Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Introducción
A comienzos del siglo XX, el bambuco trascendió las fronteras de su natal Colombia y
llegó a disfrutar de gran popularidad en diversos países de Hispanoamérica. Específicamente en
Cuba, ese género floreció en numerosos bambucos compuestos e interpretados por cubanos, y se
enriqueció con el aporte de los estilos autóctonos de esa nación. El auge del bambuco en Cuba
vio su ocaso a comienzos de los años treinta del siglo XX; pero éste continuó más tarde su
exitosa travesía hacia otros países de Hispanoamérica y el mundo.
El bambuco
Según los datos que hemos podido recopilar acerca del bambuco, este género
representativo de la música colombiana surge aproximadamente en la misma época que el
zapateo cubano, durante la primera mitad del siglo XIX, y es generado por elementos de estilo
similares, los cuales procedían de la metrópoli española. El bambuco pertenece a una familia de
géneros descendientes de las canciones-danzas españolas de ritmo sesquiáltero de los siglos XVI
al XVIII, que surgen en las colonias de América durante el siglo XIX; como el zapateo cubano,
los sones jarochos mexicanos, el punto panameño, la zamacueca peruana, la cueca chilena, y el
gato argentino.2
1
González Espinosa, Jesús Emilio: "No doy por todos ellos el aire de mi lugar": La construcción de una identidad
colombiana a través del bambuco en el siglo XIX, Universidad autónoma de Barcelona, Facultad de Filosofía y
Letras, Dpto. de Arte Bellaterra, 2006, p. 62.
2
Linares, María Teresa y Núñez, Faustino: La música entre Cuba y España, Fundación Autor, 1998, p. 58
3
González Espinosa, 2006: 62.
3 El bambuco colombiano en la música cubana.
"...rompió el bambuco, aire nacional colombiano con que hacemos fiesta de la misma
muerte; los soldados, ebrios de entusiasmo, se sintieron más que nunca invencibles; y entre
frenéticos vivas a la libertad y al Libertador, que eran nuestro grito de guerra, avanzó rectamente
esa cuádruple legión de enconados leones, reprimida hacía casi dos horas por la diestra mano de
su amo."4
El anterior texto sugiere que el bambuco ya había sido adoptado en esa época como
símbolo del sentimiento nacionalista colombiano, por las tropas que luchaban por la
consolidación de la independencia del país; esa posibilidad es reafirmada por un poema llamado
El bambuco, de Rafael Pombo, publicado en New York en 1872. Dicen las estrofas 74 y 75 de
ese poema:
Él a Córdoba marcó
su paso de vencedores
y de los libertadores
la hazaña solemnizó.5
El bambuco llamado Palonegro ostenta el nombre de una de las batallas más importantes
de la Guerra de los mil días, que se llevó a cabo en Santander, entre el 11 y el 25 de mayo de
1890.6
4
Rodríguez Melo, Martha Enna: El bambuco, música nacional de Colombia, Revista del Instituto de Investigación
Musicológica “Carlos Vega”, Año XXVI, Nº 26, 2012, p. 309.
5
Rodríguez Melo, 2012: 310.
6
Rodríguez Melo, 2012: 311.
Armando Rodríguez Ruidíaz 4
Tal como podemos apreciar en el ejemplo anterior, el bambuco Palonegro era una danza
rápida de ritmo sesquiáltero que muestra la característica alternancia de acentos ternarios y
binarios, tanto de forma consecutiva en la melodía, como simultánea en el tambor; y cuyo estilo
danzario es muy similar al de otros bailes latinoamericanos, tales como el zapateo cubano y el
son jarocho mexicano.
Domingo de Caycedo y Sanz de Santa María, quién fuera Vicepresidente en 1830 y debió
abandonar el cargo por presiones en 1831, tuvo una hija llamada Carmen en 1818. Hacia 1830,
un profesor de música copió varias piezas para guitarra en un cuaderno destinado a la enseñanza
de la joven Carmen, que ha quedado como valioso testimonio sobre la música de esa época. Entre
las piezas incluidas en ese cuaderno figuraba el primer bambuco documentado en Bogotá,
llamado El aguacerito, el cual transcribimos a continuación:8
Bambuco El aguacerito.9
7
Youtube: Palo Negro: Chimizapagua: https://www.youtube.com/watch?v=MLR3EVQbvpE. Transcripción del
autor.
8
González Espinosa, 2006: 75.
9
Rodríguez Melo, 2012: 312.
5 El bambuco colombiano en la música cubana.
En cuanto a este bambuco es importante destacar que aunque fue llevado a la partitura
con un compás de 3/8, es posible apreciar con respecto a la relación de sus valores, el ritmo de la
hemiola vertical característico de las danzas y las guarachas cubanas de ritmo ternario.
Hacia los años cincuenta del siglo XIX el bambuco fue adoptado como forma de
expresión artística por intelectuales bogotanos como el poeta Rafael Pombo, quién lo eleva a un
nivel de elaboración estética superior a la que hasta ese momento poseía; estableciendo de esa
manera ciertos parámetros estilísticos que fueron respetados por otros creadores serios. El
bambuco pasó entonces de ser un género musical folklórico y anónimo, a convertirse en una
forma de canción bailable cultivada por músicos con cierto nivel de formación técnica y cultural.
Podemos afirmar pues, que Pombo inauguró el estilo académico en la creación y la elaboración
del bambuco; en contraposición al estilo tradicional, estrictamente popular, que imperó hasta
entonces.
Nos dice González Espinosa sobre este tema: "Es en esta década que ocurren tres hechos
notorios para el desarrollo del tema en cuestión. El primero de ellos fue en el año 1851, cuando
aparece en este panorama Rafael Pombo (1833-1912), quién fuera uno de los mayores partidarios
del bambuco en su denominación de música nacional. Pombo, notable poeta y persona influyente
en la vida sociocultural del país, fue el primero en escribir canciones en ritmo de bambuco,
rompiendo además con el anonimato hasta entonces habitual, Esto implicó un nuevo parámetro
(el carácter culto) en la composición de bambucos, iniciando asimismo el proceso de
"equiparación" de la música nacional con la música culta occidental."10
Dentro del estilo al cual nos referimos se encuentra el siguiente bambuco anónimo,
llamado La morena:
10
González Espinosa, 2006: 117
11
Banrepcultural: Rafael Pombo por Darío Jaramillo:
http://enciclopedia.banrepcultural.org/index.php?title=Rafael_Pombo
Armando Rodríguez Ruidíaz 6
La palabra bambuco sugiere una relación con otros vocablos que han sido utilizados para
denominar géneros musicales, tales como bamba, bomba, rumba, samba, cumbia, mambo y
candombe. Todos ellos denotan un posible origen bantú debido a la presencia de la combinación
de sonidos mb, que es característica de ese complejo lingüístico.15
12
González Espinosa, 2006: 118
13
González Espinosa, 2006: 156.
