Está en la página 1de 16

La clasificación de los materiales deportivos

The classification of sports equipment

Adrián Cordero Roales*


Daniel Aguilar Romero*
Manuel Jesús Jiménez Roldán*
Alejandro Pradas Moreno**
acorderoroales@gmail.com

*Diplomado en Magisterio de Educación Física. Universidad de Huelva


Estudiante de 5º cuso de Ciencias de la Actividad Física y el Deporte, Universidad de Sevilla
**Diplomado en Magisterio de Educación Física. Universidad de Córdoba
Estudiante de 5º cuso de Ciencias de la Actividad Física y el Deporte, Universidad de Sevilla
(España)

Resumen
La clasificación de los materiales y recursos físicos-deportivos, ha sufrido numerosos cambios durante las últimas décadas, el gran
número de clasificaciones existentes y el desacuerdo entre los autores que la componen ha dado lugar a una enorme confusión. Las
discrepancias en la diferenciación de materiales y recursos, el desconocimiento de los autores sobre los antecedentes de otras
clasificaciones estableciendo así sus propios criterios, la clasificación errónea o no acertada de diversos materiales son algunas de las
dificultades que se presentan a la hora de elaborar una clasificación de recursos materiales, por lo que el principal objetivo de este
estudio es elaborar una clasificación de los materiales físicos-deportivos partiendo de las clasificaciones ya elaboradas intentando
unificarlas y sintetizarlas en una. Palabras clave: Clasificaciones. Materiales. Educación Física.

Abstract

The classification of material and physical resources-sports, has undergone many changes over the
past decades, the large number of existing classifications and disagreement among the authors who
compose it has led to enormous confusion. The discrepancies in the differentiation of materials and
resources, ignorance of the authors about the history of other classifications and establishing their
own criteria, misclassification successful or not different materials are some of the difficulties that
arise when developing a classification of material, so that the main objective of this study is to develop
a classification of physical materials-based sports classifications developed and trying to unify and
synthesize them into one. Keywords: Classifications. Materials. Physical Education.

EFDeportes.com, Revista Digital. Buenos Aires, Año 17, Nº 167, Abril de 2012. http://www.efdeportes.com/

Introducción

La clasificación de los materiales y recursos físicos-deportivos, han sufrido numerosas


diversificaciones durante las últimas décadas, esta tarea de categorización ha sido siempre
una tarea dificultosa, lo cual ha derivado en una constante confusión. Esto es debido al gran
número de clasificaciones existentes, diferenciadas una de otras por pequeños matices que
dan lugar al desconcierto y al error en denominar un material como recurso, un recurso
como un material o simplemente la incorrecta categorización de estos.

Por ello se hace necesario, en primer lugar, establecer las discrepancias entre materiales
curriculares y recursos de educación física y deportiva. Blázquez (1994) ya establece las
diferencias, definiendo materiales curriculares como aquellos que han sido elaborados con
una finalidad explícita, mientras que los recursos didácticos toman su verdadero valor
pedagógico en el momento en el que los docentes deciden, desde la metodología,
integrarlos en el currículo.

Pero el gran problema no es el diferenciar estos dos conceptos, si no que se encuentra en


el dónde ubicarlos dentro de una clasificación. Existen numerosas clasificaciones, cada una
realizada bajo los criterios de sus autores y en base, unas a la función de estos materiales
y recursos, otras al material con el cual han sido construidas, o al empleo que el profesor,
docente, monitor le quiera dar.

Autores como Blández (1995) diferencia solo entre específicos y no específicos basándose
esta clasificación en aspectos ergonómicos, es decir, según la función para la cual fue
fabricado. Otros autores como Cánovas y Martínez (2010) realizan su clasificación según la
procedencia del material, bien si ha sido fabricado, reutilizado, extraído del hogar, de la
naturaleza, etc. Galera (1996) realiza una clasificación según el peso y la movilidad de dichos
materiales y recursos, por ello, lo divide en tres grupos: fijos, móvil pesados, móvil ligeros,
seguidamente expone tres categorías más, donde en alguna de ella se pueden situar algún
grupo anterior, estos grupos son: materiales deportes en equipo; balones, pelotas y discos
voladores y por último auxiliares. Díaz (1996) centrándose en el contexto educativo, añade
otro tipo de material, “material complementario” que incluye aquel material que se utiliza
para la docencia de la educación física, pero que complementa a las clasificaciones
anteriores en la consecución de los objetivos (ropa deportiva, al impreso, al audiovisual).

