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¿Cuál es el objeto de estudio de las ciencias?

Por
Itziar Varela
El objeto de estudio de las ciencias son los fenómenos que ocurren en la naturaleza y sociedad, cuyo conocimiento nos permite
explicar los sucesos y predecirlos de forma racional. Explicarlos de forma racional significa que no dejamos que ninguna idea
preconcebida, política o religiosa, intervenga en la forma de estudio de la ciencia.
El objeto de estudio de la ciencia suscita preguntas una vez que es observado. La ciencia intenta resolver las preguntas a través de un
diseño experimental. Esto define el objeto de estudio de la ciencia y pone los límites a la investigación que se va a realizar.
Clasificación de las ciencias basándose en el objeto de estudio
Podemos organizar las ciencias basándonos en su objeto de estudio.
Ciencia formal o eidética
La ciencia formal es aquella que estudia las ideas. Esto quiere decir que no se encarga de estudiar objetos ni realidades, sino lo que
les rodea. A través del método deductivo se plantean modelos que pueden ser aplicados a la realidad.
Estudia objetos ideales que son creados por el hombre, y a diferencia de las ciencias naturales, que comprueban sus resultados
empíricamente; las ciencias formales argumentan su validez con teorías basadas en proposiciones, definiciones, axiomas y reglas de
inferencia. Dentro de las ciencias formales están la lógica y las matemáticas.
Lógica
El objeto de estudio de la lógica es la inferencia. Podemos definir la inferencia como la evaluación que realiza la mente entre
proposiciones. En palabras mundanas, lo podemos definir cómo sacar una consecuencia de otra.
La lógica investiga por que unas inferencias son válidas y otras no. Una inferencia es aceptable cuando tiene una estructura lógica.
Existen dos clases de inferencias, las deducciones y las inducciones.
Ejemplo de inducción
Todas las vacas son mamíferos y tienen pulmones, todos los humanos son mamíferos y tienen pulmones, por lo tanto, probablemente
todos los mamíferos tienen pulmones
Ejemplo de deducción
Todos mis compañeros son estudiantes, ellos son estudiantes, por lo tanto, yo soy estudiante.
Como vemos en el ejemplo, el objeto de estudio de la lógica son las ideas, no se centra en un hecho específico que sucede, sino en
las ideas que lo rodean.
Matemáticas
Para las matemáticas, el objeto de estudio son las propiedades y relaciones entre entidades abstractas como números, figuras
geométricas o símbolos. Es un conjunto de lenguajes formales que se utilizan para plantear problemas de forma no ambigua.
Por ejemplo, podemos decir que X es mayor que Y, y que Y es mayor que Z. Para plantearlo de una manera más sencilla, podemos
utilizar el lenguaje matemático, y resulta en un enunciado X>Y>Z.
Las matemáticas simplifican el lenguaje utilizado en conceptos abstractos para explicar problemas. Las ciencias naturales utilizan las
matemáticas para explicar y demostrar sus teorías y dotarlas de coherencia.
Ciencia fáctica
Estas ciencias son las que tienen como objeto de estudio los hechos. Estos son estudiados a través de hechos basándose en la
observación y experimentación. Dentro de las ciencias fácticas podemos hacer otra distinción basándonos en el objeto de estudio,
entre ciencias naturales y ciencias sociales.
Ciencias naturales
Las ciencias naturales son aquellas estudian el funcionamiento del universo y el mundo que nos rodea. Como objeto de estudio tienen
la naturaleza y utilizan un método experimental para demostrar sus hipótesis.
Para acotar su objeto de estudio, las ciencias naturales estudian los aspectos físicos de la realidad, intentando evitar las acciones
humanas dentro de sus hipótesis.
Aún teniendo un objeto de estudio tan distinto de las ciencias eidéticas, las ciencias naturales se apoyan en estas para desarrollar su
modelo de estudio, especialmente en la lógica y las matemáticas. Todas las ciencias se apoyan en un razonamiento lógico para las
explicaciones de sus hipótesis.
Dentro de las ciencias naturales, podemos distinguir dos amplias categorías, las ciencias físicas y las ciencias biológicas.
Dentro de las ciencias físicas nos encontramos primeramente con la astronomía. En la astronomía el objeto de estudio son los
cuerpos celestes. Seguimos con la física, cuyo objeto de estudio son el espacio, el tiempo, la materia y la energía.
Además de la geología, que estudia la Tierra y la química, que estudia la composición de la materia y sus reacciones.
Por otro lado, en las ciencias biológicas el objeto de estudio son los seres vivos. La mayor rama de estudio es la biología, que a su vez
se divide en pequeñas secciones definiendo su objeto de estudio. La botánica y la zoología son dos de sus ramas, donde el objeto de
estudio son las plantas y los animales respectivamente.
La biología, en el estudio humano, sólo se centra en las características físicas del cuerpo, ya que la interacción en la sociedad es el
objeto de estudio de las ciencias sociales.
Ciencias sociales
Las ciencias sociales se caracterizan porque su objeto de estudio son los seres humanos dentro de la sociedad y sus interacciones.
Es importante distinguir entre ciencias sociales y estudios sociales.
Pese a que el objeto de investigación es el mismo, dentro de las ciencias sociales se tiene que seguir un método inductivo mixto, que
es aquel que se utiliza para el estudio de las ciencias naturales. Sin embargo, los estudios sociales se basan en razonamientos y
observaciones, y pese a seguir un razonamiento lógico, no siguen el modelo de ciencia.
Dentro de las ciencias sociales encontramos varios grupos dependiendo del objeto de estudio de los mismos. Están las ciencias
sociales que tienen como objeto de estudio la interacción de la sociedad, como son la ciencia política, la antropología, la economía y
la sociología.
