REFLEXIÓN DEL EVANGELIO DE JUAN 3, 16- 21

“Dios envió su Hijo, para que el mundo se salve por él.”

El Evangelio de ayer terminaba diciendo que: “es necesario que el Hijo del hombre sea
levantado en alto, para que todos los que creen en él tengan Vida eterna.”.
En en día de hoy, en evangelista Juan sigue llamando la atención para el tema de la vida
eterna, pero profundizando un poco más su reflexión con el hecho de que la vida eterna que nos
viene por Jesús, es un proyecto del Padre, que por amor a cada un de nosotros, entregó su Hijo
único, el objeto de toda su predilección, el Hijo amado.
El amor de Dios por nosotros, “consiste que Él nos amó primero, y envió su Hijo como
víctima de expiación por nuestros pecados” (1Jn 1, 4,10b), para que podamos recibir la vida eterna,
la resurrección que profesamos en el Credo todos los domingos: Creo en la resurrección de la carne
y la vida eterna.
Tenenos aquí la buena noticia que alegra nuestro corazón, cambia todo nuestro existir, saber
que Dios nos ama, con amor infinito y por eso promete para nosotros la salvación y la vida eterna
por medio de su Hijo.
Todavía para participar de esta Vida Nueva, que nos viene de la Pasión- Muerte y
Resurrección de Jesús, es necesario creer en Jesús, seguir creyendo, renovar la fe en Jesús a cada
día de nuestra vida, mismo delante de las persecuciones, como es el caso de los Apóstoles en la
Primera Lectura, llevados a la cárcel por anunciar la fe en Jesucristo, ellos permanecieran firmes
delante dos los que no creían, de los que optaran por las tinieblas.
Hoy somos invitados por la Palabra de Dios a renovar nuestra fe en Cristo Jesús, que vino
para salvarnos, no para condenarnos, que vino para rescatarnos de las tinieblas y de la perdición
eterna. Iluminados por la Verdad, seamos anunciadores de este misterio de Salvación para que todos
puedan conocer y creer en este Dios que tanto nos ama, con nuestra manera de vivir en este mundo,
siendo reflejos del amor y de la misericordia de Dios. Así sea. Amen.

Hno. Thiago Augusto da Silva, a.a.

CIFA, 15 de abril de 2021.