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CIUDAD Y TERRITORIO enero-marzo-1987 3

.LA CWDAD LEGAL


I' LA CIUDAD
II.F,Gc1L
Jorge E . Hardoy y David Satterhwaite

Lawful cities and cities outside the la w

The roots of those differences as between the city of the ric h


and its poor man's counterpart, as between the lawful one an d
Las causas de las diferencias entre la ciudad de los ricos y l a that outside all law are examined as within the context of th e
ciudad de los pobres, la ciudad legal y la ciudad ilegal, dentr o Third World . The colonial past of such places is taken as the
del Tercer Mundo, se analizan en este trabajo partiendo de s u starting point of this study, it beeing seen as the origen of thei r
pasado colonial, origen de su configuración separadora tant o physical, social and economic seperating lay-out .
física como social y económica . Further to this, the gigantic repercusion of the world econo-
Asimismo, se estudia la enorme repercusión de la crisi s mic crisis on all aspects of urban and rural life in many of th e
económica mundial en todos los aspectos de la vida urbana y states within this general context is studied .
rural de muchos de los paises de este ámbito geográfico . The paper finishes by taking to task the majority of th e
Por último, se formula una dura critica a la mayoria de lo s governments of these states for the haziness of their housin g
gobiernos de estos países por la indefinición en su política d e distribution thinking and sees this as being further muddled b y
asentamientos humanos, perjudicada, además, por el énfasi s the wrong-headed protagonism that this tends to give to th e
puesto en los grandes planes económicos, pero sin relacio- demands of ambitious economic planning, planning whic h
nar éstos ni con la capacidad económica real del país ni co n pays scant attention to either the real economic potential o f
la organización administrativa existente a nivel provincial y the states or the administrative potential actually existing a t
local . provincial of local levels .

1. INTRODUCCIO N plo, en Africa Oriental, casi todos los asenta-


mientos urbanos de más de 20 .000 habitante s
Si analizamos una lista de las ciudades co n hacia mediados de los años setenta ya eran cen-
mayor número de habitantes del Tercer Mund o tros administratiuvos coloniales en 1910 . Los in-
en la actualidad, encontraremos que la mayorí a gleses, los franceses, los holandeses y los portu-
tiene su origen colonial . En América Latina, don- gueses fundaron también muchos asentamiento s
de casi todas las ciudades con más de un milló n en el sudeste de Asia y en las islas del Pacífico, y
de habitantes fueron fundadas por los españole s muchas de las ciudades más grandes de esa re-
o los portugueses, las diez áreas metropolitana s gión se desarrollaron inicialmente como impor -
más grandes en la actualidad ya habían sid o tantes centros administrativos, comerciales y d e
fundadas antes del año 1580 (1) . Lo mismo ocu- intercambio bajo el dominio colonial .
rre en Africa, al sur del Sahara, donde casi todas Estudiar el origen y el desarrollo inicial de la s
las capitales nacionales, entre muchas otras ciu- ciudades del Tercer Mundo y el de las institu-
dades principales, fueron creadas por los podere s ciones y normas implementadas para construirla s
coloniales europeos : Inglaterra, Francia, Portu- y administrarlas- tiene una importancia que su -
gal, Alemania y Bélgica . Para dar sólo un ejem - pera el de un interesante antecedente histórico .

Jorge E . Hardoy y David Satterthwaite son Arquitectos. habitantes en América Latina ; las nueve áreas metropolitanas
(I) Sólo ciudad de México tiene un origen prehispánic o restantes son : San Pablo, Buenos Aires, Río de Janeiro, Lima ,
entre las diez áreas metropolitanas con un mayor número de Santiago de Chile, Bogotá, Caracas, Guadalajara y Recife .
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Es fundamental conocer esos antecedentes, y a ra y servicios . Paralelamente, los desplazamien-


que las instituciones y normas establecidas e n tos de la población-indígena fueron controlado s
cada región durante los siglos coloniales fuero n para servir o defender las economías coloniales y
utilizadas para dar forma a las actuales y s u los nuevos sistemas administrativos y legales im -
continua aplicación ha contribuido, en gran me- puestos .
dida, a crear lo que actualmente parecen se r Inevitablemente, las ciudades reflejaron eso s
problemas insolubles . controles y esas políticas . Los valores simbólicos
En las grandes ciudades contemporáneas (y, e n de los poderes coloniales son aún visibles en l a
gran medida, en muchas de las de menor tamañ o arquitectura que sirvió de alojamiento a las insti-
también), tanto la teoría como la práctica de l tuciones y a sus más destacados representantes :
planeamiento urbano bajo la dominación colo- los palacios de los gobernadores y arzobispos, la s
nial son visibles en la trama urbana de los distri- iglesias y ayuntamientos, las residencias de lo s
tos centrales, en el trazado de las calles, la ubica- administradores coloniales, de los ricos comer-
ción y la forma de las plazas o de los espacio s ciantes, de los dueños de las minas y de lo s
públicos, el diseño de las avenidas (a menud o terratenientes . Muchos de esos edificios existen
siguiendo el trazado de las murallas destruidas) , en la actualidad en cientos de ciudades en todo e l
la arquitectura y el uso del suelo . La localizació n Tercer Mundo .
de esas ciudades revela también las prioridade s A lo largo de la historia los pobres han cread o
coloniales ; el hecho de que muchas de las ciuda- siempre su propio hábitat : sus viviendas y su s
des más populosas sean los principales puertos d e barrios . Durante milenios han construido su s
mar o que se encuentren en un cruce estratégic o asentamientos, ya fueran urbanos o rurales, si n
de rutas terrestres, refleja la importancia que s e tomar en cuenta las que podrían denominarse
adjudicaba al tráfico comercial y a las comunica- normas "oficiales" de la ciudad de las "élites", las
ciones entre las colonias y con los centros de lo s que variaban según la región, la cultura y e l
imperios, y a la necesidad de ejercer un contro l período histórico . Mientras pueden, los pobre s
político y administrativo sobre los territorio s utilizan técnicas y trazan sus asentamientos si-
ocupados . Estos objetivos fueron tenidos e n guiendo sus propios valores culturales ; éstos tam-
cuenta al seleccionar la localización de las ciuda- bién difieren de región a región y se modifican
des : las cinco ciudades más pobladas de la India , con el transcurso del tiempo . Construyen su s
según el censo de 1981, deben su preeminencia , asentamientos fuera de los límites de la "ciudad
en gran medida, a su desarrollo bajo el domini o oficial" ocupada por minorías selectas .
colonial (2) . Los que fundaron y estableciero n Cuando algunas ciudades del Tercer Mund o
esas ciudades coloniales no podían prever el des - comenzaron a crecer, en respuesta a sus funcio-
arrollo demográfico y físico que éstas adquiriría n nes como centros de producción e intercambi o
unas décadas o siglos más tarde . dentro de un mercado mundial cada vez más
En los casos en que los territorios bajo domi- interconectado, los nuevos barrios, principalmen-
nio colonial europeo habían estado previamente te los autoconstruidos por los habitantes de más
ocupados por culturas indígenas avanzadas , bajos ingresos, comenzaron a asentarse en terre -
como México, Guatemala y Perú, o como e n nos desocupados, próximos al centro de las ciu-
varios países árabes y en gran parte de la India o dades o adyacentes a los lugares donde habí a
en los territorios ocupados por la cultura Yoru- oportunidades de trabajo, como, por ejemplo, lo s
ba, en Africa central, la localización de los asen- puertos . A menudo, los pobres no tuvieron otr a
tamientos (incluyendo las ciudades) muestra un a opción que ocupar terrenos poco aptos para con-
continuidad en el tiempo a menudo sorprendente . vertirlos en lugares de residencia permanente :
Las ciudades coloniales crecieron frecuentement e áreas sujetas a periódicas inundaciones, como e n
sobre o cerca de ciudades precoloniales ; despué s Guayaquil, Bombay, Lagos, Maputo y Bangkok ,
de todo no existieron economías coloniales si n o laderas de montañas propensas a deslizamien-
siervos o esclavos o, por lo menos, mano de obr a tos, como en Río de Janeiro, La Paz o Quito, o
barata, y las áreas más densamente poblada s en lechos de lagos secos, como en ciudad d e
eran, a menudo, seleccionadas para la construc- México, o aun barrancos, como en Lima, Khar-
ción o reconstrucción de los nuevos emplaza- toum y El Cairo . Bajo el dominio colonial y en l a
mientos de la administración colonial . En estas actualidad, hubo y hay diferentes grados de po-
ciudades fue impuesta una segregación cultural y breza, tanto dentro como fuera de los límites d e
social . La frase más usada en las ciudades colo- la "ciudad oficial" . También la forma como lo s
niales inglesas, para denominar a los barrios resi- pobres construyeron sus propios "asentamiento s
denciales construidos exclusivamente para euro - populares" ha tenido diferentes soluciones .
peos, fue "distrito sanitario" ; normalmente era n Las ciudades de los reinos precoloniales, a l
estos enclaves, donde vivía la población europea , igual que las ciudades coloniales y las actuale s
los únicos con una alta calidad de infraestructu - ciudades capitalistas del Tercer Mundo, no po -

