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10 - La Trampa en La Apertura B. Weinstein
10 - La Trampa en La Apertura B. Weinstein
WEINSTEIN
LA TRAMPA
EN LA APERTURA
Con mucha frecuencia, los ajedrecistas
prlnciplnntes - y algunas veces alrn los
más probados-, experimentnn en la
eta pa inicial de una partida de ajedrez
una humillante derrota. En pocas juga·
das y debido a un error, a un fall o de·
cisivo, han caldo en la trampa, en la
celada que el adversario ha sabido ten-
derles, perui endo Irremediablemente
una partida cuya lucha ni siquiera ha·
bla comenzado.
Entre las infinitas combinacionas y ce-
ladas que pueden presentarse en el
todavla inaprendido campo de las posi·
bilidades iniciales, el autor de esta obra
ha seleccionado las más instructivas e
interesanles, ofrecienuo en un centenar
de diagramas, aquellas que la práctica
ha demos t rt~do que pueden presentarse
con más asiduidad.
Pero el valor de este libro no reside
solamente en esto. No es, ni mucho
menos, una recopi lación de trampas
previamente ordenadas por sistemas de
apertura. ti gran teórico ruso B. Weins·
teln ha realiLado una verdadero obro
t.terorio al dar a su libro un tono huruo·
rlstico que capta la atención del lector
desde las primeras páginas. Usando el
diálogo y la narración, Wemstein nos
introduce en el aridlsimo terreno de la
teorra de aperturas y cuenta -porque su
exposición de la técnica ajedreclstica se
concilia con la amenidad del cuento-
todas aqu~llas com binaciones y celadas
que suelen presentarse en uno partido,
haciendo grata y comprens1va su lectu·
ra para atraer al aficionado hacia los
inagotables recursos del ajedrez.
DibuJe seltruublert•s G. M•rl
B. WEINSTEIN
LA TRAMPA
EN
LA APERTURA
Revisión técnica
por Jos~ MARIA JusTE BoRaBLL
Página
7
INTRODUCCION
Bajo la umbrosa arboleda del par- matura esa clavada de caballo? -le
que junto al Volga, hay infinidad preguntó el hombre.
de mesillas con tableros de ajedrez, -Ha sido hecha en el momento
el ruido de cuyas piezas es perma- preciso. Primero la he realizado, y
nente, y no cesa el festivo diálogo ahora tomo.
entre los concurrentes. AliJ se jue- Y volvió a ganar la partida, por
ga •echando a los que pierden con lo que su adversario tuvo que ce-
cajas destempladaso; esto es, el que der el sitio a otro y marcharse.
pierde dos partidas cede el sitio a -¿Quiere jugar conmigo? -le
otro y se larga. Se gastan bromas preguntó el anciano al ganador.
unos a otros, y nadie puede enfa- A lo que éste contestó:
darse. -¿Cómo está del corazón? ¿No
En el momento en que situamos le causará infarto si tiene que sa-
nuestro relato, se distinguió un lir de estampida?
adolescente, de pelo bermejizo, viva -No estoy muy seguro de ello
mirada y sonrisa pícara, que lleva- --contestó el hombre con cierta
ba una gorra gris, gallardamente la- vacilación-, aunque creo poder re-
deada. Despachaba uno tras otro a sistir un par de partidas.
sus adversarios; ello era debido más El sobredicho adolescente, a quien
a la rapidez de su juego y a las pa- llamaban Sergei, jugó las blancas;
labras festivas con que lo acompa-
ñaba que al profundo sentido de l. P4AR P4R
sus jugadas. l. PJCR
Junto a la mesilla en cuestión es-
taba un hombre maduro y cenceño - Aquí le aconsejarla que toma-
que parecía no mostrar interés en se el peón -le dijo el anciano, y
ocupar el sitio que iban dejando jugó rápidamente:
los perdedores, sino que, sonriente,
le hablaba al referido adolescente : 2•... PXP
-¿Qué hubiera hecho usted si -Los peones comen por la dia-
su adversario le hubiese comido el gonal -respondió gallardamente
peón? Sergi, y jugó:
-Los peones se mueven por la
vertical y comen por la diagonal. 3. PXP
Si se come el núo, le como el su,yo
-contestó el muchacho. A lo que siguió:
Ganó la partida, y comenzó otra.
-¿No cree que es un poco pre- 3•... DST, mate.
9
Diagrama núm. 1 7•... AXD
-Nuestros antepasados también
sabían jugar sin la dama - repuso el
hombre:
8. AXP+
-¿Tuvo antepasados? Pues cret
que usted era un antepasado -ex-
clamó Sergei, jugando:
8.... RZR
-Me refería a nuestros antepasa-
dos ajedrecistas -contestó el vie-
jo, y:
9. CSD, mate.
El joven de la gorra gris se quedó Diagrama núm. 2
suspenso un momento, transcurrido
el cual hizo girar el tablero, para
jugar las negras, y explicó:
-con objeto de abreviar tiempo.
Y empezaron la segunda partida:
l. P4R P4R
Z. C3AR C3AD
3. A4A P3TR
4. C3A P3D
S. P4D ASC
-Es prematuro intentar la cla-
vada -le dijo el anciano, e hizo el
movimiento:
6. PXP
-¡Trabazón y ataque simultá- - ¡Mate de Legal! - prosiguió el
neos 1 -exclamó Sergei, y, satisfe- viejo enjuto de carnes.
cho, contestó: Silenciosos, los presentes mante-
nían fija la mirada en el tablero. Y
6.... CXP el joven de la gorra gris respondió
con seriedad:
La respuesta fue: -Es una combinación muy bo-
nita. ¿Cómo ha podido calcularla
7. cxc tan pronto en el tablero?
- No ha sido necesario hacerlo
-Abuelo, descuida la dama -dijo -le contestó el hombre-. Pues
el adolescente, con tono reproba- hace poco menos de doscientos aftos
dor-. Pero no le dejo volver atrás que se conoce. Se llama «mate de
la jugada. - Y tomó rápidamente la Legah, nombre del ajedrecista fran-
referida pieza : cés que la desarrolló. También es
10
posible en otro orden de rnovi- 5•... , C XC; pero a Legal se le pue-
mientos: de perdonar este descuido. pues
contaba ochenta y cinco años de
l. P4R P4R edad cuando jugó esta partida.
.2. A4A P3D -Abuelo, ¿conoce usted muchos
J, CJAR C3AD artificios como ése? -preguntó uno
4. CJA A5C de los circunstantes, que era estu-
5. CXP AXD diante y se llamaba Nikolai.
6. AXP+ R.ZR -Bastantes.
7. CSD, mate. -Pues nosotros no sabemos nin-
guno. ¿Querría usted darnos a co-
·-·.-\sí ganó Legal a su compa- nocer algunos?
triota Saint-Brie, en 1787. Es cierto - Con mucho gusto -contestó el
que pudo haber perdido, si su ad- avellanado viejo, quien no era otro
versario hubiese respondido con sino el autor de este libro.
EL (APETITOSO• PEON
11
que, tras lo cual se comería mi ca- la doble amenaza, los dos peones, el
ballo. Siguió: jaque. Y, de pronto ... Si hubiéra-
mos jugado una segunda partida, se-
6. TIA DXPR+ guro que yo la habrfa ganado. Por
lo que le pregunté con timidez si
-Aqw no fue posible mover el quería que jugásemos otra; pero el
rey ni cubrirse con la dama. Hubo
que hacerlo con el alfil: referido literato no quiso. Al pare-
cer, tuvo bastante con aquélla. Me
7. AlR C6A, mate. respondió: • Es mejor que analices
esta partida, Boris. Trata de hallar
-Tanta fue la sorpresa, que me los errores que has cometido. Ca-
puse colorado y no pude pronunciar pablanca decía que se puede sacar
una palabra. ¿Cómo pudo suceder? más provecho de una partida per-
Lo tenía yo todo tan bien planeado : dida que de cien ganadas... •
12
¿POR QUE SE HACE LA JUGADA PHR7
-Decís que el movimiento P3TR Diagrama núm. 4
es simplemente una pérdida de
tiempo en la apertura, y que, a
veces, puede ser la causa de perder
la partida. Lo comprendo perfecta-
mente. Pero ¿qué hacer7 Forzosa-
mente hay que mover éste peón si
no se quiere perder en seguida. Veá-
moslo: l, P4R, P4R; 2. ClAR,
C3AD; 3. A4A; tras esto, inténtese
jugar 3• .. ., C3A en lugar de 3....,
P3TR. ¿Qué ocurrirá?
-¿Qué puede ocurrir? -pregun-
tó Nikolai.
-Pues las blancas jugarán 4.
ese, tras lo cual no se ve ninguna
posibilidad de defender el peón
2AR.
- ¿Y por qué no7 - repuso Ni-
kolai-. Se puede contestar con 4.
.. ., P4D. dos movimientos seguidos con la
-¡ ?ruébalol misma pieza y deshacen la· posición
Y Nikolai jugó 4. . .. , P4D, a lo de las negras. Por eso es necesario
que Sergei replicó sin vacilar S. el movimiento P3TR.
P X P; luego, siguió S• ... , C X P; 6. - No -repuso Nikolai-; ha sido
CXPA, RXC; 7. D3A+, DlA; 8. un error mío; al darme jaque, no
AXC+, RIR; 9. AxC+, PxA. tenía que haberme cubierto con la
- ¿Cuál ha sido el resultado? Has dama, sino haber retirado el rey
perdido un peón y el enroque, y te a la casilla 3R.
has quedado con la posición desba- -¿Adónde? ¿A la casilla 3R?
ratada. He aquí el sentido de esta ¿Aquí?
combinación: las blancas efectúan Ver diagrama núm. 5.
REGATES PELIGROSOS
- ¿Aquf? -insistió Sergei. -No permanecerá mucho t iempo
- Sí; aquí. en su casa, porque 11. P X P, RlR;
- Bueno; defiéndete: 8. ClA, 12. 0·0·0, A3R; 13. C XC, A XC;
C3-SC; 9. D4R, P3A; 10. P4D, D3D; 14. TXA, I•xT; lS. ASC+ .
ll . P4A, P4CD; 12. PAXP, DID; Ver diagrama núm. 7.
13. 0-0. ¡Ahora estás perdido! El
error ha .sido retirar la dama a la -Ha sido un simple descuido.
casilla ID. Tenfa que haber hecho otra jugada
-respondió Nikolai, y, dirigiéndo-
Ver diagrama núm. 6. se a mí-: Dfgame: ¿tienen defensa
- No me he dado cuenta - res- las negras en esta posición? Pues
pondió Nikolai-:-, aunque esto no llevan una pieza de ventaja.
tiene importancia, pues podfa ha· Le contesté:
bcr jugado 8. . .. , C3-2R; 9. P4D, -Posiblemente la tengan en Jos li-
PlA; 10. A5CR, R2D. Envío el rey bros de ajedrez, pero no en el ta·
a casa, y me quedo con una pieza blero. La primera vez, has dicho
de ventaja. que no te habías dado cuenta; la
13
Diagrama núm. 5 Diagrama núm. 7
14
Diagrama núm. 8 en esta misma fase de la partida,
que perdió sin que le diese tiempo
a efectuar el enroque. Pero, en la
presente partida, prefirió enrocar.
10•... 0-0
11. P3AD ClC
12. D41' AXC
13.P XA D3D
14. P3D C4D
lS. A3A A3C
16. D4TR AlA
17. TlD P4AR
18. AXC+ PXA
19. ClD T3A
20. R1A PSR
21. P4D T3C
22. DST T4C
23. D4T D3T+
24. P4AD
-¿Y qué? -exclamó Sergei-.
Como anteriormente, las negras han Diagrama núm. 9
perdido un peón. ¿Qué han logrado?
Aqul no aparece combinación n.i ce-
lada por ningún sitio.
Le contesté:
-La combinación se realiz6 en
la partida Steinitz-Chigorin, del
match de 1892, para el campeonato
del mundo:
l. P4R P4R
l. C3AR C3AD
3. A4A C3A
4. ese P4D
S. PXP C4TD
6. ASC+ P3A
1. PXP PXP
8. AlR P3TR
9. C3TR
15
pueden jugar dos veces seguidas una de ventaja para las negras. Esto no
misma pieza. ¿No es así? quiere decir que las blancas pierdan.
