Llamamos escuelas helenísticas a las escuelas filosóficas que se
desarrollan en el período llamado helenismo. Con el helenismo se produce en la filosofía griega un nuevo modo de plantear las cuestiones filosóficas, una problematización sobre la finalidad de la vida humana que es también un enfrentamiento al momento de crisis que vive la polis griega.
Con la propuesta de que lo necesario para construir una comunidad política
es en primer lugar el desarrollo del cuidado de uno mismo.
La desaparición de la polis:
La filosofía había surgido como forma de superación de la antigua
mentalidad mítica en los ambientes ociosos e ilustrados de las primeras ciudades de las colonias griegas del Asia menor, en la polis, (ciudad-estado) el filosofar en lo que tiene de libre discusión, de crítica y reflexión sobre los problemas humanos fundamentales, era una parte del ejercicio de la libertad del ciudadano griego. Para los griegos libres de esta época, no era posible llegar a ser hombres en plenitud por fuera de la polis. Los que Vivian fueran de la polis era considerados por los ciudadanos libres “bárbaros”.
Las rivalidades entre las distintas polis pusieron en marcha un proceso de
destrucción irreversible que con la derrota de Atenas en la guerra del Peloponeso marco el ocaso del esplendor de la polis.
El gran artífice de este proceso de cambios fue Alejandro Magno. De sus
conquistas en oriente nació un inmenso imperio en el que la cultura griega se mezcló con la de los pueblos conquistados.
El griego se impuso como la lengua de un imperio donde los individuos
podían ahora sentirse cosmopolitas (ciudadanos del mundo). Pero ahora este mundo era inmenso y se encontraba demasiado agitado.
El malestar es generalizado al perecer la independencia de la ciudad estado
lo que provoca una gran desconfianza en el ejercicio de la política como marco normal de solución de los problemas sociales. .
La filosofía se convierte en la búsqueda de desarrollar un ethos, una
filosofía moral lo suficientemente fuerte como para ser feliz en un mundo en decadencia y al mismo tiempo intentar con la acción ética construir una comunidad social fuerte.