Afio III. -Tomo 5. 25 de Febrero de 1902. Núm. 4.

J2a Cmrgia Cíéoírioa

REVISTA GENERAL D E ELECTRICIDAD Y SUS APLICACIONES

P U B L I C A C I Ó N Q U I N C E N A L , I L U S T R A D A

S U M A R I O
Sobre la afinidad química (continuación), por José Echegaray.—Perfeccionamiento de la válvula para altas tensiones,
por Guido Semenza,—Analogías, por M. Gómez Vidal.—Instrumentos de inducción para corrientes alternas.—El
papel de la tiej-ra en la telegrafía sin hilos, por Isidro Calvo.—Bibliografía.—Crónica científica: Micrófono de car-
bón granular, sistema Massari. — El minio como aislador.—Taquímetro del Dr. Th. Hom.—Fabricación eléctrica del
vidrio.—Procedimiento eléctrico de corrosión del cristal y de la porcelana.—Aparato para acoplamiento de pilas. —
Información.—Preguntas y respuestas.—España Automóvil: Procedimiento de ignición magnetoeléctrica Simms Bosch,
por J, G. B.— Crónica científica é información.

SOBRE LA AFINIDAD QUÍMICA

(CONTINUACIÓN)

Como no tratamos de resolver et problema de una manera completa y rigurosa, sino tínica-
mente de dar una idea superficial del efecto mutuo de los tres átomos, haremos dos hipótesis.
Supondremos que se han combinado los átomos M y M', y veremos que la influencia del áto-
mo M* no hará posible esta combinación.
Supondremos en segundo lugar que se han combinado los átomos M y M", y veremos que
la presencia del átomo M' destruye la combinación de los dos primeros, substituyéndose M' á
M" ; de suerte que, en el ejemplo que hemos presentado, la tínica cotnbinación posible parece que
debe ser la M M'.
En suma: reducido el problema á estos términos elementales y limitándonos á estudiar lige-
ramente las tendencias del fenómeno químico de que se trata, bastará que estudiemos la influen-
cia de la curva de la tercera figura sobre las curvas de las dos anteriores.
Supongatnos que se han combinado los átomos M y M' y que se presenta el átomo M"; pues
para estudiar estas tendencias generales de que hablábamos, superpondremos la curva de la tei-
cera figura sobre la curva de la primera, y sumando algebraicamente las ordenadas tendremos
una curva resultante parecida á la siguiente:

V 1

Ya hemos dicho cómo se obtiene esta figura por medio de las curvas (M M') y (M' M"). Por
ejemplo, la ordenada m, n, será la diferencia de las ordenadas m n y m' n*, puesto que son de
diferente signo, correspondiendo ambas a la misma abscisa A n — A n' = A U j .
 78 LA ENERGÍA ELÉCTRICA

La última figura demuestra si A Bj es del orden químico, que la combinación subsistirá, pues-
to que la curva tiene la forma general de la que corresponde á una combinación posible.
Por el contrario, si combinamos la curva M M" con la curva M' M" , como las ordenadas posi-
tivas de la primera, todas ellas son menores que las ordenadas negativas de esta última curva,
la resultante tendrá la forma de la M' M' , de suerte que la combinación M' M" no podrá subsistir
en presencia del átomo M'.
En resumen, y en términos generales, la presencia simultánea de los átomos M' y M" cambia
totalmente la forma de la curva de M M", pero no cambia la forma de la curva M M'.
Creemos inútil insistir en este problema y sólo indicaremos, para terminar, que en la última
figura hemos supuesto, para simplificar, que los puntos A y B estaban á distancia tan pequeña
que podíamos suponerlos confundidos con el origen.

XXI
Como aplicación de las ideas que vamos presentando, digamos algo de un ítnómeno ó, me-
jor dicho, de una hipótesis hoy dominante en la teoría de los ions.
Se supone en la electrólisis que las moléculas de los cuerpos compuestos no se descomponen
por el paso de la corriente, sino que previamente están descompuestas; es decir, que ciertos di-
solventes descomponen las moléculas en átomos y hasta cada átomo en subátomos.
¿Cómo se comprende que esto sea posible?
Ensayemos, no una explicación, sino una hipótesis análoga á otras que venimos empleando
en este trabajo, á saber: que las atracciones entre el éter y la materia ponderable dependan de
potencias superiores de la distancia en el denominador de la fórmula.
Supongamos para fijar las ideas una molécula compuesta de dos átomos, en el centro de una
parte del disolvente, cuyas moléculas líquidas admitiremos, para más sencillez, que están distri
buidas uniformemente alrededor de la molécula de que se trata.
De manera que podremos reducir este caso al de una molécula compuesta, rodeada por una
capa esférica, substituyendo como primera apro.ximación las moléculas del disolvente por una
capa continua.
La figura que sigue representa simbólicamente el caso en que vamos á ocuparnos.
O es el centro de la capa esférica que hemos substituido á la masa
del disolvente.
E A F B es dicha capa continua que substituye á las moléculas de
dicho cuerpo disolvente.
M M' es el conjunto de los dos átomos del cuerpo compuesto, ó
sea su molécula.
Y vamos á demostrar que en esta hipótesis el disolvente tiende á
disociar la molécula compuesta cuando las atracciones varían en razón
inversa de una cierta potencia de la distancia superior á la segunda.

( Continuará.)
 LA ENERGL\ ELÉCTRICA
;9

PEErSCCIONáMIENTO DE LA VÁLVULA PARA ALTAS

POR G U I D O S E M E N Z ^ ^

I U Ingeniero de la casa Edisson, de Milán, Sr. Guido Semenza, ha tenido la bondad de remi-
i timos un folleto con el discurso por él leído en la sesión del i8 de Abril de 1901, de la Aso-
ciación Electrotécnica Italiana.
Su contenido es altamente interesante, y sentimos no reproducido íntegro por lalta de
espacio. .,
Empieza diciendo que un electricista americano aseguraba que la válvula para alta tensión
era más bien un mal necesario que un aparato protector, siendo más los casos en que su fusión
producía daños y desastres que aquellos en que los evitaba. Guido Semenza cree que son suscep-
tibles de mejoras.
Las válvulas de seguridad térmica se emplean en la industria desde que Edisson compuso su
sistema de distribución de alumbrado, tan admirable como completo.
Explica después el principio del fundamento de las válvulas térmicas, la fusión de una parte
de conductor intercalado en la línea por la transformación en energía térmica de una cierta can-
tidad de energía eléctrica. De esta energía térmica, parte se pierde por radiación y parte eleva
la temperatura del conductor fusible; durante el régimen ordinario de corriente, la cantidad de
energía dispersa es la misma que se engendra, y la temperatura del fusible se sostiene muy por
bajo de la de fusión; pero cuando la corriente aumenta por cima de cierto Hmite, la cantidad de
energía térmica producida supera á la irradiada, aumenta la temperatura hasta producir, al cabo
de cierto tiempo, la fusión del conductor.
Hay gran número de válvulas en las que se lee: « 1 0 amperios... 1 5 amperios. . 1 0 0 ampe
rios»; y dice Guido Semenza con gran oportunidad: «¿Qué significan estos números? ¿Indican
valores de corriente de régimen, ó son valores de la corriente de fusión? En este caso, ¿cuánto
tiempo tarda en fundirse? Porque el tiempo que tarda en fundirse la válvula es función de la in-
tensidad de corriente.
Ensayando varias válvulas, ha formado Semenza un di.-igramma cuyas curvas indican para
cada conductor las temperaturas de fusión en tiempos distintos; las abolsas son los tiempos, y las
ordenadas los amperios; en este diagramma puede verse que el fusible que constantemente
puede dar paso á 20 amperios y aun á 30, funde instantáneamente á 50 y tarda 14" en fundirse
con 40 amperios.
Otra causa del descrédito de la válvula es la tarificación de las constantes que en ellas se es-
tampan por semejanza con otras análogas del mismo tipo, sin tener en cuenta las grandes varia-
ciones de unas á otras por cualquier detalle de fabricación, sobre todo en la constitución de la
aleación de que se compone el fusible.
Pero aún hay otra causa de imperfección que hace inútil toda la buena voluntad del cons-
tructor, y es la influencia del portaválvulas. La facilidad para irradiar calor el fusible se aumen-
tará con un portaválvulas de gran superficie metálica ó disminuirá si esta superficie es pequeña.
Aún hay más: el contacto de la válvula con el portaválvulas puede ser insuficiente, y, por
tanto, puede haber un exceso de calor que no tuvo en cuenta el fabricante de la válvula.
«Todos estos defectos son debidos—decía S e m e n z a - a l emperismo, y son susceptibles de
evitarse en su mayoría.»
Desde luego se comprende la absoluta necesidad de que válvula y portaválvulas formen un
todo inseparable, dejando de ser independientes.
Aconseja poner en las válvulas indicaciones más completas; 10-20-40, «sería la tara de una
 8o LA ENERGÍA ELÉCTRICA

válvula de lo amperios de régimen y 20 de fusión en 40" », y considerando que la fusión podría

siempre suponerse en un número de segundos determinado, por'ejemplo, 40, bastaría poner 10-20.
Las válvulas para altas tensiones (desde i.ooo voltios en adelante) tienen, á más de los de-
fectos generales, otros propios, entre los que el principal es la formación, al fundirse, del arco
eléctrico, que quema la v:ilvula, el portaválvulas y alguna vez los cuerpos metálicos pró.ximos;
para la extinción del mismo se ha empleado con é.xito el soplo eléctrico, procedimiento imposi-
ble de usar con las corrientes alternas.
Para conseguir la extinción del arco se han usado otros muchos procedimientos: tipo de tubo
abierto, de tubo de vidrio lleno de yeso y polvo de talco, cámara reducida, etc., etc.
En el laboratorio de la Sociedad Edison se han ensayado todos ellos.
Si las pruebas no hubiesen podido ejecutarse más que en un alternador de lOO kilovatios,
pudiera encontrarse una válvula que funcionara regularmente; pero sometida á pruebas con un
alternador de algunos miles de kilovatios, los resultados no hubieran sido igualmente satisfactorios.
Consiste esto en que el cortocircuito, en un alternador de 100 kilovatios, reacciona sobre
la máquina y disminuye su velocidad, con lo que las variaciones de tensión en la válvula son
más pronunciadas en caso de potencia menor; la extinción del arco es, pues, más fácil en este
caso.
El resultado de las pruebas recomienda el uso de las válvulas de tubo abierto, demostrando

Tipo C

SeX£Q/tf f/'

.1

Tipo C Tipo C

Tipo A

la experiencia que la extinción del arco es factible aun con elevadísimo voltaje (14.000) y aun
con alternadores muy potentes.
Un gran inconveniente presenta esta forma del tubo abierto, si bien es casi común también
á las otras; la cantidad de metal que vaporiza en el momento de la fusión es muy grande: 100,
150 y hasta 200 gramos de aleación pasan al estado fluido.
Estos vapores salen expulsados del tubo y pueden con facilidad producir un nuevo arco entre
otros conductores, es decir, un cortocircuito en el cuadro con todos sus graves inconvenientes y
peligros.
La Sociedad Edison, reconociendo estos inconvenientes, ha tratado de solucionar el proble-
ma, creando un nuevo tipo y procurando no alterar profundamente la constitución del cuadro.
 LA ENERGÍA ELÉCTRICA 8i

El fusible está sumergido en aceite, lo cual no es nuevo; pero la forma en que conocíamos las
válvulas de aceite eran muy primitivas para adaptadas á los modernos cuadros—dice Semenza--,
y puesto que se deseaba no alterar la actual constitución del cuadro, lo mejor era convertir los
tubos de porcelana en depósitos de aceite.
Las adjuntas figuras representan en cortes los tipos de válvulas de aceite que estamos descri-
biendo; en la parte superior nada ha cambiado (tubo abierto); la parte inferior esta modificada
para recibir un tapón roscado, que lleva al propio tiempo el alejamiento del fusible. Cuando el nu-
mero de fusibles es múltiple, se usa para el tapón inferior la forma indicada en el diseño.
Las ventajas del empleo del aceite son: apagar el arco, bien sea por su poder dieléctrico, sea
por no permitir la volatilización del metal. Además hace que la válvula se funda lentamente y
permita que se reduzca casi á la mitad el diámetro del fusible.
Los metales empleados para la fabricación de fusibles, desde que se ha sabido que las alea-
ciones no eran prácticas por la inseguridad de su composición, son generalmente el cobre, el
aluminio y el estaño, todos ellos aplicados con un excelente éxito. Los estudios hechos sobre
metales simples y sobre aleaciones han tenido como punto principal de vista su temperatura de
fusión.
En las válvulas de aceite es preciso emplear un metal de temperatura de fusión baja; el metal
más indicado es el estaño, y da muy buenos resultados; pero en muchos casos hay que dar la
preferencia á las aleaciones, y la razón es la siguiente: un elemento de gran importancia en las
válvulas es la relación entre la corriente de fusión (en un número dado de segundos) y la corriente
de régimen. Según los casos, podrá ser muy conveniente que esta relación sea más ó menos con-
siderable, y en general es preferible que sea más bien pequeña.
En la práctica hemos observado que, aun con fusibles de estaño, esta relación era mayor que
con los compuestos de partes iguales de plomo y estaño; así es que, á pesar de sus defectos, te-
nemos que dar la preferencia á las aleaciones.
También la calidad del aceite tiene una gran influencia sobre la corriente de régimen y sobre
'a de fusión, puesto que es el vehículo de una buena parte del calor desarrollado, que comunica
a la caja de porcelana.
De aquí una diferencia notable entre los aceites pesados y los aceites ligeros. La experiencia
ha demostrado que con los aceites ligeros la relación entre el valor de la corriente de fusión y el
de la corriente de régimen, es bastante mayor que con aceites pesados. Hay, pues, que emplear
estos últimos; además, por su fácil inflamabilidad, hay que prescribir los aceites ligeros.
«Los aceites que empleamos--dice el Sr. Semenza—son los aceites ordinarios detenidos por
el cilindro.»
En la línea trifásica de Milán hay en ejercicio 216 válvulas del tipo A y 165 del B; la ten-
sión es de cerca de 3.700 voltios y el funcionamiento es bueno.
En la de Palermo, la tensión es de 6.000 voltios.
Y por último, en la línea de experimentación de Milán á Mouza y Sesto San Juan, la tensión
media es de 14.000 voltios y el funcionamiento de las válvulas igualmente bueno, á pesar de las
frecuentes crisis y de algunas sobrecargas, producidas unas veces por errores de manipulación y
otras por vía de ensayo, y en todas ellas las válvulas de aceite respondieron admirablemente.
Donde no siempre dieron buen resultado fué en la Oficina de Santa Rudegunda, donde dos
veces, en caso de pérdida de sincronismo de los motores, no respondieron como sc esperaba;
pero eran muy especiales las condiciones en que se encontraban por la mala marcha, casi cons-
tante de los motores.
A pesar de estos dos casos, cree el Sr. Semenza poder asegurar que las válvulas de aceite,
sin pretender que sean perfectas, representan un verdadero progreso.
 82 LA ENERGÍA ELÉCTRICA

