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Corporación de Asistencia Judicial R.M.

Centro de Atención Jurídico y Social LA FLORIDA


Domicilio y teléfono: Doctor Sótero del Río Nº 132, La Florida, 29371701
Correo electrónico cajfamilialaflorida@gmail.com
FMA/N. Pieranni

PROCEDIMIENTO : Ordinario
MATERIA : Divorcio unilateral por cese de la convivencia
FECHA DE MATRIMONIO : 1 de agosto de 1964

DEMANDANTE : NORA ELBA LÓPEZ CARRERA


CÉDULA DE IDENTIDAD : 5.660.914-8
DOMICILIO : Martinica N° 10991, La Florida
CORREO ELECTRÓNICO : Se Desconoce
TELÉFONO : 61921100 – 22892543 (recado)

ABOGADO DEMANDANTE : JEANNETTE HUERTA DÍAZ


CÉDULA DE IDENTIDAD : 15.452.410-K
DOMICILIO : Dr. Sótero del Río Nº 132, La Florida
CORREO ELECTRÓNICO : cajfamilialaflorida@gmail.com
TELÉFONO : 22817935
ABOGADO DEMANDANTE : SANDRA PRADENAS MARTÍNEZ
CÉDULA DE IDENTIDAD : 10.855.242-5
DOMICILIO : Dr. Sótero del Río Nº 132, La Florida
CORREO ELECTRÓNICO : cajfamilialaflorida@gmail.com
TELÉFONO : 22817935
ABOGADO DEMANDANTE : MARCIA SOFJER BIZUELA
CÉDULA DE IDENTIDAD : 10.718.815-0
DOMICILIO : Dr. Sótero del Río Nº 132, La Florida
CORREO ELECTRÓNICO : cajfamilialaflorida@gmail.com
TELÉFONO : 22817935
ABOGADO DEMANDANTE : CHRISTIAN VARELA BARRA
CEDULA DE IDENTIDAD : 13.696.852-1
DOMICILIO : Doctor Sótero del Río Nº 132, La Florida.
CORREO ELECTRÓNICO : cajfamilialaflorida@gmail.com
TELEFONO : 22817935

DEMANDADO : HECTOR EDUARDO BARRERA PALMA


CÉDULA DE IDENTIDAD : 4.108.224-0
DOMICILIO : Venezuela N° 4271, Villa Andrés Bello, Maipú
CORREO ELECTRÓNICO : Se Desconoce
TELÉFONO : Se desconoce
EN LO PRINCIPAL: Interpone demanda de divorcio unilateral por cese efectivo de la
convivencia; PRIMER OTROSI: Demanda de Compensación Económica; SEGUNDO
OTROSI: Acompaña documentos; TERCER OTROSI: Se tenga presente; CUARTO
OTROSI: Patrocinio y Poder.

S.J. DE FAMILIA DE SANTIAGO

NORA ELBA LÓPEZ CARRERA, chilena, casada, pensionada, domiciliada en


Martinica N° 10991, comuna de La Florida, cédula nacional de identidad 5.660.914-8, a
S.S. respetuosamente dice:

Que viene en interponer demanda de Divorcio Unilateral por cese efectivo


de la convivencia, en contra de su cónyuge don HECTOR EDUARDO BARRERA
PALMA, chileno, casado, jubilado, domiciliado en Venezuela N° 4271, Villa Andrés Bello,
comuna de Maipú, cédula nacional de identidad 4.108.224-0, con el objeto de que S.S.
declare el divorcio del matrimonio por haber cesado, efectiva y definitivamente la vida en
común durante un lapso mayor de tres años, en virtud de las siguientes consideraciones
de hecho y derecho que a continuación se pasan a exponer:

LOS HECHOS:

- Con fecha 1 de agosto de 1964 contrajimos matrimonio con el demandado, el


cual se inscribió en el Registro Civil de la Circunscripción de Ñuñoa, bajo el número 916
del Registro de matrimonios del año 1964.

