Está en la página 1de 149

GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

UNIVERSIDAD NACIONAL DEL ALTIPLANO

FACULTAD DE MEDICINA HUMANA

ESCUELA PROFESIONAL DE MEDICINA HUMANA

AREA DE CIENCIAS MORFOLOGICAS

CATEDRA

ANATOMIA HUMANA I

GUIA DE DISECCION

JEFE DE CATEDRA

Dr. Giovanni Dueñas Melo

PRESENTADO

- Mamani Calderon, Moisés

- Orozco Bustinza, Carlos Eduardo

- Bustencio Jose David

- Mamani Calderón Blanca Nellyda

C.U. Enero 2013

1
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

INDICE

PRESENTACION

OBJETIVO

INSTRUCCIONES

BIOSEGURIDAD EN SALA DE DISECCION………………………...…… 4

INSTRUMENTOS DE DISECCION………………………………………… 5

REGIONES DEL CUELLO..………………………………………………….7

REGIÓN SUPRAHIOIDEA…………………………………………………. 10

REGIÓN INFRAHIOIDEA ……………………………………………………13

REGIÓN PAROTIDEA………………………………………………………. 22

REGIÓN CAROTIDEA……………………………………………………….26

REGIÓN SUPRACLAVICULAR…………………………………………… 32

REGIÓN SUPRACLAVICULAR…………………………………………… 37

REGION ESCAPULAR ………………………………………………………42

REGION DE LA AXILA ………………………………………………………49

REGIÓN BRAQUIAL ANTERIOR………………………………………….. 61

REGION BRAQUIAL POSTERIOR………………………………………… 64

REGIONES DEL CODO…………………………………………………….. 66

REGION OLECRANIANA ……………………………………………………71

REGION ANTEBRAQUIAL ANTERIOR

REGION ESTERNAL ………………………………………………………..81

REGION COSTAL…………………………………………………………… 86

REGION DEL MEDIASTINO……..………………………………………… 94

PARED ABDOMINAL………………………………………………………. 108

BIBLIOGRAFIA

2
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

PRESENTACION

La presente guia de disección tiene la finalidad facilitar a los estudiantes de


Anatomia I la preparacion de regiones anatomicas mediante la diseccion, para
mejor comprensión de estructuras anatomicas .

La disección de cadáveres es una técnica practicada desde los siglos XIII y XIV,
pero que tiene su mayor expresión durante el Renacimiento. En este periodo, la
fascinación por el cuerpo humano y el afán por descubrir sus misterios, llevó a la
conformación de gremios que reunían médicos, artistas y boticarios que acudían a
las disecciones para conocer directamente la anatomía humana. Andreas Vesalius
es el anatomista más notable de la época, considerándose su obra compilada en
De humani Corporis Fabrica, la fundación de la anatomía moderna. Sin embargo,
hubo otras contribuciones importantes al arte de la disección de cadáveres, y por
tanto, a la descripción anatómica del ser humano, correspondientes al mismo
periodo pero que en ese momento histórico se desconocían, como es el caso de las
obras realizadas por Leonardo Da vinci (entre ellas, el famoso Hombre de Vitruvio).

Actualmente, el objetivo de la disección de cadáveres no ha cambiado mucho.


Aunque ya ha sido descrita casi toda la anatomía humana y por tanto el fin ya no es
desvelar los misterios de la morfología del cuerpo humano, el deseo por explorar y
conocer la anatomía sigue latente y la disección de cadáveres representa entonces,
una herramienta pedagógica esencial para la adquisición por parte de los
estudiantes de medicina de estos conocimientos

OBJETIVO

Facilitar a los estudiantes de Anatomía la preparación de regiones anatómicas


mediante la disección estructuras para su mejor entendimiento.

INSTRUCCIONES

3
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

 En la sala de disección, el cadáver debe ser formalizado previamente para


su conservación. Por lo que las venas pueden estar llenas de sangre
coagulada o vacías. El cuerpo puede estar húmedo ya por su envoltorio o
por los conservadores.
 Realice la disección con calma, pues una parte que ha sido separada para
su estudio no puede ser totalmente restaurada, por lo tanto exponga sólo
aquellas partes del cuerpo que corresponden a la práctica en turno.
 Inspeccione periódicamente las partes del cadáver y provéales un
mantenimiento adecuado durante cada disección.

BIOSEGURIDAD EN SALA DE DISECCION

Mientras permanezca en el laboratorio de disección, utilice Barreras primarias de


Bioseguridad para disminuir el riesgo de contaminación o infección.

 Proteja su ropa con el uso de uniforme de disección con su respectivo


barbijo, gorro y aislante para los pies.
 No use sandalias o zapatos abiertos porque la caída de un bisturí puede
lesionarle gravemente el pie.
 Usar guantes para evitar el contacto con el tejido humano y fijadores.
Cuando corte huesos use anteojos o gafas para proteger sus ojos de las
virutas.
 Evite comer en el lugar de disección

INSTRUMENTOS DE DISECCION

4
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

 Sonda acanalada – es la primera herramienta de disección después de sus


dedos. Una sonda acanalada está diseñada para rasgar el tejido conectivo y
permitir al estudiante sentir los nervios y los vasos antes de que se dañen
 Pinzas – se utilizan para levantar y sostener vasos, nervios y otras
estructuras, mientras realiza la disección roma. Dos pares de pinzas son
necesarias: una de puntas tipo romo y redondeadas, las superficies de
agarre deben ser corrugadas; la segunda debe tener dientes (también
conocidos como pinzas o fórceps de tejido de dientes de rata) para sujetar
los tejidos
 Bisturí – se utiliza principalmente como una herramienta de corte. El bisturí
no se recomienda para la disección general porque puede cortar estructuras
pequeñas sin sentirlo. El mango del bisturí debe estar hecho de metal (no
plástico). La hoja debe ser de alrededor de 3,5 a 4 cm de largo. La
vanguardia debe tener alguna convexidad cerca de la punta. Una hoja
afilada se debe utilizar en todo momento porque nadie puede hacer un buen
trabajo con un bisturí sordo. Por lo tanto, puede ser necesario tener algunas
de reserva
 Tijeras – útiles para cortar, para la disección roma y para la transección. Se
recomiendan dos pares: un par de tijeras largas y pesadas (alrededor de 15
cm de largo) y un par de tijeras pequeñas de puntas agudas para la
disección de estructuras delicadas
 Pinza hemostática – herramienta para eliminar piel. Esta pinza tiene dos
ventajas: aplasta estructuras delicadas y no se reposiciona con la rapidez
que lo hacen las pinzas, por tanto, permite mirar por más tiempo el
contenido de las regiones en disección

5
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

A. Sonda
acanalada
B. Pinzas
C. Pinzas de tejido
D. Bisturí y cuchilla
para extracción
E. Tijeras largas
F. Tijeras cortas

REGIONES DEL CUELLO

El cuello es la parte del tronco, relativamente estrecha, como estrangulada, que


une la cabeza con el tórax. Topográficamente, el cuello, prescindiendo de la
columna cervical que forma su esqueleto, se divide en dos grandes regiones: una,

6
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

posterior, situada detrás de la columna vertebral, región de la nuca, (debe referirse


a las regiones raquídeas); la otra anterior, situada delante de esta misma columna
vertebral, a región traqueal. El límite que separa ambas regiones es un plano
verticotransversal que, partiendo de las apófisis transversas de la columna cervical,
llega al borde anterior del músculo trapecio. La región traqueal, a su vez, se divide
en cierto número de regiones secundarias, que repartiremos en dos grupos:
1.- Regiones anteriores.
2.- Regiones laterales
REGIONES ANTERIORES
Las regiones anteriores o medias se encuentra situada entre los dos músculos
esternocleidomastoideos. Son en número de dos: una situada encima del hueso
hioides, región suprahioidea.
1.- REGIÓN SUPRAHIOIDEA
La región suprahioidea, par y simétrica, ocupa la parte anterior y superior del
cuello.

1. Límites.- Sus límites superficiales son: por abajo, una línea horizontal que,
pasando por
El cuerpo del hueso hioides, se extiende de un esternocleidomastoideo al otro; por
arriba, una línea horizontal, tangente al borde inferior del maxilar y que se extiende
igualmente hasta el borde inferior de ambos esternocleidomastoideos. Sus límites
profundos están representados por la cara inferior de los músculos milohioideos e
hioglosos.

7
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

2. Posición del cadáver.-Se coloca bajo la nuca junto soporte convexo para
poner la cabeza
En hiperextensión. Luego se atrae fuertemente hacia arriba la sínfisis mentoniana y
se fija en esta posición por medio de una erina. De este modo la regiónsupra
hioidea queda extendida y tensa. Disecaremos sucesivamente cada una de las dos
mitades, comenzando por el lado derecho.

Región suprahioidea. Trazado de las incisiones

3. Disección del lado derecho: planos superficiales, compartiendo y


glándulasubmaxilares.- En este lado representaremos el compartimiento
submaxilar,
Después de haber levantado en un primer tiempo los planos superficiales, es decir,
la piel, el tejido celular subcutáneo y el músculo cutáneo.
a) Piel y tejido celular subcutáneo.- En la piel de la región, previamente
afeitada si es
Necesario, se trazan tres incisiones, al saber: dos incisiones horizontales, que
correspondan a los límites superior e inferior de la región, y una incisión vertical
media.
La incisión horizontal superior sigue el borde inferior del maxilar y se
extiende por atrás hasta el borde anterior de los dos esternomastoideos. La incisión
horizontal inferior sigue el borde inferior del cuerpo del hueso hioides y se extiende,
como la precedente, hasta el borde anterior de los músculos
esternocleidomastoideos. La incisión vertical media parte de la sínfisis mentoniana
para llegar al centro del cuerpo del hueso hioides.
Las tres incisiones que acabamos de trazar limitan dos colgajos cutáneos, uno
derecho y otro izquierdo. De momento solo nos ocuparemos del derecho. Disecado,
de delante atrás, hasta el límite posterior de la región, debe levantarse la piel con su
capa celuloadiposa para poner al descubierto las fibras del músculo cutáneo,
evitando su lesión.
b) Cutáneo.-Así disecado y reclinado hacia atrás el colgajo cutáneo, se
encuentra al
Descubierto el músculo homónimo, cuyas fibras son oblicuas de abajo arriba y de
atrás adelante, su borde anterior no llega a establecer contacto con el del lado

8
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

opuesto, si no que limita con este último un espacio triangular de base inferior, en
el cual se ven los músculos milohioideos cubiertos por la aponeurosis cervical
superficial,. Bajo el cutáneo, visible a través de sus fibras, se reconoce la glándula
submaxilar, y en la parte más posterior, en el mismo borde del
esternocleidomastoideo, la vena yugular externa.
c) Aponeurosis cervical superficial.-Como hicimos para la piel, cuyo grosor
es siempre Muy pequeño, se corta un colgajo rectangular que se levanta
y reclina hacia atrás, respetando cuidadosamente la aponeurosis
subyacente. Al mismo tiempo que el músculo, separaremos la vena
yugular externa, adherida al mismo.
La aponeurosis cervical superficial, mas o menos gruesa según los sujetos, se
encuentran entonces al descubierto. Bajo ella se percibe yendo delante atrás, el
milohioideo, el vientre anterior del digástrico, la glándula submaxilar, la vena facial,
el borde anterior del esternocleidomastoideo, y por último, en el ángulo
posterosuperior de la preparación, el polo inferior de la parótida.
La aponeurosis superficial, que se desdobla para envainar la glándula
submaxilar, contribuye a la formación de su compartimiento.
d) Compartimiento y glándula submaxilares.-Para evidenciar el
compartimiento
Submaxilar se procede así: se practica en la eminencia glandular de la aponeurosis
una incisión transversal, o mejor ligeramente conexa hacia abajo, que no exceda,
por delante ni por detrás, los límites de la glándula. Por medio de la sonda
acanalada, introducida en la incisión hecha en la aponeurosis, se separa esta última
de la glándula, lo que es fácil, pues la aponeurosis se encuentra aislada de la
submaxilar por una capa de tejido celular laxo. Después de haber colocado algunas
piezas sobre los labios de la incisión aponeurótica, para mantenerla ampliamente
abierta, se proseguí, siempre con la sonda acanalada, el aislamiento de la glándula
de las paredes de su compartimiento, con lo que se puede estudiar el
compartimiento submaxilar y su contenido.
Reconoceremos primero las tres paredes del compartimiento:
3.1· La pared externa, formada por la hoja superficial-la que hemos incidido-de
la aponeurosis, en cuyo espesor hallamos la vena facial que va al tronco
tirolinguofacial; en realidad no se halla, pues, en el compartimiento, a la inversa de
la arteria homóima.

REGIÓN SUPRAHIOIDEA

9
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

3.2· La pared interna está constituida por los músculos di gástrico, estilohioideo
e hiogloso, cubiertos por una hoja aponeurótica, u hoja profunda, que se reúne con
la hoja superficial en la proximidad del músculo digástrico, como puede
comprobarse tirando con las pinzas de los labios de la incisión aponeurótica.

3.3· La pared superior se halla constituida por la cara profunda del maxilar.
En cuanto al contenido del compartimiento, está representado: por una glándula
submaxilar, por ganglios linfáticos, la arteria facial y una de sus ramas, la arteria
submentoniana.
La glándula submaxilar aparece casi por completo. Estudiada su forma y
relaciones, se reclina hacia fuera, buscando, en su cara profunda, la prolongación
que envía al intersticio que separa el milohioideo del hiogloso.
Atrayendo la glándula hacia abajo se ponen de manifiesto los ganglios linfáticos.
En número de tres o cuatro, descansan sobre su cara superior, en una capa
celulosa más o menos cargada de grasa.

10
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

La arteria facial se encuentra a nivel del ángulo y describe un asa en contacto


con la pared posterosuperior del compartimiento submaxilar. Penetra en el tejido
glandular y luego sale dela región por la cara externa del maxilar inferior. Tirando de
la glándula por una parte y de la facial por otra, se descubren las ramas que esta
arteria da a la glándula. La arteria submentoniana nace de la facial en el ángulo
posterosuperior del compartimiento. Las seguiremos de atrás adelante, en el
trayecto que recorre por la cara superior de la glándula, para descubrir la rama que
abandona a esta última. La vena que le acompaña desemboca en la vena facial.
Pasemos ahora al lado derecho para preparar los planos subaponeuróticos.
4·- Disección el lado izquierdo: plano subaponeurótico.-El plano
subaponeurótico de la región suprahioidea está constituido:
4.1.-Por músculos (digástrico, estilohiodeo, milohioideo, hiogloso);
4.2.- Por la vena lingual superficial, el nervio hipogloso mayor, el nervio lingual
y el glandio
Submaxilar.
Estas diversas formaciones están cubiertas por los planos superficiales, es
decir, por la piel, el tejido celular subcutáneo, el músculo cutáneo y la aponeurosis
cervical que contiene en su desdoblamiento la glándula submaxilar. Por lo tanto,
debemos, ante todo, desembarazarnos de ella.
Para lograrlo se diseca y reclina hacia atrás, como en el lado derecho, la piel
tapizada de tejido celuloadiposo y el cutáneo. Se abre el compartimiento de la
submaxilar y luego se extirpa la glándula, excepto su prolongación profunda, que se
deja en su lugar después de haberla separado del cuerpo de la glándula con un
golpe de tijeras. Al mismo tiempo que la glándula, se extirpan los ganglios y el tejido
celuloadiposo que los rodea; no tocaremos la arteria facial ni los vasos
submentonianos, que deben conservarse en la preparación. Solo nos falta ahora
liberar los planos profundos de la delgada hoja aponeurótica que los cubre, lo que
es fácil.
a) Músculo digástrico y estilohioideo.-El digástrico se reconoce por su
dirección y
Disposición: sus dos manojos, el vientre posterior y el vientre anterior, así como el
tendón intermedio que los une y el modo de fijación de este tendón al hueso
hioides, forma una horquilla por la que pasa el tendón del digástrico.
b) Músculo milohioideo e hiogloso.-El milohiodeo por delante y el hiogloso por
detrás

11
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

Constituyen el suelo de la región. Los dos milohioideoa, el del lado derecho y el


lado izquierdo, se unen el la línea media para formar una especie de rafe, la línea
blanca suprahioidea. En cuanto al músculo hiogloso, solo se manifiesta en la parte
más posterior de la región. En el intersticio que separa aquel del milohioideo se
aloja la prolongación de la glándula submaxilar, y desaparecen el nervio hipogloso
mayor y la vena lingual.
c) Nervio hipogloso mayor y vena lingual.- encontramos el nervio situado
encima de la
Vena, cruzando más o menos horizontalmente la cara superficial del hiogloso, algo
por encima del hueso hioides. Pronto desaparecen en el intersticio, conocido ya,
que separa el milohioideo del hiogloso.
d) Nervio lingual y ganglio submaxilar.- Se prende con una pinza-erina la
prolongación de
la glándula submaxilar y se atrae un poco hacia abajo y atrás para desprenderla del
intersticio que separa el hiogloso del milohioideo; se reclina, por otra parte, hacia
delante el borde posterior o borde libre del milohioideo, y aparecen, aplicados sobre
el hiogloso, el nervio lingual y los filetes que dicho nervio envía al ganglio
submaxilar y a la glándula.Igualmente, en conexión con la prolongación de la
glándula submaxilar, puede verse el origen del conducto de Wharton.

2. REGIÓN INFRAHIOIDEA

La región infrahioidea, impar y media, está situado por debajo del hueso hiodes.
Ocupa la parte anterior e inferior el cuello.
1. º.-Límites.-Tiene por límites: por arriba un plano horizontal que pasa por
el cuerpo del
Hueso hioides; por abajo, la horquilla esternal; lateralmente, el borde anterior de los
dos músculos esternocleidomastoideo. En profundidad se extiende hasta el plano
prevertebral.

12
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

2. º Utilización de los cadáveres.- La definición que precede muestra que


la región
infrahioidea comprende : 1º, por una parte, planos e cubierta: piel, aponeurosis y
músculos; 2º. Por otra parte, formaciones viscerales situadas detrás del plano
musculoaponeurótico: cuerpo tiroides, conducto laringotraqueal, esófago.
Será difícil, por no decir imposible, estudiar este conjunto tan complejo en
solo cadáver.
Son necesarios dos. El primero se utiliza para la preparación de los planos
superficiales (región infra hioidea propiamente dicha de los tratados de anatomía
topográfica). El segundo servirá para estudiar los planos profundos, es decir, los
órganos viscerales.

13
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

Como, por otra parte, la región infra hioidea, impar y media, está formado de
dos partes
Sensiblemente simétricas, cada preparación de dividirá a su vez en dos mitades,
derecha e izquierda. He aquí como, en definitiva, se utilizarán los cadáveres:

Primer cadáver: PLANOS SUPERFICIALES


a) Lado izquierdo: preparación de las aponeurosis.
b) Lado derecho: músculos, vasos y nervios.

Segundo cadáver: PLANO PROFUNDO


a) Lado derecho: Lóbulo derecho del cuerpo tiroides, pedículos vasculares,
conducto laringotraqueal, nervio recurrente derecho.
b) Lado izquierdo: conducto laringotraqueal, esófago, nervios laríngeos y
nervios recurrentes izquierdo.
3.- Posición del sujeto.-Para estas diversas preparaciones es necesario
que el cadáver esté
En decúbito sobre el dorso, con el cuello en extensión forzada. Para lograrlo se
coloca un soporte bajo los hombros, dejando caer la cabeza hacia atrás y
manteniéndola fija de manera que no pueda girar hacia los lados.

A. Disección del primer cadáver: planos superficiales


B.
1. º Incisión de los tegumentos.-Se traza ( una incisión vertical media que
Comprenda la piel y el tejido celular subcutáneo, muy delgado a este nivel, y se
extienda desde el borde superior del hueso hioidal hasta la horquilla esternal.
A esta incisión vertical se añaden dos incisiones horizontales: una superior
que se
Extenderá transversalmente desde el esternocleidomastoideo izquierdo,
alcanzando ligeramente cada uno de estos músculos; la segunda, inferior se traza
desde una articulación esternoclavicular a la otra.
Levantando los dos colgajos limitados por estas dos concisiones, aparece
la aponeurosis cervical superficial, y bajo la misma se descubre por transparencia el
borde anterior del esternocleidomastoideo.
Los colgajos cutáneos y el músculo cutáneo del cuello; 2º, las arteriolas y
las venas superficiales, tributarias éstas últimas de las venas yugulares anteriores y
externas; 3º, ramos nerviosos que proceden del plexo cervical superficial.

14
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

2. º Aponeurosis cervical, superficial, espacio supraesternal.- La


aponeurosis cervical
Superficial cubre toda la región. Para descubrir el plano subyacente, se incide y
reclina como las piel, seccionando, para realizar el trabajo, la porción esternal del
músculo esternocleidomastoideo derecho 2 ó 3 centímetros por encima de la
horquilla esternal.
Comprobamos a si que la aponeurosis cervical superficial se desdobla en la
parte inferior de la región, mientras que una hoja va insertarse en el labio anterior
del borde superior del esternón, otra va a fijarse en el labio posterior este mismo
borde. El espació comprendido entre estas dos hojas, espacio supra esternal, está
lleno de una grasa bastante densa, en medio dela cual se pueden identificar las
venas yugulares anteriores y pequeños ganglios linfáticos.
3. º Aponeurosis cervical media.- levantada la aponeurosis cervical
superficial, nos encontramos con un nuevo plano aponeurótico, inmediatamente
subyacente al otro: la aponeurosis cervical media. Esta en vaina los músculos de la
región infrahioidea: omohioideo, esternocleidohioideo, esternotiroideo y tirohioideo.
Incidida la aponeurosis cervical media algo a la izquierda de la línea media,
dejamos ya la parte izquierda de la preparación, que quedará tal cual está, con sus
conexiones aponeuroróticas.
Levantemos, por el contrario, la aponeurosis del lado derecho, hasta que
descubramos el músculo omohioideo. En mucho sujetos la aponeurosis cervical
media, que generalmente se describe detenida a nivel de los bordes superiores de
los músculos omohioideo, continua más allá por una hoja celulosa que pasa por
delante de los grandes vasos carotideos y se pierde en el tejido celuloadiposo que
se encuentra alrededor de la vena yugular interna y en la cara profunda de la
glándula submaxilar.
Levantada y reclinada la aponeurosis cervical media, solo nos falta disecar
primero los músculos infrahioideos y luego los vasos y los nervios profundos.

4. º Músculos infrahioideos.-Son en número de cuatro. Tres están situados a


cada lado de la línea media y son paralelos el eje del cuello: el
esternocleidohioideo, el esternocondrotiroideo y el tirohioideo.
El esternocleidohioideo es el más superficial y cubre los otros dos. Una vez
aislado y reconocidas sus inserciones superiores e inferiores, se secciona por la
mitad levantando el cabo superior hacia su inserción hioidea y reclinando el cabo
inferior hacia el esternón.

15
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

Descubrimos entonces los dos músculos subyacentes: el


esternocondrotiroideo, que desde el mango del esternón y del primer cartílago
costal se dirige hacia la cara externa del cartílago tiroides, y el tirohioideo, que nace
donde termina el esternocondrotiroideo y se inserta, por otra parte, en el borde
inferior en el hueso hioides.
Entre el esternocleidohioideo y el esternocondrotiroideo se halla un pequeño
filete nervioso que da ramos a los dos: la rama descendente del hipogloso, que
procuraremos no seccionar.
El cuarto músculo, el omohioideo, se reconoce por su dirección oblicua.
Situado por fuera de los músculos precedentes, sale de abajo del esternomastoideo
y se dirige hacia la parte externa del cuerpo del hueso hioides. Músculo de gástrico
(dos vientres, uno anterior y otro posterior), presenta en su mitad, en la parte
subyacente al esternocleidomastoideo, una porción tendinosa estrecha. Así, pues,
únicamente el vientre anterior este músculo es el que pertenece a la región
infrahioidea.
5. º.-Vasos y nervios profundos.-debajo de la aponeurosis cervical media y de
los músculos que envainan, se encuentra una capa de de grasa que es
particularmente abundante en la parte más inferior de la región, en el origen de la
tráquea: el tejido adiposo pre traqueal.
En el plano medio, en el espacio comprendido entre los bordes internos de los
músculos infrahioideos, aparecen de arriba abajo: el hueso hioides, la membrana
tiroidea, el cartílago tiroides con su escotadura anterior, el ángulo tiroideo y la
eminencia del bocado de Adán, la membrana cricotiroidea y los músculos
cricotiroideos. El cartílagocricoiodes y los primeros anillos de la tráquea, estos
últimos ocultos por el istmo del cuerpo tiroides.
Por detrás del esternocondrotiroideo, desprendiéndose de debajo de este
músculo, aparecen el lóbulo derecho y el polo superior del tiroides.
Estas diversas formaciones, de las que se debe tenerse desde ahora una
noción de conjunto, se estudiarán en detalle en la segunda preparación, que
comprende la decisión de los planos profundos.
Las arterias proceden todas de las tiroideas superior, rama de la carótida
externa. Al reclinar el esternocleidomastoideo descubrimos sin abrirla la vaina de
los vasos carotideos. De esta vaina, a la altura del asta mayor del hueso hioides,
sale una arteria bastante voluminosa que describe un cayado de convexidad
superior: la tiroidea superior. Imite inmediatamente colaterales: unas, destinadas al
cuerpo tiroides, se dirigen hacia el polo superior de la glándula; otras, ramas

16
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

musculares, irrigan los músculos próximos, omohioideo y esternohioideo; otra, por


fin, se distribuyen en la laringe: la laríngea superior atraviesa la membrana tiroidea
acompañada del nervio laríngeo superior; la laríngea inferior, que camina
oblicuamente por debajo del músculo esternohioideo, en el espacio que separa el
esternotiroideo del tirohioideo, da ramas a estos dos músculos y suministra,
además, la arteria crocotiroidea, que pasa por delante de la membrana del mismo
nombre y se anastomosa con la cricotiroidea del lado opuesto.
Los nervios son: 1. º por una parte, la rama descendente del hipogloso,
conocida ya, y que inerva los tres músculos esternocleidohioideo, esternotiroideo y
omohioideo; 2. º por otra parte el nervio del tirohioideo, que procede directamente
del tronco del hipogloso.

B. Disección del segundo cadáver: planos profundos.


Incididos los planos superficiales, piel y tejido celular subcutáneo como en el
primer cadáver , se incide del mismo modo la aponeurosis cervical superficial, que
se reclinará al máximo, seccionando las porciones esternales de los músculos
esternocleidomastoideos. Se cortan, por fin, transversalmente por su mitad de los
músculos omohioideos, esternohioideos, esternotiroideos de ambos lados y se
reclinan los diversos segmentos de estos músculos hacia sus inserciones
respectivas. Todos los planos de cubierta se encuentran así reclinados: es posible,
por consiguiente, estudiarlos órganos profundos de la región infrahioidea.
1. º Lado derecho de la preparación.- La disposición de estos órganos y sus
relaciones no son absolutamente idénticas a la derecha y a la izquierda. Por esta
aconsejamos como se ha especificado anteriormente-utilizar: 1º, el lado derecho
de la preparación para el estudio del cuerpo tiroides, de su vascularización y del
nervio recurrente derecho; 2º, el lado izquierdo para el estudio de las relaciones del
esófago y los nervios laríngeos.

A.-CUERPO TIROIDES.- La glándula tiroides está formado de los glóbulos


casi idénticos, reunidos delante de los primeros anillos de la tráquea por una
porción estrecha, el istmo, entrevista ya al disecar los planos superficiales, entre los
bordes internos de los músculos esternohioideos y esternotiroideos. A este nivel,
istmo del cuerpo tiroides es inmediatamente subaponeurótico. El levantamiento de
los músculos infrahioideos desprende el cuerpo tiroides en totalidad y descubre
independientemente de los lóbulos y del istmo, la pirámide de Lalouvete,
prolongación de forma alargada, que parte del borde superior del istmo, algo a la

17
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

izquierda de la línea media, y se dirige aplicándose a la laringe, hacia el hueso


hioides.

B.- VASOS TIROIDEOS.-El cuerpo tiroides es irrigado por las arterias tiroides
superiores e inferiores, que terminan en los dos polos, superior e inferior, de cada
lóbulo. Disecaremos sucesivamente el pedículo superior y el pedículo inferior.
a) Pedículo superior.- El pedículo superior está formado por la tiroidea
superior, rama de la carótida externa, ya conocida ( véase disección del primer
cadáver),. Las venas tiroideas superiores que la acompañan, cuyo diámetro y
calibre podrán a veces estorbar la disección, desembocan generalmente en el
tronco venoso tirulinguofacial y otras veces directamente en la yugular interna.
b) Pedículo inferior.-El pedículo inferior está constituida por la arteria tiroidea
inferior, rama de la subclavia. Llega al polo inferior del cuerpo tiroides por su cara
profunda. Para descubrirlo, se reclina fuertemente hacia delante y adentro el lóbulo
tiroideo. La arteria sale de la profundidad, detrás de los vasos carotideos, cuya
vaina reclinaremos hacia atrás. Describe, como la tiroidea superior, un cayado de
convexidad superior; luego, antes de llegar a la glándula, se subdivide en múltiples
ramas terminales.
Siguiendo estas ramas procurando no lesionar el nervio recurrente derecho
que se insinúa entre ellas, buscaremos en la proximidad del polo inferior de la
glándula para tiroidea, que se encuentra de un modo casi constante en la
proximidad del recurrente y de las ramas de división de la tiroidea inferior.
Abriendo ahora una ventana en la aponeurosis profunda, podemos seguir la
tiroidea inferior hasta su nacimiento, es decir, hasta la subclavia, cuya porción
intrascalénica alcanzaremos, observando la relación importante que tiene la tiroidea
inferior con el gran simpático y su ganglio cervical medio, puesto que pasan ambos
por delante de ella.
Las venas tiroideas inferiores se desprenden del polo inferior de la glándula,
pero no siguen el mismo trayecto que la arteria: tienen una dirección verticalmente
descendente y siguen la tráquea en el tejido celular pre traqueal. Desembocan en
seguida en los troncos venosos braquiocefálicos derecho e izquierdo.
Con frecuencia encontramos venas tiroideas medias; son de pequeño calibre y
están tendidos transversalmente de la glándula a la yugular interna. Como estas
venas dificultan la disección, se ligan cerca de su desembocadura y se seccionan.

18
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

C.-NERVIO RECURRENTE DERECHO.-Rama del neumogástrico, el nervio


recurrente derecho, después de haber rodeado el cayado de la subclavia, sube
hacia la laringe, lo que equivale a decir que tiene una dirección francamente oblicua
de abajo arriba y de fuera adentro. Lo seguiremos en toda la extensión de su
trayecto cervical, luego en medio de las ramas de ramificación de la tiroidea inferior,
en las que se ha señalado ya su presencia.

D.-CONDUCTO LARINGOTRAQUEAL.-para terminar esta preparación


seguimos la cara lateral derecha del conducto laringotraqueal, que forma, en cierto
modo, el plano profundo de la región, estudiando, en particular, la membrana
tirohioidea, que atraviesan la arteria laríngea superior; y el nervio laríngeo superior;
la cara externa del cartílago tiroides y su borde posterior, sobre el que se inserta el
constrictor medio dela laringe; la membrana cricotiroideo, por el que se distribuye el
nervio laríngeo externo; por último, la tráquea, cuyos primeros anillos están ocultos
por el cuerpo tiroides y que se hace cada vez más profunda a medida que se
progresa hacia la parte inferior de la región.
En esta parte no se percibe el esófago; la traqueal parece descansar
directamente sobre el plano pre vertebral.

2. º Lado izquierdo de la preparación.- Pasemos ahora a la disección de la


mitad izquierda. Seccionamos el cuerpo tiroides a ras del borde izquierdo de la
pirámide de Lalouette, que de este modo, quedará en su lugar con sus conexiones.
Disociamos el tejido celular laxo que se encuentra en la cara profunda de la
glándula, reclinando ésta hacia atrás y manteniéndola fuertemente reclinada con
erinas. Aparece entonces: por una parte, la cara posterior del lóbulo izquierdo con
los pedículos vasculares; por otra parte, el plano profundo de la región, constituido
por el conducto laringotraqueal, el esófago y los músculos prevertebrales, cubierto
de la aponeurosis cervical profunda.