14
Varney, John: “An Introduction to the Colombian "Bambuco." Latin American Music Review / Revista de Música
Latinoamericana 22, no. 3 (Autumn - Winter, 2001): 135. Citado en: López, David: Colombian Bambuco, Pasillo,
and Porro and the Role of the Tuba in these Traditional Genres, Texas Tech University, 2016, p. 10.
15
Wikipedia: Lenguas bantúes: https://es.wikipedia.org/wiki/Lenguas_bant%C3%BAes
7 El bambuco colombiano en la música cubana.
"Solamente Nay, única hija de Magmahú, conoció aquel secreto. Siendo niña cuando
Sinar vino como siervo a casa del vencedor de Orsué, la cautivó primero la digna mansedumbre
del joven guerrero, y más tarde su ingenio y hermosura. Él le enseñaba las danzas de su tierra
natal, los amoríos y sentidos cantares del país de Bambuk..."16
Al analizar las diferentes modalidades en las cuales se nos presenta éste término, nos
parece muy posible que el mismo haya atravesado por un proceso de castellanización, desde las
versiones más afines a las lenguas africanas (Bambuk, Bambuc o Bambuhu), pasando por las
francesas (Bambuque o Bambougou) hasta la castellana Bambuco. De manera similar a lo que
sucede con los vocablos: plastic en inglés, plastique en francés y plástico en castellano; elastic,
élastique y elástico o fantastic, fantastique y fantástico.
En cuanto a la ambigüedad entre los metros binario y ternario (los cuales pueden
presentarse de forma consecutiva o superpuesta) que es llamada tradicionalmente hemiola o
sesquiáltera, nos dice Jesús González Espinosa: "La gran dificultad de la escritura del bambuco
resulta de la correcta distribución del acento métrico de las frases debido a la polirritmia que se
produce entre melodía y acompañamiento. A mediados del siglo XX se propuso una escritura
polimétrica [6/8 3/4] para tratar de solventar el problema de la distribución de los acentos
rítmicos de la mayoría de los bambucos..."19
16
Isaacs, Jorge: María: Biblioteca Virtual Universal. Editorial Del Cardo, 2003:
http://www.biblioteca.org.ar/libros/70959.pdf
17
Wikipedia: Bambuque: https://es.wikipedia.org/wiki/Bambuque
18
Ver: Rodríguez Ruidíaz, Armando: El origen de la música cubana. Mitos y realidades, 2015:
https://www.academia.edu/4832395/El_origen_de_la_m%C3%BAsica_cubana._Mitos_y_realidades, p. 12-15.
19
González Espinosa, 2006: 44.
Armando Rodríguez Ruidíaz 8
Y continúa explicando González al respecto: "De manera general podemos afirmar que la
estructura rítmica del bambuco presenta fórmulas que podemos expresar en compases binarios
compuestos y ternarios simples, los cuales frecuentemente se alternan formando una hemiolia [o
hemiola]20 o están superpuestos en la melodía y el acompañamiento funcionando
simultáneamente los dos esquemas. Usualmente la melodía funciona en 6/8 alternando con 3/4
en algunas ocasiones o momentos de la composición [...] el acompañamiento en la tambora
emplea simultáneamente las dos estructuras: 3/4 en el parche o membrana y 6/8 en la
madera..."21
22
Ritmo de la tambora en el bambuco.
20
Nota del autor.
21
González Espinosa, 2006: 45.
22
González Espinosa, 2006: 46.
23
González Espinosa, 2006: 51.
24
González Espinosa, 2006: 45.
9 El bambuco colombiano en la música cubana.
"En algunas composiciones, la melodía de este tipo de bambuco muestra rasgos que
pueden ser considerados como 'arcaicos', posiblemente derivados de la escala pentatónica usual
en grupos campesinos e indígenas de la parte sur del país, que probablemente se asentaron en
Bogotá durante las primeras décadas del siglo en cuestión; y es posible apreciar estos rasgos en
algunos bambucos del siglo XIX como La guaneña y El miranchurito..."27
25
González Espinosa, 2006: 49.
26
González Espinosa, 2006: 51
27
González Espinosa, 2006: 52
Armando Rodríguez Ruidíaz 10
Fragmento de La guaneña:28
Fragmento de El miranchurito.29
A diferencia del bambuco tradicional, el estilo académico está definido por un mayor
gado de elaboración y un autor identificado, así como por la existencia de una versión escrita por
el autor o algún transcriptor.
Según González Espinosa, "Sus características armónicas están dadas por la pluralidad y
complejidad de sus grados tonales y la amplitud de sus intervalos melódicos. El ámbito tonal
sigue al bambuco tradicional, pues está fundamentado en los mismos grados básicos, aunque
ahora los utiliza en una mayor cantidad de inversiones e introduce un número más amplio de
28
Youtube: La Guaneña: https://www.youtube.com/watch?v=ELtDbSl4M_A. Transcripción del autor.
29
Youtube: El Miranchurito: https://www.youtube.com/watch?v=pRemh5CPWeI. Transcripción del autor.
11 El bambuco colombiano en la música cubana.
cambios armónicos y alteraciones accidentales en sus frases, siendo por lo general modulante: I –
VI7 (V7 del II) – II – V7 – I (m)."30
Tal como la música característica del bambuco colombiano pertenece a una grupo de
géneros descendientes de las canciones-danzas españolas de ritmo sesquiáltero de los siglos XVI
al XVIII; como el zapateo cubano, los sones jarochos mexicanos, el punto panameño, la
zamacueca peruana, la cueca chilena, y el gato argentino;31 también el baile que lo acompaña
está emparentado con esos estilos de danza hispanoamericanos. Según el escritor costumbrista
cubano del siglo XIX, José Joaquín Suzarte: "En toda la América española existe el mismo baile
popular campesino, alternando con el canto, y el mismo tipo guajiro con más o menos variantes.
El jarocho mejicano llama jarabe a su zapateo y son al punto de nuestros montunos." 32
Dice Alejo Carpentier al repecto: "Es indudable que desde muy temprano, América
comenzó a crear una música de expresiones muy diversas – de acuerdo con los factores étnicos
puestos en presencia – capaz de crear modas en la península. Cotarelo y otros autores nos
informan ampliamente acerca de ello, en sus selecciones de textos alusivos a danzas y músicas.
