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Didáctica museográfica

Inicialmente, la guía comunica la finalidad del recorrido: forjar una identidad en los
visitantes. No más de un estudiante expresó su sorpresa al contemplar el edificio en
donde de alberga el memorial.
Antes de iniciar el recorrido, la guía comenzó a preguntarles el motivo por el que los
estudiantes estaban ahí. Uno de ellos respondió, de manera inmediata, que el motivo
era "conocer la historia del 68. Al preguntarle la guía por qué le interesaba conocer la
historia del 68, el estudiante recalcó "porque en el 68 murieron muchos estudiantes".
De modo que la institución, al plantearse como objetivo forjar una identidad en
aquéllos que visiten el museo, los visitantes –estudiantes de secundaria, en este
caso- acceden al objetivo del memorial en la medida en la que parten de una idea
preconcebida acerca del tema: la muerte de muchos estudiantes. Por lo tanto, el
hecho de que los visitantes partan de una motivación, que es esencialmente la muerte
de muchos estudiantes, éste constituirá el elemento que guíe su impresión y
comprensión de lo que se les relatará.
De tal modo, la guía mencionó que el movimiento del 68 que pretendía explicar a
través del recorrido lo insertaría dentro de algunos temas concretos, que son: a) las
marchas y; b) la contracultura.
Para la comprensión del movimiento estudiantil durante el 68, la guía ofrece un
panorama general del contexto cultural en el que dicho movimiento se encontraba:
las décadas entre los 50's y los 60's. Así, se llega al tema de la revolución sexual. La
guía les pregunta si saben qué son los psicotrópicos y el LSD, a lo que un estudiante
se limitó a responder que era "una droga". Estos referentes los utilizó para explicarles
que, dado que en aquéllas décadas los jóvenes tendían a consumir estas sustancias,
lo que la guía pretendía era convencer a los estudiantes de secundaria de que, el
hecho de que el presidente Ordaz asociara el uso sustancias psicotrópicas con
jóvenes constituía un elemento para repudiarlos.
De esta manera, la guía comenzó a hablarles sobre el caso mexicano durante estas
décadas: el milagro mexicano y el presidente Gustavo Díaz Ordaz. Comenzó la guía
hablándoles de la figura del presidente: "Él hacía ver que México era un país
avanzado […] estabilizado. De hecho, sobre el edificio que ustedes observaron al
entrar, su construcción fue parte del llamado milagro mexicano".
Al hablarles la guía sobre el contexto cultural en el que el movimiento se hallaba, noté
que había una intención precisa detrás de ello: mostrar que el sentido del movimiento
residía en una liberación, es decir, que los jóvenes de estas décadas pretendían hacer
una liberación que desencadenara en una ruptura con las convenciones que, hasta
ese momento, dejaban de ser vigentes. Esto queda ejemplificado cuando la guía hace
mención de una tribu urbana que surgió precisamente en esas décadas: los hippies.
La guía explicó que esta tribu poseía la característica de que rompía con las
convenciones de su pasado, o en los términos en los que ella lo dijo, "rompieron con
su cultura pasada". De tal manera, es en esos términos en los que la guía
conceptualizó a la contracultura.
No obstante, este sentido de liberación en la explicación de la guía se va
transformando a causa de los hechos que relató: la puesta en práctica de estas ideas
por parte de los estudiantes mexicanos involucrados en el movimiento del 68 tuvo sus
consecuencias. Concretamente, la guía afirmó: "Al presidente no le caían bien los
estudiantes porque eran revoltosos (ello a causa de que estaban involucrados en las
marchas) y porque consumían drogas. Además el gobierno no los quería porque estos
chavos estaban bien informados".
Posteriormente, la guía pasó a explicarles algunas de las fotografías en las que los
estudiantes del movimiento fueron violentados: fue aquí en donde los estudiantes de
secundaria tuvieron una atención particular hacia el discurso del museo.
Descripción del 2 octubre
Después de hacer un recuento de las marchas que antecedieron al mitin del 2 de
octubre, la guía coloca a este último hecho como el culminante tras el período de
meses que duraron las marchas de los estudiantes. Después de relatar que todos los
estudiantes -tanto los del IPN como los de la UNAM- hicieron acto de convocatoria en
la Plaza de las Tres Culturas, la guía utilizó un recurso diferente al oral para continuar
su explicación: a modo de efecto de realidad, se les invita a los estudiantes a mirar
un montaje en el piso con objetos personales arrojados sin un orden, como
despojados de sus propietarios. Incluso antes de que la guía les hiciera la invitación
de mirar aquél montaje, los estudiantes guiaron su mirada hacia éste súbitamente.
Como quizá ya los estudiantes suponían, aquél montaje tenía como propósito
representar la apariencia del patio de la Plaza de las Tres Culturas después del
exterminio de los estudiantes. De tal modo, este recurso de carácter visual y espacial
fue el central para que los estudiantes no sólo comprendieran, sino que además
empatizaran con este suceso, pero concretamente, con los estudiantes que fueron
asesinados en la matanza. Al producir un impacto en los estudiantes la atención que
prestaron en la observación de este recurso visual y el hecho de que así culminara la
explicación de la guía, fue ésta la que determinó en mayor medida su opinión en
cuanto al tema que se les explicó.
Pancartas: aplicación del conocimiento adquirido
Al terminar el recorrido por el museo –y, con ello, la explicación del tema-, la guía les
hizo la indicación a los estudiantes de realizar una actividad que se basaba en la
elaboración de pancartas. El objetivo de dicha actividad consistía en plasmar en esas
pancartas algunas consignas que los estudiantes consideraran como aquéllas que
representaban lo que los estudiantes del 68 querían expresar. Es decir, de manera
empática, los chicos tenían que elaborar expresiones como si fueran ellos mismos
aquéllos que marcharon en la década de los sesentas.
Después de que terminaron, algunos explicaron lo que pretendían expresar con lo
que habían escrito: es éste el momento de reflexión acerca de la información que se
les ha proporcionado. Su apoyo a los estudiantes del 68 fue contundente, más, por
otro lado, el repudio al presidente Gustavo Díaz Ordaz y a toda la estructura
gubernamental no expresaron más que repudio: ésta es la impresión con la que los
estudiantes de secundaria concluyeron su visita al memorial.

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