Esto se complica aún más cuando entre los autores existe desacuerdo y cada uno se centra
en realizar su clasificación sin tener en cuenta, en muchos casos, lo ya elaborado. Por lo
que se crea la contradicción, y como consecuencia a esto, la confusión como por ejemplo
ocurre en la definición y posición dentro de las clasificaciones de los materiales y recursos
no convencionales y los alternativos. Para Rivadeneyra (2001) los materiales no
convencionales son aquellos que no ha sido utilizado tradicionalmente en actividades físicas
- deportivas. Mientras que los materiales alternativos son cualquier objeto, fácil de conseguir
y de escaso o nulo coste económico, que no habiendo sido diseñado para su aplicación
directa a la actividad física, puede servir, modificado o no, para facilitar el proceso de
enseñanza aprendizaje. Esto fue apoyado por Martín (2007) quien ayudándose de
clasificaciones anteriores de Méndez (2003), Jardí y Rius (2004) apoya a Rivadeneyra
realizando una clasificación del material dividida en dos grupos: específico y alternativo,
definiéndolo como aquel material que, a pesar de no haber sido diseñado específicamente
para la práctica físico-deportiva, puede resultar muy útil en el proceso de enseñanza-
aprendizaje.

Esto fue refutado por Carrasco (2010) ya que en su diversificación sitúa al material
alternativo dentro del no convencional, definiendo el material alterativo como aquel que solo
sustituye a otro de carácter específico o convencional, siendo los materiales no
convencionales aquellos que proveniente de cualquier ámbito de la vida, usamos bien en su
forma original, bien modificado o transformado para un objetivo que no es el
correspondiente.

Autores como Parcerisa (1996) consideran que los materiales ayudan a planificar, desarrollar
y evaluar el curriculum. En áreas como la educación física los materiales pueden tener una
especial importancia por las características específicas de esta asignatura. Cuando el niño
empieza a descubrir el mundo lo hace manipulando los objetos, interactuando con ellos.

Por lo tanto, el objetivo de este estudio es elaborar una clasificación de los materiales físicos-
deportivos partiendo de las clasificaciones ya elaboradas intentando unificarlas y
sintetizarlas en una.

Métodos y recursos

Métodos

En este proyecto se ha considerado la posibilidad de establecer una nueva clasificación de


materiales deportivos adaptada a las circunstancias actuales que rodean las aulas de
educación física. Para ello, se ha realizado una búsqueda de artículos en diferentes medios
sobre la clasificación de los material en educación física, partiendo de clasificaciones
generales en las que destacan los aspectos más sociológicos (Zapico, 1994) de las mismas,
hasta clasificaciones más específicas, en las que se categoriza el material por tipo, peso,
deporte…etc. de autores como Blández (1995), Velázquez (1995), Paredes Labra (1998),
Rius y Jardí (1998 y 2004, Camerino (2000), Rivendaya (2001), Sanchez y Fernández
(2003), Méndez (2003), Martín (2007), Monroy (2008).

En primer lugar se ha realizado una puesta en común sobre los artículos encontrados que
hacen referencia al tema a tratar, para posteriormente establecer una clasificación de
trabajos que podían tener relevancia en nuestro artículo, aceptándose como válidos aquellos
artículos que estableciesen cualquier tipo de clasificación del material deportivo en las aulas
de educación física.

Tras la selección de artículos se procedió a la recogida de datos de los mismos, cotizando


posteriormente lo extraído de cada artículo entre los miembros del grupo. Se analizó cada
artículo realizando así una descripción explicativa de cada clasificación según su formulación,
causas y aspectos a destacar.

En última instancia se ha procedido a la lectura y corrección de las descripciones de los


artículos seleccionados, para realizar, en último lugar, un análisis en común sobre las
diferentes clasificaciones establecidas por los miembros del grupo, aunándolas en una
propia y obteniendo así una clasificación de materiales deportivos acorde a los aspectos más
relevantes que rodean las aulas de educación física.
Recursos

Artículos científico-deportivos basados en la clasificación de los recursos materiales en


educación física buscados por internet en los distintos buscadores: Dialnet, PubMed, Wok,
recursos buscados en la biblioteca de la Universidad de Sevilla y apuntes de la asignatura
Deporte y Recreación impartida en la Licenciatura de Ciencias de la Actividad Física y el
Deporte por la Universidad de Sevilla.