En un clásico entremés, la intérprete de un "baile de Gayumba" exclama:
Y continúa Carpentier diciendo: "Lope de Vega alude a una chacona, que se bailaba
"cogiendo el delantal con las dos manos". Esta chacona:
La zarabanda, como la chacona, era "cosa venida de Indias". El zambapalo (de zamba,
samba), bailado en España en los siglos XVI y XVII, se da también como una danza nacida en
América.33
30
González Espinosa, 2006: 52.
31
Linares, María Teresa y Núñez, Faustino, 1998: 58
32
Suzarte, José Quintín. Los guajiros. Costumbristas cubanos del siglo XIX. Selección, prólogo, cronología y
bibliografía Salvador Bueno.
http://www.cervantesvirtual.com/servlet/SirveObras/68060620217137506322202/p0000017.htm#83
33
Carpentier, Alejo: La música en Cuba, Editorial Letras Cubanas, 1979, p. 49.
Armando Rodríguez Ruidíaz 12
La falda amplia, que era alzada y zarandeada por la bailadora española, forma parte de un
atuendo típico que también es compartido con ciertas variaciones regionales por las danzas del
Nuevo Mundo; ese vestuario es característico de los campesinos de muchos países dentro de esa
zona geográfica, desde la época colonial.
Esa indumentaria que hemos descrito es la que se encuentra más frecuentemente en los
países caribeños que estuvieron relacionados con la ruta de los galeones, como Cuba, Puerto
Rico, Colombia, Panamá y México. En otro países de Suramérica, tales como Perú, Chile y
Argentina, el traje típico es el de los vaqueros de los llanos y las pampas; un sombrero de tela
gruesa y ala muy ancha, pañuelo al cuello y la cintura, camisa, chaquetilla o chaleco, y
pantalones abombados que se introducían en las botas de cuero, a las cuales se adherían unas
grandes espuelas de metal.34
Con respecto al origen de ese vestuario nos dice Alejo Carpentier, refiriéndose a las
danzas españolas del siglo XVI, que aquellas eran '…movidas, siempre sexuales, en que los
bailarines "parece que se dan", llevando pañizuelo al cuello, en los hombros, en la mano, y
"dando puntapiés al delantar", como podría hacerlo hoy una rumbera criolla con la cola de su
vestido.'35
También dice González Espinosa acerca del baile del bambuco, que su temática "se
estructura alrededor de una supuesta representación de la conquista amorosa, en la cual el estilo
jocoso, propio de la actitud campesina nacional, se evidencia lleno de gracia y coqueteo por parte
de la pareja",37 descripción que concuerda con la anterior mención de Carpentier a las danzas
españolas del siglo XVI, cuando éste dice que eran "movidas y siempre sexuales".
34
Rodríguez Ruidíaz, Armando: El punto y el zapateo de Cuba, p. 13: academia.edu:
https://www.academia.edu/31268678/El_Punto_y_el_Zapateo_de_Cuba
35
Carpentier, 1979: 49
36
González Espinosa, 2006: 54.
37
González Espinosa, 2006: 55.
13 El bambuco colombiano en la música cubana.
Ya hemos mencionado cómo hacia la segunda mitad del siglo XIX, el bambuco pasa de
ser un género folklórico, solamente cultivado por el pueblo, y penetra en los salones y saraos de
los estratos sociales más elevados en la capital del país39 Ese proceso implicó también un cambio
en el estilo en que se bailaba este género musical, el cual se refleja en una litografía del artista
bogotano Ramón Torres Méndez, realizado aproximadamente en 1856. En este grabado es
posible apreciar a un grupo de personas elegantemente vestidas, que se encuentran reunidas en
un salón de fiestas. Entre el grupo se destaca, en primer plano, una pareja que aparentemente
ejecuta algunos pasos de baile cuya imagen coincide con los pasos característicos del bambuco; y
hacia la derecha de la escena, observamos a tres músicos que ejecutan sus instrumentos.40
Durante las dos primeras décadas del siglo XX, el bambuco trascendió los límites de la
nación colombiana y se dio a conocer a nivel internacional, logrando alcanzar un
reconocimiento sin precedente; y uno de sus primeros promotores fue Pedro Morales Pino.
Nacido en Cartago, Valle del Cauca, en 1863, Morales Pino realizó estudios en la
Academia Nacional de Música, y en 1897 organizó una agrupación llamada Lira Colombiana, la
cual combinaba instrumentos europeos tales como el violín, el violonchelo y la flauta, con
instrumentos de cuerda autóctonos como el tiple y la bandola. Sastres o zapateros de oficio en su
mayoría, los miembros del grupo de Morales Pino eran los mismos que participaban junto a los
intelectuales y poetas del círculo La Gruta Simbolica, en las tertulias literarias y las juergas
nocturnas de la bohemia bogotana hacia fines del siglo.41 En 1899, después de presentarse en
varias ciudades del país, partió Morales Pino con su ensamble desde Medellín, en un viaje que
abarcaría Panamá, El Salvador, Guatemala y más tarde Estados Unidos, con el propósito de
38
Rodríguez Ruidíaz, Armando: El punto y el zapateo de Cuba, p. 12: academia.edu:
https://www.academia.edu/31268678/El_Punto_y_el_Zapateo_de_Cuba
39
Ver: p. 3.
40
Rodríguez Melo, 2012: 312
41
Santamaría Delgado, Carolina: El bambuco, los saberes mestizos y la academia; un análisis histórico de la
persistencia de la colonialidad en los estudios musicales latinoamericanos, Latin American Music Review, Volume
28, Number 1, Spring/Summer 2007, p. 6.
Armando Rodríguez Ruidíaz 14
llegar hasta la Exposición Universal de París. Durante esa larga gira, el conjunto se fue
desintegrando poco a poco, hasta que finalmente se disolvió hacia el año 1908.42
Aunque muy probablemente existan otros factores que contribuyeron a la difusión de ese
género musical fuera de Colombia, debemos considerar que en muchas ocasiones algún evento
específico puede provocar una reacción en cadena que amplifique el estímulo original hasta
límites insospechados. Ese es el caso del estreno de la canción El manisero en Broadway por el
grupo de Don Aspiazu, que generó un gran interés por la rumba de salón cubana a nivel
internacional; o el de la colaboración de la actriz norteamericana Josephine Baker y el
compositor cubano Eliseo Grenet en el film francés Princesse Tam tam, el cual dio lugar a la
difusión internacional de la conga de salón.
La imagen pintoresca del músico colombiano que dio inicio al proceso descrito
anteriormente, se nos presenta con matices de leyenda. Pedro León Franco Rave, conocido por el
sobrenombre de Pelón Santamarta, nació en el popular barrio Guanteros de Medellín. Pedro
León fue hijo natural de Francisca Franco Rave y Pedro León Velázquez, un esclavo liberto que
poseía habilidades musicales y era llamado Santamarta debido a su ciudad de origen. Él
aprendió de su padre la música y el oficio de sastre.
