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9- Prehistoria Europea

EL ARTE DE LEVANTE
ESPAÑOL

CATEDRA DE HISTORIA DE LAS


ARTES PLASTICAS I
CARACTERISTICAS DEL MESOLITICO O EPIPALIOLITICO

• El final del Paleolítico Superior coincide con la ultima retirada de los hielos del continente
europeo. El cambio de clima y las transformaciones ecológicas van a modificar el
comportamiento cultural de los seres humanos que habitan en diferentes puntos del planeta.
• Podemos hablar de una etapa existente entre Paleolítico y Neolítico , refiriéndonos a ella
como Mesolítico.
• Alguno autores de la escuela francesa hacen una subdivisión de este periodo en Epipaleolítico
y Mesolítico. Son epipaleolíticos aquellos grupos humanos claramente herederos del
Paleolítico Superior que siguen empleando la técnica laminar para sus industrias. Por el
contrario serán Mesolíticos los pueblos con industrias de tipo microlíticos (tallan artefactos
de piedra extremadamente pequeños), que se encuentran en vías de transformación hacia un
Neolítico.
• Los grupos humanos cambian gradualmente de cazadores- recolectores a otro de agricultores
ganaderos que se desarrollara a los largo del Neolítico.
• La regresión de los hielos deja libre grandes espacios en los que la tundra se ve sustituida por
masas boscosas y permite a los grupos humanos una migración hacia latitudes mas norteñas,
produciéndose nuevas adaptaciones al medio. El cambio climático trae también aparejado
cambio sustanciales en la fauna , desapareciendo especies como el rinoceronte lanudo o el
mamut, o la migración hacia regiones mas frías como sucede con el reno.
• En definitiva, esta época es una especie de puente cultural de gran complejidad a la hora de
una clasificación cronológica, pero también de una gran trascendencia para comprender todo
el proceso sociocultural que alumbrará el Neolítico.
Aunque casi todos los investigadores coinciden en no adscribir las pinturas
rupestres del Levante español al periodo paleolítico, sigue sin haber un
planteamiento definitivo.

 E. Ripoll sitúa el comienzo de las representaciones hacia el año 6.500 a.C.

 A. Beltrán plantea los inicios en el 6.000 a.C. y enlaza el final con las
últimas manifestaciones azilienses cantábricas.

 J. Fortea opina que las primeras imágenes de este ciclo artístico se


situarían en torno al 5.000 a.C., en relación con los grupos epipaleolíticos
del Levante español, pero no los vincula con el Arte Paleolítico franco -
cantábrico.

 M. Hernández Pacheco indica los comienzos a finales del IV milenio


relacionados con las manifestaciones de la cerámica cardial del Neolítico
inicial de la región mediterránea peninsular. F. Jordá sitúa los primeros
momentos del arte levantino a mediados del IV milenio, coincidente con el
Neolítico, y habla de su florecimiento en la Edad de los Metales y de su
desarrollo sincrónico al arte esquemático…
Fue J. Marconell quien tuvo el honor de descubrir en 1892 las primeras
manifestaciones de este arte en La Cocinilla del Obispo (Albarracín,
Teruel). El siguiente contacto con esta pintura postpaleolítica del
Levante español se produce en 1903, cuando J. Cabré, arqueólogo
turolense, y R. Huguet descubren los ciervos de estilo naturalista de
Calapatà, en Teruel (1903) - estos ciervos pronto se relacionaron con la
pintura rupestre cantábrica -, y la danza fálica de la Roca dels Moros de
Cogull, en Lleida (1907). Son estos dos investigadores quienes dan a
conocer al mundo científico la pintura levantina por medio de la
publicación de los estudios sobre los ciervos de Calapatá (Teruel) en
1907 y, al año siguiente, la edición de un trabajo en el Boletín del
Centro Excursionista de Cataluña sobre el abrigo pintado en Cogull
(Lleida).
E. Ripoll - Beltrame
1- Fase de sencillas pinturas lineales y geométricas que podría llegar hasta el año 5.000 a. C.;
a esta fase corresponderían las pinturas de las cuevas de la Sarga (Alcoy, Alicante), Cantos de
la Visera (Yecla, Murcia) y la Araña (Bicorp, Valencia).