Análisis de las clasificaciones

Consejo Superior de Deportes (1981)

1. Equipo de aparatos empotrados (colgados o fijos): espalderas, mástiles, canastas.


2. Equipo de aparatos transportables: banco sueco, barra fija, colchonetas, vallas.
3. Equipo de aparatos manuales: picas, combas, pelotas, balones deportivos.
4. Equipo material complementario: red baloncesto, red voleibol, cinta métrica.
5. Equipo de test EF: cronómetro, báscula, flexómetro.

El Consejo Superior de Deportes en el año 1981 crea una clasificación para los materiales
físicos–deportivo en el ámbito escolar. Este los va a dividir en equipo de aparatos
empotrados, los cuales pueden ser colgados o fijos, equipo de aparatos transportables,
equipo de aparatos manuales, de material complementario y de test de EF.

Se observa en esta clasificación, que debido al año en que se creó, no hablan de materiales
convencionales, no convencionales ni materiales auxiliares por lo que esta clasificación
queda anticuada. Se aprecia que en las clasificaciones propuestas por diferentes autores
años más tarde hablan de lo mismo pero con denominaciones distintas.

Cuando Carrasco (2010) hablan de material auxiliar el Consejo Superior de Deportes lo


clasifica como equipo de material complementario y equipo de test de EF; y cuando hablan
de material convencional el consejo superior de deportes los clasifica en equipo de aparatos
empotrados, transportables y manuales. No hace distinción alguna entre materiales
convencionales, no convencionales o alternativos.

Zapico (1994)
Zapico (1994) va a diferenciar los materiales en tradicionales y nuevos. Los tradicionales
diferenciados en ligeros y pesados, diferenciación subjetiva realizada dependiendo del peso
del material; y los nuevos los diversifica en psicomotricidad, alternativos y no
convencionales. Hace una mayor distinción a los materiales denominados como nuevos ya
que es una época de cambios y se emprende con algo que como él denomina es “nuevo”
aunque esta clasificación quede incompleta debido a que no detalla ni explica estos nuevos
conceptos. Es la primera clasificación en denominar el material como alternativo o no
convencional, tales términos tienen una especial importancia en la actualidad debida a que
son materiales donde existe una interacción constante entre los alumnos y éstos, donde el
tiempo de compromiso motor se multiplica.

Esta clasificación se ha quedado algo anticuada ya que es del año 1994, y además su
incompleta explicación y ejemplificación lo que la hace una clasificación bastante pobre.

Blázquez (1995)

Materiales específicos del área de educación física

 Gimnasios
 Patios de recreo
 Deportes
 Psicomotricidad

Materiales no específicos del área de educación física

 Naturales
 Reciclados
 Construcción propia
 Comerciales

Esta clasificación se diferencia en dos bloques, en el primero Blázquez hace referencia a los
materiales de educación física en sí, pero sin concretar en ninguno de los sub-apartados,
quedando poco completo.

En cuanto al segundo bloque, materiales no específicos del área de educación física, el autor
hace una clasificación en la lo expone en un marco distinto al material de educación física.
Como son los materiales reciclados, comerciales, de fabricación propia. Este tipo de
materiales son importantes para esta área de conocimiento, por lo que este tipo de recursos
tendrían que estar en un apartado dentro del área de educación física con una mención más
global con sus respectivos sub-apartados.

Blández (1995)

Materiales específicos
 Gimnasio, los del patio de recreo, los de deporte y los de
Psicomotricidad.

Materiales no específicos

Los naturales, los reciclados (domésticos e industriales), los de fabricación propia y los
comerciales. Aquí es donde estarían incluidos los materiales alternativos construidos, como
pueden ser: las bolas de malabares hechas con globos y arroz, las indiacas hechas con papel
y bolsas de plástico, los zancos hechos con latas y cuerda, etc.

Blández (1995) centra su clasificación principalmente en una de otro autor con un enfoque
más de dependencia económica, donde tendría que depender de los fondos económicos del
departamento de educación física dentro del centro escolar para ese año lectivo. Los
materiales serian específicos del área de educación física y los materiales referentes a la
propia creación debido a los medios escasos del departamento.

Velázquez (1995)

Material no convencional

 Construido por alumnos.


