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CABA, 22 de febrero de 2021

Propuesta Nivel Medio para el inicio de clases presenciales

Sra. Rectora ENS N°11

Prof. Cristina Carpintero

Atendiendo a la necesidad del regreso a la escuela de la comunidad educativa, le elevo la


siguiente propuesta para ser sometida a su consideración, de acuerdo con la convivencia de los
distintos niveles, las características y condiciones edilicias, y su atinado criterio.

Diagnóstico de la situación actual

El espacio físico:
Una vez finalizada la obra del primer piso y realizadas las rigurosas tareas de limpieza y
desinfección, quedarían disponibles las cinco aulas de Secundaria del Futuro, que cuentan con la
ventilación indispensable y con una dimensión que permitiría la asistencia de entre 12 y 15
alumnos. Asimismo se tiene en cuenta que para el turno mañana se cuenta con cinco aulas en
planta baja y con tres aulas en el segundo piso en caso de que pueda mejorarse su ventilación. En
el turno tarde, nuestro nivel no contaría con las aulas de planta baja dado que están afectadas al
nivel primario. Esto significa que en el turno mañana podríamos contar con un total de 9 a 11 aulas
para 11 divisiones y en el turno tarde con 8 aulas para 10 divisiones.

La matrícula:
En primer año, la matrícula supera los 30 alumnos por división, en segundo año, en razón de la
promoción en proceso que se dispuso en 2020, contamos con dos divisiones del turno mañana con
aproximadamente 47 estudiantes y dos en el turno tarde que superan los 30 estudiantes. De
tercero a quinto año las divisiones superan también los 30 estudiantes (menos los quintos años),
siendo un poco más numerosas las del turno mañana respecto de las del turno tarde.

La situación pedagógica:
Los estudiantes de primer año ingresarán al nivel medio luego de haber transitado el último año
del nivel primario en forma virtual. Teniendo en cuenta que el último año de nivel primario es un
período de repaso y cierre de muchos contenidos, creemos que nuestros noveles estudiantes
llegarán en una situación desfavorable respecto de lo que se daba en los años pre-pandemia.

Los estudiantes de segundo año vienen de transitar un primer año virtual en el que
prácticamente no han tenido contacto físico con la escuela. Esto quiere decir que conocieron a sus
profesores y escasamente a sus compañeros a través de canales tecnológicos, lo cual no les ha
permitido, en general, apropiarse de las mínimas herramientas necesarias para transitar
adecuadamente el nivel medio. Son muchos los estudiantes que adeudan una alta cantidad de
asignaturas.

Los estudiantes de tercero a quinto año sabemos que en más o en menos han transitado por el
nivel en etapas pre-pandemia por lo cual consideramos que cuentan con algún bagaje que les
permitió, salvo en algunos casos, transitar en mejores condiciones el ciclo lectivo 2020. Los datos
con los que contamos permitirían que digamos que cuanta mayor experiencia transitada en forma
presencial, mejor fue la adaptación a la virtualidad; excepción hecha de los alumnos que por
diversos motivos no pudieron acceder a herramientas y canales tecnológicos, de aquellos a
quienes el aislamiento les impactó emocionalmente en el sostenimiento de la tarea y de aquellos
que necesitan un acompañamiento más cercano que la media de sus compañeros.

Nuestra propuesta:
Teniendo en cuenta el diagnóstico precedente, elaboramos la propuesta que sigue a
continuación, la cual no es única para todos los cursos ya que surge del análisis particular de cada
uno. Lo que sí es general para todos los cursos es que el dispositivo pedagógico a implementarse
será semi presencial para quienes puedan concurrir a la escuela y a distancia (en lo posible virtual)
para quienes por razones debidamente justificadas deban permanecer en aislamiento.

La semi-presencialidad surge de confrontar nuestra matrícula con los espacios disponibles para el
dictado de clases.

El dispositivo pedagógico presencial.