-Sin duda, pueden permitirse Por lo demás, han transcurrido se-
ese lujo, particularmente si con ello senta años desde la época de Chigo-
atacan el rey contrario. Por lo me- rin, y, en este tiempo, los ajedrecis-
nos, retiran el caballo, si bien re- tas han ideado algo nuevo en be·
sulta que éste ha sido movido de acá neficio de las negra' •.
para allá, lo cual supone un tiempo
SACRIFICIO APARENTE
16
-Estos sacrificios aparentes se Di11grama núm. 12
pueden hacer también en otras aper-
turas:
l . P4R P4R
Z. C3AR C3AD
3. A4A ClA
4•. C3A CXP
S. CXC P4D.
17
2
-No hay otra solución que en- l. P4D CJAR
tregar la dama, pues cualquier otra 2. P4AD P3R
jugada no es valedera según las re- 3, C3AD ASC
glas del juego en el ajedrez. 4. DlA P4AD
S. PXP AXP
8•... AXD+ 6. ASC
9. RXA RxA.
Ver diagrama núm. 14.
-Resultado: las blancas han ga. -El alfil ha llevado a efecto la
nado un peón, y las negras, un ca- clavada; mas, de pronto...
ballo.
-Pero esto no es debido a que 6.... AXP+
las blancas han trabado el caballo 7. RXA CSC+
-dijo Sergei.
8. RIR DXA.
-Desde luego; lo que ocurre es -Analicemos otros ejemplos:
que han sobreestimado el valor de
la clavada. Si detrás del caballo se l. P4R P4R
hubiera encontrado el rey, realmen- 2. C3AD C3AR
te hubiese sido efectiva. Pero, como 3. P3D A4A
se trata de la dama, la negra no 4. ASC P3D
es más valiosa que la blanca. Gene- S. CRlR AXP+
ralmente, el movimiento 4. A5C es 6. RXA CSC+
bueno; el error está en 6. ex P. 1 • ... DXA.
-¿Puede ocurrir que pierda uno
la partida si realiza el movimiento l. P4R P4R
4. A5C? 2. C3AR C3AR
-¡Ya lo creo! Esta combinación 3. A4A CXP
se da en muchas aperturas, tanto 4. C3A ex e
abiertas como cerradas. He aquí una S. PDXC P3D
de ellas· en una partida de la semifi- 6. 0-0 ASC
nal del campeonato de la U.R.S.S.,
de 1929: Diagrama núm. 15
Dia~rama núm. 14
7. AXP+ RXA
8. CXP+.
18
UN MENTIS AL CABO DE TRESCIENTOS A¡qOS
19
Diagrama núm. 17 contesté: c¡Usted acaba de r~batir
un :~ combinación de ataque que fue
ide:~da hace trescientos años por el
célebre ajedrecista italiano Grecoh
Y el muchacho exclamó: c¡Hombre,
no me creía tan capaz!• Coloqué de
nuevo las piezas y le mostré su ge-
ni:~l jugada. •Entonces, usted ha ju-
gado según lo que indica la teoría
- respondió mi joven adversario-.
Dfgame: ¿se puede d:1r j:~que sin
guiarse de lo que aconseja la teo-
rfa7 Pues a mí me gusta mucho
dar jaques.• Y jugó las blancas: 13.
DlT+ . Aquí, las negras pierden la
dama. Tras esto, en poco estuvo
que yo soltase un improperio, por el
coraje que me causó; pero !.uego
me alegré de esta incidencia, porque
el ataque de Greco acababa de pa-
una pieza dos jugadas después. Le sar por una de las pruebas más di-
dije: cUsted ha realizado una ju- fíciles de toda su e.xistencia en .¡que-
gada sorprendente al no defender na partida. ¿Dónde cometen las ne-
su dama, sino atacar la mía. • gras el error7 En lugar de tomar la
c¿Cuándo ha sido7 -respondió el torre deben continuar 10.... , P4D;
muchacho-. No me acuerdo.• Le 11. AXP, 0-0; 12. AxP+, RIT.
ttGIUOCO FORTISSIMO•
20
fil a la casilla 3CD no hace más cómo salvar su dama, suceden acon-
que favorecer la posición de las tecimientos decisivos.
blancas en la apertura de «juego a
paso lento•. Los peones centrales 11 • ... A7A+
blancos avanzan rápidamente y se 12. RlA P3AD
apoderan de las casillas del frente B.Axe D3e
de las negras: 14. ese TIA
15. DST.
l. P4R P4R
2. CJAR eJAD No hay posibilidad de evitar el
J. A4A A4A mate; mientras, los audaces peones
4. PJAD eJA blancos han salido incólumes de la
S. P4D PXP lucha.
6. PXP AJe
-Como habéis podido comprobar,
-¡Adelante! -grita el PD. nuestros antepasados ajedrecistas te-
nían un singular concepto del cjue-
7. PSD elR go a paso lento•. Veamos lo que
sucede en el giuoco pianissimo:
-¡Al ataque! -le responde el PR. l. P4R P4R
8. PSR esR 2. C3AR C3AD
3. A4A A4A
Amenaza tomar el peón 2A con 4. P3D CRlR
una de las dos piezas. s. ese 0-0
--Quizá sería conveniente vol- 6. DST P3TR
verme al escaque 3R -dice el PR. 7. CXP DIR
-Los peones no retroceden ~on 8. CxPT+ RlT
testa el PD. 9. C1A+ RIC
10. D8T, mate.
9. P6D exPlA
10. DlR D1agrama núm. 20
exT
11. ASeRI
Mientras las negras piensan en
Diagrama núm. 19
21
veniente es 4. . ••, CJAR o 4. .. ., Le contesté:
PJD. -Hace muchos años que este des-
-¿No podrían las blancas jugar cubrimiento fue rebatido por el des-
fortissimo un movimiento antes? tacado ajedrecista inglés Blackburne.
-preguntó Sergei.
-¡Naturalmente! Fijaos: 7• .. . , P3DI
8. DXT DST
9. 0-0 C3A
4. AXP+ RXA 10. P3AD ese
S. CxP+ ex e 11. P3TR AXP+
6. DST+ PJCR 12. RlT A4AR
7. DXC 13. DXT DxP+
\4, PXD AXP, mate.
Diagrama núm. 21
Ver diagrama núm. 22.
-Todo eso está muy bien -re-
puso Sergei-; pero no me habéis
convencido con esta combinación de
Blackburne. Primero, no se debía
haber tomado la torre, sino jugar
8. DSD+, A3R; 9, DXPC, y las
blancas hubiesen logrado comer t res
peones y dar cuatro veces jaque
por un caballo.
-Y, por si fuese poco, continua-
mos 9. . .. , TIC y, luego, 10. . ..,
DST, con lo que se llega, más o me-
nos, al resultado de la combinación
de Blac\tburne.
-Segundo, ¿por qué hacer el mo-
vimiento 10. P3AD7 Aquí es nece-
sario jugar 10. P4D o 10. D8D, y
aún mejor si se hacen estos dos
-¿Y qué se ha obtenido a cam- movimientos. En fin, tengo que com-
bio de la pieza sacrificada? -pre- probarlo.
!JUntó Nikolai. -En esta situación no hay nada
-Dos peones y tres jaques la que comprobar -respondió Niko-
compensan suficientemente --con- lai-. Porque no se deben sacrifi-
testó Sergei-; además, amenazo el car precipitadamente dos piezas en
alfil y la torre a un tiempo. ¿Qué la apertura; cuanto más que las ne-
harás? f!ras no han alterado los principios
-Es cierto, ¿qué hacer7 -res- de la misma. .
pondió Nikolai, y a mí-: ¿Es po- -De todos modos, lo compro-
sible que Sergei haya descubierto un baré. Acuérdate del consejo de Ca-
nuevo fortissimo1 pablanca.
22
duque invitaron a Morphy a su 13.... TXT
palco. o~conozco si la actuación de 14. TlD D3R
Jos artistas fue brillante; pero sé
que, en el referido palco, se creó
una obra inmortal.
23
-si no hubiera sido por esta p:.r- metido por el conde y el duque?
tida, nadie hubiese conocido al con- ¿Por qué perdieron tan pronto la
de Isouard, cuyo nombre conocen partida?
millones de aficionados al ajedrez. -Creo que se precipitaron al que-
De esta manera, un genio inmortali- rer clavar el caballo a la tercera
zó a un conde. jugada. Era mejor el movimiento 3.
-¿En qué consiste el error co- .. ·• CZD o 3 . ... , C3AR.
LA PEOR JUGADA
24
-¿Hay otra partida todavía más -Seguro que no hay otra partida
corta? más corta que ésta.
-En la penúltima ronda del tor- -En la partida X. - Ebralidze,
de uno de los campeonatos de Geor-
neo de Asia Central, de 1924, Bek- gia, las blancas jugaron l. P4R.
Murat Emir Berdi (a quien se le Transcurría el tiempo, pero Archil
conoce más por Bekki Berdiev) lle- Ebralidze no efectuaba su jugada
vaba a su inmediato adversario, correspondiente; tenía las manos
Brenda, dos puntos de ventaja. cruzadas y apoyadas contra su
pecho y puesta la mirada en su ad-
versario. Luego, suspiró profunda-
Emir Berdl - Brenda mente, escribió en su hoja eme rin-
do• y la firmó. Su adversario le
l. P4R P4R preguntó: c¿Qué sucede, Archil?
¿Por qué no quiere jugar?• A lo
cLa posición es equivalente -le que éste contestó: cPorque mi opo-
dijo el ajedrecista turcomano a su nente va sin afeitar, y me causa
oponente--. LConviene usted en que desagrado mirarle•
lo dejemos en tablas?, -Sí -intervino Sergei-; el aje-
drez es signo de cultura. El juez ár-
Luego de haberlo pensado quin- bitro de la competición debía ha-
ce minutos, Brenda contestó: cCon- berle puesto un cero al adversario
venido.» de Ebralidze.
Duz-Jotimlrskl -Autor
l. P4R P4R
2. P4AR PXP
3. C3AR P4CR
4. A4A PSC
S. CSR DST+
6. RIA OTR
26
10. RlR D7C hizo maquinalmente este movimien-
11. ClA. to, al que procedió 10•... , D X P+;
11. RlA, DXP+; ll. A3R, DXA,
Ver diagrama núm. 26. y las blancas abandonaron.
Y Duz-Jotimirski se dirigió hacia Mientras yo contemplaba mi
el tablero sigúiente. posición y no veía la manera de
Monov se acercó a m!: defenderme de ll. AlA, vino Duz-
e-Parece que te ha copado la Jotimirski; por él supe que esta aper-
dama.• tura se llama gambito de Salvio-Sil-
Tras lo cual se volvió a su ta- berschmidt, y que la celada CZAR-
blero y, al acercarse el maestro, ju- AlAR hace casi un siglo que se
gó 9. P3CR, a lo que sucedió 9 • .. ., conoce.
DlR. Monov se desconcertó y no De esta manera, Monov y yo per-
analizó la posición; sólo se acordó dimos. Nos supo mal, porque po-
de que las blancas habían jugado díamos haber realizado dos buenas
10. RlR en mi tablero, por lo que partidas.
V. LENSKI - 0. LARF.NA
•No hace mucho que tuvimos una zio, apertura al uso en el siglo an-
grata sorpresa: en la redacción de terior. Es uno de los pocos casos
la revista La Ilustración Universal en que las blancas sacrifican al co·
recibimos unas partidas de ajedrez, mienzo de la partida una pieza en
jugadas cuarenta años atrás entre provecho del ataque, y lo hacen sin
los personajes de E.ugenio One- probabilidad de recuperarla en se-
gllin, es decir, entre Vladimir Lens- guida o de dar mate.
ki y Oiga Larina... Dichas partidas
fueron anotadas por Oiga... En to- Diagrama núm. 27
das ellas se da mate a Lenski. .. • •.
Esto lo escribió Schumov, que fi-
guraba entre los primeros maestros
de ajedrez rusos, en uno de los nú-
meros de La Ilustración Universal
de 1870. Todo el mudo sabe que
Vladimir y Oiga jugaban al ajedrez.
Pero lo interesante del asunto es
que Schumov publicó una de las
partidas que jugaron los dos refe-
ridos personajes.
