de cómo
estamos emocionalmente. Andar erguidos ayuda a no estar tan tristes, a recuperar nuestro poder ancestral
• Levanta la cabeza, mira bien alto, eres importante y mereces SER. Esto se relaciona con lo anterior. Es sabidu-
ría del cuerpo y la ciencia lo demuestra.
• Puede que la vergüenza aparezca, tranquila, no estás sola. Cientos de personas estaremos haciendo el mismo
ejercicio desde nuestras casas. No estás sola. Calma a tu superyó y dile que se ría un poquito de la vida, que
luego si eso sientes vergüenza, pero que ahora vas a ser TÚ MISMA.
• Practica la libertad. Ya lo decía Winnicott: la salud es la capacidad de jugar. Experimenta y sé libre
• Nota a la mujer salvaje que nace de tus caderas, de tus piernas, de ti. Eres ella.

Ahora haz que tu mujer salvaje invite a la niña a bailar contigo. Siéntela dentro de ti y bailad, abrazaos, reíros juntas,
experimentad. Deja que la niña sienta que ya es una mujer poderosa, que se funda contigo a través del movimiento.

¿Cómo os habéis sentido?

@sarasarmiento_psicologa 56
Rutinas de autocuidado
Queridas, ha llegado el final de nuestro viaje. A partir de ahora tenéis un compromiso: cuidar a la niña y vivir desde la
mujer salvaje que acabáis de despertar.

La mujer salvaje sabe que para vivir conectada a su poder ancestral ha de ritualizar la vida, esto es, convertir lo coti-
diano en un ritual de autocuidado, vivir de acuerdo con la naturaleza, conectarse a sus ciclos naturales menstruales
y a la luna, etc. En este manual no me da tiempo a hablar de todo lo que la naturaleza ofrece, aunque he comentado
algunas cositas para empezar a vivir desde ahí. Sé que muchos principios de realidad hacen que nuestro día a día sea
caótico y rápido, alejado de lo natural. Vivir Slow no siempre es posible ya que a veces tenemos hijos, trabajos que
apenas nos dan para llegar a fin de mes, etc., y esto es importante tenerlo en cuenta porque si no sabemos ver el prin-
cipio de realidad nos sentimos unas inútiles o que nuestra vida es una mierda. Si bien es cierto que el malestar nos
ayuda a querer cambiar las cosas y movilizar la energía para hacerlo, también es cierto que muchas veces el malestar
es por no ver que la realidad a veces es difícil, por querer cambiar y dominar todo, en definitiva, por la omnipotencia.

Ahora bien, incluir pequeños rituales pueden ayudarte a sentirte mejor. No, no te hablo de hacer una hora de yoga al
día, otra de meditación y no sé cuántas cosas más. Te hablo de cosas pequeñas y sencillas.

Te dejo algunos ejemplos:

• Llevar un diagrama menstrual


• Hacer pequeños rituales de acuerdo a la luna que toque (llena, menguante, nueva, creciente…) Cada luna
tiene un significado distinto y la rige una energía diferente.
• Hacer tus propios productos cosméticos o crear una rutina de autocuidado, donde no solo te limpies la cara
y eches crema, sino que disfrutes haciéndolo. Usar música, velas, aceites esenciales, etc., te harán que estas
rutinas sean más agradables.
• Pasear por la naturaleza
• Respetar los ritmos diarios, para ello fíjate en la luz del día, ella te irá diciendo cómo adaptar la rutina y tu
energía
• Hablar con tus amigas
• Pasear con tu mascota
• Ver películas o leer libros inspiradores
• Cocinar lento
• Restaurar muebles
• Pintar
• Meditar 5 minutos diarios
• Tomar el café o té de forma lenta
• ...

@sarasarmiento_psicologa 57
Escribe pequeños rituales, hobbies, etc. que te ayudarían en tu bienestar.