Por otro lado, también tenemos las ciencias que se centran en el objeto de estudio del sistema cognitivo humano. Dentro de estas
encontramos la lingüística, la semiología y la psicología.
Por último, están las ciencias sociales que basan su objeto de estudio en la evolución de las sociedades, como son la arqueología, la
demografía, la historia, la ecología humana y la geografía.
Referencias
1. RYAN, Alan G.; AIKENHEAD, Glen S. Students’ preconceptions about the epistemology of science. Science Education, 1992,
vol. 76, no 6, p. 559-580.
2. POBOJEWSKA, Aldona; LACHMAN, Michał. Epistemology and Science.
3. FELDMAN, Richard. Epistemology. 2006.
4. D’AGOSTINO, Fred. EPISTEMOLOGY, AND SCIENCE.The Routledge Companion to Hermeneutics, 2014, p. 417.
5. BENSON, Garth D. Epistemology and science curriculum.Journal of Curriculum Studies, 1989, vol. 21, no 4, p. 329-344.
6. BUNGE, Mario. epistemología.Barcelona España, 1980.
7. SAMAJA, Juan.Epistemología y metodología: elementos para una teoría de la investigación científica. Eudeba, 2007

La ciencia como objeto de estudio


Zenobio Zaldibia M.*
Dentro de la cultura contemporánea, la ciencia como objeto de estudio puede ser analizada desde diversas perspectivas; v.gr.:
histórica, sociológica, o filosófica.  Para el primer caso podemos recurrir a la historia de las ciencias; para el segundo enfoque,
podemos adentrarnos en la sociología de la ciencia por ejemplo.  Y para el ámbito filosófico, lo más apropiado es el análisis
proveniente de la epistemología.
 Desde el ámbito de la historia de las ciencias, es posible visualizar por ejemplo, el dinamismo de las teorías químicas, físicas y
biológicas; el aparecimiento de aparatos e instrumentos que permiten la mensuración de los fenómenos o procesos del universo, el
incremento de los conceptos teóricos y operativos en las ciencias empíricas, o diversas revoluciones de determinados corpus teóricos
que han traído aparejado un avance significativo en la comprensión científica del mundo.
 Por su parte, la perspectiva de la sociología de la ciencia, focaliza la atención en la descripción y análisis de las formas de
organización institucional de las comunidades científicas; en las interacciones de los hombres de ciencia con el resto de los
componentes del marco social; en el uso de los descubrimientos científicos y en las consecuencias de los mismos para los distintos
estamentos sociales; o en la presencia de determinadas formas de ideología en el proceso de investigación científica.
 Y en cuanto a la perspectiva filosófica para estudiar a la ciencia,  lo que se explícita a continuación pretende ser una muestra
ilustrativa acerca de los temas de interés epistemológico.
 Ciencia pura y ciencia formal
 El concepto "ciencia pura" es una mera abstracción, es una diferenciación intelectual de obras y cometidos humanos.  La ciencia real
es lo existente en la sociedad y en sus interacciones con el resto de la cultura, con la tecnología y con otras expresiones humanas.   La
ciencia es un conjunto de actividades en desarrollo que se caracteriza por el empleo de métodos rigurosos y por la exigencia de
procedimientos  verificativos.  Habitualmente a estas actividades que realizan distintas comunidades de individuos especializados se
les denomina "ciencia normal".
 La ciencia trata de explicar el mundo, de darle una coherencia lógica, de aportar un sentido para la comprensión de los hechos del
mundo.  Pero el sentido, la orientación última no es del mundo, es del científico; o mejor aún, de las comunidades científicas. “El
mundo no esta estructurado de por sí de un modo unívoco.  Somos nosotros los que lo estructuramos al proyectar sobre él nuestros
conceptos."
 Así, el universo es caos y es el científico el que interpreta este caos y ordena explicativamente los hechos del mundo, al mismo
tiempo que cumple una tarea productiva sobre los mismos.
 La ciencia normal está fuertemente vinculada a la técnica, puesto que casi todos sus resultados, sus informaciones y conocimientos
específicos, van dirigidos a fines prácticos, principalmente utilitarios.  La convergencia entre el interés científico y el espíritu práctico de
la técnica, ya se visualiza en el auge y desarrollo sostenido de las sociedades y academias científicas propias del Siglo de la
Ilustración.  Los miembros de estas florecientes comunidades, se dedicaban tanto al estudio de las ciencias naturales, como a la
realización de experimentos y a la investigación de aplicaciones prácticas de los conocimientos científicos de la época.  Muchos de los
informes de estas entidades dan cuenta de una manifiesta preocupación por los asuntos técnicos, v.gr.; el empleo de los gases y
vapores, "los tintes, la fabricación de mejores telas, la ventilación de las prisiones, etc." (2)
 En el Siglo XIX, la conexión ciencia-técnica se consolida con los nuevos requerimientos cognitivos de la Revolución Industrial, en sus
fases mas avanzadas.  En Chile también en este período, se visualiza el mismo espíritu pragmático que rodea a la actividad científica
de la Europa decimonónica.  Así, por ejemplo, Claudio Gay en su Historia Física y Política de Chile destaca para la industria naciente,
el conocimiento de alguna especie de flora o fauna nacional, v.gr.; ora una salicornia (para jabones) o una rosella (para tinturas). (3)
 Actualmente en la práctica, lo que se observa es un proceso de desarrollo incrementante científico-tecnológico, con carácter
dialéctico.  La separación es solo mental, lo que efectivamente existe es el proceso, un continuo ciencia-tecnología.
