LA LUZ APACIBLE

Materia: Seminario de Santo Tomás de Aquino

Profesor: P. Uriel Isaac Álvarez Ordaz

Alumno: Edwin Alexis Lemus González

Morelia, Michoacán. 12 junio 2020

Louis de Wohl en su libro la luz apacible muestra el contexto histórico en el que se

desempeño santo Tomás, su obra relata principalmente el movimiento político de la época, en
un primer momento el libro pareciera que se tratara de una novela romántica, con la típica
temática de un caballero que lucha por su dama contra el mundo, pero conforme vamos
avanzando el autor muestra poco a poco algunos rasgos y elementos que nos ayudan a ir
descubriendo la vida de santo Tomas.

En la primera parte del libro el autor trata de narrarnos un poco como fue la infancia y
adolescencia del Doctor Angélico, desde esa edad su personalidad ya estaba en camino a la
santidad, puesto que se nos muestra a un Tomás totalmente serio e inclusive ensimismado. En
realidad, Tomás fue un hombre totalmente reflexivo, nunca alejado de la realidad, todo lo
contrario, alguien que a pesar de no demostrarlo estaba atento a lo que pasaba a su alrededor.

El autor trata de explicarnos como era la relación del Doctor Angélico con su familia,
naturalmente se nos menciona que los Aquino eran unas personas con poder. Poseían cierto
rango, más de un castillo, caballeros y servidumbre a su disposición, pero para Tomás esto no
era indispensable y esto es comprobado al encontrarnos en la historia que el estaba en un
monasterio como oblato, mientras que su familia disfrutaba de todas esas comodidades.

El Doctor Angélico siempre fue tomado como alguien raro, que no encajaba en las
costumbres de aquel tiempo, inclusive se nos menciona que su familia lo encierra en un
castillo por alrededor de un año y que uno de sus hermanos contrata a una prostituta para que
Tomás se convirtiera en “hombre”. Fracasando esta estrategia Tomás se aferra a su breviario,
a la Palabra de Dios y a unos cuantos libros.

Dentro de su camino, Tomás encontrará a un santo quien le ayudará en la construcción

de su intelecto, San Alberto Magno, quien será su maestro y después su cómplice en el trabajo
de Santo Tomás. Durante sus estudios el Aquinate tiene esa inquietud de servir a Dios de la
mejor manera posible, es por eso, que decide entrar a la orden de los predicadores.

Como en toda historia siempre hay un villano y aquí no es la excepción, el tirano de

esta obra se llama Federico II quien fue emperador, un ser ambicioso el cual quería adueñarse
del occidente cristiano. Ante este villano se opondrá un Papa llamado Inocencio, el cual como
vicario de Cristo luchará por defender a su pueblo.

Al Doctor Angélico le toca luchar de forma intelectual y lo hace con tal maestría que
es invitado al concilio de Lyon, donde desafortunadamente no conseguirá llegar, puesto que a
medio viaje morirá o mejor dicho iniciará su trabajo en el cielo. Durante su vida Santo Tomás
escribió muchísimas obras siendo la Summa Theologiae, Summa contra Gentiles y su
Scriptum super Sententias las más importantes de todas.

En lo personal pienso que en algunos momentos el libro se puede volver repetitivo y

un poco cansado al momento de leer, pero en general la historia ilumina los puntos esenciales
de la vida de Santo Tomás de Aquino. También muestra algunos detalles que son pocos
conocidos pero que el autor hace el esfuerzo de reflejarlos en su obra, como las actitudes de
su familia, la cuestión de las cruzadas, la influencia que había del islam ya dentro de la misma
Iglesia.

Podemos conocer y relacionar los pensamientos de diferentes personajes de la historia,

a partir del esfuerzo que hace el escritor en su obra, como ya lo mencioné en un principio es
una obra que ayuda a conocer muchas cosas referentes a la labor del Doctor Angélico.
Fundamentos que son importantes para la filosofía cristiana y que como lo menciona el
mismo autor, Santo Tomás dio el soplo del Espíritu Santo dentro de la filosofía.

La presencia de Dios siempre se manifestó en la vida de aquellos que a pesar de las

dificultades que les presentaba la vida, tenían esa disposición, un ejemplo de la fe que hoy en
día nos hace falta, no solamente a nosotros como seminaristas, sino que es fundamental para
la vida de todo cristiano.
 Sería una proeza llegar a la vejez y tener la fortuna de poder morir de amor, un amor
que se funde en el alma del hombre y lo conduce a la vida eterna con su creador, pero para
esto es necesario un camino que todo ser humano debe recorrer y es el de la santidad. La cual
Santo Tomás lo hace muy sencillo, y en realidad lo es puesto que la santidad se basa en el
amor y cuando nuestras acciones llevan este elemento no se hacen pesadas, todo lo contrario,
hacen que nuestros pasos en la fe sean más firmes.

La luz apacible nos enseña de igual manera a acoger el dolor con un sentido
evangélico, pues quien no este dispuesto a cargar su cruz de cada día no puede seguir al
Señor. Debemos aprender a “luchar” por aquellos ideales y sueños que hay en nuestro
corazón. La vida del Doctor Angélico nos enseña este punto en diferentes momentos de su
existencia terrena, tales son los momentos en los cuales muchas personas lo hicieron de
menos con sus burlas y sus desprecios. Pero hay que observar que el santo varón en ningún
momento se inmutó. Al contrario, puso todos los recursos que tenia en las manos de Dios.

Uno de los valores que rescata esta novela es el de la amistad que bien esta remarcado
entre Sir Piers y su escudero que a lo largo de la historia se no va mencionando como en las
diferentes peripecias que les presenta la vida siguen juntos, tanto en las buenas como en las
malas. Haciendo una analogía al respecto bien podríamos decir que de esa forma debería ser
la vida del hombre para con Dios, verlo como un amigo al que siempre podemos tenerle
confianza y con el que sabemos que estará para nosotros. La novela en general tiene muchos
valores los cuales se pueden ver reflejados en los personajes, y que si los analizamos a fondo
podemos descubrir diferentes aspectos que nos pueden servir de puente para encontrarnos con
Dios.

Al final de la historia el mal no pude vencer al bien, a pesar de tantas trabas que le
habían puesto a Santo Tomas empezando desde su propia familia hasta aquellos miembros de
la Iglesia que no querían que siguieran en pie las ordenes mendicantes, la justicia divina se
hizo presente, regalándonos hasta nuestros días las grandes obras que el Doctor Angélico
aportó para la Madre Iglesia, las cuales han servido para la formación de otros santos,
sacerdotes y seminaristas que buscan encontrar la verdad, aquella que nos ayudará a librarnos
de las tentaciones que el mundo nos ha puesto para no llegar a la plenitud de la vida cristiana
que es configurarnos con el mismo Cristo.