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FACULTAD DE CIENCIAS
PSICOLÓGICAS
CARRERA DE PSICOLOGÍA CLÍNICA
Quito
2019
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A. PRELIMINARES
DERECHO DE AUTOR
Yo, Sonia Lizeth Cóndor Carrillo, en calidad de autora y titular de los derechos morales y
patrimoniales del trabajo de titulación Niveles de impulsividad en adolescentes infractores:
Centro de Orientación Juvenil Virgilio Guerrero, modalidad Presencial, de conformidad
con el Art. 114 del CÓDIGO ORGÁNICO DE LA ECONOMÍA SOCIAL DE LOS
CONOCIMIENTOS, CREATIVIDAD E INNOVACIÓN, concedo a favor de la Universidad
Central del Ecuador una licencia gratuita, intransferible y no exclusiva para el uso no
comercial de la obra, con fines estrictamente académicos. Conservo a mi favor todos los
derechos de autor sobre la obra, establecidos en la normativa citada.
Así mismo, autorizo a la Universidad Central del Ecuador para que realice la digitalización
y publicación de este trabajo de titulación en el repositorio virtual, de conformidad a lo
dispuesto en el Art. 144 de la Ley Orgánica de Educación Superior.
El autor declara que la obra objeto de la presente autorización es original en su forma de
expresión y no infringe el derecho de autor de terceros, asumiendo la responsabilidad por
cualquier reclamación que pudiera presentarse por esta causa y liberando a la Universidad
de toda responsabilidad.
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APROBACIÓN DEL TUTOR DEL PROYECTO
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MSc. Alex Castro C.
DOCENTE-TUTOR
CI: 1710888601
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DEDICATORIA
A Dios que, con su amor y misericordia, me ha brindado el don del servicio, indispensable para seguir
esta hermosa profesión y ha puesto en mi camino a las personas y momentos correctos, que han hecho
de este sueño una realidad palpable.
A mi esposo Lenin Pozo, por ser ese brazo en el que he podido sostenerme y apoyarme durante todo
este proceso, quien por su amor ha buscado fomentar mi crecimiento personal y profesional.
A mis padres Manuel Cóndor y Vilma Carrillo, quienes han sido ejemplo de lucha constante, y han
motivado con su confianza cada paso que he dado.
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AGRADECIMIENTO
A las autoridades del Centro de Orientación Juvenil “Virgilio Guerrero” quienes dieron apertura para el
presente estudio, y a los adolescentes que compartieron su tiempo tanto para la investigación, como en
un acercamiento hacia su vida, y de esta manera conocer sus motivaciones y anhelo de cambio, es así
como me han dejado una noble lección sobre el perdón y la necesidad de una segunda oportunidad, a
través del trabajo psicoterapéutico oportuno, pues más allá de las condiciones y circunstancias que
hayan causado su internamiento; muchos de ellos, son personas con deseos de enrumbar su camino; y
de esta manera evidencian el compromiso del trabajo que como psicólogos se debe hacer con
poblaciones vulnerables.
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CONTENIDO
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ÍNDICE DE TABLAS
ÍNDICE DE FIGURAS
Figura 1. Comparación Alfa de Cronbach 11-c reportado en estudios realizados en España, Colombia
y Ecuador. Fuente: Validación de la Escala de Impulsividad Bis 11-C para su Aplicación en
Adolescentes Ecuatorianos. Ramos, Pérez y Bolaños, 2015. ................................................................. 34
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ÍNDICE DE ANEXOS
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TITULO: Niveles de impulsividad en adolescentes infractores: Centro de Orientación Juvenil Virgilio
Guerrero
RESUMEN
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TITLE: Impulsivity Levels in Adolescent Lawbreakers: Virgilio Guerrero Juvenile Orientation Center
ABSTRACT
Impulsivity can result in a predisposition towards and the maintaining of lawbreaking behavior. The
main objective of the investigation was to determine the impulsivity levels of adolescent lawbreakers
in Casa Recepción and Casa Renacer, two communities which form part of Virgilio Guerrero Juvenile
Orientation Center. A quantitative, descriptive and non-experimental methodology was used. A
sociodemographic survey and the Barratt Impulsivity Scale were applied to 44 male adolescents
between 13 and 20 years old. Results showed that 48% of the sample of adolescent lawbreakers have
impulsivity levels that fall within what can be considered the normal range. With regard to types of
impulsivity, nonplanning impulsivity, at 43%, was the predominant type found among participants. An
analysis of impulsivity levels by age showed that 65% of participants 13-16 years old present normal
levels of impulsivity whereas 54% of participants 17-20 years old display low levels of impulsivity. It
was also determined that 3% of adolescents who had been confined for less than three months had high
levels of impulsivity, a statistic that rose to 15% among those that had been confined for more than 3
months. The study concludes that lawbreaking adolescents´ show a normal level of impulsivity with a
predisposition towards nonplanning impulsivity. It was also found that age influences impulsivity
levels since as age increased impulsivity levels decreased. At the same time, it was observed that the
frequency of high levels of impulsivity increased as a function of the incarceration time of lawbreaking
adolescents.
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B. INFORME FINAL DEL TRABAJO DE TITULACIÓN
1. INTRODUCCIÓN
La presente investigación tuvo como objetivo principal determinar los niveles de impulsividad, que
presentan los adolescentes infractores, que se encuentran internados como medida socioeducativa en la
Casa Recepción y en la Casa Renacer del Centro de Orientación Juvenil Virgilio Guerrero, de edades
comprendidas entre 13 a 20 años. La impulsividad es considerada como un rasgo propio de la
adolescencia y a su vez puede ser considerado un factor que, al prevalecer en el sujeto, le predispongan
al cometimiento de conductas delictivas (Luengo, Carrillo, Otero y Romero, 1994; de la Peña
Fernández, 2010). Un estudio realizado en Perú con mujeres encarceladas señala la presencia de la
impulsividad en las mismas (Loyola, 2011). Por ello, surgió la necesidad de indagar la presencia de
esta variable en adolescentes, especialmente de aquellos que están privados de libertad.
El presente trabajo se divide en capítulos que hacen referencia al planteamiento del problema, el
marco teórico, el marco metodológico, la presentación y discusión de resultados, las conclusiones y
recomendaciones. El marco teórico desarrolla los fundamentos para llegar a estas hipótesis. El primer
capítulo define a la impulsividad, los tipos y subtipos de acuerdo a los diferentes autores, además de la
relación de esta variable con la agresividad, la conducta delictiva y la adolescencia. El segundo hace
referencia a los adolescentes infractores, los factores que intervienen en la conducta infractora en los
adolescentes, la inimputabilidad, el Código de la Niñez y Adolescencia, y las medidas socioeducativas.
En cuanto a la metodología, se caracterizó por ser cuantitativo, descriptivo y no experimental. Se
llevó a cabo la aplicación de dos instrumentos, que constó en una encuesta sociodemográfica y la
Escala de Impulsividad de Barratt (BIS 11), instrumento que ha sido validado para su aplicación en
adolescentes ecuatorianos (Ramos, Pérez y Bolaños, 2015), los cuales se aplicaron a una muestra de 44
adolescentes de la Casa Recepción y la Casa Renacer del Centro de Orientación Juvenil Virgilio
Guerrero.
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2. PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA
La adolescencia es una etapa transitoria, que supone una serie de cambios tanto físicos como
psicológicos, y que para algunas personas puede resultar más difícil que para otras. Según Oliva
(2004), (como se citó en Corbí, Ángel, & Nieto, 2004) menciona que:
Se han llevado a cabo diversas investigaciones, en las que los hallazgos en el campo de la
neurobiología relacionados con los diferentes ritmos de maduración de los sistemas cerebrales de la
recompensa y la inhibición, ayudan a entender mejor los comportamientos arriesgados e impulsivos
del adolescente (p.4).
En muchas ocasiones este tipo de comportamientos impulsivos puede desembocar en conductas de
riesgo como el consumo de alcohol, tabaco y drogas, embarazos precoces, y entre otros casos el
cometimiento de actividades que infringen la ley.
Los adolescentes al ser considerados sujetos de derecho cuando cometen conductas que infractoras
deberán vez asumir la responsabilidad de sus actos.
Según López (2011) un adolescente en conflicto con la ley es: “la persona que, siendo mayor de
doce años, pero menor de dieciocho, ha cometido una infracción reprochable por la ley penal”. Por lo
cual al adolescente se le hace responsable de sus actos, puesto que se considera que la persona menor
de 18 años a pesar de tener el conocimiento de que el acto que ha cometido va en contra de la ley no
cuenta con el nivel de madurez de un adulto lo que le impide ver todas las implicaciones de sus actos.
Por lo que es importante considerar sus derechos y promover su reeducación y reinserción. (Alvarado,
2018)
En la legislación ecuatoriana, el Código de la Niñez y Adolescencia es la norma que garantiza la
protección integral de los niños, niñas y adolescentes, y a su vez regula y sanciona las infracciones
cometidas por los adolescentes infractores penal. (Morales, 2013, p.9)
Es así como a los adolescentes en lugar de imponerles una pena sujeta al Código Orgánico Integral
Penal se les aplica una medida socioeducativa dependiendo del nivel de gravedad de la infracción
cometida, para ello el art.309 del libro cuarto del Código de la Niñez y Adolescencia evalúa lo
siguiente: “el grado de participación del adolescente (…) las circunstancias del hecho, la personalidad
del adolescente y su conducta y el medio familiar y social en el que se desenvuelve”. Es así como se
valorará cada caso antes de aplicar la medida socioeducativa, puesto que existen varios factores que
influyen en el cometimiento de la infracción.
Por otro lado, Boyle, O’Leary, Rosenbaum y Hassett-Walker (2008): “Reportaron asimismo una
correlación significativa entre la conducta antisocial y la impulsividad”. Ésta correlación se encontró
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en base al análisis hecho por los investigadores sobre el comportamiento antisocial, la violencia en la
familia de origen y la desinhibición conductual. Entendiéndose a la conducta antisocial como una serie
de actos que violan las normas sociales y derechos de los demás.
Por ende, la presencia de la impulsividad en el adolescente podría predisponer la reincidencia de su
conducta delictiva, circunstancia que hace evidente la necesidad de estudiar los niveles de impulsividad
en el adolescente en conflicto con la ley y profundizar así en dicha problemática, y así analizar si la
edad interviene en los niveles de impulsividad, ya que el incremento de edad supone una mayor
planificación y en menor medida implicación en conductas motivadas por la impulsividad, además de
establecer si la impulsividad de los adolescentes infractores está motivada por una visión optimista de
su conducta, por dejarse llevar por el momento, o por la falta de previsión de las consecuencias de sus
actos. En este mismo sentido valorar si el tiempo de internamiento afecta de manera positiva o negativa
a la impulsividad en el adolescente en conflicto con la ley, en el primer caso la aplicación de estrategias
que fomenten el control de los impulsos y la toma de decisiones, influiría en la merma de la
impulsividad en el sujeto, mientras que en el segundo caso la presencia factores negativos como el
encierro, hacinamiento, problemas de convivencia incrementarían loa niveles de impulsividad.
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2.4 Justificación de la investigación
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El estudio fue viable gracias a la apertura del director del Centro de Orientación Juvenil Virgilio
Guerrero, el padre Gilberto Rubio. Cabe mencionar que, al ser una entidad presidida por el Ministerio
de Justicia y la Congregación de Terciarios Capuchinos, se trabajó bajo parámetros éticos y de
confidencialidad; además para la realización del trabajo de campo se configuró un cronograma con
tiempos específicos y responsabilidades, de acuerdo al equipo de Psicología de la “Casa Recepción” y
la “Casa Renacer” del C.O.J.V.G.
Para la ejecución del trabajo de investigación, se consideró como población a los adolescentes del
Centro de Orientación Juvenil “Virgilio Guerrero”, el cual se encuentra ubicado en el norte de la
ciudad de Quito, en la calle Isaac Albéniz y Manual Lizarzaburu. El mismo que tiene sus orígenes a
mediados del año de 1929, en el gobierno del Dr. Isidro Ayora, época en la que se le conocía como una
escuela correccional, debido a la inexistencia de políticas claras que dirijan su campo de acción
respecto a los adolescentes allí recluidos y a la existencia de procedimientos inadecuados. En el año de
1937 en el gobierno del general Alfredo Enríquez Gallo, se crean los Tribunales de Menores y la
Dirección General de Hogares de Protección Social, circunstancia que transforma el nombre, de
Escuela Correccional a “Escuela de Trabajo”. El 14 de octubre de 1992, el Ministerio de Bienestar
Social, suscribe el primer convenio con la congregación de Religiosos Terciarios Capuchinos, con el
nombre de “Centro de Rehabilitación Juvenil Virgilio Guerrero”, cuyo principio fundamental se basa
en ofrecer a los adolescentes varones entre los 13 y 18 años en conflicto con la ley, mejorar su calidad
de vida individual, familiar y social, a través del acompañamiento e intervención psico-socioeducativa
y espiritual de forma integral (Vaca, 2015).
El objetivo principal de los Terciarios es promover el desarrollo integral del adolescente,
procurando su realización individual y su progresiva readaptación y reinserción en su medio socio
familiar, ayudándole a adquirir madurez y autonomía. Abarcan cuantas actividades ayuden a liberar a
los adolescentes de la problemática en la que se hallan inmersos, sea personal, social o familiar
(Tamayo, 2017). Lo cual se materializa gracias al equipo multidisciplinario del C.O.J.V.G. está
conformado, pos psicólogas, trabajadoras sociales y educadores.