 Tomado de la vida cotidiana.
 De desecho.
 Alternativo.
 Facilitador de la enseñanza.

Material convencional

 Pequeño material.
 Gran material.
 Convencional usado de forma no convencional

Este autor realiza una clasificación del material no convencional, explicando y desarrollando
lo que Zapico (1994) solo nombra. Dentro del material no convencional, este autor hace
una distinción distinta a la clasificación propuesta por Blández (1995). Blández habla de
material reciclado y dentro de este hace otra clasificación, por su parte Velázquez (1995)
habla de material de desecho pero no los subdivide en ningún otro sino que lo nombra de
manera más global. Por otra parte, este autor sí que distingue dentro del material no
convencional al material alternativo y Blández (1995) no lo hace.

Referido al material convencional Velázquez (1995) lo subdivide en pequeño material, gran


material y convencional usado de forma no convencional. Este autor también se diferencia
con Zapico (1994) en esto, ya que él lo nombra llamándolo material tradicional en vez de
convencional. Esta clasificación está más actualizada debido a que nombra y subdivide el
material convencional y no convencional pero dentro de los materiales no convencionales,
los materiales de desecho deberían de venir subdivididos como la clasificación de Blández
(1995) para que fuese más completa.

Paredes Labra (1998)

En esta clasificación el autor elabora una clasificación de los materiales didácticos específicos
del área de Educación Física, para ello y antes de comenzar se fijó unos criterios de
clasificación de los cuales partió apara elaborar una completa clasificación.

Para comenzar, se realiza una completa clasificación de las instalaciones deportivas de


donde salieron los siguientes apartados: sala o espacio cubierto, pistas polideportivas, zona
de juegos, vestuarios, almacén deportivo, enfermería, etc. Concluye este apartado
mencionando la necesidad de algunas de las instalaciones en un centro escolar.

Posteriormente realiza una clasificación del material deportivo, donde coincide en algunos
apartados con otros autores, algunos de estos son tenidos en cuenta por la mayoría de
autores, aunque aquí aparecen algunos más. Los apartados mencionados por este autor
son: material no convencional, material convencional, material convencional utilizado de
forma no convencional y material fungible y de otro tipo, también contempla un apartado
donde tiene en cuenta las características e importancia del material.

Los siguientes puntos que trata en esta clasificación son más escuetos y con menos
importancia que los anteriores donde se habla sobre el equipamiento de los alumnos,
material de soporte del profesor, material impreso, material audiovisual e informático y
material complementario.

Esta clasificación realizada por Joaquín Paredes Labra para su tesis doctoral es un buen
manual de partida para analizar lo existente hasta ese año. Se puede extraer, de su gran
extensión, que se ha investigado mucho sobre el tema de los materiales en el ámbito
específico de la educación física.

Rius & Jardí (1998)

Se clasifican este material en dos apartados:

 Material específico de Educación Física con uso distinto para el que fue
diseñado. Ejemplo: un saltómetro como una portería.
 Materiales de usos ajenos al ámbito de las actividades motrices. Ejemplo:
cintas elásticas, listones o pelotas pequeñas.

Los autores hacen una clasificación diferenciando entre los materiales referentes a la
educación física con una utilidad distinta a la de su fabricación, y otro apartado donde hace
referencia a los materiales ajenos a las actividades motrices, quedando una clasificación
escasa y algo cuestionable en cuanto a los materiales ajenos a las actividades motrices, ya
que necesitaría un planteamiento algo menos general, concretizando más en la cuestión,
puesto que perfectamente las cintas elásticas, pelotas pequeñas, etc., pueden desarrollar
actividades con implicaciones motrices.

Camerino Foguet (2000)

Esta clasificación está motivada según la utilidad de los materiales convencionales, en un


determinado momento y una determinada utilidad de los mismos.

Como se aprecia en la Figura 1, es una clasificación algo escueta y desordenada, ya que


dentro de esta clasificación, hay muchos materiales de utilidad alternativa, faltando otro tipo
de clasificación dentro de la misma donde se llegue a concretar algo más.

Figura 1. Clasificación y ejemplos de Camerino (2000)

Rivadeneyra (2001)

Esta autora basa su clasificación en dos autores anteriores como son Galera y Díaz (1996).

En una primera parte Galera (1996) se comienza haciendo una clasificación del material en
seis grupos, atendiendo mayoritariamente a la gestión de estos. La clasificación se establece
en: aparatos empotrados, colgados y fijos; material móvil pesado; material móvil ligero;
material de deporte de equipo; balones, pelotas y discos voladores; material auxiliar.