A. LÓBULO IZQUIERDO DEL CUERPO TIROIDES.-Se diseca rápidamente


el lóbulo tiroideo
con sus pedículos vasculares, recordando para esto lo que se dio anteriormente. La
única particularidad que señalaremos es importante y volveremos a recordarla
dentro de poco es que en lado izquierdo no se encuentra el nervio recurrente entre
las ramas terminales de la arteria tiroidea inferior.

19
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

B. CONDUCTO LARINGOTRAQUEAL, NERVIO LARINGEO SUPERIOR Y


NERVIO LARINGEO
EXTERNO.- El conducto laringotraqueal presenta los mismos caracteres
morfológicos a derecha e izquierda. Sin embargo, existe una relación anatómica
principal solo en lado izquierdo: la de la tráquea con el esófago. En este lado el
esófago se desvía de la línea media, en tanto que a la derecha era imposible verlo y
parecía que la traque estaba en contacto con el plano prevertebral, en este lado el
esófago excede claramente la tráquea y se reconoce con facilidad por un tinte rojizo
y su consistencia blanda, que contrasta de modo patente con la rigidez de las
partes traqueales y la resistencia clásica del plano prevertebral.
Como en el lado derecho encontramos sucesivamente, y siguiendo de arriba
abajo el conducto laringotraqueal: la membrana tiroidea; el cartílago tiroides y,
detrás de él, el constrictor medio de la laringe; el cartílago cricoides cubierto del
músculo cricotiroideo; la tráquea. Estudiaremos de paso los dos nervios laríngeo
superior y laríngeo externo.
El nervio laríngeo superior, rama del neumogástrico, llega a la membrana
tirohioidea y desaparece detrás de ella. Resecando una porción de esta membrana
se ve como el nervio se desparrama en multitud de ramas, destinadas a la epiglotis
y a la porción supraglótica de la laringe. La arteria laríngea superior acompaña al
nervio.
El nervio laríngeo externo, rama de precedente, se distribuye por el músculo
cricotiroideo; da además un ramo que perfora la membrana cricotiroidea y termina
en la porción infraglótica de la laringe.

C. ESÓFAGO CERVICAL, NERVIO RECURRENTE IZQUIERDO.- Al


desprender el esófago del
Tejido celuloadiposo de que se halla rodeado, comprobamos que es fácilmente
despegable de la columna vertebral a la que esta aplicado, y mas difícilmente
desplegable de la tráquea, a la que esta unido por tejido musculo elástico bastante
denso. Lo que importa evidenciar, principalmente, es la relación del nervio
recurrente izquierdo con el esófago. Mientras que el recurrente derecho se dirige
oblicuamente hacia adentro, el recurrente izquierdo tiene una dirección
verticalmente ascendente, y en contacto con el esófago, en el ángulo diedro
formado por esta víscera y la tráquea, es donde hay que descubrirlo.se destaca por
su color blanco del fondo rojo violáceo del esófago, y da, a lo largo de su trayecto,
ramos muy finos destinados al esófago y a la tráquea.

20
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

D.- PLANO PREVERTEBRAL.- Si, para terminar la disección se abre una


ventana en la aponeurosis cervical profunda, descubriremos, como en el lado
derecho, el gran simpático con su ganglio cervical medio y la arteria cervical
profunda que lo acompaña.

REGIONES LATERALES

Las regiones laterales del cuello son en número de tres: 1.º, Por arriba, entre
la rama del rama del maxilar inferior y el músculo esternocleidomastoideo, la región
parotidea; 2º, inmediatamente por fuera de las dos regiones supra e infrahioideas,
la región esternocleidomastoideo o carotidea, que corresponde al músculo
esternocleidomastoideo; 3º, por detrás de esta ultima, entre ella y la nuca, la región
supra clavicular.

1. REGIÓN PAROTIDEA

Situada en la parte superior y lateral del cuello, la región parotidea toma su


nombre de
la glándula parótida que comprende.

1. Límites.- Esta limitada: por delante, por la rama ascendente del maxilar
inferior;
por detrás , por la apófisis mastoides y el borde anterior del músculo
esternocleidomastoideo; por arriba, por el conducto auditivo externo y por la parte
mas posterior del arco cigomático; por abajo, por una línea que une el ángulo del
maxilar con el borde anterior del esternocleidomastoideo. En profundidad, la región
parotidea se extiende hasta la apófisis estiloides y las partes laterales de la laringe.

2º Posición de cadáver.- Se coloca la cabeza en exterción y se vuelve del


lado opuesto al que debe de practicarse la disección. Una erina sólida que tire de la
barbilla fuertemente hacia abajo mantiene la cabeza en esta posición y da al
espacio parotideo su amplitud máxima. Aquí también disecaremos sucesivamente
el lado izquierdo y derecho. Comenzaremos por el lado izquierdo.

21
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

3º Disección del lado izquierdo: planos superficiales y glándula


parótida.- En el lado izquierdo se prepara la glándula parótida y los planos que la
cubren, es decir, la piel, en tejido celular subcutáneo y la aponeurosis parotidea
superficial.
a) Piel y tejido celular subcutáneo .- En la piel previamente afeitada se
trazan tres
Incisiones que corresponden sensiblemente a los límites superior, inferior y
posterior de la región.
De estas tres incisiones dos son horizontales y la tercera vertical. La incisión
horizontal superior sigue en toda su longitud el arco cigomático, hasta el pabellón
del oído. La incisión horizontal inferior Sigue primero el borde inferior de la rama
horizontal el maxilar inferior, desde el borde anterior del masetero hasta el ángulo
del maxilar; luego a partir de este punto gana directamente el borde anterior del
esternocleidomastoideo. La incisión vertical reúne el extremo posterior de ambas
incisiones horizontales; sigue el borde anterior del pabellón del oído, al que interesa
ligeramente.

Estas tres incisiones limitan un colgajo cutáneo rectangular, que se diseca


junto con la capa adiposa subcutánea y algunas fibras amarillentas que representan
el músculo cutáneo luego se reclina hacia adelante sobre la mejilla. Esta disección
es bastante delicada, en la proximidad del borde anterior del pabellón sobre todo
pues a este nivel el tejido celular subcutáneo es denso y no se diferencia
claramente de la aponeurosis subyacente. Este tejido celular subcutáneo contiene,
en la parte inferior de la preparación un filete nervioso ascendente que se dirige
hacia el pabellón del oído. Es el nervio auricular del plexo cervical superficial, que al
reconocerlo se deseca.
b) Aponeurosis parotidea superficial.- Levantados la piel y el tejido celular
Subcutáneo, aparece la aponeurosis parotidea superficial.
Comprobamos primeramente que se continúa con la aponeurosis de las
regiones próximas, a saber: la aponeurosis maseterina, la aponeurosis submaxilar y
la aponeurosis esternocleidomastoidea.
En seguida percibimos, a través de la misma y haciendo eminencia, la
glándula parótida y la prolongación que envía a la cara externa del masetero.
Igualmente, a través de la aponeurosis , percibimos los vasos y nervios que

22
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

emergen del contorno de la glándula: por arriba los vasos temporales; por delante,
aplicados a la cara externa del masetero, menos diferenciados, los vasos
transversos de la cara, los ramos del facial, el conducto de esternón y, por abajo la
vena yugular externa.
Estudiada la aponeurosis parotidea superficial y reconocidos los órganos
que cubre, se levanta dejando al descubierto la parótida.
c) Glándula parótida.- Para lograr descubrirla, practicamos en la parte
media de la
Aponeurosis una incisión vertical y en ambos extremos de la misma una incisión
horizontal,. Disecamos los dos colgajos así formados y los reclinamos a una y otra
parte, el colgajo anterior hacia delante sobre el colgajo cutáneo, el colgajo posterior
sobre la oreja. Esta disección es difícil, pues la aponeurosis esta muy adherida en
ciertos puntos; además, envía numerosos tabiques a los ácinos glandulares; los
seccionaremos a ras de la aponeurosis, procurando no dilacerarla.
El compartimiento parotideo, cuya aponeurosis forma la pared superficial –
mas adelante estudiaremos la constitución de este compartimento, se encuentra
entonces abierto y la parótida al descubierto, lo que permite estudiar su forma sus
dimensiones y su prolongación anterior luego se disecan los vasos y los nervios
que se desprende de sus tejidos glandular en todo el contorno de la glándula.
Prepararemos sucesivamente, de arriba abajo y delante atrás.
1º el paquete vasculonervioso temporal, que emerge del polo superior de la
glándula a nivel o algo por encima del trago. Comprende la vena temporal
superficial por detrás, la arteria del mismo nombre por delante el nervio
auriculotemporal entre ambas y, además, uno o dos pequeños ganglios linfáticos;
todos estos órganos están rodeados de tejido celulo adiposo particularmente denso
que hace la disección algo delicada.
2º Los ramos ascendentes, muy delgados, de la rama temporal del facial.
3ª La arteria transversal de la cara, muy pequeña.
4ª El conducto del esternón cuyo aspecto recuerda el de una vena vacía y
que se dirige hacia delante, casi transversalmente, en la región geniana.
5ª Los ramos descendentes, muy delgados también, de la rama cervical del
facial, que se hallan en el borde posterior de la mandíbula.
6º La vena yugular externa, que emerge del polo inferior de la glándula y se
aplica sobre el esternocleidomastoideo cubierto de su aponeurosis.
7º Por último algunos ganglios linfáticos superficiales, situados entre el
borde posterior de la glándula y la aponeurosis parotidea.

23
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

Volviendo de nuevo al borde anterior de la parótida proseguimos hacia atrás,


en el mismo espesor de la glándula la disección de los ramos del facial como que
acabamos de descubrir. Al hacerlo comprobaremos que las dos ramas cervical y
temporal de este nervio están contenidas en una especie de planos de
desdoblamiento de la glándula y pronto se reúnen en un tronco común, el tronco del
facial. En este mismo plano se halla la vena yugular externa, que el facial cruza
horizontalmente, pasando por fuera de ella.
Solo nos falta para terminar, evidenciar el punto en que la carótida externa
penetre en la glándula. Para esto, dejando la yugular externa intacta,
desprenderemos con el cincel o con el escalpelo el polo inferior de la glándula de
las paredes de su compartimiento, y los separaremos hacia afuera. Emergiendo de
la pared interna profunda del compartimiento parotideo, a tres o cuatro centímetros
por encima del extremo inferior de la glándula, se percibe entonces la carótida
externa acompañada de una vena. Aislamos un poco estos vasos antes de su
entrada en el tejido glandular.
Desde este momento pasamos a la disección del lado derecho.

4º Disección del lado derecho: compartimiento parotideo y órganos


que lo atraviesan.- En este lado prepararemos el compartimiento parotideo y los
órganos que lo atraviesan. Para ello se quita la glándula y su compartimiento,
dejando en su sitio el nervio facial y sus ramos, la carótida externa y las ramas que
nacen en la región la vena yugular externa y sus afluentes.
Comenzamos de nuevo igual que en la preparación del lado derecho,
disecamos y levantamos un gran colgajo cutáneo, luego dos pequeños colgajos
pequeños aponeuróticos y ponemos a descubierto la glándula parotidea y los vasos
y nervios que se desprenden de su contorno. Extirpamos en seguida, por medio de
tijeras, pelotón por pelotón, la porción de glándula que cubre la yugular externa y el
tronco del facial, porción que aislamos al intentar descubrir el trayecto intraglandular
del nervio y de la vena. Aislamos estos vasos yendo de arriba abajo, es decir,
desde su punto de penetración en la glándula hasta el punto en que se desprenden.
La operación es algo penosa, pues el tejido glandular se adhiere a la vaina vascular
y a las paredes del compartimiento, pero no es difícil.
Extirpamos así toda la glándula, excepto la porción adjunta al conducto de
stenon, que queda en su lugar. Entonces, el compartimiento parotideo es visible y
pueden estudiarse sus paredes y los vasos y nervios que lo atraviesan.
a) Paredes.- Reconocemos sucesivamente:

24
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

1º La pared superior, formada por el conducto auditivo, el cual esta


constituido en su parte interna por hueso, en su parte externa por un
fibrocartílago.
2º La pared inferior, aponeurótica, que corresponde al compartimiento
submaxilar.
3º La pared anterior, que se halla formado por el borde posterior de la
mandíbula, con el masetero al exterior y el pterigoideo interno por dentro.
4º la pared posterior, constituida de fuera adentro, de la periferie hacia la
profundidad, por el borde anterior del musculo esternocleidomastoideo,
por el borde anterior de la apófisis estiloides y los músculos
estilohioideos, estigloso y estilofaringeo que se desprenden de ella.
5º La pared interna borde mas bien que pared, que corresponde a la
faringe.
6º En cuanto a la pared externa, esta constituida por los planos
superficiales, piel y aponeurosis superficial, que hemos levantado en el
primer tiempo d la preparación.
Comprobamos que las tres paredes anterior, posterior e inferior están
tapizadas por una hoja aponeurótica mas o menos manifiesta, la aponeurosis
parotidea profunda y evidenciamos la continuidad de esta aponeurosis profunda
con la aponeurosis superficial ejerciendo tracciones sobre esta ultima.
b).- Vasos.- los vasos de la región parotidea están representadas: por la
carótida externa y sus ramas, por la vena yugular externa y por la vena que lo
acompaña la carótida externa.
Anotemos que la carótida externa penetra en el compartimiento atravesando
la pared interna entre el estilohioideo y el estilogloso. Después de haber preparado
el tronco buscamos las ramas: por delante la pequeña arteriola transversa de la
cara; por detrás la auricular posterior, por Arriba la temporal superficial y la maxilar
interna sus dos ramas terminales.
La vena yugular externa es superficial; la vemos nacer de las venas
maxilares internas y temporales, comprobando que se anastomosan con la vena
que acompañan a la carótida externa.
C.- Nervios.- Son en número de dos: el auriculotemporal y el facial.
Buscaremos el auriculotemporal y el paquete vasculonerviosos temporal superficial,
y desde aquí le seguiremos en la cara superior del compartimiento parotideo, por la
que camina antes de encontrar los vasos temporales. Seguiremos igualmente el

25
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

tronco del facial hacia la base del cráneo, observando de paso las relaciones que
tiene con la cara externa de la apófisis estiloides.

2. REGIÓN CAROTIDEA

La región carotidea o esternocleidomastoidea corresponde al músculo


esternocleidomastoideo.
1º Límites.- Situada en la parte lateral del cuello está limitada: por delante,
por el borde anterior del esternocleidomastoideo; por detrás, por el borde posterior
del mismo músculo.- por arriba por la apófisis mastoides; por abajo por la clavícula
y la horquilla esternal. En profundidad la región se extiende hasta el plano
prevertebral.
2º Posición del cadáver.- El cadáver debe de colocarse en de cúbito
dorsal, con la cabeza en extensión y vuelta del lado opuesto al que se practica la
disección. Una erina fuerte la mantiene en esta posición.
Así dispuesta la región carotidea se la tiende y extiende. Para aumentar aun
su tensión que facilita el trabajo, deprimimos fuertemente el hombro del cadáver y
lo mantenemos así tirando del miembro superior y fijándolo por medio de una
ligadura en esta posición.
Disecaremos sucesivamente el lado derecho y el lado izquierdo,
comencemos por el derecho.
3º disección del lado derecho: plano superficiales.- En el lado derecho,
dispuesto como hemos dicho, prepararemos los planos superficiales, ha saber: la
piel y el tejido celular subcutáneo, el cutáneo, la aponeurosis superficial, el músculo
esternocleidomastoideo y su vaina y, por último, los músculos homohioideo,
esternohioideo y la aponeurosis cervical media que los envuelve.

a) Piel y tejido celular subcutáneo. En la piel, previamente afeitada, si es


necesario, se practican tres incisiones una vertical y dos horizontales, superior e
inferior.
La incisión vertical (a` b`) , o mas exactamente oblicua, sigue el borde
anterior saliente del esternocleidomastoideo en toda su longitud. Se extiende, por
consiguiente, de la mastoides a la horquilla esternal.

26
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

La incisión horizontal superior (a’ a ), que parte del extremo superior de la


incisión vertical, sigue por la región mastoidooccipital hasta algo mas allá del borde
posterior del esternomastoideo; corresponde a las inserciones superiores del
músculo. La incisión horizontal inferior (b`b), partida del externo inferior de la
incisión vertical, sigue por el borde superior de la clavícula hasta el límite posterior
del esternocleidomastoideo; sigue, por lo tanto, las inserciones inferiores del
musculo. Las tres incisiones que acabamos de describir limitan un largo colgajo
cutáneo rectangular que disecamos y reclinamos hacia atrás, dejando adherida a la
piel la capa adiposa subcutánea. Respetaremos cuidadosamente, en la mitad
inferior de la región, el músculo cutáneo; en la mitad superior, la vena yugular
externa, los filetes nerviosos pegados a la cara superficial de ala aponeurosis
cervical superficial y esta misma aponeurosis, ala que esta unida la piel por tractos
fibrosos, tanto más numerosos y densos cuanto más próximos a la región
mastoideo occipital.
Disecado y reclinado el colgajo cutáneo, aparece la aponeurosis cervical
superficial, cubierta, en la mitad inferior de la preparación solamente, por las fibras
del músculo cutáneo.
b) Cutáneo.- Este músculo, repetimos, solo ocupa la parte inferior de la
región.
Estudiaremos la dirección de sus fibras anotando que la vena yugular externa, que
por encima de el es subcutánea, se coloca en la zona en que existe el cutáneo,
debajo de este.
c) Aponeurosis cervical superficial, vasos y nervios superficiales. Como la
aponeurosis
Cervical esta en la parte cubierta por el cutáneo, es necesario desprenderla y, por
consiguiente, levantar el cutáneo. Para esto se secciona este musculo, por una
parte siguiendo el límite anterior de la región y, por otra parte, el borde superior de
la clavícula. Luego se diseca y reclina hacia atrás, como hicimos con el colgajo
cutáneo. Recordando la delgadez del musculo evitaremos en esta disección
interesar las venas que se hallan en su cara profunda y la aponeurosis. Aparece
entonces la aponeurosis cervical superficial y en ella la vena yugular externa (Con
algunas de sus ramas) y los ramos del plexo cervical superficial.
 Comprobamos que la aponeurosis es gruesa y nacarada en su
segmento superior, y que por el contrario, es muy delgada y celulosa
en su segmento inferior, y que, por el contrario, es muy delgado y

27
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

celulosa en su segmento inferior, en que las fibras del


esternocleidomastoideo son claramente visibles.
 La vena yugular externa, de calibre muy variable según los sujetos y
también según su estado de repleción, no hace mas que atravesar
diagonalmente la región.
 En cuanto a los ramos del plexo cervical superficial, los vemos salir
de la profundidad a nivel del borde posterior del músculo
esternocleidomastoideo: el que se dirige hacia arriba es el ramo
muscular; el ramo transverso se dirige transversalmente adentro, y
el ramo supraclavicular, hacia abajo. Estos dos últimos nervios, en
los puntos que cruzan la vena yugular externa, están debajo de ella.
Pasemos ahora ha disecar el músculo esternocleidomastoideo y su
vaina.

d) Musculo esternocleidomastoideo y su vaina.- Se trazan en la


aponeurosis superficial tres
Incisiones semejantes a las que hemos hecho en la piel, interesando, como se
comprende, los vasos y nervios superficiales. Limitan, aquí también un colgajo
rectangular aponeurótico que primero disecamos y luego reclinamos hacia atrás,
dejando pegados a su cara superficial la vena yugular externa y los nervios del
plexo cervical superficial. Esta disección es delicada pues la aponeurosis se
adhiere al músculo en su parte superior, y es muy delgada y friable en su parte
inferior.
Reclinada la aponeurosis, el músculo se encuentra al descubierto.
Estudiamos sus inserciones, su forma, sus fascículos constitutivos. Luego
desprendemos su cara profunda del plano en que descansa, empleando
únicamente instrumentos obtusos, una espátula , o el extremo de las tijeras romas,
o el mango del escalpelo, lo que es fácil, pues el músculo no se adhiere ha este
plano profundo.
Separando entonces hacia afuera el músculo así liberado, examinamos el
plano profundo, comprobando que esta formado por una delgada hoja fibrocelulosa,
la cual, a nivel de los bordes anterior y posterior del músculo viene ha reunirse en la
aponeurosis cervical superficial, con la que constituye una vaina, la vaina del
músculo esternocleidomastoideo, en la que se encuentra contenido el músculo,
e) Musculo homohioideo y esternohioideo .- a través de la hoja profunda de
la vaina del

28
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

Esternocleidomastoideo se percibe, en la parte inferior de la región, un plano


muscular en el cual reconocemos:
1º El manojo anterior del homohioideo, gracias a su forma triangular y a la dirección
oblicua de arriba abajo y de adelante atrás; 2º, por dentro y por delante de el, el
esternocleidomastoideo, de forma acintada. Debajo d este plano muscular,
ocupando todo el resto de la región, encontramos una capa celuloadiposa que
levanta por delante la gran vena yugular interna y, en algunos puntos por detrás,
algunos ganglios. Este plano muscular y esta capa celulo adiposa cubre y ocultan el
paquete vaculonervioso que vamos ahora ha disecar en el lado izquierdo.

4º Disección del lado izquierdo: paquete vasculonervioso del cuello.- Tras la


práctica de la mismas incisiones que efectuamos en el lado derecho, reclinamos
hacia atrás el colgajo cutáneo, luego el cutáneo después la aponeurosis cervical
superficial . Seccionamos entonces transversalmente, a nivel de su parte media, el
músculo esternocleidomastoideo y reclinamos hacia arriba su mitad superior y hacia
abajo su mitad inferior.
En la mitad superior, aplicado a la cara profunda, en la que pronto
desaparece, se percibe el ramo nervioso que el espinal envía al
esternocleidomastoideo.
Desprendemos ahora el homohioideo y el esternocleidomastoideo de la hoja
profunda de la vaina del esternocleidomastoideo a la que se adhieren más o
menos, excepto por debajo algo por encima de la clavícula, en donde los separa
tejido celuloadiposo, y comprobamos que el homohioideo y el esternotiroideo están
envueltos también por una aponeurosis mas o menos gruesa, la aponeurosis
cervical media. Cortamos, perpendicularmente a su dirección, el homohioideo, el
esternocleidomastoideo y la aponeurosis que los envuelve, reclinando los dos
colgajos así formados.
Ante nuestros ojos aparece, oculto en parte por la capa celuloganglionar
que resecamos, el paquete vasculonervioso del cuello, formado por la vena yugular
interna, la arteria carótida primitiva y sus ramas y el nervio neumogástrico.
a) Vena yugular interna.- La ablación prudente de esta capa celuloadiposa
pone al
Descubierto primeramente la vena yugular interna. Reconocemos aislamos los
grandes a fluyentes que recibe a nivel de su borde anterior: el trenco tirolingofacial
a la altura del hueso hioides, la vena tiroidea inferior en la parte inferior de la región;
la seguimos por arriba hasta el punto que se halla la glándula parótida y ponemos al

29
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

descubierto la vena satélite de la arteria carótida externa, que emerge de la


glándula y va ha desembocar en la yugular algo por debajo de la parótida.
b) Nervio neumogástrico.- Encontramos el nervio neumogástrico bajo el
borde posterior de
La vena, en el ángulo que forman la arteria carótida y la vena yugular interna. Lo
aislamos del conducto venoso y de la arteria a la que se adhiere.
c) Las tres carótidas, primitiva, externa e interna.- Separada de la vena
yugular de la
Carótida primitiva, la movilizamos hacia adelante, con lo que aparece entonces la
carótida primitiva. Caminando por su cara anterior, vemos un nervio bastante del
gado: la rama descendente del hipogloso, que conduce por arriba, en el limite
superior de la región, hacia un grueso nervio que se dirige transversalmente de
atrás adelante: el hipogloso. Reconocidos así el nervio hipogloso mayor y su rama
descendente, proseguimos la disección de la carótida primitiva, yendo de abajo
arriba. En la proximidad del borde superior del cartílago tiroides veremos que se
bifurca en carótida externa y carótida interna.
Disecamos la carótida externa hasta el punto en que penetra en la parótida,
y de paso reconocemos y aislamos sus ramas colaterales, y que de arriba abajo
son: la tiroidea superior, que nace casi en la bifurcación de la carótida primitiva y
que desciende describiendo un cayado hacia la glándula tiroides; la lingual, que se
desprende a nivel del hasta de hueso hioides y desaparece detrás del musculo
hiogloso; la facial, que se aplica al polo posterior de la glándula submaxilar y cuya
dirección es francamente ascendente; la occipital que encontramos en la cara
posterior de la carótida y que se entrecruza con el nervio hipogloso mayor.
Disecaremos igualmente la carótida interna, que parece prolongar la
carótida primitiva y que sube hacia la base del cráneo. Esto se conseguirá pronto,
puesto que la carótida interna no da ramas en la región.
d) Plano prevertebral.- Terminada la disección del paquete
vasculonervioso, reclinamos hacia adelante sus diversos elementos.
Percibimos entonces el plano prevertebral, cubierto de la aponeurosis
cervical profunda.
Un nervio camina verticalmente en este plano profundo: el gran simpático.
En la parte más superior de la región se puede descubrir su ganglio cervical
superior.
Hacia la parte inferior de la región carotidea parece que emergen una arteria
de este plano profundo para ir al polo inferior del cuerpo tiroides: es la porción

30
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

horizontal de la arteria tiroidea inferior. Si, ha este nivel se pone el dedo en la


preparación y se palpa la columna vertebral, se percibe claramente un tubérculo
que sobresale en las apófisis transversas supra y subyacentes: el tubérculo de
chassaignac.

REGIÓN SUPRACLAVICULAR

La región supraclavicular esta situado en las partes laterales del cuello,


encima de la clavícula, entre la región esternocleidomastoidea por delante de la
región de la nuca por detrás.
1º Límites.- Su forma es triangular (triángulo supraclavicular) y sus límites
corresponden a los lados del triángulo, que son: por abajo, la clavícula; por delante,
el borde posterior del músculo esternocleidomastoideo; por detrás, el borde
posterior del músculo esternocleidomastoideo; por detrás, el borde anterior del
trapecio. En profundidad, la región supraclavicular se extiende hasta la apófisis
transversas de las vertebras cervicales.
2º Posición del cadáver.- Para disecar esta región es indispensable tender
bien los músculos, vasos y nervios que contiene. Colocado el cadáver sobre el
dorso, se coloca bajo sus hombros un soporte de grosor mediano, de modo que la
cabeza cuelgue hacia atrás. Volvemos en seguida esta hacia el lado opuesto al que
vamos ha disecar y la mantenemos por cualquier medio en rotación forzada. Esta
maniobra hace sobresalir el esternocleidomastoideo y los músculos de la nuca y
nos permite apreciar exactamente los límites dela región.
3º Incisión de los tegumentos.- se traza en primer lugar (Figura 27), Una
incisión (a a`) Que sigue el eje de la clavícula, que exceda respectivamente, por
delante y por detrás, el extremo posterior del esternocleidomastoideo y el extremo
anterior del trapecio.
Sobre esta incisión transversal se baja en seguida una incisión vertical ( c c`)
Que parta del vértice del triángulo supraclavicular, es decir del punto de encuentro
del trapecio y el esternocleidomastoideo, punto que se encuentra situado algo por
debajo de la línea curva superior del occipital.
Seccionamos la piel y tejido celular subcutáneo hasta que llegamos a la
aponeurosis cervical superficial, y levantamos los dos colgajos cutáneos limitados
por las incisiones, rasando la aponeurosis. Ambos colgajos tienen forma triangular y

31
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

su charnela corresponde a los músculos trapecio y esternocleidomastoideo, cuyos


bordes importa descubrir ampliamente. Para facilitar esta maniobra y tener mas
campo, convendrá en especial se traza de un cadáver fuertemente musculado,
practicar un desbridamiento transversal (b b`) de 4 a5 centímetros en el extremo
superior de la incisión vertical.
Si permanecemos contacto con la aponeurosis, los colgajos cutáneos deben
comprender: el músculo cutáneo del cuello; los vasos superficiales en particular las
ramas aferentes y una parte del tronco de la vena yugular externa; las
ramificaciones terminales de los nervios del plexo cervical.

4º Aponeurosis cervical superficial.- incidimos y reclinamos la


aponeurosis superficial como la piel. De la clavícula, a la que se adhiere, la
separaremos con la legra. Por delante y por detrás levantamos al mismo tiempo y
reclinamos al máximo los músculos esternocleidomastoideo y trapecio, a los que
envainan.
5º aponeurosis cervical media y musculo omohioideo.- Debajo de la
aponeurosis superficial se encuentra un segundo plano celulofibroso, más o menos
infiltrado de grasa: la aponeurosis cervical media. Esta está dividida en dos partes
por el músculo omohioideo, que se percibe por transparencia y del que se reconoce
el cuerpo delgado dirigido oblicuamente de arriba abajo y de delante atrás.
La parte de aponeurosis cervical media subyacente al omohioideo es
fibrosa y resistente; se inserta en el borde superior de la clavícula y es atravesada,
en el ángulo ínfero anterior de la región, por la vena yugular externa. A menudo a
este nivel se nota un reforzamiento de la aponeurosis: El repliegue falciforme de
Dittel.
La porción de la aponeurosis cervical media subyacente al omohioideo
(Triangulo omotrapecial) es abundante en tejido adiposo. Contiene ganglios
linfáticos, los ganglios supraclaviculares y es atravesada por numerosos filetes que
emanan de la dos últimas de las raíces del plexo cervical.
Incidimos esta aponeurosis como hicimos con la piel y la aponeurosis
cervical superficial, y la reclinamos a una y otra parte en forma de dos postigos, que
comprenderán en su espesor el músculo omohioideo, el cual habrá sido seccionado
al mismo tiempo que la hoja fibrosa.
En la cara profunda de la aponeurosis encontramos: por arriba, las ramas
del plexo cervical; por abajo, la vena yugular externa y la arteria escapular superior,
rama de la subclavia.

32
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

6º Compartimiento supraclavicular.- Aparece ahora abierto el


compartimiento supraclavicular. Disecaremos primeramente los músculos que
tapizan sus paredes, luego su contenido. Pero antes, para tener más acceso a la
parte más inferior de la región en particular la vena subclavia y desprenderla de la
primera costilla, resecaremos una porción de clavícula de 6 a 8 centímetros.
Dejando intacto las inserciones del músculo subclavio, se ara vascular hacia abajo
el fragmento resecado, que mantendremos reclinado por medio de una aguja
metálica.
a) Aponeurosis de los escalenos y los músculos escalenos.- Los músculos
escalenos, que
Constituyen el plano profundo de la región, están cubiertos de una aponeurosis
que, en realidad, no es más que la porción lateral de la aponeurosis cervical
profunda. Esta hoja aponeurótica es muy delgada, excepto delante del escaleno
anterior, en donde ofrece alguna consistencia. Está perforada por los múltiples
elementos vasculares y nerviosos que emergen de la profundidad. Su disección es,
pues, delicada y difícil.
Incidimos la aponeurosis siguiendo el borde del escaleno anterior de arriba
abajo y la levantamos hacia adentro, procurando durante este tiempo no deteriorar
el nervio frénico, que se halla en la cara superficial del escaleno, inmediatamente
por debajo de la aponeurosis.
Desprendemos completamente el musculo escaleno anterior, que
descendiendo de los tubérculos anteriores de las apófisis transversas de la 3ª,4ª,5ª
y 6ª vértebras cervicales, se resuelve en un tendón de aspecto brillante, fácilmente
reconocible, que viene ha fijarse en la primera costilla, sobre el tubérculo de
Lisfranc.
Levantamos ahora la parte posterior, excesivamente delgada, de la
aponeurosis de los escalenos, hasta llegar al tabique aponeurótico que separa al
escaleno posterior del esplenio y del angular del omoplato. De este modo
desprenderemos el escaleno posterior. Este, partiendo de los tubérculos posteriores
de la siete vertebras cervicales, se divide en dos fasciculoscarnosos que se insertan
respectivamente en la primera segunda costilla.
b) Arteria y venas subclavias.- Disecados los escalenos, nos ocupamos en
los órganos
Vasculares y nerviosos que contiene el compartimiento supraclavicular. La mayoría
de estos elementos son llamados interescalenicos, a causa de pasar entre los dos
músculos escalenos.