Actualmente se encuentra organizada en 4 casas; la Casa Recepción, en la cual se encuentran los
adolescentes de manera provisional como medida cautelar, por un período de hasta 3 meses con el fin
de que se investigue la infracción por la cual es acusado y el juez pueda determinar el tipo de medida
socioeducativa y con ello el tipo de internamiento; la Casa Superación, en la cual se encuentran
adolescentes de 13 a 16 años; la Casa Renacer en la cual se encuentran adolescentes de 16 a 18 años; la
Casa Trascender de 17 a 21 años.
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Según la Lic. Nelly Ramírez miembro del departamento de Psicología, los adolescentes dentro del
C.O.J.V.G; en la mañana cumplen con actividades académicas, sean estas en educación básica o
educación secundaria; mientras que en la tarde participan en talleres como panadería, arte, carpintería,
cerrajería o sistemas; que en un futuro puedan aportarles como una herramienta de trabajo.
En cuanto a las visitas, estas se realizan cada fin de semana en un horario de 2 a 5 pm; en el cual se
reciben exclusivamente a familiares.
Cuando los adolescentes, cumplen el 60% de la medida socio educativa impuesta, su caso pasa a
revisión por parte del equipo de psicología, trabajo social y los educadores, con el fin de viabilizar o no
algún tipo de libertad asistida; la cual puede darse mediante internamiento semi-abierto, que consiste
en que el adolescente salga en la mañana del centro a laborar o estudiar dependiendo del caso, pero
regrese por la noche, todo esto con el respaldo familiar, en especial de un representante legal, que este
en la capacidad de garantizar una buena reinserción al medio, así como firmar su salida y entrada al
centro; razón por la cual este tipo de internamiento no se da con frecuencia, debido a que muchos de
los adolescentes son de provincia y no tienen un representante legal que pueda ir a diario a firmar su
salida e ingreso, ni hacerse responsable de ellos. La segunda alternativa es el Internamiento de fin de
semana, en la cual el adolescente ingresa el día sábado al centro y se retira el día lunes, todo esto con
respaldo del equipo de Psicología, así como de la familia del implicado; por ser más flexible es el tipo
de libertad asistida al que más recurren los adolescentes.
No existen datos estadísticos sobre el tipo de infracciones por cuales son retenidos los
adolescentes; pero de entre los más comunes según las autoridades del lugar, se mencionan a
continuación en orden de frecuencia de cometimiento: la violación, abuso sexual, acoso sexual,
tentativa de abuso sexual, robo con violencia, asesinato, homicidio y tráfico de drogas.
A pesar, de que la normativa vigente reconozca a las instituciones destinadas al internamiento de
adolescentes infractores como CAI. Centro de Adolescentes Infractores, la institución ha optado por
conservar su nombre original dado que así se han establecido.
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3. MARCO TEÓRICO
El presente trabajo investigativo tiene como base la corriente cognitiva conductual, se debe
considerar a la impulsividad como una forma rápida de actuar, sin pensar en las consecuencias, como
un mecanismo de defensa que puede ser positivo o como una conducta que podría acarrear resultados
perjudiciales. Está podría entenderse mediante la teoría del aprendizaje social por modelamiento
(Berkowitz, 1993).
Por otro lado, Bandura destaca que hay una combinación de factores sociales y psicológicos que
influyen en la conducta. Considera que los factores externos son tan importantes como los internos y
que los acontecimientos ambientales, los factores personales y las conductas interactúan con el proceso
de aprendizaje (Woolfolk, 2010).
Por ello, por más que la impulsividad sea considerada un mecanismo de defensa innato en el ser
humano, dependerá del contexto en el que se desenvuelva el sujeto para que tome conductas o
decisiones impulsivas como su primer recurso ante un estímulo, mediante un aprendizaje previo dado
por la experiencia directa o por medio de modelos (Bandura, 1987).
Es así como este tipo de conductas pueden verse influenciadas por sujetos que actuaron como
modelos para los adolescentes, tal como lo afirma Bandura (1987):
Los humanos aprenden la mayor parte de su conducta a través de la observación por medio de
modelado: al observar a los demás, nos hacemos idea de cómo se efectúa las conductas nuevas y
posteriormente, esta información nos sirve como guía. (p.90)
La figura de apego, cuidadores principales, personas o personajes que representen admiración para
los adolescentes, son los principales modelos de comportamiento. Meichenbaum, es el autor más
representativo del enfoque cognitivo-conductual en relación con la impulsividad, la trata como una
variable cognitiva que media entre el estímulo antecedente y las consecuencias que van a
desencadenarse (Fernández Millán, Pérez Máñez, & Carrasco Salmerón, 2002).
Es por ello, que la conducta delictiva de los adolescentes, puede ser el resultado de una o un
conjunto de conductas impulsivas, en las que el sujeto no meditó sobre los efectos de su
comportamiento; dejándose influenciar por estímulos externos, resultado de una relación estímulo-
respuesta, lo cual dio como consecuencia el cumplimiento de medidas socioeducativas (Knorring &
Ekselius, 1998; Tremblay, Pihl, Vitaro & Dobkin, 1994).
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Capítulo I: Impulsividad
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1.1.1 La impulsividad en la teoría de Eysenck.
Eysenck propuso una teoría de la personalidad con un enfoque biopsicosocial, basada en rasgos,
dentro de los cuales la impulsividad encaja tanto en la búsqueda de sensaciones como en el
psicoticismo.
En la teoría de la personalidad de Eysenck, la impulsividad queda asociada, por una parte, a la
búsqueda de sensaciones, más relacionada con la extroversión, y por otra la impulsividad en
sentido estricto, que se relaciona más con el psicoticismo (Figueroa Varela, Anllo-Vento, &
Vila Castellar, 2013).
La impulsividad dentro de la extroversión, relacionado a la búsqueda de sensaciones se expresa en
cómo los individuos se insertan en situaciones que puedan generarle emociones nuevas o una
gratificación inmediata, de esta manera el sujeto no considera la posible presencia de los riesgos a los
que se expone. Mientras que este mismo rasgo vinculado al psicoticismo, expresa como el nivel de
impulsividad se puede vincular con la agresividad como medio de respuesta ante estímulos que el
sujeto considere como amenazantes, lo cual al volverse patológico podría recaer en conductas
antisociales, que tengan a la impulsividad como origen y mantenimiento de la conducta (Squillace,
Picón y Schmidt, 2011).
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1.2 Tipos de impulsividad
Ser una persona impulsiva, es considerado negativo para la sociedad, la cual nos invita ser más
prudentes en la toma de decisiones, pero existen ocasiones en que es necesario ser impulsivo, siendo
esto positivo para el individuo. Por ello, Chico (2000) afirma:
Dickman ha dirigido su atención especialmente al estudio de la impulsividad como dimensión de la
personalidad, y señala que las consecuencias de la impulsividad no siempre son negativas. De
hecho, manifiesta que, en tareas experimentales sencillas de funcionamiento cognitivo, los sujetos
más impulsivos suelen cometer menos errores. (p.80)
Lo cual podría incurrir en personas con reflejos rápidos, que supieron manejar una situación de
manera eficaz al momento como lanzarse a una piscina para ayudar a una persona se estaba ahogando,
un resultado positivo sería salvar a la persona, sin embargo, en decisiones que impliquen una
consecuencia a largo plazo podrían acarrear consecuencias negativas, por ejemplo si un alumno decide
salirse de clase porque alguien le incitó a hacerlo, esta situación podría ameritar una sanción por parte
del colegio, un llamado de atención por parte de las autoridades y de los progenitores del mismo
(Pedrero, Ruiz, Rojo, Llanero y Puerta, 2011).
Dicha premisa, podría generar una división de la impulsividad en razón de las consecuencias que se
pueden obtener mediante este tipo de conducta. “Hay dos tipos de impulsividad, la funcional
relacionada con la tendencia a tomar decisiones rápidas cuando así lo requiere una situación en
beneficio de la persona y la disfuncional relacionada con decisiones rápidas e irreflexivas que
comportan consecuencias negativas” (Adan, 2012, p.12). Dependerá de la situación, el contexto, el
momento en que ocurra el evento ya que, con ello, vendrán las posibles consecuencias (Riaño, Guillen
y Buela, 2015).
La impulsividad no está vinculada a una especie de ruleta de la fortuna, de la cual dependerá si los
efectos de la conducta impulsivas son negativos a o positivos, la impulsividad funcional se relaciona a
la capacidad de adquiere un individuo para utilizar la impulsividad como un recurso de manera
oportuna. “Es la tendencia a tomar decisiones rápidas cuando la situación implica un beneficio
personal, mediante un proceso de toma de decisiones con riesgo calculado” (Pedrero-Pérez, de León,
Mota, Luque, & García, 2012, p. 52). Por ello, una persona que recurre a la impulsividad funcional, ha
sido capaz de analizar de manera rápida las consecuencias posibles de aquel acto, y por ende opta por
una conducta impulsiva solo si la condición lo requiere y los efectos negativos esperados son mínimos
(Pedrero, 2009).
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1.2.1.2 Impulsividad Disfuncional.
Al contrario de la impulsividad funcional, en la que el individuo era capaz de calcular los riesgos de
su conducta, en este tipo de impulsividad el sujeto no considera la posibilidad de que su impulsividad
pueda traer consecuencias no deseadas. “Es la tendencia a tomar decisiones irreflexivas, rápidas y sin
precisión en situaciones en las que esta estrategia no es óptima, con consecuencias negativas para el
individuo” (Pedrero-Pérez et al., 2012, p.52). Lastimosamente, esta incapacidad para pensar en que su
acto, podría traer una consecuencia diferente a la esperada, le ocasiona resultados negativos (Chico,
2000).
Existen situaciones que demandan en el sujeto, una capacidad de resolución de problemas, lo cual
está determinada de acuerdo a como la persona ha ido configurando esta capacidad método mediante
ensayo-error. “La impulsividad de procesamiento de la información o llamada también cognitiva, la
cual se encuentra circunscrita al área del aprendizaje, es decir, al afrontamiento y la resolución de
problemas” (Álvarez, 2011, p.5). Lo cual implica, que un sujeto ponga a la impulsividad como un
recurso tanto para afrontar eventos que puedan resultarle estresantes, como permanecer como una
forma de resolver conflictos ya instaurada (Andreu, Peña y Penado, 2013).
Según el estudio realizado en dos colegios de la ciudad de Quito por Ramos en el 2015, con un
grupo de 245 estudiantes adolescentes se puede resaltar lo siguiente: “Se encuentra que el 16.74% de la
muestra presenta un nivel elevado de Impulsividad cognitiva, el 11.84% presenta un nivel elevado en
Impulsividad motora y el 12.24% presenta un nivel elevado en Impulsividad no planeada” (Ramos,
2015). Dichos hallazgos podrían establecer una relación entre la impulsividad cognitiva y la
adolescencia, que claramente debería corroborarse con estudios posteriores. Por otro lado, un
individuo puede actuar de manera impulsiva, siendo esto debido a que en el momento se le presentó
como la mejor opción de acción. Debido a que la impulsividad cognitiva implica “Un bajo control
sobre la intrusión de pensamientos y dificultades para la atención sostenida” (Squillace, Picón, &
Schmidt, 2011). Dicha situación explica, como un sujeto impulsivo con base cognitiva actúa basado en
lo que ha pensado de la situación, pero no ha utilizado los recursos más favorables para la misma
(Squillace, Picón y Schmidt, 2011).
En este caso: “Supone una falta de previsión hacia el futuro” (Figueroa Varela, Anllo-Vento, & Vila
Castellar, 2013). Lo que implica, que el sujeto realiza una actividad motivada por su impulso, sin
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considerar las consecuencias negativas o positivas que pudiese tener su acto. Al contrario, de otros
tipos de impulsividad en los que el sujeto solo se considera las consecuencias positivas del acto, la
impulsividad no planeada es “un estilo de procesamiento de la información apresurado que lleva a
tomar decisiones rápidamente, sin planear y con orientación hacia el presente” (Squillace, Picón, &
Schmidt, 2011).
En un estudio realizado en una muestra intencional de la Universidad Técnica de Ambato sobre los
niveles de impulsividad refiere: “La que más alto nivel tienen los estudiantes es la impulsividad no
planeada que es la falta de planificación de las actuaciones futuras y mayor interés por la situación
presente que por la futura” (Morales, 2014). Cabe mencionar que el estudio fue realizado en
estudiantes universitarios, de quiénes se esperaría pensasen más en el futuro, que en una gratificación
instantánea (Andreu, Peña y Penado, 2013).
Las emociones juegan un papel importante en la vida de todo ser humano, cumplen con funciones
adaptativas, sociales y motivacionales; esta última se relaciona con la impulsividad de tipo motora.
“Caracterizando una tendencia general a actuar motivado por las emociones del momento” (Squillace,
2011, p.13). Emociones como la alegría acompañada de la euforia, pueden mover al sujeto a realizar
una serie de actividades, que a consideración del sujeto le producirán una gratificación y con ello, una
sensación de bienestar. En otro caso, un individuo motivado por la ira, podría actuar impulsivamente e
incluso con agresividad. “Implica actuar sin pensar, dejándose llevar por el ímpetu del momento”
(Vives Morales, 2007). Situación que puede traerle consecuencias negativas al no considerar las
variables implícitas en el cometimiento del acto impulsivo.
Existen varias estructuras que intervienen en la impulsividad de entre ellas: “El córtex prefrontal, el
núcleo accubems, la amígdala, el área tegmental ventral y los núcleos del rafe” (Elvira, 2015, p. 15).
Mientras que, para Sánchez, P., Giraldo, & Quiroz (2013) las siguientes estructuras son relevantes: “La
corteza prefrontal ventromedial, la corteza cingulada anterior, el núcleo basolateral de la amígdala, el
núcleo subtalámico y el accubems como regiones cerebrales que participan en la incapacidad de la
inhibición conductual” (p.244). Pero en ambos casos, coinciden en la presencia de dos estratos
neurobiológicos presentes en la impulsividad.
