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INTRODUCCIÓN
En América Latina en los últimos 15 años se han diseñado profundas reformas judiciales en
los procesos penales que conllevan a una nueva forma de hacer justicia penal con la tendencia
a reemplazar el tradicional proceso inquisitivo escrito por un nuevo sistema de justicia penal
acusatorio, oral y público, propio de un Estado Constitucional de derechos, justicia y
democrático.
Con las reformas procesales penales, sin lugar a duda, se implementa un cambio de cultura
jurídica de los profesionales del Derecho, la sociedad y los operadores de justicia, y estos
basados en la actualización y capacitación; los procesos integrados en audiencias públicas y
orales; la actuación e imparcialidad de los órganos judiciales, la infraestructura institucional
física, la nueva gestión judicial; la separación de funciones, entre la investigación y el
juzgamiento; la investigación en tres etapas: investigación, intermedia y justicia oral,
profesionalización del Ministerio Público (Fiscal), creación del juez de garantías penales, de
control de la investigación, diferente del Tribunal que juzga y del juez a cargo de la ejecución;
fortalecimiento de la Defensoría Pública y garantías de los derechos de la víctima y del
procesado, soluciones alternativas y juicios abreviados; y recursos o medio de impugnación
rápidos (conciliación y reparación).
7
El presente libro está organizado en seis capítulos, que se fundamentan en la doctrina o teoría
jurídica; en las normas nacionales e internacionales de los derechos humanos y jurisprudencia
de las Cortes Constitucionales y Corte Interamericana de Derechos Humanos.
El Capítulo III trata de Los Derechos Humanos y Justicia Penal, que se refieren al sistema
universal de protección de los derechos humanos; los órganos competentes e incorporación de
las normas de derechos humanos en el derecho interno y las nueva justicia penal protegen los
derechos y la dignidad de las personas.
El Capítulo IV analiza Las Garantías Constitucionales del Proceso Penal, definiendo las
garantías y principios constitucionales individuales en el proceso penal que protegen los
derechos fundamentales.
El Capítulo V refiere sobre el Derecho Fundamental del Debido Proceso, que tiene
relación, precisamente con el debido proceso, la gratuidad de la justicia penal; el juez natural
y el derecho de defensa, que son mandatos constitucionales y legales en un sistema jurídico
garantista de los derechos de las personas.
Por último, el Capítulo VI, se refiere a los Principios Fundamentales del Procesal Penal,
que describen los postulados rectores del sistema procesal penal acusatorio oral y público. Por
ello, el Estado constitucional de derechos y justicia establece instrumentos de protección de
los derechos de las personas, con la finalidad de poner límites al poder punitivo y arbitrario
del Estado, que debe reconocer y garantizar los derechos fundamentales de las personas.
8
CAPÍTULO I
EN AMERICA LATINA
9
1. EL CAMBIO DE MODELO IMPLEMENTA LA REFORMA
PROCESAL PENAL
1
LUÍS JIMENEZ DE ASÚA. Tratado de Derecho Penal. Buenos Aire. Losada, T.I. 1950. P. 205.
2
Disponible en: https://www.un.org/es/documents/udhr/
3
Disponible en: http://www.acnur.org/t3/fileadmin/scripts/doc.php?file=biblioteca/pdf/0015
4
Disponible en: http://www.oas.org/es/cidh/mandato/Basicos/declaracion.asp
5
Disponible en: http://www.oas.org/dil/esp/tratados_B-
32_Convencion_Americana_sobre_Derechos_Humanos.htm
6
Disponible en: http://www.echr.coe.int/Documents/Convention_SPA.pdf
10
Las Reformas del Sistema de Justicia Penal en América Latina surgen en la década de los
ochenta cuando nace el Código Procesal Penal Modelo para Iberoamérica de 1988, propuesto
por varios autores7 el “que sirvió de guía para la reforma procesal en diversos países de la
región. Este Código Procesal Penal para la provincia de Córdoba”8, Argentina, propuesto por
los profesores SEBASTIÁN SOLER Y ALFREDO VÉLEZ MIRICONDE, quienes
promovieron un movimiento que luego tuvo dimensión regional 9. Asimismo, se sostiene que
ese Código generó el cambio del proceso penal en la Región al establecer el juicio oral 10 que
es el eje fundamental en el nuevo proceso penal Acusativo Oral actual.
Por lo tanto, el proceso de Reforma del Proceso Penal en América latina se desarrolla desde
hace dos décadas, de acuerdo con lo que señalan los autores MAURICIO DUCE, CLAUDIO
FUENTES M Y CRISTIAN RIEGOR: “Las razones que motivaron este proceso de reforma
son de distinta índole, encontrándose dentro de ellas, y de manera muy general, los abusos a
los derechos fundamentales en el contexto del proceso penal inquisitivo y la poca eficiencia
de este en la persecución penal. Este proceso de reforma alcanzó a la mayoría de los países
del continente y se ha orientado en general en la misma dirección: reemplazar los diversos
tipos de sistemas inquisitivos vigentes por modelos procesales de carácter acusatorio.”11.
7
JAIME BERNAL CUELLAR, FERNANDO DE LA RÚA y ADA PELLEGRINI CRIMOVER y JULIO
MAIER. Código Procesal Penal Modelo para Iberoamérica. Instituto de Derecho Procesal (Ed.) Buenos Aires.
Hammurabi. 1989.
8
ARSENIO ORÉ GUARDIA y LIZA RAMOS DÁVILA. Aspectos comunes de la reforma procesal penal en
América latina. P. 4.Disponible en: http://webcache.googleusercontent.com/search?
q=cache:LzKu7exLQS4J:incipp.org.pe/modulos/documentos/archivos/Reforma%2520procesal%2520en
%2520America%2520Latina.doc+&cd=1&hl=es&ct=clnk&gl=ec
9
Véase: MAURICIO DUCE y CRISTIAN RIEGO. Introducción al Nuevo Sistema Procesal Penal. Universidad
Diego Portales. Santiago. 2002. P. 60. También Julio Maier, kai Ambos y JanWoischuik (Coord). Las reformas
procesales penales en América latina, Ad Hoc, 2000. P. 23 y ss.
10
Cfr. MAURICIO DUCE y ROGELIO PÉREZ PERDOMO. Seguridad Ciudadana y Reforma de la Justicia
Penal en América Latina. Boletín Mexicano de Derecho Comparado. N° 102. 2001. Disponible en:
http://www.juridicas.unam.mx/publica/rev/boletin/cont/102/art/art13.htm
11
MAURICIO DUCE, CLAUDIO FUENTES M. y CRISTIAN RIEGOR. La Reforma procesal penal en
América latina y su impacto en el uso de la prisión preventiva. Santiago de Chile. Centro de Estudios de
Justicia de las Américas. Ceja Américas. CHRISTIAN SALAS BETETA. La Eficacia del Proceso
PenalAcusatorio en el Perú. Prolegómenos. Derechos y valores. Red de Revistas Científicas de América
Latina, el Caribe, España y Portugal. Sistema de Formación Científica. Disponible en: www.redalyc.org
11
Por ello, a partir de los años noventa los países de América Latina acogieron la propuesta del
Código Procesal Penal modelo “pero no lo asumieron de modo íntegro” 12; sin embargo, los
países en sus legislaciones implementaron el proceso de reforma de la justicia penal. Por
ejemplo, “Guatemala: Decreto N° 51-92, Código Procesal Penal vigente desde 1994;
Argentina: Ley N° 11922, Código Procesal Penal de la Provincia de Buenos Aires vigente
desde 1998; Costa Rica: Ley N° 7594, Código Procesal Penal vigente desde 1998; El
Salvador: Decreto Legislativo N° 904, Código Procesal Penal vigente desde 1998; y,
Venezuela: Gaceta Oficial Nº 5.558 (Extraordinaria), Código Orgánico Procesal Penal vigente
desde 1999, iniciaron los procesos de reforma procesal penal hacia al sistema acusatorio. A
partir del año 2000”13, “Bolivia: Ley N° 1970, Código de Procedimiento Penal vigente desde
2000; Paraguay: Ley N° 1286/98, Código Procesal Penal vigente desde 2000; Chile: Ley N°
19.696, Código Procesal Penal vigente desde 2000; Ecuador: Ley N° 000. RO/ Sup 360,
Código de Procedimiento Penal vigente desde el 2001, actualmente, Código Orgánico Integral
Penal. R.O. S180: 10-feb-2014; Honduras: Decreto N° 9-99-E, Código Procesal Penal vigente
desde 2002; Nicaragua: Ley N° 406, Código Procesal Penal vigente desde 2002; República
Dominicana: Ley N° 76-02, Código Procesal Penal vigente desde 2004; Colombia: Ley N°
906, Código de Procedimiento Penal vigente desde 2005; Perú: Decreto Legislativo N° 957,
Código Procesal Penal vigente desde 2006; México: Decreto DOF 18/06/2008, reforma
constitucional vigente a partir de 2008; Panamá: Ley N° 63, Código Procesal Penal vigente
desde 2009; y, Uruguay: Ley 9.754, Código Procesal Penal vigente desde 2009; Ley N° 9024
- Código de Procedimientos Penales, promulgado el 23 de noviembre de 1939” 14, Por tanto,
“el proceso de reforma procesal penal, implementando -en algunos casos de manera total y en
otros de forma gradual o progresiva- códigos adjetivos basados en los principios del sistema
acusatorio, evidenciando a la fecha diversos resultados.”15. Aclarando, que toda reforma
procesal penal tiene impactos sociales, jurídicos, culturales y económicos, y un cambio
cultural de los actores procesales y de la comunidad en general.
12
KAI AMBOS. Breves comentarios sobre la reforma judicial en América Latina, en política criminal. N° 2,
2006, CH3. P. 2. Disponible en: http://www.políticacriminal.cl/no2/ch32.pdf
13
Disponible en: http://www.redalyc.org/pdf/876/87622536017.pdf
14
Disponible en: http://www.redalyc.org/pdf/876/87622536017.pdf
15
Ver: CHRISTIAN SALAS BETETA. La Eficacia del Proceso Penal Acusatorio en el Perú. Prolegómenos.
Derechos y Valores, vol. XIV, núm. 28, julio-diciembre, Universidad Militar Nueva Granada Colombia.
2011. P. 265. Disponible en: http://www.redalyc.org/pdf/876/87622536017.pdf
12
1.2. Análisis de los Sistemas Procesales Penales antes de la Reforma
El Proceso Penal Inquisitivo existente en América latina nace en el siglo XVII y dura hasta la
mitad del siglo XX; es Absolutista, se basa en un procedimiento escrito en su totalidad,
secreto, burocrático, formalista, incomprensible, ritualista y solo se preocupaba por el trámite
y no por la solución del caso; no era respetuoso de las garantías del imputado y se lo llama
antigarantista16, no existía el principio de independencia judicial y no se ejercía el
iuspuniendi, por ello en este Sistema Inquisitivo se daba la falta de confianza social respecto a
la administración de justicia.
En este Sistema Procesal Penal Inquisitivo, el juez investigaba de oficio el proceso y juzgaba,
sin otra limitación que la impuesta por la ley, la verdad material sin la participación de las
partes procesales y practicar los medios de pruebas que estime convenientes y necesarias17; la
función de acusar le correspondía al juez quien concentraba el poder penal y la persecución
pública de juzgador, defensor y acusador en una sola persona (o tribunal de personas) no
admite la contradicción del inculpado y su derecho de defensa es limitado, la prisión
preventiva es regla, y no la excepción, los procesos son largos y las audiencias discontinuas y
su defensa (auxiliar de la justicia).
Para el jurista JAVIER PIÑA y PALACIOS, el Sistema Inquisitivo “se remonta al siglo XII,
cuando apareció la herejía, propagándose en los siguientes dos siglos, y con el objeto de
combatir lo anterior, las autoridades civiles y eclesiásticas enviaron comisionados para que
impidieran y averiguaran quienes eran, y una vez logrado, los entregaban a los jueces
eclesiásticos para la aplicación de las penas respectivas llamándose a éstos "comisionados
16
LUIGI FERRAJOLI. Derecho y Razón. Teoría del Garantísmo Penal. Editorial Trotta. 8 va edición. Madrid-
España. 2006. P. 42.
17
FERNANDO ARILLA BAS. El Procedimiento Penal en México. Kratos. México. 1981. P. 93. También
Véase: RUBEN MUCIÑO. Principios Rectores del sistema Acusatorio (Argentina). Disponible en:
http://www.monografias.com/trabajo93/principios-rectores-del-sistema-acusatorio/principios-rectores-del-
sistema-acusatorio.shtml
13
inquisidores”18. Por lo tanto, este modelo resulta el culto a los formalismos, ritualismos, a la
escrituralidad, el secreto de la investigación la cual era dirigida por el juez.
El autor GUILLERMO CALIN SANCHEZ, sostiene que el sistema procesal inquisitivo “data
del Derecho Romano desde la época de Diocleciano y se propaga por Europa hasta alcanzar
institucionalidad en el siglo XVII, bajo los auspicios de Bonifacio VIII, y en Francia en 1670
con Luis XIV; la privación de la libertad depende de que quien detenta la autoridad, hace uso
de la tortura para obtener confesiones; se reciben denuncias anónimas; el proceso es escrito y
secreto y quien juzga no tiene limitaciones, respecto de las investigaciones; por lo que la
defensa era prácticamente nula. Este sistema fue adoptado por la Santa Inquisición” 19.Por lo
tanto, este modelo resalta el culto a los formalismos, ritualismos, a la escrituralidad, el secreto de
la investigación la cual era dirigida por el juez.
En efecto, detallamos algunas características relevantes que la doctrina coincide del Sistema
Procesal Penal Inquisitivo:
18
JAVIER PIÑA y PALACIOS. Procedimientos penales. Sistema general de enjuiciamiento inquisitivo,
publicado en la Revista Criminalia. Revista de Ciencias Penales, Órgano de la Academia Mexicana de
Ciencias Penales. Año IV, agosto de 1938, número 12. P. 761. Véase: RUBEN MUCIÑO. PrincipiosRectores
del sistema Acusatorio (Argentina). Disponible en: http://www.monografias.com/trabajos93/principios-
rectores-del-sistema-acusatorio/principios-rectores-del-sistema-acusatorio.shtml
19
GUILLERMO CALIN SANCHEZ. Derecho Mexicano de Procedimientos Penales. Editorial Porrúa. México.
1984. P. 4. Véase: RUBEN MUCIÑO. Principios Rectores del sistema Acusatorio (Argentina). Disponible
en: http://www.monografias.com/trabajos93/principios-rectores-del-sistema-acusatorio/principios-rectores-
del-sistema-acusatorio.shtml
14
h) El rol del imputado limitado y de su defensa.
Este sistema acusatorio imperó en Grecia, Roma, Germana antigua y en el sistema acusatorio
ingles, y tuvo sus influencias de la Carta Magna de Inglaterra del siglo XII; la Revolución de
los Estados Unidos de América de 1787; La Revolución Francesa de 1789, y, las ideas de
libertad en América. Según la doctrina, este sistema cuenta con las características siguientes:
instancia única, acusación, igualdad, pasividad del juez, equidad, oralidad, publicidad y
contradictorio20 y entre las comunes tenemos:
Después de la Revolución Francesa (oficialidad) surge el Sistema Procesal Penal Mixto, con
tendencia predominante, inquisitivo y mínimo acusatorio, que se genera luego de la ruptura
con el sistema acusatorio clásico y el sistema inquisitivo y contiene características tanto del
sistema acusatorio e inquisitivo:
20
FRANCISCO CARRARA. Programa de Derecho Criminal. Volumen II. Parte General. Cuarta Edición.
Bogotá. 1998. P. 296.
21
ALEJANDRO COOK. Cuadro Comparativo entre los sistemas procesales: acusatorio clásico, inquisitivo,
mixto acusatorio garantista y acusatorio adversorial. 2010. P. 2.
15
El proceso penal tiene dos fases:
Primera, la de investigación e instrucción (sumario) para que el juez instructor tenga las
pruebas ofertadas tanto por el órgano investigador como por la defensa, fase en la que
predominan los caracteres inquisitivos (secreto parcial, escritura, iniciativa judicial,
posibilidad de prisión provisional).
El proceso es escrito.
Es público y contradictorio aunque con sus limitaciones, por la desigualdad de
derechos entre las partes.
La prueba se valora libremente.
Rige el principio del tribunal colegiado.
“La separación entre la función de acusar, la de instruir y la de juzgar; confiados a
órganos distintos, esto es, al fiscal, al juez de instrucción y al tribunal con jurado,
respectivamente.22
Por ello, la doctrina sostiene que el proceso penal mixto “quedó estructurado en dos etapas
principales: el sumario o instrucción de corte inquisitivo; y el plenario o juicio, de corte
acusatorio”23.
22
RUBEN MUCIÑO. Principios Rectores del Sistema Acusatorio (Argentina). Disponible en:
www.monografías.comtrabajos93/principios-rectores-del-sistema-acusatorio/principios-rectores-del-sistema-
acusatorio-shtml
23
ARSENIO ORÉ GUARDIA. Derecho Procesal Penal. Lima. 1996. P. 16.
16
2.1. Aspectos que justifican el Nuevo Modelo Procesal Penal.
Las Reformas del Sistema Procesal Penal en América Latina generan cambios jurídicos
profundos, que conllevan a la transición de un modelo de sistema inquisitivo a otro sistema
acusatorio, que modifica los aspectos escritos, por las prácticas basadas en la oralidad, como
objetivo principal del sistema de justicia penal basado en el proceso acusatorio, conforme lo
dispone la norma constitucional y los Convenios y Tratados Internacionales de Derechos
Humanos que dispone que el proceso penal será acusatorio y oral, es decir, público.
El Sistema de Justicia Penal Acusatorio actual obliga a que los jueces sean imparciales e
independientes; el Ministerio de Fiscalía es controlado por el Poder Judicial (jueces) que
valoran por la aplicación del debido proceso y respecto de los derechos y garantías que tienen
los procesados, sospechosos, víctimas, testigos, etc., y, también se garantiza la Defensoría
Penal Pública.
Los jueces y tribunales penales son los que conocen y resuelven los conflictos penales que
deben dirimirlos en juicio oral, público, contradictorio y basados en las garantías de la
inmediación, concentración y oportunidad jurídica en el proceso; también contempla la
formación y capacitación judicial, la infraestructura física, el modelo gerencial del servicio
judicial y otros cambios que se dan con la “reforma judicial en latinoamérica” no ha sido solo
en el aspecto normativo como he señalado24 y los principales aspectos de la reforma se pueden
sintetizar de la manera siguiente25:
La autora REBECA CONTRERAS LÓPEZ, al referirse a los principios generales del proceso
penal, sostiene: “El sistema acusatorio y sus principios básicos, en el sistema procesal permite
la solución de controversias ante una autoridad jurisdiccional. En el sistema acusatorio el Juez
está separado de las partes y la contienda se da entre iguales, la cual es dirimida por una
autoridad imparcial. Esa contienda se realiza en forma pública, contradictoria y oral. En el
sistema inquisitivo, la contradicción y publicidad se encuentran limitados pues muchas fases
del procedimiento son secretas, lo que vulnera el derecho de defensa”. Ferrajoli, explica así la
distinción entre ambos sistemas27:
Gráfico 1
18
perjudicada se identifica con el Estado.
Actualmente, existen fundamentos que justifican el nuevo modelo del sistema acusatorio en el
Nuevo Proceso Penal, en virtud de la reforma procesal penal que han implementado las
naciones latinoamericanas y desde el punto de vista del Derecho Comparado y de la Doctrina
la reforma penal en Chile (en Perú) “constituye, en esencia, una respuesta integral, coherente,
frente a la impostergable necesidad de adoptar el sistema de justicia penal a los
requerimientos de la sociedad actual”28 en la que armoniza” su legislación desde el punto de
vista del Derecho Comparado la gran mayoría de los países latinoamericanos, entre ellos
Ecuador, El Salvador, Chile, Costa Rica, Colombia, Venezuela, Bolivia, Argentina, Paraguay,
Honduras, Guatemala. Estos países han tenido la necesidad de armonizar y adecuar sus
normas internas de conformidad a los estándares mínimos, que señalan el Derecho
Internacional de los Derechos Humanos y las disposiciones establecidas en la Constitución de
cada Estado que regula el nuevo modelo procesal penal en un cuerpo único y sistemático
procesal penal del sistema acusatorio en la justicia penal, basado en los operadores judiciales
para que funcione, el juez de garantías penales constata que se respeten las garantías y
derechos de los sujetos procesales; el fiscal guía y controla la labor policial; y, la defensa
vigila que se cumpla con el debido proceso constitucional-penal.
28
ALEX AURORA PÉREZ. El nuevo sistema procesal penal. Santiago de Chile. 2003. P. 09.
19
Por lo tanto, las reformas de los sistemas procesales penales en América Latina garantizan
“determinados derechos como lo tuvo lugar en Europa continental en el siglo XIX”29 , y se
puede observar la tendencia a reemplazar el tradicional proceso inquisitivo escrito por formas
de juicio oral propias de un Estado de Derecho.30
Gráfico 2
29
CLAUS ROXIN. Derecho procesal penal. Traducción por Daniel Pastor y Gabriela Córdoba. Buenos Aires
(Del puerto). 2000. P. 158.
30
KAI AMBOS, JULIO MAIER y JAN WOISHMIK (Coords.)Las Reformas Procesales Penales en América
Latina; Buenos Aires (Fundación Konrad Adenauer, Max Planck
InstitutFurAuslandischesundinternationalesstrafrecht/editorial ad hac). 2000. P. 100.
20
Se aplica el principio de inmediación
No se aplica inmediación probatoria
probatoria
Las pruebas se practican en la Las pruebas se practican en la etapa de
investigación juzgamiento en el juicio oral
Juez ejerce control de legalidad sobre
No se ejerce control de legalidad
actuaciones de fiscalía
La instrucción fiscal es reservada El juicio es público y oral
La sentencia se dicta de acuerdo a los La sentencia se dicta de acuerdo a las
escritos e informes que contiene el pruebas practicadas en el juicio oral y
expediente. público.
Fuente: Estudio de la Reforma Procesal Penal en América Latina.
Diseño: Propio del Autor.
2.2. Cambio de roles de los actores del proceso en el Nuevo Sistema Procesal Penal
Acusatorio Oral y Público.
El Nuevo Modelo Procesal Penal Acusatorio Oral así como sus instituciones se edifican y
construyen teniendo como fundamento el Modelo Acusatorio Oral cuyas características y
líneas rectoras se describen a continuación:
31
ALBERTO M. BINDER. Introducción al Derecho Procesal Penal. Buenos Aires. 2000. P. 100-101.
21
Por lo tanto, es necesario el procedimiento que sustituya la metodología inquisitiva
que permitía el uso del expediente por una nueva metodología de audiencias orales o
verbales que tiene como finalidad resolver un conflicto de forma justa y personal en
lugar de seguir tramitando el expediente. Más bien se lo abandona por la
implementación de un sistema de audiencias que permite la oralidad, por tanto, es una
“metodología para producir información de alta calidad para la toma de decisiones y
para garantizar a las partes del proceso un entorno razonable para el ejercicio de
derechos”32; sin embargo, no todo los actos procesales necesariamente se realizan de
manera oral, se expresa en diferentes fases del procedimiento y en los medios
probatorios, etc. “un proceso es oral si la fundamentación de la sentencia se realiza
exclusivamente mediante el material de hecho, introducido verbalmente en el juicio.
Lo rigurosamente oral es la ejecución de la prueba, los informes de las partes y la
“última palabra”33 del imputado (la oralidad, si bien tiene la ventaja de la expresividad,
frescura y rapidez, tiene como consecuencia los peligros de la falta de atención y del
olvido) mientras que puede ser escrita la instrucción, la fase intermedia, la prueba
documental -que en juicio habrá de ser leída-, la sentencia y el procedimiento
recursal”34.
32
CEJA. “La oralización de los procesos en las etapas preliminares al juicio: ¿Qué significa un sistema de
audiencias orales en las etapas preliminares al juicio: ¿Qué significa un sistema de audiencias orales en las
etapas preliminares del juicio y qué valores están en juego en el mismo?. Curso Intermedio E-learning.
Módulo 1. 2005. S.N.
33
Disponible en: http://www.redalyc.org/pdf/876/87622536017.pdf
34
CLAUS ROXIN. Derecho procesal Penal. Buenos Aires. Editores del Puerto. 2000. P. 115. Véase también:
CHRISTIAN SALAS BETETA. La Eficacia del Proceso Penal Acusatorio en el Perú. Ob. Cit. P. 271.
Disponible en: http://www.redalyc.org/pdf/876/87622536017.pdf
22
Etapa de Juzgamiento; y, Etapa de Ejecución) 35; sin embargo, otro sector expresa que
son tres fases:
35
Véase, según PABLO SÁNCHEZ VELARDE. Introducción al nuevo Proceso Penal. Editorial Moreno.
Lima 2005. P. 125.
23
El juez (o jueces) asumen, entre otras, las funciones de control de garantías de los
derechos humanos o fundamentales del procesado y víctima. En un Estado
Constitucional de Derechos y Justicia en el nuevo modelo del proceso penal, respecto
de la investigación de un delito realizado por el fiscal, o decida la Fiscalía resolver el
conflicto penal mediante su libre arbitrio, en perjuicio de la víctima o procesado; para
el efecto, la parte perjudicada deberá acudir al juez de garantías penales para que actúe
de conformidad con la Constitución, el Derecho Internacional de los Derechos
Humanos y las leyes; o en las etapas del juicio oral, los jueces controlan la oralidad de
las pruebas y que se cumpla el debido proceso en el proceso penal oral.
36
MANUEL MIRANDA ESTRAMPES. El juez de garantías vs. EL Juez de instrucción en el Sistema Procesal
Penal acusatorio, revista Peruana de Ciencias Penales. N° 17. lima 2005. P. 456.
37
Véase: JULIO MAIER/ KAI AMBOS/ JAN WOISCHINLK (Coordinadores). Las Reformas procesales en
América Latina. Editorial Ad-Hoc. Buenos Aires. 2000. P. 896, en la que consta una visión general del
cambio ocasional en la mayoría de los países de la Región Latinoamericana.
38
JULIO MAIER. Derecho Procesal Penal II. Parte General Sujetos Procesales. Editores del Puerto, Buenos
Aires. 2003. P. 294 a 310.
24
Público reconfigurado en sus funciones, y su objetivo “fue lograr la abolición del
modelo inquisitivo”39. Por tal motivo, “el nuevo modelo rompe esto y dota al
Ministerio Público de mayor protagonismo y de continuidad en sus actuaciones. Debe
pues, practicar la investigación preparatoria, dirigir las actuaciones de la policía,
seleccionar la información obtenida y probar la actuación ante el tribunal de juicio”40.
39
CLAUS ROXIN. Posiciones jurídicas y Tareas Futuras del ministerio público, en el Proceso penal, Ad-Hoc.
Buenos Aires. 1993. P. 40.
40
ARSENIO ORÉ GUARDIA y LIZA RAMOS DÁVILA. Aspectos comunes de la reforma procesal penal en
América Latina. Ob. Cit. P. 18.
41
LUIS PÁSARA. Reforma procesal penal y Seguridad Ciudadana en América latina. En: Athina. N° 3, Año
2, Editorial Grilly. 2007. P. 71.
42
MAURICIO DUCE. El Ministerio Público en la Reforma Procesal penal en América latina: Visión General
del Estado de los Cambios. P. 69-70. Disponible en:
http://sistemasjudiciales.org/content/jud/archivos/notaarchivo/463.pdf
25
Control judicial de sus actuaciones por el juez de garantías penales.
Solicita las medidas coercitivas o cautelares personales o reales al juez de
garantías.
Respetará el principio de legalidad, es decir, perseguirá todas las conductas
delictivas y el respeto al ordenamiento jurídico interno y Constitución,
Convenios y Tratados Internacionales de Derechos Humanos.
Principio de responsabilidad: Es responsable civil, penal y administrativamente
y al órgano como civilmente responsable, por las actuaciones en el ejercicio de
sus funciones.
Que los ciudadanos sospechosos de cometer un presunto delito penal contarán desde
los actos preliminares de la investigación penal con un defensor privado o público que
le asista, oriente y tutele sus derechos en todas las etapas del proceso, incluso cuando
se encuentre privado de su libertad. Hay que aclarar que dentro de un auténtico Estado
Constitucional de Derechos y Justicia, la privación de la libertad anterior a la sentencia
condenatoria solo puede revestir carácter excepcional, tomando en cuenta el derecho a
la presunción de la inocencia y “como lógica consecutiva de éste aparece que la
prisión preventiva debe regirse por el principio de excepcionalidad. A la vez, la
excepcionalidad emerge de la combinación entre el derecho a la libertad y la
prohibición de aplicación de una pena que elimine totalmente dicho derecho”43.
Por ello, el sospechoso o procesado tiene garantías básicas como el fortalecimiento del
derecho de defensa, no como auxiliar, sino como parte fundamental de los derechos
humanos en el proceso penal; por tal motivo, el rol del abogado defensor en el nuevo
modelo se transforma de auxiliar de la justicia a representante del sospechoso o
procesado, y aporta los elementos de convicción y de prueba a la defensa de su cliente,
tiene el derecho a acceder a la información que contiene el proceso fiscal y judicial.
43
JAMES REATEGUI SÁNCHEZ. En busca de la Prisión Preventiva. Lima 2006. P. 153. Ver. JORGE
ROSAS YATACO. El Sistema en el Nuevo Código Procesal Penal. Disponible en:
http://www.mpfn.gob.pe/ncpp/files/dfbaaa_articulo%20dr.%20rosas%20yataco.pdf
26
Defensa como derecho fundamental y no como “auxiliar de la justicia como
era en el sistema inquisitivo”;
Investigación y preparación de la teoría del caso;
Defender los derechos e intereses de su patrocinado o cliente;
Defensa pública y protección;
Liderazgo en la litigación del caso. Decisiones estratégicas;
Relaciones eficaces con la fiscalía;
Negociación según el caso; y,
Efectividad y calidad en sus acciones profesionales.
El nuevo modelo del proceso penal acusatorio entre sus principales objetivos plantea
el reconocimiento efectivo de los derechos de las víctimas, que tiene su fundamento
constitucional y el Derecho Internacional de los Derechos Humanos, en virtud de que
no debe darse autosatisfacción del Estado como tal, sino el bienestar individual de sus
ciudadanos. No se puede afirmar que el proceso penal “sirve para proteger a la
sociedad” sin emprender acciones efectivas para brindar atención y protección a la
víctima individualmente considerada”44
Actualmente, los países de la región con la reforma han dispuesto políticas públicas y
protección efectiva de las víctimas como son:
Medidas de autoprotección;
Sistemas de alarmas para informar sobre situaciones de riesgo;
Sistemas de comunicación directa con la autoridad;
Protección Policial;
Sistemas de Reubicación;
Medidas Cautelares contra el ofensor; y,
44
ALBIN ESER. “Un cambio en las máximas del proceso penal: ¿hacia “reprivatización” del proceso penal?”.
Traductora Maria Luisa Villamarín. En, Ambos y Montealegre (Camp) Constitución y sistema acusatorio. Un
estudio de derecho comparado. Universidad de Externado de Colombia. Bogotá. 2005. P. 70. Disponible en:
http://webcache.googleusercontent.com/search?
q=cache:LzKu7exLQS4J:incipp.org.pe/modulos/documentos/archivos/Reforma%252520procesal%252520en
%252520America%252520Latina.doc+&cd=1&hl=es&ct=clnk&gl=ec
27
Sistema de protección en las audiencias45
Con la reforma procesal penal, la gran mayoría de países latinoamericanos “ha venido
introduciendo instituciones o figuras que se apartan del modelo europeo-continental
basado en el respeto al principio de legalidad procesal y que intentan aproximarse al
modelo anglosajón del consenso y la justicia negociada y al respecto, se afirma: “si es
que alguna vez existió el rol absolutamente neutral del juez anglo americano, ya no
calza más con el panorama procesal penal actual caracterizado por la mínima
existencia de juicios, debido a la práctica frecuente del pleabargaining47.
45
Cfr. CEJA. “Víctimas y nuevo sistema procesal penal: del discurso teórico a la satisfacción concreta del
interés en el proceso”. Curso Intermedio e-learning, módulo IX, 2006. P. 24.
46
ALBERTO BINDER. “Legalidad y Oportunidad”. En Libro Homenaje al Profesor JULIO B.J. MAIER. Ed.
Del Puente. Buenos Aires. 2004. P. 217.
47
JUMG. “El Proceso Penal, Conceptos, Supuestos y modelos Básicos”. P. 102. Ver: ARSENIO ORÉ
GUARDIA y LIZA RAMOS DÁVALOS. Aspectos comunes de la reforma procesal penal en América
Latina. Ob. Cit. P. 25.
28
b) El acuerdo reparatorio, existe cuando la víctima y el procesado se ponen de
acuerdo en el resarcimiento económico por los daños sufridos en los delitos de
mínima lesividad o gravedad;
c) El procedimiento abreviado, se genera cuando existe acuerdo entre el procesado
quien acepta los hechos atribuidos y conviene con el Fiscal, respecto de la pena
que cumplirá y la reparación civil, por ello, el juez de garantías penales da por
terminado el juicio penal, siempre que no corra riesgo la seguridad e integridad
física de la víctima; y,
d) El Fiscal tiene facultades para solicitar la desestimación de investigaciones
previas de casos de acuerdo a la ley ante el juez de garantías penales.
48
Cfr. GERMÁN GARAVANO. El Gobierno Judicial en la Argentina – Una perspectiva integral sobre la
Administración de Justicia-Sistemas Judiciales Año V. N° 10, (CEJA-INECIP). 2006. P. 50.
49
GERMÁN GARAVANO. Parte Deudécima, responsabilidad judicial de Cara el Servicio de Justicia y su
Reforma. Universidad Austral – Editorial Abarco de Rodolfo De palma. Tomo II. 2012. P. 125.
29
b) La definición de la metodología de trabajo en los tribunales y la capacidad o
idoneidad del propio juez, fiscal o defensor y su equipo de trabajo para la
administración y gestión de estos procesos; y,
Por lo tanto, cuando se trata de la gestión es necesario que en las actuaciones de cada
operador y de cada institución exista una evidente productividad y eficiencia en los
resultados no solo en los procesos de trabajo sino en los productos. Es decir, con la
“gestión se plantea el objetivo de atacar una de las principales deficiencias del sistema
penal que es la sobrecarga de trabajo que influye de modo altamente negativo en el
desempeño de todos los operadores judiciales” 50; y, una solución práctica basada en la
eficiencia y comunicación verbal, según los autores ARSENIO ORÉ GUARDIA y
LIZA RAMOS DÁVILA, es la siguiente:
30
Comunicaciones a los procesos en el principio de Justicia Accesible, Independiente, Efectiva,
Eficaz y Transparente.
31
Gráfico 3
Noticia de Infracción Penal: Por denuncia, por querella, de oficio, a petición (informes de
control), providencias judiciales o cualquier otro medio.
INVESTIGACIÓN PREPARATORIA
ETAPA INTERMEDIA ETAPA DE JUZGAMIENTO
(Investigación Previa e Instrucción Fiscal)52
JUEZ DE JUEZ DE TRIBUNAL ORAL
FISCAL DEFENSOR FISCAL DEFENSOR FISCAL DEFENSOR
GARANTÍAS GARANTÍAS (Jueces Colegiados)
Dirige con Actuar desde la Toma de decisión La Fiscalía una Contradice la Liderar y dirige Presenta Actúa como Dirige la
liderazgo y investigación y sobre las medidas vez culminada la acusación fiscal esta etapa acusación o parte audiencia de
objetividad la acceso a las limitativas o investigación Ofrece medios Controla la no de acuerdo procesal juicio oral
investigación
evidencias restrictivas de preparatoria con probatorios acusación fiscal a las pruebas
Refutación Escucha los
Ejerce el derecho libertad solicitadas los elementos de Interpone Decide sobre el y elementos
de la teoría arguementos de
penal por el fiscal convicción con de convicción
de participación y cuestiones previas, sobreseimiento del caso de las partes
Indaga los controversia de la Verifica y que cuente tiene prejudiciales y que solicite el en base a las Presencia la
la fiscalía
elementos de actuaciones de la controla el respeto dos opciones ante excepciones fiscal evidencias actuación procesal
convicción de fiscalía en la de las garantías el juez: Impugna los Resuelve las Expone la Presenta de las pruebas y la
preparación de del sospechoso o a) Formula medios de pruebas cuestiones o teoría del caso pruebas de valora
cargo y descargo
pruebas procesado acusación fiscal de la fiscalía alegaciones Presenta descargo Decide sobre la
para acusar o no
Representante del Controla el plazo b) Solicita Negocia con la previas a cerca de pruebas de Actúa y absolución o
hacerlo
sospechoso o y las prórrogas de sobreseimiento fiscalía según el incompetencias, cargo o de ejerce condena al
Dirige y controla procesado la investigación Solicita medios descargo defensa
caso nulidades e presunto
la labor de la Derecho a Toma decisión alternativos de Presentación de la impugnaciones estratégica responsable,
policía judicial y investigar y sobre la actuación solución de teoría del caso. planteada por la favor de su después de
se apoya con practicar pruebas de la prueba conflicto penal, defensa contra la defendido practicada la
tecnología Derecho de anticipada e según el caso. acusación fiscal Demuestra prueba basados en
científica y de acceder a la interviene en su Se pronuncia en las los principios de
información de la actuación el acto de debilidades inmediación,
prueba forense
52
Código Orgánico Integral Penal Ecuatoriano. R.O-S 180: 10-feb-2014. Corporación de Estudios y publicaciones. Quito. 2014. P. 580-600.
32
Tiene el deber de investigación y Se pronuncia audiencia si llama en la teoría oralidad, igualdad
la carga de prueba proceso sobre el control de o no a juicio del caso de y contradicción al
Solicita medidas Defiende los los actos de Realiza la fiscalía juicio oral
derechos e investigación que actividades Garante del
cautelares
intereses de su afecten o jurisdiccionales debido proceso
Respeta el patrocinado restringieron penal
principio de Mantiene derechos del constitucional.
legalidad relaciones sospechoso o
Propone solución eficaces con la procesado o de la
del conflicto a fiscalía víctima.
través de los Establece y busca
la mejor estrategia
medios
de defensa para su
alternativos de cliente
resolución del Comunicación
conflicto penal y fluida con su
otros patrocinado
procedimientos Derecho a
alternos. interrogar testigos
de cargos.
Fuente: Estudio de la Reforma Procesal Penal del Sistema Acusatorio Oral en América Latina.
Diseño: Propio del Autor.
33
2.3. Jurisprudencia de la Corte Constitucional de Colombia
53
Corte Constitucional de Colombia. Sentencia C-591/05. Disponible en:
http://www.corteconstitucional.gov.co/RELATORIA/2005/C-591-05.htm
34
CAPÍTULO II
35
1. CONSTITUCIONALIZACIÓN DEL ORDENAMIENTO JURÍDICO
PENAL
“En todos estos casos se advierte la creciente importancia que van adquiriendo en su sistema
político la Constitución como norma jurídica y los tribunales constitucionales como órganos
que velan por asegurar su vigencia, en especial mediante la tutela y el progresivo desarrollo
de los derechos humanos. Ello supone una transformación importante del ordenamiento
normativo y de todo el sistema jurídico de estos países. Por ello, sus partidarios señalan que el
54
LUÍS PRIETO SANCHÍS. Neoconstitucionalismo y Ponderación Judicial, en Neoconstitucionalismo (s).
Editorial Trotta. Madrid. 2005. P. 123.
55
Véase: MAURO BARBERIS. Neoconstitucionalismo, Democracia e Imperialismo de la Moral, en
Neoconstitucionalismo (s). Editorial Trotta. Madrid. 2005. P. 102. LUÍS PRIETO SANCHÍS. Positivismo y
Constitucionalismo. Distribuciones Fontamara. México. 1999. P. 230.
36
Neoconstitucionalismo es una corriente europea, pero en franco proceso de expansión
global”56.
Por lo tanto, para hablar de la constitucionalización del ordenamiento jurídico hay que tener
un derecho que se identifique por tener una Constitución invasora, intrusa, que condiciona a la
legislación, la jurisprudencia, la doctrina y los comportamientos de los actores públicos (por
ejemplo, Poder Legislativo o Asamblea, Poder Ejecutivo y Poder Judicial) y, los
ciudadanos/as y personas jurídicas.
El académico italiano RICCARDO GUASTINI señala siete condiciones que permiten hablar
de la constitucionalización de un determinado sistema jurídico que debe satisfacer para ser
considerado “impregnado”, o empaparse de las normas constitucionales. Al respecto
resumimos estas características:
37
a) Primer modelo de Estados Unidos, control a posteriori por vía de excepción que
es ejercido por el Juez en el ámbito de su propia competencia jurisdiccional;
b) Segundo modelo de Francia, control a priori, por vía de acción y en abstracto,
ejercido por el Tribunal Constitucional o Corte Constitucional;
c) Tercer modelo de Alemania, Italia y España, control a posteriori, por vía de
excepción, ejercido por el Tribunal Constitucional o Corte Constitucional.
58
RICCARDO GUASTINI. Estudios de Teorías Constitucionales. Ob. Cit. P. 148-158.
38
En efecto, ante la crisis del Positivismo Jurídico o de la Ley, el prestigioso profesor español
Luis Prieto Sanchís59expresa que el Neoconstitucionalismo se caracteriza por la defensa
simultánea de las siguientes tesis atinentes a la Constitución y a su interpretación:
39
6. Esta concepción de la Constitución implica negar la posibilidad de estructurar un
“modelo geográfico” de relaciones entre la Constitución y la legislación, en el cual la
frontera entre los derechos fundamentales y la ley aparezca claramente delimitada y
existan unos límites infranqueables por el legislador y otras materias en donde este
poder se puede mover con libertad. Por eso, o un caso es legal o es constitucional.
a) Textos constitucionales
b) Prácticas Jurisprudenciales
60
REY CANTOR, Ernesto; REY ANAYA, Ángela. Medidas Provisionales y medidas cautelares en el sistema
interamericano de Derechos Humanos. Segunda Edición. Editorial Temis S.A. Colombia. 2008
61
MIGUEL CARBONELL. El neoconstitucionalismo en su laberinto. Teoría del neoconstitucionalismo. Teoría
del neoconstitucionalismo. Ensayos Escogidos. Varios Autores. Instituto de Investigaciones Jurídicas-
UNAM. Editorial Trota. Madrid. 2007. P. 10.
40
Con el nuevo modelo de los textos constitucionales en vigencia la práctica
jurisprudencial de los Tribunales y Cortes Constitucionales ha cambiado; en razón de
que los jueces constitucionales han tenido que realizar su función o rol basándose en
una nueva técnica de interpretación propia de los principios constitucionales, como es
la ponderación, la proporcionalidad, la razonabilidad, la maximización de los efectos
normativos de los derechos fundamentales, y también trabajan con “valores” y
“principios” constitucionales.
En el caso ecuatoriano se dan las condiciones de las que habla el autor Riccardo Guastini, por
cuanto la nueva Constitución de la República del Ecuador del 2008 (vigente) es rígida,
suprema con fuerza vinculante y existe la Corte Constitucional, que ejerce el control de
constitucionalidad. Ha constitucionalizado un catálogo de derechos fundamentales, y
reconoce la fuerza vinculante que existe sobre interpretación de la Constitución no solo por
los jueces de las distintas jurisdicciones, sino todos los operadores jurídicos quienes se basan
en principios, valores y reglas constitucionales.
41
mediante su jurisprudencia hace el control constitucional de los decretos que declaran estados
de excepción.
Por lo demás, se colige que la fuente principal del ordenamiento jurídico ecuatoriano es la
Constitución y no la Ley, como ocurría anteriormente con el Positivismo Jurídico. La
Constitución es la norma jurídica, está por encima de la legislación orgánica, ordinaria,
ordenanzas y otros cuerpos legales. No puede ser reformada, modificada por la Ley. Por
último los jueces ordinarios hacen uso de la excepción de inconstitucionalidad y mediante los
procesos constitucionales se garantizan y protegen los derechos constitucionales de los
ciudadanos.
Es así, que, por ejemplo, en el 2009 se adecuaron normas secundarias, institucionalidad y las
políticas públicas de justicia al nuevo marco jurídico constitucional, como el caso del Código
42
Orgánico de la Función Judicial, publicado en el Registro Oficial Nº 544 (suplemento), de 9
de marzo del 2009, en el cual se integran a las leyes de la Función Judicial, del Consejo de la
Judicatura y la Defensoría Pública, y la Ley Orgánica de Garantías Jurisdiccionales y Control
Constitucional, publicado en el Registro Oficial Nº 52 del 22 de octubre del 2009; dando
cumplimiento a la disposición transitoria de la Constitución que determinó plazos máximos de
ciento veinte (120) días, contados desde la entrada en vigencia de la actual Constitución (20
de octubre del 2008), para que la Asamblea Nacional proceda a la aprobación de legislación
prioritaria en materia de justicia.
Artículo. 11. Principios que rigen para el ejercicio de los derechos.- El ejercicio de los
derechos se regirá por los siguientes principios:
43
Asimismo, los derechos son jurisdiccionalmente garantizados mediante el debido proceso, el
derecho de defensa y la tutela efectiva, por tal motivo no se requiere de ley para reconocer y
defender los derechos.64 Además el Estado ecuatoriano tiene la obligación de respetar y hacer
respetar los derechos garantizados en la Constitución.65
64
Ibídem. Artículo 75 y 76.
65
Ibídem. Artículos 3.1 - 11.9.
66
LUIS CUEVA CARRION. Acción Constitucional Extraordinaria de Protección. Ediciones Cueva Carrión.
Quito-Ecuador. 2010.
67
Véase: ANDRÉS DE LA OLIVA SANTOS y Otros. Derecho Procesal Penal. Centro de Estudios Ramón
Arces. Madrid. 1993. P. 63.
68
Véase: JUAN MONTERO AROCA. Procesal Penal y Libertad. Ensayo Polémico sobre el nuevo proceso
penal. Editorial Homnson – Civitas. Primera edición. España. 2008. P. 20.
44
CLAUS ROXIN, afirma: quien caracterizó al “derecho procesal penal es el sismógrafo de la
Constitución Política del Estado”69. Por lo tanto, existe una relación indisoluble entre la
Constitución y el Proceso Penal; por ello, ALBERTO BINDER, habla de un “diseño
constitucional del proceso penal”70 que sirve como marco fundamental para la garantía de los
derechos, para el jurista peruano RICHAR HACSAHUANGO CHÁVEZ, cuando se refiere a
la Constitución y proceso Penal, señala que la potestad de administrar justicia penal debe estar
enmarcada dentro de las fases constitucionales, como son la observancia de los principios,
valores y derechos fundamentales que la Constitución consagra y reconoce y también se
consagra con la limitación de la potestad jurisdiccional71
En efecto, el ordenamiento jurídico procesal penal recoge principios, valores, normas o reglas,
derechos y garantías de la Constitución y del Derecho Internacional de los Derechos Humanos
sobre la materia, y así lo afirma JURGEN BAUMAN: “Que el derecho procesal penal es
derecho constitucional aplicado”72.Y que existen principios limitadores del poder primitivo
del Estado, permitiendo la consagración de los derechos fundamentales como derechos que
limitan desde el principio la autoridad del Estado y que operan como fuentes de obligaciones
del mismo73, por tal motivo, el poder primitivo del Estado se fundamenta en los diseños
señalados en la Constitución.
69
CLAUS ROXIN. Derecho Procesal Penal. Editores del Puerto S.R.L. Edición en castellano. Traducción de
la 25° edición Alemana de Gabriela E. Córdova y Daniel. Pastor. Revisada por JULIO B.J. MAIER. Buenos
Aires. 2000. P. 200.
70
Citado por VICTOR BURGOS MARIÑOS. Principios sectores del nuevo Código procesal Penal. P. 48. En
VÍCTOR VILLANUEVA, YOLANDO DOIG DIAS y FANNY SOLEDAD FARFÁN. (Coordinadores). El
nuevo proceso penal. Estudios Fundamentales. Editorial Palestra. Lima-Perú. 2005. P. 215.
71
RICHARD HACSAHUANGA CHÁVEZ. Constitución y proceso Penal. Universidad Nacional de San
Cristóbal de Huarmanga, Ayacucho-Perú. 2012. P.3.
72
JURGEN BAUMANN. Derecho Procesal Penal, Conceptos Fundamentales y Principios Procesales.
Introducción sobre la base de Casos. Editorial De palma. Buenos Aires-Argentina. 1989. P. 25
73
ENRIQUE BACIGALUPO. Principios Constitucionales del Derecho Penal. Editorial Hammurabi. Buenos
Aires-Argentina. 1999. P. 13.
45
a que se ha de someter al Estado que ejerce el poder punitivo en interés de la protección de los
derechos humanos de todos los intervinientes en un conflicto penal” 74. Al respecto, la
Declaración Francesa de los Derecho del Hombre y del Ciudadano (Derechos Humanos) de
26 de Agosto de 1789, en su artículo 8, expresa: “La Ley no debe establecer más penas que
las estrictas y evidentemente necesarias.”75.Así se realiza una de las reivindicaciones más
importantes de la doctrina clásica, por ejemplo CÉSAR BECCARIA y otros autores que ha
sido dirigida al legislador o asambleísta. Por lo tanto, la Constitución ha incorporado los
aspectos procesales, permitiendo el cambio normativo dogmático, que tienen relación con los
caracteres e instrucciones del proceso penal como el reconocimiento y restricción de los
derechos fundamentales76.
Así mismo, a criterio del jurista alemán KLAUS TIEDEMANN, lo establecido con el artículo
8 de la Declaración Francesa, en terminología de la actual política criminal acogida por el
Tribunal Constitucional Federal, se plasman los postulados de proporcionalidad y
subsidiaridad de Derecho Penal77 respecto a la política criminal alemana.
74
WINFRIE HASSEMER. ¿Puede haber delitos que no afecten a un bien jurídico Penal? Traducción
SPINOLA TÁRTALO, en La Teoría del Bien Jurídico Penal?, Fundamento de la Legitimación del Derecho
Penal o Juega de Abolorios dogmático? HEFENDEHL (Edición). Mariscal Pons Madrid Barcelona. 2007. P.
96. Citado Por: MARCEDES ALFONSO ÁLAMO. Bien Jurídico Penal: Más Allá del Constitucionalismo de
los derechos. Estudios Penales y Criminológicos. Volumen XXIX. 2009. P. 62.
75
Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano de 1789, artículo 8. Véase en: JAVIER DÍAZ
REVORIO. Textos Constitucionales Históricos. El Constitucionalismo Europeo y Americano en sus
Documentos. Derechos Humanos Editorial Palestra. Lima-Perú. 2004. P. 125. Disponible en:
http://www.fmmeducacion.com.ar/Historia/Documentoshist/1789derechos.htm
76
Véase: ANDRÉS DE LA OLIVA SANTOS y OTROS. Derecho procesal Penal. Centro de Estudios Ramón
Arces. Madrid. 1993. P. 63.
77
KLAUS TIEDEMANN. Constitución y Derecho Penal. Revista Española de Derecho Constitucional. N° 33,
1991. P. 145.
78
Código Orgánico Integral Penal de Ecuador. Artículo. 5.1 Legalidad.- no hay infracción penal, pena, ni
proceso penal sin ley anterior al hecho. Este principio rige incluso cuando la ley penal se remita a otras
normas o disposiciones legales para integrarla.
46
Naturalmente, los derechos y principios fundamentales ocupan un lugar relevante en el
contexto de un ordenamiento jurídico constitucionalizado y por ello, la dogmática jurídica-
penal debe tomar la forma que afirma JUAN FERNANDEZ CARRASQUILLA “de una
ciencia dogmática lógica-axiológica en la que el tiempo se impone el análisis lógico de las
normas de acuerdo con el positivo buscando su coherencia sistemática 79. Además, se exige
indagar por su corrección desde el punto de vista axiológico teniendo como referente las
normas superiores, es decir, los derechos humanos y la equidad80. Por tanto, la doctrina
sostiene que la ciencia dogmática del derecho penal no solo ha de mostrar “cómo es” el
derecho vigente, sino también “cómo debe ser” y de consiguiente, -cómo no debe ser-
(función negativa).
Es evidente, que la constitucionalización del Derecho Penal ya sea en materia sustantiva como
de Derecho Procesal, la Constitución en su contenido material en tanto los principios, valores
y derechos fundamentales, inciden de manera relevante y orienta su alcance del Derecho
Penal y limita el poder público. Por ello, la norma “constitucional debería ser siempre
concebida, no como ley de organización de los poderes públicos, sino como enunciado de
79
JUAN FERNANDEZ CARRASQUILLA. Derecho Penal Liberal de Hoy. Editorial Gustavo Ibáñez. Bogotá.
2006. P. 149.
80
GUSTAVO EMILIO COTE-BARCO. Constitucionalización del Derecho Penal y Proporcionalidad de la
Penal. Universitas. UCLS. Bogotá-Colombia. 2008. P. 127.
81
GUSTAVO EMILIO COTE-BARCO. Constitucionalización del Derecho Penal y proporcionalidad de la
Pena. Ob. Cit. P.3.
47
deberes limitativos del poder. Esto, después de todo, está en los orígenes del más genuino
constitucionalismo”82.
Por ello, “la Constitución ya no solo limita al legislador al establecer el modo de producir el
Derecho y, a lo sumo, algunas barreras infranqueables, sino que lo limita también al
predeterminar amplias esferas de regulación jurídica, en ocasiones por cierto de forma no
suficientemente unívoca ni concluyente. El segundo elemento, y tal vez más importante, es lo
que pudiéramos llamar el desbordamiento constitucional, esto es, la inmersión de la
constitución dentro del ordenamiento jurídico como una norma suprema. Los operadores
jurídicos ya no acceden a la Constitución a través del legislador, sino que lo hacen
directamente… es difícil encontrar un problema jurídico medianamente serio que carezca de
alguna relevancia constitucional”83.
Es decir, la aplicación del Derecho Penal se debe llevar a efecto, en principio mediante la
técnica de una interpretación “conforme la Constitución84; por tal motivo, la moderna doctrina
penal se enfoca en el rol de la Constitución, que es limitar el poder del Estado en materia
penal y organizar los derechos de las personas mediante la construcción de principios
limitadores rectores del sistema penal, capaces de restringir el IUS PURIENDI ESTATAL,
como el de legalidad, el de culpabilidad u otras; es decir, el Constitucionalismo influye y
construye la política criminal.
La dogmática del sistema penal es un asunto de la doctrina y la jurisprudencia 85; sin embargo,
la dogmática jurídica penal proviene del modelo señalado en la Constitución que contiene
principios, valores, derechos y garantías.
82
ANTONIO C. PEREIRA MEMAUT. Un concepto Orsiano de constitución (en línea). Revista de derecho
Valparaíso 2005. Disponible en: http.www.redalye.org (fecha de consulta: agosto del 2012). P. 8.
83
LUIS PRIETO SANCHÍS. Neoconstitucionalismo y Ponderación Judicial, en Neoconstitucionalismo (s).Ob.
Cit. P. 130.
84
ENRIQUE BACIGALUPO. Principios Constitucionales del Derecho Penal. Editorial Hammurabi. Ob. Cit. P.
13.
85
KLAUS TIENDEMANN. La Constitucionalización del derecho Penal en Alemania. 1994. Publicada en:
www.unifr.ch/derechopenal P. 2.
48
“Ha habido una constitucionalización del derecho penal porque tanto en materia sustantiva
como procedimental, la Carta incorpora preceptos y enuncia valores y postulados -
particularmente en el campo de los derechos fundamentales- que inciden de manera
significativa en el derecho penal y, a la vez, orientan y determinan su alcance. Esto significa
entonces que el Legislador no tiene una discrecionalidad absoluta para definir los tipos
delictivos y los procedimientos penales, ya que debe respetar los derechos constitucionales
de las personas, que aparecen así como el fundamento y límite del poder punitivo del Estado.
Fundamento, porque el iuspuniendi debe estar orientado a hacer efectivos esos derechos y
valores constitucionales. Y límite, porque la política criminal del Estado no puede
desconocer los derechos y la dignidad de las personas”86.
86
Corte Constitucional de Colombia. Sentencia C-038 de 1995. Disponible en:
http://www.corteconstitucional.gov.co/relatoria/1995/C-038-95.htm
87
REINER ARNOL; JOSÉ IGNACIO MARTÍNEZ ESTAY; FRANCISCO ZÚÑIGA URBINA. El Principio
de Proporcionalidad en la Jurisprudencia del Tribunal Constitucional. Estudios Constitucionales. Vol. 10,
Numeral 1. Centro de Estudios Constitucionales de Chile. 2012. P. 67.
49
constitucional. Tal derivación del Estado de Derecho es en virtud del contenido esencial de
los derechos que no pueden ser limitados más allá de lo imprescindible para la protección de
los intereses públicos”88.
88
HUMBERTO NOGUEIRA ALCALÁ. Dogmática constitucional. Editorial Universidad de Talca. 1997.
P.184.
89
GLORIA PATRICIA LOPERA MESA. El principio de Proporcionalidad en el Control de Constitucionalidad
de las leyes penales sustantivas (una aproximación a su empleo en la jurisprudencia constitucional
colombiana). En Revista Nuevo Foro Penal, N° 67. Juan Oberto Sotomayor Acosta, Director. Universidad
EAFIT. Enero-Junio. Colombia. 2005. P. 13.
90
Cfr. En la que su principal ámbito de aplicación del principio de proporcionalidad en el sentido amplio es el
de los derechos fundamentales. CARLOS BERNAL PULIDO. El Principio de Proporcionalidad y los
Derechos Fundamentales. Madrid. 2003. P. 132-145.
50
3.2. El Principio de Proporcionalidad aplicado al Control Constitucional de las Leyes
Penales Sustantivas.