 Algunos problemas epistemológicos
 Entre los problemas que actualmente se manifiestan al interesado en comprender la génesis y el desarrollo del conocimiento
científico, la literatura especializada  ofrece una gama muy amplia.  Sin embargo, pensando en los estudiantes de universidades
principalmente tecnológicas, que pudieran leer estas notas;  tal vez los más relevantes serían los siguientes:
 la aprehensión cognoscitiva
-la demarcación entre ciencia y metafísica
-el análisis de los conceptos científicos
-los límites de la ciencia y la tecnología
-las formas de hacer epistemología
-la unidad de las ciencias
-las dos culturas (Ciencias versus Humanidades)
-Ética de las Ciencias
 Abordar, desde luego, todos los tópicos mencionados con una adecuada profundidad excede las pretensiones de este ensayo.  Por
ello analizaremos aquí sólo la aprehensión cognoscitiva, el análisis de los conceptos científicos y la demarcación entre ciencia y
metafísica.
 La aprehensión cognoscitiva
 Se denomina así, al estudio de la adquisición del conocimiento; esto es, a la tarea de  dilucidar cómo es que acontece el
conocimiento científico y el conocimiento individual, desde la génesis ontogenética hasta la conquista de las nociones y estructuras
científicas.  Esto significa por una parte, explicitar la formación de los contenidos cognoscitivos y comprender el dinamismo de las
operaciones lógico-matemáticas que implica el proceso de captación intelectual.  Por otra, es una temática que sugiere el estudio del
desarrollo de las distintas formalizaciones incrementantes, en lingüística, matemáticas y lógica; así como también una manera de
demandarle a las ciencias formales en general, una expansión de sus estructuras lógicas para que colaboren en la tarea de dar
cuenta de las nuevas interacciones, de los nuevos observables.  Tales interacciones entre objetos de estudio acotados, se obtienen
cotidianamente gracias al avance de la ciencia normal.
 La cuestión cognoscitiva, dentro de la epistemología es más que un simple problema inserto en un universo de temas a dilucidar.   Es
un hito en la marcha de la inteligibilidad, un momento del desenvolvimiento de  la razón para analizar sus propios límites y para
determinar la validez del propio conocimiento. Tradicionalmente, el conocimiento ha sido percibido intelectualmente como una
construcción histórica de visiones de mundo, características de un tiempo histórico determinado.   Más actualizadamente el análisis
del conocimiento focaliza la atención tanto en el rol del sujeto como en el rol que desempeña el objeto.  Ello enfatiza la interacción
como génesis de las construcciones cognoscitivas. A su vez, tanto la epistemología como la sociología de la ciencia contemporánea,
están muy interesadas en lograr una explicación acerca de la base ideológica del conocimiento.(4)   Lo anterior,  sugiere un mayor
énfasis  en analizar el conocimiento en su construcción histórica misma; esto es, en  los estadios de desarrollo en el cual
determinadas verdades alcanzan el nivel de tales.  Las tendencias contemporáneas, por tanto, indican una mayor preocupación por
las condiciones históricas y epistemológicas en las cuales se obtiene el saber.  Ello está aparejado a los criterios de validez que
utilizamos para determinar un conocimiento como verdadero.  Se estaría produciendo así, un viraje en el interés cognoscitivo; más que
estudiar el resultado, o el producto final del conocimiento (el carácter pragmático de la investigación) se estaría llamando la atención
en el proceso mismo de la gestación del conocimiento (en las distintas etapas de su construcción) . Este es, por ejemplo, el camino
seguido por Piaget y otros constructivistas que privilegian la búsqueda de estructuras, como una forma de estudiar el conocimiento
desde dentro.
 La demarcación entre ciencia y metafísica
 Dicho problema tiene una raigambre positivista, puesto que ya los positivistas lógicas fueron los primeros en formularlo.  Para ellos, el
conocimiento científico es aquel tipo de saber que utiliza proposiciones lógicas o proposiciones que pueden ser verificadas por la
experiencia (exigencia de la verificación).
 Las proposiciones filosóficas, al no cumplir con el requisito mencionado, no podían ser consideradas ni como verdaderas ni como
falsas; por lo tanto, debían  ser consideradas como proposiciones "sin sentido" . Y los nuevos enunciados resultantes de las
combinaciones de las mismas serían "pseudoproblemas".  Así,  un discurso que utilice estos tipos de proposiciones "sin sentido”, no
participarían del conocimiento científico y quedarían en el terreno de la metafísica.
 Otros autores, v.gr. Piaget, comparten también la exigencia de la verificación experimental para las proposiciones científicas, pero
este investigador  estima además que el problema no está en el ámbito de la lógica formalizante, sino más bien en el ámbito
metodológico:  “ ... cualquier problema según el modo como se lo plantee, y una vez bien delimitado, puede convertirse en un
problema científico...” (5).
 Por tanto, si en torno a un problema específico, es posible delimitar bien el objeto de estudio y aplicar sobre él un método que cumpla
con los canones científicos, entonces ese  contenido puede llegar  a ser científico.  De este modo, la visión piagetana no considera la
existencia de fronteras definitivas entre filosofía y ciencia.
 Popper por su parte, plantea que el científico analice detenidamente las nociones de "ciencia empírica" y "metafísica”, para evitar que
la primera incluya proposiciones de la metafísica y reduzca así, las probabilidades de tener contenidos equivocados.  Sugiere, además
una nueva convención para las comunidades científicas; que el criterio de demarcación no sea la verificabilidad sino la falsabilidad. 