^ I se tiene un generador de electricidad, pila ó dinamo, y un conductor en comunicación con

ia tierra, dispuesto para (jue por él circule la corriente eléctrica, tan luego como el segundo
f se ponga en comunicación con el primero y se cierre el circuito que la corriente haya de
recorrer, ésta se establece; pero es sabido que desde el primer instante no recorre el conductor
con toda su intensidad; el conductor se carga primero de una cierta cantidad de electricidad, que
depende de su capacidad electrostática, y cuando pudiéramos decir que ésta queda satisfecha,
así que el conductor llega á saturarse de la electricidad que en él puede permanecer en estado
estático, entonces la corriente circula con libertad, adquiere su intensidad normal, y salvando su
período variable, entra en el período de régimen permanente.
Si tenemos á la vez un generador de energía, caldera de vapor, salto de agua etc., una má-
quina dispuesta para transformarla en trabajo industrial, y hacemos que el motor que suministra
el generador actúe sobre el órgano receptor de la máquina para establecer el movimiento y comu-
nicarlo por el intermedio de la transmisión al útil ú operador, sabemos también que después del
período de arranque, en el cual la velocidad de los órganos de la máquina va creciendo, á partir
de cero, sucesivamente, llega el período normal, en que esos órganos alcanzan su velocidad
de régimen y la transmisión ó transporte del trabajo se efectúa regularmente, convirtiéndose,
por medio del operador, el trabajo mecánico en trabajo industrial al efectuarse la obra que la
máquina debe hacer.
El conductor eléctrico parece absorber, durante el período variable de la corriente, una cierta
cantidad de energía, porque ésta es en resumen la electricidad, al constituir una modalidad de
la energía universal, cantidad de energía que es función de la naturaleza y las condiciones del
conductor.
La máquina, durante su período de arranque, parece absorber también otra cierta cantidad ]
del trabajo suministra jo por el motor al actuar sobre el órgano receptor; otra cierta cantidad de \
energía, que es función á su vez de la naturaleza y las condiciones de la máquina, clase y dispo- j
sición y enlace de sus órganos. El uno y la otra, después de este primer período, y desde el ins- '
tante en que termina, se prestan á la circulación libre y regular de la energía: el conductor en !
forma de electricidad, la máquina en forma de trabajo, y ambos sirven para el transporte de ella.
Existe, pues, perfecta analogía entre la máquina y el conductor en este primer período, de
velocidad variable para los órganos de la primera, de intensidad variable también para la corriente
eléctrica que circula por el segundo; de variación de la cantidad de trabajo mecánico que la má-
quina va sucesivamente consumiendo, y variación de la cantidad de trabajo eléctrico que suce-
sivamente también va consumiendo el conductor.
¿Qué ha sido y dónde está el trabajo absorbido por la máquina en su período de arranque.''
Se ha empleado en vencer la inercia de esa máquina, convirtiendo el estado de reposo de sus
órganos en el estado de movimiento de los mismos. Por eso en el período de parada, que co-
mienza en el instante en que el motor deja de actuar sobre el receptor, restituye el trabajo gas-
tado en el período de arranque al tornar los órganos del movimiento al reposo, función inversa
que requiere igual suma de trabajo, regulada por la inercia de la máquina en movimiento, igual
á la inercia vencida desde el reposo, hasta imprimirle tal movimiento, pero de signo con-
trario que la primera. Ese trabajo, esa energía aparentemente gastada en el período de arran-
que, está acumulada en la máquina; se halla en ella en estado de potencial durante el período
normal de su movimiento, y, por lo tanto, no se pierde ni puede perderse para su rendimiento,
puesto que pasa de potencial a actual al iniciarse el período de parada.
¿Qué ha sido y dónde está la energía que en forma de electricidad ha consumido el conduc-
tor durante cl período variable de la corriente.'' Se ha empleado en formar el campo elcctromag-
 LA ENERGIAjLECrRlCA 83

nético de Marwell, donde existen fuerzas eléctricas y fuerzas magnéticas, que han ido desarro•
liándose paulatina y sucesivamente durante el referido período variable, y que permanecen cons-
tantes en intensidad mientras subsiste el de régimen permanente, al comienzo del cual alcanza-
ron su valor máximo; constancia de intensidad que demuestra es también constante la cantidad
de energía que está en el conductor dispuesta á producir los fenómenos de inducción, y que no
es otra cosa que la electricidad que constituye su carga electrostática, electricidad que del estado
estático pasa al dinámico, cuando, al interrumpirse la corriente, da origen á la inducida, que se
desarrolla instantáneamente en un circuito próximo, siendo ella instantánea también; pero resti-
tuyéndose así la energía que pareció absorber el conductor y que tampoco se ha perdido.
En estafunción de absorber primero y de restituir después trabajo la máquma y el conduc-
tor, mecánico la primera y eléctrico el segundo, existe otra perfecta analogía entre ambos.
Las piezas que constituyen los órganos de toda máquina no pueden moverse sin oponer al
movimiento las resistencias pasivas, de las cuales la principal es el rozamiento, que transforma
en calor la energía empleada en venceria, y que se pierde totalmente para el efecto útil o el ren-
dimiento de la máquina; el trabajo motor ha de ser constantemente igual en todos los períodos
del movimiento al trabajo resistente, y éste se compone del trabajo útil más el de las resisten-
cias pasivas; con la máquina, pues, hay pérdida de energía, que se transforma en calor, y pér-
dida de energía que se transforma en calor hay también cuando la corriente recorre el conductor,
puesto que éste se calienta al paso de la corriente, siendo el calor desarrollado R P , según la
fórmula de Joule, en la cual R es la resistencia del conductor é I la intensidad de la corriente;
calor que es producto de la transformación de trabajo eléctrico, como el calor desarrollado por
los rozamientos es producto de la transformación de trabajo mecánico.
El conductor presenta, por tanto, su resistencia, análoga á las pasivas que hay que vencer
en la máquina; en él se pierde energía como en ésta última, y la que resulta perdida para el
efecto útil, se transforma de igual manera y én la misma cosa en ambos, existiendo también en
esto analogía perfecta entre el conductor y la máquina. Además, en ésta las vibraciones de los
apoyos y de los ejes durante el movimiento son causa también de que se pierda energía que de
ella se escapa y pasa á la tierra; y en todo conductor se pierde asimismo electricidad por efecto
de la imperfección de su aislamiento, que no es posible obtenerio por completo, y en esto el con-
ductor presenta otra analogía con la máquina.
Así, pues, al comenzar á desempeñar los dos su papel de transmisores ó transportadores del
trabajo, ó sea en el período variable ó de arranque, durante el período normal ó de régimen de
este transporte, y cuando cesa la función que desempeñan ó llegado que sea el tercer período ó
periodo de parada, el conductor y la máquina se conducen de idéntica manera: ambos transmi-
ten trabajo ó energía, y esta misión la desempeñan mediante los mismos períodos, durante los
cuales la energía transmitida ó transportada lo es con los mismos accidentes, con las mismas
pérdidas reales ó aparentes, y, por consiguiente, la máquina y el conductor eléctrico resultan así
identificados por completo. Pero en esta función de transportar la energía, el conductor eléctrico
tiene grandes ventajas sobre la máquina; ésta la transporta á muy corta distancia: la del órgano
receptor al útil ú operador; el conductor eléctrico la lleva á toda distancia que se desee ó sea
necesario, cuando se le dispone convenientemente para ello: el conductor eléctrico es, pues, una
verdadera máquina, pero máquina más sencilla, más perfecta como transportadora de la energía
ó el trabajo á distancia, pues realiza entre límites amplios lo que á la máquina no es dado reali
zar más que entre muy restringidos límites; y esto lo efectúa sin necesidad de palancas, sin en-
granajes, sin émbolos, excéntricas ni bielas, porque basta un alambre ó un cable para substituir
en ese transporte á tal complicación de piezas, á condición de transformar en corriente eléctrica
la energía del motor por medio de la dinamo, G(3MKZ VJ1).A.1-
Coroiiel de Kstado Mayur.
 84 LA ENERGÍA ELÉCTRICA

Instrumentos de inducción para corrientes alternas.

1 p os instrumentos de inducción para corriente alterna, de la Sociedad general de Electricidad

vi de Berlín, se basan en los efectos electrodinámicos, ejercidos por ciertas corrientes, y están
dispuestos en la forma siguiente: á ambos lados de un disco giratorio alrededor de un
eje A (fig. I ."' >) se hallan dos carretes de corriente alterna M, colocados uno enfrente de otro, y
delante de ellos dos placas de metal ó pantallas T que cubren en parte los polos. Parte de las
líneas de fuerza que van de uno á otro encuentra en su camino las pantallas fijas, y otra parte,
á la izquierda de las pantallas, obra sobre el disco giratorio y origina en él corrrientes inducidas,
las cuales, por ser producidas por el mismo campo magnético, tienen idéntica d'rección que las
de las pantallas. Como, según un principio de electrodinámica, se atraen las corrientes en esas
condiciones, y las originadas en el disco tienen su lugar en la parte izquierda del mismo, cerca
de la parte descubierta de los polos magnéticos, de ahí que aquel disco reciba un impulso para
moverse en la dirección de la flecha. En la práctica las pantallas, en vez de rebasar por la derecha
del disco, están encorvadas, y envuelven por encima y por la derecha los polos respectivos. Ade­
más obra sobre el disco el imán permanente que se ve en la fig. 2.-'', á fin de hacer efecto de un
buen freno ó moderador. La fig. 2.» muestra el interior, y la 3.* el exterior del voltímetro y am­
perímetro. La principal ventaja de estos instrumentos estriba en su buen sistema de regulación,
lo cual es de especial importancia en el acoplamiento en cantidad de máquinas de corriente alter­
na ó polifásica, en los motores sincrónicos y en todos aquellos en que ha de contarse con una carga
muy variable. Otra ventaja consiste en que sus datos dependen de la forma curva de la corriente
alterna en menor grado que los llamados instrumentos electromagnéticos, los cuales se fundan en

Figura Figura 2

la atracción y repulsión de una pieza de hierro de determinada forma por el campo magnético
de una bobina atravesada por la corriente. Por lo que respecta á la frecuencia de la corriente,
es de advertir que el voltímetro de este sistema tiene próximamente la misma dependencia de
ese dato que los instrumentos electromagnéticos; el amperímetro tiene alguna mayor depen­
dencia; pero esto no tiene importancia, porque ya por otros motivos casi todas las Centrales
están dispuestas para una cierta frecuencia, que puede tenerse en cuenta en la calibración; así,
pues, al pedir un aparato es preciso expresar el dato relativo á la frecuencia.
VOLTÍMETRO
Las figuras 2.-1 y 3.^' muestran el vcdtímetro por dentro y por fuera respectivatnente; la 4."
hace ver tres escalas en tamailo mitad pró.ximamente; .se hacen para la tensión que se desee
hasta 550 voltios; colócanse en una caja de latón, y además llevan otra de cstabilita provista en
 LA ENERGÍA ELÉCTRICA 85

la parte posterior de contactos, y de una resistencia intercalable en forma de bobina de reacción,

para colocarla detrás del cuadro de distribución. Por lo común sólo se preparan hasta una ten-
sión de l.ooo voltios, porque para las tensiones mayores es preferible la conexión con un
transformador-medidor, á causa de la mayor seguridad del servicio. Estos voltímetros pueden,
como es natural, y del mismo modo que los demás, emplearse como verificadores de aislamiento
en cuadros de conmutadores para una cierta tensión de servicio. Sea dicho de paso, que al hacer
un pedido de voltímetros es necesario expresar cuál ha de ser la mayor medida que con ellos

^ 200250
Figura 4

se ha de efectuar, ó la tensión corriente en que van á emplearse; se comete á menudo la falta

de pedir un voltímetro capaz de 200 voltios para una máquina cuya tensión normal de servicio
es esa cifra, cuando en tal caso debería pedirse un voltímetro que alcanzase lo menos á 2io ó
220 voltios, ó bien expresarse claramente que la tensión de servicio es de 200 voltios.

AMPERÍMETROS
Los amperímetros para fuerzas de corriente hasta 30 amperios tienen para recibir la co-
rriente dos casquillos de rosca; de 30 á 600 amperios, los contactos, que están en la parte de
atrás, tienen la forma de unos cerrojos de cobre cuyos ejes distan entre sí n o mm. Para los de
alta tensión se ha introducido una novedad, que se traduce en aumento de la seguridad de ser-

Figura 5 Figura 6

vicio; con tensiones muy altas el cuadro de conmutadores constituye, por lo que atañe á la se-
guridad del servicio, una dificultad mayor que las máquinas ó transformadores, puesto que en
las últimas puede extenderse el límite de las tensiones, para las cuales hay seguridad de servicio
con sólo ponerlas en aceite. No ocurre esto con los instrumentos de medida, y, en consecuen-
cia, se ha utilizado en los amperímetros la propiedad ya en uso en los voltímetros, es á saber:
la actitud de la corriente para transformarse. La figura 5-^ muestra el esquema de una medición
de corriente por el intermedio de un transformador de la misma; la ó." es un transformador para
250 amperios. El carrete que conduce la corriente de alta tensión que ha de medirse consta aquí
 86 LA Li\EFiGÍA ELÉCTRICA

de una sola vuelta, y está cuidadosamente aislada, lo que es fácil conseguir con cstabilita ó
micanita. El enrollamiento secundario que conduce al instrumento de medida tiene sólo peque-
ña tensión; pero la suficiente, sin embargo, para que el instrumento pueda ponerse á conside-

Figura 7

rabie distancia del transformador y del conductor de alta tensión; esa distancia puede ser de va
rios metros con alambres de unión de i á 2 mm.; para un metro basta alambre de medio mili-

I i !

1 ^
fignra 8

metro de grueso. El transformador puede ponerse ligeramente en aceite. El instrumento se pare-

ce mucho al voltímetro representado en las figuras 2." y 3."
El uso de transformadores de corriente no es sólo procedente con altas tensiones, sino con
las bajas, cuando se trata de grandes intensidades. En tales casos debe colocarse en el instru-
mento mismo la sección de cobre necesaria para la línea, con lo cual podrá suplir, en caso
 LA ENERGÍA ELÉCTRICA 87

de interrupción accidental, á las barras conductoras de la corriente; en este caso se coloca un

transformador de corriente en dichas barras, y para llevarla al instrumento mismo basta con dos
alambres delgados, como se ve en la fig. 7.*, que muestra un amperímetro de la clase indicada
para 300 amperios con transformador.
El empleo de transformadores para la medición de intensidades ofrece aún otra ventaja, que
es la de poder emplear el nnsmo instrumento con el auxilio de un conmutador, para comparar v^a-
rios circuitos sin interrumpir las corrientes, lo que es una ventaja en las polifásicas, en la niaj'or
parte de las cuales se requiere poder comparar exactamente entre sí las corrientes en todo con-
ductor. Para ello sería preciso dos ó tres amperímetros que concordasen y estuviesen convenien-
temente verificados. La figura 8.* da el esquema para la com|)aración de dos circuitos, provistos
cada uno de un transformador de corriente, cuya envuelta secundaria está unida con el instru-
mento mismo por el intermedio de un conmutador.
En ciertas circunstancias puede desearse prescindir de los indicados transformadores de
corriente, para lo cual se fabrican amperímetros de inducción, también en estuche de estabilita,
de la .misma forma que los electro magnéticos hasta ahora conocidos. El empalme se hace por
cerrojos de cobre colocados en la cara posterior.
Al hacer, pues, un pedido de amperímetros de alta tensión hay que distinguir entre tales
aparatos con transformador de corriente y los mismos con estuche de estabilita. La fig. g." mues-
tra tres graduaciones de amperímetros en escala de un medio, y de ellas, la de más abajo, corres-
ponde á un amperímetro con dos transformadores de corriente, pudiendo convenir á varios lí-
mites de medida, como indica la fig. S."
(Traducción del alemán.)
(Continuará.)