(2) los puertos comerciales creados por la British East decidido por el gobierno colonial inglés en 1911, Io que di o
India l rading Company en el siglo XVII fueron el estímul o impulso a su rápido crecimiento desde entonces . Bangalor e
inicial para el desarrollo de Calcuta, Bombay y Madras com o debe gran parte de su temprano desarrollo como ciudad
ciudades . Aunque varias ciudades antiguas florecieron en dife- importante al hecho de que se transformara en la capital n o
rentes momentos históricos, dentro o cerca de lo que hoy e s oficial del Estado de Mysore y a que los gobernantes colonia -
Delhi, fue el traslado de la capital de la India a Nueva Delhi, les Ia preferian a Mysore, Ia capital oficial .
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dían pueden funcionar sin el apoyo de lo s Mundial, llevó a la formación de numerosas na-
pobres . Gran parte del trabajo realizado por és - ciones independientes y a nuevas formas de orga-
tos puede denominarse "trabajo marginal", pero , nización política y administrativa. También so n
en realidad, los bienes y servicios que producen una evidencia de las restricciones nacionales e
son esenciales para el funcionamiento de la "ciu- internacionales que los países del Tercer Mund o
dad legal" . Muchos de los asentamientos y ba- deben enfrentar cuando aspiran a desarrollarse y
rrios de los pobres están fisicamente segregado s las dificultades de sus respectivos gobiernos (o s u
de la "ciudad legal", como lo estuvieron bajo e l mala voluntad) para implementar reformas, esen-
dominio colonial, pero la mano de obra, lo s ciales en las áreas rurales . Estas han sido, hast a
bienes y los servicios baratos que proveen lo s hoy, las principales causas de los flujos migrato-
habitantes de esos barrios son fundamentale s rios hacia las ciudades . Todo esto podría habers e
para la economía de la ciudad . previsto, pero ahora no se pueden corregir o
De modo que las diferencias entre la ciudad de controlar con facilidad .
los ricos y la ciudad de los pobres, entre la ciudad Más de 120 países políticamente independien-
legal y la ciudad ilegal, no son nuevas . Han tes, pero económica y tecnológicamente depen-
existido en estrecha relación durante miles de dientes, forman lo que se denomina el Terce r
años . Reflejan el hecho de que, tanto en el pasa - Mundo . Por lo menos unos 40 de esos paíse s
do como en la actualidad, en muy raras ocasione s sufren tal carencia de recursos que sus economía s
los gobiernos del Tercer Mundo fueron y so n difícilmente pueden sobrevivir si no alcanzan s u
elegidos por los pueblos y que, sólo excepcional - integración regional, si no firman convenios co-
mente, representan a los objetivos e intereses de merciales más equitativos y se transfiere haci a
las mayorías . Quizás a esto se deba que lo s ellos tecnologías del mundo industrializado y d e
asentamientos ilegales, los conventillos superpo- los países más ricos del Tercer Mundo . Alguno s
blados y otras formas de hábitat humanos degra- de estos países tienen una población de sólo uno s
dados hayan existido desde hace mucho tiempo , pocos millones de habitantes y, a veces, menos .
y que las personas que podrían influir en s u Durante los años cincuenta, sesenta y princi-
mejoramiento, incluyendo a muchos profesiona- pios de los setenta, los países más pobres sobrevi -
les, los consideran inevitables . También existe l a vieron gracias a la rápida expansión de la econo-
creencia de que el problema se solucionará a mía mundial y a subsidios provinientes de lo s
medida que se desarrollen los paises del Terce r países industriales . Con la actual recesión su s
Mundo y de que ese desarrollo es un proces o limitaciones y problemas fundamentales se ha n
lineal e inevitable . Esta creencia justifica la inac- puesto de manifiesto . Estos países pobres se con -
ción en el mejoramiento de las condiciones de centran en América Central y en el Caribe, en la s
vida de los pobres, pero su validez está cada ve z zonas sur, centro y oeste de Africa al sur de l
más en duda, ya que ha aumentado la cantida d Sahara, en el sudeste asiático y en el Pacífico . L a
de gente que vive en condiciones de habitabilidad mayor parte de ellos obtuvo su independenci a
infrahumanas y degradadas, careciendo de lo s hace apenas unas décadas o unos años . Sus lími-
servicios básicos . Sólo en raras ocasiones la eli- tes políticos fueron definidos por los podere s
minación de la pobreza, que significa la elimina- coloniales, aunque algunas veces con el consenti -
ción del hambre, de las enfermedades endémicas , miento y apoyo de las élites locales . El trazado de
del analfabetismo, de las altas tasas de mortali - sus fronteras no fue relacionado con sus posibili-
dad infantil y de los entornos humanos degrada - dades económicas y, a menudo, fue fragmentad o
dos, es considerada la responsabilidad colectiv a arbitrariamente el territorio de antiguas culturas ,
de una nación, mucho menos la responsabilida d alterando así importantes lazos sociales y comer-
colectiva del mundo . Es obvio que hay paíse s ciales . Al considerar los problemas que enfrentan
ricos, gente rica, instituciones ricas y distrito s algunos de los países más pobres del Tercer Mun -
urbanos ricos, porque hay países pobres, .gent e do no habría que olvidar que la vida política ,
pobre, instituciones pobres y distritos urbano s institucional y económica de muchos de ellos s e
pobres . ve amenazada por presiones externas cuando pre-
La mayoría de los países del Tercer Mund o tenden implementar reformas básicas .
están urbanizándose rápidamente . Existe un pro - También hay países del Tercer Mundo co n
ceso paralelo de concentración de la població n mejores perspectivas, pero que parecen habe r
urbana en unas pocas ciudades o áreas en cad a perdido el rumbo por razones que las minorías
país . En muchos países la población urbana s e nacionales e internacionales no son capaces d e
concentra en una sola ciudad y en sus alrededo- explicar . Quizás la explicación sea que las élite s
res . La conurbación de millones de habitantes , hablan de desarrollo con poco conocimiento d e
que hace sólo unas décadas era una característic a la historia y de la cultura y, por lo tanto, co n
de los países industrializados, es ahora un fenó- escaso conocimiento del papel que pueden jugar
meno mundial . Ciudades de medio millón o d e los pueblos libres, las instituciones democrática s
un millón de habitantes se esparcen en regiones y sistemas legales que garanticen la igualdad d e
que hace sólo unas décadas estaban escasament e derechos . La mayoría de los países más avanza -
pobladas . Esto evidencia el crecimiento explosiv o dos científica y tecnológicamente del Terce r
experimentado por varias ciudades del Terce r Mundo están gobernados por pequeñas minoría s
Mundo, en donde la desarticulación de los impe - desde unas cuantas ciudades, con escaso conoci-
rios coloniales, a partir de la Segunda Guerra miento de la diversidad de situaciones que existen
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dentro de sus fronteras . La creciente brecha entr e rurales hasta encontrar una vivienda en una gra n
países ricos y pobres está también presente den- metrópolis, y está inspirado en un conocido jueg o
tro de los mismos países entre los centros d e de niños, el juego de la oca . Los autores de l
poder nacional y las regiones periféricas . afiche intentaron graficar los problemas políticos ,
En muchos casos las viejas economías colonia- ambientales, culturales y económicos que tuv o
les mantienen el control de las actividades econó- que enfrentar el jefe de una familia, llamado Juan
micas actuales y sus interconexiones, que se refle - Ramírez, su esposa Inés y sus tres hijos . Despué s
jan en la gran disparidad que existe entre regio- de veinte años y la pérdida de uno de sus hijo s
nes y entre ciudades y áreas rurales en cuanto a l a (que falleció por beber agua contaminada), l a
provisión de servicios básicos y en sus conexione s familia Ramírez consiguió finalmente su objetiv o
con las redes viales y ferroviarias ; en la localiza- de tener una casa convencional, con servicio s
ción de los puertos y centros industriales ; en e l 'básicos, en una urbanización legal . Pero antes d e
uso de las mejores tierras para cultivos comercia - lograrlo tuvieron que vivir en una pequeña habi-
les y en su concentración en manos de una peque - tación de un conventillo de la ciudad, y, poste-
ña minoría ; en la carencia de recursos técnicos y riormente, cuando comenzaron a construir s u
administrativos ; en la destrucción o supresión d e propia vivienda, en una villa de emergencia de l a
antiguas organizaciones y sistemas comunitarios ; cual fueron desalojados por la policía . Por u n
en la imposición de leyes e instituciones que tiempo tuvieron que volver a vivir en una habita-
niegan el valor de las tradiciones culturales, in- ción de una casa de inquilinato hasta que toma -
cluso en la manera de escribir la historia de esa s ron parte en una invasión ilegal que logró resisti r
culturas . el desalojo y consiguió la tenencia legal para su s
Este es el contexto de las principales pregunta s ocupantes .
que se plantean en este trabajo . ¿Qué es lo qu e Decenas de millones de personas y familias del
hace crecer física y demográficamente a las ciuda- Tercer Mundo se enfrentan con problemas simi-
des, de manera que cada vez son más evidente s lares cuando emigran a las ciudades . Comparati =
las desigualdades mundiales y nacionales, al pun - vamente, muy pocos tienen la suerte de la famili a
to que se han convertido en un obstáculo al Ramírez . Para muchos, sus existencias será un a
funcionamiento de instituciones democráticas efi- lucha incesante por la supervivencia, mientras
cientes, multiplicando así los entornos humano s viven en entornos degradados y con pocas espe-
degradados? ; ¿qué pueden hacer los pueblos del ranzas de encontrar trabajo estable . Al no tene r
Tercer Mundo en un contexto de crisis económi- capital y, a menudo, tampoco ningún oficio o
ca, cuando ésta seguirá siendo un factor prepon- conocimiento sobre cómo moverse en una ciuda d
derante en la toma de decisiones inmediatas y , desconocida, su creatividad, sensibilidad y volun-
para muchos países, condicionará las decisiones tad se ven seriamente disminuidas y hasta des-
futuras? ; ¿qué pueden hacer esos países para en- truidas . Se mueven y viven en un entorno urban o
frentar los problemas más acuciantes derivados que les es extraño, porque no tuvieron otra alter-
de la pobreza, cuando la superación de la crisis , nativa que abandonar el entorno propio . Mucho s
con los actuales modelos de desarrollo y la actua l estudios sobre movimientos migratorios han de -
constitución de los bloques políticos mundiales , mostrado que los desplazamientos de población ,
depende de la recuperación de los países indus- ya sean temporarios o permanentes, desde área s
trializados y de cambios drásticos de las condi- rurales o centros urbanos pequeños hacia grande s
ciones bajo las cuales los países del Tercer Mun - centros urbanos (y aun desde los grandes centro s
do pueden comerciar en el mercado mundial? ; urbanos hacia las áreas rurales) son, en esencia ,
¿por qué la ciudad del Tercer Mundo es tan ma l una respuesta lógica a la búsqueda de mejore s
conocida, a pesar de innumerables informes, con- oportunidades económicas y de vida . El proble-
ferencias y publicaciones?; ¿por qué los proble- ma no reside en que se hayan trasladado desd e
mas de la ciudad y los que enfrentan sus habitan- áreas rurales, porque incluso los pobres que lle-
tes más pobres reciben tan poca prioridad po r van varios años viviendo en grandes conglomera-
parte de los gobiernos y de las minorías en e l dos urbanos, e incluso muchos que nacieron e n
poder? ; ¿cómo podemos hacer para construir ciu- ellos, siguen enfrentándose al problema de logra r
dades que ayuden a sus habitantes a acceder a u n una vivienda y un salario dignos . Muchos estu-
ingreso razonable, que promuevan la participa- dios empíricos revelan que un alto porcentaje d e
ción comunitaria base de una verdadera demo- los habitantes de las villas de emergencia no so n
cracia- participativa-, que faciliten los intercam- recién llegados, sino que llevan en ellas vario s
bios sociales y que sean más económicas de cons- años, porque no tuvieron otra alternativa par a
truir, mantener y administrar, y que pongan lo s construir sus casas . Por ejemplo, la mayoría d e
servicios básicos al alcance de todos, ahorrando , los que participaron en las invasiones masiva s
simultáneamente, energía y tiempo ? que dieron origen al asentamiento San Martín, y
a asentamientos vecinos del partido de Quilmes ,
2 . LA BUSQUEDA DE UN TECH O en el Gran Buenos Aires, a partir de fines d e
1981, no eran migrantes sin hogar, sino antiguo s
Hace algunos meses, las Naciones Unidas pu- residentes que tuvieron que abandonar sus vi-
blicó un afiche para publicitar el Año Internacio- viendas porque el gobierno militar de entonce s
nal de los sin Techo . El afiche muestra las penu- abolió el control de los alquileres, pero tambié n
rias que debe enfrentar una familia de migrantes debido al deterioro de los salarios entre los gru-
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pos de menores ingresos (Cuenya y otros, 1984) . recientemente los planes del gobierno (incluyend o
En realidad, el crecimiento natural contribuy e proyectos de sitios con servicios y programas d e
más que la migración al crecimiento demográfic o núcleos de vivienda) tenían una escala suficient e
de muchas ciudades . CO()
mpara modificar las condiciones habitacio -
Para tener un techo sobre sus cabezas, lo s nales de los sectores de bajos ingresos (3) . Lo s
pobres urbanos, generalmente, construyen su s objetivos son generalmente ambiciosos, pero cas i
propias viviendas con la ayuda de familiares y nunca se cumplen . Por ejemplo, en Kenia, el Pla n
amigos . Pero sólo consiguen un terreno para su s de Desarrollo de 1979-83 admitía que : "En e l
viviendas cuando invaden tierras públicas o pri- último período del plan sólo se completaron el 8
vadas, o cuando compran un terreno en subdivi- por 100 de las unidades de viviendas planificada s
siones ilegales, porque los terrenos para vivienda s y éstas tuvieron un costo promedio cinco vece s
legales son demasiado caros y también lo e s superior al costo estimado" (Kenia, República de ,
construir de acuerdo con las normas edilicia s 1979) .
vigentes . El proceso, de construcción de esto s El criterio adoptado para la adjudicación d e
asentamientos ilegales contribuye al crecimient o las pocas viviendas que se construyen excluyen, a
horizontal de las ciudades . La otra alternativ a menudo, a los más pobres, porque no puede n
para los pobres de las ciudades es alquilar u n demostrar que tienen un ingreso regular (que e s
espacio para vivir ; por ejemplo, una habitació n una de las condiciones exigidas) o porque n o
en una casa de inquilinato o en una pensión, o u n pertenecen a organizaciones oficialmente recono-
rancho en una villa de emergencia, o simplement e cidas o a los gremios cuyos miembros tiene n
una cama en algún sitio . Esto da como resultad o mayor prioridad . En Nigeria se construyeron me -
el hacinamiento, y la ciudad recién se expand e nos de la mitad de las 202 .000 unidades de vivien -
cuando la disponibilidad de espacios para alqui- das propuestas en el Plan del Gobierno de 1976 -
lar a precios económicos (tanto en asentamiento s 80, y sólo unas pocas fueron adjudicadas a lo s
legales como ilegales) se ha agotado y los recié n sectores de bajos ingresos . En Indonesia, a fine s
llegados no encuentran donde alojarse . de la década del 70, los empleados públicos y e l
Muchas formas de alojamiento utilizadas po r personal militar tenían prioridad en la adjudica-
los grupos de bajos ingresos son ilegales, es decir , ción de viviendas de interés social o de terrenos y
no responden a las reglamentaciones establecida s urbanizaciones promovidos por un organism o
en cada país . Las viviendas de las villas de emer- oficial . Según una publicación del Banco Mun -
gencia se asientan en terrenos ocupados ilegal - dial de 1979, la mitad de la población de Raba t
mente y su disposición y construcción general - (Marruecos) y las tres cuartas partes de los habi-
mente infringen las leyes sobre zonificación y lo s tantes de los "bidonvilles" no pueden acceder a
códigos de edificación, la falta de infraestructur a una vivienda convencional construida por el go-
y servicios . Algunos asentamientos tienen algo d e bierno . También en El Cairo, Manila e Indonesi a
legalidad : una vivienda construida en un terren o (Linn, 1979) se han producido ejemplos similare s
comprado en una subdivisión ilegal no constitu- de exclusión de los sectores de bajos ingresos d e
ye, normalmente, una ocupación ilegal desde e l los planes oficiales de viviendas .
punto de vista del comprador, aunque el uso de l Los ingresos de decenas de millones de familia s
suelo, los planos y las normas de infraestructur a que viven en centros urbanos grandes, mediano s
y servicios contravengan las leyes y códigos ofi- y pequeños son tan bajos e inestables que está n
ciales . Las casas de inquilinatos de las ciudade s obligados a realizar la mayor parte de sus activi-
fueron, a menudo, legalmente construidas. Mu - dades fuera de la ley . Estas familias constituye n
chas fueron, originalmente, casas de clase medi a un porcentaje cada vez mayor de las familia s
o apartamentos que luego se subdividieron cuan - residentes en núcleos urbanos . No se necesita n
do los sectores de clase media se trasladaron a lo s estudios detallados para apreciar sus problemas :
suburbios residenciales, pero otras fueron tugu- hombres, mujeres y niños sobreviven en 4a mayo -
rios construidos con ese propósito, a menudo co n ría de los edificios de cualquier ciudad del Terce r
aprobación oficial y hasta con el estímulo de lo s Mundo vendiendo en las calles, acarreando bul-
gobiernos municipales . Estas casas de inquilina - tos, desempeñando diferentes trabajos tempora-
tos casi nunca cumplen con las normas mínima s rios en las casas o jardines de los ricos, dedicán-
de asoleamiento, ventilación, superficie, instala- dose a la prostitución, mendigando, robando, o
ciones para el lavado de ropa, cocina e instalacio- simplemente están parados en una esquina . S i
nes sanitarias . No es una casualidad que estas los, problemas son tan evidentes, ¿por aué lo s
viviendas, que no cumplen con las leyes y código s gobiernos del Tercer Mundo hacen tan poco ?
vigentes y que legalmente no se puedan compra r Muchos gobiernos del Tercer Mundo todaví a
o alquilar, sean, precisamente, las únicas que lo s pretenden planificar y construir ciudades qu e
individuos o familias pobres estén en condiciones sólo existen en la mente de los tecnócratas y
de ocupar . burócratas . Una cosa es construir ciudades par a
Muy pocas familias pobres tienen acceso a la s aquellos que tienen ingresos estables y puede n
viviendas convencionales construidas por los go- pagar las viviendas y servicios que utilizan, y otr a
biernos . En casi todos los países, la producció n es construir ciudades para aquellos grupos d e
anual de esas viviendas no cubre, ni aproximada - escasos recursos y con ingresos inestables, pero
mente, las necesidades . En sólo dos de los dieci-
siete países del Tercer Mundo que analizamos (3) Hardoy y Satterthwaite, 1981 .
CIUDAD Y TERRI] CRIO / enero-mano-198 7