 Ello indica que el discurso científico sería tal, no porque sus proposiciones que constituyen hipótesis, sean suceptibles de ser
verificadas por los pasos del método experimental; sino porque tales hipótesis puedan ser refutadas o falseadas por otros
enunciados.  Lo anterior, requiere  previamente, de la formulación de  al menos, un enunciado básico que contradiga el enunciado
científico sometido al proceso de falsación; si no es este el caso, continúa siendo válido el enunciado sometido a falsación. (6)
 En rigor, hay que reconocer que existen también otras posiciones para analizar el tema, pero los enfoques precedentes parecen ser
los más importantes.  Y de tales argumentos es posible obtener, al menos, dos conclusiones:
1.- Las comunidades científicas continúan ininterrumpidamente con su tarea rutinaria de ciencia normal, sin detenerse a clarificar el
problema de la demarcación.
2.- La discusión epistemológica continúa aún principalmente entre los filósofos de la ciencia, los sociólogos del conocimiento y los
epistemólogos provenientes de las ciencias;  pero sin alcanzar un acuerdo intersubjetivo sobre el límite  entre ciencia y metafísica.
 El análisis de los conceptos científicos
 La epistemología cumple también el rol analítico de estudiar la estructura del discurso; principalmente por su interés en el análisis de
los conceptos que empleamos en la vida cotidiana y en la esfera científica.  Ello, para determinar sus relaciones con el significado de
otras nociones científicas.  Esta tarea no la realizan los miembros de las comunidades científicas, porque para ellos es una actividad
"incidental”; en cambio sí se realiza en el ámbito filosófico porque aquí pasa a ser una labor ''esencial''.  Recuérdese que de ordinario,
la función del filósofo ha sido la de exigir una clarificación o una mayor precisión en el uso de nuestros conceptos.  Por ello Platón
desarrolla su arte dialéctico, por ejemplo.
 Al analizar  el sentido exacto de los conceptos que empleamos en diversos cometidos humanos, la epistemología cumple una fase
previa para posteriormente colaborar con la tarea científica de dar cuenta de los hechos del mundo.  Por lo demás, uno de los roles
tradicionales de la filosofía ha sido en análisis del lenguaje; esto es, el análisis del discurso que empleamos cuando hablamos de la
naturaleza, la sociedad o de nosotros mismos; no en vano siguen vigentes los principios lógicos y los cánones de corrección formal del
pensamiento, que la ciencia debe  a la lógica clásica  - disciplina esencialmente filosófica-  que colabora   en la formulación de 
hipótesis y enunciados científicos  en general.
 Por otra parte, al estudiar las nociones científicas por ejemplo, se centra la atención en una función denominada análisis formalizante
del lenguaje.  De este modo se alcanza una teorización sobre una de las conquistas científicas más preciadas: sus conceptos
específicos.  Así, una porción significativa de la literatura de la filosofía de la ciencia, corresponde a una teorización de los resultados
científicos, a la clasificación de la ciencia y al análisis del discurso científico en general.
 El argumento precedente sugiere una colaboración entre filósofos y científicos para la propia comprensión que poseen estos últimos,
sobre los conceptos que utilizan. Es también   una forma de aportar nuevos elementos de juicio para la reflexión sobre los fundamen-
tos de las distintas disciplinas.
Mario Bunge (21 de septiembre de 1919-)
         
Físico, filósofo, epistemólogo y humanista de nacionalidad argentina. Se doctoró en Física y Matemáticas por la Universidad de la
Plata y actualmente radica en Canadá. Desde 1962 es docente e investigador en la McGill University de Montreal. Bunge es un
filósofo materialista que defiende el realismo científico y la filosofía excata, por lo que ha expresado una postura contraria a las
"pseudociencias" entre las cuales considera al psicoanálisis, la praxeología, la homeopatía y la microeconomía entre otras. Sus
intereses abarcan la filosofía en general y la filosofía aplicada, así como de la lógica y la matemática. Es fundador de la Sociedad para
la Filosofía Exacta , ha publicado más de 30 libros, entre los más reconocidos se encuentran  Temas de educación popular (1943), La
edad del universo (1955), Causalidad: el principio de causalidad en la ciencia moderna (1959), La ciencia, su método y su filosofía
(1960), Tratados de filosofía básica (1974-1989), La investigación científica  (1967) y Tratado de                                                 filosofía
Vol.I-IV (2008- 2012).
La ciencia segn Mario Bunge La ciencia es el conocimiento racional, sistemtico, exacto, verificable y por ende falible, el ser humano.
amasa y remoldea la naturaleza, sometindola a sus necesidades. ... Las ciencias fcticas alcanzan un tipo de conocimiento racional y
objetivo.
¿Qué es la ciencia?
La ciencia es un cuerpo de ideas caracterizado por conocimiento racional, sistemático, exacto, verificable y falible. Es decir, las ideas
generadas por la investigación científica se pueden probar, pueden fallar en determinados casos pero también se pueden mejorar.
La ciencia es una disciplina que utiliza el método científico con la finalidad de hallar estructuras generales (principios y leyes) con
capacidad predictiva y comprobable.
La finalidad de la ciencia es el enriquecimiento del conocimiento objetivo de la humanidad.
Ciencia formal y ciencia fáctica
La ciencia se clasifica según el objeto de estudio en ciencias formales, que son aquellas que estudian las ideas, como la lógica y la
matemática, y ciencias fácticas, que son las que estudian hechos, como la física y la biología.
Cuadro comparativo entre ciencia formal y fáctica
Ciencia formal Ciencia fáctica
Trata de entes ideales, abstractos o interpretados, que
Trata de hechos.
sólo existen en la mente humana.
Los enunciados se refieren en su mayoría a entes extracientíficos:
Los enunciados consisten en relaciones entre signos.
sucesos y procesos.
Demuestra o prueba. Verifica (confirma o rechaza) hipótesis.