33
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

La arteria subclavia es el más inferior de los elementos interescalénicos.


Buscamos este vaso detrás del tendón del escaleno anterior, en contacto con la
primera costilla. Lo que se descubre es la porción extra escalénica de la arteria
subclavia. Una sola colateral, la escapular posterior, emana de la misma. Para
poner al descubierto la porción intraescalénicag, que en realidad forma parte de la
región carotidea, es necesario emplear el artificio siguiente. Se abre una ventana en
la aponeurosis del escaleno ya levantada (véase lámina 31) Y hundimos la hoja
celulosa que se encuentra por delante y mas allá del musculo escaleno anterior. En
el tejido celuloadiposo que llena el espacio subyacente se descubre la porción
infraescalénica de la arteria subclavia e identificamos alguna de sus ramas, en
particular la tiroidea inferior, la escapular superior, la cervical profunda y la cervical
ascendente.
La vena subclavia no tiene la misma dirección ni las mismas relaciones que
la arteria. La encontramos inmediatamente detrás de la clavícula, desprendida por
el hecho de haberla desprendida una porción de este hueso. Su dirección es casi
horizontal. Está separado de la arteria por el escaleno anterior. En la parte interna
de la región recibe un afluente, la vena yugular, ya identificada al estudiar los
planos superficiales.
c) Plexo braquial.- Los cinco grandes cordones que van ha constituir el
plexo braquial se
Encuentran también entre los dos escalenos: los superiores tienen una dirección
francamente oblicua de arriba abajo y de dentro afuera; a medida que se
descienda, la oblicuidad disminuye y la última rama es casi horizontal. Para verla
bien es necesario reclinar hacia adentro la arteria subclavia. Anotemos, siguiendo el
último plexo braquial, emanado de la primera raíz dorsal, sus relaciones con la
cápsula de la pleura, que constituyen en algún modo el suelo del espacio
supraclavicular.
Después de haber aislado los troncos del plexo, disecamos sus ramas
colaterales destinadas a los músculos del hombro y del tórax: nervio subclavio,
nervios del pectoral mayor y menor, nervios del angular del omoplato y del
romboides, nervios supraesternales, nervios del infraescapular, del dorsal mayor y
del redondo mayor.
d) Plexo cervical.- En la parte mas superior de la región descubrimos los
dos últimos troncos
Del plexo cervical, reconocibles por su dirección francamente transversal. La
mayoría de las ramas colaterales, destinados a los ramos superficiales, atraviesan

34
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

sucesivamente la aponeurosis de los escalenos, luego la aponeurosis cervical


media, y por ultimo, la aponeurosis superficial. Otras ramas profundas están
destinados a los músculos próximos buscamos en particular: 1º las raíces del nervio
frénico cuyo tronco ya conocido, camina a lo largo del escaleno anterior; 2º, los
nervios del trapecio, del angular del omoplato, del romboides, que se dirigen hacia
atrás.
e) Plano esquelético.- Algunas partes del esqueleto vertebral y costal
constituyen puntos de
Referencias importantes en medicina operatoria y en cirugía. Las reconoceremos
atentamente.

La columna cervical ofrece las eminencias de las apófisis transversas. Estas


forman el fondo del compartimiento supraclavicular y están subdivididas por dos
series de tubérculos: Los anteriores, que dan inserción a los fascículos del escaleno
anterior (músculo transverso anterior), y los tubérculos posteriores, en los que se
insertan los fascículos del escaleno posterior (músculo transverso posterior). Los
troncos constitutivos del plexo cervical y del plexo braquial se denominan
intertransversos.
Entre las apófisis transversas de las vértebras cervicales, notaremos las
más salientes de ellas, que corresponde a la sexta cervical: es el tubérculo de
chassaignac. En la cara superior de la primera costilla aparece una pequeña
eminencia ósea denominada tubérculo de LIs franc.

REGIONES DEL: MIEMBRO SUPERIOR

El miembro superior, en anatomía topográfica, se divide en seis segmentos,


que son, desde su raíz a su extremo libre:

1.- El hombro.
2.- El brazo.
3.- El codo.
4.- El antebrazo.
5. · La muñeca.
6. · La mano.

35
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

REGIONES DEL HOMBRO

El hombro, que a veces se designa con el nombre de raíz del miembro


superior, tiene por límites: 1. por arriba, del lado del cuello, una línea curva que
corresponde al borde superior de la escápula y a la clavícula; 2.·, por abajo, del
lado del brazo, una línea circular que pasa por debajo de la inserción humeral del
pectoral
mayor; 3.·, por detrás, el borde posterior de la escápula; 4.·, por delante, una línea
vertical que pasa por el lado externo de la mama. Admitimos en el hombro tres
regiones distintas:

1.- Una región media, que corresponde a la eminencia o muñón del hombro,
región deltoidea.
2.-Una región posterior, que descansa en el plano dorsal de la escápula,
región escapular.
3.- Una región anterior, que comprende todas las formaciones situadas por
delante y por dentro de la articulación del hombro, región de la axila.

1. REGIÓN SUPRACLAVICULAR

La región deltoidea, o región del muñón del hombro, cubre por fuera la articulación
escapulohumeral. Incluida entre la región escapular por detrás y la axila por
delante, corresponde al músculo deltoides.

1.- Límites. - Sus límites son: por arriba, el tercio externo de la clavícula, la
articulación acromioclavicular y el acromion; por abajo, la impresión deltoidea del
húmero o V deltoidea; por delante y atrás, el borde anterior y el borde posterior del
músculo deltoides. En profundidad, la región deltoidea se detiene en la articulación
escapulohumeral.

36
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

2.- Posición del cadáver. - Se colocará en decúbito sobre el dorso; para tender la
región deltoidea, será necesario colocar un soporte bajo el tórax y bajo el muñón
del hombro; el brazo se deja colgar a lo largo del cuerpo.

3.- Incisión de los tegumentos. - Se traza (fig. 43) una incisión horizontal (a a') que
pase por el límite superior de la región; seguirá, por consiguiente, el acromion y la
clavícula y se detendrá en el tercio externo de ésta. Partiendo de la articulación
acromioclavícular, se traza una incisión perpendicular (b b') que desciende
paralelamente al eje del miembro superior, hasta la altura de la V deltoidea. Esta
incisión, cuya forma general es la de una T, limita dos colgajos triangulares de
charnelas anteroinferior y posteroinferior, que reclinamos. Comprenden en estos

37
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

colgajos la piel y el tejido celular


subcutáneo, con los vasos y los nervios superficiales. Entre estos últimos, se aíslan
especialmente las ramas del ramo cutáneo del nervio circunflejo, que a través de la
aponeurosis superficial sale a nivel del borde posterior del deltoides, casi en la
unión de sus dos tercios superiores con su tercio inferior.

4.-Aponeurosis superficial. - Una vez reclinados estos colgajos, aparece la


aponeurosis superficial, que cubre el músculo deltoides y se continúa sin
demarcación precisa con la aponeurosis de las regiones próximas.
Efectuamos en ella incisiones idénticas a las cutáneas, para reclinar dos colgajos
semejantes. Este levantamiento de la aponeurosis es algo delicado a causa de la
presencia de tabiques fibrosos que la aponeurosis envía entre cada fascículo
muscular: es preciso seccionar con el escalpelo cada uno de estos tabiques, a
medida que se avanza en la disecci6n; por detrás, en donde la aponeurosis es
gruesa, la cosa es relativamente fácil; pero por delante, en donde es delgada, debe
rnaniobrarse prudentemente para no perforarla. Cuando lleguemos a los límites
anterior y posterior de la región, nos detienen tabiques resistentes emanados de la
aponeurosis superficial, que separan el deltoides de los músculos de las regiones
pr6ximas y que forman a éste un verdadero compartimiento. El tabique posterior,
tendido entre el deltoides y los músculos de la regi6n escapular, es muy grueso. El
tabique anterior, que se insinúa entre el surco deltopectoral, es, por el contrario,
muy delgado; a través de él se percibe, por transparencia, la rama cefálica
acompañada de una rama de la arteria acromiotorácica.

5.° Deltoides. - Por el hecho del levantamiento de la aponeurosis superficial, se


encuentra ya el deltoides en cierto modo preparado. Es el único músculo de la
regi6n. Desprendidas sus inserciones, lo aislamos y pasamos inmediatamente a la
disecci6n del plano subdeltoide o, que constituye la parte más interesante de la
regi6n. 6. ° Plano subdeltoideo. En la cara más profunda del deltoides se
encuentran los vasos profundos, el nervio circunflejo y el tejido celular subdeltoideo,
que separa el músculo de la articulaci6n es capulohumeral y en el cual se
desarrollan dos bolsas serosas importantes.
Para ver bien este plano profundo, conservando al mismo tiempo la integridad de
los vasos y de los nervios y dejando intacta la mayor parte del músculo deltoides,
cuyas conexiones importa no destruir, he aquí cómo se debe proceder: Se secciona
verticalmente el deltoides, en el eje del brazo, partiendo de la articulaci6n

38
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

acromioclavicular para llegar a la punta de la V deltoidea. Se hiende el músculo en


todo su espesor, recordando que el paquete vasculonervioso circunflejo cruza la
cara profunda del músculo, para no incidir más allá del músculo. De este modo, el
deltoides se divide en dos partes: una parte anterior y otra posterior. Esta última, la
más importante, queda intacta; es necesario, en cambio, dividir de nuevo el colgajo
anterior.
Del deltoides, paralelamente a la clavícula.
Levantamos por arriba la porci6n del músculo correspondiente al acromion
ya la clavícula; reclinamos hacia abajo y adentro el colgajo anterior dividido,
disociando prudentemente con el dedo o la sonda acanalada el tejido celular
laxo subdeltoideo; reclinamos, por último, fuertemente hacia atrás el colgajo
posterior, cuyas inserciones están intactas, disociando de su cara profunda el
tejido celuloadiposo.
Sólo falta entonces quitar la grasa al ir disecando, para evidenciar todos los
elementos anatómicos del plano subdeltoideo.

a) Vasos circunflejos posteriores y nervio circunflejo. Buscaremos, en primer


lugar, los vasos y el nervio circunflejos, que constituyen el elemento esencial
de la región. Se hallan en la cara profunda del deltoides y rodean por detrás el
cuello quirúrgico del húrnero,
0.) La arteria circunfleja posterior nace de la regi6n axilar, cuya pared
posterior forma, con la regi6n escapular, el plano profundo de la preparaci6n;
atraviesa el cuadrilátero humerotricipital de Velpeau (véanse los tratados de
anatomía), e inmediatamente se divide en un ramillete de ramas que se
ramifican en la cara profunda del deltoides, donde la mayoría se agotan.
Algunas de estas ramas van a anastomosarse con ramas terminales de la
circunfleja anterior y de la acromioto rácica.
Las venas que acompañan a la arteria forman alrededor de ésta, en el
punto en
que aparece en la regi6n, una red tupidísima; para la claridad de la preparación,
para desprender la arteria y el nervio, que en cierto modo son los órganos
nobles, será preferible quitar estas venas seccionándolas a su entrada en el
cuadrilátero humerotricipital. Lo mismo se hará con las venas que acompañan
las otras arterias de la región.
f3) El nervio circunflejo presenta una dirección y una distribución análogas a

39
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

las de la arteria, encima de la cual lo encontramos ordinariamente. El ramo


sensitivo, o ramo cutáneo del circunflejo, aparece a nivel del borde
posterior del deltoides, en la uni6n de sus dos tercios superiores con su
tercio inferior; sale del músculo y luego atraviesa la aponeurosis: las
ramificaciones terminales fueron reconocidas al disecar los planos
superficiales.
b) Arteria circunfleja anterior. - De ella s610 vemos sus dos ramas
terminales: una que sigue, subiendo, el canal bicipital : otra que se divide en la
cara profunda del deltoides. Antes llegamos a ella al disecar los últimos ramos
de la circunfieja posterior, con los cuales se anastomosa.
e) Arteria acromiotorácica. - Bajo el fragmento superior del colgajo anterior
es preciso buscar la rama acromial de la arteria acromiotorácica destinada
al músculo deltoides. Siguiendo sus ramos terminales, vemos que a veces
se anastomosa igualmente con la circunfieja
posterior.
d) Bolsas serosas. - En el tejido celular subcutáneo se encuentran dos
bolsas
serosas; para mostrarlas, será necesario abrirlas y conservar solamente de
su pared superficial una estrecha cinta, que, en el montaje de la
preparación, tenderemos con alfileres o erinas. Estas dos bolsas son: en la
cara externa del húmero, la bolsa subdeltoidea; debajo del acromion, entre
éste y la cabeza humeral, la bolsa subacromial.

7.0 Plano profundo. - El fondo de la regi6n deltoidea está constituido por la


cabeza humeral con sus dos apófisis, el troquín y el troquiter, sobre las que se
insertan respectivamente el músculo subesca- pular y los músculos supraespinoso,
infraespinoso y redondo menor. Todos estos músculos corresponden a otras
regiones; no los diseca remos y los mantendremos incluidos en sus aponeurosis de
envoltura. La cabeza humeral está cubierta por la cápsula articular; se busca a la
altura de su parte anteroexterna, entre las dos tuberosidades precitadas, el relieve
que hace el tendón de la porción larga del bíceps que desciende, cubierto de su
vaina fibrosa, al canal bicipital.
La cabeza humeral tiene encima el acromion y la apófisis coracoides, unidas una a
otra por el ligamento acromiocoracoideo, cuyas bellas fibras nacaradas pondremos
de manifiesto.

40
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

REGION ESCAPULAR

La región escapular comprende todas las partes blandas que se disponen


en la cara posterior del omóplato. V LÍmites. - Sus límites son: PO?' arriba, el borde
superior del omóplato; por dentro, el borde espinal del mismo hueso; por abajo, una
línea que reúne el extremo del acromion a la impresión deltoidea, línea que
corresponde aproximadamente al borde posterior del deltoides. En profundidad, la
región escapular se extiende hasta la cara posterior de la escápula.

Posición del cadáver. - En decúbito prono y al borde de la mesa de


disección. Colocamos en seguida un fuerte soporte bajo el tórax, de modo que el
hombro quede suelto y el brazo cuelgue fuera de la mesa. De esta manera
sobresale el muñón del hombro: el omóplato se levanta y tiende los músculos que
debemos disecar.
Incisión de los tegumentos.- Se traza una incisión (a' a) que, partiendo del punto
más saliente de la articulación acromioclavicular, se dirija adelante; seguimos, con

41
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

el escalpelo, el borde superior del omóplato.


Cuando llegamos al extremo posterior de éste, cambiamos de dirección, y
seguimos el borde espinal del omóplato, hasta la punta del mismo hueso, o algo
más abajo (a b). Esta incisión tiene la forma general de una V de ramas desiguales,
abiertas hacia delante y abajo, cuya punta corresponde a la unión del borde
superior y el borde espinal de la escápula.
Se seccionan, en un mismo tiempo, la piel y el tejido celular subimos un
colgajo único cuya charnela será la línea que une la articulación acromioclavicular
con la punta del omóplato.
Aponeurosis superficial. - La aponeurosis superficial cubre la totalidad de la
región. Se continúa, sin demarcación apreciable, con las aponeurosis de las
regiones próximas. Pero se inserta en el acromion y la espina del omóplato. Por
consiguiente, esta larga y ancha apófisis divide la región escapular en dos partes
distintas, que estudiaremos separada y sucesivamente: la fosa supraespinosa y la
fosa infraespinosa.
Fosa supraespinosa. - Yendo de la superficie a la profundidad encontramos:
1.0, la aponeurosis superficial (en este caso, aponeurosis del trapecio); 2.°,
el músculotrapecio; 3.°, la aponeurosis del su- praespinoso, el
músculosupraespinoso; 4.°, por último, el plano esquelético, con los vasos y
los nervios supraespinales.
a) Aponeurosis del trapecio. Se incide la aponeurosis paralelamente a la
espina del omóplato, a un centímetro por encima de ésta. En la unión de los tres
cuartos anteriores y el cuarto posterior de la fosa supraespinosa, hendimos
verticalmente, hasta el encuentro de la incisión. Cutánea. Dejamos la parte inferior,
la que se inserta en la espina del omóplato, adherente al músculo, y levantamos
solamente los dos colgajos superiores, uno hacia atrás y el otro hacia delante.
Region escapular, arriba.Trazado de las incisiones. b) Musculo trapecio.
Incidimos igualmente el músculo trapecio, que cubre casi enteramente la región,
comprendiendo en el corte la delgada hoja celulosa que constituye la aponeurosis
profunda de este músculo. De este modo tendremos: 1.0, una cinta de músculo, de
un centímetro de anchura, correspondiente a las inserciones escapulares del
trapecio, cuyas conexiones óseas y aponeuróticas se habrán conservado; 2,o dos
colgajos, uno posterior y otro anterior, que, una vez reclinados y mantenidos de
este modo con agujas fuertes, encuadrarán el plano subyacente, constituido por el
supraespinoso cubierto de su aponeurosis.

42
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

e) Aponeurosis supraespinosa y músculo supraespinoso. - Gruesa y de


aspecto tendinoso en su parte posterior, la aponeurosis supraespinosa se adelgaza
a medida que se aproxima a la región escapulohumeral. Sólo conservaremos en la
preparación el tercio posterior y resecaremos toda la parte anterior.

43
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

Un centímetro por delante de la sección aponeurótica, se corta a su vez el


músculo supraespinoso en todo su espesor, manejando el escalpelo con prudencia
cuando nos aproximemos a la cara profunda del músculo, pues en el espacio
celuloso subyacente se encuentran vasos y nervios que importa respetar. Dividido
enteramente el músculo, dejamos en su lugar la porción posterior; reclinamos luego
hacia delante y erinarnos la porción anterior, que se estrecha cada vez más, a
medida que nos vamos aproximando al tendón terminal del músculo, aplanado, que
se inserta en el troquiter.
d) Plano projundo, vasos y nervios supraescapulares. - El plano profundo de
la región está constituido por la fosa supraespinosa del omóplato, en el que se
reconoce la escotadura coracoidea, y desprendemos el ligamento coracoideo, que
transforma la escotadura en orificio.
La arteria supraescapular, acompañada de venas que no es útil conservar,
pasa por encima del ligamento coracoideo. Es un vaso im- portante, que da
múltiples ramas al supraespinoso y que, prosiguiendo su trayecto oblicuo abajo y
afuera, se dirige hacia la base de la espina del omóplato, para penetrar en seguida
en la fosa infraespinosa, en
donde lo encontramos.

44
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

El nervio supraescapular, al principio separado de la arteria por el ligamento


coracoideo - pasa, por consiguiente, al agujero coracoideo; se une pronto a ella,
inerva el supraespinoso y, como la arteria, penetra en la fosa infraespinosa.
6.° Fosa infraespinosa. - Encontramos en ella casi los mismos
planos que en la fosa supraespinosa.
a) Plano superficial, músculos trapecio y dorsal ancho. - El trapecio y el dorsal
ancho cubren: el primero, la parte superior y posterior de la fosa infraespinosa; el
segundo, la parte inferior. Uno y otro están incluidos en un desdoblamiento de la
aponeurosis superficial que incidimos siguiendo el eje mayor de la región, es decir,
según una línea
dirigida desde la punta del omóplato hacia el acromion; reclinamos hacia atrás y
arriba el colgajo superior, con el trapecio, que desinsertamos de la espina del
omóplato, y reclinamos hacia abajo y adelante el colgajo inferior, con el dorsal
ancho, para desprender completamente la punta del omóplato y el mismo omóplato.
b) Aponeurosis infraespinosa. - Los músculos que pertenecen en propiedad a la
región escapular aparecen entonces. Pero están todavía velados por una
aponeurosis importante y resistente: la aponeurosis infraespinosa que cubre
indistintamente los músculos subyacentes y se continúa sin demarcación con la
aponeurosis del deltoides; la parte posterior de este músculo, aunque pertenezca a
la región deltoidea, invade en gran parte la región escapular. Incidimos esta
aponeurosis en el eje de la fosa infraespinosa, como
hicimos con la aponeurosis superficial, y levantamos los dos colgajos así limitados,
respectivamente hacia delante y atrás.
El levantamiento del colgajo posterior no presenta dificultades reales,
aunque la aponeurosis, principalmente atrás y abajo, es muy adherente al músculo
infraespinoso. Por delante, el levantamiento no se hará tan sencillamente, lo que
depende de que la aponeurosis infraespinosa envía tabiques profundos que se
insinúan entre el infraespinoso y el redondo mayor por una parte, entre este último
músculo y el deltoides por otra (importa, en una disección de anatomía topogr-áfica,
evidenciar estos tabiques); depende también del hecho ya señalado de que la parte
posterior del deltoides oculta la porción más anterior y externa de la región
escapular.

45
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

He aquí, pues, cómo es necesario proceder: Se incide el deltoides en todo


su espesor, paralelamente a la espina del omóplato, 2 centímetros por debajo de
ella, desde su borde posterior hasta el límite anterior de la región escapular. Se
prosigue también, si es necesario, la sección del deltoides lo más lejos posible,
dirigiéndonos hacia sus inserciones humerales: lo esencial es que se desprendan
suficientemente los elementos subyacentes que el deltoides oculta en parte.
Reclinamos fuertemente la porción inferior del músculo, del que hemos respetado,
como se comprende, las conexiones aponeuróticas superficiales y profundas.
Disecamos ahora la porción de aponeurosis infraespinosa que cubre

46
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

también el músculo infraespinoso. Cuando se llega al borde inferior de éste, se


observa que de la cara profunda de la aponeurosis se desprende un tabique que se
insinúa entre el infraespinoso y el redondo menor, por una parte, y el redondo
mayor, por otra; finalmente, va al borde axilar del omóplato. Por otro lado, cuando,
progresando hacia la parte externa, se llega al borde posterior del deltoides, se
observa claramente la hoja que separa el compartimiento escapular.
c) Músculos infraespinosos y redondo menor. - Estos dos músculos ocupan
la totalidad de la fosa infraespinosa. Ambos van a insertarse en el troquiter. ..
d) Músculo redondo mayor. - Está separado de los músculos precedentes
por el tabique que acabamos de identificar y se inserta en el ángulo inferior del
omóplato. Conservaremos sus relaciones aponeu- róticas: la aponeurosis es, en
efecto, suficientemente transparente para dejarnos ver los fascículos musculares,
con su dirección oblicuamente ascendente hacia delante y afuera. No es preciso
seguir este músculo hasta su terminación en la región axilar.
e) Plano profundo. - Se corta el músculo infraespinoso perpendicularmente a
la dirección de sus fibras, en la unión de sus dos tercios posteriores y del tercio
anterior. Esto nos permitirá a la vez desprender completamente el redondo menor y
descubrir el plano profundo, y por último, estudiar mejor las inserciones de los tres
músculos troquiterianos. Levantamos para esto el colgajo posterior, des insertando
con la legra o el escalpelo sus inserciones escapulares; reclinamos hacia delante el
colgajo anterior hasta las inserciones humeral es del músculo.
Este sacrificio es indispensable para descubrir el plano esquelético, así
como los vasos y nervios que llegan a los músculos por la cara profunda de éstos.
Bajo el músculo infraespinoso reclinado, se' percibe primeramente la cara posterior
del omóplato, con sus rugosidades destinadas a las inserciones musculares. Por
arriba y delante, se señalan: 1.0, la base de la espina del omóplato, rodeada por los
vasos y nervios supraescapulares; 2.°, la eminencia que hace el reborde de la
cavidad glenoidea, a la que sigue la depresión correspondiente a la interlínea
escapulohumeral; 3.°, luego
inmediatamente por delante, la tuberosidad mayor del húmero. En ella vienen a
fijarse los tres tendones convergentes del supraespinoso, del infraespinoso y del
redondo menor. Reclinando este último hacia arriba y atrás, sentiremos
inmediatamente el borde axilar del omóplato; desprendemos con cuidado el origen
de la porción larga del trlceps, punto de referencia principal para el estudio de los
vasos y nervios de la región.
f) Vasos y nervios. - e, Buscamos ante todo la arteria y el nervio

47
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

súpraescapulares, que dejamos cuando pasaban de la fosa supraespinosa a la


infraespinosa; se encuentran en contacto de la espina del omóplato. Después de
rodear ésta, se distribuyen por los músculos de la región. Aislamos de manera
especial las ramas arteriales que se anastomosan de un modo constante con las
colaterales de la escapu- lar inferior.
(3) La arteria escapular inferior sale de la región axilar bajo la porción larga
del tríceps, en el triángulo omotricipital. Para descubrir este "aso se abre una
ventana en el tabique que separa el infraespinoso del redondo mayor, y así
podremos ver la arteria que penetra en la región, seguirla en cierta longitud y
estudiar su distribución y sus anastomosis. 'Y) Los vasos y el nervio circunflejo
posteriores no corresponden propiamente a la región escapular. Los buscaremos,
sin embargo, a su salida de la axila, en el cuadrilátero de Velpeau, debajo del
tendón del tríceps largo. Reconoceremos principalmente el nervio del redondo
menor, rama del circunflejo que forma parte de la región y que llega al músculo por
su cara profunda.

REGION DE LA AXILA

Región de paso para los vasos y nervios que van del cuello al miembro
superior, o recíprocamente, está situada por dentro de la articulación
escapulohumeral. Comprende el conjunto de las partes blandas situadas entre ésta
y el tórax.
1." Límites. - Sus límites son: por arriba, la clavícula; por abfljo, el borde
inferior del pectoral mayor; por dentro, una línea vertical, convencional, que,
partiendo del tercio medio de la clavícula, llega al borde inferior del pectoral mayor,
pasando algo por debajo de la tetilla. En profundidad, la región se detiene en la
escápula y en el tórax.
2.Posición del cadáver. - El mejor medio para estudiar la axila es atacarla
por la parte anterior. Se extiende el cadáver sobre el dorso, el brazo en abducción
Iorzada para tender los tegumentos que forman la base del hueco axilar. Aparecen
así claramente la pared anterior y la base de la región.
3Incisiones. - Se traza una primera incisión (e e') que siga aproximadamente
el borde inferior claramente saliente del músculo pectoral mayor, incisión que
comienza algo por dentro de la inserción humeral del músculo y llega al límite
interno de la región axilar, o sea algo por fuera de una línea vertical que pase por la
tetilla. A esta incisión se unen otras dos, una interna y otra externa: la primera (b b')

48
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

seguirá el límite interno de la región y se extenderá desde la clavícula por arriba,


hasta el nivel del borde anterior del dorsal ancho por abajo; la incisión externa, que
parte del borde exter- no del brazo (a a'), seccionará en ángulo recto los
tegumentos de la cara interna del brazo y se detendrá en el borde interno de éste.

Se limitan de este modo dos colgajos: uno superior, que tendrá por charnela
el surco deltopectoral, y otro inferior, irregularmente cuadrilátero, que comprenderá
los tegumentos que forman la base de la pirámide axilar.
Sucesivamente se disecan y reclinan estos dos colgajos, procurando
conservar, en el colgajo inferior, las ramas terminales de los tres nervios emanados
de los in tercos tales, algunos de los cuales se extienden por la piel de la axila,
mientras que los otros descienden a lo largo de la cara interna del brazo, mucho
más allá de los límites de la región axilar. Descubrimos así la aponeurosis
superficial.

49
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

4 Aponeurosis superficial. - Esta aponeurosis forma un plano único que


cubre el pectoral mayor y que se continúa sin demarcación especial con la
aponeurosis superficial de envoltura del brazo y la aponeurosis deltoidea. Se
utilizan para disecarla y luego para reclinarla las incisiones que han servido para la
disección de la piel. Levantamos el colgajo superior hasta descubrir el borde
anterior del deltoides y poner de manifiesto el surco deltopectoral, en el cual se
hallan la vena cejálica y un ramo arterial, rama de la acro- miotorácica.
Reclinamos ahora el colgajo inferior. Muy delgada mientras nos hallamos en
el músculo pectoral mayor, la aponeurosis se engruesa con tejido celuloadiposo así
que se pasa el borde inferior de este músculo y se hace adherente a la piel del
hueco de la axila; se fusiona igualmente aquí con la aponeurosis profunda
subyacente que encontraremos dentro de un momento y que va precisamente a la

50
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

piel; esta aponeurosis profunda subyacente no es más que el ligamento


suspensorio de la axila.
5.0 Músculo pectoral mayor.- Inmediatamente por debajo de la aponeurosis
superficial, el pectoral mayor constituye por sí solo el primer plano muscular de la
pared anterior de la axila, Lo reconocemos por sus anchos y gruesos fascículos
(que vienen de la clavícula y del esternón y convergen hacia el húmero) y por su
tendón acintado
caracterí~ti.co. Como este músculo oculta enteramente el plano subyacente, es
necesario cortarlo. Se verifica la sección en la unión del tercio externo con los dos
tercios internos y se reclinan a una y otra parte los colgajos musculares,
comprobando que están cubiertos, en su cara profunda, de una hoja aponeurótica
transparente, bajo la cual se perciben las ramificaciones vasculares y nerviosas que
penetran en el músculo.
6.0 Capa muscular profunda. - Esta operación nos permite ver el segundo plano
constitutivo de la pared anterior de la axila. Está formado por los músculos
subclauio (en la parte más superior) y pectoral menor (en la parte media), más o
menos ocultos por una aponeurosis que los envaina, aponeurosis clavicoracoaxilar.
Esta se extiende en altura desde el borde inferior de la clavícula, en la que se
inserta, hasta la piel de la base de la axila, a la que se adhiere después de haberse
fusionado con la aponeurosis superficial. En este trayecto pasa por delante del
subclavio y del pectoral menor, a los que forma una vaina completa. La porción
comprendida entre el pectoral menor y los tegumentos de la axila se designa con el
nombre de ligamento suspensorio de la axila o ligamento de Gerdy. En el sentido
de la anchura se extiende desde el tórax al brazo. Después de haber tapizado los
músculos subclavio y pectoral menor, pasa por encima del paquete vasculonervioso
de la axila, que adivinamos por transparencia; luegose extiende por encima del
músculo coracobraquial y se continúa así con la aponeurosis profunda de los
músculos del brazo.Muy resistente en su parte externa y superior, la aponeurosis
clavicoracoaxilar se hace, por el contrario, cada vez más delgada a medida que se
dirige hacia el tórax. La encontraremos a veces reducida, a este nivel, a una simple
hoja celulosa. Sea como fuere, forma un plano que oculta todo el contenido del
hueco axilar.

Hacia el vértice del triángulo clavipectoral (formado por la clavícula y el


borde superior del músculo pectoral menor), a cosa de un dedo por fuera de la
apófisis coracoides, aparece un paquete vasculonervioso bastante importante, que

51
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

atraviesa la aponeurosis y está formado primeramente por las dos ramas de


bifurcación de la arteria acromiotorácica, que divergen inmediatamente formando
una Y de las más características. Siguiendo estas dos ramas observamos que una
se ramifica en la cara profunda del pectoral mayor y la otra, siguiendo un trayecto
inverso, da dos colaterales, de las cuales la primera se dirige hacia arriba, hacia el
acromion, mientras que la segunda se aloja en el surco deltopectoral.

En medio de las ramificaciones arteriales se percibe una 'vena, a menudo


voluminosa. la vena cefálica, que ha seguido el surco deltopectoral y que, llegada
cerca de la clavícula, se in curva hacia atrás (cayado de la cefálica), atraviesa la
aponeurosis clavicular y desemboca en la vena axilar. Aislaremos, por último, un
pequeño filete nervioso: el nervio del pectoral mayor, el cual se divide
inmediatamente en ramas finas que se mezclan a las ramificaciones vasculares
situadas en la cara profunda del pectoral mayor.