Por tanto, “en el Derecho Penal se destina la funcionalidad de este principio en el momento de
establecer el enlace material entre el delito y su consecuencia jurídica” 93. En efecto, el
fundamento político y constitucional del poder punitivo del iuspuniendi genera en el Estado
Constitucional de Derechos y justicia, en la que “la pena que establezca el legislador al delito
deberá ser proporcional a la importancia social del hecho”94.
91
Cfr. CARLOS BERNAL PULIDO. El Principio de Proporcionalidad y los Derechos Fundamentales. Ob. Cit.
P. 55.
92
CARLOS BERNAL PULIDO. El Derecho de los Derechos. Escritos sobre la aplicación de los Derechos
Fundamentales. Universidad de Externado de Colombia. Reimpresión. 2008. P. 117.
93
TERESA AGUADO CORREA. El Principio de proporcionalidad en Derecho Penal. Edición Edersa. Madrid.
1999. P. 114 y ss.
94
SANTIAGO MIR PUIG. Derecho Penal. Parte general. Barcelona. Euros. 1998. P. 99.
95
Corte Constitucional de Colombia. Sentencia C-581 de 2001, M.P. Jaime Rentería.
51
Al respecto, la jurista GLORIA LOPERA MESA sostiene: “Toda ley penal sustantiva supone
una intervención en derechos fundamentales, ya sea a través de la definición de cierta
conducta como delito (norma de conducta) como de la determinación de la sanción aplicable
(norma de sanción). Por lo tanto, el primer paso para enjuiciar su constitucionalidad será
determinar cuáles son los derechos fundamentales prima facie afectados por la ley penal,
tanto a través de la prohibición contenida en la norma de conducta, como mediante la
definición de la clase y cuantía de pena establecida en la norma de sanción”96.
96
GLORIA PATRICIA LOPERA MESA. Posibilidades y Límites del Principio de Proporcionalidad como
Instrumento de control del Legislador Penal. P. 111 y 112. Constitución y Principios del Proceso Penal:
Algunas Bases Constitucionales. Santiago Mir Puig y Joan Queralt J. Jiménez, Directores. Silvia Fernández
Bautista, Coordinadora. Tirat lo Blanch. Valencia. 2010.
97
RAMÍRO ÁVILA SANTAMARÍA. El Principio de legalidad Vs al Principio de Proporcionalidad.
(Reflexiones sobre la Constitucionalidad de las Leyes Penales y el Rol de los parlamentos y los Jueces): El
Principio de Proporcionalidad y la Interpretación Constitucional. Editor. Miguel Carbonell. Ministerio de
Justicia y Derechos Humanos. Neoconstitucionalismo y Sociedad. Quito-Ecuador. 2008. P. 332.
98
SANTIAGO MIR PUIG. Derecho Penal. Parte General. Ob. Cit. P. 100.
52
fin constitucionalmente legítimo”99; y, consecuentemente, refiriéndose al control de leyes
penales se aplican los subprincipios de proporcionalidad que son:
Por ello, de conformidad con el principio de idoneidad, “toda ley penal, como
intervención en la libertad general de acción y otros derechos fundamentales, debe ser
idónea para fomentar un objetivo constitucionalmente legítimo”100.
Naturalmente, el principio de idoneidad “requiere que el Derecho Penal sea apto para la
tutela del bien jurídico y que la medida adoptada, tanto la pena como la medida de
seguridad, sea adecuada para conseguir la finalidad que persigue” 101. Por ello, los
“criterios de intervención penal exigen que el bien jurídico reúna las siguientes
cualidades:
99
Sentencia del Tribunal Constitucional, 169/2001, FJ9. Cfr. IGNACIO VILLAVERDE MENÉNDEZ. La
Resolución de Conflictos entre Derechos Fundamentales. El Principio de Proporcionalidad: El Principio de
Proporcionalidad y la interpretación Constitucional. Editor. Miguel Carbonell. Ministerio de Justicia y
Derechos Humanos. Neoconstitucionalismo y Sociedad. Quito-Ecuador. 2008. P. 183.
100
CARLOS BERNAL PULIDO. El Derecho de los Derechos. Ob. Cit. P. 135. Véase: TERESA AGUADO
CORREA. El Principio de Proporcionalidad en la Jurisprudencia del Tribunal Constitucional Peruano. P. 41.
Varios Autores. Derecho Constitucional Penal. José Urquinzo Olaechea y Nelson Salazar Sánchez
(Coordinadores). Idemsa. Lima-Perú. 2012.
101
TERESA AGUADO CORREA. El Principio de Proporcionalidad en el Derecho Penal. Ob. Cit. P. 147.
102
IVONNE YENISSEY ROJAS. La Proporcionalidad en las Penas. Disponible en:
http://portal.uclm.es/portal/page/portal/IDP/Iter%20Criminis%20Documentos/Iter%20Criminis
%20Numero_3/la%20proporcionalidad%20en%20las%20penas.pdf P. 90.
53
b) Subprincipio de Necesidad: El Subprincipio de Necesidad se lo llama también “de
intervención mínima” “de la alternativa menos gravosa” o “de subsidiaridad”,
considerado un “principio de constitucionalidad, de prohibición, de exceso o de
proporcionalidad en sentido amplio, que tiende a la optimización del grado de eficacia de
los derechos individuales, frente a las limitaciones que pudieron imponer en su ejercicio
los poderes públicos”103.
Así mismo, GLORIA PATRICIA LOPERA PRESA señala: “aplicando al control de los
tipos penales, el subprincipio de necesidad requiere acreditar que no existe otra
alternativa de tipificación que sea igualmente idónea para proteger el bien jurídico y al
mismo tiempo menos lesiva para el derecho fundamental afectado por la prohibición
penal”105.
Por tanto, para que una medida no sea necesaria debe existir un medio alternativo menos
gravoso o de mínima intervención que tenga, por lo menos, la misma idoneidad y que sea
menos limitado a la libertad o de los otros derechos fundamentales que resulten
afectados. Por ello, el legislador está obligado a la máxima economía en el momento de
configurar los delitos en la ley penal, y el juez solo hará su aplicación cuando sea
indispensable constar con mecanismos sustitutivos menos lesivos al rigor de la sanción
penal.
54
de una medida, con el objetivo de concluir, a través del uso de los intereses de acuerdo al
caso concreto.
Artículo. 8.-La ley no debe imponer otras penas que aquéllas que son estrictamente y
evidentemente necesarias; y nadie puede ser castigado sino en virtud de una ley
promulgada con anterioridad a la ofensa y legalmente aplicada.108
b) Convenio Europeo de 1950, para la Protección de los Derechos Humanos y
Libertades Fundamentales
107
CARLOS BERNAL PULIDO. El Derecho de los Derechos. Ob. Cit. P. 136.
108
FRANCISCO JAVIER DÍAZ REVORIO. Textos Constitucionales Históricos. Constitucionalismo Europeo y
Americano en sus documentos. Editorial Palestra. Lima 2004. P. 125.
55
“Artículo. 4.- Los Estados Partes en el presente Pacto reconocen que, en ejercicio de
los derechos garantizados conforme al presente Pacto por el Estado, éste podrá
someter tales derechos únicamente a limitaciones determinadas por ley, sólo en la
medida compatible con la naturaleza de esos derechos y con el exclusivo objeto de
promover el bienestar general en una sociedad democrática”.110
d) Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, 1966
Artículo. 15.-
Artículo. 76.- Garantías básicas del Debido Proceso.- En todo proceso en el que se
determinen derechos y obligaciones de cualquier orden, se asegurará el derecho al
debido proceso que incluirá las siguientes garantías básicas:
109
MIREYA CASTILLO DAUDI. Derecho Internacional de los Derechos Humanos. Segunda Edición.
Valencia-España. 2006. P. 113.
110
Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales. Aprobado en la Asamblea General de
las Naciones Unidas, el 16 de Diciembre de 1966. Disponible en:
http://www.ohchr.org/SP/ProfessionalInterest/Pages/CESCR.aspx
111
Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, 1966. Artículo 15, numeral 1 y2. Disponible en:
http://www.ohchr.org/SP/ProfessionalInterest/Pages/CESCR.aspx
112
Cfr. MABEL GOLDSTEIN. Diccionario Jurídico. Consultor Magno. Buenos Aires. 2008. P. 769.
Disponible en: https://www.oas.org/dil/esp/tratados_B-
32_Convencion_Americana_sobre_Derechos_Humanos.htm
56
6. La ley establecerá la debida proporcionalidad entre las infracciones y las
sanciones penales, administrativas o de otra naturaleza.113
A los ciudadanos y los ciudadanas que integran toda sociedad se le deben garantizar la
dignidad y no solo deben reconocerse formalmente sus derechos, sino también respetar sus
derechos humanos, sean estos, individuales o colectivos; además, que debe implementarse
medios que garanticen el conocimiento y ejercicio de sus derechos fundamentales o
constitucionales de cada persona de acceso a la justicia y obtener de los Juzgados y Tribunales
una resolución motivada, racional y justa.
57
ejercer sus derechos y dar soluciones a sus conflictos jurídicos de manera eficaz y
oportunamente. Por tanto, el derecho humano de acceso a la justicia tiene relación con un
conjunto de derechos fundamentales que deben ser considerados en el derecho a la tutela
judicial efectiva o derecho a un juicio justo, establecido en los instrumentos internaciones de
derechos humanos.
Doctrinariamente, se afirma que el concepto de tutela judicial efectiva surge, por primera vez,
en la Constitución Española de 1978 (Art. 24)116, establece las bases fundamentales de todo
procedimiento judicial de Jueces y Tribunales de Justicia; y la “propia doctrina europea
afirmó desde hace tiempo que toda persona tiene el derecho a acudir al órgano jurisdiccional
respectivo para obtener una `respuesta´ (o tutela)”; Asimismo, VANESA AGUIRRE sostiene
“que la tutela judicial efectiva impone al estado un deber prestacional (…) y que el poder
jurisdiccional está para eso: otorgar respuestas motivadas, justas, que sean el resultado de un
debate en el que se garantice la igualdad de armas a las partes y se cumplan a cabalidad” 117.
Por tanto, el derecho de acción y de acceso a los órganos jurisdiccionales en un derecho
público, subjetivo y autónomo de todos las personas ya sean físicas o jurídicas (públicos o
privados), nacionales o extranjeros que le garantiza el Estado Constitucional de Derechos y
Justicia.
La tutela judicial efectiva es definida, según GERMÁN BIDART CAMPO, “como el derecho
al acceso a los órganos de administración de justicia en procura de justicia” 118. Asimismo, la
autora MARÍA AQUILINA SÁNCHEZ expresa que “El derecho a la tutela judicial efectiva
es el derecho a todas las personas a tener acceso al sistema judicial y a obtener de los
tribunales una resolución motivada, no permitiéndose que por parte de estas se pueda sufrir
indefensión al no permitírseles ejercer todas las facultades que legalmente tienen
reconocidas”119; y, también, se la define como “aquel derecho que tiene toda persona de
acudir a los órganos jurisdiccionales, para que a través de los debidos causes procesales y con
unas garantías mínimas, se obtengan una decisión fundada en derecho sobre las pretensiones
116
MARTÍN HURTADO REYES. Tutela Jurisdiccional Diferenciada. Lima. Palestra. 2006. P. 36.
117
VANESSA AGUIRRE. El Derecho a la Tutela Judicial Efectiva: Una aproximación a su aplicación por los
Tribunales Ecuatorianos: Publicado en Revista de Derecho FORO Nº14, UASAB/ CEN-Ecuador. Programa
Andino de Derecho Humanos, Compilador. Universidad Andina Simón Bolívar. Ediciones Abya- Yala.
Quito, 2010. P. 40.
118
GERMÁN BIDART CAMPOS. Compendio de Derecho Constitucional. Ediar. Sociedad Americana de
Editores. Buenos Aires. 2005. P. 43.
119
MARÍA AQUILINA SÁNCHEZ RUBIO. Derecho a la Tutela Judicial Efectiva: Prohibición de sufrir
indefensión y su tratamiento por el Tribunal Constitucional. Disponible en http://dialnet.uniroja.es
58
propuestas”120. Finalmente, los autores VICENTE GIMERO SENDRA 121y JOSÉ
GARBERÍ122, afirman que el derecho a la tutela judicial efectiva no es más que el derechos a
la acción “constitucionalizado”
Según JESÚS MARÍA CASAL, el derecho a la tutela judicial efectiva tiene, entre otras, las
siguientes manifestaciones:
“El acceso al órgano jurisdiccional; las condiciones que dicho órgano desee poseer, en cuanto
a su independencia e imparcialidad y a su competencia determinada con antelación por la ley;
el desarrollo del procedimiento con arreglo al principio del contradictorio y a los demás
principios del debido proceso; la resolución de la controversia en un tiempo razonable; la
obtención de una decisión congruente con lo solicitado y basado en el Derecho, y la cabal
ejecución de la sentencia”.123
La tutela judicial efectiva es el derecho humano que tienen todas las personas para actuar en
juicio y tener la tutela de sus propios derechos e intereses -personales legítimos, colectivos,
difusos-.124, para acceder a los órganos jurisdiccionales de administración de justicia (poder
judicial) para que garantice al conocer la efectividad de los derechos constitucionales e
intereses legítimos mediante el recurso directo de sus titulares a los jueces o tribunales y la
obligación de estos a actuar, y resuelva un conflicto legal mediante una sentencia fundada,
motivada, razonable, justa y que se ejecute su cumplimiento. Pero del análisis de sus efectos
se desprenden tres momentos diferentes, según la doctrina “ ... primero, en el acceso a la justicia;
segundo, una vez en ella, que sea posible la defensa y obtener solución en un plazo razonable, y
tercero, una vez dictada la sentencia, la plena efectividad de sus pronunciamientos. Acceso a la
120
JUAN CARLOS BENALCÁZAR GUERRÓN. El derecho a la tutela judicial efectiva. Ediciones Legales
EDLE. S.A. Quito-Ecuador. 2004. P. 50. Expone tres garantías mínimas que deben observarse para el
derecho de tutela efectiva: imparcialidad del juez, celeridad (calidad de expedita), derecho a la defensa
(prescripción de la defensa).
121
VICENTE GIMENO SENDRA. Introducción al Derecho procesal (con la colaboración e Manuel Díaz
Martínez). Madrid. Colex. sexta edición. 2010. P. 239
122
JOSÉ GALBERÍ LLOBREGOT. Constitución y Derecho procesal. Los Fundamentos Constitucionales del
Derecho procesal. Pamplona-España. 2009. P. 115.
123
JESÚS MARÍA CASAL. Derechos Humanos, Equidad y Acceso a la Justicia. Véase en: Instituto
Latinoamericano de Investigaciones Sociales (ILDIS). Caracas-Venezuela. 2005. P. 26.
124
ANTONIO ARAUJO GARCÍA. El principio de la Tutela Judicial Efectiva y los intereses colectivos y
difusos, en el derecho público a comienzos del siglo XXI. Estudios en Homenajes al profesor A.R. Brewer –
Carías, T. m. Civitas. Madrid. 2003. P. 703 y ss.
59
jurisdicción, proceso debido y eficacia de la sentencia ”125; para ello, debe existir una justicia
gratuita, accesible, imparcial, equitativa, transparente, autónoma e independiente, expedita y a
un juez natural y tribunal competente, sin dilaciones, ni formalismos o rigorismos y
discriminación. “El juzgamiento acorde con el debido proceso y garantías mínimas ”126 y para todos
los ciudadanos gobernados se le respete sus derechos y garantías y a la vez ellos se someten al
ordenamiento jurídico del Estado y así lo harán los gobernantes de acuerdo con los
instrumentos internacionales de derechos humanos, la Constitución y leyes internas, e
inclusive, el legislador al expedir las normas jurídicas se sujeta al Estado Constitucional de
derechos y justicia”.
Al respecto, se debe observar que la Constitución Española habla de los derechos que todas
las personas tienen a obtener la tutela efectiva de los Jueces y Tribunales.
Artículo 24.
1. “Todas las personas tienen derecho a obtener la tutela efectiva de los jueces y
tribunales en el ejercicio de sus derechos e intereses legítimos, sin que, en ningún caso,
pueda producirse indefensión”.127
125
JESÚS GONZALES PÉREZ. El Derecho a la Tutela Jurisdiccional. (1989, P. 43-44). Citado por: JESÚS
MARÍA CASAL. Derechos Humanos, Equidad y Acceso a la Justicia. Ob. Cit. P. 26
126
JUAN CARLOS BENALCÁZAR GUERRÓN. El derecho a la tutela judicial efectiva. Ob. Cit. P. 60
127
Constitución de España. 1978. Disponible en:
http://noticias.juridicas.com/base_datos/Admin/constitucion.t1.html#a24
60
La doctrina expresa que existen cuatro manifestaciones de la tutela judicial efectiva, como lo
señala JOSÉ MARÍA ASENCIO MELLADO128, que se refiere al derecho de libre acceso a la
jurisdicción; derecho a una sentencia motivada; derecho de acceso a los recursos legalmente
establecidos; y, derecho a la ejecución de las sentencias o resoluciones judiciales firmes, que
son detallados a continuación:
“La Jurisdicción es una Función Pública del Estado que se ejerce a través de los Tribunales
para la resolución de litigios, mediante la aplicación de la Ley”130.
128
JOSÉ MARÍA ASENCIO MELLADO: Introducción al derecho procesal. Valencia: TirantloBlancha.
1997.P. 188
129
HÉCTOR FIX-ZAMUDIO. La Función del Poder Judicial en Sistemas Constitucionales Latinoamericanos.
Editorial Porrúa. 2008. P. 13.
130
HUGO ALSINA. Tratado Teórico-Práctico de Derecho Procesal Civil y Comercial. 2da.Edición T.I. Ediar,
Buenos Aires. 1963. P. 19 y ss.
61
Los Convenios y Pactos Internacionales de Derechos Humanos y el Constitucionalismo han
reconocido un conjunto de derechos y principios procesales que se fundamentan en la
necesidad del proceso penal o principio de jurisdiccionalidad. Por ello, esta garantía
jurisdiccional tiene un doble componente según la doctrina: “por un lado atiende a que la pena
se impone solo por los tribunales y, por otro, a que la pena se impone por los tribunales
exclusivamente por medio del proceso”131.
En igual sentido, FRANCISCO CHAMORRO BERNAL, expresa: que este derecho debe
garantizar el irrestricto o ejercicio del derecho de acción, parta lo que resulta evidente que es
necesario que el Estado deba proveer de órganos jurisdiccionales, dotar de normas procesales
así como de Jueces imparciales134. En consecuencia, está garantizado el acceso al órgano
jurisdiccional de justicia que tutela los derechos de los procesados y también de la víctima en
el sistema de justicia penal oral y acusatoria.
131
JUAN MONTERO AROCA. Principios del proceso Penal. Una explicación basada en la Razón. Trant lo
Blanch. Valencia. 1997. P. 21.
132
ALBERTO BINDER. Introducción al Derecho Procesal Penal. Ad-Hoc. Buenos Aires. 2002. P. 29.
133
CESAR SAN MARTIN CASTRO. Derecho procesal Penal, volumen I, 2da Edición actualizada. Grijley.
Lima. 2003. P.64.
134
FRANCISCO CHAMORRO BERNAL. La Tutela Efectiva. Bosh.Barcelona. 1994. P. 12-13
62
La tutela jurisdiccional tiene la obligación de dictar resolución motivada que ponga fin al
proceso judicial penal, civil, laboral y otros. Por tal motivo, PATRICIA ZIFFER, expresa que
la fundamentación de una sentencia condenatoria no se agota en la atribución del hecho
culpable a una persona, sino que se extiende a la motivación de la decisión sobre la pena que
se impone y su modo de ejecución 135. Por tanto, cuando hablamos de sentencias penales
condenatorias, el derecho a la tutela judicial y la obligación constitucional y legal de motivar,
es más riguroso, en virtud de que en la sentencia penal; el deber de motivo incluye la
obligatoriedad de fundamentar los hechos y la argumentación jurídica de la decisión de la
pena que se impone al imputado y la manera que se ejecuta individualmente cada procesado
señalado por el Órgano Jurisdiccional competente.
135
PATRICIA ZIFFER. “El deber de fundamentación de las decisiones Judiciales y la determinación de la
pena”. Publicado en Revista Persona de Ciencias Penales, Nº6 /1998. P. 842.
136
FRANCISCO CHAMORRO BERNAL. La Tutela Efectiva. Ob. Cit. P. 12-13
63
MARTIN CASTRO, quien sostiene: “las resoluciones judiciales firmes no son meras
declaraciones de intenciones si no que es necesario que se ejecuten obligatoriamente,
inclusive de modo coactivo en los casos en que voluntariamente no se cumpla el
pronunciamiento contenido en ella”137
Artículo XVIII.-
Toda persona puede ocurrir a los tribunales para hacer valer sus derechos.
Asimismo debe disponer de un procedimiento sencillo y breve por el cual la justicia
lo ampare contra actos de la autoridad que violen, en perjuicio suyo, alguno de los
derechos fundamentales consagrados constitucionalmente.138
Articulo 8.-
Toda persona tiene derecho a un recurso efectivo, ante los tribunales nacionales
competentes, que la ampare contra actos que violen sus derechos fundamentales
reconocidos por la constitución o por la ley
Artículo 10.-
Articulo 2
137
CESAR SAN MARTIN CASTRO. Derecho procesal Penal. Ob. Cit. P.64.
138
Declaración Americana de los Derechos y Deberes del Hombre. 1948. Artículo XVIII. Disponible en:
http://www.oas.org/es/cidh/mandato/Basicos/declaracion.asp
139
Declaración Universal de los Derechos Humanos. 1948. Artículo 8. Disponible en:
http://www.un.org/es/documents/udhr/
64
3. “Cada uno de los Estados Partes en el presente Pacto se compromete a garantizar
que:
a) Toda persona cuyos derechos o libertades reconocidos en el presente Pacto
hayan sido violados podrá interponer un recurso efectivo. (…)”140
Artículo 14
1.- “Todas las personas son iguales ante los tribunales y cortes de justicia. Toda
persona tendrá derecho a ser oída públicamente y con las debidas garantías por un
tribunal competente, independiente e imparcial, establecido por la ley, en la
substanciación de cualquier acusación de carácter penal formulada contra ella o
para la determinación de sus derechos u obligaciones de carácter civi”l141.
1. Toda persona tiene derecho a ser oída, con las debidas garantías y dentro de un
plazo razonable, por un juez o tribunal competente, independiente e imparcial,
establecido con anterioridad por la ley, en la sustanciación de cualquier acusación
penal formulada contra ella, o para la determinación de sus derechos y obligaciones
de orden civil, laboral, fiscal o de cualquier otro carácter. 142
140
Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos. 1976. Artículo 2, numeral 3, literal a. Disponible en:
http://www.ohchr.org/SP/ProfessionalInterest/Pages/CCPR.aspx
141
Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos. 1976. Artículo 14, numeral 1. Disponible en:
http://www.ohchr.org/SP/ProfessionalInterest/Pages/CCPR.aspx
142
Convención Americana de Derechos Humanos. 1969. Artículo 25. Disponible en:
https://www.oas.org/dil/esp/tratados_B-32_Convencion_Americana_sobre_Derechos_Humanos.htm
143
Convención Americana de Derechos Humanos. 1969. Artículo 25. Disponible en:
https://www.oas.org/dil/esp/tratados_B-32_Convencion_Americana_sobre_Derechos_Humanos.htm
65
4.4. Normas nacionales que regulan la Tutela Judicial Efectiva
“La Función Judicial, por intermedio de las juezas y jueces, tiene el deber
fundamental de garantizar la tutela judicial efectiva de los derechos declarados en la
Constitución y en los instrumentos internacionales de derechos humanos o
establecidos en las leyes, cuando sean reclamados por sus titulares o quienes
invoquen esa calidad, cualquiera sea la materia, el derecho o la garantía exigido.
Deberán resolver siempre las pretensiones y excepciones que hayan deducido los
litigantes sobre la única base de la Constitución, los instrumentos internacionales de
derechos humanos, los instrumentos internacionales ratificados por el Estado, la ley,
y los méritos del proceso.
Para garantizar la tutela judicial efectiva de los derechos, y evitar que las
reclamaciones queden sin decisión sobre lo principal, por el reiterado
pronunciamiento de la falta de competencia de las juezas y jueces que previnieron en
el conocimiento en la situación permitida por la ley, las juezas y jueces están
obligados a dictar fallo sin que les sea permitido excusarse o inhibirse por no
corresponderles”.145
144
Constitución de la República del Ecuador. Editorial Jurídica del Ecuador. 2008. Artículo 75. Disponible en:
http://www.pucesi.edu.ec/web/wp-content/uploads/2016/04/Constituci%C3%B3n-de-la-Rep%C3%BAblica-
2008.pdf
145
Código Orgánico de la Función Judicial. Editorial Jurídica del Ecuador. 2009. Artículo 23. Disponible en:
https://www.oas.org/juridico/mla/sp/ecu/sp_ecu-int-text-cofj.pdf
66
4.5. Jurisprudencia de la Corte Constitucional del Ecuador
67
intervendrá en la etapa final, cuando el delito se ha plasmado. Por ello surge el denominado
principio de minina intervención del derecho penal, y que se aplicará como la última ratio de
la política de control social del estado y teniendo su obligación de proteger los bienes
jurídicos más relevantes, frente a la vulneración de agresiones más graves; sin embargo, no
puede intervenir contra presuntas omisiones, irregularidades o ilegales mínimas de conductas
humanas transgresoras; “el derecho penal sólo debe intervenir en los casos de ataques muy
graves a los bienes jurídicos más importantes”.150
Según los estudiosos de la teoría penal, el origen del principio de mínima intervención se da
en la segunda mitad del siglo XVIII, especialmente en Francia y el Reino Unido, cuando nace
el liberalismo, considerado como una “doctrina política, caracterizada por la reivindicación de
un importante espacio de libertad en el ámbito personal, religioso, literario, económico, surge
el principio de mínima intervención del Estado”151.
En aquellos momentos históricos, los ideales del liberalismo en un Estado absoluto estaba
identificado por la concentración de poderes; limitados en manos de una persona llamada el
monarca. Por ello, “el Derecho penal era utilizado como norma de obligar a las personas que
obedecieran al soberano”152, el mismo que contenía leyes penales rígidas, su característica
era la de tener penas severas, como la pena de muerte, corporales, destierro, penas
pecuniarias, entre otras, en la que se desarrollaba un derecho penal en un estado absoluto con
concentración de poderes y abusos de los gobernantes. Por lo cual nace el liberalismo con la
revolución francesa, que proclamo una nueva concepción política y jurídica, que se
fundamenta en “la soberanía popular del imperio de la ley, del control y separación de los
poderes y de la defensa de la libertad”153. Es decir, en esa época “el derecho penal era
utilizado como forma de coaccionar a las personas a la obediencia al soberano”154
150
FRANCISCO MUÑOZ CONDE y MERCEDES GARCIA ARÓN. Derecho Penal, parte general. Quinta
Edición, Valencia, Ed. Tirant lo Blanch. 2002.P.72
151
REINHART MAURACH y HEINZ ZIPF. Derecho Penal: Parte General, Tomo I, Buenos Aires. Astrea,
1994. P.67.
152
SANTIAGO MIR PUIG. Derecho Penal: Parte General. Montevideo. B de F. 2004.P.113-114
153
IGNACIO FLORES PRADA. El Ministerio Fiscal en España. Valencia. Editorial. Tirant lo Blanch.
1999.P.103
154
PABLO MILANECE. El moderno derecho penal y la quiebra del principio de intervención mínima.
Disponible en: https://www.unifr.ch/ddp1/derechopenal/articulos/a_20080526_33.pdf.
68
Posteriormente, (1964) se publicó la obra titulada: “De los delitos y de las penas” de
CESARÉ BECCARIA, recoge los ideales del liberalismo en el derecho penal liberal, en la
que estable un sistema penal garantista que limita la intervención punitiva del Estado, se
señala que se debe respetar los derechos de las personas, que las penas deben ser humanas, se
suprime la tortura, impera la igualdad y legalidad ante la ley, la proporcionalidad entre el
delito y la pena, y la libertad como garantía del debido proceso” 155, que tenía el ciudadano
reconociéndose su dignidad humana basado en su libertad e igualdad ante la ley; Por tanto,
CESAR BECCARIA planteó lo que actualmente conocemos como el principio de
intervención mínima del Derecho Penal.
Además, según el principio de mínima intervención “el derecho penal debe ser la última ratio
de la política social del Estado para la protección de los bienes jurídicos más importantes
frente a los ataques más graves que puedan sufrir, la intervención del derecho penal en la vida
social debe reducirse a lo mínimo posible” 157. Es decir, “el principio de mínima intervención
es revelador, de un ideario de derecho penal mínimo”158; sin embargo, no quiere decir que no
se reconocerán la necesidad de la intervención penal, pero de una visión de la política penal
basada en un derecho penal mínima y excluye el derecho penal de máxima intervención por
violar los derechos fundamentales.
155
Cfr. CÉSAR BECCARIA. Tratados de los delitos y las penas, 16 ava edición actualizada, tomada de la
14ava edición facsímil, MéxicoPerru. 2006. P. 8-9. Ver También: ADELA GARCÍA BATARRITA.
Reinvindicacion o superación de programa Beccaria en AsuaBatarrita, Adela. Ed. El pensamiento penal de
Beccaria: su actualidad, Bilbao, Ed. Universidad de Deusto. 1990. P. 9-10.
156
RAUL GONZALEZ – SALAS CAMPOS. La teoría del bien jurídico en el Derecho Penal. México. Oxford.
2001.P.95.
157
JULIO ROBERTO SÁNCHEZ FRANCISCO. El principio de intervención mínima en el Estado Mexicano.
Ver: http://www.ijf.cjf.gob.mx/publicaciones/revista/23/r23_.pdf
158
GONZALO FERNANDEZ. “Culpabilidad y Pena”, Editorial B de F. Montevideo. Uruguay. 1995. P.49
69
Pues bien, cuando existan otros mecanismos diferentes a la norma del derecho penal, que sean
menos lesivos a los derechos individuales de las personas, serán las aplicables en un Estado
Constitucional de Derechos, justicia y democracia, en la que se implementará el bien jurídico
social protegido con el menor costo social posible. Por lo tanto, del principio de intervención
mínima se establecen los caracteres de subsidiaridad o ultima ratio y fragmentariedad del
derecho penal que a continuación lo explicamos:
El sistema del derecho penal tiene la función de proteger los bienes jurídicos considerados
fundamentales tomando en cuenta que las otras disciplinas del Derecho no garantizan la
solución del conflicto penal, a pesar de que los casos o hechos menos graves o leves deben
resolverse mediante otras disciplinas del derecho, y el sistema punitivo del Estado deberá
actuar cuando los ataques o (delitos) a los intereses de los bienes jurídicos tengan una alarma
social o connotación de gravedad que esté al margen de la mínima intervención; desde esa
óptica se explica el carácter de subsidiaridad del derecho penal, cuando es obligación del
sistema penal proteger y tutelar los bienes jurídicos fundamentales del ciudadano y sociedad,
por lo cual el derecho penal debe ser considerado como la última ratio del sistema penal.
La subsidiaridad permite acudir al derecho penal, como una manera de control social,
teniendo en cuenta que cuando los otros controles disciplinarios del derecho menos graves o
fracasan por ser insuficientes; por ello, se produce “cuando fracasan las demás barreras
protectoras del bien jurídico que deparan otras ramas del derecho” 159. En consecuencia, de
todas las ramas del ordenamiento jurídico, al derecho penal le compete la función de
establecer sanciones graves, cuando se afecta gravemente el bien jurídico, tutelado
penalmente.
El derecho penal debe ser considerado como la última ratio del sistema penal, es decir,
“cuando el ataque no sea muy grave o el bien jurídico no sea tan importante, o cuando el
conflicto pueda ser solucionado con decisiones menos radicales que las sanciones penales
propiamente dichas, deben ser aquellos los aplicables”160.
159
FRANCISCO MUÑOZ CONDE y MERCEDES GARCIA ARÓN. Derecho Penal Parte General. Ob. Cit. P.
72.
160
HERNAN HORMAZABEL MALARÉE y JUAN J. BUSTOS RAMIREZ. Nuevo Sistema de Derecho
Penal. Madrid.Trotta. 2004. P.34.
70
Finalmente, la doctrina sostiene que el derecho penal debe ser considerado como “un recurso
excepcionalísimo frente al conflicto social”161
El carácter fragmentario del derecho penal es otro de los principios de intervención mínima,
que se refiere a que el proceso de incriminación de la conducta delictiva en el momento de su
configuración legal por el órgano legislativo es limitada, en razón de que no todos los bienes
jurídicos deben ser protegidos y tutelado por el derecho penal punitivo, si no solo las más
importantes que se refieren a las conductas que más gravemente afecten a los bienes jurídicos
protegidos, en consecuencia, el carácter fragmentario implica limitar la aplicación del derecho
penal o los ataques más violentos contra bienes jurídicos protegidos más relevantes e
importantes del ciudadano y la sociedad.
Es necesario definir qué es bien jurídico de acuerdo a la doctrina. CLAUS ROXIN se refiere
al bien jurídico, expresando: -partiendo de las ideas de la ilustración -, los postulados
necesarios para posibilitar los fines del Estado, entendidos estos como la pacifica coexistencia
de la persona apoyada en los principios de libertad e igualdad; la protección de bienes
jurídicos; y, agrega el autor significa el impedimento de daños sociales162.
Respecto del Bien Jurídico, para una mejor comprensión, recurrimos a juristas reconocidos,
como MANUEL OSSRIO: “que presenta particular importancia en el ámbito del Derecho
Penal, porque cada uno de los delitos se entiende que atenta contra el bien que la legislación
protege: vida, propiedad, familia, honestidad, honor, seguridad nacional, administración
pública... Pero, en la doctrina, existen profundas diferencias acerca de cuál es el bien jurídico
protegido frente a la comisión de los delitos o de algunos de ellos. Fuera de su aspecto
penalistico, se debe entender que un bien jurídico es el que se encuentra amparado dentro de
todos los aspectos del Derecho”. 163
161
JUAN J. BUSTOS RAMIREZ y HERNAN HORMAZÁBAL MALARÉE. Lecciones de Derecho Penal.
Volumen I. Madrid. Ed. Trotta. 1997. P. 65-66
162
CLAUS ROXIN. Problemas actuales de Dogmática Penal. 1. ra Edición. Perú. Ara Editores. 2004. P.23
163
MANUEL OSSORIO. Diccionario de Ciencias Jurídicas, Políticas y Sociales. 1973. 33 ava Edición
actualizada, corregida y aumentada por GUILLERMO CABANELLAS DE LAS CUEVAS. Editorial
Heliasta S.R.L. 2008. P. 125.
71
FRANCISCO MUÑOZ, al referirse a bien jurídico, afirma: “… presupuestos existenciales
que, en tanto, son de utilidad para el hombre, se denominan “bienes” y concretamente, en
tanto son objeto de protección por el derecho, bienes jurídicos. Así, bienes jurídicos son
aquellos presupuestos que la persona necesita para la autorización en la vida social”164
164
FRANCISCO MUÑOZ CONDE. Introducción al Derecho Penal. Segunda Edición. Editorial IB de f.
Montevideo-Buenos Aires, 2001, P. 90.
165
Constitución de la República del Ecuador, 2008. Articulo 1 y 195. Disponible en:
http://www.pucesi.edu.ec/web/wp-content/uploads/2016/04/Constituci%C3%B3n-de-la-Rep%C3%BAblica-
2008.pdf
72
La intervención penal está legitimada siempre y cuando sea estrictamente necesaria
para la protección de las personas. Constituye el último recurso, cuando no son
sufrientes los mecanismos extrapenales.166
166
Código Orgánico Integral Penal, 2014. Articulo 3 Disponible en: http://www.justicia.gob.ec/wp-
content/uploads/2014/05/c%C3%B3digo_org%C3%A1nico_integral_penal_-_coip_ed._sdn-mjdhc.pdf
167
Corte Constitucional de Colombia. Sentencia C-365/12. Disponible en:
http://www.corteconstitucional.gov.co/RELATORIA/2012/C-365-12.htm
73
CAPÍTULO III
LOS DERECHOS HUMANOS Y JUSTICIA PENAL
74
Los derechos humanos tienen un carácter universal 168 porque es para todas las personas.
Mujeres, hombres, niños, niñas y adolescentes, jóvenes y adultos mayores tienen derechos en
todo tiempo y lugar. Son absolutos porque su respeto se puede reclamar a cualquier autoridad
o persona; inalienable por ser irrenunciables; inviolables porque ninguna autoridad o persona
puede actuar en su contra, al atentar, lesionar o destruir sus derechos; imprescriptible, porque
no prescriben con el transcurso del tiempo; son indisolubles por ser un conjunto de derechos;
indivisibles porque no tienen jerarquía y están relacionados entre sí los derechos. También
son progresivos, en virtud del carácter evolutivo de los derechos y libertades; también, tienen
el carácter de irrenunciables por ser los derechos irrevocables; es decir, no se pueden resumir
los derechos o negociarlos; y son innatos o inherentes a las personas porque nacemos con
derechos; finalmente, los derechos humanos son obligatorios para el Estado o personas de
respetarlos; así no hayan sido reconocidos por la legislación.
El jurista español ANTONIO ENRIQUE PÉREZ LUÑO sostiene que derechos humanos son
un “conjunto de facultades e instituciones que, en cada momento histórico, concretan las
exigencias de la dignidad, la libertad y la igualdad humanas, las cuales deben ser reconocidas
positivamente por los ordenamientos jurídicos a escala nacional e internacional” 169. Los
derechos humanos, según el Tribunal Constitucional Peruano, son “(…) la expresión jurídica
de un conjunto de facultades y libertades humanas que encarnan la necesidad y aspiraciones
de todo ser humano, con el fin de realizar una vida digna, racional y justa. Es decir que con
independencia de las circunstancias sociales y de las diferencias accidentales entre las
personas, los derechos humanos son bienes que portan los seres humanos por su condición de
tales.”170.
168
Véase: Característicasdelosderechoshuamnos.losderechoshuamanosblogspot.com/
169
ANTONIO ENRIQUE PÉREZ LUÑO. Derechos Humanos, Estado de Derechos y Constitución. Tecnos.
Madrid. 2001. P. 48.
170
DOMINGO GARCIA BELAUNDE. Diccionario de Jurisprudencia Constitucional. Editora Jurídica Grijley.
Lima. 2009. P. 182-183.
75
prevista; asimismo, por una norma jurídica positiva como presupuesto de su idoneidad para
ser titular de situaciones y/o autor de los actos que son ejercicio de estas”171.
En efecto, los Derechos Humanos son principios de carácter jurídico y valores relacionados
con la justicia, igualdad, libertad, dignidad, equidad y paz, que sirven de fundamento de los
derechos humanos de las ciudadanas y ciudadanos y que actualmente son reconocidos y
protegidos por el Derecho Internacional de los Derechos Humanos, y están
constitucionalizados en las Constituciones y legislación secundaria de los Estados con el
objetivo de proteger la dignidad de la persona frente a los abusos del poder, de la violencia, la
tortura, la desigualdad, la pobreza, la injusticia. Por ello, es necesario conocerlos y aplicarlos
para su judicialidad y garantía efectiva y los mecanismos y organismos existentes para su
reconocimiento y protección nacional e internacional.
La aplicación de los derechos humanos es de manera directa e inmediata a todos las y los
ciudadanos, sin importar su condición, género, raza, edad, ideas (políticas, sociales o
culturales), nacionalidad, religión. Todos los seres humanos tienen la misma dignidad ni nadie
puede ser excluido, discriminado, desconocerle del goce de sus derechos fundamentales, tanto
en el ámbito internacional como en el ámbito nacional, para la tutela eficaz de los derechos,
mediante la adopción de medidas necesarias, con el objeto de evitar o cesar una amenaza
respecto de un derecho o preservar el derecho o el interés, cuya protección y tutela se solicita.
Para efectos de la futura resolución o sentencia en un proceso constitucional, se pide medidas
cautelares ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) o las medidas
provisionales que dicta la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH).
171
LUIGI FERRAJOLI. Derechos Fundamentales, en los fundamentos de los derechos fundamentales. Trotta.
Madrid. 2005. P. 19.
172
NORBERTO BOBBIO. La era de los derechos, en El tercero ausente. Madrid. Cátedra. 1997. P. 154-173
173
RAMIRO AVILA SANTAMARIA. La (IN) Justicia Penal en la Democracia Constitucional de Derechos.
Una mirada desde el garantísmo penal. Colección Profesional Ecuatoriana. Universidad Andina Simón
Bolívar Ecuador- Quito 2013. P 33
76
El Derecho Internacional de los Derechos Humanos 174 en su desarrollo histórico y evolución
se consolidó y fortaleció en virtud de que se encuentran reconocidos por instrumentos
internacionales como establece un conjunto de normativas internacionales, procedimientos e
instituciones que todo Estado tiene compromiso de respetar los derechos humanos y de
garantizar su goce y disfrute. Además, los Estados partes y la comunidad internacional vigilan
su cumplimiento de esas obligaciones; por ello, la aprobación de la Declaración Universal de
los Derechos Humanos, que realizó la Asamblea General de las Naciones Unidas, en 1948.
Posteriormente, con base en este marco jurídico, se suscribieron varios instrumentos de
carácter regional: tratados, pactos, convenios, protocolos, que integran el sistema de
protección de los Derechos Humanos que tienen como finalidad reconocer y proteger a la
dignidad de persona humana en el ámbito internacional y nacional. La doctrina, se refiere a
los derechos humanos o derechos fundamentales, de la manera siguiente:
Sin embargo, el Derecho Penal-Procesal Penal es de carácter nacional, por tal motivo cada
Estado ha implementado en su legislación penal ciertas conductas que son consideradas
delictivas en unos países y en otros no tienen esa condición. No obstante, a futuro podría
darse una organización en concordancia de las legislaciones penales de acuerdo con la
globalización. Por lo tanto, los derechos humanos son relevantes y determina los límites del
Derecho Penal que debe proteger los derechos fundamentales y consecuentemente tienen
límites por los derechos humanos para que la protección no sea arbitrario o lesiva a los
ciudadanos; por ello, se habla de un Derecho Penal mínimo; y de allí, que existe una
vinculación de los derechos humanos y los sistemas procesales y que tradicionalmente se
diferencia entre un sistema inquisitivo (es escrito, clandestino y secreto, sin participación de la
persona y presume la culpabilidad) y otro acusativo (predomina la oralidad, es público,
abierto, hay participación de la persona y se presume la inocencia).
Los Tratados Internacionales relacionados a los derechos humanos tienen por su contenido
sus propias características que la distinguen de los otros tratados tradicionales que se celebran
174
La Doctrina señala que el desarrollo del derecho internacional de los derechos humanos es a partir de la
Segunda Guerra Mundial; y se lo debe entender como la “rama del derecho internacional que se ocupa del
establecimiento y promoción de los derechos humanos y de las protección de los individuos y grupos de
individuos en el caso de violaciones gubernamentales de derechos humanos. Véase en: TOMÁS
BUERGENTHAL. Manual Internacional de Derechos Humanos. IIDH. 2007. P. 9.
77
entre los Estados Partes en beneficio mutuo. Por lo tanto, los Estados al ratificar tratados de
derechos humanos obtienen obligaciones, regulados por el derecho internacional, diferentes a
los otros tratados tradiciones, que no tienen relación con la protección de los derechos
humanos175. Al respecto, la Corte Interamericana, basada en la opinión consultiva de la Corte
Internacional de Justicia sobre la reservas a la Convención sobre genocidio 176, señala: “Al
aprobar estos tratados sobre derechos humanos, los Estados se someten a un orden legal
dentro del cual ellos, por el bien común, asumen varias obligaciones no en relación con otros
Estados, sino hacia los individuos bajo su jurisdicción”177.
En tal sentido, la Convención de Viena al tratar sobre la definición del Derecho de los
Tratados, señala en su numeral 2, literal a):
Se entiende por tratado un acuerdo internacional celebrado por escrito entre Estados y
regido por el derecho internacional, ya conste en un instrumento único o en dos o más
instrumentos conexos y cualquiera que sea su denominación particular. 179
175
De acuerdo con la Corte Interamericana de Derechos Humanos: en su opinión Consultiva N° 2, relativa al
efecto de las Reservas sobre la entrada en vigor de la Convención Americana sobre Derechos Humanos (Art.
74 y 75) en el párrafo 29, “los tratados sobre derechos humanos, son aquellos cuyo objetivo y fin son la
protección de los seres humanos, independientemente de su nacionalidad, tanto frente a su propio Estado
como frente a los otros Estados contratantes.”.
176
Corte International de Justicia. Reservations to the Convention on the Preventión and Punnishment of the
crime of genocide, OpiniónCnsultiva, CIJ.Report 1951, P. 15.
177
Opinión Consultiva, N° 2, sobre el Efecto de las Reservas sobre la Entrada en vigencia de la Convención
Americana sobre Derechos Humanos (artículo 74 y 75), Párrafo 29.
178
MIGUEL ANGEL DE LOS SANTOS. Derechos Humanos: Compromisos Internacionales, Obligaciones
Nacionales. Biblioteca Jurídica Virtual de la UNAM. P. 1. Disponible en:
http://www.juridicas.unam.mx/publica/rev/refjud/cont/12/cle/cle13.htm
179
ERNESTO REY CANTOR y ÁNGELA MARGARITA REY ANAYA. Medidas Provisionales y Medidas
Cautelares en el Sistema Interamericano de Derechos Humanos. Editorial Temis. Bogotá- Colombia. 2005. P.
52.
78
El autor español JUAN ANTONIO CARRILLO SALCEDO afirma: “Tratado es todo acuerdo
de voluntades entre dos o más sujetos de derecho internacional, destinado a producir efectos
jurídicos regulados por el derecho internacional”180.
Según la doctrina, son sujetos de Derecho Internacional de los Derechos Humanos de los
Estados Partes y las Organizaciones Internacionales, por ejemplo, la Organización de las
Naciones Unidas, 1945; la Declaración Universal de Derechos Humanos, 1948; el Consejo de
Europa, 1949; Convenio Europeo de Derechos Humanos, 1950; la Organización de Estados
Americanos, 1948; la Declaración Americana de los Derechos del Hombre y del Ciudadano,
1948 y otros. Es decir, surgen importantes sistemas de vigilancia, control y protección de
Derechos Humanos.
29. La Corte debe enfatizar, sin embargo, que los tratados modernos sobre derechos
humanos, en general, y, en particular, la Convención Americana, no son tratados
multilaterales de tipo tradicional, concluidos en función de un intercambio recíproco de
derechos, para el beneficio mutuo de los Estados contratantes. Su objeto y fin son la
protección de los derechos fundamentales de los seres humanos, independientemente de su
nacionalidad, tanto frente a su propio Estado como frente a los otros Estados contratantes. Al
aprobar estos tratados sobre derechos humanos, los Estado se someten a un orden legal
dentro del cual ellos, por bien común, asumen varias obligaciones, no en relación con otros
Estados, sino hacia los individuos bajo su jurisdicción. El carácter especial de estos tratados
ha sido reconocido, entre todos, por la Comisión Europea de Derechos Humanos cuando
declaró que las obligaciones asumidas por las Altas Partes Contratantes en la Convención
(Europea) son esencialmente de carácter objetivo, diseñadas para proteger los derechos
fundamentales de los seres humanos de violaciones de parte de las Altas Partes Contratantes
en vez de crear derechos subjetivos y recíprocos entre las Altas Partes Contratantes (“Austria
vs. Italy”, Application Nº 788/60, EuropeanYearbook of HumanRights (1961), vol. 4, pág.
140).
180
JUAN ANTONIO CARRILLO SALCEDO. Curso de Derecho Internacional Público. Madrid. Edit. Tecnos.
1994. P. 103.
79
público común de las democracias libres de Europa con el Objetivo de salvaguardar su
herencia común de tradiciones políticas, ideas régimen de derecho (Ibíd., pág. 138). 181
165. La primera obligación asumida por los Estados Parte, en los términos del citado artículo,
es la de <<respetar>> los derechos y libertades reconocidos en la Convención. El ejercicio de
la función pública tiene unos límites que derivan de que los derechos humanos son atributos
inherentes a la dignidad humana y, en consecuencia, superiores al poder del Estado [...] 184.
181
Véase en: CARLOS M. AYALA CORAO. Las Consecuencias de la Jerarquía Constitucional de los Tratados
Relativos a los Derechos Humanos. 2010. P. 8.
182
Corte Interamericana de Derechos Humanos. Caso Cantoral Benavides contra Perú, sent. 3 septiembre 1998,
excepciones preliminares, párrafo 46.
183
Véase en: ERNESTO REY CANTOR y ÁNGELA MARGARITA REY ANAYA. Medidas Provisionales y
Medias Cautelares en el Sistema Interamericano de Derechos Humanos. Ob. Cit. P. 60.
184
Véase en: ERNESTO REY CANTOR y ÁNGELA MARGARITA REY ANAYA. Medidas Provisionales y
Medias Cautelares en el Sistema Interamericano de Derechos Humanos. Ob. Cit. P. 65.
80
“Cuando decida que hubo violación de un derecho o libertad protegidos en esta Convención,
la Corte dispondrá que se garantice al lesionado en el goce de su derecho o libertad
conculcados. Dispondrá así mismo, si ello fuere procedente, que se reparen las consecuencias
de la medida o situación que ha configurado la vulneración de estos derechos y el pago de
una justa indemnización a la parte lesionada”185.
Hay que considerar como fundamento las fuentes del Derecho Internacional Público para
tomar en cuenta las medidas cautelares dictadas por la Comisión Interamericana de Derechos
Humanos y que tiene vigencia en el ámbito del Derecho Interno.
Articulo 41.-
Asimismo, el Art. 51 del Pacto de San José de Costa Rica determina que el término de un
proceso, la Comisión puede formular recomendaciones a un Estado Parte para que resarza a
las víctimas de violaciones de derechos humanos.
185
Convención Americana sobre Derechos Humanos, artículo 63, numeral 1. Véase en: ERNESTO REY
CANTOR y ÁNGELA MARGARITA REY ANAYA. Medidas Provisionales y Medias Cautelares en el
Sistema Interamericano de Derechos Humanos. Ob. Cit. P. 169. Disponible en:
https://www.oas.org/dil/esp/tratados_B-32_Convencion_Americana_sobre_Derechos_Humanos.htm
186
Corte Interamericana de Derechos Humanos. Caso de las Masacres de Ituango contra Colombia, sent. de
fondo y de reparaciones, 1º julio 2006, párrafo 346. Véase en: ERNESTO REY CANTOR y ÁNGELA
MARGARITA REY ANAYA. Medidas Provisionales y Medias Cautelares en el Sistema Interamericano de
Derechos Humanos. Ob. Cit. P. 169.
187
TARA MELISH. La Protección de los Derechos Económicos, Sociales y Culturales en el Sistema
Interamericano de Derechos Humanos. Manual Para la Presentación de Casos. Anexo C.- Convención
Americana Sobre Derechos Humanos. Quito-Ecuador. 2003. P. 503.
81
Artículo. 51.-
2. La Comisión hará las recomendaciones pertinentes y fijará un plazo dentro del cual el
Estado debe tomar las medidas que le competan para remediar la situación examinada 188
188
Convención Americana de los Derechos Humanos. Artículo 51. Disponible en:
https://www.oas.org/dil/esp/tratados_B-32_Convencion_Americana_sobre_Derechos_Humanos.htm
189
Corte Interamericana de Derechos Humanos. Caso Layza Tamayo. Sentencia del 17 de septiembre de 1997.
Serie e, Nº 33. Párrafos 80 y 81.
190
Corte Interamericana de Derechos Humanos. Caso Velásquez Rodríguez, sentencia del 29 de julio de 1988,
Serie C, núm. 4. Relacionado con la desaparición forzada de Manfredo Velásquez Rodríguez. Párr. 166.
Disponible en: http://www.juridicas.unam.mx/publica/rev/refjud/cont/12/cle/cle13.htm
82
mismo año191. La Carta no define qué son “derechos humanos o derechos fundamentales”, sin
embargo, el Preámbulo y los artículos 1, 13, 55, 56, 62, 68 y 76 contiene lo relacionado con
los derechos humanos.
Sin embargo, los Estados que voluntariamente ratifican los Tratados Internacionales de
Derechos y hacen parte de ellos están obligados a armonizar su legislación interna a los
referidos tratados y a respetar, proteger y garantizar los derechos humanos establecidos en los
Tratados en mención.
191
ANTONIO SALAMANCA SERRANO y ALEJANDRO ROSILLO MARTINEZ. Derechos Humanos de
los Pueblos y Derechos de la Naturaleza. GENITH Tomo I. Editorial Jurídica del Ecuador. Quito. 2012. P. 3.
192
Declaración Universal de los Derechos Humanos. Adoptada y Proclamada por la Resolución de la
Asamblea General 217 A (iii). París. 10 de Diciembre de 1948. Disponible en:
http://www.oas.org/es/cidh/mandato/Basicos/declaracion.asp
193
MARY GENITH VITERI AGUIRRE. Derecho Internacional de los Derechos Humanos. P. 25. Derechos
Humanos y Estado Constitucional. MARY VITERI, DIEGO ANDRADE ARMAS, IVAN CADAVIL y
ROLANDO VÍCTOR GUERRERO. Colección Derecho Constitucional Nº 1. Editorial Universitaria.
Publicaciones UNIMAS. 2010. P. 25.
83
d) Procedimientos Especiales.
e) Órganos de los Tratados (Comités).
Sistema Europeo:
a) Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH).
b) Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE).
c) Comisión Europea.
Sistema interno:
a) Corte Interamericana de Derechos Humanos.
b) Comisión Interamericana de Derechos Humanos.
Sistema Africano:
a) Corte Africana de Derechos Humanos.
b) Comisión Africana de Derechos Humanos.
84
Estados contratantes. Al aprobar estos tratados sobre derechos humanos, los Estados se
someten a un orden legal dentro del cual ellos, por el bien común asumen varias obligaciones,
n en relación con otros Estados, sino hacia los individuos bajo su jurisdicción. 195
Gráfico 1
Instrumentos Universales de los Derechos Humanos196
Sigla Instrumento Órgano de vigilancia Fecha
Convención International sobre la Eliminación Comité para la Eliminación de la
ICERD 21dic65
de todas las Formas de Discriminación Racial Discriminación Racial(CERD)
Pacto Internacional de Derechos Civiles y Comité de Derechos
ICCPR 16dic66
Políticos Humanos (HRC)
Pacto Internacional de Derechos Económicos, Comité de Derechos Económicos,
ICESCR 16dic66
Sociales y Culturales Sociales y Culturales (CESCR)
Comité para la Eliminación de la
Convención sobre la eliminación de todas las
CEDAW Discriminación contra la 18dic79
formas de discriminación contra la mujer
Mujer (CEDAW)
Convención contra la Tortura y Otros Tratos o
CAT Comité contra la Tortura (CAT) 10dic84
Penas Crueles, Inhumanos o Degradantes
Comité de los Derechos del
CRC Convención sobre los Derechos del Niño 20nov89
Niño (CRC)
Convención internacional sobre la protección
Comité de Derechos de los
ICRMW de los derechos de todos los trabajadores 18dic90
Trabajadores Migratorios (CMW)
migratorios y de sus familiares
Convención internacional para la protección
Comité contra las Desapariciones
CPED de todas las personas contra las 20dic06
Forzadas(CED)
desapariciones forzadas
Convención sobre los derechos de las Comité sobre los Derechos de las
ICRPD 13dic06
personas con discapacidad Personas con Discapacidad (CRPD)
ICCPR- Protocolo Facultativo del Pacto Internacional Comité de Derechos
16dic66
OP1 de Derechos Civiles y Políticos Humanos (HRC)
Segundo Protocolo Facultativo del Pacto
ICCPR- Comité de Derechos
Internacional de Derechos Civiles y Políticos, 15dic89
OP2 Humanos (HRC)
destinado a abolir la pena de muerte
Protocolo Facultativo de la Convención sobre Comité para la Eliminación de la
OP-
la eliminación de todas las formas de Discriminación contra la 06oct99
CEDAW
discriminación contra la mujer Mujer (CEDAW)
Protocolo facultativo de la Convención sobre
OP-CRC- Comité de los Derechos del
los Derechos del Niño relativo a la 25may00
AC Niño (CRC)
participación de niños en los conflictos
195
JAVIER LLOBET RODRIGUEZ. Derechos Humanos y Justicia Penal. Costa Rica. 2007. Disponible en:
http://www.corteidh.or.cr/tablas/24328.pdf
196
Disponible en: http://www.derechos.org/nizkor/ley/tratado.html
85
armados
Protocolo facultativo de la Convención sobre
OP-CRC- los Derechos del Niño relativo a la venta de Comité de los Derechos del
25may00
SC niños, la prostitución infantil y la utilización de Niño (CRC)
niños en la pornografía
Protocolo facultativo de la Convención contra
OP-CAT la Tortura y Otros Tratos o Penas Crueles, Comité contra la Tortura(CAT) 18dic02
Inhumanos o Degradantes
Protocolo facultativo de la Convención sobre
Comité sobre los Derechos de las
OP-CRPD los derechos de las personas con 12dic06
Personas con Discapacidad (CRPD)
discapacidad
Protocolo facultativo del Pacto Internacional
ICESCR- Comité de Derechos Económicos,
de Derechos Económicos, Sociales y 10dic08
OP Sociales y Culturales (CESCR)
Culturales
El Comité de Derechos Humano declaró al concluir que había sido violado el Art. 6 del Pacto,
“No hay pruebas de que el comportamiento de la policía fuera necesario para defenderse a sí
misma o a terceros, ni de que fuera necesario para arrestar a estas personas o impedir que se
197
Véase: Derechos Humanos en el Sistema Penal Acusatorio, versión actualizada 2012. Instituto Mexicano de
Derechos Humanos y Democracia, A.C. P. 21.
http://www.sitios.scjn.gob.mx/codhap/sites/default/files/acc_ref/ReformaPenal2014.pdf
86
escaparan” y agrega, por lo tanto, la muerte de la señora Suarez de Guerrero se consideró
desproporcionada con respecto a la necesidad de hacer respetar la ley en las circunstancias del
caso”198
El Sistema Interamericano de Derechos Humanos está constituido por todos los Estados que
integran la Organización de Estados Americanos (OEA). La OEA 199 es un organismo regional
que se creó en 1948, en Bogotá, Colombia, en el marco de la Novena Conferencia
Internacional de los Estados Americanos. Tiene como función primordial velar por la paz y la
justicia, fomentar la solidaridad y defender la soberanía, el respeto, protección y efectividad
real de los Derechos Humanos en los Estados Americanos. “Desde su creación los Estados
Americanos han adoptado una serie de instrumentos internacionales que se han convertido en
la base normativa de un sistema regional de promoción y protección de los derechos humanos,
al reconocer estos derechos, establecer obligaciones tendientes a su promoción y protección, y
crear órganos destinados a velar por su observancia”200.