La segunda clasificación de Díaz (1996) se contextualiza más en un entorno educativo, en


esta se incluye el material complementario: equipamiento de alumnos, material de soporte
al profesor, material impreso y material audiovisual e informático. Como se aprecia, se ha
realizado una reunión de dos puntos de vista para la creación de una nueva clasificación
aunando por una parte una clasificación meramente gestional con otra más directamente
enfocada a la educación en sí.
También se incluye unos criterios de selección de material, aportados por Galera (1996).
Estos criterios que apunta Galera (1996) son muy importantes a la hora de seleccionar algún
tipo de material para el centro. Posteriormente se recogen pinceladas sobre el tipo de
material y la cantidad. Esta opinión de Díaz (1996) sigue unas pautas lógicas para la correcta
ejecución de una clase de E.F.

Como punto final se realiza una separación entre las distintas concepciones que se pueden
dar. Se categorizan según Díaz (1996) en dos grupos: de concepción neutra y de concepción
participativa y emancipadora. En el primer grupo el material solo es utilizado para aquello
que está diseñado, con lo que el profesor solo reproduce la utilización del material. Sin
embargo el segundo grupo es más amplio, permitiendo dar distintos usos a este, mejorando
la actividad docente.

Como se puede concluir, se ha realizado una clasificación del material de forma escalonada,
primero focalizándola hacia la gestión, después en un contexto educativo y por último, y
que ya se saldría un poco de las clasificaciones, serían criterios de selección del material.

Sánchez & Fernández, coords. (2003)

Los materiales no convencionales son desarrollados, explicados y subdivididos en:

Naturales: en los que estarían las hojas, ramas, piedras, castañas.

Reciclados: Dentro de este apartado podemos subdividirlos en:

 Los domésticos (procedentes de la casa o del colegio): Papeles, envases de


yogurt, botellas de plástico, receptores (envases de suavizante), tapas,
chapas, plásticos.
 Los industriales (procedentes de tiendas, grandes almacenes,...): cajas de
cartón, neumáticos, sacos, tubos de cartón; también podíamos incluir los
tubos de PVC.
 Los comerciales (se compran en las tiendas que no sea deportiva): gomas
elásticas, cinta aislante, cuerdas, rollos de papel higiénico.
 Los de fabricación propia (los objetos que elaboramos a partir de objetos de
desecho, o bien comprando la materia prima): zancos, pelotas, instrumentos
musicales, siluetas, tragabolas.

Un año más tarde de la clasificación propuesta por Zapico (1995), sale publicado una
clasificación sobre los materiales no convencionales. Esta clasificación engloba todo excepto
que no nombra, ni define en ningún caso el material alternativo. La clasificación se va a
diferenciar en material natural y material reciclado, y dentro de éste concreta más y se
dividen en domésticos, industriales, comerciales y de fabricación propia. Es posible apreciar
un especial hincapié en los materiales de desecho por lo que se ve que quieren participar
en la mejora del medio ambiente y hacer ver a los alumnos/as la importancia de éste y que
con un poco de creatividad un simple envase, botella, cajas, etc..., se pueden realizar
muchísimos materiales con los que poder jugar.

Martín (2007)

Material específico

Material diseñado para el uso concreto en las clases de educación física o para la práctica
deportiva. La industrialización y la tecnología han generado infinidad artículos físico-
deportivos que dan respuesta a la especificidad de muchos de los deportes actuales.
Podemos conseguirlos en tiendas deportivas especializadas en Educación Física. Según
Blández (1998) podemos clasificar este material en material de gimnasio, de patio o recreo,
deportivo y de psicomotricidad.

Material alternativo

En este grupo queda englobado todo aquel material que, a pesar de no haber sido diseñado
específicamente para la práctica físico-deportiva, puede resultar muy útil en el proceso de
enseñanza-aprendizaje.

Estos autores nos muestran una clasificación en donde apuestan por unos materiales
específicos, alternativos y reciclados o de desecho, dentro de los materiales específicos hay
que destacar a Blández (1998), quien a su vez divide este grupo en materiales de gimnasio,
de patio o recreo, deportivo y de psicomotricidad.

