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Un átomo es la partícula más pequeña en que un elemento puede ser dividido sin perder
sus propiedades químicas. Cada elemento químico está formado por átomos del mismo
tipo (con la misma estructura electrónica básica), y que no es posible dividir mediante
procesos químicos. Este, también cuenta con una evolución desde su descubrimiento
hasta nuestros días, En el átomo distinguimos dos partes: el núcleo y la corteza. Cada
elemento químico está formado por átomos del mismo tipo (con la misma estructura
electrónica básica), y que no es posible dividir mediante procesos químicos. En el
átomo distinguimos dos partes: el núcleo y la corteza.
Después de pasar por una serie de hipótesis y planteamientos científicos, se dio lugar al
surgimiento de muchos modelos atómicos donde se dará como sugerencia la estructura
atómica. Con el paso de las investigaciones se trata de explicar y entender el cambio de
las propiedades de este; teniendo en cuenta las posturas que se adoptaban a medida que
pasaba el tiempo, proceso al que podemos denominar evolución de los átomos.
La teoría atómica fue de gran importancia para la ciencia, con ello se pretendía
comprender el comportamiento de las sustancias durante los experimentos y asi poder
darles una explicación. Dentro de los modelos atómicos, podemos encontrar que la
concepción del átomo ha cambiado de acuerdo a los descubrimientos realizados en el
campo de la física y la química.
Aristóteles, rechazo la teoría atomista. Sostenía que todo en la tierra estaría constituido
por cuatro elementos (agua, aire, tierra y fuego) y concluyó que los átomos no existían
debido a que no se podían ver.
En 1808, el químico británico John Dalton, definió el átomo como partículas muy
pequeñas, indivisibles y que no se pueden destruir, sostenía que los átomos de un
mismo elemento son iguales entre sí, pero, diferentes a los demás elementos. Descubrió
que los compuestos se formaban al unirse dos átomos de dos o más elementos distintos.
El año de 1897, JJ Thompson, comparó el átomo con un pastel de pasas y postuló que la
materia se compone de dos partes, una negativa y una positiva, estando la parte negativa
(electrones) inmersa en la masa de carga positiva. En 1911, Ernest Rutherford, físico y
químico británico, sostuvo que el átomo se compone de una parte positiva y una
negativa, la parte positiva se centra en el núcleo y los electrones giran alrededor del
núcleo en órbitas circulares o elípticas, presentando un avance al modelo de JJ
Thompson.
Seguido de esto, en 1913, Niels Bohr, comparó el átomo con el sistema solar y postuló
que los electrones se mueven alrededor del núcleo en órbitas bien definidas, cada órbita
tiene una energía asociada, la más externa teniendo mayor energía. Concluyó que los
electrones pueden saltar de una órbita a otra absorbiendo o liberando energía.
Antes de la teoría expuesta por Borh, en1912, Henry Moseley, estableció una relación
entre la longitud de onda de los rayos X emitidos por distintos átomos con su número
atómico. Cuatro años después, Arnold Sommerfeld, postuló que los electrones se
mueven alrededor del núcleo en orbitas elípticas, la excentricidad de la órbita dio lugar
al número cuántico azimutal.
Para concluir, cuando tocamos algo, estamos en contacto con millones de átomos