que pueden afrontar el pago de cuotas modestas to urbano ha tomado por sorpresa a los gobier-
para acceder a viviendas y servicios aceptables . nos del Tercer Mundo, o los ha sorprendido ma l
Pero algo completamente diferente es construi r preparados para afrontar tal variedad de proble-
una ciudad para gente que puede pagar mu y mas interconectados, especialmente cuando lo s
poco o nada por sus viviendas y por los servicio s recursos son tan escasos? La respuesta, especial -
que utiliza, que no tienen otra alternativa qu e mente para aquellos países que obtuvieron s u
construir sus propias viviendas y barrios, y qu e independencia hace relativamente poco tiempo ,
subsisten con ingresos tan bajos e inestables qu e sería que estaban y están mal preparados . En la
casi todo lo que ganan lo gastan en comida . Est a mayoría de los casos, una explicación del mal
gente no puede hacerse tratar las enfermedade s desempeño de los gobiernos habría que buscarla
crónicas o malestares temporarios que sufre n en su reciente pasado colonial, pero otras situa-
porque el costo de los tratamientos, medicinas y ciones son resultado de sus propias decisiones .
transporte, e incluso del tiempo que pierden e n Los gobiernos insisten en encarar el problem a
los viajes a un hospital, es demasiado alto . Si n como lo han hecho hasta ahora, pero carecen d e
embargo, son ellos los verdaderos constructore s los recursos económicos y humanos, de la infor-
de las ciudades del Tercer Mundo . mación, las instituciones y la tecnología par a
La contribución de los grupos de muy bajo s hacer frente al rápido crecimiento urbano . Un a
ingresos al volumen de viviendas disponibles os - estrategia diferente para enfrentar estos proble-
cila, normalmente, entre un cuarto y la mitad del mas se hace imprescindible .
total construido, y no sería extraño que esta El principal obstáculo para ensayar un nuev o
proporción fuera aún mayor . Para dar un sol o enfoque es el hecho de que la mayoría de lo s
ejemplo, un 40 por 100 de la población de Nairo- gobiernos del Tercer Mundo no han sido demo-
bi vive en unidades habitacionales ilegales (Amis , cráticamente elegidos y difícilmente pueden adju-
1984) . Una estimación realizada en 1981 indicab a dicarse el apoyo político de sus pueblos . Un paí s
que el 64 por 100 de la población de Nouakchot t se define por una cantidad de valores, estilos d e
(Mauritania) vivía en comunidades en su mayo r vida, costumbres e instituciones, en otras pala-
parte autoconstruidas (Theunynck y Dia, 1981) . bras, por su cultura o culturas . Cultura implic a
Un estudio realizado en 1975 en El Salvado r conocimiento, es decir, experiencias acumulada s
descubrió que casi las dos terceras partes de la s a lo largo de un prolongado período de tiempo .
unidades habitacionales disponibles en los cinc o Pero la mayoría de los gobiernos han ignorado a
centros urbanos principales fueron construida s la cultura y a la historia como insumos esenciale s
ilegalmente o fuera del marco formal, legal, fi- para sus planes de desarrollo . Los gobiernos y lo s
nanciero e institucional (Harth Deneke y Silva , pueblos no enfrentan de la misma manera l a
1982) . En Manila, un informe de 1978 indicab a construcción y administración de las ciudades . L a
que casi dos millones de personas vivían en 41 5 etnocentricidad de los gobiernos -y también d e
villas de emergencia desperdigadas en distinto s las agencias internacionales- es la que genera s u
distritos del área metropolitana (Keyes, 1980) . E l aislamiento, y en consecuencia, a verse sometido s
60 por 100 de la población de Guayaquil viven e n a la indiferencia o a la crítica de la mayoría de l a
viviendas construidas sobre pilotes por sus pro - población . Y ésta, a su vez, forzada por circuns-
pios habitantes en terrenos inundables (Moser , tancias más allá de su control a vivir hacinada e n
1982) . Se pueden citar ejemplos similares para l a entornos degradados, sin agua potable, sin cloa-
mayoría de las ciudades del Tercer Mundo . cas, sin alcantarillado, sin calles ni aceras, sin
La construcción de las ciudades y sus conurba- asistencia sanitaria y comunitaria, es cada vez
ciones se realiza poco a poco . Su expansión físic a menos pasiva . Reclaman sus derechos como ciu-
es definida, en gran parte, por la decisión de lo s dadanos, aunque se los reconozcan en raras oca-
grupos de bajos ingresos sobre dónde construir siones . Sin embargo, esta gente que a menud o
sus barrios, decisión que, a su vez, está determi- son mayoría en los países del Tercer Mundo -
nada por la elección de sitios de los que ellos constituye el recurso más dinámico e important e
piensan no serán desalojados y podrán consolida r en la construcción y administración de las ciuda-
su ocupación . De modo que las áreas urbanas des del Tercer Mundo .
crecen de forma fragmentada y fortuita, y cad a Pero ellos, los verdaderos constructores y pla-
barrio se construye sin articularse adecuadament e nificadores de la ciudad, saben poco o nada de l o
con otros barrios o vecindarios . Como se desta - que los gobiernos intentan hacer . Generalmente ,
cara anteriormente, este proceso caótico y, e n las prioridades de los gobiernos no tienen nad a
gran medida, espontáneo refleja con gran realis- que ver con las necesidades más acuciantes d e
mo las circunstancias socioeconómicas y los pro- esta gente . Los alcaldes o intendentes de la s
blemas políticos de cada país y región a lo larg o ciudades se preocupan por las autopistas, e l
de su historia reciente . transporte subterráneo de pasajeros, mejores es-
Hay una creciente brecha entre los problemas tacionamientos para los automotores privados, l a
creados por el rápido desarrollo físico y demo- construcción de edificios públicos, los pavimen-
gráfico de las ciudades, que para la mayoría d e tos y el abastecimiento de agua, empezando po r
sus habitantes no se desarrollan económicament e los distritos centrales . Pero cuando se les pregun-
y que socialmente rio están bien integradas, y l a ta a los habitantes de los barrios más pobres su s
capacidad (ó decisión) de los gobiernos de busca r prioridades, éstas son, generalmente, un trans -
soluciones de fondo . ¿Acaso el rápido crecimien - porte público barato y eficiente, la recolección de
CIUDAD Y TERRITORIO enero-marco-1987 9

la basura, centros asistenciales y escuelas, defen- áreas rurales (Hardoy y Satterthwaite, 1986) . Se -
sas contra inundaciones y, por supuesto, agua ría más correcto hablar de un "favoritismo po r
potable y alcantarillado, empleos estables y ade- las grandes ciudades". No es una sorpresa que la s
cuadamente remunerados y pequeños préstamo s políticas estatales, las inversiones y la provisió n
sin intereses o con intereses muy bajos para mejo- de servicios favorezcan a los habitantes de mayo -
rar sus viviendas y sus barrios . Los grandes pro- res recursos e influencia y a las empresas comer-
yectos les son indiferentes . La ciudad donde vi - ciales, industriales y financieras más poderosas .
ven y trabajan no tiene nada que ver con l a Puesto qee en muchos países éstas se concentra n
ciudad que políticos y tecnócratas quieren cons- en la ciudad (o ciudades) más grande, o alrededo r
truir . Las barriadas de los pobres forman un a de ella, pareciera que existiera un favoritismo po r
ciudad de pragmáticos . Cada metro cuadrado , las grandes ciudades .
cada trozo de material y toda suma de dinero qu e Cuando los políticos y tecnócratas permite n
pueden ahorrar son aprovechadas de la mejo r la libre especulación del suelo urbano y la prolife-
forma posible . Los grupos comunitarios que tra- ración de subdivisiones ilegales, están aceptand o
bajan en la construcción o mejoramiento de esa s un uso caótico del suelo precisamente en las área s
barriadas son muy racionales en sus objetivos y donde se asentarán los sectores de menores ingre-
acciones . Sin embargo, las ideas, posibilidades y sos . Cuando se condena a estos sectores a vivi r
recursos que podrían mejorar su entorno urban o hacinados en conventillos urbanos (a veces ubica -
están en manos de un pequeño grupo de tecnó- dos en áreas céntricas de la ciudad) o en barrio s
cratas con escaso poder de intervención y, a marginales cada vez más apartados o en subdivi-
menudo, con poca sensibilidad para impulsa r siones ilegales, se está volviendo a la segregació n
programas que beneficiarían a los sectores má s de las viejas ciudades coloniales . Esto significa l a
necesitados . aceptación de sociedades urbanas segregadas y
Los gobiernos municipales y nacionales limita n gobernadas desde arriba, lo que inevitablement e
sus proyectos a la provisión de servicios . Nunca, limita sus potencialidades y reduce sus interaccio-
en la historia de las ciudades latinoamericanas , nes . Una vez establecido este modelo de desarro-
han existido tantos proyectos de salud, de vivien- llo urbano, no es fácil modificarlo . La integra-
das convencionales, de servicios sociales o d e ción será aún más difícil, como también cualquie r
parques industriales . Estos proyectos han contri - intento de los gobiernos por mejorarlo . El caóti-
buido muy poco a mejorar las condiciones d e co parcelamiento del suelo urbano en las perife-
vida de los pobres y hari favorecido únicamente a rias de las ciudades, con muchos terrenos sin
ciertos sectores de la población urbana en algu- urbanizar o parcialmente urbanizados, permit e
nas ciudades y han sido de poca utilidad par a tramas, densidades y localizaciones a las qu e
quienes no pueden costearse una vivienda o su s resultará costoso proveer de calles, aceras, agua ,
servicios . Tampoco fueron útiles para quiene s servicios sanitarios y sociales . Cuando se permi-
sólo pueden pagar pequeñas sumas para adquiri r ten estos asentamientos como lugares de vid a
o alquilar una vivienda, pero que no puede n para los sectores de bajos ingresos se está, e n
afrontar el precio de una casa o apartament o realidad, decidiendo el tipo de cultura y de socie-
convencional en el mercado . Aunque la situació n dad que tendremos . Pareciera que no somo s
difiere mucho de país a país (y también de ciuda d conscientes de que al actuar de esa manera esta -
a ciudad, dentro de un mismo país), todos lo s mos limitando seriamente la creatividad y sensi-
gobiernos, al enfrentar los problemas generado s bilidad de esa gente . Si condenamos a los secto-
por el rápido crecimiento urbano, no dirigen las res de bajos ingresos a vivir día a día con su s
inversiones y las estrategias esenciales a cubrir la s necesidades materiales insatisfechas y con pocas
necesidades de los sectores de bajos ingresos . E l ideas sobre cómo utilizar el espacio, nos arriesga -
resultado es que las ciudades más privilegiadas y mos a que la relación entre la gente y su entorn o
sus distritos urbanos consolidados reciben u n desaparezca .
mayor porcentaje del total de las inversiones qu e Las ciudades del Tercer Mundo se enfrenta n
los suburbios convencionales, o los asentamien- con dificultades cada vez mayores al tratar d e
tos autoconstruidos alrededor de esas ciudades y , solucionar los muchos problemas que enfrenta n
especialmente, que las ciudades en regiones peri- como consecuencia de su rápido crecimiento de-
féricas . La prueba más evidente de esto es l a mográfico y físico y la pobreza que padece gra n
creciente cantidad de estudios sanitarios que de - parte de su población . Al mismo tiempo, la ma-
muestran que las diferencias, en cuanto a morta- yor parte de la población, en la mayoría de lo s
lidad infantil y expectativas de vida, pueden se r países del Tercer Mundo, vive en pequeñas ciuda-
mayores dentro de una gran ciudad, al compara r des o en áreas rurales, especialmente en los países
barrios pobres con barrios ricos, que entre un a de Africa al sur del Sahara, en los del centro, su r
ciudad y las áreas rurales (Harpham, Vaughan y y sudeste asiático, en los de América Central y e n
Rifkin, 1985) . algunos países árabes . Muchos habitantes qu e
Existe la creencia de que la mayor parte de la s viven fuera de las grandes ciudades se encuentra n
políticas estatales del Tercer Mundo tienen u n con serios problemas para acceder a servicios y
fuerte "favoritismo urbano" . No es así si compro- salarios dignos, aparte del hecho de que mucho s
bamos que casi todos los centros urbanos peque- sufren hambre . Las tasas de crecimiento natural
ños y medianos están tan huérfanos de inversio- de la población son a menudo altas, lo qu e
nes y proyectos públicos como la mayoría de las aumenta la presión sobre los limitados recursos .

lo CIUDAD Y TERRITORIO ! enero-marzo-198 7

Esto sugiere que se puede predecir para el futur o con relativamente poca población ; cada uno d e
una fuerte tendencia hacia una urbanización con- los países estudiados en esta fase tenían menos d e
tinua y rápida que constituye un desafío si n 6 millones de habitantes en 1981 . En una tercer a
precedentes para los pueblos que quieren solucio- etapa nuestro programa estudió países que expe-
nar sus problemas más esenciales . rimentaron rápidos cambios políticos y sociales .
El núcleo del problema es la creciente cantida d También tuvimos acceso directo a estudios reali-
de familias urbanas pobres . Ni la pobreza rural ni zados por otros grupos de investigación o po r
la urbana se eliminarán con ayuda extranjera . E s investigadores individuales .
necesario una nueva mentalidad, diferente de l a La conclusión general que emerge de esto s
actual, y un buen comienzo sería relacionar l a estudios es que los gobiernos prácticamente nun -
erradicación de la pobreza con el desarme y co n ca toman en cuenta las necesidades de vivienda y
una mayor participación popular en las decisio- servicios en las áreas rurales o en los pequeños
nes políticas . En este contexto, las estrategia s centros urbanos . Vale la pena considerar los pe-
para enfrentar los desafíos mencionados tal ve z queños centros urbanos y las áreas rurales e n
tengan alguna incidencia. conjunto, pues en la mayoría de estos centros cas i
La pobreza sigue siendo el problema principal todos los puestos de trabajo están relacionado s
de las ciudades del Tercer Mundo . La pobrez a directa o indirectamente con la agricultura o co n
está definiendo rápidamente la forma de esta s los ingresos generados por ella . En la mayoria de
ciudades y su estructura espacial . A medida qu e los países estudiados, muchos con una población
los terrenos vacíos de los distritos centrales so n predominantemente rural, los gobiernos no tie-
ocupados o sus pobladores desalojados, las nue - nen ningún interés en mejorar las condiciones d e
vas villas de emergencia y los asentamientos ur- la vivienda rural, o sólo se llevaron a cabo uno s
banos ilegales se alejan, cada vez más, de la s cuantos ensayos . La excepción la constituyen al-
fuentes de ingresos de sus habitantes, de las línea s gunos países socialistas que construyeron vivien-
principales de transporte, del abastecimiento d e das rurales y hasta pueblos rurales completos y
agua potable y de la infraestructura sanitaria . E l pequeñas ciudades, como parte de sus programa s
resultado es una disminución del tamaño prome- de reforma agraria y colonización .
dio de los terrenos de los nuevos asentamiento s En los países capitalistas del Tercer Mundo ,
ilegales ; el tamaño de un lote es, a menudo , algunos proyectos de vivienda rural han sido, o
inferior a los 40 ó 50 metros cuadrados po r son, parte de programas oficiales de coloniza-
familia. Generalmente se ocupan los terrenos ba- ción, algunas veces en respuesta a movimiento s
jos e inundables o laderas empinadas sujetas a espontáneos hacia nuevos territorios y, sólo oca-
deslizamientos, contribuyendo a aumentar el cos - sionalmente, como parte de proyectos integrale s
to de la infraestructura básica y de los servicios , de desarrollo agrícola . En estos proyectos oficia -
si es que alguna vez son construidos . Pero mu - les, financiados a menudo con ayuda multilatera l
chas familias no pueden vivir en asentamiento s o bilateral, las inversiones para el mejoramient o
ilegales a varios kilómetros del centro de la ciu- de viviendas, servicios y educación constituye n
dad, de modo que optan por radicarse en villa s sólo una pequeña proporción -si existe- del
de emergencia o en conventillos céntricos, haci- total de los fondos invertidos en la producción y
nándose con familiares o amigos, o se instalan e n diversificación de los cultivos, en el desarrollo d e
los terrenos baldíos de las villas de emergenci a medios de comercialización, en la construcció n
reservados originalmente para escuelas o centro s de infraestructura regional y, algunas veces, en e l
comunitarios . El resultado es un aumento de l a entrenamiento de los trabajadores . El sector pri-
densidad de ocupación promedio de los conventi- vado invierte muy poco en viviendas rurales y e n
llos y de las villas de emergencia . Algunas metró- servicios rurales no relacionados con la produc-
polis han crecido de tal manera que los villero s ción . Cuando lo hace, su objetivo es alojar a l
optaron por ocupar casas viejas o vacías de la s personal técnico o administrativo permanente y a
áreas centrales o por hacinarse en conventillo s parte del personal calificado y fijo que vive e n
con un alquiler controlado . caseríos cerca de las plantaciones y hacienda s
dedicadas a la producción agrícola para la expor-
3. ASENTAMIENTOS RURALE S tación . La vivienda rural es, en consecuencia ,
YPEQUEÑOS CENTROS URBANO S responsabilidad de sus ocupantes, quienes la s
construyen con materiales locales ; por ejemplo ,
A partir de 1977, el Programa de Asentamien- madera de Tailandia, adobe y techo de paja e n
tos Humanos del Instituto Internacional para e l diferentes regiones andinas de la América Latina ,
Medio Ambiente y el Desarrollo y su red de palmas de cocoteros en Sri Lanka e Indonesia ,
instituciones asociadas del Tercer Mundo (4) ha n siguiendo las técnicas y los diseños tradicionales .
analizado las políticas de vivienda de diverso s En muy raras ocasiones hay créditos oficiale s
países del Tercer Mundo . En una primera fase disponibles para la construcción de viviendas ru -
estudiamos 17 países, incluyendo algunos de lo s rales y, en general, no hay, ningún apoyo par a
países más populosos de Africa, Asia y Améric a ayudar el desarrollo de las industrias de materia-
Latina . En una segunda fase se estudiaron países les de construcción indígenas .
(4) Centro_ de Estudios Urbanos y Regionales (CEUR), ra . Universidad de Khartoum (Sudán) ; Instituto Internacional
Buenos Aires (Argentina) ; Facultad de Diseño Ambiental, para la Investigación del Desarrollo, Allahabad (India) .
Universidad de Lagos (Nigeria) ; Departamento de Arquitectu-
CIUDAD Y TERRITORIO enero-mano-198 7 n