7.° Cavidad axílar, - Para descubrir el contenido del hueco de la axila, es


necesario incidir la aponeurosis c1avipectoral y el músculo pectoral menor. Se
practica una muesca en la aponeurosis, en el trayecto del paquete vasculonervioso
de la axila (que vemos por transparencia), en el punto en que éste va a
desaparecer bajo los tegumentos que cubren la cara interna del brazo. Insinuamos
una sonda acanalada, la cual seguirá el trayecto de los vasos, y seccionamos la
aponeurosis sobre la sonda hasta el borde inferior del pectoral mayor; cortamos
este músculo de través siguiendo siempre la misma dirección, y seccionamos, por
último, sírviéndonos de nuevo de la sonda acanalada, lo que queda de aponeurosis
c1avipectoral comprendida entre el borde inferior del pectoral menor y el orificio por
donde sale la arteria acromiotorácica descrito anteriormente. Levantamos ahora la
aponeurosis, dispuesta en dos colgajos que reclinamos hacia los lados completa.
La porción comprendida entre el pectoral menor y los tegumentos de la axila se
designa con el nombre de ligamento suspensorio de la axila o ligamento de Gerdy.
En el sentido de la anchura se extiende desde el tórax al brazo. Después de haber
tapizado los músculos subclavio y pectoral menor, pasa por encima del paquete
vasculonervioso de la axila, que adivinamos por transparencia; luego se extiende
por encima del músculo coracobraquial y se continúa así con la aponeurosis
profunda de los músculos del brazo.
Muy resistente en su parte externa y superior, la aponeurosis
clavicoracoaxilar se hace, por el contrario, cada vez más delgada a medida que se

52
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

dirige hacia el tórax. La encontraremos a veces reducida, a este nivel, a una simple
hoja celulosa. Sea como fuere, forma un plano continuo que oculta todo el
contenido del hueco axilar.
Hacia el vértice del triángulo clavipectoral (formado por la clavícula y el
borde superior del músculo pectoral menor), a cosa de un dedo por fuera de la
apófisis coracoides, aparece un paquete vasculonervioso bastante importante, que
atraviesa la aponeurosis y está formado primeramente por las dos ramas de
bifurcación de la arteria
acromiotorácica, que divergen inmediatamente formando una Y de las más
características. Siguiendo estas dos ramas observamos que una se ramifica en la
cara profunda del pectoral mayor y la otra, siguiendo un trayecto inverso, da dos
colaterales, de las cuales la primera se dirige hacia arriba, hacia el acromion,
mientras que la segunda se aloja en el surco deltopectoral.
En medio de las ramificaciones arteriales se percibe una vena, a menudo
voluminosa. la vena cefálica, que ha seguido el surco deltopectoral y que, llegada
cerca de la clavícula, se in curva hacia atrás (cayado de la cefálica), atraviesa la
aponeurosis clavicular y desemboca en la vena axilar. Aislaremos, por último, un
pequeño filete nervioso:
7.° Cavidad axílar, - Para descubrir el contenido del hueco de la axila, es
necesario incidir la aponeurosis c1avipectoral y el músculo pectoral menor. Se
practica una muesca en la aponeurosis, en el trayecto del paquete vasculonervioso
de la axila (que vemos por transparencia), en el punto en que éste va a
desaparecer bajo los tegumentos que cubren la cara interna del brazo. Insinuamos
una sonda acanalada, la cual seguirá el trayecto de los vasos, y seccionamos la
aponeurosis sobre la sonda hasta el borde inferior del pectoral mayor; cortamos
este músculo de través siguiendo siempre la misma dirección, y seccionamos, por
último, sírviéndonos de nuevo de la sonda acanalada, lo que queda de aponeurosis
c1avipectoral comprendida entre el borde
inferior del pectoral menor y el orificio por donde sale la arteria acro- miotorácica
descrito anteriormente. Levantamos ahora la aponeurosis, dispuesta en dos
colgajos que reclinamos hacia los lados. el nervio del pectoral mayor, el cual se
divide inmediatamente en ramas finas que se mezclan a las ramificaciones
vasculares situadas
en la cara profunda del pectoral mayor.

Es fácil levantar el colgajo externo, bastante corto y que comprede en su

53
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

espesor el extremo coracoideo del pectoral menor. Para reclinar más fácilmente el
colgajo interno, que, por el contrario, está muy extendido, será útil practicar un
desbridamiento que seguirá (según el cadáver posea un pectoral menor poco o
muy desarrollado) el borde superior o el borde inferior del músculo. De esta suerte
nos será fácil reclinar la aponeurosis. Sin embargo, la disección será siempre
delicada en la base de la axila, por la razón de que aquí se fusiona con la
aponeurosis superficial. Se hace adherente a la piel y se tapiza de tejido
celuloadiposo abundante. Por último, es perforada por las ramas nerviosas que
vienen de los intercostales.
Incididos y reclinados la aponeurosis clavicoracoaxilar y el músculo
pectoraLmenor, aparece la cavidad axilar y su contenido. Disecaremos
primeramente el contenido; luego, estudiando éste, nos ocuparemos en las otras
paredes que, de momento, son poco o nada visibles.
8.° Contenido del hueco de la axila. - La cavidad axilar contiene, sumergidos
en un bloque celuloadiposo que conviene resecar, arterias} venas y linfáticos.
Aislamos sucesivamente cada uno de estos elementos para identificarlos, sin
destruir, sin embargo, las relaciones fundamentales que los unen entre sí, algunas
de las cuales sirven hasta para reconocerlos. Comenzamos la disección por las
venas.
A. VENAS. - La más superficial, y también la más voluminosa, es la vena
axilar, que reconoceremos en seguida por sus dimensiones y forma aplanada. En el
vértice de la axila sólo se ve a ella, que cubre enteramente la arteria y los nervios y
recibe a este nivel varios afluentes, en particular la vena cefálica y las venas
acromiotorácicas.
A medida que nos alejamos de la clavícula, la vena se separa del paquete
vasculonervioso. Se hace cada vez más fácil de disociar. Siguiendo las numerosas
ramas aferentes que recibe, observamos que unas acompañan las arterias
emanadas de la axilar y otras son completamente independientes. La topografía es
demasiado variable según los sujetos para que puedan darse detalles más
precisos.
Muy a menudo la vena axilar está acompañada de un conducto colateral
que permanece junto a la arteria axilar y se coloca en su borde externo. Si existe en
el cadáver, debe conservarse.
B. ARTERIAS. - La arteria axilar forma en cierto modo el eje del paquete
vasculonervioso de la axila: alrededor de ella se disponen los troncos nerviosos del
plexo braquial. Está rodeada de una vaina celulosa resistente, que nos permite

54
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

fácilmente aislarla de los otros elementos.


U na vez disecada la arteria axilar en toda su extensión, seguirmos cada
una de sus ramas. 0.) La acromiotorácica, fácilmente reconocible por su forma en y
de la que seguimos las ramas terminales desde su salida a través de la
aponeurosis clavipectoral.
/3) La torácica inferior o mamaria externa} que se dirige hacia la pared
torácica junto a la que se aplica, dando ramas a la vez a los músculos de esta
pared y al músculo infraescapular. Un ramo importante se une generalmente al
nervio del serrato mayor. y) La arteria escapular inferior} la más voluminosa de las
colaterales de la axilar, se dirige inmediatamente hacia abajo y atrás; forma una
especie de cayado, y, mientras que una de sus ramas se aplica al músculo dorsal
ancho, el tronco principal penetra en el triángulo omotricipital, que pondremos al
descubierto, y desaparece en la región escapular, en la que vamos a seguirlo.
S) La circunfleja anterior se desprende de la axilar en el borde interior del
infraescapular; es por lo regular un pequeño vaso que penetra casi inmediatamente
detrás del coracobraquial. €) La circunfleja posterior} mucho más importante que la
precedente, nace al mismo nivel; pero se dirige hacia atrás, rodea en cierto modo el
paquete vasculonervioso describiendo un cayado y atraviesa el cuadrilátero
humerotricipital para penetrar en la región deltoidea.
Las ramas de la arteria axilar están sujetas, en cuanto a su origen, a
numerosas anomalías, de las que es conveniente conocer las principales. Muy
frecuentemente la mamaria externa viene de la escapular inferior y las dos
circunflejas nacen de un tronco común; a menudo también, las circunflejas
proceden de la escapular inferior; a veces, por último, pero más raramente,
observamos un tronco único que da la torácica inferior, la escapular y las dos
circunflejas; mas estas disposiciones anormales sólo se refieren al origen del vaso;
inútil es decir que identificaremos siempre éste fácilmente por su dirección y
distribución. Encontramos sucesivamente, desde el vértice de la axila hacia el
brazo:

REGIONES DEL MIEMBRO SUPERIOR


La acromiotorácica, fácilmente reconocible por su forma en Y, de la que seguimos
las ramas terminales desde su salida a través de la aponeurosis clavipectoral. /3)
La torácica inferior o mamaria externa} que se dirige hacia la pared torácica junto a
la que se aplica, dando ramas a la vez a los músculos de esta pared y al músculo
infraescapular. Un ramo importante se une generalmente al nervio del serrato

55
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

mayor.
La arteria escapular inferior} la más voluminosa de las colaterales de la
axilar, se dirige inmediatamente hacia abajo y atrás; forma una especie de cayado,
y, mientras que una de sus ramas se aplica al músculo dorsal ancho, el tronco
principal penetra en el triángulo omotricipital, que pondremos al descubierto, y
desaparece en la región escapular, en la que vamos a seguirlo.
La circunfleja anterior se desprende de la axilar en el borde interior del
infraescapular; es por lo regular un pequeño vaso que penetra casi inmediatamente
detrás del coracobraquial. La circunfleja posterior} mucho más importante que la
precedente, nace al mismo nivel; pero se dirige hacia atrás, rodea en ciertomodo el
paquete vasculonervioso describiendo un cayado y atraviesa el cuadrilátero
humerotricipital para penetrar en la región deltoidea.
Las ramas de la arteria axilar están sujetas, en cuanto a su origen, a
numerosas anomalías, de las que es conveniente conocer las principales. Muy
frecuentemente la mamaria externa viene de la escapular inferior y las dos
circunflejas nacen de un tronco común; a menudo también, las circunflejas
proceden de la escapular inferior; a veces, por último, pero más raramente,
observamos un tronco único que da la torácica inferior, la escapular y las dos
circunflejas; mas estas disposiciones anormales sólo se refieren al origen del vaso;
inútil es decir que identificaremos siempre éste fácilmente por su dirección y
distribución.

C. NERVIOS. - Vienen todos del plexo braquial. Mal diferenciados todavía


en el momento en que penetran en el hueco de la axila, los nervios del plexo
braquial no tardan en individuarse. El nervio mediano es el primero que se
encuentra; un carácter esencial nos permitirá identificarlo inmediatamente: está
constituido por la reunión de dos raíces que enlazan la arteria axilar, y el tronco así
formado sigue el trayecto de la arteria y se coloca a su lado externo.
/3) De la raíz externa del mediano vemos que se desprende el
musculocutáneo, que se aleja inmediatamente del plexo para ir a perforar el
músculo coracobraquial: buscaremos el nervio en este punto de su trayecto. La
raíz interna del mediano suministra el cubital, el braquial cutáneo interno y su
accesorio. - El nervio cubital es simétrico al mediano en relación a la arteria axilar:
flanquea este vaso por su lado interno; pero, a medida que desciende hacia el
brazo, tiende a hacer.

56
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

REGIÓN DE LA AXILA

Dentro del nervio cubital; son de pequeño volumen; al contrario del nervio
precedente, se hacen cada vez más superficiales al dirigirse hacia la región
braquial. Nos falta aislar las dos últimas ramas terminales del plexo: el radial y el
circunflejo. Buscaremos el tronco común de estos dos nervios detrás de la arteria
humeral, donde se reconoce por su volumen ordinariamente considerable. - El
nervio circunflejo se desprende de él algo por encima del origen de la arteria
circunfleja posterior, a la que se une casi inmediatamente para atravesar el
cuadrilátero de Velpeau. - El nervio radial sigue el trayecto del tronco original, es
decir, queda posterior y pasa, detrás de la arteria axilar, en contacto del tendón del
dorsal ancho: esta relación constituye un punto de referencia primordial para el
descubrimiento del nervio en medicina operatoria.
Algunas ramas colaterales del plexo braquial se encuentran en la región
axilar: son los nervios del pectoral mayor, del serrato mayor, del subescapular y del
dorsal ancho. Los buscaremos. y seguiremos hasta los músculos a los que están
destinados
D. LINFÁTICOS. - Si no pueden ser disecados los vasos linfáticos de la
axila, pueden, en cambio, aislarse los ganglios. Estos forman grupos distintos, de
los cuales tres principalmente son de importancia; de ordinario nos será posible
encontrar algunos elementos.
En general, los ganglios se hallan en contacto con las venas; bus- caremos
más especialmente: los ganglios del grupo braquial, en la parte externa de la axila,
junto a la vena axilar; los ganglios del grupo tordcico, dispuestos alrededor de los
vasos mamarios externos; los ganglios del grupo subescapular, agrupados
alrededor de los vasos del mismo nombre. Más raramente nos será posible
encontrar ganglios
9.° Las otras tres paredes de la axila. - Al principio de la disección
estudiamos la pared anterior de la pirámide axilar, cuyo hundimiento nos ha
permitido llegar a la misma cavidad. La disección minuciosa que acabamos de
hacer del contenido de esta cavidad hace aparecer las otras tres paredes, posterior,
externa e interna. Sólo tendremos que mirar la preparación movilizando como
conviene los elementos vasculares y nerviosos.
a) Pared posterior. - Esta pared es enteramente muscular. Encontramos
primeramente, de arriba abajo, el músculo subescapular, que tapiza la cara anterior
del omóplato, junto a la cual está aplicado por su aponeurosis; sus fascículos

57
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

convergen hacia la cabeza humeral y forman un pequeño tendón aplanado que se


inserta en el troquiter, fusionando más o menos sus fibras con las de la cápsula
articular del grupo infraclavicular en el vértice de la axila, o del grupo intermedio,
situado junto a la vena axílar, algo más allá de la desembocadura de la vena
torácica inferior porción corta del bíceps, ambos pegados al húmero, al que no
tardan en cubrir enteramente.
En la cara interna del coracobraquial puede verse el Debajo del
subescapular descubrimos el redondo mayor y el dorsal ancho, superpuestos uno
al otro. Sus tendones confundidos van a insertarse en el labio posterior y en el
fondo del canal bicipital. Reconocemos sin dificultad este tendón común por su
forma cuadrilátera y su aspecto brillante, ya que está compuesto exclusivamente de
fibras tendinosas.
Si disecamos cuidadosamente los bordes de este tendón, comprobaremos
que existe un intersticio entre su borde superior y el borde axilar del omóplato
cubierto del subescapular. Examinando más atentamente, veremos que este
espacio está a su vez dividido en dos partes por el tendón de la porción larga del
tríceps, que cruza transversalmente por detrás el dorsal ancho y el redondo menor.
Los dos intersticios así formados son: el más externo, el cuadrilátero
humerotricipital o cuadrilátero de Velpeau; el más interno, el triángulo omotricipital.
A través de estos intersticios musculares pasan los vasos y los nervios circunflejos
y escapulares inferiores, que identificamos precedentemente. Comprobamos, por
fin, en.la cara axilar del dorsal ancho, la presencia de su nervio motor, rama
colateral del plexo braquial.
b) Pared interna. - La pared interna de la axila no es más que la pared
lateral del tórax. Está formada por la parrilla costal (costillas y músculos in tercos
tales), y además las primeras digitaciones del serrato mayor. Estos músculos están
cubiertos por una aponeurosis.
En esta pared hay un filete nervioso, el nervio del serrato mayor, que va a
unirse con la arteria torácica inferior, rama de la axilar. De los dos o tres primeros
espacios intercostales salen finas ramificaciones nerviosas que atraviesan el hueco
axilar a manera de puente colgante y van a perderse en el tejido celular y la piel de
la base de la axila o se continúan hasta la región braquial: son filetes anastomóticos
que unen los nervios intercostales al plexo braquial.
c) Pared externa. - Se halla casi disecada por el hecho del levantamiento de
la aponeurosis clavicoracoaxilar; está constituida por el músculo coracobraquial,
fusionado con la nervio musculocutáneo, que penetra en el músculo y lo perfora

58
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

para pasar a la región braquial anterior.


En la parte no cubierta por el coracobíceps, la pared externa de la axila está
formada por la articulación escapulohumeral y la basede la apófisis coracoides, de
la que se perciben fácilmente los relieves.
Nota. Si disponemos de ambos lados del cadáver, en uno de ellos, el
derecho,
por ejemplo, se diseca hasta la aponeurosis cIavicoracoaxilar Y nos detenemos una
vez erinado fuertemente el colgajo cutáneo inferior, para mostrar bien el ligamento
suspensorio de la axila de Gerdy. Luego, en el lado izquierdo se diseca la cavidad
axilar para preparar las otras tres paredes y los diferentes elementos, vasculares y
nerviosos, que se encuentran contenidos en la misma. 10. Presentación de la
pieza.

REGIONES DEL BRAZO

El brazo, en anatomía topográfica, es la porción del miembro superior comprendida


entre el hombro y el codo. Está limitado: 1.°, por arriba por una línea circular que
corresponde a la vez al borde inferior del pectoral mayor, del dorsal ancho y del
redondo mayor; 2.°, por abajo) por una línea circular, paralela a la precedente, que
pasa a unos dos dedos por encima de la epitróclea y del epicóndilo. El brazo forma
dos regiones: 1.0 Una, colocada delante del húmero: la región braquial anterior; 2.°
La otra, situada detrás: la región braquial posterior

REGIÓN BRAQUIAL ANTERIOR

La región braquial anterior comprende el conjunto de las partes blandas situadas


delante del húmero.
1.- Límites. - Sus límites son: por arriba) un plano horizontal que pasa por el borde
inferior del pectoral mayor; por abajo) un plano horizontal trazado a cosa de dos
dedos por encima de la epitróclea y del epicóndilo; a los lados) dos líneas verticales
trazadas, una por el epicóndilo, otra por la epitróclea.
2: Posición del cadáver. - Decúbito supino, con el miembro superior en abducción
en ángulo recto para tender convenientemente los músculos, vasos y nervios de la
región. El antebrazo estará en supinación.
3.° Incisión de los tegumentos. - Dos incisiones transversales (a a' y b b') pasan
respectivamente por los límites superior e inferior de la región, reunidas por una

59
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

incisión vertical (e e') en el eje del brazo .


Seccionamos a la vez piel y tejido celular subcutáneo, hasta lle- gar a la
aponeurosis superficial, y reclinamos a derecha e izquierda los dos colgajos
limitados por las incisiones. En estos colgajos se buscan los vasos y los nervios
superficiales) a
saber: en el lado externo, la vena cefálica y algunos ramos termina-les del nervio
radial y del nervio circunflejo; en el lado interno la vena basílica y, al lado de ella, el
nervio braquial cutáneo interno y su accesorio.
4: Aponeurosis. - La aponeurosis braquial cubre indistintamente todos los órganos
de la región. La hendimos verticalmente, siguiendo el eje del bíceps, que sobresale
y que percibimos por transparencia. Desbridamos arriba y abajo siguiendo las
incisiones cutáneas y levantamos dos colgajos, uno externo y otro interno. Este
tiempo de la disección no tiene dificultad alguna.
El levantamiento de los colgajos se detendrá, a los lados, por los tabiques
intermusculares, que se desprenden de la cara profunda de la aponeurosis y van a
insertarse respectivamente en los bordes interno y externo del húmero, separando
así el compartimiento braquial anterior del compartimiento posterior. Respetaremos
cuidadosamente estos tabiques. Arriba y afuera, comprobamos que el tabique
intermuscular externo se in terpone entre los músculos anteriores del brazo y el
deltoides: este último músculo, aunque pertenezca propiamente a la región
deltoidea, invade la región braquial. No destruiremos sus relaciones, reclinando
simplemente hacia fuera el tabique intermuscular y el deltoides, sin abrir el
compartimiento deltoideo.
Arriba y adentro, el tabique intermuscular interno separa los músculos del brazo del
pectoral mayor. Aparece, entonces, ante nosotros el contenido del compartimiento
braquial anterior, con exclusión de todo elemento extraño: Capa subaponeurótica. -
Estudiaremos: los músculos, los vasos y los nervios.
a) Músculos. - El bíceps llena por sí solo la casi totalidad del compartimiento.
Sebuscan, en la parte superior de la preparación, sus dos manojos de origen, el
bíceps largo y el bíceps corto. Reconocemos, en la parte inferior, en el borde
interno de su tendón terminal, las primeras fibras de la expansión aponeurotica, que
se continúa en la región del pliegue del codo.

REGIONES DEL MIEMBRO SUPERIOR

Reclinamos ahora el bíceps en su parte superior, desprendiendo el coracobraquial,

60
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

cuyas fibras carnosas, de dirección oblicua hacia abajo y afuera, se fijan en la parte
media dé la cara interna del húmero. Entre el bíceps y el coracobraquial, pasa el
nervio musculocutáneo, que volveremos a encontrar en seguida. Luego separamos
el bíceps hacia dentro, en la parte inferior de la región, descubriendo así dos
músculos que el bíceps oculta más o completamente; el b raquial anterior,
ampliamente extendido delante de la diáfisis humeral, y por fuera de éste, el
supinador largo, que desciende por la cara externa del húmero.
b) Vasos humerales y nervio mediano. - Los encontraremos siguiendo el borde
interno del bíceps incluidos en una vaina, verdadera dependencia del tabique
intermuscular, que los aísla en algún modo de los órganos próximos. Hendimos
esta vaina en toda la altura de la región, excepto en los últimos centímetros
inferiores, que conservamos intactos, para la demostración, y disecamos luego el
nervio mediano, la arteria humeral y las venas humerales.
El nervio mediano es el más superficial de los órganos encontrados al abrir
la vaina de los vasos. Situado en la parte superior de la región, delante y afuera de
la arteria humeral, pasa por delante de ella, para venir a colocarse finalmente en su
lado interno. Este nervio no suministra en su largo trayecto ninguna rama colateral.
La arteria humeral suministra, en cambio, numerosas ramas que
reconoceremos y seguiremos, a medida que avanzamos en la disección.
Aislaremos ante todo las ramas musculares, destinadas al coracobraquial y al
bíceps (existe a menudo, en la parte media del brazo, un voluminoso pedículo,
constituido por los vasos nutricios del bíceps).
En seguida encontramos la humeral profunda, o colateral externa, en la
parte más superior de la preparación, y que desaparece muy pronto, a través de un
orificio del tabique intermuscular interno, para pasar a la región braquial posterior.
Las dos colaterales internas superior e inferior pasan también al posterior; la
primera acompaña al nervio cubital.
Dos venas humerales están junto a la arteria, anastomosándose frecuentemente
entre sí. Reciben los afluentes correspondientes a las ramas arteriales; pero su
afluente más importante es la vena basílica, que viniendo del tejido celular
subcutáneo, desemboca en la vena humeral, después de haber atravesado la
aponeurosis superficial. Encontramos ordinariamente esta importante confluencia
en la unión del tercio superior y los dos tercios inferiores de la región.
c) Nervio musculocuiáneo, - Este nervio ha sido ya entrevisto al disecar el
coracobraquial. Lo descubrimos entre este músculo y el bíceps. Tomándolo en el
punto en que sale del coracobraquial (músculo perforado de Casserio), aislamos los

61
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

ramos que envían al bíceps y al braquial anterior; seguimos, por fin, su ramo
cutáneo hasta la parte inferior de la región; a este nivel sale de debajo del borde
externo del bíceps y se dirige hacia la cara externa del antebrazo.
d) Nervio radial. - Para terminar, falta poner al descubierto el tronco del nervio
radial; lo buscamos en el tercio inferior de la preparación, en el fondo del intersticio
celuloso que separa el braquial anterior del supinador largo. Aquí se halla, desde
que entra en el
compartimiento braquial anterior (a través del tabique intermuscular externo), hasta
que penetra en la región del pliegue del codo.
Para completar la preparación y para precisar relaciones importantes,
convendrá destruir, en la parte superior de la región, los troncos del nervio radial y
del nervio cubital. Están situados en el compartimiento posterior del brazo, por lo
que será necesario buscarlos detrás del tabique intermuscular interno. El cubital se
encuentra
por detrás y algo por dentro de la arteria humeral, y desciende a lo largo del tabique
intermuscular interno, único que lo separa de los vasos humerales y del nervio
mediano. En cuanto al nervio radial, está situado primeramente detrás de la arteria
humeral; se aleja de ella en seguida, contornea el húmero y reaparece, en el lado
externo de este hueso, en la región braquial anterior.
6.° Montaje .de la preparación.

REGION BRAQUIAL POSTERIOR


La región braquial posterior comprende las partes blandas situadas detrás de la
diáfisis humeral.
1.0 Límites. - Sus límites son; por arriba, un plano horizontal que pasa por el borde
inferior del pectoral mayor; por abajo, un plano horizontal que pasa a dos dedos por
encima de la epitróclea; a los lados, dos líneas que corresponden respectivamente
a los bordes interno y externo del brazo. En profundidad, la región se detiene en el
húmero y en los dos tabiques intermusculares interno y externo.
2.° Posición del cadáver. - Decúbito prono con el brazo ligeramente separado del
cuerpo.
3.° Incisión de los tegumentos. - Se trazan (fig. 47) dos incisiones transversales (a
a' y b b') en los límites superior e inferior de la región, yendo de uno a otro borde del
brazo, y se unen por una incisión longitudinal (e e') que siga el eje del miembro.
Incidimos a la vez la piel y el tejido celular subcutáneo y levantamos los dos
colgajos, interno y externo, rasando la aponeurosis.

62
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

En estos colgajos se buscan los vasos y nervios superficiales. Las venas,


bastante numerosas, están irregularmente distribuidas. Los nervios son más
interesantes; en la parte superoexterna, aislamos los ra-mas emanados de la rama
cutánea del nervio circunflejo,' en el resto del brazo, preparamos los filetes
nerviosos que proceden del nervio radial.
4.° Aponeurosis superficial. - Forma una capa continua encima de la región. Se
incide longitudinal y paralelamente al eje del brazo, desbridando arriba y abajo por
dos incisiones transversales y levantando los dos postigos así limitados; ello es fácil
por todas partes, excepto en la superior, en donde nos detiene un tabique que se
interpone
entre el deltoides y el tríceps braquial. El deltoides (véase región deltoidea, pág.
174), se encuentra contenido en una verdadera vaina formada por su aponeurosis
propia y los tabiques que lo separan de los músculos próximos. Como desciende
hasta la parte media del brazo, invade, por consiguiente, la región braquial. Para
acabar el levantamiento del colgajo aponeurótico por fuera, será, pues, necesario
desinsertar el tabique que separa el deltoides del tríceps.
Cuando llegamos al límite posterior de la región nos detienen los tabiques
intermusculares interno y externo, que se desprenden de la aponeurosis superficial
y van a insertarse, respectivamente, en los bordes interno y externo del húmero,
separando así la región braquial posterior de la anterior.
5.° Capa subaponeurótica. - Debajo de la aponeurosis se encuentran los elementos
esenciales de la región: el músculo triceps
braquial, los vasos y los nervios profundos
A. MÚSCULO TRÍCEPS BRAQUIAL. - Reconocemos, en primer lugar, cada una de
sus partes constituyentes: la porción larga, que está en medio: el vasto interno y el
vasto externo, a los lados. Estas tres partes del mismo músculo están más o menos
fusionadas en gran parte de su trayecto y, por lo tanto, son de difícil disección. Para
la claridad de la preparación es necesario disociarlas al máximo y separarlas
francamente unas de las otras para poder reclinadas afuera y adentro. Estas masas
musculares cubren los grandes vasos y nervios de la ,13 región, que importa poner
al descubierto; para esto es necesario poder movilizar libremente los músculos
B. VASOS y NERVIOS PROFUNDOS. - Son el nervio radial, los vasos humerales
profundos, el nervio cubital y las arterias y venas colaterales internas superiores.
a) Nervio radial. - Es el órgano más importante de la región. Si en la parte superior
disociamos bien el vasto externo de la porción larga del tríceps, veremos, al separar
estos dos músculos y al reclinar arriba y atrás el deltoides, que el nervio radial sale

63
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

de debajo del tendón del dorsal ancho y que pasa transversal mente a la parte más
superior de la región.
Si pretendemos seguirlo (tiene una dirección oblicua hacia abajo afuera y
entra en el canal de torsión del húmero), es necesario que cortemos el vasto
externo. La incisión se dirigirá, como el mismo nervio, oblicuamente abajo y afuera;
se practicará progresivamente, sin perder el contacto del nervio, a fin de que la
brecha muscular posea la anchura suficiente para poner el tronco nervioso al
descubierto. Por consiguiente, será fácil seguido hasta que perfora el tabique
intermuscular externo para penetrar en el compartimiento anterior del brazo. En el
curso de esta disección aislaremos las ramas que van al tejido celular subcutáneo.
El nervio radial-emite ramos motores a cada una de las partes constitutivas
del tríceps: porción larga, vasto externo y vasto interno. Estos ramos vienen de la
parte superior del tronco nervioso; seguimos cada uno de ellos hasta el interior del
músculo, haciendo, con el escalpelo o con las tijeras, pequeñas brechas en los
fascículos musculares. La preparación mostrará, de este modo, la distribución
completa del nervio radial.
b) Vasos humerales profundos. - Son, en cierto modo, los satélites del nervio radial.
La arteria colateral externa o humeral profunda) a la que seguiremos, viene de la
humeral, y por lo tanto de la región braquial anterior, y se une al nervio radial desde
su entrada en el compartimiento posterior. Pronto se divide en dos ramas: la
primera, arteria del tríceps, que se distribuye, acompañando más o menos de cerca
las ramificaciones correspondientes del nervio radial, en las tres porciones del
tríceps; la otra, que queda unida al tronco del nervio radial y que pasa con él al
canal de torsión del húmero, dando, en su trayecto, numerosos ramos al músculo
vasto externo. Todas estas arterias y ramas van acompañadas de venas satélites.
e) Nervio cubital. - En la parte superointerna de la región, encima de las inserciones
del vasto interno, se reclina algo hacia fuera la porción larga del tríceps y se busca
el nervio cubital. Es reconocible por su dirección vertical, pero desaparece pronto
bajo el vasto interno, y, si lo seguimos, comprobaremos que se halla entre este
músculo
y el tabique muscular interno.
d) Arterias y venas colaterales internas superiores. - Al nervio cubital se une pronto
una pequeña arteria flanqueada de las venas: los vasos colaterales internos y
superior. La arteria viene de la humeral y atraviesa, por consiguiente, de delante
atrás, el tabique in termuscular interno. En su punto de emergencia se abre una
pequeña ventana oval en el tabique intermuscular por la que se descubre el

64
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

paquete vasculonervioso de la región anterior, constituido por los vasos humeral es


y el nervio mediano.

REGIONES DEL CODO

El codo, en anatomía topográfica, tiene por límites convencionales: 1.0, por arriba,
un plano horizontal que pasa a unos dos dedos por encima de la epitróc1ea y del
epicóndilo; 2.°, por abajo, un plano igualmente horizontal que pasa a cosa de dos
dedos por debajo de estas mismas eminencias óseas. Presenta dos regiones:
1.0 Una región anterior, situada delante de la articulación: región anterior del codo o
región del Pliegue del codo.
2.° Una región posterior, situada detrás de la articulación: región posterior del codo
o región olecraniana.
1. REGION DEL PLIEGUE DEL CODO
La región del pliegue del codo comprende el conjunto de las partes blandas
dispuestas delante de la articulación cubitohumerorradial
Límites. - Sus límites son: por arriba, un plano transversal que pasa a dos traveses
de dedo por encima de la epitróclea; por abajo, un plano transversal que pasa a
unos dos dedos de la misma eminencia ósea; a los lados, dos líneas verticales
trazadas respectivamente adentro y afuera por la epitróc1ea y el epicóndilo. En
profundidad, la región se detiene en el plano articular.
2.° Posición del cadáver. - En decúbito supino con el miembro superior en
abducción ligera y el antebrazo en extensión forzada, para tender al máximo los
tegumentos y los órganos de la región.

3: Incisión de los tegumentos, planos superficiales: piel y tejido celular subcutáneo.


