es aquel obtenido mediante la experiencia directa o
la percepción del mundo real, sin atravesar abstracciones o imaginaciones. Es el conocimiento que nos dice cómo es el mundo, qué cosas existen y cuáles son sus características.
Existen dos tipos de conocimiento empírico que son:
Particular. Aquel que se refiere a casos específicos de la realidad, sin poder
garantizar que lo aprendido se aplique a todos los casos en general.
Contingente. Aquel que atribuye características a un objeto que, sin embargo, es
posible que carezca de ellas a futuro.
Características del conocimiento empírico:
Los distintos autores que definen este tipo de conocimiento concuerdan en que su característica fundamental es su vínculo directo con la cotidianidad, con la experiencia del mundo y con la vida misma. En ese sentido, el conocimiento empírico no proviene de un proceso formativo o educativo, ni de la acción de una reflexión consciente y analítica, sino que se trata de la experiencia procesada y convertida directamente en saber. La observación, la repetición, el ensayo y error son las formas usuales de adquirirlo.