Aunque todas las familias campesinas tiene n agua potable o de incorporar sencillas formas d e
algún tipo de vivienda, un alto porcentaje vive si n energía . En la mayoría de los casos, lo prioritari o
servicios y en condiciones de extrema pobreza y es terminar con la explotación de los trabajado -
hacinamiento . Es difícil disponer de datos preci- res rurales, lo que significa garantizarles el acces o
sos, pues en muchos países estos datos o n o a una parcela de tierra cultivable de tamañ o
existen o son poco confiables, ya que los datos d e adecuado, al crédito y a las herramientas esencia -
los pocos censos rurales que se han realizad o les .
están agregados de tal manera que sólo son indi- En algunos países o en algunas regiones d e
cativos de situaciones muy generales . ciertos países, como ser en la mayor parte de l a
La mala calidad general de las viviendas rura- India, Bangladesh y Pakistán, hay escasez d e
les, ejemplificada por el hacinamiento y la falt a tierras con la calidad suficiente para proveer e l
de ventilación, sin abastecimiento de agua pota- sustento de la actual población rural, aunque co n
ble y sin protección contra los insectos (u otros mejores precios para las cosechas, mejor irriga-
vectores portadores de enfermedades), es una d e ción y mejores servicios para la actividad agríco-
las causas principales de las altas tasas de morta- la, se podría vivir dignamente en pequeñas parce -
lidad rural, especialmente la infantil . Si se insta- las de tierra ubicadas en áreas fértiles . En muchos
laran formas protegidas de abastecimiento d e otros países y regiones, como son Haití y E l
agua, la disentería y la diarrea infantil, así com o Salvador, el Sahel y varios países árabes, y e n
otras enfermedades producidas por el agua con- algunas áreas de los Andes y del este de Africa, l a
taminada, se reducirían enormemente ; si se dier a posibilidad de absorber a una mayor població n
un tratamiento especial a los materiales tradicio- rural en actividades agrícolas y proyectos asocia -
nales, se reduciría la incidencia de la malaria y d e dos a ella es muy limitada, y sólo se podrí a
otras enfermedades propagadas por algunos in- concretar invirtiendo en programas que a larg o
sectos ; si se instalaran letrinas bien diseñadas, la s plazo aumentaran la productividad de tierras
enfermedades intestinales producidas por ameba s muy erosionadas, y con programas racionales
y parásitos serían mejor controladas y las enfer- para colonizar otras áreas . No hay ninguna razó n
medades fecales-orales disminuirían significativa- para creer que la actual situación de los pobres
mente . La tuberculosis y los problemas respirato- que viven en el campo cambiará en un futur o
rios podrían disminuir reduciendo el hacinamien- próximo, a menos que se modifiquen las relacio-
to y mejorando la ventilación de las viviendas . L a nes de poder entre los grupos sociales ricos y
incidencia o los efectos debilitantes de estas en- pobres y entre los países ricos y pobres .
fermedades se podrían controlar con una diet a Los gobiernos de los países analizados en nues-
alimentaria más adecuada y nutritiva . tro estudio demostraron poca preocupación po r
Las diversas formas de debilidad física y men- los pobladores rurales . Cuando realizamos nues-
tal que producen estas enfermedades -que tam- tros trabajos de campo, a fines de los años seten-
bién aparecen en las grandes ciudades, princi- ta y comienzos de los ochenta, nos encontramo s
palmente entre los sectores de bajos ingresos con que en Egipto, Iraq, Jordania, Sudán, Nige-
impide a millones de personas incorporarse efec- ria, Bolivia, Brasil, Paraguay y Colombia n o
tivamente a la fuerza laboral, o reduce drástica- existían programas importantes en este sentido .
mente su capacidad productiva . Muchas de esta s Había algunas excepciones . En Tanzania, uno d e
enfermedades son, sencillamente, enfermedade s los objetivos del programa de creación de pue-
de pobres . Es raro encontrarlas entre la clas e blos fue el de concentrar la población rural par a
media o entre los sectores de altos ingresos . poder abastecerlos con los servicios básicos . El
Muy pocos países en vías de desarrollo ha n Banco de la Vivienda de Tanzania creó una línea
estudiado seriamente la forma en que las inter- de créditos para áreas rurales con el propósito d e
venciones públicas y los diferentes organismo s construir 32 .000 viviendas permanentes en pue-
existentes podrían mejorar las condiciones d e blos rurales antes de 1981 . El Plan de Desarroll o
habitabilidad y reducir las enfermedades en lo s de Túnez (1977-1981) incorporó entre sus objeti-
pequeños centros urbanos y en las áreas rurales . vos la construcción de 40 .000 viviendas rurales ,
Esto sucede a pesar que en la mayoría de lo s cifra que representaba la mitad del programa d e
países de Asia y en los de Africa al sur de l vivienda del gobierno para ese período . El pro -
Sahara, y en algunas de las regiones más atrasa - grama de viviendas rurales del estado de Kerala ,
das de América Latina, la población rural seguirá en el sur de la India, comenzado a principios d e
aumentando rápidamente, al menos hasta la pró- 1970, se basaba en la movilización de comité s
xima generación . Si no se introducen mejora s locales, voluntarios y estudiantes, dándose priori -
económicas en las áreas rurales y en los centro s dad a las familias sin tierra . Existen otras iniciati-
urbanos de menor tamaño, es prácticamente im - vas, pero no son tan conocidas . En Malasia s e
posible concebir cambios positivos en las condi- favoreció la construcción de nuevos pueblos ; e n
ciones de vida de sus habitantes . Algunas veces s e Tailandia se inició un programa para realojar e n
trata de abrir un camino transitable durante tod o áreas rurales habitantes de casas de inquilinat o
el año para quebrar el aislamiento en que vive n urbanas ; Kenia dedicó algunos esfuerzos a equi-
muchas comunidades y para facilitar la comercia- par pueblos rurales con servicios básicos ; desd e
lización de sus productos . Otras veces hace falt a hace varios años, en la India, se está desarrollan -
ayuda técnica básica y pequeños créditos . A me - do un programa para proveer a los trabajadore s
nudo se trata de mejorar el abastecimiento de sin tierra de terrenos donde construir sus vivien-
12 CIUDAD 7-F ERRITORIO enero-marzo-1987

das ; hacia fines de 1975 ya se habían entregad o El sustento de un importante porcentaje de l a


5 .800 .000 terrenos . También se hicieron esfuerzo s población de la mayoría de los países del Terce r
importantes para mejorar el abastecimiento d e Mundo está relacionado todavía con el campo y
agua a las aldeas . Toda esta información debe se r sus cosechas o con el procesamiento y comerciali-
actualizada y ampliada para cubrir otras expe- zación de sus productos .
riencias, pero ¿qué significado tienen estos pro - Los asentamientos rurales y los pequeños cen-
gramas? ; ¿qué diferencia pueden hacer unos po - tros urbanos son puntos estratégicos en las rede s
cos cientos de miles de viviendas rurales, nueva s de transporte y comunicaciones y deberían conta r
o rehabilitadas con dinero público, diseminada s con servicios de apoyo sociales y económicos .
por todos los países del Tercer Mundo, cuando l a Puesto que los gobiernos del Tercer Mundo aspi-
población rural crece a un promedio de 30 millo- ran a aumentar la producción agrícola de expor-
nes de personas por año y cuando quizás el 60 ó tación y reducir la importación de producto s
70 por 100 de la población rural vive en vivienda s alimenticios, deberían invertir, por ejemplo, e n
inadecuadas? No compartimos el punto de vist a infraestructura, en servicios sociales y en agroin-
de aquellos que ven la situación con optimism o dustrias, en depósitos, en oficinas de irrigación ,
sin otra razón que detectar una mayor preocupa- etcétera . No todas las regiones se beneficiarán d e
ción por la vivienda rural en los planes oficiale s tales inversiones, lo que producirá, inevitable -
de algunos gobiernos, o porque se están realizan - mente, fuertes disparidades . Pero cuando se con-
do algunos proyectos, o porque se han cread o creten, su incidencia se propagará principalment e
algunos organismos especiales . a través de la red de asentamientos existentes o
Muchos países socialistas del Tercer Mund o futuros . Además, los niveles más bajos de l a
han encarado las cosas de otra manera . Par a administración del estado están, o estarán, esta-
empezar, muchos países socialistas del Terce r blecidos en centros urbanos pequeños o media -
Mundo han definido una estrategia diferent e nos . Si los planes de desarrollo locales han de
para el desarrollo rural, y, . como parte de es a reflejar las posibilidades y necesidades locales ,
estrategia, las mejoras de las condiciones de vid a éste es el nivel de gobierno que debe jugar u n
rurales han recibido mayor prioridad . Las nueva s papel fundamental para definir las necesidades y
granjas del estado y las granjas cooperativas ne- decidir el destino de los fondos en las altas esfe-
cesitaban nuevos asentamientos para alojar a lo s ras del gobierno . Los países políticamente inde-
trabajadores y para proveer de servicios a l a pendientes deben organizarse administrativamen-
población rural . Se modernizaron pueblos exis- te de otra manera para poder servir y controla r
tentes para cubrir las necesidades de aquellos qu e territorios antes ignorados por la administració n
vivían en granjas privadas en áreas donde s e colonial, para orientar sus programas hacia un a
había realizado la reforma agraria . En Mozambi- población mayor y con más movilidad, y par a
que se establecieron algunos pueblos comunales ; poder ejercer su influencia política . Vale la pen a
el gobierno de Cuba construyó más de 300 pue- destacar que las tres cuartas partes, o más, de l a
blos en el campo, mientras que a muchos y a población de la mayoría de los países de Asia y
existentes se los proveyó de los servicios necesa- Africa vive en áreas rurales o en centros urbano s
rios, de fuentes de empleo y de conexiones con e l con menos de 20 .000 habitantes . Pero, a menudo ,
sistema viario ; el gobierno sandinista de Nicara- los gobiernos no saben cómo incorporar esa po-
gua mejoró las viviendas y los servicios de pue- blación de manera efectiva a las iniciativas d e
blos rurales ; el gobierno de Etiopía fomentó l a desarrollo y a estrategias alternativas . Otras vece s
creación de cooperativas de productores y d e no están realmente preocupados por hacerlo .
servicios en áreas rurales, así como también cons-
truyó pueblos modelos para sentar el ejemplo e n 4. EL IMPACTO DE LA CRISI S
las áreas rurales y apoyó programas de asenta- ECONOMIC A
miento rural para los más carenciados, a travé s
de la Comisión de Ayuda y Rehabilitación ; e n La crisis económica ha tenido, y seguirá tenien-
Angola se realizaron proyectos de mejoramient o do, una enorme repercusión en todos los aspecto s
de pueblos en áreas rurales . Como ya se mencio- de la vida urbana y rural del Tercer Mundo . L a
nara, un programa de creación de pueblos nucle ó nueva política económica y la nueva orientación
a la mayoría de la población rural de Tanzania . de Estados Unidos y de la Comunidad Económi-
Pero en la mayoría de estos países los logros n o ca Europea tuvieron mayor repercusión que l a
satisficieron las expectativas, y en los casos d e deuda externa sobre los pobres del campo y de l a
Mozambique, Tanzania, Angola y Etiopía algu- ciudad de muchos países del Tercer Mundo . A l
nos éxitos iniciales en el mejoramiento de vivien- encontrarse los países del Tercer Mundo co n
das y en la provisión de servicios en las área s dificultades cada vez mayores para colocar s u
rurales se han visto bastante empañados por gra- producción agrícola o minera en los mercado s
ves crisis económicas y por conflictos militares . internacionales y expandir y diversificar sus ex-
Los asentamientos rurales son fundamentale s portaciones, especialmente las manufactureras ,
para el desarrollo de los países del Tercer Mund o tuvieron que recurrir a créditos extranjeros adi-
y para el bienestar de sus habitantes . A través d e cionales, aun cuando ambas partes sabían, o
los asentamientos rurales y de Ios centros urba- deberían haber sabido, que esa deuda era imposi-
nos de menor tamaño, la población rural s e ble de pagar . Se percibió que la forma de salir d e
conecta con los mercados regionales y nacionales . la crisis era aumentar la producción . Pero los
CIUDAD Y TERRITORIO enero-marzo-198 7

