Está en la página 1de 6

Preadolescencia

¿Qué es la preadolescencia?
La preadolescencia se suele considerar como la etapa del crecimiento en la que se pasa
de la niñez a la adolescencia. La duración de esta fase del desarrollo humano se sitúa entre
los 10 y los 13 años, aunque depende en gran medida del sexo; en las mujeres se suele dar
entre los 10 y los 12 años y en los hombres entre los 12 y los 14.
Durante esta esta etapa, el niño experimenta importantes cambios físicos y
psicológicos que a su vez transforman su biología y sus relaciones sociales. 

Cambios físicos
El cuerpo de un preadolescente ya no es el de un niño, pero tampoco experimenta los
mismos cambios ni llega al nivel de desarrollo que el de un adolescente. Normalmente, en
estas edades, las niñas están físicamente más desarrolladas que los niños, por lo que es
más normal apreciar cambios en las mujeres que en los hombres. Este desarrollo responde a
la necesidad de adquirir las características físicas y sexuales de una persona adulta,
aunque los cambios sexuales más significativos se suelen apreciar con más intensidad
durante la adolescencia. Las transformaciones biológicas durante la preadolescencia son las
siguientes:
 En las niñas, lo primero que se desarrolla es el pecho. Durante la
preadolescencia los pechos no suelen crecer demasiado, pero sí de forma
constante. El rasgo más significativo es la aparición del botón mamario, que
es una primera y pequeña elevación del pezón y de la mama en general,
aunque no se suele apreciar contorno entre las mamas. El vello púbico suele
aparecer unos meses después del comienzo del desarrollo mamario.
 
 En los niños, lo primero que se puede apreciar es el crecimiento
testicular. En general, aparece entre los 11 y los 12 años. En el caso de los
hombres, la aparición del primer vello púbico también se produce unos meses
después de los primeros signos de crecimiento testicular. Durante esta etapa
también aparece el vello en las axilas.
 
 Los niños experimentan un incremento de su estatura y de su masa
corporal. En el caso de las niñas, el crecimiento es más explosivo, suele
comenzar entre los 9 y los 10 años y alcanza su pico máximo a los 12. Los
niños también crecen a partir de los 9 años, pero en su caso el crecimiento es
más gradual y su pico máximo se suele alcanzar a los 14 años.
 
 La preadolescencia es la etapa en la que aparece el acné.
 
 En el caso de las niñas, el final de esta fase de desarrollo es el momento en el
que se manifiesta la primera menstruación. 
 

Cambios psicológicos y sociales


Además de las transformaciones físicas relacionadas con la actividad hormonal y el
desarrollo natural, la preadolescencia es la etapa donde se produce el desarrollo
intelectual que hace evolucionar al niño hacia un adolescente; debido a esto, es muy
natural encontrarse contradicciones y comportamientos derivados del choque entre el
infantilismo del niño y los inicios del pensamiento maduro del adolescente que
evolucionarán posteriormente hacia el pensamiento adulto. Los cambios psicológicos y
sociales más significativos son los siguientes:
 La capacidad cognitiva y la percepción del tiempo varían. Durante la
infancia, el niño es incapaz de percibir en la mayoría de las ocasiones las
consecuencias que producirán sus actos en un futuro. En la preadolescencia
comienza a preocuparse y a medir las posibles consecuencias de sus acciones.
Esto representa uno de los primeros indicios del pensamiento maduro.
 
 Adquiere una identidad y una imagen sobre sí mismo. Comienza a querer
autodefinirse dentro de su entorno, a obtener un rol propio, lo que provoca
que empiece a preocuparse por crear y cultivar una imagen ante los demás a
la vez que refuerza esa imagen sobre sí mismo. El desarrollo de esta imagen
hace que el preadolescente sea más vulnerable ante las frustraciones que
pueden producir el cumplimiento de las autoexpectativas (sobre su cuerpo, su
higiene, sus hábitos, etcétera).
 
 Cambia la percepción y la forma de relacionarse con los demás. No sólo
va a experimentar un deseo de mayor independencia y un desarraigo del
núcleo familiar en pro de amistades y otros entornos (actividades deportivas,
profesores, etcétera), sino que comenzará a ver el lado humano y más
imperfecto de las figuras de autoridad, dejará de idolatrar a estas figuras y
comenzará a cuestionarse sobre la autoridad de las mismas. Además, el
cambio en las relaciones sociales del preadolescente provoca la necesidad de
integrarse en grupos y círculos, lo que también acarrea una debilidad mayor
ante la presión social a la hora de adquirir determinados hábitos perjudiciales,
como el consumo de alcohol y drogas.
 
 Los cambios en el cuerpo también producen cambios en la mente. No sólo
va a experimentar un desarrollo inicial de la sexualidad, sino que los cambios
biológicos motivarán la aparición de miedos e inseguridades (muchas niñas
experimentan miedo ante la primera menstruación.
¿Qué es la adolescencia?
La adolescencia es una etapa del desarollo que se caracteriza por la transición entre la niñez
y la adultez, y tiene como objetivo prepararnos para asumir los roles de un adulto. En
términos generales, podríamos decir que la adolesencia va desde los 12 hasta los 22-25
años.

Desde un punto de vista estrictamente biológico, la adolescencia comienza en la pubertad y


acaba cuando los cambios físicos (en los órganos sexuales y en relación al peso, altura y
masa muscular) ya han ocurrido. Este periodo se caracteriza también por grandes cambios a
nivel de crecimiento y maduración del sistema nervioso central.

Desde un punto de vista cognitivo, la adolescencia se caracteriza por alcanzar el


razonamiento abstracto y lógico.