- Contrajimos matrimonio bajo el régimen patrimonial de Sociedad Conyugal.

- Fruto de la unión conyugal nacieron nuestros hijas Erika del Pilar, Vivian Ivette
y Belén Nava, todas de apellido Barrera López de 49, 46 y 36 años de edad, todas
mayores de edad e independientes económicamente.

- Nos separamos de hecho con el demandado en enero de 1992, época en que mi


marido dejó el hogar común por tener una relación sentimental con otra mujer, con
quien actualmente tiene un hijo, por lo cual cesó la convivencia hace 27 años, sin existir
reconciliación alguna o reanudación de vida en común con ánimo de
permanencia, hasta la fecha.

DE LAS MATERIAS COMUNES ENTRE LOS CÓNYUGES Y RESPECTO DE SUS HIJOS:


- En las materias relativas a los hijos, las hijas producto del matrimonio en cuestión
son mayores de edad e independientes económicamente, por lo que no deben
regularse.

- La demandante declara que existe un bien raíz adquirido durante la vigencia


de la sociedad conyugal, a su nombre, ubicado en Calle Verlaine N° 3000,
comuna de Puente Alto, según consta en escritura de compraventa, mutuo e
hipoteca de fecha 30 de agosto del año 1991, el que ha ingresado al haber social.

EL DERECHO:

La Ley 19.947 de Matrimonio Civil, modificada por la ley 20.286, contempla en su


capítulo VI la acción de divorcio unilateral por cese de la convivencia, exigiendo en el
artículo 55 inciso tercero que se verifique, para dar lugar a la demanda, un cese efectivo
de la convivencia por el lapso de a lo menos tres años. Dicho lapso, conforme al art. 2°
inciso 3° transitorio de la ley citada, puede ser acreditado por cualquier medio de prueba,
considerando la fecha de celebración del matrimonio.

Así las cosas, los presupuestos para la procedencia de la acción de divorcio, se


cumplen cabalmente en el caso en comento, según se acreditará en la oportunidad
procesal correspondiente.

En último término, es menester señalar que conforme a lo prescrito en el artículo


8 numeral 15 de la Ley 19.968 y artículo 87 de la ley 19.947, conoce la presente acción
el juzgado con competencia en materias de familia, del domicilio del demandado.

POR TANTO,

Y de conformidad con lo dispuesto en los artículos 53, 55 inc. 3º, 56, 57, 59 y 60
de la Ley 19.947 sobre Matrimonio Civil; 133 del Código Civil; artículo 254 y siguientes
del Código de Procedimiento Civil; artículos 8, 15, 87 y siguientes de la Ley 19.968 y
demás normas pertinentes,

SOLICITO A US. Tener por interpuesta demanda de Divorcio Unilateral por


cese de la convivencia en contra de don Héctor Eduardo Barrera Palma, ya
individualizado, acogerla a tramitación, y en definitiva declarar el divorcio del
matrimonio celebrado con fecha 1 de agosto de 1964, ordenando se practiquen las
inscripciones y subinscripciones correspondientes.
PRIMER OTROSÍ: NORA ELBA LÓPEZ CARRERA, chilena, casada, pensionada,
domiciliada en Martinica N° 10991, comuna de La Florida, cédula nacional de identidad
5.660.914-8, a S.S. respetuosamente dice:

Que en este acto vengo en interponer demanda de compensación


económica en contra de mi cónyuge don HECTOR EDUARDO BARRERA PALMA,
chileno, casado, jubilado, domiciliado en Venezuela N° 4271, Villa Andrés Bello, comuna
de Maipú, cédula nacional de identidad 4.108.224-0, en razón de las siguientes razones
de hecho y derecho que a continuación se exponen:

LOS HECHOS:

Contraje matrimonio con el demandado a la edad de 21 años, mientras me


encontraba embarazada. Hasta entonces y hasta los 8 meses de embarazo yo trabajaba
en confecciones. Con posterioridad al nacimiento de mi hija hacía confecciones en mi
casa y luego, fuera de ella, pero sin cotizar, por un lapso de tiempo de dos años,
aproximadamente. Mientras, mi marido trabajaba como ayudante cortador. Una vez que
mi marido dejó el hogar, trabajé por un periodo de tres años, nuevamente sin
cotizaciones.