198
Caso: SUAREZ DE GUERRERO C. Colombia (45/79. P. 13.3). Disponible en:
http://www.omct.org/files/2006/11/3979/handbook4_esp_03_parte3.pdf
199
Los Estados Miembros de la OEA, son: Antigua y Barbuda, Argentina, Bahamas, Barbados, Belice, Bolivia,
Brasil, Canadá, Chile, Colombia, Costa Rica, Cuba, Dominica, Ecuador, EL Salvador, Estados Unidos,
Grenada, Guatemala, Guyana, Haití, Honduras, Jamaica, México, Nicaragua, Panamá, Paraguay, Perú,
República Dominicana, Santa Lucía, San Kitts y Nevis, San Vicente y las Granadinas, Suriname, Trinidad y
Tobago, Uruguay y Venezuela. Véase en: www.cidh.org
200
Comisión Interamericana de Derechos Humanos. Documentos Básicos en Materia de Derechos Humanos en
el Sistema Interamericano. Véase en: Sitio Oficial de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos.
Véase en: www.cidh.org Ob. Cit. P. 1.
201
EDUARDO JIMÉNEZ DE ARÉCHAGA. La Convención Interamericana de Derechos Humanos como
derecho interno. Fundación de Cultura Universitaria. Montevideo- Uruguay. 1988. P. 55.
87
Al respecto, de la Novena Conferencia Internacional de Estados Americanos, que adoptó la
Carta de la OEA, surgió la Declaración Americana de los Derechos y Deberes del Hombre, en
1948.
Es notorio que las peticiones individuales se aplican tanto a los Estados partes en la
Convención Americana como a los otros miembros de la OEA que no participan en ella. En
cuanto a los primeros, la Convención Americana sobre Derechos Humanos señala:
Artículo. 44
202
JULIO PRADO VALLEJO. Documentos Básicos de Derechos Humanos (Civiles y Políticos). Editorial
Casa de la Cultura Ecuatoriana. Quito-Ecuador. 1985. P. 84 a 114. Ver: MIREYA CASTILLO DAUDI.
Manuales de Derecho Internacional de los Derechos Humanos. Ob. Cit. P. 60 y ss.
203
Disponible en:www.iej.org/img/articula-nikken-esp.pof/artículo.-Nicken_esp.Pdf.
204
Convención Americana sobre Derechos Humanos. Artículo 44.
88
Efectivamente, queda establecido que la Convención Americana, según su Artículo 44,
determina la regla procesal de que el único titular de los derechos es el ciudadano. La
Comisión Interamericana de Derechos Humanos señala que el peticionario tiene derecho a
que, en el trámite del caso, se agoten todos los mecanismos de protección de la Convención
Americana sobre Derechos Humanos.
De igual manera, la Corte Interamericana de Derechos Humanos señala que las víctimas
“podrán presentar sus solicitudes, argumentos y pruebas en forma autónoma durante todo el
proceso”, de acuerdo con el Artículo 23 de su Reglamento.
205
Adoptado el 2 de Mayo de 1948, OEA, Res XXX, Novena Conferencia de los Estados Americanos, OEA
Doc. OEA/Ser. L/V/14. Rev. XX (1948).
206
Adoptado el 22 de Noviembre de 1969, 1144 U.N.T.S (Serie sobre tratados de la ONU) 123, O.A.S.T.S.
(Serie sobre Tratados de la OEA) Nº 36. P. 1, OEA/ Ser. L/V/II 23 doc. Rev. 2.9. I.L.M 673 (1970) entra en
vigor el 18 de Julio de 1978. Ver SARA MELISH. La protección de los Derechos Económicos, Sociales y
Culturales en el sistema Interamericano de Derechos Humanos CDES. Quito-Ecuador. 2003. P. 11.
207
Adoptado el 17 de Noviembre de 1988 y entró en vigencia el 16 de Noviembre de 1999.
89
El Sistema Interamericano cuenta con Tratados específicos de Protección de Derechos
Humanos, como la Convención Interamericana para Prevenir y Sancionar la Tortura, 1985208;
la Convención Interamericana sobre Desaparición Forzada de Personas, 1994209; el Protocolo
Relativo a la Abolición de la Pena de Muerte, 1990210; la Convención para la Prevención,
Sanción y Erradicación de la Violencia Contra la Mujer, 1994211; la Convención
Interamericana para la Eliminación de todas las formas de Discriminación contra las Personas
con Discapacidad, 1999. 212
La Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH) en el caso Castillo Pietruzzi y otras
excepciones preliminares, al referirse a la protección internacional de los derechos humanos,
señala:
El derecho de petición individual constituye, en suma, la piedra angular del acceso de los
individuos al mecanismo de protección de la Convención Americana. 213
208
Adoptada el 9 de Diciembre de 1985 y entró en vigencia el 28 de Febrero de 1987.
209
Adoptada (Brasil) el 9 de Junio de 1994 y entró en vigor el 28 de Marzo de 1996.
210
Adoptado durante la Asamblea General de la OEA, efectuada en Asunción, Paraguay, en 1990.
211
Adoptado en Brasil, el 9 de Junio de 1994 y entró en vigor el 5 de Marzo de 1995.
212
Adoptada en Guatemala, el 7 de Junio de 1999 y que entró en vigor el 14 de Septiembre del 2001.
213
Corte Interamericana de Derechos Humanos: Caso Castillo Pietruzzi y otros excepciones preliminares.
Sentencia del 4 de Septiembre de 1998. Serie C, No. 41. Voto del Juez A.A. CANCUDO TRINDADE, Párr.
3.
90
3.1. La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), 1959
Está conformada por siete (7) miembros que duran cuatro (4) años y pueden ser reelegidos
por una sola vez.215 Se reúne en sesiones ordinarias y especiales varias veces al año 216; su
Estatuto y Reglamento la definen como un Órgano de la Organización de los Estados
Americanos (Art. 1).217
Asimismo, el procedimiento para tramitar las peticiones que contengan denuncias o quejas,
asuntos y solicitudes de medidas cautelares no es de carácter jurisdiccional y, como lo
sostiene el jurista mexicano HÉCTOR FIX ZAMUDIO, “el procedimiento ante la Comisión
no tiene carácter jurisprudencial [...] se sigue una investigación preliminar [...]. La
214
CÉSAR DUQUE. Ecuador ante el Sistema Interamericano. ¿Estado Constitucional de Derechos?. Programa
Andino de Derechos Humanos, Compilador Informe sobre Derechos Humanos Ecuador 2009. Universidad
Andina Simón Bolívar. Ediciones Abya- Yala. Quito- Ecuador. 2010. P. 465.
215
LA CARTA DE LA OEA, en su Artículo 53, literal e, en la enumeración de los órganos principales de la
organización incluye a la Comisión.
216
Reglamento de la Comisión, supra nota 45. Artículo 14.
217
Ver Estatuto de la Comisión, supra nota 88. Artículos 2. 1,6.
218
Ver: JUAN CARLOS HITTERS. Derecho Internacional de los Derechos Humanos. Tomo II. Sistema
Interamericano. Buenos Aires- Argentina. Ediar. S.F. 2005. P. 254. RODOLFO PIZA ESCALANTE. La
Jurisdicción Contenciosa del Tribunal Interamericano de Derechos Humanos. P. 86; y, HÉCTOR GROS
ESPINEL. Procedimiento Contencioso ante la Corte Interamericano de Derechos Humanos en revista
Uruguaya de Derecho Procesal. Montevideo- Uruguay. 1955. P. 113-55.
219
ERNESTO REY CANTOR y ÁNGELA MARGARITA REY ANAYA. Medidas Provisionales y Medidas
Cautelares en el Sistema Interamericano de Derechos Humanos. Ob. Cit. P. 33.
91
culminación del procedimiento, cuando no se ha llegado a una solución amistosa, no consiste
en una resolución, sino en uno o dos informes”220.
Visitas in situ.
Informe por país y Temáticas.
Celebración de Audiencias.
Relatorías Temáticas.
Denuncias Individuales.
220
HÉCTOR FIX ZAMUDIO. Lineamientos procesales de los procedimientos ante la Corte Interamericana de
Derechos Humanos en la Corte y el Sistema Interamericano de Derechos Humanos, San José de Costa Rica.
Editor Rafael Nieto. 1994. P. 163.
221
CÉSAR DUQUE. Ecuador ante el Sistema Interamericano. ¿Estado Constitucional de Derechos? Programa
Andino de Derechos Humanos, Compilador Informe sobre Derechos Humanos Ecuador 2009. Ob. cit. P.
466.
222
ENMA MAZA CALVIÑO Y JUAN LOPEZ VILLANUEVA. Editorial Gabriela Monticelli. Derechos
Humanos en el Sistema Penal Acusatorio.México2012. Ob. Cit.p.21
92
Gráfico 2
SISTEMA INTERAMERICANO DE
PROTECCIÓN DE LOS DERECHOS HUMANOS
Comisión Interamericana
de Derechos Humanos
Corte Interamericana
de Derechos Humanos
93
agotamiento de los procedimientos previstos en los Art. 48, 49 y 50 de la Convención
Interamericana sobre Derechos Humanos.
Según su opinión consultiva, la Corte IDH representa, además, el órgano con mayor poder
conminatorio para garantizar la efectiva aplicación de la Convención.226
La Corte IDH, oficialmente tiene su sede en San José, de Costa Rica se define como una
institución judicial autónoma cuyo objetivo es la interpretación y aplicación de las
disposiciones de la Convención Americana.227
Gráfico 3
ATRIBUCIONES Y FUNCIONES
Gráfico 4
COMPETENCIA
95
Fuente: La Protección de los Derechos Económicos, Sociales y Culturales.228
Diseño: Propio del Autor
21 (…) “La protección a los derechos humanos, en especial los derechos civiles y políticos
recogidos en la Convención, parte de la afirmación de la existencia de ciertos atributos
inviolables de la persona humana que puedan ser legítimamente menoscabados por el ejercicio
del poder público. Se trata de esferas individuales que el Estado no puede vulnerar o en las que
solo puede penetrar limitadamente. Así, en la protección de los derechos humanos, está
necesariamente comprendida la noción de restricción al ejercicio del poder estatal” 229.
228
TARA MELISH. La Protección de los Derechos Económicos, Sociales y Culturales en el Sistema
Interamericano de Derechos Humanos. Ob. Cit. P. 33
229
MANUEL VENTURA (1983, P.12-13). Citado por Javier Llobet Rodríguez. Derechos Humanos y Justicia
Penal. 23-12-15. P. 13. Disponible en: http://www.corteidh.or.cr/tablas/24328.pdf
96
El jurista VÍCTOR ABRAMOVICH y Comisionado de la Comisión Interamericana de
Derechos Humanos (Argentina) expresa: “Los países deben “atarse al mástil” del Derecho
Internacional de los derechos humanos. Ello implica una limitación en la autonomía de los
Estados pero también una redefinición del rol de los Tribunales de justicia, dado que esas
relaciones producen una serie de conflictos. Y no cierran problemas sino que los abren. En esa
perspectiva, los jueces deben armonizar el Derecho Internacional de los Derechos Humanos
con el Derecho Interno. Sin embargo ¿cómo se acomoda la justicia constitucional de un
Estado a ese devenir de los derechos humanos? Habiéndose generado una fuerte
institucionalización de los derechos humanos, el rol del juez es armonizar la Constitución con
los Tratados, es decir, “acomodar” a los pasajeros con el orden constitucional”230.
El jurista colombiano RODRIGO UPRIMMY se refiere al tema: “El uso del derecho
internacional de los derechos humanos en la práctica interna presenta dos grandes ventajas: a)
Ayuda a que los jueces tomen decisiones más garantistas; y b) Es la única forma de salvar el
sistema de protección, es decir, que se internalicen sus estándares. Solo tiene sentido fijar
estándares si ellos se aplican en el Derecho interno”231.
En efecto, la doctrina internacional establece los niveles de jerarquía o interrelación entre los
tratados internacionales sobre derechos humanos y el derecho interno. Sin embargo, la
Convención de Viena sobre el Derecho de los Tratados define al tratado como: “Un acuerdo
internacional celebrado por escrito entre Estados y regido por el Derecho Internacional, ya
conste en un único instrumento o en dos o más instrumentos conexos y cualquiera que sea su
denominación particular”232.
Es necesario señalar que el término “tratados” es únicamente una de las fuentes del Derecho
Internacional como son los pactos y convenios. “Es decir aquellos instrumentos que gozan de
fuerza vinculante, garantizados por organismos colegiados que rigen su cumplimiento y que
230
VÍCTOR ABRAMOVICH. Comisionado de la Comisión Interamericana de DD. HH. (Argentina). Curso
implementación de los DD.HH. en el Derecho interno. Alusión Curso DD.HH. 2009. Argentina. 2010. P. 5.
231
RODRIGO UPRIMMY. Curso Implementación de DD. HH. En el Derecho Interno. Citado por Jurista
Peruano Edwin Figueroa Gutarra. Publicado en Jurídica 263. El Peruano. Perú 2009. P. 108.
232
Convención de Viena sobre el Derecho de los Tratados U.N.A/CONF.39/27 (1969) Artículo 2.1.a. La
Convención fue adoptada el 23 de mayo de 1969 y entró en vigencia el 27 de Enero de 1980. Ecuador se
adhirió a esta Convención en el Registro Oficial, del 28 de Abril del 2005.
97
para efectos jurídicos pasan a formar parte de la legislación de cada Estado que lo ratificó de
acuerdo a un procedimiento”233.
3. Relación a nivel Supralegal: Los Tratados sobre Derechos Humanos tienen una
jerarquía mayor a las normas legales, pero inferior a la Constitución.
Por ello, es obligación de los Estados incorporar los derechos humanos, respetando y
aplicando los instrumentos internacionales y además adoptar un discurso que promuevan la
observancia de los derechos humanos y tomar medidas para evitar su incumplimiento. Así lo
dispone la Convención Interamericana de Derechos Humanos, que establece el deber de
adoptar disposiciones legislativas o de cualquier otro carácter para hacer efectivos los
233
DANILO ALBERTO CAICEDO TAPIA. El Bloque Constitucional en el Ecuador. Derechos Humanos más
allá de la Constitución. 2010. P. 513. Teoría y Práctica de la Justicia Constitucional. Editora Claudia Escobar
García. Serie Justicia y Derechos Humanos. Neoconstitucionalismo y Sociedad. Ver también a: LUIS
PÁSARA. El uso de los instrumentos internacionales de Derechos Humanos en la Administración de
Justicia. Ministerio de Justicia y Derechos Humanos. Serie Justicia y Derechos Humanos.
Neoconstitucionalismo y Sociedad. Quito-Ecuador. 2008. P. 34-39.
234
MARA GÓMEZ PÉREZ. La protección internacional de los Derechos Humanos y la soberanía nacional.
Revista Derecho PUCP. 2008. No. 54-2004. Aníbal Quiroga Loor. (Editor General). P. 230-231. Ver
También a Marco Gerardo Monroy Cabra. Ensayos de Teoría Constitucional y Derecho Internacional.
Editorial Universidad del Rosario. Colombia-Bogotá. 2007. P. 265-266.
98
derechos y libertades contenidas en el instrumento mencionado (Art. 2)235. Por tal motivo, la
Corte Interamericana de Derechos Humanos, en ejercicio de su función consultiva, señala
que:
Esta Corte entiende que la responsabilidad internacional del Estado puede generarse por
actos u omisiones de cualquier poder u órgano de éste, independientemente de su jerarquía,
que violen la Convención Americana. Es decir, todo acto u omisión, imputable al Estado, en
violación de las normas del derecho internacional de los derechos humanos, compromete la
responsabilidad internacional del Estado. En el presente caso ésta se generó en virtud de que
el artículo 19 número 12 de la Constitución establece la censura previa en la producción
cinematográfica y, por lo tanto, determina los actos de los Poderes Ejecutivo, Legislativo y
Judicial.”237.
235
Convención Interamericana de Derechos Humanos, Artículo 2. Disponible en:
https://www.oas.org/dil/esp/tratados_B-32_Convencion_Americana_sobre_Derechos_Humanos.htm
236
Corte Interamericana de Derechos Humanos. Opinión Consultiva 14 (OC-14/94), Internet.
www.corteidh.or.cr.
237
Corte Interamericana de Derechos Humanos. Caso La última Tentación de Cristo, sentencia de fondo del 5
de febrero de 2001, párr. 72. La posición del Estado chileno en este caso fue la de reclamar que la
responsabilidad internacional del Estado no podía surgir por la sola emisión de una sentencia del Poder
Judicial, sino que se requería la omisión o participación de los poderes Legislativo y Ejecutivo: Disponible
en: http://www.juridicas.unam.mx/publica/rev/refjud/cont/12/cle/cle13.htm
238
Corte Interamericana de Derechos Humanos. Voto razonado, Caso La Última Tentación de Cristo, Sentencia
de fondo del 5 de febrero de 2001, párr. 37. Disponible en:
http://www.juridicas.unam.mx/publica/rev/refjud/cont/12/cle/cle13.htm
99
5. LA NUEVA JUSTICIA PENAL FUNDAMENTADA EN LOS
TRATADOS Y CONVENCIONES INTERNACIONALES
5.1. Conceptualización
Al respecto, podemos afirmar que la constitucionalización del derecho procesal penal tiene su
fuente a la luz de los instrumentos internacionales como son los tratados, declaraciones,
pactos, convenios, protocolos, convenciones y otros sobre derechos humanos o derechos
fundamentales.
Al amparo del Derecho Internacional de los derechos humanos, se impulsan los cambios
estructurales de la reforma penal-procesal en trámite en nuestros países 240, ya que exige la
incorporación de los estándares jurídicos de protección y respeto a los derechos, principios y
garantías de los sujetos procesales241 en un Estado Constitucional de derechos y justicia.
239
RICHARD LLACSAHUANGA CHÁVEZ. Constitución y Proceso Penal. Editorial Ox. Ayaguacho –Perú.
1979. Ob. Cit. P. 4-9. Ver:http://perso.unifr.ch/derechopenal/assets/files/articulos/a_20110107_02.pdf
240
Está marcha el proyecto de Código Procesal Penal modelo para los países iberoamericanos de 1988,
inspirado los Códigos de Costa Rica, Chile, Colombia y ahora Perú, sin dejar de mencionar la importancia de
la Ordenanza Procesal Penal (OPP) de Alemania y el Código de Procedimiento Penal de Italia y en el
Ecuador, existe un proceso de implementación de un nuevo sistema procesal penal por aprobarse.
241
JORGE ROSAS YATACO. Derecho Procesal Penal. Con aplicación al Nuevo Proceso Penal Decreto
Legislativo N° 957. Editorial Jurista Editores. Primera Edición. Lima-Perú. 2009. P.64.
242
Adoptada y proclamada por la Asamblea General de las Naciones Unidas en su Resolución 217 A (III), del
10 de diciembre de 1948. MIREYA CASTILLO CAUDI. Manuales: Derechos Internacional de los Derechos
Humanos. Ob. Cit. P. 54 a 59.
100
importancia de ser un instrumento histórico en la lucha por la libertad y dignidad
humanas, al igual que otros como la Carta Magna de 1215, el Bill Of Rigths de 1689,
la Declaración de los Derechos del Buen Pueblo de Virginia de 1776 y la Declaración
Francesa de los Derechos del Hombre y del Ciudadano de 1789. Al respecto, Norberto
Bobbio, afirma: “Con la Declaración de 1948 comienza una tercera y última fase en la
que la afirmación de los derechos es, a la vez, universal y positiva: universal en el
sentido de que destinatarios de los principios allí contenidos no son ya solamente los
ciudadanos de tal o cual Estado, sino todos los hombres; positiva en el sentido de que
pone en marcha un proceso en cuya culminación los derechos humanos no solo serían
proclamados o idealmente reconocidos, sino efectivamente protegidos incluso contra
el propio Estado que los viola. En la culminación de este proceso, los derechos del
ciudadano se habrán transformado realmente, positivamente, en los derechos del
hombre.”243.
“Artículo 3.
Todo individuo tiene derecho a la vida, a la libertad y a la seguridad de su persona 245.
Artículo 4.
Nadie estará sometido a esclavitud ni a servidumbre, la esclavitud y la trata de esclavos están
prohibidas en todas sus formas”246.
Artículo 5.
243
NORBERTO BOBBIO. Presente y porvenir de los derechos humanos. P.68. En Norberto Bobbio. “El
tiempo de los derechos”. Traducción de Rafael de Asís Roig. Editorial Sistema. Madrid. 1991.
244
Según interpretación de la Corte Interamericana de Derechos Humanos en su Opinión Consultiva OC-9/87,
en la que interpreta el derecho a las garantías judiciales del artículo 8 de la Convención Americana, señala
que la expresión más exacta es la de “debido proceso legal”, ya que la expresión “garantías judiciales”,
strictu sensu, se refiere a los medios procesales que “sirven para proteger, asegurar o hacer valer la titularidad
o ejercicio de un derecho(…) vale decir, los medios idóneos para que los derechos y libertades sean efectivos
en toda circunstancia.”
245
Declaración Universal de Derechos Humanos. 1948. Artículo. 3. Disponible en.
https://www.oas.org/dil/esp/tratados_B-32_Convencion_Americana_sobre_Derechos_Humanos.htm
246
Ibídem. Artículo 4.
101
Nadie será sometido a torturas ni a penas o tratos crueles, inhumanos o degradantes 247.
Artículo 6.
Todo ser humano tiene derecho, en todas partes, al reconocimiento de su personalidad
jurídica248.
Artículo 7.
Todos son iguales ante la ley y tienen, sin distinción, derecho a igual protección de la ley.
Todos tienen derecho a igual protección contra toda discriminación que infrinja esta
Declaración y contra toda provocación a tal discriminación249.
Artículo 8.
Toda persona tiene derecho a un recurso efectivo ante los tribunales nacionales competentes,
que la ampare contra actos que violen sus derechos fundamentales reconocidos por la
constitución o por la ley250.
Artículo 9.
Artículo 10.
Toda persona tiene derecho, en condiciones de plena igualdad, a ser oída públicamente y con
justicia por un tribunal independiente e imparcial, para la determinación de sus derechos y
obligaciones o para el examen de cualquier acusación contra ella en materia penal. 252
Artículo 11.
1.-Toda persona acusada de delito tiene derecho a que se presuma su inocencia mientras
no se pruebe su culpabilidad, conforme a la ley y en juicio público en el que se le hayan
asegurado todas las garantías necesarias para su defensa253.
2. Nadie será condenado por actos u omisiones que en el momento de cometerse no fueron
delictivos según el Derecho nacional o internacional. Tampoco se impondrá pena más
grave que la aplicable en el momento de la comisión del delito”254.
247
Ibídem. Artículo 5.
248
Ibídem. Artículo 6.
249
Ibídem. Artículo 7.
250
Ibídem. Artículo 8.
251
Ibídem. Artículo 9.
252
Ibídem. Artículo 10.
253
Ibídem. Articulo 11.1
254
Ibídem. Articulo 11.2
102
El Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos contiene un catálogo de derechos
civiles y políticos más completo y preciso que la Declaración Universal de los Derechos
Humanos; sin embargo, algunos derechos establecidos en la Declaración se establecen
en el Pacto, por ejemplo: el derecho a buscar asilo en caso de persecución, en
consecuencia, los derechos y garantías que se desarrollan en el Pacto son:
Artículo 7.
Artículo 9.
1. “Todo individuo tiene derecho a la libertad y a la seguridad personal. Nadie podrá ser
sometido a detención o prisión arbitrarias. Nadie podrá ser privado de su libertad, salvo por
las causas fijadas por ley y con arreglo al procedimiento establecido en ésta.
3. Toda persona detenida o presa a causa de una infracción penal será llevada sin demora ante
un juez u otro funcionario autorizado por la ley para ejercer funciones judiciales, y tendrá
derecho a ser juzgada dentro de un plazo razonable o a ser puesta en libertad. La prisión
preventiva de las personas que hayan de ser juzgadas no debe ser la regla general, pero su
libertad podrá estar subordinada a garantías que aseguren la comparecencia del acusado en
el acto del juicio, o en cualquier momento de las diligencias procesales y, en su caso, para la
ejecución del fallo
4. Toda persona que sea privada de libertad en virtud de detención o prisión tendrá derecho a
recurrir ante un tribunal, a fin de que éste decida a la brevedad posible sobre la legalidad de
su prisión y ordene su libertad si la prisión fuera ilegal.
5. Toda persona que haya sido ilegalmente detenida o presa, tendrá el derecho efectivo a
obtener reparación.256
255
Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, 1966. Artículo 7. Disponible en:
http://www.ohchr.org/SP/ProfessionalInterest/Pages/CCPR.aspx
256
Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, 1966. Artículo 9. Disponible en:
http://www.ohchr.org/SP/ProfessionalInterest/Pages/CCPR.aspx
103
Artículo 10.
1. “Toda persona privada de libertad será tratada humanamente y con el respeto debido a la
dignidad inherente al ser humano.
2.
b) Los menores procesados estarán separados de los adultos y deberán ser llevados ante los
tribunales de justicia con la mayor celeridad posible para su enjuiciamiento.
3.- El régimen penitenciario consistirá en un tratamiento cuya finalidad esencial será la reforma
y la readaptación social de los penados. Los menores delincuentes estarán separados de los
adultos y serán sometidos a un tratamiento adecuado a su edad y condición jurídica” 257.
Artículo 14.
1. “Todas las personas son iguales ante los tribunales y cortes de justicia. Toda persona tendrá
derecho a ser oída públicamente y con las debidas garantías por un tribunal competente,
independiente e imparcial, establecido por la ley, en la substanciación de cualquier
acusación de carácter penal formulada contra ella o para la determinación de sus derechos u
obligaciones de carácter civil. La prensa y el público podrán ser excluidos de la totalidad o
parte de los juicios por consideraciones de moral, orden público o seguridad nacional en una
sociedad democrática, o cuando lo exija el interés de la vida privada de las partes o, en la
medida estrictamente necesaria en opinión del tribunal, cuando por circunstancias especiales
del asunto la publicidad pudiera perjudicar a los intereses de la justicia; pero toda sentencia
en materia penal o contenciosa será pública, excepto en los casos en que el interés de
menores de edad exija lo contrario, o en las acusaciones referentes a pleitos matrimoniales o
a la tutela de menores.
2. Toda persona acusada de un delito tiene derecho a que se presuma su inocencia mientras no
se pruebe su culpabilidad conforme a la ley.
3. Durante el proceso, toda persona acusada de un delito tendrá derecho, en plena igualdad, a
las siguientes garantías mínimas”258
257
Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, 1966. Artículo 10.3. Disponible en:
http://www.ohchr.org/SP/ProfessionalInterest/Pages/CCPR.aspx
258
Ibídem Artículo 14.3. Disponible en: http://www.ohchr.org/SP/ProfessionalInterest/Pages/CCPR.aspx
104
b) A disponer del tiempo y de los medios adecuados para la preparación de su defensa y
a comunicarse con un defensor de su elección;
5. Toda persona declarada culpable de un delito tendrá derecho a que el fallo condenatorio y la
pena que se le haya impuesto sean sometidos a un tribunal superior, conforme a lo prescrito
por la ley.
6. Cuando una sentencia condenatoria firme haya sido ulteriormente revocada, o el condenado
haya sido indultado por haberse producido o descubierto un hecho plenamente probatorio de
la comisión de un error judicial, la persona que haya sufrido una pena como resultado de tal
sentencia deberá ser indemnizada, conforme a la ley, a menos que se demuestre que le es
imputable en todo o en parte el no haberse revelado oportunamente el hecho desconocido.
7. Nadie podrá ser juzgado ni sancionado por un delito por el cual haya sido ya condenado o
absuelto por una sentencia firme de acuerdo con la ley y el procedimiento penal de cada
país260
Artículo 15.
1. Nadie será condenado por actos u omisiones que en el momento de cometerse no fueran
delictivos según el derecho nacional o internacional. Tampoco se impondrá pena más grave
que la aplicable en el momento de la comisión del delito. Si con posterioridad a la comisión
259
Ibídem Artículo 14.3.g. Disponible en: http://www.ohchr.org/SP/ProfessionalInterest/Pages/CCPR.aspx
260
Ibídem Artículo 14.7. Disponible en: http://www.ohchr.org/SP/ProfessionalInterest/Pages/CCPR.aspx
105
del delito la ley dispone la imposición de una pena más leve, el delincuente se beneficiará de
ello261.
2. Nada de lo dispuesto en este artículo se opondrá al juicio ni a la condena de una persona por
actos u omisiones que, en el momento de cometerse, fueran delictivos según los principios
generales del derecho reconocidos por la comunidad internacional 262.
Artículo 17.
2. Toda persona tiene derecho a la protección de la ley contra esas injerencias o esos
ataques264.
261
Ibídem Artículo 15.1. Disponible en: http://www.ohchr.org/SP/ProfessionalInterest/Pages/CCPR.aspx
262
Ibídem Artículo 15.2. Disponible en: http://www.ohchr.org/SP/ProfessionalInterest/Pages/CCPR.aspx
263
Ibídem Artículo 17.1. Disponible en: http://www.ohchr.org/SP/ProfessionalInterest/Pages/CCPR.aspx
264
Ibídem Artículo 17.2. Disponible en: http://www.ohchr.org/SP/ProfessionalInterest/Pages/CCPR.aspx
265
MARY GENITH VITERI AGUIRRE. Derecho Internacional de los Derechos Humanos. Derechos
Humanos y Estado Constitucional. Ob. Cit. P. 26. Disponible en:
http://www.oas.org/es/cidh/mandato/Basicos/declaracion.asp
106
1. “Toda persona tiene derecho a que se respete su integridad física, psíquica y
moral;
5. Cuando los menores puedan ser procesados, deben ser separados de los adultos
y llevados ante tribunales especializados, con la mayor celeridad posible, para
su tratamiento;
2. Nadie puede ser privado de su libertad física, salvo por las causas y en las
condiciones fijadas de antemano por las Constituciones Políticas de los Estados
Partes o por las leyes dictadas conforme a ellas.;
4. Toda persona detenida o retenida debe ser informada de las razones de su detención
y notificada, sin demora, del cargo o cargos formulados contra ella.
5. Toda persona detenida o retenida debe ser llevada, sin demora, ante un juez u otro
funcionario autorizado por la ley para ejercer funciones judiciales y tendrá derecho a
ser juzgada dentro de un plazo razonable o a ser puesta en libertad, sin perjuicio de
que continúe el proceso. Su libertad podrá estar condicionada a garantías que
aseguren su comparecencia en el juicio;
6. Toda persona privada de libertad tiene derecho a recurrir ante un juez o tribunal
competente, a fin de que éste decida, sin demora, sobre la legalidad de su arresto o
266
Disponible en: https://www.oas.org/dil/esp/tratados_B-
32_Convencion_Americana_sobre_Derechos_Humanos.htm
107
detención y ordene su libertad si el arresto o la detención fueran ilegales. En los
Estados Partes cuyas leyes prevén que toda persona que se viera amenazada de ser
privada de su libertad tiene derecho a recurrir a un juez o tribunal competente a fin
de que éste decida sobre la legalidad de tal amenaza, dicho recurso no puede ser
restringido ni abolido. Los recursos podrán interponerse por sí o por otra persona;
7. Nadie será detenido por deudas. Este principio no limita los mandatos de autoridad
judicial competente dictados por incumplimientos de deberes alimentarios”267.
1. “Toda persona tiene derecho a ser oída, con las debidas garantías y dentro de un
plazo razonable, por un juez o tribunal competente, independiente e imparcial,
establecido con anterioridad por la ley, en la sustanciación de cualquier acusación
penal formulada contra ella, o para la determinación de sus derechos y obligaciones
de orden civil, laboral, fiscal o de cualquier otro carácter;
267
Disponible en: https://www.oas.org/dil/esp/tratados_B-
32_Convencion_Americana_sobre_Derechos_Humanos.htm
108
4.-El inculpado absuelto por una sentencia firme no podrá ser sometido a nuevo juicio por
los mismos hechos;
5.-El proceso penal debe ser público, salvo en lo que sea necesario para preservar los
intereses de la justicia”268.
Nadie puede ser condenado por acciones u omisiones que en el momento de cometerse no
fueran delictivos según el derecho aplicable. Tampoco se puede imponer pena más grave
que la aplicable en el momento de la comisión del delito. Si con posterioridad a la comisión
del delito la ley dispone la imposición de una pena más leve, el delincuente se beneficiará de
ello269.
“Toda persona tiene derecho a ser indemnizada conforme a la ley en caso de haber sido
condenada en sentencia firme por error judicia”l270.
3. Toda persona tiene derecho a la protección de la ley contra esas injerencias o esos
ataques”271.
268
Ibídem Artículo. 8.5. Disponible en: https://www.oas.org/dil/esp/tratados_B-
32_Convencion_Americana_sobre_Derechos_Humanos.htm
269
Ibídem Artículo. 9. Disponible en: https://www.oas.org/dil/esp/tratados_B-
32_Convencion_Americana_sobre_Derechos_Humanos.htm
270
Ibídem Artículo 10. Disponible en: https://www.oas.org/dil/esp/tratados_B-
32_Convencion_Americana_sobre_Derechos_Humanos.htm
271
Ibídem Artículo 11.3. Disponible en: https://www.oas.org/dil/esp/tratados_B-
32_Convencion_Americana_sobre_Derechos_Humanos.htm.
109
Artículo 24. Igualdad ante la Ley
Todas las personas son iguales ante la ley. En consecuencia, tienen derecho, sin
discriminación, a igual protección de la ley272
1.- “Toda persona tiene derecho a un recurso sencillo y rápido o a cualquier otro recurso
efectivo ante los jueces o tribunales competentes, que la ampare contra actos que violen sus
derechos fundamentales reconocidos por la Constitución, la ley o la presente Convención,
aun cuando tal violación sea cometida por personas que actúen en ejercicio de sus funciones
oficiales”273
a) a garantizar que la autoridad competente prevista por el sistema legal del Estado
decidirá sobre los derechos de toda persona que interponga tal recurso;
La obligación de garantizar el libre y pleno ejercicio de los derechos humanos no se agota con
la existencia de un orden normativo dirigido a hacer posible el cumplimiento de esta
obligación, sino que comporta la necesidad de una conducta gubernamental que asegure la
existencia en la realidad, de una eficaz garantía del libre y pleno ejercicio de os derechos
humanos275.
272
Ibídem Articulo 24
273
Ibídem Articulo 25.1
274
Ibídem Articulo 25.2.c
275
Corte Interamericana de Derechos Humanos.Caso Velásquez Rodríguez, sentencia del 29 de Julio de 1988,
Serie C, num. 4. Relacionado con la desaparición forzada de Manfredo Velásquez Rodriguez.Parr. 167
110
6.- LA NUEVA JUSTICIA PENAL PROTEGE DERECHOS HUMANOS
CONSTITUCIONALIZADOS
La protección de los derechos humanos se desarrolla con base en las orientaciones éticas,
filosóficas, políticas sociales y constitucionales, en que se fundamenta el sistema de Justicia
Penal. Por ello, en todo sistema de justicia penal moderno, el procesado tiene derecho a ser
asistido en el proceso o juicio por un abogado, privado o público.
Los derechos humanos no solo se protegen por el Derecho Interno, sino también por el
Derecho Internacional Público. Por ejemplo, la Convención Europea para la Protección de los
Derechos Humanos y las libertades Fundamentales276 contiene un catálogo de derechos
relativos a la Justicia Penal. De igual manera, la Convención Americana de Derechos
Humanos277.
276
Convención Europea de Derechos Humanos; Disponible en:
http://www.exteriores.gob.es/Portal/es/PoliticaExteriorCooperacion/ConsejoDeEuropa/Documents/Convenio
%20Europeo%20para%20la%20Protecci%C3%B3n%20de%20los%20Derechos%20Humanos%20y%20de
%20las%20libertades%20fundamentales.pdf
277
Convención Americana de Derechos Humanos; Disponible en: http://www.oas.org/dil/esp/tratados_B-
32_Convencion_Americana_sobre_Derechos_Humanos.htm
278
Véase: MARTIN CARLOS SÁNCHEZ BOCANEGRA. La Reforma Penal y su Nuevo Sistema. La forma,
el fondo y las fuentes del sistema acusatorio. 2011, Disponible en:
http://148.202.89.14/laboratoriojuiciosorales/sites/default/files/La%20Reforma%20Penal%20y%20el
%20Nuevo%20Sistema.pdf
111
recursos o medios de impugnación rápidos y sencillos y separación de funciones, de
investigación y acusación respecto del juzgamiento; diseño de un procesos en tres etapas:
investigación, intermedia y Juicio Oral279, de acuerdo con la Constitución, Derecho
Internacional de los Derechos Humanos, el COIP (Código Orgánico Integral Penal,
Ecuador)280, con la finalidad de esclarecer los hechos, la protección del inocente, que el
culpable no quede impune y que el daño se repare y que exista un juicio justo.
279
Cfr. CAROLINA VILLADIEGO BURBANO. Implementación del Sistema Penal Acusatorio en América
Latina. VIII Curso Internacional de Capacitación en Prevención Comunitaria del Delito para Jóvenes
Profesionales de America Latina. Nicaragua. 2012, Disponible en:
http://148.202.89.14/laboratoriojuiciosorales/sites/default/files/La%20Reforma%20Penal%20y%20el
%20Nuevo%20Sistema.pdf
280
Código Orgánico Integral Penal. Publicado en el Suplemento del Registro Oficial 180, del lunes 10 de
febrero de 2014, y entro en vigencia, el10 de agosto del 2014. Editorial Corporación de Estudio y
Publicaciones CEP. Quito. 2014
281
LUIS ROBERTO BONOSO. El Neoconstitucioalismo y la Constitucionalización del Derecho. México DF.
IIJ-UNAM.2008. P.35.
282
Constitución de la República del Ecuador, 2008. Artículo 77, numeral 4. Disponible en:
http://www.pucesi.edu.ec/web/wp-content/uploads/2016/04/Constituci%C3%B3n-de-la-Rep%C3%BAblica-
2008.pdf
112
5.- “Si la persona detenida fuera extranjera, quien lleve a cabo la detención
informará inmediatamente al representante consular de su país”283.
3. Declarar ante una autoridad judicial sobre el trato que haya recibido durante
la privación de la libertad.
283
Ibídem Articulo77, numeral 5. Disponible en: http://www.pucesi.edu.ec/web/wp-
content/uploads/2016/04/Constituci%C3%B3n-de-la-Rep%C3%BAblica-2008.pdf
284
Ibídem Articulo78. Disponible en: http://www.pucesi.edu.ec/web/wp-content/uploads/2016/04/Constituci
%C3%B3n-de-la-Rep%C3%BAblica-2008.pdf
285
Ibídem Articulo198. Disponible en: http://www.pucesi.edu.ec/web/wp-content/uploads/2016/04/Constituci
%C3%B3n-de-la-Rep%C3%BAblica-2008.pdf
113
5. La atención de sus necesidades educativas, laborales, productivas, culturales,
alimenticias y recreativas.
286
Ibídem Articulo51. Disponible en: http://www.pucesi.edu.ec/web/wp-content/uploads/2016/04/Constituci
%C3%B3n-de-la-Rep%C3%BAblica-2008.pdf
287
Ibídem Artículo. 66, numeral 3, literal c. Disponible en: http://www.pucesi.edu.ec/web/wp-
content/uploads/2016/04/Constituci%C3%B3n-de-la-Rep%C3%BAblica-2008.pdf
114
agrícola, artesanal, industrial o cualquier otra forma ocupacional, de salud mental y
física, y de cultura y recreación.
288
Ibídem Articulo203, numeral 5. Disponible en: http://www.pucesi.edu.ec/web/wp-
content/uploads/2016/04/Constituci%C3%B3n-de-la-Rep%C3%BAblica-2008.pdf
289
Ibídem Articulo191. Disponible en: http://www.pucesi.edu.ec/web/wp-content/uploads/2016/04/Constituci
%C3%B3n-de-la-Rep%C3%BAblica-2008.pdf
290
Ibídem Articulo194 y 195. Disponible en: http://www.pucesi.edu.ec/web/wp-
content/uploads/2016/04/Constituci%C3%B3n-de-la-Rep%C3%BAblica-2008.pdf
291
RAMIRO ÁVILA SANTAMARÍA. La (IN) Justicia Penal en la Democracia Constitucional de Derechos.
Una mirada desde el garantísmo penal. Ob. Cit. P. 205
292
Constitución de la República del Ecuador, Ediciones Legales, Quito, 2012. Art. 66 y 77. Disponible en:
http://www.pucesi.edu.ec/web/wp-content/uploads/2016/04/Constituci%C3%B3n-de-la-Rep%C3%BAblica-
2008.pdf
115
6.2. Jurisprudencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos
El concepto de Derechos Humanos ha estado relacionado con los derechos frente al Estado y
así lo afirma la Corte Interamericana de Derechos Humanos, en su opinión consultiva OC-
6/86 del 9 de mayo de 1986, determino:
21. (…) La protección a los derechos humanos, en especial los derechos civiles y políticos
recogidos en la Convención, parte de la afirmación de la existencia de ciertos atributos
inviolables de las persona humana que no pueden ser legítimamente menoscabados por el
ejercicio del poder público. Se trata de esferas individuales que el Estado no puede vulnerar
o en las que solo puede penetrar limitadamente. Así, en la protección a los derechos
humanos, esta necesariamente comprendida la noción de la restricción al ejercicio del poder
estatal293
7.1 Conceptualización
Por ello, es importante el reconocimiento de la dignidad humana por las Constituciones de los
Estados Constitucionales de Derechos modernos amparados en el Derecho Internacional de
los Derechos Humanos. El jurista ERNESTO BENDA, afirma: En Alemania, la decisión
constitucional por el Estado de Derecho y la Democracia Liberal, “resulta del reconocimiento
de la dignidad humana”294.
293
MANUEL VENTURA (1983, P.12-13). Citado por Javier Llobet Rodríguez. Derechos Humanos y Justicia
Penal. 23-12-15. P. 13. Disponible en: http://www.ucipfg.com/Repositorio/MCSH/MCSH-
03/BLOQUEINICIAL/Derechos_Humanos_y_Justicia_Penal.pdf
294
ERNESTO BENDA. Dignidad Humana y Derechos de la Personalidad. Manual de Derecho Constitucional.
Madrid. Mariel Pons. 1996. P. 123.
116
La dignidad humana logra dimensiones constitucionales por primera vez con la Ley
Fundamental de Bonn, de 23 de mayo de 1949 (Alemania), cuando trata sobre los “Derechos
Fundamentales”, determinó en sus dos primeros párrafos:
“La dignidad de la persona humana es intangible, respetarla y protegerla es obligación de todo
poder público. El pueblo Alemán se identifica, por lo tanto, con los inviables e inalienables
derechos del hombre como fundamento de toda comunidad humana, de la paz y de la justicia
en mundo”295.
Es claro que la dignidad humana es una cualidad o valor intrínseco inherente a los seres
humanos, es irrenunciable e inalienable de toda persona y sus derechos individuales dieron de
ella. “Si la dignidad es, en palabras da Haberle, la premisa cultural antropológica al Estado
Constitucional, los derechos, inherente a ella, son sus manifestaciones señeras y, por eso
mismo, son fundamentales”296. Por lo tanto, la dignidad humana se ha constitucionalizado y
en la actualidad es el núcleo del derecho, y se la considera a la dignidad como “… mi
nimuninvulneramble que todo estatuto jurídico debe asegurar, de modo que sean unas u otras
las limitaciones que se impongan en el disfrute de derechos individuales, no conlleva
menosprecio para la estima en cuanto ser humano merece la persona”297. En efecto, la
dignidad es un elemento primordial de la persona o ser humano, por ello, es previa a las
Ciencias Jurídicas y su reconocimiento jurídico para existir, sin embargo, el reconocimiento
será necesario e intransferible como un requisito para legitimar el ordenamiento público y
jurídico del Estado Constitucional de Derechos y Justicia.
117
penal: víctimas, procesados, testigos, peritos, fiscales y abogados. Su referencia al principio
de dignidad de la personas se encuentran preámbulo de la Declaración Universal de los
Derechos Humanos y de la Declaración Americana de Derechos del Hombre.
Artículo 1.
Señala que la República de Brasil tiene como fundamento […] la dignidad de las
personas […]298
El artículo 11, de la Constitución se refiere a los principios que rigen para el ejercicio
de los derechos, en su numeral 7 señala: “El reconocimiento de los derechos y
garantías establecidos en la Constitución y en los instrumentos internacionales de
derechos humanos, no excluirá los demás derechos derivados de la dignidad de las
personas, comunidades, pueblos y nacionalidades, que sean necesarios para su pleno
desenvolvimiento”299.
298
Constitución del Brasil. Artículo 1.
299
Constitución de la República del Ecuador. Artículo 11, numeral 7. Disponible en:
http://www.pucesi.edu.ec/web/wp-content/uploads/2016/04/Constituci%C3%B3n-de-la-Rep%C3%BAblica-
2008.pdf
300
Constitución de la República del Ecuador. Artículo 57, numeral 21. Disponible en:
http://www.pucesi.edu.ec/web/wp-content/uploads/2016/04/Constituci%C3%B3n-de-la-Rep%C3%BAblica-
2008.pdf
118
Asimismo, el Título Tercero de las Garantías Constitucionales, en su capítulo Primero,
de las Garantías Normativas, establece: “La Asamblea Nacional y todo órgano con
potestad normativa tendrá la obligación de adecuar, formal y materialmente, las leyes
y demás normas jurídicas a los derechos previstos en la Constitución y los tratados
internacionales, y los que sean necesarios para garantizar la dignidad del ser humano
o de las comunidades, pueblos y nacionalidades. En ningún caso, la reforma de la
Constitución, las leyes, otras normas jurídicas ni los actos del poder público
atentarán contra los derechos que reconoce la Constitución”.301
Artículo 1.-Todos los seres humanos nacen libres e iguales en dignidad y derechos
y, dotados como están de razón y conciencia, deben comportarse fraternalmente los
unos con los otros303
301
Constitución de la República del Ecuador. Artículo 84. Disponible en: http://www.pucesi.edu.ec/web/wp-
content/uploads/2016/04/Constituci%C3%B3n-de-la-Rep%C3%BAblica-2008.pdf
302
Constitución de Chile. Artículo 1. Disponible en: http://www.senado.cl/constitucion-politica-capitulo-i-
bases-de-la-institucionalidad/prontus_senado/2012-01-16/093048.html
303
Declaración Universal de Derechos Humanos. Adoptada y proclamada por la Asamblea General en su
resolución 217 A (III), de 10 de diciembre de 1948. Artículo 1.
304
Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos. Adoptado y abierto a la firma, ratificación y adhesión
por la Asamblea General en su resolución 2200 A (XXI), de 16 de diciembre de 1966.
119
c) Convención Americana sobre Derechos humanos de 1969
“Teniendo presente que los pueblos de las Naciones Unidas han reafirmado en la
Carta su fe en os derechos fundamentales del hombre y en la dignidad y el valor de la
persona humana”.307
305
JESÚS GONZALES PÉREZ. La Dignidad de la Persona. Editorial Civitas. Madrid. 1986. P. 25.
306
Convención contra la Tortura y Otros Tratados o penas Crueles inhumanas o Degradantes de 1984.
307
Convención sobre los Derechos del Niño de 1989. Disponible en:
http://www.un.org/es/events/childrenday/pdf/derechos.pdf
308
HUMBERTO NOGUEIRA ALCALÁ. Dignidad de la persona, derechos fundamentales, bloque
constitucional de derechos y control de convencionalidad. P. 2. Disponible en:
http://www.crdc.unige.it/docs/articles/Dignidad.pdf
309
GREGORIO PECES-BARBA. La dignidad de la persona desde la filosofía del Derecho. Madrid. Dykinson.
2002. P. 11, 12 y 13.
120
Además, JUAN BUSTOS RAMÍREZ sostiene que el Derechos Penal ha de constituirse desde
el principio constitucional de la dignidad de la persona, de su reconocimiento como ente
autónomo frente al Estado cualquiera que sea sus condiciones y características”310.
Por lo tanto, todo el sistema jurídico constitucional y legal tendrá que interpretarse a la luz del
reconocimiento y respecto a la dignidad de la persona humana, en razón de que todos los
derechos fundamentales se proyectan la dignidad de los ciudadanos.
“Todos los hombres nacen libres e iguales en dignidad y derechos y dotados, como
están por naturaleza de razón y conciencia, deben conducirse fraternalmente los
unos con los otros”.313
310
JUAN BUSTOS RAMÍREZ. Los mitos de la Ciencia Penal del Sigo XX: La Culpabilidad y la peligrosidad
en la ciencia del Derecho Penal ante el Nuevo Siglo libro homenaje al profesor José Cerezo Mir. Madrid.
Tecnos. 2002. P. 7.
311
MIGUEL ANGEL ALEGRE MARTINEZ. La dignidad de la Persona. Ob. Cit. P. 97.
312
Declaración Universal de Derechos Humanos. Adoptada y proclamada por la Asamblea General en su
resolución 217 A (III), de 10 de diciembre de 1948. Artículo 1. Disponible en:
http://www.un.org/es/documents/udhr/
313
Declaración Americana de los Derechos del Hombre. 1948. Artículo 1. Disponible en:
http://www.fmmeducacion.com.ar/Historia/Documentoshist/1789derechos.htm
121
c) Pacto Internacional de los Derechos Civiles y Políticos, 1966, en su preámbulo ,
expresa:
Entre tales atributos se hallan los derechos públicos subjetivos o facultades que el
ordenamiento jurídico le asegura con carácter de inalienables, imprescriptibles e
inviolables en todo momento, lugar y circunstancia. De esos atributos se nombran aquí,
por su vínculo directo con la causa a ser decidida, el derecho a la vida, a la integridad
física y psíquica y a la protección de la salud cuyo ejercicio legítimo la Constitución
exige respetar siempre incluyendo la esencia inafectable de lo garantizado en ellos;” 316.
314
Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos. Adoptado y abierto a la firma, ratificación y adhesión
por la Asamblea General en su resolución 2200 A (XXI), de 16 de diciembre de 1966. Artículo 1.Disponible
en: http://www.ohchr.org/SP/ProfessionalInterest/Pages/CCPR.aspx
315
Pacto Internacional de los Derechos Económicos, Sociales y Culturales. Artículo 1. Disponible en:
http://www.ohchr.org/SP/ProfessionalInterest/Pages/CESCR.aspx
316
Sentencia del Tribunal Constitucional, de 26 de junio de 2008, Rol N° 976, considerando vigesimotercero.
Véase: HUMBERTO NOGUEIRA ALCALÁ. Dignidad de la persona, derechos fundamentales, bloque
constitucional de derechos y control de convencionalidad. Ob. Cit. P. 2 y 3.
http://www.crdc.unige.it/docs/articles/Dignidad.pdf
317
Tribunal Federal Constitucional Alemán. Sentencia de la Sala Primera del 16 de Julio de 1969. C.F.
Schwabe, 2003, p. 35.m
122
La Corte Interamericana de Derechos Humanos, en el caso VELÁSQUEZ RODRÍGUEZ 318, señala:
154. Esta más allá de toda duda que el Estado tiene el derecho y el deber de garantizar su
propia seguridad. Tampoco puede discutirse que toda sociedad padece por las
infracciones a su orden jurídico. Pero, por graves que puedan ser ciertas acciones y por
culpables que puedan ser los reos de determinados delitos, no cabe admitir que le poder
pueda ejercerse sin límite alguno o que el Estado pueda valerse, de cualquier
procedimiento para alcanzar sus objetivos, sin sujeción al derecho o a la moral. Ninguna
actividad del Estado puede fundarse sobre el desprecio a la dignidad humana. 319
318
Corte Interamericana de Derechos Humanos en caso Velásquez Rodríguez, 29 de Julio de 1988.
319
JAVIER LLOBET RODRÍGUEZ. Derechos Humanos y Justicia Penal. Ob. Cit. Disponible en:
http://www.corteidh.or.cr/tablas/24328.pdf
123
CAPÍTULO IV
124
1. CONCEPTO DE GARANTÍAS CONSTITUCIONALES INDIVIDUALES
Con la finalidad de tener una idea fundamental o principal de las garantías constitucionales
individuales consideramos necesario tener en cuenta previamente un concepto gramatical, y
después, abordaremos las opiniones de la doctrina jurídica-constitucional que nos enseñan los
distinguidos tratadistas al respecto: y, con esas puntuaciones, se determina nuestra propuesta
conceptual.
Con relación al término individual, nos remitimos a la Enciclopedia Salvat Diccionario, que
expresa: “Individual (De individuo) adj. perteneciente o relativo al individuo. Particular,
propio y característico de una cosa”321.
320
Diccionario de la Lengua Española. Editorial España Calpe. Argentina. S.A. 19 a. Editorial Santiago Ltda.
1997. P. 203.
321
Enciclopedia Salvat Diccionario, Tomo VI. Salvat Méxicana de Ediciones. México. 1984. P. 1785.
125
Con esta referencia, podemos señalar que las garantías se las consideran individuales porque
tienen como propósito la protección de las y los ciudadanos como persona humana sujetas a
derechos, libertades y garantías fundamentales que están sobre el Estado y autoridades.
De igual manera, el tratadista IGNACIO BURGOA ORIHUELA, afirma: “Parece ser que la
palabra “garantía” proviene del término anglosajón Warranty o Warantie, que significa de
acción de asegurar, proteger, defender o salvaguardar (to warrant) por lo que tiene una
connotación muy amplia”324.
322
GUILLERMO CABANELLAS. Diccionario Enciclopédico de Derecho Usual. TOMO IV. F-I. 20 a Edición.
Revisada, Actualizada y Ampliada. Editorial Heliasta S.R.L. Buenos Aires-Argentina. 1981. P. 154.
323
JUVENTINO VICTOR CASTRO. Garantías y Amparo. Porrúa. 10a Edición. México. 1998.P. 3.
324
IGNACIO BURGOA ORIHUELA. Las Garantías Individuales. Editorial Porrúa. 3 era Edición. México. 1999.
P. 161.
126
Para VÍCTOR M. MARTÍNEZ BULLÉ-GOYRI: “Las garantías individuales son aquellas
destinadas a proteger los derechos fundamentales, que por supuesto tienen el carácter de
constitucional en tanto son parte integrante del texto de la Constitución”325.
Por su parte MANUEL OSSORIO afirma: “Garantías Constitucionales. Las que ofrece la
Constitución en el sentido de que se cumplirán y se respetarán los derechos que en ella se
consagra, tanto en lo que se refiere al ejercicio de los de carácter privado como al de los de
índole pública”326.
El maestro y jurista HÉCTOR FIX ZAMUDIO, desde una perspectiva procesalista conceptúa
las garantías individuales, como: “Los medios jurídicos predominantemente carácter procesal,
que están dirigidos a la reintegración del orden constitucional cuando él mismo ha sido
desconocido por los órganos del poder”327.
Según nuestro criterio, las garantías constitucionales individuales son aquellos mecanismos
procesales constitucionales consignados y proclamados en el texto Constitucional, leyes y el
Derecho Internacional de los Derechos Humanos con la finalidad de dar seguridad y proteger
los derechos y libertades fundamentales de los ciudadanos, la sociedad o el Estado para que
dispongan de los medios que hagan efectivo el goce de los derechos subjetivos de los mismos
325
VÍCTOR M. MARTÍNEZ BULLÉ-GOYRI. Las Garantías Individuales en la Constitución de 1917. Instituto
de Investigaciones Jurídicas de la Universidad Nacional Autónoma de México. México. 1992. P. 3.
326
MANUEL OSSORIO. Diccionario de Ciencias Jurídicas, Políticas y Sociales. 3 a Edición. Editorial Heliasta.
S.R.L. Buenos Aires, Argentina. 2008. P. 430.
327
HÉCTOR FIX ZAMUDIO. La Constitución y su defensa. UNAM. México. 1994. P. 17.
328
SAÚL LARA ESPINOZA. Las Garantías Constitucionales en materia Penal. Editorial Porrúa. 3 era Edición.
México. 2005. P. 12 y 13.
127
frente el peligro o riesgo de ser desconocidos o vulnerados por los poderes públicos o
privados, afectando la dignidad del ser humano.
Es evidente que, una garantía puede proteger al ciudadano de la sanción del Estado, o puede
también proteger a la sociedad o al Estado de las actividades de los y las ciudadanos que
pudieron desestabilizar el régimen democrático y de Derecho Establecido; en consecuencia,
una garantía puede ser:
a) “Garantías de la libertad;
b) Garantías del orden público; y,
c) Garantías de procedimientos”329
De igual manera, acontece con el tratadista ISIDRO MONTIEL DUARTE, que expone una
clasificación en forma específica y realiza una división de “garantías de libertad, igualdad,
seguridad y propiedad”330.