Como ya se revisó con anterioridad, son algunos los sustratos neurológicos que intervienen en la
conducta impulsiva, pero el papel de neurotransmisores como la dopamina y serotonina son
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categóricas. Según Elvira, L. (2015) “La serotonina facilita la inhibición prefrontal, por lo que una
actividad serotoninérgica insuficiente puede incrementar la impulsividad agresiva” (p.16). Existen
varios tipos de impulsividad, y en la literatura se le ha relacionado con la impulsividad con la
agresividad, consolidado así un subtipo conocido como impulsividad agresiva, en la cual estaría
implicada una disminución de la actividad de dicho neurotransmisor (Figueroa Varela, Anllo-Vento,
Vila Castellar, et al., 2013).
De esta manera se entiende que una actividad acrecentada de la serotonina, implicaría una menor
posibilidad de que la persona actúe de manera impulsiva, tal como lo afirma Ramírez, J. (2007):
El aumento de la actividad serotoninérgica reduce la impulsividad, mientras que, por el contrario, la
disminución de esta hormona aumenta la frecuencia e intensidad de las reacciones agresivas y
antisociales, más las de tipo impulsivo (explosivo e incontrolable) que las premeditadas. (p.124)
Además, existen varias conductas antisociales que pueden estar enmarcadas dentro de las de tipo
impulsivo-agresivo como es el caso de los asaltos con el uso de la fuerza o de un arma sea de fuego o
corto punzante, a diario se visualiza en los periódicos nacionales e internacionales como personas han
terminado heridas e incluso muertas a causa de un robo, en el cual poner o no resistencia puede ser
crucial para el agresor (Elvira, 2015).
Existe una relación entre la agresividad y la impulsividad, puesto que ambas se hacen evidentes en
eventos como homicidios, peleas verbales o físicas. “Tanto la impulsividad como la agresividad están
relacionadas con conductas desadaptativas y trastornos mentales de gran impacto social” (C. Morales,
2012). Por ello, estos dos tipos de comportamientos que podrían servir al ser humano puesto que son
considerados un mecanismo de defensa. como una forma de adaptarse al medio; en su aspecto patológico
desencadenarían una serie de conductas problemáticas para el sujeto. (Reyes-Tovilla et al., 2016)
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A pesar de lo mencionado con anterioridad, aún queda una interrogante a esclarecer si la
agresividad precede a la impulsividad o viceversa, es decir si una persona agresiva tiende a realizar
actos más impulsivos, o si una persona impulsiva tiende a ser agresiva. Según Vives Morales (2007):
“Tradicionalmente se ha relacionado la impulsividad con la agresividad impulsiva, principalmente
porque la impulsividad puede favorecer que la persona reaccione de manera agresiva, especialmente
con ira” (p.88). Tal premisa revela que la impulsividad preexiste a la agresividad, pero que es
especialmente en la de tipo impulsiva en que esta relación se hace evidente. Lo que implicaría que una
relación entre estas dos variables haría que un sujeto se exponga de manera frecuente en actividades en
las que primero, el sujeto tuvo una reacción rápida sin pensar en las consecuencias negativas de sus
actos y segundo, su respuesta ante el estímulo fue motivada por la agresividad (Andreu, Peña y
Penado, 2012).
Existe amplia serie de conductas que encajan en las de tipo delictivas como el uso de armas
cortopunsantes, el asalto agravado con violencia, el microtráfico de drogas, asesinatos, violaciones, etc.
“El rasgo impulsividad puede ser un factor de riesgo de conductas antisociales cuando tiene un valor
elevado en los individuos, mientras que sería un factor de protección cuando su valor es muy bajo” (de
la Peña Fernández, 2010). Una persona cuyos niveles de impulsividad sean elevados, tendrá mayor
predisposición para la participación en cualquier conducta de tipo antisocial sobre todo en las que la
impulsividad jueguen un papel predominante como en un homicidio, mientras que una persona con
bajo nivel de impulsividad, será menos proclive a la ejecución de este tipo de comportamientos (López
Soler & Ramón López López, 2003).
La adolescencia es una etapa transitoria, que involucra una serie de cambios a nivel físico, social y
cultural. En algunos casos esta fase coadyuva a adquirir madurez, fijarse metas e incluso un plan de
vida, mientras que para otros sujetos la adolescencia marca su vida, por sucesos en los cuales la falta de
razonamiento e impulsividad fueron cruciales. Tal como lo señala Schweizer (2002): ha encontrado
pruebas que demuestran que la impulsividad correlaciona negativamente con el razonamiento. Dichas
dificultades pondrían al adolescente en riesgo de implicarse en conductas problemáticas (de la Peña
Fernández, 2010). Estas conductas podrían ser un embarazo precoz, adquisición de una infección de
transmisión sexual, la inserción en alguna pandilla, la participación de actos delictivos, el consumo
excesivo de sustancias psicotrópicas, etc; (Rosabal García E, Romero Muñoz N, Gaquín Ramírez K, &
Hernández Mérida R, 2015).
14
Los adolescentes por lo general se muestran intrépidos, audaces ante las situaciones que se les
presente, el revelar temor ante ello, podría convertirlos en flancos de burla o rechazo, por lo cual están
dispuestos a inmiscuirse en cualquier tipo de actividad que involucre peligro sin considerar los riesgos.
“El concepto de fábula personal, tendencia del adolescente a considerarse invulnerable y pensar que su
vida y sus experiencias personales son únicas y no se rigen por las reglas que gobiernan la vida de las
demás personas” (Corbí, Ángel, & Nieto, 2004). Es en la adolescencia cuando generalmente se inicia el
consumo de alcohol, de tabaco u otras drogas, los adolescentes se vuelven sexualmente activos,
motivados por la curiosidad y la necesidad de experimentar sensaciones nuevas que le resulten
gratificantes, características principales de la impulsividad; por ende, no consideran que una
gratificación momentánea como la satisfacción sexual, podría acarrear consecuencias a largo plazo
como un embarazo (Orbegoso, 2011).
La consideración del adolescente de que “a mí no me va a suceder”, lo convierte en un sujeto
potencialmente impulsivo, la forma en como maneje las situaciones y como reaccione ante los
estímulos mediante el aprendizaje ensayo-error, configurará su capacidad de toma de decisiones tanto
como su capacidad de acción. En un estudio realizado en una muestra de 245 adolescentes del DMQ,
de un rango de edad de 14 a 18 años menciona que “no se encontró relación significativa entre la
impulsividad y el género o grupo etario de los participantes” (Ramos, C., 2015). Lo que supondría, que
el hecho de pertenecer a esta etapa evolutiva del desarrollo, no los vuelve proclives a la impulsividad,
ni que ésta decrezca o se incremente en alguna edad en específico (Ibáñez Cuadrado, 2014).
2.1 Adolescentes
El período de la adolescencia, suele ser considerado un proceso que implica cambios a nivel
cognitivo, afectivo-emocional y físico. “Adolescente es la persona de ambos sexos entre doce y
dieciocho años de edad” (Codigo de la Niñez y Adolescencia, 2013). En esta etapa el adolescente sufre
una serie de cambios corporales, emocionales que pueden significarle inestabilidad, y será en base a los
cambios cognitivos, el aprendizaje e inteligencia emocional que el sujeto podrá hacerle frente a dichas
transiciones de la mejor manera posible hasta convertirse en un adulto joven (Pagliuca, 2012).
2.2 Conducta infractora en adolescentes
La vulnerabilidad de los adolescentes, sobre todo en casos de pobreza extrema hace que puedan
verse involucrados en el cometimiento de actos delictivos. “Puede explicarse de muchas maneras: no
todos los adolescentes delincuentes se implican en este tipo de comportamiento por las mismas
razones” (Estévez, Jiménez y Musitu. 2007). Si bien queda claro que las motivaciones no son las
mismas, es común ver que detrás de los adolescentes existe una banda organizada en la cual se
15
encuentran adultos que, considerando la inimputabilidad de los adolescentes, los integran a sus bandas
delictivas. “El 45% de adolescentes vive en hogares en condiciones de pobreza y el 24% en hogares de
pobreza extrema” (Senplades, 2010). Más allá de la imputabilidad, la vulnerabilidad del adolescente le
vuelve en presa fácil de adultos inescrupulosos que buscan beneficios económicos. (Kvaraceus, 1964).
Otra realidad se explica debido al proceso de callejización por el cual atraviesan algunos
adolescentes, situación que los vuelve víctimas de las circunstancias, debido a que en este contexto su
único objetivo de vida es sobrevivir. "La utilización de los niños es muy frecuente, principalmente los
niños en situación de calle, son presa fácil” (Fundación Nuestros Jóvenes, 2011). Es precisamente, la
evidente necesidad de recursos económicos que les motiva a acceder al cometimiento de conductas
delictivas (Salazar-Estrada, Torres-López, Reynaldos-Quinteros, Figueroa-Villaseñor, & Araiza-
González, 2011).
A pesar de que no todos los adolescentes que hayan cometido actos ilícitos, han sido objeto de
medidas socioeducativas como el internamiento en los Centros de Orientación Juvenil, el resumen de
un Informe emitido por el Ministerio de Justicia (2014) revela los siguientes detalles:
De acuerdo al informe del Ministerio, el 16% de los jóvenes que ingresan a los Centros de
Adolescentes Infractores (CAI) son reincidentes. Durante el período analizado, por robo fueron
aislados el 37%; por delitos contra el pudor, violación y estupro el 24%; por delitos contra la vida
el 14%; por posesiones ilícitas el 12%; por último, los delitos graves entre los que se mencionan al
homicidio, asesinato representan el 3%.(Velasco, Álvarez, Carrera, & Vásconez, 2014, p.82-83)
De los resultados obtenidos se destaca el cometimiento de robos, que como se mencionaba con
anterioridad podrían ser resultado de la búsqueda de recursos económicos, sin embargo, se le aproxima
en un 24% infracciones como la violación, lastimosamente este tipo de actos delictivos son el resultado
de una sociedad machista, que impone las necesidades sexuales de un ser humano frente a otro, en
donde el uso de la agresión está implícito, además de como la impulsividad del sujeto se hace evidente
(Vázquez González, 2003).
La familia es concebida como el núcleo de la sociedad, un espacio en el cual tanto los niños, niñas y
adolescentes deberían satisfacer todas sus necesidades físicas, afectivas y económicas, que le permitan
un desarrollo integral de su ser. A pesar de ello, es justamente en este lugar, en el cual se ven
vulnerados los derechos de los adolescentes. “Según el defensor público, Ernesto Pazmiño, hay un
problema de fondo: la mayoría proviene de hogares en los que han sido maltratados. Según Justicia, el
74 % de los adolescentes ha sufrido maltrato” (Diario Expreso.ec, 2017). Esta condición pone al
adolescente en primer lugar en víctima y futuro agresor, puesto que el círculo de la violencia se
produce de manera transgeneracional.
16
Incluso se le da a entender al adolescente que es una manera de resolución de conflictos, por cual de
esta manera podrían verse involucrados en agresiones físicas que les vuelvan sujetos de medidas
socioeducativas. Por otro lado, la violencia física de la cual pueden ser víctimas, les hace sentir la
necesidad de salir del hogar, saliendo a las calles, y de esta manera el microtráfico y el robo serían de
algunas de las alternativas para los adolescentes (Velasco et al., 2014).
17
Es común ver como a los niños, incluso desde temprana edad, se les da mensajes sobre la
agresividad mediante juguetes como espadas o pistolas, posterior a ello mediante van creciendo llegan
los videojuegos de guerras y batallas cuyo fin es atacar de manera violenta a un enemigo, estos se
mantienen en la adolescencia acompañados de los mensajes violentos en los mass-media; que lejos de
enseñarle a un sujeto vulnerable (adolescente) a ser asertivo le inclinan a la agresividad (Kvaraceus,
1964).
2.3 Inimputabilidad
En la República del Ecuador los adolescentes son considerados inimputables, esto gracias a la lucha
de organizaciones que han buscado reivindicar los derechos de los NNA. “Al dejar de ser personas
necesitadas de protección, para convertirse en sujetos de derechos, también asumen responsabilidades”
(La Hora, 2011). Los niños, personas de 0 a 11 años de edad son consideradas necesitadas de
protección, mientras que al cumplir los 12 años empiezan a ser sujetos de derechos, lo que implica que
a más de los derechos que lo protegen deberán asumir responsabilidades (Gaviria, 2005).
Hacerse responsable de los actos cometidos, incluye la judicialización de dichos actos, es decir que
estos estén sujetos a la consideración de un juez, aclarando que la sanción irá acorde a su etapa
evolutiva de desarrollo; puesto de que ello, dependerá el nivel de consciencia que haya tenido el
implicado al cometer el acto (Arroyo, 2014).
Cabe la pena aclarar que más allá de que los adolescentes deban ser juzgados, no será las leyes
penales las que pesen sobre sus actos. “Los adolescentes son penalmente inimputables y, por tanto, no
serán juzgados por jueces penales ordinarios ni se les aplicarán las sanciones previstas en las leyes
penales” (Código de la Niñez y Adolescencia, 2014). El Código Orgánico Integral Penal, no aplicaría
sanción a los NNA, puesto que para ello es pertinente considerar las leyes que han sido creadas con el
fin de proteger la integridad de los mismos, gracias al Código de la Niñez y Adolescencia; debido a
que no es lo mismo un asalto cometido por un NNA, que, por un adulto, el nivel de vulnerabilidad del
primero hace que el caso deba será juzgado de diferente manera (UNICEF, 2006).