Cabe hacer presente que actualmente vivo en un hogar de acogida, el Hogar de


Rehabilitación Martinica ya que padezco de fibrosis pulmonar y trastorno afectivo bipolar
tipo 1, lo que me permite también pagar los dividendos de la casa que adquirí en calle
Verlaine N° 3000 en la comuna de Puente Alto en el año 1991, durante la vigencia de la
Sociedad Conyugal, mediante su arriendo. Recibo una pensión asistencial de setenta mil
pesos, aproximadamente.

En cuanto a los hechos señalados en lo principal, éstos se dan por enteramente


reproducidos, agregando además:

EN CUANTO A LOS REQUISITOS DE PROCEDENCIA DE LA ACCIÓN:

CAUSAL:

1. Que las partes contrajeron matrimonio el 1 de agosto de 1964, y


mantuvieron una convivencia en común hasta enero de 1992, completando por tanto un
total de 27 años 5 meses de convivencia efectiva.

2. La demandante contrajo matrimonio estando embarazada de su hija


mayor, por lo que trabajó hasta los 8 meses de gestación de ésta, para luego dedicarse
al cuidado de la menor y de los hijos que con el tiempo tuvieron los cónyuges. La
demandante se dedicó al cuidado de sus hijos y del hogar común, teniendo trabajos
de confección esporádicos e informales, postergando, en consecuencia, su desarrollo
laboral y profesional, en favor de sus hijos y especialmente de su marido quien pudo
desempeñarse en el ámbito laboral sin restricciones de ningún tipo.

3. Que durante el período de convivencia, su desarrollo laboral y


profesional estuvo siempre limitada producto de haberse dedicado al cuidado de
sus hijos y a labores propias del hogar común, vale decir, menos de lo que
quería y podía. En efecto, la demandante trabajó en ciertas épocas de la convivencia
común, de manera informal, pero menos de lo que deseaba, pues debía cuidar el hogar y
en especial a sus hijos.

4. Respecto del período en que la demandante trabajó


remuneradamente durante la convivencia común efectiva, fue sólo desde su casa,
en trabajos de confecciones y luego, por un corto período de tiempo, fuera de ella, pero
de manera informal y sin cotizaciones. Luego que su marido dejó el hogar común, tuvo
que volver a trabajar de esta manera, por el espacio de tiempo de tres años. Es
menester señalar que debió hacerlo producto de que la satisfacción de las necesidades
económicas del hogar lo hacían imperioso. Así, la preocupación por los quehaceres
propios del hogar común, paralelo a que con el tiempo se fueron sumando graves
problemas de salud de la demandante, inhibieron sus posibilidades de una mayor
realización profesional.

5. Como consecuencia de todo lo anterior, la demandante, durante el período


de convivencia efectiva, no cotizó en su cuenta de capitalización individual.

PERJUICIO:

a) Previsional

Durante la vida en común, no coticé en ninguno de los meses de convivencia


efectiva en mi cuenta de capitalización individual. Actualmente estoy afiliada a la AFP
PROVIDA S.A.

b) Capacidad de Ahorro

La situación patrimonial de la demandante claramente resulta desmedrada en


comparación con la del demandado, ya que éste -al trabajar remuneradamente en forma
permanente- pudo contar con un potencial de ahorro manifiestamente superior al de la
primera.
EL DERECHO:

Las normas relativas a la compensación económica se encuentran consagradas en


los artículos 61 a 66 de la Ley N° 19.947, de Matrimonio Civil. Enuncia tal derecho sin
entrar a definir su naturaleza jurídica el artículo 61 al indicar que “Si, como
consecuencia de haberse dedicado al cuidado de los hijos o a las labores
propias del hogar común, uno de los cónyuges no pudo desarrollar una actividad
remunerada o lucrativa durante el matrimonio, o lo hizo en menor medida de lo
que podía y quería, tendrá derecho a que, cuando se produzca el divorcio o se declare
la nulidad del matrimonio, se le compense el menoscabo económico sufrido por esta
causa”. En el mismo sentido, la jurisprudencia (Corte de Apelaciones de Valdivia causa

Rol Nº 1006-2008 del 1º de diciembre de 2008) ha señalado que “se desprende que los
requisitos de procedencia para la compensación económica son: a) menoscabo
económico; b) sacrificio, y c) cuantía“).