329
JUVENTINO VICTOR CASTRO. Garantías y Amparo. Ob. Cit. P. 31.
330
ISIDRO MONTIEL DUARTE. Estudios sobre garantías Individuales. Editorial Porrúa. 6 ta Edición. México.
1998. P. 50.
128
Mientras que la jurista MATHA ELVA IZQUIERDO MUCIÑO hace en dos partes la
clasificación de las garantías Constitucionales:
a) Según el contenido de los derechos del gobernado, que consiste en que exigirá a
autoridad el respeto y observancia de sus garantías, como la de igualdad, seguridad,
propiedad;
Para los efectos de nuestro estudio, en base a los autores que han emitido sus criterios
ofrecemos modelos de clasificación de garantías constitucionales individuales mediante
cuadros sinópticos que son:
331
MATHA ELVA IZQUIERDO MUCIÑO. Garantías Individuales. Editorial OXFORD. UniversityPress.
México. S.A. Dec. V. 2da Edición. México. 2007. P. 32 y 33.
332
VICTOR M. MARTÍNEZ BULLÉ-GOYRI. Las Garantías Individuales en la Constitución de 1917. Ob. Cit.
P. 13.
129
co 1
CLASIFICACIÓN DE LAS
GARANTÍAS
INDIVIDUALES
Gráfico 2
Libertad personal
a) Garantías de libertad Libertad de acción
Libertad ideológica
CLASIFICAC Libertad económica
IÓN DE LAS
GARANTÍAS
INDIVIDUAL Comprenden diversas garantías de
ES libertad
b) Garantías del Orden
De competencia
Jurídico
De justicia
De propiedad
130
c) Garantías de
procedimientos
De irretroactividad
De legalidad
De exacta aplicación
de la ley
Las garantías constitucionales del proceso penal “son el cúmulo de principios, derechos y
libertades fundamentales reconocidos por la Constitución y, lato sensu, por los tratados
internacionales, que tienen por finalidad otorgar al imputado un marco de seguridad jurídica
y, en última instancia, mantener entre la llamada búsqueda de la verdad material y los
derechos fundamentales del imputado.333
La doctrina plantea que es necesario respetarlos y observarlos dentro del proceso penal y es
vital para la vigencia de un Estado Constitucional de Derecho, pues la Constitución establece
las reglas mínimas de un debido proceso penal y, en palabras de BIN BINDER, lo que
establece es “un diseño Constitucional del Proceso Penal”334.
Por lo que las garantías constitucionales se cofunden y complementan con los derechos
subjetivos y los principios procesales, como lo sostiene el jurista JUAN LUIS GÓMEZ
COLOMER, cuando afirma: “Los derechos fundamentales procesales, entendidos en el
333
DINO CARLOS CARO CORÍA. Las Garantías Constitucionales del Proceso Penal. Biblioteca Jurídica
Virtual del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM. México. 2013. P. 1028.
334
Ibídem. Ob. Cit. P. 1028
131
sentido amplio, incluyen también a los principios procesales, garantías institucionales y
libertades públicas reconocidos por la Constitución y que tienen aplicación en el proceso
penal335; en consecuencia, los textos Constitucionales o Legales utilizan conceptos como:
“derechos fundamentales, derechos fundamentales procesales, derechos humanos, principios
procesales, libertades públicas, garantías institucionales, entre otros conceptos que según la
doctrina guardan relación a lo mismo: las garantías procesales constitucionales”336.
335
JUAN LUÍS GÓMEZ COLOMER. Citado por Dino Carlos Caro Coría. Las Garantías Constitucionales del
Proceso Penal. Ob. Cit. P. 1027-1028.
336
SERGIO CÉSAR PARIONA CANALES. Garantías Constitucionales y Procedimentales del Proceso penal.
Extracto de la Obra ¨El Nuevo Proceso Penal y sus garantías¨. Universidad Nacional de San Cristobal de
Huamanga. Ayacucho-Perú. 2011. P. 3.
337
SALVADOR ENRIQUE ANAYA. Aplicación de la Constitución y Derecho Procesal Penal Constitucional,
en: Susana Castañeda Otsu (Coordinadora). Derecho Procesal Constitucional. Tomo I. Lima. 2004. P. 117.
338
WERNER GOLDSCHMIDT. Citado por Armenta Deu Teresa. Principios y sistemas de proceso penal
español. En Quinteros Olivares Gonzalo y Morales Prats Fermín (Coordinadores). El nuevo Derecho Penal
Español. Estudios Penales en memoria del profesor José Manuel Valle Muniz. Pamplona. 2001. P. 57.
339
CLAUS ROXIN. Derecho Procesal Penal. Ob. Cit. P. 10.
132
Por lo tanto, las garantías constitucionales se confunden y complementan con los derechos
subjetivos y los principios procesales constitucionales.
Sin embargo, hay que tener en cuenta que los principios constitucionales, según VÍCTOR
BURGOS MARIÑOS “son aquellas máximas que configuran las características esenciales de
un proceso, pudiendo coincidir o no con un ¨derecho fundamental procesal¨. Por ejemplo, el
principio de imparcialidad de los jueces, o el de igualdad procesal.340
También hay que señalar que los principios y garantías del proceso penal están
constitucionalizados. Por ello, la dinámica del Proceso Penal plasma evidencia de una
dinámica que provoca, en poco casos, colisiones entre estos derechos fundamentales. De ahí,
que en efecto, mediante “el proceso penal se busca realizar el Derecho Penal evitando la
afectación de los derechos fundamentales de las y los ciudadanos”341.
Por ello, el jurista PETER HÁBERLE afirma lo siguiente: “todos los derechos fundamentales
se encuentran en una relación más o menos estrecha entre sí. Se garantizan y refuerzan
recíprocamente”342.
340
VÍCTOR BURGOS MARIÑOS. El Proceso Penal Peruano: Una Investigación sobre su Constitucionalidad.
Universidad Nacional Mayor de San Marcos. Facultad de Derecho. Perú.2011. P. 30.
341
DANIEL PASTOR. Acerca del derecho fundamental l plazo razonable de duración del proceso penal en:
Jueces para la Democracia N° 49. Madrid. 2004. P. 51.
342
PETER HÁBERLE. LA libertad fundamental en el Estado Constitucional. Traducción del Italiano de Carlos
Ramos. Fondo Editorial de la Pontificia Universidad Católica del Perú. Lima. 1997. P. 66.
343
CONSTANTE CARLOS ÁVALOS RODRÍGUEZ. ¿Puede Prohibirse la revisión del expediente cuando aún
no se ha rendido la instructiva?. Entre la reserva de la instrucción y el derecho de defensa del inculpado”. En:
Actualidad Jurídica. N° 135. Gaceta Jurídica. Lima 2005. P. 105.
133
pueden ser total o parcialmente limitados o restringidos, pero hay que aclarar que las
restricciones o limitaciones que afecten a un derecho fundamental, tienen a su vez sus propias
limitaciones que es al respecto a su contenido esencial del derecho fundamental, como
sostiene LUÍS PRIETO SANCHÍS “límite de los límites” 344. Por ello, la actividad legislativa
tiene límite cuando se trata del contenido esencial de los derechos fundamentales; sin
embargo, el parámetro de interpretación de todo el ordenamiento jurídico 345 y especialmente
su interpretación y aplicación de las normas de Derecho procesal Penal.
“En el Estado Constitucional de Derecho, por regla general, no hay derechos cuyo ejercicio
pueda realizarse de manera absoluta, pues estos pueden ser limitadores ya sea en atención a
la necesidad de promover o respetar otros derechos fundamentales, ya sea porque su
reconocimiento se realiza dentro de un ordenamiento en el cual existen también reconocidas
una serie de principios y valores constitucionales. 346 .
El tratamiento de las garantías constitucionales a los derechos podría ser definido como toda
forma de “aseguramiento” o de “protección” de un derecho; y CLAUDIA STORINI, lo
conceptúa como “diversos mecanismos de protección de los derechos que se configuran como
elementos imprescindibles para su real eficacia jurídica”347. En efecto, a los derechos
fundamentales “expectativas negativas o positivas a los que corresponden obligaciones (de
prestación) o prohibiciones (de lesión)”. A las obligaciones de prestación y a las obligaciones
de prohibiciones las llama garantías primarias 348 a las obligaciones de reparar o sancionar las
344
LUÍS PRIETO SANCHÍS. Derechos Fundamentales. Neoconstitucionalismo y ponderación judicial. Palestra.
Lima. 2002. P. 58.
345
CARLOS MESÍAS. Derecho de la Persona. Dogmática Constitucional. Fondo Editorial del Congreso de la
República. Lima. 2004. P. 46.
346
Tomado de: LUÍS MIGUEL REYNA ALFARO. Jurisprudencia Penal Constitucional. Lima. 2003. P. 254.
Sentencia de 3 de Enero del 2003.
347
CLAUDIA STORINI. Las Garantías Constitucionales de los Derechos Fundamentales, en la nueva
Constitución del Ecuador. Santiago Andrade, Agustín Grijalba y Claudia Storini (Editores). UASB y
Corporación Editora Nacional. Quito. 2009. P. 287.
348
FARIT SIMON CAMPANA. Garantías de los Derechos de la Infancia y Adolescencia (de las legisladores
integrales al Estado Constitucional de Derechos). Algunas notas sobre los mecanismos de aplicación.
Derechos y Garantías de la niñez y adolescencia: Hacia la consolidación de la doctrina de protección integral.
Ramiro Ávila Santamaría y María Belén Corredores Ledesma. Serie Justicia y Derechos Humanos.
Neoconstitucionalismo y Sociedad. Quito. 2010. P. 465.
134
lesiones a los derechos (las omisiones y los abusos), es decir, la respuesta a la violencia de las
garantías primarias, la llamada garantías secundarias349.
Asimismo, la doctrina formula que la garantía de los derechos como la legitimación sustancial
(estricta legalidad), que sustenta el ejercicio de cualquier poder constituido, esto por “la
funcionalización de todos los poderes del estado al servicio de la garantía de los derechos
fundamentales de los ciudadanos, mediante la incorporación limitativa en su Constitución de
los deberes públicos correspondientes, es decir, de las prohibiciones de lesionar los derechos
de libertad y de las obligaciones de dar satisfacción a los derechos sociales, así como los
correspondientes poderes de los ciudadanos de activar la tutela judicial”350.
Continuando con el análisis de las garantías, según GERARDO PISARELLO, “se deben
diferenciar las garantías desde el punto de los sujetos en Garantías Institucionales (a cargo de
las instituciones y poderes públicos) y Extra-institucionales (o sociales que les corresponde en
cabeza de sus propios titulares)351.
349
LUIGI FERRAJOLI. Los fundamentos de los derechos fundamentales. Editorial Trotta. Madrid. 2011. P. 38
y 39.
350
LUIGI FERRAJOLI. Derecho y Razón. Ob. Cit. P. 856 y 857.
351
GERARDO PISARELLO. Los derechos sociales y sus garantías. Editorial Trotta. Madrid. 2007. P. 112.
135
sanciones o invalidar las violaciones a los derechos, que incluyen las técnicas de defensa y de
justicialidad de los derechos sociales”352.
El Proceso Penal requiere de una de las ideas fundamentales que es la de garantías, la que no
tiene una definición concreta y su clasificación es diversa por la doctrina; sin embargo,
actualmente, existen esfuerzos que hay que tenerlos en cuenta, cuando se da el tratamiento
del proceso penal con principio acusatorio.
El autor OSCAR JULIÁN GUERRERO expresa: “Algunos autores intentan hacer una
distinción entre principios y garantías, de donde se deduce que los primeros se refieren al
conjunto de normas constitucionales con incidencia en el proceso que afectan el ritual y
determinan el comportamiento correcto en la persecución estatal, mientras que las garantías se
suelen identificar con el conjunto de normas que amparan a los ciudadanos frente al poder de
persecución penal”353.
352
LUIGI FERRAJOLI. Derecho y Razón. Una Teoría del Garantísmo. Editorial Temis. Quinta Edición en
Español. Madrid. 2008. P. 680.
353
OSCAR JULIÁN GUERRERO PERALTA. Fundamentos Teórico Constitucionales del Nuevo Proceso
Penal. Segunda Edición. Ediciones Nueva Jurídica. Bogotá-Colombia. 2007. P. 29.
136
que configuran las características esenciales de un modelo procesal, y que sirven de guía para
la interpretación de las demás normas procesales y para dirigir el desarrollo concreto de cada
proceso”354.
Autores, como ALBERTO BINDER, agrupan los principios del proceso penal en niveles:
“Las garantías destinadas a impedir la manipulación del proceso penal, las que limitan la
potestad de Estado de buscar información probatoria y las que buscan limitar el empleo de la
jueza en el proceso”355.
Por otro lado, la doctrina española al hablar de la clasificación de las garantías en el proceso
penal afirma las siguientes:
Por su parte, la Corte Interamericana de Derechos Humanos considera las garantías como
medios procesales que “sirven para proteger, asegurar o hacer valer la titularidad o ejercicio
354
RODRIGO CERDA SAN MARTÍN y MARÍA ESTHER FELICES MENDOZA. El Nuevo Proceso Penal.
Constitucionalización, Principios y Racionalidad Probatoria. Editorial Jurídica GRIJLEY. Perú.2011. P. 95 y
96.
355
ALBERTO BINDER. Introducción al Derecho penal. Ob. Cit. P. 29.
356
FAUSTINO CORDÓN MORENO. Las Garantías Constitucionales del Proceso Penal. Aranzadi. Navarra.
1999. P. 7.
357
JOAN PICO I JUNOY. Las garantías constitucionales del proceso. Editorial Bosh. Barcelona. 1997. P. 57.
137
de un derecho, vale decir, los medios idóneos para que los derechos y libertades sean
efectivos en toda circunstancias”358.
Asimismo, la Corte IDH, en el mismo fallo que se cita, con relación al artículo 8 de la
Convención Americana de Derechos Humanos, señala: “Este artículo, cuya interpretación ha
sido solicitada expresamente, es denominado por la Convención ¨Garantías Judiciales¨, lo cual
puede inducir a confusión porque en ella no se consagra un medio de esa naturaleza en
sentido estricto. En efecto, el artículo 8° no contiene un recurso judicial propiamente dicho,
sino el conjunto de requisitos que deben observarse en las instancias procesales para que
pueda hablarse de propias y verdaderas garantías judiciales según la convención”359.
Por lo que, se determina los distintos niveles de clasificación de los derechos, principios y
garantías del proceso penal por el autor y catedrático alemán, CLAUS ROXÍN, que a
continuación graficamos:
4.1. Garantías Mínimas del Proceso Penal que establece el Derecho Internacional de los
Derechos Humanos
Artículo 9
Artículo 10
1. Toda persona privada de libertad será tratada humanamente y con el respeto debido
a la dignidad inherente al ser humano.
Artículo 14
358
Corte Interamericana de Derechos Humanos.Opinión Consultiva. OC-9/87.
359
Corte Interamericana de Derechos Humanos. Supra nota 3. Párrafos 27-28.
138
1. Todas las personas son iguales ante los tribunales y cortes de justicia. Toda persona
tendrá derecho a ser oída públicamente y con las debidas garantías por un tribunal
competente, independiente e imparcial, establecido por la ley, en la substanciación de
cualquier acusación de carácter penal formulada contra ella o para la determinación
de sus derechos u obligaciones de carácter civil. La prensa y el público podrán ser
excluidos de la totalidad o parte de los juicios por consideraciones de moral, orden
público o seguridad nacional en una sociedad democrática, o cuando lo exija el interés
de la vida privada de las partes o, en la medida estrictamente necesaria en opinión del
tribunal, cuando por circunstancias especiales del asunto la publicidad pudiera
perjudicar a los intereses de la justicia; pero toda sentencia en materia penal o
contenciosa será pública, excepto en los casos en que el interés de menores de edad
exija lo contrario, o en las acusaciones referentes a pleitos matrimoniales o a la tutela
de menores.
139
5. Toda persona declarada culpable de un delito tendrá derecho a que el fallo
condenatorio y la pena que se le haya impuesto sean sometidos a un tribunal superior,
conforme a lo prescrito por la ley.
7. Nadie podrá ser juzgado ni sancionado por un delito por el cual haya sido ya
condenado o absuelto por una sentencia firme de acuerdo con la ley y el procedimiento
penal de cada país”.360
1. “Toda persona tiene derecho a que se respete su integridad física, psíquica y moral.
2. Nadie puede ser privado de su libertad física, salvo por las causas y en las
condiciones fijadas de antemano por las Constituciones Políticas de los Estados Partes
o por las leyes dictadas conforme a ellas.
4. Toda persona detenida o retenida debe ser informada de las razones de su detención y
notificada, sin demora, del cargo o cargos formulados contra ella.
360
Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos. Adoptado y abierto a la firma, ratificación y adhesión
por la Asamblea General en su resolución 2200 A (XXI), de 16 de diciembre de 1966., Articulo 9. 1;
Artículo 10. 1 y Artículo 14. Disponible en:
http://www.ohchr.org/SP/ProfessionalInterest/Pages/CCPR.aspx
361
Convención Americana sobre Derechos Humanos. San José, Costa Rica 7 al 22 de noviembre de 1969
(Pacto de San José), 1969. 5 1. Disponible en: https://www.oas.org/dil/esp/tratados_B-
32_Convencion_Americana_sobre_Derechos_Humanos.htm
140
5. Toda persona detenida o retenida debe ser llevada, sin demora, ante un juez u otro
funcionario autorizado por la ley para ejercer funciones judiciales y tendrá derecho a
ser juzgada dentro de un plazo razonable o a ser puesta en libertad, sin perjuicio de que
continúe el proceso. Su libertad podrá estar condicionada a garantías que aseguren su
comparecencia en el juicio.
6. Toda persona privada de libertad tiene derecho a recurrir ante un juez o tribunal
competente, a fin de que éste decida, sin demora, sobre la legalidad de su arresto o
detención y ordene su libertad si el arresto o la detención fueran ilegales. En los
Estados Partes cuyas leyes prevén que toda persona que se viera amenazada de ser
privada de su libertad tiene derecho a recurrir a un juez o tribunal competente a fin de
que éste decida sobre la legalidad de tal amenaza, dicho recurso no puede ser
restringido ni abolido. Los recursos podrán interponerse por sí o por otra persona.
7. Nadie será detenido por deudas. Este principio no limita los mandatos de autoridad
judicial competente dictados por incumplimientos de deberes alimentarios”362
1. “Toda persona tiene derecho a ser oída, con las debidas garantías y dentro de un
plazo razonable, por un juez o tribunal competente, independiente e imparcial,
establecido con anterioridad por la ley, en la sustanciación de cualquier acusación penal
formulada contra ella, o para la determinación de sus derechos y obligaciones de orden
civil, laboral, fiscal o de cualquier otro carácter”. 363
362
Ibídem Artículo 7. 1-7 Disponible en: https://www.oas.org/dil/esp/tratados_B-
32_Convencion_Americana_sobre_Derechos_Humanos.htm
363
Ibídem Artículo 8. 1 Disponible en: https://www.oas.org/dil/esp/tratados_B-
32_Convencion_Americana_sobre_Derechos_Humanos.htm
141
e) derecho irrenunciable de ser asistido por un defensor proporcionado por el
Estado, remunerado o no según la legislación interna, si el inculpado no se
defendiere por sí mismo ni nombrare defensor dentro del plazo establecido por la
ley;
3. “La confesión del inculpado solamente es válida si es hecha sin coacción de ninguna
naturaleza.
4. El inculpado absuelto por una sentencia firme no podrá ser sometido a nuevo juicio
por los mismos hechos.
5. El proceso penal debe ser público, salvo en lo que sea necesario para preservar los
intereses de la justicia” 365
Podemos sostener que las garantías constitucionales del proceso penal moderno delimitan y
establecen el ámbito de actuación de la justicia penal. Estas garantías procesales, según la
mayoría de la doctrina latinoamericana, que incluso los ha acogido el Derecho Procesal Penal
Ecuatoriano, son:
c) Derecho a obtener una resolución fundada en derecho que ponga fin al proceso
364
Ibídem Artículo 8 2. literales a – h. Disponible en: https://www.oas.org/dil/esp/tratados_B-
32_Convencion_Americana_sobre_Derechos_Humanos.htm
365
Ibídem Articulo 8 Articulo 3, 4 y 5. Disponible en: https://www.oas.org/dil/esp/tratados_B-
32_Convencion_Americana_sobre_Derechos_Humanos.htm
142
a) Interdicción de la persecución múltiple (principios de ne bis in idem)
c) Derecho a la defensa
b) Principios de publicidad
c) Principios de celeridad
4.4. Las garantías mínimas del proceso penal en el contexto del derecho internacional de
los derechos humanos
Gráfico 3
Por todo ello, el artículo 8.2.b convencional rige incluso antes de que se formule
una “acusación” en sentido estricto. Para que el mencionado artículo satisfaga los
fines que le son inherentes, es necesario que la notificación ocurra previamente a
que el inculpado rinda su primera declaración ante cualquier autoridad pública.
El hecho de que el señor Barreto Leiva hubiese podido conocer por los medios de
comunicación o por su declaración previa ante el Congreso (supra párr. 33) el tema
de la investigación que se estaba realizando, no relevaba al Estado de cumplir con
144
lo dispuesto en el artículo 8.2.b de la Convención. El investigador, antes de
declarar, tiene que conocer de manera oficial cuáles son los hechos que se le
imputan, no sólo deducirlos de la información pública o de las preguntas que se le
formulan. De esta forma su respuesta podrá ser efectiva y sin el margen de error
que las conjeturas producen; se garantizará el principio de congruencia, según el
cual debe mediar identidad entre los hechos de los que se informa al inculpado y
aquellos por los que se le procesa, acusa y sentencia, y se asegura el derecho a la
defensa”.366
CAPÍTULO V
145
1. EL DERECHO FUNDAMENTAL DEL DEBIDO PROCESO PENAL
El debido proceso legal es parte del Derecho Constitucional Procesal que determina los
principios, derechos y presupuestos procesales mínimos que debe reunir todo proceso judicial
o jurisdiccional, en el que se respetarán todas las garantías por parte de los funcionarios
judiciales y sus resoluciones deber ser motivadas.
146
El debido proceso legal o Thedueprocess of Law es una institución de origen o procedencia
del Derecho Anglosajón, que significa: debido proceso legal. “Se descompone en: el debido
proceso sustantivo, que protege a los ciudadanos de las leyes contrarias a los derechos
fundamentales y, el debido proceso adjetivo que se refiere a las garantías procesales que
aseguran los derechos fundamentales”367. Por tal motivo, el constitucionalismo Europeo,
norteamericano y latinoamericano ha incorporado en sus textos constitucionales el Debido
Proceso; además, la doctrina y la jurisprudencia coinciden que el debido proceso es un
derecho fundamental de todo ciudadano y ciudadana o colectivos, y no solo un principio o
derecho de los operadores de justicia o de la administración pública.
El autor IÑAKI ESPARZA LEIBAR al referirse al debido proceso, señala: surge del derecho
inglés o su traducción al derecho eurocontinental previendo “chances iguales” para el
imputado en juicio”368.
“En suma, se entiende por debido proceso aquel que se realiza en observancia estricta de los
principios y garantías constitucionales reflejadas en los principios, previsiones normativas de
la ley procesal: único del proceso, actos de investigación, actividad probatoria, las distintas
diligencias judiciales, los mecanismos de impugnación, el respeto de los términos procesales,
etc.”369.
El jurista EDUARDO J. COUTURE describe como una “Garantía constitucional que consiste
367
JOHN NOWA Y RONAL ROTUNDA. Constitucional Law, St. Paul Min. 1995. P. 380-451. También ver:
César Landa. El derecho fundamental al debido proceso y a la tutela jurisdiccional. En: pensamiento
constitucional, año VIII N° 8. Pontificia Universidad Católica del Perú. Fondo Editorial. Lima. 2002. P. 445-
461.
368
IÑAKI ESPARZA LEIBAR. El debido proceso. José María Bosch Editor. Barcelona. 1995. P. 241.
369
PABLO SÁNCHEZVELARDE. Comentario al Código Procesal Penal. Lima. Editorial Idemsa. 1994. P. 100.
370
GUILLERMO CABANELLAS. Diccionario de Derecho Usual. Ob. Cit. P. 69.
147
en asegurar a los individuos la necesidad de ser escuchados en el proceso en que se juzga su
conducta, con razonables oportunidades para la exposición y prueba de sus derechos”371.
El jurista LUIS CUEVA CARRIÓN sostiene: “El debido proceso es un sistema de garantías y
de normas jurídicas de carácter sustancial y de grado superior, porque son constitucionales, le
señala la debida y correcta actuación al funcionario público, le fija los límites dentro de los
que debe actuar y la manera de impartir justicia imparcial, efectiva y oportuna”373.
176. El concepto del debido proceso en casos penales debe incluir, por lo menos, las garantías
mínimas a que hace referencia el artículo 8 de la Convención. Al denominarlas mínimas ésta
presume que, en circunstancias específicas, otras garantías adicionales pueden ser necesarias si
se trata de un debido proceso legal375
371
EDUARDO J. COUTURE. Vocabulario Jurídico. Editorial Depalma. Buenos Aires. 1978. P. 199.
372
ALFONSO ZAMBRANO PASQUEL. El debido Proceso Penal. Editorial Edino. 2002. Guayaquil. P. 25.
373
LUIS CUEVA CARRIÓN. El Debido Proceso. Segunda Edición actualizada y ampliada. Ediciones Cueva
Carrión. Ecuador. 2013. P. 81.
374
JORGE BLUM CARCELÉN. La Constitucionalización del Proceso Penal. P. 273. Véase en: Gladys Terán
Sierra, Editora. Temas Penales. Estudios de Derecho Penal y Criminología. Corte Nacional de Justicia.
Quito-Ecuador. 2016.
375
CONSTANZA NUÑEZ. Estándares internacionales sobre proceso penal y derechos humanos: recopilación
de jurisprudencia y observaciones de organismos internacionales para la Defensoría Penal Pública, 2014.
148
1.3. Constitucionalización del Debido Proceso Penal
149
Hay que puntualizar que todo proceso judicial o administrativo u otros, actualmente “el
debido proceso es uno de los derechos fundamentales generales presentes en cualquier
Constitución que merezca tal apelativo” 379y así se “reconoce al debido proceso como una
garantía constitucional a favor de los derechos del imputado en el proceso penal así como
garantía de la organización judicial”380.
Asimismo, ANÍBAL QUIROGA LEÓN señala: Que uno de los aspectos esenciales del
debido proceso legal en el derecho procesal contemporáneo es el relativo a lograr y preservar
la igualdad efectiva de las partes en juicio como la aplicación del principio genérico de la
igualdad de los ciudadanos ante la Ley, consagrado en el artículo 1 de la Declaración de los
Derechos del Hombre y del Ciudadano, 1798.381
Al respecto, CLAUS ROXIN refiere que “el derecho procesal penal es el sismólogo de la
Constitución Política del Estado”382 Por tal motivo, en los textos constitucionales se utilizan
conceptos como “derechos fundamentales, derechos fundamentales procesales, derechos
humanos, principios procesales, libertades públicas, garantías institucionales, entre otros
conceptos, para referirse por lo general a lo mismo: las garantías procesales penales
constitucionalizadas”383. Por su parte, JUAN LUÍS GÓMEZ, manifiesta: “los derechos
fundamentales pueden ser, y de hecho son al mismo tiempo, aunque considerados desde un
punto de vista distinto, libertades públicas, garantías institucionales o principios procesales”,
y, agrega que, “los derechos fundamentales procesales, entendidos en sentido amplio,
incluyen también a los principios procesales, garantías institucionales y libertades públicas
reconocidas por la Constitución y que tienen aplicación en el proceso penal 384. Por lo tanto,
encuentre en servicio efectivo en tiempo de guerra o peligro público; tampoco se pondrá a persona alguna
dos veces en peligro de perder la vida o algún miembro con motivo del mismo delito; ni se le forzará a
declarar contra sí misma en ningún juicio criminal; ni se le privará de la vida, la libertad o la propiedad sin el
debido proceso legal; ni se ocupará su propiedad privada para uso público sin una justa indemnización”.
379
CARLOS BERNAL PULIDO. El derecho de los Derechos. Ob. Cit. P. 333.
380
CESAR SAN MARTÍN CASTRO. Derecho Procesal penal. Ob. Cit. P. 203.
381
ANÍBAL QUIROGA LEÓN. El debido proceso legal en el Perú y el sistema interamericano de protección
de derechos humanos. Jurista. Lima. 2003. P. 186.
382
CLAUS ROXIN. Derecho Procesal Penal. Ob. Cit. P. 10.
383
DINO CARLOS CARO CORIA (Perú). Las garantías constitucionales del proceso penal. Biblioteca Jurídica
Virtual del Instituto de investigación jurídica de la UNAM. Disponible en:
http://www.corteidh.or.cr/tablas/R08047-30.pdf
384
JUAN LUÍS GÓMEZ COLOMER. Constitución y Proceso Penal. Madrid. Tecnos. 1996. Colombia. P. 156.
150
“toda legislación es entendida como actuación de la Constitución y se la interpreta a la luz de
la Constitución”385. Pues bien, es necesario que exista un “diseño constitucional del procesal
penal”386.
Asimismo, la doctrina constitucional colombiana define las dos dimensiones del derecho del
debido proceso, y al respecto el jurista CARLOS BERNAL PULIDO sostiene: “En primer
lugar, se trata de un derecho que protege las facultades del individuo para participar en los
procedimientos del Estado constitucional democrático y el ejercicio dentro del marco de
dichos procedimientos de las facultades de hacer argumentaciones, afirmaciones, aportar
pruebas y las capacidades de rebatir los argumentos de los demás y de auto-criticarse. Por otro
lado, se trata también de “un mecanismo para la protección de otros derechos fundamentales.
En tal sentido, el debido proceso se convierte en un pilar fundamental para la defensa de los
derechos de las personas que intervienen dentro de un juicio; alrededor de aquel se articulan
una serie de principios y garantías básicas que permiten una correcta administración de
justicia”.387
385
PAOLO COMANDUCCI. Constitución y Teoría del Derecho. México. Distribuciones Fontamara. 2007. P.
38-52.
386
ALBERTO BINDER. Introducción al derecho procesal penal. Ob. Cit. P. 67 y ss.
387
Sentencia de la Corte Constitucional de Colombia. Sentencia N° 048-11SEP-CC, Caso N° 1252-10-EP. R.O.
N° 606 de 28 de Diciembre de 2011. Citado por: Simón Valdivieso Vintimilla. Litigación Penal en el
Ecuador. Ediciones Carpol. Ecuador. 2014. P. 85.
151
“El artículo 8.1 de la Convención no se aplica solamente a jueces y tribunales judiciales. Las
garantías que establece esta norma deben ser observadas en los distintos procedimientos en que
los órganos estatales adoptan decisiones sobre la determinación de los derechos de las personas,
ya que el Estado también otorga a autoridades administrativas, colegiadas o unipersonales, la
función de adoptar decisiones que determinan derechos” 388
El autor MONTERO AROCA señala que formarían parte del debido proceso, en atención a su
vinculación con los convenios internacionales, a través de los cuales pueden integrarse
garantías concretas no reconocidas expresamente en la Constitución pero sí en esos
Convenios, las siguientes garantías específicas:
Los Tratados y Pactos internacionales contienen disposiciones sobre el debido proceso legal y
establecen precisión los requisitos:
388
CONSTANZA, NUÑEZ. Ob. Cit. Corte Interamericana de Derechos Humanos. Caso Barbani Duarte Vs.
Uruguay. Fondo, Reparaciones y Costas. Sentencia de 13 de octubre de 2011. Serie C No. 234. Disponible
en: http://www.cdh.uchile.cl/media/publicaciones/otros/Informe_jurisprudencia_DPP.pdf
389
JUAN MONTERO AROCA. Derecho jurisdiccional. Proceso penal. Volumen II. Tirant lo Blanch. Valencia.
2001. P. 102.
152
Artículo 7.-
Ningún hombre puede ser acusado, arrestado o detenido, como no sea en los casos
determinados por la ley y con arreglo a las formas que ésta ha prescrito. Quienes
soliciten, cursen, ejecuten o hagan ejecutar órdenes arbitrarias deberán ser
castigados; pero todo ciudadano convocado o aprehendido en virtud de la ley debe
obedecer de inmediato; es culpable si opone resistencia.390
Artículo 8.-
Toda persona tiene derecho a un recurso efectivo ante los tribunales nacionales
competentes, que la ampare contra actos que violen sus derechos fundamentales
reconocidos por la constitución o por la ley.
Artículo10.
Todo el mundo tiene derecho, en plena igualdad, a ser oída públicamente por un
tribunal independiente e imparcial, para la determinación de sus derechos y
obligaciones o para el examen de cualquier acusación penal formulada contra ella.
Artículo11.
Artículo 14.
390
Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano, 1789. Artículo 7. Disponible en:
http://www.fmmeducacion.com.ar/Historia/Documentoshist/1789derechos.htm
391
Declaración Universal de los Derechos Humanos, 1948.Adoptada y proclamada por la Resolución de la
Asamblea General 217 A (III) del 10 de diciembre de 1948, París. Artículo 8, 10, y 11. 1.2. Disponible en:
http://www.un.org/es/documents/udhr/
153
1. Todas las personas son iguales ante los tribunales y cortes de justicia. Toda
persona tendrá derecho a ser oída públicamente y con las debidas garantías por
un tribunal competente, independiente e imparcial, establecido por la ley, en la
substanciación de cualquier acusación de carácter penal formulada contra ella
o para la determinación de sus derechos u obligaciones de carácter civil. La
prensa y el público podrán ser excluidos de la totalidad o parte de los juicios por
consideraciones de moral, orden público o seguridad nacional en una sociedad
democrática, o cuando lo exija el interés de la vida privada de las partes o, en la
medida estrictamente necesaria en opinión del tribunal, cuando por
circunstancias especiales del asunto la publicidad pudiera perjudicar a los
intereses de la justicia; pero toda sentencia en materia penal o contenciosa será
pública, excepto en los casos en que el interés de menores de edad exija lo
contrario, o en las acusaciones referentes a pleitos matrimoniales o a la tutela
de menores.
392
Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, 1966.Adoptado y abierto a la firma, ratificación y
adhesión por la Asamblea General
en su resolución 2200 A (XXI), de 16 de diciembre de 1966. Entrada en vigor: 23 de marzo de 1976, de
conformidad con el artículo 49. Disponible en:
http://www.ohchr.org/SP/ProfessionalInterest/Pages/CCPR.aspx
154
d) derecho del inculpado de defenderse personalmente o de ser asistido por un
defensor de su elección y de comunicarse libre y privadamente con su
defensor;
e) derecho irrenunciable de ser asistido por un defensor proporcionado por el
Estado, remunerado o no según la legislación interna, si el inculpado no se
defendiere por sí mismo ni nombrare defensor dentro del plazo establecido
por la ley;
f) derecho de la defensa de interrogar a los testigos presentes en el tribunal y de
obtener la comparecencia, como testigos o peritos, de otras personas que
puedan arrojar luz sobre los hechos;
g) derecho a no ser obligado a declarar contra sí mismo ni a declararse
culpable, y
h) derecho de recurrir del fallo ante juez o tribunal superior.
a) a garantizar que la autoridad competente prevista por el sistema legal del
Estado decidirá sobre los derechos de toda persona que interponga tal
recurso;
b) a desarrollar las posibilidades de recurso judicial, y
c) a garantizar el cumplimiento, por las autoridades competentes, de toda
decisión en que se haya estimado procedente el recurso”.393
393
Convención Americana sobre Derechos Humanos. San José, Costa Rica 7 al 22 de noviembre de 1969
(Pacto de San José), 1969. Artículo 8. Disponible en: https://www.oas.org/dil/esp/tratados_B-
32_Convencion_Americana_sobre_Derechos_Humanos.htm
155
“En opinión de esta Corte, para que exista “debido proceso legal” es preciso que un justiciable
pueda hacer valer sus derechos y defender sus intereses en forma efectiva y en condiciones de
igualdad procesal con otros justiciables. Al efecto, es útil recordar que el proceso es un medio
para asegurar, en la mayor medida posible, la solución justa de una controversia. A ese fin
atiende el conjunto de actos de diversas características generalmente reunidos bajo el concepto
de debido proceso legal. El desarrollo histórico del proceso, consecuente con la protección del
individuo y la realización de la justicia, ha traído consigo la incorporación de nuevos derechos
procesales. Son ejemplo de este carácter evolutivo del proceso los derechos a no
autoincriminarse y a declarar en presencia de abogado, que hoy día figuran en la legislación y
en la jurisprudencia de los sistemas jurídicos más avanzados. Es así como se ha establecido, en
forma progresiva, el aparato de las garantías judiciales que recoge el artículo 14 del Pacto
Internacional de Derechos Civiles y Políticos, al que pueden y deben agregarse, bajo el mismo
concepto, otras garantías aportadas por diversos instrumentos del Derecho Internacional” 394.
394
Corte Interamericana de Derechos Humanos. Opinión Consultiva OC-16/99 de 1 de octubre de 1999. Serie A
No. 16. Véase: Claudio Nash (director proyecto) y Constanza Núñez (investigadora a cargo
recopilación).Estándares internacionales sobre proceso penal y derechos humanos: recopilación de
jurisprudencia y observaciones de organismos internacionales para la Defensoría Penal Pública. 44.
395
Corte Constitucional del Ecuador. Suplemento del Registro Oficial N° 97, de 29 de diciembre del 2009. P. 74
y 75. Citado por: Luis Cueva Carrión. Jurisprudencia de la Corte Constitucional. Tomo I. Ediciones Cueva
Carrión. Ecuador. 2010. P. 155.
156
procesales valor alguno (costa o tasas judiciales) por prestar servicios en los conflictos
penales públicos, porque la Justicia es un “bien público” que no se puede privar a
ninguna persona; de similar naturaleza que, por ejemplo, la defensa nacional, o el
servicio de policía396
Las ciudadanas y ciudadanos pobres no tienen capacidad para tramitar o sostener un proceso
jurisdiccional y consecuentemente por su pobreza sufren discriminación material por no tener
recursos económicos para acudir al sistema de justicia; por lo que están en situación de
desigualdad ante quienes tienen recursos para los costos que implican los procesos judiciales.
Por lo tanto, es necesario que los Estados Constitucionales de derechos y justicia implementen
programas de asistencia legal gratuita destinados a patrocinar procesos laborales, penales,
administrativos, intrafamiliares, niñez y adolescencia, entre otros; incluso dar alternativas para
iniciar ciertos causas legales no sea necesario el patrocinio de letrado (abogado) como, por
ejemplo, en procesos garantistas constitucionales, como es el caso del Ecuador; en alimentos,
filiación, y otros; y, estos obstáculos para el acceso a la justicia en América Latina, es un
hecho material, es decir, “es una realidad indiscutible que los poderes judiciales en América
Latina no tienen la capacidad ni los recursos suficientes para resolver todos los conflictos que
se presentan dentro de los territorios bajo su competencia. Por otro lado, es también
indiscutible que un sector de la población no puede acudir a ellos por falta de recursos
económicos”398.
396
DAVID BURNING HAM y otros. Economía. Madrid. Ediciones Pirámide S.A. 1996. P. 54.
397
JOSÉ ANTONIO NEYRA FLORES. Manual del nuevo proceso Penal y de Litigación Oral. Indensa. Lima.
2010. P. 124 y 125.
398
Obstáculos para el Acceso a la Justicia en las Américas. Debido Proceso Legal. Barreras Económicas. El
Instituto de Defensa Legal (IDL) de Perú. P. 24. Disponible en:
157
Por ello, “los costos económicos vinculados con la contratación de un abogado, el pago de las
tasas judiciales y el acceso físico a los tribunales constituye un obstáculo difícil de sortear
para quienes viven en condiciones de pobreza e indigencia”399.
La Corte IDH y la CIDH coinciden en afirmar que no solo la ausencia de asistencia jurídica
gratuita es el único obstáculo de tipo económico para ejercer el derecho a la justicia y el
acceso a la administración de justicia, sino también otros costos procesales que demanda el
sistema y no pueden pagar un abogado defensor y en ciertos casos judiciales, el pago de tasas
judiciales. En consecuencia, las tasas judiciales o costos judiciales deben ser razonables, de tal
manera que no constituyan un obstáculo para el acceso a la justicia y a la administración de
justicia, especialmente en el caso de las personas y/o grupos más vulnerables y sectores
excluidos.400
Es evidente que tanto la Corte IDH como la CIDH han determinado la obligación de los
Estados de proveer servicios jurídicos gratuitos a las personas sin recursos económicos a fin
de evitar violación de su derecho a las garantías judiciales y a la protección judicial efectiva
de conformidad a las disposiciones de los instrumentos internacionales de derechos humanos,
y cuando existan las tasas judiciales o costos judiciales deben ser razonables, de tal manera
que no constituyan un obstáculo para el acceso a justicia y a la administración de justicia,
especialmente en el caso de las personas y/o grupos más vulnerables y sectores excluidos.
http://www.dplf.org/sites/default/files/obstaculos_para_el_acceso_a_la_justicia_en_las_americas_version_fin
al.pdf
399
HAYDÉE BIRGIN y NATALIA GHERARDI. La Garantía de acceso a la justicia: Aportes Empíricos y
Conceptuales. Colección: “Género, Derecho y Justicia”. N° 6. P. XV. Disponible en:
https://d3gqux9sl0z33u.cloudfront.net/AA/AT/gambillingonjusticecom/downloads/224443/La_Garantia_de_
Acceso_a_la_Justicia.pdf
400
MARÍA MERCEDES LEMA y VÍCTOR MORALES RESCIA. El Acceso a la Justicia y Derechos
Humanos en el Ecuador. Editorial del IIDH. Costa Rica.2009. Ob. Cit. P. 75 y 76.
158
Artículo 75. Derecho de acceso gratuito a la justicia; y a la tutela efectiva de los
derechos.
401
Constitución de la República del Ecuador. Artículo. 75. Disponible en:
http://www.asambleanacional.gov.ec/documentos/constitucion_de_bolsillo.pdf
402
Constitución de la República del Ecuador. Artículo. 168, numeral 4. Disponible en:
http://www.asambleanacional.gov.ec/documentos/constitucion_de_bolsillo.pdf
403
Código Orgánico de la Función Judicial, 2009. Artículo 12. Disponible en:
http://www.funcionjudicial.gob.ec/index.php/es/normativa/codigo-organico-de-la-funcion-judicial.html
159
“Esta disposición de la Convención (8.1.) consagra el derecho de acceso a la justicia. De ella
se desprende que los Estados no deben interponer trabas a las personas que acudan a los
jueces o tribunales en busca de que sus derechos sean determinados o protegidos. Cualquier
norma o medida del orden interno que imponga costos o dificulte de cualquier otra manera el
acceso de los individuos a los tribunales, y que no esté justificada por las razonables
necesidades de la propia administración de justicia, debe entenderse contraria al precitado
artículo 8.1. de la Convención”.
A continuación agrega: “La suma fijada por concepto de tasa de justicia y la correspondiente
multa constituyen, a criterio de ese tribunal, una obstrucción al acceso a la justicia sea, en
términos aritméticos, proporcional al monto de la demanda. Esta Corte considera que si bien
el derecho al acceso a la justicia no es absoluto y, consecuentemente, puede estar sujeto a
algunas limitaciones discrecionales por parte del Estado, lo cierto es que éstas deben guardar
correspondencia entre el medio empleado y el fin perseguido y, en definitiva, no pueden
suponer la negación misma de dicho derecho [...] Este Tribunal estima que para satisfacer el
derecho de acceso a la justicia no basta que en el respectivo proceso se produzca una
decisión judicial definitiva. También se requiere que quienes participan en el proceso puedan
hacerlo sin temor de verse obligados a pagar sumas desproporcionadas o excesivas a causa
de haber recurrido a los tribunales. Esta última situación se agrava en la medida en que para
forzar el pago procedan las autoridades a embargar los bienes del deudor o a quitarle la
posibilidad de ejercer el comercio”404.
Ser juzgado por un juez natural es un derecho constitucional penal fundamental que tiene todo
ciudadano, como una garantía del derecho procesal establecida en la Constitución y en el
Derecho Internacional de los Derechos Humanos; esta garantía implica que el poder judicial
ha de preexistir al acto punible, es decir, es un derecho a un juez con competencias, señaladas
por la Constitución y la Ley; ha de ser permanente, creado de acuerdo con la norma
Constitucional y legal; el juez natural es un administrador de justicia penal con competencia
exclusiva indelegable y universal para juzgar como administrador de justicia conoce de causa
que se originó en su jurisdicción-territorio por mandato de la ley”.
Por lo tanto, cada ciudadano debe ser juzgado donde tiene su domicilio o donde sucedió el
hecho según las circunstancias, en la que el juez natural tiene competencia y constituye un
elemento del debido proceso penal legal que tiene carácter previo y permanente.
Según VICTOR CUBAS VILLANUEVA, esta garantía de juez natural “[…] constituye un
derecho fundamental que asiste a todos los sujetos del derecho, en virtud del cual deben ser
juzgado por un órgano jurisdiccional perteneciente a la jurisdicción penal ordinaria,
404
Corte Interamericana de Derechos Humanos. Caso Cantos Vs. Argentina. Sentencia de 28 de noviembre de
2002. Fondo, reparaciones y costas. Página, párrafo 54.
160
respetuoso de los principios constitucionales de igualdad, independencia, imparcialidad y
sumisión a la ley”405.
Esta garantía implica el debido proceso y tiene concordancia y relación con la garantías de
imparcialidad, de independencia, el derecho a la tutela jurisdiccional efectiva y el juicio
previo; y por otro lado, el autor GIMENO SENDRA, señala: “este derecho encierra una doble
garantía: primero, para el justiciable se le asegura que no deberá ser juzgado por órgano que
no sea uno que integre la jurisdicción: segundo, constituye una garantía propia de la
jurisdicción, ya que impide que el ejecutivo disponga a su antojo la Constitución y
funcionamiento de los tribunales”406.
Es evidente, que todo ciudadano tiene derecho a ser juzgado por un juez o Tribunal
previamente establecido en la Ley y la Constitución, por lo tanto, el procesado o la victima
tiene derecho a que se le administre justicia penal por jueces de los órganos judiciales
competentes, independientes e imparciales declaren derechos o establezcan sanciones al
amparo del principio de acceso a la justicia y al debido proceso, consagrada en la Convención
Americana sobre Derechos Humanos:
Capítulo XXXIX
“Ningún hombre libre podrá ser detenido o encarcelado o privado de sus derechos
o de sus bienes, ni puesto fuera de la ley ni desterrado o privado de su rango de
cualquier otra forma, ni usaremos de la fuerza contra él ni enviaremos a otros que
lo hagan, si no en virtud de sentencia judicial de sus partes y con arreglo a la ley del
reino”407
405
VÍCTOR CUBAS VILLANUEVA. El Proceso penal. Teoría y Jurisprudencia Constitucional. Sexta Edición.
Palestra. Lima 2006. P. 64.
406
VICENTE GIMENO SENDRA, Citado por: Víctor Cubas Villanueva. El Proceso penal. Teoría y
Jurisprudencia Constitucional. Ob. Cit. P. 62.
407
Carta Magna del 1215, siglo XIII, Ley Juan sin Tierra. Disponible en: file:///C:/Users/user/Downloads/232-
861-1-PB.pdf
161
Artículo 10
Artículo XXVI.
(…) Toda persona acusada de delito tiene derecho a ser oída en forma imparcial y
pública, a ser juzgada por tribunales anteriormente establecidos de acuerdo con
leyes preexistentes y a que no se le imponga penas crueles, infamantes o
inusitadas.409
Artículo 14.
1.- “Todas las personas son iguales ante los tribunales y cortes de justicia. Toda
persona tendrá derecho a ser oída públicamente y con las debidas garantías por un
tribunal competente, independiente e imparcial, establecido por la ley, en la
substanciación de cualquier acusación de carácter penal formulada contra ella o
para la determinación de sus derechos u obligaciones de carácter civil”(…)410
1.- “Toda persona tiene derecho a ser oída, con las debidas garantías y dentro de un
plazo razonable, por un juez o tribunal competente, independiente e imparcial,
establecido con anterioridad por la ley, en la sustanciación de cualquier acusación
408
Declaración Universal de Derechos Humanos. Adoptada y proclamada por la Asamblea General en su
resolución 217 A (III), de 10 de diciembre de 1948. Artículo 10. Disponible en:
http://www.un.org/es/documents/udhr/
409
La IX Conferencia Internacional Americana. Declaración Americana de los Derechos y Deberes del
Hombre, 1948. Artículo XXVI. Disponible en: http://www.un.org/es/documents/udhr/
410
Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos. Adoptado y abierto a la firma, ratificación y adhesión
por la Asamblea General en su resolución 2200 A (XXI), de 16 de diciembre de 1966.Artículo 14.
Disponible en: http://www.ohchr.org/SP/ProfessionalInterest/Pages/CCPR.aspx
162
penal formulada contra ella, o para la determinación de sus derechos y obligaciones
de orden civil, laboral, fiscal o de cualquier otro carácter”411.
La Corte considera que no cabe sustraer del proceso de justicia y paz la competencia para que el
juez penal decida sobre la reparación integral de las víctimas, pues ello implica desconocer el
principio de juez natural consagrado en el artículo 29 de la Constitución Nacional. Por
consiguiente, el incidente de reparación previsto en la Ley 975 de 2005 debe adelantarse hasta
su culminación por el juez de la causa, sin perjuicio de las competencias que corresponden a la
Unidad Administrativa Especial para la Atención y Reparación Integral a las Víctimas y a la
Unidad Administrativa Especial de Gestión de Restitución de Tierras Despojadas, en el marco
de los programas de reparación integral y de restitución de tierras de que trata la Ley 1448 de
2011. Cabe precisar que la decisión de inexequibilidad adoptada se refiere a la hipótesis en que
la víctima decida solicitar la reparación dentro del proceso penal, evento en el cual por virtud
del principio de juez natural corresponde al Tribunal de Justicia y Paz ordenar en cada caso en
concreto las medidas de reparación a favor de las víctimas, toda vez que las otras formas de
reparación que no surjan de un proceso penal seguirán a cargo de las Unidades Administrativas
Especiales de Atención y Reparación Integral a las víctimas y de Gestión de Restitución de
Tierras Despojadas de acuerdo con las competencias señaladas en la Ley 1448 de 2011, pues
cabe resaltar que esta decisión no modifica las funciones atribuidas por otras disposiciones
legales a la Unidad Administrativa Especial de Atención y Reparación Integral a las víctimas y
a la Unidad Administrativa Especial de Gestión de Restitución de Tierras Despojadas en lo
concerniente a la ayuda humanitaria, atención, asistencia y reparación de las víctimas. 412
“75. El artículo 8.1 de la Convención garantiza el derecho a ser juzgado por “un tribunal
competente […] establecido con anterioridad a la ley”, disposición que se relaciona con el
concepto de juez natural, una de las garantías del debido proceso (…) 76. El juez natural deriva
su existencia y competencia de la ley (…) Consecuentemente, en un Estado de Derecho sólo el
Poder Legislativo puede regular, a través de leyes, la competencia de los juzgadores.” 413
411
Convención Americana sobre Derechos Humanos. San José, Costa Rica 7 al 22 de noviembre de 1969
(Pacto de San José), 1969. Artículo 8. Disponible en: https://www.oas.org/dil/esp/tratados_B-
32_Convencion_Americana_sobre_Derechos_Humanos.htm
412
Corte Constitucional de Colombia. Sentencia C-180/14. Véase:
http://www.corteconstitucional.gov.co/RELATORIA/2014/C-180-14.htm.
413
Corte Interamericana de Derechos Humanos. Caso Barreto Leiva Vs. Venezuela. Sentencia de 17 de
noviembre de 2009: fondo, reparaciones y costas (se suplen las negritas; ver la sentencia integral aquí:
163
5. EL DERECHO FUNDAMENTAL A LA DEFENSA COMO UNA
GARANTÍA DE LAS PARTES PROCESALES
http://www.corteidh.or.cr/docs/casos/articulos/seriec_206_esp1.pdf)
414
CARLOS BERNAL PULIDO. El derecho de los Derechos. Escritos sobre la aplicación de los Derechos
Fundamentales. Ob. Cit. P. 368.
415
JOSÉ ANTONIO NEYRA FLORES. Manual del nuevo proceso Penal y de Litigación Oral. Indensa. Lima.
2010. P. 195.
416
VÍCTOR CUBAS VILLANUEVA. El Proceso penal. Teoría y Jurisprudencia Constitucional. Ob. Cit. P. 31-
32.
164
Asimismo, el jurista VICENTE GIMENO SENDRA afirma: “El derecho de defensa es la
facultad de las partes de sostener sus posiciones y contradecir los fundamentos del contrario.
Es un derecho público constitucional que asiste a toda persona física a quien se le pueda
atribuir la comisión de un hecho punible, mediante cuyo ejercicio se garantiza al imputado la
asistencia técnica de un abogado defensor y se le concede a ambos la capacidad de
postulación necesaria para oponerse eficazmente a la pretensión punitiva y poder hacer valer
dentro del proceso el derecho constitucional a la libertad del ciudadano”417.
En efecto, ningún ciudadano puede ser privado del derecho de defensa en ningún estado del
proceso, y, dispone de los medios jurídicos para exigir el respeto y efectividad de sus
derechos a la defensa designando un letrado (abogado) de su elección y de confianza o en su
efecto, a uno de oficio (defensor público) y poder comunicarse libremente con él; el de
preparar su defensa oportunamente en un tiempo y los medios necesarios para conocer los
cargos y pruebas existentes en su contra y presentar los descargos, pruebas y alegaciones a su
favor en el proceso judicial, cuanto más el nuevo sistema penal acusatorio, el derecho de
defensa constituye en un derecho fundamental de naturaleza procesal y que integra el debido
proceso penal que protege los derechos fundamentales del ciudadano procesado, la víctima y
de la verdad.
Ciertamente, todo procesado tiene derecho a un abogado defensor eficaz que proteja y
garantice sus derechos fundamentales, como lo reconocen las normas internaciones de
derechos humanos, y lo afirma el Comité de Derechos Humanos. El Comité de Derechos
Humanos de los Naciones Unidas, “ha reconocido que el derecho a un abogado defensor
significa el derechos a un abogado defensor eficaz. La persona que asume la representación
jurídica tiene que estar calificada para representar al acusado. El abogado defensor tiene que
representar plenamente los intereses del defendido y tiene que abogar en su favor”418
417
VICENTE GIMENO SENDRA. Constitución y Proceso. Editorial. Ob. Cit. P. 100.
418
Comité de Derechos Humanos de Naciones Unidas. Ver Elena Beatriz Vasilkis contra Uruguay y Miguel
Ángel Estrella contra Uruguay en Derechos Humanos y prisión preventiva. Manual de Normas
Internacionales en materia de prisión preventiva serie de Capacitación Profesional Nº3 Naciones Unidas
Nueva York y Ginebra. 1994.
165
La defensa técnica constituye una actividad o labor profesional importante en el proceso penal
y al respecto existen dos modalidades según la doctrina419 y asimismo los instrumentos
internaciones de derechos humanos los señalan:
El asesor técnico debe ser experto, con perfil profesional y experiencia, bien preparado
en los casos penales y deberá contar con los mecanismos de acceso a laboratorios a
instrumentos técnicos, a asesores y expertos en otras disciplinas que guardan relación
con el caso. Por lo tanto, este derecho fundamental constitucional y legal implica la
necesidad de garantizar la participación sustancial del procesado en el contradictorio,
con la actividad probatoria; del descubrimiento de los elementos prácticos jurídicos
como fundamento de la acusación y la posibilidad de refutación de la acusación; es
decir, el derecho de defensa es parte esencial del núcleo del debido proceso.
419
IRENE VELASQUEZ VELASQUEZ I.V El derecho de defensa en el nuevo modelo procesal, en
constituciones sociales, J. 2008. Disponible en: http://www.eumed.net/rev/cccss/02/ivvv.htm
166
5.2. La Defensa Pública Penal
Por lo tanto, con los cambios procesales que se han introducido en los países latinoamericanos
en materia de defensa pública, ha hecho que las naciones que no tenían estas instituciones
actualmente cuenten con las defensorías públicas que intervienen en las diferentes etapas del
proceso penal e inclusive tienen normativa de su funcionamiento a nivel nacional, y en los
instrumentos internacionales de derechos humanos: el Pacto Internacional de derechos civiles
y políticos; la Convención Americana de Derechos Humanos; la Convención Europea sobre
Derechos Humanos y otros.
Los defensores públicos son abogados públicos designados por el Estado (Consejo de la
Judicatura), que patrocinan ante la función judicial y fiscalía que por disposición
constitucional y legal están en la obligación de defender a las personas que sean víctimas o
acusados en el proceso penal de manera gratuita, y actuarán con eficacia, eficiencia y
diligentes con conocimientos de las ciencias jurídicas y preparación independiente de la
defensa, pero en ciertas actuaciones la defensa penal no es eficaz en las fases de investigación
y en las audiencias y así lo afirma lo Corte Constitucional de Colombia; al respecto, “sin
embargo, cuando hay una indebida defensa, por la actuación negligente y descuidada del
abogado defensor, la existencia de esos instrumentos no se aplica, sobre todo cuando de
asuntos penales se trata”.420. Por ello, “en América Latina, el derecho a un defensa adecuada
ha llevado también a establecer a la defensoría pública como un pilar de la reforma penal y se
agrega: Desde su fundación en 1999, el CEJA ha publicado diversos estudios e informes sobre
el proceso de transformación en el sistema penal, incluyendo a la defensa pública”. 421
420
Corte Constitucional de Colombia. Sentencia T-567/14 de 1998.
