La comunicación asertiva es clave para lograr el éxito en la vida.
Ser asertivos implica ser firmes en nuestras decisiones sin llegar a la pasividad. Es decir, cuando permitimos que otros decidan por nosotros, o pasen por alto nuestras ideas y valores. Y también implica no llegar al extremo contrario: La agresividad. Mediante la asertividad, podemos comunicarnos de una forma clara y concisa, haciendo valer lo nuestro ante los demás. Contar con un criterio en la sociedad de hoy es indispensable para lograr lo que queremos. No existe un líder que no sea asertivo. Generalmente las personas asertivas tienden a tomar decisiones y guiar a otros de manera mucho más sencilla que quienes no cuentan con este rasgo. Por lo regular, las personas que siguen a líderes, son menos asertivas que ellos. Esto no significa que quienes no son asertivos se equivoquen con sus vidas, ni que quienes lo son tengan el cielo ganado. Significa que al menos, cuando se tiene una visión clara del mundo y del camino que queremos recorrer, y además contamos con la habilidad de comunicarlo de forma asertiva, el éxito formará parte de nuestras vidas indefectiblemente. Uno de los valores que promueve la asertividad, es el respeto.
La asertividad es un comportamiento comunicacional en el cual la persona no agrede, sino que
manifiesta serena y abiertamente sus convicciones, ideas y preocupaciones. La asertividad es una conducta de las personas, un comportamiento. Es también una forma de expresión consciente, congruente, clara, directa y equilibrada, cuya finalidad es comunicar nuestras ideas y sentimientos o defender nuestras posturas sin intención de herir o perjudicar, actuando desde un estado interior de autoconfianza, en lugar de la emocionalidad desbordada típica de la ansiedad, la culpa o la rabia. Características de la comunicación asertiva 1. Contacto visual: Se demuestra interés y sinceridad en la mirada. El emisor mira a los ojos de la persona a la cual quieres trasmitir el mensaje, pero sin causar intimidación. 2. Postura corporal: El lenguaje corporal congruente mejora el significado del mensaje. La comunicación no verbal del emisor (gestos, posiciones de manos, postura corporal) es coherente con el mensaje que quiere transmitir. 3. Gestos: Los gestos apropiados ayudan a añadir énfasis, o a enfatizar actitudes. Una buena Comunicación Asertiva se caracteriza porque sus interlocutores manejan muy bien los gestos para guiar la conversación. Una moderada sonrisa y mantener las manos abiertas (para expresar receptividad) también son recomendables. 4. Voz: Un tono bien modulado es más convincente y aceptable, y no intimida. La voz es clara, fluida y sincera, sin titubeos y relajada, pero firme y segura. 5. Oportunidad: El emisor utiliza su juicio para maximizar la receptividad y el impacto del mensaje. Siempre evalúa la comunicación no verbal del receptor para identificar puntos de interés, aspectos que le incomodan en el discurso o incluso su propensión a seguir escuchando más sobre el mensaje. 6. Contenido: Cómo, dónde y cuándo eliges comentar es probablemente más importante de lo que dices. Mantente atento al estado emocional de la otra persona, si ha tenido un mal día, si lo abordas en medio de una jornada ardua de trabajo, o saliendo del trabajo es probable que recibas una respuesta negativa. A manera de resumen, la Comunicación Asertiva se caracteriza porque existe un adecuado contacto visual entre los interlocutores, su postura corporal es congruente y expresa apertura y receptividad, los gestos guían la conversación, la voz es clara y fluida, ambas partes procuran mejorar la receptividad del mensaje y el contexto de la comunicación es el indicado.