2- Fase antigua o naturalista, entre el 6.000 y el 3.500 a.C.. Es entonces cuando se realizan las
pinturas de animales de gran tamaño, en tintas planas, de escaso movimiento y sin presencia
de figuración humana. Destacan los toros rojos y blancos de los abrigos de Albarracín (Teruel),
los toros rojos de la Cueva Remigia en el Barranco de Gasulla (Ares del Maestre, Castellón de
la Plana), el gran toro de la Cueva de la Araña (Bicorp, Valencia), los ciervos de Calapatá
(Cretas, Teruel) y de Val del Charco del Agua Amarga (Alcañiz, Teruel), los ciervos de Alpera
(Albacete) y otros análogos.

3- Fase plena con la progresiva desaparición de los toros, la abundancia de ciervos y, en


ocasiones, las metamorfoseadas figuras de los primeros en cérvidos. La representación de
estos animales sigue la tradición de la fase 2 pero aumenta su movimiento y la complejidad
de las escenas. Surge además la figura humana, muy poco naturalista. Este periodo arrancaría
en el año 4.000 a.C. y las imágenes más representativas de esta fase serían las del hombre
inclinado de la Cueva Remigia del Barranco de la Gasulla (Ares del Maestre, Castellón de la
Plana), algunos animales de Minateda (Albacete), la mayor parte de las pinturas de Cogull
(Lleida) y de la Solana de las Covachas (Nerpio, Albacete).
4- Fase de desarrollo, coetánea al Neolítico de las llanuras litorales, pero aún sin escenas
pastoriles o agrícolas. Abarca el periodo comprendido entre los años posteriores al 3.500
y el 2.000 a.C. A esta fase pertenecerían los bellos conjuntos donde hombres y animales
corren; la figura humana en carrera introduce el convencionalismo de las dos piernas en
línea; además, abunda la composición diagonal, la esquematización de los cuerpos
humanos realizados con técnica caligráfica y la estilización triangular del tórax, la
corrección del naturalismo animal a través del movimiento… En esta línea, destacarían los
arqueros de Val del Charco del Agua Amarga (Alcañiz, Teruel), los conjuntos del Bajo
Aragón, Valltorta (Tirig, Castellón de la Plana), La Gasulla (Tirig, Castellón de la Plana) y
Valencia.
5- Fase final desde el año 2.000 a.C. hasta su agotamiento. Supone una vuelta al
estatismo, la rigidez y la tendencia a la estilización y el esquematismo cada vez más
acentuados. En las pinturas se alude a una agricultura inicial con picos o palos para cavar
o a la domesticación de algunos animales - supuestos perros de Alpera (Albacete), monta
de caballos
Algunos estudios muy recientes, sin embargo, cuestionan una rígida evolución estilística y
relativizan determinadas superposiciones e infraposiciones o algunos posibles paralelos, cuyas
relaciones iconográficas o formales no son tan claras como en un primer momento podría
parecer, llegando a la conclusión de que el arte levantino es una manifestación artística con un
estilo definido, cuya narración sintonizaría con una sociedad cazadora recolectora, que sitúan en
el Epipaleolítico. Las escenas citadas en muchas publicaciones que nos remitirían a grupos
productores, domesticación de animales y plantas, son – según estos autores – interpretaciones
idealizadas, que se revelan como formas imprecisas y ambiguas.

El problema de la cronología de la pintura rupestre del Levante Español está aún


en discusión y, en cualquier caso, la datación absoluta anteriormente propuesta
es siempre una hipótesis. Aún no se tienen datos ni fuentes suficientes que
puedan dar confirmación a las distintas teorías que se han desarrollado al
respecto (Ripoll, F. Jordá, Almagro, Bandi…).
TECNICAS:
 El arte rupestre levantino solo ha dejado
manifestaciones pictóricas; no se han
hallado restos de esculturas y los escasos
grabados que conocemos están asociados a
las pinturas, a veces formando el perfil de
figuras de animal.
 Los colores mas utilizados son el rojo,
negro y blanco con numeroso matices. Los
colores proceden de ocres, óxidos y otras
materias como el carbón vegetal, disuelto
en agua o aglutinantes como sangre, miel,
resinas, grasas animales, etc. El blanco es
casi exclusivo de la Sierra de Albarracín.
 Las figuras humanas son en tintas planas,
estilizadas con cierto grado de
desproporción en sus cuerpos, exagerando
algunas veces el tronco y otras las
extremidades.
 Los animales se ajustan a la ley de
frontalidad, sus cuernos y pesuñas se ven
de frente y cabeza y cuerpo de perfil
 En las escenas de mayor actividad, como
carrera o persecuciones , el esquema que
siguen las figuras de una diagonal que da
sensación de profundidad
Temática:

 Figura humana
 Representaciones de animales
 Representación de armas
 Escenas de domesticación de animales
 Escenas de danza
 Escenas de caza
 Escencas de lucha
 Paul Wernert:
 En España, Paul
Wernert participó en la
excavación de las
cuevas prehistóricas
pintadas con H.
Obermayer, luego el
padre Breuil y el padre
Teilhard de Chardin. Un
trabajo muy
importante fue la
excavación de
la cueva del Castillo en
Cantabria .
 Según Wernert puede
distinguirse 4 grupos
de tipos humanos
representados en el
arte levantino.
Tipo de
Alpera
De intenso
naturalismo y justas
proporciones
Tipo cesto-
somatico
 De cuerpo exageradamente
largo, cabeza redonda,
pecho ancho triangular,
caderas estrechas y piernas
largas relativamente gruesas
Tipo paquipodico
 De cuerpo relativamente corto, cabeza grande y de
perfil, talla breve y esbelta y piernas excesivamente
gruesas.
Tipo
nematomorficos
 Reducido a las
dimensiones casi
lineales y estilizadas
hasta tal punto que sus
cuerpos solo cuentan
de alguna líneas
rectas y curvas
TIPOS HUMANOS

figura de arquero.
abrigo del ciervo
(valencia)
TIPOS HUMANOS

Abrigo del Barranco de


las Olivanas en Tormón
(Albarracín, Teruel)
Animales más significativos que aparecen en el arte levantino. Cabra Feixet (El Perelló,
Tarragona) – cáprido–. Cañaica del Calar (Moratalla, Murcia) –cérvido–. Torcal de las
Bojadillas (Nerpio, Albacete) – bóvido–. Cova Remigia (Ares del Maestre, Castellón) –
suido.
Abrigo de la
Cocinilla del
Obispo,
Albarracín,
Teruel
Abrigo del Barranco de
las Olivanas en Tormón (Albarracín, Teruel)
CIERVOS PINTADOS COMO TOROS SIERRA DE ALBARRACIN
GRUPO DE CIERVOS Y CABRA
CUEVA DE LA ARAÑA
ARAÑA O COLMENA CON INSECTOS CUEVA REMIGIA
ESCENA DE CAZA
ALCAÑIZ
ESCENA DE CAZA VALLTOTA
ESCENA DE CAZA
CASTELLON
DETALLE
VALLTORTA
SIERRA DE LA PIETA
TORO PERSIGUIENDO A UN GUERRERO CUEVA REMIGIA
CASTELLON
La Cueva del
Venado del Abrigo
de Alpera
(Albacete),
llamada también
de la Vieja,
La Cueva del
Venado del Abrigo
de Alpera
(Albacete),
llamada también
de la Vieja,
Barranco des Gascons, de Calapatá
(Cretas, Teruel)
CINCO ARQUEROS MOLA REMIGIA
El Abrigo de Doña Clotilde de La Losilla,
Tormón (Albarracín, Teruel)
ARQUERO
ALCAÑIZ
ARQUERO SENTADO
CASTELLON
ARQUERO CORRIENDO
CUEVA REMIGIA
CASTELLÓN
En la Cueva del Civil del Barranco de
la Valltorta (Tirig, Castellón de la
Plana) se han representado elegantes
arqueros que figura de un arquero de
0,14 metros que hoy se encuentra en
el Museo de Cervera (Lleida).
ARQUERO CORRIENDO
CUEVA DE LA ARAÑA
VALENCIA
GUERREROS EN FILA ABRIGO DEL BORO
VALENCIA
ARQUERO HERIDO CUEVA SALTADORA
Abrigos de Morella
la Vella (Morella,
Castellón
de la Plana)
Roca de