De esta manera, los adolescentes de acuerdo a la infracción cometida tendrán una medida
socioeducativa que cumplir, a diferencia que en adulto deberá acatar la pena que la jueza determine, en
el primer caso la medida implica la educación y restablecimiento de derechos, mientras que en el
segundo caso es una medida punitiva. “De ahí que, gracias a estos avances, no sean penalmente
imputables y por tanto su destino no sea una cárcel sino una institución destinada a su re-educación”
(Observatorio de los Derechos de la Niñez y Adolescencia, 2011). En cada caso, en primera instancia
la labor irá dirigida a la investigación de la presunto infracción, de ahí se evaluarán el caso y se emitirá
un juicio dado por el juzgado de la Niñez y Adolescencia (Galarza, 2015).
18
2.4 Adolescentes infractores
La adolescencia puede ser una etapa difícil, más aún si está se vive en un medio conflictivo,
acompañado de conductas antisociales o malas decisiones que ponen en riesgo el desarrollo integral del
mismo. “Reconocieron a estos adolescentes como infractores y no como delincuentes, pasando a ser
juzgados bajo normativas y procedimientos particulares” (Observatorio de los Derechos de la Niñez y
Adolescencia, 2011, p.162). Es decir, se toma al acto que va en contra de ley que es cometido por un
adolescente como una infracción, por lo que su juzgamiento será diferente al de un delito.
Actualmente un adolescente es considerado en conflicto con la ley, cuando ha cometido un hecho
delictivo. Según el SRSALP, (Sistema de Reinserción Social del Adolescente en conflicto con la Ley
Penal-Perú) lo define como:
Una persona en desarrollo, sujeto a derechos y protección, quien debido a múltiples causas ha
cometido una infracción, y que, por lo tanto, requiere de atención profesional individualizada y
grupal que le permita desarrollar sus potencialidades, habilidades, valores y hábitos adecuados
dentro de un proceso formativo integral.(Tello, 2016 ,p.11).
Es así como lejos de tener un régimen punitivo, lo que se busca es proporcionar al adolescente las
herramientas necesarias para que pueda desarrollarse y enrumbar su camino, es por ello que, en los
centros de orientación juvenil, tienen la posibilidad de continuar o empezar sus estudios, de desarrollar
sus capacidades mediante talleres que a su vez les permitan tener un futuro oficio, todo esto enmarcado
en la formación y refuerzo de valores (UNICEF, 2015).
Los actos que van en contra de ley pueden ser cometidos tanto por hombres como mujeres de
distinta edad. “A escala nacional, 1.023 son hombres y 85 mujeres. De ellos, 683 tienen medidas
privativas de libertad en los 11 Centros de Adolescentes Infractores existentes y 425 con medidas
alternativas” (Rodríguez, R., 23 noviembre 2017, Diario Expreso.ec). Como se puede evidenciar no en
todos los casos la medida será internar al adolescente a un centro, pero si en la mayoría de casos, para
ello se tomará en cuenta la edad del adolescente y la infracción cometida; puesto que para otros casos
se establece otro tipo de medidas socioeducativas (García, s.f.).
No se puede establecer una edad específica en la que los adolescentes cometan en mayor medida
infracciones. Pero si se puede establecer el rango de edad, en el que se frecuentan estos hechos. “Las
edades de mayor incidencia están entre los 14 y 17 años (91%), aumentando el número de adolescentes
infractores proporcionalmente con la edad” (Velasco et al., 2014). Lo que quiere indicar que a pesar de
que lo esperable, sea que al incrementar la edad el adolescente vaya adquiriendo mayor madurez y
menor implicación en conductas desadaptativas o de riesgo, sucede el fenómeno contrario
(Albuquerque & Vilchez, 2017).
19
2.4.1 Adolescentes infractores en el Código de la Niñez y Adolescencia.
Dentro del Código de la Niñez y Adolescencia, se menciona a lo no responsabilidad de los actos por
parte de los niños y niñas, mientras que en el caso de los adolescentes se habla de la responsabilidad
que estos tienen frente al cometimiento de actos infractores:
Los adolescentes que cometan infracciones tipificadas en el Código Orgánico Integral Penal estarán
sujetos a medidas socio - educativas por su responsabilidad de acuerdo con los preceptos del presente
Código.(Código de la Niñez y Adolescencia , 2014)
Para ello se evaluará la situación de cada adolescente, para considerar cual será la medida
socioeducativa a aplicar.
El internamiento es la medida socioeducativa más fuerte considerada dentro del Código de la Niñez
y Adolescencia, por lo general está medida se aplica a adolescentes mayores de 14 años, pero existen
excepciones.
La jueza o juez debe aplicar exclusivamente esta medida a los adolescentes mayores de 14
años, siempre y cuando hayan cometido alguna infracción que sea sancionada con pena de
reclusión. También se aplica esta medida a los adolescentes menores de 14 años que han
cometido delitos de violación, asesinato, homicidio, plagio de personas y robo con resultado de
muerte (Morales, S., 2013, p. 9).
Más allá de los factores que intervienen en el cometimiento de actos violentos por parte de los
adolescentes, el internamiento a edades tempranas podría marcar la diferencia entre la perpetuación de
crímenes, en una vida delictiva o una vida diferente, gracias a la re-educación, a la formación y a la
posibilidad de adquirir habilidades que le permitan al adolescente a tener un oficio o profesión
(UNICEF, 2006).
Como se mencionó con anterioridad a los adolescentes se les impone una medida socioeducativa en
lugar de pena. “Dentro de este sistema, las sanciones que aplican los jueces de la niñez a los y las
adolescentes infractores son medidas socio-educativas privativas o no privativas en función de la
infracción para lograr su re-inserción en la sociedad” (Observatorio de los Derechos de la Niñez y
Adolescencia, 2011).
Para ello se realizará una evaluación del acto cometido para poder establecer el tipo de medida
socioeducativa, a lo cual se le conoce como garantía de proporcionalidad, la cual estipula lo siguiente:
“Se garantiza al adolescente infractor la debida proporcionalidad entre la infracción atribuida y la
medida socioeducativa aplicada” (Código de la Niñez y Adolescencia, 2014). Por esta razón, en
20
algunos se prevé una medida privativa de la libertad, mientras que en otros se establece medidas
alternativas.
El modelo pretende activar los distintos niveles del sistema de protección para restituir su derecho a
la salud y a la educación, trabajar en la construcción de vínculos afectivos con la familia o
referentes, generar oportunidades ocupaciones-laborales y trabajar sobre la autoestima para
construir proyectos de vida. (Ministerio de Justicia, Derechos Humanos y Cultos, 2011).
Dentro de las medidas socioeducativas establecidas en el Código de la Niñez y Adolescencia, se
pueden encontrar las no privativas de la libertad y las privativas, recalcando que el objetivo principal
de ambas son la reducación y la reinserción escolar. A continuación, se presentan las medidas
socioeducativas no privativas de la libertad; en la amonestación, el objetivo es dejar un llamado de
atención que haga reflexionar tanto al adolescente como a sus representantes y establezca una
diferencia entre la infracción realizada y el presente, por otro lado, está sanción se agrava cuando existe
una imposición de reglas, el cual determinará obligaciones y restricciones sobre la conducta del
adolescente. En otros casos, se ve la necesidad de orientar al adolescente y su entorno para evitar la
perpetuación de conductas desadaptativas y procurar un adecuado desarrollo socio-familiar; mientras
que si el juez lo ve pertinente se podría solicitar al adolescente la participación en servicio comunitario
y la libertad asistida que es una forma de libertad condicional (UNICEF, 2006).
21
Tabla 1.
22
Por otro lado, se encuentran las medidas socioeducativas privativas de la libertad, las mismas que
van variando de acuerdo al tipo de infracción cometida pues puede ir desde el internamiento
domiciliario hasta el internamiento institucional.
A priori existen la privación de la libertad como medida cautelar en los siguientes casos:
-Siempre existan suficientes indicios sobre la existencia de una infracción de acción pública y su
autoría y complicidad en la infracción investigada:
-De los adolescentes que no cumplen catorce años de edad, en el juzgamiento de delitos de robo con
resultado de muerte, homicidio, asesinato, femicidio, sicariato, violación, secuestro extorsivo,
genocidio, lesa humanidad y delincuencia organizada.
-De los adolescentes que cumplen catorce años, en el juzgamiento de delitos sancionados en el
Código Orgánico Integral Penal con pena privativa de libertad de más de cinco años. (Código de la
Niñez y Adolescencia, 2014)
23
Tabla 2.
Los 2 últimos tipos de internamiento están establecidos como las medidas socioeducativas más
fuertes; en el caso del régimen semiabierto el adolescente podrá acudir a su centro de internamiento,
pero a su vez tendrá la facilidad de dirigirse a su centro de trabajo o estudios; mientras que el
internamiento institucional supone la privación total de la libertad (Galarza, 2015).
24
Tabla 3.
Según el COIP con pena Según el COIP con pena Según el COIP con pena
privativa de libertad de más de privativa de libertad de cinco privativa de libertad de más de
un mes hasta cinco años. hasta diez años diez años
Se aplicará la medida de amonestación y una o más de las siguientes medidas:
a) Imposición de reglas de a) Internamiento domiciliario Internamiento institucional de
conducta de uno a seis meses. de seis meses a un año. cuatro a ocho años.
b) Orientación y apoyo psico b) Internamiento de fin de Adicionalmente y seis meses
socio familiar de tres a seis semana de seis meses a un año. antes de concluir esta medida
meses. c) Internamiento con régimen socioeducativa se realizará una
c) Servicios a la comunidad de semiabierto de seis meses a dos evaluación integral que
uno a seis meses. años. determinará la necesidad de
d) Libertad asistida de tres d) Internamiento institucional seguimiento y control de hasta
meses a un año. de uno a cuatro años. dos años posteriores al
e) Internamiento domiciliario cumplimiento de la medida.
de tres meses a un año. Para los casos de delitos contra
f) Internamiento de fin de la integridad sexual y
semana de uno a seis meses. reproductiva, el juzgador
g) Internamiento con régimen especializado en adolescentes
semiabierto de tres meses a un infractores impondrá además la
año. obligación de que el
adolescente asista a programas
de educación sexual, dentro del
tratamiento de las medidas
socioeducativas.
25
4. HIPÓTESIS Y VARIABLES
4.1 Hipótesis
Al ser un estudio cuantitativo de tipo descriptivo, no cuenta con hipótesis, pues tal como lo refiere
Hernández Sampieri (2014) “No en todas las investigaciones cuantitativas se plantean hipótesis” …
“Sólo se formulan hipótesis cuando se pronostica un hecho o dato”. Motivo por el cual se ha optado por
obviar las mismas.
26
Los variables sociodemográficos tales como género, edad o años de experiencia generalmente
no se definen dentro de la conceptualización de variables por ser conocidos y comprensibles para la
gran mayoría de lectores (Hernández, Fernández y Baptista, 2014).
Tabla 4.
27
Variables -Edad -# de años Encuesta
Sociodemográficas sociodemográfica
- Preparatoria, Básica
-Escolaridad
Elemental, Básica
Media, Básica
Superior o
Bachillerato.
-Presencia de uno o
-Estructura
más de los padres u
Familiar
otras figuras a cargo
de su cuidado.
-Número de miembros
que conforman el
hogar.
-Tipo de vivienda
-Contexto
socioeconómico
-Servicios básicos con
los que contaba antes
de ingresar a la
institución.
28
5. METODOLOGÍA
Cuantitativo
Debido a que se generalizó los resultados encontrados en un grupo, en este caso los adolescentes. De
esta manera se logró establecer el nivel de impulsividad de los adolescentes infractores, contabilizando
el resultado general de los test, determinar el tipo de impulsividad predominante en los adolescentes
infractores, la edad promedio en la cual los adolescentes reflejan mayores niveles de impulsividad, para
lo cual se separó los test por edades, además de diferenciar los niveles de impulsividad según el tiempo
de internamiento en de los adolescentes resultado que se obtuvo gracias a la división de los adolescentes
por casas (Hernández Sampieri, 2008).
Descriptivo
Este tipo de estudios busca especificar propiedades y características importantes de cualquier
fenómeno que se analice, describiendo tendencias de un grupo o población. Por ello, este estudio
describe como la impulsividad subyace en el comportamiento delictivo de los adolescentes del Centro
de Orientación Juvenil Virgilio Guerrero, el nivel de impulsividad de los adolescentes infractores, la
edad en la que la impulsividad revela altos niveles, como el tiempo de internamiento influye en la
impulsividad de los sujetos y que tipo de impulsividad predomina en los mismos (Hernández
Sampieri, 2008).
29
Escala de Impulsividad de Barrat, dando las indicaciones generales sin dirigir las respuestas de los
adolescentes infractores.
5.4.1 Población
Los adolescentes del Centro de Orientación Juvenil Virgilio Guerrero se encuentran separados en 4
casas, la Casa Recepción, la Casa Superación, la Casa Renacer y la Casa Trascender, los mismo que se
encuentran separados en función de su edad. En cada casa se encuentran aproximadamente 30
personas, por lo que la población en general hace referencia a 120 adolescentes, con la posibilidad
diaria del ingreso y salida de cada uno de ellos.
Muestra no probabilística
Dentro del muestreo no probabilístico supone un procedimiento de selección orientado por las
características de la investigación, más que por un criterio estadístico de generalización, se trabajó con
los adolescentes, de la Casa Recepción, y de la Casa Renacer, para englobar la diversidad de la población
de acuerdo a sus características. Puesto que los mencionados se encuentran en internamiento provisional
e internamiento institucional respectivamente. En la Casa Renacer, se encuentran adolescentes de 16 a
18 años aproximadamente, los cuales ya tienen impuesto un tipo de medida socioeducativa, que pasaron
ya por un período superior a los 3 meses de residencia en el Centro de Orientación Juvenil Virgilio
Guerrero, que además ya han tenido un período de adaptación al internamiento y por otra parte, en la
Casa Recepción, se encuentran personas que han estado en un período de tiempo de 1 día hasta 3 meses
de internamiento en el C.O.J.V.G., que aún no tienen una medida socioeducativa asignada, y que están
en edades comprendidas entre 13 a 17 años.