Requiere datos empíricos acerca de observaciones o
Es autosuficiente.
experimentos. A veces recurre a las ciencias formales.
Es una red de inferencias deductivas, demostrativas y plausibles
Es deductiva.
(inconcluyente).
Se contenta con la lógica para demostrar
Necesita la observación y/o el experimento.
rigurosamente sus teoremas.
Las ciencias fácticas a su vez se clasifican en ciencias naturales y ciencias sociales.

Según Mario Bunge, físico y matemático dedicado al estudio de la ciencia, los rasgos esenciales del tipo de conocimiento que
alcanzan las ciencias de la naturaleza y la sociedad son la racionalidad y la objetividad.
Por racionalidad se entiende que el conocimiento está constituido por conceptos e ideas y no por sensaciones o emociones.
Por objetividad se entiende que el conocimiento concuerda con la verdad de los hechos a través de la observación y el experimento.
Características de la ciencia fáctica
1. El conocimiento científico es fáctico: la ciencia intenta describir los hechos tales como son, independientemente de su valor
emocional o comercial. En todos los campos, la ciencia comienza estableciendo los hechos: esto requiere curiosidad
impersonal, desconfianza por la opinión prevaleciente y sensibilidad a la novedad.
2. El conocimiento científico trasciende los hechos: descarta hechos, produce nuevos hechos y los explica. Los científicos
exprimen la realidad a fin de ir más allá de las apariencias.
3. La ciencia es analítica: la investigación científica aborda problemas circunscriptos, uno a uno, y trata de descomponerlo todo
en elementos a fin de descubrir “el mecanismo” interno responsable de los fenómenos observados.
4. La investigación científica es especializada: la aplicación del método científico depende en gran medida del asunto; esto
explica la multiplicidad de técnicas y la relativa independencia de los diversos sectores de la ciencia.
5. El conocimiento científico es claro y preciso.
6. El conocimiento científico es comunicable: puede expresarse en un lenguaje informativo de forma pública.
7. El conocimiento científico es verificable: las técnicas de verificación se reducen a mostrar que hay o no algún fundamento
para creer que las suposiciones corresponden a los hechos observados o a los valores medidos.
8. La investigación científica es metódica: no es errática sino planeada.
9. El conocimiento científico es sistemático: una ciencia no es un agregado de informaciones inconexas, sino un sistema de
ideas conectadas lógicamente entre sí.
10.El conocimiento científico es general y abierto: va de lo singular a lo universal y no reconoce barreras a priori que limiten el
conocimiento.
11.El conocimiento científico es legal: inserta los hechos singulares en pautas generales llamadas “leyes naturales” o “leyes
sociales”.
12.La ciencia es explicativa: los científicos no se conforman con descripciones detalladas; además de inquirir cómo son la cosas,
procuran responder a porqués: por qué ocurren los hechos, cómo ocurren y no de otra manera.
13.El conocimiento científico es predictivo: la predicción es, en primer lugar, una manera eficaz de poner a prueba las hipótesis;
pero también es la clave del control o aun de la modificación del curso de los acontecimientos.
Ciencia pura y ciencia aplicada
La ciencia se clasifica según los objetivos que persigue en:
• Ciencia pura, que es aquella que persigue un fin puramente cognitivo y entender las cosas mejor, como, por ejemplo, la
biología y la física;
• Ciencia aplicada, que utiliza el mismo método general de la ciencia pura pero lo aplica a fines que son prácticos y utilitarios,
para mejorar nuestro dominio de las cosas, como, por ejemplo, la patología.
Utilidad de la ciencia
La ciencia es eficaz en proporcionar herramientas para el bien y para el mal. La utilidad de la ciencia es una consecuencia de su
objetividad. La tecnología moderna es en gran parte producto de ciencia aplicada. Así, la ingeniería es física y química aplicadas, la
medicina es biología aplicada, la psiquiatría es psicología y neurología aplicadas.
Además, la ciencia es útil en:
• comprender el mundo de acuerdo a los hechos;
• crear el hábito de adoptar una actitud examinadora libre y valiente, y
• acostumbrar a la gente a poner a prueba sus afirmaciones y a argumentar correctamente.
En resumen, la ciencia es valiosa como herramienta para domar la naturaleza y remodelar la sociedad y es eficaz en el
enriquecimiento, la disciplina y la liberación de nuestra mente.
Conocimiento técnico, protociencia y pseudociencia
El conocimiento ordinario puede desarrollarse en algunas de las tres direcciones siguientes:
• Conocimiento técnico: es el conocimiento especializado, pero no científico, que caracteriza las artes y las habilidades
profesionales;
• Protociencia (ciencia embrionaria), que puede ejemplificarse por el trabajo cuidadoso, pero sin objetivo teorético, de
observación y experimentación;
• Pseudociencia: un cuerpo de creencias y prácticas cuyos cultivadores desean, ingenua o maliciosamente, dar como ciencia,
aunque no comparte con ésta ni el planteamiento, ni las técnicas, ni el cuerpo de conocimientos. Ejemplos: rabdomancia,
parapsicología, psicoanálisis, homeopatía.
Metaciencia
Según Mario Bunge, el estudio interno de la ciencia es conocido como metaciencia. La metaciencia puede dividirse en tres partes:
• La lógica (sintaxis y semántica) de la ciencia, ocupada por problemas como el de la estructura de las teorías fácticas y la
relevancia empírica si la tiene, de los conceptos empíricos;
• La metodología de la ciencia, que trata del método en general de la ciencia y de las técnicas que lo complementan, como, por
ejemplo, la obtención de muestras al azar;
• La filosofía de la ciencia que estudia los supuestos y resultados lógicos, epistemológicos, ontológicos y éticos de la
investigación científica.
