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PREGUNTAS ¿Es Jesús el centro de mi vida? ¿Cómo expreso la centralidad de Cristo en mi familia, en mi
DE REFLEXIÓN parroquia, en mi comunidad, en el lugar de mis actividades diarias?
9. EVANGELIO
M. Escucharemos, ahora, las Palabras de Jesús. “El que ama a su padre o a su madre más que a mí,
Palabras sobre la exigencia que nos supone su no es digno de mí; y el que ama a su hijo o a su hija
seguimiento. Y Palabras, también, que expresan que más que a mí, no es digno de mí. El que no toma su
Él está presente en aquéllos que le siguen por amor. cruz y me sigue, no es digno de mí. El que encuentre
su vida, la perderá; y el que pierda su vida por mí, la
Aleluia. encontrará. El que los recibe a ustedes, me recibe a
Ustedes, son una raza elegida, un sacerdocio real, mí; y el que me recibe, recibe a Aquél que me envió.
una nación santa, un pueblo adquirido El que recibe a un profeta por ser profeta, tendrá la
para anunciar las maravillas de Aquél recompensa de un profeta; y el que recibe a un justo
que los llamó de las tinieblas a su admirable luz. por ser justo, tendrá la recompensa de un justo. Les
Aleluia. aseguro que cualquiera que dé a beber, aunque sólo
Evangelio de nuestro Señor Jesucristo según sea un vaso de agua fresca, a uno de estos pequeños
san Mateo 10,37-42 por ser mi discípulo, no quedará sin recompensa”.
Dijo Jesús a sus apóstoles: Palabra del Señor. / Gloria a Ti, Señor, Jesús.
10. HOMILIA/SILENCIO (Momento para meditar e interiorizar el
mensaje de la Palabra) PLEGARIA EUCARÍSTICA
11. CREDO 15. CANTO DE COMUNIÓN: “Antes que te formaras” (VSJ. 298; ER. 3208)
Creo en Dios, Padre todopoderoso, Creador del cielo Antes que te formaras
y de la tierra. Creo en Jesucristo, su único Hijo, nuestro dentro del vientre de tu madre,
Señor, que fue concebido por obra y gracia del Espíritu antes que tú nacieras te conocía y te consagré.
Santo, nació de santa María Virgen, padeció bajo el poder Para ser mi profeta de las naciones yo te escogí:
de Poncio Pilato, fue crucificado, muerto y sepultado, “iras donde te envíe y lo que te mande proclamarás.”
descendió a los infiernos, al tercer día resucitó de entre los Tengo que gritar, tengo que arriesgar.
muertos, subió a los cielos y está sentado a la derecha de ¡Ay de mí si no lo hago!
Dios, Padre todopoderoso. Desde allí ha de venir a juzgar ¡Cómo escapar de Ti, como no hablar
a vivos y muertos. si tu voz me quema dentro!
Creo en el Espíritu Santo, la santa Iglesia católica, la Tengo que andar, tengo que luchar.
comunión de los santos, el perdón de los pecados, la ¡Ay de mí si no lo hago!
resurrección de la carne y la vida eterna. Amén. ¡Cómo escapar de Ti, cómo no hablar
si tu voz me quema dentro!
12. ORACIÓN UNIVERSAL No temas arriesgarte
C. Dios Padre que nos amas, dirigimos a Ti nuestras porque contigo yo estaré.
oraciones, para que por medio de tu Hijo Primogénito No temas anunciarme
nos concedas aquello que te pedimos. A cada súplica porque en tu boca yo hablaré.
respondemos: Por tu Hijo, escúchanos. Te encargo hoy mi pueblo
para arrancar y derribar,
Por la Iglesia, pueblo de Dios, para que en todas las para edificar destruirás y plantarás.
naciones continúe dando testimonio de fe, esperanza
y solidaridad. Oremos. Deja a tus hermanos,
deja a tu padre y a tu madre.