Es una muestra no probabilística, dado que fue una muestra recogida por conveniencia, “estas
muestras están formadas por los casos disponibles a los cuales tenemos acceso” (Hernández Sampieri,
2008); esto bajo las necesidades de la investigación, procurando realzar la diversidad tanto del
muestreo como de los posibles resultados. Para lo cual se investigó a 44 adolescentes, 24
pertenecientes a la Casa Recepción y 20 pertenecientes a la Casa Renacer. Cabe mencionar que cuando
se ejecutó el estudio se contó dicho número de adolescentes para la aplicación de los instrumentos,
debido a que en la Casa Recepción cada día existe la posibilidad de que ingrese un nuevo adolescente y
30
a su vez, que adolescentes que ya hayan sido juzgados sean redirigidos a la Casa Superación, Renacer o
Trascender dependiendo de la edad; mientras que los adolescentes de la Casa Renacer tienen la
posibilidad de aplicar por la libertad asistida al cumplir el 60% de la medida socioeducativa impuesta,
o a su vez obtener su libertad completa al terminar su condena, por lo cual existe la posibilidad de su
salida; razón por la que no se cuenta con un número de adolescentes establecido.
5.5.1. Procedimiento
Para la recolección de datos, en primera instancia se envió una solicitud al Centro de Orientación
Virgilio Guerrero, a la cual se adjuntó el reactivo psicológico y un consentimiento informado; quienes,
en un período de 4 días, dieron una respuesta favorable, posterior a ello se mantuvo una reunión con el
Director el Padre Gilberto Rubio y la Lic. Nelly Ramírez con los cuales se trataron los objetivos,
relevancia y la metodología a aplicar en el estudio. Para mayor constancia, se entregó una planificación
con la cual se propuso la práctica de talleres con fines educativos, como una forma de acercamiento
hacia los adolescentes y su realidad, además del proceso de recolección de información. El C.O.J.V.G,
realiza una planificación mensual, por lo cual el centro propuso la separación de fechas en el mes
consecutivo para poder aplicar los talleres y los reactivos psicológicos. Para la aplicación de los
reactivos psicológicos se programaron 3 fechas, 2 para la Casa Renacer, para lo cual se contó con la
presencia de la Lic. Nelly Ramírez y 1 fecha para la Casa Recepción, con la presencia de la Dra.
Amparo León; para su efecto las autoridades realizaron la respectiva introducción y presentación de la
investigadora al grupo, posterior a ello la investigadora manifestará el proceso a seguir, presentándoles
a los investigados en primera instancia el consentimiento informado a las personas que tienen la
mayoría de edad, mientras que en el caso de los participantes menores de edad de procedió a hacerles
firmar a sus respectivos tutores (familiares, policía custodio, director del centro), posterior a ello se les
presentó la encuesta sociodemográfica, para finalmente proceder a la aplicación del reactivo
psicológico la Escala de Impulsividad de Barratt (Morales, 2012).
31
5.5.2 Instrumentos
Encuesta sociodemográfica
Es importante acotar que la encuesta sociodemográfica fue elaborada por la investigadora con el fin
de obtener datos generales, como edad, sexo, escolaridad lo que permitió contextualizar la situación del
adolescente en conflicto con la ley. Para comprender su realidad socioeconómica, se preguntó sobre el
tipo de vivienda y el acceso a servicios básicos, además para conocer la estructura familiar se indago
con quienes vivía el adolescente y el número de miembros del hogar.
La Escala de Impulsividad de Barratt, es uno de los instrumentos más utilizados para evaluar
impulsividad, el BIS 11 hace referencia a la onceava versión de la misma. Fue diseñada por Barrattt.
Su aplicación es auto-administrada. El cuestionario está compuesto por 30 ítems con opciones en la
cual raramente o nunca puntúa (0), ocasionalmente puntúa (1), a menudo puntúa (3), siempre o casi
siempre puntúa (4) las cuáles se reparten en las siguientes tres escalas: Impulsividad cognitiva,
impulsividad motora, impulsividad por no planificación o no planeada (Morales, 2012). Las preguntas
4, 7, 10, 13, 16, 19, 24 y 27 hacen referencia a la impulsividad cognitiva, las preguntas 2, 6, 9, 12, 15,
18, 21, 23, 26 y 29 a la impulsividad motora, mientras que las preguntas 1, 3, 5, 8, 11, 14, 17, 20, 22,
25, 28 y 30 tienen relación con la impulsividad no planeada. Cabe señalar que existen preguntas que se
califican de modo inverso, es decir las interrogantes 1, 5, 6, 7, 8, 10, 11, 13, 17, 19, 22 y 30 puntuarían
de la siguiente manera raramente o nunca puntúa (4), ocasionalmente puntúa (3), a menudo puntúa (1)
siempre o casi siempre puntúa (0). Siendo el valor más alto el correspondiente al tipo de impulsividad
predominante en el sujeto.
El punto de corte para considerar a un individuo altamente impulsivo es de 72 o más puntos, según
lo descrito por Stanford y colaboradores; puntajes entre 52 y 71 se consideran normales, y niveles
inferiores de 52 se interpretan en sujetos controlados en exceso, o que no responden el cuestionario con
sinceridad.
En 2001 el grupo de trabajo de la Dra. Oquendo y colaboradores, publicó una versión adaptada al
español, considerada valida y confiable por sus desarrolladores para aplicar en personas de habla
hispana. (Rodríguez, 2016)
32
Tabla 5.
Impulsividad Cognitiva 4, 7, 10, 13, 16, 19, 24 y Son sujetos que se basan en ideas positivas
27 sobre la conducta o la supresión de las
posibilidades de que sus actos denoten
consecuencias negativas.
Impulsividad Motora 2, 6, 9, 12, 15, 18, 21, Implica actuar sin pensar, dejándose llevar por
23, 26 y 29 el ímpetu del momento
No consideran las consecuencias de sus actos
Impulsividad no planeada 1, 3, 5, 8, 11, 14, 17, 20, ni en lo positivo, ni en lo negativo por su falta
22, 25, 28 y 30 de predisposición de ver hacia al futuro,
viviendo solo el presente.
Además, Ramos, Pérez y Bolaños (2015) realizaron un estudio para la validación de la Escala de
Impulsividad BIS 11 y su aplicación en adolescentes ecuatorianos, en el cual para valorar la
consistencia interna del instrumento BIS 11-c se realizó el procedimiento estadístico Alfa de Cronbach
33
(Cronbach, 1951) en donde se obtuvo niveles aceptables tal como se evidencia en el siguiente cuadro
comparativo, en el cual además se aprecia los resultados encontrados en estudios en España y
Colombia.
Figura 1. Comparación Alfa de Cronbach 11-c reportado en estudios realizados en España, Colombia y Ecuador. Fuente:
Validación de la Escala de Impulsividad Bis 11-C para su Aplicación en Adolescentes Ecuatorianos. Ramos,
Pérez y Bolaños, 2015.
Al ser un estudio cuantitativo, se utilizó el programa SPSS, para poder codificar y organizar los
datos, procurando la maximización de recursos y tiempo. Para mayor comprensión se realizaron tablas
estadísticas con Excel, las cuales permiten la visualización de los resultados arrojados tanto en la
encuesta sociodemográfica, como en los resultados del BIS 11. Para lo cual en primera instancia se
corrigió los test en base a una plantilla Excel, en la cual, al colocar los datos obtenidos del test,
arrojaron resultados de manera rápida y eficaz. Para comprobar las hipótesis o descartarlas se revisó los
datos que arrojados por la Escala de Impulsividad de Barratt (BIS 11), para ello las tabulaciones se
ejecutaron de manera global, primero se valoró los niveles de impulsividad independientemente de la
edad de los participantes y la Casa a la que pertenecen, posterior a ello, se analizó los niveles de
impulsividad global por Casas, al tener los resultados globales se pudo observar cuales son los
adolescentes que reflejan mayores niveles de impulsividad según el tiempo de internamiento, después
se tabuló en razón de la edad, para comprobar a qué edad los adolescentes reflejan mayores niveles de
impulsividad, mientras que para comprobar que la impulsividad motora es la más frecuente en
adolescentes, se valoró la escala por tipos. La encuesta sociodemográfica coadyuvó con datos como la
edad necesaria para corroborar o descartar algunas hipótesis además de poder contextualizar la
situación de vida de cada participante.
34
6. RESULTADOS
En la Tabla 6 se puede visualizar la variable edad que corresponde a la primera sección: datos
generales de la encuesta sociodemográfica.
Tabla 6.
Interpretación. Para la ejecución del presente proyecto investigativo, se consideró la variable edad,
de la cual se establecen los siguientes resultados; de un total de 44 participantes correspondientes tanto
a la Casa Recepción como a la Casa Renacer, los adolescentes de entre 16 a 17 años reflejan el mayor
porcentaje con un 55%, mientras que el 23% corresponde a adolescentes de 18 a 19 años, asimismo los
participantes de 13 a 15 años representan el 20%, el 2% está representado por un participante de 20
años. La diversidad de edades en los adolescentes radica en que los adolescentes son destinados al
internamiento como medida socioeducativa a partir de los 14 años, sin embargo, existen casos en los
que se ingresan personas menores de 14 años cuando han cometido infracciones graves. Además, se
considera la edad en la que el sujeto cometió la infracción, es decir así le falte un día para cumplir la
mayoría de edad será considerado inimputable y juzgado como adolescente.
35
En la Tabla 7 se puede visualizar la variable escolaridad que permite conocer la diversidad de
niveles de estudio que cursan los participantes.
Tabla 7.
Interpretación. Los resultados revelan que de los participantes el 44% cursa el Bachillerato, el
41% la educación básica superior, mientras que en menor medida con el 11% cursa la educación básica
media y sólo un participante que representa el 2% cursa la educación superior; cabe mencionar que
dentro del C.O.J.V.G. se les permite continuar o incluso iniciar sus estudios de ser el caso, puesto que
uno de los objetivos del internamiento es la reeducación de los internos.
36
En la Tabla 8 se puede visualizar la variable lugar de nacimiento que permite conocer la
procedencia de los participantes.
Tabla 8.
37
En la Tabla 9 se puede encontrar la variable hogar, lo cual se indagó con el fin de establecer la
estructura familiar de los participantes.
Tabla 9.
Interpretación. De los participantes un 48% afirmó pertenecer a un hogar conformado por padre y
madre, seguido de un 30% de participantes que manifestó vivir solo con su madre, en menores
porcentajes los adolescentes manifestaron vivir solo con su padre, abuelos, tíos u otras personas que
hacen la función de sus tutores.
38
En la Tabla 10 se puede visualizar el número de personas que conforman la familia de los
participantes.
Tabla 10.
39
En la Tabla 11 se observa el tipo de vivienda de los participantes.
Tabla 11.
40
En la Tabla 12 se visualiza el tipo de servicios básicos con los que cuentan los participantes.
Tabla 12.
Interpretación. Los servicios básicos ayudan a que el ser humano cuente con una vida saludable,
actualmente el servicio de telefonía y de internet se han vuelto una necesidad, que a su vez contribuye
en el desarrollo adecuado de las personas. Los resultados reflejan que el 97% de adolescentes cuenta
con servicio de agua potable y luz eléctrica respectivamente, mientras que un 86% tiene servicio de
alcantarillado, un 81% con telefonía, mientras que el internet refleja menos accesibilidad en
comparación de los otros servicios con un 77%.
41
Del análisis inferencial de la aplicación de la Escala de Impulsividad de Barratt (BIS 11) se
obtuvieron los siguientes resultados:
Tabla 13.
Interpretación. Los niveles altos de impulsividad hacen referencia a sujetos que optan por
conductas impulsivas si la situación lo amerita. La mayoría de los adolescentes con un 43% reflejan
niveles normales de impulsividad, sin embargo, un porcentaje significativo presenta niveles inferiores
de impulsividad con un 43%, este tipo de impulsividad hace mención a sujetos controlados en exceso o
con falta de honestidad a la hora de responder el test, mientras que un porcentaje menor con un 9%
revela niveles altos de impulsividad en este caso son sujetos que mantienen conductas impulsivas en
todo momento sin considerar las consecuencias.
42
En la Tabla 14 se presenta los resultados arrojados por la Escala de Impulsividad de Barratt
(BIS11), en su escala de tipos que hace referencia a la impulsividad de tipo cognitiva, motora y no
planeada.
Tabla 14.
Tipos de Impulsividad
Interpretación. Se encontró que los adolescentes tienen mayor inclinación por la impulsividad no
planeada, es decir no consideran las consecuencias de sus actos ni en lo positivo, ni en lo negativo por
su falta de predisposición de ver hacia al futuro, viviendo solo el presente, puesto que el 43% de la
muestra revelo inclinación hacia este tipo de impulsividad. consecuencias negativas. Por otro lado, los
participantes con impulsividad motora reflejan el 39%, este tipo de impulsividad hace referencia a
personas que se dejan llevar por el ímpetu del momento sin pensar en las consecuencias. Además, se
encontró que un 18% de la muestra tiene predisposición hacia la impulsividad de tipo cognitiva, en la
cual los sujetos se basan en ideas positivas sobre la conducta o la supresión de las posibilidades de que
sus actos denoten.