Por lo tanto, del artículo y la jurisprudencia antes citada, se desprende


que los requisitos generales para la procedencia de la compensación económica
son:

1.- Haberse dedicado al cuidado de los hijos o a las labores propias del hogar común.

2.- Que como consecuencia de haberse dedicado al cuidado de los hijos o las labores
propias del hogar común, uno de los cónyuges no haya podido desarrollar una actividad
remunerada o lucrativa durante el matrimonio, o haberlo hecho en menor medida de lo
que podía y quería.

Elementos para determinar la existencia del menoscabo económico y la cuantía


de la Compensación Económica:

Señala el artículo 62 de la ley 19.947 que, para determinar la existencia y cuantía


de la compensación económica se considerará, especialmente (es decir, de manera no
taxativa) diez elementos que a continuación se señalan:

1.-Duración del matrimonio: El matrimonio en comento ha tenido una duración


aproximada de 50 años y 4 meses, al momento de esta presentación.

2.- Duración de la vida en común de los cónyuges: La demandante mantuvo una


convivencia efectiva por el término de 27 años y 5 meses.
3.- Situación patrimonial de ambos: El patrimonio de la demandante claramente se
vio menoscabado al no poder ejercer labores remuneradas en la forma que ella
pretendía, a diferencia de lo ocurrido con el demandado, quien pudo ejercer
tranquilamente dichas labores producto del apoyo dado por ella, al trabajar y hacerse
cargo de las labores del hogar común y de sus hijos.

En cuanto a los bienes adquiridos durante el matrimonio, y habida cuenta de que


se encuentran casados bajo el régimen de sociedad conyugal, reviste particular
relevancia para el caso en comento, hacer referencia al bien raíz ubicado en Calle
Verlaine N° 3000, comuna de Puente Alto, según consta en escritura de compraventa,
mutuo e hipoteca de 30 de agosto del año 1991.

4.- La buena o la mala fe de los cónyuges: Durante todo el tiempo de convivencia,


efectiva y a su vez, durante la duración efectiva del matrimonio, siempre la demandante
actuó de buena fe, proveyendo todas las necesidades afectivas y domésticas que
requerían su hija, y cumpliendo, hasta el término de la convivencia efectiva, con todas y
cada una de las obligaciones que el matrimonio impone a ambos cónyuges.

5.- Edad de los cónyuges: Actualmente la demandante y el demandado, tienen 71 y 68


años de edad, respectivamente.

6.- Estado de salud del cónyuge beneficiario: Actualmente la demandante sufre de


diversos problemas de salud. Entre ellos se encuentran: Enfisema Pulmonar, Fibrosis
Pulmonar y Trastorno afectivo bipolar tipo I. Fue operada en el último tiempo de Edema
Pulmonar y de un nódulo en marzo de 2014. En la actualidad, se trata en el Complejo
Asistencial Sótero del Río.

7.- Situación en materia de beneficios previsionales y de salud: La postergación y


el sacrificio sufrido, incidieron directamente en el vacío de cotizaciones en el sistema
previsional.

En cuanto a los beneficios de salud, soy actualmente beneficiaria de FONASA.

8.- Cualificación profesional: Al dedicarme a mis hijos, me impidió capacitarme de


igual forma que profesionales de su misma edad, siendo técnica en diseño de vestuario,
pudiendo conseguir trabajos esporádicos y de baja remuneración, lo que constituye una
nítida expresión del principio del cónyuge más débil, consagrado en el artículo 3º de la
Ley 19.947.