PAPff
il i TIERRA EN LA TELEGRAFÍA 1 HILOS
Kxpei'ienciaíí de M. P i l s o n d s k i .
(CONTINUACIÓN)

|ANDO por supuesto que se encuentren capas geológicas continuas y capaces de servir de
conductor á una corriente, dice M. Villot que una de estas capas podrá hacer de conductor
de ida y otra de conductor de vuelta; pero con sus mismos argumentos se le puede demos-
trar que no es así, puesto que si las capas geológicas son conducturas, y aquellas que sirven para
la transmisión de despachos están en contacto, ó separadas por otra capa también conductriz,
formarán cortocircuito en todos los puntos y no será posible ningún envío de corriente. En el
caso de ondas hertzianas no habrá, como antes se ha dicho (fig. 3.''), nada más que un solo con-
ductor. Claro es que las razones precedentes no bastan para demostrar en absoluto la imposibi-
lidad de la solución del problema. Si todas las capas geológicas forman en su conjunto un con-
ductor de gran capacidad, podrían servir para constituir algo semejante á la telegrafía por un
solo hilo. Concerniente á este mismo asunto ha publicado M. Poncelet el resultado de las expe-
riencias de M. Guarini, verificadas con una disposición análoga á la representada en la fig. 8.a,
en que A es el o.scilador; 77, la bobina de inducción; P, el origen de electricidad; C, el interrup-
tor ó manipulador, y D, un receptor telefónico. (Electrical Revietv, núm. 1.207, 11 de Enero de
1901, páginas 84, 85 y 86, y núm. 1.208, 18 de Enero de 1901, páginas 95 y 96.) Pero desde
luego se ocurre preguntar: ¿ocurrirá lo mismo en el caso presente, en que el conductor es de una
capacidad tan grande como lo es la tierra?
 88 LA ENERGÍA ELÉCTRICA

Viene á ser la tierra en electricidad lo que el Océano es en hidráulica. La tierra constituye

prácticamente una capacidad infinitamente grande, así como el Océano es un depósito enorme-
mente grande. Aunque se eche agua en el mar á muy alta presión, su nivel no cambiará de una
manera sensible; indudablemente se habrá producido algún efecto; pero éste habrá tenido lugar
en un radio muy limitado. Asimismo una alta presión eléctrica produce en la tierra una pertur-
bación eléctrica sensible á la distancia de i, 5, ó acaso lo kilómetros; pero no más allá, á no ser
que se ponga en juego una cantidad colosal de electricidad. El rayo que cae en un punto de la
tierra y cuya potencia eléctrica puede contarse por millones de vatios, no produce perturbacio-

nes en el suelo nada más que á distancias muy limitadas aun sobre los cohesores más sensibles.
Además existe un hecho que demuestra hasta la evidencia la imposibilidad en que se encuentra
el hombre para producir en la tierra un cambio de tensión ó nivel eléctrico; todo conductor unido
á tierra toma el potencial de ésta; por consiguiente, ¿cómo puede pretenderse enviar una co-
rriente á través de la tierra sirviendo ésta de conductor (en la telegrafía con hilos, por ejemplo),
si las extremidades de los conductores unidas á tierra, independientemente de otro origen de

electricidad, adquieren el mismo potencial que aquélla, toda vez que para producir corriente es
necesario que exista una diíerencia de potencial?
Desde luego se puede afirmar que la telegrafia eléctrica sin hilos está basada sobre la radia-
ción y no sobre la conducción eléctrica. Esta radiación puede tener lugar á través de obstáculos
y aun á través del agua del mar. (Electrical Reviezu 24 de Mayo de 1901, pág. 871.) Varios he-
chos prueban esto: i." Sobre tierra, y especialmente en las ciudades, las radiaciones eléctricas
son detenidas por construcciones de hierro, material de líneas telegráficas y telefónicas y por
otras causas que tiendan á debilitarlas. Esto ha sido comprobado por todos los experimentado-
res, M. Guarini entre otros, y prueba lo importante que es la circunstancia de que esté lo más
despejado posible el espacio que separa dos estaciones de telegrafía sin hilos. 2." M. Briffant,
comandante de ingenieros del ejército belga, ha observado que haciendo uso de una bobina de
 LA ENERGÍA ELÉCTRICA 89

gran fuerza, y á pesar de existir comunicación con tierra en el transmisor y receptor, no era po-
sible la comunicación sin lulos á t'-avés de los terraplenes del recinto fortificado de Amberes,
cuando las antenas estaban más bajas que la parte superior del terraplén. La comunicación lle-
gaba á ser posible cuando se colocaban las
antenas más altas que el terraplén (figuras
9." y 10). Esto confirma lo que antes se ha
dicho, y prueba que una perturbación eléc-
trica comunicada á la tierra no es sensible
nada más que en un radio muy limitado,
-O O—I I I H K » 1—1 dependiendo además de que la naturaleza
del suelo sea más ó menos conductora, y de
í WAW-
la potencia del origen de electricidad em-
pleado. El agua del mar es mejor conductora
de la electricidad que la tierra: así lo han
demostrado las experiencias de telefonía sin
hilo continuo verificadas por Preece, en las
Wit} que se obtuvo mejor resultado sumergien-
^ do las extremidades de los conductores en
^i 3gua del mar que poniéndolas en comunicación con tierra.
En las experiencias de telegrafía sin hilos verificadas por M. Guarini entre Bruselas y Mali-
nes, no fué posible establecer buena comunicación mientras no estuvieron situadas las antenas á
un nivel determinado. Esto demuestra que es necesario exista alguna orientación entre el radia-
dor y el colector de ondas electromagnédcas. (Electrical Review 7 de Junio de 1901.) 4.° La co-
municación cesa suprimiendo en estaciones alejadas las dos antenas (fig. 11), la del transmisor
(fig. 12) ó la del receptor (fig. 13). 5.» Los efectos aumentan con la superficie de la antena recep-
tora. (Electrical Revieiv 28 de Junio de 1901, pág. 1.112.) 6." La comunicación es posible á dis-
tancia de 23 kilómetros (experiencia Guarini) sobre la tierra, sin que estén unidos eléctricamente
á ésta ni el transmisor ni el receptor. 7.° M. Marconi y M. Guarini han demostrado que la toma
de tierra puede ser reemplazada por una gran capacidad; por ejemplo, la caldera de una máquina
de vapor. Esto prueba que el papel de la tierra es el de capacidad.
ISIDRO C A L V O
Profesor de ia Academia de Ingeniero.^.
( Concluirá.)

b i b l i o g r a f í a .
CARTILLA DE ELECTRICIDAD PRÁCTICA—Novena
edición.
El distinguido jefe de la Armada D. Eugenio
Agacino y Martínez, acaba de publicar una nueva
edición de su conocidísima Cartilla de electricidad.
Esta i^iltiina edición no es ya una cartilla, es un
libro,- es un tratado de electricidad práctica que no
conserva de cartilla más que el nombre y el precio,
lo cual prueba la coexistencia en el ilustrado jefe
de la Armada de dos cualidades altamente reco-
mendables: la modestia y el desinterés.
El obrero inteligente que vive de su trabajo, y al
decir obrero inteligente aliarco desde oficial de
taller al ingeniero, necesita, ansia, más que la obra
de gran densidad científica que deleite por sus pro-
fundas disquisiciones, aquella otra que le lleva de
la iTiano á la concepción clara de un fenómeno que
momentos antes en el taller era para él completa
duda.
El que escudriña, el que profundiza cualquier
fenómeno, con facilidad se pierde, y si no en-
cadena los razonamientos, una maraña terrible,
una nebulosa más terrible que la de la ignorancia,
llega á sumirle en el desencanto y la desesperación.
Después, es indudable que tras esa lucha de ideas
viene la calma en el cerebro y se depositan, se-
 90 LA ENERGÍA
dimentándose, principios y razonamientos que no
se borran jamás.
Pero en el obrero inteligente estos estudios tie-
nen que ser, aunque él no quiera, lo accidenta],
porque la lucha por la vida se le impone robándole
el tiempo que aquellas meditaciones exigen-, nece-
sita, pues, más que libros que le hagan dudar, li-
bros que descansen su cerebro; más que ideas ([ue
gasten su facultad de pensar, ideas que alimenten
su inteligencia, y en tal concepto bien podemos
afirmar que la nueva cartilla de -Agacino es el pan
del electricista.
El libro que tiende á hacer sabios, puede fácil-
mente quedarse sin cumplir su cometido; el hbro
que tiende á facilitar al hombre laborioso el acceso
á una ciencia, es totalmente imposible que no lleve
á muchos á la ciencia misma.
Desgraciadamente en Espaila escasean, por no
decir que no existen, las bibliotecas de vulgariza-
ción científica á la manera que se editan en el
extranjero, escritas por los hombres de ciencia más
notables y en libritos pequeños, es decir, que care-
cemos de pan bueno á precio bajo; ¿qué extraño es,
pues, que haya hambre? ;Qué extraño es que libros
como el de Agacino lleguen á la novena edición?
En ocho grandes capítulos está dividida la obra;
el primero trata de las leyes generales de la electro-
dinámica, el segundo de los aparatos de medida y
utihzación.
En el capítulo destinado á la descripción de
máquinas eléctricas, se estudian los tipos más mo-
dernos, tanto de corriente continua como de co-
rriente alternativa y polifásica, el acoplamiento de
CRÓNICA
m i c r ó f o n o de carbón {¡rannlar,
s i s t e m a ülassarí.
La principal novedad de este aparato, del que ha
sacado patente su inventor, M. .Alfonso M. Massari,
consiste en el medio ideado para su arreglo sin ne-
cesidad de desmontarlo, lo que se consigue del
modo que vamos á explicar:
En las figuras i." y 2.^ A representa un disco de
materia aisladora, que tiene un orificio central y
lleva unidos dos rebordes cilindricos a y (pie,
perpendicularmente á su ¡jlano, se prolongan en
direcciones opuestas; E es el portavoz, unido al re-
borde a por tornillos l>; C es un cilindro hueco de
metal, que lleva en sentido de su directriz una ra-
nura, en la que se aloja la horquilla R (cuyo objeto
ELÉCTRICA
alternadores y los cuidados que deben observarse
en el entretenimiento y arreglos de las dinamos.
Pilas, acumuladores, timbres y telefonía forman
la materia del cuarto capítulo, y en él se discuten
los más modernos tipos de acumuladores, y se
exponen ejemplos prácticos sobre los mismos.
Con gran claridad se estudia en capítulo extenso
el problema del buen establecimiento de una cen
tral, elección de motores y calderas, la producción
máxima y factor de consumo de una central, con
gran copia de datos económicos recogidos entre
las centrales más importantes de Etiropa y América.
El capítulo séptimo está dedicado á la tracción
eléctrica por líneas aéreas, subterráneas y acumula-
dores, centrales para tranvías y ferrocarriles eléc-
tricos.
El táltimo capítulo es un interesante resumen de
las aplicaciones más notables de la electricidad en
estos momentos: telegrafía sin hilos, por ondas te-
lúricas, perforadoras de minas, ascensores para mu-
niciones, etc., etc.
Tal es, en pocas palabras, el examen de la obra
que con tanto gusto como imparcialidad recomen-
damos á nuestros lectores.
Y me despido del Sr. Agacino hasta muy pronto,
pues según nos anuncia en su libro, tiene en pre-
paración una obrita que tratará de vulgarizar los
asombrosos adelantos de la telegrafia sin hilos.
Una advertencia que seguramente me agradece-
rá el autor: procure corregir un error de imprenta
que existe en la página 23, línea 19 y 20; tal error
sería poco importante para muchos lectores, pero
para algunos podría ser causa de confusión.—H. H.
CIENTÍFICA
ya veremos), y que además se prolonga por un re-
pliegue que ajusta al reborde aislador a^ ya citado;
d es un disco con un orificio central, al cual va
adosado un extremo del tubo D, que pasa á través
de la plancha A; rt" es un pequeño cilindro hueco
unido al borde exterior de d.
El tubo D, disco d y cilindro ÍZ" son de bronce ó
latón, y pueden constituir una sola pieza.
B es un resorte en espiral situado en el disco d
y el asiento formado por el reborde del cilindro C;
en el extremo libre de D hay una Itierca d'-, asegu-
rada por una contratuerca d-K
El cilindro //' contiene un bloque de carbón E,
situado delante del orificio central del disco d y su-
jeto en esta posición por tiza F; / e s algodón ó
 LA ENERGÍA ELÉCTRICA
ni
fieltro colocado delante de E ; / es un disco de al-
godón, y . carbón granulado. H es un diafiagma
de metal, é Y un disco eldsüco, que separa y aisia
el diafragma del portavoz. En el tubo D esta aps
tado un reborde aislador «I Una varilla de metal
pasa á través del reborde a'- y va á apoyarse contra
el carbón E-, g puede regiüarse con la tuerca g .
El transmisor está sostenido en el soporte P por
medio de la horquilla R, que ajusta en la ranura
del cilindro C, y está asegurada por los tornillos
;.3 y f\
Uno de los alambres T está unido á R, y el otro
T' á una pieza de contacto / que se comunica con
la varilla g. El circuito queda en la parte supenor
constituido por el alambre T, horquilla R, cilindro
C, tubo D, disco d y cilindro rf'; y en la parte infe-
rior por el alambre r, pieza de contacto varilla
bloque E y carbón granulado quedando ce-
rrado con el diafragma al ponerse éste en contacto
á la vez con el cilindro y el carbón granulado e.
Cuando el aparato funciona, el diafragma vibra, y
de este modo varía la presión de contacto con el
cilindro El resorte S en su estado normal em-
puja al cilindro d'j disco d y tubo D hacia el dia-
fragma, oponiéndose á esta acción la tuerca d-, que
apoya el resorte contra el extremo del cilindro C, y
que permite, por tanto, regular con suma exactitud
el grado de presión del diafragma, y una vez con-
seguido, se fija dicha tuerca por medio de la con-
tratuerca d^.
Si el carbón granular se saliera, como algunas
veces acontece en los transmisores de este tipo,
hasta sacar el portavoz B, quitando los tornillos ¿,
y separando el diafragma se puede reemplazar el
carbón con facilidad.
Para sacar el aparato del soporte P basta levan-
91
tar la horquilla
norqi^ R á la posición indicada de puntos
q , , 1, idea del aparato
:„„eniosa y que el procedimiento de ajuste
^^^J^^^J,, suele haber necesidad
resu yP ^^^^^^^^ ^.^^ cuidadosamente
de volver
montado.
líl m i n i o c o m o a i s l a d o r .
Se ha comprobado que el minio mezclado con
aceite de linaza es un excelente aislador, barato y
de conveniente aplicación á los cables y conducto-
res eléctricos aéreos. El minio así preparado, y en
estado líquido, no posee ciertainente gran potencia
aisladora; pero expuesta al aire la mezcla referida,
se oxida, produciéndose una substancia gomosa,
que presenta gran capacidad aisladora, muy resis-
tente á la acción atmosférica, al calor y al frío. Se
han verificado pruebas de hilos de cobre de 1,50
metros de diámetro, desnudos unos é im-
pregnados de aquella substancia otros
que, sometidos ambos á la acción del va-
por de ácido clorhídrico, el primero se ha
destruido completamente al mes, y los se-
gundos han resistido hasta cinco meses en
la misma atmósfera. Puede, por consi-
guiente, considerarse dicha materia aisla-
dora como un buen substituto de la guta-
percha y mucho más económico.
T a t i n i m c t r o del ü r . T h . H o m .
El aparato que representa la figura es
un contador de revoluciones de uso muy
práctico para ingenieros y maquinistas,
que puede Ibvarse en el bolsillo.
 92 LA ENERGÍA ELÉCTRICA