42
Monsalve, Jaime Andrés: El Espectador: El músico de lira: https://www.elespectador.com/noticias/cultura/el-
musico-de-lira-articulo-406270
43
Santamaría Delgado, Carolina: Bambuco, tango and bolero: music, identity, and class struggles in Medellín,
Colombia, 1930-1953, p. 64.
15 El bambuco colombiano en la música cubana.
Esas actividades resultaron muy importantes para la carrera musical de Pelón Santamarta,
ya que en aquel entonces tuvo la oportunidad de cantar con otros artistas, como Roberto Mesa, y
aprender un amplio repertorio de canciones. Después de cinco años viajando por diferentes
ciudades del Valle del Cauca, regresó en 1893 a Medellín, donde se unió a Mesa en un dúo,
mientras también cantaba con otros artistas y se dedicaba a su profesión de sastre.45
En 1897, Santamarta realizó un viaje a Bogotá con su padre, Pedro León Velázquez,
durante el cual cantaron en diferentes regiones, tales como Antioquia, Tolima, Cundinamarca,
Boyacá y Bucaramanga. Él permaneció en la capital hasta que en 1898 regresó a Medellín,
donde cantó a dúo con Germán Benítez. Un año más tarde, Santamarta contrajo matrimonio con
María del Carmen Uribe, con la cual tuvo cinco hijos. Después de participar en un levantamiento
encabezado por el coronel Crisanto Teleche en el año 1900, Pelón Santamarta se mantuvo al
margen de toda actividad bélica durante la llamada Guerra de los Mil Días.46
En 1903, Santamarta se unió a Adolfo Marín para formar un dúo. Como el mismo
Santamarta, Marín había nacido en el barrio Guanteros de Medellín el 25 de junio de 1882, y era
sastre de profesión. Después de ausentarse del país durante dos años, Pelón Santamarta regresó a
Medellín en busca de Adolfo Marín, con el cual reanudó las actividades musicales hasta 1907;
año en que el dúo llevaría la música colombiana por rumbos insospechados. Ese año, Santamarta
y Marín viajaron a Panamá, donde los recibieron con gran entusiasmo y decidieron establecer un
negocio de sastrería. Más tarde se dirigieron a Jamaica, y finalmente a Cuba.47
Nos dice Daniel Restrepo Posada, en referencia a la estancia del dúo en Cuba, que "los
santiagueros se mostraron reacios o adversos a sus canciones, y al no pelechar su canto, ellos
tomaron su rumbo hacia La Habana en septiembre de 1907." 48
Ya en La Habana, el dúo pasó algún tiempo deambulando, sin que le prestaran mucha
atención, por los bares y cafetines de la ciudad; donde según Julián Cabal Salcedo "unieron sus
miserias a las del poeta antioqueño Porfirio Barba Jacob",49 quién se encontraba viajando por
América Central y los Estados Unidos desde 1907. 50 Porfirio Barba Jacob fue un seudónimo
utilizado hasta su muerte por el poeta Miguel Ángel Osorio Benítez, el cual se refirió de la
siguiente manera a la visita de los cantantes colombianos:
44
100 años del Bambuco en México: http://tiplenuevo.blogspot.com/2008/07/100-aos-del-bambuco-en-mxico.html
45
Restrepo Posada, Daniel: Contraste entre dos músicos que representaron la formación académica y la condición
popular de la música en Medellín a finales del siglo xix y comienzos del xx: Antropol. Sociol. no. 9, enero -
diciembre 2007, p. 342.
46
Restrepo Posada, 2007: 343.
47
García Felipe: Por los senderos del Bambuco: http://www.trovadores-yucatecos.com/Bambuco.html
48
Restrepo Posada, 2007: 344 – 345.
49
Salcedo Cabal, Julián: Bambuco a lo 'mero macho', El País.com.co, 2016:
|https://www.elpais.com.co/elpais/calibuenanota/cultura/noticias/bambuco-mero-macho
50
Wikipedia: Porfirio Barba Jacob: https://es.wikipedia.org/wiki/Porfirio_Barba_Jacob
Armando Rodríguez Ruidíaz 16
“Conocí a Los Trovadores Colombianos Franco (Pelón) y Marín, a cuya locura de andar
cantando debe Colombia un hecho glorioso: que hayan difundido en México el bambuco, el
pasillo y mil tonadas de canciones. Las dos melancolías musicales, la de aquí y la de allá, se han
reconocido fraternas: los dos pueblos se han oído sus rumores y sus amores íntimos en sus
íntimas melodías. En México desbordan la más fina inteligencia y la más fina percepción
artística, y por eso la muchedumbre ha encontrado en las canciones de Colombia, sin analizarlas,
una excelencia de flor que se mustia, de miel que se acendra...”51
Pero a pesar de la fría acogida que aparentemente recibieron en Cuba, los cantantes
colombianos lograron obtener allí el contrato que tanto anhelaban, ya que el empresario cubano
Raúl Del Monte les ofreció incluirlos en su próxima gira por México. Ya en la Revista de Mérida
del viernes 10 de Julio de 1908 aparecía una mención del “próximo arribo a Yucatán de la
Compañía Cubana de Zarzuelas de Raúl Del Monte”52, la cual actuaría en el Circo-Teatro
Yucateco a partir del viernes 24 de julio; 53 y en la edición del 23 de Julio, se reseñaba la llegada
del grupo cubano en el vapor “Mérida”, que había arribado el día 22 procedente de La Habana.
En la relación de artistas visitantes aparecían los nombres de Pedro León “Pelón” Franco y
Adolfo Marín.54
51
García, Felipe: Por los senderos del Bambuco: http://www.trovadores-yucatecos.com/Bambuco.html
52
Un ejemplar del Periódico El Villareño con fecha enero 26 de 1902, decía: He aquí el de la compañía de zarzuela
que bajo la dirección de Raúl del Monte está actuando en Sagua, y recorrerá después todas Las Villas.
https://books.google.com/books?id=8IEa2FbRiQsC&pg=RA78-PT8&lpg=RA78-
PT8&dq=compania+de+zarzuelas+de+raul+del+monte&source=bl&ots=7qZ06uxVlQ&sig=ACfU3U12m6YvSrp64
BINj1F4TLq7YbO8Cw&hl=en&sa=X&ved=2ahUKEwiup5nP0sviAhUwuVkKHeCuAegQ6AEwBnoECAgQAQ#
v=onepage&q=compania%20de%20zarzuelas%20de%20raul%20del%20monte&f=false
53
Ecured: Luis casas Romero: https://www.ecured.cu/Luis_Casas_Romero: Viajó a México como director de la
orquesta de la Compañía de Raúl del Monte, que actuó en Mérida y Veracruz.