La metaciencia está limitada a la descripción y al análisis de la ciencia por lo que sigue siendo una protociencia.
Otra investigacion
¿Que es la ciencia? según mario bunge
Capítulo I: ¿Qué es la ciencia?
Es conocimiento racional, sistemático, exacto, verificable y por ende falible. Por medio de la investigación científica el hombre ha
alcanzado la reconstrucción conceptual del mundo que es cada vez más amplia, profunda y exacta. El ser humano amasa y remoldea
la naturaleza, sometiéndola a sus necesidades. La ciencia como actividad (como investigación) pertenece a la vida social; en cuanto
se le aplica al mejoramiento de nuestro medio natural y artificial, a la invención y manufactura de bienes materiales y culturales, la
ciencia se convierte en tecnología.
Las ciencias se dividen por su objeto o tema de estudio en dos: CIENCIAS FORMALES O IDEALES | CIENCIAS FÁCTICAS O
MATERIALES | * Hacen relaciones
La ciencia según Bunge: de las ciencias formales a las ciencias fácticas
Pistas para resolver el rompecabezas de la ciencia
“Un mundo le es dado al hombre; su gloria no es soportar o despreciar este mundo, sino enriquecerlo construyendo otros universos”
(Bunge, 1992, p.6)
Resumen
Este trabajo está constituido por una síntesis del capítulo “¿Qué es la ciencia?” del libro de Mario Bunge La ciencia. Su método y su
filosofía. El objetivo de esta síntesis es definir qué es la ciencia para Mario Bunge. En el presente trabajo, se abordan las definiciones
de ciencia, ciencias formales, ciencias fácticas y quince características principales de las ciencias fácticas que Bunge identifica.
Finalmente, se presentan algunas observaciones, a manera de conclusiones personales sobre las fortalezas y limitaciones definición
de ciencia de Bunge.
Palabras clave: Ciencia, ciencias formales, ciencias fácticas, método científico.
1. La ciencia de Bunge: La ciencia ha sido utilizada para comprender, domar, y modificar el mundo natural de acuerdo a las
necesidades biológicas y espirituales de los seres humanos. Para  Mario Bunge, la ciencia es un conjunto de ideas racionales,
verificables y falibles para elaborar construcciones conceptuales de mundo. Mediante estas construcciones, la ciencia ha sido aplicada
para mejorar el medio natural, a partir de las necesidades humanas, y a la creación de bienes materiales y culturales; esta ciencia
aplicada, se convierte en tecnología.
Este autor explica que no toda la investigación científica procura el conocimiento objetivo, y distingue dos tipos de ciencia: las ciencias
formales y las ciencias fácticas. Las ciencias formales son ciencias que se integran de saberes racionales, sistemáticos y verificables,
que a su vez forman parte de sistemas como la lógica y la matemática, que no son objetivos puesto que no se ocupan de los hechos y
por tanto, no dan informaciones sobre la realidad. 
Los sistemas de las ciencias formales tratan con entes ideales que implican condiciones abstractas e interpretadas, y sólo existen en
la mente. Estos sistemas se sustentan en entes formales y establecen relaciones entre ellos para construir las relaciones complejas
entre los hechos y sus diversos aspectos. Por esta razón es que estas ciencias se denominan “formales” ya que sus objetos no son
procesos ni cosas, sino formas en las que se pueden incluir contenidos, tanto fácticos como empíricos, ilimitados.  Ya que el
significado fáctico que se le asigna a los objetos formales no es una propiedad intrínseca de los mismos, las ciencias formales no
entran en conflicto con la realidad. En este sentido, las ciencias formales no se aplican a la realidad, sino que se emplean en la vida
cotidiana.
Para introducir las ciencias fácticas, Bunge hace una comparación entre éstas y las ciencias formales. Mientras que las ciencias
formales consisten en relaciones entre signos y usan la lógica para demostrar sus teoremas, las ciencias fácticas se refieren a entes
extra científicos, a sucesos y procesos concretos, por lo que  en su metodología utilizan la observación y la experimentación. Por otro
lado, las verdades en las ciencias formales no son absolutas, sino relativas a sus sistemas de lógica y principios teóricos.
En las ciencias fácticas no se emplean símbolos vacíos, sino símbolos interpretados; la racionalidad es necesaria pero no es garantía
de que se obtenga la verdad, por lo que se exige que los enunciados de estas ciencias sean verificables mediante la experiencia. De
esta manera las ciencias formales se orientan a demostrar o probar y por tanto, son completas y finales, mientras que las ciencias
fácticas son temporales, pues verifican hipótesis que en su mayoría son provisionales.
A partir de esta comparación, Bunge aborda a profundidad las ciencias fácticas; sus rasgos esenciales son la racionalidad y la
objetividad. Bunge define la racionalidad como el conocimiento constituido por juicios y raciocinios y que además efectúa operaciones
que tienen como punto de partida y punto final las ideas. Dichas ideas son combinables de acuerdo a un conjunto de reglas lógicas 
para producir nuevas ideas. Estas ideas a su vez se organizan en sistemas para conformar teorías. Por su parte, la objetividad, o el
conocimiento objetivo, busca analizar la verdad fáctica y verifica la adaptación de ideas a hechos recurriendo a la observación y la
experimentación.
Bunge identifica 15 principales características de las ciencias fácticas:
1) El conocimiento científico es fáctico, parte de los hechos y siempre vuelve a ellos. La ciencia intenta describir los hechos tal y
como son a través de datos empíricos que se obtienen mediante teorías; estos datos son a la vez materia prima de la
elaboración teórica. Por otro lado, Bunge destaca que no siempre es posible ni deseable respetar completamente los hechos
cuando se los analiza, puesto que estos sufren modificaciones durante la intervención del investigador. No obstante estas
modificaciones son estimadas por el investigador y consideradas en la descripción del experimento.
