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UNIVERSIDAD ANTONIO NARIÑO

CONTADURÍA PÙBLICA

ANALISIS CRITICO CASO AGRO INGRESO SEGURO

PRESENTADO A LA DOCENTE: JENNY SALAS

LEIDY VANESSA UMAÑA ZUÑIGA

Colombia /Valle del Cauca

2020
DELITOS CONTRA LA ADMINISTRACION PUBLICA

CASO: AGRO INGRESO SEGURO (ANDRES FELIPE ARIAS)


Agro Ingreso Seguro fue un programa creado en el año 2006 por Andrés Felipe
Arias, quien era ministro de agricultura en ese año, con el fin de favorecer a los
campesinos más pobres. El congreso de la república aprobó este programa con el
fin de promover la productividad y competitividad, reducir la desigualdad en el
campo y preparar a todos los agricultores de Colombia tanto grandes y pequeños
en los Tratados de Libre Comercio que venían. Esto en sí, buscaba apoyar a estos
empresarios a través de la agroindustria ya que era la única forma de competir en
el mundo globalizado.
El problema surgió cuando los grandes agricultores decidieron fragmentar sus
predios para obtener más ayudas de las permitidas. Además de ello se
encontraron irregularidades relacionadas a la contratación los cuales no tenían los
debidos estudios, encontraron irregularidades en los métodos de contratación,
beneficios indebidos a algunas familias terratenientes, falta de supervisión de los
programas y aumento indebido de los recursos destinados al programa de
gobierno
Esos casos y los 26.000 millones de pesos que habían desembolsado en
subsidios generaron una gran indignación nacional y se convirtieron en uno de los
mayores escándalos del gobierno de Álvaro Uribe. La justicia colombiana no
encontró que Arias se hubiera robado un peso en este programa, cosa que generó
desconcierto de algunos sectores con el monto de la pena. Sin embargo, la corte
encontró probado el favorecimiento de terceros y la forma irregular en que se
celebraron contratos.
La Sala Penal de la Corte Suprema de Justicia encontró a Arias responsable de
los siguientes delitos contra la administración pública:
CELEBRACIÓN DE CONTRATOS SIN CUMPLIMIENTO DE REQUISITOS
LEGALES
En este punto se dice que Andrés Felipe Arias cometió dos errores muy grandes:
- Haber hecho contrataciones sin haber realizado una planeación previa,
razón por la cual se le culpa de poner a funcionar el programa de Agro Ingreso
Seguro a como fuera lugar, sin importarle que no conocía a cabalidad los
principios que se requerían para llevar a cabo una correcta contratación
administrativa.
En este orden de ideas, se considera que Andrés Felipe por el afán de aprobar lo
más pronto posible este programa, para que le garantizaran recursos económicos
y así poder ejecutarlo rápidamente pasó por alto uno de los principios más
fundamentales de la contratación estatal, el cual es el principio de economía y el
deber de planeación. Incluso a la Universidad de los Andes se le encomendó
realizar un estudio para la suscripción de estos convenios y cuando tuvieron los
resultados ya era demasiado tarde, ya habían suscrito el primer convenio, lo que
dejó sin sustento la necesidad de priorizar estos programas de riego, la población
a la que debía ser dirigida o la forma en cómo debía implementarse este
programa.
Según lo explicado anteriormente la Corte concluyó afirmando que el ministro
Arias se apersonó de todas estas gestiones para aprobar y garantizar recursos
ejecutables a AIS, violando principios esenciales de la contratación pública. Así
mismo, había seleccionado la entidad que él quería que ejecutara el programa
antes de que este hubiera sido aprobado o contará con los recursos.
- Como segundo error y pienso que es el más grave, él decidió elegir la
contratación directa como modalidad del programa, sin realizar licitaciones o
concursos públicos, para contratos que tenían un valor muy alto, y además de ello,
estos no tenían como objetivo desarrollar actividades de ciencia y tecnología; todo
esto hizo que lo incurrieran en este delito.
En este punto se generó un gran problema ya que, por regla general, cuando el
Estado va a realizar contrataciones, realizan una serie de procedimientos en los
que se incluyen convocatorias, licitaciones y/o concursos públicos, a los cuales se
pueden presentar todos los que cumplan con los requisitos que exigen, y de este
se elige a quien haya presentado la mejor propuesta. Aunque cabe resaltar que la
Corte tiene dos excepciones en estos casos: cuando la contratación es de menor
cuantía o cuando, el objeto de la contratación es desarrollar actividades de ciencia
y tecnología. En estos casos, la entidad estatal está autorizada para contratar
directamente, sin que medie otro procedimiento.
En el caso de estos convenios, el Ministerio empleó la modalidad de contratación
directa, aduciendo que el objeto de estos convenios era desarrollar actividades de
ciencia y tecnología. De acuerdo a lo anterior, la situación era la siguiente desde la
perspectiva de los jueces: si los convenios sí tenían por objeto desarrollar
actividades de ciencia y tecnología, entonces el ministro estaba autorizado para