54
Salcedo Cabal, Julián: Bambuco a lo 'mero macho', El País.com.co, 2016:
https://www.elpais.com.co/elpais/calibuenanota/cultura/noticias/bambuco-mero-macho
55
Restrepo Posada, 2007: 344 -345
17 El bambuco colombiano en la música cubana.
El bambuco en Cuba
A pesar de que la estancia en Cuba del dúo de Santamarta y Marín fue muy breve, parece
evidente que, después de todo, ésta desempeñó un importante papel con respecto a la
popularización del bambuco, tanto en la Isla como en otras regiones de la América hispana; y no
debemos descartar tampoco en ese proceso, por supuesto, la posible incidencia de otros factores
señalados por algunas fuentes; como la presencia de numerosos emigrados cubanos en
Colombia, los cuales regresaron a Cuba entre fines del Siglo XIX y comienzos del XX;59 así
como la estancia en Cuba de colombianos, tales como el poeta Porfirio Barba Jacob;60 y los
combatientes por la independencia José Rogerio Castillo y Zúñiga, Avelino Rosas, Martín Sierra,
Heriberto Duque, Rafael Díaz Morkum, Benjamín Soto Varela, Baltazar Orozco, Joaquín
Urdaneta, Ignacio Medrano y Francisco Tamayo.61
56
Salcedo Cabal, Julián: Bambuco a lo 'mero macho', El País.com.co, 2016:
https://www.elpais.com.co/elpais/calibuenanota/cultura/noticias/bambuco-mero-macho
57
Youtube: El enterrador: https://www.youtube.com/watch?v=Z6qYFGt73G0 (vocal)
https://www.youtube.com/watch?v=SnYrFAmbJmg (instrumental)
58
García Felipe: Por los senderos del Bambuco: http://www.trovadores-yucatecos.com/Bambuco.html
59
Ariel, Sigfredo: Cubaliteraria: Un amor que no ha pasado, 2006:
http://www.cubaliteraria.com/artbaul.php?idarticulo=31
60
Ver: p. 14-15.
61
Cardona Tobón, Alfredo: Historia y región, 2011: http://historiayregion.blogspot.com/2011/10/colombianos-en-
la-independencia-de-cuba.html
Armando Rodríguez Ruidíaz 18
Agáchate el sombrerito
y por debajo mírame.
Agáchate el sombrerito
y por debajo mírame
y con una miradita
di lo que quieras hablarme.
Y con una miradita
di lo que quieras hablarme.
62
Díaz Ayala, Cristóbal: Discografía de la Música Cubana. Editorial Corripio C. por A., República Dominicana,
1994, p. 256.
63
La colección Strachwitz Frontera de grabaciones mexicanas y México-americanas:
http://frontera.library.ucla.edu/es/recordings/agachate-el-sombrerito-0. Transcripción del autor.
19 El bambuco colombiano en la música cubana.
Estribillo (bis)
Estribillo (bis)64
Es importante aclarar que la canción Mares y arenas del compositor Rosendo Ruiz, fue
asentada en esa lista con la clasificación de bambuco, aunque es conocida tradicionalmente como
una clave. No sabemos en realidad si se trata de una errata o de una versión de esa pieza
interpretada en el estilo del bambuco colombiano.
64
Toda Colombia: Canción: Agáchate el sombrerito: https://www.todacolombia.com/folclor-colombia/musica-
colombiana/canciones/agachate-el-sombrerito.html
65
Jorge Áñez: Músico, escritor y “cucarachero”, 2017: https://www.radionacional.co/noticia/jorge-anez-musico-
escritor-cucarachero
66
Díaz Ayala, 1994: 216 y 218.
Armando Rodríguez Ruidíaz 20
Díaz Ayala, Cristóbal: Discografía de la Música Cubana. Editorial Corripio C. por A., República
Dominicana, 1994:
* Vera, María Teresa y Zequeira, Rafael: Grabaciones Históricas – 1916-1924, Tumbao Cuban
Classics 1998. D.L.B. 11870, 1998, CD. Tracks 1, 7, 12 y 14.
La realización de estas grabaciones constituye una muestra del alto nivel de popularidad
del cual llegó a disfrutar el bambuco en Cuba durante las dos primeras décadas del siglo XX;
éste, literalmente, se puso de moda en la Isla. En referencia a ese acontecimiento nos dice María
Teresa Linares que: "...en esa época también se había generalizado el bambuco, género de
canción colombiana que fue adoptado por Rosendo Ruiz, María Teresa Vera, Manuel Corona y
muchos otros autores."67
67
Vera, María Teresa y Zequeira, Rafael: Grabaciones Históricas – 1916-1924, Notas de María Teresa Linares,
Tumbao Cuban Classics 1998. D.L.B. 11870, 1998, CD.
68
Ecured: María Teresa Vera: https://www.ecured.cu/Mar%C3%ADa_Teresa_Vera
21 El bambuco colombiano en la música cubana.
hecho pone en evidencia el gran interés que se manifestó en esa época por el bambuco, tanto en
los círculos artísticos como entre el pueblo cubano en general.
De esa canción ha dicho el escritor cubano Sigfredo Ariel, que "el bambuco adquirió en
Cuba un modo peculiar de acompañamiento", y que el destacado músico cubano Obdulio
Morales "aseguraba que al bambuco cubano había que darle ritmo de bembé", apuntando de esta
manera a la posibilidad de que se haya llevado a cabo una modificación regional cubana del
estilo del bambuco tradicional.
Fragmento del bambuco Esta vez tocó perder, por María Teresa Vera y Lorenzo Hierrezuelo.69
69
Youtube: Esta vez tocó perder, María Teresa Vera: https://www.youtube.com/watch?v=_P3Yq702TEM.
Transcripción del autor
Armando Rodríguez Ruidíaz 22
pero me resignaré,
a mi orgullo le diré,
igual que a mi corazón:
no siempre se va a ganar,
esta vez tocó perder.70
Esta desaceleración del tempo es uno de los detalles más relevantes que se manifiestan en
cuanto a la diferencia entre este bambuco cubano de María Teresa Vera y sus modelos originales
colombianos; ya que esa canción se desarrolla a un tempo más lento que el de todos los ejemplos
de bambucos antiguos que hemos señalado anteriormente, tales como Palonegro, ca. 126; El
miranchurito, ca. 120; La guaneña, ca. 108, La morena, ca. 90 y El enterrador, ca.