Basta introducir en el hueco cónico situado en componían, lo cual es de todo punto necesario
las extremidades del eje que gira uno de los apén­ evitar.
dices que se ven en la parte inferior de la figura, En el modelo perfeccionado de las figuras 2 y 3,
después de calzados con piezas tronco-cónicas que sigue aplicándose el principio fundamental de la
se adapten al hueco' de los ejes. fusión por arcos voltaicos; pero los carbones están
Los niínieros que van encima de los apéndices
motivan los límites extremos de revoluciones por
minuto que cuenta cada apéndice.
El ai)éndice central lleva dos numeraciones loo-
400 y 1.000-4.000; para usar esta segunda hay que
oprimir la palanca que se ve á la izquierda de! apa­
rato.
Las escalas dan las revoluciones por minuto; la
interior, multiplicada por 10, cuenta de 30 á 120;
la exterior por 10, 100 á 400, y por 100, i.ooo á
4.000, y la interior por 100, 300 á 1.200.
El aparato es práctico y económico. Tienen su
representación en Espaiia los setiores Barrasa y
Brenes.
Fabricación eléctrica del vidrio.
Los constantes perfeccionamientos de los hornos
eléctricos, van ensanchando el círculo de stis apli­ dispuestos horizontalmente y montados en serie,
caciones industriales. Es una de las más importan­ pudiéndose hacer la regulación á mano ó mecáni­
tes la fabricación del vidrio y del cristal, en la cual camente y obtener una intensidad de corriente
su empleo resulta ventajosísimo. perfectamente regular. La materia ígnea obtenida,
M. Maurice du Welz, ha resumido en una intere­ cae gota á gota descendiendo por escalones á una
sante conferencia dada á la «Asociación de Inge­
nieros electricistas salidos del Instituto de Monte-
flore en Lieja)), estas ventajas refiriéndose al tilti­
mo modelo de hornos (figs. 2 y 3) y al primitivo
(fig. I . " ) .
En este tiltimo, las materias Vitrificables caían

cuba refractaria de donde pasa á los aparatos de

por el receptáculo en forma de embudo á la canal
pasando entre los carbones de tres arcos voltaicos
que producían la fusión. La regulación de la tem­
peratura de los arcos era muy difícil de obtener
con este sistema; la cantidad de aire en contacto
con la masa fundida, era demasiado grande y ésta
se enfriaba muy rápidamente, sucediendo con fre­
cuencia que en vez de fundirse los elementos des­
tinados á constituir el vidrio ó el cristal, se des­
moldeado. Para que el enfriamiento no sea rápido
en esta cuba se recalienta por medio de un hogar
de coque ó de gas. Los experimentadores dan
como cifras de consumo para obtener una produc­
ción por hora de dos y medio kilogramos de masa,
lio y 125 amperios, empleando corriente conti­
nua. Algunos creen que el empleo de las corrien­
tes alternadvas, sería preferible por evitar todo pe­
ligro de electrólisis de las materias en fusión.—E. G,
 LA ENERGÍA ELÉCTRICA 93

l'i'ocertiniicnto e l é c t r i c o <lc c o r r o s i ó n trabajar los quince primeros elementos, y así suce-

del c r i s t a l y de l a porcelana. sivamente. Se comprende, pues, que de esta manera
se podrán hacer con las dos palancas todo género
Nuestro estimado colega Helios, de Leipzig, de combinaciones que se deseen.
mdica un nuevo procedimiento eléctrico para Entre los aparatos que se distinguen en la parte
la corrosión del vidrio y la porcelana, muciio más delantera de la caja hay un conmutador que, colo-
sencillo y práctico que el actualmente en uso, que
utiliza el efecto producido sobre dichos cuerpos
por el ácido fluorhídrico. Aplícase en aquél una
corriente eléctrica de l o o á n o vohios de tensión
q'Je puede muy fácilmente tomarse de las mismas
canalizaciones establecidas en los talleres para el
alumbrado.
El cristal ó la porcelana que hay que corroer
se introduce en un líquido buen conductor de la
electricidad (solución de salitre, por ejemplo), en
el cual se sumerge también una placa metálica de
,?ran superficie, que se pone en comunicación con
el polo positivo del origen de electricidad (dinamo
ó batería), constituyendo, por lo tanto, el ánodo.
Como cátodo empléase un lápiz ó estilete de pla-
tino cubierto de una capa aisladora, á excepción
de la punta con la cual se marcan sobre la placa
las figuras que se quieran corroer. Haciendo rápi-
dos los movimientos con el lápiz, los grabados
se obtienen sin producir más que el deslustra- cado en N, indica que el sentido de la corriente en
miento del vidrio; si dichos movimientos son más los electrodos de aplicación será la normal, mien-
lentos, se producen líneas profundas. tras que se logrará invertir el sentido de la misma
Este procedimiento, en extremo recomendable colocando la palanquita en W. El otro conmutador
por su sencillez y economía, puede ser aplicado tiene las posiciones C, P y S, que indican corriente
con ventaja hasta en los establecimientos industria- constante, primaria y sectmdaria respectivamente.
les más modestos dedicados á tales trabajos.—E. G. El galvanóscopo G sirve para indicar la existen-
cia de corriente eléctrica cuando se unen los elec-
Aparato para acoplamiento de pilas. trodos conexos á los casquillos K y Z. Por último,
En la figura del grabado está representado un el botón M sirve para interrumpir la corriente eléc-
aparato construido, según datos del Dr. Glanert, trica.—C. R .
por la casa alemana Serftieben y descrito en la Re-
vista Die Elektrizital, en cuyo aparato hay treinta
elementos de pila cinecarbón, dispuestos en tres s e -
nes de á diez cada una. En uno de les costados de
la caja hay tres ranuras, de las que sobresalen tres
INFORMACIÓN
palancas, que sirven para que se pongan en activi-
dad los elementos de las series, para lo cual aqué- l a mayor máquiíxa eléctrica constrnída en
llas tienen que ser levantadas y colocad.is en uno el mundo.—Para establecer el nuevo servicio de
de los dientes que se perciben en las referidas ra- tracción eléctrica en la línea de la segunda aveni-
nuras. da del ferrocarril aéreo de Mauhaltom "(Nueva
El conmutador está colocado encima del aparato Yorlc) ha construido la Compañía americana ex-
y consta de dos palancas, una pequeña que está en plotadora una gran Central (la mayor que existe en
comunicación con el polo positivo, y otra mayor el mundo), de la que dimos algunos detalles en el
que lo está con el negativo. Cuando la palanca pe- número anterior.
queña esté en cero, por ejemplo, y la mayor en el Completamos dicha noticia con los datos que
casquillo treinta, treinta serán los elementos en cir- nos envía nuestro inteligente y activo corresponsal
cuito; si la menor estuviese en quince, dejarían de en New-York Sir Taltavull, referentes al alternador
 94 LA ENERGÍA ELÉCTRICA
monstruo suministrado por la Compañía Wesíing-
Iwusc, con el cual se produjo la corriente necesaria
para operar en el primer tren eléctrico de la línea
mencionada.
Capacidad máxima.... lo.ooo h. p.
\ 5.000 kilovatios (6.700 h.
nommal (p.).
42 pies (i pie inglés =
Altura
0,304metros.
Diátnetro del campo gi-j
ratono ( 33 pies.
I, , , • i 370000 libras (i libra=
Peso del mismo ' , ., \ marcha con el auxilio de un diminuto motor eléc-
/ 0,07 kilogramos).
Velocidad periférica del| 7.540 pies por minuto (i
campo giratorio. . . . ( pie=o,3o metros).
Peso de todo el gene)
rador | 90°-°oo Jibra.s.
Profundidad de las ci-(
. • 21 pies,
mentaciones \ '
El aceite .para lubrificar este colosal generador
se eleva por medio de bombas desde el piso bajo á
razón de 4 gallones por hora (i gallón=4,543 li-
tros).
El aceite, después de usado, pasa automática-
mente á una bodega para emplearlo nuevamente
después de filtrado.
Las calderas tienen cargadores mecánicos, gra-
cias á los cuales basta con 90 hombres para hacer
este trabajo, que sin aquéllos necesitaría 270 hom-
bres. En estos generadores de vapor puede usarse
cualquier clase de carbón.
El primer tren eléctrico accionado por tan pode-
rosa Central se ha ensayado ya con felicidad en
New-York; constaba de seis carruajes, cuatro de
ellos motores.
Cada uno de estos últimos tiene dos motores que
desarrollan una fuerza de 300 caballos, siendo, por
lo tanto, la potencial total del tren, 1.200 caballos,
y su peso 35.000 libras.
Las locomotoras que habían prestado hasta aho-
ra el servicio pesaban 46.000 libras y desarrolla-
ban sólo unos 300 caballos, ó sea, la cuarta, parte
de los nuevos motores.
Se ha encargado la construcción de 1.800 moto-
res, con los que se reemplazarán 300 locomotoras,
y se podrá trabajar con trenes más pesados.
Cada coche motor llevará un compresor eléctrico
de aire para el mejor manejo de los frenos.—E. G.
Ensayos de trenes á gran velocidad.— En
los ensayos verificados en Berlín por el ferroca-
rril militar eléctrico de gran velocidad, se ha con-
seguido obtener cerca de Qossen una marcha de
169 kilómetros por hora. A esta velocidad, la pre-
sión del aire sobre el tren alcanzó una fuerza equi
valente á un viento que llevase 3,60 metros por se-
gundo. Se prosiguen los ensayos con el objeto de
alcanzar volocidades mayores que las que hasta
ahora se han obtenido.
Aparatos Hughes modernos.—Entre los apa-
ratos adquiridos recientemente por la Dirección
General de Telégrafos, hay cuatro Hughes de so
bremesa, ó sea sin pesas ni patas, que se ponen en
trico, cuya correa actúa sobre la tercera rueda del
mecanismo. Esos aparatos, de reducido volumen, se
vienen explotando con satisfactorios resultados en
la Central de París; pero en la Central de Madrid,
donde la energía e!éctri(ia para los motores la su-
ministra una Compañía, quedará á merced de ésta
el que puedan ó no utilizarse los mencionados apa-
ratos.
Kesistencia y capacidad eléctrica del cuer-
po humano. —Con relación á la electridad, ¿presen-
ta el cuerpo humano los caracteres de un conduc-
tor cualquiera, ó tiene alguna particularidad espe-
cial?
Pregunta es esta que los electricistas se han he-
cho muy frecuentemente, y cuya medida, respecto
á la existencia del cuerpo humano, se ha estudiado
de muy diferentes modos. Ha quedado perfecta-
mente demostrado que la resistencia al paso de
la electricidad del electrodo á la mano, no presen-
ta variación notable, mientras que las condiciones
del calzado y del suelo, pueden hacer variar esta r2-
sistencia de 150.000 hasta cerca de i.ooo ohmios.
Es decir, que una persona colocada en las con-
diciones que requieren estos dos límites, podrá ó
no, impunemente, tocar un conductor eléctrico re-
corrido por una corriente de alta tensión. Pero, á
pesar de esto, y teniendo en cuenta los límites en-
contrados y que antes hemos mencionado, no se
explican ciertos hechos.
Como ejemplo, y muy notable, citaremos un
muchacho de nueve años, del condado de Hart-
ford, que en Mayo último, sin que se sepa cómo,
puso las manos sobre un conductor eléctrico que
conducía la energía para el alumbrado de la ciu-
dad; el potencial de la corriente alterna era de
10.000 voltios con 60 períodos. El muchacho reci-
bió una terrible descarga eléctrica que, de no ser
prontamente auxiliado, le hubiera producido la
 LA ENERGÍA ELÉCTRICA 95

muerte. Después de haber pracdcado con él la res- Las patentes de invención en Alemania. —
piración artificial, volvió en sí. Pudieran ser de interés para nuestros lectores, algu-
La descarga recibida por el muchacho en cues- nas particularidades que ofrecen las concesiones de
tión, era de una tensión cinco veces mayor que la privilegios de invención en Alemania.
que ordinariamente se emplea en los Estados Uni- En primer lugar, al solicitar un extranjero una
dos para practicar la electrocución, y en este caso patente, no puede gestionar la concesión directa-
los reos son colocados en condiciones especiales mente; tiene que ser representado por un agente de
de aislamiento. patentes alemán de reconocida competencia, por
Respecto a la capacidad eléctrica del cuerpo hu- medio de quien se dene que presentar la solicitud
mano, Bordier en 1S95 Y Dubois en 1898 encon- y descripción del objeto, y por cuyo conducto los
traron respectivamente las cifras de 0,0025 y de examinadores alemanes pueden exigir que se com-
0,1650 microfaradios. Los valores deducidos por pleten los datos presentados, ó hacer las preguntas
estos dos experimentadores, como se ve, distan mu- que estimen convenientes para su detallado conoci-
cho de la igualdad; de aquí cjue su admisión ofrez- miento.
can naturalmente grandes dudas sobre su exactitud. No se puede privilegiar un invento en Alemania
A pesar del gran interés que esta cuestión encie- si antes de solicitarse allí, primero, se ha hecho pú-
rra, desde los experituentos de Dubois, nadie, que blico por medio de la iiuprenta, y segundo si se ha
sepamos, ha vuelto ha estudiarlos, hasta que muy utilizado ó exhibido en público, en forma que indi-
recientemente el Sr. Metz, después de una serie de que que se ha llevado á la práctica.
experimentos, ha obtenido para la capacidad eléc- Las mayores dificultades que en la práctica se
trica del cuerpo humano la cifra de 0,00011 micro- encuentran para sacar un privilegio de invención
faradios, que coiuo se ve es muy inferior á las de en Alemania, no estriban, sin embargo, en lo ante-
Bordier y Dubois. rior, sino en el alcance de las reclamaciones con
Las mediciones, muy concienzudas y racionales, que se desea proteger el privilegio.
se hicieron en 20 personas colocadas en diversas La primera reclamación debe ser la descripción
posiciones y distintos estados de aislamiento. del.invento; las detnás reclamaciones que en la so-
La experiencia ha demostrado que no es compa- licitud se hagan para proteger la patente, deben to-
rable en modo alguno la capacidad del cuerpo hu- das tener íntima relación y caer dentro de la esfera
mano con la de un conductor elipsoidal. de acciones de la primera. En Alemania no se admi-
También ha quedado demostrado que el hombre te que en un mismo privilegio se reclamen la reso-
desnudo, ó vestido completamente de metal, posee lución de dos ó más problemas; lo único que se ad-
casi la misma capacidad eléctrica. mite en la segunda y subsiguientes reclamaciones
Resulta de todo lo dicho, que el hombre no tie- de la solicitud, son «modificaciones», siempre que
ne ningtin poder condensador como suponía Bor- éstas se refieran á la resolución del mismo problema
dier y se carga lo misiuo que un conductor metáli- solucionado en la reclamación primera y principal.
co cualquiera, y que su capacidad eléctrica perma- La electricidad en las minas.—La Compaiiía
nece constante aun cuando la tensión varíe de 100 «Minera de Mercadal» en sus minas de hierro y
á i.ooo voltios; que esta capacidad es precisamen- calamina, próximas á Torrelavega, ha introducido
te igual á la de un conductor metálico de igual for la novedad de mover los lavaderos de mineral con
nía y dimensiones y parece ser proporcional á la fuerza eléctrica y además la ha aplicado al arrastre
altura y volumen de la persona; y finalmente, se de los mismos, udlizando un salto de agua en el
desprende que, el valor de esta capacidad, cambia río Besaga. Se compone el material móvil de tres
con las circunstancias y con la posición del cuerpo. locomotoras eléctricas que funcionan con regulari-
Parece ser, según de los experimentos se des- dad y mueven unas 1.000 toneladas de mineral dia-
prende, que cuando la persona está bien aislada en riamente y puesta al servicio para empalmar con
el centro de una habitación y lejos de toda mesa me- los ferrocarriles del Norte y Cantábrico.
tálica, que el valor alcanzado para la capacidad eléc- La nueva red de la Compañía madrileña de
trica es completamente normal. Ahora bien; este Teléfonos.—Con gran actividad están realizándo-
valor normal obtenido, puede desde luego aceptar- se en esta corte los trabajos de instalación de la
se que es sieiupre el mismo para cada individuo y nueva red de la Compaiiía madrileña de Teléfonos,
el valor medio que se le puede asignar es de con arreglo al proyecto presentado por su Director
0,00011 microfaradios.—A. B.
gerente, D. Enrique Parellada, del cual dimos cuen-
 96 LA ENERGÍA ELÉCTRICA

