Estudio de Caso

Carlos es un hombre de 45 años, actualmente está sin trabajo. Acude a consulta por

“desespero, angustia” y “desmotivación en todas las áreas de su vida”. Estudió

Administración de Empresas en una universidad pública y encontró trabajo rápidamente

después de obtener su título. Ha estado 15 años trabajando para la misma empresa donde

había tenido un excelente desempeño, hace aproximadamente 6 meses su esposa falleció en

un trágico accidente lo cual ha afectado su vida en todos los ámbitos, como el personal,

laboral, profesional, y social ya que siente que perdió el vínculo más fuerte que lo ataba al

mundo. No tiene referentes familiares ya que todos los ha perdido y en su matrimonio no

hubo hijos.

Carlos está cobrando el subsidio de desempleo, prestación que finalizará en breve.

Ha repartido su currículum por distintas empresas, pero hasta ahora no ha pasado de la

primera entrevista. Dice sentirse “profundamente preocupado” ya que no se genera en él el

entusiasmo y el mismo dinamismo para desempeñarse profesionalmente como lo hacía

anteriormente; del mismo modo, afirma que: “no puede conciliar el sueño por los motivos

anteriormente expuestos”. A lo largo del día manifiesta sentir desespero, y estados de

ánimos cambiantes. Algunos ejemplos de pensamiento son “nunca volveré a encontrar a

alguien a quien amar pues le genera temor de perder nuevamente”, “la vida no tiene

sentido” y “las cosas del mundo carecen de valor”. Ha empezado a crear dependencias para

subsanar esos vacíos como consumo excesivo de alcohol, consumo de cigarrillos y el

aislamiento social. Siente que a través de estos comportamientos aliviana un poco su dolor.
 Respecto a la angustia, dice sentir “ahogo”, además de “palpitaciones, sofoco y

ganas de llorar”. La primera vez que le ocurrió fue a urgencias, donde le dijeron que era

“psicológico” y le recomendaron asistir a sesiones de terapia con un profesional, además de

recetarle algunos ansiolíticos. Los cuales ingiere en espacios adecuados para que le puedan

generar tranquilidad y descanso. Por lo cual se ha vuelto dependiente de estos.

Refiere que ya no se siente “a gusto con nadie, que no le apetece la compañía de

ninguna persona” y que por ello algunos amigos han dejado de contactar con él. Debido a

esto su motivación para desempeñarse como profesional es muy poca. Antes del

fallecimiento de su esposa le gustaba, salir con sus amigos, ver series, quedarse en casa con

su pareja, viajar e ir a exposiciones. Ahora no hace ninguna de las actividades

mencionadas, “porque no le apetece”. Dice, además, que no quiere “forzarse a hacer lo que

hacía antes”, porque si no le surgen las ganas “de manera natural” no las disfrutaría.

Tiene buenos círculos sociales, ya que conserva amigos tanto de su infancia como

de la carrera y el trabajo. Antes trataba de verlos a menudo, aunque se ha distanciado de

estas amistades “por lo antes mencionado”.

ANÁLISIS FUNCIONAL

Variables disposicionales:

- Perdida de su esposa, vinculo fuerte que lo ataba al mundo.

- Fuentes de dependencia para subsanar ese vacío: Consumo excesivo de alcohol,

consumo de cigarrillos y aislamiento social.

- Estado de ánimo cambiante: consumo de ansiolíticos.

 Variables de protección o fortaleza:

- Estudios superiores.

- Buenos círculos sociales.

- Experiencia laboral de 15 años.

Objetivos de la intervención:

- Hacer que Carlos supere el duelo de su esposa

- Que retome su vida social

- Que se sienta menos deprimido

- Que pueda dormir con tranquilidad