88.
En Esta vez tocó perder, podemos apreciar otra característica importante, la de una
marcada predilección de los compositores cubanos por los temas líricos, dramáticos y
melancólicos expresados en el texto de las canciones, que también hemos mencionado en otros
trabajos.73 Ya desde la primera estrofa de esta canción se hace evidente la intención dramática y
lírica de la autora, cuando dice:
Aquí encontramos por primera vez, entre los ejemplos de bambucos que hemos
mencionado hasta ahora, la introducción de fluctuaciones que modifican el tempo de la pieza,
70
Ariel, Sigfredo: Cubaliteraria: Un amor que no ha pasado, 2006:
http://www.cubaliteraria.com/artbaul.php?idarticulo=31
71
Youtube: Esta Vez Tocó Perder · María Salgado: https://www.youtube.com/watch?v=GVyg7scoCFY
72
Ver: Rodríguez Ruidíaz, Armando: La saudade gallega en la música popular cubana, p. 2:
https://www.academia.edu/37538782/La_saudade_gallega_en_la_m%C3%BAsica_popular_cubana
73
Ver: Rodríguez Ruidíaz, Armando: La saudade gallega en la música popular cubana:
https://www.academia.edu/37538782/La_saudade_gallega_en_la_m%C3%BAsica_popular_cubana
23 El bambuco colombiano en la música cubana.
Entre los bambucos de autores cubanos que están asentados en los registros de
grabaciones realizadas por compañías norteamericanas como la Columbia y la Edison,
mencionados por Cristóbal Díaz Ayala (los cuales fueron incluidos en el CD de grabaciones
históricas realizadas por el dúo Vera – Zequeira), el primero, llamado Me parece mentira, del
compositor Rosendo Ruiz, es en realidad una habanera-bolero, de acuerdo con sus
características estructurales, aunque fue clasificado como un bambuco.
Hemiola horizontal.
74
Vera, María Teresa y Zequeira, Rafael: Grabaciones Históricas – 1916-1924, Notas de María Teresa Linares,
Tumbao Cuban Classics 1998. D.L.B. 11870, 1998, CD, tracks 4 y 5.
Armando Rodríguez Ruidíaz 24
75
Vera, María Teresa y Zequeira, Rafael: Grabaciones Históricas – 1916-1924, Notas de María Teresa Linares,
Tumbao Cuban Classics 1998. D.L.B. 11870, 1998, CD., track 7. Transcripción del autor.
25 El bambuco colombiano en la música cubana.
Otro dato importante a destacar en cuanto al cultivo y la preferencia del bambuco por los
músicos y por el pueblo cubano en general, es el de la canción Rosina y Virginia, del compositor
Rosendo Ruiz. De ésta nos dice Hernán Restrepo Duque: "Del paso de Pelón y Marín por La
Habana, donde compartieron con su compatriota el poeta Porfirio Barba Jacob, quedaron huellas.
El Sr. José Portaccio Fontalvo en su libro 'La música cubana en Colombia y la música
colombiana en Cuba' dedica un capítulo para hablar del bambuco cubano “Rosina y Virginia”
(Dos lindas rosas) (1914-1919), compuesto en letra y música por el santiaguero Rosendo Ruiz,
que también es mencionado por el cubano Helio Orovio en su obra 'Música de la A a la Z'."77
Este bambuco aparece en el repertorio de las Hermanas Romay. (78 y 79)
76
Vera, María Teresa y Zequeira, Rafael: Grabaciones Históricas – 1916-1924, Notas de María Teresa Linares,
Tumbao Cuban Classics 1998. D.L.B. 11870, 1998, CD., track 7. Transcripción del autor.
77
Orovio, Helio: Cuban music from A to Z. Tumi Music Ltd. Bath, U.K., 2004, p. 190.
78
Restrepo Duque, Hernán: Bambuco antes y después de Pelón Santamarta, A mí cánteme un bambuco, 1ª edición,
julio de 1986, volumen nro. 28 de la colección “Ediciones de autores antioqueños”, Departamento de Antioquia –
Secretaría Departamental de Educación y Cultura, Dirección de Extensión Cultural– Impreso en la Editorial
universidad DEAFIT (escuela de administración, finanzas, e instituto tecnológico):
http://postigodeorcasas.blogspot.com/2017/11/230-bambuco-antes-y-despues-de-pelon.html
79
Youtube: Rosina y Virginia. Dúo hermanas Romay: https://www.youtube.com/watch?v=43WLfw37NNk.
Transcripción del autor.
Armando Rodríguez Ruidíaz 26
En este bambuco observamos un detalle muy importante, el cual sugiere una mayor
elaboración del estilo original del bambuco colombiano, modificado por la inclusión de
elementos típicos de los géneros cubanos de ritmo ternario, tales como la guajira, la clave y la
criolla; ya que el acompañamiento de esa canción fue estructurado en base al patrón rítmico
característico de esos géneros, la hemiola vertical.81
Debemos señalar al respecto que, ya en 1896, José Marín Varona había insertado en su
zarzuela El Brujo la primera guajira cubana de la cual tenemos información;82 y que en 1899, el
compositor Jorge Anckermann introdujo en la pieza teatral llamada Toros y gallos la famosa
guajira El arroyo que murmura, la cual adquirió enorme popularidad y se convirtió en un
modelo clásico que sería replicado después por muchos otros compositores.83 Aquellas guajiras
estaban basadas en el mismo ritmo sesquiáltero ternario mencionado anteriormente; el cual
aparece en bambucos antiguos tales como El aguacerito,84 así como en el acompañamiento de la
canción Rosina y Virginia, llamado hemiola vertical. La popularidad de este estilo de canción
lánguida y melancólica con ritmo sesquiáltero ternario continuó vigente en los estilos de la clave
y la criolla, durante la primera mitad del siglo XX.
Los rasgos descritos anteriormente se ponen de manifiesto, aún con mayor intensidad, en
el bambuco Mi chiquita de Rosendo Ruíz, grabado también por el dúo Vera – Zequeira.
80
El cancionero rumbero: http://cancionerorumbero.blogspot.com/2008/08/rosina-y-virginia.html
81
Ver: p. 4.
82
Giro, Radamés: Diccionario enciclopédico de la música en Cuba. Editorial Letras Cubanas, La Habana, Cuba. p.
68.
83
Díaz Ayala, Cristóbal: Cuba canta y baila: Discografía de la música cubana. Fundación Musicalia, San Juan,
Puerto Rico, 1994. p. 179.
84
Ver: p. 3.