ta detallada en las páginas 485 á 491 del tomo III Telegrafía sin conductores. — Sistema Mar­
(i." de la 2.' época) de la ENERGÍA. coni.—Ha sido firmado un contrato entre la Socie­
Todos los cables del'interior de la Central y los dad Marconi y el Instituto Lloyd, según el cual el
de bajada para acometer á las galerías del Canal mencionado Centro, que tiene la misión de vigilar
de Isabel II han sido adquiridos á la acreditada y velar por cuanto tiende á procurar mayor seguri­
casa Pirelli, de Milán, de la que es representante dad en la navegación, se compromete á no emplear
en Espaila D. Pedro Borri. durante catorce aiios más sistema de telegrafía sin
listos últimos son de 100 conductores de cobre conductores que el Marconi.
de de milímetro con cubierta parcial de cau­ Acuérdase además en dicho convenio montar in­
cho vulcanizado, ofreciendo cada uno un aislamien­ mediatamente 10 estaciones de telegrafia, de las
to de 100 megohmios y un peso de 800 gramos por cuales una se instalará en F'astnet Rock, sobre la
metro lineal. El conjunto está protegido por dos costa NE. de Irlanda, y dos sobre la costa del mar
envueltas de tela y cáfiatno trenzado. Rojo, no habiéndose fijado todavía el emplaza­
Los cables subterráneos, así como los aéreos que miento definitivo de las siete restantes.
se utilizan en las calles por las que no pasa la men­ El personal que sirva estas estaciones será cos­
cionada galería, son de cobre con aislamiento de teado por el Instituto Lloyd, que toma á su cargo
papel cada hilo, y las cubiertas aisladoras y protec­ tan importante servicio en provecho de la navega­
toras necesarias y todos los modelos empleados (de ción y del comercio.
400, 300, 200, etc., conductores) los ha proporcio­ Cohesor Armstrong y Orling.—Los mencio­
nado la conocida casa Felten y Guillaume, provee­ nados físicos ingleses han ideado un aparato elec-
dora de las redes telefónicas de Berlín y represen­ trocapilar relevador de corrientes, que puede por
tada en Espaiia por los sucesores de Kribben. su extraordinaria sensibilidad ser utilizado como
Los postes metálicos de celosía son de alturas cohesor, y aplicado, por consiguiente, á la telegra­
variables entre 10 y 30 metros, y han sido cons­ fía sin conductores.
truidos en los talleres de Torras, en Barcelona. El Los informes que hasta ahora se tienen de dicho
sistema de montaje empleado está perfectamente aparato no son tan suficientemente detallados que
entendido, evitando la construcción del andamiaje, permitan formar juicio exacto sobre su utilidad
en substitución del cual se utiliza el mismo poste á práctica; pero dan idea bastante aproximada de su
medida que se va armando. fundamento y funcionamiento.
La transmisión de energía más larga del Nuestro estimado colega Kazóti y Fe, revista
mundo. —En uno de los pasados números dába­ mensual redactada por Padres de la Compaíiía de
mos cuenta del transporte de energía eléctrica inau­ Jesús, lo describe como sigue:
gurado por la «Bay Comistles Power Company» á «En su mecanismo es muy sencillo el aparato:
225 kilómetros empleando una tensión de 40.000 se reduce á un electrómetro capilar, dispuesto de
voltios, considerando esa distancia como la máxi­ manera que al pasar por él una corriente, por dé­
ma alcanzada en 1901. bil que sea, cierra el circuito de un substituidor de
Hoy leemos en la prensa americana que la trans­ corricnics.
misión de Colgate (sobre el río Juba) á Redwood y El electrómetro capilar, algo diferente del de
Burlingame se ha decidido continuarla inmediata­ Lippman, consta de un sifón de vidrio, de brazos
mente hasta San Francisco de California. Para re­ poco desiguales, capilares en sus extremos, sumer­
correr esta distancia de jgo kilómetros se empleará gido el más corto en un vasito con mercurio, y el
una tensión de 60.000 voldos. otro en una vasija con disolución de ácido sulfúri­
Escuela fotoeléctrica.—El 4 de Enero se inau­ co, cuya superficie libre se halla bastante por deba­
guró en el Havre una escuela dedicada á la instruc­ jo de la del mercurio.
ción del personal necesario para el servicio de ilu­ El sifón va lleno de mercurio, y en contacto con
minación de costas. Componen el Profesorado del este líquido un alambre de platino soldado en
referido Centro un capitán, dos tenientes y veinte / la parte más alta del sifón ó en el punto medio de
suboficiales, todos del Cuerpo de .Artillería, eligién la porción encorvada que media entre las dos ra­
dose entre los Regimientos de á pie de dicha .irma, mas. Otro alambre igual comunica con la diso­
anualmente, los 200 alunmos que permanecerán en lución de ácido sulfúrico, atravesando por junto al
ella durante siete meses dedicados 4,ejercicios teó­ fondo las paredes del vaso que lo contiene.
ricos y prácticos. Por la capilaridad del sifón está el mercurio en
 LA ENERGÍA ELÉCTRICA 97

equilibrio en él; pero si los citados alambres se unen
con dos puntos cualesquiera de potencial eléctrico
diferente, y mayor en uno que en otro, la corriente
eléctrica vence la fuerza capilar, y el mercurio sale
del sifón hacia la disolución acida, cayendo sobre
uno de los brazos de una palanca de primer género,
á modo de balanza, la cual oscila y cierra el cir-
cuito en el substituidor de corrientes.
La altura del mercurio en el vaso donde va su-
mergido uno de los brazos del sifón, se mantiene
constante por este medio: en el mercurio de dicho
vaso entra la punta capilar en que remata el cuello
largo de un matraz lleno de mercurio, y del fondo
de aquél arranca otro tubito que, doblado en la
dirección del cuello, desemboca debajo de la su-
perficie del mercurio.
Cuando éste fluye por el sifón, queda fuera del
mercurio la extremidad del tubito, y entrando
aire por él, sale mercurio del matraz, hasta que de
nuevo impida el acceso al aire, cubriendo la extre-
midad del mismo tubo.
Otra disposición dan los mismos físicos al re-
ceptor, en extremo sencilla y de una delicadeza tal,
que se dice poder substituir al radio-conductor (ad-
lieridor ó co/iesor, se tiende á llamarlo) de Branly ó
de Marconi, y aun al sifón inscriptor de Thomson
para la telegrafia submarina.
Es un tubo de vidrio de poco diámetro, casi ho-
rizontal, lleno de mercurio, si no es en el punto
medio, donde lleva una gota de ácido sulfíirico, y
suspendido, á modo de balanza, de una cuchilla.
Dos alambres de platino, fijos en los extremos del
tubo y doblados hacia abajo, completan el circuito
entre el mercurio de aquél y el contenido en dos
vasitos metálicos, de los cuales parten los alam-
bres que van á los dos puntos de diferente po-
tencial.
En la parte inferior y media del tubo, hay un
como fiel de balanza. Al pasar por el tubo una co-
rriente eléctrica, se modifica el luenisco del mer-
curio, oscila el tubo y el fiel cierra el circuito del
relevador de corrientes.

Preguntas 7 respuestas

R E S P U E S T A Á L A P R E G U N T A 9,'^
Traducción según la Real Academia:
l . ° De los nombres de las diversas lormas de corriente y sus máquinas generadoras y receptoras.
2." De k s unidades C. G. S. y sus aparatos de medida.

l!"ORMAi«» ¡DE C O K R I E X T E APARATOS GEKERADORES R E C E P T O R E S

" Corriente continua. Pilas eléctricas. * Motores.

— alternativa. Acumuladores. * Electromotores.
— monofásica. ( bifilares ( i ) . * Electromotor alterno.
— bifásica. D'"^'"»^ I trifilares. j monofásico
— trifásica. Dinamo de corriente alternativa. Alternomotor | bifásico,
— polifásica. Alternador. ( trifásico.
— ondulada. — bifásico. Motor trifásico.
"• Corrientes parásitas. — trifásico. — polifásico.
— polifásico. — asincrónico.
— monocíclico. " — sincrónico.
Generatriz asincrónica (2). — de campo cohstante.
í monofásico. — — giratorio.
Transformadores . . \ rotatorio. " - - — alternativo.
( trifásico. * Motor de inducción.
Generadores polimórficos. Dinamotor. \
Transformadores de fase. ••• Transformador motor. I
Convertidores — conversivos. *
Conmutatrices — conmutadoras. *

Los términos marcados con un asterisco, están en el Diccionario de lu Lengua Espafíota, en su líltimii edición, ó se
componen de palabras que figuran en el Diccionario.

(11 Bifitar y Trifilar no son palabras españolas.

(2) Asincrónica no figura en el Diccionario; pero sincrónica sí.
 98 / LA ENERGÍA ELÉCTRICA

Los términos que no tienen asterisco, aparecen en las obras de electricidad con nombres variados.
2.0 Unidades C. G. S. y aparatos de medida.
Unidades cegesimales empleadas en mecánica:

Dina, * dinamia, * kilográmetro. Unidad cegesimal de velocidad.

Dina centímetro ó Erg. — — de aceleración.
* Caloría grande. — — d e p r e s i ó n , dina centímetro cuadrado.
* Pequefia caloríi.

Unidades prácticas derivadas del sistema C. G. S., empleadas en las aplicaciones eléctricas.
Los artículos publicados por nuestro Presidente, Sr. Echegaray, en El Imparñal, en Julio y Agosto de 1899,
título «Las unidades eléct'icas» (Nuevo Diccionatio tie la Academia Española), explican con tanta claridad como precisión
la nomenclatura de las mismas.
Exigencias de la fonética, necesidad de acomodar á nuestro idioma las terminaciones, y que se presten á plurales y
adjetivos, lógica imposición de los radicales que recuerdan sabios ilustres; tales son las premisas que forman la base de
tan notable trabajo que, en unisn á la Memoria que ü . Eduardo Saavedra dio á conocer á la Academia de la Lengua en
1899, dieron por resultado los nombres de las unidades eléctricas usuales.
Muchos hay que dicen ohm j ohms, como pudieran decir ohmes y ohmps; también dicen volt y volts, que es igualmente
inadmisible.
Echegaray, razonando como él sabe, expresándose con su elegancia peculiar y aclarando los conceptos con bellas
imágenes, dice; «Para los españoles, la consonante es una montaña, la vocal un valle de suavidad y de dulzura; y pedi-
mos, entre montaña y montaña, un v a l l o , e t c . . . por eso volts y ohms son inadmisibles.
Hecha esta pequeña digresión, con objeto de contribuir con nuestro grano de arena á la unidad de la nomenclatura,
pasemos á nombrar las unidades eléctricas tal como lo hace la Academia:
' Culombio. * Vtltio.
* Amperio. * Vatio.
« Ohmio. * Faradio.
* Julio.

Además podemos agregar, como admitidas por tratadistas de electricidad:

* Caballo de vapor. Weber.

" Amperio hora. Oersted.
* Amperio-vuelta. Gilberl.
Gauss. Hery-cuadrante.
Mho.

Aparatos de medida en general:

Galvanóscopos. Registradores.
Galvanómetros. Histeresímetros.
- Galvanómetros diferenciales. •• Calorímetros.
— balísticos. Oscilógrafos.
Electrodinamómetros. Fasómetros.
Shunts. Julíinetros.
* Electrómetros. Valihorámetros.
Electróscopos. Condensadores tipos.
* Cajas de resistencias. Induclómelro
Puente de Wehatotone. Permeámetro.
Balanzas electrodinámicas. Reóstato.
* Voltímetros. Reógrafo.
* Amperímetros. Bolómetro.
* Vaümetros. Radio micrómetro.
Ohmetros. Secohómatro.
- Contadores. Potenciómetros.

NOTA. Los asteriscos tienen igual significación que antes.

Otras palabras que deben someterse al estudio de la Real Academia':

Rectancia ó reactencia, Selfinducción ó autoinducción.
Inductancia. Corriente desvatada ó adinética
Impediencia ó resistencia aparente. — vallada ó dinética.
Pernitancia. Resistibilidad.
Capacitancia. Cohesor.
Reluctancia — reluctividad. Radio conductor.
Decalado, ó distancia constante de fases. Estator.
Sintonismo. Rotor.
. G. B.
 LA ENERGÍA ELÉCTRICA 99

ISYUm fiUTOMOVIL
Procedimiento de ignioión magnetoeléctrica Simms Bosch.
l& N todos los motores de explosión, y principalmente en sus aplicaciones al automovilismo, e S
cuestión de importancia capital la buena elección del procedimiento de ignición.
El procedimiento de ignición que se emplee en un motor de explosión para automóviles
debe llenar las condiciones siguientes:
i.° Funcionamiento seguro.
2.0 Mecanismo sólido, sencillo y económico.
3-° Ausencia de malos olores.
4-° Poco peso.
Durante mucho tiempo gozaron de la exclusiva los procedimientos de tubo incandescente, y
hoy día su aplicación sigue recomendándose en los motores fijos, empleándose tubos dobles,
cuyo funcionamiento puede hacerse á voluntad simultáneo, con objeto de cumplir con la primera
condición antes citada.
Bien conocida es de antiguo la propiedad de que goza la esponja de platino en el aire que
se pone incandescente haciendo circular por entre sus poros una corriente de gas hidrocarbu-
rado, y se comprende que tal propiedad haya tratado de resolver el problema de la ignición de
los motores de hidrocarburo.
Pero tales disposiciones, que han resuelto el problema perfectamente tratándose de motores
fijos, tienen algunos inconvenientes al aplicarlos á automóviles; el chorro de gas que produce la
ignición, por el viento y el polvo que originan las velocidades algo crecidas, puede, en unos casos,
apagarse; en otros obturarse los conductos de llegada ó los orificios de comunicación con el in-
terior del cilindro, y en tales casos el funcionamiento es defectuoso.
La electricidad, destinada á dar en casos múltiples soluciones verdaderamente revolucio-
narias, ha vencido por completo aquellos defectos, y puesto que el ideal es producir la ignición
en un momento dado, y dentro del mismo cilindro, allí ha ido la chispa eléctrica á situarse,
dando solución cumplida á la imperiosa necsidad de evitar una comunicación pasajera, pero per-
judicial, del interior del cilindro con la cámara exterior de combustión.
El empleo de pilas y acumuladores exige un aumento en el peso muerto no despreciable, de
modo que tal disposición eléctrica faltaba á la cuarta condición ya dicha; además, la necesidad
de recargas periódicas limitaba el recorrido y exigía elementos y materiales no siempre fáciles
de adquirir en pueblos de tránsito, y por esto se acudió á los procedimientos magnetoeléctricos,
los mismos que emplean los ingenieros militares en campaña para explosiones de minas.
No está exenta de inconvenientes esta última solución, cuya bondad descansa principalmente
en la intensidad de campo magnético producido por un imán, magnetismo que con el tiempo
disminuye, disminuyendo también las corrientes inducidas, las cuales pueden debilitarse hasta
no producir chispas en el interior del cilindro.
Es preciso, pues, evitar, ó por lo menos reducir, la desimantación pronta del imán, y eso es
precisamente lo que con ingenio procura conseguir el Simms Bosch.
Carecteriza el Simms Bosch la disposición especial de la magneto; en otros sistemas electro-
magnéticos gira el inducido dentro del imán; en este sistema inductor é inducido son fijos, y
una pantalla de hierro recibe un movimiento de vaivén de una excéntrica actuada por el eje
 100 LA ENERGÍA ELÉCTRICA

motor; tal variación en la disposición para engendrar la corriente inducida, reduce el trabajo de
desimantación, porque facilita un cierre de poca reluctancia al campo magnético del imán.
El resto del sistema es sencillísimo; los extremos del alambre del inducido van: el uno, á la
masa metálica del motor; el otro, al botón del detonador; si en éste no hay interrupción de co-
rriente, cierra ésta por la masa del aparato; pero si la excéntrica presenta su entalladura á la

barra K por la acción del muelle P, ésta desciende y la corriente se interrumpe en el detonador M,
saltando la thispa.
Variando la posición de la entalladura de la excéntrica), con relación al vastago que actúa el
detonador, se consigue producir la explosión en un punto cualquiera de la marcha del émbolo,