43
En la Tabla 15 y Tabla 16 se presenta los resultados arrojados por la Escala de Impulsividad de
Barratt (BIS11), de acuerdo a los niveles considerando la edad de los participantes.
Tabla 15.
Interpretación. Los resultados muestran que la mayoría de los adolescentes de entre 13 a 16 años
es decir el 65% reflejan niveles normales de impulsividad, mientras que los sujetos que revelan niveles
inferiores o controlados en exceso representan el 25% de la muestra, además el 10% revela niveles
altos o superiores.
44
-Adolescentes de 17 a 20 años de edad
Tabla 16.
45
En la Tabla 17 y Tabla 18 se presenta los resultados arrojados por la Escala de Impulsividad de
Barratt (BIS11), de acuerdo a los niveles considerando el tiempo de internamiento.
Tabla 17.
Interpretación. La Casa Recepción alberga a los adolescentes que son internados como medida
precautelar hasta que se realice la investigación de la presunta investigación, por lo que pueden
permanecer de 1 día a 3 meses hasta que le dicte sentencia. Los adolescentes con internamiento
pertenecientes a esta casa reflejan en un 50% niveles normales de impulsividad, un porcentaje
relevante de 46% refleja niveles inferiores de impulsividad, además, los adolescentes que reflejan
niveles altos de impulsividad alcanzan el 4% de la muestra.
46
Tabla 18.
47
7. DISCUSIÓN
49
8. CONCLUSIONES
Según los datos que arrojan el estudio, los niveles de impulsividad en adolescentes infractores son
normales (48%), seguido de niveles inferiores (49%) a pesar de que en estudios anteriores se haya
evidenciado niveles altos de impulsividad relacionados a la conducta delictiva, se evidenció un número
importante de adolescentes con niveles inferiores de impulsividad, lo que hace referencia al excesivo
control de los participantes o a la búsqueda de deseabilidad social, lo que provocaría su falta de
honestidad a la hora de responder el test. Por otro lado, no se encontró un número significativo de
participantes (9%) con niveles altos de impulsividad.
La impulsividad no planeada en la que el sujeto no considera las consecuencias de sus actos es la
predominante en los adolescentes (43%), sin embargo, existieron varios adolescentes que se inclinaron
hacia la impulsividad motora (39%), en ambos casos se extrae como factor común que la mayoría de
los adolescentes participantes actúan dejándose llevar por sus impulsos, sin considerar las
consecuencias de sus actos, puesto que tienen una visión con tendencia hacia el presente. Puesto que en
menor medida (18%) se encontraron adolescentes con impulsividad cognitiva, aquella en la que el
sujeto considera que las consecuencias de sus actos serán positivas.
Se encontró que mientras los adolescentes de 13 a 16 años presentan niveles normales de
impulsividad con un 65%, los adolescentes mayores de 16 años reflejaron niveles inferiores de
impulsividad con 54%. Por lo que se evidenció que la edad incide en la impulsividad, puesto que a
mayor edad van decreciendo en los adolescentes sus niveles de impulsividad.
Para todo ser humano una situación de cambio implicaría un tiempo de adaptación, los adolescentes
con tiempo de internamiento mayor a 3 meses revelaron niveles normales de impulsividad con un 45%.
al igual que los adolescentes con menor tiempo que reflejan niveles normales de impulsividad con un
50%, a pesar de que la diferencia entre ambos grupos no es considerable se evidenció un incremento en
los niveles altos de impulsividad a medida que su estancia en el centro se prolonga, puesto que
mientras en la Casa Recepción con adolescentes en internamiento de hasta 3 meses reflejaron un 4% de
niveles altos de impulsividad en comparación con el 15% de los adolescentes de la Casa Renacer con
internamiento mayor a 3 meses.
50
9. RECOMENDACIONES
Se sugiere a las autoridades del C.O.J.V.G. continúen con el trabajo multidisciplinario que realizan
en favor del desarrollo integral de los adolescentes internos, más aún se centren en trabajar en temas
sobre autocontrol de los impulsos, sobre todo considerando a la impulsividad como un factor
predisponente y mantenedor de la conducta infractora, para así prevenir la reincidencia en los mismos.
Los adolescentes tienden a actuar sin considerar las posibles consecuencias de sus actos, por ende,
se le invita al equipo de Psicología a trabajar con los adolescentes, tanto sobre el control de los
impulsos, enfocado en que al autodominio, para que de esta manera sea el sujeto quien tome las riendas
de su vida y no sus impulsos motiven su destino, así mismo se trabaje en el proceso de toma de
decisiones, que le permita al adolescente decidir cuál es el tipo de vida que quiere vivir, haciendo
énfasis en que las decisiones que tome traerán consecuencias, sean estas positivas o negativas
dependiendo de lo que se escoja, y de esta manera crear conciencia en el adolescente sobre su conducta
actual y fomentar el cambio.
Se sugiere crear un convenio con la Unidad de Vinculación con la Sociedad de la Facultad de
Ciencias Psicológicas de la Universidad Central del Ecuador, para que de esta manera los pasantes de
psicología clínica puedan ofrecer intervenciones psicológicas a los adolescentes a nivel individual y
familiar, contemplando primero a la impulsividad del sujeto, como fruto del aprendizaje
transgeneracional, y segundo considerando su relación con la agresividad, pues como se evidenció en
la encuesta sociodemográfica la mayoría de los adolescentes han experimentado situaciones de
violencia intrafamiliar, hecho que puede estar relacionado con la conducta del adolescente. De esta
manera, cuando los adolescentes retornen a casa puedan gozar de un ambiente familiar sano, que les
permita desarrollarse integralmente.
Se recomienda potenciar las actividades lúdicas dentro del centro, dado que estas permiten al
individuo mitigar su estancia durante su período de internamiento, pues como se vio en los resultados
la impulsividad se incrementa en relación al tiempo que la persona permanece privada de su libertad.
51
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54
11. ANEXO
2018
55
UNIVERSIDAD CENTRAL DEL ECUADOR
FACULTAD DE CIENCIAS PSICOLÓGICAS
PERFIL DEL PROYECTO
● Carrera:
o Psicología Clínica
● Área de conocimiento:
.
o Ciencias de la Salud.
Línea de Investigación:
Sublínea de Investigación
● Investigadores proponentes:
56
1. Título
➢ Objetivos específicos:
58
específicos y responsabilidades, de acuerdo al equipo de Psicología de la “Casa
Recepción” y la “Casa Renacer”.
2. Marco contextual
Para la ejecución del trabajo de investigación, se consideró como población a los
adolescentes del Centro de Orientación Juvenil “Virgilio Guerrero”, la cual tiene sus
orígenes a mediados del año de 1929, en el gobierno del Dr. Isidro Ayora, época en
la que se le conocía como una escuela correccional, debido a la inexistencia de
políticas claras que dirijan su campo de acción respecto a los menores allí recluidos y
a la existencia de procedimientos inadecuados. En el año de 1937 en el gobierno del
general Alfredo Enríquez Gallo, se crean los Tribunales de Menores y la Dirección
General de Hogares de Protección Social, circunstancia que transforma el nombre,
de Escuela Correccional a “Escuela de Trabajo”. El 14 de octubre de 1992, el
Ministerio de Bienestar Social, suscribe el primer convenio con la congregación de
Religiosos Terciarios Capuchinos, con el nombre de “Centro de Rehabilitación
Juvenil Virgilio Guerrero”, cuyo principio fundamental se basa en ofrecer a los
adolescentes varones entre los 13 y 18 años en conflicto con la ley, mejorar su
calidad de vida individual, familiar y social, a través del acompañamiento e
intervención psico-socioeducativa y espiritual de forma integral. (Vaca, 2015)
El objetivo principal de los Terciarios es promover el desarrollo integral del menor,
procurando su realización individual y su progresiva readaptación y reinserción en su
medio socio familiar, ayudándole a adquirir madurez y autonomía. Abarcan cuantas
actividades ayuden a liberar a los jóvenes de la problemática en la que se hallan
inmersos, sea personal, social o familiar (Tamayo, 2017).
Actualmente se encuentra organizada en 4 Casas; la Casa Recepción, en la cual
se encuentran los adolescentes de manera provisional como medida cautelar, por un
período de hasta 3 meses con el fin de que se investigue el delito por el cual es
59
acusado y el juez pueda determinar el tipo de medida socioeducativa y con ello el
tipo de internamiento; la Casa Superación, en la cual se encuentran adolescentes de
13 a 16 años; la Casa Renacer en la cual se encuentran adolescentes de 16 a 18
años; la Casa Trascender de 17 a 21 años.
Según la Lic. Nelly Ramírez miembro del departamento de Psicología, los
jóvenes dentro del C.O.J.V.G; en la mañana cumplen con actividades académicas,
sean estas en educación básica o educación secundaria; mientras que en la tarde
participan en talleres como panadería, arte, carpintería, cerrajería o sistemas; que en
un futuro puedan aportarles una futura herramienta de trabajo.
En cuanto a las visitas, estas se realizan cada fin de semana en un horario de 2 a
5 pm; en el cual se reciben exclusivamente a familiares.
Cuando los adolescentes, cumplen el 60% de la medida socio educativa
impuesta, su caso pasa a revisión por parte del equipo de psicología, trabajo social y
los educadores, con el fin de viabilizar o no algún tipo de libertad asistida; la cual
puede darse mediante internamiento semi-abierto, que consiste en que el
adolescente salga en la mañana del centro a laborar o estudiar dependiendo del
caso, pero regrese por la noche, todo esto con el respaldo familiar, en especial de un
representante legal, que este en la capacidad de garantizar una buena reinserción al
medio, así como firmar su salida y entrada al centro; razón por la cual este tipo de
internamiento no se da con frecuencia, debido a que muchos de los jóvenes son de
provincia y no tienen un representante legal que pueda ir a diario a firmar su salida e
ingreso, ni hacerse responsable de ellos. La segunda alternativa es el Internamiento
de fin de semana, en la cual el adolescente ingresa el día sábado al centro y se retira
el día lunes, todo esto con respaldo del equipo de Psicología, así como de la familia
del implicado; por ser más flexible es el tipo de libertad asistida al que más recurren
los adolescentes.
No existen datos estadísticos sobre el tipo de delitos por cuales son retenidos los
adolescentes; pero de entre los delitos más comunes según las autoridades del
lugar, se mencionan a continuación en orden de frecuencia de cometimiento: la
violación, abuso sexual, acoso sexual, tentativa de abuso sexual, robo con violencia,
asesinato, homicidio y tráfico de drogas.
60
3. Marco teórico
Marco Epistemológico
El presente trabajo investigativo tiene como base la corriente cognitiva conductual,
se debe considerar a la impulsividad como una forma rápida de actuar, sin pensar en
las consecuencias, como un mecanismo de defensa que puede ser positivo o como
una conducta que podría acarrear resultados perjudiciales. Está podría entenderse
mediante la teoría del aprendizaje social por modelamiento. (Berkowitz, 1993)
Por otro lado, Bandura destaca que hay una combinación de factores sociales y
psicológicos que influyen en la conducta. Considera que los factores externos son
tan importantes como los internos y que los acontecimientos ambientales, los
factores personales y las conductas interactúan con el proceso de aprendizaje.
(Woolfolk, 2010)
Por ello, por más que la impulsividad sea considerada un mecanismo de defensa
innato en el ser humano, dependerá del contexto en el que se desenvuelva el sujeto
para que tome conductas o decisiones impulsivas como su primer recurso ante un
estímulo, mediante un aprendizaje previo dado por la experiencia directa o por medio
de modelos. (Bandura, 1987)
Es así como este tipo de conductas pueden verse influenciadas por sujetos que
actuaron como modelos para los adolescentes, tal como lo afirma Bandura (1987):
Los humanos aprenden la mayor parte de su conducta a través de la observación
por medio de modelado: al observar a los demás, nos hacemos idea de cómo se
efectúa las conductas nuevas y posteriormente, esta información nos sirve como
guía. (p.90)
La figura de apego, cuidadores principales, personas o personajes que
representen admiración para los adolescentes, son los principales modelos de
comportamiento. Meichenbaum, es el autor más representativo del enfoque
cognitivo-conductual en relación con la impulsividad, la trata como una variable
cognitiva que media entre el estímulo antecedente y las consecuencias que van a
desencadenarse (Fernández Millán, Pérez Máñez, & Carrasco Salmerón, 2002).
Es por ello que la conducta delictiva de los adolescentes, puede ser el resultado
de una o un conjunto de conductas impulsivas, en las que el sujeto no meditó sobre
los efectos de su comportamiento; dejándose influenciar por estímulos externos,
resultado de una relación estímulo-respuesta, lo cual dio como consecuencia el
cumplimiento de medidas socioeducativas. (Knorring & Ekselius, 1998; Tremblay,
Pihl, Vitaro & Dobkin, 1994)
61
Plan analítico:
Capítulo I: Impulsividad
1.1 Concepto de Impulsividad
1.1.1 La impulsividad en la teoría de Eysenck
1.1.2 La impulsividad en la teoría de Zuckerman
1.2 Tipos de impulsividad
1.2.1 Tipos de Impulsividad según Dickman
1.2.1.1 Impulsividad Funcional
1.2.1.2 Impulsividad Disfuncional
1.3 Subtipos de Impulsividad según Barratt
1.3.1 Impulsividad Cognitiva
1.3.2 Impulsividad No Planeada
1.3.3 Impulsividad Motora
1.4 Neuropsicología de la impulsividad
1.4.1 Impulsividad serotoninérgica
1.4.2 Impulsividad dopaminérgica
1.5 Impulsividad y la agresividad
1.6 Impulsividad y la conducta delictiva
1.7 Impulsividad en adolescentes
4. Hipótesis y variables
H1: Los adolescentes infractores tienen niveles altos de impulsividad.