27 El bambuco colombiano en la música cubana.
En esta canción los estilos del bambuco colombiano y la criolla cubana convergen de
manera tal que es prácticamente imposible diferenciar uno del otro. En ella podemos apreciar un
proceso de interacción o simbiosis cultural, en el cual algunos elementos del bambuco aportados
por los músicos colombianos, fueron incorporados al repertorio de los cubanos, los cuales
introdujeron ciertas modificaciones regionales en el patrón original; y a su vez, los músicos
colombianos insertaron características de la música cubana en su propio estilo.
85
Vera, María Teresa y Zequeira, Rafael: Grabaciones Históricas – 1916-1924, Notas de María Teresa Linares,
Tumbao Cuban Classics 1998. D.L.B. 11870, 1998, CD., track 12. Transcripción del autor.
Armando Rodríguez Ruidíaz 28
Grato silencio
de la lluvia que azotaba la enramada;
asi se fue disipando con su luz
tan linda y clara;
así se apasiona un hombre
por una sola mirada.
86
Youtube: Grato silencio, bambuco de Pelón Santamarta y Francisco Diago:
https://www.youtube.com/watch?v=9Ctgp7Mvvec. Transcripción del autor.
87
25 Festival Nacional de la Música Colombiana: Cancionero oficial:
https://www.fundacionmusicaldecolombia.com/portal/images/cancionero/cancionero2011.pdf
29 El bambuco colombiano en la música cubana.
88
Youtube: Atrevido, bambuco de Pelón Santamarta: https://www.youtube.com/watch?v=BLHJzQ1G_JM.
Transcripción del autor.
89
Youtube: Antioqueñita - Miguel Agudelo y Pelón Santamarta (1919):
https://www.youtube.com/watch?v=Gj3Kl557koY. Transcripción del autor.
Armando Rodríguez Ruidíaz 30
90
Cancionero antioqueño: Lopaisa.com: https://lopaisa.com/cancionero2.html
91
Youtube: Al río (o En el río), bambuco, Julio Flórez y Pelón Santamarta:
https://www.youtube.com/watch?v=t82O0dYaOcQ. Transcripción del autor.
31 El bambuco colombiano en la música cubana.
El aprecio que mostraron los cubanos por el bambuco era previsible, ya que entre éste y
los géneros de ritmo ternario autóctonos de la Isla, como el punto el zapateo, la guajira, la clave
y la criolla existían afinidades esenciales; debido a que, tal como hemos mencionado
anteriormente, todos esos géneros procedían de un ancestro común; las danzas de ritmo
sesquiáltero españolas de los siglo XVI al XVIII.
92
Cancionero antioqueño: Lopaisa.com: https://lopaisa.com/cancionero2.html
Armando Rodríguez Ruidíaz 32
las características culturales de los negros curros eran similares en muchos aspectos a las de los
jarochos de Veracruz.93
De acuerdo con Tanius Karam y Martín Echeverría, "la región del Gran Caribe ha sido uno
de los lugares más intensos para el intercambio cultural en todo el hemisferio. No resulta casual
que sea la península yucateca el lugar de encuentro entre esos ritmos caribeños (como el
bambuco, la clave y el bolero), con su difusión y desarrollo tanto en Yucatán como en
México."94
También nos dicen Karam y Echeverría que entre las múltiples contribuciones del
legendario trovador yucateco Chan Cil se ecuentra el uso de la guaracha de origen cubano,
manifestada en canciones como Blanca azuzena,95 y que una de los géneros adoptados y
difundidos por la trova yucateca es precisamente el bambuco.96 También el bolero antiguo
cubano, al estilo de la trova oriental, y la clave cubana forman parte de las tradiciones yucatecas,
y según Karam y Echeverría, las compañías de teatro bufo cubanas y la comercialización
disquera que se realizaba desde La Habana desde fines del siglo XIX, contribuyeron a la
difusión de estos géneros en la Península de Yucatán.97
En Yucatán se le llama danza a la habanera cubana, la cual fue adoptada desde tiempos
pretéritos por los trovadores yucatecos;98 así como también por el colombiano Pelón Santamarta,
que incluyó en su catálogo varias danzas (o habaneras), tales como la llamada Tú tienes un
alma. Estas piezas constituyen una prueba de la evidente influencia que las tradiciones musicales
cubano-yucatecas ejercieron en el estilo de los trovadores colombianos durante las primeras
décadas del siglo XX.
93
Winfield Capitaine, Fernando: La Bamba en Esclavos y libertos en Veracruz, p. 143.
https://www.scribd.com/doc/144702679/Esclavos-y-LibertosDef
94
Karam Cárdenas, Tanius y Echeverría, Martín: La trova como experiencia de recepción y consumo cultural en las
familias yucatecas, Secretaría de la Cultura y las Artes de Yucatán, Consejo Nacional para la Cultura y las Artes,
MéxicoDomicilio de la Sedeculta: Calle 18 No. 204 x 23 y 25, Col. García Ginerés, C.P. 97070, Mérida, Yucatán,
2013, p. 37.
95
Karam Cárdenas, Tanius y Echeverría, Martín, 2013: 36.
96
Karam Cárdenas, Tanius y Echeverría, Martín, 2013: 37.
97
Karam Cárdenas, Tanius y Echeverría, Martín, 2013: 38.
98
Karam Cárdenas, Tanius y Echeverría, Martín, 2013: 40.
33 El bambuco colombiano en la música cubana.
De acuerdo con Martha Enna Rodríguez Melo, la historia del bambuco yucateco, que
floreció en la segunda década del siglo XX, comenzó con la llegada de Pelón y Marín en 1907 y
se consolidó con el trabajo del dueto Wills y Escobar desde 1919. Según Rodríguez Melo, el
bambuco yucateco se basó en la forma colombiana de la canción-bambuco, y hacia el año 1910,
los yucatecos ya habían asimilado el bolero cubano y el bambuco colombiano. Dice también
Rodríguez Melo: "...se afirma que Ricardo Palmerín, uno de sus principales cultores con más de
cuarenta bambucos en catálogo, fue alentado por el dueto de Wills y Escobar, y sus bambucos El
rosal enfermo, ganador de un concurso en México en 1923, y Flores de mayo, fueron grabados
en 1924 y 1926, respectivamente, por el dueto colombiano de Briceño y Añez. El bambuco
Acuarela a Mérida de Miguel Ángel Gallardo lo recuerda: “A mi Mérida querida, / la ciudad
blanca y gentil, / la tierra de Guty Cárdenas / y Ricardo Palmerín”.100
99
Youtube: Tú tienes un alma, Danza, Jesús María Trespalacios (la 1ª y 3ª estrofas), Pelón Santamarta (2ª y 4ª
estrofas) y Germán Benítez Barón: https://www.youtube.com/watch?v=5ZGKAf2WhIY y
https://www.youtube.com/watch?v=t4mS4r5rPGs
100
Rodríguez Melo, Martha Enna: El bambuco, música nacional de Colombia, Revista del Instituto de Investigación
Musicológica “Carlos Vega”, Año XXVI, Nº 26, 2012, p. 329-330.