Para esta modalidad proponemos que la presencialidad sea una regla básica en un formato de
alternancia entre dos grupos de aprox. 15 estudiantes por semana. La frecuencia semanal está
justificada por el armado de la grilla horaria típica del nivel medio. En este, como en el resto de los
años, durante la semana de presencialidad los alumnos tendrán clases de introducción y cierre de
temas, además de tiempo de tutoría para consulta sobre los trabajos de realización autónoma que
se indiquen para la semana no presencial. El DOE colaborará con las coordinaciones en el
asesoramiento para la elaboración didáctica de las estrategias y materiales.

Primer año:

Consideramos que la presencialidad es de suma importancia para estos grupos de alumnos que
atravesaron su séptimo grado sin asistir a la escuela. Creemos que en primer año se adquieren
muchas de las herramientas y habilidades (vg. curriculum oculto) que permiten iniciar una
trayectoria exitosa en la escuela. Esas herramientas y habilidades van más allá de las académicas,
dado que entre las mismas encontramos otras como la construcción de relaciones con múltiples
docentes, la vinculación con pares etarios y otros adolescentes de distintas edades, etc. Para este
año se ocuparían tres de las aulas equipadas para la secundaria del futuro.

Cabe la aclaración que durante la primera semana, los grupos de cada curso no superaron los 11
alumnos, y observamos que a los sumo podría entrar uno más en cada burbuja. Como la matrícula
indica que hay 32 estudiantes, se contempla la opción de formar un grupo C.

Segundo año:

Consideramos que la presencialidad es de suma importancia para estos grupos de alumnos que
atravesaron su primer año sin asistir a la escuela. Caben las mismas consideraciones acerca de las
herramientas y habilidades extra-curriculares referidas para primer año. A diferencia del primer
año y debido a la cantidad de alumnos, la rotación de alumnos implica una semana de asistencia y
dos de trabajo autónomo. Desde el DOE se trabajará especialmente con los docentes de estos
cursos con el fin de maximizar la utilización de los recursos tanto presenciales como no
presenciales. Se usarán dos aulas de las equipadas para secundaria del futuro, si están finalizadas
en tiempo y forma.

Tercer año:

Siendo inicio de la orientación, creemos que los alumnos de tercer año deben ser incluidos
también en el régimen de rotación semanal.

Cuarto y quinto:

Habida cuenta de lo propuesto hasta aquí resulta que para cuarto y quinto años nos restan dos o
cuatro aulas para cuatro divisiones en el turno mañana y dos aulas para cuatro divisiones en el
turno tarde. Este recurso espacial nos permite para el turno mañana la asistencia de cada grupo
durante una semana con dos de trabajo autónomo en sus hogares y para el turno tarde sería
asistencia de una semana más trabajo en sus hogares durante tres semanas. En el caso del turno
mañana quedará, la tercera semana, un grupo de profesores de una división sin alumnos; en este
caso se dedicarán a dar tareas de apoyo como acompañantes docentes en las divisiones de 1ro a
3er año que lo requieran en función de cómo se vaya desarrollando la dinámica escolar.

La elección de estos últimos curso de cuarto y quinto año para que tengan menos asistencia
presencial debido a la escasez de aulas se debe a que creemos que son los estudiantes con más
edad y que han tenido más experiencia en el nivel secundario, por lo cual estarían en mejores
condiciones para llevar adelante la parte del trabajo autónomo.

El dispositivo pedagógico a distancia.


Esta modalidad de cursada está dirigida a los estudiantes que por motivos debidamente
justificados no puedan llevar adelante una cursada presencial. Los docentes a cargo de esta
modalidad no serán necesariamente los mismos que estarán frente al curso de cada estudiante;
esto se explicará en el próximo título.

Esta modalidad se instrumentará a través de diferentes canales según las posibilidades de cada
estudiante. Entre las posibilidades se encuentran desde el uso de medios digitales hasta la entrega
de fotocopias.