regulando la potencia del motor, y, por tanto, la velocidad de marcha con gran perfección; tam-
bién puede variarse el número de explosiones, suprimiendo las que convenga, con lo que se
obtiene la regulación más generalmente aceptada de los modernos motores de hidrocarburos;
todo ello puede efectuarse mediante una palanca al alcance del chaufeur.
¿Será delicado en la práctica el Simms Bosch? No debe olvidarse que tal mecanismo debe
funcionar miles de veces en un recorrido de regular importancia, y que el conjunto parece que
no tiene la robustez de los procedimientos ya citados.
Adeniás, el magneto pierde su imantación, y aunque fácilmente puede imantarse, son nece-
sarios elementos que quizás falten en el momento más preciso.
Y como á la ligera hemos dado cuenta de varios procedimientos de ignición, justo es que
consignemos las ventajas que por todos conceptos ofrece el novísimo sistema de ignición auto-
mática, fundado en el principio de producir la temperatura de combustión antes de verificarse
ésta; claro es que disponiendo de aquella temperatura en la cámara del cilindro, la inyección del
hidrocarburo es seguida inmediatamente de la explosión, lo cual representa el desiderátum de
sencillez en la ignición; pero tal sencillez se conseguirá si se vencen antes otras grandes dificul-
tades: la ley de las compensaciones no deja nunca de cumplirse.—^J. G. B.
 LA ENERGÍA ELÉCTRICA
CRÓHlCñ CIEfiTÍFICM
lios automóviles eléctricos en la Exposición
del Automóvil del Ciclo y del Sport.—Algunos
progresos ha perniilido conijjrobar esta Exposición
en la construcción de los automóviles eléctricos;
los carruajes eléctricos de acumuladores no presen-
taban particularidades dignas de mención. Los ca-
rruajes mixtos que, además de una batería, llevan
un grupo electrógeno de motor de esencia, eran re-
presentados por cinco vehículos de la Compaiiía
internacional de los transportes automóviles (la que
construye los motores eléctricos Zenatzy). Un ter-
cero y nuevo tipo de carruajes eléctricos estaba
representado por el carruaje electrógeno de M. de
Champrabert, cuyo equipo consiete en un grupo
electrógeno y un motor eléctrico accionando el eje;
el conjunto, formado por este último niotor y la
dinamo del grupo, no hace, pues, más que reem-
plazar las disposiciones de cambios de velocidad
de los carruajes de petróleo ordinario. Es de obser-
var que como elasticidad en la transmisión y eco-
nomía en la producción de la energía, los carruajes
del segundo tipo son preferibles.
Baterías Gould.—Las placas de estas baterías
son de plomo puro laminado. A fin de aumentar su
superficie, mediante una máquina especial se pro-
duce una serie de nervios y ranuras. La superficie
activa de una placa así dispuesta es próximatnente
diez y siete veces igual á su superficie aparente; la
operación da además por resultado batir el plomo.
La formación se efectúa en un baño de composición
especial, después del cual las placas se lavan
para que desaparezca toda señal de la solución.
Los constructores han procurado sobre todo re-
ducir los regímenes específicos de la carga y des-
carga de sus elementos, á fin de aumentar su du-
ración. Sus placas son, al parecer, tan ligeras como
lo permiten las consideraciones mecánicas. La su-
perficie activa es de 64 dm^. próxttnamente por ki-
logramo. Al régimen de descarga en ocho horas, se
tienen 16 dm-. por amperio.
Las placas están separadas y aisladas entre sí por
hojas de ebonita moldeada y perforada; los vasos
son también de ebonita; en el fondo llevan salien-
tes triangulares sobre los cuales descansan las pla-
cas. Estas tienen próximamente 15X^2 cm-.
Al régimen de descarga en tres horas, estas bate-
rías suministran 7,3 amperios-hora por kilogramo
de elemento. Los principales tipos de estas baterías
se pueden clasificar en dos series de seis elementos.
lOI
É IflFOt^mñClÓrl
Coche automóvil de vapor «Toledo».—El ve-
híctdo denominado «Toledo» no tiene nada de es-
pañol más que el nomlire, puesto que se construye
en los talleres de la American Bicycle C" de Nueva
York y es de patente americana.
A pesar de su apariencia ligera pesa 675 kilos.
La caldera es del tipo tubular y se compone de
ocho series de tubos en espiral encerrados en una
envoltura interior y el todo cubierto con otra exte-
rior, sujeta por pasadores de hierro. Los tubos se
descargan en el espacio desuñado al vapor, de
modo que causan acción centrífuga que separa el
vapor seco y sólo envía éste á los cilindros, produ-
ciendo esta acción una gran economía de combus-
tible y un escape prácticamente invisible. Todavía
puede obtenerse una economía mayor, disponiendo
después de la válvula de escape un aparato de ca-
lefacción del agua de alimentación, que se colo-
cará encima de la caldera y permite una produc-
ción de vapor rápido.
El quemador que calienta la caldera es de bron-
ce y no está sujeto á oxidación; el depósito de agua
contiene 140 litros y se llena por medio de un in-
yector de sifón con un tubo de 4,50 metros. El de-
pósito de esencia puede contener 20 litros en cada
una de sus dos partes. El motor tiene una potencia
de 6 Ya caballos y su pistón tiene 7,50 sobre 10
centímetros: el sistema de caldera tiene la ventaja
de una potencia evaporadora considerable con pe-
queña superficie de calefacción. La dimensión to-
tal es de 48 centímetros de alto por 55 de diáme-
tro. La capacidad de los depósitos está calculada
para contener el combustible necesario á un reco-
rrido de 30 millas.
Exposiciones de automóviles.—Desde el día 6
al 20 de Abril próximo se verificarán en Niza, bajo
el patronato del Automobile Club de France, del
Automobile Club d'Italia y del Touring Club de
Turín, animadas fiestas.
Los Municipios de Niza y de Monaco han con-
cedido valiosos premios para los diferentes concur-
sos de automóviles que han de celebrarse, entre los
cuales figurará uno de velocidad entre Niza y
-Abazzia, con un recorrido total de 1.907 kilóme-
tros.
—El 8 de Marzo próximo se abrirá en París el
Salón para Exposición y concurso de automóviles,
teniendo ya actualmente la adhesión de Sociedades
análogas que concurrirán á la misma; entre ellas, El
 102 LA ENERGÍA ELÉCTRICA

Aéreo Club de Bélgica, de acuerdo con la Cámara ellas no pocoá títulos de Castilla y distinguidos
sindical de automóviles, la que ofrece á los inven sporlmeii.
tores de aereostádcos la instalación gratuita para Concurso de carruajes pesados.— War Office
sus diferentes sistemas de aparatos. Esta Exposición anuncia concurso para carruajes pesados en la pri-
se hace con el fin de propaganda general y en in- mavera de 1903. Las condiciones que deben cum
terés comtjn con la locomoción aérea. plir, por el orden que se.indica, son las siguientes:
Para informes ó datos sobre dicha Exposición y I . " Fuert£s cargas.
concurso dirigirse al Secretario general del Salón, 2?- Precio del carruaje.
24, rué de Fripiers, en Bruselas. 3." Facilidad en su servicio.
Inglaterra.—Concurso de locomotoras mili, 4." Sencillez de su construcción.
tares para caminos y carreteras.—Con elfinde 5.* Poco humo y ruido.
aumentar el radio de acción de estas locomotoras, 6.^ Protección contra el lodo, fango, etc.
el Ministerio de la Guerra inglés abre un concurso Los premios serán: i.° 25.000francos; 2." 18.750
internacional para vehículos de dicha especie, des- francos; 3." 12.500 idem.
tinados únicamente al transporte militar. Además se concede una prima de 250 francos
Ofrece premios de 12, 18 y 25.000 francos res- por cada milla inglesa (1.609 ms.) que recorra el
pectivamente á los constructores de las tres prime- vehículo pasadas 40 millas (64 kms.) sin recargo de
ras máquinas premiadas. Los ensayos empezarán agua y combustible.
en el curso del primer trimestre de 1903. Las soli- Entre las muchas condiciones exigidas en este
citudes de admisión se dirigirán al Secretario del concurso internacional figtira la de que el carruaje
Mechanical Transport Committee War Office, atraviese baches de 60 cms. de agua sin deterioro
Horse Guards Whitehall de Londres hasta el i.° de sensible.
Enero de 1903. Acumuladores para automóviles. — Batería
Automóviles militares en Alemania. — Un Sperry.—Las placas están consdtuidas por so);or-
destacamento del 2.» regimiento de ferrocarriles, tes de plomo puro enlucidos de materia aativa;
compuesto de un capitán, dos oficiales, 34 sub- estos soportes, formándose ulteriormente, podrán
oficiales y 80 individuos de tropa, ha sido comisio- conservar algo de la capacidad si por el uso se
nado recientemente para probar en el trayecto efectúa desagregación en la materia activa.
Cannstatt-Heilbrourc-Wurzburg'-Berlín, un automó- El enrejado de estas placas consiste en una hoja
vil para el transporte de tropas y 8 para cargas pe- delgada de plomo puro laminado que, por un es-
sadas, construidos estos úUimos por la casa Deimler. tampado mecánico, se forman una serie de salien-
La velocidad media de dichos vehículos es de lo tes simétricamente dispuestos. El fondo de éstos se
kilómetros por hora y su coste 135.750 francos. El taladra con un punzón triangular que arroja las
Ministerio de la Guerra piensa destinarlos al trans- barbas al interior ó al exterior de los salientes;
porte rápido de tropas y aprovisionamiento de ví- la rejilla terminada toma el aspecto de una esco-
veres y municiones en tiempo de guerra y en ma- fina.
niobras. La materia activa se compone de 80 á 85 por 100
Carrera París-Viena. — Tendrá lugar de tal de plomo finamente dividido, obtenido por la re-
modo que la llegada á Viena sea el 29 de Junio. ducción de los cloruros de plomo y cinc, y de 15 á
Las categorías de carruajes serán 5: 20 por 100 de óxido de plomo; ambos componen-
Bicicletas automóviles. Peso < 50 kilogramos. tes se mezclan íntimamente añadiendo á la mezcla
— motociclos... » < 250 » 1,25 por 100 de sal alcalina. Este último cuerpo,
— — >i > 250 » que es inerte por sí mismo, tiene por objeto au-
— — » < 400 » mentar la porosidad de la placa, disolviéndose
— — » >• 400 » durante la formación, así como darla mayor du-
Carruajes ligeros » 650 » reza.
— — » > 650 » La materia activa se extiende sobre la rejilla de
— pesados » <. i.ooo » suerte que ciegue todos los saHentes, y se la somete
Sociedad de automovilistas.—Con el título de á una presión aproximada de 70 kilogramos por
«Auto Garage Madrid», se ha formado una Sociedad minuto, con lo que la placa adquiere una gran du-
de automovilistas, en la cual figuran la mayoría de reza, reteniendo enérgicamente la materia activa
las personas que tienen automóvil en Madrid, entre merced á la forma especial de su soporte. En segui-
 LA
da se la recubre con una envuelta especial, que se
obtiene transformando un tejido grueso de celulo­
sa nitrado por los procedimientos ordinarios, y he­
cho inexplosible por la adición de una pequefia
cantidad de 'nitrobenzol. Esta envuelta se recubre
de una capa de celulosa pura labrada de suerte
que su superficie externa presente una serie de cos­
tillas verticales, áfinde facilitar la libre circulación
del electrolito.
Las placas se colocan en unos vasos de ebonita
cuyo fondo lleva una serie de canales que se relle­
nan con bandas de caucho, áfinde amortiguar la
trepidación propia del carruaje. Se separan unas
de otras con hojas delgadas de ebonita perforadas
y onduladas.
, Datos de xma batería de 4 4 elementos.
Rcgimcü Vatios hora por
PESO de descarga. Amp.liora.
5 lloras 15 m . 20
kg. . .
3 horas. 17,6
Los constructores pretenden que sus baterías
pueden suministrar un recorrido de 12.000 kilóme-j
tros, casi unas 200 descargas, con una disminución!
en su capacidad, próximamente, de un 28 por 100.
Faltan datos para poder comprobar la exactitud de
estas cifras.
Baterías Clare del Internacional Síorage Battery
Compagny.—En éstas las placas son de óxidos pre­
parados, y están constituidas por tortas de materia
activa (óxido de plomo), mantenidas en placas de
tierra porosa de 1,5 mihmetros de espesor, estas
placas, en la superficie de contacto con la materia
activa, llevan dos series de ranuras perpendicula­
res, en tanto que la otra superficie lleva una sola
serie. El electrodo lo forman dos placas porosas
guarnecidas de materia acdva juntas, con interposi­
ción de una hoja de plomo de 0,8 milímetros, para
conducir la corriente; las dos placas se sueldan me­
diante un cemento especial inatacable por el elec­
trolito. Estas placas unitarias son siempre de las
mismas dimensiones, y soldando varias por medio
del cemento, se obtienen placas de la magnitud
que se necesite.
Datos de on elemento de este tipo.
Variación de la
diferencia de
Capacidad
PESO
eo amperios amp.-horas.
potencial ca los
7,260 — 12 - 96 - 2,1 á 1,9 volts.
ENERGÍA ELÉCTRICA 103
Pueden sin inconveniente soportar regímenes ele­
vados de descarga, suministrando 26,5 vatios hora
por kilogramo de peso total.
" Baterías Perret.—Estas tienen sus placas cons­
tituidas por la reunión de varillas eletnentales sol­
dadas en número conveniente á una barra de co­
nexión; dichas varillas, de sección rectangular, son
de plomo puro formadas por el procedimiento
Planté. Las positivas y negativas son idénticas.
TIPOS
í Peso = 3 , 4 0 0 kg.
I \ A m p - h . = 50
( Descarga en cinco horas.
Peso = 6,800 k g .
11,
Amp-h. == 100.
E. N.
kilogramo. Concurso internacional de alcohol en 1902.
—El éxito obtenido por el concurso nacional del
18
alcohol en 1901, no obstante lo acelerado de su
33
organización, decidió al Ministro de Agricultura á
abrir en el próximo Mayo un segundo concurso in­
ternacional.
Una Exposición pública seguirá á este concurso,
cuyo comité organizador, presidido por el Ministro
de Agricultura, está dividido en tres secciones.
Primera sección.—Motoresfijos,locomóviles, car­
buradores.—M. M. Michel Levy, Bourdon, Hospi­
talier, Ringelmann, Sorel y Trillat.
Segunda sección.—Alumbrado y calefacción.—
M. M. A'^iolle, Couderchon, Grouvelle, Lindet y
Tisserand. M. Famechon es el comisario del con­
curso y secretario del Comité.
Le Journal Officiel del 9 de Enero da además el
detalle de las subdivisiones de las diferentes cate­
gorías, así como las condiciones generales del con­
curso para cada clase de aparatos.
Las declaraciones de los constructores deberán
enviarlas al Ministerio de Agricultura: i.° Para
los motores fijos y locomóviles, el i.o de Marzo.
2.° Para los automóviles y barcos, así como para los
aparatos de alumbrado y calefacción, el 15 de
Marzo,
La Exposición pública se verificará desde el 24
de Mayo al x.° de Junio.
Serán admitidos todos los motores y aparatos
que utilicen el alcohol adulterado, hayan tomado
6 no parte en el concurso; los aparatos producto­
horcos.
res de alcohol industrial, los recipientes de almace­
namiento y de transporte, los aparatos movidos por
los motores expuestos los alcoholes adulterados y
sus compuestos^
 I04 LA ENERGÍA ELÉCTRICA
Las preguntas de los expositores se recibirán
hasta el 15 de Abril.
l o s automóviles en Navarra.—Este gran ade-
lanto del siglo XIX está casi tínicamente representa-
do en esta provincia por la Compafiía general de
Automóviles, Sociedad anónima domiciliada en
Pamplona.
Cuenta esta importante Compañía, para los ser-
vicios que tiene establecidos de transporte de via-
jeros y mercancías, con cuatro automóviles berlinas
y dos ómnibus, teniendo éstos y dos de las berlinas
30 caballos de fuerza, y las otras dos berlinas 25,
siendo en total seis magníficos automóviles de va-
por construidos en la casa Dion-Bouton y Compa-
ñía, de París.
Las líneas que explota en la actualidad esta Com-
pañía son tres:
i.a Pamplona á Estella, 44 kilómetros. Hace el
recorrido en tres horas, pasando por Astrain, Puer-
to del Perdón (cuya pendiente es de un 20 por 100
en tres kilómetros), Puente la Reina, Maneru y Ci-
rauqui. Toma agua en Astrain y Puente la Reina,
distantes 10 y 24 kilómetros, respectivamente, de
Pamplona. El automóvil sale de Pamplona á las
siete, y de Estella á las catorce del mismo día.
2.a Pamplona á Elizondo, 58 kilómetros. Salva
esta distancia en cuatro horas á través de los pue-
blos de Villava, Olagtíe, célebre Puerto de Veíate
(30 por 100 de pendiente en 18 kilómetros), Mu-
gaire é Irurita. En Olagüe y en Mugaire hace la
toma de aguas, distando el primero 21 kilómetros,
y el segundo 48 de Pamplona. Salida de Pamplona,
á las catorce, y de Elizondo, á las siete.
3." Elizondo á Irún, 50 kilómetros. Pasa por
Santistéban, Sumbilla, Vera y Puente de Endarla-
za, haciendo este recorrido eu tres horas y treinta
minutos. Tomas de agua en Sumbilla y Vera, dis-
tantes 18 y 37 kilómetros respectivamente de Eli-
zondo. De Elizondo sale á las siete, y de Iriin á las
catorce.
Tiene instaladas la Compañía espaciosas coche-
ras en los puntos de salida, además de un gran ta-
ller de reparaciones en Pamplona, estando dotados
todos los servicios y talleres de un personal ade-
cuado é inteligente, debiéndose á esto y á la acer-
tada dirección y administración de la Junta de Go-
bierno, compuesta de los Sres. Ureta, Maisonnave
y Galbete, en cooperación con el celoso adminis-
trador, D. Pío Guerendiain, el que no se haya para-
lizado uingiin servicio en los cuatro años que lleva
de existencia.
No nos extraña la admirable acogida que por
parte del público obtiene, pues las condiciones de
comodidad y hasta lujo de que se hallan dotados
los vehícuíoj, y el reducido precio, les hace supe-
riores á los medios anteriores de transporte.
Todos estos datos los debemos á la amabilidad
del señor administrador, D. Pío Guerendiain, del
cual quedamos sumamente complacidos.—J. N.
El automovilismo en el ejército.—Creemos
interesante conocer el extracto que nuestro De-
pósito de la Guerra ha hecho recientemente de las
opiniones de la prensa militar europea, referentes
á los últimos ensayos realizados con tales vehícu-
los.
Se aproxima el momento—dice el resumen pu-
blicado por el mencionado Depósito de la Guerra
—en que la tracción mecánica sea de lleno aplica-
da en el dominio militar.
Las experiencias que se hacen en los ejércitos de
las grandes potencias con el fin de utilizar el auto-
movilismo como complemento de los caballos, ma-
nifiestan la importancia atribuida á ese nuevo me-
dio de locomoción. Sus aplicaciones son interesan-
tes y numerosas, como carruajes afectos á cuarteles
generales, líneas de relevos, servicios de correos y
de telégrafos.
En el importante servicio de subsistencias, se po-
dría utilizar la nueva locomoción en las columnas
de víveres, cuyos carruajes serían reemplazados por
automóviles, carros de unidades, de requisición,
cocinas, etc.
Aplicaciones múltiples en los diferentes servicios
de la artillería, como avantrenes motores, transpor-
tes de municiones y de material pesado'
Cosa parecida sucede en el servicio sanitario,
empleando los automóviles en carruajes de ambu-
lancias, lo que permitiría en 'reposo, iluminar, por
medio de proyectores, el campo de batalla, fácil i-
tando la busca de heridos y permitiendo también,
en momentos dados, iluminarse aquéllos su interior,
sirviendo 'de salas de operaciones.
Al hablar con frecuencia de los servicios que
puede prestar á los ejércitos el automovilismo, se-
ñálase lo conveniente que sería para un país el
agrupar los esfuerzos de los diferentes Ministerios
interesados en el desarrollo de tal medio de loco-
moción, para trazar á los constructores un progra-
ma á fin de conseguir un tipo de vehículo conve-
niente á las necesidades del comercio en tiempo de
paz, y á las del ejército en el de guerra.
Imp. de A. Marzo, calle de las Pozas, ¡2.
 CORRESPONDENCIA PARTICULAR