mercados mundiales más poderosos aquello s dos a construir sus propias viviendas y a crear e l
de Norteamérica y Europa Occidental-- está n entorno de las mismas porque no tienen otr a
cerrándose cada vez más a las exportaciones del posibilidad . Para las clases medias bajas la crisi s
Tercer Mundo . económica ha significado un fuerte golpe a su s
Los gobiernos del Tercer Mundo se enfrentan , expectativas, y muchos de los que tenían u n
además, con una importante recesión y, muy a empleo fijo e ingresos estables se vieron obliga -
menudo, con imposiciones del Fondo Monetari o dos a buscar ingresos adicionales en trabajo s
Internacional para reducir el gasto público . El transitorios . Se vieron, además, obligados a com-
pago de la deuda externa se ha transformado e n petir con los sectores de bajos ingresos por lo s
un programa insuperable debido al volumen de la alquileres más baratos .
misma y a las altas tasas de interés de los paíse s Si nuestros pronósticos son correctos, el cua-
desarrollados . La reducción del gasto públic o dro socioeconómico y ambiental en la mayoría d e
significó el aumento de la desocupación y/ o l a los centros urbanos (si no en todos) seguirá dete-
reducción del ya reducido poder adquisitivo d e riorándose . Las ciudades del Tercer Mundo se
los salarios y de los ingresos marginales, lo qu e construyen, y se seguirán construyendo en e l
conduce a enfrentamientos políticos y sociales d e futuro predecible, con gran escasez de recursos .
impredecibles dimensiones . Algunos ejemplos d e Aumentará la competencia por terrenos libres ,
esto son las revueltas por el pan en Marruecos y por bancos en las escuelas o por una cama d e
Túnez, los problemas que tuvieron que enfrenta r hospital, por obtener agua potable, por estacio-
los gobiernos de Senegal y Camerún y las difícile s nar y circular, por un asiento en un tren o
negociaciones con los gremios de los nuevos go- autobús, por una esquina o un rincón de un a
biernos democráticos de Argentina, Brasil, Per ú plaza para vender mercaderías y, obviamente ,
y Uruguay . por los puestos de trabajo . Es difícil predecir l o
En muchos casos la deuda de muchos paíse s que sucederá dentro de diez, veinte o treint a
del Tercer Mundo fue pactada con los banco s años . Aun cuando se supere gradualmente l a
internacionales por los gobiernos militares d e actual crisis económica, sus consecuencias afecta-
facto, generalmente represivos . En algunos casos , rán el futuro de las ciudades por largo tiempo .
éstos llegaron al poder con la tácita aprobació n Debemos esperar más villas de emergencia, má s
de ciertos países industrializados . ¿Cómo pued e conventillos y más subdivisiones ilegales ; aumen-
un gobierno democráticamente elegido y compro - tará la utilización de terrenos inadecuados par a
metido con la justicia social exigir a su població n viviendas precarias ; debemos esperar que má s
sacrificios adicionales para pagar una deuda de l a gente se vea obligada a obtener sus ingresos e n
cual no es en absoluto responsable? Sea com o trabajos ilegales o temporarios y a vivir con
fuera, ésta no es quizás una cuestión de falta d e peores servicios y sufrir una mayor cantidad d e
recursos sino del mal uso de los mismos . Cual - enfermedades relacionadas con entornos de vid a
quiera que sea el resultado de la presente crisis e n contaminados y en continuo deterioro .
la mayoría de los países del Tercer Mundo, esta - Debemos preguntarnos si ¿son compatibles la s
mos seguros que los más golpeados por la crisi s propuestas económicas que se discuten para su-
serán los pobres del campo y de la ciudad y lo s perar la recesión, con estrategias que animen u n
sectores de menores ingresos dentro de la clas e desarrollo económico y social, y si pueden ésta s
media. En las ciudades del Tercer Mundo ya s e ser aceptadas por los gobiernos del Tercer Mun-
aprecia, de diferentes maneras, el impacto de l a do desde un punto de vista político y social? ;
crisis . ¿qué medidas deberían y podrían adoptarse par a
Toda crisis económica impone más presione s reducir estos problemas y para establecer la s
sobre los ya escasos recursos de los países de l condiciones para un crecimienmto urbano má s
Tercer Mundo y demora la incorporación d e justo y eficiente, en una situación de continu a
nuevos recursos y el mantenimiento y ampliació n crisis económica? Todo esto implica, obviamente ,
de los servicios básicos . En períodos de crisis , lo siguiente : ¿qué debemos aprender para se r
todos los afectados de las áreas urbanas reconsi- capaces de abordar con cierto éxito los proble-
deran sus decisiones individuales y se concentran mas arriba mencionados ?
en una política de superviviencia personal o insti-
tucional . Esto tiene amplias repercusiones en e l 5. LA LEY NO ES IGUAL PARA TODO S
tejido arquitectónico y urbano de cualquier ciu-
dad y en la calidad de vida de sus habitantes . Hasta no hace muchos años era común encon-
Para peor, al predominar las decisiones sectoria- trar a los planificadores urbanos de los organis-
les o aisladas, las políticas e intervenciones de l mos oficiales del Tercer Mundo representando a
gobierno tienen pocos efectos positivos en l a las villas miserias, en sus planos de uso del suelo ,
totalidad de las áreas urbanas . como terrenos sin edificar o como espacios abier-
La crisis económica y el deterioro resultant e tos, como si estos terrenos superpoblados, per o
afectan a los pobres de diferentes maneras . Mu- ilegalmente ocupados, habitados por miles d e
chos tienen un escaso margen para poder sobrevi- personas, de alguna manera no existieran . Esto s
vir o no tienen ninguno . La crisis hace emerge r planos ilustraban la actitud oficial hacia esto s
sus necesidades insatisfechas . Están tan dedica - asentamientos, aun cuando alojaban a la tercer a
dos a sobrevivir que apenas tienen tiempo o parte y hasta a la mitad de la población y de l a
ganas de pensar en otra cosa, pero se ven obliga - fuerza de trabajo de una ciudad .
4 CIUDAD Y TERRITORIO / enero-marzo-198 7

Las villas miserias y las otras formas de vivien- cer sus planes y ambiciones . Cada uno tiene su s
da ilegal eran consideradas formas transitorias d e propias ideas sobre cuáles son las prioridades ,
alojamiento, que serían reemplazadas por vivien- porque les sirven a sus intereses y necesidades .
das convencionales una vez que se produjese e l Pero se hacen pocos esfuerzos para repensar l a
crecimiento económico esperado, como si todo s ciudad colectivamente en términos de una distri-
los países del Tercer Mundo fueran a tener u n bución más equitativa y eficiente de escasos re-
proceso de desarrollo lineal, históricamente simi- cursos, lo que significa seleccionar tecnologías
lar al experimentado por los países ricos de l relacionadas con las reales posibilidades econó-
bloque occidental . Otra solución discutida e im- micas de las sociedades nacionales y orientadas a
plementada fue la de eliminar esos asentamiento s satisfacer las necesidades de la mayoría ; actuali-
ilegales y trasladar a sus habitantes a zonas me - zar normas para la construcción de viviendas que
nos visibles y más distantes . A los gobiernos le s permitan que cada ciudadano encuentre una so-
llevó muchos años aceptar que un alto porcentaj e lución legal a su problema, pero que sean l o
de la población urbana no tiene otra alternativ a suficientemente flexibles para permitir y promo -
de alojamiento que los asentamientos ilegales . ver el bienestar, y alentar gobiernos municipale s
Aunque poco a poco están reconociendo la for- basados en una actitud más participativa y am -
ma en que crecen las ciudades, muchos gobierno s plia . También existe una brecha creciente entre l o
todavía persisten en intimidar a los habitantes d e que se plantea y lo que se hace referente a esto s
las villas miserias, desalojándolos por la fuerza, y temas . La población tiene el derecho de exigi r
en hostigar constantemente a los sectores de ba- que los escasos recursos disponibles se usen co n
jos ingresos para disuadirlos de invadir nuevo s más eficiencia y honestidad, y tiene el derecho d e
terrenos o de hacinarse en las villas existentes . participar en la discusión e implementación de la s
Otros gobiernos, quizás en un intento de demos- decisiones que ayuden a desarrollar mejores hábi-
trar que están haciendo algo, intentaron expulsa r tats humanos . Pero éste no es el caso . Se admi-
por la fuerza a algunos habitantes de la ciudad a nistra la ciudad con un mismo enfoque ineficien-
áreas rurales u otras regiones o hacerlos regresa r te . Se repiten las mismas críticas y se dicen la s
a sus países de origen . Más preocupante es l a mismas cosas en conferencia tras conferencia y e n
negligencia con que los gobiernos ven los proble- la mayoría de los planes de desarrollo .
mas de los barrios autoconstruidos e ilegales . Las intervenciones oficiales con respecto a l a
Dadas las actuales circunstancias económicas, n i construcción de las ciudades no son muy claras .
el hostigamiento, ni los desalojos, ni la negligen- A menudo, la primera vez que los habitantes d e
cia, ni, obviamente, "el llevarlos en camiones al una villa o barrio de una ciudad oyen hablar d e
campo", constituyen una solución . Es una batalla la construcción de un alcantarillado o de un a
perdida para los gobiernos que persisten en estas nueva calle es el ver llegar las máquinas excava -
actitudes . doras para comenzar las obras . En casi todas la s
En los últimos treinta o cuarenta años, el creci- ciudades del Tercer Mundo los asentamiento s
miento urbano de la mayoría de los países de l ilegales han sido objeto, durante muchos años, d e
Tercer Mundo ha sido tan acelerado que es com o diversas políticas gubernamentales tendentes a
si cada ocho, diez o quince años se hubiera n mitigar los problemas sociales y ambientales co n
construido ciudades completamente nuevas en l a que se enfrentan los grupos de bajos ingresos qu e
periferia de las viejas ciudades o sobre ellas . En la viven en el único tipo de alojamiento que puede n
arquitectura, usos del suelo y calidad de la in- costearse . No quiere decirse que estas políticas ,
fraestructura y servicios de estas ciudades se ve n cuando al fin se implementan, sean siempre gene-
reflejados los privilegios de unos pocos y la po- rosas y amplias ; sin embargo, en algunos países ,
breza de la mayoría . El planeamiento urbano y la hay una nueva actitud oficial en cuanto a recono-
legislación urbana vigentes refuerzan esta actitu d cer los derechos de los habitantes de las villas d e
porque contribuyen a segregar este crecimient o emergencia a permanecer en ellas y a contar co n
físico que refleja los intereses privados y especu- los servicios básicos .
lativos de una reducida élite con respecto al suel o La legislación urbana en todo el Tercer Mund o
urbano y suburbano y a la construcción especula- refleja la influencia del derecho consuetudinario
tiva de viviendas en barrios consolidados, provis- inglés, del derecho romano o islámico . Esta legis-
tos de servicios . No refleja, en cambio, la situa- lación no previó la transformación de la econo-
ción de los distritos donde se construyen la ma- mía mundial, ni los cambios sociales y económi-
yoría de las nuevas viviendas, en las villa s cos en los países del Tercer Mundo, que daría n
miserias o los asentamientos urbanos ilegales . como resultado asentamientos ilegales masivo s
Los gobiernos y los organismos oficiales redu- alrededor de la mayoría de las ciudades . Po r
cen, a menudo, el problema de la construcción y ejemplo, según la tradición del Código Civi l
administración de las ciudades a una cuestió n Francés de 1804, el propietario público o privad o
estadística ; la solución más conocida es busca r del suelo es también dueño de la vivienda cons-
más dinero . Dinero para construir más viviendas , truida por el villero, y éste (un intruso) puede se r
cañerías, calles y aceras ; dinero para compra r desalojado sin indemnización .
autobuses o para construir una línea de transpor- Pero la aplicación de la ley, según ha demos -
te subterránea, un hospital o escuelas . Cada mi- trado la experiencia, es muy problemática . Vale
nisterio nacional o departamento municipal y la pena recordar que en la mayor parte de Asia y
cada grupo social quiere más dinero para satisfa - en casi todos los países de Africa al sur del
CIUDAD Y I FRRITORIO enero-marzo-1987 15