H2: La impulsividad motora es el tipo de impulsividad frecuente en los adolescentes
infractores.
H3: Los adolescentes infractores, de menor edad (13-16 años) reflejan mayores
niveles de impulsividad.
H4: Los adolescentes con mayor tiempo de internamiento en el C.O.J.V.G reflejan
menores niveles de impulsividad.
62
A continuación, se presenta la definición de impulsividad, tiempo de internamiento
y variables sociodemográficas.
“La impulsividad se ha asociado a tres factores principales: el actuar sin una
implicación directa de las funciones del lóbulo frontal, un aumento en la velocidad de
la respuesta emitida y una obtención inmediata de gratificación” (Sánchez-Sarmiento,
Giraldo-Huertas, & Quiroz-Padilla, 2013, p.241).
Barratt ha dividido a la impulsividad en tres, siendo éstas: la impulsividad cognitiva,
también conocida como “La impulsividad de procesamiento de la información, la cual
se encuentra circunscrita al área del aprendizaje, es decir, al afrontamiento y la
resolución de problemas” (Álvarez, 2011, p.5), mientras que la impulsividad No
Planeada “Supone una falta de previsión hacia el futuro” (Figueroa Varela, Anllo-Vento,
& Vila Castellar, 2013), por otro lado la impulsividad motora “Implica la tendencia a
actuar según los estados emocionales transitorios o del momento”. (Patton, Stanford,
& Barrattt, 1995).
Por otro lado, el Internamiento institucional puede ser de 3 tipos como medida
cautelar, Internamiento institucional o Libertad asistida, en este estudio se trabajará
con los adolescentes en Internamiento como medida cautelar tanto como en
Internamiento Institucional. (Codigo de la Niñez y Adolescencia, 2013)
El primero hace referencia a “Un internamiento provisional, para adolescentes que
ingresen por efecto de una medida cautelar” (Código de la Niñez y Adolescencia,
2013), el cual tiene una duración máxima de 3 meses.
El segundo obedece al internamiento en régimen cerrado, el cual consiste en la
privación total de la libertad del/la adolescente que debe cumplir en un Centro de
Atención integral para Adolescentes infractores; es una medida socioeducativa más
grave prevista en la ley, y desde el punto de vista jurídico se asemeja con la pena de
prisión; ésta medida socioeducativa tiene como objetivo un contenido educativo y de
reintegración, con el fin de superar el déficit del adolescente y prepararlo para la vida
en libertad, a fin de que cuando recupere la libertad tenga un proyecto de vida.
(Velasco, 2015)
Los variables sociodemográficos tales como género, edad o años de
experiencia generalmente no se definen dentro de la conceptualización de variables
por ser conocidos y comprensibles para la gran mayoría de lectores (Hernández,
Fernández y Baptista, 2014).
63
Impulsividad - Motora -Niveles Altos de Escala de
(Variable -Cognitiva Impulsividad Impulsividad de
Dependiente) -No Planeada -Niveles Normales Barratt (Salvo, L.
de Impulsividad & Castro, A.
-Niveles Inferiores 2013).
de Impulsividad
-Tipo de
-Muy buena,
relación familiar
buena, regular o
mala.
-Calidad de la
-Muy buena,
comunicación
buena, regular o
familiar
mala.
-Presencia de
-Siempre, casi
violencia
siempre, a veces o
psicológica en
nunca.
el hogar
-Presencia de
-Siempre, casi
violencia física
siempre, a veces o
en el hogar
nunca.
-Contexto
-Servicios básicos
socioeconómico
con los que
contaba antes de
ingresar a la
institución.
64
5. Metodología
5.1. Enfoque de la investigación
Cuantitativo
Debido a que se pretende generalizar los resultados encontrados en un grupo, en
este caso los adolescentes infractores, con el fin demostrar las hipótesis planteadas.
De acuerdo al estudio planteado se busca determinar la que tipo de impulsividad es
más frecuente en los adolescentes infractores, cual es la edad promedio en la cual los
adolescentes reflejan mayores niveles de impulsividad, además de corroborar si los
adolescentes en internamiento institucional reflejan mayores niveles de impulsividad
en contraste con los adolescentes en internamiento como medida
precautelar.(Hernández Sampieri, 2008)
6. Población y muestra
6.1. Población
65
Cabe mencionar que los adolescentes de la institución se encuentran separados
en 4 Casas, de acuerdo al tipo de internamiento y a la edad de los mismos. Se
trabajará con 60 adolescentes aproximadamente, de ellos 30 pertenecientes a la
Casa Recepción, mientras que los otros 30 corresponden a la Casa Renacer del
Centro de Orientación Juvenil Virgilio Guerrero. Los mencionados se encuentran en
internamiento provisional e internamiento institucional. El número de participantes es
estimado, puesto que la Casa Recepción día a día tiene la posibilidad de recibir más
adolescentes y de que otros sean colocados ya en otras Casas debido a su y la
imposición de la medida socioeducativa, mientras que la Casa Renacer tiene la
posibilidad de que alguno de los adolescentes salga o que al cumplir el 60% de la
medida socioeducativa, opte por algún tipo de libertad asistida.
66
su vez obtener su libertad completa al terminar su condena, por lo cual existe la
posibilidad de su salida.
7. Recolección de datos
7.1. Procedimiento
Para la recolección de datos, en primera instancia se envió una solicitud al Centro
de Orientación Virgilio Guerrero, a la cual se adjuntó el reactivo psicológico y un
consentimiento informado; quienes, en un período de 4 días, dieron una respuesta
favorable, posterior a ello se mantuvo una reunión con el Director el Padre Gilberto
Rubio y la Lic. Nelly Ramírez con los cuales se trataron los objetivos, relevancia y la
metodología a aplicar en el estudio. Para mayor constancia, se entregó una
planificación con la cual se propuso la práctica de talleres con fines educativos, como
una forma de acercamiento hacia los adolescentes y su realidad, además del
proceso de recolección de información. El C.O.J.V.G, realiza una planificación
mensual, por lo cual el centro propuso la separación de fechas en el mes consecutivo
para poder aplicar los talleres y los reactivos psicológicos. Para la aplicación de los
reactivos psicológicos se programaron 3 fechas, 2 para la Casa Renacer, para lo cual
se contará con la presencia de la Lic. Nelly Ramírez y 1 fecha para la Casa
Recepción, con la presencia de la Dra. Amparo León; para su efecto las autoridades
realizarán la respectiva introducción y presentación de la investigadora al grupo,
posterior a ello la investigadora manifestará el proceso a seguir, presentándoles a los
investigados en primera instancia el consentimiento informado, posterior a ello la
encuesta sociodemográfica, para finalmente proceder a la aplicación del reactivo
psicológico.
El método a utilizar es el Hipotético-Deductivo ya que, consiste en un
procedimiento que intenta dar respuesta a los distintos problemas que recaen sobre la
postulación de hipótesis que se toman como verdaderas, para ello se formuló las
siguientes hipótesis: 1) Los adolescentes infractores tienen niveles altos de
impulsividad. 2) La impulsividad motora es el tipo de impulsividad frecuente en los
adolescentes infractores. 3) Los adolescentes infractores, de menor edad (13-16 años)
reflejan mayores niveles de impulsividad. 4) Los adolescentes con mayor tiempo de
internamiento en el C.O.J.V.G reflejan menores niveles de impulsividad. Las cuales se
67
comprobarán su veracidad de acuerdo a los resultados arrojados mediante la
aplicación de la Escala de Impulsividad de Barratt y la Encuesta sociodemográfica
elaborada por la autora del estudio.
7.2. Instrumentos
Encuesta sociodemográfica
Es importante acotar que la encuesta sociodemográfica fue elaborada con el fin de
obtener datos generales, como edad, sexo, escolaridad con el fin de contextualizar la
situación del adolescente en conflicto con la ley. Para comprender su realidad
socioeconómica, se preguntará sobre el tipo de vivienda y el acceso a servicios
básicos; además existe la necesidad de indagar sobre la estructura familiar, por ello
se explorará sobre el tipo de relación y comunicación en la familia, y la presencia o
ausencia de agresiones tanto físicas como psicológicas en el hogar, que pudieron de
alguna manera poner al adolescente en un estado de vulnerabilidad, que
predispongan el cometimiento de actos ilícitos.
68
Además, Ramos, Pérez y Bolaños (2015) realizaron un estudio para la validación
de la Escala de Impulsividad BIS 11 y su aplicación en adolescentes ecuatorianos,
en el cual para valorar la consistencia interna del instrumento
BIS 11-c se realizó el procedimiento estadístico Alfa de Cronbach (Cronbach,
1951) en donde se obtuvo niveles aceptables tal como se evidencia en el siguiente
cuadro comparativo, en el cual además se aprecia los resultados encontrados en
estudios en España y Colombia.
Figura 1. Comparación Alfa de Cronbach. Fuente: Validación de la Escala de Impulsividad Bis 11 para
su Aplicación en Adolescentes Ecuatorianos. Ramos Galarza, Pérez Salas (2015)
8. Análisis de datos
Al ser un estudio cuantitativo, se utilizará el programa SPSS, para poder codificar
y organizar los datos, procurando la maximización de recursos y tiempo. Para mayor
comprensión se realizarán tablas estadísticas que permitan la visualización de los
resultados arrojados tanto en la encuesta sociodemográfica, como en los resultados
del BIS 11. Para lo cual en primera instancia se corregirá los test en base a una
plantilla Excel, en la cual, al colocar los datos obtenidos del test, arrojan resultados
de manera más rápida y eficaz. Para comprobar las hipótesis o descartarlas bastará
con revisar los datos que arroje la Escala de Impulsividad de Barratt (BIS 11), para
ello las tabulaciones se ejecutarán de Casa en Casa, primero se valorarán los niveles
de impulsividad independientemente de la edad de los participantes y la Casa a la
que pertenecen, posterior a ello, se analizará los niveles de impulsividad global por
Casas, al tener los resultados globales se podrá observar cuales son los
adolescentes que reflejan mayores niveles de impulsividad según el tiempo de
internamiento, después se tabulara en razón de la edad, para comprobar a qué edad
los adolescentes reflejan mayores niveles de impulsividad, mientras que para
comprobar que la impulsividad motora es la más frecuente en adolescentes, se
valorará la escala por tipos. La encuesta sociodemográfica coadyuvará con datos
69
como la edad necesaria para corroborar o descartar algunas hipótesis además de
poder contextualizar la situación de vida de cada participante.
9. Consideraciones éticas
70
Impulsividad de Barratt. Además, se adjunta el Anexo (F) referente a la
Declaración de confidencialidad.
5. Aleatorización equitativa de la muestra; para la aplicación de instrumentos
se considerará a toda la muestra, sin hacer diferencias por motivos de raza,
nacionalidad, origen étnico, orientación sexual, género, ideología, creencias
religiosas o culturales, discapacidad, y/o enfermedad.
6. Protección de la población vulnerable; los sujetos participantes tienen doble
vulnerabilidad al ser adolescentes y estar privados de la libertad, se
garantiza salvaguardar sus derechos evitando la discriminación, el uso de
estereotipos, o prejuicio alguno que pueda transgredir su integridad
personal. Además, se cumplirá con las normas de la institución, en la cual
está el no mencionar el delito por el cual se encuentran en internamiento,
por ello en la encuesta sociodemográfica no se solicita nombre, ni delito con
el fin de precautelar la confidencialidad, evitar la re-victimización y prevenir
algún tipo de daño.
7. Riesgos potenciales del estudio; la investigación no implica ningún riesgo
físico o emocional para el participante o la institución.
8. Beneficios potenciales del estudio; los beneficiarios directos serán los
profesionales en Psicología, quienes podrán contar con datos actuales
sobre la impulsividad en adolescentes y sobre todo la impulsividad en
relación a la conducta delictiva. Mientras que los beneficiarios indirectos
son todas las personas que se encuentran privadas de la libertad, al contar
con bases para mantener, cambiar o mejorar las estrategias utilizadas para
autocontrol en los centros privativos de libertad y en los centros de
orientación juvenil.
9. Idoneidad ética y experticia del investigador, se especifica en el Anexo (G)
Competencia ética y experticia del Tutor y Anexo (H) Competencia ética y
experticia de la estudiante.
10. Declaración de conflicto de intereses, se encuentran en el Anexo (I)
Declaración de conflicto de intereses del estudiante y Anexo (J) Declaración
de conflicto de intereses del tutor.
71
Solicitud al Centro Juvenil Virgilio Guerrero X
Análisis de resultados X
11. Recursos
Los recursos que demandará el proyecto estarán a cargo de la investigadora, los
cuales se detallan a continuación:
Talento Humano
Rubros Cantidad
Equipo de investigación 2
-Estudiante (1)
-Tutor académico (1)
Adolescentes investigados 44
Autoridades C.O.J.V.G. 3
-Director (1)
-Psicólogas (2)
TOTAL 49
Recursos Materiales
Rubro Cantidad Valor Valor total
por unidad
72
Internet 20 0,50 10,00
Total 45,40
Recursos Tecnológicos
Materiales Cantidad
Fotocopiadora 1
Computadoras 1
Scanner 1
Impresora 1
Encuesta sociodemográfica 60
Consentimiento Informado 60
73
12. Referencias
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76
Anexo I: Consentimiento informado para adolescentes del C.O.J.V.G.
CONSENTIMIENTO INFORMADO
Propósito del estudio: Analizar los niveles de impulsividad en los adolescentes infractores del
“Centro de Orientación Juvenil Virgilio Guerrero”, a través de la aplicación de la “Escala de
Impulsividad de Barratt”
Beneficios: Las personas que participan en el estudio están contribuyendo de manera activa y
voluntaria con la investigación educativa y formativa de las estudiantes responsables.