Lenskl - Larlna
l. P4R P4R
l. P4AR PXP
3. C3AR P4CR
4. A4A PSC
S. 0-0. PXC 6. P4D
Lenski juega el gambito de Mu- Artificio en el que Olga no cae.
27
En esta posición, comúnmente, las
blancas toman el peón con la dama Diagrama núm. 28
y, después del movimiento P4D, to-
man el peón 5AR con el alfil, con
lo que inician un fuerte ataque
contra el rey negro por la vertical
AR. Si Oiga hubiera conocido la
teoría, hubiese jugado 6•..., C3AD;
peto optó por comer un peón que
no le servía para nada.
6.... PXP
7. AXP+I RXA
8. DST+ RlR
9. TXP
El rey negro está indefenso y las
dos piezas de ventaja no mejoran la
posición de Oiga.
9.... ClAR
10. TXC DIR
11. D4T P3D «Al advertir que había tomado
ll. PSR PXP su propia torre -prosigue Schu-
13.PXP RlD mov-, Lenski quiso volver atrás
la jugada; pero Oiga no se lo per-
Distraído, Lenski jugó: mitió ...•
14. PXT71 ¡Se da mate en seis jugadas!
28
v la negras se encontrarían en una 6. exe PXC
situación sin salida, porque no pue- 7. DST.
den defender el escaque PAR y pier-
den una pieza, por lo menos: 6•.. ., Diagrama núm. JO
C3T; 7. A XC, 0·0. En esta partida,
Shilin contestó con S. . . ., CJC y
le costó sólo un peón, aunque per-
dió la partida.
En el campeonato de Moscú de
1956 actuó brillantemente el joven
ajedrecista Libersohn, que actual·
mente es maestro internacional. En
la semifinal de dicho campeonato,
logró el número de puntos suficien-
tes para el nombramiento de maes-
tro y alcanzó el segundo puesto en
la clasificación general. Cuando
sólo hacía un año que le sucedió un
caso inaudito:
Estrln • Libersohn
Las negras se ven forzadas a re-
l. P4R P4R plicar 7. ..., P3eR, tras lo cual pier-
2. C3AR e3AD den el peón 4R y su posición es
J. A4A A2R poco prometedora. Tenían que ha-
4. P4D PJD ber jugado S•..., P X P en lugar de
S. PXP CXP S.... , CXP.
29
Diagrama núm. 11 esperaba era poder transformase en
dama.
-Entonces, veamos otra partida:
l. P4R P4R
2. P4AR Px P
3. A4A DST+
4. P3CR PXP
S. C3AR P7C+
6. CXD PXT=D+
- ¡Tras seis jugadas, el peón se ha
convertido en dama l 1Esto sí que es
gordo! ¿Cómo ha podido suceder?
- La primera imprecisión ha sido
jugar 3. A4A en lugar de 3. CJAR.
Aunque también se puede efectuar
el movimiento 3. A4A, con objeto
de dar luego jaque con la dama y
situar el caballo en la casiUa JAR.
debfan haber situado la dama en el Pero no creo que estos tres movien-
escaque 2D, sino hacer frente a este tos sean efectivos. La segunda im-
audaz peón, que sólo e.s peraba la precisión ha sido la jugada 4. PJCR;
oportunidad de poder dar mate. en este caso no hay otra salida que
-No -repuso Sergei-; lo que mover el rey a la casilla lA.
Schleehter - Perlis
1911
l. P4D P4D
l. P4AD P3AD
3. C3AR A4A
4. D3C D3C
S. PXP DXD
6. PXD AXC
1. PXP ASR
8. TXPll tablero. Lo inesperado y sutil de esta
combinación consiste en que el peón
Las negras tienen que abandonar. blanco puede transformase en da-
Pues a 8•. .., TXT sucede 9. P7A!I ma, sea en el escaque 8C o en el
y aparece una dama blanca en el BA. Las negras pueden defender
30
ambas casillas, aunque no a un JO. D X P, las negras replican JO. ... ,
tiempo. P4A y, tras retirar la dama, el alfil
Las blancas logran crear esta si· estarla atrapado.
tuación con la jugada 8. T X Pll
Perlis no permitió que Schlechter 1()• ... PXP
llevase a término esta combinación, ll.TXP+ A2R
pues tras examinar la situación des- 12. DlR P4A
pués de 7, PXP, jugó 7.... , CXP, 13. A2D P4TD
con lo que evitó la pérdida de un 14. P4TD P5A
peón y apenas faltó nada para que 15. PXP PXA
lograse hacer tablas. 16. AXP
-Ahora -dijo Nikolai- recuer·
do haber visto esta posición en un Diagrama núm. 33
pequeño e interesante libro •.
-¿Qué ha facilitado el desarrollo
de esta combinación - preguntó
SergeF- . ¿Dónde se han equivocado
las negras?
--creo que han movido prematu·
ramente el alfil. Aunque esto se po·
dla haber remediado si se tomaba
el caballo antes de cambiar· las da·
mas. Transcurridos quince años,
Aliojin (Aiekhine) consiguió realizar
esta idea de Schlechter, aunque en
una posición un poco distinta.
Carranza • AlekbJne
Buenos Aires, 1927
l. P4R P4R
2. C3AR C3AD Aquí, para ganar es suficiente 16.
3. A5C P3TD ..., TXA; 17. TXT, PXP; 18.
4. A4T C3A TXA+, R1A. Pero Alekhine qui·
5. 0-0 P3D so más.
6. P4D A2D
7. TlR P4CD 16. . .. PXP!
8. A3C CXPD 17. AXD TXT
9. cxc PXC 18. TXA+ R1A
10. P5R
Y las blancas abandonaron, pues
Las blancas eluden el escollo. Si el peón negro se convierte en dama.
31
Esta apertura, gambito siciliano, Diagrama núm. 34
es usada a veces por ajedrecistas de
estilo austero, para eludir la manio-
bra de posición, propia de muchas
variantes de la defensa siciliana. Su
sentido fundamental es desviar el
peón AD negro hacia el flanco y for-
mar un sólido centro.
J. P4D P4R
4. PXP CJAD
S. CJAR CR2R
6. A4AR CJC
1. A3C D4T
8• DSD P6C+
Ver diagrama núm. 34.
9. DXD P7C
10. D3A
Parece que las blancas llegan a
tiempo para eliminar el audaz peón; Si a 8• ... , P6C+ las blancas hu-
pero las negras disponen de más bieran contestado con 9. CDZD,
recursos. también habrían perdido, porque 9.
. .. , D6A; 10. TIA, A6T; ll. D X PC,
10.... ASC DxD; 12. CXD, AXT; B. CXA,
U.DxA CXD y las negras ganan una calidad.
33
3
Diagram11 núm. 17 situar en el escaque SR, ocupaao
por la torre blanca. Pero su intui-
ción ajedrecista le sugirió que su
alfil de casillas blancas estaría in-
cómodo en aquel escaque negro.
por lo que, tras dar vueltas a la in-
trusa pieza entre los dedos y mirar-
la reprobadamcnte, la volvió a su
sitio y ... abandonó la partida. Pero
lo más sorprendente de esta inci-
dencia es su final: esta inconcebi-
ble equivocación no desmoralizó a
Korchnoi, que ganó las tres últimas
partidas y conquistó el título de
campeón.
-En el torneo que se celebró en
Budapest en 1926 -proseguí rela-
tando-, y después de la sexta ron-
da, ocupaba el primer puesto el bel-
blero en que exhibfa la partida. En ga E. Colle. La partida jugada entre
la sala estalló la risa general y los Steiner y él en la séptima ronda
circunstantes exclamaron: c¡Otra llegó a la siguiente situación:
vez se han confundido los anuncia-
dores! ¡Que se muestre la última Diagrama núm. 19
jugada de las negrasb Pero esta ju-
gada no apareció en el referido ta-
blero. Korchnoi había abandonado
y nada más.
-Quizá acusaba falta de tiempo.
-¡Qué val Todavía le quedaban
sesenta minutos de reserva. Luego,
en el proscenio apareció P. A. Ro-
manovski, juez árbitro de la com-
petición, y lo aclaró. Resulta que
Korchnoi cogió el alfil 3T y lo quiso
Diagrama núm. 18
34
Tras esto, Steiner sacrificó una to- Diagrama núm. 40
rre, con objeto de llevar a cabo la
siguiente combinación:
6. TXP PxT
7. AXP 0-0
8. TXA TxA
9. TXD
Y Colle se rindió unas jugadas
después. La situación de las blancas
se hubiera complicado sensiblemen-
te si el rey hubiese sido puesto en
el escaque que le correspondía.
Pues, tras 8. T X A, las negras ha-
brían continuado 8. . .., D X T; 9.
AXD, TSA++.
-Todo lo cual se aclaró después
de la partida; pero la protesta de
Colle no fue atendida. Esta circuns- tavo puesto en la clasificación ¡Po-
tancia le causó tanta amargura que ned atención en las piezas que pue-
jugó mal las restantes partidas y dan caerse del tablero y colocadlas
tuvo que compartir el séptimo y oc- en el sitio que les corresponde!
35
El gran maesfto Maroczy, juez que 8 • ... , T8D+, 9. RlC, TIC+.
árbitro de la competición, paró el Y las blancas se rindieron.
reloj y .situó las piezas blancas en
la posición inicial. La partida pro- Diagrama núm. 42
siguió (después de l . . .. , T X T) y
finalizó en esta elegante combina-
ción:
l. TXT AxA
J. TXA eso
Amenaza jaque al rey y a la dama.
4. D4R C6A+
S. KIT TlD
6. C4A C4C
7. DlR P4R
8. DxP.
Aquí, Przepiorka cayó en el lazo:
no se puede tomar este peón, por-
MATE A LA DAMA
Cibaud - Lazard
l. P4D C3AR 5. PxC DST+
l. ClD P4R 6. P3C DXP++.
3. PXP ese He aquí otra partida sobre el mis-
4. P3TR C6R
mo tema, perteneciente también al
La dama no puede escapar, pues campeonato de Francia, de 1927,
si el peón toma el caballo, celebrado en Chamonix.
36
Che roo - Polikier Otra partida sobre el tema de
cmate a la dama. que comenzó con
l. P4D P3CR maniobras lentas y finalizó en una
:z.P4R A2C sorprendente explosión combina-
3. C3AR P3D toria:
4. CJA C:ZD
S. A4AD eRJA Head - Gatdiner
6. PSR PXP Match Sussex- Kent
7. PXP e4T
8. AxP+ RXA l. e3AR P4D
9. CSC+ 2. PJR e3AR
3. P3eD P3R
Diagrama núm. 44 4. A2C A2R
S. e3A eDlD
6. C:ZR 0-0
7. eJe P4A
8. P4A P3eD
9. A3D A2C
IO. TlAD TIA
u. ese TIR
12. RIA P3e
11. P4TR P4TR
14. AXP PXA
1.5. exPR.
Diagrama núm. 45
l. P4D eJAR
2. C3AD P3D Si a 14. A X P las negras no hu-
3. C3A P3eR bieran tomado el alfil, sino defen-
4. P4R A2C dido el escaque 2AR con 14. . ..,
S. A4AD eD2D? TIA, la combinación se hubiese lle-
6. PSR vado a término con el sacrificio de
la dama: 15. D X PI, e X D; 16. A7T
etcétera. y jaque mate.
37
1\JATE EN LAS TRES VARIANTES . ..
38
EL ALFIL SEXAGESIMO PRIMERO
- En una ocasión jugué una par- peón SR no tiene defensa; me será
tida amistosa con el maestro Rud- fácil ganarlo.
niev. En aquel entonces, Rusia te-
nía unos doce o quince maestros 6•... AXP
de ajedrez. Y, aunque Rudniev no 7. DlA CRlR
era el mejor entre ellos, suponía
para mi un gran honor jugar una -con e.'>te movimiento, pensaba
partida con él. Es de suponer que yo cont.i nuar CJC y tomar el peón
yo temía este encuentro, aunque, 5R. Pero mi adversario jugó.
como me había aprendido muchas
variantes de la defensa francesa y 8. P4CD.
sabía que Rudniev no estaba muy
fuerte en las aperturas, estaba con- Diagrama núm. 48
vencido de que a él le costaría tra-
bajo vencerme.
