El trabajador a lo largo de la historia, no ha sido bien valorado en su dimensión humana,
ni laboral. Su valor como persona y profesional ha dependido de las circunstancias históricas, sociales y políticas de cada país y continente. Evolución del trabajador en la historia de la humanidad El concepto trabajo y trabajador ha ido evolucionado, así vemos que a lo largo de la historia el trabajador se ha encontrado ante diversas circunstancias. Prehistoria. En esta etapa el trabajo era una forma de subsistencia, los hombres se reunían y se organizaban para recolectar, cazar, pescar y subsistir. Para las culturas antiguas el concepto del trabajo y trabajador fue diferente. Así por ejemplo, en Grecia, el trabajo intelectual estaba en manos de unos privilegiados los nobles y el trabajo manual lo realizaban los esclavos y los metecos. En el Imperio Incaico el trabajo está organizado y repartido entre sus habitantes, ya que en la mentalidad de esa civilización el trabajo era considerado como una obligación moral y un deber, como consecuencia, la ociosidad era severamente castigada. Existía un código de conducta con 3 valores que se hacía cumplir: ama sua (no seas ladrón), ama llulla (no seas mentiroso) y ama quella (no seas perezoso). Edad Antigua.(siglo V) En esta época se formaron jerarquías que servían los intereses de los reyes. El trabajo manual lo realizaban los esclavos quienes dependían de sus patronos. Edad Media. (siglo XV) La economía se basaba en la agricultura, cuyas tierras pertenecían a los señores feudales, siendo los campesinos quienes las trabajaban. Edad Moderna (siglo XVIII) La economía inicialmente estaba basada en el trabajo manual, se trabajaba en pequeños talleres. Edad Contemporánea: desde el XIX hasta la actualidad. La humanidad ha experimentado fuertes cambios sociales y conseguido mejoras significativas en la calidad de vida. La Economía Digital, también conocida como “Economía en Internet”, “Nueva Economía” o “Economía Web”, domina la sociedad contemporánea que ofrece nuevas oportunidades a los perfiles digitales. Otro hecho digno a destacar, son las plataformas de economía colaborativa que crecen y ofrecen ventajas a sus usuarios gracias a la: transparencia, fiabilidad y a la facilidad de uso, a través de aplicaciones móviles. La globalización de los mercados permite a las empresas operar a nivel local y global y, al trabajador trabajar en red, desde su casa, conciliar, con un horario flexible y ofrecer sus servicios profesionales a un empresario o emprendedor que decida contratarlo. El cambio empezó con la primera revolución industrial La primera revolución industrial Cuando se inventa la máquina de vapor, con ésta surge la primera revolución industrial. Esta revolución industrial que se inicia en Inglaterra generó una transformación económica, social y tecnológica acabando con siglos de trabajo artesano y manual. Se pasa de una economía agrícola y manual a una economía urbana, con estos cambios empiezan a proliferar las industrias.
El trabajador un elemento más de la producción
En este periodo, los trabajadores que ya eran libres, necesitaban un trabajo para sobrevivir y por ello, buscan empleo en las fábricas. Carlos Marx denuncia que los obreros han pasado a otra forma de explotación donde el trabajo se convierte en mercancía, en valor de cambio; el trabajador entrega su trabajo a cambio de un jornal, sin mayor motivación que la económica. Los trabajos eran monótonos, poco cualificados y los puestos fijos, definidos, de acuerdo a un calendario de producción. Se trabajaba con carencias legislativas, con salarios bajos, con autoritarismo: el patrón y el supervisor daban órdenes que los operarios debían cumplirse con rapidez; el trabajador era un recurso para producir más y mejor. Se trabajaba bajo la creencia que la especialización y la productividad eran los desencadenantes del progreso.
La segunda revolución industrial
La revolución industrial fue avanzando con los inventos sucesivos, mejora de transporte, invención de la imprenta, automóvil, cine, radio, tv, etc. La Segunda Revolución Industrial se desarrolló entre 1870 y mediados del siglo XX.La industrialización sigue imparable USA, EUROPA, ASIA, junto con los avances en los métodos financieros, progresos en la navegación, en la industria pesada. Surgen los sindicatos, organización que reúne a los trabajadores con el fin de defender sus intereses comunes ante los empleadores y los gobiernos, aparecida en el siglo XIX. Una de las reivindicaciones básicas de los trabajadores fue la jornada de ocho horas. Investigadores como Taylor (Administración científica), Elton Mayo, Fayol (teoría de las relaciones humanas) M.Weber (teoría de la burocracia) Maslow (teoría de la motivación) entre otros, dignifican el trabajo y al trabajador, con sus estudios y teorías. Como consecuencia, surgen nuevos métodos de organización del trabajo y se da valor a la motivación del trabajador y al cuidado de las relaciones humanas. La tercera revolución industrial La tercera revolución se da terminada la segunda guerra mundial, ante la escasez de recursos. En este contexto, surge la tecnología y las telecomunicaciones caracterizadas por las investigaciones en microelectrónica y la apuesta por sectores de investigación científica Se inicia el desarrollo de la electrónica con avances en computación y en sistemas operativos. La cuarta revolución industrial Edad contemporánea (siglos XX-XXI) Estamos asistiendo a la cuarta revolución industrial basada en la electrónica e informática para promover una producción automatizada. El concepto trabajo y trabajador han evolucionado tanto que las organizaciones son planas, con apenas mandos, basadas en el trabajo en equipo; los horarios son flexibles, se ofrecen planes de formación y acogida personalizados, la propuesta de valor al empleado pone el foco en la oportunidad que tienen los colaboradores de desarrollarse como personas y profesionales en la empresa. En esta cuarta revolución industrial, la economía tradicional convive con la economía digital, son otros los paradigmas, se tiende a la digitalización de bienes y servicios y a la importancia de la identidad digital. Es la etapa de la revolución tecnológica con la consolidación de Internet y la proliferación de redes sociales, hitos que están generando una economía digital basada en las Tics y en el comercio electrónico. Las tecnologías de la información ofrecen varias ventajas, permiten: la visibilidad de los negocios, competir globalmente, interactuar con clientes, proveedores, empleados, diseñar y participar en proyectos en línea para cocrear y mejorar la eficiencia de los procesos empresariales e incrementar la productividad, a fin de generar mejoras y ahorro en la producción de servicios. Esta nueva economía los robots inteligentes empiezan a invadir las fábricas y éstas optan por reducir su contrataciones. La robótica, el big data, Internet de las cosas, las apps, están originando una segunda transformación empresarial que afecta a ciudadanos, profesionales, entidades y a todos los sectores económicos. Hoy la revolución es tecnológica, caminamos hacia la industria 4.0 y hacia ella avanzan muchos países como Singapur, Finlandia, Alemania. La tecnología sigue cambiando nuestra forma de trabajar, producir y relacionarnos y es utilizada para innovar. Estamos en la era de la innovación y, en el ámbito empresarial, las empresas prósperas seguirán siendo aquellas que innoven. Pero la innovación la realizan las personas quienes deben ser consideradas como el eje del negocio.