- Se trazan (fig. 48) dos incisiones trans- versales (a a' y b b'), que pasen una a
nivel del límite superior de la región y otra por el límite inferior. Se reúnen estas dos
incisiones por una tercera vertical (e e') que siga exactamente el eje del músculo
bíceps, cuyo relieve es fácil percibir en cualquier sujeto. Se inciden
simultáneamente la piel y el tejido celular subcutáneo y se levantan de una y otra
parte los dos colgajos que trazamos, rasando la aponeurosis superficial. En el curso
de este levantamiento cortaremos un tronco venoso que anastomosa la vena
mediana con las venas profundas de la región: la vena comunicante del codo.
Antes de ir más adentro en la región, se examinan los vasos y nervios superficiales
que se encuentran incluidos en los colgajos: en el colgajo externo aislamos la vena

65
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

radial superficial, seccionada a nivel de la incisión una parte de la vena mediana,


vertical media, la vena cejálica y las ramificaciones del nervio musculocutáneo; en
el colgajo interno encontramos la vena cubital superficial, la otra porción de la vena
mediana, la vena basílica y las ramas terminales del nervio braquial cutáneo
interno. Desprendemos ligeramente estas venas y estos nervios del tejido celular
en que se hallan, para hacerlos bien visibles, origen de la vena comunicante se
encontrará unas veces en el colgajo interno y otras en el colgajo externo. Hay
motivo para recordar aquí que la vascularización venosa superficial está sujeta a
nurnerosas variaciones (véanse los Tratados de Anatomía).
4.° Aponeurosis superficial. - Si se ha ejecutado correctamente el tiempo
precedente, la aponeurosis del codo debe estar descubierta por completo y
desembarazada de su grasa. Hay que quitarla a su vez para descubrir los planos
profundos. Se trazan sobre ella las mismas incisiones que en la piel y se levantan
los dos colgajos aponeuróticos, uno hacia dentro y otro hacia fuera. Este tiempo de
la disección presenta algunas particularidades. Por dentro, se comprueba que la
aponeurosis superficial está reforzada pronto por una hoja fibrosa que se
desprende del tendón bicipital: la expansión aponeurótica del bíceps. Se corta
perpendicularmente a la dirección de sus fibras, a 2 centímetros del tendón bicipital.
Entonces es posible completar el levantamiento del colgajo, aunque con alguna
dificultad, pues la aponeurosis se adhiere íntimamente a los músculos epitrócleos
subyacentes que se insertan en ella. En el lado externo, la disección de la
aponeurosis es más fácil. Sin embargo, nos detiene en su levantamiento un tabique
que emana de su cara profunda y que separa el grupo de los músculos externos
(supinador largo y radiales) de los músculos medianos (bíceps y braquial anterior).
Seccionado este tabique a ras de la aponeurosis superficial, se conserva, en parte
por lo menos, para demostrar en la preparación el tabicamiento de los
compartimientos musculares.
5.° Capa subaponeurótica. - Debajo de la aponeurosis encontramos: 1.0, los
músculos; 2.°, los vasos y nervios profundos.
A. MÚSCULOS. - Los músculos forman tres grupos que diferenciamos
inmediatamente: un grupo medio, un grupo interno y un grupo externo.
Grupo medio. - En el primer plano se encuentra el músculo bíceps, cuyo cuerpo
carnoso, grueso y fusiforme, se resuelve en un tendón, al principio plano, luego
cilíndrico. La parte aplanada del tendón es superficial y en ella se inserta la
expansión aponeurótica que seccionamos precedentemente; a medida que
seguimos el 'tendón bicipital hacia la parte inferior de la región, comprobamos que

66
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

se hace más profundo y que pasa por debajo del paquete vasculonervioso para ir a
insertarse finalmente en la tuberosidad bicipital del radio. Lo levantamos
reclinándolo por fuera de la arteria y de las venas radiales, con lo que se pone al
descubierto la bolsa serosa del bíceps, que abriremos.
Debajo del músculo precedente se percibe el braquial anterior, ampliamente
extendido delante del extremo inferior del húrnero y de la cápsula articular del codo
y que va a insertarse en la apófisis coronoides del cúbito.
b) Grupo interno. - Los músculos del grupo interno proceden todos de 14
epitróclea. Los encontramos ordinariamente fusionados en una masa común; con
algún artificio podremos tal vez disociar en el primer plano, yendo de fuera adentro,
el pronador redondo, el palmar mayor y el palmar menor. Debajo de este plano se
encuentra el origen de los músculos [lexores comunes superficial y projundo de los
dedos.
Grupo externo. - Este grupo muscular está separado de los dos grupos
precedentes por un tabique que descubrimos al disecar la aponeurosis superficial y
que conservamos. Está formado de cuatro músculos dispuestos en dos planos, uno
superficial y otro profundo. El supinador largo es el más interno de estos músculos:
como viene de la parte media del brazo, está claramente diferenciado; el tabique
precitado lo separa, por arriba, del braquial anterior y del bíceps; por debajo, del
pronador redondo. Por fuera del supinador largo se buscan los dos radiales
externos. Levantamos y reclinamos estos dos músculos superficiales,
descubriendo, arrollado delante del radio, el supinador corto, reconocible por la
dirección oblicua hacia abajo y adentro de sus fibras brillantes, a la vez musculares
y tendinosas,
B. VASOS y NERVIOS PROFUNDOS. - Los vasos y nervios profundos se hallan en
los dos canales bicipitales interno y externo. Para ponerlos al descubierto es
necesario ensanchar estos canales, que normalmente son muy estrechos.
Separemos, pues, fuertemente por dentro los músculos epitrócleos y por fuera los
músculos superficiales del grupo externo. En el canal bicipital interno aislamos la
arteria humeral y sus ramas, sus dos venas satélites y el nervio mediano. En el
canal bicipital externo descubrimos el nervio radial, la arteria colateral externa y sus
venas satélites.
a) Vasos humerales y sus ramas. - La arteria humeral aparece entre dos venas en
el lado interno del bíceps. Sigue al principio, como el mismo músculo, una dirección
ligeramente oblicua hacia abajo. Pasa en seguida (siempre con sus dos venas
satélites) bajo la expansión aponeurótica del bíceps, relación importante que

67
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

deberá conservarse en el montaje de la preparación. En la parte más inferior de la


región: la arteria, que se ha si tuado en el centro, se divide en arteria radial y arteria
cubiial. Las venas presentan la misma subdivisión. La arteria radial parece
continuar el mismo trayecto de la humeral. Se dirige francamente hacia abajo y
afuera, queda superficial y se aloja en el intersticio, entre el pro nadar redondo y el
supinador largo. Está separada de este último por el tabique intermuscular. La
arteria cubital, al contrario de la radial, cambia bruscamente de dirección; se hunde
inmediatamente en la profundidad y desaparece pronto entre el fiexor común
superficial y el fiexor común profundo de los dedos.
En su origen, comprobamos que las dos ramas de división de la arteria humeral
no están, como se cree generalmente, en un mismo plano frontal, sino, por el
contrario, en un plano casi sagital. Después de haber disecado los troncos
principales, buscamos sus
ramas colaterales. - La humeral emite, en la región, la colateral interna inferior.
Siguiendo este vaso vemos que camina a lo largo del braquial anterior y luego
penetra bajo la masa de los músculos epitrócleos. Si reclinamos éstos fuertemente,
podremos seguir la arteriola aún más lejos y ver cómo se anastomosa por
inosculación con una rama de la cubital: la recurrente cubital anterior. - La radial
suministra la recurrente radial anterior, ordinariamente voluminosa. La
reconoceremos por su dirección ascendente; vemos que penetra en el
compartimiento de los músculos externos perforando el tabique intermuscular, que
sube por la cara interna del supinador largo en el canal bicipital externo, se une al
tronco del nervio radial y, finalmente, se anastomosa con la terminación de la
arteria humeral profunda. La eubital da origen, en el corto espacio que figura en la
región, a los dos troncos de las interóseas y de las recurrentes cubitales. Del
primero sólo podemos ver el origen; del segundo sólo seguiremos una: de sus
ramas, ya conocida, la recurrente cubital anterior, sobre la que llegamos al disecar
la colateral interna inferior.
b) Nervio mediano. - Se busca y aísla el nervio mediano por dentro de los vasos
humerales. Con estos últimos pasa por debajo de la expansión aponeurótica del
bíceps. Luego los abandona para introducirse entre los dos fascículos de inserción
del pronador redondo y cruza la arteria cubital pasando por delante de ella. Al
proseguir la disección de este nervio desprenderemos los ramos bastante
numerosos que suministra a los músculos epitrócleos.
Nervio radial. - El nervio radial se encuentra en la parte superior de la región, en el
fondo del intersticio que separa el supinadar largo del braquial anterior. A medida

68
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

que nos aproximamos a la interlínea articular del codo se hace más superficial. Algo
por encima de la interlínea se bifurca en sus dos ramas, la rama sensitiva y la rama
motriz. Antes habremos aislado una serie de ramos colaterales que van al
supinador largo y a los músculos radiales externos. La rama sensitiva o anterior
continúa el trayecto del tronco principal; permanece unida a la cara interna del
supinador largo, en su compartimiento, rama motriz o posterior es mucho más
voluminosa que la precedente; se halla también más profundamente situada. Llega
a la parte superior del supinador corto; luego penetra en el espesor de este
músculo, en el intersticio de los fascículos musculares; se dirige finalmente hacia la
cara posterior del antebrazo, en donde no la
seguiremos.

REGION OLECRANIANA

Situada en la cara posterior del codo, comprende todas las partes blandas que
se disponen en el plano dorsal de la articulación del brazo con el antebrazo.
Límites. - Sus límites son: por arriba, un plano ficticio que pasa a unos dos dedos
por encima de la epitróclea; por abajo, un plano transversal, igualmente ficticio, que
pasa también a unos dos dedos por debajo de esta misma eminencia ósea; a los
lados, dos líneas verticales que pasarían, la interna por la epitróclea, la externa por
el epicóndilo.
Posición del cadáver. - Decúbito prono, con el brazo y el antebrazo descansando
sobre su cara anterior. El miembro superior podrá ser ligeramente separado del
tronco. Por último, para hacer sobresalir la articulación del codo y las partes
blandas de la región, se coloca un soporte bajo el brazo, a nivel del pliegue del
codo.
Incisión de los tegumentos. - Se trazan dos incisiones transversales (a a' y b b'],
correspondientes, respectivamente, a los límites superior e inferior de la región, y
se reúnen por una incisión vertical (e e'), que trazamos en el eje de la cresta del
cúbito y del olécranon Se reclinan los dos colgajos cutáneos así formados, que
comprenderán, a la vez, la piel y el tejido celular subcutáneo, con las arteriolas, las
venas y los nervios superficiale.Al ejecutar este tiempo se abre la bolsa serosa
retroolecraniana, que se
adhiere a la cara profunda de la dermis y al cúbito.
Aponeurosis superficial. - Se incide la aponeurosis del m i s m o modo que los
tegumentos; luego se reclinan los dos colgajos a derecha e izquierda. El des-

69
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

prendimiento es fácil en el lado interno, en donde la aponeurosis se adhiere


relativamente poco a los músculos subyacentes. Pero en el lado externo tendremos
que disociarla literalmente de los músculos vasto externo y epicondíleos; es
necesario, además, seccionar la expansión aponeurótica que viene del vasto
externo y se fusiona con la aponeurosis antebraquial, debajo del epicóndilo. En el
curso de la disección comprobamos que la aponeurosis superficial, al mismo tiempo
que envuelve los músculos de la región posterior del brazo y del antebrazo,
suministra tabiques interrnusculares, y que tiene una inserción fija, en el codo, en el
epicóndilo y la epitróclea, que debemos respetar.
Capa muscular superficial. - Debajo de la aponeurosis encontramos la capa
muscular superficial, formada por tres grupos distintos: uno superior y medio y dos
inferiores, externo e interno.
GRUPO MUSCUL-\R MEDIO. - Está constituido exclusivamente por el triceps,
cuyas tres porciones se encuentran fusionadas, pero que, sin embargo, podemos
diferenciar por su aspecto.
a) La porción larga, media, está constituida por una cinta tendinosa cuyas fibras, de
dirección longitudinal, se insertan en el vértice del olécranon. El vasto externo
también está cubierto de fibras nacaradas, de aspecto tendinoso, de dirección
longitudinal, ligeramente oblicua hacia abajo y adentro, reforzadas por fibras
transversales que lo fusionan con la porción larga. Las fibras musculares van a la
porción larga y las más inferiores terminan en el borde externo del olécranon.
Regularizamos, en la parte inferior del músculo, la superficie de sección de la
expansión aponeurótica que de él se desprende. El vasto interno es enteramente
carnoso; lo reconoceremos por sus fascículos regulares, oblicuamente
descendentes hacia abajo y adentro, que van también a la porción larga del tríceps
y al borde interno del pico del olécranon.

GRUPO MUSCULAR EXTER."\O. - El grupo muscular externo, formado por los


músculos epicon dileos, comprende cuatro músculos, que se insertan en el borde
posterior del epicóndilo, y son, yendo de arriba abajo: el ancáneo, el cubital
posterior, el extensor propio del meñique y el extensor común de los dedos. Estos
diferentes músculos están, por decirlo así, fusionados en sus inserciones
epicondíleas, y sólo podemos disociar netamente el primero, el ancóneo, que forma
una masa triangular cuyo vértice corresponde al epicóndilo y cuya base se inserta
en el borde externo del
olécranon y sobre la cresta del cúbito. Los demás músculos sólo tienen en la región

70
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

olecraniana su extremo superior; sus fascículos musculares, reforzados de fibras


ten-
dinosas bastante gruesas, tienen una dirección oblicua hacia abajo y adentro y no
tardan en desaparecer en la cara posterior del antebrazo, donde no es preciso que
los sigamos

GRUPO MUSCULAR INTERNO. - El grupo muscular interno o epitrócleo


comprende un solo músculo, el cubital anterior, constituido por dos manojos
distintos: uno de ellos se inserta en la epitróclea, y se reconoce por su grosor y su
aspecto brillante y tendinoso; otro, exclusivamente carnoso, se inserta en el lado
interno del olécranon y
en la cara interna del cúbito. Estos dos manojos, al reunirse, forman un arco, bajo el
cual buscaremos el nervio cubital, acompañado de una arteria, la recurrente cubital
posterior. Por último, desprendemos y disecamos cuidadosamente, entre la
epitróclea y el olécranon, una pequeña cinta fibrosa reforzada de algunas fibras
musculares que vienen del vasto interno y del cubital anterior: la cinta
epitrocleoolecraniona, bajo la cual pasan el nervio cubital.
Plano profundo. - El plano profundo está constituido por la cara posterior de la
articulación humerorradiocubital. Tendremos que preparar: 1.0, la cápsula articular;
2.°, el nervio cubital; 3.°, los vasos que forman el círculo arterial posterior del codo.

CÁPSULA ARTICULAR. - Cortamos el tríceps en todo su grosor, siguiendo


exactamente el eje posterior del brazo, y cuando llegamos a su cara profunda,
disociaremos prudentemente el tejido celular, bastante denso, que separa la parte
inferior del músculo de la cápsula articular, y, más arriba, desinsertaremos del
húmero las fibras musculares que de un modo bastante laxo en él se adhieren.
Separamos
fuertemente las dos mitades del músculo tríceps así dividido y percibimos entonces
en el fondo la cápsula articular, reconocible por sus fascículos transversos, por su
borde superior bastante neto y por la presencia de pelotones adiposos adherentes
a la sinovial. En la cápsula se hallan pequeñas ramificaciones arteriales, de
dirección transversal, que
forman la anastomosis retroolecraniana de las arterias colaterales internas y
externas.

NERVIO CUBITAL.•- Ai disecar el plano superficial, percibimos ya el nervio cubital,

71
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

que, después de haber pasado bajo la cinta epitroclecolecraniana, penetra entre los
dos fascículos del músculo cubital anterior. Cortamos el arco que une estos dos
fascículos y seccionamos el músculo paralelamente al trayecto del nervio,
observando como éste se hunde progresivamente en el espesor del cubital anterior
y se dirige hacia la cara anterior del antebrazo, en donde no puede seguirse. Más
arriba el nervio cubital se halla bajo la cinta epitrocleoolecraniana que ya
conocemos; comprobamos que se encuentra en un canal, en contacto mismo del
hueso, y también observamos el origen de los fascículos de la cápsula articular del
codo que unen la epitróclea al olécranon. Más arriba, por último, vemos este mismo
nervio cubital que sale de debajo del vasto interno, en cuyo espesor se crea un
verdadero trayecto.

CÍRCULO ARTERIAL POSTERIOR DEL CODO. - Después de haber disecado el


nervio cubital, que es el órgano más importante de la región, buscamos las cinco
ramas arteriales que contribuyen, por sus anastomosis, a formar el círculo
periarticular superior del codo. Todas estas ramas son descendentes, proceden de
la humeral y son la arteria colateral externa (o humeral profunda) y las arterias
colaterales interna, superior e inferior. Las otras dos son ascendentes: una viene de
la arteria interósea posterior, la recurrente radial posterior, y la otra viene de la
cubital, la recurrente cubital posterior.
a) Arteria colateral externa. - La encontraremos al reclinar el músculo vasto externo;
este vaso viene del compartimiento anterior del brazo, que abandona perforando el
tabique interrnuscular externo. Camina junto a este tabique y da cierto número de
ramas trans-versales que pasan bajo el vasto externo en contacto de la cápsula
articular. Termina en la interlínea humerorradial, después de haber pasado por
debajo del ancóneo; sus últimas ramificaciones, fáciles a veces de seguir, van a
anastomosarse con las de la recurrente radial.
b) Arteria colateral interna superior. - Este vaso acompaña al nervio cubital; lo
buscamos bajo el vasto interno, en el punto de emergencia del nervio, por dentro
del cual camina, dando ramas musculares destinadas al vasto externo. La arteria
colateral interna. superior desciende hasta el canal epitrocleoolecraniano, y aquí se
agota en
ramas terminales: unas, transversales, pasan en contacto con la cápsula articular
para anastomosarse con las ramificaciones de la colateral externa; otras,
descendentes, se anastomosan con las ramas de la recurrente cubital posterior.
Otras ramas, por fin, se dirigen hacia la superficie de los músculos y se ramifican

72
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

alrededor del olécranon.


e) Arteria colateral interna inferior. - Es análoga a la colateral externa; la
descubrimos en la parte más inferior del brazo, bajo el borde del vasto interno, que
será necesario reclinar. Como la colateral externa, perfora el tabique intermuscular
que viene del compartimiento anterior del brazo y se divide, cerca de la epitróclea,
en vasos igualmente transversales y descendentes.
d) Arteria recurrente cubital posterior. - Hemos visto ya esta arteria unida al
nerviocubital en el momento en que atraviesa el músculo cubital anterior. Buscamos
bajo este músculo el orificio de la membrana interósea por el que penetra en la
región. La seguimos en su trayecto ascendente hasta el canal
epitrocleoolecraniano, donde
termina, dando ramas superficiales y ramas profundas, que van a anastomosarse
con las ramas análogas de las arterias precedentes.
e) Arteria recurrente radial posterior. - Esta arteria está muy profundamente situada;
para encontrarla habrá que cortar el rnúsculo ancóneo casi a ras de sus inserciones
cubitales y levantar el manojo externo, desplegándolo prudentemente de la cápsula
articular hume- rorradial, a la que se adhiere de modo bastante íntimo. Reclinando,
por otra parte, la masa de los extensores, descubriremos ampliamente el plano
profundo de la región, en el que se reconocen de arriba abajo la eminencia del
cóndilo humeral, la depresión de la interlínea humerorradial, de un centímetro de
anchura aproximadamente, la eminencia de la cabeza radial, y por último, por
debajo, los fascículos de inserción del músculo supinador corto, notables por su
dirección oblicua hacia abajo y afuera. Buscamos entonces la arteria recurrente
radial posterior inrnedia-
tamente junto a la cápsula articular y casi en contacto con la cara externa del
cúbito; viene de la profundidad, bajo la masa de los extensores, y se ramifica, al
llegar a la base del olécranon, en finas ramas terminales que abocan con las ramas
similares, ya disecadas, de la colateral externa.

REGIONES DEL ANTEBRAZO

El antebrazo, comprendido entre la muñeca y el codo, está limitado: por arriba, por
un plano horizontal que pasa por debajo de la epitróclea y del epicóndilo; por
abajo, por un segundo plano igualmente horizontal, que pasa inmediatamente por
encima de la
cabeza del cúbito. Comprende, como el brazo y el codo, dos regiones distintas:

73
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

Una situada delante, región antebraquial anterior. Otra situada detrás, región
antebraquiai posterior.

REGION ANTEBRAQUIAL ANTERIOR


La región antebraquial anterior comprende el conjunto de par- tes blandas que se
disponen en la cara anterior del antebrazo
Límites. - Los límites de esta región son: por arriba, un plano transversal que pasa
aproximadamente a dos dedos por debajo de la epitróclea; por abajo, un plano
transversal que pasa por la parte más elevada de la cabeza del cúbito; a los lados,
dos líneas que parten del epicóndilo y de la epitróclea y terminan respectivamente
en las
apófisis estiloides radial y cubital. Estas líneas corresponden, práctica- mente, al
borde externo y al borde interno del antebrazo. En profundidad, la región se detiene
en los dos huesos del antebrazo y en la membrana interósea.
Posición del cadáver. - Decúbito supino, con el miembro superior en abducción
ligera y la mano mantenida en supinación forzada, clavándola, en caso necesario,
en una tablilla.
3.° Incisión de los tegumentos. - Se trazan de arriba abajo dos incisiones
transversales (a a' y b b') que sigan los límites superior e inferior de la región
reunidas por una tercera incisión, vertical (e e'), trazada en el eje del miembro. Se
inciden la piel y el tejido celular subcutáneo en todo su espesor, hasta llegar a la
aponeurosis superficial. Se levantan entonces los dos colgajos cutáneos externo e
interno, que comprenderán los vasos y los nervios superficiales, que son aquí
particularmente numerosos e importantes.

REGIONES DEL BRAZO


El brazo, en anatomía topográfica, es la porción del miembro superior comprendida
entre el hombro y el codo. Está limitado: 1.°, por arriba) por una línea circular que
corresponde a la vez al borde inferior del pectoral mayor, del dorsal ancho y del
redondo mayor; 2.°, por abajo) por una línea circular, paralela a la precedente, que
pasa a unos dos dedos por encima de la epitróclea y del epicóndilo. El brazo forma
dosregiones: 1.0 Una, colocada delante del húmero: la región braquial anterior; 2.°
La otra, situada detrás: la región braquial posterior1.
REGION BRAQUIAL ANTERIOR
Región braquial anterior comprende el conjunto de las partes blandas
situadas delante del húmero. 1.0 Límites. - Sus límites son: por arriba) un plano que

74
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

pasa por el borde inferior del pectoral mayor; por abajo) un pla- no horizontal
trazado a cosa de dos dedos por encima de la epitróclea y del epicóndilo; a los
lados) dos líneas verticales trazadas, una por el epicóndilo, otra por la epitróclea.
En profundidad) la región está limitada por el húmero y, de una y otra parte de este
hueso, por los dos tabiques intermusculares interno y externo.
2: Posición del cadáver. - Decúbito supino, con el miembro superior en abducción
en ángulo recto para tender convenientemente los músculos, vasos Y nervios de la
región. El antebrazo estará en supinación.
3.° Incisión de los tegumentos. - Dos incisiones transversales (a a' y b b') pasan
respectivamente por los límites superior e inferior de la región, reunidas por una
incisión vertical (e e') en el eje del brazo (fig. 46). Seccionamos a la vez piel y tejido
celular subcutáneo, hasta llegar a la aponeurosis superficial, y reclinamos a
derecha e izquierda los dos colgajos limitados por las incisiones. En estos colgajos
se buscan los vasos y los nervios superficiales) a saber: en el lado externo, la vena
cefálica y algunos ramos termina.

REGION BRAQUIAL POSTERIOR

La región braquial posterior comprende las partes blandas situadas detrás de la


diáfisis humeral.

1.0 Límites. - Sus límites son; por arriba, un plano horizontal que pasa por el borde
inferior del pectoral mayor; por abajo, un plano horizontal que pasa a dos dedos por
encima de la epitróclea; a los lados, dos líneas que corresponden respectivamente
a los bordes interno y externo del brazo. En profundidad, la región se detiene en el
húmero y en los dos tabiques intermusculares interno y externo.

2.° Posición del cadáver. - Decúbito prono con el brazo ligeramente separado del
cuerpo.

3.° Incisión de los tegumentos. - Se trazan (fig. 47) dos incisiones transversales (a
a' y b b') en los límites superior e inferior de la región, yendo de uno a otro borde del
brazo, y se unen por una incisión longitudinal (e e') que siga el eje del miembro.
Incidimos a la vez la piel y el tejido celular subcutáneo y levantamos los dos
colgajos, interno y externo, rasando la aponeurosis. En estos colgajos se buscan
los vasos y nervios superficiales. Las venas, bastante numerosas, están
irregularmente distribuidas.

75
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

Los nervios son más interesantes; en la parte superoexterna, aislamos los ramas
emanados de la rama cutánea del nervio circunflejo,' en el resto del brazo,
preparamos los filetes nerviosos que proceden del nervio radial.

Aponeurosis superficial. - Forma una capa continua encima de la región. Se incide


longitudinal y paralelamente al eje del brazo, desbridando arriba y abajo por dos
incisiones transversales y levantando los dos postigos así limitados; ello es fácil por
todas partes, excepto en la superior, en donde nos detiene un tabique que se
interpone entre el deltoides y el tríceps braquial. El deltoides, se encuentra
contenido en una verdadera vaina formada por su aponeurosis propia y los tabiques
que lo separan de los músculos próximos. Como desciende hasta la parte media
del brazo, invade, por consiguiente, la región braquial. Para acabar el levanta-
miento del colgajo aponeurótico por fuera, será, pues, necesario desinsertar el
tabique que separa el deltoides del tríceps. Cuando llegamos al límite posterior de
la región nos detienen los tabiques intermusculares interno y externo, que se
desprenden de la aponeurosis superficial y van a insertarse, respectivamente, en
los bordes interno y externo del húmero, separando así la región braquial posterior
de la anterior. 5.° Capa subaponeurótica. - Debajo de laaponeurosis se encuentran
los elementos esenciales de la región: el músculo triceps braquial, los vasos y los
nervios profundos. .

MÚSCULO TRÍCEPS BRAQUIAL. - Reconocemos, en primer lugar, cada una de


sus partes constituyentes: la porción larga, que está en medio: el vasto interno y el
vasto externo, a los lados. Estas tres partes del mismo músculo están más o menos
fusionadas en gran parte de su trayecto y, por lo tanto, son de difícil disección. Para
la claridad de la preparación es necesario disociarlas al máximo y separarlas
francamente unas de las otras para poder reclinadas afuera y adentro. Estas masas
musculares cubren los grandes vasos y nervios de la 13 región, que importa poner
al descubierto; para esto es necesario poder movilizar libremente los músculos

B. VASOS y NERVIOS PROFUNDOS. - Son el nervio radial, los vasos humerales


profundos, el nervio cubital y las arterias y venas colaterales internas superiores. a)
Nervio radial. - Es el órgano más importante de la región. Si en la parte superior
disociamos bien el vasto externo de la porción larga del tríceps, veremos, al separar
estos dos músculos y al reclinar arriba y atrás el deltoides, que el nervio radial sale
de debajo del tendón del dorsal ancho y que pasa transversal mente a la parte más
superior de la región. Si pretendemos seguirlo (tiene una dirección oblicua hacia

76
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

abajo y afuera y entra en el canal de torsión del húmero), es necesario que


cortemos el vasto externo. La incisión se dirigirá, como el mismo nervio,
oblicuamente abajo y afuera; se practicará progresivamente, sin perder el contacto
del nervio, a fin de que la brecha muscular posea la anchura suficiente para poner
el tronco nervioso al descubierto. Por consiguiente, será fácil seguido hasta que
perfora el tabique intermuscular externo para penetrar en el compartimiento anterior
del brazo. En el curso de esta disección aislaremos las ramas que van al tejido
celular subcutáneo. El nervio radial-emite ramos motores a cada una de las partes
constitutivas del tríceps: porción larga, vasto externo y vasto interno. Estos ramos
vienen de la parte superior del tronco nervioso; seguimos cada uno de ellos hasta el
interior del músculo, haciendo, con el escalpelo o con las tijeras, pequeñas brechas
en los fascículos musculares. La preparación mostrará, de este modo, la
distribución completa del nervio radial.

b) Vasos humerales profundos. - Son, en cierto modo, los satélites del nervio radial.
La arteria colateral externa o humeral profunda) a la que seguiremos, viene de la
humeral, y por lo tanto de la región braquial anterior, y se une al nervio radial desde
su entrada en el compartimiento posterior. Pronto se divide en dos ramas: la
primera, arteria del tríceps, que se distribuye, acompañando más o menos de cerca
las ramificaciones correspondientes del nervio radial, en las tres porciones del
tríceps; la otra, que queda unida al tronco del nervio radial y que pasa con él al
canal de torsión del húmero, dando, en su trayecto, numerosos ramos al músculo
vasto externo. Todas estas arterias y ramas van acompañadas de venas satélites.

e) Nervio cubital. - En la parte superointerna de la región, encima de las inserciones


del vasto interno, se reclina algo hacia fuera la porción larga del tríceps y se busca
el nervio cubital. Es reconocible por su dirección vertical, pero desaparece pronto
bajo el vasto interno, y, si lo seguimos, comprobaremos que se halla entre este
músculo y el tabique muscular interno.

d) Arterias y venas colaterales internas superiores. - Al nervio cubital se une pronto


una pequeña arteria flanqueada de las venas: los vasos colaterales internos y
superior. La arteria viene de la humeral y atraviesa, por consiguiente, de delante
atrás, el tabique in termuscular interno. En su punto de emergencia se abre una
pequeña ventana oval en el tabique intermuscular por la que se descubre el
paquete vasculonervioso de la región anterior, constituido por los vasos humeral es
y el nervio mediano.

77
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

REGION ANTEBRAQUIAL ANTERIOR

La región antebraquial anterior comprende el conjunto de partes blandas que se


disponen en la cara anterior del antebrazo.

Límites. - Los límites de esta región son: por arriba, un plano transversal que pasa
aproximadamente a dos dedos por debajo de la epitróclea; por abajo, un plano
transversal que pasa por la parte más elevada de la cabeza del cúbito; a los lados,
dos líneas que parten del epicóndilo y de la epitróclea y terminan respectivamente
en las apófisis estiloides radial y cubital. Estas líneas corresponden, práctica-
mente, al borde externo y al borde interno del antebrazo. En profundidad, la región
se detiene en los dos huesos del antebrazo y en la membrana interósea.

2.° Posición del cadáver. - Decúbito supino, con el miembro superior en abducción
ligera y la mano mantenida en supinación forzada, clavándola, en caso necesario,
en una tablilla.

3.° Incisión de los tegumentos. - Se trazan (fig. 50) de arriba abajo dos incisiones
transversales (a a' y b b') que sigan los límites superior e inferior de la región
reunidas por una tercera incisión, vertical (e e'), trazada en el eje del miembro.

Se inciden la piel y el tejido celular subcutáneo en todo su espesor, hasta llegar a la


aponeurosis superficial. Se levantan entonces los dos colgajos cutáneos externo e
interno, que comprenderán los vasos y los nervios superficiales, que son aquí
particularmente numerosos e importantes.

Entre las venas, ampliamente anastomosadas entre sí, reconoceremos las tres
principales que suben paralelamente al eje del antebrazo la vena radial superticial,
por fuera; la vena cubital superficial, por dentro; la vena mediana, en el centro,

REGIONES DEL TORAX

Preparemos sucesivamente, entre las regiones torácicas:

78
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

1º Ante todo, dos regiones superficiales o parietales: la región esternal y la región


costal.

2º Luego, dos regiones profundas que corresponden a los mediastinos: la región


del mediastino anterior y la región del mediastino posterior.

1. REGION ESTERNAL

La región esternal está constituida por los diferentes planos que se superponen por
delante del esternón, y por detrás de él, hasta la pleura mediastínica.

1º Límites.- Sus límites son, aproximadamente, los del esternón. Es decir, que la
región esternal esta limitada: por arriba, por la horquilla esternal; por abajo, por la
base del apéndice xifoides; a los lados, por la articulación esternoclavicular y las
articulaciones condroesternales. En profundidad, la región esternal se detiene en el
plano de la pleura parietal.

2º Posición del cadáver.- Se coloca el cadáver en decúbito dorsal, la cabeza y el


cuello en hiperextensión, los brazos ligeramente separados del tronco para tender
los músculos pectorales.

79
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

3º Incisiones.- Se traza (fig. 28) una incisión vertical media (c c´) que corresponda
exactamente al eje del esternón, fácil de determinar, puesto que el hueso a este
nivel es completamente superficial. Esta incisión se extenderá en altura desde una
línea horizontal que pase a un centímetro por encima de las eminencias laterales
que forman las articulaciones esternoclaviculares, hasta otra línea horizontal que
pase por el centro del apéndice xifoides.