Rudaiev -Autor
l. P4R P3R
l. P4D P4D
3. PSR
- ¡Esta jugada es errónea! -ex-
clamé para mis adentros (si bien no
lo era ni mucho menos}-. Ahora,
forzaré el centro y le atacaré el
peón SR.
3. ... P4AD
4. PJAD C3AD
S. C3AR D3C
- ¡Ayl No hubo otra solución que
- El peón 4D es atacado por tres entregar el alfil por dos peones. Mi
elementos y está defendido por otros ataque fracasó y tuve que rendirme
tantos -pensé-. No dispone de unas jugadas después. cNo se aflija
más fuerzas con que defenderlo. -dijo Rudniev-, que en esta si-
Efectuaré el movimiento CR2R y, tuación todo ajedrecista opta por
luego, atacaré el peón SR o el 4D jugar CR2R, y todos pierden el
con este caballo, según lo exijan las alfil. De esta manera, llevo gana-
circunstancias en mis casillas JCR dos sesenta alfiles desde que jue-
o 4AR. go al ajedrez., Le pregunté: c¿In-
cluido el que acaba de ganarmeh
6. PX P El maestro se quedó pensando un
instante, transcurrido el cual con-
- ¡Otro error! -me dije (realmen- testó: •Con el suyo suman sesenta
te, esta jugada es bastante deficien- y uno. Estoy convencido de que us-
te; en esta situación se requiere ted también capturará alfiles en po-
el movimiento 6. AJD y, si las ne- siciones análogas a ésta. Pues que
gras pretenden ganar el peón me- aquí todos jueguen CR2R es un fe-
diante 6. ... , PXP, procede 7. PXP, nómeno psicológico., Y tuvo razón.
CXP; 8. CxC, DXC; 9. ASCD+, En el transcurso de unos cuarenta
y las negras pierden la dama)-. El años llevo capturados unos treinta
39
alfiles en el escaque A4D de las Diagrama mím. 49
negras.
-No se comprende --dijo Ser-
gei- cómo ustedes juegan atenién-
dose estrictamente a los principios
del juego y pierdan el alfil a la oc-
tava jugada.
-suele ocurrir que una persona
va por la calle y es atropellada por
un vehículo, aun observando todas
las reglas de la circulación -le res-
pondí.
-Entonces, ¿qué hay que hacer
para no ser atropellado?
-Mirar en rededor.
-¿Puede usted concretar más1
-Sí; es imprescindible asegurar
la posición del aUil con el movi-
mient~ P4T y, luego, atacar el peón
SR. Os voy a mostrar otro malo-
grado intento de ganar ese peón:
Parece que las blancas han perdi-
l. P4R do el peón; mas, de pronto, sucede:
P3R
Z. P4D P4D
3. e3AD ASe 9, exP+! AXe
4. P.SR P4AD 10. DxA+ .
5. D4e RIA
6. AlD e3AD Si las negras juegan primeramente
8. .. ., A X e para obstaculizar esta
Ver diagrama núm. 49. combinación, las blancas la llevan
-Las negras intentan la ganan- a término por 9. A X A, e X P; 10.
cia del peón 5R, y las blancas frus- exP+l, Axe; 11. D4e+, DlR;
tran este intento mediante la si- 12. DXD+ , RXD; 13. Axe. En
guiente combinación: los dos casos, las blancas tienen
mejor posición que las negras, aun
1. eRlR PXP cuando no exista desequilibrio ma-
8. exp CXP terial.
SI NO ES UNO ES OTRO
- No llego a comprender el sen- las negras en la apectura en el que
tido de la defensa francesa -dijo sucumben muchas veces antes de
Scrgei-. Usted nos habla ele que enrocar. En uno de los análisis que
es necesario mover los peones de venimos haciendo, efectuaste el mo-
modo que dominen el centro y no vimiento P3TR, con objeto de im-
obstaculicen el movimiento de las pedir el salto 5CR del caballo blan-
piezas. ¿Qué pretenden las negras co y asegurar el peón 2AR. Por eso,
en replicar a 1. P4R l. . .., P3R1 surgió la idea de la defensa fran-
Pues este peón no ocupa su corres- cesa, para defender este peón y cor-
pondiente casilla central y obstacu- tar de raíz e l ataque de las blancas
liza además la salida del alfil de contra el rey negro.
casillas blancas. -¿Cómo reaccionan las blancas a
-2AR es el punto vulnerable de esta idea?
40
-Como encuentran dificultades l. P4R P3R
para llerar hasta el peón 2AR del 2. P4D P4D
adversario, suelen a menudo atacar 3. CJAD A.SC
el peón 2CR. Y, si las negras no 4. PXP DXP
juegan con precisión, estos ataques 5. D4C C2R
dan, a veces, resultados positivos. 6. DXPC D.SR+.
l. P4R PJR Diagrama núm. 51
2. P4D P4D
3. C3AD ASC
4. P3TD AXC+
S. PXA P4AD
6. D4C PXPR
41
4. PSR P4AD Diagrama 'IÚm. 52
S. D4C ClR
6. DXPC TIC
7. DXPT
Las blancas han ganado dos peo-
nes, y las negras pasan al contraata-
que:
1. ... PXP
8. PlTD D4T
9. TIC PXC
10. PXA
42
go enrocar. No obstante, las blan- movimientos - les dije-. Veamos
cas se les adelantan en el desenvol- esta partida:
vimiento de las piezas. Era más
oportuno aprovechar la prematura Dlestl • Rossipall
salida de la dama blanca y continuar 1900
5 • ..., e X e; 6. D X e , e2D, con mi-
ras al movimiento C3A. l. P4R P4R
Z. e3AR e3AD
6. PXP D4T+ 3. P4D PXP
7. A2D DXPR 4. exp
8. 0-0-0 ex e
Es la típica apertura holandesa.
Y as(, Tartakower ganó una pie- ex e
za; sabía que las blancas podían re- 4....
cuperarla, por supuesto, aunque 5. Dxe C2R
esto le ufrecCa la posibilidad de en- 6. A4AD P3AD
rocar a tiempo. Mas, de pronto, su- 7. e3A P3D
cedió algo inconcebible: 8. A5CR D3C
9. DXPD DXPe
9. DBD+!l 10. TID Dxe+
Las negras han tomado el caballo
Diagrama núm. 53 dando jaque, y se apoderarán de
otra pieza; pero las blancas amena·
zan con dar mate en la casiUa SD.
ll. A2D DXA
Diagrama núm. 54
43
-Me gusta m;{s la otra combina· 6. A.SCR PXP
ción -contestó Sergei. 1. CXP DlR
-¿Por qué7 Poco se llevan una 8. 0-0-0 D XC
de la otra.
-En la anterior, el rey negro tie- Diagrama núm. 55
ne dos posibi1idades de poder re·
tirarse; en ésta, sólo tiene una. Por
otro lado, aqul no hay necesidad
de sacrificar la dama, pues la juga·
da ll. AST es suficiente para que
las negras se rindan.
-¡Estás equivocado! Porque a
12. AST procede ll. . .. , P3A, tras
lo cual es posible que tengan que
rendirse las blancas. Quiero mos·
traros otra combinación sobre el
mismo asunto que se produjo en
una de las partidas de una sesión
de simultáneas dada por D. Brons-
tein:
l. P4R P4R
l. P4D PXP
3. DXP CJAD
4. D4T C3A 9. T8D+U RXT
S. C3AD P4D 10. DXD.
LA JUGADA PREFERlDA
(Relato del maestro internacional L. Schamkovicb)
cEn cierta ocasión, vino a verme ,y Lida roe mostró la siguiente va-
una ajedrecista conocida mía y me riante:
pidió que le prestase mi colabora-
ción en prepararse para una partida l. P4R PJAD
de torneo que debía jugar al día si- Z. P4D P4D
guiente. 3. C3AD P xP
•-¿Qué debo hacer para no equi- 4. CXP C2D
vocarme en la apertura, pues m i S. A4AD C3A
oponente conoce muy bien la teoría 6. cxc+ ex e
de las aperturas? -me preguntó la 7. CJA ASC
ajedrecista en cuestión, a quien lla- •-Discúlpeme -le dije-. ¿Por
man Lida. qué sitúa el alfil en el escaque 5C7
•-Juegue usted P4R - le acon- 1Asf las negras pierden inevitable-
sejé. mente!
•-Eso es precisamente lo que me •-Le ruego que no intente disua-
da miedo -respondió Lida-, por- dirme. EUa siempre juega asi; es su
que ella jugará la defensa de Caro- jugada preferida.
Kann, que conoce detalladamente •Le indiqué cómo debla jugar. Y
y en la que tiene su jugada prefe- fui a presenciar la partida en cues-
rida. tión. La oponente de Lida e.fectua-
•-¿Qué jugada? - inquirí. ba sus movimientos con bastante
45
Diagrama 11úm. 58 Diagrama núm. 59
Y SIN MIRARLE.. .
46
l. P4R P3AD Diagrama núm. 60
2. CJAD P4D
3. C3A PXP
4. CXP C3AR
En esta posición, Kcres continuó
S. D2R y abandonó su asiento, de-
jando al maestro polaco Arlamovski
que pensase. Se dio una vuelta por
la sala y, al volver a su mesa, vio
que su adversario había efectuado
el movimiento S•.. .• CD2D. Por lo
que, de pie ante él y sin mirarle a
los ojos, cogió su caballo de la ca-
silla 4R y lo puso despaciosamente
en la 60. ¡Jaque mate!
Esta celada también se puede lle-
var a efecto en otro orden de juga-
das. Ejemplo:
Otro caso más; en éste, el caba-.
l. P4R P3AD llo da jaque mate desde otro lado:
2. P4D P4D
3. C3AD PXP l. P4R P3CR
2. C3AD C3AR
4. CXP C2D 3. CSD CXP
S. D2R C3A 4. D2R C3D
6. C6D++. S. C6A++ .
COMO EN EL CINE
47
vimiento para defenderse de la com- Diagrama mím. 61
binación 11. C X PR, etc. Pero se
ofrece la posibilidad de otra com-
binación más artística y efectiva:
ll. CXPA Rxc
12. CSC+I RlC
13.DXP+ RlT
14. C7A+ RlC
IS. C6T+ RIT
16. D8C+ TXD
17. C7A, mate.
48
citado periodista me convenció de 7. P XP DXPC
tal manera, que parecía como si me
hubiese hipnotizado; tanto fue así, Todavía podían haberse salvado
que me parecía ser yo la única per- si 7. ..., CDXP; 8. AlR, P4R; 9.
sona que conocía aquel secreto por PXP a. p., A4A; 10. P XP+, RlR.
el precio de una botella de vino.
»JEs imposible describir la alegría 8. TIA!
que me causó jugar las negras con-
tra Botvinnik en la primera ronda! Aquí, Spielmann decidió analizar
Ya me veía un tanto puesto en la profundamente su posición, pues
tabla de la clasificación, y efectué Botvinnik hizo una jugada que no
las primeras jugadas con más rapi- babfa sido prevista en el análisis,
dez que reflexión. hecho tras una botella de vino du-
»Al decidirme a analizar debida- rante el viaje. Según opinaba el re-
mente mi posición, y ver que mi ferido periodista, las blancas juga-
dama sucumbía sin compensación rían 8. C4T, DSC + ; 9. AlD, D X P;
alguna, me dio un vuelco el cora- 10. PXC, CSR; 11. AlR, DSC+;
zón. Como me daba vergüenza aban- 12. R2R, y las negras podían iniciar
donar tan pronto, la continué ha-
ciendo las jugadas de la agonía... , Diagrama 11úm. 61
¡La partida entre el reputado
maestro Spielmann y Botvinnik duró
media hora!
Botvinnik - Spielmann
l. P4AD P3AD
2. P4R P4D
3. PRXP PXP
4. P4D
Variante de la defensa de Caro·
Kann que Botvinnik solCa usar en
aquellos años.
