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Intuyendo sobre los sabios de Oriente.

Cuando Jesús nació en Belén de Judea en días del rey Herodes, vinieron del oriente a Jerusalén
unos magos, diciendo: ¿Dónde está el rey de los judíos, que ha nacido? Mateo 2:1-2

“… ἰδοὺ μάγοι ἀπὸ ἀνατολῶν παρεγένοντο εἰς Ἱεροσόλυμα”. “… y he aquí (unos) magos desde
Oriente se encontraban por Jerusalén”. Mateo 2:1

Y al entrar en la casa, vieron al niño con su madre María, y postrándose, lo adoraron; y abriendo
sus tesoros, le ofrecieron regalos: oro, incienso y mirra. Mateo 2: 11

Como la idea de que estos sabios eran “Reyes” está descartada porque el texto original los llama
“magos” (μάγοι), nos limitaremos a partir del otro adjetivo: el de magos. Magos en aquel tiempo
era un término que podría equivaler al de sabio. Para dedicarse a la búsqueda de la sabiduría era
necesario un mecenazgo (alguien que les pagara por sus investigaciones o que les diera los medios
para subsistir y conseguir las herramientas para alcanzar la sabiduría). Por lo tanto, cabe recalcar
que solo se podría lograr eso si había una orden sacerdotal o de sabios en un reino. Eso no
significa que hayan sido reyes, sino que un rey o reina les daba lo necesario para fungir como
mecenas, similar a la forma en que el pueblo judío mantenía a los levitas o los reyes de occidente a
los artistas.

Andaban en camellos, y, aunque hay una amplitud de países principalmente árabes que los usan
como transporte, no por eso deja de ser una característica.

E. White menciona que no eran idólatras (EJ 24.5), sino que habían estudiado las profecías hebreas
sobre el Mesías, lo cual concuerda con la Biblia. Los lugares en donde hubo una estancia de los
escritos hebreos y que pudieron ser centro de las investigaciones de una casta sacerdotal o grupo
de magos, son: Babilonia (hoy Irak) cuando ocurrió el exilio; Etiopía cuando el eunuco se llevó un
libro profético a su país; Yemen por ser considerado el reino de Saba a donde su reina pudo haber
llevado textos que le diera Salomón; y Persia, tras la caída del imperio babilónico.

Hasta aquí podemos establecer sus características que sirvan para dilucidar su origen: 1. Andaban
en camellos y dromedarios (Isaías 60), animales que existían en su país; 2. Venían de Oriente, por
lo que está de más hablar de cualquier país a la izquierda de Israel; 3. Eran sabios (sinónimo de
magos pero no reyes) y tal vez filósofos como menciona E. G. de White (EJ 24.5). 4. Pertenecían a
un grupo de sabios “financiados” por su reino. 5. Su reino había tenido contacto con Israel de
donde consiguieron los libros proféticos. 6. Los sabios llegaron a Jerusalén en primera instancia
guiados por la “estrella” de Belén.

Etiopía queda descartado porque, a pesar de que pudo pertenecer al reino de Saba y es un lugar
donde existen camellos, sí está al oriente de Israel pero en el continente africano. Además, la
historia del eunuco sucede incluso después del bautizo de Jesús y no antes de su nacimiento.

En Babilonia predominaba el paganismo en sus centros de investigación y no hay muchos datos


que puedan inferir que es el lugar de procedencia de los sabios de Oriente. Lo poco que se puede
decir es que existió una defensa del judaísmo pues en este lugar se escribió el Talmud y los
exilarcas se quedaron a vivir ahí por siglos sin regresar del exilio a Israel. Las posibilidades son
mínimas. Además, a esta cultura la absorbió el imperio persa, así que pudieron pasar a ser un solo
imperio, sin diferencia y aprovechando el avance en las ciencias que los caldeos habían hecho.

Yemen pudo conservar textos proféticos y es un lugar que ha sido considerado candidato para el
hogar de los sabios, incluso se cree que la Arabia Felix tiene esa posibilidad por su mención en
Salmo 72. {Donde igual se habla de Tarsis (tal vez España o Cerdeña, la isla italiana) pero este lugar
queda muy al occidente como para ser representativo de camellos y el mundo oriental asiático. Sin
embargo, puede ser que por esa mención se hable de que uno de los supuestos tres reyes magos
representa a Europa. Aunque eso sería una interpretación forzada e incluso heterodoxa de los
fundadores de la iglesia católica}.

En los países árabes aún no existían escuelas de pensamiento filosófico, pero pensadores como
Platón o Sócrates (quien viajó a Persia) tuvieron influencia de ideas persas, donde veían formas de
filosofía (o pensamiento un tanto pre filosófico siendo más estrictos) y llevaron sus ideas
racionalistas. En Persia ya existía la idea de un Mesías en el mazdeísmo y es tal vez se consolidó la
idea en los sabios al leer los libros que pudieron dejar los judíos antes de dejar el imperio. La idea
de que fueron filósofos se vería apoyada por la mención en EJ 24.5. Además es un país (o imperio
en ese entonces) donde se utilizan a los camellos y dromedarios como medio de transporte. La
ubicación geográfica al norte de Israel concuerda más con la idea de que los sabios fueron guiados
a Jerusalén, la cual se encuentra 9 km al norte de Belén. En cambio, si vinieran de Yemen, habrían
pasado antes por Belén y habrían regresado. En este lugar es más creíble que quedaran copias de
la literatura israelita que en Yemen. Por lo que es más viable que bajaran hasta Jerusalén y luego
bajaran más hasta llegar a Belén. Otro punto es la mención en Job 1:1 que menciona a la Tierra de
Uz ubicada en las lejanas tierras de Oriente, lugar que se relación con Uzbekistán o alguno de los
países persas o arios; sin embargo, es un tema del cual solo existen hipótesis y no es viable para
ubicarse con mayor exactitud, ya que primero habría que definir donde era Uz y Oriente hace
referencia a todo el continente asiático.

Por lo tanto, lo más factible es pensar que los sabios de Oriente era un grupo de pensadores
conocidos como magos por su interés en comprender la naturaleza como libro vivo donde podían
leer a Dios (EJ 24.5), además de filósofos por la relación de los persas con la cultura helénica y el
interés por comprender la physis o cosmos (entendido como el primer problema de la filosofía
occidental desde el discurso racional y conceptual) sin separarse de las interpretaciones religiosas
(la filosofía seguía ligada al mythos). Incluso puede ser que su sabiduría en la cultura hebrea la
obtuvieran por ser descendientes de los mismos judíos que vivían en el imperio.

Cabe aclarar que existen referencias que podrían dar ventaja a alguno de los lugares mencionados
pero esos datos se omitieron por provenir de libros apócrifos.

En conclusión, pero solo como algo hipotético especulativo y no definitivo, los hombres
mencionados por Mateo y profetizados por Isaías que visitaron a Jesús cuando nació porque
conocían la historia del Mesías que había de venir, eran sabios de alguna casta religiosa con
influencia de la filosofía y provenían de Persia, hoy representado por Irán pero no se limita a este
país, sino que incluye a Irak (antes Babilonia), parte de Siria, entre otros. Precisar la ubicación aún
más es otra tarea por su grado de complejidad.

Referencias:
Isaías, Salmos, Job y Mateo (Biblia)

White, Elena G. Exaltad a Jesús

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