En los extremos de esta incisión vertical, se trazan dos incisiones transversales


(a a´ y b b´) que terminan algo más allá de la línea de las articulaciones
condroesternales. La incisión superior será ligeramente convexa y algo más larga
que la inferior para permitir descubrir enteramente la articulación esternoclavicular.

80
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

4º Disección.- Aunque impar y media, la región esternal puede, a causa de la


disposición simétrica del esqueleto y de las partes blandas, dividirse en dos
mitades, derecha e izquierda. Esta división nos permite estudiar en un solo sujeto
todos los planos constitutivos de la región.

A. MITAD DERECHA.- Preparemos en este lado los planos superficiales, que son:

1º la piel, el tejido celular subcutáneo. 2º la aponeurosis superficial. 3º la capa


muscular.

a) Piel.- En esta disección del colgajo cutáneo, levantamos al mismo tiempo la piel y
el tejido celular subcutáneo, teniendo cuidado de rasar la aponeurosis superficial, a
nivel de la cual cortamos las ramas vasculares y nerviosas que, saliendo a través
de la aponeurosis por el ángulo anterior de los espacios intercostales, van a
perderse en el tejido celular.

b) Aponeurosis superficial.- La aponeurosis del pectoral mayor se encuentra así al


descubierto. La disecamos partiendo de la línea media. Es muy delgada, sobre todo
hacia la parte media e inferior de la región, a cuyo nivel el plano de desdoblamiento
es bastante difícil de encontrar a causa de las fibras de refuerzo que recibe y que
contribuyen a la formación de la línea blanca abdominal.

81
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

c) Capa muscular.- Aparece entonces ante nuestros ojos el músculo pectoral mayor
con sus fascículos esternales, que es fácil separar unos de otros y que hacia la
parte media se insertan en la línea media.

En la parte superior de la región esternal, disecamos el tendón esternal de


inserción del músculo esternocleidomastoideo, cinta estrecha, nacarada, que se
implanta en el mango del esternón.

En la parte inferior, por último, reconocemos, por su dirección vertical, los primeros
fascículos del músculo recto mayor del abdomen, que se insertan en el paciente
xifoides.

Terminado el lado derecho, pasamos a la mitad izquierda del cadáver, que debe
servirnos para la preparación de los planos profundos.

B. MITAD IZQUIERDA.-Los planos profundos de la región son el propio esternón y


el plano retroesternal. Preparemos, para terminar, una articulación condroesternal y
la articulación esternoclavicular. Levantamos primeramente, como en el lado
derecho, la piel y el tejido celular subcutáneo.

a) Esternón y plano retroesternal.- Con el bisturí, incidiendo a fondo hasta el


esqueleto, se limita un colgajo que comprenda en anchura la mitad del esternón y el
origen (un centímetro) de los cartílagos costales, y que extienda en altura desde la
tercera costilla a la sexta inclusive. Legramos el hueso y los cartílagos para levantar
todas las partes blandas, incluso el periostio, y las reclinamos hacia fuera.

Por encima y debajo de este colgajo se levantan simplemente las partes blandas
musculares para poner al descubierto: arriba, el mango del esternón y las dos
primeras articulaciones condrocostales; abajo, la base del apéndice xifoides.
Aparece entonces el plano esquelético por completo, del que distinguiremos
claramente el contorno y el extremo anterior de los espacios intercostales.

Tomando ahora el escoplo y el martillo, cortamos el postigo óseo, del que


precedentemente hemos fijado los límites y que se encuentra desprovisto de su
periostio. La movilización de este colgajo nos permitirá descubrir el plano
retroesternal.

82
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

Este tiempo operatorio es algo delicado. El esternón es muy grueso, y si no se está


prevenido, sólo se secciona la tabla externa y la parte esponjosa del hueso, sin
interesar la tabla interna. Es conveniente asegurarnos, pues, de que el escoplo
interesa las tres capas constitutivas del esternón.

Pero aún queda otro escollo: la herida y la abertura de la cavidad pleural, falta fácil
de cometer a causa de la adherencia relativa de la pleura parietal a la pared.

He aquí cómo puede evitarse. Comenzamos la sección del postigo esternal por el
ángulo superointerno y continuamos por la sección de la posición vertical media.
Después de abrir una brecha suficiente, se ensaya con una palanca cualquiera el
levantamiento del postigo, y cuando se obtenga una pequeña movilización, se
introduce un instrumento romo, las tijera curvas cerradas o una sonda acanalada,
por ejemplo, para desprender la pleura parietal de su cara profunda. Prosiguiendo
este desprendimiento a medida que avanzamos la movilización del postigo,
terminamos seccionando los cartílagos costales con las tijeras o con el bisturí.

Terminada la liberación del postigo, se descubre el plano retroesternal.

Entre el esternón y el tejido celuloadiposo del espacio subpleural, se perciben, más


o menos bien desarrollados, según los sujetos, pequeños fascículos
musculotendinosos, dirigidos oblicuamente de abajo arriba y de dentro afuera: las
digitaciones del músculo triangular del esternón, del que hemos desprendido, al
movilizar el postigo, las inserciones que se efectúan en la cara posterior y en el
borde del hueso. No podemos ver las inserciones costales y pleurales de la región
próxima, la región costal. Sin embargo, algunos fascículos quedan intactos; tienen
una dirección casi transversal: estos fascículos son los que se insertan en el
apéndice xifoides.

Al penetrar algo bajo las costillas seccionada y al invadir, por consiguiente, la región
costal, pueden percibirse, y atraer hacia el campo de disección, los vasos
mamarios internos (la arteria rodeada de sus dos venas), que caminan
paralelamente al borde esternal, entre el plano óseo y las digitaciones del triangular
del esternón.

b) Articulaciones condroesternales.- Son todas semejantes, y y para tener de ellas


una noción exacta, nos basta estudiar una. Preparamos para ello la segunda
articulación condroesternal, descubierta ya por el hecho del levantamiento del

83
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

pectoral mayor. Disecamos el ligamento anterior, fácilmente reconocible por sus


fascículos extendidos en abanico por delante de la línea articular.

c) Articulación esternoclavicular.- Desprendamos esta articulación de los músculos


que la cubren y ocultan. Primero se encuentra el músculo pectoral mayor, del que
cortamos las inserciones claviculares a ras de la clavícula y en una extensión de 4
centímetros por lo menos, y reclinamos el colgajo con los fascículos esternales ya
levantados. Por otra parte, desinsertamos el manojo esternal del
esternocleidomastoideo, que reclinaremos hacia arriba.

Podemos entonces disecar y mostrar:

1º La cápsula, con sus fascículos de refuerzo anteriores, dispuestos en forma de


abanico y constituyendo el ligamento anterior; a través de las mallas de esta
cápsula salen pequeños lobulillos de grasa pegados a la sinovial.

2º El ligamento interclavicular, que se extiende, por encima del manubrio, de una a


otra clavícula y que está unido al esternón por cintas fibrosas, entre las cuales se
hernian pelotones de grasa del espacio supraesternal.

3º El ligamento costoclavicular, situado por fuera de la cápsula y constituido por


fascículos fibrosos cortos y gruesos que unen la clavícula a la primera costilla. Entre
él y el ligamento anterior se encuentra un pequeño espacio triangular a través del
cual aparece la sinovial.

5º Montaje de la preparación.-

2. REGION COSTAL

La región costal o torácica lateral es una vasta zona de la pared torácica


comprendida entre el esternón y la columna vertebral.

1º Límites.- En parte oculta por el omóplato y todas las partes blandas que rodean
este hueso, la región costal tiene como límites superficiales: por delante, el borde
del esternón y la línea de las articulaciones condroesternales; por detrás, los
canales vertebrales; por arriba, el borde interno de la primera costilla; por abajo,
una línea fuertemente curva que sigue el borde de los cartílagos costales, luego

84
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

cruza el extremo libre de la undécima y duodécima costillas y sigue, por último, el


borde inferior de esta última hasta el canal vertebral. En profundidad, la región
costal se detiene en el plano de la pleura parietal. Es decir, que debemos disecar
todos los músculos que forman la pared torácica y la parrillla osteomuscular
constituida por las costillas y los espacios intercostales.

2º Posición del cadáver.- Se coloca el cadáver en decúbito lateral, con el brazo


levantado hacia delante, formando un ángulo superior a los 90º y el antebrazo
flexionado sobre el brazo en ángulo recto. De este modo el omóplato se elevará
sobre el, plano de la jaula torácica; acentuad aún más esta separación en el curso
de la disección, podremos preparar con bastante facilidad los músculos
subyacentes al omóplato, que se insertan en su cara profunda.

3º Disección.- La región costal está constituida por un conjunto bastante complejo


de músculos, casi todos anchos, delgados y extendidos delante de la pared
torácica. Para realizar una buena preparación y mostrar todo lo que tiene de
interesante, es necesario proceder con mucho método y disecar los músculos unos
después de otros, con sus vasos y sus nervios. Para evidenciarlo todo, utilizando
sólo un lado del tórax, deben emplearse algunos artificios de preparación, que se
indicaran en el curso de la descripción.

4º Incisión de la piel.- Se traza primeramente (fig 29) una incisión vertical( c c´)
que parta, por arriba, del borde posterior de la axila, reconocible por la eminencia
del dorsal mayor, y termine en el reborde costal, por abajo, siguiendo
aproximadamente la línea axilar posterior.

Se añaden a esta incisión otras dos transversales, una superior y otra inferior.

La incisión transversal superior ( a a´) sigue el borde inferior de la clavícula desde la


articulación esternoclavicular hasta el centro de la clavícula; luego se dirige hacia el
borde posterior de la axila, cruza transversalmente el omóplato para llegar
finalmente al canal vertebral, a tres dedos de la línea de las apófisis espinosas de
las vértebras dorsales.

La incisión transversal inferior ( b b´)debe seguir los límites inferiores de la región


costal: partiendo algo por fuera del apéndice xifoides, dibujará la convexidad del
reborde costal; luego, abandonándolo a nivel de la décima costilla, se dirigirá hacia
el extremo de las dos costillas flotantes, que se perciben con mucha facilidad en los

85
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

tegumentos, para seguir por último el borde inferior de la duodécima costilla y


detenerse a unos cuatro dedos de la línea de las crestas espinosas.

5º Piel y tejido celular subcutáneo.- Se levantan al mismo tiempo la piel y el tejido


celular subcutáneo, rasando de cerca la aponeurosis superficial. Se cortan las
numerosas ramificaciones vasculares y nerviosas que proceden de los vasos
nerviosos intercostales y que se extienden por el tejido celular subcutáneo después
de haber perforado la aponeorosis. Estas ramificaciones son principalmente visibles
en la línea axilar anterior.

6º Aponeurosis superficial.- Hecho esto, aparece el plano aponeurótico


superficial. Es una hoja celulosa, muy delgada en toda la parte media de la región,
reforzada solamente en su parte inferoanterior y en su parte posteroinferior.

Se trazan en esta aponeurosis dos colgajos absolutamente idénticos a los colgajos


cutáneos y luego se procede a disecar cada uno de ellos partiendo de la incisión
media vertical.

El colgajo anterior se diseca bastante fácilmente al principio; pero pronto se llega,


por arriba, al músculo pectoral mayor, alrededor del cual se desdobla la
aponeurosis para formarle una vaina, por lo que se hace sumamente tenue y de
levantamiento difícil; por debajo y delante, la aponeurosis cubre el recto mayor del
abdomen; además está reforzada por fibras de la aponeurosis del oblicuo mayor; la
disección es, por consiguiente, particularmente difícil. Es preferible que, desde el
primer momento, se incida al mismo tiempo esta aponeurosis del oblicuo mayor que
forma la vaina del músculo recto y que se limite un colgajo que se levantará al
mismo tiempo que la delgada aponeurosis superficial (véase lámina 33).

El colgajo posterior de la aponeurosis superficial, después de haber cubierto el


serrato mayor, del que lo separemos sin gran dificultad, llega la músculo dorsal
ancho y lo envaina; las fibras de este músculo son bastante adherentes a la
aponeurosis, que es muy delgada en su parte superior, pero mucho más gruesa en
su parte inferior. La disección es aquí también delicada; después de haber
franqueado el dorsal ancho se llega al trapecio, igualmente comprendido en la
aponeurosis superficial desdoblada. Como este músculo sólo corresponde en
pequeña parte a la región costal, se reclina simplemente hacia atrás. Al mismo
tiempo que el postigo aponeurótico; de este modo quedará incluido en su vaina
fibrosa.

86
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

7º Músculos.- Disecaremos, uno por uno, los diferentes músculos extendidos


delante de la parrilla costal. Podemos dividirlos en tres grupos: 1º un grupo anterior;
2º un grupo medio; 3º un grupo posterior.

A. GRUPO ANTERIOR.- El grupo anterior comprende el pectoral mayor, el pectoral


menor, el subclavio y la parte más superior del recto mayor del abdomen.

a) Músculo pectoral mayor.- Este músculo está ya en gran parte constituido cuando
penetra en la región costal, puesto que se inserta por digitaciones en el esternón y
las articulaciones condroesternales, es decir, en la región esternal. En la parte
superior, sin embargo, tendremos que buscar sus inserciones claviculares.
Disecamos la extensa capa muscular que forma y le seguimos hasta la parte
superior de la región; le abandonamos en el momento en que penetra en la axila,
de la que constituye la pared anterior.

Al reclinar ligeramente el pectoral mayor, se percibe su cara profunda tapizada de


una hoja aponeurótica más o menos cargada de grasa. En medio de este tejido
celuloso se observan los vasos y nervios del músculo. Los vasos proceden de las
arterias y venas acromiotorácicas y llegan a la región por el vértice de la axila, bajo
la apófisis coracoides; van acompañadas del nervio propio del pectoral mayor, rama
colateral del plexo braquial.

Independientemente de este nervio, el músculo pectoral mayor recibe otro tanto,


procedente del nervio del pectoral menor: lo reconocemos por el hecho de que
perfora el pectoral menor inmediatamente subyacente y está tendido como una
pequeña cuerda de la cara superficial de este último músculo a la cara profunda del
pectoral mayor.

b) Músculos pectoral menor y subclavio.- Desde que reclinamos el pectoral mayor


descubrimos un nuevo plano muscular constituido por dos músculos reunidos uno a
otro por una formación aponeurótica: el subclavio y el pectoral menor.

Oculto en gran parte debajo de la clavícula, el subclavio no es más que este


delgado huso muscular que se extiende desde el primer cartílago costal a la cara
inferior de la clavícula excavada en canal.

El pectoral menor se inserta por tres digitaciones en la cara externa de la 3ª, 4ª, y 5ª
costillas, y se dirige en forma de cinta aplanada hacia la apófisis coracoides, en
donde termina.

87
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

Estos dos músculos están envainados en una aponeurosis muy delgada, celulosa,
en su parte anterior e interna, pero que se engruesa a medida que se aproxima a su
inserción externa. Aquí toma el nombre de aponeurosis clavicoracoaxilar y va a
formar, entre el pectoral menor y la base de la axila, el ligamento suspensorio de
Gerdy. Preparemos esta aponeurosis dejando al músculo pectoral menor incluido
en su vaina, en su posición externa; podremos así evidenciar el origen del
ligamento suspensorio, que no tenemos más que seguir hasta la región axilar.

c) Músculo recto mayor del abdomen.- A través de la brecha abierta


precedentemente en la aponeurosis del oblicuo mayor, soldada a la aponeurosis
superficial, se percibe un músculo de fibras dirigidas verticalmente de arriba abajo:
el músculo recto mayor del abdomen, que se inserta por digitaciones en los
cartílagos costales de la 5ª, 6ª y 7ª costillas. No hace más que pasare por la región
costal para, desde ella, descender a la región esternopúbica, a la que corresponde
por completo. En ciertos sujetos puede aparecer una intersección aponeurótica que
asiente en la cara anterior del músculo.

B. GRUPO MEDIO.- Dos músculos anchos, el serrato mayor y el oblicuo mayor,


constituyen este grupo medio:

a) Músculo serrato mayor.- El serrato mayor forma parte en totalidad de la región


costal. Por el levantamiento de la aponeurosis superficial describimos sus diferentes
fascículos extendidos por delante del tórax. Todos estos fascículos emanados de la
cara externa de las 8 ó 10 primeras costillas, convergen hacia el borde espinal del
omóplato, sobre el que se insertan, pasando bajo el cuerpo del hueso. Es
necesario, pues, para ver bien estas inserciones, que levantemos intensamente el
omóplato.

A la superficie del serrato mayor descienden vasos y nervios que salen del hueco
de la axila. Los vasos son las arterias y venas torácicas inferiores o mamarias
externas; proceden directamente de los vasos axilares, a veces de los vasos
escapulares inferiores.

88
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

El nervio del serrato mayor los acompaña. Rama colateral bastante voluminosa del
plexo braquial, se divide en una seri de ramos destinados a cada uno de los
fascículos constitutivos del serrato mayor.

Entre cada fascículo, cerca de la inserción costal, en una dirección que corresponde
a la línea axilar anterior, vemos salir de la profundidad ramas vasculares y
nerviosas que proceden de los espacios intercostales: son ramas colaterales de los
vasos y nervios intercostales y van al tejido celular subcutáneo y a la piel.

A nivel del segundo y tercer espacios, disecamos los dos filetes nerviosos que
emanan de la profundidad y se dirigen subiendo hacia el hueco de la axila: las
anastomosis que reúnen los nervios intercostales del plexo braquial.

b) Músculo oblicuo mayor.- Las digitaciones del oblicuo mayor se imbrican con las
del serrrato mayor por arriba, con las del serrrato menor posterior e inferior y del
dorsal ancho por abajo. Se implantan en las 8 ó 9 últimas costillas y sus fibras
tienen una dirección oblicua hacia abajo y adentro. Se expansionan sobre una
lámina tendinosa que forma a este nivel la hoja anterior de la vaina del músculo
recto y que está constituida por fibras entrecruzadas irregularmente. La dirección de
este músculo no presenta particularidad alguna digna de ser mencionada.

C. GRUPO POSTERIOR.- El grupo posterior comprende el dorsal ancho, el


trapecio, el romboides y los sserratos menores posteriores.

a) Músculo dorsal ancho.- Este músculo, inmenso, ancho, aplanado, cubre la casi
totalidad de la parte posterior de la región costal.

Aparece por completo desde que se ha levantado la aponeurosis superficial.


Disecaremos cuidadosamente los dos fascículos que se insertan en la cara externa
de la 11ª y 12ª costillas, únicas inserciones que corresponden propiamente a la
región costal.

Para descubrir la cara profunda de este músculo, así como los planos subyacentes,
es necesario dividirlo en dos partes algo por debajo de la punta del omóplato. Se
verifica esta sección y se reclinan los dos colgajos, el superior sobre el omóplato.
Con ello vemos su cara profunda, tapizada de una delgada hoja aponeurótica, que

89
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

se continúa sin interrupción con la aponeurosis del redondo mayor. Este último
músculo corresponde a la región escapular, pero está pegado al borde posterior
del dorsal ancho y acaba por fusionarse enteramente con él en la axila. En esta
misma cara profunda se hallan las ramas de la arteria escapular inferior o torácica
larga y el nervio del dorsal ancho, rama del plexo braquial, que se divide en cierto
número de ramos.

El colgajo inferior del dorsal ancho será simplemente erinado hacia abajo: no
presenta por sí mismo ningún interés particular.

b) Trapecio.- Detrás del dorsal ancho, incluido en la aponeurosis superficial y


reclinado con ella, hemos visto ya el músculo trapecio, que no hace más que
aparecer en la región costal. Ocupa en ella un espacio triangular limitado por el
canal vertebral, por la espina del omóplato y por el borde del mismo músculo.

c) Romboides.- La reclinación hacia atrás del trapecio nos permite descubrir el


romboides, tendido entre las apófisis espinosas de la columna vertebral y el borde
espinal del omóplato; no pertenece, pues, a la región costal sino por su parte
anterior.

d) Músculos serratos menores posteriores.- Estos músculos son en número de dos:


superior e inferior.

El superior es muy difícil de ver por estar profundamente situado debajo del
romboides; por lo demás, forma parte, en su casi totalidad, de la región de la nuca.

El inferior, en cambio, puede evidenciarse fácilmente, y percibimos con claridad sus


fascículos costales bajo el dorsal ancho reclinado.

Se inserta por tres o cuatro digitaciones en el borde inferior y en la cara externa de


las últimas costillas; la dirección oblicua de sus fibras hacia abajo y atrás basta para
caracterizarlo. Va a terminar en la región lumbar, en las apófisis transversas de las
primeras vértebras lumbares; no debemos seguirlo hasta allí.

8º Plano esquelético.- Falta ahora estudiar el plano esquelético, constituido por las
costillas y los espacios intercostales. Normalmente, no puede verse la parrilla costal
en esta región sino en un pequeño espacio cuadrilátero comprendido entre el
romboides, el trapecio y el dorsal ancho. Pero, gracias a la sección del músculo
dorsal ancho, se encuentra descubierta en mayor extensión y pueden evidenciarse

90
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

todas las diferentes particularidades anatómicas del espacio intercostal. Este ofrece
a la consideración: 1º el músculo intercostal externo; 2º el músculo intercostal
interno; 3º los vasos y nervios intercostales; 4º los mamarios internos.

a) Músculo intercostal externo.- Para preparar este músculo basta disecar la hoja
celulosa transparente que lo cubre. Notaremos la dirección oblicua hacia abajo y
delante de sus fibras, que van del borde inferior de una costilla al borde superior de
la costilla subyacente.

b) Músculo intercostal interno, vasos y nervios intercostales.- Dedicaremos un


espacio intercostal, el 8º, por ejemplo, a esta parte de la preparación. Hendimos el
músculo intercostal externo en medio del espacio intercostal, paralelamente a la
costilla, con sumo cuidado, pues no suele tener más de 1 ó 2 milímetros de
espesor. Con ello llegamos al plano del intercostal interno, separado del precedente
por tejido celular muy laxo; reconocemos este músculo por la dirección de sus
fibras, inversa de la del músculo intercostal externo, es decir, oblicua hacia abajo y
atrás.

En vano buscaremos por delante de este plano los vasos y nervios intercostales,
aunque lleguémosla borde inferior de la costilla subyacente. Para descubrirlos, es
necesario incidir delicadamente el fascículo superficial del músculo intercostal
interno, el que se inserta en el labio anterior del canal subcostal. En efecto, entre
este fascículo superficial y el fascículo profundo, que se inserta en el labio posterior
del canal subcostal, se hallan los vasos y los nervios intercostales dispuestos del
modo siguiente: vena, arteria y nervio. Están, en el centro del espacio donde lo
disecamos, por consiguiente, casi completamente ocultos por el labio anterior del
canal. Será, pues, necesario que los busquemos y los atraigamos hacia el espacio
intercostal, sosteniéndolos artificialmente con alfileres.

c) Arteria mamaria interna.- La mamaria interna se halla la parte más anterior de la


región, entre las costillas, por una parte, y la pleura y el triángulo del esternón, del
que dista un centímetro y medio en los primeros espacios, 2 centímetros en los
espacios quinto y sexto.

Para mostrarla en la preparación, procederemos de la siguiente forma: se


desprenden en el 2º y 3er espacios intercostales las fibras del músculo pectoral
mayor para descubrir el músculo intercostal externo. Se abre una brecha
rectangular en estos dos espacios, seccionando con el escalpelo las fibras

91
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

intercostales sin lastimar las ramas de los vasos mamarios (véase lámina 33).
Cuando la brecha está abierta y no quedan ya músculos, se percibe la arteria
mamaria interna rodeada de dos venas, vasos todos de calibre importante.

Vemos igualmente sus ramas, que son de dos clases: unas se dirigen hacia dentro,
atravesando los músculos intercostales (estos pequeños vasos se dirigen hacia la
región esternal y van al tejido celular subcutáneo preesternal); las otras se dirigen
hacia fuera; penetran entre los dos músculos intercostales y van a anastomosarse
con las ramas terminales de la arteria intercostal.

Por último, ocurre frecuentemente que encontraremos, a una y otra parte de los
vasos mamarios, pequeños ganglios linfáticos, a menudo reconocibles por su
coloración negruzca: los ganglios mamarios internos.

3. REGION DEL MEDIASTINO ANTERIOR

El mediastino anterior es la porción de la cavidad o espacio comprendido entre las


dos regiones pleuropulmonares derecha e izquierda, situada por delante de un
plano frontal que pasa por la traquea y los bronquios.

1º Límites.- Sus límites son: por delante, la pared torácica anterior y, más
particularmente, la región esternal; por detrás, el plano frontal que pasa por los
bronquios; a derecha e izquierda, las caras hiliares de los pulmones derecho e
izquierdo, cubiertas de la pleura mediastínica; por arriba, un plano transversal que
pasa por la horquilla esternal; por último, por abajo, el diafragma.

2º Posición del cadáver.- Extendido sobre el dorso.

3º Incisión de los tegumentos, abertura de la cavidad mediastínica.- Esta


operación comprende varios tiempos:

a) Trazado de las incisiones cutáneas.- Se trazan (fig. 30) una incisión vertical
media (c c´), desde el borde superior del mango del esternón a la base del
apéndice xifoides, y dos incisiones transversales; la primera (a a´), arriba, tiene su
origen algo más acá de la articulación esternoclavicular derecha y termina algo más
allá de la articulación esternoclavicular izquierda; la segunda, inferior (b b´),

92
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

ligeramente convexa, comienza a nivel de la séptima costilla derecha, un dedo por


fuera del borde derecho del esternón, y termina a la izquierda, a cuatro dedos,
aproximadamente, del borde izquierdo de este hueso.

Limítanse así dos grandes colgajos cutáneos que reclinamos a una y otra parte
para descubrir el peto esternal y el origen de las costillas. Estos dos colgajos no son
absolutamente simétricos; el de la izquierda es más extenso. Esto obedece a que el
mediastino anterior excede notablemente a la izquierda de la línea media.

b) Levantamiento de un postigo esternocostal.- Para poner al descubierto el espacio


mediastino, es necesario antes levantar en un solo bloque el postigo
osteomuscular que lo cubre. Para ello se seccionan los músculos superficiales a ras
de la charnela de levantamiento de los colgajos cutáneos; se descubren las
articulaciones esternoclaviculares y se desarticulan las dos clavículas, procurando
no lesionar troncos nerviosos braquiocefálicos que se hallan inmediatamente
detrás. Descubrimos entonces cada una de las costillas a derecha e izquierda,
desde la primera hasta la séptima, en una superficie de 2 a 3 centímetros de
anchura. A continuación, incidimos a este nivel el periostio, y luego, por medio de la
legra, quitamos el periostio de la cara externa de los dos bordes y de la cara
posterior del hueso. Por último seccionamos la costilla sin periostio con un
costótomo o una cizalla de Listón.

Se cortan después los músculos intercostales, que quedan intactos entre las
secciones óseas, procurando no franquear el espacio celuloso que separa estos
músculos de la pleura parietal, a fin de no abrir la cavidad pleural. Por abajo,
seccionamos los músculos superficiales – éstos comprenden el origen de los
músculos rectos y oblicuos del abdomen -, hasta hallarnos en presencia de los
fascículos de inserción del diafragma, y cortamos con las cizallas el apéndice
xifoides en su base para desprender enteramente el esqueleto torácico.

Para poder levantar el postigo, sólo falta disociar el tejido celular laxo que se
encuentra en su cara profunda y cortar las lengüetas tendinosas del triangular del
esternón, que se adhieren, por una y otra parte, a la pleura parietal. En la parte
superior de la región encontramos el ligamento suspensorio del pericardio, que une
la horquilla esternal al vértice del saco pericardiaco; lo respetamos, pues no impide
el levantamiento del postigo.

93
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

c) Reclinación de los pulmones.- Levantado y reclinado hacia la cara anterior del


cuello el postigo intercostal, aparecen los pulmones revestidos de su pleura. Las
dos pleuras parecen unidas entre sí en la línea media; se separan, sin embargo,
ligeramente una de otra en la parte superior y en la parte inferior de la región. Aquí,
en particular, existe un área triangular, más o menos llena de tejido celuloadiposo,
en la cual podemos distinguir la superficie lisa y grisácea del saco pericardíaco.
Este tejido celuloadiposo se insinúa entre el pericardio y la pleura; es fácil, al
disociarlo con la sonda acanalada o, más simplemente, con el índice encorvado en
gancho, reclinar progresivamente la pleura y los pulmones (seccionaremos con el
escalpelo las bridas más resistentes que encontremos). Separamos fuertemente los
dos pulmones y su pleura a derecha e izquierda, hasta que aparezca la región de
los hilios y distingamos claramente los vasos y los bronquios que forman los
pedículos pulmonares. A lo largo de la cara mediastínica del pulmón derecho, por
delante del hilio, aparece el nervio frénico derecho; a la izquierda se decubre
igualmente el nervio frénico izquierdo, que rodea la masa cardiopericardiaca.

4º Contenido del mediastino.- El contenido del mediastino se dispone en dos


planos: inferior y superior.

A. PLANO INFERIOR.- Contiene: 1º el pericardio; 2º el corazón; 3º los grandes


vasos que de él parten, constituyendo el pedículo cardiaco.

a) Pericardio.- El saco pericardiaco, intacto ante nuestros ojos, parece ocupar por sí
solo la totalidad del espacio mediastínico.

Examinaremos primeramente su forma. Unidos al esternón a nivel de su vértice


por el ligamento suspensorio, que ya conocemos; adherente, por otra parte, al
diafragma, de un modo íntimo, por su base, presenta una forma cónica algo
irregular. Incidido según su eje mayor, es decir, desde la línea media hasta la punta
del corazón, se reclinan a cada lado los labios de la incisión en forma de colgajos
que tendemos con erinas al objeto de poder estudiar su contenido.

Antes, sin embargo, es conveniente observar la topografía y las relaciones de la


cavidad pericardiaca. Por delante, esta cavidad (cavidad pericardiaca anterior) es
uniforme, sin ningún divertículo, y se extiende por delante del corazón y de gran
parte de los gruesos vasos de la base, es decir, de las venas cavas superior e
inferior, de la aorta y del tronco de la arteria pulmonar. Esta porción de la cavidad

94
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

pericardiaca se halla en relación con los pulmones derecho e izquierdo; luego, más
allá, con la pared torácica anterior. No tiene contacto directo con esta pared torácica
sino por la pequeña superficie triangular de que hemos hablado y por la que hemos
comenzado el desprendimiento del pericardio.

Levantado el corazón prendido por la punta y haciéndolo girar alrededor de la


charnela que forman los vasos de su pedículo, descubrimos la cavidad pericardiaca
posterior, en relación con la cara posterior del corazón, a la que separa de los
órganos del mediastino posterior, en particular del esófago. Esta cavidad posterior
comunica ampliamente con la cavidad anterior alrededor de la punta del corazón;
termina, arriba, por el fondo de saco o ciego de Haller, situado entre la vena cava
inferior y las venas pulmonares derechas, por una parte, y las venas pulmonares
izquierdas, por otra parte.

Nos falta, para terminar, reconocer el canal o seno transverso de Henle, que se
extiende entre las aurículas, por una parte, y la arteria pulmonar y la cara posterior
de la aorta descendente, por otra. Reclinada la aorta a la izquierda, ponemos al
descubierto el divertículo pericardiaco sobre el que descansan los tres cuartos de
la cara posterior de este vaso; en su parte inferior descubrimos el orificio, oval o
deprimido en ombligo, del seno transverso. Introduciendo el dedo o una sonda
acanalada en este orificio, pasamos por detrás del pedículo aorticopulmonar y
desembocamos detrás de la aurícula. Existe aquí una verdadera cavidad
pericardiaca posterosuperior, descrita por DELORME, que está en relación con el
origen de los bronquios derecho e izquierdo y la aorta descendente.

b) Corazón.- El corazón sólo ocupa la parte inferior de la cavidad pericardiaca. Su


cara anterior, la que corresponde a la pared torácica, esta representada por el
ventrículo derecho y una pequeña porción del ventrículo izquierdo. Distinguimos
fácilmente la separación de los dos ventrículos por la presencia de los vasos
coronarios izquierdos, que recorren el surco interventricular anterior.