4• . .. C3AR
S. C3AD C3A
6. ASC D3C un fuerte ataque, después de 12• . .. ,
P X P. Pero no pueden tomar el ca-
En una partida Botvinnik-Flohr, ballo: 12. .. ., D XC; 13. D X D,
de la competición de 1939, las ne- C6A+; 14. RlR, CXD, porque si-
gras jugaron 6.... , P x P; 7. PSD, gue 1S. ASCDI
C4R; 8. D4D, C6D +; 9. A X C, Spielmann aún no conocía bien a
P X A, y Botvinnik no se apresuró a nuestro Botvinnik. Hasta 19.51, no
tomar el peón, sino que jugó 10. recuerdo que ninguno hubiese lo-
C3AI, consiguió una excelente posi- grado atraparlo con una variante
ción y ganó. estudiada de antemano. Pero puedo
En la presente partida, la primera decir que se dieron más de una de-
jugada de la variante que tiende el cena de casos en que Botvinnik lo-
lazo fue ideada por el teórico Ra- gró la victoria gracias a su sólida
fer, y era conocida del susodicho preparación para las aperturas.
periodista extranjero. Respecto a la presente partida,
49
4
Botvínnik previno. según dijo luego, gar el caballo para salvar la dama
la posible celada 6• . •. , D3C- 7.... , y su posición hubiese sido desespe-
D X PC y encontró en seguida la ranzadora.
réplica oportuna.
11. elAR AXe
8•... eseo U. PXA.
9. e4T DxPT
10. A4AD ASe En este momento apareció en el
tablero donde se señalan las juga-
Jugada cde la agonJa•. Quedaba das la inscripción: Las blancas T1an
todavía el recurso de esta última e ganado.
ingenua celada 10. . .., D6T, con- Las negras pueden aplicar esta
tando con que las blancas jugase 11. variante sin temor alguno; sólo es
TIT??, para continuar luego 11•.. ., necesario no continuar 6• ... , P X P,
DxT; ll. DxD, C7A+ . Pero las como hace Flohr, ni 6. . .., D3e,
blancas hubiesen contestado, por su- como juega Spielmann, sino 6. . .. ,
puesto, con 11. T3A, y las negras PJR; luego, se puede continuar 7.
no tenían otra solución que entre- CJA, AlR, etc.
Rutlta • Viesloli
Praga, 1950
l. P4R P4R
2. eJAR C3AD
3. A4A C3A
4. ese A4A
S. CXPA AXP+I
6. RXA CXP+
7. R3R D2R
8. RXC
Si toma el alfil, se da mate en
Las blancas han ganado dos pie- dos jugadas, y si se retira a la ca-
so
silla 3A, es mate dentro de tres ju- -Estamos jugando al ajedrez y
gadas. no a las damas. Lo tomaré cuan-
-Pero las blancas podían haber do lo crea oportuno.
jugado mejor. -Sólo tengo un movimiento,
-No lo d iscuto. Las blancas que es
siempre pueden jugar mejor, y lo
mismo se puede decir de las ne- 6. D2R
gras. Por ejemplo: 11. AxC+, 7. CXT P4D
A2D+; 12. R3lt, AXA; 13. TIA, 8. PXl'
0-0, y, de nuevo, las blancas tienen
dificultades. -Y ahora, ¿cómo continuar?
Diagrama núm. 65 A Sergei le indiqué el movimiento
8• . . ., CSD.
-¡Hombre! -exclamó Nikolai-.
Me habéis entregado la torre y el
peón central; y ahora queréis en-
tregar el alfil. ¿No es arriesgar de·
masiado?
--cuando se cabalga en un tigre
el mayor riesgo que se puede correr
es apearse.
-Está bien -respondió Niko-
lai-; ¿no se os ocurrirá sacrificar
también el caballo?
9. P3A ASC
10. D4T+ C2D
ll.RXA DST+
Y las negras inician un ataque
-Y antes de eso podían haber arrollador.
jugado 9. R3R, pero sucede 9. . .. ,
DSA+; 10. R2R, DxA+, y luego, Diagrama núm. 66
11. . .. , D x e, tras lo cual no cesa
el ataque de las negras, y las blan-
cas han cedido su ventaja material.
-Eso no me convence --dijo Ni-
kolai.
-Pues a mí me gusta la posición
de las negras -repuso Sergei-.
¡Analicémoslal
Y los dos se sentaron al tablero:
l. P4R P4R
2. C3AR e3AD
3. A4A e3A
4. ese A4A
S. CXPA AXP+
6. RlA
-¿Por qué no tomas el alfil?
-le preguntó Sergei.
51
INGENIOSIDAD DEL DESTACADO MAESTRO FLOHR
52
tiende de los jaques as!: .S. DSD+, que respondió: c¡Lo ve! Ustedes
A3R; 6. DxPC+, R3A, o así: S. han estado seis años pensando si
D4A+, RlC; 6. D8C+, RZT •. rendirse o no. Y yo me rendf en
Bronstein se lo contó a Flohr, seguida.•
ERRATA EN EL DIAGRAMA
Sergci se presentó con un diagra- -intervino un joven que se reunía
ma, sacado de una revista de aje- con nosotros-. Esa pieza es el alfil
drez muy vieja. negro que se ha comido el caballo~
y ahora las negras amenazan con
Diagrama mlm. 68 el movimiento ASC.
- Quizá no es una errata; tal
vez se trata de un peón que se ha
transformado en caballo -les dije.
Se echaron a reír:
-¿Cómo han podido las negras
llegar a esta casilla sin haber mo-
vido una sola pieza? Si hubieran en-
trado un peón, lo hubiesen conver-
en dama y no en caballo.
- Hay una interesante apertura
que se denomina contragambito de
Albin:
l. P4D P4D
Z. P4AD P4Rl7
53
peón, hacemos el cambio de damas C3AR, C3AD; S. P3TDI, con objeto
y luego continuarnos con A x P. de obstaculizar el movimiento 5....,
Tras lo cual, las blancas han gana· ASCD. Luego, se puede continuar
do un peón y las negras han per· así:
dido el enroque.
-¿Y si las negras no lo toman? Diagrama 6Y
-Entonces, me como el suyo a
la jugada siguiente.
-Veámoslo:
4. P3R ASC+
S. A2D PXP
-Me como el alfil:
6. AXA PXP+
-Las blancas no pueden comer el
peón, porque pierden la dama. Hay
que mover el rey.
-Movámoslo:
7. IUR PXC=C+
-El peón se ha transformado en
caballo y da jaque. Si se hubiera S. ... A5CR
convertido en dama. las blancas ha- 6. CD2D D:ZR
brían efectuado los movimientos 7. P3T AXC
DXD+ y TXD. Pero aquí no pue- 8. CXA 0-0-0
den tomar el caballo, pues amenaza 9. D3D P3TR
la jugada A5C+. No hay más es- 10. PJCR PJCR
capatoria que mover el rey. 11. A2C A2C
ll. 0-0 CXP
8. RIR DST+ n.cxc AXC
9. P3C DSR+ 14. P4CD.
Si 9. R:ZD, sucede DSD +. Las negras han recuperado el
-Ahora comprendo por qué mi peón; pero su situación es peor que
obuelo guardó este diagrama -dijo la de las blancas.
Sergei, ufano. -¿Son oblígatorias estas jugadas?
-¿Cómo tenían que haber juga- -No, no lo son. La partida se
do las blancas? desarrolló así.
-Si lo hacen con precisión, pue- - ¿Quiénes la jugaron?
den obtener ventaja. Por ejemplo: - Lasker y Aliojin (Aiekhine), en
en lugar de 4. PJR es mejor 4. 1914.
LA CELADA AU TOMATI CA
54
Este artificio actúa sin fallo alguno, 4. C3AR C3AR
cual un autómata, y se consuma den- 5. AXP P4AI
tro de las siguientes jugadas: 2•... , 6. o-o P3TD
PX P; 3. P3R, P4CD; 4. P4TD. Tras 7. D2R C3A
esto, vuestro adversario verá que, si 8. TlD P4CD
toma el peón, se le desmorona la
posición de sus peones; también ve Diagrama núm. 71
la inconveniencia del moviento 4•
.. ., P3TD, porque S. PXP. a¿Y por
qué no jugar 4•... , P3AD?•, piensa
él. Pero a este movimiento sucede
S. PXP, PXP; 6. D3A, y las negras
se horrorizan al darse cuenta de
que pierden, o la torre, o el alfil, o
el caballo.
Diagrama 11úm. 70
.55
l. P4R P4AD 6 •... P3A
2. CJAR C3AR 7. CSR PXC
3. PSR C4D
4. C3A cxc 8. D3A.
S. PDXC P3CD
6. P6RI Y las negras pierden irremisible-
Ver diagrama núm. i2. mente la torre.
l. P4D P4D
2. P4AD P3AD
l. PXP
-¿Por qué torna usted el peón 7
Tras esto, resulta una posición si-
métrica y un juego monótono. ¿Re-
porta esta jugada alguna ventaja?
-Esta apertura es engaftadora;
en ella. se ofrece un sinfín de po-
sibilidades de ataque. Cuanto más
se mantiene la posición simétrica,
mayor es la ventaja de las blancas.
3 •... PXP
4. C3AD ClAR
S. CJA C3A
6. A4A A4A llo, sino que reali'1.an el movimiento
7. CSR 9. P4RU Si 9• ..., P X P a. p., se pue-
den cambiar las damas y luego to.
Con esta jugada empieza mi arti· mar el caballo. O comer esta pieza
ficio. Las negras pueden tomar el sin cambiar las damas, pues el mo-
caballo. vimiento PXP+ ni el subsiguiente
DJC+ son peligrosos. Pero la va-
7•... ex e riante principal es
56
9. P4Rll P XC Diagrama núm. 74
10. DXD+ TXD
ll.PXA PXP
12. TlCD ClD
Es la única jugada para defen-
derse del movimiento ASC+.
13. P6R PXP
14. P XP C1C
De nuevo es la única jugada para
eludir la amenaza anterior.
l.S. T X PI CJA
16. TXl'.
Y las negras no pueden defender-
se del movimiento ASCO debida-
mente.
- ¿Y si las negras no cambian el
caballo? - Absolutamente nada; pero en
- Eso es precisamente Jo .que este caso la combinación no r epor-
ocurre. En lugar de cambiarlo jue- ta ningún beneficio al bando blan-
gan 7•..., PlR. co. Hay que idear otras combiDacio·
-¿Qué extraña eso? nes.
57
Tras esto, el maestro H. hizo la Y las negras sucumbieron.
sigilosa jugada: • Ha sido una combinación ex-
traordinaria -le dijo Pumpianski a
17. P4A P3C su oponente-. Me ha maravillado
18. D4C R2C esa serie de jugadas sigilosas con
sacrificio de piezas. Usted se mere-
Diagrqma núm. 75 ce que le concedan un premio por
su artística combinación. •
Y se lo concedieron; era una figu-
rilla de bronce que representaba un
caballo. Sólo que al maestro H. no
le dio tiempo a recibirla, pues le
urgía regresar a la ciudad de Tash-
kent, y el cincelador necesitaba cier-
to tiempo para cincelar el nombre
del maestro en el pedestal de dicha
figurilla de bronce.
cNo te preocupes - le dijo el juez
árbitro del torneo-, que dentro
de un par de días te la enviaremos
por correo.•
cDe Moscú acaba de recibirse un
extraño paquete -le comunicó la
empleada Lena a la jefa de la ofi-
cina de Correos-. ¡Fíjese en lo pe-
19. CXPDII queño que es y lo que pesa! Va di-
rigido a un deportista. ¡Es un
• Un segundo regalito, • pensaría premio de belleza 1•
Pumpianski. Se reunieron las empleadas de
Correos y se pusieron a hacer co-
19•... PXC mentarios al respecto; a ellas se
20. PSA unieron las de la Caja Postal. Ma-
dina, conocedora de las costumbres
Otra jugada sigilosa: mientras, las de los países extranjeros, dijo que
negras abren un hueco para que el en el extranjero se organizaban con-
rey pueda huir hacia la zona de cursos de belleza; que a las ganado-
concentración de sus piezas. ras se les concedía el título de •miss
Islandia•, cmiss Mississiph, etc., y
20.... TIT que se les otorgaba premios, por su-
puesto.
Pero el caballo blanco se encami· Mediante unos simples silogismos,
nó con paso lento hacia la casilla Madina llegó a la conclusión de que
6R, y no se sabe si fue el maestro se presentaría omlster Tasbkenh a
o el caballo el que dijo en voz baja: retirar el referido paquete.