421
Ver: HECTOR FIX-FIERRO y ALBERTO ABAD SUÁREZ ÁVILA. Hacia una defensa pública de
calidad. El Nuevo Diseño Institucional de las Defensorías Públicas en las Entidades Federativas de la
República Mexicana. Cuestiones Constitucionales. Revista Mexicana de Derecho Constitucional. número
32. Enero-Junio 2015. P34. UNAM. Disponible en: http//biblio.juridicas.unam.mx
167
“La concepción de que la defensoría pública debe actuar principalmente en el ámbito del
respeto y la protección de los derechos del debido proceso y del juicio justo en el proceso
penal surge de la obligación general que tiene todo Estado-parte del Pacto Internacional de
Derechos Civiles y Políticos y de la Convención Americana de Derechos Humanos de
respetar y proteger los derechos humanos de las personas sometidas a algún tipo de
investigación policial, judicial o administrativa con posibles implicaciones penales antes ,
durante o posteriormente a la instauración de un proceso penal”. 422
En los hechos facticos, para la mayoría de los ciudadanos sometidos a un proceso penal, el
derecho de defensa se materializa en la posibilidad de contar con un defensor público, que
proteja sus derechos de acceso a la justicia penal en un estado constitucional de derechos y
justicia; sin embargo, en los sectores sociales empobrecidos y desprotegidos deberá actuar la
defensoría pública en defensa de sus derechos e intereses. Al respecto, EUGENIO RAUL
ZAFFARONI, señala: “...puede afirmarse que el indicador del grado de realización del Estado
de Derecho en nuestra región está dado por la autonomía y el poder de la Defensoría Pública
en comparación con las otras agencias del sistema penal. Poco importan códigos procesales
acusatorios y jueces técnicamente formados, si carecen de defensa idónea quienes más la
necesitan... el Estado de Derecho solo podrá considerarse mínimamente respetado cuando la
defensa pública -que se ocupa de los menos poderosos o de los directamente desapoderados-
tenga el mismo poder y la misma jerarquía que el ministerio de la acusación, pero, por
supuesto, a condición de que sobre ninguno de ambos ponga su zarpa ninguna agencia
ejecutiva”.423
422
Informe Especial de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (Capitulo III) sobre el sistema de
administración de justicia ineficiente, debido a que no puede resolver ágil y adecuadamente los casos que son
sometidos a su conocimiento, año 1999.
423
EUGENIO RAUL ZAFFARONI. Introducción de Pena y Estado. Revista Nº 5, Buenos Aires. Ediciones del
Instituto INECIP. 2002. P. 20. Véase: ERNESTO PAZMIÑO GRANIZO. Desafíos y perspectivas para la
Defensoría Pública en el Ecuador. SANTIAGO ANDRADE UBIDIA y LUIS FERNANDO ÁVILA
LINZÁN. La Transformación de la Justicia. Serie Justicia y Derechos Humanos. Neoconstitucionalismo y
Sociedad. Ministerio de Justicia y Derechos Humanos. Quito. 1ra edición. 2009. P. 308.
168
Ernesto Pazmiño Granizo, al señalar que “sin defensa pública se limita el acceso a la justicia
penal a los ciudadanos más necesitados y vulnerables, cuando sus derechos están garantizados
en la Constitución y normativa que garantiza la implementación de una Defensoría Pública
autónoma e independiente de los organismos de persecución penal y juzgamiento y en
condiciones de equilibrio con los recursos materiales, humanos y financiero, en la práctica se
garantice la igualdad de armas en litigio penal, y en la organización moderna y eficiente que
evite la burocratización y la defensa meramente formal y de baja calidad”. 424
Artículo 1.
Artículo 3.
“Los gobiernos velarán por que se faciliten fondos y otros recursos suficientes para
asistencia jurídica a las personas pobres, y, en caso necesario, a otras personas
desfavorecidas. Las asociaciones profesionales de abogados colaborarán en la
organización y prestación de servicios, medios materiales y otros recursos”
Artículo 6.
Artículo 7.
424
ERNESTO PAZMIÑO GRANIZO. Desafíos y perspectivas para la Defensoría Pública en el Ecuador. Ob.
Cit. P. 305-373
169
“Los gobiernos garantizarán además que todas las personas arrestadas, o detenidas,
con una acusación penal o no, tengan acceso a un abogado inmediatamente, y en
cualquier caso dentro de las 48 horas siguientes al arresto o a la detención”.425
Artículo 14.
3.- “Durante el proceso, toda persona acusada de un delito tendrá derecho, en plena
igualdad, a las siguientes garantías mínimas:
425
Principios Básicos sobre la Función de los Abogados, Octavo Congreso de las Naciones Unidas sobre
Prevención del Delito y Tratamiento del Delincuente, celebrado en La Habana (Cuba), del 27 de agosto al 7
de septiembre de 1990, ONU Doc. A/CONF.144/28/Rev.1 p. 118 (1990). Disponible en:
https://www1.umn.edu/humanrts/instree/spanish/si3bprl.html
426
Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos. Adoptado y abierto a la firma, ratificación y adhesión
por la Asamblea General en su resolución 2200 A (XXI), de 16 de diciembre de 1966. Artículo 14. 3 literal
d). Disponible en: http://www.ohchr.org/SP/ProfessionalInterest/Pages/CCPR.aspx
427
Convención Europea para la protección de los Derechos Humanos, Art. 6, numeral 3, literal c, 2010.
Disponible en: http://www.echr.coe.int/Documents/Convention_SPA.pdf
170
“Toda persona inculpada de delito tiene derecho a que se presuma su inocencia
mientras no se establezca legalmente su culpabilidad. Durante el proceso, toda persona
tiene derecho, en plena igualdad, a las siguientes garantías mínimas:
El Tribunal Constitucional del Perú al ejercicio del derecho de defensa, que este:“Tiene una
doble dimensión: una material, referida al derecho que tiene el imputado de ejercer su propia
defensa desde el mismo instante en que toma conocimiento de que se le atribuye la comisión
de determinado hecho delictivo; y otra formal, lo que supone el derecho a una defensa
técnica, esto es, el asesoramiento y patrocinio de un abogado defensor durante todo el tiempo
que dure el proceso”429.
“Si el derecho a la defensa surge desde el momento en que se ordena investigar a una
persona (supra párr. 29), el investigado debe tener acceso a la defensa técnica desde ese
mismo momento, sobre todo en la diligencia en la que se recibe su declaración. Impedir a
éste contar con la asistencia de su abogado defensor es limitar severamente el derecho a la
defensa, lo que ocasiona desequilibrio procesal y deja al individuo sin tutela frente al
ejercicio del poder punitivo”430
428
Disponible en: https://www.oas.org/dil/esp/tratados_B-
32_Convencion_Americana_sobre_Derechos_Humanos.htm
429
STC 1323-2002-HC/TC, caso Silvestre Espinoza Palomino. Disponible en:
http://www.tc.gob.pe/jurisprudemcia/2003/01323-2002-HC.html
430
Corte Interamericana de Derechos Humanos, Caso Barreto Leiva vs. Venezuela. Fondo, Reparaciones y
Costas. Sentencia de 17 de noviembre de 2009. Serie C No. 2061969. Disponible en:
http://www.corteidh.or.cr/docs/casos/articulos/seriec_206_esp1.pdf
171
CAPÍTULO VI
172
1. EL PRINCIPIO CONSTITUCIONAL DE LEGALIDAD EN EL
PROCESO PENAL
173
(lexscripta) previa (lexproevia), en general (lexcerta) y prohibida de toda analogía
(lexstricta) 431
El jurista español JUAN LUÍS GÓMEZ COLOMER señala: “El principio de legalidad
se basa, por un lado, en el deber del derecho penal de proteger determinados bienes
jurídicos y, por otro, en un fin de derecho procesal penal de mantener la paz jurídica
para mayor seguridad de la sociedad”432.
El jurista peruano JOSÉ HURTADO afirma: “El principio de legalidad, tal como fue
establecido en las declaraciones de los derechos humanos y en los primeros códigos
penales, es una conquista de orden política, fruto del proceso que culmina con la
conformación de los Estados modernos. Su formulación en latín (nullum crimen,
mulla poema sirve lege) no data de muy antiguo, y en todo caso, su origen no está en
431
ENRIQUE BACIGALUPO. Derecho Penal, parte general. Ara Editores. Firma. 2004. P. 101.Véase
RAMIRO J. GARCIA F. Código Orgánico Integral Penal Comentado. Tomo I. Segunda Edición UIDE,
Universidad Internacional del Ecuador. Quito. 2014. 67
432
JUAN LUÍS GÓMEZ COLOMER. El modelo alemán del Ministerio Público: Aspectos organizativos y
funcionales. Revista de Estudios Jurídicos. Ministerio Fiscal 199. N° IV P. 125-145. Ver: Oscar Julián
Guerrero Peralta. Fundamentos Teóricos Constitucionales del Nuevo Proceso Penal. Ob. Cit. P. 40-47.
433
CARLOS BERNAL PULIDO. El Derecho de los Derechos. Ob. Cit. P. 358.
174
el derecho romano. La significación y los límites del principio de legalidad son
mejores comprendidos y los tiene en cuenta la manera cómo surge y evoluciona”434.
Para JUAN LUIS GÓMEZ, el principio de legalidad se basa, por un lado, en el deber
del derecho penal de proteger determinados bienes jurídicos y por otro, en el fin del
derecho procesal penal de mantener la paz jurídica para mayor seguridad de la
sociedad435
Art. (…).- La ley no debe establecer más que las penas estricta y evidentemente
necesaria, y ninguno puede ser sancionado más que en virtud de una ley establecida y
promulgada anteriormente al deto y legalmente aplicada.437
434
JOSÉ HURTADO POZO. Manual de Derecho penal. parte General I. Tercera Edición. Editorial Grijley. Perú
2005. P. 50.
435
JUAN LUIS GÓMEZ COLOMES. El modelo Alemán del Ministerio Público. Ob. Cit. P. 125. Ver: MARCO
SIGUENZA BRAVO y JUAN DIEGO SIGUENZA ROJAS. Principios Rectores del Derecho Penal. Casa
de la Cultura Ecuatoriana en Benjamín Carrión, Núcleo del Cañar. Ecuador. 2012.P. 84
436
CLAUS ROXIN. Tratado de Derecho Penal. Parte General. T.I. Traducción de la Segunda Edición. Alemana
y notas por Diego Manuel Luzón Peña y otros. Civitas. Madrid. 1997. P. 140.
437
FRANCISCO JAVIER DIAZ REVORIO. Textos Constitucionales Históricos. El Constitucionalismo
Europeo y Americano en sus documentos. Ob. Cit. P. 114.
175
Enmienda V.- Ninguna persona será detenida para que responda por un delito punible con
la pena de muerte, u otro delito infame, sin un auto de denuncia o acusación formulado por
un Gran Jurado, salvo en los casos que se presenten en las fuerzas terrestres o navales, o en
la Milicia, cuando estas estén en servicio activo en tiempo de Guerra o de peligro público;
tampoco podrá someterse a una persona dos veces, por el mismo delito, al peligro de perder
la vida o sufrir daños corporales; tampoco podrá obligársele a testificar contra sí mismo en
una causa penal, ni se le privará de la vida, la libertad, o la propiedad sin el debido proceso
judicial; tampoco podrá enajenarse la propiedad privada para darle usos públicos sin una
compensación justa.
Enmienda VI.- En toda causa criminal, el acusado gozará del derecho a un juicio público y
expedito por un jurado imparcial del Estado y distrito en que el delito se haya cometido;
distrito que deberá haber sido determinado previamente por la ley; así como a que se le
haga saber la naturaleza y causa de la acusación; a que se le confronte con los testigos que
depongan en su contra, a que se obligue a comparecer a los testigos que le favorezcan y a
contar con la ayuda de un abogado que lo defienda.
Enmienda VII.- El derecho a que se ventilen ante un jurado los juicios de derecho
consuetudinario en que el valor que se discuta exceda de veinte dólares, será garantizado, y
ningún hecho del que haya conocido un jurado será objeto de nuevo examen en tribunal
alguno de los Estados Unidos, que no sea con apego a las normas del derecho
consuetudinario.438
Artículo 11.
438
FRANCISCO JAVIER DIAZ REVORIO. Textos Constitucionales Históricos. El Constitucionalismo
Europeo y Americano en sus documentos. Ob. Cit. P. 128.
439
GILBERT ARMIJO. Del Control Político al Control Constitucional: El principio de legalidad Penal.
Disponible en: www.poderjudicial.go-cr/salaconstitucional/.../principio%.20de%20.l.2013.
176
Tampoco se impondrá pena más grave que la aplicable en el momento de la
comisión del delito440
Artículo 15.
440
Declaración Universal de Derechos Humanos. Adoptada y proclamada por la Asamblea General en su
resolución 217 A (III), de10 de diciembre de 1948 Artículo 11. 2. Disponible en:
http://www.un.org/es/documents/udhr/
441
Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos. Adoptado y abierto a la firma, ratificación y adhesión
por la Asamblea General en su resolución 2200 A (XXI), de 16 de diciembre de 1966. Artículo 15. 1 y 2.
Disponible en: http://www.ohchr.org/SP/ProfessionalInterest/Pages/CCPR.aspx
442
Convención Americana sobre Derechos Humanos. San José, Costa Rica 7 al 22 de noviembre de 1969
(Pacto de San José), 1969. Artículo 9. Disponible en: https://www.oas.org/dil/esp/tratados_B-
32_Convencion_Americana_sobre_Derechos_Humanos.htm
177
Artículo. 76. Garantías básicas del Debido Proceso.-
3.- “Nadie podrá ser juzgado ni sancionado por un acto u omisión que, al momento de
cometerse, no esté tipificado en la ley como infracción penal, administrativa o de otra
naturaleza; ni se le aplicará una sanción no prevista por la Constitución o la ley. Sólo
se podrá juzgar a una persona ante un juez o autoridad competente y con observancia
del trámite propio de cada procedimiento”443
443
Constitución de la República del Ecuador, 2008. Artículo 76. 3. Disponible en:
http://www.asambleanacional.gov.ec/documentos/constitucion_de_bolsillo.pdf
444
Constitución de la República del Ecuador, 2008. Artículo 73, numeral 3 y Artículo 82. Disponible en:
http://www.asambleanacional.gov.ec/documentos/constitucion_de_bolsillo.pdf
445
Código Orgánico Integral Penal, 2014. Artículo 18 y 53. Disponible en: http://www.justicia.gob.ec/wp-
content/uploads/2014/05/c%C3%B3digo_org%C3%A1nico_integral_penal_-_coip_ed._sdn-mjdhc.pdf
446
Código Orgánico de la Función Judicial 2009. Art. 7
178
Las autoridades de las comunidades, pueblos y nacionalidades indígenas ejercerán las
funciones jurisdiccionales que les están reconocidas por la Constitución y la ley. 447
“El principio de legalidad exige que por ley se establezca los delitos y que las conductas
prohibidas estén claramente delimitadas previamente por ley. Como tal, garantiza la prohibición
de la aplicación retroactiva de la ley penal (lex previa), sea el escrito (lexescripta), la
prohibición de la analogía (lex estricta) y de cláusulas legales indeterminadas (lexcerta)”450.
179
cuando entre delito y la condena hay varias leyes y se debe decidir cuál es la que se debe
aplicar al caso. Por ejemplo, si en el momento de la infracción (delito) está vigente una ley A,
que más tarde es sustituida por una ley B; y, posteriormente esta es sustituida por nueva ley C,
entonces se debe aplicar la ley más favorable al reo (favor rei). Por lo que todo ciudadano
sometido a un proceso penal tiene derecho a que se le aplique a su favor las normas de la
Constitución, Tratados Internacionales de Derechos Humanos, Ley y Jurisprudencia que más
favorezca a sus derechos e intereses. Esto en virtud de que el principio de favorabilidad es un
derecho fundamental, universal, irrenunciable e intangible, por ello, se prohíbe su violación;
el operador de justicia tiene la obligación constitucional y legal de aplicar este principio de
favorabilidad, tanto pronto determine la existencia de una situación de favorabilidad, deberá
reconocerla de oficio o a solicitud de parte procesal.
Por ello, el principio de favorabilidad es uno de esos principios generales del sistema penal
que desde la órbita constitucional conforma la estructura del debido proceso, es una
herramienta orientada al logro de los fines de nuestro ordenamiento jurídico y a la cual los
operadores del sistema deben acudir para establecer las técnicas, procedimientos a que se
debe sujetar el derecho penal y el derecho procesal penal.454
451
Constitución de la República del Ecuador del 2008. Artículo 11, numeral 3. Disponible en:
http://www.asambleanacional.gov.ec/documentos/constitucion_de_bolsillo.pdf
452
Véase: Código Orgánico Integral Penal Ecuatoriano. 2014. Artículo. 5, numeral 3. Disponible en:
http://www.justicia.gob.ec/wp-content/uploads/2014/05/c%C3%B3digo_org%C3%A1nico_integral_penal_-
_coip_ed._sdn-mjdhc.pdf
453
Véase: Sentencia C-581 de 2001 de la Corte Constitucional de Colombia. Disponible en:
http://www.corteconstitucional.gov.co/relatoria/2001/c-581-01.htm
454
FERNANDO VELASQUEZ VASQUEZ. Manual de Derecho Penal General. Tercera Edición. Editorial.
Temis. 2002. P. 253 y ss.
180
El autor EUGENIO ZAFFARONI, señala: “El favor rei es un principio general de inspiración
que en concreto debe encontrar su manifestación en normas jurídicas particulares”, aunque
“suele decirse que el principio de la duda a favor del reo rige sólo para valorar prueba, pero no
en cuanto a su interpretación de la ley penal”. Para ello, sostiene que en el evento de estar en
conflicto o controversia dos normas, la situación no se resuelve por el principio de la duda
sino, más bien, interpretando las disposiciones en su alcance más limitado”455.
Artículo 15.
1.- Nadie será condenado por actos u omisiones que en el momento de cometerse no
fueran delictivos según el derecho nacional o internacional. Tampoco se impondrá
pena más grave que la aplicable en el momento de la comisión del delito. Si con
posterioridad a la comisión del delito la ley dispone la imposición de una pena más
leve, el delincuente se beneficiará de ello.456
455
EUGENIO ZAFFARONI. Tratado de Derecho Penal. Parte General. Tomo I. Editorial Ediar. Buenos Aires-
Argentina. 1998. P. 96.
456
Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos. Adoptado y abierto a la firma, ratificación y adhesión
por la Asamblea General en su resolución 2200 A (XXI), de 16 de diciembre de 1966. Artículo 15.1
181
Artículo. 9. Principio de Legalidad y de Retroactividad.-
2.- Favorabilidad.- En caso de conflicto entre dos normas de la misma materia, que
contemplen sanciones diferentes para un mismo hecho, se aplicara la menos rigurosa
aun cuando su promulgación sea posterior a la infracción459
457
Convención Americana sobre Derechos Humanos. San José, Costa Rica 7 al 22 de noviembre de 1969
(Pacto de San José), 1969..Artículo 9. Disponible en: https://www.oas.org/dil/esp/tratados_B-
32_Convencion_Americana_sobre_Derechos_Humanos.htm
458
Constitución de la República del Ecuador del 2008, Artículo 76, numeral 5 (inciso primero). Disponible en:
http://www.asambleanacional.gov.ec/documentos/constitucion_de_bolsillo.pdf
459
Código Orgánico Integral Penal, 2014. Articulo 5 numeral 2. Disponible en: http://www.justicia.gob.ec/wp-
content/uploads/2014/05/c%C3%B3digo_org%C3%A1nico_integral_penal_-_coip_ed._sdn-mjdhc.pdf
182
2.3 Jurisprudencia de la Corte Constitucional de Colombia
Es claro que la modificación o derogación de una norma surte efecto hacía el futuro, salvo el
principio de favorabilidad, de tal manera que las Autoridades consolidadas bajo el imperio de la
legislación objeto de aquello no puedan sufrir menoscabo. Por lo tanto, de conformidad con el
precepto constitucional, los derechos individuales y concretos que ya se habían radicado en
cabeza de una persona no quedan afectados por la nueva normatividad, la cual únicamente
podrá aplicarse a las situaciones jurídicas que tengan lugar a partir de su vigencia 460
El principio de in dubio pro reo es un principio constitucional y legal que tiene un origen
histórico de larga data (Ley de la XII Tablas), y en la actualidad se lo considera una garantía
procesal penal contra la arbitrariedad de las juezas o jueces.
INDUBIO PRO REO, significa: “La duda favorece al reo”. Este principio, es una locución
latina, que determina el principio jurídico que en caso de duda, por ejemplo, en un proceso
penal, por existir pruebas deficientes de los hechos, siempre se le aplicará la ley más favorable
al acusado (reo); es decir, significa que dentro de la actuación penal toda duda ineliminable o
insuperable debe ser resuelta en pro del imputado” 461; en consecuencia, a pesar de que el
Fiscal debe probar la culpa o responsabilidad del imputado o acusado, o caso contrario
solicitará que se lo declare inocente hasta que se demuestre con pruebas su culpabilidad y el
Juez debe absolverlo mediante sentencia.
Es evidente que este principio o guarda relación con el principio de legalidad y de inocencia
que garantiza y protege el constitucionalismo moderno y tiene importancia en el Derecho
Penal y Derecho Procesal Penal, como garantía procesal del procesado con la existencia de
una duda razonable; sin embargo, no se permite su interpretación en el campo de la ley según
la doctrina:
460
Corte Constitucional de Colombia. C-402 de 1998. M.P Favio Morán Díaz.
461
CF. ALVARO ORLANDO PERÉZ PINZON. Los principios generales del proceso penal. Universidad de
externado de Colombia. 2004. P. 28
183
“Principio que propala debe estarse a la más favorable al acusado. Si bien su operancia es
reconocida en el ámbito del derecho procesal o instrumental, con referencia concreta a la
apreciación de la prueba (en caso de duda debe absolverse) no es plenamente admitida en el
campo de la interpretación de la ley”.462
LUIGI FERRAJOLI sostiene: “La certeza de derecho penal mínimo de que ningún inocente
sea castigado viene garantizada por el principio in dubio pro reo. Es el fin al que tienden los
procesos regulares y sus garantías. Y expresa el sentido de la presunción de no culpabilidad
del imputado hasta la prueba en contra: es necesaria la prueba –es decir, la certidumbre,
aunque sea subjetiva, no de inocencia sino de culpabilidad, sin tolerarse la condena sino
exigiéndose la absolución en caso de incertidumbre”.463
Para el autor RAÚL CHANAMÉ ORBE, “su aplicación práctica está basada en el principio
de que toda persona es inocente hasta que se demuestre su culpabilidad. En caso de que el
juez no esté seguro de esta, y así lo argumente en la sentencia, deberá entonces dictar un fallo
absolutorio (Exp. N° 8232-2006-PHC/TC) Ucayali”.464
También la doctrina concibe al principio in dubio pro reo como un concepto bidimensional, es
decir, tiene dos dimensiones como lo sostiene el jurista ENRIQUE BACIGALUPO: “Una
dimensión normativa y otra dimensión fáctica”; el referido autor agrega que la última “hace
referencia al estado individual de duda de los jueces y por lo tanto debe quedar fuera de la
casación” y “la dimensión normativa se manifiesta en la existencia de una norma que impone
a los Jueces la obligación de absolver cuando no se hayan podido convencer de la
culpabilidad del acusado o de condenar por hipótesis más favorable al mismo”.465
462
MARCO ANTONIO DÍAZ DE LEÓN. Diccionario de Derecho Procesal Penal. Editorial Porrúa. México.
1986. P. 1182.
463
LUIGI FERRAJOLI. Derecho y Razón. Ob. Cit. P. 106.
464
RAÚL CHANAMÉ ORBE. Diccionario de Derecho Constitucional. Editorial ADRUS. Perú. 2010. P. 313.
465
ENRIQUE BACIGALUPO. La impugnación de los hechos probados en la Casación Penal. Ab – Hoc.
Buenos Aires. 1994. P. 69.
184
3.1 Normas Nacionales que establecen el Principio de In dubio Pro Reo o duda a favor
del reo
5. (inciso segundo). En caso de duda sobre una norma que contenga sanciones, se la
aplicará en el sentido más favorable a la persona infractora”.466
466
Constitución de la República del Ecuador del 2008. Artículo 76, numeral 5 (inciso segundo). Disponible en:
http://www.asambleanacional.gov.ec/documentos/constitucion_de_bolsillo.pdf
467
Código Orgánico Integral Penal, 2014. Artículo 34 y 51. Disponible en: http://www.justicia.gob.ec/wp-
content/uploads/2014/05/c%C3%B3digo_org%C3%A1nico_integral_penal_-_coip_ed._sdn-mjdhc.pdf
468
Código Orgánico de la Función Judicial, Artículo 5, inciso segundo. Disponible en:
https://www.oas.org/juridico/mla/sp/ecu/sp_ecu-int-text-cofj.pdf
185
3.2 Jurisprudencia de la Corte Constitucional de Colombia
469
Corte Constitucional de Colombia. Disponible en:
http://www.corteconstitucional.gov.co/RELATORIA/2005/C-782-05.htm
470
LUIGI FERRAJOLI. Teoría del Garantísmo Penal. Editorial Trotta.1995. Madrid-España. P. 550. Ver
Walter Raña Arana. Principio de Presunción de inocencia. Disponible en:
www.tribunalconstitucional.gob.bo/descargas/artículos/PPL_WRA.PDF.
471
CÉSAR BECCARIA. De los Delitos y de las Penas. Segunda Edición. Ediciones Jurídicas Europea-América.
Buenos Aires-Argentina. 1974. P. 119.
186
Después, uno de los primeros autores clásicos que tomó la iniciativa de escribir sobre el
principio de presunción de inocencia es GIOVANNI CARMIGNIANI, que expresa: “La base
de la presunción es lo que acontece a diario, ya que, lo que sucede con mayor frecuencia es
que los hombres se abstengan de delinquir, por ello la ley consagra y defiende la presunción
de inocencia para todos los ciudadanos”472.
Sin embargo, a pesar de la vigencia de la Declaración del Hombre y del Ciudadano, que es
universal, en el Siglo XIX, surge el ataque y critica a los autores clásicos que ilustraron sobre
el principio de presunción de inocencia, como son los que formaban parte de la Escuela
Positivista Italiana, como son RAFAEL GARÓFALO Y EURICO FERRI, quienes en síntesis
opinan a este principio como una fórmula vacía, absurda, e ilógica 474. También, los autores
MANZINI, MORTARA, LEONE, ERICO FERRI Y ALOISI, seguidores de la citada Escuela
positivista italiana, expresan que “analizando los efectos de la detención preventiva, el
principio de presunción de inocencia es absurdo, puesto que en esencia se trata de una pena
anticipada, no bastando los fines procesales para justificar tal medida”475.
En efecto, con la Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano se reaccionó
frente a toda organización política-social totalitaria y absolutista que tenían como modelo de
justicia penal represivo o de forma inquisitiva de enjuiciamiento criminal basado en un
472
GIOVANNI CARMIGNIANI. Elementos del Derecho Criminal. Editorial Temis. Colombia. Bogotá. 1979.
P. 208.
473
FRANCISCO JAVIER DÍAZ REVORIO. Textos Constitucionales Históricos. El Constitucionalismo
Europeo y Americano en sus documentos. Ob. Cit. P. 129.
474
LUIGI FERRAJOLI. Derecho y Razón. Ediorial. Trotta. S.A. Madrid-España. 1995. P. 555.
475
ALFREDO VELIZ MARICONDE. Derecho Procesal Penal. Tomo II. Tercera Edición. Editorial Marcos
Ferner. Argentina. Buenos Aires. 1986. P. 37. Ver también: Antonio Magallanes Gomes Filho. Presunción de
inocencia y prisión Preventiva. Traducido de Claudia ChaimovichGuraluk. Editorial Conosur. Chile.
Santiago. 1995. P. 13.
187
derecho represivo, fundado en las pruebas legales y en un uso discriminado de la tortura como
un medio válido para obtener la confesión. Uno de los ejemplos más significativos del sistema
inquisitivo se halla en la ordenanza criminal francesa de 1670” 476; en consecuencia, en un
Estado constitucional de derechos y justicia, el principio de presunción de inocencia
constituye una garantía fundamental en la que no puede existir un inocente privado de su
libertad. Este principio no trata de beneficiar al reo o favorecerlo, sino que, por el contrario, lo
que se apunta es a delimitar la actividad sancionadora del Estado con base en el debido
proceso, y solo la sentencia judicial permite cambiar el estado de inocencia de la persona en
un proceso penal.
Asimismo, el autor JULIO MAIER, afirma: “Toda persona debe ser tratada como un inocente,
desde el punto de vista del orden jurídico, mientras no exista una sentencia penal de condena;
476
JULIO MAIER. Derecho Procesal Argentino. Tomo I. Fundamentos. Editorial del puerto SRI. Segunda
Edición. Buenos Aires. 1996. P. 309.
477
LUIGI FERRAJOLI. Derecho y Razón. VIII Edición. EdiorialTrotta. S.A. Madrid-España. 2008. P. 551.
478
LUIGI FERRAJOLI. Elementos Di Procedura Pénale Barbera. Florencia. 1995. P. 15.
188
por ende, que la situación jurídica de un individuo frente a cualquier imputación es la de un
inocente, mientras no se declare formalmente su culpabilidad y, por ello; ninguna
consecuencia penal le es aplicable, permaneciendo su situación frente al Derecho recogida por
las reglas aplicables a todos con prescindencia de la imputación deducida. El principio de
inocencia no afirma que el imputado sea, en verdad, inocente, sino antes bien, que no puede
ser considerado culpable hasta la decisión que pone fin al procedimiento, condenándolo”479.
Para KLAUS TIEDERMANN, “la presunción de inocencia es la base del derecho penal
moderno, que representa al principio de la dignidad humana, considera al inculpado como
persona humana, sujeto y portador de derechos individuales y no como simple objeto de la
persecución penal”481.
479
RAUL CHANAME ORBE. Diccionario de Derecho Constitucional. Ob. Cit. P. 465.
480
RAÚL CÁRDENAS RIOSECO. La Presunción de Inocencia. Editorial Porrúa S.A. 2da. Edición. México.
2006. P. 23. Disponible en:http://www.monografias.com/trabajos86/principio-inocencia/principio-
inocencia.shtml
481
KLAUS TIEDERMANN. Constitución y Derecho penal. Palestra. Editores. Lima. 2003. P. 169-170.
189
en el cual el acusado debía comprobar la improcedencia de la imputación de que era
objeto”482.
482
ANTONIO MAGALLANES GÓMES FILHO. Presunción de inocencia y Prisión preventiva. Editora
Conosur. Santiago de Chile. 1995. P. 13.
483
MIGUEL ÁNGEL MONTAÑES PARDO. La Presunción de Inocencia. Análisis Doctrinal y Jurisprudencia.
Editorial Aranzadi. Pamplona-España. 1999. P. 43. Disponible en:
http://www.tribunalconstitucional.gob.bo/descargas/articulos/PPI_WRA.pdf P. 6 -7
484
Disponible en: http://www.monografias.com/trabajos86/principio-inocencia/ principio-inocencia.shtml
190
“La principal vertiente del derecho a la presunción de inocencia es su significado
como regla probatoria del proceso penal. La presunción de inocencia, en este sentido,
puede considerarse como una regla directamente referida al juicio de hecho de la
sentencia penal, con incidencia en el ámbito probatorio, conforme a la cual la prueba
completa de la culpabilidad del imputado debe ser suministrada por la acusación,
imponiéndose la absolución del inculpado si la culpabilidad no queda suficientemente
demostrada”485
485
Disponible en: http://www.monografias.com/trabajos86/principio-inocencia/ principio-inocencia.shtml
486
Disponible en: http://www.monografias.com/trabajos86/principio-inocencia/ principio-inocencia.shtml
487
MIGUEL SÁRRE. El investigador de la defensa pública. Manual para favorecer la equidad procesal:
Caleidoscopio de la defensa pública Asociación Mexicana para las Naciones unidas, A.C. México. 2008. P.
39-40 y Uahri. Los Derechos Humanos en la administración de Justicia: Un manual sobre Derechos
Humanos para los Jueces, Fiscales y Abogados, Internacional Bar Association. Londres. 2010.P. 237,
Amnistía Internacional, juicios justos, Amnistía Internacional Londres. 1998. P. 94. Véase Derechos
Humanos en el Sistema Penal Acusatorio. Instituto México de Derechos Humanos y Democracia, AC.
2012. P. 44
191
Además, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos ha señalado que “la presunción
de inocencia se relaciona con la actitud del Juez que debe conocer la acusación penal, el cual
debe abordar la causa, sin perjuicios y construir la responsabilidad de una persona imputada a
partir de la valoración de las diferentes pruebas que se desahoguen en su presencia”488
Por otro lado, “en todos los casos criminales la ley presume que el acusado es inocente
mientras no se pruebe lo contrario de modo satisfactorio y por evidencia competente; y, es
norma de ley que su culpabilidad debe ser probada, más allá de toda duda razonable… El peso
de la prueba le corresponde al Ministerio Fiscal, teniendo que establecer la culpabilidad del
acusado más allá de toda duda razonable. Si existe esa duda en el ánimo del jurado, deberán
absolverlo”489
Articulo 9.-
488
Comisión Interamericana de Derechos Humanos, caso Martínez de Mejía C. Perú, caso 10.970, 1996.
Disponible en: www.cidh.oas.org/annualrep/955pam/cap.iii.perú/10.9700htm, (29-10-2010).
489
ERNESTO CHIESA. Apunte, Derecho Procesal Penal de Puerto Rico y Estados Unidos, Fórum. Bogotá DC.
1995. Vol. I. P. 48.
192
Toda persona se presume inocente mientras no haya sido declarada culpable, y si se
juzga indispensable su detención, todo rigor que no fuera necesario para asegurar su
persona debe ser severamente reprimido por la Ley.490
Artículo 11.
1.- “Toda persona acusada de delito tiene derecho a que se presuma su inocencia
mientras no se pruebe su culpabilidad, conforme a la ley y en juicio público en el que
se le hayan asegurado todas las garantías necesarias para su defensa”491
Artículo 14.
2.- “Toda persona acusada de un delito tiene derecho a que se presuma su inocencia
mientras no se pruebe su culpabilidad conforme a la ley”492
d) Convención Americana sobre Derechos Humanos (Pacto de San José de Costa Rica)
2.- “Toda persona inculpada de delito tiene derecho a que se presuma su inocencia
mientras no se establezca legalmente su culpabilidad. Durante el proceso, toda persona
tiene derecho, en plena igualdad, a las siguientes garantías mínimas:
490
JAVIER DÍAZ REVORIO. Textos Constitucionales Históricos. El Constitucionalismo Europeo y
Americano en sus documentos. Declaración de Derechos del Hombre y del Ciudadano de 1789. Artículo 9.
491
Declaración Universal De Derechos Humanos. Adoptada y proclamada por la Resolución de la Asamblea
General 217 A (iii) del 10 de diciembre de 1948. Artículo 11, numeral 1. Disponible en:
http://www.un.org/es/documents/udhr/
492
Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos. Adoptado y abierto a la firma, ratificación y adhesión
por la Asamblea General en su resolución 2200 A (XXI), de 16 de diciembre de 1966. Artículo 14, numeral
2. Disponible en: http://www.ohchr.org/SP/ProfessionalInterest/Pages/CCPR.aspx
193
b) comunicación previa y detallada al inculpado de la acusación formulada;
Artículo 84.
493
Convención Americana sobre Derechos Humanos. Artículo 8, numeral 2. Disponible en:
https://www.oas.org/dil/esp/tratados_B-32_Convencion_Americana_sobre_Derechos_Humanos.htm
494
Adoptadas por el Primer Congreso de las Naciones Unidas sobre Prevención del Delito y Tratamiento del
Delincuente, celebrado en Ginebra en 1955, y aprobadas por el Consejo Económico y Social en sus
resoluciones 663C (XXIV) de 31 de julio de 1957 y 2076 (LXII) de 13 de mayo de 1977
194
Artículo. 76.- Garantías básicas del Debido Proceso.- En todo proceso en el que se
determinen derechos y obligaciones de cualquier orden, se asegurará el derecho al
debido proceso que incluirá las siguientes garantías básicas:
2.- Se presumirá la inocencia de toda persona, y será tratada como tal, mientras no se
declare su responsabilidad mediante resolución firme o sentencia ejecutoriada.
2.- Todas las personas son iguales y gozarán de los mismos derechos, deberes y
oportunidades.”495.
b) Código Orgánico Integral Penal, 2014
4. Inocencia.
Toda persona mantiene su estatus jurídico de inocencia y debe ser tratada como tal,
mientras no se ejecutoríe una sentencia que determine lo contrario.496
195
5. EL PRINCIPIO DE GARANTIA CONSTITUCIONAL DE LA
IGUALDAD DE ARMAS Y NO DISCRIMINACION EN EL
PROCESO PENAL
Es una garantía fundamental de todo proceso la igualdad entra las partes, sin discriminación.
Por ello, la existencia de la Constitución es como un conjunto normativo superior material que
rige en el ordenamiento jurídico, político y social; reconoce y garantiza los derechos de las
personas. Por ello, entre estos derechos tiene importancia relevante el derecho a la igualdad en
todas sus actividades y manifestaciones a nivel público y privado, que permite tratar de igual
forma a las personas impuesta por el principio de la dignidad humana como valor
fundamental del ordenamiento jurídico. Por lo tanto, “el principio de igualdad representa uno
de los pilares de toda sociedad bien organizada y de todo Estado Constitucional”. 498; e incluso
algunos autores “reconocen derechos, garantías, y órganos relacionados con el derecho
sustantivo, adjetivo y ejecutivo penal… derecho de las víctimas, de las personas procesadas y
de las privadas de libertad… de la igualdad formal, igualdad material, y la prohibición de
discriminación”499, teniendo en cuenta que la Constitución determina que todas las personas
son iguales y gozarán de los mismos derechos, deberes y oportunidades que el derecho de
igualdad ante los Tribunales y Cortes de Justicia y la no discriminación constituye un
elemento fundamental para la protección de los derechos humanos.
196
Así, pues, la garantía de la igualdad está bien presentada con las palabras de igualdad ante la
ley”500.
Además, el jurista Paolo Comanducci 503, señala que la igualdad debe ser analizada desde tres
perspectivas:
197
c) En la perspectiva jurídica, el principio de igualdad recogido por los textos
constitucionales contenidos en la dogmática constitucional establece las condiciones
para aplicar la igualdad a todos sin discriminación pero aceptando las diferencias en
razón de sexo, raza, etc.
De esta manera, el nuevo sistema de justicia penal tiene un elemento fundamental como
principio de contradicción, en la que cada parte procesal tiene la oportunidad de oponerse a
todos los argumentos y pruebas que presente la otra parte (Fiscal o defensa), es decir,
“significa que todas las partes en un proceso gozarán de los mismos derechos en materia de
procedimiento” ya que “no hay igualdad de medios procesales si, por ejemplo, el Fiscal puede
recurrir determinada decisión para el procesado”505. Por tal motivo, en un proceso, como el
proceso penal, no puede admitirse supremacía de ninguna de las partes, se deberá dar a las
mismas una igualdad de los motivos respecto al proceso, utilización de los medios de prueba,
en definitiva una igualdad de asuntos.506
504
JAIME BERNAL CUELLAR Y EDUARDO MONTEALEGRE LEYNETT. El Proceso Penal. Universidad
Externado de Colombia. Bogotá. 2004. P. 26.
505
Comité de Derechos Humanos, observación General Nº 32. Artículos 14. El Derecho a un Juicio Imparcial
ante los Tribunales y Cortes de Justicia. Naciones Unidas, CCPR/C/GC/32, 2007, Párr. 13.
506
JACOBO LOPEZ. Tratado de Derechos Procesal Penal, Thomson-Asanzadi, Pamplona, 2005. P. 342
199
En consecuencia, todos los ciudadanos son iguales ante conformidad con la Constitución, la
Ley, Tribunales y Cortes de Justicia y la no discriminación. El principio de igualdad
constituye el fundamento del debido proceso, tanto de la víctima que reclama investigación y
sanción como el procesado, en el juicio oral, público, la inmediación y con contradicción
entre las partes; durante el proceso penal, un trato igualitario cualquiera que sea la condición
personal de las mismas, sin privilegios, ni discriminación de ninguna naturaleza conforme lo
establece la Constitución y el Derecho Internacional de los Derechos Humanos. Se puede
decir existe igualdad de armas que reclama un sistema acusatorio respetuoso de los derechos y
garantías del acusado y víctima en el proceso penal. Por tal motivo, los sistemas de Justicia
Penal, modernos establecen “… en el marco del proceso penal, las partes enfrentadas, esto es,
la Fiscalía y la Defensa, deben estar en la posibilidad de acudir ante el Juez con las mismas
herramientas de persuasión, los mismos elementos de condición, sin privilegios ni
desventajas, a fin de convencerlo de sus pretensiones procesales.508
507
JACOBO LÓPEZ BARJA DE QUIROGA. Quien en instituciones de Derecho Procesal Penal. Madrid.
1999. P. 88. Citado por MANUEL JAEN VALLEJO. Derechos Fundamentales del Proceso Penal. Colección
de autores Extranjeros, Francisco Bernate Ochoa. Ediciones Jurídicas Gustavo Ibáñez C.Ltda. Colombia.
2004. P. 95.
508
Corte Constitucional de Colombia , Sentencia C-1194 de 2005, M.P. Marco Gerardo Monroy Cabra
509
La Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano de 1789, es uno de los textos jurídicos más
importantes y relevantes en la historia de los derechos humanos de la humanidad era toda una proyección no
solo la Declaración de los derecho, sino el programa político y constitucional de la modernidad. Disponible
en: http://www.fmmeducacion.com.ar/Historia/Documentoshist/1789derechos.htm
200
Para GREGORIO PECES-BARBA, “la Declaración de 1789, era más que una
Declaración de derechos […] es un modelo de organización política, con el poder
limitado, con la supremacía de la ley, y con la afirmación capital de que una sociedad
que carece de separación de poderes y de garantías de los derechos no tiene
constitución”.510
Artículo. II.
Todas las personas son iguales ante la ley y tienen los derechos y deberes
consagrados en esta declaración sin distinción de raza, sexo, idioma credo ni otra
alguna.511
Artículo. 7.
Todos son iguales ante la ley y tienen, sin distinción, derecho a igual protección de
la ley. Todos tienen derecho a igual protección contra toda discriminación que
infrinja esta Declaración y contra toda provocación a tal discriminación512
Artículo 14.
1.-Todas las personas son iguales ante los tribunales y cortes de justicia. Toda
persona tendrá derecho a ser oída públicamente y con las debidas garantías por un
tribunal competente, independiente e imparcial, establecido por la ley, en la
substanciación de cualquier acusación de carácter penal formulada contra ella o
para la determinación de sus derechos u obligaciones de carácter civil. 513
510
GREGORIO PECES-BARBA MARTINEZ. Curso de Derecho Fundamentales. Teoría General. Coedición
de la Universidad Carlos II de Madrid y Boletín Oficial del Estado. 1999. P. 303.
511
La Declaración Americana de los Derecho y Deberes del Hombre de 1948, contiene en su artículo II el
derecho de igualdad, que es irrenunciable, inalienable e intangibles, que son recogidos en los textos
constitucionales contemporáneos. Disponible en:
http://www.fmmeducacion.com.ar/Historia/Documentoshist/1789derechos.htm
512
Declaración Universal De Derechos Humanos. Adoptada y proclamada por la Resolución de la Asamblea
General 217 A (iii) del 10 de diciembre de 1948. Artículo 7. Disponible en:
http://www.un.org/es/documents/udhr/
513
Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos. Adoptado y abierto a la firma, ratificación y adhesión
por la Asamblea General en su resolución 2200 A (XXI), de 16 de diciembre de 1966. Artículo 26.
201
Artículo. 26.
Todas las personas son iguales ante la ley y tienen derecho sin discriminación a igual
protección de la ley. A este respecto, la ley prohibirá toda discriminación y
garantizará a todas las personas protección igual y efectiva contra cualquier
discriminación por motivos de raza, color, sexo, idioma, religión, opiniones políticas
o de cualquier índole, origen nacional o social, posición económica, nacimiento o
cualquier otra condición social. 514
Todas las personas son iguales ante la ley. En consecuencia, tienen derecho, sin
discriminación, a igual protección de la ley515
Artículo 15.
1. Los Estados Partes reconocerán a la mujer la igualdad con el hombre ante la ley.
202
2. Los Estado Partes reconocerán a la mujer, en materias civiles, una capacidad
jurídica idéntica a la del hombre y las mismas oportunidades para el ejercicio de esa
capacidad. En particular, le reconocerán a la mujer iguales derechos para firmar
contratos y administrar bienes y le dispensarán un trato igual en todas las etapas
del procedimiento en las cortes de justicia y los tribunales.517
Artículo 16.
La Nación Argentina no admite prerrogativas de sangre, ni de nacimiento: no hay en
ella fueros personales ni títulos de nobleza. Todos sus habitantes son iguales ante la
ley, y admisibles en los empleos sin otra condición que la idoneidad. La igualdad es la
base del impuesto y de las cargas públicas.518
Artículo 13.
Todas las personas nacen libres e iguales ante la ley, recibirán la misma protección y
trato de las autoridades y gozarán de los mismos derechos, libertades y
oportunidades sin ninguna discriminación por razones de sexo, raza, origen nacional
o familiar, lengua, religión, opinión política o filosófica.
El Estado promoverá las condiciones para que la igualdad sea real y efectiva y
adoptará medidas en favor de grupos discriminados o marginados. […].519
517
Convención sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación Contra La Mujer. Articulo 15
numeral 1 y 2
518
Constitución Argentina. 1994. Artículo 16. Disponible en: http://www.constitution.org/cons/argentin.htm
519
Constitución de Colombia. 1991. Artículo 13. Disponible en:
http://www.procuraduria.gov.co/guiamp/media/file/Macroproceso
%20Disciplinario/Constitucion_Politica_de_Colombia.htm
520
Constitución de Costa Rica, 1949. Artículo 33. Disponible en: https://es.wikipedia.org/wiki/Constituci
%C3%B3n_Pol%C3%ADtica_de_Costa_Rica_de_1949
203
Artículo 41.-Todos los ciudadanos gozan de iguales derechos y están sujetos a
iguales deberes.521
Artículo 14.-Los españoles son iguales ante la ley, sin que pueda prevalecer
discriminación alguna por razón de nacimiento, raza, sexo, religión, opinión o
cualquier otra condición o circunstancia personal o social.522
Artículo 14.- Todos los ciudadanos son iguales ante la ley y no existirá
discriminación política, económica o social por razones de raza, credo, sexo,
condición social o linaje. No se reconocerán prerrogativas ni títulos de nobleza.
Ningún privilegio acompañará al otorgamiento de honores, condecoraciones o
cualquier otra distinción ni tampoco ninguno de tales reconocimientos será válido
más allá de la vida del individuo que los ostente en el presente o que pueda recibirlos
en el futuro.523
Artículo 8.- Todas las personas son iguales ante la ley no reconociéndose otra
distinción entre ellas sino la de los talentos o las virtudes.524
521
Constitución de Cuba, 1940. Artículo 41. Disponible en: http://www.cuba.cu/gobierno/cuba.htm
522
Constitución de España, 1978. Artículo 14. Disponible en:
http://www.lamoncloa.gob.es/documents/constitucion_es1.pdf
523
Constitución de Japón, 1945. Artículo 14. Disponible en:
http://biblio.juridicas.unam.mx/revista/pdf/DerechoComparado/41/art/art5.pdf
524
Constitución de Uruguay, 1997. Artículo 8. Disponible en: http://www.rau.edu.uy/uruguay/const97-1.6.htm
204
Artículo. 11.- Principios que rigen para el ejercicio de los derechos.- EI ejercicio
de los derechos se regirá por los siguientes principios:
2. Todas las personas son iguales y gozaran de los mismos derechos, deberes y
oportunidades.
Nadie podrá ser discriminado por razones de etnia, lugar de nacimiento, edad, sexo,
identidad de género, identidad cultural, estado civil, idioma, religión, ideología,
filiación política, pasado judicial, condición socio-económica, condición migratoria,
orientación sexual, estado de salud, portar VIH, discapacidad, diferencia física; ni
por cualquier otra distinción, personal o colectiva, temporal o permanente, que tenga
por objeto o resultado menoscabar o anular el reconocimiento, goce o ejercicio de los
derechos. La ley sancionará toda forma de discriminación.
El Estado adoptará medidas de acción afirmativa que promuevan la igualdad real en
favor de los titulares de derechos que se encuentren en situación de desigualdad.
Artículo. 76. Garantías básicas del Debido Proceso.- En todo proceso en el que se
determine trechos y obligaciones de cualquier orden, se asegurara el derecho al debido
proceso que incluirá las siguientes garantías básicas:
525
Ibídem Artículo 76, numeral 7, literal c).
Código Orgánico Integral Penal. Art. 5 numeral 5. Disponible en: http://www.justicia.gob.ec/wp-
526
content/uploads/2014/05/c%C3%B3digo_org%C3%A1nico_integral_penal_-_coip_ed._sdn-mjdhc.pdf
205
Artículo 9.- Principio de imparcialidad.- La actuación de las juezas y jueces de la
Función Judicial será imparcial, respetando la igualdad ante la ley. En todos los
procesos a su cargo, las juezas y jueces deberán resolver siempre las pretensiones y
excepciones que hayan deducido los litigantes, sobre la única base de la Constitución,
los instrumentos internacionales de derechos humanos, los instrumentos
internacionales ratificados por el Estado, la ley y los elementos probatorios
aportados por las partes.
Con la finalidad de preservar el derecho a la defensa y a la réplica, no se permitirá la
realización de audiencias o reuniones privadas o fuera de las etapas procesales
correspondientes, entre la jueza o el juez y las partes o sus defensores, salvo que se
notifique a la otra parte de conformidad con lo dispuesto en el numeral 14 del
artículo 103 de esta ley.
“Para alcanzar sus objetivos, el proceso debe reconocer y resolver los factores de desigualdad real
de quienes son llevados ante la justicia. Es así como se atiende el principio de igualdad ante la ley
y los tribunales y a la correlativa prohibición de discriminación. La presencia de condiciones de
desigualdad real obliga a adoptar medidas de compensación que contribuyan a reducir o eliminar
los obstáculos y deficiencias que impidan o reduzcan la defensa eficaz de los propios intereses. Si
no existieran esos medios de compensación, ampliamente reconocidos en diversas vertientes del
procedimiento, difícilmente se podría decir que quienes se encuentran en condiciones de
desventaja disfrutan de un verdadero acceso a la justicia y se benefician de un debido proceso
legal en condiciones de igualdad con quienes no afrontan esas desventajas” 528
527
Código Orgánico de la Función Judicial. Artículo 9 y 22
528
CESAR ARANDA ARROYO. El Derecho al Debido Proceso en la Jurisprudencia. Corte Suprema de
Justicia de la República del Perú. Corte Interamericana de los Derechos Humanos. Volumen 1. Primera
Edición. Lima –Perú. 2012.
206
6. EL PRINCIPIO CONSTITUCIONAL DE IMPUGNACIÓN
PROCESAL EN EL PROCESO PENAL
El autor JOSÉ CAFFERATA NORES, expresa: “Es posible que las resoluciones
jurisdiccionales sean equivocadas y por ello ocasionan un perjuicio indebido a los afectados.
Tal posibilidad, que deriva de la falibilidad propia de la condición humana de los jueces,
revela la necesidad de permitir un reexamen y eventual corrección de sus decisiones, para
evitar la consolidación de la injusticia: se viabiliza a través de los recursos”.529
El autor JOSÉ ANTONIO NEYRA FLORES señala: “Se puede definir los medios
impugnatorios como los mecanismos legales que permiten a las partes solicitar una
modificación de la resolución judicial, cuando esta ocasione un gravamen o un perjuicio al
interés del impugnante”.530
529
JOSÉ CAFFERATA NORES. Proceso Penal y Derechos Humanos. Editores del Puerto.Buenos Aires. 2000.
P. 177-178.
530
JOSÉ ANTONIO NEYRA FLORES. Medios Impugnatorios Penales. Disponible en:
http://www.institutoderechoprocesal.org/upload/biblio/contenidos/ARTICULO_DE_MEDIOS_IMPUGNAT
ORIOS.pdf.
207
b) Los Sujetos Impugnantes: Son aquellos a quienes asiste el derecho de impugnar
como son el inculpado, la parte civil, el Ministerio Público, el tercero civilmente
responsable, y los terceros que tengan interés directo.
Toda resolución jurisdiccional es susceptible de ser impugnada por los sujetos procesales que
la afectan ante el juez que dictó la resolución judicial que se rechaza, previo cumplimiento de
los requisitos y plazos legales y que cumpla con las formalidades de interposición de la parte
procesal. Los recursos impugnatorios pueden presentarlo:
Según la doctrina y legislación los recursos en el proceso penal son dispersos, contradictorios
y asistemáticos de acuerdo con las distintas materias y tipos penales, aclarando que “un
recurso es un instrumento procesal a través del cual una parte impugna una resolución que le
perjudica y simultáneamente solicita que sea sustituida por otra que sea más favorable”. 531
531
JULIO BANACLOCHE PALAO y JESÚS ZARZALEJOS NIETO, Editores. Los Recursos en el Proceso
Penal y la Impugnación de Sentencias Firmes. Los Aspectos fundamentales de derecho procesal penal.
Segunda Edición. Editorial La Ley. España. 2011. P. 327.
208
En ese sentido, YOLANDA GOIG DIAZ, citando a Díaz Méndez, señala que: “El
fundamento de los recursos descansa en la falibilidad del órgano judicial y en la necesidad de
evitar que la certeza implícita en toda resolución judicial, alcance su plenitud cuando la parte
gravada por ella estime desacertada, para lo cual se le da posibilidad de la impugnación que el
recurso supone”532.
El autor GONZALO CORTEZ sostiene: “los recursos procesales son un tipo o clase de medio
de impugnación a través de los cuales se pretende un nuevo examen de las cuestiones fácticas
o jurídicas resueltas en una resolución que aún no ha alcanzado firmeza. Se hacen valer dentro
del mismo proceso en el que fue pronunciada la resolución y su objetivo apunta a que dicha
resolución sea modificada o anulada en razón de resultar perjudicial a quien interpone el
recurso”533.
SERGI GUASCH FERNÁNDEZ sostiene: “Se suele afirmar que el sistema de recursos tiene
su justificación en la falibilidad humana y en la necesidad con carácter general, corregir los
errores judiciales”535.
El pilar natural de los recursos con el cual se puede revisar por la forma o el fondo la
sentencia o resolución impugnada -siendo sinónimos- se ampara en la falibilidad humana que
el órgano jurisdiccional incurre en virtud de que frecuentemente se produce un error en la
decisión judicial y que la parte afectada se pronuncia planteando el recurso por vulnerar sus
532
YOLANDA GOIG DIAZ. El Sistema de recursos en el proceso penal peruano. Horia la generalización de la
doble instancia y la instauración de la Casación. Editorial de la Pontifica Universidad Católica del Perú. P.
190.
533
GONZALO CORTEZ. El Recurso de Nulidad. Segunda Edición. LexisNexis. Santiago. 2006. P. 4.
534
RODRIGO CERDA SAN MARTÍN y MARÍA FELICES MENDOZA. El Nuevo Proceso Penal.
Constitucionalización, Principios y Racionalidad Probatoria. Ob. Cit. P. 303 y ss.
535
SERGI GUASCH FERNÁNDEZ. El Sistema de Impugnación en el Código Procesal Civil del Perú. Una
visión de derecho comparado con el sistema español, en Derecho Procesal Civil, Congreso Internacional.
Universidad de Lima. 2003. P. 166.
209
intereses y derechos. Los recursos son mandatos constitucional y legal en todas las materias
sean estas civiles, penales, laborales y tránsito. Hay que recordar que la Corte Inter americana
de Derechos Humanos sostiene que el derecho a recurrir o apelar de una sentencia o fallo ante
el superior o Corte de Justicia debe procurar la eficaz protección de los derechos humanos.
La doctrina establece los principios en que se basan los medios impugnatorios, como lo
sostiene IBERICO CASTAÑEDA, citado por Rodrigo Cerda y María Felices: “El principio
dispositivo además implica que el afectado pueda desistirse de este derecho y por otro se
configura la adhesión, a través del cual el sujeto que no ha impugnado puede adherirse a los
posibles efectos de la sentencia”536.
536
IBERICO CASTAÑEDA. Impugnación y Recurso en el nuevo modelo procesal penal. Académica de la
Magistratura. Modulo. Programa de Capacitación para el Ascenso. 2010.
537
Código Orgánico Integral Penal Ecuatoriano.2014. El Recurso de Apelación Normado en los Artículos 653 y
655. Disponible en: http://www.justicia.gob.ec/wp-content/uploads/2014/05/c%C3%B3digo_org
%C3%A1nico_integral_penal_-_coip_ed._sdn-mjdhc.pdf
538
Ibídem, El Recurso de Hecho está regulado en el artículo 661.
210
d) Recursos Extraordinarios: Solo se pueden presentar contra ciertas resoluciones
judiciales y tiene que haber motivo fundamental de tasación o derecho, y en el proceso
penal ecuatoriano estos recursos extraordinarios son:
El Recurso de Casación539, se presenta ante la Corte Nacional de Justicia dentro
del término de cinco días. Su trámite es oral, público y contradictorio.
De acuerdo con la Teoría General de los Recursos y que es aplicable al proceso penal, para
plantear un recurso de una resolución judicial se requiera de la concurrencia de tres elementos
como lo afirma la doctrina542.
539
Ibídem, Recurso de Casación artículos 656 y 657.