El apéndice auricular derecho, por entero, y la cola del apéndice auricular izquierdo
ocultan casi completamente las aurículas. Para poder ver estas últimas es preciso
reclinar hacia atrás los apéndices auriculares. Esta maniobra descubrirá, además,
el surco auriculoventricular anterior, en el cual pasan los vasos coronarios
derechos.

95
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

Levantaremos, por último, el corazón, como anteriormente, para explorar su cara


posterior, reconociendo los dos ventrículos separados por el surco interventricular
posterior, seguido por las ramificaciones de los vasos coronarios; la aurícula
derecha y la aurícula izquierda que están aisladas de los ventrículos por el surco
auriculoventricular posterior, y el apéndice auricular izquierdo.

c) Pedículo cardiaco.- La parte de la cavidad pericardiaca que no está ocupada por


el corazón lo está por los grandes vasos que forman el pedículo de este órgano.
Estos se hallan envainados por la serosa en una extensión variable. Lo
reconoceremos sucesivamente.

En la línea media, exactamente en el eje del esternón, encontramos en primer lugar


la aorta ascendente, que sale del ventrículo izquierdo y que es casi enteramente
intrapericardiaca, en una longitud de 6 a 7 centímetros exactamente.

Algo por delante y a la izquierda de la aorta, entre los dos apéndices auriculares
cuyas puntas terminales la cubren parcialmente, encontramos la arteria pulmonar,
que nace del ventrículo derecho y se dirige hacia arriba y a la izquierda para
ramificarse luego en dos ramas: la arteria pulmonar izquierda, que abandona casi
inmediatamente la cavidad pericardiaca, y la arteria pulmonar derecha, que pasa
por detrás de la aorta y de la vena cava superior. Hay que reclinar esta vena para
ver la arteria en el momento en que sale del pericardio.

Al seguir el borde derecho de la cavidad pericardiaca, reconoceremos las venas


cavas, superior e inferior. Parece que sólo forman un tronco único y vienen a
desembocar en la aurícula derecha. La confluencia de los dos vasos y su
desembocadura en el corazón se encuentra algo por debajo del apéndice auricular.

Reclinando la vena cava superior, como precedentemente hicimos para buscar la


arteria pulmonar derecha, desprendemos las dos venas pulmonares derechas,
cuyos troncos, muy cortos, van a la aurícula izquierda. Igualmente, reclinando el
tronco de la arteria pulmonar, percibimos a la izquierda la porción terminal de las
venas pulmonares izquierdas. Vimos ya cómo pueden descubrirse estas venas
haciendo bascular el corazón, con lo que se examina mejor su desembocadura en
la aurícula izquierda. Al terminar, buscaremos los múltiples pequeños divertículos o
fondos de saco que la serosa pericardiaca forma al reflejarse entre los vasos de la
base del corazón.

96
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

B. PLANO SUPERIOR.- El plano superior contiene: 1º el timo; 2º los grandes vasos


que parten del corazón o que van a él.

a) Timo.- La disección de esta glándula es difícil en el adulto, ya que el timo se


atrofia desde la edad de dos años, y en el adulto no está representado más que por
una masa adiposa de la forma variable, generalmente alargada. Lo encontraremos
inmediatamente detrás del ligamento suspensorio del pericardio, aplicado junto a
los grandes vasos; así pues, en la parte más superior del espacio mediastínico (1).

b) Grandes vasos.- Estos vasos son la continuación o, por el contrario, representa


el origen de los que hemos ya disecado en el interior del pericardio. Forman tres
grupos distintos: dos laterales y uno medio.

 Los grupos laterales comprenden los vasos pulmonares de los hilios de los
pulmones. Corresponden propiamente a las regiones pleuropulmonares.
Recordemos que los órganos constitutivos del pedículo pulmonar se
superponen de delante atrás del modo siguiente: venas pulmonares, arterias
pulmonares y, en la parte más posterior, los bronquios.
 El grupo medio contiene: la aorta, la vena cava superior y los dos troncos
braquiocefálicos venosos, el tronco braquiocefálico arterial y la carótida
primitiva izquierda. La vena cava superior se encuentra a la derecha y sigue
durante cierto tiempo el saco pericardiaco antes de penetrar en él. Recibe
por detrás la vena ácigos mayor, que viene del mediastino posterior y cuyo
cayado podemos ver cuando franquea el bronquio derecho. Los dos troncos
braquiocefálicos venosos, que, al reunirse, forman la vena cava superior,
ocupan casi todo el espacio situado detrás de la horquilla esternal, entre las
dos articulaciones esternoclaviculares. Reconoceremos el tronco derecho
por su dirección casi vertical, mientras que el izquierdo se orienta casi
transversalmente. La porción extrapericardiaca de la aorta es muy corta.
Este gran vaso, casi al salir del pericardio, se incurva y se dirige hacia atrás,
hacia el mediastino posterior, formando el cayado aórtico que cabalga sobre
el bronquio izquierdo y que a su vez está abrazado por el asa del nervio
recurrente izquierdo. No será fácil encontrar este nervio gracias a la relación
que tiene con el cayado de la aorta; siguiéndole, nos llevará al
neumogástrico izquierdo. El tronco arterial braquiocefálico nace en el punto
en que la porción ascendente del cayado aórtico se continúa con la porción
horizontal. Está oculto a este nivel por la confluencia venosa retroesternal,

97
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

por lo que será necesario reclinar ésta; reaparece más arriba, siguiendo el
borde superior del tronco braquiocefálico venoso derecho, y se pone así en
relación con la articulación esternoclavicular derecha. Si, por último,
reclinamos el tronco venoso braquiocefálico izquierdo, percibiremos el
origen de la arteria carótida primitiva izquierda, que pasa a la cara posterior
de la articulación esternoclavicular del mismo lado.
5º Montaje de la preparación.-

98
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

4. REGIÓN DEL MEDIASTINO POSTERIOR

El mediastino posterior es la parte de la cavidad mediastínica situada detrás del


plano frontal que pasa por la tráquea y los bronquios.

1º Límites.- Sus límites son: por arriba, un plano que pasa por la primera vértebra
dorsal y la horquilla esternal; por abajo, el diafragma; por delante, el pericardio y los
grandes vasos que forman el pedículo del corazón; por detrás, la columna vertebral;
a derecha e izquierda, los dos pulmones cubiertos de la pleura mediastínica.

2º Posición del cadáver.- Se coloca el cadáver en cecubito prono y se colocan


uno o dos soportes debajo de la pared torácica anterior a fin de tender la columna
vertebral y hacere sobresalir las apófisis espinosas de las vértebras dorsales.

3º Descubrimiento de la región, ablación de la columna vertebral dorsal.- Se


traza (fig. 31) una incisión que parta del extremo de la apófisis espinosa de la
primera vértebra dorsal t termine en la apófisis espinosa de las duodécima dorsal (c
c´). Arriba y debajo de esta incisión, se trazan dos incisiones transversales (a a´y b
b´) de 15 a 20 centímetros de longitud cada una, que sigan respectivamente el eje
de la primera y duodécima costillas. Se incide hondo, hasta el plano esquelético;
luego, de una y otra parte de la línea de la apófisis espinosas, utilizando al principio
el escalpelo y luego la legra, se desprenden las partes blandas de los canales
vertebrales y del esqueleto vertebrocostal hasta que se haya denudado el
segmento posterior de las vértebras y la porción inicial de las costillas no más allá
de su ángulo posterior. Tanto a la derecha como a la izquierda se seccionan cada
una de las costillas, de la segunda a la undécima inclusive, a una distancia
aproximada de cuatro dedos de la cresta espinosa. En seguida se seccionan al

99
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

mismo nivel los músculos intercostales. Esta maniobra debe ejecutarse con mucho
cuidado para evitar dilaceraciones de la pleura parietal; importa, además, conservar
intactos los vasos y los nervios intercostales.

Sólo falta separar la primera vértebra dorsal de la segunda y la undécima de la


duodécima. Tomando el martillo y el escoplo se insinúa éste entre los dos cuerpos
vertebrales y se golpea con el martillo hasta obtener la disyunción de los dos
cuerpos; seccionamos, por último, con un golpe rápido, las apófisis articulares.
Desde este momento la columna vertebral puede ser levantada. Se prende ahora
su parte superior con un gatillo de Farabeuf y se desprende del plano subyacente
empleando un instrumento romo con el fin de no dañar ninguno de los órganos y
vasos del mediastino. Los nervios intercostales son seccionados a su emergencia
de los agujeros de conjunción.

Una vez quitada la columna vertebral, aparecen los órganos del mediastino
sumergidos en un tejido celular más o menos abundante en grasa. Disecando esta
grasa podremos aislar e identificar los diversos elementos de la región.

Pero antes es necesario procurarnos un acceso más amplio, rechazando todo lo


posible a derecha y a izquierda los dos pulmones rodeados de su pleura. Esta
maniobra, además de agrandar la cavidad mediastínica, nos permite reconocer, por
hallarse tensos, los divertículos importantes de la cavidad pleural: a la izquierda, el
fondo de saco interaorticoesofagico; a la derecha y en la parte inferior de la región,
el fondo de saco interacigoesogagico. Este último está siempre muy desarrollado.

4º Venas ácigos mayor y menor, conducto torácico.- Los tres órganos que
constituyen el primer plano de la región son las venas ácigos y el conducto torácico.

a) Vena ácigos mayor.- La vena ácigos mayor, situada a la derecha, sube


paralelamente a la columna vertebral, luego se curva hacia delante formando el
cayado de la ácigos, que cabalga sobre el bronquio derecho. Penetra entonces en
el mediastino anterior. Recibe todas las venas intercostales derechas, anastomosis
que le envía la ácigos menor y, finalmente, la misma ácigos menor a la altura de la
séptima costilla. Esta cruzada por las arterias intercostales derechas, que viene de
la aorta y que pasa entre ésta y la columna vertebral.

b) Vena ácigos menor.- La ácigos menor camina paralelamente a la ácigos mayor,


a la izquierda de ésta. Recibe las venas intercostales izquierdas y desemboca en la
ácigos mayor.

100
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

c) Conducto torácico.- El conducto torácico es a menudo muy difícil de reconocer en


el cadáver, porque es friable, de muy pequeño calibre y está sumergido en la grasa.
Presenta el aspecto de un cordón pequeño y blanquecino. Camina al principio
paralelamente a la columna vertebral, entre las dos venas ácigos: aquí es donde
debe buscarse. Luego, a la altura del cayado de la aorta, se incurva hacia la
izquierda y se dirige a la base del cuello. Las arterias y las venas intercostales
pasan entre el conducto torácico y la columna vertebral.

5º Aorta torácica.- La aorta esta situada en un plano ligeramente anterior al


precedente. Su posición descendente ocupa casi toda la parte izquierda de la
región, en sus dos tercios inferiores. Pero llegada a nivel del bronquio izquierdo, la
aorta cambia de súbito de dirección, describe una curva, el cayado de la aorta, y
pasa del mediastino posterior al anterior, por encima del bronquio izquierdo.

La aorta está contenida en una vaina que la aísla en cierto modo del tejido celular
mediastínico y de los órganos próximos. Se incide esta vaina paralelamente al eje
de la arteria y se reclina a derecha e izquierda, sujetándola con alfileres.
Reconocemos en seguida sus ramas, que son muy numerosas. El cayado aórtico
suministra, yendo desde la superficie a la profundidad de la preparación ( es decir,
en realidad, de atrás adelante) y de izquierda a derecha, la subclavia izquierda, la
carótida primitiva izquierda y el tronco braquiocefálico. La porción descendente da
ramos esofágicos, las arterias bronquiales y las arterias intercostales, derechas e
izquierdas.

Antes de pasar a la disección del plano siguiente, es necesario limpiar un poco el


campo de la preparación, desembarazándolo de algunos vasos que lo atraviesan
de parte a parte. Estando situada naturalmente la aorta a la izquierda, se cortan en
su origen todas las arterias intercostales derechas y resecamos de éstas la porción
comprendida entre la aorta y la superficie de sección de la parrilla costal.

Resecamos igualmente todas las venas intercostales que van a la porción vertical
de la ácigos mayor. Este segmento de la vena será mantenido reclinado a la
izquierda, de modo que, estando el cayado fijo a la derecha, sólo subsistía, tendida
a través de la preparación, la parte de la ácigos mayor comprendida entre la
desembocadura de la ácigos menor y el cayado (véase lámina 35). Procediendo
así se pueden observar las ramas aferentes del cayado de la ácigos.

Del conducto torácico sólo conservaremos los dos extremos, superior e inferior.

101
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

Seguidamente emprenderemos la disección del plano siguiente, constituido por el


esófago y por los nervios neumogástricos.

6º Esófago, nervios neumogástricos.- Nos ocupamos primeramente del esófago


torácico.

a) Esófago torácico.- El esófago recorre el mediastino posterior en toda su altura.


Al principio pegado a los cuerpos vertebrales y excediendo claramente a la
izquierda la línea media, se separa progresivamente de la columna vertebral, de la
que está separado en la parte inferior de la región por el fondo de saco pleural
interacigoesofágico , por las venas ácigos, el conducto torácico, la aorta y los vasos
intercostales.

Lo reconocemos fácilmente por su situación y también por el color rojo escuro


característico de su túnica musculosa.

En el punto en que el esófago cruza la bifurcación de la traquea y entra en relación


con la aorta, se aprecia un estrechamiento, estrechez broncoaórtica.

El esófago está cuadrado por tres troncos nerviosos, que son: a la derecha, el
nervio neumogástrico derecho; a la izquierda, el nervio recurrente por arriba y el
neumogástrico izquierdo por abajo.

Además, está cruzado por multitud de filetes nerviosos que proceden de los
neumogástricos y los simpáticos y que se anastomosan entre sí.

b) Nervio neumogástrico derecho.- Encontraremos el neumogástrico derecho en


contacto de la arteria subclavia derecha y del tronco braquiocefálico. A este nivel da
origen al nervio recurrente derecho, que, después de haber descrito una asa por
debajo de la subclavia, sube a lo largo del borde derecho del esófago. El
neumogástrico se dirige oblicuamente hacia abajo y adentro. Llega al esófago, del
que sigue algún tiempo el borde derecho y la cara posterior. Suministra en su
trayecto numerosos ramos muy tenues a la traquea, a los bronquios, al esófago y al
pulmón.

c) Nervio neumogástrico izquierdo.- El tronco del neumogástrico izquierdo es


difícilmente visible, pues en gran parte está oculto por la aorta descendente, delante
de la cual está situado. Sólo puede verse (y aún no se ve por mucho tiempo, pues
pasa a la cara anterior del esófago hacia el tercio inferior de la región) reclinando la

102
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

aorta a la izquierda. Su rama principal, el nervio recurrente izquierdo, rodea el


cayado aórtico y camina, subiendo hacia el cuello, a lo largo del esófago, en el
ángulo diedro que forma la cara anterior de éste con la traquea.

7º Tráquea y bronquios.- El esófago está adherido al conducto traqueal. No es


posible, pues, reclinarlo para descubrir la tráquea. Pero como ésta excede
notablemente el esófago por la derecha, es fácil descubrirla en este lado, o por lo
menos sentir con el dedo la arista saliente que forman los bordes posteriores de sus
arcos cartilaginosos. Siguiendo la tráquea de arriba abajo,, llegamos a la altura de
la quinta costilla, a su bifurcación en bronquio izquierdo y bronquio derecho.

El bronquio izquierdo, del que puede verse y sentirse el borde superior, pasa casi
inmediatamente bajo el cayado de la aorta y termina en el hilio pulmonar.

El bronquio derecho, más oblicuo, más ancho y más largo que el izquierdo, es
visible en casi todo su recorrido. Está cruzado por la ven ácigos mayor que cabalga
sobre él. Descubriremos a lo largo de su cara posterior una arteria bronquial y
ramificaciones del neumogástrico.

8º Ganglios.- Por delante de la tráquea y del esófago se encuentra una capa más o
menos gruesa de tejido adiposo, en la cual están diseminados numerosos ganglios
linfáticos, los ganglios traqueobronquiales.

Estos se reparten en cinco grupos: dos grupos interbronquiales, situados en el hilio,


alrededor de las subdivisiones de cada uno de los dos bronquios, derecho e
izquierdo; dos grupos pretraqueobronquiales, derecho e izquierdo, situados en los
ángulos que forma la tráquea con cada bronquio; un grupo intertraqueobronquial,
que ocupa el espacio situado por debajo de la bifurcación de la tráquea.

La capa de grasa que contiene estos ganglios separa, en cierto modo, el mediastino
anterior. Si la atravesamos, se encuentran detrás los órganos del mediastino
anterior, a saber: arriba, los grandes vasos de la base del corazón; abajo el
pericardio, que se halla así en relación directa con el esófago.

9º Montaje de la preparación.-

103
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

104
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

PARED ABDOMINAL ANTEROLATERAL

LÍMITES

Sus límites son:

Por arriba, la parte media del apéndice xifoides (la mitad superior corresponde a la
región esternal) y el reborde de las costillas; por abajo, el pubis en su porción
comprendida entre las dos espinas del pubis, a los lados el borde externo de los
músculos rectos.

El cadáver se encuentra en decúbito sobre el dorso.

1.- Incisiones cutáneas; Trazar en la piel en la línea media, una incisión que vaya
del apéndice xifoides a la sínfisis púbica y que rodee a cada lado el ombligo, luego
practicar una incisión que vaya de la sínfisis hasta cinco dedos por detrás de la
espina iliaca antero posterior y siga el ligamento inguinal y la cresta iliaca. Por
arriba, el colgajo está limitado por la incisión que se ha hecho para la disección de
la pared torácica anterior a lo largo del borde inferior del tórax.

2.- Al levantar el colgajo cutáneo se observa el tejido celuloadiposo subcutáneo en


el cual La fascia superficial se encuentra dispuesta en dos capas:

Una hoja superficial (Camper), grasosa, de grosor variable de acuerdo a la


contextura del sujeto.

105
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

Una hoja Profunda (Scarpa), membranosa, entre las que se encuentran los
elementos vasculares y nerviosos de la región: vasos epigástricos superficiales,
músculos: oblicuo mayor, oblicuo menor y transverso, recto del abdomen, piramidal
del abdomen Arterias: epigástrica y rama abdominal de la mamaria interna. Venas:
satélites de las arterias.Nervios: 6 últimos intercostales, y ramas abdominales de
los abomino-genitales mayor y menor.

Hacia medial, vasos circunflejos iliacos superficiales hacia lateral, finos ramos
cutáneos nerviosos que se hacen presente en el tejido celuloadiposo subcutáneo
en tres líneas; dos de estas líneas son los ramos perforantes anteriores a cada lado
una al borde externo y otra alborde interno del músculo recto; la tercera
corresponde a una verticalque pasa por el centro de la crestailiaca; estos
constituyen los ramos perforantes laterales. La hoja membranosa de la fascia
superficialestá unida a la fascia profunda. Disecar en la parte inferior de laregión la
atería y las venas subcutáneas abdominales.

3-. Se incide el tejido subcutáneolevantando los dos planos,


rasandocuidadosamente loa aponeurosissuperficial. En el transcurso de este
levantamiento se seccionan varios ramitos neurovasculares que salen a la piel. Se
observan las tres líneaspor donde los nervios atraviesan lasfibras musculares a la
piel.

4- se observa la aponeurosis y eloblicuo externo; se procede alimpiar la vaina de


los recto, también el oblicuo mayor y suaponeurosis de inserción en todo suapogeo
hasta sus fibras más inferiores, en donde se observa el arco crural.

5- Se incide sobre el oblicuo mayorpara mostrar el musculo oblicuointerno,


posteriormente se incide elmúsculo oblicuo interno paramostrar el transverso del
abdomen.

106
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

DISECCIÓN PARED ABDOMINAL POSTERIORDORSO

Para empezar el abordaje de la región abdominal posterior llamado también dorso,


se colocó el cuerpo boca abajo. Se coloco un bloque que elevara la cabeza para
que el cuello quedara estirado. Se procedió a un corte vertical medial en todo el
dorso Y dos cortes horizontales en la mitad de este mismo elaborando dos
cuadrantes. En este corte se puede palpar en la línea media de la espalda las
apófisis espinosas de la mayor parte de las vértebras.

Luego de hacer este corte longitudinal o vertical se empezó a levantar la piel a


través del bisturís, con una pinza de garra, el bisturís iba hacia arriba, esta fue la
técnica utilizada ya que así se evitaba un desprendimiento de piel brusco. Al
levantar la piel con el bisturís y una pinza de diente de ratón para que no se
maltraten los músculos de la parte inferior, se encontró la aponeurosis superficial
del dorso y se observaron ramos muy chiquitos de algunos nervios cutáneos del
dorso, que se derivan de los ramos dorsales de los nervios cervicales, torácicos y
lumbares.

107
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

Después del primer corte de piel se encontró como es usual en esta parte del
cuerpo depósitos de grasa y además una fascia muy fuerte. Al retirar la fascia y la
grasa se empieza el reconocimiento de músculos, nervios y componente vascular.

MUSCULOS SUPERFICIALES DEL DORSO

Los músculos más superficiales del dorso son el trapecio y el dorsal ancho
longuísimo del dorso. Se empieza a limpiar el trapecio quitando la aponeurosis
superficial y profunda que cubre toda su cara superficial. El trapecio es un músculo
triangular aplanado que se origina en el tercio interno de la línea superior del
occipital, del ligamento nucal en toda su longitud, y de las apófisis espinosas de
todas las 12 vértebras torácicas. Sus fibras convergen hacia fuera hasta una
inserción en forma de v en el tercio externo del borde posterior de la clavícula, el
borde interno del acromion y el borde superior de la espina de la escápula

Luego se procede a limpiar el dorsal ancho, al quitar la aponeurosis superficial de la


región situada justo por fuera de las apófisis espinosas de las vértebras lumbares,
se reconoce la fascia toracolumbar, identificando un aspecto aponeurótico brillante
de su cara superficial , la cual se inserta en las apófisis espinosas lumbares y
sacras y se extiende hacia afuera como una ancha la mina aponeurótica. La fascia
toracolumbar difiere de la profunda ya que se encuentra por lo general rodeando los
músculos donde es muy densa. En laregión lumbar el dorso se dispone en dos
hojas las cuales contienen los músculos profundos. El dorsal ancho es un músculo

108
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

aplanado que cubre laparte inferior y lateral del dorso, cubierto en parte por la
porción más inferiordel trapecio. Tiene un amplio origen en las apófisis espinosas
de las 5vértebras torácicas y se inserta por medio de la aponeurosis triangular e
baseinferior en la apófisis espinosa y en los ligamentos interés
pinosascorrespondientes de las seis últimas dorsales y de las 5 vértebras lumbares.

MUSCULOS DEL PLANO INTERMEDIO:

Debajo del trapecio se encuentra los dos músculos romboideos que a veces se
encuentran fusionados y así los encontré. El romboides menor es estrecho y
aplanado tiene su origen en la parte inferior del ligamento nucal y la apófisis
espinosa de la séptima vértebra cervical. El romboides mayor es aplanado, mucho
mas ancho situado justo por abajo del menor, se origina en las apófisis espinosas
de las 4 vértebras torácicas y se inserta en el borde vertebral de la escápula por
debajo de la espina.

También se disecaron los músculos redondos mayores menores que se encuentran


debajo del músculo infraespinoso del manguito rotador y el redondo menor carga al
mayor.

109
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

Luego de esto se limpio los músculos serratos posteriores superiores e inferiores,


estos son dos músculos muy delgados y planos a menudo son mas tendinosos que
musculares pero en esta disección presentaba un aspecto mas de fascia .

El serrato menor posterosuperior es profundo al romboides y sus fibras corren a la


misma dirección, se origina de la parte inferior del ligamento nucal. El serrato menor
postero inferior esta cubierto por el dorsal ancho, nace de la hoja posterior de la
aponeurosis toracolumbar en la región de las vértebras torácicas inferiores y las
lumbares superiores

MUSCULOS PROFUNDOS DEL DORSO:

Se encontró en este tercer plano, una parte muy pequeña del músculo esplenio, las
fibras inferiores, este es un músculo plano que se origina en la mitad inferior del
ligamento nucal y las apófisis espinosas de la séptima vértebra cervical, la porción
superior se denomina esplenio de la cabeza y la porción inferior se denomina

110
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

esplenio del cuello y se inserta por medio de 3bandas tendinosas de las apófisis
transversas de las primeras 3 vértebras cervicales.

En este tercer plano también se encontraron los músculos que conforman la masa
común, hacia abajo tienen un extenso origen carnoso común en las apófisis
espinosas de todas las vértebras lumbares, el dorso del sacro el ligamento
sacrosiliaco posterior, la parte mas alejada de la cresta iliaca, y lacara profunda de
la porción inferior de la hoja posterior de la aponeurosistoracolumbar.la columna
mas externa se conoce como músculo iliocostal, la intermedia como músculo dorsal
largo o dorsal longuísimo, y la parte mas interna o mas medial se le conoce como
músculo epiespinoso o espinoso.

El iliocostal se subdivide de abajo hacia arriba en 3 porciones, porción lumbar,


porción torácica y porción cervical. La porción lumbar parte delorigen común y se
conecta por medio de una serie de fascículos en los ángulos de las 7 ultimas
costillas; la parte torácicas recibe fascículosadicionales que proceden de las 6
últimas costillas y entra en los ángulosdelas 6 primeras costillas.

El dorsal largo

también tiene las misma subdivisiones, exepto una, tiene porción torácica, cervical y
dela cabeza. La porción torácica parte del origen común y se inserta por medio de
dos series largas de fascículos musculares, la porción cervical recibe fascículos de
origen de la apófisis transversas delas vértebras torácicas superiores y se inserta
en los tubérculos posteriores delas apófisis trasversas de la segunda a al sexta
vértebra cervical; la porción de la cabeza nace en las apófisis transversas de las 3 o
4 vértebras torácicas superiores y en las apófisis articulares de las vértebras
cervicales inferiores.

111
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

El epiespinoso

es la mas pequeña de las tres porciones de los músculos dela masa común , sus
fibras apuntan hacia arriba a parir de las apófisisespinosas de las vértebras
lumbares superiores y torácicas inferiores paraentrar en la apófisis espinosas, su
porción torácica se observa claramente, nohay porción cervical .

A lo largo de la disección, cuando se levantaban los diferentes músculos en los


Planos superficial, medio y profundo, se observaban ramos de nervios espinal pero
eran muy pequeños que se confundían entre la fascia, y también vasos sanguíneos
muy chiquitos , que se levantaban igualmente con los músculos y se limpiaban
también con las fascias.

VÍSCERAS ABDOMINALES

1. Inspeccione la cavidad abdominal con ayuda de lasmanos. Durante


estainspección es posible que setope con adherencias. En este caso, rómpalas
conlos dedos y movilice los órganos.

2. Abra los colgajos de la pared abdominal. Las líneasde la incisión corresponden a


las líneas de los cuadrantesabdominales. Al examinar los órganosdebe cerrar y
abrir los colgajos para ayudarle a relacionarlos órganos con los cuadrantes del
abdomen.La mayor parte de los órganos que va a identificarforma parte del aparato
digestivo.

3. Identifique el hígado. Es un órgano intraperitoneal.El hígado ocupa el cuadrante


superiorderecho y se extiende a través de la líneamedia hasta el cuadrante superior
izquierdo. Yacecontra la superficie inferior del diafragma. La insercióndel ligamento
falciforme divide el hígadoen un lóbulo derecho y otro izquierdo.

112
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

4. La vesícula biliar es un órgano intraperitoneal que también se ubica en el


cuadrante superior derecho.Se extiende bajo el borde inferior del hígado.Casi
siempre se encuentra en la punta delnoveno cartílago costal sobre la línea
medioclavicular. Confirme esta relación.

5. Identifique el estómago. Es un órgano intraperitonealque yace en el cuadrante


superior izquierdo. Se continúa con el esófago en su porción proximal ycon el
duodeno en su porción distal. El hígado cubreparcialmente la superficie anterior del
estómago.

6. Identifique el bazo. Es un órgano intraperitonealque yace en el cuadrante


superior izquierdo. Seubica detrás del estómago y en ocasiones es difícilde
encontrar a menos que esté hipertrófico. Introduzcala mano derecha alrededor del
lado izquierdodel estómago y palpe el bazo.

7. Identifique el omento mayor. Se fija enla curvatura mayor del estómago. Doble el
omentomayor en sentido superior sobre el borde costal.

8. Identifique el intestino delgado. El intestino delgado empieza en el


extremopilórico del estómago. Tiene tres porciones:

• Duodeno

• Yeyuno

• Íleon

9. La mayor parte del duodeno es secundariamenteretroperitoneal. Se le examinará


con el páncreas.

10. El yeyuno y el íleon son órganos intraperitonealesque se extienden desde el


cuadrante superiorizquierdo hasta el cuadrante inferior derecho, peropor su longitud
y movilidad ocupan los cuatro cuadrantes.Empezando en el cuadrante superior
izquierdo,deslice el yeyuno e íleon entre las manosy aprecie su longitud, posición y
terminación.

11. Identifique el intestino grueso. Empiece en elcuadrante inferior derecho a nivel


de la unión iliocecal

Tiene seis porciones:

113
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

• Ciego – ubicado en el cuadrante inferior derecho.El apéndice se une al extremo


inferior del ciego.

• El colon ascendente se extiende desde el cuadranteinferior derecho hasta el


cuadrante superiorderecho. Termina en la flexura cólica (hepática) derecha. El
colon ascendente es secundariamenteretroperitoneal.

• El colon transverso se extiende desde el cuadrantesuperior derecho hasta el


cuadrante superior izquierdo. Termina en la flexura cólicaizquierda (esplénica). El
colon transversoes intraperitoneal

• El colon descendente se extiende desde elcuadrante superior izquierdo hasta el


cuadranteinferior izquierdo. Es un órgano secundariamenteretroperitoneal.

• Colon sigmoide – ubicado en el cuadrante inferiorizquierdo. Termina en la cavidad


pélvicaa nivel de la tercera vértebra sacra. El colon sigmoidees un órgano
intraperitoneal.

• Recto – ubicado en la pelvis. Su disección sellevará a cabo con la de las vísceras


pélvicas.

12. Con las manos, siga el trayecto del intestinogrueso desde el cuadrante inferior
derecho hasta elcuadrante inferior izquierdo. Advierta la posición(el cuadrante) y la
movilidad de sus segmentos.

PERITONEO

114
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

1. Observe el peritoneo visceral en la superficie delestómago o intestino delgado.


Adviertaque el peritoneo visceral es liso y resbaloso.

2. Observe el peritoneo parietal en la superficie internade la pared abdominal.


Advierta quetambién el peritoneo parietal es liso y resbaloso.

3. Observe el omento mayor. Extiendaesta estructura similar a un delantal y aprecie


su tamaño.Normalmente el omento mayor yace entrelas asas intestinales y la pared
abdominal anterior

4. Eleve el borde inferior del hígado e identifique elomento menor. El omento


menorviaja desde la curvatura menor del estómago y laprimera porción del duodeno
hasta la superficieinferior del hígado. El omento menor tiene dosporciones:

 El ligamento hepatogástrico, que se extiende desdehígado hasta la


curvatura menor del estómago.

 El ligamento hepatoduodenal, que se extiendedesde hígado hasta la primera


porcióndel duodeno.

5. Regrese el colgajo del cuadrante superior derechoa su posición anatómica y


examine el ligamentofalciforme. El ligamento falciforme va desde elperitoneo
parietal en la pared abdominal anteriorhasta el peritoneo visceral en la superficie del
hígado.

El ligamento redondo del hígado es lavena umbilical obliterada y yace en el borde


libreinferior del ligamento falciforme.

6. Siga el trayecto del ligamento falciforme en sentidosuperior y observe que forma


parte del ligamentocoronario que une el hígado con el diafragma.

Otros dos ligamentos peritonealestambién forman parte del ligamento coronario:

 Ligamento triangular izquierdo – ubicadoentre el lóbulo izquierdo del hígado


y el diafragma

 Ligamento triangular derecho – ubicado entreel lóbulo derecho del hígado y


el diafragma

115
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

7. El ligamento gastrofrénico conecta la porción superiorde la curvatura mayor del


estómago con eldiafragma. Deslice la mano en sentido superiorhacia el lado
izquierdo del estómago para sentir esteligamento.