@sarasarmiento_psicologa 58
Muy bien, ahora que ya tienes todo esto, que ya has acabado todos los ejercicios, toca crear un hogar para tu niña
interior, tanto para la de luz como para la herida. En este hogar interior han de habitar tu Yo, Tu Mujer Salvaje y Tus
Niñas (entre otras partes). Al integrarlas estás un poco más cerca de tu verdadero Self. Por otro lado, como ya las co-
noces, debes aprender quién de ellas es la que está activa y recordar que, en situaciones importantes, es complicado
que las niñas cojan el control. Por ejemplo la niña herida suele coger el control en discusiones con tu pareja, en si-
tuaciones con tus jefes, tus amigos o cuando te pones delante del espejo y no te gustas (aunque aquí también puede
activarse la adolescente, pero esto es para otro libro). Si la niña coge el control puede comportarse de forma que te
dañe o te avergüence, por eso es importante que sea la mujer salvaje la que dirija el cotarro.

Tú has ido generando un compromiso tanto con la mujer salvaje como con tus niñas. La mujer ha de ser llamada
cuando la necesites, para cuidarte, protegerte, aceptarte, poner límites a los demás. La niña ha de ser protegida y
cuidada, has de dejarla jugar, crearle un hogar donde pueda estar tranquila y tenga paz. Y recuerda una cosa. Tanto
las niñas como la mujer salvaje están dentro de ti, ellas eres tú misma. Cuídate para cuidarlas. Ama tu sensibilidad,
aprende a vivir desde ella, aprende a cuidarte y elegir personas y actividades sabiendo que hay una niña herida a la
que debes proteger. Recuerda también que existe un poder innato en tu interior. Que como todas las mujeres eres la
guardiana de un poder salvaje, del sagrado fuego del femenino. Que tu cuerpo está lleno de creación y creatividad,
de movimiento y empoderamiento.

Cariño, eres fuerza ancestral porque el poder de todas las mujeres habita en tu interior. Tienes su fuerza. Tienes su
sabiduría. Estás llamada a ser mujer medicina.

No tienes nada que aprender, solo algo que recordar

@sarasarmiento_psicologa 59
@sarasarmiento_psicologa 60
En la elaboración de este libro han participado Sara Sarmiento Borge como autora y Patricia Cuevas Gutiérrez como
diseñadora gráfica. Solo decirle a Patri un GRACIAS enorme, por ayudarme en mis locuras.

patriciacuevas.com

Agradecer a todas mis pacientes y todas las mujeres que han pasado por mi consulta y círculos por hacerme ver que
es cierto que la Mujer Salvaje existe, aunque a veces la hayamos enterrado muy profundo.

@sarasarmiento_psicologa 61
Bibliografía
Este libro no tiene una bibliografía asociada como tal, pues me he basado en mi experiencia clínica para escribirlo.

Sin embargo, voy a dejar algunos libros y autores en los que se basa el libro:

Mujeres que Corren con lo Lobos. Clarissa Pinkola Estés

Análisis del Self, Heinz Kohut Amorrortu Editores

Rabia Narcisista. Heinz Kohut.

Winnicott y Kohut. Carlos Nemirovsky. Ediciones Biebel.

Obras Completas, Sigmund Freud. Amorrortu Editores.

Diferentes obras de Carl Gustav Jung. Diferentes editorials.

The Body Keeps the Score. Bessel Van Der Kolk.

La escritura como herramienta terapéutica. Gustavo Lanza Castelli, Héctor Fernández Álvarez y Héctor Fiorini,. Edi-
torial Psimática.

Vivir con Disociación Trumática. Boon. S, Steele. K, Van der Hart. O., Editorial: Desclée de Browser.

El trauma y el cuerpo. Odgen.,P., Minton. K., Pain. C. Editorial: Desclée de Browser.

Sentarse Juntos. Pollak. S. M., Pedulla. T., Siegel R.D., Editorial : Desclée de Browser.

Terapia Centrada en la Compasión, Gilbert., P. Editorial: Desclée de Browser.

Diferentes libros, cursos, estudios, artículos y seminarios de psicoanálisis junguiano y relacional.

@sarasarmiento_psicologa 62
@sarasarmiento_psicologa 63

También podría gustarte