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El 

periodo indígena en Venezuela comenzó aproximadamente en 20000


a. C. El desplazamiento de los primeros pobladores se generó desde el
norte hacia el sur, razón por la cual las costas venezolanas fueron las
primeras en recibir a las familias indígenas. Investigaciones arqueológicas
han determinado que existen cuatro periodos demarcados: Paleoindio,
Mesoindio, Neoindio e Indohispano. Los tres primeros corresponden a la
época precolombina: durante estas fases las familias indígenas venezolanas
experimentaron desarrollos importantes en materia económica, social y
cultural. Una de las tribus venezolanas más relevantes fueron los timoto-
cuicas, quienes desarrollaron construcciones de gran utilidad para la época
—como bóvedas para enterrar fallecidos o almacenar alimentos— y llevaron
a cabo intercambios con otras familias indígenas cercanas, lo que les
permitió dedicarse al comercio en cierta medida.

– Primera etapa: convivencia con megafauna

Los primeros pobladores de Venezuela se ubicaron especialmente en las


costas y los valles. Su principal fuente de alimento fueron los animales de
gran tamaño, aquellos que  constituían la megafauna de la región.

Estos animales se extinguieron aproximadamente en 10 000 a. C. Esto


implica que hubo un largo periodo de coexistencia entre animales gigantes
y habitantes originarios.

Las herramientas que utilizaban para defenderse de dichas bestias y para


sus tareas cotidianas estaban construidas a base de piedras. Poco a poco
fueron incluyendo otros elementos, como la madera, las conchas de mar y
los huesos, entre otros.

Como consecuencia de una búsqueda de mejores técnicas de caza, los


indígenas venezolanos de este periodo desarrollaron armas más efectivas
como el arco y la flecha, gracias a los que podían cazar presas en
movimiento y desde la distancia.
Esta primera fase (Paleoindio) duró hasta 5000 a. C. aproximadamente, y
la forma de vida seguía siendo nómada. Los hallazgos arqueológicos más
importantes correspondientes a esta época se han encontrado en El Jobo,
poblado ubicado en el estado Falcón. Entre estos rastros destacan puntas
de lanza y otros instrumentos para cazar.

– Segunda etapa: búsqueda de nuevas fuentes de


alimento

La desaparición de la megafauna implicó una búsqueda de nuevas opciones


de alimento. Ya desde finales del periodo anterior las tribus estaban
ampliando sus posibilidades al incorporar armas para cazar a distancia, así
que en esta fase la alimentación incluyó peces, aves e incluso roedores.

Los recursos marinos fueron los más importantes para los pobladores de
este periodo. Gracias al consumo de estos, los indígenas venezolanos
comenzaron a experimentar un proceso de semisedentarismo.

Los hallazgos en las excavaciones soportan este argumento, pues se han


encontrado muchas piezas relacionadas con la pesca y muy pocas armas de
otro tipo.

Expansión

En esta época —que corresponde al periodo Mesoindio— la población de las


tribus comenzó a aumentar, lo que dio pie a las primeras formas de
organización social.

De hecho, el desarrollo de la pesca implicó que los indígenas se


desplazaran a otras zonas a las que solo podían llegar a través de una
embarcación; tal es el caso de varias islas del Caribe. La población se
expandió, lo que permitió un mejor aprovechamiento de los suelos y el
nacimiento de una cultura agrícola que poco a poco fue evolucionando.
Esta diversificación en la obtención de alimentos contribuyó a crear
sistemas de intercambio, que fueron beneficiosos para las diferentes tribus
que hicieron vida en Venezuela en la época prehispánica.

– Tercera etapa: repunte de la agricultura

A partir del 1000 a. C. aproximadamente los sistemas de agricultura se


desarrollaron de tal forma que generaron los primeros asentamientos más
complejos en cuanto a su estructura.

De este periodo (conocido como Neoindio) son los timoto-cuicas, tribu de


indígenas venezolanos ubicados en los Andes de Venezuela que
compartieron su cultura con las de tribus aledañas. Gracias a este
intercambio, los timoto-cuicas ganaron conocimiento en distintas áreas,
especialmente en la arquitectura.

Otras tribus importantes de entonces fueron los caribes y los arawacos. Los
caribes estaban asentados en las costas del Caribe (de allí su nombre),
mientras que los arawacos se encontraban en los llanos de occidente.

A continuación describiremos los aspectos más relevantes de estas tres


tribus de indígenas de Venezuela:

Timoto-cuicas

Entre los principales aspectos relevantes de los timoto-cuicas destacan la


construcción de canales de riego, el uso de abonos naturales y el cultivo en
terrazas. Todas estas implementaciones hicieron que existiera un amplio
desarrollo cultural en la zona andina.

Caribes

Fueron muy buenos navegantes y llevaron a cabo actividades comerciales


con distintas tribus de la zona. Los ancianos eran considerados guías
espirituales de la tribu, por lo que ocupaban un lugar importante en la
organización social.

Los caribes fueron una de las tribus que resistió más cuando los españoles
llegaron a las costas venezolanas. Investigadores señalan que fueron los
primeros fabricantes de hamacas y que la venganza era permitida dentro
de los parámetros normativos de la tribu.

Arawacos

Su acción no estaba muy enfocada a cultivar, pues seguían subsistiendo


sobre todo a través de la caza y la pesca.

Los chamanes y los caciques eran los que dirigían la organización social de
esta tribu, y sus viviendas eran cubiertas con bahareque para darles mayor
estabilidad y firmeza.

Uno de los elementos más característicos de los arawacos fue que se


dedicaron a construir balsas y se hicieron especialistas en esta tarea

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