Finalmente, desde un punto de vista social la adolescencia es el periodo que nos prepara
para nuestros roles como adultos, ya sea para el trabajo o para formar una familia. Al ser
una fase de cambios importantes ha recibido distintos nombres y algunos se refieren a la
adolescencia como una época en la que las personas transitan una "crisis de identidad".

¿Por qué cambia el comportamiento?


Durante la adolescencia tu cuerpo y tu cerebro están cambiando notablemente.

Es normal que aparezcan nuevos comportamientos y tus padres u otros familiares pueden
sentirse frustrados y/o irritados. A menudo aparecen dificultades para concentrarte y una
falta de motivación para realizar tus obligaciones. Algunos adolescentes se vuelven más
impulsivos y se involucran en situaciones de riesgo que pueden tener consecuencias
negativas a largo plazo.

Todos estos comportamientos son normales y ocurren como consecuencia de cambios a


nivel del cerebro.

¿Qué cambios ocurren a nivel del sistema nervioso


central?
El cerebro de un adolescente es diferente al cerebro de un adulto dado que se encuentra en
etapa de maduración hasta los 22-24 años.

Las áreas encargadas del auto-control, el juicio, las emociones y la organización se


desarrollan durante la pubertad y principios de la adultez. Es por eso que la adolescencia se
caracteriza por ser un periodo de dificultades en la toma de decisiones, toma de riesgos y
descontrol emocional.

Durante la adolescencia se produce una segunda fase en el desarrollo del cerebro - la
primera ocurre durante los primeros 18 meses de vida -, hay algunas conexiones entre
neuronas que desaparecen y otras conexiones se fortalecen, haciendo el cerebro más
eficiente.

Por esto, aprender a tomar decisiones eficaces y un estilo de vida saludable tendrá un
impacto durante toda la vida, de la misma forma que los "malos hábitos" durante esta etapa
también tendrán repercusiones a largo plazo. Por ejemplo: hoy en día las investigaciones
muestran que el cerebro de los adolescentes es más vulnerable a los efectos del alcohol en
la memoria y en el aprendizaje. El consumo frecuente y desproporcionado de alcohol podrá
tener consecuencias a largo plazo, comprometiendo algunas funciones cerebrales.

DEFINICIÓN DE JUVENTUD
El concepto de juventud, un término que deriva del vocablo
latino iuventus, permite identificar al periodo que se ubica entre
la infancia y la adultez. La Organización de las Naciones
Unidas (conocida como ONU) ha definido a la juventud como la etapa
que comienza a los 15 y se prolonga hasta los 25 años de vida de
todo ser humano, aunque no existen límites precisos al respecto. Las
mayores expectativas de vida hacen que, en ciertos
aspectos, personas de 40 años sean consideradas como jóvenes.
En la juventud, el individuo se encuentra
desarrollado a nivel sexual pero carece aún de la madurez
emocional que se requiere para enfrentar los conflictos de la vida adulta.
La adultez, por lo tanto, es un estado al que se llega gracias a la
experiencia de vida.
La juventud constituye un conjunto social de carácter
heterogéneo donde cada subgrupo desea diferenciarse del resto y de
los adultos. Los jóvenes buscan desarrollar un sentido de pertenencia y,
por eso, se agrupan con sus pares.
En este sentido, dada esa necesidad de identificación y diferenciación al
mismo tiempo, es importante recalcar que es frecuente que los jóvenes
decidan pertenecer a determinados grupos en base a su estética o a sus
creencias. Así, por ejemplo, nos encontramos con grupos católicos de
jóvenes, con grupos socialistas o con diversas tribus urbanas.

Entre aquellas, sustentadas básicamente en el tipo de comportamiento o


gustos así como en la ropa, nos encontramos con la juventud que forma
parte de las tribus de heavies, pijos, raperos, góticos, hippies, rockeros o
mods.

El cine, al igual que otros ámbitos artísticos, ha dado un importante papel


a la juventud. Así, encontramos un amplio número de películas que
abordan esta etapa vital desde diversos puntos de vista no sólo para
descubrirla sino también para mostrar lo peor y lo mejor de la misma.

Entre las producciones más interesantes sobre aquella está, por


ejemplo, El Club de los poetas muertos. Peter Weir fue quien en 1989
dirigió la misma que gira entorno a una clase de literatura, a sus alumnos
y a su profesor quien intenta enseñarles que deben luchar por sus
sueños y que deben vivir de la mejor manera posible el presente.
La amistad, la lealtad y el talento que reside en cada joven son, por su
parte, los valores entorno a los cuales gira otra película sobre la juventud.
Se trata de Descubriendo a Forrester, del año 2000, que está
protagonizada por Sean Connery y Rob Brown, quienes interpretan a un
escritor ya retirado que ejercerá desinteresadamente como profesor para
un joven con un gran talento literario al que las condiciones sociales que
vive le impiden desarrollar aquel.
La idea de juventud se aprovecha por lo general para nombrar tanto al
grupo de los jóvenes como al estado de la persona joven. Por
ejemplo: “La juventud está pérdida, cada día hay más droga y alcohol en
las calles”, “Fui un gran jugador de fútbol durante mi juventud”, “Mi tío me
aconsejó disfrutar mi juventud porque después llegan las obligaciones y
responsabilidades”.
Otros usos del concepto hacen referencia a los tiempos iniciales de
una determinada cosa (“La vía láctea, en su juventud, no era estable”),
a la energía o vigor (“Mi padre tiene setenta años pero demuestra su
juventud en todas las fiestas: nunca para de bailar”) y a la rama juvenil
de alguna organización política o social (“La juventud comunista
organizará su décimo congreso nacional durante el próximo mes”).

También podría gustarte