•Jaque al rey y a la dama.• Y Pum- El maestro H. se distinguía más
pianski no tuvo - más remedio que por su inteligencia y agudeza que
aceptar la tercera pieza que se le por su aspecto exterior. Incluso sus
ofrecía. aunque advirtió que su rey amistades convenían en que su per-
iba a salir mal de esta situación. fil, su complexión y hasta su cabe-
llera estaban muy por bajo de los
21. C6R+ PXC límites de la belleza común. Por
22. DXP+ RlA eso, cuando se presentó en la ofici-
23. PXP+ RlR na de Correos, Madína se quedó
14. D7C+. suspensa, y le preguntó:
58
c-¿Trae usted la autorización del clamó Madina, y dirigiéndose a su
destinatario 7 compañera de trabajo-: ¡Kisliar,
•-No -contestó el maestro- , no hay nada que hacer; por lo vis-
¿Qué necesidad tengo de escribir to, él es el más guapo entre los
una autorización para mf mismo? ajedrecistas! (No se ha encontrado
Aquí tiene mi documentación per- otro que le supere en belleza!•
sonal.• -Desde entonces --concluí refi-
Tres expertos revisaron circuns- riéndoles a mis jóvenes amigos-, los
tanciadamente la referida documen- organizadores de las competiciones
tación al paso que miraban, ya la de ajedrez han dejado de enviar pre-
fotografía, ya al original. Al rema- mios de belleza por correo.
te, Madina le preguntó: -Desgraciadamente -intervino
•-¿ Y a usted le han concedido Sergei-, ni siquiera los entregan
un premio de belleza?
•-¿Cómo no iban a concedérme- personalmente. Parece que eso de
lo? ¿Le parece poco sacrificar tres los premios de belleza ha decaído.
piezas una tras otra7 Me prome- -Es una lástima, pues una par-
tieron publicarlo en la revista de tida bonita embellece más la com-
ajedrez. petición, y para el ajedrecista es
•-¡Ah, es usted ajedrecista! -ex- más agradable que ganar puntos.
59
Jueguen como jueguen, las negras para no verse forzado a rendirse
no pueden evitar la pérdida de una a la decimocuarta jugada?
pieza, y no ganan un peón siquiera -Pues sencillamente enrocar o
a cambio de la misma. Surge la ame- efectuar el movimiento P4AD a la
naza 10, CXC, AXC; 11. AXA+; quinta jugada. Por ejemplo: S. ASC,
a 9•..., RlR sucede 10. CxP+, y P4AD; 6. PSD, CJT o 6...., P4C.
las blancas se comen una torre, tras
lo cual surge la duda de si las ne· Reputados maestros estiman que
gras lograrán capturar el caballo aquí la posición de las negras es algo
blanco. peor que la de las blancas, aunque
-Su consejo es bueno para el esto lo compensan las posibilidades
que juega las blancas. Pero ¿qué que se les ofrecen en el flanco de
debe hacer el que juega las negras, la dama.
60
Este movimiento fue considerado 8•... PXC
durante mucho tiempo como el más
eficaz en la posición dada, y Fine Ver diagrama núm. 77.
lo aplicó de buen grado en esta •Fine echó el cuerpo atrás --con-
partida. cluye Yudovich- y se sumergió en
AquC, Yudovich fingió reflexionar una profunda meditación.•
sobre la jugada, aun cuando tenía Después de la serie de jugadas,
fijada de antemano la respuesta. al parecer únicas, 9. CxC+ , PXC;
•Porque -dice él- , si yo hubiera 10. DXD + , RXD; 11. AXP+ Y
efectuado al instante el movimiento ll. A X T, las blancas tienen una ca-
previsto, Fine hubiese podido sos- lidad y dos peones de ventaja. Pero
pechar algo anormal y quizá habría Fine se dio cuenta en seguida del
desistido de tenderme el lazo. Por asunto, y no debió de discurrir so-
eso medité u nos veinte minutos, bre cómo continuar, sino sobre qué
transcurridos los cuales hice con dirían de esta partida en Nueva
ademán vacilante mi jugada corres- York. Comoquiera que fuese, jugó:
pondiente.•
9. CXC+
7• ..• P3TD
Y Yudovich replicó:
cFine -prosigue Yudovich-· me
lanzó una astuta mirada, avanzó 9. ... DXCII
lentamente la mano hacia el caba-
llo y, de pronto, se comió el peón. • En este momento, entró Krilenko
en la sala. donde se celebraba el tor-
neo, miró el tablero en el que se
8. CXPD seiíalan las jugadas, se restregó los
ojos y, con su peculiar agudeza, ex-
cTras lo cual -continúa diciendo clamó: c¡Tomal ¿Es que Fine y Yu-
Mijail Miiailovich- debí haberme dovich se han puesto de acuerdo?
puesto a pensar cinco o diez minu· Mientras, la partida continuaba:
tos, para que mi oponente se impa-
cientase un poco; pero ya no tuve Diagrama núm. 78
fuerzas para ello y, mirando a él
y no el tablero, le comí rápidamen-
te el caballo con el peón. •
Diagrama núm. 77
61
(Véase c¡Ojo, que el caballo se ha -¿Cómo deben jugar las blancas
sacudido la trabah) para no correr la suerte de Fine?
-De dos maneras: primera, des-
ll. DlD AXD+ pués de 6. . .., P4R, continuar 7,
ll. RXD PXA. C3AR, PSD; 8. CSD, AlR; 9. A XC,
AXA; 10. P4R, PXP a. p.; ll.
Y las negras, con el cambio de CD X P, y ambos bandos tienen sus
un peón por un caballo y su exce- ventajas, aunque la apertura no ha
lente posición, ganaron pronto la proporcionado superioridad a nin-
partida. guno de los dos. Segunda, efectuar
- ¿Y qué ha sido de Fine? -pre- el movimiento 7. C4-SC, como en la
guntó Sergei-. Pues no se oye ha- partida Fine-Yudovich, suponiendo
blar de él que el bando contrario desconoce
-Al afio siguiente, R. Fine tomó esta celada; luego, la continuación
parte en el gran torneo internacional puede ser 7•..., P.5D; 8. CSD, C X C.
Y compartió con Keres los puestos Las negras sacrifican la dama, aun-
primero y segundo. Es increíble el que recuperan en seguida este sa-
éxito que acompañó a Fine en la crificio: 9. AXD, ASC+; 10. D2D,
primera vuelta de dicho torneo: en AXD+; ll. R X A, lo que pone fin
el transcurso de una semana, ganó a las complicaciones; la situación
a tres campeones mundiales... de las blancas es mejor, gracias a
-¿Ganó a tres campeones en un la vertical abierta AD y al poderoso
torneo? peón, al que no es fácil acercarse.
--Sí; ganó a Euwe, campeón del Si el bando de las negras conoce
mundo; a Aliojin (Alekhine). ex esta partida, y a 7. C4-SC replica 7.
campeón, y a Botvinnik, futuro cam- ..., P3TD, entonces no se debe se-
peón. guir el juego de Fine, sino el con-
-Pero entonces Fine no sabía sejo de Lasker, es decir, 8. D4T.
que Botvinnik llegaría a conquistar Aunque este movimiento origina un
el título de campeón.
-Ciertamente, y nosotros lo sabe- juego muy complicado con numero-
mos ahora. sas combinaciones que redundan en
-¿Qué hace Fine actualmente? beneficio de las negras, si éstas jue-
-Se ha alejado de la actividad gan con precisión.
ajedrecista y convertido en profe- -¿Querría usted ponernos un
sor de psicología. Posiblemente, les ejemplo?
explica a sus alumnos la lección de -Veamos éste: 8...., AlD; 9.
psicología que el maestro Yudovich PJR, PXP; 10. AxP, PXC; ll.
el Viejo le dio. AXP+, RXA; 12. D XT, AJA.
62
-No -me interrumpió Sergei-; Diagrama núm. 79
eso no supone peligro para nosotros,
porque no hemos leído ese libro de
Fine ni, posiblemente, lo leamos.
-Entonces, en «La partida de
ajedrez ultramoderna», de Ta-
rrasch ...
-¡Qué cosa ha ido a recordar!
Como si usted no supiese que ese
libro ha dejado de ser ultramoder-
no; pues mi abuelo ya decía que
no estaba a la venta.
-Veo que no hay manera de con-
vencerte -le dije--. No obstante,
se ofrecen muchas celadas en los
libros modernos. Analicemos una
que se lleva a efecto en la siguiente
variante:
l. P4D P4D fícil solución. Aunque es bien sen-
2. P4AD P3R cilla: 14. P6Rl y, si las negras con-
3. C3AD C3AR testan con 14.... , PX P, resulta ...
4. P3R P3AD -¡Qué se da mate a la dama!
S. C3A CDZD -exclamó Sergei.
6. A3D PXP -En efecto; y, si no se lo
1. AXP P4CD comen, su situación es embarazosa.
8. A3D P3TD -Este artificio es el más peligro·
9. P4R P4A so de cuantos hemos visto -dijo
10. PSD C3C Sergei-. ¿En qué libro viene y
11. 0-0 PXP quién es su autor7
12. PSR. - Eso carece de importancia -le
respondí-. Lo que interesa es la
Y su autor escribe: «Las negras celada.
pueden poner al adversario ante -Para nosotros es interesante sa·
problemas difíciles de resolver si berlo.
juega 12. .. ., C3A2D y, luego, 13. -Basta, Sergei -intervino Ni-
ese, AZR.• kolai-; no importunes con tus pre-
Después emplea toda una página guntas. Conozco ese libro. Luego
para exponer estos problemas de di- te lo aclararé •.
63
6. PlR proporcionado, que estaba sentado
delante de sus piezas y permanec.fa
Su oponente, A. Budo, replicó: inmóvil cual una estatuta de már-
mol; al parecer, hacía un cálculo
6. ... ASC circunstanciado de las variantes.
7. D4T AZD Transcurrieron treinta minutos, y
8. DSC continuaba sin hacer su movimien-
to correspondiente. Al fin, suspiró
de alivio, alzó la cabeza y dirigió
Diagrama núm. 80 una solemne mirada al sitio que
ocupaba su oponente. Pero no lo vio
tKotikov estaba en el bar), tras lo
cual jugó:
8•... P3TDII
Al enterarse, Kotikov vino co-
rriendo, cogió su dama con las dos
manos y la situó en la casilla que
le pareció más segura:
9. D3C.
Budo movió la cabeza y se su
mergió de nuevo en una profunda
meditación. Carece de importancia
lo que sucedió después en la par-
tida.
Alexander Budo era mejor juga-
Luego de haber situado la dama dor que su oponente. Consiguió
en la casilla en cuestiÓn, se dio una superioridad aplastante; pero,
cuenta de que las negras amenaza- como había invertido casi una hora
ban con los movimientos C X P y en analizar las jugadas novena y
C7 AD. Estuvo pensando cinco mi- décima, acusó falta de tiempo, co-
nutos y, al ver que la referida ame- metió un error grave y perdió la
naza era inevitable, se levantó de partida.
su asiento y fue quejándose de sf •-¿Por qué no se ha comido el
mismo a cuantos quisiesen escuchar- peón7 -le preguntó Kotikov, mo-
le: e ¡Soy un verdadero asno 1 ¡He vido por la curiosidad.
malogrado la partida( ¡Aun cuando •-tlmposiblel (Pues he previsto
juego en el tablero noveno, no creía su diabólica celada 1 -contestó
perderla tan pronto!. .. • Budo.•
Los tahkentinos le reprendían, A Kotikov se le desorbitaron los
y Jos leningradenses le prodigaban ojos:
.amablemente palabras consoladoras. •-¿A qué celada se refiere?
A la media hora, dieciocho de los »-A 8. . .., C X PD sucedía 9.
veinte participantes en la competi- PXCJ, AxD; 10. AXA+, CZD;
ción estaban enterados de la amar- 11. CSR, D4T; U. AXC+, y usted
gura e inquietud de Kotikov. Sólo obtenía tres piezas menores a cam-
dos de ellos no sospechaban los pe- bio de mi dama y un peón, además
ligros que amenazaban a éste: Bot· de poner mi rey en un aprieto.
vinnik, estudiante del Instituto Po· •-Quién iba a figurarse ... -mur-
litécnico, que treinta y cinco años muró Kotikov.
atrás ya jugaba sin apartarse del •-¿Creyó usted que yo no lo
tablero, y Budo, jovén alto y bien advertiría? -inquirió Budo-. Tam-
64
bién advertí otras variantes favora- Diagrama núm. 81
bles a usted. Sobre las cuales re-
flexioné . ..