Se tendrán en cuenta para su desarrollo las experiencias transitadas durante el ciclo lectivo 2020
para recuperar las prácticas más satisfactorias. De la misma manera que en la modalidad
presencial se contempla trabajo autónomo de los estudiantes, en esta modalidad también ese tipo
de trabajo será parte de la cursada, pero incorporará, para la introducción y cierre de temas, el
uso de recursos multimediales y/o gráficos según la posibilidad de acceso de los estudiantes. La
facilitadora pedagógica digital de INTEC y los ayudantes de trabajos prácticos de informática
colaborarán en esta tarea con los docentes. El DOE, contribuirá con asesoramiento para el
desarrollo de esta modalidad. Asimismo, las tutorías se llevarán adelante en forma virtual por los
canales que se acuerden entre docentes y estudiantes.

El trabajo docente.
La organización del trabajo docente tendrá diferentes características derivadas, por una parte, de
las dos modalidades de cursada (presencial y a distancia) y, por otra parte, de los docentes que
tienen permiso de ausencia extraordinaria (PAE) y no asisten a la escuela.

La cursada presencial será atendida por los docentes que asisten a la escuela conforme a la grilla
horaria habitual y que consta en su DDJJ.

La cursada a distancia será atendida por tres tipos de docentes, a saber: Los que tienen PAE, los
que tienen horas en proyecto especial en esa cantidad de horas y los que tienen horas extra-clase
en esa cantidad de horas. En los dos últimos casos el trabajo lo harán desde la escuela en tanto las
condiciones edilicias y tecnológicas sean las adecuadas, de otro modo lo harán desde sus hogares.

La distribución de estudiantes entre los docentes que trabajen en esta modalidad, se hará
teniendo en cuenta las especificidades disciplinarias de los mismos, para lo cual las coordinaciones
de cada área participarán en la definición de qué asignaturas abordará cada docente. De todos
modos, el docente que trabaje a distancia lo hará en coordinación con el docente que trabaje en la
modalidad presencial, de manera que la planificación de contenidos y objetivos será
responsabilidad de este último, mientras que las actividades y evaluaciones serán de
responsabilidad conjunta y con asesoramiento del DOE.

Los horarios de entrada y salida.

Los horarios de entrada y salida serán escalonados con intervalos de entre cinco a diez minutos.
Con este esquema cada curso perderá sólo una hora de clase dado que quienes entren en primer
lugar se retirarán primero y así sucesivamente. Teniendo en cuenta que la grilla horaria está
armada en su mayoría por módulos de dos horas cátedra, creemos que es la mejor manera de
organizar el tránsito por el edificio respetando los protocolos y afectando lo menos posible las
actividades académicas.

El escalonado del ciclo lectivo.


Proponemos un inicio escalonado que nos permita evaluar el funcionamiento de este proyecto y
hacer los ajustes necesarios si fuera necesario. Por este motivo las clases iniciarán la primera
semana de marzo para tercer año y la segunda semana para cuarto y quinto año.

Las asignaturas en proceso (no acreditadas en CL 2020)


Consideramos que las asignaturas en las que muchos estudiantes han sido promovidos sin
haberlas acreditado requieren un abordaje que no puede ser común para todas. En algunos casos
es posible, por la característica de la asignatura, que el seguimiento y acreditación puedan ser
llevados adelante por un docente del curso del ciclo lectivo actual del estudiante. Tal puede ser el
caso de asignaturas correlativas, aunque no necesariamente en todas ellas. En otros casos hay
asignaturas con particularidades que hacen difícil o imposible el abordaje por parte de docentes
ajenos a ellas; la especificidad disciplinar es una de las limitantes, aunque no la única. Por lo
expuesto es que proponemos que para cada asignatura se evalúe al interior de cada
departamento y/u orientación cuál es la mejor estrategia de seguimiento de los estudiantes en
pos de la acreditación faltante. Entre dichas estrategias podrá haber algunas que se instrumenten
en paralelo a la cursada presencial conviviendo y/o alternando con otras no presenciales. Cada
situación será decidida teniendo en cuenta las características de las asignaturas, la disponibilidad
de docentes y la subjetividad de cada estudiante.

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