Esta aportación a este grupo es bastante importante ya que clarifica aún más los diferentes
materiales que podemos encontrar, y completa la ya existente de los autores Méndez, Jardín
y Rius y Martín, aunque se podría hacer una clasificación a parte de los materiales específicos
que englobe a estos.

Con respecto a los materiales reciclados esto autores hacen una sub-clasificación, donde
están los materiales naturales palos, arena, piedras, legumbres, etc. y de origen artificial
latas, envases, neumáticos, tubos, etc. En este sentido queda muy ajustado este enfoque.

Monroy Antón (2008)

Materiales auxiliares

 Materiales de control de resultados: aparte de los recogidos en las


normas federativas, objetos tan simples como cronómetros,
marcadores, cintas métricas, pesos y medidas, bolígrafos, libros de
Actas, ordenadores, etc., son imprescindibles en muchas
competiciones.
 Materiales de seguridad: candados para cerrar las jaulas con el
material, chalecos reflectantes para competiciones nocturnas o que
así lo requieran, banderines señalizadores, cintas limitadoras de
sectores con paso prohibido.
 Avituallamiento líquido y sólido para los deportistas.
 Materiales para la sala de prensa: hojas de notas, bolígrafos,
baterías, faxes, ordenadores, enchufes, alargadores, teléfonos
móviles, etc.
 Materiales médicos y sanitarios: botiquín de primeros auxilios,
utensilios para tomas de muestras antidopaje, etc.

Existen una serie de materiales que no son obligatorios pero son indispensables para el
desarrollo de la competición que habrán de tenerse en cuenta a la hora de planificarla, son
lo que llamamos materiales auxiliares. Estos materiales se hacen imprescindibles aunque
como he dicho antes no son obligatorios, pero se necesitan de ellos para la realización de
la competición donde se debe llevar todo de forma más estricta.

Estos materiales auxiliares los divide el autor en materiales de control de resultados,


materiales de seguridad, avituallamiento líquido y sólido, materiales para la sala de prensa
y materiales médicos y sanitarios.

A la hora de competir todos estos materiales tienen una función específica ya que por
ejemplo, necesitamos de los marcadores para saber cómo va un partido, el cronómetro
para el tiempo de juego (materiales de control de resultados); botiquín de primeros
auxilios para heridas de algún tipo (materiales médicos y sanitarios); víveres líquidos y
sólidos para las personas que participen en una competición, etc.

Puede vislumbrarse en esta clasificación que a pesar de estar bien diversificar, no explica
dónde van situados estos materiales dentro de una clasificación, es decir, si pertenecen a
un grupo como pudiera ser materiales convencionales, alternativo, etcétera o son un
grupo en sí mismo como lo son los materiales antes nombrados.

Conclusión

Tras analizar y revisar todas las clasificaciones podemos concluir con la idea de que las
clasificaciones están realizadas en función de lo que el autor/a considere, sin tener en cuenta
lo ya escrito o publicado. Destacar la no aclaración, en muchos de los casos, del parámetro
en base al cual fue diseñada, es decir, en función a qué se diseñó, como ejemplo la
diversificación elaborada por el Consejo Superior de Deporte (1981) donde realizan su
clasificación en función de la movilidad de los materiales, mientras que Blázquez (1995) la
realiza en función de si el material es específico o no del área de educación física.

Nuestra clasificación está elaborada en función del uso que le demos a cualquier material,
pues si usamos un material para soportar libros, indistintamente del material que fuese,
éste sería un soporta libros o como quiera llamarse, por ello, creemos de vital importancia
catalogar un material según el uso que se le dé, esto supone que a priori no podamos decir
qué clase de material es uno u otro, pudiendo ser, en distintos momentos, una clase de
material u otro.

La clasificación propuesta consta de cuatro bloques fundamentales, los cuales son: material
convencional, material no convencional, material alternativo y material auxiliar.

Definiendo el material convencional como aquel material usado para la actividad física o
deportiva para el cual fue diseñado y fabricado, como ejemplo si usamos un balón de fútbol
para jugar al fútbol este balón se denominará material convencional.

El material no convencional como aquel que usamos en una actividad física o deportiva
distinta a la que por fabricación, tradición, diseño y reglamentación usaríamos. Un ejemplo
sería el jugar al baloncesto con un balón de fútbol, el balón de fútbol sería no convencional
ya que lo estamos usando en un deporte para el cual no fue fabricado.