540
Ibídem, Recurso de Revisión artículos 658 al 660.
541
Constitución de la República del Ecuador, artículo 184 N° 1, dice: “Art. 184.- serán funciones de la Corte
Nacional de Justicia, además de las determinadas en la ley, las siguientes.- Numeral 1: Conocer los
recursos de casación, de revisión y los demás que establezca la ley”.
542
JULIO BANACLOCHE PALAO y JESÚS ZARZALEJOS NIETO, Editores. Los Recursos en el Proceso
Penal y la Impugnación de Sentencias Firmes. Ob. Cit. P. 330.
211
Sin embargo, “el Tribunal Constitucional Español ha admitido que se puede recurrir una
sentencia completamente favorable en cuanto al fallo, si el presuntamente beneficiado
considera que la argumentación jurídica le causa un perjuicio”543.
c) Elemento Temporal: Todo recurso de impugnación tiene que plantearse dentro del
plazo establecido en la ley: Recurso de Apelación, Recurso de Casación Recurso de
Revisión y Recurso de Hecho544.
Artículo 8.-
Toda persona tiene derecho a un recurso efectivo ante los tribunales nacionales
competentes, que la ampare contra actos que violen sus derechos fundamentales
reconocidos por la constitución o por la ley.545
Artículo 14.-
543
Ver Sentencias.- STC. 157/2003, de 15 de Septiembre. STC 79/1987, de 27 de mayo y 41/1998, de 24 de
Febrero.
544
Código Orgánico Integral Penal Ecuatoriano. Articulo 652 al 661.
545
Declaración Universal De Derechos Humanos. Adoptada y proclamada por la Resolución de la Asamblea
General 217 A (iii) del 10 de diciembre de 1948.Articulo 8. Disponible en:
http://www.un.org/es/documents/udhr/
212
5.-Toda persona declarada culpable de un delito tendrá derecho a que el fallo
condenatorio y la pena que se le haya impuesto sean sometidos a un tribunal superior,
conforme a lo prescrito por la ley 546
c) Convención Americana sobre Derechos Humanos, 1969
El constitucionalismo exige que los medios impugnatorios o recursos sean medios efectivos,
idóneos y de exigencia tutelar judicial efectiva que protege la pluralidad de instancias.
213
Artículo 173.- Derecho de Impugnación de actos administrativos.- Los actos
administrativos de cualquier autoridad del Estado podrán ser impugnados, tanto en la
vía administrativa como ante los correspondientes órganos de la Función Judicial.549
Artículo 652. Reglas generales.- “La impugnación se regirá por las siguientes
reglas”:
214
a) “La falta de competencia de la o el juzgador, cuando no pueda subsanarse
con la inhibición.
b) Cuando la sentencia no reúna los requisitos establecidos en este Código.
c) Cuando exista violación de trámite, siempre que conlleve una violación al
derecho a la defensa”.551
El ciudadano no tiene derecho “a que se establezca un recurso frente a las decisiones judiciales
que le afecten, sino un derecho a que no se le prive de los recursos previstos por el
Ordenamiento Jurídico”552 (SSTC 120/2009, de 21 Mayo, y 69/2005, de 4 de Abril). 553
“[…] el derecho de recurrir del fallo, consagrado por la Convención, no se satisface con la
mera existencia de un órgano de grado superior al que juzgó y condenó al inculpado, ante el
que éste tenga o pueda tener acceso. Para que haya una verdadera revisión de la sentencia, en
el sentido requerido por la Convención, es preciso que el tribunal superior reúna las
características jurisdiccionales que lo legitiman para conocer del caso concreto […]” 554
551
Código Orgánico Integral Penal. Artículo. 652. Disponible en: http://www.justicia.gob.ec/wp-
content/uploads/2014/05/c%C3%B3digo_org%C3%A1nico_integral_penal_-_coip_ed._sdn-mjdhc.pdf
552
Cfr. JULIO BANACLOCHE PALAO y JESÚS ZARZALEJOS NIETO, Editores. Los Recursos en el
Proceso Penal y la Impugnación de Sentencias Firmes. Ob. Cit. P. 328.
553
Corte Constitucional Español Sala Primera. Sentencia 120/2009, de 18 de mayo de 2009 (BOE núm. 149, de
20 de junio de 2009). Disponible en:
http://www.tribunalconstitucional.es/es/jurisprudencia/Paginas/Sentencia.aspx?cod=15985
554
CESAR ARANDA ARROYO. El Derecho al Debido Proceso en la Jurisprudencia. Corte Suprema de
Justicia de la República del Perú. Corte Interamericana de los Derechos Humanos. Volumen 1. Primera
Edición. Lima –Perú. 2012.
215
7.- GARANTIA CONSTITUCIONAL Y LEGAL DE LA PROHIBICIÓN
DE LA REFORMATIO IN PEIUS: NO EMPEORAR LA
SITUACIÓN DEL PROCESADO
7.1 Conceptualización
216
De igual manera, JUAN MONROY GÁLVEZ, señala que ese es el nombre, en latín
(prohibición de la reformatio in peius), de una institución de considerable importancia
en el tema del recurso de apelación. Se trata de los siguientes: si una parte recurre en
apelación de una resolución, el superior solo podrá reformar la resolución a su favor,
jamás, en su contra. 557
Al respecto, para el jurista español JOAN PICO I JUNAY, afirma que “la reformatio
in peius, consiste en la situación que se produce cuando la situación jurídica de la parte
procesal que interpone un recurso resulta empeorada exclusivamente como
consecuencia de un recurso, es decir, sin que medie impugnación directa o incidental
de la contraparte y sin que el empeorante sea debido a poderes de actuación de oficio
del órgano jurisdiccional.559
557
JUAN MONROY GALVÉZ. Medios impugnatorios. Revista Iura et veritas, articulo recopilado por Víctor
L. Tirona Postigo, en el Código Procesal Civil. Editor Dr. Paúl Meza Muñoz. Are grifa. 1994. P.328.
558
PERCY CHOCANO NUÑEZ. La actividad impugnancia o los recursos. Editorial Rodhas. 2006. P.268.
559
JOAN PICO I JUNIOY. Las garantías constitucionales del proceso. Ob. Cit. P. 85.
560
CLAUS ROXÍN. Derecho Procesal. Ob. Cit. P.454-455.
217
Sin embargo, “si el procesado no recurre y solo lo hacen los órganos de acusación, los
jueces superiores o tribunales pueden perfectamente modificar la sentencia recurrida
mejorando la situación del primero” 561; Es decir, se puede mejorar, modificar o
reformar la pena privativa de libertad, por una de menor sanción y también los daños y
perjuicios ocasionados por el supuesto delito con lo que cumpliría con el debido
proceso, como derecho fundamental en la que se demuestra que el proceso penal
guarda relación con la constitución y los tratados internaciones de derechos humanos
respecto a los derechos que son reconocidos y protegidos tanto del procesado y de la
víctima.
Artículo. 76.- Garantías básicas del Debido Proceso.- “En todo proceso en el
que se determinen derechos y obligaciones de cualquier orden, se asegurará el
derecho al debido proceso que incluirá las siguientes garantías básicas:
561
CLAUS ROXÍN. Derecho Procesal. Ob. Cit. P.455.
562
Constitución de la Republica de Ecuador, 2008. Articulo 75 numeral 5 y Articulo 77 numeral 14. Disponible
en: http://www.asambleanacional.gov.ec/documentos/constitucion_de_bolsillo.pdf
218
7. El tribunal de alzada, al conocer la impugnación de una sanción, no
empeorará la situación jurídica de la persona sentenciada cuando sea la única
recurrente”.563
8. EL PRINCIPIO CONSTITUCIONAL DE LA NO
AUTOINCRIMINACIÓN, COMO GARANTÍA DEL PROCESADO
EN EL PROCESO PENAL
563
Código Orgánico Integral Penal, 2014. Articulo 652 numeral 7. Disponible en: http://www.justicia.gob.ec/wp-
content/uploads/2014/05/c%C3%B3digo_org%C3%A1nico_integral_penal_-_coip_ed._sdn-mjdhc.pdf
564
IGNACIO BARRIENTOS PARDO. Prohibición de la reformatio in peius y la realización de nuevo juicio.
Revista de Estudios de la Justicia – Nº 9 – Año 2007. Disponible en:
http://web.derecho.uchile.cl/cej/htm/media/reformatoinpeius.pdf
565
CLAUS ROXIN. Derecho Procesal Penal. Ob. Cit. P. 124.
566
MARÍA INÉS HORVITZ LENNON y JULIAN LÓPEZ MASLE. Derecho Procesal Penal Chileno. Tomo I.
Jurídica de Chile. Santiago de Chile. 2005. P. 225.
219
mismo se concreta como un derecho a negar toda colaboración con la acusación sin sufrir
consecuencias por ello”.567 “El inculpado, protegido por la cláusula de no auto discriminación,
conserva la facultad de no responder, sin que pueda emplearse ningún medio coactivo ni
intimidatorio contra este y que sin que pueda extraer ningún elemento positivo de prueba de
su silencio”568
Con la Declaración de Derechos “Bill of Rights” que se origina con la Constitución de los
Estados Unidos en la Enmienda V y se concretó con el caso Miranda Vs. Arizona, con la
sentencia dictada por la Corte Suprema de los EE.UU. 384 U.S. 436, 1966., en el Siglo XIX,
que toda persona que está siendo investigada por la vía policial o judicial debe ser informada
del derecho a guardar silencia y lo que diga puede ser utilizado en su contra.569
Por lo tanto, “el derecho a la no incriminación deriva del respeto, a la dignidad de la persona,
que constituye una parte del proceso en un Estado de Derecho” 570; en consecuencia, es un
mecanismo del derecho de defensa y del debido proceso y se deberá aplicar no solo en los
asuntos criminales, correccionales y de policía, o contra sí mismo o contra sus parientes o en
asuntos que pueda resultar delitos juzgados con penas y actuaciones sancionadoras.
220
una política criminal dirigida a buscar la eficiencia “conducirá tarde o temprano la
desaparición del principio de la libertad e auto inculparse, que se perderá en el túnel de la
historia jurídica para nunca más volver”.572
Por tal motivo, “si el imputado decide guardar silencio, no puede, partir de ello, concluirse su
culpabilidad, puesto que lo que ejerce es un derecho”573.
Por lo tanto, el derecho a mantenerse en silencio puede ser ejercido de modo absoluto (no se
declara) o parcial (negativa a declarar respecto a determinado aspecto) y es de carácter
disponible, de modo tal que si -luego es producida la negativa- el imputado desea declarar,
podrá hacerlo sin ninguna restricción.574
572
STEFAN KIRSH. ¿Derecho a no auto inculparse?. En la insostenible situación del Derecho Penal. Editorial
Comares y Granada. 2000. P. 264.
573
PEDRO A. ANGULO. La investigación del delito en el Nuevo Código Procesal Penal. Gaceta Jurídica.
Lima. 2006. P. 309.
574
LUIS MIGUEL REYNA ALFARO. El Proceso Penal Aplicado. Ob. Cit. P.144
575
CFR. JORGE A. PÉREZ LÓPEZ. El Derecho a la no autoincriminación y sus expresiones en el derecho
procesal penal. Derecho y cambio. Disponible en:
www.derechoycambiosocial.com/revista017/autoincriminación.htmn
576
RAÚL GONZÁLEZ SALAS CAMPOS. La valoración del silencio del imputado. en: Revista peruana de
Doctrina y Jurisprudencia Penales Nº 3. Grijley. Lima. 2003. P. 192.
221
Finalmente, en el ejercicio de la práctica del derecho, los profesionales pocas veces proponen
a su defendido que utilicen el derecho al silencio, en razón, de que presumen de que el Juez lo
tome como un acto negativo, dando lugar a que se considere la culpabilidad del procesado;
por otro lado, los Jueces, con tal actividad no le dan valor probatorio al silencio o a la
negativa de colaborar con la autoincriminación de justicia por parte del procesado; por tal
motivo, consideran el proceder del imputado como no correcto, en virtud si es inocente el
procesado no tendría nada que ocultar; sin embargo, al resolver o dictar sentencia los Jueces
le dan valor probatorio a otras pruebas que son coherentes con el hecho y el derecho.
Pues bien, la declaración del imputado no puede considerarse como fuente de prueba en
sentido incriminatorio, sino como expresión del derecho de defensa577, cuestión distinta es que
el imputado haciendo uso de su mejor derecho decida confesar su culpabilidad. 578 Por lo tanto,
el derecho a la no discriminación deriva del respeto a la dignidad de la persona, que
constituye una parte esencial del proceso en un Estado de Derecho579 que viene a
materializarse como el derecho a defensa en el proceso penal como una garantía de los
derechos fundamentales. Por consiguiente, queda prohibida el uso de la violencia física o
psicológica contra los sospechosos o imputados, con el objeto y la legitimidad de la
investigación judicial. Al respecto, PEDRO ANGULO A., expresa: “Un Estado de Derecho
no puede coexistir con tales actuaciones siniestras 580, es decir, en un Estado Constitucional de
derechos y justicia, se debe garantizar, reconocer y proteger los derechos y libertades de los
ciudadanos en procura de una justicia penal efectiva dentro de un marco de democracia y de
seguridad jurídica, en la que la garantía de no autoincriminación se reconoce y protege como
un derecho fundamental al debido proceso, que prohíbe la confesión de culpabilidad del
imputado, que le afecta su dignidad como persona humana; En resumen, de ninguna manera
se puede obligar, ni inducir siquiera al imputado a reconocer su culpabilidad, pero también
se contiene el derecho a que de la negativa a declarar, del silencio del imputado, frente a
577
JORGE A. PÉREZ LÓPEZ. El derecho a la no autoincriminación y sus expresiones en el derecho procesal
penal. Derecho y Cambio Social. P. 2/9. Disponible en:
http://www.derechoycambiosocial.com/revista017/autoincriminacion.htm
578
ALBERTO BINDER. Introducción al derecho procesal penal. Ad-hoc. Buenos Aires. 1993. P. 310.
579
ENRIQUE BACIGALUPO. El debido proceso Penal. Hammurabi. BuenosAires. 2005. P. 69. Ver También
Luís Miguel Reyna Alfaro. EL Proceso Penal Aplicado. Ob. Cit. P. 231.
580
PEDRO ANGULO A. La investigación del delito en el nuevo código procesal penal. Ob. Cit. P. 311.
222
preguntas concretas o, incluso frente a su mentira, no se puedan extraer conclusiones de
culpabilidad”581
Artículo 14.
3.- Durante el proceso, toda persona acusada de un delito tendrá derecho, en plena
igualdad, a las siguientes garantías mínimas:
2.- Toda persona inculpada de delito tiene derecho a que se presuma su inocencia
mientras no se establezca legalmente su culpabilidad. Durante el proceso, toda
persona tiene derecho, en plena igualdad, a las siguientes garantías mínimas:
223
d) El Convenio de Ginebra III, 1949
Enmienda V.- Ninguna persona será detenida para que responda por un delito
punible con la pena de muerte, u otro delito infame, sin un auto de denuncia o
acusación formulado por un Gran Jurado, salvo en los casos que se presenten en las
fuerzas terrestres o navales, o en la Milicia, cuando estas estén en servicio activo en
tiempo de Guerra o de peligro público; tampoco podrá someterse a una persona dos
veces, por el mismo delito, al peligro de perder la vida o sufrir daños corporales;
tampoco podrá obligársele a testificar contra sí mismo en una causa penal, ni se le
privará de la vida, la libertad, o la propiedad sin el debido proceso judicial; tampoco
podrá enajenarse la propiedad privada para darle usos públicos sin una
compensación justa. (Ratificada el 15 de diciembre de 1791).586
Artículo. 77. Garantías del Debido Proceso Penal en casos de privación de libertad.
585
El Convenio de Ginebra III, 1949. Artículo 99. Disponible en:
https://www.scjn.gob.mx/libro/InstrumentosConvenio/PAG0089.pdf
586
Constitución Política de los Estados Unidos, 1787. Enmienda V. Disponible en:
http://www.cato.org/pubs/constitution/constitution_sp.html
224
c).- Nadie podrá ser forzado a declarar en contra de sí mismo, sobre asuntos que
puedan ocasionar su responsabilidad penal.587
(…) no obstante que en las decisiones que, entre otras muchas, se han relacionado surge como
criterio orientador de la proyección y alcance del Articulo 33 de la Constitución en lo
relativo a las actuaciones para señalar que la protección a la no autoincriminación “solo debe
ser aplicada en los asuntos criminales, correccionales y de policía”, es lo cierto que tal
principio en los términos textuales mismos de la regla constitucional reviste una mayor
587
Constitución de la República del Ecuador. 2008, Artículo 77, numeral 7, literal c). Disponible en:
http://www.asambleanacional.gov.ec/documentos/constitucion_de_bolsillo.pdf
588
Código Orgánico Integral Penal, Artículo 5, numeral 7. Disponible en: http://www.justicia.gob.ec/wp-
content/uploads/2014/05/c%C3%B3digo_org%C3%A1nico_integral_penal_-_coip_ed._sdn-mjdhc.pdf
589
Código Orgánico Integral Penal, Artículo 502, numeral 15. Disponible en: http://www.justicia.gob.ec/wp-
content/uploads/2014/05/c%C3%B3digo_org%C3%A1nico_integral_penal_-_coip_ed._sdn-mjdhc.pdf
590
Ibídem, Artículo 569, numeral 4.
225
amplitud pues está no restringe la vigencia del principio a determinados asuntos y por ellos
bien cabe su exigencia en todos los ámbitos de la actuación” 591
9.1 Conceptualización
Es una garantía constitucional y legal que tiene como objeto impedir un doble proceso y una
sanción o absolución contra un mismo proceso por los mismos hechos; que se consideren
delictuosos; es decir, “se plasmó la corriente procesal del principio NON BIS IN IDEM de
forma conjunta con el instituto de la cosa juzgada el establecer la prohibición de doble
juzgamiento de crímenes por los cuales ya se hubiere absuelto o condenado”592.
La doctrina señala que es un aforismo latino 593 el “non bis in idem” se refiere “non” es usado
para un hecho real, el “ne” se lo utiliza para citar a las prohibiciones.594
En consecuencia, el principio non bis in idem como principio fundamental está inmerso en
la garantía constitucional de la legalidad de los delitos (nullum crimen, mulla poema sin lege).
Por lo tanto, la citada locución significa que una persona no puede ser juzgada dos veces por
los mismos hechos que se consideran tipo penal (delito), por lo cual no puede ser juzgado
nuevamente por el mismo delito o infracción, pese a que en el primer proceso fue absuelto o
concluido por los actos delictivos que se presumen ha cometido por segunda ocasión y que
genera otro proceso. Por tal motivo, el citado principio constituye en un límite al ejercicio
desproporcionándose irracional de la potestad sancionadora del Estado, a través de la
aplicación del sistema penal, de que nadie puede ser juzgado ni castigado dos veces por el
mismo hecho.
591
Corte Constitucional de Colombia. Sentencia C-422 del 2002. Disponible en:
http://www.corteconstitucional.gov.co/relatoria/2002/C-422-02.htm
592
JOSÉ LUIS GONZÁLEZ CURSAR y ELENA GORRIS RAYO. La Corte Penal Internacional (un estudio
interdisciplinario). Ed. Tirant. Lo Blanch. Valencia-España. 2003. P. 205
593
GUILLERMO CABANELLAS. Generales del Derecho, locuciones, máximos y aforismos latinos y
castellanos. 4ta edición ampliada por Ana María Cabanellas. Heliasta SRL. Buenos Aires. Argentina. 1992. P.
175.
594
EDUARDO MARCELO JAUCHEN. Derecho del Imputado. Buenos Aires. Rubinzal-Culzoni. 2007. P. 105.
226
El autor GUILLERMO VIVAS, expresa: “La prohibición que trae consigo el principio non
bis in idem, impone que nadie puede ser juzgado por un mismo hecho dos veces, evitando así
que una persona sufra la reacción penal en forma reiterada, respecto de una mismo objeto de
juzgamiento. Esta garantía busca limitar el poder de persecución y de juzgamiento, auto
limitándose al Estado y prohibiéndose al legislador y más poderes estatales la persecución
penal múltiple y, consecuentemente, que exista un plural juzgamiento”595.
Por ello, el non bis in idem, se trata de una regla general del derecho de acuerdo a la cual “los
poderes público no pueden castigar más de una vez las infracciones en las que se aprecie
identidad de sujeto, por un mismo hecho e infracciones que protejan un mismo bien
jurídico”596.
“En definitiva, lo que se persigue con la garantía analizada (El principio de non bis in idem)
es evitar un doble proceso y una doble sanción que resulta desproporcionada a un mismo
sujeto por un mismo hecho, lo que representa consecuencias en el plano sustancial y
procedimental”597. En síntesis, existen elementos suficientes para pregonar el alcance del non
bis in ídem en el derecho interno tanto en el orden material como procesal, al igual que su
relativización frente a la cosa juzgada.598
El autor FRANCISCO DE LEÓN599, califica el “non bis in idem” o también llamado “non
bis in idem”600“como un criterio de interpretación o solución a constante conflicto entre la
idea de seguridad jurídica y la búsqueda de justicia material, que tiene su expresión en un
criterio de la lógica, de que lo ya cumplido no debe volverse a cumplir”.
595
GUILLERMO VIVAS USSHER. Manual de Derecho Procesal Penal. T.I. Córdoba. 1999. P. 150.
596
PAULA RAMÍREZ BARBOSA. Los Fundamentos del Principio del Non Bis in Ídem en el Derecho Español
y Colombiano. Revista Dos mil tres mil. Vol. 10. Edi. Universidad de Ibagné “Coruniversitaria”. Ibaqué.
Colombia. P. 54.
597
Ibídem. P. 64.
598
JAIME ALBERTO SANDOVAL MESA. El Non Bis in Ídem como fórmula del principio de legalidad que
permite el ingreso del Estatuto de Roma al Derecho Interno. Red de Revistas Científicas de América Latina,
el Caribe, España y Portugal. Sistema de Información Científica. Universidad Militar Nueva Granada.
Colombia. 2009. P. 97. Disponible en: http://www.redalyc.org/home.oa
599
FRANCISCO JAVIER DE LEÓN VILLALBA. Acumulación de sanciones penales y administrativas:
Sentido y alcance del principio “ne bis in ídem”. Bosch. Barcelona. España. 1998. P. 388-389
600
JULIO MAIER. Inadmisibilidad de la Persecución Penal Múltiple (ne bis in ídem) Bosh. Barcelona, España.
1998. P. 388 y 389.
227
A criterio de JUAN ALFONSO SANTA MARIA Pastor, el principio que examinamos
supone, en primer lugar, la exclusión de la posibilidad de imponer en base a los mismos
hechos dos a más sanciones administrativas o una sanción administrativa y otra de orden
penal; esta regla prohibitiva surge históricamente como reacción a la práctica criminal del
Estado absoluto y, por su evidencia ha sido apenas objeto de referencia en los textos
legales”601. Al respecto, JUAN CARLOS MORÁN URBINA, señala: La incorporación de
este principio sancionador presupone la existencia de dos ordenamientos sancionadores en el
Estado que contiene una doble tipificación de conductos: el penal y el administrativo; y,
además, admiten la posibilidad que dentro del mismo régimen administrativo exista doble
incriminación de conductos. Precisamente este principio intenta resolver la concurrencia del
ejercicio de poderes punitivos o sancionadores mediante la exclusión de la posibilidad de
imponer sobre la base de los mismos hechos dos o más sanciones administrativas o una
sanción administrativa y otra penal. 602
Partiendo del principio general del derecho de acuerdo con los principios de proporcionalidad
y de cosa juzgada, se prohíbe la aplicación de doble sanción, ejecución de dos o más
procedimientos ya sea penal o administrativo, el rol de este principio es la de impedir que una
persona pueda ser juzgada y sancionada de manera sucesiva, reiterada o simultáneamente por
un supuesto hecho que fue ya sancionado por una autoridad judicial penal o por una
administrativa; por tal motivo, el principio NON BIS IN IDEM, no permite la doble sanción,
por ser un mismo hecho, y surgiría la colisión de normas jurídicas de distintos ordenamientos
jurídicos sancionadores (penal o administrativo), en la que ambos sancionan un mismo hecho
que tiene identidad y que cumple con los requisitos señalados por NON BIS IN IDEM, según
la doctrina son:
1.- El sujeto.- Debe ser la misma persona a la cual se le inicio una instrucción penal y a ella
misma se le inicia un procedimiento administrativo sancionador.
601
JUAN ALFONSO SANTAMARIA PASTOR. Principios del Derecho Administrativo Sancionador. Centro
de Estudio Román Areces. Colección Ceura. Madrid.2000. P. 393.
602
JUANCARLOS MORA URBINA. Comentario Ley de Procedimiento Administrativo General. Gaceta
Jurídica. Lima. 2003. P.522.
228
2.- Los hechos.- Los acontecimientos suscitados deben ser penados o sancionados tanto por
el órgano jurisprudencial como por la autoridad administrativa, es decir, la supuesta
consecuencia para cada caso está en función al hecho antijurídico materializado
(incumplimiento de una norma o un deber de cuidado en materia penal o administrativo).
3.- Los Fundamentos.- Esta referido a los fundamentos jurídicos, es decir, qué es lo que se
desea: En materia penal, qué bienes jurídicos se protegen y en materia administrativa, qué
actos se sancionan.603
Artículo 14.
7.- Nadie podrá ser juzgado ni sancionado por un delito por el cual haya sido ya
condenado o absuelto por una sentencia firme de acuerdo con la ley y el
procedimiento penal de cada país.604
b) Convención Americana sobre Derecho Humanos
4.- El inculpado absuelto por una sentencia firme no podrá ser sometido a nuevo
juicio por los mismos hechos.605
603
DANIEL RUIZ CERNADES. El principio NOM BIS IN IDEM, en el Derecho Administrativo Sancionador
y el Derecho Penal. Derecho y Cambio Social. Disponible en: www.derechoycambiosocial.com/.../nom
%20biso%20indemhtm.
604
Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos. Adoptado y abierto a la firma, ratificación y adhesión
por la Asamblea General en su resolución 2200 A (XXI), de 16 de diciembre de 1966. Artículo 14. 7.
Disponible en: http://www2.ohchr.org/spanish/law/ccpr.htm
605
Convención Americana sobre Derechos Humanos San José, Costa Rica 7 al 22 de noviembre de 1969 (Pacto
de San José). Artículo 8. 4. Disponible en: http://www.oas.org/dil/esp/tratados_B-
32_Convencion_Americana_sobre_Derechos_Humanos.htm
229
Artículo 20. Cosa juzgada.-
1. “Salvo que en el presente Estatuto se disponga otra cosa, nadie será procesado por
la Corte en razón de conductas constitutivas de crímenes por los cuales ya hubiere
sido condenado o absuelto por la Corte;
2. Nadie será procesado por otro tribunal en razón de uno de los crímenes
mencionados en el artículo 5 por el cual la Corte ya le hubiere condenado o absuelto;
3. La Corte no procesará a nadie que haya sido procesado por otro tribunal en razón
de hechos también prohibidos en virtud de los artículos 6, 7 u 8 a menos que el
proceso en el otro tribunal:
a) Obedeciera al propósito de sustraer al acusado de su responsabilidad penal por
crímenes de la competencia de la Corte; o
b) No hubiere sido instruido en forma independiente o imparcial de conformidad
con las debidas garantías procesales reconocidas por el derecho internacional o lo
hubiere sido de alguna manera que, en las circunstancias del caso, fuere
incompatible con la intención de someter a la persona a la acción de la justicia”.606
Artículo 50. Derecho a no ser acusado o condenado penalmente dos veces por el
mismo delito.
“Nadie podrá ser acusado o condenado penalmente por una infracción respecto de la
cual ya haya sido absuelto o condenado en la Unión mediante sentencia penal firme
conforme a la ley”.607
Artículo 10
2.- “Las normas relativas a los derechos fundamentales y a las libertades que la
Constitución reconoce se interpretarán de conformidad con la Declaración Universal
606
Estatuto de Roma, 2000. Artículo 20. Disponible en:
http://www.un.org/spanish/law/icc/statute/spanish/rome_statute(s).pdf
607
Carta de los Derechos Fundamentales de la Unión Europea, 2000. Artículo. 50. Disponible en:
http://www.europarl.europa.eu/charter/pdf/text_es.pdf
230
de Derechos Humanos y los tratados y acuerdos internacionales sobre las mismas
materias ratificados por España”.608
Artículo. 76.- Garantías básicas del Debido Proceso.- En todo proceso en el que se
determinen derechos y obligaciones de cualquier orden, se asegurará el derecho al
debido proceso que incluirá las siguientes garantías básicas:
i) Nadie podrá ser juzgado más de una vez por la misma causa y materia. Los
casos resueltos por la jurisdicción indígena deberán ser considerados para este
efecto.609
608
Constitución Española, 1978. Artículo. 10. Disponible en:
http://noticias.juridicas.com/base_datos/Admin/constitucion.t1.html#a10
609
Constitución de la República del Ecuador de 2008, Artículo 76, numeral 7 y Artículo 171. Disponible en:
http://www.asambleanacional.gov.ec/documentos/constitucion_de_bolsillo.pdf
231
9. Prohibición de doble juzgamiento: ninguna persona podrá ser juzgada ni penada
más de una vez por los mismos hechos. Los casos resueltos por la jurisdicción
indígena son considerados para este efecto. La aplicación de sanciones
administrativas o civiles derivadas de los mismos hechos que sean objeto de
juzgamiento y sanción penal no constituye vulneración a este principio. 610
(…) en la medida en que el iuspuniendi aparece conpartido en nuestro país entre los órganos
judiciales penales y la administración, el principio nom bis in ídem opera, tanto en su vertiente
sustantiva como en lo procesal, para regir las relaciones entre el ordenamiento penal y el
derecho administrativo sancionador (…)612
610
Código Orgánico Integral Penal, 2014. Artículo 5 numeral 9. Disponible en: http://www.justicia.gob.ec/wp-
content/uploads/2014/05/c%C3%B3digo_org%C3%A1nico_integral_penal_-_coip_ed._sdn-mjdhc.pdf
611
Código Orgánico de la Función Judicial, Artículo 344, literal c). Disponible en:
https://www.oas.org/juridico/mla/sp/ecu/sp_ecu-int-text-cofj.pdf
612
Sentencia del Tribunal Constitucional Español. Sentencia del Tribunal Nº 188/2005.
232
La Constitución garantiza el derecho a la intimidad en relación con el derecho a la
personalidad, que todo ciudadano conlleva para desarrollar una vida plena, y dentro de sus
derechos se encuentra el derecho al honor y a la dignidad, y entre ellos se deslumbra el
derecho a la intimidad que corresponde a la primera generación de derechos humanos o
derechos fundamentales.
Con visión axiológica, el honor y la intimidad requieren una especial protección por el hecho
de ser valores que se generan de la conducta humana y que conllevan aspectos éticos de los
ciudadanos comprometiendo su dignidad y que constituye el fundamento de la personalidad,
que comprende lo privado, lo reservado, lo íntimo; consecuentemente, el derecho a la
intimidad también incluye la prohibición de intervenciones telefónicas, de revelar
información intima de la persona, usar sus nombres, identidad o a la vida privada.
ALBADALEJO define así derecho a la intimidad: “El poder concedido a la persona sobre el
conjunto de actividades que forma un circulo intimo personal y familiar, poder que le permite
excluir a los extraños de entrometerse en él y de darle una publicación que no desee el
interesado”615
613
Diccionario de la Real Academia Española de la Lengua. Véase en: http://dle.rae.es/?id=LyCn6I9
614
MARCIA MUÑOZ DE ALBA y ALBERTO CANO VALLE. Derechos de las personas con síndrome de
inmunodeficiencia adquirida. México. Cámara de Diputados-UNAM. 2002. P. 38.
615
ALBADALEJO Citado por XAVIER OCALLAGHAN MUÑOZ. Honor, intimidad y propia imagen en la
Jurisprudencia de la Sala Primera Penal del Tribunal Supremo” en honor, intimidad y propia imagen,
cuadernos de Derecho Judicial, CGPJ. Madrid. 1993.P.185
233
En efecto, “el derecho a la intimidad es un derecho fundamental porque implica una defensa
frente a la intromisión por parte del Estado o de la comunidad, sino también porque su plena
vigencia posibilita el desarrollo íntegro de la personalidad del individuo”.616
Otros autores, como MIGUEL CARBONELL, hablan de las amenazas contra la intimidad e
identifica dos clases: la acción o introducción en un espacio o zona propia, y el conocimiento
o intromisión informativa sobre hechos, datos o aspectos relativos a la vida privada de una
persona. Puede hablarse en consecuencia, de una intimidad “territorial” y de una intimidad
“informacional”, que también puede llamarse confidencialidad.620
616
MARCOS ALEJANDRO CELIS QUINTAL. La Protección de la Intimidad como Derechos Fundamental de
los Mexicanos. P. 78. Disponible en: http://biblio.juridicas.unam.mx/libros/5/2253/9.pdf
617
SANTOS CIFUENTES. Los Derechos Personalísimos. Buenos Aires. 1979. P. 852.
618
ELDA SCALVINI Y CLAUDIO LEYVA. Las medidas precautorias y la tutela efectiva del derecho a la
intimidad, Derecho a la información, hábeas data internet. Buenos Aires. Ediciones La Rosca. 2002. P. 238.
619
ELDA SCALVINI Y CLAUDIO LEYVA. Las medidas precautorias y la tutela efectiva del derecho a la
intimidad, Derecho a la información, hábeas data internet. Ob. Cit. P. 238.
620
MIGUEL CARBONELL. Los Derechos Fundamentales en México. UNAM-Porrúa. 2005. P. 2.
234
titular, y a la persona quien no puede sufrir intromisión de terceros extraños, en su entorno
familiar, social religioso, laboral y en el ámbito de su reserva individual y vida privada; por
ello, el reconocimiento y protección del derecho a la intimidad es un derecho fundamental, a
pesar de los avances y desarrollo científico de la tecnología y la comunicación, y en ciertos
casos el secreto profesional se vulnera cada día afectando la vida privada o pública de los
ciudadanos.
Artículo 17.-
2. Toda persona tiene derecho a la protección de la ley contra esas injerencias o esos
ataques.621
621
Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos. Adoptado y abierto a la firma, ratificación y adhesión
por la Asamblea General en su resolución 2200 A (XXI), de 16 de diciembre de 1966. Artículo 17.
Disponible en: http://www.ohchr.org/SP/ProfessionalInterest/Pages/CCPR.aspx
622
Declaración Universal De Derechos Humanos. Adoptada y proclamada por la Resolución de la Asamblea
General 217 A (iii) del 10 de diciembre de 1948.. Artículo 12. Disponible en:
http://www.un.org/es/documents/udhr/
235
Artículo 8.- Derecho al respeto a la vida privada y familiar.-
623
Convenio Europeo para la Protección de los Derechos Humanos y de las Libertades Fundamentales, 1950.
Artículo 8. 1 y 2. Disponible en: http://www.echr.coe.int/Documents/Convention_SPA.pdf
624
Convención Americana sobre Derechos Humanos San José, Costa Rica 7 al 22 de noviembre de 1969 (Pacto
de San José). Artículo 11. Disponible en: https://www.oas.org/dil/esp/tratados_B-
32_Convencion_Americana_sobre_Derechos_Humanos.htm
236
19.- El derecho a la protección de datos de carácter personal, que incluye el acceso y
la decisión sobre información y datos de este carácter, así como su correspondiente
protección. La recolección, archivo, procesamiento, distribución o difusión de estos
datos o información requerirán la autorización del titular o el mandato de la ley.
3. “Las y los servidores de la fuerza pública, sin que medie orden judicial, como una
actividad de carácter preventivo o investigativo, podrán realizar el control de
identidad y registro superficial de personas con estricta observancia en cuanto a
género y respeto de las garantías constitucionales, cuando exista una razón
625
Constitución de la República del Ecuador, 2008. Articulo 19,20 y 21. Disponible en:
http://www.asambleanacional.gov.ec/documentos/constitucion_de_bolsillo.pdf
626
Código Orgánico Integral Penal. 2014. Artículo 478. Disponible en: http://www.justicia.gob.ec/wp-
content/uploads/2014/05/c%C3%B3digo_org%C3%A1nico_integral_penal_-_coip_ed._sdn-mjdhc.pdf
627
Ibídem Art. 478 numeral 2.
237
fundamentada de que la persona oculta en sus vestimentas cualquier tipo de arma que
pueda poner en riesgo la seguridad de las personas o exista la presunción de que se
cometió o intentó cometer una infracción penal o suministre indicios o evidencias
útiles para la investigación de una infracción”.628
“Se podrá registrar un vehículo sin autorización judicial, en los siguientes casos”:
1. “En zonas de frontera o donde la aduana ejerza control. En ningún caso el registro
deberá interferir en la intimidad de los pasajeros.
628
Ibídem Art, 478 numeral 3.
629
Código Orgánico Integral Penal. 2014. Artículo 479. Disponible en: http://www.justicia.gob.ec/wp-
content/uploads/2014/05/c%C3%B3digo_org%C3%A1nico_integral_penal_-_coip_ed._sdn-mjdhc.pdf
630
Ibídem Artículo 479. Disponible en: http://www.justicia.gob.ec/wp-content/uploads/2014/05/c
%C3%B3digo_org%C3%A1nico_integral_penal_-_coip_ed._sdn-mjdhc.pdf
238
El domicilio o el lugar donde la persona desarrolle su actividad familiar, comercial o
laboral, podrá ser allanado en los siguientes casos:
1. “Cuando se trate de detener a una persona contra la que se ha dictado orden de
detención con fines de investigación, prisión preventiva o se ha pronunciado
sentencia condenatoria ejecutoriada con pena privativa de libertad.
2. Cuando la Policía Nacional esté en persecución ininterrumpida de una persona que
ha cometido un delito flagrante.
3. Cuando se trate de impedir la consumación de una infracción que se está
realizando o de socorrer a sus víctimas.
4. Cuando se trate de socorrer a las víctimas de un accidente del que pueda correr
peligro la vida de las personas.
5. Cuando se trate de recaudar la cosa sustraída o reclamada o los objetos que
constituyan elementos probatorios o estén vinculados al hecho que se investiga. En
estos casos se procederá a la aprehensión de los bienes.
6. En los casos de violencia contra la mujer o miembros del núcleo familiar, cuando
deba recuperarse a la agredida, agredido, o a sus familiares; cuando la agresora o el
agresor se encuentre armado o bajo los efectos del alcohol, de sustancias catalogadas
sujetas a fiscalización o esté agrediendo a su pareja o poniendo en riesgo la
integridad física, psicológica o sexual de cualquier miembro de la familia de la
víctima.
7. Cuando se trate de situaciones de emergencia, tales como: incendio, explosión,
inundación u otra clase de estragos que pongan en peligro la vida o la propiedad” 631
“En los casos de los numerales 1 y 5 se requerirá orden motivada de la o el juzgador
y en los demás casos no requerirá formalidad alguna. Para evitar la fuga de personas
o la extracción de armas, instrumentos, objetos o documentos probatorios y mientras
se ordena el allanamiento, la o el fiscal podrá disponer la vigilancia del lugar, la
retención de las cosas y solicitar a la o al juzgador la orden de detención con fines
investigativos para las personas que se encuentren en él”632
7Artículo 481.- Orden de allanamiento.-
“La orden de allanamiento deberá constar por escrito y señalar los motivos que
determinan el registro, las diligencias por practicar, la dirección o ubicación
concreta del lugar o lugares donde se ejecute el allanamiento y su fecha de
expedición. En casos de urgencia, la o el fiscal podrá solicitar la orden verbalmente o
por cualquier medio conveniente, dejando constancia de los motivos que determinen
631
Código Orgánico Integral Penal. 2014. Artículo 480. Disponible en: http://www.justicia.gob.ec/wp-
content/uploads/2014/05/c%C3%B3digo_org%C3%A1nico_integral_penal_-_coip_ed._sdn-mjdhc.pdf
632
Ibídem Artículo 480.
239
el allanamiento. De no ser posible la descripción exacta del lugar o lugares por
registrar, la o el fiscal indicará los argumentos para que, a pesar de ello, se deberá
proceder al operativo. En ninguna circunstancia podrá emitirse órdenes de registro y
allanamiento arbitrarios” 633
633
Código Orgánico Integral Penal. 2014. Artículo 481. Disponible en: http://www.justicia.gob.ec/wp-
content/uploads/2014/05/c%C3%B3digo_org%C3%A1nico_integral_penal_-_coip_ed._sdn-mjdhc.pdf
634
Código Orgánico Integral Penal. 2014. Artículo 482. Disponible en: http://www.justicia.gob.ec/wp-
content/uploads/2014/05/c%C3%B3digo_org%C3%A1nico_integral_penal_-_coip_ed._sdn-mjdhc.pdf
635
Ibídem Artículo 482 numeral 2.
636
Ibídem Artículo 482 numeral 3.
240
no podrá realizarse. En todo caso, se acogerá lo dispuesto en las convenciones
internacionales vigentes en la República del Ecuador sobre la materia”637
5. Para detener a las personas prófugas que se han refugiado en una nave o en una
aeronave extranjera que se halle en territorio ecuatoriano, la reclamación de entrega
se hará, según las disposiciones del numeral anterior, inclusive en los casos de
negativa o silencio del comandante de la nave o aeronave.638
“La intromisión en la intimidad de la persona que sucede con el simple hecho de ingresar en
el campo que ella se ha reservado. Es un aspecto meramente material, físico, objetivo,
independiente de que lo encontrado en dicho interior sea publicado o de los efectos que tal
intrusión acarree. Cabe en este análisis la forma en que el agente violador se introduce en la
intimidad del titular del derecho y no tanto el éxito obtenido en la operación o el producto de
la misma, que se encuentran en el terreno de la segunda forma de vulneración antes señalada.
En la divulgación de hechos privados, en la cual incurre quien presenta al público una
información cierta, veraz, pero no susceptible de ser compartida, es decir, perteneciente al
círculo íntimo de cada quien, siempre y cuando no se cuente con autorización para hacerlo
bien de su titular, bien de autoridad competente. Finalmente, la presentación falsa de
aparentes hechos íntimos no corresponde con la realidad”. 639
241
instrumento facilitador del debido proceso y respeto de los derechos y garantías de los
ciudadanos en el Estado constitucional de derechos y justicia. Por ello, actualmente no se
discute la necesidad de practicar la justicia penal mediante un sistema de oralidad que es el
más fidedigno e idóneo para realizar los fines, los principios y las garantías procesales es el
sistema oral del proceso penal, que garantiza los derechos fundamentales y el debido proceso.
El juicio o proceso oral es la implementación de la nueva cultura jurídica, “ha sido escogido
por la mayoría de los países occidentales porque es el que mejor (no el único) que permite
hacer justicia y a la vez respetar la libertad y la dignidad del hombre”640
Al respecto, CÉSAR REYES MEDINA cita aNEYRA FLORES sostiene: “El sentido de la
oralidad en un proceso penal es el de ser una herramienta, pues la oralidad es la manera
natural de resolver los conflictos. Así esta trae muchas ventajas, pues otorga transparencia,
humaniza en conflicto y agiliza el proceso”642. Por lo tanto, la doctrina reconoce a un
procedimiento oral cuando predomina la palabra hablada y no lo escrito en el juicio penal oral
que se da en el proceso acusatorio moderno, teniendo en cuenta escritos de preparación:
denuncia, anuncios de las pruebas a practicarse en la audiencia, etc. y documentación, los
peritajes técnicos; sin embargo, debe prevalecer el dominio de la oralidad sobre el acto escrito
y así lo admite la doctrina, “partiendo de que es difícil imaginar un proceso penal oral que no
admita actos escritos sea de preparación o documentación, lo que identifica a la oralidad es
que los escritos preparatorios no son la forma en que las partes hagan sus aportaciones al
640
JOSE I CALFERAT. Juicio Penal. Temas de derecho Penal. Buenos Aires. Depalma. 1988. P. 270-271.
641
ALBERTO BINDER. Introducción al Derecho Procesal Penal. Buenos Aires. Ad-hoc.1993. P.93.
642
242
proceso sino, el anuncio de la declaración que van a hacer en audiencia; en tanto que los
escritos de documentación sirven para dar cuenta de lo ocurrido, principalmente en la
audiencia[…] las actas no sirven de ayuda memoria al juez que debe fallar sino de
documentación a la activad procesal para las posteriores instancias”.643
643
JUAN MONTERO AROCA y JOSÉ FLORES MATIES. Tratado de Juicio Verbal. Tomo I. Editorial
Aranzadi. 2004. P. 118.
644
ALBERTO BINDER. Introducción al Derecho Procesal Penal. Ob. Cit. P. 100.
645
JUANA SANTAMARÍA VALLE. La Oralidad en el Nuevo Código Procesal Penal, en Revista Jurídica del
Colegio de Abogados del Callao, diciembre de 2008. Lima. P. 89.
646
FRANCISCO BERNATE OCHOA. El Principio de oralidad en Sistema Penal Acusatorio. Centro de
Ediciones. Universidad del Rosario. Colombia. 2008. P. 62.
647
HECTOR FIX-ZAMUDIO. Aproximación al Estudio de la Oralidad Procesal, en especial en Materia Penal.
En serrano Migollón, Fernando, Estudios Jurídicos en homenaje a Cipriano Gómez Lara. Porrúa. México.
2007. P. 99.
243
un proceso penal reciban de manera directa la información por las partes procesales, quienes
explican sus pretensiones, debates, contradicción, empleando un medio comunicación directo,
inmediato y rápido, y consecuentemente le facilita al juez ver sin intermediarios la recepción
de los medios de pruebas y alegaciones de las partes procesales, “antes de la sentencia se
presenten al Juez o Tribunal de viva voz” 648, para acto seguido los Jueces o Tribunales
resuelven dictar sentencia absolutiva o condenatoria.
Además, es necesario emplear técnicas de litigación oral en el proceso penal oral, que consiste
en la manera de aplicar los conocimientos, procedimientos y recursos orales, según la
importancia e interés de las partes procesales para encontrar la verdad real y material, como
son el interrogatorio, el contrainterrogatorio, las obligaciones, la argumentación jurídica,
alegato inicial o apertura y el alegato final; es decir, es oral la ejecución de la prueba, los
informes de las partes y la “última palabra” del imputado, sin embargo, pueden ser escrita la
instrucción, la fase intermedia, la prueba documental (que será leída), la sentencia y los
recursos.
Por lo tanto, la oralidad es un principio fundamental y pilar del sistema acusatorio, y más aún
que tiene rango constitucional, y su vulneración no solo es ilegal sino inconstitucional, y se
viola el derecho internacional de los Derechos Humanos. La oralidad es parte del nuevo
sistema de justicia penal oral acusatoria que implica jurídico-cultural, el cambio de una nueva
cultura jurídica en el proceso penal oral en la que todas las peticiones de los sujetos procesales
deberán ser resueltas en forma oral mediante audiencias, el juzgamiento es oral y público,
respetando el debido proceso legal.
El juicio oral es el espacio donde se practica todos las pruebas, de acuerdo a los principios de
publicidad, mediación y contradicción, que tiene relación este último al derecho de defensa,
648
ANDRES DE LA OLIVIA. Introducción al Derecho Procesal, segunda edición. Madrid. Ceres. 2004. P. 19.
649
EUGENIO ZAFFARONI. Sistemas Penales y Derechos Humanos en América latina. Informe Final 1982-
1986. Instituto Interamericano de Derechos Humanos. Editorial Depalma. Buenos Aires. Argentina 1986. P.
157.
244
se lo celebrará en audiencias públicas con presencia del imputado y su abogado defensor, por
exigir el derecho de defensa y el principio del debido proceso, los mismos que son
reconocidos y protegidos por la Constitución y el Derecho Internacional de los Derechos
Humanos.
Articulo 14.-
1-. (...) Toda persona tendrá derecho a ser oída públicamente y con las debidas
garantías por un tribunal competente, independiente e imparcial (...)650
3.- Durante el proceso, toda persona acusada de un delito tendrá derecho, en plena
igualdad, a las siguientes garantías mínimas:
Artículo XXVI. Se presume que todo acusado es inocente, hasta que se pruebe que es
culpable.
650
Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos. Adoptado y abierto a la firma, ratificación y adhesión
por la Asamblea General en su resolución 2200 A (XXI), de 16 de diciembre de 1966. Articulo 14 numeral
1. Disponible en: http://www.ohchr.org/SP/ProfessionalInterest/Pages/CESCR.aspx
651
Ibídem. Artículo 14. Numeral 3 literales a-g
245
“Toda persona acusada de delito tiene derecho a ser oída en forma imparcial y
pública, a ser juzgada por tribunales anteriormente establecidos de acuerdo con leyes
preexistentes y a que no se le imponga penas crueles, infamantes o inusitadas”652
Artículo 10.-
Articulo 11.-
1. Toda persona tiene derecho a ser oída, con las debidas garantías y dentro de un
plazo razonable, por un juez o tribunal competente, independiente e imparcial,
establecido con anterioridad por la ley, en la sustanciación de cualquier acusación
penal formulada contra ella, o para la determinación de sus derechos y obligaciones
de orden civil, laboral, fiscal o de cualquier otro carácter.
5. El proceso penal debe ser público, salvo en lo que sea necesario para preservar
los intereses de la justicia.654
246
Artículo 6.- Derecho a un proceso equitativo
1. Toda persona tiene derecho a que su causa sea oída equitativa, públicamente y
dentro de un plazo razonable (...) la sentencia debe ser leída pública (...)655
Las Reglas Mínimas de las Naciones Unidas para la administración de justicia penal
(Proceso Penal o Reglas de Mallorca), que se refieren al Juicio Oral:
Articulo 25.-
1. El imputado tiene derecho a un juicio oral. 2) Los debates serán públicos salvo las
excepciones reconocidas en los instrumentos internacionales de protección de
derechos humanos.
Artículo 27.- En el juicio oral, se practicarán con plenitud todas las pruebas
tendentes a acreditar los hechos imputados y también las que contribuyan a
demostrar la inocencia del acusado.
Artículo 28.- La totalidad del juicio oral se deberá celebrar necesariamente ante los
mismos miembros del Tribunal que sentenciará.
Artículo 29.-
655
La Convención de Salvaguardia de los Derechos del Hombre y de las Libertades Fundamentales, 1950.
Articulo 6 numeral 1.
656
MAXIMO PACHECO G. Los Derechos Humanos. Documentos Básicos, Santiago. Editorial Jurídica de
Chile. 1967. P .53-83.
247
1. Todas las pruebas habrán de ser practicadas ante el Tribunal juzgador.
2. Si la comprobación de un hecho se basa en la percepción de una persona, ésta
tiene que ser interrogada en el juicio oral. Este interrogatorio no puede ser
reemplazado por la lectura de un documento o declaración escrita anterior […].657
2. Será competente la jueza o juez del lugar en el que se origina el acto o la omisión o
donde se producen sus efectos, y serán aplicables las siguientes normas de
procedimiento:
a) El procedimiento (judicial) […] será oral en todas sus fases e instancias. 658
657
Proyecto de Reglas Mínimas de las Naciones Unidas para el Procedimiento Penal “Reglas de Mallorca”.
Aprobadas por un grupo de expertos en Palma de Mayorca, en Noviembre de 1990-Mayo y Septiembre de
1991, Febrero de 1992. Palma, Hlas Baleares, Imprenta Politécnica, 1992
658
Constitución de la República del Ecuador. 2008. Artículo 86, numeral 2 literal a. Disponible en:
http://www.asambleanacional.gov.ec/documentos/constitucion_de_bolsillo.pdf
659
Ibídem. Artículo 168, numeral 6.
248
constancia y registrar las actuaciones procesales; y, los sujetos procesales recurrirán
a medios escritos en los casos previstos en este Código. 660
El Comité de Derechos Humanos ha señalado que: “En principio todos los juicios en casos
penales o casos conexos de carácter civil deberían llevarse a cabo oral y públicamente”.
También indica que “para satisfacer los derechos de la defensa garantizados en el
párrafo 3 del artículo 14 de Pacto, todo juicio oral, en la que se permita comparecer en
persona o a través de representante legal y donde pueda presentar las pruebas que estime
pertinentes e interrogar a los testigos”663
660
Código Orgánico Integral Penal. Artículo 5 numeral 11 Disponible en: http://www.justicia.gob.ec/wp-
content/uploads/2014/05/c%C3%B3digo_org%C3%A1nico_integral_penal_-_coip_ed._sdn-mjdhc.pdf
661
Ibídem Artículo 610
662
Código Orgánico de la Función Judicial. Artículo 18. Disponible en:
https://www.oas.org/juridico/mla/sp/ecu/sp_ecu-int-text-cofj.pdf
663
DERECHOS HUMANOS EN EL SISTEMA PENAL ACUSATORIO. Versión Actualizada. Instituto
Mexicano de Derechos Humanos y democracia, A.C 2012. Disponible en:
http://www.sitios.scjn.gob.mx/codhap/sites/default/files/acc_ref/ReformaPenal2014.pdf
249
El principio de concentración es constitucional y legal, y se lo señala como una técnica
procesal que se ejecuta en el procedimiento en la etapa oral, permitiendo unificar o agrupar y
desarrollar en una sola sesión de audiencias orales el mayor número de actuaciones judiciales
en la que el operador de justicia realiza la verificación del auto procesal de los elementos
probatorios de manera lógica, estructurada y coherente, argumento y la expedición de la
sentencia en la misma audiencia o auto procesal, permitiendo que se obtengan los objetivos
del sistema penal acusatorio para determinar la verdad material; “se debe entender que la
concentración, celeridad y oralidad son una traída donde se apoya el sistema acusatorio”.664
Hay que indicar que “el principio de concentración se define como la posibilidad de ejecutar
la máxima actividad del procedimiento en la fase oral. La concentración, celeridad y oralidad
forma el trípode sobre el cual descansa la ritualidad del procedimiento con principio
acusatorio (...)”.665
El proceso será concentrado cuando el desahogo de las pruebas, el desarrollo del debate y la
emisión de la resolución deben ocurrir en un mismo acto procesal” 666. Por ello, el principio de
concentración, al igual que la inmediación está relacionado con la oralidad de procedimiento
penal y concretamente con el juicio oral, que reúne en una sola diligencia o acto las cuestiones
procesales. “De este principio se encuentra el de “eventualidad”, por el cual, en un solo acto
procesal se deben concentrar el mayor número de peticiones. En esta forma el proceso penal
en su desarrollo no pierde energía y en él se fundamenta aquella repetida frase de la
<<economía procesal>>”667.
664
JAIME BERNAL CUELLAR y EDUARDO MONTEALEGRE LYNETT. EL proceso Penal. Universidad
Externado de Colombia. Bogotá. 2002. P. 208.
665
JAIME BERNAL CUELLAR y EDUARDO MONTEALEGRE LYNETT. Ob. Cit. P.208
666
F. CARLOS NATAREN NANDAYAPA y JOSÉ ANTONIO CABALLERO JUAREZ. Los Principios
Constitucionales del Nuevo Proceso Penal Acusatorio y Oral Mexicano. Universidad Nacional Autónoma de
México, UNAM. 2013. P. 24.
667
CARLO CARLI. Derecho Procesal. 2007. P. 89. Ver: MARCO SIGUENZA BRAVO y JUAN DIEGO
SIGUENZA ROJAS. Principios Rectores del Derecho Penal. Ob. Cit. P. 107.
668
ALFREDO LECANO MARTINEZ. La Nueva Reforma Constitucional al Sistema de Justicia Penal; algunos
aspectos y algunos voces” Corpus Juridiciorum revista jurídica de opinión e investigación. Universidad del
250
El principio de concentración realiza el mayor número de actos procesales en el menor
número de audiencias que conlleva la reunión o agrupación en el mismo acto procesal se
concentra en el juicio oral todas las partes, pruebas testimoniales, documentales, peritajes
(argumentos, objeciones y otros, de manera conjunta y continua), en una audiencia única y en
menor número de sesiones de continuidad y resuelve dictando sentencia, aplicando celeridad
y oralidad, concentración de los sujetos intervinientes procesales (Tribunal, partes testigos,
peritos) y de concentración material probatorio, en la que se cumplirá el principio de
contradicción, inmediación y de acceso a la oralidad y publicidad (asistencia del público).
Se denomina así al principio procesal que contienen algunas leyes, que dejan exclusivamente
a las partes la iniciativa y actividades procesales (dominio del proceso), quedando el juez en
una posición más expectante o pasiva en razón de que solo dirige el debate y decide la
controversia judicial.
Dispositivo, significa disponer, decidir, mandar, ordenar. Parte de la ley, decreto u ordenanza
que contiene las normas obligatorias, permisivas o supletorias de la voluntad de las partes.671
Valle de México, Septiembre. 2008.P.9.
669
CESAR SAN MARTIN CASTRO. Derechos Procesal Penal. Ob. Cit. P.135.
670
RAQUEL BASTIDAS DE RAMIREZ / YESID RAMIREZ BASTIDAS. Principalistica Procesal Penal,
Ediciones Doctrina y Ley. Bogotá. 2004. P.521.
671
SANTIAGO SANTÍS MELENDO. In dubio pro reo, Breviarios de Derecho. Ediciones Jurídicas Europa-
América. Buenos Aires. 1971. P. 219.
251
De conformidad con la teoría del proceso, sus reglas fundamentales son:
“No puede tener en cuenta hechos ni medios de prueba que no han sido aportados por
las partes.
El juez no puede condenar a más, ni a otra cosa que la pedida en la demanda.
El juez no puede iniciar del oficio el proceso”672.
Artículo 14.