Roca dels Moros del Abrigo de Cogull


FIGURAS FEMENINAS
LERIDA

figuras femeninas. roca de los moros (el cogul)


RECOLECCIÓN DE MIEL CUEVA DE LA ARAÑA VALENCIA
ORIGINAL RECOLECCION DEMIEL
DOS FIGURAS FEMENINAS
CUEVA DE ALPERA
HOMBRES CON MASCARAS DE TORO MOLA REMIGIA
Fragmento del panel con representaciones zoomorfas
y antropomorfas grabadas (Barranco Hondo)
Castellote, Teruel.
ARQUERO DANZANDO CASTELLON
Mapa ideográfico con localización de sitios rupestres en el mundo y en
Colombia.
Foto: Diego Martínez C. 2009
ARTE PREHISTÓRICO EN ÁFRICA, ASIA, OCEANÍA Y
AMÉRICA

En el gran desierto del Sahara, las pinturas y grabados se plasmaron sobre rocas y en
abrigos
A partir de mediados del siglo pasado H. Lhote divulga una división cronológica para el arte
rupestre sahariano en cuatro fases:
• Período de los cazadores o Bubaliense (7.000-4.000 a.C.), se caracteriza por la reiterada
Búfalos, rinocerontes, jirafas, elefantes, hipopótamos, leones, avestruces… constituyen los
temas representados, también figuras humanas con bumerangs, bastones, hachas, arcos y
flechas… En muchos casos, pues, estamos ante auténticas escenas de caza. Los grabados
son anchos y profundos, piqueteados o pulidos.
• Período pastoralista o Bovidiense (ya plenamente neolítico, caracterizado por la
presencia de rebaños. Abunda la incisión y el piqueteado, y el pulimentado es menos
regular. En Tassili destacan las escenas pintadas (negro, rojo, blanco…) en tinta plana,
combinando bóvidos y antropomorfos de tendencia naturalista.
• Equidiense (a partir del 1.500 a.C.), se introducen nuevos elementos iconográficos (jinetes,
carros de guerra, animales domésticos. Las representaciones son más estilizadas, es el
momento en que los antropomorfos de gran tamaño definen el estilo de las Cabezas
Redondas, presentes ya en etapas anteriores. • Período de los camelleros, se desarrolla en
una cronología ya muy avanzada, apareciendo motivos ya muy simplificados,
esquemáticos.
Ta-n-Zoumaitak (argelia)

escenas de tassili (argelia)


África occidental y central. Aunque no es homogénea culturalmente, se caracteriza por
la abundancia de representaciones pintadas y grabadas esencialmente geométricas,
poco conocidas y menos investigadas. Este arte se prolonga prácticamente hasta
nuestros días, manteniendo una apariencia prehistórica en los temas y las formas. Los
elementos geométricos impregnan todas las construcciones u objetos y útiles o
adornos, sin olvidar la pintura corporal, tanto relacionados con rituales como con
actividades cotidianas.
Representaciones naturalistas de fauna salvaje, como las que hemos descrito para el
Sahara, las encontramos también en África del Este. A partir del 2.000 a.C. las escenas
pastoriles y de carácter doméstico van reemplazándolas.

Las investigaciones llevadas a cabo en África meridional destacan en el panorama


continental y mundial, con un inventario de miles de conjuntos rupestres y millones de
figuras, registrándose amplias concentraciones en Zimbabwe y en la República de
Sudáfrica.
13.000 BP.
Hipopótamos, rinocerontes, cebras,
antílopes… antropomorfos y
abstracciones o elementos geométricos
configurarían el cada día más amplio
inventario. Posteriormente surgiría la
bicromía (9.500 BP), las aves y los seres
híbridos o teriántropos – desde una
perspectiva chamánica – A partir de 8.000 BP
las escenas se
multiplican y hacia el 6.000 BP los elefantes,
las jirafas y los
avestruces se cuentan entre la fauna más
representada,
apareciendo los simios y los lepóridos. Los
animales domésticos
no se documentan hasta después del 2.000
BP.