El material alternativo lo definimos como aquel material que no siendo fabricado, ni diseñado
para la realización de actividades físicas o deportivas, lo utilizamos para este fin. Por ejemplo
una mesa sería un material alternativo si esta es usada como portería.

Por último, definimos el material auxiliar como aquel que nos ayuda a la realización de la
actividad física o deportiva. Dentro de este apartado encontramos una subdivisión realizada
por Monroy (2008):

 Materiales de control de resultados: aparte de los recogidos en las normas


federativas, objetos tan simples como cronómetros, marcadores, cintas métricas,
pesos y medidas, bolígrafos, libros de actas, ordenadores, etc., son imprescindibles
en muchas competiciones.
 Materiales de seguridad: candados para cerrar las jaulas con el material, chalecos
reflectantes para competiciones nocturnas o que así lo requieran, banderines
señalizadores, cintas limitadoras de sectores con paso prohibido.
 Avituallamiento líquido y sólido para los deportistas.
 Materiales para la sala de prensa: hojas de notas, bolígrafos, baterías, faxes,
ordenadores, enchufes, alargadores, teléfonos móviles, etc.
 Materiales médicos y sanitarios: botiquín de primeros auxilios, utensilios para tomas
de muestras antidopaje, etc.
A su vez, y para diversificar aun poco más, hemos añadido en cada uno de estos cuatro
bloques una subdivisión en función de la fabricación del material. Esta subdivisión es:

 Fabricación propia: Cuando el material ha sido fabricado por nosotros o por la propia
persona que lo usa.
 Reciclado: Cuando la fabricación del material, bien por parte de la persona que lo
usa o bien por una industria, son confeccionados con material reciclado.
 Comercial: Cuando el material es comprado en tiendas, siendo producido por
industrias.

Bien es cierto, como ya hemos comentado, que un mismo material en dos situaciones
distintas pueda ser dos clases de materiales diferentes, como ejemplo claro si usamos una
pelota de tenis para jugar al fútbol, esta sería no convencional, pero si la usamos para jugar
al tenis cambiaría y sería convencional.

Tradicionalmente se ha usado el material alternativo, como aquel que es más novedoso o


que menos se ha empleado en las actividades físicas o deportivas. Esto induce en muchos
casos al error, ya que, las indiacas han sido consideradas como alternativo cuando sus
primeros usos datan de 1970.

Por todo ello hemos considerado que el material alternativo debe ser aquel que empleamos
para la actividad física o deportiva pero que no fue diseñado o fabricado para ello.

Consideramos un acierto el considerar a los materiales deportivos por su uso, esta es una
clasificación novedosa, nunca realizada antes, que intenta aclarar y despejar todas las
confusiones y errores que producen las clasificaciones elaboradas con anterioridad.

Discusión

Los datos recogidos en el proyecto de revisión nos dan a conocer la gran diversidad que se
encuentra hoy día en cuanto al tipo y criterios de clasificación de los materiales de educación
física.

En este trabajo se ha llevado a cabo una búsqueda de clasificaciones que van desde el año
1981 hasta el año 2008. Estas muestran la realidad de los materiales de educación física,
su utilidad en la práctica, y como cada autor le da un enfoque diferente dependiendo de su
criterio profesional y su experiencia docente.

Se han encontrado multitud de tipos y autores como CSD (1981), Zapico (1994), Blázquez
(1995), Velázquez (1995), Labra (1998), Rius y Jardí (1998), Camerino (2000), Rivendaya
(2001), Sánchez y Fernández(2003), Méndez (2003), Martín (2007), Monroy (2008

Después de la búsqueda realizada, se han hallado diversos problemas a la hora de entender


el punto de vista que los autores querían transmitir en sus artículos, dificultando su análisis
y comprensión en muchos casos. Entre estos problemas habría que destacar, Blázquez
(1995) y Blández (1995), la confusión que generaba algunas clasificaciones donde sus
características y composición eran casi idénticas, y también algunos apartados donde se
encontraban materiales que no se especificaba su ubicación, función u origen.

Un problema para la realización de este proyecto de revisión fueron las limitaciones de


artículos publicados a día de hoy. Tras realizar búsquedas en las principales revistas
científicas y usando los recursos online de estas no se logran hallar mucha variedad sobre
este tema. Las clasificaciones no se ajustan muchas a nuestro ámbito apareciendo
clasificaciones donde el material auxiliar estaba relacionado con la competición, omitiendo
el ámbito escolar Monroy Antón (2008).