San Sebastián.—Corresponsal.—Ídem id y id. id.

CóiMa.—D. A. 13.—Cobrada suscripción y hecho el
Antequera (Málaga).—D. F . Herrero.—Hecha su sus-
cambio pedido.
cripción.
New Kí7;ví-. —Corresponsal.—Contestado por correo.
Zaragoza.—Sr. Averly.—Recibido giro.
yalencia.—T). P. A . — R e c i b i d o giro y hecho cambio.
Scgorbe (Castellón) — D . V. D i e g o . — A n o t a d a su sus-
Madrid.—T). E . Casado. - Anotada suscripción.
cripción.
ídem. —Y). ¥. Valifío.—ídem id.
Villavalto (Córdoba). - D . J. R.—Recibido iiuporte sus-
% í w / f l . — D i r e c t o r telégrafos.—Recibido importe actual cripción; por correo recibirá detalles de ui;a instalación.
semestre. Málaga.—T). M. C.—Recibido importe su suscripción.
Badajoz. — Enviados números año anterior. Madrid.—D. R. Sánchez.—Anotoda suscripción.
Bilbao. - Corresponsal. —Enviada obra D . Luis de la Madrid.—Librería Romo y Füssel.—ídem i d .
Pena. Avila.—D. P. Diz, ingeniero Caminos.—ídem i d .

Guadalajara, —H. M. M.—Servida obra Sr. Olmos y Cc.stellón.—Corresponsal.—Recibido envío y conforme.

Caracas (Venezuela).—D. Rafael Mata.—Anotada.sus-
recibidas 5 pesetas.
MaarU.—T). R. Parada.—Anotada suscripción. cripción.
ídem.—D. J. Godino. ídem id. Orgiba (Granada).—D. R. Rodríguez.—ídem id.
C»//if,a ( V a l e n c i a ) . - D . J. L . Sanchiz. - ídem id. Palma (Baleares).—Recibido su giro y conforme.
Cazalla de la Siirra (Sevilla).—ídem id. y recibido su Lanzarcte (Canarias).—D. J. Martínez.—Anotada sus

importe. cripción.

Beceiíe (Teruel). — D . G. Gil.—Anotada suscripción. Aouilar (Córdoba).—D. C. B. — Recibido su giro de

100,75 pesetas.
j1/<2«/7a (Filipinas).—Universidad Santo T o m á s . — A n o -
tada suscripción y recibido importe. Burgos.—Corresponsal.—Recibido su giro y conforme.
7«/-í-«¿-í7«a. —Corresponsal.—Recibido giro y conforme.
.,4í//Va. —Corresponsal.—Recibido su giro y se agradece
su felicitación. Valladolid.—D. F. Casado.—Anotada suscripción.
Boltaña ( H u e s c a ) . — D . E . G . — R e c i b i d o su giro, Valencia.—II Regimiento Artillería.—ídem id.
Ferrol.—Brigada torpedista.—Recibido su giro. ídem.—i." ídem i d . — I d . id.
Balaguer (Lérii'ií).—D.E. T.—Recibido su giro y en- Madrid.—D. J. S. —Servida obra Sr. Olmos.
viado número pedido. Gerona. —D. ]• M M. — Servida obra Hidráulica del s e -
Burguillos (Badajoz).—D. F . E . — R e c i b i d o su giro. ñor Bruna.
Barcelona.—Industria Eléctrica.—Recibida Letra. Zaragoza.—D. I. Gómez.—Recibido su giro.

Madrid. — D . J. Santamarina.—Anotada suscripción. Córdoba.—VI. A. V . — R e c i b i d o importe su suscripción.

Cuenca. - Corresponsal.—Conforme liquidación. Cádiz. — D . J. J. Rubio. —Anotada su suscripción.
Barcelona. —T). L . Cirera.—Anotada suscripción. Pozo Rttbio (Cuenca).—D. A. P. - Enviado Piazzoli.
Toledo. —T). N . Lagarde.—ídem i d . Buenos Aires.—Lilireria Jacoliina.—Kecibido importe
Alicante.—Corresponsal. — Conforme liquidación. sus-rii)CÍones de .su aviso del l o de Enero.
F'rt/ir;;í7V7.^Corresponsal.—ídem id. .Madrid.—D. E. Estelut.—Anotada suscripción.
Gallur (Zaragoza).—!). M. M. —Recibido su envío. San Sebastián.—D A. Lago. Ídem id.
Canarias. —li. ]. A. —Anotado cambio. 7 ) ( C á c e r e s ) — D . P. M.—Recibidos sus dos giros
Santander.—D. L . Salazar.—Queda hecha su susciip- i m p o n e ejeniiili-.r de la Cartilla elutricidad, por Agacino,
ción. que se le mandará cuando el autor nos haga el envío anun-
Barcelona. — Corresponsal.—Recibida letra. ciado.
CÍ;/-H;7(J.—Corresponsal.—ídem id. y conforme liquida- OOTÍ-Í/o.—Recibida liquidación, y contormes.
ción.
. ,-7 T.T T.' V V- ?-? Vr W W W í«? '-7 >f ?-? T - - - •,•-7; ^-*-r

¿/í
PREVISTA G E N E I \ A L
£ü/£/?(?/^
D E ELECTI\ICIDAD
ELÉCTRICA Y AUTOMOVILISMO

Órgano la disociación L A I N D U S T R I A E L É C T R I C A E N E S P A Ñ A
So publica lo» dtam 10 y 2 0 dm cada mms.

PRECIOS DE SUSCRIPCIÓN PUNTOS DE SUSCRIPCIÓN

Españm y Portugaí.—Aflo, l o pesetas.
> Semestre, 5 ídem, En la Administración de La Energía Eléotrica (Prin-
n Trimestre, 3 ídem. cesa, 18 provisional), por medio de sus corresponsaleí en ;
Extranjero — A n o , 15 ídem.
> Semestre, 8 ídem. provincias y en las principales libreríu, tanto nacionales i
En Madrid. . . . . . — U n mes, una peseta. I como del extranjero.

AL aRO AL SEMESTRE AL TRIMESTRE

ESPACIO OCUPADO
Pesetas. cts. Pesetas. cu. Pesetas. cts.

Plana entera 800 150 80

Media plana 160 > 75 > 40 >
U n tercio d e p l a n a 100 > 50 > 80 >
ü n cuarto d e plana 75 > 40 > 20 >
U n sexto d e plana 50 > 30 > 15 >
U n octavo d e plana 40 • 20 • 10 *

SxtraiiJeFO, loa m i s m o s precios e n francos.

Rmprmmmnianim mxclumlvo mn Franclai M. Félix Bmnard,
Ñu* dea BourgaIgnona-JO. Aanierea (Seiae)
CORRESPONSALES EN EL EXTRANJERO
COLONIA, ALEMANIA.—M. JUAN SCHLOTTE, MOSELSTRASSE, 4 2 .
MÉXICO.—D. RAMÓN DE S. N . ARALUCE, CALLEJÓN DE SANTA INÉS, 5, LIBRERÍA.
H a b a n a . — D . MAMERTO GONZÁLEZ, LIBRERÍA LA ÚNICA.
BUENOS AIRES.—LIBRERÍA EUROPEA, MAIPU, 2 7 0 .
, REPTÍBLICA ARGENTINA, CÓRDOBA.—D. CARLOS GANGE, F . C . C . C .
URUGUAY, MONTEVIDEO.—A. BARREIRO Y RAMOS, LIBRERÍA NACIONAL.
NEW Y O R K . — M . ANTONIO TALLAVULL, 1 2 8 , WATER.
PUERTO R I C O . — D . JOSÉ LEÓN NTIÑEZ, SUCESORES DE VILLAMIL.
EMPRESAS ANUNCIADORAS INTERNACIONALES EN RELACIÓN CON NUESTRA REVISTA
NEW Y O R K . — M . EMEST F . WOLFF, 3 2 , BROADWAY.
BERLÍN.—RUDOLFF MOSSE, JERUSALEMER, 4 8 / 4 9 .
FRANCIA.—JOHN F . JONES & C » , RUÉ DU FAUB. MONTMARTRE, 3 1 BIS, PARÍS.
BARCELONA.—HAASENSTEIN Y VOGLER, FERNANDO V I I , 2 .

0 « « O M O « * O M O « « 0 « 0 « 0 « f t O M O « » 0 <

SOCIEDAD A N Ó N I M A T A L L E R E S D E S A N M A R T Í N

ESTA CASA SE HA HECHO UNA ESPECIALIDAD EN LA CONSTRUCCIÓN DE MOTORES HIDRÁULICOS, APLICANDO Á

CADA CASO EL MÁS CONVENIENTE Y APROPIADO AL FIN Á QUE SE DESTINA.
SE REMITEN PRESUPUESTOS Y PROYECTOS DE INSTALACIÓN Á QUIEN LO SOLICITE. PIDAMSE REFERENCIAS.

D I R E C C I Ó N T B L E Q R A K I C A

TALLERES DORIGA.—SANTANDER
 Madrid 25 de Febrero de 1902.—Año III
b o l b t I n !
asociación de la Industria Eléctrica de España.
La correspondencia relacionada con la Asociación, debe dirigirse al Sr. Presidente de la misma D. José Batlle, S e -
rrano, 26, 6 al Sr. .Secretario D . Salvador de Casas y Castilla Portugal, Divino Pastor, 7 duplicado.
GUÍA MANUAI. D E LEGISLACIÓN INDUSTRIAL,
D. Fernando Ruiz Feduchy, ingeniero industrial,
capitán de Artillería y licenciado en derecho, y don
Lorenzo EIps, ingeniero industrial.
Los autores, al escribir esta útilísima obrita, pre-
tendieron, como dicen modestamente en su intro-
ducción, «presentar todas las disposiciones legis- ,
lativas que hacen referencia á la industria, indican- j
do brevemente el asunto de que se ocupan y el lu-1
gar en que se ptieden estudiar con la extensión que j
cada caso exija», y no hay duda de que han con-1
seguido por completo su objeto, evitando con elloj
muchísimo trabajo y prestando señalados servicios
á los que le consulten.
En España, donde nuestra laberíntica legislación
en todos los ramos, imposibilita algunas veces y di-
ficulta siempre, la resolución de los asuntos y
consHltas, aumentando indefinidamente los trá-
mites y obligando á buscar y rebuscar multitud de
disposiciones, sueltas y desordenadas, contenidas
en gran número de textos legislativos, el presentar
todas las vigentes sobre materia tan interesantí-
sima como es la relacionada con el planteamiento
y explotación de industria^, es trabajo en extremo
meritorio y práctico, que debiera ser imitado por
quienes están en condiciones por sus conocimientos
y profesión para realizarlo, y se sienten con ios
bríos de los señores Feduchy y Elps, cuyos nom-
bres, y principalmente el primero, serán ya cono-
cidos de la mayoría de nuestros lectores por aq-
teriores publicaciones.
Aunque todas las prescripciones de la Guía ma-
nual son igualmente útiles á los que se dedican á
las industrias eléctricas, les interesa especialmente
el conocimiento de las disposiciones referentes al
aprovechamiento de aguas públicas, servidumbres
legales, delitos contra la propiedad, faltas contra
los intereses generales de las poblaciones, apertura
de fábricas y establecimientos industriales, domi-
nio, servidumbre, policía y aprovechamiento de
aguas ptiblicas, reglamentación y tarifas de la con-
DE LA
por tribución industrial, pertenencia de la propiedad
industrial internacional, etc., á todos los cuales se
refiere el Guía manual, cuyo insignificante precio
de 1,50 pesetas, lo pone al alcance de cuantos se
dedican al planteamiento ó explotación de indus-
trias, por modestas que sean.—H. H.
3 S r O T I O I L A . S
Nombramiento.—Ha sido nombrado ingeniero-
consultor de la Asociación y Director del Boletín
de la misma, nuestro compañero de redacción don
José García Benítez.
Concurso.—La Compañía Española de Minas
—La Liga Vizcaína de Productores, ha recibido de
la Sociedad Española de Minas, domiciliada en
Bilbao, el encargo de redactar las bases de un
Concurso que dicha Sociedad proyecta abrir entre
ingenieros nacionales y extranjeros, á fin de pre-
miar los mejores estudios que puedan servir de base
á la creación en España de industrias nuevas con
primeras materias del país, y al establecimiento de
industrias con productos procedentes del extran-
jero.
La Sociedad Española de Minas destina 15.000
pesetas para premiar el trabajo que se haga acree-
dor á recompensa.
El Jurado, probablemente, lo compondrán siete
individuos; tres los designará la Compañía Espa-
ñola, y serán ingenieros de la casa; tres será desig-
nados por la Liga Vizcaína de Productores, á cuya
respetable entidad ha sometido la Española de Mi-
nas su pensamiento para que le dé forma y desarro-
llo. Y el individuo restante, según nuestros infor-
mes, será un catedrático de la Escuela de Ingenie-
ros Industriales de esta villa.
No está acordada la fecha del concurso ni los
demás particulares del mismo, que en breve serán
del dominio público.
 II