1-. (...) Toda persona tendrá derecho a ser oída públicamente y con las debidas
garantías por un tribunal competente, independiente e imparcial (...)674
672
EDUARDO A. MONDRAGÓN. Introducción al Sistema de Justicia Penal Acusatoria. Conatrib “Sistema
Penales Procesales”. Disponible en: http://www.pjbc.gob.mx/instituto/CURSO%20SOBRE%20EL
%20NUEVO%20PROCESO%20PENAL%20ACUSATORIO%20Y%20ORAL/M%C3%B3dulo%20I
%20Sistemas%20Penales%20Procesales_ppt%20%5BModo%20de%20compatibilidad%5D.pdf
673
GUILLERMO CABANELLAS. Diccionario de Derecho Usual. Ob. Cit. P. 727.
674
Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos. Adoptado y abierto a la firma, ratificación y adhesión
por la Asamblea General en su resolución 2200 A (XXI), de 16 de diciembre de 1966. Articulo 14 numeral 1.
Disponible en: http://www.ohchr.org/SP/ProfessionalInterest/Pages/CCPR.aspx
252
1. Toda persona tiene derecho a ser oída, con las debidas garantías y dentro de un
plazo razonable, por un juez o tribunal competente, independiente e imparcial,
establecido con anterioridad por la ley, en la sustanciación de cualquier acusación
penal formulada contra ella, o para la determinación de sus derechos y obligaciones
de orden civil, laboral, fiscal o de cualquier otro carácter.
5. El proceso penal debe ser público, salvo en lo que sea necesario para preservar los
intereses de la justicia.675
675
Convención Americana sobre Derechos Humanos San José, Costa Rica 7 al 22 de noviembre de 1969
(Pacto de San José). Artículo 8. 1 y 5. Disponible en: https://www.oas.org/dil/esp/tratados_B-
32_Convencion_Americana_sobre_Derechos_Humanos.htm
676
Constitución de la República del Ecuador del 2008. Artículo 168, numeral 6. Disponible en:
http://www.asambleanacional.gov.ec/documentos/constitucion_de_bolsillo.pdf
677
Código Orgánico Integral Penal, 2014. Articulo 5 numeral 12. Disponible en: http://www.justicia.gob.ec/wp-
content/uploads/2014/05/c%C3%B3digo_org%C3%A1nico_integral_penal_-_coip_ed._sdn-mjdhc.pdf
253
c) Código Orgánico de la Función Judicial, 2009
Sin embargo, en los procesos que versen sobre garantías jurisdiccionales, en caso de
constatarse la vulneración de derechos que no fuera expresamente invocada por los
afectados, las juezas y jueces podrán pronunciarse sobre tal cuestión en la resolución
que expidieren, sin que pueda acusarse al fallo de incongruencia por este motivo678
Los procesos se sustanciarán con la intervención directa de las juezas y jueces que
conozcan de la causa. Se propenderá a reunir la actividad procesal en la menor
cantidad posible de actos, para lograr la concentración que contribuya a la celeridad
del proceso.679
13.1. Conceptualización
254
puede definir este principio de contradicción “como la posibilidad de la reputación o de la
contraprueba”681 que hace la parte procesal acusada, Fiscalía o víctima, contradecir la prueba
de cargo; inherente al derecho de defensa y el debido proceso y que se debe tener en cuenta
que “nadie puede ser condenado sin ser oído y vencido en juicio”682
También, se la considera como el derecho a la igualdad procesal que tienen las partes ante la
ley, de ejercer el derecho con las mismas armas y posibilidades, para llevar frente al juez
imparcial las pruebas de cargo y descargo del acusador e imputado con la finalidad de llevar a
la “verdad”.
En efecto, las partes procesales someten a reputación y contra argumentación los actos,
diligencias y las pruebas de la contraparte con el objeto de demostrar la teoría del caso, y la
otra parte procesal el derecho de controvertirlas, por ello, el principio de contradicción
“consiste en el reciproco control de la actividad procesal, la oposición de argumentos y
razones entre los contendientes sobre las diversas cuestiones introducidas que constituyen su
objeto”683. En consecuencia, “el principio de contradicción permite el ejercicio efectivo del
derecho de defensa”684.Por ello, el principio de contradicción es la facultad que tiene las
partes en audiencias procesales para oponerse o contradecir lo solicitado por la otra
contraparte procesal y una vez concluido los actos procesales de los sujetos y habiendo sido
escuchado por el Juez o Tribunal se pronunciara en la audiencia emitiendo sentencia
condenatoria o absolutiva.
255
respectivamente; la de controlar activa y personalmente, y en presencia de los otros sujetos
actuantes, el ingreso y recepción de ambas clases de elementos probatorios, y la de
argumentar públicamente ante los jueces que las recibieron sobre su eficacia conviccional
(positiva o negativa) en orden a los hechos contenidos en la acusación o los afirmados por la
defensa, y las consecuencias jurídico-penales de todos ellos, para tener modo la igual
oportunidad de intentar lograr una decisión jurisdiccional que reconozca el interés que cada
uno defiende, haciéndolo prevalecer sobre el del contrario”685
Hay que recalcar que este principio rige plenamente durante el juicio oral y “garantiza que la
producción de las pruebas se hará bajo el control de todos los sujetos procesales, con la
finalidad de que ellos tengan la facultad de intervenir en dicha producción, formulando
preguntas, observaciones, objeciones, aclaraciones y evaluaciones, tanto sobre la prueba
propia como respecto de la de los otros. El control permitido por el principio contradictorio se
extiende, asimismo, a las argumentaciones de las partes, debiendo garantizarse que ellas
puedan, en todo momento escuchar de viva voz los argumentos de la contraria para apoyarlos
o rebatirlos”686.
Hay que tener en cuenta que las partes tienen derechos y facultades, tales como:
685
JOSÉ CAFFERATA NORES. Derecho Procesal Penal. Consensos y Nuevas Ideas. Imprenta del Congreso
de la Nación. Buenos Aires. 1998. P. 57. Citado por: Israel González Zurita. El principio de contradicción en
el sistema procesal acusatorio-adversarial. P. 2. Disponible en:
http://www.juiciooraloaxaca.gob.mx/Publicaciones/revista55JSL/EL%20PRINCIPIO%20DE
%20CONTRADICCION%20EN%20EL%20SISTEMA%20PROCESAL%20ACUSATORIO-
ADVERSARIAL.pdf
686
SABAS CHAHÚAN SARRÁS. Manual del Nuevo Procedimiento Penal. Ed. Lexis, Nexis. P. 301. Citado
por: Israel González Zurita. Ob. Cit. P. 2. Disponible en:
http://www.juiciooraloaxaca.gob.mx/Publicaciones/revista55JSL/EL%20PRINCIPIO%20DE
%20CONTRADICCION%20EN%20EL%20SISTEMA%20PROCESAL%20ACUSATORIO-
ADVERSARIAL.pdf
687
Consejo de la Judicatura de Nuevo León. Técnicas del Juicio Oral en el sistema penal de Nuevo León. 2004.
Basado en los materiales desarrollados por el proyecto de fortalecimiento y acceso a la justicia de Colombia.
(USAID). P: 36.
256
13.2 El Principio de Contradicción en los Tratados Internaciones de Derechos
Humanos.
Artículo. 14
Artículo 40.
2. Con este fin, y habida cuenta de las disposiciones pertinentes de los Instrumentos
Internacionales, los Estados Partes garantizarán, en particular:
688
Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos. Adoptado y abierto a la firma, ratificación y adhesión
por la Asamblea General en su resolución 2200 A (XXI), de 16 de diciembre de 1966. Artículo 14.
Disponible en: http://www.ohchr.org/SP/ProfessionalInterest/Pages/CESCR.aspx
689
Convención Americana sobre Derechos Humanos San José, Costa Rica 7 al 22 de noviembre de 1969 (Pacto
de San José). Artículo 8, numeral 2, literal f). Disponible en: https://www.oas.org/dil/esp/tratados_B-
32_Convencion_Americana_sobre_Derechos_Humanos.htm
257
b) Que a todo niño del que se obligue que ha infringido las leyes penales o a quien
se acuse de haber infringido esas leyes se le garantice, por lo menos, lo siguiente:
iv) Que no será obligado a prestar testimonio o a declararse culpable, que podrá
interrogar o hacer que se interrogue a testigos de cargo y obtener la participación
y el interrogatorio de testigos de descargo en condiciones de igualdad;690
Cuando exista oportunidad procesal para que intervenga y actué una de los partes, la otra
parte tiene derecho a la misma oportunidad, ejemplo; la apertura o conclusión de los alegatos,
argumentos, de los interrogatorios y contra–interrogatorios, la sustentación de las objeciones,
dentro de la estructura y forma de la audiencia del juicio oral; por consiguiente, (…) el
proceso es la síntesis dialéctica de la actividad de las partes encaminadas a velar por los
intereses que representa (…),691. Por ello, la contradicción rige en toda las etapas de
procedimiento del juicio oral y público.
Artículo. 76.- Garantías básicas del Debido Proceso.- En todo proceso en el que se
determinen derechos y obligaciones de cualquier orden, se asegurará el derecho al
debido proceso que incluirá las siguientes garantías básicas:
h).- Presentar de forma verbal o escrita las razones o argumentos de los que se
crea asistida y replicar los argumentos de las otras partes; presentar pruebas y
contradecir las que se presenten en su contra.692
690
Convención sobre los Derechos del Niño. Adoptada y abierta a la firma y ratificación por la Asamblea
General en su Resolución 44/25, de 20 de noviembre de 1989. Artículo 40.
691
FERNANDO VELASQUEZ. Comentarios al Nuevo Código de Procedimiento Penal. Señal. Medellín. 1987.
P.29.
692
Constitución de la República del Ecuador, 2008. Artículo 76, numeral 7 literal h. Disponible en:
http://www.asambleanacional.gov.ec/documentos/constitucion_de_bolsillo.pdf
258
Artículo 168. Principios Jurisdiccionales para la Administración de Justicia.- La
administración de justicia, en el cumplimiento de sus deberes y en el ejercicio de sus
atribuciones, aplicará los siguientes principios.-
En este sentido, dice la Corte Constitucional Colombiana: “Así mismo, en virtud del principio de
contradicción, el sindicado en el proceso penal acusatorio debe contar con la facultad de
controvertir, en el curso de una audiencia, las pruebas que se alleguen en su contra y de
interponer los recursos de ley correspondientes” 694
La dirección judicial del proceso es la atribución o facultad otorgada por el derecho procesal
penal a los Jueces y Tribunales para que vigilen y cuiden que el procedimiento se lleve a cabo
en forma adecuada y conveniente para la administración de justicia; Por lo que la dirección
tiene como finalidad desarrollar acciones o diligencias de dirección, gerencia o administrar o
controlar la gestión judicial del proceso con la finalidad de racionalizar y optimizar los
recursos judiciales y para el efecto el derecho procesal contemporáneo cuenta con dos
tradiciones del Juez que controla y dirige activamente el proceso; la primera que se genere
el derecho europeo continental entorno a la idea de “dirección de proceso”, y la segunda que
se desarrolla en el sistema angloamericano a partir del concepto de “case management”.695
693
Ibídem. Artículo 168, numeral 6.
694
Corte Constitucional de Colombia, Sentencia C-591/05; Disponible en:
http://www.corteconstitucional.gov.co/RELATORIA/2005/C-591-05.htm
695
EDUARDO LOPEZ MEDINA. El proceso Penal entre la Eficiencia y la Justicia: La Aplicación de
Técnicas de Dirección Judicial del Proceso al Sistema Acusatorio Colombiano, Consejo Superior de la
Judicatura. Bogotá. 2006. P.49 y ss.
259
La gestión696 judicial la realiza el Juez o Jueces del Tribunal, quien o quienes cumplen un rol
fundamental como administradores de recursos para hacer efectiva la tutela jurisdiccional que
aspiran obtener los justiciables, las mismas que deben llevarse a trámite con eficiencia,
agilidad y con economía procesal por los sujetos del proceso (las partes, el Juez, los
asistentes, etc.) a efecto de que se defina el conflicto en un tiempo razonable y con el menor
costo posible en términos de gastos y esfuerzos.697
Sin embargo, hay que tener en cuenta las reformas judiciales que se produjeron en los
siguientes países: Estado Unidos, 1990; Gran Bretaña 1995; Australia 1997; Colombia 1989;
y Ecuador 2000, entre otros, que permitieron crear técnicas de control y gestión proactiva del
proceso judicial, teniendo como fundamentos las normas constitucionales y normas del
Derecho Internacional de los Derechos Humanos, en el momento de conocer, decidir y juzgar
los jueces y tribunales de justicia, previa “la búsqueda de la verdad determina una actividad
del juez, pudiendo llegar a inculpar o a exculpar, lo que se explica desde la imparcialidad
judicial pero también la del Fiscal.698
EDUARDO J. COUTURE afirma: “La experiencia enseña que en un proceso sin una
dirección judicial y certera, la dirección queda en manos del contendiente más astuto… el
proceso no debe dejar de quedar en manos de la autoridad para que no quede en manos de
más aprovechados”.699
En consecuencia, el principio de dirección judicial del proceso que ejerce el Juez tiene como
poder-deber controlar razonablemente la actividad de las partes, promoviendo que logre los
fines y objetivos del proceso mediante la eficacia, prontitud y celeridad. Sin embargo, le
696
Cfr. Gestión. Acción y efecto de gestionar, de administrar y hacer diligencias conducentes al logro de un
asunto público o privado. Manuel Ossorio. Diccionario de Ciencias Jurídicas, Políticas y Sociales. Ob. Cit. P.
434.
697
Ver. AMALIA FERNÁNDEZ BALDIS. Reglas operativas derivados del principio de economía procesal.
Sup. Doctrina Judicial Procesal 2010 (agosto). Primera Edición. La ley, Bs. As. 2010. Cita Online. Citado
por German Eduardo Grosso Molina. Principios Procesales: “Economía Procesal” como principio
Fundamental a lograr una justicia eficaz. 22 de Septiembre del 2015.
698
TERESA ARMENTA DEU. Sistemas Procesales. La Justicia penal en Europa y América. Marcial Pons.
Madrid. 2012. P. 95.
699
EDUARDO J. COUTURE. Proyecto de Código de Procedimiento Civil con exposición de motivos. Editorial
Depalma. Buenos Aires. 1945. P. 24, 25 y 54.
260
corresponde a los juzgadores intervenir con prudencia, en razón que son garantista de los
derechos de las personas que se prueba que es inocente y no se puede autoincriminarse el
procesado.
El desarrollo del Derecho Procesal permite alcanzar un nuevo paradigma y declara que las o
los jueces han superado el rol de ser “director del proceso judicial” quien no alcanzó ni
concretó la aspiración de los ciudadanos que es la tutela judicial efectiva y eficiente, por lo
que surge el juez administrador quien corrige sus falencias y debilidades; el “Juez
administrador” debe gestionar el escaso “recurso tiempo del proceso”, con el objeto de reducir
costas y esfuerzo, velando y practicando una adecuada administración de recursos del Estado
que se le han confiado y respetando el debido proceso.
También, se debe dejar constancia que los jueces deben regir sus actuaciones y conductas
judiciales de acuerdo a los estándares, principios y normas internacionales de Bangalore sobre
la conducta judicial 2002, que establece los estándares para la conducta ética de los jueces que
deben aplicar en proceso judicial, como son: los principios de independencia, imparcialidad,
integridad, corrección, igualdad, competencia y diligencia.700
En virtud de la dirección judicial del proceso en los sistemas mixtos en búsqueda de la verdad
el Juez tiene facultad de interrumpir y hacer preguntas, mediante las aclaraciones a las partes
procesales, pudiendo incluso llegar a inculpar o a exculpar, lo que contradice el principio de
imparcialidad del Juzgador, derecho consagrado en normas nacionales y en el derecho
internacional de los derechos humanos701. Esta actuación judicial del Juez es legítima y valida
700
Principios de Bangalore sobre conducta judicial, aprobado por el Consejo Económico y Social de las
Naciones Unidas en la resolución E/CN4/2003/65/Anexo, en la Haya, Países Bajos, Noviembre 2002 y
Adoptado en 10 de Enero del 2003.
701
Cfr. TERESA ARMENTA DEU. Sistemas Procesales Penales. La Justicia Penal en Europa y América. Ob.
Cit. P.95 y 96.
261
mientras no vulnere la imparcialidad del Juzgador, de acuerdo al Artículo 8 numeral 1 de la
Convención Americana de Derechos Humanos.702
Sin embargo, le corresponde a los Juzgadores intervenir con prudencia, en razón de que es
inocente y no se puede auto incriminarse el procesado.
Artículo 14.-
1.- Todas las personas son iguales ante los tribunales y cortes de justicia. Toda
persona tendrá derecho a ser oída públicamente y con las debidas garantías por un
tribunal competente, independiente e imparcial, establecido por la ley […].703
Artículo 10.-
Toda persona tiene derecho, en condiciones de plena igualdad, a ser oída
públicamente y con justicia por un tribunal independiente e imparcial, para la
determinación de sus derechos y obligaciones o para el examen de cualquier
acusación contra ella en materia penal.704
702
Convención Americana de Derechos Humanos, 1969. Artículo 8. Garantías Judiciales.- 1. Toda persona
tiene derecho a ser oída, con las debidas garantías y dentro de un plazo razonable, por un juez o tribunal
competente, independiente e imparcial, establecido con anterioridad por la ley, en la sustanciación de
cualquier acusación penal formulada contra ella, o para la determinación de sus derechos y obligaciones de
orden civil, laboral, fiscal o de cualquier otro carácter .
703
Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos. Adoptado y abierto a la firma, ratificación y adhesión
por la Asamblea General en su resolución 2200 A (XXI), de 16 de diciembre de 1966,.1966.Articulo 14.
Disponible en: http://www.ohchr.org/SP/ProfessionalInterest/Pages/CCPR.aspx
704
Declaración Universal De Derechos Humanos. Adoptada y proclamada por la Resolución de la Asamblea
General 217 A (iii) del 10 de diciembre de 1948.. Artículo 10. Disponible en:
http://www.un.org/es/documents/udhr/
262
c) Convención Americana sobre Derechos Humanos, 1969
Artículo 8. Garantías Judiciales.-
1.- Toda persona tiene derecho a ser oída, con las debidas garantías y dentro de un
plazo razonable, por un juez o tribunal competente, independiente e imparcial,
establecido con anterioridad por la ley, en la sustanciación de cualquier acusación
penal formulada contra ella, o para la determinación de sus derechos y obligaciones
de orden civil, laboral, fiscal o de cualquier otro carácter705
14.5. Normas Nacionales que establecen El Rol del Juez Director del Proceso Penal
a) Constitución de la República del Ecuador, 2008.
15. Impulso procesal: corresponde a las partes procesales el impulso del proceso,
conforme con el sistema dispositivo707
705
Convención Americana sobre Derechos Humanos, 1969. Articulo 8 numeral 1. Disponible en:
https://www.oas.org/dil/esp/tratados_B-32_Convencion_Americana_sobre_Derechos_Humanos.htm
706
Constitución de la República del Ecuador, 2008. Artículo 76, numeral 1 y 172. Disponible en:
http://www.asambleanacional.gov.ec/documentos/constitucion_de_bolsillo.pdf
707
Código Orgánico Integral Penal, 2014.Articulo 5, numeral 5. Disponible en: http://www.justicia.gob.ec/wp-
content/uploads/2014/05/c%C3%B3digo_org%C3%A1nico_integral_penal_-_coip_ed._sdn-mjdhc.pdf
263
Artículo 225. Competencia.- Las y los jueces de garantías penales, además de las
competencias atribuidas en el Código Orgánico Integral Penal, son competentes
para:
1.- Cuidar que se respeten los derechos y garantías de las partes procesales en los
juicios;
15.1 Conceptualización.
El principio del impulso procesal es constitucional y legal que puede estar facultado al Juez,
Tribunal o a las partes procesales. Tiene como objetivo legitimar y poner en movimiento la
708
Código Orgánico Integral Penal, 2014.Articulo 225, numeral 1. Disponible en: http://www.justicia.gob.ec/wp-
content/uploads/2014/05/c%C3%B3digo_org%C3%A1nico_integral_penal_-_coip_ed._sdn-mjdhc.pdf
709
Código Orgánico de la Función Judicial, 2009.Articulo 130, numeral 1, 2 y 15. Disponible en:
https://www.oas.org/juridico/mla/sp/ecu/sp_ecu-int-text-cofj.pdf
264
actividad judicial por voluntad de las partes procesales, para que sea más funcional, dinámica,
desarrollo, avance y directriz normal del proceso, cuando el Juez está autorizado de acuerdo
con las leyes, mediante la cual el Estado constitucional de derechos y justicia, cumple con el
libre acceso, tutela judicial, efectividad y eficacia de la justicia plena al poner fin al conflicto
judicial con la sentencia firme, en bien de la armonía y paz social.
Según EDUARDO COUTURE, se denomina impulso procesal al fenómeno en virtud del cual
se asegura la continuidad de los actos procesales y su dirección hacia el fallo definitivo712
Sobre el tema, GUISEPPE CHIOVENDA afirma: “Las actividades del simple impulso
procesal, es decir, dirigidas únicamente a llevar adelante el proceso, se reservan a las partes
710
GIUSEPPE CHIOVENDA. Instituciones de Derecho Procesal Civil. Madrid. Editorial. Revista de Derecho
Privado. Madrid. 1954. P.102.
711
LUIS PRIETO SANCHÍ. Derecho Procesal Civil Tomo IV. Buenos Aires, Abeledo –Perrot.1964. P.201.
712
EDUARDO COUTURE. Fundamentos del Derechos Procesal Civil. LexisNexis, Santiago, 2006.P.115.
713
HUGO ROCCO. Tratado de Derecho Procesal Civil. Temis. Madrid. 1982. P. 717.
265
(principio de impulso procesal de parte) o, por el contrario, al juez (principio de impulso
procesal de oficio); siendo este segundo principio el que prevalece en los procesos orales”714.
En los procedimientos de aplicación del principio de impulso del proceso por voluntad de las
partes, el rol del juzgador (Juez) está supeditado a la voluntad de las partes procesales en
materia no penal; por ello, la doctrina sostiene: “Para que se pueda obtener el
desenvolvimiento gradual del proceso, en todas sus estados o fases, es necesario siempre que
las partes soliciten la actividad del juez” 715, en razón de que el litigio civil, comercial... es de
impulso procesal de actos esencialmente disponible de las partes procesales de conformidad
con la ley y por lo tanto, no existe interés público, sino privado.
Los jueces y tribunales penales tienen a su cargo la responsabilidad para que el proceso penal
no se detenga o paralice y termine dentro de los plazos legales; por ello, el modo de impulsar
el proceso penal, por las partes, Fiscal, Juez, Tribunal, se debe continuar con el procedimiento
hasta terminar la instancia procesal. Actualmente, la titularidad de la acción penal pública le
corresponde inicialmente al Fiscal y en los delitos de acción privada al acusador privado. Por
lo tanto, el Estado no solo tiene la pretensión penal material, sino también el derecho y la
obligación de perseguir penalmente al delito penal público. Por ello, “el Estado realiza su
pretensión penal por sí mismo, es decir, sin consideración a la voluntad del ofendido,
interviene de oficio en todos los hechos punibles (de acción ública)… Esto no significa que el
ofendido no pueda presentarse como denunciante, víctima, acusador o testigo, pero ni siquiera
esto es necesario”716.
En ese sentido, el autor GUISEPPE CHIOVENDA señala: “El impulso de oficio parte de la
idea de que el Estado está interesado en la rápida resolución de las litis, una vez que estas han
sido planteadas, y por ello sus órganos deben tomar la iniciativa de su rápida expedición; el
principio opuesto parte de la idea de que el proceso civil es cosa de las partes, y que estas
tienen el derecho a elegir el momento de su despacho, y al mismo tiempo la carga de ser
diligentes para conducirlo adelante”717.
714
GUISEPPE CHIOVENDA. Principios de Derecho Procesal Civil. Reus. Madrid. 1925. P. 61.
715
HUGO ROCCO. Tratado de Derecho Procesal Civil. Ob. Cit. P. 172.
716
CLAUS ROXIN. Derecho Procesal Penal. Editores del Puerto. Buenos Aires. 2000. P. 83. Citado por Ramiro
J. García F. Código Orgánico Integral penal Comentado. Tomo I. Ob. Cit. P. 111.
717
GUISEPPE CHIOVENDA. Principios de Derecho Procesal Civil. Ob. Cit. P. 78.
266
Por consiguiente, el impulso procesal puede atribuirse a los Órganos Jurisdiccionales, Juez,
Tribunales que, como director del proceso, deben impulsarlo de oficio hasta su conclusión, lo
que corresponde al impulso procesal de oficio; y, también el impulso procesal se le puede
atribuir a las partes procesales, que viene a ser el principio del impulso procesal de las partes,
en fin el impulso procesal lo puede ejecutar el Juez o Tribunal y las partes, de acuerdo con la
doctrina o el ordenamiento jurídico; por ejemplo, en el sistema jurídico de Italia y Francia
impera el impulso de las partes y en el ordenamiento jurídico Austriaco y Alemán impera el
impulso procesal de oficio, y en otros casos se dan ambos casos, esto es el impulso procesal
del Juez y de las partes para poner fin al proceso.
Artículo 14.
3.- Durante el proceso, toda persona acusada de un delito tendrá derecho, en plena
igualdad, a las siguientes garantías mínimas:
1.- Toda persona tiene derecho a ser oída, con las debidas garantías y dentro de un
plazo razonable, por un juez o tribunal competente, independiente e imparcial,
718
Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, 1976. Artículo 14, numeral 3, literal c. Disponible en:
http://www.ohchr.org/SP/ProfessionalInterest/Pages/CCPR.aspx
719
Derecho Internacional Humanitario en los Convenios de Ginebra del 12 de Agosto de 1949.
267
establecido con anterioridad por la ley, en la sustanciación de cualquier acusación
penal formulada contra ella, o para la determinación de sus derechos y obligaciones
de orden civil, laboral, fiscal o de cualquier otro carácter 720
15.3 Normas Nacionales que establecen el Principio de Impulso Procesal del Proceso
Penal
15.- Impulso procesal.- corresponde a las partes procesales el impulso del proceso,
conforme con el sistema dispositivo723
720
Convención Americana sobre Derechos Humanos, 1969.Artículo 8, numeral 1. Disponible en:
https://www.oas.org/dil/esp/tratados_B-32_Convencion_Americana_sobre_Derechos_Humanos.htm
721
Constitución de la República de Ecuador, 2008. Artículo 168, numeral 6. Disponible en:
http://www.asambleanacional.gov.ec/documentos/constitucion_de_bolsillo.pdf
722
Código Orgánico Integral Penal, 2014. Articulo 5 numeral 5. Disponible en: http://www.justicia.gob.ec/wp-
content/uploads/2014/05/c%C3%B3digo_org%C3%A1nico_integral_penal_-_coip_ed._sdn-mjdhc.pdf
723
Código Orgánico Integral Penal, 2014. Articulo 5 numeral 15. Disponible en: http://www.justicia.gob.ec/wp-
content/uploads/2014/05/c%C3%B3digo_org%C3%A1nico_integral_penal_-_coip_ed._sdn-mjdhc.pdf
268
Artículo. 18. Sistema-medio de administración de justicia.- El sistema procesal es un
medio para la realización de la justicia. Las normas procesales consagrarán los
principios de simplificación, uniformidad, eficacia, inmediación, oralidad, dispositivo,
celeridad y economía procesal, y harán efectivas las garantías del debido proceso. No
se sacrificará la justicia por la sola omisión de formalidades724
Los procesos se sustanciarán con la intervención directa de las juezas y jueces que conozcan
de la causa. Se propenderá a reunir la actividad procesal en la menor cantidad posible de
actos, para lograr la concentración que contribuya a la celeridad del proceso725
724
Código Orgánico de la Función Judicial, 2009.Articulo 18
725
Código Orgánico de la Función Judicial, 2009. Artículo 19. Disponible en:
https://www.oas.org/juridico/mla/sp/ecu/sp_ecu-int-text-cofj.pdf
726
Corte Constitucional de Colombia Sentencia No. T-604/95. Disponible en:
http://www.corteconstitucional.gov.co/relatoria/1995/T-604-95.htm
269
16. LA PUBLICIDAD DEL PROCESO PENAL COMO GARANTÍA
CONSTITUCIONAL Y LEGAL
Por ello, la publicidad “configura el requisito más elemental y llamativo del proceso
acusatorio727, por lo que la Constitución, el Derecho Internacional de los Derechos Humanos y
la legislación secundaria exigen que los juicios penales sean públicos, en virtud de que es un
“principio fundamental y estructurante del procedimiento penal” 728; y, que en países como
España, Estado Unidos, Alemania, Italia, Francia, Portugal e Inglaterra, han debatido sobre el
comportamiento y regulación del Principio de Publicidad en el Proceso Penal, en la que los
procesos penales con sus respectivas pruebas de un delito deberán ser públicos, para que se
genere “el control interno o externo de la actividad judicial sobre la administración de
justicia”729.
El jurista CÉSAR BECCARIA, señala: “Sean públicos los juicios y las pruebas de un delito,
para que la opinión, que es quizá el único fundamento de la sociedad, imponga un freno a la
fuerza y a las pasiones”730. Por lo tanto, es fundamental como principio constitucional que
exista la transparencia de la administración de justicia en un sistema acusatorio “es reprobar
727
Cfr. LUIGI FERRAJOLI. Derecho y Razón. Ob. Cit. P. 616.
728
ALBERTO BOVINO. Publicidad del Juicio Penal: La Televisión en la Sala de Audiencias, en problemas del
Derecho Penal Contemporáneo. Ed. Del Puerto. Buenos Aires. 1998. P. 271 y ss.
729
Cfr. GABRIEL IGNACIO ANTTUA. El Principio de Publicidad Procesal Penal. Un Análisis con base en la
historia y el derecho comparado, en Nuevas Doctrinas Penales. Buenos Aires. Editores del Puerto. Tomo
2000/A. P. 100. Véase: SABRINA VICTORERO. La Publicidad, una herramienta Fundamental en la lucha
contra la Corrupción. Lecciones y Ensayos. N° 88. 2010. P. 197-216.
730
CÉSAR BECCARIA. Tratado de los Delitos y de las penas. Editorial Centro de Publicaciones Ministerio de
Justicia y Biblioteca Nacional del Ministerio de Cultura. Madrid. 1993. P. 109.
270
toda practica secreta y ocultista (común en los sistemas inquisitivos), y postular en su lugar la
transparencia y flujo directo de toda información/acto/prueba del proceso. En ello, radica el
principio de publicidad”731
En igual sentido, el jurista LUIGI FERRAJOLI afirma: “la publicidad asegura el control,
tanto externo como interno, de la actividad judicial, pues el procedimiento debe realizarse a la
luz del sol, bajo el control de la opinión pública y, sobre todo, del imputado y su defensor”732.
Partiendo del punto de vista de “la jurisprudencia, las decisiones judiciales reafirman que el
principio de publicidad tiene una doble finalidad; esto es, proteger a las partes de una justicia
sustraída al control público y, por otra parte, mantener la confianza de la comunidad en los
tribunales. Ambos aspectos se consideran componentes del debido proceso y uno de los
pilares del Estado de Derecho”733. Sin embargo, CLAUS ROXIN sostiene que el fundamento
de la publicidad es triple: “Su significado esencial reside en consolidar la confianza pública en
la administración de justicia, fomentar la responsabilidad de los órganos de [esta] y evitar la
posibilidad de que circunstancias ajenas a la causa influyan en el tribunal y, con ello, en la
sentencia”734.
Por tanto, existen dos derechos fundamentales que se deducen con la publicidad del caso: por
una parte, el principio de audiencia para las partes, acusado (derecho a ser oído) víctima
(derecho a informarse) que se relaciona con el derecho de defensa y el debido proceso; y, por
otra parte, al derecho de información directa de los ciudadanos conforme lo establecen las
Constituciones de diferentes países, para saber cómo se tramitan los juicios y valoricen a los
tribunales y juzgadores, quienes son responsables ante la sociedad del ejercicio de sus
funciones y de sus deberes impuestos por la Constitución y leyes; por ello, la publicidad
constituye la única herramienta que tiene la sociedad sobre el quehacer de la actividades
judiciales sobre el procesado, su imputación, las pruebas, la manera como se lo juzga; y,
731
MARIA ELOISA QUINTERO y MIGUEL POLAINO-ORTS. Principios del Sistema Acusatorio. Una
Visión Sistémica. Aras Editores. Perú.2010.P.27.
732
LUIGI FERRAJOLI. Derecho y Razón. Ob. Cit. P. 616.
733
ERNESTO PEDRAZ PENALVA. Derecho Procesal Penal. J.I. Principios del Derecho Procesal Penal.
Colex. Madrid. 2000. Supra nota 37. P. 270-288.
734
CLAUS ROXIN. Derecho Procesal Penal. Ob. Cit. P. 407. Disponible en:
http://www.monografias.com/trabajos93/principios-rectores-delsistema-acusatorio/principios-rectores-del-
sistema-acusatorio.shtml
271
consecuentemente, el público se formará un criterio propio de la forma cómo es la
administración de justicia y la calidad de la misma. Por consiguiente, el proceso penal será
público con sus excepciones (protección de víctimas o del interés público), en la que el
público y terceros puedan observar los actos procesales de las partes, pruebas documental,
testimonial y material y su debate y argumentaciones en la audiencia.
Artículo 14.-
1) (…) Toda persona tendrá derecho a ser oída públicamente (…) 735
Artículo. 10.-
Todo el mundo tiene derecho, en plena igualdad, a ser oída públicamente y con justicia
por un tribunal independiente e imparcial, para la determinación de sus derechos y
obligaciones o para el examen de cualquier acusación penal formulada contra ella736
5.- El proceso penal debe ser público, salvo en lo que sea necesario para preservar
los intereses de la justicia737
735
Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos. Adoptado y abierto a la firma, ratificación y adhesión
por la Asamblea General en su resolución 2200 A (XXI), de 16 de diciembre de 1966. Artículo 14.
Disponible en: http://www.ohchr.org/SP/ProfessionalInterest/Pages/CCPR.aspx
736
Declaración Americana de los Derechos y Deberes del Hombre. Aprobada en la Novena Conferencia
Internacional Americana. Bogotá, Colombia, 1948. Artículo 10. Disponible en:
http://www.oas.org/es/cidh/mandato/Basicos/declaracion.asp
737
Convención Americana sobre Derecho Humanos, 1969. San José, Costa Rica 7 al 22 de noviembre de 1969
(Pacto de San José). Artículo 8, numeral 5. Disponible en: https://www.oas.org/dil/esp/tratados_B-
272
16.3. Comité de Derechos Humanos de la Naciones Unidas
Observación General N° 13, afirma: “La publicidad de la audiencia constituye una importante
salvaguarda de los intereses del individuo y de la sociedad en general. Al mismo tiempo, el
párrafo 1 del artículo 14 reconoce que los tribunales tienen la facultad de excluir la totalidad o
parte del público por las razones que se enumeran en dicho párrafo. Debe observarse que con
independencia de las circunstancias excepcionales, el comité considera que las audiencias
deben estar abiertas al público en general, incluidos los miembros de la prensa, sin estar
limitadas, por ejemplo, a una determinada categoría de personas. Debe observarse que, aun
en los casos en que el público quede excluido del proceso, la sentencia, con algunas
excepciones estrictamente definidas, debe hacerse pública”738.
Artículo. 76. Garantías Básicas del Debido Proceso.-En todo proceso en el que se
determinen derechos y obligaciones de cualquier orden, se asegurará el derecho al
debido proceso que incluirá las siguientes garantías básicas:
d) Los procedimientos serán públicos salvo las excepciones previstas por la ley.
Las partes podrán acceder a todos los documentos y actuaciones del
procedimiento.739
32_Convencion_Americana_sobre_Derechos_Humanos.htm
738
DANIEL O’ DONELL. Derecho Internacional de los Derechos Humanos. Normativa, Jurisprudencia y
Doctrina de los Sistemas Universal e Interamericano. Oficina en Colombia del Alto Comisionado de
Naciones Unidas para los Derechos Humanos.Observación General número 13. Supra nota 35. Bogotá. 2004.
P. 383-384.
Constitución de la República del Ecuador, 2008. Artículo 76, numeral 7, literal d. Disponible en:
739
http://www.asambleanacional.gov.ec/documentos/constitucion_de_bolsillo.pdf
273
Artículo 168. Principios Jurisdiccionales para la Administración de Justicia.- La
administración de justicia, en el cumplimiento de sus deberes y en el ejercicio de sus
atribuciones, aplicará los siguientes principios:
6.En todas sus etapas, los juicios y sus decisiones serán públicos, salvo los casos
expresamente señalados en la ley740
16. Publicidad: todo proceso penal es público salvo los casos de excepción previstos
en este Código.741
740
Constitución de la República del Ecuador, 2008. Artículo 168, numeral 5. Disponible en:
http://www.asambleanacional.gov.ec/documentos/constitucion_de_bolsillo.pdf
741
Código Orgánico integral Penal Art. 5 numeral 16. Disponible en: http://www.justicia.gob.ec/wp-
content/uploads/2014/05/c%C3%B3digo_org%C3%A1nico_integral_penal_-_coip_ed._sdn-mjdhc.pdf
742
Código Orgánico de la Función Judicial. Editorial Jurídica del Ecuador.2011. Artículo 13. Disponible en:
https://www.oas.org/juridico/mla/sp/ecu/sp_ecu-int-text-cofj.pdf
274
16.5 Jurisprudencia de la Corte Constitucional de Colombia
El principio de inmediación procesal es uno de los principios básicos que informa el sistema
formal de la oralidad, teniendo como finalidad, el contacto directo que tiene el juez o
Tribunal en el juicio oral entre las partes procesales: juzgador, litigantes y los elementos
probatorios, que el juzgador debe valorar para tomar su convicción y decisión judicial, en la
audiencia respectiva (sentencia en base a la información aportada de los hechos).
275
sostiene: “Solo a través del sometimiento oral y por ende público, de los medios de pruebas en
el juicio, es que el juez puede tener contacto directo con las fuentes y medios de pruebas,
siendo esta última parte, lo que engloba y plantea el principio de inmediación” 746. Por ello, la
inmediación funciona cuando se da por la presencia física del Juez, tribunal, partes
procesales, testigos, peritos, la recepción de alegatos, prueba, debates y objeciones finales,
durante la audiencia como medio de realización de la inmediación en el juicio oral, en la que
queda constancia en el acto escrita resumida de la actividad procesal que el secretario da fe.
Para JOSE ANTONIO NEYRA FLORES, “la inmediación es uno de los principios de mayor
importancia dentro del proceso penal, en la medida en que estructura el cambio de paradigma
en la resolución de las causas que llegan al servicio de justicia, y es un principio base de la
reforma procesal penal, determinante para pasar de un sistema mixto o inquisitivo a un
acusatorio, tanto a nivel legislativo, jurisprudencial como en el frente de lucha de prácticas”747
El jurista PIERO CALAMANDREI, citado por Perfecto Ibáñez, afirma: “La inmediación
significa presencia simultánea de los varios sujetos del proceso en el mismo lugar, y, por
consiguiente, posibilidad entre ellos de cambiarse oralmente su comunicaciones”750.
Mientras CLAUS ROXIN expresa: el principio de inmediación implica dos cosas distintas: a)
El Tribunal que dicta la sentencia debe observar por sí mismo la recepción de la prueba
746
MIGUEL ANGEL DÍAZVILLALONA. El Principio de Inmediación en el Proceso Penal. Disponible en:
https://mdiazv.blogspot.com/2010/02/el-principio-de-inmediacion-en-el-proceso-penal
747
JOSE ANTONIO NEYRA FLORES. Manual del Nuevo Proceso Penal y de Litigación Oral. Ob. Cit. P.130.
748
FRANCESCO CARNELUTTI. Tratado del Proceso Civil. Distrito e Proceso. Napoli. 1958. P. 151.
749
RAFAEL ZAMUDIO ARIAS. Principios Rectores del Nuevo Proceso Penal, aplicaciones e implicaciones:
oralidad, inmediación, contradicción, concentración. El nuevo sistema de Justicia Penal Acusatorio desde la
perspectiva Constitucional. México. 2011.P.63.
750
Disponible en:http://www.enjcomunidad.org/file.php/83/adnres-ibanez-jodnum46.pdf P. 57-58.
276
(inmediación formal); y, b) El Tribunal debe extraer los hechos de la fuente, por si mismo,
sin utilizar equivalente probatorio alguno (inmediación material)751.
Para que tenga eficacia el principio de inmediación debe existir el de concentración, que exige
se tenga todos las pruebas de cargo y descargo de los hechos, deberá ser solicitada,
practicadas o introducirse dentro del juicio oral público (audiencia); dentro del cual todos los
actos procesales de distintas clases deban efectuarse en una sala de audiencia, por ejemplo: la
exposición de acusación y defensa (posición inicial), desahogo de las pruebas, los alegatos de
conclusión ( conclusiones y expedición de la sentencia); no se puede interrumpir los actos
procesales en una audiencia; sin embargo, en ocasiones se puede suspender el proceso para
que continúe el siguiente día y llegar hasta la sentencia (aplicando el principio de
continuidad), tampoco una persona puede ser juzgada en ausencia. Por consiguiente, la
inmediación permite una relación interpersonal directa, frente a frente, cara a cara, de todos
entre sí; Juzgador o Tribunal, acusado y acusador, acusado y defensores, entre estos con el
juzgador y acusado, la víctima, fiscal y terceros, testigos y peritos; es decir, el Juez conoce
directamente la personalidad, las actividades, las reacciones de los acusados, victimas, fiscal.
Por lo que podemos sostener que el Principio de Inmediación tiene como objetivo la relación
751
CLAUS ROXIN. Derecho Procesal Penal. Ob. Cit. P. 394.
752
MARIA ELOISA QUINTERO y MIGUEL POLAINO-ORTS. Principios del Sistema Acusatorio. Una
Visión Sistemática. Ara Editores. Perú. 2010. P. 35-36
277
directa del juez con las pruebas sean recibidos apreciados por el juzgador al mismo tiempo y
en presencia directa de las partes procesales.
753
Constitución de la Republica de Ecuador, 2008. Artículo 169. Disponible en:
http://www.asambleanacional.gov.ec/documentos/constitucion_de_bolsillo.pdf
754
Código Orgánico Integral Penal. 2014, Articulo 5 numeral 17. Disponible en: http://www.justicia.gob.ec/wp-
content/uploads/2014/05/c%C3%B3digo_org%C3%A1nico_integral_penal_-_coip_ed._sdn-mjdhc.pdf
755
Código Orgánico de la Función Judicial. Artículo 18. Disponible en:
https://www.oas.org/juridico/mla/sp/ecu/sp_ecu-int-text-cofj.pdf
278
de conformidad con lo fijado por las partes como objeto del proceso y en mérito de
las pruebas pedidas, ordenadas y actuadas de conformidad con la ley.
Sin embargo, en los procesos que versen sobre garantías jurisdiccionales, en caso de
constatarse la vulneración de derechos que no fuera expresamente invocada por los afectados,
las juezas y jueces podrán pronunciarse sobre tal cuestión en la resolución que expidieren, sin
que pueda acusarse al fallo de incongruencia por este motivo.
Los procesos se sustanciarán con la intervención directa de las juezas y jueces que conozcan
de la causa. Se propenderá a reunir la actividad procesal en la menor cantidad posible de
actos, para lograr la concentración que contribuya a la celeridad del proceso.756
Entre los principios que inspiran la estructuración y la interpretación de las normas jurídicas
procesales se encuentra el de la inmediación, en virtud del cual el juez debe tener una relación
directa y sin intermediarios con el proceso, tanto con los demás sujetos del mismo, es decir, las
partes y los intervinientes, como con su contenido o materia, de principio a fin. 757
756
Ibídem. Artículo 19.
757
Corte Constitucional de Colombia. Sentencia C-830/02. Disponible en:
http://www.corteconstitucional.gov.co/relatoria/2002/C-830-02.htm
279
Por tanto, el proceso debe desarrollarse con agilidad eficacia, rapidez y sin dilaciones
injustificadas (oportunas) que un “plazo razonable”, dentro de un procedimiento que
garantice los principios y garantías del debido proceso, con la finalidad de alcanzar la justicia,
si se tiene en cuenta la importancia de todo lo que comprometen las partes procesales en el
marco del proceso: la libertad, sus bienes, la expectativa de una cadena, su futuro, familia. Por
lo cual, cuando las decisiones judiciales, en el marco del proceso, se logren en un plazo
razonable y con el menor coste posible, se podrá afirmar la calidad que la justicia y la
sociedad demandan, por lo tanto la celeridad procesal exige en el proceso penal acusativo que
jueces, fiscales, defensores públicos y defensores particulares actúen con eficiencia y agilidad
procesal. El principio de celeridad procesal tiene relación con la economía procesal conforme
lo señala la Constitución de la República del Ecuador 758 y guarda relación con la frase del
filósofo SENECA “Nada se parece tanto a la injusticia como la justicia tardía”, si tomamos en
cuenta que la celeridad es eficiencia y eficacia en el descongestionamiento de la carga
procesal; si los operadores de justicia resuelven los procesos de sus despachos con agilidad y
prontitud, no tendrán expedientes acumulados sin despachar en perjuicio de la administración
de justicia y de la ciudadanía.
758
Constitución de la República del Ecuador, 2008. Articulo 169.-EI sistema procesal es un medio para la
realización de la justicia. Las normas procesales consagrarán los principios de simplificación, uniformidad,
eficacia, inmediación, celeridad y economía procesal, y harán efectivas las garantías del debido proceso. No
se sacrificará la justicia por la sola omisión de formalidades.
759
Corte Constitucional de Colombia. Sentencia C-699 de 200. M.P. Alejandro Martínez Caballero. Véase:
Carlos Bernal Pulido. El Derecho de los Derechos. Ob. Cit. P. 372.
760
JULIO MUERZA ESPARZA. Derecho Procesal Penal. En de la Oliva et. España. 2012.P. 601.
280
Para varios autores, el principio de celeridad presenta tres importantes manifestaciones: a)
Desde el punto de vista de la legalidad ordinaria, la celeridad ha de obtenerse mediante la
adecuada combinación de los principios de preclusión, eventualidad y concentración del
procedimiento; b) Desde la legislación constitucional, es un auténtico derecho fundamental
el que todo ciudadano tiene “a un proceso sin dilaciones indebidas”; y, c) Desde la política
de legislación, al haberse convertido el principio de celeridad , junto con el de eficacia, en
uno de los postulados de la justicia social contemporánea, ha de informar las sucesivas
reformas legislativas761.
761
DINO CARLOS CARO CORIA (Perú). Las garantías Constitucionales del proceso penal. Biblioteca
Jurídica Virtual del Instituto de Investigaciones jurídicas de la UNAM. www.juridicas.unam.mx
762
PABLO SANCHEZ VELARDE. Manual de Derecho Procesal IDEMSA. Lima. 2004. P.286-287.
763
Corte Interamericano de Derechos Humanos. Derecho al Debido Proceso.Elementos delplazo razonable: La
situación jurídica de la persona involucrada en el proceso.
281
18.1 El Principio de Celeridad en el Derecho Internacional de Derechos Humanos sobre
el derecho a ser juzgado en un tiempo razonable sin Dilaciones
Articulo 9.-
3. Toda persona detenida o presa a causa de una infracción penal será llevada sin
demora ante un juez u otro funcionario autorizado por la ley para ejercer funciones
judiciales, y tendrá derecho a ser juzgada dentro de un plazo razonable o a ser puesta
en libertad. La prisión preventiva de las personas que hayan de ser juzgadas no debe
ser la regla general, pero su libertad podrá estar subordinada a garantías que
aseguren la comparecencia del acusado en el acto del juicio, o en cualquier momento
de las diligencias procesales y, en su caso, para la ejecución del fallo.764
Artículo 14.
282
Todo individuo que haya sido privado de su libertad tiene derecho a que el juez
verifique sin demora la legalidad de la medida y a ser juzgado sin dilación
injustificada, o, de lo contrario, a ser puesto en libertad. Tiene derecho también a un
tratamiento humano durante la privación de su libertad”.766
5. Toda persona detenida o retenida debe ser llevada, sin demora, ante un juez u otro
funcionario autorizado por la ley para ejercer funciones judiciales y tendrá derecho a
ser juzgada dentro de un plazo razonable o a ser puesta en libertad, sin perjuicio de
que continúe el proceso. Su libertad podrá estar condicionada a garantías que
aseguren su comparecencia en el juicio.767
766
Declaración Americana de los Derechos y Deberes del Hombre. Aprobada en la Novena Conferencia
Internacional Americana Bogotá, Colombia, 1948. Articulo XXV. Disponible en:
http://www.echr.coe.int/Documents/Convention_SPA.pdf
767
Convención Americana sobre Derechos Humanos. San José, Costa Rica 7 al 22 de noviembre de 1969.
Articulo 7 numeral 5. Disponible en: https://www.oas.org/dil/esp/tratados_B-
32_Convencion_Americana_sobre_Derechos_Humanos.htm
768
Ibídem. Articulo 8 numeral 1.
283
eficacia, inmediación, celeridad y economía procesal, y harán efectivas las garantías
del debido proceso. No se sacrificará la justicia por la sola omisión de formalidades
Las servidoras y servidores judiciales, que incluyen a juezas y jueces, y los otros
operadores de justicia, aplicarán el principio de la debida diligencia en los procesos
de administración de justicia.
Las juezas y jueces serán responsables por el perjuicio que se cause a las partes por
retardo, negligencia, denegación de justicia o quebrantamiento de la ley769
El principio de celeridad procesal consagrado por el Art. 116 XCPE, impone a quien administra
justicia el deber jurídico de despachar los asuntos sometidos a su conocimiento sin dilaciones
indebidas; exigencia que se hace más apremiante en aquellos casos vinculados a la libertad
personal, toda vez que tales peticiones deben ser atendidas de forma inmediata si no existe una
norma que establezca una plazo, y si existiera, el plazo deberá ser cumplido estrictamente 771
769
Constitución de la República de Ecuador, 2008. Articulo 169 y 172. Disponible en:
http://www.asambleanacional.gov.ec/documentos/constitucion_de_bolsillo.pdf
770
Código Orgánico de la Función Judicial, 2009. Artículo 2009. Disponible en:
https://www.oas.org/juridico/mla/sp/ecu/sp_ecu-int-text-cofj.pdf
771
LUCIO VALDA MARTINEZ y JOSE MANUEL GUTIERREZ. Consultores Tribunal Constitucional de
Bolivia. Sistematización de la Jurisprudencia Obligatoria en Derecho Procesal Penal SSCC 758/2000-R y
/05/2088-R. Tomo II. Sucre. 2008.P. 106.
284
19. PRINCIPIO DE MOTIVACIÓN CONSTITUCIONAL Y LEGAL DE
LAS DECISIONES JUDICIALES Y SENTENCIAS
772
RAFAEL BENITEZ GIRALT, El papel del Juez en la Democracia, un acercamiento teórico. 1°. Edición –
San Salvador. El Salvador, Consejo Nacional de la Judicatura, Escuela de Capacitación Judicial (CNJ-ECJ),
2006. P.79.
773
PERFECTO ANDRES IBAÑEZ. Guía de trabajo para los textos de apoyo del curso: Valoración de la
Prueba en el Proceso penal. 1° Edición; Unidad de Producción bibliográfica y documentación, CNJ-ECJ; San
Salvador, El Salvador. 2003. P. 88.
774
PERFECTO ANDRES IBAÑEZ Y ALEX ROBERT. Jueces y Ponderación Argumentativa. 1° Ed,
Universidad Nacional Autónoma de México. 2006. P. 37.
285
c) Doctrina fundada en “argumentos cognoscitivos sobre los hechos y recognoscitivos
sobre el derecho: las sentencias, por lo contrario, exigen una motivación fundada en
argumentos cognoscitivos sobre los hechos y recognoscitivos sobre derecho de cuya
aceptación como “verdaderos” depende tanto la validez o legitimación jurídica interna
o formal como la justicia o legitimación política, externa o sustancial de las
mismas”775.
Existen fundamentos de índole jurídico y político para la motivación de las sentencias; enseña
que “en todas las sociedades civilmente organizadas existe una norma que impone a los jueces
el deber de juzgar según justicia. La existencia de un deber está en función de la posibilidad
de poner de relieve su posible violación, con lo que se quiere decir que el deber de juzgar
según justicia se resuelve en primer término en el deber de motivar la decisión, precisamente
porque es la motivación el medio imprescindible para comprobar la justicia de la decisión”778.
“La necesidad de que las resoluciones judiciales sean motivadas es un principio que informa
el ejercicio de la función jurisdiccional y, al mismo tiempo, un derecho constitucional de los
justiciables. Mediante ella, por un lado se garantiza que la administración de justicia se lleve a
775
LUIGI FERRAJOLI. Democracia y Garantísmo. Editorial Trotta. Madrid. 2010. P. 68 y 69.
776
PABLO RAUL BONORIO. La Justificación de las Sentencias Penales. Una perspectiva lógica y conceptual.
Publicación CNJ. El Salvador. 2003. P.27.
777
MARINA GASCON ABELLAN; ALFONSO GARCIA FIGUEROA. “Interpretación y Argumentación
Juridica”.1 Ed. San Salvador, El Salvador: Consejo Nacional de la Judicatura, Escuela de Capacitación
Judicial. 2003. P.102
778
FRANCESCO CARNELUTTI. Lecciones de Derecho Procesal Penal. Volumen II. P. 251. Citado por: Pablo
Sánchez Velarde. Manual de Derecho Procesal Penal. Indensa. Lima. 2004. P. 180.
286
cabo de conformidad con la Constitución y las leyes (artículos 45° y 138° de la Constitución)
y, por otro, que los justiciables puedan ejercer de manera efectiva su derecho de defensa”779.
Esto significa que las resoluciones, autos y sentencias judiciales dictadas por autoridad
judicial, sean estas jueces penales, civiles, laborales, mercantiles… deberán referirse a la
fundamentación jurídica, técnica y precisa sobre el debate de los hechos y del derecho, como
exigencia constitucional y legal de la motivación, y su argumentación, corresponde al análisis
de la argumentación jurídica, de la conducta descrita por el acusado, de igual manera
debatirse su categoría del delito: tipicidad, antijuricidad y culpabilidad; y, la fundamentación
de la pena y su sanción que se impone. Es decir, en materia de derecho penal, la limitación
constitucional se fundamenta en que su interpretación sea estricta solo deja lugar a la
argumentación.
a) La Racionalidad.- Todo proceso judicial o administrativo debe terminar con una solución
jurídica legitimada, por ser una garantía exigible en la administración de justicia; es decir,
779
RAÚL CHANAMÉ ORBE. Diccionario de Derecho Constitucional. Ob. Cit.P. 396.
780
IGNACIO COLOMER HERNÁNDEZ. La motivación de las sentencias. Sus exigencias constitucionales y
legales. Tirant lo Blanch. Valencia. 2003. P. 163-308. Véase: RODRIGO CERDA SAN MARTIN y MARIA
ESTHER FELICES MENDOZA. El Nuevo Proceso Penal Constitucionalización, principios y racionalidad
probatoria. Ob. Cit. P. 295-325.
287
el deber y obligación de motivar una sentencia o resolución judicial es una garantía
vinculada a la correcta administración de justicia, que en un Estado constitucional de
derechos, justicia y democrático se protege a los ciudadanos a ser juzgados por razones y
fundamentos de hecho y de derecho, y lo contrario sería una sentencia arbitraria ilegal e
inconstitucional y se afectará al debido proceso.
Así, se puede afirmar que la racionalidad judicial se valora si la justificación está amparada en
Derecho, mediante motivación razonada de los hechos, de las pruebas, valor de pruebas y
motivación razonada del ordenamiento jurídico aplicado y la comunicación de la decisión y su
justificación que el juez o tribunal deberá emitir al dictar su fallo judicial, además la respuesta
a las pretensiones de las partes.
La motivación de la sentencia es una garantía de defensa y debido proceso que tienen las
partes procesales frente al posible arbitrio judicial; por ello, exige una aplicación racional de
los fundamentos de hecho y de derecho que integran la decisión judicial; es decir, las razones
por las que se llega a esa conclusión en base a las pruebas consideradas de acuerdo con la
sana crítica racional; y así mismo, el porqué de los efectos jurídicos atribuidos a los hechos
acreditados en la decisión que debe basarse en una motivación fundamentada en derecho, en
concordancia con los principios y valores establecidos en la Constitución.
781
IGNACIO COLOMER HERNÁNDEZ. La motivación de las sentencias. Sus exigencias constitucionales y
legales. Ob. Cit. P.138
288
b) La Razonabilidad.- De la decisión judicial guarda relación a la aceptabilidad del fallo por
el común de las personas. Por lo tanto, puede haber decisiones racionales y coherentes que las
mismas pueden no ser razonables.
Por ello, existe un imperativo que obliga a los jueces y tribunales a la motivación de las
resoluciones judiciales representa una garantía efectiva y eficaz de la justicia, del debido
proceso, publicidad, seguridad jurídica y transparencia en un Estado Constitucional de
derechos y justicia; si tomamos en cuenta que las sentencia judiciales deben cumplir dos
requisitos: Presupuestos externos como la existencia de la judicatura o tribunal legalmente
constituido, la intervención de las partes, de manera concreta del imputado, a quien se
garantiza su derecho a la defensa y al debido proceso y la existencia de protección.784
782
IGNACIO COLOMER HERNÁNDEZ. La motivación de las sentencias. Sus exigencias constitucionales y
legales. Ob. Cit. P. 163-308.
783
FERNÁNDO DE LA RÚA. Teoría General del Proceso. Ediciones Depalma. Buenos Aires. 1991. P. 146.
784
FERNÁNDO DE LA RÚA. Teoría General del Proceso. Ob. Cit. P. 142.
785
CARLA ESPINOZA CUEVA. Teoría de la motivación de las resoluciones judiciales y jurisprudencia de
casación y electoral. Quito. Editorial V y M Gráficos. Quito. 2010. P. 66.