La búsqueda de artículos en inglés no obtuvo mucho resultado, la mayoría de los artículos


que aparecían hablaban de clasificaciones que no tenían nada que ver con nuestro trabajo
como pueden ser clasificaciones de rocas, plásticos, etc. Por otra parte, una vez realizada
la búsqueda y su posterior análisis, se procedió a la realización de una clasificación propia,
que parte de la experiencia de este trabajo y con objetivo de clarificar el ámbito de las
multitudes clasificaciones de los materiales de educación física.

Bibliografía

 Area, M. & cols. (2010). Un análisis de las actividades didácticas con tic en aulas de
educación secundaria. Revista de Medios y Educación, 38, 187-199.
 Ballesteros, F. & Cepero, M. (2003). El amigo rocódromo en la escuela (I).
Creación y pragmatización del rocódromo en el área de educación física en
primaria. EFDeportes.com, Revista Digital. Buenos Aires,
63. http://www.efdeportes.com/efd63/rocod.htm
 Blanco, M. & Sáenz-López, P. (2009). Elaboración y valoración de materiales para
educación física en primaria. Wanceulen, 5, 139-145.
 Camerino, O. (2000). Aportaciones del deporte recreativo. En Fuentes García, JP. y
Macías García, M. (Coordinadores), Área de recreación deportiva. I Congreso de la
Asociación Española de Ciencias del Deporte, Cáceres, España, Marzo.
 Cánovas, J.M. & Martínez, V. (2010). La utilización de materiales alternativos en el
área de Educación Física. EFDeportes.com, Revista Digital. Buenos Aires,
151. http://www.efdeportes.com/efd151/materiales-alternativos-en-educacion-
fisica.htm
 Dols, J. (2005). Reciclaje y materiales para la educación física en la escuela
rural. EFDeportes.com, Revista Digital. Buenos Aires,
87. http://www.efdeportes.com/efd87/rural.htm
 Fernández, J. (1998). Los materiales didácticos en educación física. Escuela
Abierta, I, 223-248.
 Fernández, R. (2010). Juegos innovadores con material alternativo en el área de
educación física. EmasF, 4, 5-18.
 Flynn, B. & others. (1985). Planning facilities for athletics, physical education, and
recreation. Florida: American Alliance for Health, Physical Education, Recreation
and Dance.
 García, E. (2001). Recreación de materiales y materialización espaciotemporal de la
recreación física. Manuscrito no publicado, Universidad de Murcia, Murcia, España.
 Madrid, J. (2005). Espacio y materiales no convencionales una experiencia en la
ESO. Retos: Nuevas tendencias en Educación Física, Deporte y Recreación, 7, 19-
25.
 Martínez, A & Hermosilla, J. (2010). El blog como herramienta didáctica en el
espacio europeo de educación superior. Revista de Medios y Educación, 38, 165-
175.
 Méndez-Giménez, A & Fernández-Río, J. (2011). Análisis y modificación de los
juegos y deportes tradicionales para su adecuada aplicación en el ámbito
educativo. Retos: Nuevas tendencias en Educación Física, Deporte y Recreación,
19, 54-58.
 Muñoz, D. (2008). Construcción de material alternativo en Educación
Física. EFDeportes.com, Revista Digital. Buenos Aires,
124. http://www.efdeportes.com/efd124/construccion-de-material-alternativo-en-
educacion-fisica.htm
 Muñoz, J. (1993). Posibilidades de aplicación didáctica de los materiales y recursos
de Educación Física en Educación Primaria. EFDeportes.com, Revista Digital.
Buenos Aires, 65. http://www.efdeportes.com/efd65/material.htm
 Paredes, J. (1998). Análisis etnográfico de los usos de recursos y materiales
didácticos en educación primaria. Estudio de los casos de dos centros. Tesis
doctoral publicada, Universidad Complutense de Madrid, Madrid, España.
 Rivadeneyra, M. (2001). Selección y optimización de recursos materiales
favorecedores del desarrollo en la Educación Física. EFDeportes.com, Revista
Digital. Buenos Aires, 35. http://www.efdeportes.com/efd35/recursos.htm
 Shah, S. (2000). Sources and Patterns of Innovation in a Consumer Products Field:
Innovations in Sporting Equipment. Massachusetts: Institute of Technology/Sloan
School of Management.

También podría gustarte