Pintura rupestre de la etnia San (bosquimanos) en


Zimbabwe
Asia
En la India, la historiografía tradicional ha
definido una fase mesolítica para una
secuencia de pinturas rupestres, más
raramente grabados, que presenta
cazadores portando arcos, cérvidos,
équidos y
carnívoros; aunque en ciertas cavidades y
abrigos, como en Bhimbetka se han
propuesto cronologías del Paleolítico
Superior. Se localizan en las cordilleras
periféricas. El movimiento y pequeño
formato recuerdan el arte levantino
español, con el que en unos primeros
momentos, desde una perspectiva
etnocentrista, se comparó bhimbetka (india)
El arte prehistórico de China es el gran desconocido
para
occidente y para los mismos chinos. La mayor parte
de los
núcleos con arte rupestre se sitúan fuera del interior
de China, al exterior de las cadenas montañosas del
Suroeste. Pinturas, pero especialmente grabados
rupestres, presentan una fase similar a la que se ha
diferenciado en la India, en la que los cazadores con
arcos son los protagonistas. En una segunda fase
aparecerán los animales domésticos, los carros, los
puñales… Algunos posibles animales representados,
como el alce, el elefante o el avestruz, indicarían
cronologías anteriores a 10.000 BP. Los últimos
descubrimientos en este sentido se han producido
en Baga- Oygur y Tsagan-Salaa (Mongolia). En las
costas del Mar Amarillo próximas a Shanghai se
documentan figuras antropomorfas
esquemáticas, máscaras y soliformes, en rojo, cuyas
cronologías no superan apenas los 3.000 años a.C.
Oceanía
En Australia, el poblamiento
humano y la presencia de ocre,
que se podría utilizar tanto para
pintar como para decorar el propio
cuerpo u otras actividades, estás
atestiguados entre 60.000 y
40.000 BP. Las dataciones
absolutas a partir de muestreos
directos, acudiendo a diferentes
técnicas, sitúan las primeras
manifestaciones artísticas antes
del 40.000 BP. Encontramos dos
períodos:
El primero llegaría hasta el 8.000
BP. Incluye el estilo Paranamitee,

Abundan las huellas de animales formando auténticos rastros, círculos, cazoletas, líneas rectas… Los aborígenes
actuales interpretan estas figuras como si de una escritura se tratara.
Composición de la Cueva de la Serpiente (Arroyo del Parral, Baja California Sur, México).
Pueden verse dos serpientes con cabeza de ciervo y los característicos antropomorfos
bícromos (rojo y negro, tinta plana) de gran tamaño (el de mayores dimensiones mide
alrededor de un metro). El ofidio de la derecha finaliza con una cola bifida.
América del Sur y Central presentan una problemática similar a la del Norte. En la
Amazonia, las Antillas, Paraguay, Bolivia…, abundan los motivos geométricos
profundamentegrabados, incisos o piqueteados, sobre grandes bloques, paredes de
abrigos… Corresponden a una edad incierta e integran en sus composiciones
antropomorfos y zoomorfos esquemáticos. En los Andes se añaden también camélidos
y aves como el cóndor
Macusani-Corani

Cerca de la transición de la Cordillera de Carabaya a la ceja de selva, en el extremo norte del


departamento de Puno, se encuentra uno de los repositorios de arte rupestre más fascinantes y
menos conocidos de los Andes peruanos
Cueva de las manos. Santa Cruz