Sahara el sistema legal, en el cual se basa l a nos y la justicia, el reconocimiento tácito de un a


actual legislación urbana, fue impuesto por lo s ocupación ilegal de tierras . Ejemplos similares s e
regímenes coloniales para garantizar (y legitimar ) pueden dar para cada actividad diaria que des -
sus derechos y el acceso a los recursos . La planifi- arrolla una familia pobre en cualquier ciudad de l
cación urbana en uso, y la legislación que l a Tercer Mundo . La legislación urbana, laboral ,
apuntala, fue fundamentalmente establecida par a sanitaria y ambiental, las reglamentaciones co-
brindar a una reducida élite de europeos una alt a merciales y edilicias, todos los procedimiento s
calidad de vida y para dar una base legal a l a legales que intentan regular los actos de las per-
administración colonial . Sólo unos pocos gobier- sonas en cualquier ciudad del Tercer Mund o
nos -tanto nacionales como municipales- hi- fueron sancionados originalmente en función d e
cieron cumplir sistemáticamente esta legislación , una situación ideal . Quizás, en un comienzo ,
si bien muchos recurrieron a la expropiación de hayan sido decisiones correctas, pero se volviero n
tierras privadas, donde se habían asentado villas tan complejas, rígidas e irreales, con referencia a
miserias, y pagaron una buena indemnización al las actuales circunstancias y a las posibilidade s
propietario original . Los gobiernos resuelven e l reales de los pobres, que son transgredidas a
conflicto de intereses transformando esos solare s diario por quienes enfrentan las mayores necesi-
en terrenos fiscales . Según comentara reciente - dades .
mente un autor venezolano, "esta paradoja pare - Demasiado a menudo suponemos que la ley e s
ce reflejar una gran ambigüedad de la polític a igual para todos . Cuando se sancionaron las
estatal . Por un lado, el Estado reconoce que un a constituciones nacionales se dio por sentado qu e
parte importante de la población carece de vi- todos los habitantes de un país disfrutaban d e
viendas dignós y debe recurrir a las ocupaciones . iguales oportunidades . De modo que las leye s
Se delinean planes para solucionar el problema , vigentes se basan en un criterio de equidad . L a
se introducen diversas medidas y se invierte n realidad es muy diferente y no creemos que pue -
importantes fondos en áreas de bajos ingresos . A l da producirse un cambio importante en el futur o
mismo tiempo, el Estado paga generosas indem- próximo . Mucho de lo que aprendimos -y, fun-
nizaciones tanto a los propietarios como a lo s damentalmente, de lo que aprendieron los secto-
ocupantes de los ranchos . De esto se puede dedu- res de bajos ingresos- sobre las condicione s
cir que el Estado está más interesado en dispersar básicas para encarar la construcción y adminis-
los fondos, beneficiando a ciertas personas, que tración de ciudades más justas y equitativas en-
en tratar de solucionar, efectivamente el proble- frentará enormes problemas para llegar a incor-
ma" (Pérez Perdomo y Nikken, 1982) . Esto pue - porar a los programas y proyectos públicos má s
de conducir a extrañas distorsiones, como en lo s importantes, porque irá en contra de los princi-
casos en que los propietarios de solares pagan a pales preceptos en los que se basa la actual
la gente para que organice la ocupación de su s legislación . Si aspiramos a mejorar integralment e
tierras, pues así podrán obtener un mejor "pre - nuestras ciudades, deberán modificarse concepto s
cio" por la indemnización del Estado que el qu e profundamente arraigados sobre la propiedad
obtendrían por la simple venta de esas tierras . privada de la tierra y sobre la herencia de privile-
Similares paradojas se pueden observar en las gios . El acceso a una vivienda, a servicios digno s
calles de las ciudades del Tercer Mundo . Lo s y a iguales oportunidades de trabajo deberían se r
gobiernos reconocen que no hay suficientes em- una responsabilidad colectiva . Esto sólo es posi-
pleos y que la mayoría de los trabajadores gan a ble cuando cada sociedad nacional y el mund o
muy poco . Esto lleva a que muchos tengan qu e tomen conciencia de la necesidad de comparti r
ganarse la vida realizando tareas que están e n riquezas y privilegios . Podemos seguir discutien-
desacuerdo con las reglamentaciones vigentes . do sobre cómo mejorar la ciudad del Terce r
Muy pocos vendedores ambulantes, que vende n Mundo, cuando en realidad sabemos que la s
la misma mercadería que los negocios legales , características de su crecimiento produce proble-
tienen el correspondiente permiso de venta . Lo s mas de tal complejidad y dimensión que desafía n
gobiernos no prohiben estas transacciones ilega- cualquier solución posible bajo los actuales enfo-
les, porque sin ellas muchas familias pobres n o ques, con las instituciones existentes y con lo s
podrían subsistir. Pero, en consideración a las marcos legales vigentes . Los gobiernos se está n
reglamentaciones vigentes y a los negocios legale s dando cuenta lentamente de esta realidad, e n
ya establecidos, los vendedores ambulantes se ve n parte, quizás, gracias a los resultados de alguna s
constantemente hostigados por la policía y, co n conferencias, proyectos e investigaciones y a vin-
frecuencia, son llevados a las comisarías y multa- culaciones más estrechas entre investigadores y
dos . Horas más tarde estarán nuevamente en l a dirigentes vecinales, sindicales y políticos . Pero l a
calle, desarrollando sus actividades "ilegales" , mayor presión sobre los gobiernos proviene di -
pues no tienen otra opción para ganar el diner o rectamente de los grupos comunitarios, que toda -
del cual depende su supervivencia . vía tienen una escasa representación en la mayo -
En muchas ciudades no se construyen centro s ría de los gobiernos, si la tienen .
de salud, escuelas o redes de abastecimiento d e Es inevitable que la mayoría de la gente teng a
agua dentro de los límites de las villas miseria s poca fe en las leyes . Lo más probable es qu e
precisamente porque éstas son ilegales . La inje- muchos ni siquiera sepan que ciertas leyes exis-
rencia de algún organismo oficial en tales área s ten . Cuando las leyes se aplican con severidad ,
representaría, para los propietarios de esos terre - los sectores de bajos ingresos simplemente las
16 CIUDAD Y TERRITORIO enero-marzo-198 7

ignoran o tratan de convivir con ellas . Si las leyes que parezca increíble -con sólo algunas modifi-
son demasiado complejas y amenazan la supervi- caciones, quizás , esta misma legislación es l a
vencia de estos sectores, éstos tratan de vivir d e que continúa vigente . Estos temas son de sum a
acuerdo a sus propios valores y códigos . Alg o importancia para los países que sufren un rápid o
terriblemente erróneo debe ocurrir cuando mu - crecimiento urbano .
chas leyes son transgredidas tan a menudo, espe- Muy pocos gobiernos han aprobado norma s
cialmente cuando la mayoría de los transgresore s adecuadas y realistas, basadas en las posibilida-
pertenecen al sector de bajos ingresos, y cuand o des y recursos locales . Lo poco que se ha hecho ,
sólo transgrediendo esas leyes pueden sobrevivir . se hizo en las ciudades de mayor tamaño ; muy
Hace unos años, mientras recorríamos una vi- pocos gobiernos han prestado atención a los cen-
lla de emergencia en Delhi, le preguntamos a un o tros urbanos pequeños o medianos, a pesar d e
de los villeros (a través de un periodista nativ o que en ellos vive un importante porcentaje de l
que iba con nosotros) qué había pasado con un a total de la población urbana . Las pocas norma s
vivienda que evidentemente había existido en u n que se han establecido para estos últimos son ,
pequeño terreno baldío ubicado en medio de u n generalmente, réplicas simplificadas de las adop-
distrito tan densamente poblado . Su respuesta , tadas para las ciudades de mayor tamaño o par a
según la recordamos, fue la siguiente : "Aquí vivía las conurbaciones . Una vez que se adopta un a
una familia . Durante el último monzón la lluvi a legislación urbana, ésta cambia muy lentamente .
destruyó su vivienda . Como no tenían diner o Las viejas legislaciones coloniales o aquellas ba-
para comprar los materiales para construir una sadas en costumbres importadas de Europa, difí-
nueva (que estimamos podían tener un cost o cilmente constituyan una base realista para resol -
aproximado de 40 a 50 dólares), se mudaron d e ver las necesidades de ciudades de rápido creci-
la villa para buscar otros medios de vida . Per o miento y, en gran parte, autoconstruidas con una
dijeron que pensaban regresar . Les estamos cui- gran escasez de inversiones .
dando el terreno ." A pesar de la desesperant e Las leyes son sencillamente injustas porqu e
escasez de terrenos y de que cada metro cuadrad o siginifican una amenaza para los grupos meno s
de esa villa estaba ocupado por ranchos y casi- privilegiados de cada país y porque debido a s u
llas, los villeros o vecinos asumían la responsabi- pobreza no pueden cumplir con dichas leyes . U n
lidad de guardar el sitio de una de sus familias , gran porcentaje de los habitantes de las ciudade s
aun cuando toda la ocupación de la tierra er a de cualquier país del Tercer Mundo no podrí a
ilegal . sobrevivir si tuviera que cumplir con los código s
El valor de una ley y su justificación deberí a de edificación vigentes, o con los códigos labora-
estar relacionado con los beneficios que una co- les o civiles que determinan las relaciones labora -
munidad, en su conjunto, recibe de su aplicación . les y comerciales, especialmente cuando los acto s
Pero casi nunca se modifica una ley para adap- más simples de sus vidas -como son construi r
tarla a una nueva realidad . De modo que, a pesa r sus viviendas, ganarse un salario, obtener la co -
de las transformaciones sufridas por las econo- mida que comen y el agua que beben- quedan
mías de la mayoría de los países, el sistema lega l fuera de la legislación establecida . Sería un gran
impuesto bajo circunstancias totalmente diferen- acierto que los legisladores modificaran esas leye s
tes y, a menudo, por un poder foráneo, continú a y procedimientos poco realistas y que tambié n
vigente, apenas modificado . En los países de l eliminaran aquellas leyes innecesarias . La legisla-
Tercer Mundo hay múltiples organismos, en to - ción urbana debería ser más generosa y flexibl e
dos los niveles del gobierno, dedicados a la tare a para adaptarse a la gran variedad de circunstan-
de establecer, administrar y revisar las norma s cias y al ritmo con el que éstas cambian . Tambié n
urbanísticas, ambientales y habitacionales, tant o debería incorporar los objetivos particulares y las
a nivel nacional como municipal . En muy raras prioridades de los sectores de bajos ingresos, as í
oportunidades, estos organismos oficiales toma n como también la experiencia adquirida por lo s
en consideración los bajos ingresos de la pobla- grupos comunitarios en la construcción y organi-
ción o las diferencias en la distribución de lo s zación de sus barriadas . Si los códigos de edifica-
ingresos, o el origen campesino de muchos pobla- ción y sus reglamentaciones están principalment e
dores urbanos, o la diversidad de grupos cultu- designados a promover la salud y la segurida d
rales . públicas, quizás serían más efectivos si buscara n
Más aún, la colonización extranjera, la influen- servir de guía a la gente que autoconstruye l a
cia cultural extranjera y las asistencia técnica y mayoría de las nuevas viviendas -los sectores d e
financiera extranjera dieron como resultado un a bajos ingresos- sobre cómo cumplir las norma s
serie de leyes y normas urbanas, especialment e de salubridad y seguridad a un mínimo costo . E s
sobre edificación y zonificación . que alienaron y inútil decirle a alguien que autoconstruye su vi-
segregaron una cantidad cada vez mayor de gen - vienda que "el nivel de los cimientos (de su nuev a
te . Para muchos regímenes coloniales, éste era s u casa) debe ser tal que la profundidad mínima d e
propósito : separar físicamente a los colonizado - las fundaciones, para evitar movimientos hori-
res y sus asociados nacionales de la població n zontales del suelo que recibe las cargas, deb e
indígena . Generalmente se dejaba un "cordó n ajustarse a la teoría de Rankine", teoría que est á
sanitario" o espacio abierto, donde no se podí a especificada en términos matemáticos, sin diagra-
construir ningún edificio, entre la ciudad de lo s mas, dibujos o una sencilla explicación de lo qu e
colonizadores y la de la población indígena . Aun - se exige . Sin embargo, la transcripción es parte
CIUDAD Y TFRRITORIO J enero-marzo-198 7

de las normas de edificación de la ciudad d e tualizados, como también lo están los sistemas d e
Madrás que se aplican a todos los inmueble s control para evitar la evasión fiscal . Un estudi o
dentro del radio urbano (McAuslan, 1985). Des - llevado a cabo hace pocos años en Filipinas co n
pués de todo, los gobiernos del Tercer mundo n o funcionarios municipales, que incluyó el levanta -
pueden resolver todos los problemas al mism o miento de la situación fiscal de varios municipios ,
tiempo, pero son necesarios enfoques más razo- demostró que el cobro del impuesto inmobiliari o
nables y flexibles . Parafraseando un proverbi o a solo unos cuantos evasores importantes iguala -
Masai, "un gobierno no puede ser fuente de tod a ría a la recaudación total de un año . Un ejercici o
sabiduría". similar en Ghana demostró que los ingresos po-
tenciales de la recaudación municipal, a partir d e
una variedad de derechos, impuestos, peajes y
6. GOBIERNOS MUNICIPALE S
licencias, eran, normalmente, cinco veces o más
En la mayoría de los países del Tercer Mund o que el monto que se recolectaba (Cochrane ,
los gobiernos municipales tienen una enorme res- 1983) . A diversos niveles, las municipalidade s
ponsabilidad legal e institucional en la planifica- pretenden servir a ciudades o conurbaciones d e
ción y rehabilitación de las áreas urbanas . Si n varios millones de habitantes, con estructuras ,
embargo, sólo pueden cumplir con una pequeñ a niveles de representación y programas que pue -
parte de esa responsabilidad . Los gobiernos mu- den tener validez en ciudades de unos cuanto s
nicipales son los responsables de la planificació n miles de habitantes, pero que son totalment e
del uso del suelo y también de reglamentar l a ineficientes en estas grandes conurbaciones . La
construcción de la ciudad al determinar las altu- capacidad de negociación de estos gobiernos mu-
ras, la tecnología a emplearse y las característica s nicipales con Ios gobiernos provinciales o estata-
constructivas . También tienen la responsabilida d les y nacionales, y con el sector privado, se v e
de pavimentar las calles y aceras, regular el tráfi- cada vez más debilitada .
co y el transporte público, hacer cumplir (y qui - La creciente declinación económica y polític a
zás sancionar) las leyes sobre medio ambiente , de los gobiernos municipales refleja la mayo r
incluyendo medidas sanitarias y, por lo menos e n centralización de los gobiernos nacionales y l a
principio, decidir la localización, características y indiferencia de éstos hacia los niveles de gobiern o
secuencias de las inversiones públicas y privada s de jurisdicciones menores . Los partidos político s
dentro de su jurisdicción . A cambio de esto s y los grupos nacionales de poder muestran poc o
servicios los gobiernos• municipales exigen e l interés en los gobiernos municipales, como s i
pago de ciertos impuestos y contribuciones , temieran que éstos pudiesen alentar el surgimien-
como, por ejemplo, los impuestos inmobiliarios o to de políticos con verdadero apoyo popular . E n
los impuestos sobre ciertas actividades industria - sociedades predominantemente urbanas, com o
les y comerciales . También establecen las tasas y son la mayoría de las de América Latina y algu-
cobran las contribuciones por varios servicio s nas de Asia, la situación es en extremo seria ,
públicos . Los gobiernos municipales son una im- puesto que, además, hay muy poca coordinació n
portante fuente de empleo, especialmente par a entre los diferentes niveles de gobierno ; esto seña-
trabajadores no calificados . la otro rasgo del subdesarrollo, que implica tam-
La planificación urbana y los planes socioeco- bién mayores costos . Como lo señalara un estu-
nómicos de las ciudades son también responsabi- dio recientemente publicado sobre experiencia s
lidad de los gobiernos municipales . De form a de descentralización en el Tercer Mundo : "Lo s
independiente o mediante convenios con otro s funcionarios nacionales no pueden conocer l a
gobiernos municipales, provinciales o nacionales , compleja variedad de factores que afectan el éxi-
pueden iniciar planes metropolitanos y hasta re- to de los proyectos de las comunidades locales e n
gionales . De modo que todos los planes, progra- todo el país . Al tener que enfrentarse con un a
mas y políticas para las áreas urbanas deben, e n situación desconocida, crean procedimientos cen-
principio, estar sujetos a la decisión de los gobier- tralizados y normalizados en extremo ; o por mie -
nos municipales . La realidad es muy distinta . L a do a cometer errores, no hacen nada con respect o
mayoría de los gobiernos municipales tienen poc a a decisiones urgentes, esenciales para la imple-
intervención (o ninguna) en los planes de des - mentación de proyectos y programas municipa-
arrollo, aun en América Latina, a pesar de que e l les" (Rondinelli, Nellis y Cheema, 1984) .
60 por 100 o más de la población de la mayorí a Paralelamente. a la fuerte centralización del
de los países vive en áreas urbanas . A pesar de l a poder en manos de los gobiernos nacionales, ha y
larga tradición de los gobiernos municipales e n una fuerte dispersión administrativa a nivele s
muchas regiones del Tercer Mundo, el papel qu e funcionales o sectoriales en cada nivel adminis-
juegan en su desarrollo socioeconómico ha decli- trativo . Las inversiones se hacen por sectores :
nado, aun cuando nunca fue particularmente o obras públicas, salud, educación, vivienda, etc .
importante bien definido . La estructura de l a Como resultado, en todas las áreas urbanas exis-
mayoría de los gobiernos municipales es obsole- ten varios presupuestos sectoriales públicos qu e
ta . con personal profesional e intermedio total- operan simultáneamente y sin ninguna o co n
mente inadecuado para las tareas y derecho s escasa coordinación entre sí, aparte de las inver-
propios de un municipio moderno . El sistema d e siones privadas .
recolección de impuestos y las ordenanzas qu e Además, el rígido sistema de recolección d e
establecen los ingresos municipales están desac- impuestos (de los que el gobierno nacional se
CIUDAD Y TERRITORIO r enero-marzo-198 7