hacer lo que hizo y su actuación fue legal. De lo contrario, habría cometido el
delito que se le imputa.
Entonces, ¿tenían los convenios el objetivo de desarrollar actividades de ciencia y
tecnología? La Corte dice que no. Respecto a los convenios, la Corte considera
que la finalidad de los contratos era concretar un proyecto, pero el objeto directo
de los mismos era implementar una convocatoria. Adicionalmente, la Sala Penal
afirma que producto de estos convenios no se produjo ningún elemento de
innovación ni aporte a la ciencia y tecnología, y que la labor del IICA fue
eminentemente administrativa: administrar los concursos, verificar el cumplimiento
de requisitos formales de las propuestas, y proporcionar personal y planta física al
programa.
De esta manera, la Corte concluyó que el exministro Arias incurrió en un delito:
sus acciones coincidían con los hechos descritos como prohibidos en la ley; su
actuación no estuvo al servicio del interés general (como debe ser en la
administración pública) y lo que hizo fue de forma consciente. Voluntariamente
tramitó y suscribió los tres convenios omitiendo requisitos legales esenciales de la
contratación pública, sin una razón lógica o jurídica que le respaldara.
PECULADO POR APROPIACIÓN EN FAVOR DE TERCEROS.
Como segundo cargo, la Fiscalía acusó a Andrés Felipe Arias de peculado por
apropiación en favor de terceros, esto significa que él desvió el dinero destinados
al programa para favorecer a terceros. Este delito está definido en el artículo 397
del Código Penal.
El ente acusador afirmó como tal, que el exministro como servidor público y
administrador de bienes del Estado permitió la entrega de subsidios a grandes
empresarios, lo que afectó el cumplimiento de los objetivos específicos del
programa Agro Ingreso Seguro.
Para él lograr eso, Arias se valió de un aparato burocrático que le permitía tener
control directo sobre todas las instancias y poder tomar decisiones relacionadas
con los convenios sin que recayera esto en su responsabilidad de esto, además
de ello es importante resaltar que el exministro pudo tener control sobre los
criterios impuestos dentro de la convocatoria para recibir los subsidios gracias a
esta estructura. Por lo tanto, los terceros se valieron de estos cambios para lograr
apropiarse del dinero a través de las siguientes maneras:
 Fraccionaron ficticiamente los inmuebles para presentar proyectos
vinculados con los predios como si se tratara de diferentes fincas.
 La Asignación y entrega, en idéntica o en sucesiva convocatoria, de varios
subsidios para el mismo grupo familiar y/o empresarial.
 La Obtención de subsidios para proyectos que no satisfacían los
requerimientos técnicos de la convocatoria, mediante una recalificación no
prevista en el concurso, efectuada por un «grupo de expertos».
La Corte aclaró que todas estas maneras atentaron contra el objetivo específico
del programa que era promover la productividad reduciendo la desigualdad.
ANALISIS:
Según lo explicado anteriormente considero que en este programa de Agro
Ingreso Seguro hubo mucha corrupción y que tal vez las cosas hubieran sido
distintas si este se hubiera detectado a tiempo, pero lastimosamente no fue así,
considero que en este sentido faltó mucho control por parte todas las entidades
que lideraban este proyecto y es triste saber que después de las denuncias que
realizaron los medios de comunicación es que empezaron a hacer las
investigaciones pertinentes. Pienso que esta ayuda se le hubiera podido brindar a
campesinos que realmente lo necesitaban pero lastimosamente muchos casos
como estos se ven en este país, lo que en un principio se hizo con el fin de
promover la productividad y competitividad, además de ello reducir la desigualdad
en el campo causó un efecto contrario; ya que como se va a poder hablar de
reducir la desigualdad si solo se están beneficiando unas pocas personas que
además de ello son los mas adinerados de algunas regiones del país.
Con este caso de corrupción que se presentó pienso que todos los Colombianos
deberíamos de estar más pendientes de cómo se están ejecutando y gestionando
programas como estos, ya que en parte estos se están llevando a cabo con dinero
de nosotros, así que lo más lógico seria es que fuéramos participes de ello para
lograr reducir un poco la corrupción, siendo como más maliciosos con esas
actividades que se desarrollan, porque como se vio anteriormente, muchas
personas del sector publico buscan la manera de que este tipo de tramites les
facilite solo su beneficio propio.
Es muy triste saber que en nuestro país en realidad existen muchos campesinos o
productores que son de muy pocos ingresos y que día a día se esfuerzan por
trabajar de una manera honesta y muy fuerte, y que lastimosamente no tienen
acceso a tales ayudas, mientras que muchos empresarios a través de mentiras y
falsedades obtienen millonarios subsidios sin esfuerzo alguno.

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