América
Es muy probable que grupos de cazadores
de alrededor del 12.000-10.000 BP hubieran
plasmado su actividad artística en abrigos y
cavidades. En Lapa Vermelha (Lagoa
Santa, Minas Gerais, Brasil) existen pinturas
naturalistas que reflejan escenas de caza de
guanacos. A estas composiciones se
superponen manos negativas, espirales
y otras formas geométricas, más recientes.
En la Patagonia (Argentina) encontramos
millares de manos negativas, negras y rojas,
pero también de otros colores (Cañadón de
las Pinturas, Cueva de las Manos Pintadas,
Río de las Pinturas…). Estos lugares
contienen restos de ocupación toldenses,
período cultural definido a partir de los
materiales arqueológicos de las cuevas de
Los Toldos (Patagonia), cuyas fechas se
remontan al 12.000
El sitio Cueva de las Manos se encuentra en el área del Alto Río
Pinturas en la “Estancia Cueva de las Manos”. Incluye los aleros,
farallones y la cueva con presencia de pinturas rupestres.
Los sectores con pinturas más destacados se ubican sobre la
margen derecha aproximadamente a 88 metros sobre el nivel del
río, cubriendo un frente de más de 600 metros.
Estas representan diferentes escenas de caza, negativos de mano,
motivos de animales y figuras abstractas. En la Cuenca del Río
Pinturas se localizan varios sitios arqueológicos sobre ambas
márgenes, éstos son la evidencia de una ocupación integral del
área por parte de los cazadores recolectores a lo largo de 9000
años.
Su interés radica en la belleza de las pinturas rupestres, así como en su gran antigüedad:
hasta el momento, las inscripciones más antiguas están fechadas 9300 años AP («antes
del presente», oficialmente el año 1950), lo que equivale al año 7350 a. C. Se trata de
una de las expresiones artísticas más antiguas de los pueblos sudamericanos y ha sido
declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.
La gama de colores dominante es la que implica al rojo, ocre, amarillo, blanco y
negro. Se los confeccionaba con frutos, plantas y rocas molidas. También —
por magia contagiosa (según la clasificación de Frazer)— se utilizaba la sangre de
los animales cazados y la grasa de los mismos como aglutinante.
Los temas responden a tres períodos distintos; el más antiguo —y menos
abstracto— es rico en escenas de caza; en el período intermedio sobresalen las
manos que se encuentran acompañadas secundariamente por la representación
de animales aislados; en el último período la temática preponderante es la de
motivos geométricos, líneas, puntos y mandalas de los cuales se desconoce su
significado.
Estas obras de arte fueron descubiertas para la cultura occidental en 1876 por el
explorador argentino Francisco Pascasio Moreno.
Las excavaciones de Gradín y Aschero, investigadores del Instituto de
Arqueología de la Universidad Nacional de Tucumán y miembros
del CONICET a la entrada de la Cueva de las Manos ha demostrado la
utilización de pigmentos minerales basados en óxidos de hierro, con
una antigüedad de más de 10 000 años. Estos pigmentos se presentan
mezclados con yeso cristalino, como una forma de mejorar la
adherencia de la pintura sobre la pared de rocas. Esto se ha
demostrado mediante técnicas de difracción de rayos X. La mayoría de
los colores corresponden a la gama del ocre y los amarillos.
La enorme concentración de imágenes de manos en negativo, 300 o
400 veces más numerosas que la cueva de manos europea más
poblada, es impactante y complementa y subraya las escenas
"animalísticas" y de caza. Se observan en la Cueva de las Manos
cantidades de guanacos representados en ocre, negro y rojo,
perseguidos por cazadores que los acechan y capturan con boleadoras.
Las escenas están representadas secuencialmente, y a menudo la
captura se concreta más de 12 metros más allá de donde comenzó el
acecho. El uso de las anfractuosidades de la roca para dotar de
tridimensionalidad al paisaje pintado completa el efecto.
Cueva de las manos. Santa CruzA pesar de que la cueva es conocida por viajeros occidentales
desde el siglo XIX (siendo el primero el perito de límites Francisco Pascasio Moreno), las
investigaciones arqueológicas se iniciaron en la década de 1960. Estas demostraron que los
antiguos habitantes vivían de la caza y la recolección de vegetales silvestres. Además de
encontrar las «manos pintadas» también se encuentran formas como círculos, óvalos y figuras
estrelladas, entre muchas más.
cercanías de Antofagasta estos grabados rupestres
Representación parietal de escena con jinetes, sitio Los Pintados
de Sapagua, Jujuy
. Pinturas rupestres de Cañada Seca. Antofagasta de Sierra. Catamarca.
-Bibliografia

BELTRAM, A. – “De cazadores y pastores: el Arte Rupestre del Levante Español” –


-
Ed. Encuentro, Serie “Las huellas del hombre”, 1982.

- BANDI, H.G. – “La edad de piedra” – Praxis, Seix Barral, Barcelona, 1962.

-Blasco Bosqued, C.– “La caza en el arte rupestre del levante español”

-RIPOLL PERELLO, E. – “Orígenes y significados del Arte Paleolítico” –


Editorial Silex, 1986..

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