reserva los más lucrativos y de fácil cobro), lo s Sin lugar a dudas, en cualquier intervenció n
pocos contactos entre los organismos de contro l estatal existen dificultades políticas, legales y fi-
de impuestos y los de los servicios públicos y e l nancieras -así como también restricciones admi-
bajo nivel técnico de la mayoría de los funciona - nistrativas-, pero también existen otras alterna-
rios municipales explica los escasos ingresos qu e tivas, como la venta de terrenos fiscales a organi-
recaudan las municipalidades, ya fueran en form a zaciones cooperativas o comunitarias, medidas
directa o indirecta . Esta situación se agrava e n fiscales y legales, programas de readjudicación d e
períodos de gran inflación y recesión, que so n terrenos, mejoras catastrales, modificaciones a las
ahora una característica de muchos de estos pai - normas y "standards" existentes, simplificación y
ses . Por lo tanto, es imperioso comenzar a exami- agilización del procedimiento por el cual un pro-
nar el comportamiento de los organismos oficia - pietario privado puede subdividir y vender terre -
les a nivel municipal y comenzar con las tenden- nos edificables, transporte público barato y efi-
cias observadas en los últimos años . Pero n o ciente que conecte a más zonas residenciales co n
tenemos respuesta a algunos interrogantes bási- los principales centros laborales, entre otras .
cos, tales como : ¿ha declinado o aumentado, e n Todo esto puede beneficiar a los sectores de bajo s
valores actualizados, la inversión pública y priva - ingresos . Existen otras medidas a largo plazo ,
da nacional y sectorial por habitante en las área s como la creación de bancos de tierras, pero a
urbanas durante los últimos años? ; ¿qué fuerzas corto plazo los organismos oficiales pueden ini-
políticas actúan en estos procesos y cuáles son lo s ciar la adquisición de terrenos, dotándolos d e
factores positivos y negativos que influyen e n infraestructura básica y servicios, para procede r
ellas? luego a su venta por etapas y utilizando la s
Muchos urbanistas confían en los cambios pla- sumas obtenidas en nuevas inversiones . Este sis -
nificados como una solución a los muchos e tema se intentó con algún éxito en Túnez . Otr a
interconectados problemas que causan un rápid o medida podría ser la limitación en la posesión d e
crecimiento urbano con escasas inversiones , terrenos urbanos y suburbanos . Si los políticos y
cuando, en realidad, la mayoría de los cambios s e tecnócratas municipales, por debilidades política s
producen sin planes ni regulaciones . La mayorí a y económicas, no pueden controlar la compra y
no sabe cómo utilizar la planificación tradiciona l venta de terrenos en las ciudades de las cuales s e
que estudiaron en las instituciones académicas . supone son los responsables, difícilmente se pue -
Esta resultó inútil, incluso durante los años cin- de esperar que ejerzan su influencia sobre decisio-
cuenta, sesenta y principios de los setenta, cuan - nes tomadas a niveles más altos de gobierno .
do todavía las economías de varios países de l Las administraciones municipales (y naciona-
Tercer Mundo crecían a ritmo sostenido, y resul- les) tienden a calificar a las villas de emergencia o
ta aún menos efectiva con la actual crisis econó- a las subdivisiones ilegales como de "desorganiza-
mica que enfrentan los países del Tercer Mund o das" o "no planificadas". Esto es cierto sólo e n
y bajo las actuales circunstancias políticas . Lo s parte . La diversidad de barriadas autoconstruida s
tecnócratas entrenados en los países desarrolla - y la complejidad de sus conexiones con el rest o
dos o en instituciones del Tercer Mundo qu e de la ciudad, con la economía de la ciudad y co n
adoptaron planes de estudio basados en modelo s la sociedad no pueden ser analizadas con u n
de países desarrollados, difícilmente eviten e l enfoque tradicional . Cada barriada autoconstrui-
error de transferir, a sus propias culturas, las da cumple ciertas funciones vitales para la super-
teorías y experiencias de los países capitalistas y vivencia de sus habitantes . Se debe considerar a
socialistas industrializados y diseñados para esa s cada una de ellas como un proceso particular d e
culturas . transformación social, en un constante y vita l
Los políticos y planificadores municipales ha n período de transición . Las interconexiones entre
sido incapaces de controlar la especulación de l a las diferentes barriadas o asentamientos, alguna s
tierra en sus propias ciudades, especialmente l a veces débiles, otras muy fuertes, han sido cuida-
que más afecta a los mercados marginales, a dosamente pensadas por sus habitantes más de l o
través de los cuales los sectores de bajos ingreso s que a menudo se cree .
pueden acceder a terrenos baratos para sus vi-
viendas, sin tener que alejarse demasiado de su s 7. POLITICAS NACIONALE S
lugares de trabajo . El problema fundamental qu e
debe solucionarse, para encarar la cuestión habi- La mayoría de los gobiernos del Tercer Mund o
tacional de la mayoría de las ciudades del Terce r no han definido explícitamente qué pretende n
Mundo con economía mixta o de mercado, e s hacer con sus asentamientos humanos . Los pla-
asegurar que los sectores de bajos ingresos tengan nes nacionales, en general, no han tenido e n
acceso a una parcela de tierra para construir all i cuenta la distribución espacial de las inversione s
sus viviendas . Históricamente, el mercado no h a sociales y económicas . Durante los años cincuen-
producido nunca entornos urbanos dignos par a ta y sesenta se puso énfasis en el crecimient o
los pobres, y sólo en muy raras ocasiones l o económico ; es decir, en las inversiones "producti-
consiguen aquellos grupos sociales con poca ca- vas", lo que generalmente significó promoció n
pacidad de ahorro, pero con algunos ingreso s industrial (y también, a veces, la de cultivos par a
como para costearse una vivienda . En la actuali- la exportación), y de la infraestructura que reque-
dad, el mercado no provee ni siquiera a la s ría. A comienzo de los setenta, los planes nacio-
necesidades de ese grupo . nales comenzaron a incluir la palabra "social" en
CIUDAD Y TERRITORIO enero-marzo-1987 19

sus carátulas . Surgió también, en esos años, e l tendrían que estudiar los factores que produce n
interés por reducir el crecimiento de las grande s la migración . En muchos casos ésta tiene s u
ciudades ; aparecieron ambiciosos planes par a origen en una creciente concentración de la pro -
descentralizar la población de El Cairo, Egipto ; piedad de la tierra, en la erosión del suelo, e n
se pusieron en marcha programas especiales par a sequías o en los bajos precios de las cosechas ,
centros urbanos pequeños y medianos (o centro s todo lo cual puede dejar sin sustento a la pobla-
en crecimiento) en Kenia, Tanzania, Nepal, Tai- ción rural . Entretanto, las políticas macroeconó-
landia, Indonesia y Panamá, por nombrar sól o micas de los gobiernos, sus políticas de precios ,
unos cuantos países . Casi todos los gobierno s sus planes sectoriales y sus sistemas impositivo s
nacionales se mostraron disconformes con la alt a contribuyen, a menudo, a concentrar nueva s
(y, en ocasiones, creciente) concentración de l a oportunidades de empleo en las ciudades cuy o
población en unas pocas ciudades grandes o, a rápido crecimiento desean reducir . De modo que
veces, en una sola . mientras muchos planes nacionales enuncian loa-
Pero, en lugar de explicitar políticas y proyec- bles intervenciones y objetivos, en cuanto al me-
tos basándose en análisis correctos sobre las cau- joramiento de las condiciones de habitabilidad y
sas de las actuales tendencias urbanas, los plane s de vida, con especial énfasis en las regiones má s
nacionales incluyeron una cantidad de objetivo s pobres y en los centros urbanos más pequeños ,
generales en cuanto a la construcción y organiza- estos objetivos no guardan relación con la verda-
ción de los asentamientos humanos . En mu y dera distribución del poder político y económic o
raras ocasiones se relacionó estos planes con l a de los gobiernos . Como observa Harris (1983), l a
capacidad económica del país o con la organiza- invención de programas especiales para las regio-
ción administrativa existente a nivel provincial nes pobres o para centros urbanos medianos o
(estatal) y municipal . Tampoco se relacionó co n pequeños puede ser, sencillamente, una maner a
los medios técnicos disponibles implementarlos . de distraer la atención ante la decisión de u n
Hubo una poco clara comprensión de los medios , gobierno de no encarar las causas fundamentale s
directos e indirectos, disponibles a los diferente s de la pobreza de los habitantes de las regione s
niveles de gobierno para intervenir en los asenta- pobres y de la debilidad de la base económica y
mientos humanos . También existió una gran con- de las autoridades municipales de los centro s
fusión en cuanto a lo que significa justicia y urbanos medianos y pequeños .
equidad social y su equivalente espacial . Se argu-
mentaba que al propiciar la radicación de indus - 8. EPILOG O
trias o de otros programas que impulsasen e l
desarrollo en las regiones más pobres se benefi- La mayoría de las ciudades del Tercer Mund o
ciaría a los sectores de más bajos ingresos . L a han crecido tan rápidamente que no parece n
evaluación de tales políticas demostró que ésta s tener historias visuales, las que sólo han quedad o
tuvieron un alto costo para el gobierno y sólo u n registradas en algunos distritos urbanos antiguo s
beneficio marginal para los sectores de bajo s y consolidados . Su construcción y mantenimient o
ingresos . La opinión pública se vio prácticament e está organizado por sus habitantes, pero este
excluida del debate debido a la estructura centra - proceso es consecuencia de esfuerzos individua-
lista de los gobiernos, al estilo tecnocrático de l a les, en su mayoría ilegales y desconectados .
planificación nacional y municipal y a la estruc- Visualmente, las ciudades del Tercer Mundo se
tura política de la mayoría de esos países . parecen entre sí cada vez más . Unicamente l a
Al analizar dónde se localizaron la mayoría de topografía introduce una diferenciación visual ,
las nuevas inversiones productivas -y tambié n pero ésta desaparece en cuanto los grupos invaso-
las inversiones públicas en infraestructura y servi - res toman el control de los terrenos llanos y
cios- y dónde se concentraron la mayoría de las sólidos . Ni el clima, ni los materiales de construc-
industrias, servicios, centros de intercambio y ción, ni las diferencias culturales o hasta ecológi-
comercio, se descubrió que frecuentemente l o cas son suficientes, en muchos casos, para distin-
hacían en las ciudades que los gobiernos decía n guir una villa miseria de otra . Asediadas po r
que iban a desconcentrar . Un análisis de la inci- problemas similares -presiones demográficas ,
dencia de las políticas estatales, de las inversione s oferta de solares controlada por intereses especu-
sectoriales y de las fuerzas del mercado indicarí a lativos, estructuras de clase, administracione s
claramente por qué esas ciudades crecieron ta n inadecuadas, insuficientes inversiones públicas- ,
rápidamente . Docenas de estudios realizados de - las ciudades ofrecen una imagen visual cada vez
mostraron que los flujos migratorios son, funda- más parecida . Esto sucede incluso en los distrito s
mentalmente, la respuesta de la gente adonde s e residenciales de los ricos, en los centros comercia-
radican las mejores oportunidades económicas ( o les y financieros, en la arquitectura de los edifi-
las posibilidades de supervivencia) . Si hay un a cios públicos y de los proyectos públicos de vi-
rápida migración a una ciudad en particular s e viendas . La uniformidad tecnológica está presen-
debe a que los migrantes tienen o creen tener l a te en todos lados . Sólo los centros históricos y lo s
posibilidad de vivir mejor allí . Pero, demasiado a distritos antiguos mantienen las características
menudo, los gobiernos tratan más los efectos qu e que distinguen a una ciudad islámica de un a
las causas . Si los gobiernos tienen la seria inten- ciudad hispanoamericana, una portuguesa-ame-
ción de detener, por ejemplo, un flujo migratori o ricana de otra en el lejano oriente .
desde cierta área rural hacia ciertas ciudades, El común denominador de la ciudad del Tercer
,a CIUDAD Y TERRITORIO ; cnero-marzo-198 7