9.- Posibilidades de acceso al mercado laboral: Este ítem está directamente


relacionado al anterior en el sentido que, una menor cualificación profesional incide
directamente en las posibilidades de acceso al mercado laboral en condiciones de
igualdad frente a otras personas. Lamentablemente en este caso, las opciones de la
demandante para encontrar trabajo disminuyeron proporcionalmente en relación al nivel
de capacitación profesional que posee. Su sacrificio personal, destinado a mantener y
apoyar a sus hijos, se materializa hoy en día en opciones de trabajo con muy baja
remuneración.

10.- Colaboración que hubiere prestado a las actividades lucrativas del otro
cónyuge: Mientras duró la convivencia común, el demandado, trabajó siendo ayudante
cortador, estando actualmente jubilado. Por contrapartida, y tal como ha quedado
señalado en los ítems anteriores, la demandante se desempeñó en trabajos remunerados
de baja cualificación profesional, y también en trabajos esporádicos y por consiguiente,
de bajas remuneraciones, lo tanto, vio disminuido su patrimonio en relación al de su
cónyuge, a quien prestó, en todo momento, colaboración para que pudiera realizar sus
actividades laborales propias.

Así las cosas, en la especie, quedan claramente identificados cada uno de los
elementos para determinar la existencia y cuantía de la compensación económica,
dejándose fehacientemente establecida su procedencia para el caso en comento.

FÓRMULA DE CÁLCULO DE LA COMPENSACIÓN ECONÓMICA:

FÓRMULA DE CÁLCULO:

a) Fórmula de cálculo: En relación al perjuicio provisional sufrido por la


cónyuge demandante:

1) Elementos Considerados

-.Periodo convivencia efectiva: 27 años y 5 meses

-.Cifra mensual no percibida por la demandante en el periodo de convivencia


efectiva: $ 225.000 (Doscientos veinticinco mil pesos).

-.Multiplicación del 20% del ingreso mínimo mensual remuneracional por el


periodo de convivencia efectiva: 329 meses x 45.000 (20% equivalente a
cotización provisional y de salud mensual).

2) Fórmula de cálculo: Así, la fórmula para calcular el monto de la compensación


se atiende a multiplicar un 20%, del sueldo mínimo por la cantidad de meses en que las
partes mantuvieron una convivencia en común, siendo para este caso la cantidad de 329
meses, equivalentes a 27 años y 5 meses.

3) Total del Cálculo: $14.805.000 (catorce millones ochocientos cinco mil


pesos).

POR TANTO,

SOLICITO A US.

Tener por interpuesta acción de compensación económica en contra de don


HÉCTOR EDUARDO BARRERA PALMA, ya individualizado y en definitiva, condenar al
demandado al pago de la suma de $14.805.000.- (catorce millones ochocientos
cinco mil pesos) o la suma que S.S estime justo decretar; y en su defecto, a la
cesión de la totalidad de los derechos que le corresponden sobre el único
inmueble perteneciente a la sociedad conyugal, a título de compensación
económica, en favor de la demandante en autos doña NORA ELBA LÓPEZ
CARRERA en atención a lo establecido en los artículos 261 y 254 del código de
Procedimiento Civil y 61, 62 de la ley de Matrimonio Civil.

SEGUNDO OTROSÍ: Pido a S.S. tener por acompañados los siguientes


documentos:

● Certificado de Matrimonio

● Copia simple de Acta de Matrimonio.

● Certificado de nacimiento de hijas matrimoniales.

● Comprobante de domicilio de la demandante.

● Copia de contrato de compraventa, mutuo e hipoteca del inmueble adquirido


durante la vigencia de la sociedad conyugal.

TERCER OTROSÍ: Solicito a S.S. se sirva tener presente que, dado que me
encuentro patrocinada por la Corporación de Asistencia Judicial, Consultorio de La
Florida, gozo de Privilegio de Pobreza.

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