•-Usted ha invertido más de
cuarenta minutos en ello.
•-Se equivoca, pues este tiem-
po lo he empleado en prepararle la
siguiente celada: si a 8...., P3TD,
usted hubiera contestado con 9.
D X PC, yo hubiese continuado 9.
oo., C4TD; 10. D4C, P3Rl y le ha-
bría ganado la dama.
•-Pero usted -prosiguió Budo--
ha realizado la mejor jugada al re-
tirar la dama a la casilla 3CD.
•-¡Nol -repuso Kotikov--. En
vano he jugado contra usted, porque
es demasiado bueno para mí. No
comprendo cómo le he ganado la
partida.•
65
5
castaño oscuro, llamó a su amigo: en el momento en que esta litera-
c-¿Adónde vas7 ¡Aún me queda tura ha logrado, aunque no sin gran-
el peón 2TRI¡Espera, que me rindo!» des dificultades, elevar mis cualida-
Pero el otro hizo un gesto despec- des deportivas, el juez árbitro dice
tivo con la mano y salió dando un que eso es armar lío. Me molesta
portazo. un poco esta valoración tan poco
Grachev escribió con lápiz rojo objetiva de mi conducta deportiva.
olas blancas se han rendido• en su •-¡Por Cristo, cállate! -le pidió
hoja. la firmó y la llevó junto con la el juez- . Enséfiame la hoja de la
de Mironov al juez árbitro de la partida.•
competición; éste se acercó al ta- Y los circunstantes revisaron la
blero de la clasificación, delante del mencionada hoja.
cual se agolpaban los participantes •-En efecto, te has rendido a su
y calculaban las probabilidades de debido tiempo. Pero ¿qué necesidad
poder pasar a la final. En particular, tenías de ofrecer el sacrificio de la
había tres que estaban impacientes torre?
porque compartían los puestos ter- •-Es la necesidad del jaque de
cero, cuarto y quinto en la clasifica- la agonía -contestó Grachev fría-
ción, y de los cuales sólo uno pasaba mente-. Todos los grandes maes-
a la final. El árbitro miró una hoja tros lo hacen así. Si queremos elevar
y le puso medio punto a Mironov nuestra destreza en el arte del aje-
contra Grachev; luego miró la se- drez, debemos seguir el ejemplo de
gunda hoja y, al ver clas blancas la pléyade de nuestros invencibles
se han rendido•, le puso un cero a y grandes maestros. Por tanto, es-
Grachev contra Mironov. timo que he elevado mi habilidad
Los circunstantes soltaron una ri- ajedrecista al ofrecer mi jaque. Re-
sotada que acompañaron con excla- cuerda cómo Aliojin (Alekhine) dio
maciones, como: • ¿Sabe el árbitro el jaque de la agonía en una parti-
juez contar hasta diez?. •• ¿Conoce da para el campeonato del mundo,
las propiedades de la operación de y Capablanca movió equivocadamen-
sumar, cuando uno de los sumandos te el rey, por lo que la partida fina-
es igual a cero?., c¿Qué profesión lizó en tablas. Muchos aseguran que.
tenía antes de llegar a juez árbitro si Aliojin no hubiera dado ese ja-
de una competición de ajedrez?• que, Capablanca hubiese ganado, y
Enfadado, el árbitro le preguntó a no se sabe qué curso habría toma-
Grachev: do la historia del ajedrez y, en par-
c- ¿Qué ha sucedido en vuestra ticular, la literatura ajedrecista. Una
partida? ¿Has vuelto otra vez a ar- vez di jaque en una situación mu-
mar Ho? cho más desesperanzadora que la
·-Me he rendido, lo cual no su- habida en mi partida contra Miro-
pone armar lío. Esta es la décima nov y resultó que el rey de mi ad-
vez que me rindo en este torneo, versario no tenra a dónde retirar-
como se puede comprobar en la ta- se. Por lo que no fue el jaque de
bla de la clasificación, y nadie me la agonía, sino el estertor del mate...
ha presentado quejas en este sen- •-Entonces. ¿por qué ha conve-
tido. Por otro lado, el reglamento nido Mironov en empatar? -inqui-
de juego no prohibe rendirse cuan- rió el árbitro, irritado.
do se ve que el mate es inevitable. •-Por lo visto, ha estimado que
Es más: la literatura ajedrecista, que su ventaja en la posición no era su-
está llamada a elevar nuestras cuali- ficiente para alcanzar la victoria.
dades deportivas, señala constante- Pues no es el primer caso que se
mente que no se debe prolongar la da .. .
partida si la situación de uno u •-¡Déjame en paz! -respondió
otro bando es desesperanzadora. Y el juez-. Al fin y al cabo, me es
66
indiferente el resultado de esta par· •-A fe mía, que no volveré a
tida. De todos modos, Mironov que- arbitrar una competición en que to-
da finalista, y tú pasas a ocupar el me parte ese lioso de Grachev.
último puesto en la clasificación. »-No sé - respondió éste- qué
•- Desde luego; ni a usted ni a competiciones tendrá que arbitrar
mí se nos da nada. Pero a Tieplov ni cómo se desenvolverá en su ca-
sí se le da porque, sí yo gano a Mi- rrera arbitral. Pero sospecho que no
ronov, él va delante de Kogan y, si
nuestra partida resulta tablas, éste llegará a la categoría de árbitro in-
va delante de aquél.» ternacional. Ahora dfgame: ¿cómo
El juez árbitro se salió definiti- va a anotar el resultado de mi par-
vamente de sus casillas: tida.»
67
contenga mil partidas, y cuyo gro- ajedrez posibles seria tal, que un
sor sea de un centímetro, y si cons- rayo de luz necesitaría un billón de
truimos una estantería de cien ana- años para recorrer la millonésima
queles de altura y ponemos estos parte de la misma.
libros en ella, ¿qué longitud deberá Esto quiere decir que el ajedrez
tener la referida estantería, aunque es inagotable como lo son las
las partidas hayan sido anotadas combinaciones de tono y ritmo en
sólo hasta la vigésima segunda ju- la música, de colorido y forma en
gada? la pintura. El hecho de que se pue-
-Seguramente que la de la cir- dan anotar todas las combinaciones
posibles no hace variar nuestro con-
cunferencia terrestre --contestó Ser- cepto de infinidad en el ajedrez.
gei-. ¡Es sorprendente! Pues nosotros consideramos infinito
-No -le dije-; quizá sea como el número de seres humanos de las
la que media entre el Sol y la Tie- generaciones anteriores y de las ve-
rra ... ¿O no7 nideras en los próximos mil millo-
-os quedáis cortos -intervino nes de años; sin embargo, este nú-
Nikolai-. La longitud de la referida mero es menor que el de todas las
estantería con todas las partidas de partidas de ajedrez posibles.
68
ajedrez es mucho más complicado Las negras han efectuado siete
que los callejones moscovitas, He movimientos y sólo han movido una
aqu( un ejemplo de cómo discurren pieza. Esto no es invención mfa, sino
las aperturas en nuestros días : una variante de una monografía de
«La defensa siciliana., de Schwarz
l. P4R P4AD y Platz. Y, en la apertura italiana
2. C3AR P3D (véase •Guioco fortissimo»), las blan-
3. P4D PXP cas mueven sólo dos piezas, tras lo
4. CXP ClAR cual realizan cinco movimientos
5. C3AD P3TD consecutivos con los peones. ¡Cuán-
6. P4TD P3CD tos eJemplos hay como éste 1 En
1. A5CR P3R las partidas de Capablanca se en-
cuentran tan a menudo como en las
Diagrama núm. 83 de los demás.
-¿Significa que se pueden in-
fringir estos principios?
-Sí; pero con tiento. Esto es, se
pueden infringir si veis que una de-
terminada variante os proporciona
ventaja; si no, no. Hay ajedrecistas
que sacrifican el buen juego en pro-
vecho de la originalidad, con lo que,
a veces, crean obras de arte ajedre-
cista semejantes a la pintura abs-
tracta. Hablando de uno de esos
ajedrecistas, el gran maestro Kotov
dice: •Jugué con él una partida. Em-
pleaba muchC\ tiempo en pensar
las jugadas, y no bacía ninguna ade-
cuada a la situación de la partida.
Menos mal que se rindió a la vigé·
sima segunda jugada. •
FANTASIA Y LOGICA
70
--Eso ya es más difícil de decir, -¡Perdón! -exclamaron los pre-
porque a nuestros grandes maestros sentes, al unisono--. ¿Y qué nos
les molestaría; dirían que eso es dice del campeón del mundo?
meterse con ellos. - Bl campeón del mundo -res-
- No se enterarán, pues lo pasa-
remos en silencio. pondí- posee todas estas cualida-
- Si guardáis silencio, entonces .. . des en sumo grado; por eso es
- Y les dije mi opinión sobre los campeón.
maestros contemporáneos.
l. P4R P4R
2. C3AR C3AD
3. A4A C3A
4. ese P4D
S. PXP C4TD Mayakovski: ¿desemboca siempre el
6. ASC+ P3A Volga en el Caspio en sus composi-
7. PXP PXP ciones poéticas? No. El doctor Ta-
8. A2R PJTR rrasch estimó que el lector com-
9. C3TR. prendía perfectamente que, si las
negras tienen mal situada una pie-
Las negras tienen mal situada una za y las blancas tienen mal situadas
pieza; esto es, el caballo en el es- tres piezas, no quiere decir que la
caque 4TD. Pero las blancas tienen posición de éstas es mejor que la
mal situadas todas sus piezas. ¿Su- de aquéllas. El aforismo de Tarrasch
pone esto que la partida de las ne- significa: si tienes una pieza en mala
gras no ofrece perspectivas? No. postura, procura mejorar su posi-
-Tarrasch -respondí- cubrió ción. No confíes en un pequeño
los principios y las reglas del aje- éxito al atacar la superiorid:td de
drez con un revestimiento tajante y, las fuerzas del contrario. Tarrasch
a veces, paradójico. Intentó desper- dcc(a: cLos yerros, como las des-
tar el sentido del lector, y no me- gracias, nunca vienen solos.• ¡Qué
terle en la cabeza el dogma apren- verdad! Y: •Lo malo de una jugada
dido. La verdad se suele cubrir con errónea es que trae nuevos males. •
adornos paradójicos. Si no, leed a Todo ajedrecista reconoce esta ver-
71
dad. Sin embargo, en la esfera del ajedrecista, logró grandes éxitos de-
ajedrez hubo dos Tarrasch: uno portivos, consiguió un empate en
daba fórmulas para todos los casos el match con Chigorin, venció a
que se presentasen en la práctica, Marshall y ocupó muchas veces el
aunque no siempre con acierto, y el primer puesto en los torneos inter-
otro no escuchaba estos consejos, nacionales. ¿Podía un dogmático
y así, creó excelentes obras de arte mantenerse en este nivel?
72
da. Realmente, la dama negra está rece apetitoso el peón, cómelo, que
sometida al ataque de los peones de momento no perderás la parti-
si permanece en el centro del ta- da. Tampoco la pierden las negras,
blero. Tarde o temprano, las negras aunque vengan en deseo de sacri-
tendrán que entregar el caballo, que, ficarlo.
si se retira al flanco, deja abando- -Y usted, ¿cómo hubiese jugado?
nado el rey. - me preguntó Sergei, con picar-
-¿No sería mejor mover el rey día-. ¿Se comería el peón o no7
a la casiUa lD en Jugar de hacerlo -Después del caso que os conté
a la 2R a la quinta jugada? al principio de nuestro encuentro,
- Se dice que es mejor, aunque no he tomado más dicho peón.
prácticamente no veo mucha dife- Siempre hago el movimiento 4.
rencia entre estos dos movimientos. P3A.
En caso de situar el rey en el es- -Un momento, Sergei -le dijo
caque ID, no se debe comer el ca- Nikolai-, que todavla tienes que
ballo con el alfil, sino continuar aclararnos una cosa: ¿recuerdas que
más o menos así: S. AxP+, RID; sacrificaste dos piezas en la aper-
6. 0-0, D XC; 1. P3AD, C3AD; 8. tura?