Mundo es la pobreza de la mayoría de sus habi- firme y una administración eficiente y honesta,
tantes . Cada vez más, el paisaje urbano se v a por utópico que parezca, representan la únic a
componiendo de barriadas autoconstruidas re - manera, para los gobiernos, de conseguir el apo-
cientemente y de los distritos de los trabajadore s yo del pueblo y sus organizaciones .
de bajos ingresos . Al mismo tiempo, la uniformi- Las ciudades del Tercer Mundo deberán cons-
dad de la arquitectura promovida por las élite s truirse con los recursos disponibles de cada país y
-tanto en sus viviendas como en sus oficina s de su pueblo . La asistencia multilateral y bilatera l
es casi como la negación de la cultura e histori a puede ser de ayuda, por ejemplo, en el entrena -
de sus ciudades . miento de personal técnico y administrativo, e n
Han surgido entonces dos historias paralelas , la organización directiva y financiera de los orga-
estrechamente interconectadas pero con expresio- nismos públicos, en organizar la recolección d e
nes visualmente diferentes . Una es la histori a datos y hacer uso de ellos, en programas d e
oficial, representada por una preocupación explí- información y en poner en marcha pequeño s
cita en la construcción y administración de l a proyectos . Tales organismos no pueden esperar
ciudad, y que se refleja en medidas concretas . L a recuperar el costo total de muchas de estas activi-
otra, la historia de los sectores urbanos de bajo s dades . Pero los organismos que insisten en apo-
ingresos, ha sido escrita en raras ocasiones . E s yar "grandes" proyectos, porque es más fácil y
una historia fragmentada y poco documentada . rápido, por dólar, procesar el préstamo, supervi-
Es la experiencia diaria de millones de protago- sar su utilización y recuperar los costos de l a
nistas anónimos que deben encontrar solucione s inversión (cuando se exige la recuperación de l
viables inmediatas para asegurar su superviven- costo), incurren, en muchos casos, en una mal a
cia, sin posibilidades de plantearse perspectivas a inversión de los pocos fondos de que disponen . S i
largo plazo . tal cambio de dirección no es posible, quizás l a
Las ciudades modernas del Tercer Mundo s e única alternativa realista sea la de esperar a qu e
extienden sin orden . Su desárrollo físico parec e la degradación y la injusticia provoquen reaccio-
no tener límites . Crecen y se deterioran sin recibi r nes explosivas . Un enfoque que favorece los "par -
la atención que necesitan por parte de los qu e ches", es decir, un proyecto aquí y otro allá si n
tienen el poder de intervenir para disminuir lo s buscar su complementación e integración, no e s
costos sociales y ambientales producidos por es a una solución para la construcción y adminis-
expansión incontrolada . El actual momento his- tración de las ciudades del Tercer mundo . Si n
tórico que viven las ciudades del Tercer Mund o embargo, es el enfoque que prevalece en toda s
es muy crítico ; forma parte de una transforma- partes .
ción sin precedentes de la economía mundial que La crisis económica podría generar cierto s
sustenta a una población cada vez más urbaniza- cambios de actitud positivos . Por ejemplo, ya que
da . Pero la mayoría de los gobiernos no se atre- los gobiernos (o, por lo menos, algunos gobier-
ven a adoptar las medidas esenciales para hace r nos del Tercer Mundo) reconocen su impotenci a
frente a esa transformación . Actúan con un a para hacer frente a las causas y efectos del rápid o
información parcial y fragmentaria y con recur- crecimiento urbano, se abre la posibilidad de un a
sos limitados ; esto no es excusa para que adopte n participación permanente de los grupos comuni-
soluciones parciales y fragmentarias o p ara que tarios en los gobiernos municipales y, por l o
no adopten ninguna medida . Muchos gobierno s tanto, de un cambio en el enfoque centralista de
demuestran tal falta de respeto por sus ciudada- muchas de las decisiones que entorpecen la activi -
nos que uno llega a pensar que aceptan su impo- dad diaria de la población . Podría ser el fin de l
tencia o que les importa muy poco sus sufri- "gran" gobierno, por lo menos en lo referente a l a
mientos . construcción y administración de las ciudades, y
Los gobiernos deberían informar a la pobla- un mayor respeto por el papel que los pueblo s
ción sobre sus planes y sobre las posibilidade s quieren (y pueden) jugar en el desarrollo econó-
reales de implementarlos . A muchos esto les pue - mico y social, si se autorizara el funcionamient o
de parecer políticamente peligroso, dados los es - de organizaciones democráticas permanentes .
casos recursos públicos invertidos en las ciudade s También podría redundar en una reducción y
y las críticas o indiferencia que tal anuncio pued e mejor control de los grandes proyectos urbanos y
provocar . Formas de gobierno más abiertas y en dar mayor prioridad a proyectos y programa s
participativas son esenciales para enfrentar lo s más pequeños, priorizando otras áreas que la s
problemas de las ciudades del Tercer Mundo, y grandes ciudades y metrópolis . Por supuesto, ha y
esto exige una franqueza y una honestidad qu e proyectos que necesaria e inevitablemente impli-
difícilmente caracterizan el accionar de la mayo- can grandes inversiones e importantes interven-
ría de los gobiernos . Eludir la honesta divulga- ciones estatales, como, por ejemplo, el control d e
ción de tal información es una manera infalible las inundaciones y otras medidas para mejorar l a
de acrecentar el actual aislamiento de los gobier- calidad del medio ambiente de terrenos ya ocupa-
nos, puesto que son muchos los protagonistas , dos, o la preparación de terrenos para nuevo s
con actitudes positivas y negativas, involucrado s distritos, con la necesaria preparación del terren o
en la construcción y administración de las ciuda- y la instalación de infraestructura y servicios .
des . Las preocupaciones de los protagonistas ne- Hay muchas alternativas cuyo potencial recié n
gativos y las iniciativas que pueden llegar a pro- estamos comenzando a apreciar . Una de ellas e s
piciar son previsibles . Pero una posición clara y la forma novedosa como se optimizó el transpor-
CIUDAD Y TERRITORIO enero-marzo-198 7 21

te público en Curitiba (Brasil) y otra fueron lo s relacionados con la construcción y administra-


préstamos y ayuda brindada a los artesanos d e ción de las ciudades adquiriría una escala real y
San Pablo para que trabajen en sus casas, o la s se conectaría con la vida urbana diaria .
muchas experiencias, en todo el mundo, en l a Constantemente nos impresiona con qué estre-
autoconstrucción de viviendas o de barrios com- chez de miras se plantean los problemas de la s
pletos . Quizás, la experiencia más importante se a ciudades del Tercer Mundo y qué poca atenció n
la del organismo para el desarrollo urbano cornu- le dan los gobiernos a los problemas de la ciudad ,
nitario de la municipalidad de Hyderabad, que como si los gobiernos, en su arrogancia y aisla-
trabaja directamente con grupos comunitarios y miento, hubieran olvidado la razón de su existen-
organizaciones no estatales en barriadas pobres , cia. Los que investigan la situación en los paíse s
respondiendo a las necesidades de éstas, en luga r del Tercer Mundo comenzaron a ofrecer nueva s
de imponer un paquete de medidas predetermina - interpretaciones de la ciudad y de sus problemas ,
das . El trabajo emprendido por organizacione s ayudados por la experiencia de aquellos indivi-
comunitarias o barriadas espontáneas para pro - duos y organizaciones que verdaderamente cons-
veer a sus comunidades de servicios básicos y truyen las ciudades (aun cuando su trabajo se a
otras mejoras, cuando los organismos oficiales s e considerado "ilegal") . Sin embargo, muchos go-
niegan a hacerlo, es un ejemplo importante, aun - biernos aducen su ignorancia en cuanto a l a
que mal documentado . Hay técnicas sencillas , magnitud de la crisis del hábitat de sus pueblos, y
ensayadas y probadas, para solucionar los pro- se rehúsan a admitir que hay otras maneras d e
blemas sanitarios de los sectores de menores in- aliviar el impacto social que tal crisis produce y a
gresos y para mejorar los niveles de alfabetiza- buscar nuevas soluciones . Los entornos humano s
ción y capacitación de los grupos de bajos ingre- degradados existirán siempre que haya pobreza y
sos ; la organización e implementación de esto s ésta no se elimina con la ayuda internacional, po r
programas podría descentralizarse con benefici o lo menos en la escala y con la orientación que
general . Finalmente, también deben citarse la s ésta tiene actualmente . La ayuda bilateral est á
experiencias de algunos gobiernos -algunas po- demasiado a menudo orientada a colaborar con
sitivas y otras negativas- que intentaron nuevo s la supervivencia de gobiernos "amigos" y en pai -
enfoques en la administración, construcción o ses donde el gobierno tiene intereses estratégicos ;
provisión de servicios a las ciudades, tales com o sólo un pequeño porcentaje de los fondos s e
los kebeles en Etiopía, las mini-brigadas en Cuba , destina para ayudar a los pobres, con la excep-
los dinamizadores de grupos en Mozambique, la s ción de los fondos destinados a enfrentar el im -
asociaciones para el desarrollo local en la Repú- pacto inmediato de desastres naturales . Ni siquie-
blica del Yemen . Sería importante tener una eva- ra un aumento sustancial en la ayuda a los po-
luación objetiva del real impacto de estas expe- bres solucionaría el problema de la pobreza ,
riencias en la construcción y administración d e porque ésta tiene sus orígenes en la forma en qu e
algunas de las ciudades más pobres del Terce r las sociedades nacionales e internacionales está n
Mundo . Aun combinadas, tales acciones, en tér- organizadas y la forma en que se distribuye l a
minos cuantitativos, no representan un impact o riqueza a nivel mundial y en cada país .
significativo en las condiciones de vida de lo s Como otros problemas mundiales que resulta n
pobres y, menos aún, en los problemas laborale s
de una desigual distribución del poder y de l a
que deben enfrentar los habitantes de las ciuda- riqueza, el problema de la pobreza debería se r
des del Tercer Mundo . Si se sumara a todos lo s
considerado como una responsabilidad colectiva .
beneficiados con esta clase de iniciativas, repre- Al igual que en muchos países de Europa Occi-
sentarían un pequeño porcentaje de los más nece- dental, donde un servicio de salud económico o
sitados, quizás el equivalente a la población d e
gratuito y el seguro de desempleo o de invalide z
unas cuantas áreas metropolitanas de tamaño
se consideran responsabilidades colectivas, tam-
medio . Sin embargo, indican una nueva actitu d bién la comunidad internacional debería acepta r
de algunos gobiernos para legalizar innumerable s una responsabilidad colectiva por lo gratuito e n
asentamientos o barriadas, situación que habí a el mundo .
enrarecido las relaciones entre los gobiernos y la s
organizaciones barriales . Para mejorar los hábitats humanos es necesa-
rio el protagonismo de los "usuarios" de dicho s
Lo mínimo que debe garantizar un gobierno a
sus ciudadanos es una acción coherente, un a hábitats . El problema es que, aun con la difusió n
que tuvieron tos movimientos comunitarios e n
vinculación entre los que se promete y lo que s e
muchas villas de emergencia o en asentamiento s
hace . Al mismo tiempo, los grupos comunitario s
desean una participación mayor y más profunda , ilegales de las ciudades del Tercer Mundo, l a
sin que el Estado les ponga impedimentos . Est o organización de los usuarios demanda tiempo .
Por otro lado, el ritmo de la formación de nueva s
permitiría que el gobierno aprendiera algo de lo s
verdaderos constructores y planificadores del 4 0 villas de emergencia es mucho más rápido que l a
capacidad actual de los grupos existentes par a
y hasta del 60 por 100 de la mayoría de la s
ciudades del Tercer Mundo . De esta manera, l a entrenar, asistir y desarrollar la capacidad de la s
organizaciones comunitarias para recibir ayud a
discusión sobre si favorecer a grandes proyecto s
profesional y trabajar acorde con ella .
o a proyectos comunitarios, sobre si es conve-
niente reducir o aumentar la densidad en la s Se lograrían mejoras sustanciales si los gobier-
áreas metropolitanas y muchos otros aspectos nos reconocieran la realidad de las tendencias
22 CIUDAD Y TERRITORIO i enero-marzo-1987

actuales en la formación y construcción de lo s nacional como internacional . El desastre mundial


centros urbanos . El sector "ilegal" de las ciudade s pronosticado por muchos modelos esquematiza-
está creciendo y extendiéndose más rápidament e dos en los setenta no afectará, en gran medida, l a
que el sector "legal" . Es ilegal porque los pobre s vida cotidiana de los habitantes de la Europ a
invaden terrenos, construyen sus viviendas si n Occidental o de Norteamérica, pero ha sido y
considerar el uso del suelo y las regulacione s sigue siendo la realidad cotidiana de una gran
edilicias, trabajan al margen de las organizacio- parte de la población mundial . Si la construcció n
nes laborales convencionales, toman aguas y con- de las ciudades y el acceso a la salud y a l a
sumen alimentos que no provienen de fuente s vivienda fuesen determinados por necesidades so-
autorizadas, visitan "médicos" o curanderos n o ciales y no por ventajas y ganancias individuales ,
autorizados, etc . Estas prácticas se extienden por- podría lograrse un brusco cambio de dirección e n
que cada vez hay más gente que no puede cos- las tendencias actuales .
tearse el lujo de tener un terreno legal dond e Finalmente, sospechamos que la clave reside e n
construir de acuerdo a los códigos de edificación . que los gobiernos no sigan bloqueando y repri-
Se extiende porque cada vez hay más gente que miendo y que, por el contrario, apoyen la vast a
no puede costearse un médico diplomado o l a gama de actividades, que hasta el momento igno-
visita a un hospital . Cada vez hay más gente que ran, realizada por individuos, familias y comuni-
debe alimentarse con comida vendida en las ca- dades que construyen o amplían sus viviendas y
lles, porque todos los miembros adultos de l a que se buscan la vida fabricando o vendiend o
familia tienen que trabajar para asegurar su so- cualquier cosa, puesto que no tienen otra posibi-
brevivencia o porque sus jornadas de trabajo so n lidad de ganarse el sustento . Esta amplia gama d e
demasiado prolongadas . actividades a las que la gente se dedica, invirtien-
Estas tendencias son inevitables en el futur o do pequeños capitales y con el esfuerzo tant o
próximo bajo los sistemas políticos que prevale- individual como colectivo, deberían ser apoyado s
cen en el Tercer Mundo y dada la negativa de lo s y coordinados para incorporar servicios esencia-
países líderes y de los países desarrollados a ni les, movilizar la producción y mejorar los hábi-
siquiera debatir la reestructuración de la econo- tats humanos . Por cierto, los sectores de bajo s
mía internacional . Aunque rechazamos la divul- ingresos deben también ser protegidos de la ex-
gada posición de echar sobre las espaldas de lo s plotación por parte de los empleadores y propie-
pobres, de los obreros no calificados y de l a tarios y de las autoridades . Una estrategia qu e
población mal alimentada la responsabilidad , priorice el apoyo, por parte de los gobiernos, a
además, de construir sus propios hábitats, debe - los verdaderos constructores de las ciudades ,
mos reconocer que no se logrará revertir est a adaptada a cada cultura y a cada situación, exig e
situación, salvo que haya un cambio fundamental actitudes muy diferentes con respecto al uso de l
en la distribución de la riqueza, tanto a nivel poder .

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