Proyecto de tranvía eléctrico en las minas pañía General Española de Alumbrado, Calefacción
de Incho (Galicia).—Por cuenta de la Compañía y Fuerza motriz con base de alcohol y sus deriva-
de ferrocarriles de Medina á Zamora y Orense á dos por los sistemas Denayrowze y otros.
Vigo, se practican estudios para la construcción de La Junta ha tenido por objeto tratar de la orga-
un tranvía eléctrico de vía estrecha, desde las mi- nización, con arreglo á los estatutos, y exponer el
nas de Incho á empalmar con la red general en los plan de trabajos.
Peales ó San Esteban. Como hemos oído ponderar las ventajas que re-
Tiene por objeto la conducción del mineral des- porta el empleo del alcohol en los fines indicados,
de esta provincia al puerto de Vigo, para su expor- procuraremos obtener informes técnicos y econó-
tación al extranjero. micos, exactos, para poder dedicar á esta nueva
Proyectos y estudios de instalaciones.—Se industria la atención que reclama su extraordinaria
han ultimado ya los estudios para el aprovecha- importancia.
miento de 7.000 litros de agua por segundo como Inauguración del alumbrado eléctrico en
máximum, derivados del río Alberchi, en la provin- Quintanar de la Sierra.—El dia i.o de Enero
cia de Ávila, término de Tiemblo, para producir liltimo inauguróse en la pintoresca é imporLintc
energía eléctrica en el salto de la Jabalina, término villa burgalesa de Quintanar de la Sierra el alum-
de San Martln de Valdeiglesias. brado eléctrico, instalado por la acreditada casa
El propósito de las personas que trabajan este Ahlemeyer, de Bilbao. La central se ha construido
asunto es, al parecer, proporcionar á Madrid la en las inmediaciones del pueblo en espacioso y
energía eléctrica producida por la fuerza de 2.500 elegante edificio. Se ha empleado una turbina de
caballos. eje horizontal sistema Voith, de veinte caballos
efectivos, la cual acciona sobre una dinamo de co-
También se han realizado los trabajos de campo rriente continua de 14 kilovatios, que abastece por
y estudios para el proyecto de aprovechamiento de ahora el alumbrado público, compuesto de 40 focos,
50.000 litros de agua por segundo, derivados del y al particular (150 lámparas).
río Pastrana ((iuadalajara), con destino á la pro- Han proyectado y realizado la instalación los in-
ducción de energía eléctrica destinada á Madrid, y genieros D. Antonio Jiménez Rico y D. Hesr
dicho proyecto, segtin noticias recientes, va muy Walther Ríchter, este último de la mencionada casa
adelantado. Ahlemeyer. Todo el material empleado procede de
La Hidro-eléctrica de Huesca.—La Sociedad la casa alemana Schuckert.
Hidro-eléctrica de dicha capital de provincia ha ICaquinaria y Metalurgia aragonesa.—En la
celebrado Junta general de accionistas, acordando primera reunión celebrada en la Cámara de Co-
la compra de la central que hoy explota el alum- mercio aragonesa por esta nueva Sociedad, quedó
brado eléctrico de la capital, y se autorizó al Con- elegida la siguiente Junta direcUva;
sejo de administraciún para emitir obligaciones D. Carlos Mendizábal como gerente ó director
hasta 500.000 pesetas como máximum, con objeto técnico, y como consejeros los señores D. Antonio
de sufragar los gastos necesarios para la termina- García Gil, D, Manuel Escudero, D. Antonio Usón,
ción de las obras, que no han podido verificarse 1). Gil Gil y Gil, D. Joaquín Gil Berges, 1). Luis
con el capital con que se constituyó la Sociedad, Mendizábal y D. Ramón Bosqued, y como super-
por las frecuentes y extraordinarias avenidas ocu- numerarios ü. Alberto Aladren y ü. José María
rridas en el río Gallego durante la ejecución de las Royo.
obras de la presa, y por haber ampliado el proyec- El Consejo nombró después presidente á D. An-
to primitivo, aumentando el salto, y haciendo ex- tonio García Gil, vicepresidente á D. Manuel Escu-
tensivo el suministro de luz y energía eléctrica al dero, secretario á D. Gil Gil y Gil, y vicesecretario
pueblo de Anzánigo y vi'las de Ayerbe, Loarre y á D. José María Royo.
Bolea. En dicha reunión aprobóse la Memoria presenta-
Con la compra de la central eléctrica hoy exis- da por el gerente de la sociedad, el competentísimo
tente, la Sociedad, además de evitar una compe- ingeniero militar ü. Carlos Mendizábal, director
tencia, siempre perjudicial, asegura el alumbrado que ha sido de Altos Hornos en Bilbao hasta la
de la capital en caso de interrupciones en la línea constitución de la «Maquinaria aragonesa».
de transporte. Lá Sociedad, constituida con un capital de 3 mi'
Ifneva industria en España.— Ha celebrado llones de pesetas, tiene ya en construcción su fá-
en Madrid su primera Junta de accionistas la Com- bricaen término de Utebo Mqpzalbarba, á 9 kiW.
 III

metros de Zaragoza, y se dedicará á la ejecución y Condonación de multas. — Intepretación de

reparación de construcciones metálicas de todas la ley de Presupuestos.—Por Real orden de 27
claseK. de Enero, que publica la Gaceta del 3 de Febrero,
El desarrollo creciente en nuestro país de las in- se dispone:
dustrias en general asegura á esta nueva rápidos « I . " Que deben estimarse comprendidos en el
progresos, permidendo la obtención y reparación perdón que concede el art. 17 de la ley de Presu-
en España de material y maquinaria que hasta abó- puestos todos los documentos que contengan actos
la había que adquirir ó arreglar en el extranjero ó contratos sujetos al impuesto de derechos reales
con perjuicio de la economía y demás. que estuvieran incursos en multas antes de i . ° de
la «trust» de las Trasatlánticas.—Se hacen Enero de 1902, ya estén liquidados, pendientes de
trabajos para llegar á la constitución de un pode- pago, ó ya se presenten á liquidación dentro del
roso /««/angloamericano de las Compañías Tras período de tres meses que en dicho artículo se pres-
atlánticas. cribe, y satisfaga las cuotas é intereses de demora,
Se compone el trust de las famosas Compañías dentro del plazo que determina el art. 106 del re-
«American Idne», «Cunard», «Wilhe Star», «Red glamento de 10 de Abril de 1900.
Star», «Anchor», «Leyland», «Domimia», «Fur- 2.° Que no se entenderán condonadas las mul-
nes», etc , etc., y los vapores que entrarán á servir- tas en la parte que pueda corresponder á terceras
lo sumarán más de un millón de toneladas. personas, y en ningiín caso los intereses de demora
Las dos grandes Cotnijañías alemanas que hoy exigibles á los comprendidos en el perdón desde el
baten el rectird de la velocidad y de la baratura en día en que se debieran; y
transportes, que son la Hamburguesa y el Lloyd, 3." Que la presente resolución se entienda como
disponen de muchos buques, cuyo tonelaie viene á interpretativa de la ley de Presupuestos, en cuanto
ser igual al que v a á tener el nuevo trust. al impuesto de derechos reales, para la debida uni-
La Asociación angloamericana viene, pues, á dis- dad de criterio en la aplicación de la misma.»
putar el comercio trasatlántico á las dos grandes Solicitudes.—D. Francisco G. Camino ha soli-
Compañías alemanas, y es seguro que dentro de citado del Ministerio de Agricultura, autorización
poco comenzará una guerra de tarifas. para la construcción de un tranvía con motor eléc-
El principal accionista del nuevo trust trasatlán- trico para viajeros y mercancías, desde la estación
tico es el famoso Morgan, y el capital de las accio- de Sarón en el ferrocarril de Astillero á Ontaneda,
nes pasa de 800 millones de dollars. hasta la villa de Selaya, utilizando la carretera del
Sólo en las e crituras de consdtución del trust se Estado.
han gastado hasta el día unos 40.000 duros. —D. Eduardo H. Neville, vecino de Madrid, la
La prensa inglesa comenta favorablemente la concesión de un tranvía de vapor desde Trujillo á
creación de este poderoso tmst. Cáceres.
Contribución industrial.—Fábricas de sulfu- —En breve darán principio los trabajos de cons-
ro de carbono.—Tarifa 3.", epíg. 174.—Po.-Real trucción en la villa de Andosilla (Navarra) para la
orden de 6 de Enero (Gaceta 4 Febrero) se modifica instalación de la luz eléctrica que suministrará á la
este epígrafe en la siguiente forma: expresada villa y á Carear. El concesionario es don
«Fábricas de sulfuro de carbono», en la siguiente Gil Esparza.
forma: o-A. Fábricas de sulfuro de carbono. Paga- Concesiones hidráulicas. — Por el Gobierno
rán cerno cuota irreducible, por cada cien decíme- civil de Valladolid se ha concedido á la Sociedad
tros ciiblicos de capacidad del recipiente donde de Garay, Zabala y Gorosabel, autorización para
reaccione el azufre y el carbón, 40 pesetas.» derivar del río Duero 14.000 litros por segun-
Impuesto á las Sociedades. —El señor ministro do en aguas de esdaje y 20.000 en las inverna-
de Hacienda, que en la primera Junta de las Socie- les, con desuno á la producción de energía eléc-
dades anónimas se mostró dispuesto á reformar los trica.
reglamentos de tributación en sentido favorable á l^a presa está proyectada en término de San Ro-
las mismas, ha variado de parecer, y en la actuali- mán de la Hormija y serán conducidas por un ca-
dad se opone á toda medida 4ue tenga por objeto nal de 6.375 metros de longitud, que las devolverá
modificar los impuestos que las gravan. Es el medio al río en el sitio denominado «La Sirera», en el
más eficaz para evitar la creación de las mismas, ó término de Toro. El salto será de 6,52 ms. y per-
p a r a obligarlas á que se constituyan en las Vascon- miürá aprovechar una energía de 1.190 y 1.738
gadas ó en Navarra. caballos respectivamente.
 IV!
Ha sido autorizado D. Vicente Fatrás y Neira
para aprovechar 2.000 litros de agua por segundo,
del río Nervión, caudal de sus aguas medias, en un
salto de 9 metros de altura de caída, en la jurisdic-
ción de la anteiglesia de Arrancudiaga, cuya ener-
gía mecánica ha de ser transformada en electrici-
dad.
Segtin nos comunican de Osuna, los sefiores don
Pedro Barrientos, D. Mauricio Gordillo y D. Diego
y D. Felipe González Parejo, se proponen comen-
zar muy en breve la construcción de una central
hidroeléctrica para el servicio de alumbrado y
fuerza motriz de dicha población, á cuyo efecto han
firmado ya el contrato para la instalación con la
Compañía Ahlemeyer.
El salto del río (íenil, de cuyo aprovechamiento
se trata, es de 300 caballos y se halla situado á 30
kilómetros de Osuna, en las aceñas de Don Calixto,
término de Herreras. La tensión en la línea general
será de 15.000 voltios y se instalará por lo pronto
una sola turbina Voith de 230 caballos, con alter-
nador de 225 kilovatios y 4.000 voltios de tensión.
Las obras comenzarán en el mes de Marzo y se
espera que podrá inaugurarse el servicio de alum-
brado en el mes de Septiembre.
Kl día 9 del corriente mes se inauguró en Mar-
inolejo el servicio de alumbrado eléctrico estable-
cido por la Unión Industrial Minera de Linares.
l^a central generatriz, cuya instalación ha llevado
a cabo la Compañía Ahlemeyer, dista dos y medio
kilómetros de la población y está situada á orillas
del Guadalquivir, de cuyo río utiliza un salto de
cuatro y medio metros ctíbicos por segundo, en el
sido llamado «Batán de la Fuente de Olí», que pro-
duce una fuerza de 450 caballos.
La obra hidráulica consta de una presa de 160
metros de ancho por 2 de alto y de un canal de
cotiducción de 180 metros, capaz para un caudal
de 12 á 15 metros ciibicos por segundo.
Kn la nueva central se han instalado tres grupos
de turbinas Voith de 250 caballos cada una, con
reguladores automáticos privilegiados, acopladas
directamente en transmisión horizontal á tres alter-
nadores Schuckert de corriente trifásica de 5.000
voltios, con 250 revoluciones. Uno de los grupos
queda de reserva.
Hasta ahora se han instalado en Marmolejo unas
1,200 lámparas de 10 bujías y se están construyen-
do las líneas generales para el transporte de la
energía eléctrica á Villa del Río, Montoro, Biija-
lance y Cañete, en cuyas poblaciones se inaugurará ;
el servicio de alumbrado á fines de Marzo pro- ]
ximo. •
Concesiones h i d r á n l i c a B . — A D. Jorge Loring ,
se ha concedido derivar del río Guadalhorce, tér-;
mino de Árdales (Málaga), 2.400 litros de agua por !
segundo, con objeto de utilizarlos como fuerza mo- \
triz para la producción de energía eléctrica con
destino á usos industriales, y la imposición de ser-
vidumbre forzosa de acueducto para el paso y eva-
cuación de las aguas por los terrenos que en el
proyecto detalla dicho señor al hacer la petición.
Resulta de los aforos practicados en el sitio don-
de se proyecta derivar el agua, por la división hi-
dráulica del Guadalquivir, que el término medio, ó
sea, en la época del estío, no conducía elríomás
que 1.830 litros por segundo, menos que la canti-
dad solicitada; pero la superioridad ha hecho la
concesión, no siendo, por lo tanto, responsable de
la falta ó disminución que pueda resultar en el cau-
dal solicitado.
— Del Gobierno civil de Madrid ha solicitado
D. Jorge Besonda la concesión de 220 litros de
agua por segundo del río Jarama.
—En Barcelona D. Pedro Jorba ha solicitado el
aprovechamiento de aguas del río Calders para
utilizar como fuerza motriz en una fábrica que
piensa construir.
—D. Manuel Gispert, 869,50 litros por segundo
con el propósito de producir energía eléctrica y de-
dicarla al aumento de la potencia industrial del
aprovechamiento que hoy posee y aplica á la ma-
nufactura de algodón.
—También en Barcelona ha solicitado doña
Margarita Marsiñac un aprovechamiento de aguas
del río Llobregat jiara utilizarlo como fuerza mo-
triz en una fábrica de hilados.
—Burgos: D. Tomás Tobalina ha solicitado am-
pliar una concesión que disfrutó del río Ebro, en
Cabríana, término de Miranda, con el ñn de obte-
ner 560 caballos de fuerza para la producción de
energía eléctrica.
—D. Lorenzo de Zaballa, vecino de Ugarte (Viz-
caya), 583 litros de agua para utilizarlos como fuer-
za motriz de un artefacto generador de corrientes
eléctricas.
—La Comisión municipal del alumbrado del
Ayuntamiento de Cádiz ha estudiado los informes
presentados por el ingeniero Sr. Díaz Escribano, con
arreglo á las proposiciones presentadas nara cons-
truir la fábrica municipal de electricidad. Se asegu-
ra que en principio está designada la proposición
que ha de aceptarse.