2) 2) El conocimiento científico trasciende los hechos, pues los descarta, produce nuevos hechos y los explica. La investigación
científica no se limita a los hechos observados, los científicos seleccionan aquellos hechos que consideran relevantes,
intentan controlarlos, reproducirlos e incluso producen hechos nuevos. 
El conocimiento científico se funda en la experiencia colectiva y la teoría, racionaliza la experiencia en lugar de sólo
describirla, esto quiere decir que en lugar de inventariarlos, los explica por medio de hipótesis y teorías. Para conjeturar lo
que hay detrás de los hechos observados los científicos inventan conceptos, que sólo son significativos en contextos teóricos.
Esta transición de lo observacional a lo teórico permite al científico mirar con desconfianza los enunciados surgidos por
coincidencias, ya que la principal fuente de descubrimiento de nuevos hechos  es la elaboración teórica de los hechos y la
comparación de las consecuencias de teorías con datos observacionales.
3) La ciencia es analítica, pues la investigación científica aborda problemas determinados uno por uno e intenta
descomponerlos en elementos. Los problemas de la ciencia son parciales y también sus soluciones, sus resultados son
generales  pues el análisis  es una herramienta para construir síntesis teóricas. La investigación descompone los objetos para
descubrir el mecanismo interno que es responsable de los fenómenos observados, después se examina la interdependencia
de las partes y finalmente se intenta reconstruir el todo en términos de sus partes interconectadas. A través del análisis es
posible descubrir cómo emergen, subsisten y se desintegran los todos.
4) La investigación científica es especializada como consecuencia del enfoque analítico de los problemas. La aplicación del
método científico depende del asunto en cuestión, por lo que existen una multiplicidad de técnicas y sectores en la ciencia,
pero se mantiene una unidad metodológica. Las variantes científicas pueden diferir en cuanto a su asunto, a las técnicas y a
su grado de desarrollo, pero no en tanto al objetivo, método y alcance. Para Bunge la especialización no ha impedido la
formación de campos interdisciplinarios y la filosofía es el remedio para superar la unilateralidad profesional.
5) El conocimiento científico es claro y preciso, pues la ciencia constituye una rebelión contra la superficialidad y vaguedad del
sentido común. Aunque el conocimiento científico, no está exento de vaguedades, procura mejorar la exactitud y trata de
sacar provecho de sus errores. Para Bunge, la claridad y precisión se obtienen a) distinguiendo cuáles son los problemas b)
incluyendo las nociones iniciales en esquemas teóricos c) definiendo sus conceptos y las funciones que desempeñan en un
sistema teórico d) procurando el uso y la combinación compleja de símbolos básicos y simples e) midiendo y registrando
fenómenos con exactitud.
6) El conocimiento científico es comunicable, puesto que el lenguaje científico comunica información a quienes estén
capacitados para entenderlo. Su comunicabilidad se posibilita mediante la precisión, que es una condición necesaria para la
verificación de datos empíricos e hipótesis científicas. En este sentido, la comunicación de los resultados y técnicas de la
ciencia perfeccionan la educación general y multiplica las posibilidades de su confirmación o refutación.
7) El conocimiento científico es verificable mediante la experiencia. Las hipótesis se comprueban mediante experimentación, no
obstante, los resultados experimentales generalmente se pueden interpretar de diversas maneras. Por otro lado, no todas la
ciencias pueden experimentar, por lo que la ciencia fáctica es empírica por que la comprobación de sus hipótesis involucre la
experiencia, pero no es necesaria mente experimental, ni se agota en las ciencias de laboratorio. La regla de la experiencia
para comprobar hipótesis en el método científico depende del tipo de objeto, hipótesis y medios disponibles.
8) La investigación científica es metódica,  pues los científicos formulan planes para encontrar lo que buscan. No obstante, el
planteamiento de la investigación no excluye el azar, sino que en ocasiones le da un lugar al azar, para aprovecharlo,  incluso
el investigador lo produce intencionalmente. La investigación procede según reglas y técnicas que resultaron eficaces en el
pasado pero que son perfeccionadas frecuentemente. La comprobación empírica de conclusiones particulares extraídas de
hipótesis generales, requiere del control y variación de las variables o factores relevantes, lo cual en todos los casos exige un
análisis de los datos obtenidos en el cuero de los procedimientos empíricos. La ciencia funciona sobre la premisa de que el
método científico se constituye mediante prescripciones falibles y perfectibles para el planteamiento de observaciones,
experimentos, la interpretación de resultados y el planteamiento de  problemas.
9) El conocimiento científico es sistemático, pues una ciencia es un sistema de ideas conectadas lógicamente entre sí. La
conexión entre estas ideas puede considerarse orgánica en tanto la sustitución de cualquiera de sus hipótesis básicas puede
producir un cambio importante en la teoría o grupos de teorías que conforman.
Por otra parte, la racionalidad, que Bunge relaciona con el carácter matemático del conocimiento científico, permite que el
progreso científico e efectúe no sólo mediante la acumulación de resultados, sino por revoluciones. Estas revoluciones
científicas, provocadas por del descubrimiento de nuevos hechos, consisten en la sustitución de hipótesis de gran alcance
por axiomas nuevos y  en el reemplazo de teorías por otros sistemas teóricos.