Armando Rodríguez Ruidíaz 34
cosa el bambuco después de él. Él desarrolló esa modalidad de tocar el bambuco, lo llevó a
México, y volvió de allá para imponer en Colombia su forma de tocarlo; así no fuera consciente
de esa paternidad, ni reclamara para sí tal reconocimiento, que los demás tampoco se han
preocupado por concederle”.
Y Hernán Restrepo Duque comenta al respecto: "...resulta ser que el bambuco, tal como
lo conocemos en la actualidad, es un bambuco distinto del que se tocaba en el siglo XIX..."
señalando de esa manera una evolución de la forma tradicional del bambuco colombiano, la cual
se llevó a cabo durante la transición del siglo XIX al XX, y coincidió con la importante actividad
del dúo de Pelón y Marín, así como otros destacados artistas colombianos, tales como Alejandro
Wills , Alberto Escobar, Alcides Briceño y Jorge Añez. Dice Restrepo Duque: "Yo diría que,
más que de Pelón Santamarta como único aportante, estaríamos hablando de una época, la suya,
que coincidió con la actividad musical de Pedro Morales Pino, Emilio Murillo, Daniel Uribe
Uribe, y otros músicos que influyeron unos en otros para que ese cambio estilístico, digamos,
fuera notorio."101
101
Restrepo Duque, Hernán: Bambuco antes y después de Pelón Santamarta, A mí cánteme un bambuco, 1ª edición,
julio de 1986, volumen nro. 28 de la colección “Ediciones de autores antioqueños”, Departamento de Antioquia –
Secretaría Departamental de Educación y Cultura, Dirección de Extensión Cultural– Impreso en la Editorial
universidad DEAFIT (escuela de administración, finanzas, e instituto tecnológico):
http://postigodeorcasas.blogspot.com/2017/11/230-bambuco-antes-y-despues-de-pelon.html
35 El bambuco colombiano en la música cubana.
Bibliografía
Díaz Ayala, Cristóbal: Cuba canta y baila: Discografía de la música cubana. Fundación Musicalia, San Juan,
Puerto Rico, 1994
Díaz Ayala, Cristóbal: Discografía de la Música Cubana. Editorial Corripio C. por A., República Dominicana, 1994
Giro, Radamés: Diccionario enciclopédico de la música en Cuba. Editorial Letras Cubanas, La Habana, Cuba
González Espinosa, Jesús Emilio: "No doy por todos ellos el aire de mi lugar": La construcción de una identidad
colombiana a través del bambuco en el siglo XIX, Universidad autónoma de Barcelona, Facultad de Filosofía y
Letras, Dpto. de Arte Bellaterra, 2006
Isaacs, Jorge: María: Biblioteca Virtual Universal. Editorial Del Cardo, 2003:
http://www.biblioteca.org.ar/libros/70959.pdf
Karam Cárdenas, Tanius y Echeverría, Martín: La trova como experiencia de recepción y consumo cultural en las
familias yucatecas, Secretaría de la Cultura y las Artes de Yucatán, Consejo Nacional para la Cultura y las Artes,
MéxicoDomicilio de la Sedeculta: Calle 18 No. 204 x 23 y 25, Col. García Ginerés, C.P. 97070, Mérida, Yucatán,
2013
Linares, María Teresa y Núñez, Faustino: La música entre Cuba y España, Fundación Autor, 1998
Restrepo Duque, Hernán: Bambuco antes y después de Pelón Santamarta, A mí cánteme un bambuco, 1ª edición,
julio de 1986, volumen nro. 28 de la colección “Ediciones de autores antioqueños”, Departamento de Antioquia –
Secretaría Departamental de Educación y Cultura, Dirección de Extensión Cultural– Impreso en la Editorial
universidad DEAFIT (escuela de administración, finanzas, e instituto tecnológico):
http://postigodeorcasas.blogspot.com/2017/11/230-bambuco-antes-y-despues-de-pelon.html
Armando Rodríguez Ruidíaz 36
Restrepo Posada, Daniel: Contraste entre dos músicos que representaron la formación académica y la condición
popular de la música en Medellín a finales del siglo xix y comienzos del xx: Antropol. Sociol. no. 9, enero -
diciembre 2007
Rodríguez Melo, Martha Enna: El bambuco, música nacional de Colombia, Revista del Instituto de Investigación
Musicológica “Carlos Vega”, Año XXVI, Nº 26, 2012
Santamaría Delgado, Carolina: Bambuco, tango and bolero: music, identity, and class struggles in Medellín,
Colombia, 1930-1953
Santamaría Delgado, Carolina: El bambuco, los saberes mestizos y la academia; un análisis histórico de la
persistencia de la colonialidad en los estudios musicales latinoamericanos, Latin American Music Review, Volume
28, Number 1, Spring/Summer 2007
Suzarte, José Quintín. Los guajiros. Costumbristas cubanos del siglo XIX. Selección, prólogo, cronología y
bibliografía Salvador Bueno.
http://www.cervantesvirtual.com/servlet/SirveObras/68060620217137506322202/p0000017.htm#83
Varney, John: “An Introduction to the Colombian "Bambuco." Latin American Music Review / Revista de Música
Latinoamericana 22, no. 3 (Autumn - Winter, 2001): 135. Citado en: López, David: Colombian Bambuco, Pasillo,
and Porro and the Role of the Tuba in these Traditional Genres, Texas Tech University, 2016
Vera, María Teresa y Zequeira, Rafael: Grabaciones Históricas – 1916-1924, Notas de María Teresa Linares,
Tumbao Cuban Classics 1998. D.L.B. 11870, 1998, CD
Wikipedia: Bambuque: https://es.wikipedia.org/wiki/Bambuque
Youtube: Tú tienes un alma, Danza, Jesús María Trespalacios (la 1ª y 3ª estrofas), Pelón Santamarta (2ª y 4ª
estrofas) y Germán Benítez Barón: https://www.youtube.com/watch?v=5ZGKAf2WhIY y
https://www.youtube.com/watch?v=t4mS4r5rPGs
Chan Cil By Yodigo - Own work Escaneada de una fotografía pública de los archivos del Museo de la cancion
yucateca, CC BY-SA 3.0, httpscommons.wikimedia. or - Copy