El procedimiento usual de diseño de proceso podría ser separado en dos
divisiones principales. La primera implica el diseño real del equipo que se va a construir bajo pedido. La segunda consiste en especificar las condiciones de operación para equipo de fabricación estándar.
Hay diferentes formas de llevar el proceso de diseño, la más común es
establecer las especificaciones del producto, establecer el proceso de manufactura y finalmente validar que todo esto sea repetible y confiable. Esta forma es la más aceptada, ya que se considera que al tener todo claro no habrá sorpresas, especialmente con los costos.
Sin embargo, otra forma de diseñar es por aproximación, a partir de elaborar
una serie de prototipos que se van mejorando conforme se especializan los procesos de manufactura y se va acercando a lo que necesita el cliente. Este proceso implica mucha capacidad de adaptación y de rápida reacción, puede ser una forma adecuada si no se tiene claro qué se desea.
Los procesos los podemos clasificar en:
• Procesos Continuos: son aquellos en donde los productos se fabrican
transfiriendo el material entre los diferentes equipos especializados en la realización de una tarea determinada del proceso. Cada uno de estos equipos opera en un solo estado estable. La producción continua tiene una salida permanente de producto. Podemos ver varios ejemplos, el más común podría ser la fabricación de automóviles en línea. En este caso, se trata de tener una producción continua de automóviles, según la capacidad de la línea puede generar un automóvil cada “x” minutos y la intención es que esto prosiga durante todo el periodo definido para la manufactura.
Otro ejemplo, puede ser la agroindustria, donde la producción de químico es
continua y se espera que no se detenga ya que el arranque puede ser lento y sumamente costoso.
• Procesos Discretos: los productos son elaborados en lotes de producción,
esto es grupos de productos que tienen en común tanto las materias primas con las cuales son fabricados como los históricos de producción.
En un proceso discreto, una cantidad específica de producto es movida como
una unidad (grupo de partes) entre estaciones y cada parte mantiene su única identidad. La salida de un proceso discreto aparece una por una o en cantidades de partes.
En este caso, hay un sinnúmero de ejemplos, ya que están en función del
tamaño de los lotes y la capacidad de maquinaria disponible.
Un ejemplo clásico es cuando la producción es por lotes, como por ejemplo
en un taller de torno. Donde las piezas se hacen por cada lote solicitado y se mueve por las diferentes máquinas disponibles.
• Integración vertical: es el grado en que el sistema de producción o la
instalación del servicio propios de la empresa manejan la cadena de suministro. Cuanto más alto sea el grado en que el sistema de producción de una compañía maneja las materias primas, otros insumos y productos, mayo será el grado de integración vertical.
• Intensidad de capital: es la mezcla de equipo y habilidades humanas que
intervienen en un proceso de producción; cuanto más alto sea el costo relativo del equipo, más grande será la intensidad capital.
• Operación unitaria: parte indivisible de cualquier proceso de
transformación donde hay un intercambio de energía del tipo de físico, de una materia prima en otro producto de características diferentes.
Al definir el proceso, se hace referencia a la tecnología del mismo y este
abarca los siguientes puntos: - Descripción del proceso paso a paso.