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CORPORACION UNIVERSITARIA MINUTO DE DIOS

BETSY MAYERLY BERNAL TOVAR ID 672294

ELECTIVA CMD
MEMORIAS DEL CONFLICTO ARMADO

BOGOTA, 26 DE JULIO DE 2021


MEMORIAS DEL CONFLICTO ARMADO
ANÁLISIS DEL CONFLICTO ENTRE INDIGENAS Y AFROCOLOMBIANOS EN
EL CAUCA

El litigio por la tierra en el Cauca entre las comunidades negras y las indígenas
se remonta al siglo XIX. Los afros acreditan la propiedad de esas tierras con
nombres, apellidos y resquebrajados títulos de propiedad, que nunca fueron
respetados. Una de esas propiedades es la finca San Rafael, de 517 hectáreas,
ubicada en la comunidad de Mazamorrero, municipio de Buenos Aires. Según las
comunidades afro esas tierras pertenecieron a sus antepasados a quienes se las
arrebataron terratenientes de la zona sin pagarles un solo peso, los
antepenúltimos dueños con escrituras legalizadas fue una familia Cabrera de
Popayán.

Estas personas permitieron a unas 1.200 familias campesinas utilizar la finca


para sacar leña, llevar los animales y desarrollar proyectos agrícolas cuyos frutos
se venden en supermercados de Cali, Bogotá y otros pueblos del suroccidente del
país. Los campesinos crearon la Asociación Regional para el Desarrollo
Campesino Norte-Caucano (ARDECANC) para que los representara en sus
negocios.

En diciembre del 2007, el ministro del Interior Holguín Sardi, a través de su


Viceministra María Isabel Nieto, entregó a los indígenas Nasa la finca de San
Rafael, como parte de los Acuerdos por la Masacre del Nilo ocurrida en noviembre
de 1991 y en la que 20 indígenas fueron asesinados.

Después de una demanda, el Estado reconoció su responsabilidad en la


masacre y por ello se comprometió, a través del desaparecido Instituto
Colombiano para la Reforma Agraria (INCORA) a entregar 15.663 hectáreas de
tierra a miembros del Consejo Regional Indígena del Cauca (CRIC), como
compensación por sus muertos. La finca San Rafael era la cuota inicial de ese
compromiso. El gobierno escrituró la finca a 85 familias indígenas paeces, para
que este territorio formara parte del Resguardo indígena de Toribío, ubicado a por
lo menos dos horas de camino, en otro municipio.

los campesinos afrodescendientes advierten los riesgos incurridos en este hecho


dada la inconveniencia del traslado de un grupo indígena a una comunidad
habitada en su totalidad por campesinos afrodescendientes, puesto que estos
consideran que atenta contra su integridad étnica y cultural, violando el derecho a
ser previamente consultados y que los pone en peligro de disolución como
comunidad. De igual forma, también plantearon diferentes propuestas para la
compra del predio a los indígenas, quienes en ese entonces estaban dispuestos a
venderlo. Pero los funcionarios del Gobierno rechazaron esta solicitud.

Desde esta situación pasaron dos gobiernos (URIBE y SANTOS) sin que se
obtuviera una solución al conflicto, que estalló en la tarde del domingo 22 de
mayo, cuando se enfrentaron campesinos afrodescendientes con los indígenas en
San Rafael, porque la vaca de los campesinos negros había sido abusivamente
sacrificada por los indígenas. La confrontación dejó un saldo de 15 personas
heridas, algunas de ellas de gravedad, y un indígena caucano muerto, de escasos
17 años. 

El 1 de marzo de 2014, se puso fin a la disputa por la finca San Rafael, que dejó 2
muertos y 30 heridos en 6 años. La solución del conflicto la otorgó el Instituto
Colombiano de Desarrollo Rural (INCODER), quien le entregó al Cabildo Indígena
de Toribio y al Consejo Comunitario de Río Cauca la finca Barrancón, también
ubicada entre Santander de Quilichao y Buenos Aires. Y San Rafael quedó en
manos del Consejo de Zanjón de Garrapatero, los afrodescendientes (como era
originalmente).

SE IDENTIFICAN LOS SIGUIENTES ELEMENTOS DENTRO DEL CONFLICTO


ARMADO
La comunidad afrocolombiana que ocupaba antiguamente la zona y la comunidad
indígena NASA que fue trasladada para ocupar el territorio que le otorgo el
gobierno nacional evidenciando como problema. Una tierra que por tradición la
comunidad afrodescendiente sentía como suya dada la explotación libre y pacífica
que hizo de ese recurso; y que los indígenas también defendían por el derecho
otorgado a través del gobierno.

Este conflicto dejó en su proceso 2 muertos y 30 heridos en 6 años. Pero también


destacó el liderazgo de personas en ambas comunidades que pudieron gestionar
de forma conjunta un acuerdo pacífico que zanjó la situación.

La interacción y comunicación entre los miembros de ambas comunidades no


siempre fue violenta, también surgieron líderes que procuraron poner fin al
conflicto y fomentar la sana convivencia

Estos mismos líderes gestionaron acciones que conllevaron a poner fin al


conflicto, dejando ambas partes conformes con el acuerdo pactado, todas las
personas de ambas comunidades tienen la calidad de ciudadanos colombianos,
sus diferentes étnicas, sociales y culturales marcaron la diferencia, pero también la
unidad para luchar por un objetivo común.

En primera instancia, la solución final la tenía el gobierno nacional dado que


fueron ellos quienes no previeron el conflicto que se avecinaría al ubicar a dos
culturas diferentes tan cerca, en un territorio en el que predominantemente residen
afrocolombianos. Sin embargo, a través de lo analizado en el proceso del
conflicto, este siguió su curso natural, se aprendió del mismo y se respetaron las
diferentes creencias, costumbres y prácticas de cada cultura, bajo el
reconocimiento de la amistad y la fraternidad entre campesino afros e indígenas.

No obstante, la propuesta que expreso para la resolución del conflicto


principalmente es la mediación para lograr una conciliación, donde un tercero
interviene en el conflicto y formula puntos de encuentro después de haber
escuchado a las partes, para llegar a una convivencia pacífica y compartir así los
recursos que ofrecían estas tierras.
Referencias bibliográficas

Bautista, M. (2011). El conflicto entre indígenas y afro-colombianos en el Cauca:


sangre de tu sangre. Razón Pública - 10 años. .

Carreño, K. (2013). Módulo Resolución de Conflictos. Bogotá: UVD Uniminuto.

Vargas, J. (2010). Guerreros y campesinos. El despojo de la tierra en Colombia.


Estudios Socio-Jurídicos. Vol.12 No.2.

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