Está en la página 1de 4

Alimentación de la mujer embarazada

La alimentación consiste en consumir una dieta


saludable y equilibrada para que su cuerpo
obtenga los nutrientes que necesita.

Los nutrientes son sustancias en los alimentos


que el cuerpo necesita para poder funcionar y
crecer. Estos incluyen proteínas, carbohidratos,
grasas, vitaminas, minerales y el agua.
Alimentarse sanamente, es una forma sencilla de
cuidar tu salud y la de tu hijo durante el embarazo, además de evitar el
sobrepeso o la mal nutrición.

La cantidad de peso que debe subir depende de su salud y de cuánto pesaba


antes de embarazarse: Si tenía un peso normal antes del embarazo, debería
aumentar entre 25 y 30 libras. Si tenía bajo peso antes del embarazo, debería
ganar más.
Recuerda, todos los alimentos que consumas en este periodo contribuirán a la
formación, crecimiento y desarrollo del cerebro, la vista, el oído y todas las
partes del cuerpo del bebé, así como para la formación adecuada de la
placenta.
Come cinco veces al día incluyendo en tu dieta alimentos variados, suficientes
y balanceados para asegurar que recibas todas las vitaminas, minerales y
nutrientes para ti y el bebé en desarrollo.
¿Cómo debe ser la comida de una embarazadas?
Mientras más variedad de alimentos más nutrientes adquieres: asegúrate de
ingerir las porciones adecuadas de cada grupo alimenticio (cereales, frutas,
verduras, lácteos, carnes, etc.).
Desde el comienzo de tu embarazo tu cuerpo necesita más proteínas. Estas
sustancias participan en la formación de huesos, músculos, piel y otros órganos
vitales, por lo que es recomendable que comas más alimentos ricos en ellas
como lácteos, legumbres, frutos secos, carnes magras y pescados.
Los carbohidratos son tu principal fuente de energía. Te van a ayudar a cubrir
las calorías extras que necesitas para enfrentar las nuevas exigencias físicas
del embarazo. Puedes encontrarlos en el pan, las pastas, los cereales y las
harinas. Sin embargo, tienes que cuidarte de no comerlos en exceso porque
pueden producir una mayor concentración de azúcar en tu sangre y en la de tu
bebé, exponiéndolos a la diabetes.
Es importante que ingieras vitaminas y minerales como el hierro, el ácido
fólico y el calcio. Una dieta rica en calcio, consumiendo muchos lácteos,
contribuye a evitar los calambres: un vaso de yogurt o leche antes de acostarte
ayudará a que descanses mejor. Las fibras son también importantes para
contrarrestar el estreñimiento producido generalmente en el embarazo. Es
posible que tu médico te recete algún suplemento para reforzar estos
elementos.
Siempre debes preferir las comidas más naturales a los alimentos enlatados o
procesados porque estos últimos tienen mayor riesgo de producir
intoxicaciones.

TIPS para una buena alimentación


 No te olvides de desayunar.
 Pruebas cereales enriquecidos (listos para comer o cocidos) y añádeles
fruta. Los cereales enriquecidos contienen nutrientes adicionales, como
hierro, calcio y ácido fólico.
 Si te sientes enferma, comienza con una tostada de pan que sea 100%
integral. Come otros alimentos más tarde en la mañana.
 Come alimentos que contengan fibra.
 Verduras y frutas, como alverjas, espinacas, peras y plátanos guineos
 Granos integrales, como arroz integral, pan de trigo integral y avena
 Frijoles, como los negros o los rojos
 Escoge refrigerios saludables.
 Yogur descremado o semidescremado con fruta (opta por los que
tengan menos azúcar adicional).
 Galletas integrales con queso descremado o semidescremado
 Zanahorias con hummus (un puré de garbanzos hecho con diferentes
especias y aceites)
 Toma una vitamina prenatal con hierro y ácido fólico todos los días.
El hierro es necesario para mantener la buena salud de la sangre. El
ácido fólico previene ciertos defectos congénitos (defectos de
nacimiento). Pregúntale al doctor o a la enfermera cuál vitamina prenatal
es la más adecuada para ti.
 Consume verduras y frutas de temporada
 Incluye alimentos ricos en calcio, hierro y ácido fólico
 Disminuye el consumo de pan dulce, pastelitos, galletas, frituras, pizzas,
hamburguesas, hot-dogs, refrescos y postres.
 Modera el consumo de la sal y de alimentos que la contengan, como:
embutidos (jamón, salchichas, queso de puerco, mortadela, etc.),
quesos, enlatados, cecina, cátsup, agua mineral, consomé en polvo,
aceitunas y galletas saladas
 De preferencia realice cinco comidas durante el día: Desayune,
almuerce, coma, meriende y cene. Incluye todos los grupos de
alimentos.
 Puedes ingerir una taza de café o té al día, si lo desea.
 Bebe mucha agua, esto te permitirá evitar el estreñimiento o las
infecciones urinarias y mantener tu piel hidratada.
 No fumes ni tomes bebidas alcohólicas, las sustancias tóxicas que
tienen los cigarros, el alcohol y otras drogas pueden causar daños
severos no sólo para ti sino para tu bebé.
 Si tu doctor te lo indica puedes tomar suplementos alimenticios que
contengan los minerales y vitaminas que son necesarios para este
período.

También podría gustarte