P4D, D3A; 9. A3C, y Juego prose- (Véase cGiuoco fortisslmo».)
guir según el esquema C2D, P4AR, -Lo recuerdo. No se pueden sa-
C3A y PSR. crificar, porque después de l. P4R,
-Después de todo esto -dijo Ni- P4R; 2. C3AR, C3AD; 3. A4A,
kolai-, aún no he llegado a com- A4A; 4. AXP+, RXA; .S. CxP+,
prender si se debe comer este rape- C X C; 6. DST +, las negras pueden
titoso» peón o no. defenderse del jaque con 6. .. .,
-El ajedrez no es la geometría C3C. Y puede que no se gane si se
ni la partida un teorema. Si te pa- juega como Blackburne.
74
5. P3A PXP y obtienen la ventaja de tres peo-
6. CXP nes. Pero Réti solucionó el proble-
ma de la siguiente manera :
Esto es el gambito de Staunton
contra la defensa holandesa. Las 11. CXCJI DXT+
blancas sacrifican un peón en pro- ll. RlA DXT
vecho de la evolución de sus pie- 13. AXPR P3D
zas. Si las negras desean jugar la 14, AXPD ClA
defensa holandesa y no quieren ad- U. ASC AlD
mitir este gambito, deben respon- 16. AXC PXA
der a l . P4D con l • . .., P3R y, des- 17. DlR+.
pués de l. P4AD, continuar l . . . ·• Dúzgrama núm. 91
P4AR.
6•••. AZC
7. A3D P4A
8. PSD D3C
9. DZD DXP
Las negras no deben ir a la cap-
tura de este peón si han hecho evo-
lucionar sólo una pieza en la aper-
tura. cEn el tablero se paga todo
yerro•, dice Tarrasch.
10. TIC CXP
Diagrama núm. 90
75
Diagrama nzím. 92 Diagrama mím. 93
LA MUCHACHA DE STANISLAV
76
A4D. Esto quiere decir que no se ra analizarlo. Lo más apropiado es
debe comer el referido peón, que que juguéis unas partidas entre vos·
hay que retirar el alfil a la casilla otros. Pero anotad las jugadas y
3C. Pero las blancas proseguirán analizadlas; de esta manera sabréis
7. PSC, y así, el caballo tiene que mejor que nadie cómo hay que ju-
retirarse. Si lo hace al escaque SO, gar en esta situación. Y, si os encon-
intercepta la diagonal de su alfil, y trais con la muchacha de Stanislav
si va a la casilla 4T, se aleja del en una competición, procurad salir
campo de batalla. Ahí tenéis un airosos.
audaz peón que con su incursión
rompe la linea del enemigo. -ciertamente, es más interesan·
-¿Es que las negras no pueden te hacerlo así. Si una muchacha de
jugar mejor? catorce años de edad pudo idear
-Probablemente puedan hacer- tal plan, ¿no vamos a encontrar la
lo ; mas no dispongo de tiempo pa- forma de rebatirlo 1
77
gada, fue ideada por Mijail Tahl, Diagrama ntim. 94
que la usó tres veces en la final de
la competición con Mijail Botvinnik.
Las tres partidas finalizaron en ta-
blas, resultado que Tahl buscaba.
Todo intento de hacer retroceder el
caballo ocasiona el quebrantamiento
del dispositivo de las blancas: 6.
PJA, DST+; 1. PJC, CXP; 8. PXC,
D X T. En esta variante cifré mis es-
peranzas.
En efecto, el músico tendió la
mano derecha hacia el peón 2A; pe-
ro, ¡ay 1, no lo movió, sino que en-
treabrió el ojo que tenía cerrado.
Meditó cinco minutos, transcurridos
los cuales volvió a cerrarlo y, em-
pujando la dama con el meñique,
contestó:
Me dio un vuelco el corazón.
•1 Escaparé - me dije, para tranqui-
CS. DZA P4AR lizarme-. Pero ¿cómo escapar? Se
podría intentar 10. .. ., D7T; 11.
Repliqué al instante y le dije A4A, P4CR; IZ. ASR, PSC; 13.
mentalmente; •Amigo, aún estás a PXP, PXP; 14. AXT, PxC; a lo
tiempo para hacer retroceder el ca- que sucede 1.5. ASR. Y, momentá-
ballo •· Y se me alteró el corazón neamente, no puedo escapar con la
cuando volvió a entreabrir el ojo, dama. Y todo intento de convertir
meditó otros cinco minutos, avanzó el peón en dama puede acabar en
la mano y, ¡oh, dichal, jugó: mate a mi rey: lS ... , D8C; 16.
DXPT, P7T; 17. D8C+, RlR; 18.
7. PlA D7C+.a
Sin embargo, hallé la manera de
salvarla:
Cogr mi dama y, dando con ella
un golpe fuerte en el escaque 5T. 10.... P3D
anuncié: •[Jaquel• Y el bombo re- 11. RlA PSA
pitió en tono mayor: •!Jaquel.. . • U. AlCR PxP+
IJ.RXP D8R+
7.... DST+ 14. ClA
8. PlC CxPC
9. PXC DXT Se presentó el administrador del
establecimiento y dijo:
Mi oponente se transfiguró: aho- -¡Amigos, los clientes no oyen
ra tenía los ojos totalmente abier- más que los golpes sordos de las
tos y el cuerpo inclinado adelante piezas de ajedrez contra el bombo:
como si se dispusiese a dar un sal- pero están sin música y sin baile!
to. Cogió el cabaJio y, con él, dio ¡Como sigamos as(, el restaurante se
dos golpes fuertes contra el parche quedará vaclo y no podremos cum-
cual si con ello pusiese dos signos plir el plan de producción! ...
de admiración en su jugada. Pero los músicos guardaron si-
lencio, y el batería permanecía im-
10. CJTI! pasible. Yo jugué:
78
14•... C3A del mundo emplea en la apertura.
15. AlC CXP tPor qué no se decidió a jugar
16. PXC D4T en seguida 6. PJA, con objeto de
hacer retroceder el caballo? Porque
Pude salvar la dama. pero ¡a qué la dama negra tenía tiempo para co-
precio! Aunque las negras tienen merse la torre y retirarse a :;u po-
una torre y dos peones por piezas sición: 5•... , CSR1; 6. P3A1 DST+;
menores, su posición es peor que la 7. P3C, CXPC; 8. PxC, DXT; 9.
de las blancas. C3T, P3D y amenaza P4R, lo que
No tardé en tener que rendirme. facilita el camino al alfil para acu-
Satisfechos, los músicos lo celebra- dir a sacar del apuro a su dama.
ron con champaña.
No hice más que regresar a la Por eso, las blancas provocaron
sala, y la orquesta interpretó cTú y antes el movimiento P4AR de las
yo somos como dos riberas•. negras, con objeto de obstaculizar
Lo sucedido en el restaurante de la diagonal 1AD-6TR de las mismas.
Sochí se puede considerar como un Luego de haber analizado este ex-
caso divertido; pero no fue así para celente dispositivo, llegué a la con-
el mundo del ajedrez. Pues un ig- clusión de que a mi adversario se
norado músico de jazz había rebati- le puede llamar con justicia el me-
do el dispositivo que el campeón jor ajedrecista entre los baterías.
ERROR IRREPARABLE
Los maestros no son dioses. Y oponente también puede equivocar-
hasta los más experimentados co- se. A veces, ve uno que pierde la
meten errores en el tablero: de otro partida; que no puede hacer nada
modo, todas las partidas finalizarían para salvarla y no sabe cuándo y
en tablas. Pero de lo que se trata dónde ha cometido el error que lo
es de ver cómo se puede enmendar ha originado. No hace mucho, me
un yerro. vino a las manos una partida ex-
La posición inicial de toda partida traordinariamente interesante:
es tan sólida que resulta poco me-
nos que imposible quebrantarla con
una sola jugada; si acaso, sólo con la Flcbtel • Krauzer
pérdida de una pieza. Por eso, si se
advierte que se ha efectuado un mo- l. P4R P3AD
vimiento deficiente, no hay que te- l. P4D P4D
mer ni desesperarse, sino corregir 3. C3AD PXP
paulatinamente la situación. Pues el 4. CXP CJAR
80
S. C3C P4TR 7. AXC PXC
6. ASCR PST 8. A5R TXP
9. TXT D4T+
En la típica defensa de Caro- 10. DZD DXA+!7
Kann, las negras se lanzan de pron- ll.PXD PXT
to al ataque. Y ¿con qué fuerzas?
¡Con un peón del flanco del reyl Y las blancas se rindieron.
-Las blancas no han descuidado
ninguna pieza. Por tanto, según us-
Diagrama núm. 96 ted, han cometido dos errores, por
lo menos.
-No; su error, único e irrepara-
ble, fue rendirse.
-¿Quiere decir que podían ha-
ber ganado en esta situación?
-Probablemente o, al menos, no
habrfan perdido.
-¿De qué modo?
-Vedlo vosotros mismos.
-Escrlbanos la solución en una
hoja de papel. No la miraremos has-
ta que no hayamos dado con ella
en el tablero.
-Si no habéis de mirar la solu-
ción hasta hallarla, ¿qué objeto tie-
ne que os la escriba? Y, con el fin
de que podáis entreteneros, os dejo
como recuerdo unos ejemplos de mi
colección.
81
negras ganan una pieza •. ¿Cómo? Diagrama núm. 98
Hállese la respuesta.
DiagranuJ núm. 97
82
Diagrama núm. 99 Diagrama 71Úm. 100
6• ... DXC
7. AXC CSD
83
Y Alekhine (Aliojin) sacrifica la una pieza y puso al bando contrario
dama y da mate en cinco jugadas. en una situación sin salida.
Por lo demás, las negras podían Aunque interesante, esta variante
eludir la pérdida de una pieza. no su pone peligro para las negras
si juegan con precisión. Alapin co-
Chigorin • Alaplo metió el error a la octava jugada.
Debía haber realizado el movimien·
l. P4R P4R to 8 . ... , 04TD.
2. C3AR ClAD
3. A4A CJA En la partida Najdorf- Donner
4. P4D PXP del torneo de Amsterdam de 1950,
este sacr ificio aparente vino a ser
Obsérvese que a 4 • . .. , C X PR si- real: las negras perdieron una pieza
gue S. P X P y amenazan ganar el en las siguientes circunstancias:
caballo con 6. DSD.
l. P4D PJR
S. 0-0 C XP 2. C3AR ClAR
6. TIR P4D 3. PlR P4D
7. AXP 4. AlD CD2D
5. PJCD ASC+
Sacrificio aparente; las blancas 6. PlA AJD
entregan este alfil, pero recuperan 7. P4A P4R
en seguida su pérdida. 8. PSA
7• .. . DXA Aquí, Donner dt"Cidió entregar la
8. CJA D.SA pieza por un peón y recuperar en
9. TXC+ AlR seguida esta pérdida, amenazando
10. ASC A4A con el peón el caballo y el alfil de
11. C2D D3T su adversario.
12. ClC AJC
13. C.SD 0-0 8 • .. . AXP
9. P X A PSR.
Diagrama núm. 102
Diagrama núm. 103
Aprovechando la circunstancia de
q ue las piezas del adversario esta· Pero Najdorf hizo una sutil iu·
ban acumuladas en un lado del gada que le permitió defender las
campo de batalla, Chigorin sacrificó dos piezas de la amenaza del peón.
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COLECCIÓN
ESCAQUES
Volúmenes publicados
l. MAIZELIS
FINALES DE PEONES, 2.• ed .
Y. AVERBACH
FlNAUS DE ALFIL Y CABALlO 2." ea.
G. L5WENFISCH y W. SMYSLOW
TEORIA DE FINALES DE TORRt 2.• ed.
V. N. PANOV
TEORIA DE APERTURAS, 2.• ed.
Tomo l. Aperturas abiertas
Aperturas semi-abiertas
V. N. PANOV
TEORIA DE APERTURAS 2.• ed.
Tomo 11.Apertura• cerrada•
P. CHERTA
DEFENSA INDIA DEL REY
L. PACHMAN
TACTICA MODERNA EN AJEDREZ
Tomo 1 2.• ed.
L. PACHMAN
TACTICA MODERNA EN AJlDREZ
Tomo 11
L PACHMAN
ESTRATEGIA MODERNA EN AJEDREZ
B. WEINSTEIN
LA TRAMPA EN LA APERTURA
L. PACHMAN
APUTURAS ABIERTAS