10) El conocimiento científico es general, pues ubica hechos y enunciados particulares en esquemas generales. La ciencia trata
de descubrir lo que tienen en común todos los singulares para exponer los universales, ya que el científico trata de exponer la
naturaleza esencia de las cosas humanas y naturales. El lenguaje científico no contiene únicamente términos para designar
hechos singulares sino términos generales para referirse a clases de hechos. De esta forma, la generalización es el único
medio conocido para adentrarse en lo concreto y obtener las cualidades y leyes esenciales de las cosas.
11) El conocimiento científico es legal, pues busca leyes y las aplica, insertando en ellas hechos singulares. En este sentido, la
ciencia es esencialista, pues intenta llegar a la raíz de las cosas. Algunas leyes surgen de la base de otras leyes y  pueden
cambiar paralelamente al tipo de organización social. Según Bunge, las leyes no se encuentran únicamente mediante la
observación, sino poniendo a prueba la hipótesis.
12) La ciencia es explicativa puesto que intenta explicar los hechos mediante leyes y las leyes en términos de principios. Los
científicos procuran obtener descripciones de las cosas pero también responder al por qué de las mismas. Las explicaciones
científicas se efectúan en términos de leyes, existen diversos tipos de leyes, consiguientemente existen diversos tipos de
explicaciones científicas.
13) El conocimiento científico es predictivo, pues la predicción representa una forma eficaz de poner a prueba las hipótesis y es
clave para el control y modificación del curso de las acontecimientos. La predicción científica se sustenta en leyes e
informaciones específicas y fidedignas que son relativas al estado presente o pasado de las cosas. La predicción es
perfectible, si falla, obliga al científico a corregir sus suposiciones, lo cual puede contribuir al perfeccionamiento del
conocimiento teórico.
14) La ciencia es abierta como sistema, ya que es falible y por tanto, capaz de progreso. No obstante, es metodológicamente
cerrada ya que es autocorrectiva, pues la verificabilidad de las hipótesis es un requisito y basta para asegurar el progreso
científico. Para Bunge el científico moderno es un generador de problemas, ama la verdad, pero no está interesado en teorías
irrefutables, sino que intenta probar cosas nuevas e inciertas, cometer errores y aprender de ellos.

15) La ciencia es útil, pues busca la verdad y proporciona herramientas que pueden usarse para bien o  para mal. La ciencia es
útil, respondiendo a su objetividad, de esta manera la investigación también representa avances sociales. Los técnicos
aplican los conocimientos aplicables generados por los científicos, en este sentido, la técnica moderna es en cierta medida,
ciencia aplicada. Pero la tecnología también tiene sus propios procedimientos de investigación, un cúmulo de reglas
empíricas, descubiertas antes que los principios científicos que, si éstas se confirman, terminan absorbiéndolas. La
tecnología consiste entonces, en el tratamiento de problemas prácticos mediante un enfoque científico, que también puede
ofrecer un crecimiento en tanto la invención de nuevas teorías o técnicas de investigación.
2. Conclusiones personales
Creo que es muy interesante y útil en términos epistemológicos la distinción inicial que hace Bunge entre ciencias formales y
ciencias fácticas. Mi impresión sobre su postura es que es un tanto positivista, puesto que se apega firmemente al método
científico como base del conocimiento científico. 
Por otra parte, en la onceava característica de  las ciencias fácticas,  hace referencia a la búsqueda de leyes de mente y cultura,
así como a la invención de nuevas herramientas para tratar fenómenos mentales y culturales. Esto me da la impresión de que no
está muy satisfecho con la elaboración teórica que existe hasta el momento en las ciencias sociales y probablemente en la
psiquiatría. Yo cuestionaría la idea de hacer leyes generales para el análisis de este tipo de casos, ya que ¿dónde quedaría la
subjetividad? 
En este sentido, creo que sus postulados chocan bastante con la investigación cualitativa, en la que el sujeto tiene un lugar
privilegiado, y además niegan la posible diversidad de condiciones y situaciones, que en ocasiones requieren de marcos teóricos
y métodos específicos y diversos por esta condición de especificidad.
Personalmente, no comulgo con la idea de utilizar la ciencia para “domar a la naturaleza” y “modificarla” o “mejorarla” con
respecto a las necesidades biológicas y espirituales de los humanos , porque además utiliza la palabra “hombres”, desde ahí ya
intuyo que es un discurso de dominación. Bunge no precisa las necesidades de qué hombres específicamente se busca satisfacer
a través de la ciencia, que para mí serían las del hombre occidental, lo cual también implica que la ciencia occidental no se
formuló inicialmente para satisfacer las necesidades de todos los hombres del mundo  y también pone en entredicho si en
realidad lo puede hacer. 
Como aproximación epistemológica, el texto de Bunge me parece completo y bastante ilustrativo, sin embargo, desde mi propia
trayectoria en las ciencias sociales y mi tema de tesis, los conflictos socioambientales, percibí varios vacíos y desencuentros en
cuanto a la rigidez con la que se presenta el método científico, la propia ciencia, desde una perspectiva occidental, y a la vez
patriarcal (llaman la atención la referencia a estudiantes de ingeniería llenas de pecas y que pesan más 50 kg y la metáfora: “ni
los científicos se casan con las solteronas” ).
Finalmente, además de las aportaciones epistemológicas de Bunge, identifico en su postura una apuesta a la interdisciplinariedad
y a la vinculación  y complementación entre distintos campos científicos. Me parece importante, y hasta cierto punto inspirador
que proponga que las posturas unilaterales pueden disolverse con una dosis de filosofía, habrá que ver de qué manera.
Referencias bibliográficas
Bunge, M. (1992).  ¿Qué es la ciencia?. En Autor. La investigación científica. Su estrategia y filosofía  (pp.6-23). Editorial Ariel:
Barcelona.

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