289
ajena a la propia sentencia que se dicte” 786. Asimismo, la coherencia externa permite suponer
que el juez se encuentra vinculado por sus fallos previos en caso jurisprudenciales analógicos”
19.3 La motivación debe ser expresa, clara, completa, legítima y lógica, de lo contrario
sería una resolución arbitraria o ilógica
Existe otro sector de la doctrina que sostiene que los requisitos de la adecuada motivación
son: Que la motivación sea expresa, clara, completa, legítima y lógica, ya que lo contrario
sería una resolución arbitraria o ilógica.787
b) Motivación Clara: Es necesario que el rol del juzgador debe ser comprensible y no
deje lugar a dudas sobre sus premisas o ideas que plasma en la motivación de la
786
IGNACIO COLOMER HERNÁNDEZ. La motivación de las sentencias. Sus exigencias constitucionales y
legales.Ob. Cit. P.289-291.
787
Cfr. FERNANDO DE LA RÚA. Teoría general del Proceso. Ob. Cit. P. 150 y ss.
788
FERNANDO DE LA RÚA. Teoría general del Proceso. Ob. Cit. P. 146.
789
Código Orgánico General de Procesos Ecuatoriano. Artículo. 89.- Motivación. Toda sentencia y auto serán
motivados, bajo pena de nulidad. No habrá tal motivación si en la resolución no se enuncian las normas o
principios jurídicos en que se funda y no se explica la pertinencia de su aplicación a los antecedentes de
hecho. Las sentencias se motivarán expresando los razonamientos fácticos y jurídicos, que conducen a la
apreciación y valoración de las pruebas como a la interpretación y aplicación del derecho. La nulidad por
falta de motivación única y exclusivamente podrá ser alegada como fundamento del recurso de apelación o
causal del recurso de casación.
790
Código Orgánico Integral Penal, Artículo 622, numeral 2.
290
sentencia, es decir, el lenguaje que utilice, debe ser técnico, y no contenga expresiones
ambiguas, distorsiones que conlleven a interpretaciones ajenas a la realidad procesal.
d) Motivación Legítima: Los medios probatorios, deber real y verdadera que constan en
el proceso; es decir, pruebas legales y válidas, y su evaluación debe ser total y en
conjunto; recordar que “solo la prueba debidamente actuada, esto es, aquella que se ha
pedido, presentado y practicado de acuerdo con la ley, hace fe en juicio”792.
En efecto, una sentencia judicial tiene coherencia en sus partes: una de consideraciones
generales relativa al caso (hechos) denominada expositiva (antecedentes), otra del análisis o
razonamiento jurídico del caso en concreto (considerativa); y, por último la parte resolutiva, o
fallo, vinculados a los hechos y derecho, por ello, con la integración de estas partes señaladas,
791
MANUEL ORTELLS RAMOS. Proceso Penal. Citado por Pablo Sánchez Velarde. Derecho Procesal Penal.
Indensa. Lima. 2004. P. 323.
792
Véase: Artículo 121 del Código de Procedimiento Civil y Artículo 615, numeral 2 del Código Orgánico
Integral Penal.
793
CARLA ESPINOZA CUEVA. Teoría de la Motivación de las resoluciones judiciales y jurisprudencia de
Casación y Electoral. Ob. Cit. P. 89.
291
puede considerarse que una decisión judicial se encuentra bien estructurada y motivada, y
consecuentemente, se produce los efectos constituciones y legales; es decir, deberá existir una
garantía judicial básica para toda persona en un proceso que es de gozar de la certeza judicial
o seguridad jurídica sobre el derecho invocado por la parte procesal.
La sentencia una vez agotados todos los recursos impugnativos –ordinarios o extraordinarios-,
pone fin al proceso, y se denomina cosa juzgada. Por lo tanto, se consagra el principio de que
según el cual por los mismos hechos y derechos, el ciudadano condenado o absuelto no puede
volver a ser procesado o condenado por los mismos hechos (non bis in idem) de conformidad
con el articulo 8 numeral 4 de la Convención Americana sobre Derechos Humanos y artículo
76 numeral 7, literal i de la Constitución de la República del Ecuador. En consecuencia, una
sentencia judicial es suficiente que sea legitima; es decir, que garantice los derechos y
garantías judiciales sino la debida motivación, en la que los Jueces y Tribunales tiene el deber
y obligación de fundamentar y argumentar en derecho a la sentencia; Por tal motivo, debe
guardar coherencia interna, lógica en la relación de los hechos, las acusaciones, las pruebas y
las responsabilidades determinadas; además, debe tener coherencia externa que se ampara en
las normas sustantivas y procesales pertinentes vigentes, a pesar de no haber sido citados por
las partes procesales.
794
Disponible en: http://www.echr.coe.int/documents/convention_spa.pdf y
http://www.echr.coe.int/Documents/Convention_SPA.pdf
292
Artículo 18.- La obligación de motivar las decisiones se orienta a asegurar la
legitimidad del juez, el buen funcionamiento de un sistema de impugnaciones
procesales, el adecuado control del poder del que los jueces son titulares y, en último
término, la justicia de las resoluciones judiciales. 795
Artículo 20.- Una decisión carente de motivación es, en principio, una decisión
arbitraria, sólo tolerable en la medida en que una expresa disposición jurídica
justificada lo permita. 797
795
Código Iberoamericano de Ética Judicial. Disponible en:
http://www.poderjudicial.gob.hn/CUMBREJUDICIALIBEROAMERICANA/Documents/CodigoEtico.pdf
796
Ibídem Código Iberoamericano de Ética Judicial, 2014
797
Ibídem Código Iberoamericano de Ética Judicial, 2014
798
Corte Interamericana de Derechos Humanos. Caso Tristán Donoso vs Panamá. Sentencia del 27 de Enero
del 2009, párrafos 152-153.
293
Artículo 120.3.- Las sentencias serán siempre motivadas y se pronunciarán en
Audiencias Públicas.799
Artículo 76.- Garantías básicas del Debido Proceso.- En todo proceso en el que se
determinen derechos y obligaciones de cualquier orden, se asegurará el derecho al
debido proceso que incluirá las siguientes garantías básicas:
a) Nadie podrá ser privado del derecho a la defensa en ninguna etapa o grado del
procedimiento.
b) Contar con el tiempo y con los medios adecuados para la preparación de su
defensa.
c) Ser escuchado en el momento oportuno y en igualdad de condiciones.
d) Los procedimientos serán públicos salvo las excepciones previstas por la ley. Las
partes podrán acceder a todos los documentos y actuaciones del procedimiento.
e)Nadie podrá ser interrogado, ni aún con fines de investigación, por la Fiscalía
General del Estado, por una autoridad policial o por cualquier otra, sin la presencia
de un abogado particular o un defensor público, ni fuera de los recintos autorizados
para el efecto.
f) Ser asistido gratuitamente por una traductora o traductor o intérprete, si no
comprende o no habla el idioma en el que se sustancia el procedimiento.
g) En procedimientos judiciales, ser asistido por una abogada o abogado de su
elección o por defensora o defensor público; no podrá restringirse el acceso ni la
comunicación libre y privada con su defensora o defensor.
h) Presentar de forma verbal o escrita las razones o argumentos de los que se crea
asistida y replicar los argumentos de las otras partes; presentar pruebas y
contradecir las que se presenten en su contra.
i) Nadie podrá ser juzgado más de una vez por la misma causa y materia. Los casos
resueltos por la jurisdicción indígena deberán ser considerados para este efecto.
j) Quienes actúen como testigos o peritos estarán obligados a comparecer ante la
jueza, juez o autoridad, y a responder al interrogatorio respectivo.
799
LUÍS MARTÍN REBOLLO. Constitución Española. 25 Aniversarios. Editorial. Thomson. Aranzodi.
Navarra-España. 2003. P. 119.
294
k) Ser juzgado por una jueza o juez independiente, imparcial y competente. Nadie
será juzgado por tribunales de excepción o por comisiones especiales creadas para
el efecto.
l) Las resoluciones de los poderes públicos deberán ser motivadas. No habrá
motivación si en la resolución no se enuncian las normas o principios jurídicos en
que se funda y no se explica la pertinencia de su aplicación a los antecedentes de
hecho. Los actos administrativos, resoluciones o fallos que no se encuentren
debidamente motivados se consideraran nulos. Las servidoras o servidores
responsables serán sancionados.
m) Recurrir el fallo o resolución en todos los procedimientos en los que se decida
sobre sus derechos.800
800
Constitución de la República del Ecuador. Artículo 76, numeral 7. Disponible en:
http://www.asambleanacional.gov.ec/documentos/constitucion_de_bolsillo.pdf
Código Orgánico Integral Penal, 2014. Artículo 5, numeral 18. Disponible en: http://www.justicia.gob.ec/wp-
801
content/uploads/2014/05/c%C3%B3digo_org%C3%A1nico_integral_penal_-_coip_ed._sdn-mjdhc.pdf
295
8. No haber fundamentado debidamente sus actos administrativos, resoluciones o
sentencias, según corresponda, o en general en la substanciación y resolución de las
causas, haber violado los derechos y garantías constitucionales en la forma prevista
en los artículos 75, 76 y 77 de la Constitución de la República.802
802
Código Orgánico de la Función Judicial. Artículo 130, numeral 4 y Articulo 108, numeral 8.
803
JULIO MAIER. Derecho Procesal Penal. T.I. Editores del Puerto. Buenos Aires, 2da Edición, 3ra
Reimpresión, 2004.P.739.
804
LUIGI FERRAJOLI. Derecho y Razón. Editorial Trotta, Quinta Edición. Madrid. España. 2001.P.182.
296
con justicia si es imparcial, esto es, si no tiene inclinación favorable alguno respecto al
objetivo del proceso”805.
En fin, “para que exista imparcialidad del juzgador se requiere en primer lugar de una
acción formal que demuestre no ser parte del proceso y la segunda, la actitud, es decir,
dejar al margen las condiciones subjetivas que puedan incidir al momento de actuar”807
Para el jurista JOAN PICÓ existen dos modos para apreciar la imparcialidad judicial:
“una subjetiva, que se refiere a la convicción personal de un juez determinado,
respecto al caso concreto y a las partes; otra objetiva, que incide sobre las garantías
suficientes que debe reunir el juzgador en su actuación respecto al objeto mismo del
proceso”808.
Por su naturaleza la actividad judicial debe ser ejercida por un Juez o Tribunal
competente, independiente e imparcial, objetivo, es decir, que se tiene como
presupuesto la neutralidad judicial para la objetividad del proceso y que el Juez tenga
conciencia ética en su actuación jurisdiccional y conlleva ser honesto y prudente,
independiente e imparcial y garantiza la tutela judicial efectiva y el debido proceso
legal del caso, y que es resuelto sin ninguna clase de interés personal y vinculado a la
correcta labor judicial, amparado en la Constitución, Tratados Internacionales de
Derechos Humanos y leyes; solo en sentido formal si no también material, en la que se
demuestre la protección de los derechos humanos.
805
EDUARDO JAUCHEN. Derechos del Imputado. Rubinzal-Culzoni. Buenos Aires. 2007. P. 210.
806
HUMBERTO NOGUEIRA ALCALÁ. El Debido Proceso en la Constitución y el Sistema Interamericano.
Librotecnia, Santiago. 2007. P. 48.
807
ANGEL ARIAS DOMINGUEZ. La Abstención y Recusación de Jueces y Magistrados. Edesa. Madrid.
1999. P.30-31.
808
JOAN PICÓ I JUNIOY. Las Garantías Constitucionales del Proceso. J.M. Bosh. Barcelona. 1997. P. 134.
297
20.1 Convenciones y Tratados Internacionales de Derechos Humanos reconocen el
Principio de Imparcialidad Judicial
Artículo10.- Todo el mundo tiene derecho, en plena igualdad, a ser oída públicamente por
un tribunal independiente e imparcial, para la determinación de sus derechos y
obligaciones o para el examen de cualquier acusación penal formulada contra ella.809
Artículo. 14.-
1. Todas las personas son iguales ante los tribunales y cortes de justicia. Toda
persona tendrá derecho a ser oída públicamente y con las debidas garantías por
un tribunal competente, independiente e imparcial, establecido por la ley, en la
substanciación de cualquier acusación de carácter penal formulada contra ella o
para la determinación de sus derechos u obligaciones de carácter civil. La prensa
y el público podrán ser excluidos de la totalidad o parte de los juicios por
consideraciones de moral, orden público o seguridad nacional en una sociedad
democrática, o cuando lo exija el interés de la vida privada de las partes o, en la
medida estrictamente necesaria en opinión del tribunal, cuando por circunstancias
especiales del asunto la publicidad pudiera perjudicar a los intereses de la
justicia; pero toda sentencia en materia penal o contenciosa será pública, excepto
en los casos en que el interés de menores de edad exija lo contrario, o en las
acusaciones referentes a pleitos matrimoniales o a la tutela de menores.810
809
Declaración Universal de los Derechos Humanos. Adoptada y proclamada por la Resolución de la Asamblea
General 217 A (III) del 10 de diciembre de 1948, París. Disponible en:
http://www.un.org/es/documents/udhr/
810
Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos. Adoptado y abierto a la firma, ratificación y adhesión
por la Asamblea General
en su resolución 2200 A (XXI), de 16 de diciembre de 1966. Entrada en vigor: 23 de marzo de 1976, de
conformidad con el artículo 49. Disponible en:
http://www.ohchr.org/SP/ProfessionalInterest/Pages/CCPR.aspx
298
1.- Toda persona tiene derecho a ser oída, con las debidas garantías y dentro de un plazo
razonable, por un juez o tribunal competente, independiente e imparcial, establecido con
anterioridad por la ley, en la sustanciación de cualquier acusación penal formulada
contra ella, o para la determinación de sus derechos y obligaciones de orden civil,
laboral, fiscal o de cualquier otro carácter.811
Por su parte, el Convenio Europeo para la Protección de los Derechos Humanos de las
Libertades Fundamentales, celebrado en Roma, el 14 de Noviembre de 1950,
establece:
Artículo 6.
1.- Toda persona tiene derecho a que su causa sea oída equitativa, públicamente y
dentro de un plazo razonable por un Tribunal independiente e imparcial (…).812
En cambio, la imparcialidad exige que el juez que interviene en una contienda particular
se aproxime a los hechos de la causa careciendo, de manera subjetiva, de todo prejuicio y,
asimismo, ofreciendo garantías suficientes de índole objetiva que permitan desterrar toda
duda que el justiciable o la comunidad puedan albergar respecto de la ausencia de
imparcialidad. La Corte Europea de Derechos Humanos ha explicado que la
imparcialidad personal o subjetiva se presume a menos que exista prueba en contrario.
Por su parte, la denominada prueba objetiva consiste en determinar si el juez cuestionado
brindó elementos convincentes que permitan eliminar temores legítimos o fundadas
sospechas de parcialidad sobre su persona. Ello puesto que el juez debe aparecer como
actuando sinestar sujeto a influencia, aliciente, presión, amenaza o intromisión, directa o
indirecta, sino única y exclusivamente conforme a -y movido por- el Derecho.
Teniendo en cuenta lo anterior, la Corte concluye que no hay prueba que indique que el
Estado haya desconocido el derecho de las víctimas a ser juzgadas por un tribunal
imparcial, pero sí está demostrado que su legislación (supra párr. 59) y jurisprudencia
(supra párr. 61) les impidieron solicitar que la imparcialidad de su órgano juzgador sea
revisada. Dicho de otro modo, no está demostrado el incumplimiento del deber de respeto
del derecho, sino la falta de garantía del mismo.813
811
Convención Americana sobre Derechos Humanos. San José, Costa Rica 7 al 22 de noviembre de 1969.
Artículo 8. Disponible en: https://www.oas.org/dil/esp/tratados_B-
32_Convencion_Americana_sobre_Derechos_Humanos.htm
812
Convenio Europeo para la Protección de los Derechos Humanos de las Libertades Fundamentales, celebrado
en Roma el 14 de Noviembre de 1950. Artículo 6.
813
Corte Interamericana de Derechos Humano. Caso Apitz Barbera y otros vs. Venezuela. Excepción
Preliminar, Fondo, Reparaciones y Costas. Sentencia del 5 de agosto de 2008. Serie C No. 182.
299
20.3. Normas Nacionales que establecen el Principio de Imparcialidad Procesal
Artículo. 76. Garantías Básicas del Debido Proceso.-En todo proceso en el que se
determinen derechos y obligaciones de cualquier orden, se asegurará el derecho al
debido proceso que incluirá las siguientes garantías básicas:
k).- Ser juzgado por una jueza o juez independiente, imparcial y competente.
Nadie será juzgado por tribunales de excepción o por comisiones especiales
creadas para el efecto.815
814
Constitución de la República del Ecuador, 2008. Artículo 75. Disponible en:
http://www.asambleanacional.gov.ec/documentos/constitucion_de_bolsillo.pdf
815
Constitución de la República del Ecuador, 2008. Artículo 76, numeral 7, literal k. Disponible en:
http://www.asambleanacional.gov.ec/documentos/constitucion_de_bolsillo.pdf
816
Código Orgánico Integral Penal, 2014. Artículo 5, numeral 19. Disponible en: http://www.justicia.gob.ec/wp-
content/uploads/2014/05/c%C3%B3digo_org%C3%A1nico_integral_penal_-_coip_ed._sdn-mjdhc.pdf
300
Función Judicial será imparcial, respetando la igualdad ante la ley. En todos los
procesos a su cargo, las juezas y jueces deberán resolver siempre las pretensiones y
excepciones que hayan deducido los litigantes, sobre la única base de la Constitución,
los instrumentos internacionales de derechos humanos, los instrumentos
internacionales ratificados por el Estado, la ley y los elementos probatorios
aportados por las partes.
Con la finalidad de preservar el derecho a la defensa y a la réplica, no se permitirá la
realización de audiencias o reuniones privadas o fuera de las etapas procesales
correspondientes, entre la jueza o el juez y las partes o sus defensores, salvo que se
notifique a la otra parte de conformidad con lo dispuesto en el numeral 14 del
artículo 103 de esta ley.
301
“victimas indirectas” de las violaciones de los derechos humanos (integridad, personal,
protección judicial y el debido proceso y otros). Según la definición de las Naciones Unidas
se entenderá “por víctimas las personas que, individual o colectivamente, hayan sufrido
daños, inclusive lesiones físicas o mentales, sufrimiento emocional, perdida financiera o
mescabo sustancial de los derechos fundamentales, como consecuencia de acciones de
omisiones que violen la legislación penal vigente en los estados miembros”818
La Real Academia de la Lengua Española define a la víctima como: “Persona que padece
daño por culpa ajena (…)”819; al respecto, la referida definición vista de la teoría del delito,
establece que el concepto de víctima es la persona que padece daño por la culpa delictiva de
otro; y consecuentemente, víctima del delito “es quien ha sido dañado o afectado por la
comisión de un hecho calificado punible por la legislación penal”820.
818
XIMENA MEDELLIN URQUIAGA. Digesto de Jurisprudencia Latinoamericana sobre derechos de las
víctimas. Corte Constitucional. Venezuela. Sentencia 418 (26 de Julio del 2007). Editorial Tatiana Rincón-
Covelli.2014.P.
819
Real Academia de la Lengua Española. Disponible en: http://buscon.rae.es/drae/srv/search?val=v%EDctima
820
LAURA MARÍA PASQUERO. Derechos Humanos de las víctimas del delito. Cuarto Certamen de ensayos
sobre derechos humanos. Edición Primera. Comisión de Derechos Humanos del Estado de México. Toluca.
México. 2004. P. 196.
821
ALBIN ESER. Un cambio en las máximas del proceso penal: ¿Hacia “reprivatización del proceso penal”
(Villamarin, María Luisa, Trad.). Ob. Cit. P. 70.
822
CLAUS ROXIN. Derecho Procesal Penal. Ob. Cit. P. 102. Véase Oscar Julio Guerrero Peralta. Las Víctimas
en el contexto procesal penal colombiano. (Perfiles comparativos), Anuario de Derecho Penal: La Reforma
del proceso penal peruano. Derecho Penal. Asociación Peruana de Derecho Penal. 2004. P. 214.
302
satisfactorio, mediante la protección de los bienes de los ciudadanos” 823. En efecto, estas
opiniones de la doctrina del pensamiento penal moderno vinculan los intereses de las víctimas
y conllevan a los objetivos del proceso penal actual, que no excluye a la víctima de participar
activamente en decisiones que se tomen en todas las fases del proceso penal y en todas las
audiencias a fin de que sea la víctima escuchada directa y personalmente por la Fiscalía, Juez
de Garantía o Tribunal de Juzgamiento antes de tomarse una decisión sobre el caso.
DÍAZ DE LEÓN (Citado por José Colón Moran)824 y Martínez825, define a la víctima como la
persona que sufre los efectos del delito” 826. En tal sentido, la Declaración sobre los Principios
Fundamentales de Justicia para las Víctimas de Delitos y del Abuso de poder827.
Las víctimas de delitos.-“Se entenderá por “víctimas”, las personas que, individual o
colectivamente, hayan sufrido daños, inclusive lesiones físicas o mentales, sufrimiento
emocional, pérdida financiera o menoscabo sustancial de sus derechos fundamentales, como
consecuencia de acciones u omisiones que violen la legislación penal vigente en los Estados
Miembros, incluida la que proscribe el abuso de poder”.
823
SANTIAGO MIR PUIG. Derecho Penal. parte General. PPU. Barcelona. 1966. P. 200.
824
JOSÉ COLÓN MORAN. Los Derechos Humanos de las Víctimas del delito. Revista Derechos Humanos.
Órgano Informativo de la Comisión de Derechos Humanos del Estado de México. Biblioteca Jurídica Virtual
del Instituto de investigaciones jurídicas de la UNAM. 2010. Disponible en:
http://www.juridicas.unam.mx/publica/librev/rev/derhum/cont/19/pr/pr28.pdf
825
VERÓNICA MARTÍNEZ SOLARES. Víctimas y Justicia Penal. Biblioteca Jurídica Virtual del Instituto de
investigaciones jurídicas de la UNAM. 2010. Disponible en:
http://biblio.juridicas.unam.mx/libros/1/479/20.pdf
826
Tomado de: Diccionario de Derecho Procesal Penal. Segunda Edición. Porrúa. Tomo II. México. 1989. SV.
“Víctimas”. P. 589.
827
Declaración sobre los Principios Fundamentales de justicia para las víctimas de delitos y del abuso de poder.
Adoptada por la Asamblea General en su resolución 40/34, de 29 de noviembre de 1985. Art. 1.
828
Cfr. OSCAR RODRIGUEZ OLVERA. Reforma Penal: Los beneficios Procesales a favor de la víctima del
delito. Centro de estudios sociales y de opinión pública. www.reforma-Penal-d37.pdf. Véase también
ARSENIO ORE GUARDIA Y LIZA RAMOS DÁVILA. Aspectos comunes de la reforma procesal penal en
América Latina. 2008.P. 24 y 25.
303
ejercer el control con su participación en el proceso penal en todas sus etapas: a ser escuchada
la víctima u ofendido del delito en el proceso; g) presentar recursos de impugnación si lo
considera, señalado por el derecho procesal penal; h) solventar medidas cautelares para la
protección judicial y policial, restitución de sus derechos; i) obtener reparaciones o
indemnizaciones por los daños sufridos por las víctimas del delito; j) sistema de reubicación;
k) medidas cautelares contra el ofensor; l) sistema de protección en las audiencias. Es
importante señalar que la víctima comparte con el imputado tres garantías judiciales comunes:
1.- La igualdad ante los Tribunales; 2.- La defensa en juicio y acceso a la justicia; y, 3.- La
imparcialidad de los Jueces”829
“La victima siempre tiene derecho, a una respuesta del Estado, pero no siempre tiene el
derecho a que el Estado utilice sus instrumentos violentos”.830
829
JOSE I. CAFFERATA NORES. Proceso Penal y Derechos Humanos, Buenos Aires. Editores del Puerto.
2000. P.23 y ss. Disponible en: http://webcache.googleusercontent.com/search?
q=cache:LzKu7exLQS4J:incipp.org.pe/modulos/documentos/archivos/Reforma%252520procesal%252520en
%252520America%252520Latina.doc+&cd=1&hl=es&ct=lnk&gl=ec
830
ALBERTO BIDER. Legalidad y Oportunidad. Ob. Cit. P.217.
304
Las declaraciones de ellos constituyen una prueba fundamental para investigación judicial, en
razón de que estos hechos se generan en el entorno familiar y privado en la que los medios de
pruebas son escasos y no están disponibles para la administración de justicia penal.
Además, el citado documento en su página 18 señala que cuando: “las víctimas son niños el
grado de vulnerabilidad es aún mayor, y esta viene dada tanto en su propia condición como
por el hecho de que en muchas ocasiones es su propio entorno el que acoge la producción del
delito”
Asimismo, las reglas de Brasilia sobre Acceso a la Justicia de las personas en condición de
vulnerabilidad, señala que la edad es uno de los criterios para considerar a una persona en
situación de vulnerabilidad, de acuerdo con el artículo 5, que dice: Todo niño, niña y
adolescente debe ser objeto de una especial tutela por parte de los órganos del sistema de
justicia en consideración a su desarrollo evolutivo832. Por ello, el acceso a la justicia es el
“requisito básico -el derecho humano fundamental- en un sistema legal igualitario moderno,
principalmente en el ámbito procesal penal 833, de manera especial en el sistema de justicia
penal en la que “la victimización es una causa de vulnerabilidad” conforme lo señala Las
Reglas de Brasilia sobre el concepto de personas en condiciones de vulnerabilidad: “Se
consideran en condición de vulnerabilidad aquellas personas que, por razón de su edad,
género, estado físico o mental, o por circunstancias sociales, económicas, étnicas y/o
831
Las Guías de Santiago sobre Protección de víctimas y testigos, documento, aprobado en la XVI Asamblea
General ordinaria de la Asociación Iberoamericana de Ministerio Público (AIAMP) República Dominicana 9
y 10 de julio del 2008. Punta Cana. P. 6 y 18.
832
100 Reglas de Brasilia sobre el Acceso a la Justicia de las personas en condición de vulnerabilidad, aprobado
en la XIV Cumbre Judicial Iberoamericana, 2008.
833
MAURO CAPPELLETTI y BRYANT GARTH.El acceso a la Justicia. La tendencia en el movimiento
mundial para hacer efectivos los derechos. México. Fondo de cultura económico. 1996. P. 12-13.
305
culturales, encuentran especiales dificultades para ejercitar con plenitud ante el sistema de
justicia los derechos reconocidos por el ordenamiento jurídico”834.
Principios generales.
834
100 Reglas de Brasilia sobre el Acceso a la Justicia de las personas en condición de vulnerabilidad, aprobado
en la XIV Cumbre Judicial Iberoamericana, 2008. Ob. Cit. P. 5-6.
306
3.- Asegurar la eficiencia del proceso y la obtención de pruebas válidas.
a) Monitoreo y supervisión.
b) Evaluación interna.
c) Recuperación física y psicológica de las niñas, niños y adolescentes835.
Artículo 4.- Los Estados Partes adoptarán todas las medidas administrativas,
legislativas y de otra índole para dar efectividad a los derechos reconocidos en la
presente Convención […]
Artículo 19.
1.- Los Estados Partes adoptarán todas las medidas legislativas, administrativas,
sociales y educativas apropiadas para proteger al niño contra toda forma de perjuicio
o abuso físico o mental, descuido o trato negligente, malos tratos o explotación,
incluido el abuso sexual, mientras el niño se encuentre bajo la custodia de los padres,
de un representante legal o de cualquier otra persona que lo tenga a su cargo.
835
Ver: Guía de Buenas Prácticas para el abordaje abuso sexual y otros delitos. Disponible en:
http://files.unicef.org/argentina/spanish/proteccion_Guia_buenas_practicas_web.pdf
836
Declaración Universal De Derechos Humanos. Adoptada y proclamada por la Resolución de la Asamblea
General 217 A (iii) del 10 de diciembre de 1948. Artículo 25. Disponible en:
http://www.un.org/es/documents/udhr/
307
Artículo 34.
Los Estados Partes se comprometen a proteger al niño contra todas las formas de
explotación y abuso sexuales […].
Artículo 39.
Los Estados partes adoptarán todas las medidas apropiadas para promover la
recuperación física y psicológica y la reintegración social de todo niño víctima de:
cualquier forma de abandono, explotación o abuso; tortura u otra forma de tratos o
penas crueles, inhumanos o degradantes […]837
c) Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, 1966
Artículo 24.
1.- Todo niño tiene derecho, sin discriminación alguna […], a las medidas de
protección que su condición de menor requiere, tanto por parte de su familia como de
la sociedad y del Estado838
Artículo 10.
837
Convención sobre los Derechos del Niño, 1989. Artículo 4. Artículo 19, numeral 1. Artículo 34 y 39.
Disponible en: http://www.ohchr.org/SP/ProfessionalInterest/Pages/CRC.aspx
838
Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos. Adoptado y abierto a la firma, ratificación y adhesión
por la Asamblea General en su resolución 2200 A (XXI), de 16 de diciembre de 1966. Artículo 24, numeral
1. Disponible en: http://www.ohchr.org/SP/ProfessionalInterest/Pages/CCPR.aspx
839
Pacto internacional de Derechos Económicos, sociales y culturales, 1966. Articulo10, numeral 3. Disponible
en: http://www.ohchr.org/SP/ProfessionalInterest/Pages/CCPR.aspx
840
Declaración Americana de los Derechos y Deberes del Hombre. Aprobada en la Novena Conferencia
Internacional Americana. Bogotá, Colombia, 1948. Artículo VII. Disponible en:
http://www.un.org/es/documents/udhr/
308
f) Convención Americana sobre Derechos Humanos, 1969
1.- Toda persona tiene derecho a ser oída, con las debidas garantías y dentro de un
plazo razonable, por un juez o tribunal competente, independiente e imparcial,
establecido con anterioridad por la ley, en la sustanciación de cualquier acusación
penal formulada contra ella, o para la determinación de sus derechos y obligaciones
de orden civil, laboral, fiscal o de cualquier otro carácter841
21.4. Normas Nacionales sobre los Derechos de las Niñas, Niños y Adolescentes
La Constitución prioriza el respeto a los derechos de niñas, niños y adolescentes mediante las
políticas públicas de comunicación priorizando su educación y el respeto a sus derechos de
imagen, integridad y los demás específicos de su edad. Además, se establecerán limitaciones
y sanciones para hacer efectivos sus derechos en mención.
841
Convención Americana sobre Derechos Humanos San José, Costa Rica 7 al 22 de noviembre de 1969 (Pacto
de San José). Artículo 8, numeral 1. Disponible en: https://www.oas.org/dil/esp/tratados_B-
32_Convencion_Americana_sobre_Derechos_Humanos.htm
309
derechos de imagen, integridad y los demás específicos de su edad. Se establecerán
limitaciones y sanciones para hacer efectivos estos derechos842
Artículo. 11. El interés superior del niño.- El interés superior del niño es un
principio que está orientado a satisfacer el ejercicio efectivo del conjunto de los
derechos de los niños, niñas y adolescentes; e impone a todas las autoridades
administrativas y judiciales y a las instituciones públicas y privadas, el deber de
ajustar sus decisiones y acciones para su cumplimiento. Para apreciar el interés
superior se considerará la necesidad de mantener un justo equilibrio entre los
derechos y deberes de niños, niñas y adolescentes, en la forma que mejor convenga a
la realización de sus derechos y garantías. Este principio prevalece sobre el principio
de diversidad étnica y cultural. El interés superior del niño es un principio de
interpretación de la presente Ley. Nadie podrá invocarlo contra norma expresa y sin
escuchar previamente la opinión del niño, niña o adolescente involucrado, que esté en
condiciones de expresarla.844
844
Código de la Niñez y Adolescencia en el Ecuador. Artículos 11. Disponible en:
http://www.consultorasdelecuador.com/index.php?option=com_wrapper&view=wrapper&Itemid=56
310
alimentos, alimentación, atención médica educación o cuidados diarios; y su
utilización en la mendicidad. Maltrato psicológico es el que ocasiona perturbación
emocional, alteración psicológica o disminución de la autoestima en el niño, niña o
adolescente agredido. Se incluyen en esta modalidad las amenazas de causar un daño
en su persona o bienes o en los de sus progenitores, otros parientes o personas
encargadas de su cuidado. El maltrato es institucional cuando lo comete un servidor
de una institución pública o privada, como resultado de la aplicación de reglamentos,
prácticas administrativas o pedagógicas aceptadas expresa o tácitamente por la
institución; y cuando sus autoridades lo han conocido y no han adoptado las medidas
para prevenirlo, hacerlo cesar, remediarlo y sancionarlo de manera inmediata. La
responsabilidad por maltrato institucional recae en el autor del maltrato y en el
representante legal, autoridad o responsable de la institución o establecimiento al que
pertenece. En el caso de los representantes legales, autoridades o responsables de la
institución o establecimiento, la responsabilidad se hará efectiva de conformidad con
las disposiciones previstas en la Constitución Política de la República, en el Código
Civil y demás leyes aplicables.845
Artículo. 68. Concepto de abuso sexual.- Sin perjuicio de lo que dispone el Código
Penal sobre la materia, para los efectos del presente Código constituye abuso sexual
todo contacto físico, sugerencia de naturaleza sexual, a los que se somete un niño,
niña o adolescente, aun con su aparente consentimiento, mediante seducción,
chantaje, intimidación, engaños, amenazas, o cualquier otro medio. Cualquier forma
de acoso o abuso sexual será puesto en conocimiento del Agente Fiscal competente
para los efectos de la ley, sin perjuicio de las investigaciones y sanciones de orden
administrativo que correspondan.846
845
Código de la Niñez y Adolescencia en el Ecuador. Artículo. 67. Disponible en:
http://www.consultorasdelecuador.com/index.php?option=com_wrapper&view=wrapper&Itemid=56
846
Código de la Niñez y Adolescencia en el Ecuador. Artículo 68 Disponible en:
http://www.consultorasdelecuador.com/index.php?option=com_wrapper&view=wrapper&Itemid=56
311
sustitución de persona, el consentimiento fraudulento o forzado y la entrega o
recepción de pagos o beneficios indebidos dirigidos a lograr el consentimiento de los
progenitores, de las personas o de la institución a cuyo cargo se halla el niño, niña o
adolescente.847
312
integral del sistema judicial penal, tiene amplia visión crítica, es creativo e innovador,
actualizado y consciente del desarrollo social de su sociedad; no ejerce función judicial; es
parte y no juez en el proceso, es un fiscal ideal y nuevo perfil de buen gestor y mejor líder en
su efectividad y emplea estrategias inteligentes, persuade e influye en los demás para lograr
sus objetivos de la organización; aplica la objetividad en la investigación, “pues la
investigación de los delitos ha pasado de ser burocrática, ritualista y excesivamente
formalista, a ser un proceso dinámico, en buena medida basado en aportaciones científicos
logrados por medio del trabajo de grupos interdisciplinarios, a cargo de la tarea de
coordinación policial y sirviendo de puente entre la policía y los jueces de control849
La reforma procesal penal en América Latina ha sido un proceso generalizado, con el objetivo
de cambiar los modelos tradicionales inquisitivos escritos por otros acusatorios y orales; pero,
antes de las reformas, las funciones de la Fiscalía o Ministerio Público cumplieron funciones
relacionadas con el control de la legalidad del proceso judicial y no vinculados con la
investigación activa; particular que con base en las normas legales era realizada por el Juez de
instrucción.
849
MAURICIO DUCE y CRISTIAN RIEGO. Proceso Penal. Santiago, Editorial Jurídica de las América. 2009.
P. 534 y ss. Citado por Miguel Carbonell. El Ministerio Público en la Reforma Constitucional del 2008.
Disponible en: http://biblio.juridicas.unam.mx/libros/7/3064/6.pdf
313
existencia de una policía eficiente, profesionalizada, a su vez libre de la injerencias del
ejecutivo o de otros poderes, situada bajo su dependencia”850.
Por ello, “los integrantes del Ministerio Público o de la Fiscalía deben ser objetivos en su
actuación persecutoria debiendo procurar la verdad sobre la acusación que prepara o sostiene,
y ajustarse a las pruebas sobre ella, en sus requerimientos o conclusiones (resulten contrarias
o favorables al imputado). No pueden ocultar, por cierto, los elementos favorables a la
defensa”852
En definitiva, el Ministerio Público o Fiscalía General del Estado deberá ser un organismo
constitucional autónomo e independiente del Poder Ejecutivo y que sus competencias y
funciones se ampararán en la Constitución y leyes vigentes del Estado, para perseguir el delito
y defender a la sociedad, y así lo han aplicado con el nuevo diseño del proceso penal en los
países latinoamericanos que han implementado las reformas al proceso penal que le han dado
autonomía e independencia a los Ministerios Públicos o Fiscalías del Estado como se
determina en el cuadro siguiente :
850
LUIGI FERRAJOLI. Derecho y Razón. Ob. Cit. P. 570.
851
PERFECTO ANDRÉS IBAÑEZ. Por un Ministerio Público dentro de la Legalidad. Madrid. 1998. P. 439.
852
JOSE CAFFERRATA NORES. Cuestiones Actuales del Proceso Penal. 3ra edición. Ediciones del Puerto,
srl. Buenos Aires. 2007. S/N de página.
314
de la República el Presidente con acuerdo de 2/3
del Senado.
Bolivia Fiscal General del Articulo 225 a 228 Autonomía técnica; nombrado por
Estado 2/3 de la Asamblea Legislativa
Plurinacional
Brasil Procurador General Artículos 127 a 130 Autonomía técnica; nombrado por
de la Republica el Presidente con la aprobación de
la mayoría absoluta del Senado
Chile Fiscal Nacional Articulo 80 Autonomía técnica: nombrado por
el Presidente a propuesta de la
Corte Suprema y con acuerdo de
2/3 del Senado
Colombia Fiscal General de la Artículos 249 a 253 Autonomía técnica; nombrado por
Nación la Corte Suprema a propuesta en
terna del Presidente.
Costa Rica Fiscal General de la Artículos 1,13 y 23 (Ley Autonomía técnica; nombrado por
Republica Orgánica del Ministerio la mayoría absoluta de la Corte
Público) Suprema de Justicia.
Ecuador Fiscal General del Artículos 194 a 197 Autonomía técnica; nombrado por
Estado la Asamblea Nacional y el Consejo
de Participación Ciudadana y
Control Social
El Salvador Fiscal General de la Artículos 131-19 y 191 a Autonomía técnica; elegido por la
República 194 Asamblea Legislativa
Guatemala Fiscal General Artículo 251 Autonomía técnica; nombrado por
el Presidente de una nómina de seis
candidatos elegidos por la
Comisión de Postulación.
Honduras Procurador General Artículos 228 a 231 Autonomía técnica; nombrado por
de la República el Congreso Nacional
México Procurador General Artículos 76-II, 89-IX y Nombrado por el Presidente, con la
de la República 102-A ratificación del Senado
Gráfico Nº 1
315
pertinentes
Panamá Procurador General Artículos 161-4, 200-2 y Autonomía técnica; nombrado por el
de la República 219 a 224 Presidente con acuerdo del Consejo de
Gabinete y aprobación de la Asamblea
Legislativa.
Paraguay Fiscal General del Artículos 266 a 272 Autonomía técnica; nombrado por el
Estado Presidente con acuerdo del Consejo de
Gabinete y aprobación de la Asamblea
Legislativa.
Perú Fiscal de la Nación Artículos 158 a 160 Autonomía técnica; elegido por la Junta
de Fiscales Supremos.
Uruguay Ministerio Público y Establecido legalmente Autonomía técnica; nombrado por el
Fiscal Presidente, con acuerdo de 3/5 del
Senado.
Venezuela Fiscal General de la Artículos 273,279 y 284 Independencia y autonomía; nombrado
República a 286 por 2/3 de la Asamblea Nacional de
terna del Comité de Evaluación del
Poder Ciudadano.
FUENTE: Ver Miguel Carbonell. El Ministerio Público en la Reforma Constitucional del 2008, citando a
Zovatto, Daniel y Orozco Henríquez, J. Jesús, en Zovatto, Daniel y Orozco Henríquez, J. Jesús
(coords). Reforma política y electoral América Latina 1978-2007, México, UNAM, Instituto de
Investigaciones Jurídicas-IDEA Internacional,2008, pp. 83-85. Agradezco la colaboración y ayuda de
José Carbonell para la integración de los datos que aparecen en el presente apartado.
DISEÑO: Propio del Autor.
El Fiscal para cumplir con su función está sujeto a la Constitución, a los Instrumentos
Internacionales de Derechos Humanos y a la Ley. Actúa en el sistema acusatorio oral con
base en la pirámide funcional en contraposición a la otra parte (defensa). Por ello, su
presencia en el proceso penal se lo identifica de acuerdo a dos parámetros: es un órgano del
Estado de persecución y acusación; y parte activa de la estructura procesal dentro del proceso
penal, en la que el Fiscal, por disposición constitucional, tiene la obligación de dirigir la
316
investigación preprocesal y procesal penal853; por tanto, organizará y empleará los estrategias
necesarias para el logro de sus objetivos del Estado y la sociedad, pero respetando los
derechos y garantías fundamentales del debido proceso, para descubrir la verdad objetiva de
los hechos denunciados.
Desde esta perspectiva, del principio de objetividad, el Fiscal tiene que mantener y propender
siempre la objetividad en su actuación, es decir, no solo obtendrá los elementos de cargo
contra un procesado o imputado, sino también los elementos de eventual descargo que
pudieron existir del procesado, como consecuencia de los actos de investigación que realiza
con la finalidad de determinar su culpabilidad o inocencia del hecho delictivo que investiga.
En el sistema penal acusatorio y oral, “el Fiscal es un funcionario investigador que se limita a
acopiar las pruebas pertinentes, conducentes y efectivas con los cuales hará la acusación ante
el juez”.854
Por lo tanto, “la objetividad representa ante todo imparcialidad y actuación sin perjuicios en
todos los asuntos que corresponden al campo de acción del Fiscal”.855
853
Constitución de la República del Ecuador, Artículo 189.-Las juezas y jueces de paz resolverán en equidad y
tendrán competencia exclusiva y obligatoria para conocer aquellos conflictos individuales, comunitarios,
vecinales y contravenciones, que sean sometidos a su jurisdicción, de conformidad con la ley. En ningún
caso podrá disponer la privación de la libertad ni prevalecerá sobre la justicia indígena.
Las juezas y jueces de paz utilizaran mecanismos de conciliación, dialogo, acuerdo amistoso y otros
practicados por la comunidad para adoptar sus resoluciones, que garantizarán y respetarán los derechos
reconocidos por la Constitución. No será necesario el patrocinio de abogada o abogado.
Las juezas y jueces de paz deberán tener su domicilio permanente en el lugar donde ejerzan su competencia
y contar con el respeto, consideración y apoyo de la comunidad. Serán elegidos por su comunidad, mediante
un proceso cuya responsabilidad corresponde al Consejo de la Judicatura y permanecerán en funciones
hasta que la propia comunidad decida su remoción, de acuerdo con la ley. Para ser jueza o juez de paz no se
requerirá ser profesional en Derecho.
854
VÍCTOR ORIELSAN LEÓN PARADA. El Abc del nuevo Sistema Acusatorio Penal. El Juicio Oral.
Ediciones ECOE, Argentina, 2005. P. 15.
855
JESÚS MARÍA PEÑA BERMÚDEZ. Contraloría y Ética profesional. Ediciones ECOE. Bogotá-Colombia,
2000. P. 124.
317
Al respecto, CLAUS ROXIN, señala: Debe investigar también las circunstancias que sirvan
de descargo (…) “La fiscalía tiene que averiguar los hechos; para ello tiene que reunir con el
mismo empeño, tanto los elementos de cargo como de descargo”856. En igual sentido, el autor
RODRIGO CERDA SAN MARTIN, sostiene: “En el ámbito penal el Ministerio Público
asume la conducción de la investigación desde su inicio y está obligado a hacerlo con
objetividad, esto es, indagando los hechos constituidos de delito, los que determinen y
acrediten la responsabilidad o inocencia del imputado”.857
Finalmente, “los integrantes del Ministerio Público Fiscal deben ser objetivos en su actuación
persecutoria debiendo procurar la verdad sobre la acusación que prepara o sostiene, y
ajustarse a las pruebas sobre ella en su requerimientos o conclusiones (resulten contrarias o
favorables al imputado). No pueden ocultar por cierto los elementos favorables a la
defensa”.858
856
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funden o agraven la responsabilidad de la persona procesada, sino también
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7. Expedir en coordinación con la Policía Nacional los manuales de
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347
ÍNDICE GENERAL
Introducción...........................................................................................................................................7
CAPÍTULO I
LA TRANSFORMACIÓN DE LA JUSTICIA PENAL
EN AMERICA LATINA
CAPÍTULO II
CONSTITUCIÓN Y PROCESO PENAL
348
3.4. Jurisprudencia del Tribunal Constitucional Español.................................................................57
4. Derecho a la Tutela Judicial Efectiva.......................................................................................57
4.1. Concepto de Tutela Judicial Efectiva........................................................................................57
4.2. Función de la Tutela Judicial Efectiva......................................................................................60
4.2.1 El Derecho al proceso o el derecho de libre acceso a la Jurisdicción........................................61
4.2.2. Derecho a una Sentencia Motivada...........................................................................................63
4.2.3. Derecho de acceso a los recursos legalmente establecidos.......................................................63
4.2.4. Derecho a la ejecución de las sentencias o resoluciones judiciales firmes................................64
4.3. Instrumentos internacionales que garantizan el derecho a la Tutela Judicial Efectiva..............64
4.4. Normas nacionales que regulan la Tutela Judicial Efectiva.....................................................66
4.5. Jurisprudencia de la Corte Constitucional del Ecuador.............................................................67
4.6. Jurisprudencia de la Corte Constitucional de Colombia...........................................................67
5. El Principio de Minima Intervencion del Derecho Penal: o Última Ratio................................68
5.1 El Principio Penal de Mínima Intervención..............................................................................68
5.1.1. Antecedentes históricos del Principio de Mínima Intervención................................................68
5.1.2. El Principio de Mínima Intervención en la actualidad..............................................................69
5.2 La Subsidiaridad del Derecho Penal.........................................................................................70
5.3 El carácter Fragmentario del Derecho Penal.............................................................................71
5.4. Normas Nacionales del Principio de Mínima Intervención en el Derecho Penal.....................72
5.5. Jurisprudencia de la Corte Constitucional de Colombia..........................................................73
CAPÍTULO III
LOS DERECHOS HUMANOS Y JUSTICIA PENAL
349
4. Constitucionalización de las Normas del Derecho Internacional
de los Derechos Humanos en los Ordenamientos Jurídicos Nacionales.....................................97
4.1 Implementación de los Derechos Humanos en el Derecho Interno..............................................97
4.2. Jurisprudencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH)........................100
4.3. Jurisprudencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH)........................100
5. La Nueva Justicia Penal Fundamentada en los Tratados y Convenciones Internacionales........100
5.1. Conceptualización.....................................................................................................................100
5.2. Jurisprudencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH)......................111
6.- La Nueva Justicia Penal protege Derechos Humanos Constitucionalizados..............................112
6.1 Normativas Constitucionales de Derechos Humanos.................................................................113
6.2. Jurisprudencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos............................................116
7. La Dignidad de la Persona como un Derecho Humano.............................................................117
7.1 Conceptualización.....................................................................................................................117
7.1 El Derecho Internacional de los Derechos Humanos reconoce y garantiza
la dignidad humana de las personas..........................................................................................120
7.2 La Dignidad Humana plasmada en la Declaración Universal
y Declaración Americana de los Derechos Humanos...............................................................122
7.3. Jurisprudencia del Tribunal Constitucional Chileno..................................................................123
7.4. Jurisprudencia del Tribunal Federal Constitucional de Alemania............................................123
7.5. Jurisprudencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH).......................124
CAPÍTULO IV
LAS GARANTÍAS CONSTITUCIONALES
DEL PROCESO PENAL
350
4.5. Jurisprudencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH).......................145
CAPÍTULO V
DERECHO FUNDAMENTAL DEL DEBIDO PROCESO
CAPÍTULO VI
PRINCIPIOS FUNDAMENTALES DEL PROCESO PENAL
351
3.2 Jurisprudencia de la Corte Constitucional de Colombia.........................................................187
4. Principio Constitucional de Presunción de Inocencia en el Proceso Penal...............................187
4.1. Origen histórico del principio de presunción de inocencia......................................................187
4.2. Conceptualización del principio de Presunción de Inocencia..................................................189
4.3. Naturaleza del Principio de Presunción de Inocencia..............................................................191
4.4. La Presunción de Inocencia como un derecho fundamental amparado en el Derecho
Internacional de Derechos Humanos........................................................................................194
4.5. Normas Nacionales que establecen el Principio de Presunción de Inocencia..........................196
4.6. Jurisprudencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos..........................................197
5. El Principio de Garantia Constitucional de la Igualdad de Armas y No Discriminacion en el
Proceso Penal...........................................................................................................................197
5.1. Noción del Principio de Igualdad............................................................................................197
5.2 El Principio de Igualdad y No Discriminación en el Proceso Penal.........................................200
5.3. Igualdad de armas en el Derecho Internacional de los Derechos Humanos.............................202
5.4 Derecho Constitucional Comparado........................................................................................205
5.5. Normas Nacionales sobre el Principio de Igualdad Procesal...................................................206
5.6 Jurisprudencia de la Corte Interamericana de los Derechos Humanos....................................208
6. El Principio Constitucional de Impugnación Procesal en el Proceso Penal..............................208
6.1 Definición de los medios impugnatorios..................................................................................208
6.2. Los Recursos Impugnatorios en el Proceso Penal....................................................................210
6.3. Principios que se fundamentan los medios impugnatorios.......................................................211
6.3.1. Clasificación de los Recursos..................................................................................................212
6.4 Elementos de los Recursos Impugnatorios..............................................................................213
6.5. Los Medios Impugnatorios en el Derecho Internacional de los Derechos Humanos...............214
6.6. Los Medios Impugnatorios como exigencia constitucional.....................................................215
6.6.1 Sentencia del Tribunal Constitucional Español........................................................................217
6.6.2 Jurisprudencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos..........................................217
7. Garantia Constitucional y Legal de la Prohibición de la Reformatio In Peius:
No Empeorar la Situación del Procesado.................................................................................218
7.1 Conceptualización....................................................................................................................218
7.2 Normas Nacionales de la Prohibición de la Reformatio In Peius..............................................220
8. El Principio Constitucional de la No Autoincriminación, como Garantía
del Procesado en el Proceso Penal............................................................................................221
8.1 Consideraciones Conceptuales.................................................................................................221
8.2. El derecho a guardar silencio....................................................................................................223
8.3. La Garantía de no incriminación en los Tratados y Convenios Internacionales
de los Derechos Humanos........................................................................................................225
8.4. Normas Nacionales sobre el principio de prohibición de autoincriminación............................226
8.5. Jurisprudencia de la Corte Constitucional de Colombia..........................................................227
9. El Principio e Garantía Constitucional contra el Doble Juzgamiento:
El Principio Non Bis In Idem en el Proceso Penal....................................................................228
352
9.1 Conceptualización...................................................................................................................228
9.2. El Doble Juzgamiento en el Derecho Internacional de los Derechos Humanos.......................231
9.3 Normas Nacionales sobre el Principio de Prohibición de Doble Juzgamiento.........................233
9.4. Jurisprudencia del Tribunal Constitucional Español................................................................234
10. El Principio Constitucional del Derecho a la Intimidad en el Proceso Penal...........................234
10.1 Consideraciones del Derecho a la Intimidad............................................................................235
10.2. El Derecho a la Intimidad en el Derecho Internacional de los Derechos Humanos.................237
10.3. Normas Nacionales sobre el Principio de Intimidad en el Proceso Penal................................239
10.4 Jurisprudencia de la Corte Constitucional de Colombia sobre decisiones del Derecho de
Intimidad..................................................................................................................................243
11. El Principio Constitucional de la Oralidad Procesal como Garantía del Proceso PenaL..........244
11.1 Principio de Oralidad en el Proceso Penal...............................................................................244
11.2. La Oralidad en el Derecho Internacional de los Derechos Humanos......................................247
11.3 Normas Nacionales sobre el Principio de Oralidad Procesal...................................................250
11.4. Jurisprudencia del Comité de Derechos Humanos de las Naciones Unidas.............................251
12. Principio Constitucional de Concentración en el Proceso Penal..............................................252
12.1 Principio Dispositivo...............................................................................................................254
12.2 Normas Internacionales sobre el Principio de Concentración Procesal....................................254
12.3. Normas Nacionales sobre el Principio de Concentración Procesal..........................................255
13. El Principio Constitucional de Contradicción en el Proceso Penal.........................................257
13.1. Conceptualización...................................................................................................................257
13.2 El Principio de Contradicción en los Tratados Internaciones de Derechos Humanos..............259
13.3. Normas Nacionales sobre el Principio de Contradicción.........................................................261
13.4 Jurisprudencia de la Corte Constitucional de Colombia..........................................................261
14. Rol del Juez como Director del Proceso Penal........................................................................262
14.1. El Principio de Dirección Judicial del Proceso Penal..............................................................262
14.2. Nuevo Paradigma: Juez Administrador del Proceso Judicial...................................................263
14.3 Juez o Tribunal autorizado interrumpir a las partes en búsqueda de la verdad.........................264
14.4. La Dirección del Proceso Penal en los Tratados Internacionales de Derechos Humanos.........264
14.5. Normas Nacionales que establecen El Rol del Juez Director del Proceso Penal......................265
15. Principio Constitucional y Legal del Impulso Procesal de la Partes en el Proceso Penal.........267
15.1 Conceptualización...................................................................................................................267
15.2 Derecho Internacional de los Derechos Humanos sobre el Impulso Procesal...........................269
15.3 Normas Nacionales que establecen el Principio de Impulso Procesal del Proceso Penal..........270
15.4. Jurisprudencia de la Corte Constitucional de Colombia...........................................................272
16. La Publicidad del Proceso Penal como Garantía Constitucional y Legal................................272
16.1 El Principio de Publicidad en el Proceso Penal.........................................................................272
16.2. La Publicidad en el Derecho Internacional de Derechos Humanos y Constitucional................274
16.3. Comité de Derechos Humanos de la Naciones Unidas.............................................................275
16.4. Normas Nacionales que establecen el Principio de publicidad procesal...................................276
353
16.5 Jurisprudencia de la Corte Constitucional de Colombia..........................................................277
16.6 Jurisprudencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos.........................................277
17. El Principio Constitucional y Legal de Inmediación Procesal en el Proceso Penal................278
17.1 El Principio de Inmediación en el Proceso Penal.....................................................................278
17.2. Normas Nacionales sobre el Principio de Inmediación Procesal.............................................280
17.3. Jurisprudencia de la Corte Constitucional de Colombia..........................................................282
18. El Principio Constitucional y Legal de Celeridad Procesal: El Derecho del Plazo
Razonable en el Proceso Penal................................................................................................282
18.1 El Principio de Celeridad en el Derecho Internacional de Derechos Humanos
sobre el derecho a ser juzgado en un tiempo razonable sin Dilaciones.....................................284
18.2 El Principio de Celeridad en Derecho Nacional de Derechos Humanos
sobre el derecho a ser juzgado en un tiempo razonable sin dilaciones.....................................286
18.3. Jurisprudencia del Tribunal Constitucional de Bolivia...........................................................287
19. Principio de Motivación Constitucional y Legal de las decisiones Judiciales y Sentencias.....287
19.1 Conceptualización de decisiones judiciales o sentencias motivadas........................................287
19.2. Requisitos Fundamentales de la Motivación de las Decisiones Judiciales o Sentencias..........290
19.3 La motivación debe ser expresa, clara, completa, legítima y lógica, de lo contrario
sería una resolución arbitraria o ilógica....................................................................................293
19.4. La Motivación en el Derecho Internacional de los Derechos Humanos...................................295
19.5. La Motivación de la Sentencia en el Derecho Nacional...........................................................297
20. El Principio Constitucional y Legal para ejercer el Derecho a un Juez o Tribunal Imparcial. .299
20.1 Convenciones y Tratados Internacionales de Derechos Humanos reconocen
el Principio de Imparcialidad Judicial......................................................................................301
20.2. Jurisprudencia de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos....................................302
20.3. Normas Nacionales que establecen el Principio de Imparcialidad Procesal.............................303
21. Garantía Constitucional y Legal de los Derechos de las Víctimas de Delitos Sexuales:
Privacidad y Confidencialidad de los Grupos Vulnerables.......................................................304
21.1 Garantías Procesales de la Víctima de un Delito.....................................................................305
21.2 Niñas, niños y Adolescentes Víctimas de Delitos....................................................................307
21.3 El Derecho Internacional de los Derechos Humanos de las Niñas, Niños y Adolescentes.......309
21.4. Normas Nacionales sobre los Derechos de las Niñas, Niños y Adolescentes..........................312
21.5. Jurisprudencia de la Corte Constitucional de Colombia.........................................................315
22. El Principio Constitucional y Legal de Objetividad en la Investigación Fiscal.........................316
22.1. El Nuevo Rol de la Fiscalía General del Estado o Ministerio Público......................................316
22.2 El Fiscal y su objetividad como investigador............................................................................321
22.3. Normas Nacionales del Fiscal y su objetividad como investigador..........................................323
22.3 Jurisprudencia de la Corte Constitucional de Colombia..........................................................325
Bibliografía........................................................................................................................................326
Legislación Nacional.........................................................................................................................345
Cartas Magnas....................................................................................................................................345
354
Tratados y Convenios Internacionales de Derechos Humanos..........................................................345
Jurisprudencia de las Cortes y Tribunales Constitucionales...............................................................347
Jurisprudencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos…………………………………..348
355