Voluntariedad: La participación en este estudio es voluntaria, por lo tanto, usted es libre de participar
o no.
77
CONSENTIMIENTO INFORMADO
Entiendo que los beneficios de la investigación que se realizará, serán tanto para los profesionales
psicólogos como para la comunidad en general y que la información proporcionada se mantendrá en
absoluta reserva y confidencialidad, y que será utilizada exclusivamente con fines académicos e
investigativos.
Dejo expresa constancia que he tenido la oportunidad de hacer preguntas sobre todos los aspectos de la
investigación, las mismas que han sido contestadas a mi entera satisfacción en términos claros, sencillos
y de fácil entendimiento. Declaro que se me ha proporcionado la información, teléfonos de contacto y
dirección de la investigadora con quién me podré contactar en cualquier momento, en caso de surgir
alguna duda o pregunta, las misma que serán contestadas verbalmente, o, si yo deseo, con un documento
escrito.
Comprendo que se me informará de cualquier nuevo hallazgo que se desarrolle durante el transcurso de
esta investigación.
Comprendo que la participación es voluntaria y que puedo retirar del estudio a mi representado en
cualquier momento, sin que esto genere derecho de indemnización para cualquiera de las partes.
Entiendo que los gastos en los que se incurra durante la investigación serán asumidos por el investigador.
…………………………………………
Firma del Representante legal
78
Yo, Sonia Lizeth Cóndor Carrillo, en mi calidad de Investigadora, dejo expresa constancia de que he
proporcionado toda la información referente a la investigación que se realizará y que he explicado
completamente en lenguaje claro, sencillo y de fácil entendimiento a ………………..…representante
del menor ……………………….(Iniciales del menor) interno del Centro de Orientación Juvenil Virgilio
Guerrero, la naturaleza y propósito del estudio antes mencionado y los riesgos que están involucrados
en el desarrollo del mismo. Confirmo que el representante del participante ha dado su consentimiento
libremente y que se le ha proporcionado una copia de este formulario de consentimiento. El original de
este instrumento quedará bajo custodia del investigador y formará parte de la documentación de la
investigación.
………………………….
Firma
79
Anexo II: Consentimiento informado para participantes mayores de edad del C.O.J.V.G.
CONSENTIMIENTO INFORMADO
Propósito del estudio: Analizar los niveles de impulsividad en los adolescentes infractores del
“Centro de Orientación Juvenil Virgilio Guerrero”, a través de la aplicación de la “Escala de
Impulsividad de Barratt”
Beneficios: Las personas que participan en el estudio están contribuyendo de manera activa y
voluntaria con la investigación educativa y formativa de las estudiantes responsables.
Voluntariedad: La participación en este estudio es voluntaria, por lo tanto usted es libre de participar
o no.
80
CONSENTIMIENTO INFORMADO
Entiendo que los beneficios de la investigación que se realizará, serán tanto para los profesionales
psicólogos como para la comunidad en general y que la información proporcionada se mantendrá en
absoluta reserva y confidencialidad, y que será utilizada exclusivamente con fines académicos e
investigativos.
Dejo expresa constancia que he tenido la oportunidad de hacer preguntas sobre todos los aspectos de la
investigación, las mismas que han sido contestadas a mi entera satisfacción en términos claros, sencillos
y de fácil entendimiento. Declaro que se me ha proporcionado la información, teléfonos de contacto y
dirección de los investigadores a quienes podré contactar en cualquier momento, en caso de surgir alguna
duda o pregunta, las misma que serán contestadas verbalmente, o, si yo deseo, con un documento escrito.
Comprendo que se me informará de cualquier nuevo hallazgo que se desarrolle durante el transcurso de
esta investigación.
Comprendo que la participación es voluntaria y que puedo retirarme del estudio en cualquier momento,
sin que esto genere derecho de indemnización para cualquiera de las partes.
Entiendo que los gastos en los que se incurra durante la investigación serán asumidos por el investigador.
--------------------------
Firma
81
Yo, Sonia Lizeth Cóndor Carrillo, en mi calidad de Investigadora, dejo expresa constancia de que he
proporcionado toda la información referente a la investigación que se realizará y que he explicado
completamente en lenguaje claro, sencillo y de fácil entendimiento a ………………..… interno del
Centro de Orientación Juvenil Virgilio Guerrero, la naturaleza y propósito del estudio antes mencionado
y los riesgos que están involucrados en el desarrollo del mismo. Confirmo que el participante ha dado
su consentimiento libremente y que se le ha proporcionado una copia de este formulario de
consentimiento. El original de este instrumento quedará bajo custodia del investigador y formará parte
de la documentación de la investigación.
………………………….
Firma
82
Anexo III: Autorización de la Institución
Señores
UNIVERSIDAD CENTRAL DEL ECUADOR
Facultad de Ciencias Psicológicas
Presente.
AUTORIZACIÓN
Yo padre Gilberto Rubio en calidad de director del Centro de Orientación Juvenil Virgilio
Guerrero, autorizo a Sonia Lizeth Cóndor Carrillo con C.I. 1750316265, estudiante de la carrera
de Psicología Clínica, de Facultad de Ciencias Psicológicas, de la Universidad Central del
Ecuador, a realizar el proyecto de Investigación con el nombre "Niveles de Impulsividad en
adolescentes infractores" dentro de la institución; para lo cual pongo a su disposición el trabajo
con los adolescentes de la Casa Recepción y la Casa Renacer, para los fines pertinentes apruebo
la ejecución de la encuesta sociodemográfica y la Escala de Impulsividad de Barratt, puesto que
ambos han sido revisados con anterioridad, buscando la práctica ética de los mismos procurando
la confidencialidad de los adolescentes dada su estado de vulnerabilidad. Por tanto, la estudiante
asume que toda información y el resultado del proyecto serán de uso exclusivamente académico.
Atentamente;
Padre Gilberto Rubio Guerrero
Director del Centro de Orientación Juvenil Virgilio Guerrero
83
Anexo IV: Encuesta sociodemográfica
"ENCUESTA SOCIODEMOGRÁFICA”
A continuación, se presenta una serie de preguntas, para ello se le pide responder a todas las
preguntas con sinceridad y absoluta libertad. Lea cuidadosamente cada pregunta y seleccione la
alternativa que usted considere pertinente, marcando para cada respuesta una “X”.
Código:_____________
Datos Generales:
1.- Edad: ______ 2.- Escolaridad: __________
3.- Lugar y fecha de nacimiento: _____________
Estructura familiar:
4.- Su hogar está conformado por:
a) Padre y madre c) Solo padre e) Abuelos
b) Solo madre d) Tíos f) Otros Especifique………
5.- ¿Cuántas personas viven en su Casa (incluyéndose usted)? …………
6.- ¿Cómo define la relación entre los miembros de su hogar?
a) Muy buena c) Regular
b) Buena d) Mala
7.- ¿Cómo cataloga la comunicación entre los miembros de su familia?
a) Muy buena c) Regular
b) Buena d) Mala
8.- En su hogar, las agresiones psicológicas como gritos, insultos, amenzas, etc, se
presentaban:
a) Siempre c) A veces
b) Casi siempre d) Nunca
9.- En su hogar, las agresiones físicas como empujones, golpes, cachetadas, etc, se
presentaban:
a) Siempre c) A veces
b) Casi siempre d) Nunca
Contexto socioeconómico:
10.- El lugar en el que vive (Casa, departamento, cuarto) es:
a) Propia c) Prestada
b) Arrendada d) Otro Especifique………..
11.- El lugar en el que vive cuenta con los siguientes servicios: (Señale)
a) Agua potable c) Luz eléctrica e) Internet
b) Alcantarillado d) Teléfono
84
Anexo V: Reactivo psicológico- Escala de impulsividad de Barratt (BIS-11)
Código: _____________
Datos Generales:
1.- Edad: ______ 2.- Escolaridad: __________ 3.- Lugar y fecha de nacimiento: _____________
Esta es una escala para medir algunas de las formas en que usted actúa y piensa. No se detenga demasiado tiempo en
las oraciones. Responda rápida y honestamente marcando una X en la opción que más le represente.
Raramente Ocasionalment A menudo Siempre o
o Nunca e (1) (3) casi
(0) siempre
(4)
1. Planifico mis tareas con cuidado
2. Hago las cosas sin pensarlas
3. Casi nunca me tomo las cosas a pecho ( no me perturbo fácilmente)
4. Mis pensamientos pueden tener gran velocidad (mis pensamientos van muy
rápido en mi mente
5. Planifico mis viajes (actividades) con antelación
6. Soy una persona con autocontrol
7. Me concentro con facilidad
8. Ahorro con regularidad
9. Se me hace difícil estar quieto/a por largos periodos de tiempo
10. Pienso las cosas cuidadosamente
11. Planifico para tener un trabajo fijo (me esfuerzo para asegurarme que tendré
dinero para mis gastos) (planifico mis estudios para asegurarme rendir bien)
12. Digo las cosas sin pensarlas
13. Me gusta pensar sobre los problemas complicados (me gusta pensar sobre
problemas complejos)
14. Cambio de trabajo frecuentemente (cambio de colegio con frecuencia)
15. Actúo impulsivamente
16. Me aburre pensar en algo por demasiado tiempo
17. Visito al médico y al dentista con regularidad
18. Hago las cosas en el momento en que se me ocurren
19. Soy una persona que piensa sin distraerse (puedo enfocar mi mente en una
sola cosa por mucho tiempo)
20. Cambio de vivienda a menudo (no me gusta que mis padres vivan en el
mismo sitio por mucho tiempo)
21. Compro cosas impulsivamente
22. Yo termino lo que empiezo
23. Camino y me muevo con rapidez
24. Resuelvo los problemas experimentando (resuelvo los problemas tratando
una posible solución y viendo si funciona)
25. Gasto más dinero de lo que tengo / de lo que gano
26. Hablo rápido
27. Tengo pensamientos extraños (irrelevantes) cuando estoy pensando
28. Me interesa más el presente que el futuro
29. Me siento inquieto/a en clases ( me siento inquieto/a si tengo que oír a
alguien hablar demasiado tiempo)
30. Planifico para el futuro ( e interesa más el futuro que el presente)
85
Anexo VI: Declaración de confidencialidad
DECLARACIÓN DE CONFIDENCIALIDAD
86
Toda la información obtenida de los pacientes participantes será manejada
con absoluta confidencialidad por parte de los investigadores. Los datos
CONFIDENCIALID
de filiación serán utilizados exclusivamente para garantizar la veracidad
AD
de los mismos y a estos tendrán acceso solamente los investigadores y
organismos de evaluación de la Universidad Central del Ecuador.
La realización de la presente investigación no proporciona ningún derecho
DERECHOS
a los investigadores, a excepción de los de tipo estrictamente académico.
DECLARATORIA DE CONFIDENCIALIDAD
Yo, Sonia Lizeth Cóndor Carrillo, portador/a de la Cédula de Ciudadanía No.1750316265, en mi calidad
de Investigadora, dejo expresa constancia de que he proporcionado de manera veraz y fidedigna toda la
información referente a la presente investigación; y que utilizaré los datos e información que recolectaré
para la misma, así como cualquier resultado que se obtenga de la investigación EXCLUSIVAMENTE
para fines académicos, de acuerdo con la descripción de confidencialidad antes detallada en este
documento.
Además, soy consciente de las implicaciones legales de la utilización de los datos, información y
resultados recolectados o producidos por esta investigación con cualquier otra finalidad que no sea la
estrictamente académica y sin el consentimiento informado de los pacientes participantes.
87
Anexo VII: Competencia ética y experticia del Tutor
Yo, ALEX VINICIO CASTRO CASTRO con CI 1710888601, docente de la Facultad de Ciencias
Psicológicas de la Universidad Central del Ecuador, con 7 años de experiencia de docente, he tutorado
tesis en varias ocasiones tanto para pregrado como para posgrado, además por mi trabajo en el área de
peritaje psicológico cuento con la experiencia en el área de la psicología jurídica y forense, siendo idóneo
y estando en la capacidad de tutorar a la estudiante SONIA LIZETH CÓNDOR CARRILLO en el
presente estudio “Niveles de impulsividad en adolescentes infractores”.
Atentamente:
----------------------------------
MSc. Alex Castro
CI: 1710888601
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Anexo VIII: Competencia ética y experticia de la estudiante
Yo, SONIA LIZETH CÓNDOR CARRILLO con CI 1750316265, egresada de la Facultad de Ciencias
Psicológicas de la Universidad Central del Ecuador, es la primera vez que realizo un trabajo de
investigación, más aún cuento con los conocimientos necesarios para la elaboración de mismo, dado los
conocimientos impartidos en la facultad en el área investigativa como en la parte ética, estando en la
capacidad de participar en el presente estudio “Niveles de impulsividad en adolescentes infractores”.
Atentamente:
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Sonia Cóndor
CI: 1750316265
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Anexo IX: Declaración de conflicto de intereses-estudiante
declara no tener ningún tipo de conflicto de intereses, ninguna relación económica, personal, política,
interés financiero ni académico que pueda influir en su juicio. Declara, además de no haber recibido
ningún tipo de beneficio monetario, bienes ni subsidios de alguna fuente que pudiera tener interés en
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CI:1750316265
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Anexo X: Declaración de conflicto de intereses-tutor
infractores” declara no tener ningún tipo de conflicto de intereses, ninguna relación económica,
personal, política, interés financiero ni académico que pueda influir en su juicio. Declara, además de no
haber recibido ningún tipo de beneficio monetario, bienes ni subsidios de alguna fuente que pudiera
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CI: 1710888601
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