Por el Papa Francisco, sucesor de san Pedro, para Abandona tu casa
que siga conduciendo con gran celo pastoral la barca porque la tierra gritando está.
de la Iglesia. Oremos. Nada traigas contigo
Por los Gobernantes de todas las naciones, para porque a tu lado yo estaré.
Es hora de luchar
que defiendan a la humanidad ante cualquier porque mi pueblo sufriendo está.
amenaza, facilitando la libertad, la justicia, la salud
y la solidaridad para todos. Oremos. 16. ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Por las personas enfermas con el coronavirus, C. Que la Víctima Divina que hemos ofrecido y recibido
para que encuentren en Dios, alivio a sus nos llene de vida, Señor, para que unidos a Ti por el
sufrimientos y cuenten con nuestra solidaridad amor, demos frutos que permanezcan eternamente. Por
cristina. Oremos. Jesucristo, nuestro Señor. Amén.
Por todos nosotros, para que no traicionemos a RITO DE CONCLUSIÓN
Jesucristo a cambio de algunas ventajas pasajeras.
Oremos. M. Las exigencias que Jesús indica para seguirle son
claras: Él ha de ocupar el primer lugar en nuestras vidas,
(Otras intenciones de la comunidad) hemos de estar dispuestos a dar la vida por Él, y hemos
C. Dios, Padre de bondad, que por Jesús nos has dado de acoger a los más insignificantes como si se tratara del
una vida nueva, escucha nuestra oración llena de fe. Te lo mismo Jesucristo. Dispuestos a cumplir por amor estas
pedimos por Jesucristo, nuestro Señor. Amén exigencias, recibimos la bendición de Dios.
17. BENDICIÓN
LITURGIA DE LA EUCARISTÍA C. El Señor esté con ustedes. Y con tu espíritu.
C. Y la bendición de Dios todopoderoso, del Padre, del
13. CANTO DE LAS OFRENDAS: “Te ofrezco el blanco pan” (VSJ. 149; Hijo (✝) y del Espíritu Santo, descienda sobre ustedes y
ER. 1516) permanezca para siempre. Amén.
Te ofrezco el blanco pan a Ti, Señor, 18. CANTO FINAL “Dichoso quien en su vida” (VSJ. 272; ER. 2743)
y en él yo te doy mi pobre corazón, Dichoso quien en su vida
conviértelo en tu Cuerpo Redentor, oh Dios, vive como vivió María, (2-2)
por tu Cruz y por mi salvación. siempre amando a los demás,
siempre sirviendo a los demás. (2-2)
¿Por qué no cree el hombre en Ti,
si Tú le das calor? Si hiciste el cielo, el mar y el sol Con tu entrega permitiste
tan sólo por su amor. que nos acompañe Dios,
Yo creo en Ti, Señor, creo en Ti, Señor. y creciendo Él a tu lado,
compartía nuestra vida.
14. ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS En tu canto de alabanza
C. Dios de bondad, que das eficacia a tus misterios, retrataste a nuestro mundo,
concede que nuestro culto resulte digno de estos sagrados donde siempre los pequeños
dones. Por Jesucristo nuestro Señor. Amén. del Señor son preferidos.
“TOMAR LA CRUZ Y SEGUIRLE”
La adhesión personal e íntima a Jesucristo, es una condición indispensable para seguirle.
El Evangelio de Mateo nos lo presenta así:
Esta opción de amor incondicional pasa por ese camino: abandonarlo todo, porque aumenta su intensidad, y
ser su discípulo, no es seguirlo sólo cuando nuestras ocupaciones nos lo permiten o cuando sentimos ganas
de hacerlo, estos afectos deben ser un objetivo de bien común, amor que busca más dar que recibir.
Es un seguimiento de tomar la cruz juntamente con el Maestro, como signo de entrega personal, actitud que
supone incluso no tener miedo a perder la propia vida. Y todos estamos llamados a ello.