8. El ligamento gastroesplénico (gastrolienal) vadesde la curvatura mayor del


estómago hasta elbazo y el ligamento esplenorrenal (lienorrenal)conecta el bazo
con la pared abdominal posteriorsobre el riñón izquierdo .

9. Doble el omento mayor en sentido superior sobre el borde costal e identifique el


mesocolon transverso. El mesocolon transverso fija el colon transverso a la pared
abdominal posterior. En el extremo izquierdo del mesocolon transverso se
encuentra el ligamento frenocólico, que fija la flexura cólica izquierda con el
diafragma.

10. Identifique el mesenterio . El mesenterio suspende el yeyuno e íleon desde la


pared abdominal posterior. La raíz del mesenterio se une a lapared abdominal
posterior desde el cuadrante superior izquierdo hasta el cuadrante superior
derecho.

11. Observe el meso apéndice. Fija el apéndice a la pared abdominal posterior y


contiene la arteria apendicular.

12. Identifique el mesocolon sigmoideo en el cuadranteinferior izquierdo. Esta


estructura suspendeel colon sigmoide de la pared abdominalposterior.

13. Observe que estas estructuras peritoneales son vecinasde una subdivisión de la
cavidad peritonealllamada cavidad peritoneal mayor .Detrás del estómago y el
omento menor existe unasubdivisión más pequeña de la cavidad peritonealllamada
bolsa omental (transcavidad de los epiplones).

14. El orificio omental (epiploico) conecta las bolsasperitoneales mayor y menor.


Este agujero yace detrásdel ligamento hepatoduodenal

15. Introduzca un dedo en el orificio omental y examinesus cuatro límites:

 Anterior – vena porta hepática, arteria hepáticapropia y conducto biliar


contenido en el ligamento hepatoduodenal.

 Posterior – vena cava inferior y pilar derechodel diafragma cubierto de


peritoneo parietal

116
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

 Superior – lóbulo caudado del hígado cubiertode peritoneo visceral

 Inferior – primera porción del duodeno cubiertade peritoneo visceral

16. Observe un esquema de la bolsa omental.

La porción más inferior de la bolsa omental menor sedenomina receso inferior y se


extiende en sentidoinferior hasta el omento mayor. Durante la embriogénesis ,el
receso inferior se extiende entre las capasde omento mayor (revise un texto de
embriología).

La porción más alta de la bolsa omental es el recesosuperior. El diafragma se


encuentra detrás del recesosuperior y el lóbulo caudado del hígado pordelante del
receso superior.

17. Detrás de la porción principal de la bolsa omentalse encuentra el páncreas. El


peritoneoque cubre el páncreas forma parte de la pared posteriorde la bolsa
omental.

DISECCION DEL TRONCO CELÍACO, ESTÓMAGO, BAZO, HÍGADO Y


VESÍCULA BILIAR

1.Coloque el omento mayor en su posición anatómica correcta.

2. Identifique los segmentos del estómago

 Superficie anterior

 Curvatura mayor

 Curvatura menor

 Cardias

 Escotadura del cardias

 Fondo • Cuerpo

 Escotadura angular

 Porción pilórica

117
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

 Píloro

3. Identifique las características siguientes en el hígado

• Lóbulo derecho

• Lóbulo izquierdo

• Superficie diafragmática

• Borde inferior

4. Utilizando la mano eleve el borde inferior del hígado. Identifique la superficie


visceral del hígado. Esta superficie visceral se encuentra en contacto con la
vesícula biliar y el peritoneo que cubre el estómago, duodeno, colon, riñón derecho
y glándula suprarrenal derecha.

5. Identifique elporta hepático en la superficie visce-ral del hígado. Es la fisura a


través de la cual los vasos, conductos, linfáticos y nervios entran en el hígado.

6. Identifique la vesícula biliar. En algunos cadáveres ha sido extirpada por medio


de cirugía.

TRONCO CELÍACO

Al realizar la disección de las ramas del tronco celíaco, advierta que las arterias
reciben su nombre según su región de distribución, no por su origen o patrón de
ramificación.

1. Únicamente en el lado izquierdo, con una fresa para hueso separe los cartílagos
costales de la sexta y séptima costillas de la unión xifoesternal y el borde lateral del
esternón. A través del orificio que ha creado, haga un corte vertical con tijeras a tra-
vés del diafragma. Prolongue este corte hasta el li-gamento coronario en la
superficie superior del hí-gado. Retraiga las costillas, diafragma e hígado en sentido
superior para exponer el omento menor.

2. Introduzca el dedo índice de la mano izquierda en el orificio omental. Por delante


de su dedo se encuentra el ligamento hepatoduodenal y su contenido: con-ductos
biliares, arteria hepática propia, vena porta hepática, nervios autónomos y
linfáticos.

118
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

3. Para ayudar a la disección, coloque una tira de papel blanco dentro del orificio
omental.

4. Retire por medio de disección roma el peritoneo de la superficie anterior del


ligamento hepatoduo-denal (delante de los vasos y conductos).

5. Identifique las tres estructuras grandes contenidas dentro del ligamento


hepatoduodenal: conducto biliar, arteria hepática propia y vena porta he-pática.
El conducto biliar es el que se encuentra en posición más lateral.

6. Con una sonda acanalada siga el trayecto del conducto biliar en sentido superior.
Identifique el conducto cís-tico y el conducto hepático común.

7. Siga el trayecto del conducto hepático común en sentido superior hasta que
reciba sus tributarias, los conductos hepáticos derecho e izquierdo. Estos
conductos salen del porta hepático.

8. Despeje la arteria hepática propia. El “tejido conjuntivo” resistente que rodea


estos vasos con-tiene un plexo nervioso autónomo. Para despejar el campo de la
disección, retire los nervios autónomos

9. Siga el trayecto de la arteria hepática propia hacia el hígado a través del


ligamento hepatoduodenal. A nivel del porta hepático, la arteria hepática propia se
divide en dos ramas: la arteria hepática iz-quierday la arteria hepática derecha.

10. En el ligamento hepatoduodenal se originan otras dos arterias:

• La arteria cística se origina a partir de la arte-ria hepática derecha. Siga su


trayecto hasta la vesícula biliar.

• La arteria gástrica derecha se origina a partir de la arteria hepática propia. Siga


su trayecto hasta la curvatura menor del estómago.

11. El ligamento hepatoduodenal también contiene vasos linfáticos. Estos vasos


son demasiado pe-queños para poder realizar su disección, pero es posible
observar los nódulos linfáticos hepáti-cos. Estos nódulos se pueden extirpar para
despe-jar el campo de la disección.

12. Siga el trayecto de la arteria hepática propia en sentido inferior y confirme que
se continúa con la arteria hepática común.

119
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

13. Observe que la arteria hepática común origina la arteria gastroduodenal. Esta
arteria pasa por de-trás de la primera porción del duodeno. Siga el trayecto de esta
arteria hasta que se divida originando la arteria gastroepiploica derecha y la
arteria pancreatoduodenal superior anterior.

14. Siga el trayecto de la arteria hepática común hacia el lado izquierdo en dirección
del tronco celíaco (fig. 4-26). Observe que el tronco celíaco se ori-gina en la
superficie anterior de la aorta abdominal a nivel de la duodécima vértebra torácica.
El tronco celíaco es muy corto (menos de 2 cm en la mayor parte de los casos) y se
divide en tres ramas:

• Arteria hepática común (ya se llevó a cabo su disección)

• Arteria gástrica izquierda

• Arteria esplénica

15. Por medio de disección roma siga el trayecto de la arteria gástrica izquierda
hacia el esófago y estómago . La arteria gástrica izquierda alcanza el estómago
cerca del esófago y a continuación sigue la curvatura menor del estómago dentro
del omento menor. La arteria gástrica izquierda forma una anastomosis con la
arteria gástrica derecha a lo largo de la curvatura menor del estómago. Las ramas
de la arteria gástrica se distribuyen hacia las superficies anterior y posterior del
estómago.

16. Siga el trayecto de la arteria esplénica hacia la iz-quierda unos 5 cm y verifique


que descansa sobre la pared abdominal posterior. La arteria esplénica viaja a lo
largo del borde superior del páncreas, en el que se incrusta parcialmente. No
separe la arte-ria esplénica del páncreas en este momento. Observe que las
arterias gástricas cortas se origi-nan a partir de la arteria esplénica e irrigan el
fondo del estómago.

17. Identifique la arteria gastroepiploica izquierda en el omento mayor a unos 2


cm de la curvatura mayor del estómago. La arteria gastro-epiploica izquierda es
rama de la arteria esplénica.

18. Identifique la arteria gastroepiploica derecha en el omento mayor cerca del


extremo derecho de la curvatura mayor del estómago. La arteria gastroepiploica
derecha se anastomosa con la arteria gastroepiploica izquierda. Siga el trayecto de

120
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

la arteria gastroepiploica derecha hacia el lado derecho y encuentre su origen en la


rama gastroduodenal de la arteria hepática común.

19. Coloque de nuevo el ligamento hepatoduodenal en su sitio e identifique la vena


porta hepática. Esta vena descansa detrás de la arteria hepática propia y el
conducto biliar. Siga el trayecto de la vena porta hepática en sentido superior y
observe que llega hasta el porta hepático, donde se divide para formar las venas
porta derecha e izquierda. Por lo general la vena porta hepática recibe las venas
gástricas derecha e izquierda como tribu-tarias. En la parte inferior, la vena porta
hepática pasa detrás de la primera porción del duodeno.

BAZO

El bazo es el órgano hematopoyético más grande del cuerpo. Su tamaño y peso


varían considerablemente, lo que depende del volumen sanguíneo y su contenido.
Está cubierto por peritoneo visceral con excepción del hilio, donde los vasos
esplénicos entran y salen.

1. Con la mano izquierda retraiga el fondo del estó-mago hacia la derecha. Con la
mano derecha jale con delicadeza el bazo en sentido anterior.

2. Observe que el bazo tiene una superficie diafrag-mática lisa. Sus bordes anterior,
inferior y superior son ásperos. El borde superior del bazo a menudo es mellado.

3. La superficie visceral del bazo colinda con cua-tro órganos:

• Estómago

• Riñón izquierdo

• Colon transverso (flexura cólica izquierda)

• Páncreas

4. La superficie diafragmática del bazo colinda (a través del diafragma) con la


novena, décima y undécima costillas.

HÍGADO

121
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

El hígado es la glándula más grande del cuerpo y co-rresponde aproximadamente


a 2.5% del peso corporal en el adulto. Para estudiar las características de super-
ficie del hígado, se debe separar del diafragma.

1. Examine el ligamento falciforme y el ligamento coronario del hígado.

2. Corte con tijeras el ligamento falciforme a lo largo de su inserción en la pared


abdominal anterior. Extienda el corte en sentido superior y corte los ligamentos
triangulares derecho e izquierdo a lo largo de la superficie inferior del diafragma.

3. Introduzca los dedos entre el hígado y el diafragma y rompa el tejido conjuntivo


que une el hígado con el diafragma. Corte la capa posterior del ligamento coronario.

4. Corte con tijeras la vena cava inferior entre el hígado y el diafragma. Eleve el
borde inferior del hígado y corte la vena cava inferior de nuevo, lo más cerca
posible a la superficie inferior del hígado.Estos dos cortes dejarán un segmento
pequeño de vena cava inferior dentro del hígado.

5. Ahora el hígado se debe mover libremente aunque permanece unido a otras


vísceras abdominales a través del conducto biliar, la arteria hepática pro-pia y la
vena porta hepática. Mueva el hígado con cuidado para no romper estas
estructuras.

6. Examine el hígado y advierta que el lóbulo derecho es seis veces más grande
que el izquierdo. El borde inferior áspero del hígado separa la superficie visceral
de la superficie diafragmática.

7. Identifique el área desnuda en la cara posterior de la superficie diafragmática.


Aquí, el hígado se en-contraba adyacente al diafragma y no estaba cu-bierto de
peritoneo. Observe los bordes secciona-dos del ligamento coronario alrededor del
área desnuda.

8. Examine la superficie visceral del hígado. Un conjunto con forma de “H” de


fisuras y fosas define los cuatro lóbulos. Iden-tifique el lóbulo derecho, lóbulo
izquierdo, lóbulo caudado y lóbulo cuadrado.

9. Observe que el ligamento venoso y el ligamento fal-ciformeocupan la fisura


izquierda de la “H”. La vesícula biliar y la vena cava inferior ocupan las fosas que
forman el lado derecho de la “H”.

122
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

10. Identifique el porta hepático. Forma la barra ho-rizontal de la “H”. Las


estructuras que atraviesan el ligamento hepatoduodenal (conductos biliares,
arterias hepáticas, vena porta hepática, linfáticos y nervios autónomos) entran o
salen del hígado en el porta hepático.

11. Examine un segmento pequeño de la vena cava in-feriorunido al hígado.


Observe que varias venas hepáticas desembocan directamente en la vena cava
inferior.

12. En un libro de texto estudie los dos convenciona-lismos por medio de los cuales
el hígado se divide en lóbulos. El ligamento falciforme divide el hí-gado en un
lóbulo anatómico derecho y otro iz-quierdo. El patrón de drenaje biliar y su
irrigación se utilizan para dividir el hígado en un lóbulo fun-cional derecho y otro
izquierdo.

13. El drenaje linfático del hígado es considerable. En el porta hepático, los


pequeños vasos linfáticos de-sembocan en los nódulos linfáticos hepáticos. A
partir de estos nódulos, los vasos linfáticos siguen el mismo trayecto de las arterias
hepáticas hasta los nódulos linfáticos celíacos ubicados alrede-dor del tronco
celíaco.

VESÍCULA BILIAR

La vesícula biliar es un reservorio para almacenar y concentrar bilis. Ocupa una


fosa poco profunda en la superficie visceral del hígado. Por lo general la vesícula
biliar se tiñe de color verde oscuro por la bilis, que escapa a través de las paredes
vesiculares después de la muerte.

1. Coloque de nuevo el hígado en su posición anatómica correcta.

2. Confirme que la vesícula biliar se ubica cerca de la punta del noveno cartílago
costal sobre la línea medioclavicular.

3. Coloque el hígado para exponer la superficie visceral. Por medio de disección


roma extraiga la ve-sícula de su fosa.

4. Identifique las porciones de la vesícula:

• Cuello

123
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

• Cuerpo

• Fondo

5. Examine el trayecto de la arteria cística. Esta arteria se tiñe de color verde por la
bilis y a menudo es frágil y de disección difícil.

6. Haga un corte longitudinal con tijeras a través de la pared vesicular, empezando


en el fondo y prolon-gándola a través del cuello. En caso de existir cálcu-los
biliares, extráigalos. Identifique el pliegue espi-ral, que es un doblez en el
revestimiento mucoso del cuello que se prolonga hasta el conducto cístico.

ARTERIA MESENTÉRICA SUPERIOR

La arteria mesentérica superior se origina a partir de la superficie anterior de la


aorta abdominal aproximada-mente a 1 cm debajo del tronco celíaco (a nivel de la
vértebra L1). En su origen, la arteria mesentérica su-perior yace por detrás del
cuello del páncreas. Cuando esta arteria emerge desde la parte posterior del cuello
del páncreas, pasa por delante de la apófisis unciforme, la tercera porción del
duodeno y la vena renal iz-quierda. A continuación penetra en el mesenterio. Dentro
del mesenterio, la arteria mesentérica superior viaja hacia el extremo terminal del
íleon.

1. Coloque de nuevo el hígado en su posición anató-mica correcta.

2. Doble el colon transverso y el omento mayor en sentido superior sobre el borde


costal. La superficie posterior del mesocolon transverso debe apun-tar hacia
delante.

3. Aparte las asas de yeyuno e íleon hacia el lado izquierdo del abdomen, de
manera que el lado derecho del mesenterio apunte hacia delante. Observe que la
raíz del mesenterio se adhiere a la pared abdominal posterior a lo largo de una
línea que va del cuadrante superior izquierdo al cuadrante inferior derecho.

4. Aleje el peritoneo hacia el lado derecho del mesenterio para exponer las ramas
de la arteria mesentérica superior. Con este fin, utilice una sonda acanalada para
romper el peritoneo, luego tómelo entre el pulgar y el índice. Desnúdelo con

124
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

cuidado con el mango de una pinza para raspar el peritoneo separándolo de las
estructuras más profundas.

5. Retire el peritoneo parietal de la pared abdominal posterior en el lado derecho del


mesenterio. Retire el peritoneo en sentido lateral hasta el colon ascendente.

6. Identifique la arteria mesentérica superior. Por medio de disección roma siga el


trayecto de la arteria mesentérica superior en sentido proximal y observe que cruza
por delante de la tercera porción del duodeno. Advierta que la tercera porción del
duodeno y la vena renal izquierda se pueden comprimir entre los vasos
mesentéricos superiores y la aorta abdominal.

7. Por medio de disección roma despeje las ramas de la arteria mesentérica


superior. Durante este proceso, advierta la red densa de nervios autónomos que
rodea estos vasos. Éste es el plexo de nervios mesentérico superior. Retire los
nervios conforme sea necesario para despejar el campo de disección.

8. Identifique las ramas de la arteria mesentérica superior:

• Arteria pancreatoduodenal inferior – es la primera rama de la arteria


mesentérica supe-rior. La disección de la arteria pancreatoduode-nal inferior se
llevará a cabo con el duodeno.

• Arterias intestinales – entre 15 y 18 arterias hacia el yeyuno y el íleon. Las


arterias intestina-les terminan en las ramas terminales rectas llama-das vasos
rectos (fig. 4-32). Las arterias intesti-nales se conectan por medio de arcos.
Observe la irrigación de la porción proximal del yeyuno y advierta que sólo existen
una o dos arcadas entre las arterias intestinales adyacentes, lo que tiene como
resultado unos vasos rectos relativamente largos. Examine la porción distal del
íleon y advierta que existen entre cuatro y cinco arcadas entre las arterias
intestinales adyacentes, lo que tiene como resultado unos vasos rectos re-
lativamente cortos.

• Arteria ileocólica– irriga al ciego. Esta arteria origina la arteria apendicular. La


arteria ileocólica se anastomosa con las ramas intestinales y la arteria cólica
derecha.

125
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

• Arteria cólica derecha – irriga el colon ascen-dente. Se origina en el lado


derecho de la arte-ria mesentérica superior y cruza hacia el lado derecho en
posición retroperitoneal. Se divide en una rama superior y otra inferior.

• Arteria cólica media – irriga el colon trans-verso. Se origina en la superficie


anterior de la arteria mesentérica superior y viaja a través del mesocolon
transverso. Se divide en una rama derecha y otra izquierda.

9. Identifique la vena mesentérica superior. Esta vena viaja por el lado derecho de
la arteria mesenté-rica superior. La vena está formada por ramas que corresponden
por su nombre y posición a las ramas de la arteria mesentérica superior. Detrás del
pán-creas, la vena mesentérica superior se une con la vena esplénica para formar
la vena porta hepática.

10. El mesenterio contiene hasta 200 nódulos linfáti-cos mesentéricos.


Identifique uno o dos de estos nódulos a lo largo de las ramas de los vasos mesen-
téricos superiores. Los nódulos linfáticos me-sentéricos superiores se ubican
cerca del origen de la arteria mesentérica superior en la aorta abdo-minal. Estos
nódulos se pueden retirar para despe-jar el campo de la disección.

INTESTINO DELGADO

El intestino delgado consta de duodeno, yeyuno e íleon. La función del intestino


delgado es absorber los nutrientes de los alimentos. Posee pliegues sofisticados de
mucosa que incrementan su superficie y una irriga-ción abundante para transportar
los nutrientes absor-bidos. El yeyuno (dos quintas partes proximales) y el íleon
(tres quintas partes distales) se estudiarán juntos, puesto que su transición no es
evidente.

1. Aparte el intestino delgado hacia el lado izquierdo de la cavidad abdominal y siga


el trayecto del ye-yuno en sentido proximal. Identifique la unión duodenoyeyunal.

2. Observe que el ligamento suspensorio del duo-denoes un ligamento


fibromuscular que se origina a partir del pilar derecho del diafragma y se fija en el
intestino en la unión duodenoyeyunal.

3. Palpe el intestino delgado y advierta que la pared del yeyuno es más gruesa que
la del íleon.

126
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

4. Identifique el final del íleon donde desemboca en el ciego a nivel de la unión


ileocecal.

5. Verifique que la raíz del mesenterio atraviesa la pared abdominal posterior


desde la unión duode-noyeyunal hasta la unión ileocecal. La raíz del mesenterio
mide aproximadamente 15 cm de largo. La unión intestinal del mesenterio mide
cerca de 6 m de largo.

ARTERIA MESENTÉRICA INFERIOR

1. Doble el colon transverso y el omento mayor en sentido superior sobre el borde


costal para exponer la superficie posterior del mesocolon transverso.

2. Aleje el intestino delgado hacia la derecha para que el colon descendente sea
visible desde la flexura cólica izquierda hasta el colon sigmoide.

3. La arteria mesentérica inferior se origina detrás de la tercera porción del


duodeno. Si se le dificulta encontrar este punto, busque alguna de sus ramas en el
mesocolon sigmoideo y siga el trayecto de la rama hacia el vaso principal.
Posteriormente pro-siga con la disección de las ramas periféricas.

Nota para la disección: algunas veces el uréter izquierdo se confunde con la


arteria mesentérica inferior o una de sus ramas. La arteria y vena mesentérica
inferior y el uréter yacen en el espacio retroperitoneal, pero los vasos pasan por
delante del uréter.

4. Con una sonda acanalada despeje las ramas de la arteria mesentérica inferior:

• Arteria cólica izquierda – irriga el colon des-cendente y el tercio izquierdo del


colon transverso. La arteria cólica izquierda se anastomosa con la rama cólica
media de la arteria mesenté-rica superior.

• Arterias sigmoideas – son tres o cuatro arte-rias que irrigan el colon sigmoide.
Las arterias sigmoideas atraviesan el mesocolon sigmoideo. Observe que forman
arcos similares a los de las arterias intestinales.

• Arteria rectal superior – irriga la porción proxi-mal del recto. La arteria rectal
superior se divide en una rama derecha y una rama izquierda. Las ramas derecha
e izquierda de la arteria rectal su-perior descienden hacia la pelvis en ambos lados
del recto. No siga su trayecto hacia la pelvis.

127
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

5. Observe las tributarias de la vena mesentérica inferior. Estas tributarias


corresponden a las ramas de la arteria mesentérica inferior. La vena mesen-térica
inferior es tributaria de la vena porta hepá-tica y asciende por el lado izquierdo de la
arteria mesentérica inferior, pasa por detrás del páncreas y se une a la vena
esplénica o (con menor frecuencia) a la vena mesentérica superior.

6. La arteria y vena mesentérica inferior se acompañan de vasos linfáticos que


desembocan en los nódulos mesentéricos inferiores alrededor del ori-gen de la
arteria mesentérica inferior.

INTESTINO GRUESO

El intestino grueso consta del ciego (con su apén-dice), colon (ascendente,


transverso, descendente y sigmoide), recto y conducto anal. La absorción de agua
a partir de la materia fecal es la función principal del intestino grueso. La superficie
mucosa relativa-mente lisa del intestino grueso es adecuada para esta función,
puesto que una superficie menos lisa tiene menos probabilidades de impedir el
desplazamiento de la materia fecal cada vez más sólida.

1. Coloque de nuevo el intestino delgado y el colon transverso en su posición


anatómica correcta.

2. En el cuadrante inferior derecho, identifique el ciego (del latín caecus, ciego). La


longi-tud de su mesenterio y el grado de su movilidad varían considerablemente
entre los individuos.

3. El apéndice (apéndice vermiforme) (del latín appendere, colgarse de) se fija en


el extremo del ciego. El apéndice adquiere diversas posiciones (fig. 4-36). Recuerde
que el apéndice se encuentra suspendido en un mesenterio denominado meso-
apéndice. La arteria apendicular se ubica dentro del mesoapéndice.

4. Identifique el colon ascendente. El colon ascen-dente se extiende desde el


ciego hasta la flexura cólica derecha.

5. Identifique el colon transverso. Se extiende desde la flexura cólica derecha


hasta la flexura cólica izquierda. Observe que la flexura cólica iz-quierda se
encuentra a un nivel ligeramente supe-rior al de la flexura cólica derecha. Entre
ambas flexuras, el colon transverso se mueve libremente.

128
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

6. Observe el colon descendente. Es un órgano re-troperitoneal. Desciende desde


la flexura cólica izquierda hasta el cuadrante inferior izquierdo.

7. En el cuadrante inferior izquierdo, identifique el colon sigmoide. Observe que el


colon sigmoide tiene un mesenterio (mesocolon sigmoideo) y que es móvil. El
colon sigmoide termina en la pel-vis a nivel del tercer ligamento sacro, donde se
continúa con el recto.

8. El recto se ubica dentro de la cavidad pélvica, por lo que su disección se llevará


a cabo con la de las vísceras pélvicas.

9. Observe la superficie externa del intestino grueso y advierta tres características


que lo distinguen del intestino delgado:

• Tenias del colon – tres bandas delgadas de músculo longitudinal

• Haustras– evaginaciones de la pared del colon

• Apéndices omentales (apéndices epiploicos) – pequeñas acumulaciones de


grasa cubiertas de peritoneo visceral

10. Repase las ramas de la arteria mesentérica superior e inferior que irrigan el
intestino grueso.

DUODENO

1. Invierta el colon transverso y el omento mayor en sentido superior sobre el borde


costal.

2. Por medio de disección roma, retire el tejido con-juntivo restante y el peritoneo de


la superficie an-terior del duodeno y el páncreas.

3. Observe las cuatro porciones del duodeno:

• Porción superior (primera) – a nivel de la vértebra L1. La porción superior del


duodeno se encuentra en el plano transversal y el liga-mentohepatoduodenal se le
adhiere. La mayor parte es intraperitoneal.

129
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

• Porción descendente (segunda) – a nivel de la vértebra L2. La porción


descendente del duodeno se ubica hacia la derecha de la línea media y por delante
del riñón derecho, los vasos renales derechos y la vena cava inferior. Es re-
troperitoneal. El conducto biliar y el conducto pancreático desembocan en la porción
descen-dente del duodeno.

• Porción horizontal (tercera) – a nivel de la vér-tebra L3. La porción horizontal del


duodeno yace por delante de la vena cava inferior y la aorta abdominal. Es
retroperitoneal. Delante de la por-ción horizontal del duodeno cruzan los vasos
mesentéricos superiores y por detrás los vasos mesentéricos inferiores.

• Porción ascendente (cuarta) – asciende hasta el nivel de la vértebra L2. La


porción ascen-dente del duodeno es retroperitoneal en casi toda su longitud. Esta
porción gira en sentido anterior para unirse con el yeyuno en la unión
duodenoyeyunal.

PÁNCREAS

1. Identifique el páncreas dentro del doblez del duo-deno. Advierta que es un


órgano retroperitoneal se-cundario que yace a través de la línea media y que se
coloca contra los cuerpos vertebrales de L1 a L3. 2. Identifique las porciones del
páncreas:

• Cabeza – yace dentro de la curvatura del duo-deno. La apófisis unciforme es una


proyección pequeña desde el borde inferior de la cabeza que pasa por detrás de los
vasos mesentéricos superiores. La vena cava inferior yace por de-trás de la cabeza
del páncreas.

• Cuello – porción corta que yace por delante de los vasos mesentéricos superiores
y conecta la cabeza del páncreas con el cuerpo.

• Cuerpo – se extiende de derecha a izquierda y ligeramente en sentido superior


conforme atra-viesa la porción posterior de la pared abdomi-nal. La aorta abdominal
yace por detrás del cuerpo del páncreas.

• Cola – es el extremo izquierdo estrecho de la glándula. La punta de la cola yace


en el liga-mentoesplenorrenal y tiene contacto con el hilio del bazo.

130
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

3. Con una sonda acanalada realice la disección de la superficie anterior de la


cabeza del páncreas y en-cuentre el conducto pancreático principal. Siga su
trayecto a través del cuello hasta el cuerpo. El conducto pancreático accesorio
se le une en su porción superior.

4. Siga el trayecto del conducto pancreático principal hacia la porción descendente


del duodeno. Observe que el conducto pancreático principal se une con el conducto
biliar.

5. Identifique las arterias pancreatoduodenales su-perior posterior y superior


anterior. Ambas son ramas de la arteria gastroduodenal.

6. La arteria pancreatoduodenal inferior por lo general es la rama más proximal


de la arteria mesenté-rica superior, si bien su origen es variable. La arteria
pancreatoduodenal inferior penetra en la porción inferior de la cabeza del páncreas.

7. Coloque de nuevo el tronco celíaco en su posición original y siga el trayecto de la


arteria esplénica en su trayecto hacia el lado izquierdo a lo largo del borde superior
del páncreas. El cuerpo y la cola del páncreas están irrigados hasta por 10 ramas
pequeñas de la arteria esplénica. Identifique únicamente dos: • Arteria pancreática
dorsal – penetra en el cuello del páncreas • Arteria pancreática mayor
(pancreática magna) – penetra en el páncreas en la unión de los dos tercios
mediales con el tercio lateral de la glándula

8. Siga la arteria esplénica hasta el hilio del bazo e identifique la arteria


gastroepiploica izquierda. Concluya la disección de la arteria gastroepiploica
izquierda siguiendo su trayecto a través del omento mayor hasta su anastomosis
con la arteria gastroepiploica derecha.

9. Las venas del páncreas corresponden a las arterias. Desembocan en la vena


esplénica y mesentérica superior y terminan por ser tributarias de la vena porta
hepática.

VENA PORTA HEPÁTICA

En una ilustración repase el sistema venoso porta hepático. La vena mesentérica


superior y la vena esplénica se unen para formar la vena porta hepática de-trás

131
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

del cuello del páncreas. La vena porta hepática transporta sangre venosa desde el
hígado hasta la por-ción abdominal del aparato digestivo, bazo y páncreas.

1. La vena esplénica viaja por detrás del páncreas y debajo de la arteria esplénica.
Con una sonda acana-lada realice la disección de la porción posterior del cuerpo
del páncreas y encuentre la vena esplénica.

2. Siga el trayecto de la vena esplénica hacia el lado de-recho, donde se une con la
vena mesentérica supe-rior. Éste es el origen de la vena porta hepática. Recuerde
que la vena porta hepática asciende en el ligamento hepatoduodenal hasta el porta
hepático.

3. Regrese a la superficie de distribución de la vena mesentérica inferior.


Encuéntrela y siga su tra-yecto en sentido superior. La vena mesentérica in-ferior
por lo general se une con la vena esplénica, pero en ocasiones se une con la vena
mesentérica superior o la unión de la vena mesentérica supe-rior y las venas
esplénicas.

4. En un libro de texto o atlas examine las anastomo-sisportosistémicas (porto-


cava):

• Gastroesofágica – vena gástrica izquierda/venas esofágicas/vena ácigos

• Anorrectal– vena rectal superior/venas recta-les medias e inferiores

• Paraumbilical– venas paraumbilicales/venas epigástricas superficiales

• Retroperitoneal – venas cólicas/venas retrope-ritoneales

VÍSCERAS DE LA CAVIDAD ABDOMINAL POSTERIOR

RIÑONES

La posición retroperitoneal de los riñones se ilustra con claridad en el corte


transversal. Los riñones se encuentran protegidos por su posición dentro del cuerpo
y por la capa de grasa que los cubre.

1. Observe que el riñón yace contra la pared abdomi-nal posterior. La superficie


anterior del riñón apunta en sentido anterolateral,

132
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

2. Con los dedos separe el riñón de la grasa perirre-naly fascia renal .

3. Observe que el polo superior del riñón está sepa-rado de la glándula


suprarrenal por una capa del-gada de fascia renal. Introduzca con delicadeza los
dedos entre el riñón y la glándula suprarrenal y se-pare ambos órganos. Tenga
cuidado de no retirar la glándula suprarrenal con la grasa.

4. Advierta el tamaño y la forma del riñón.

5. Identifique la vena renal izquierda. Con una sonda acanalada siga el trayecto de
la vena renal iz-quierda desde el riñón izquierdo hasta la vena cava inferior.
Observe que cruza por delante de las ar-terias renales y la aorta.

6. Identifique y despeje las tributarias de la vena renal izquierda:

• Vena testicular (u ovárica) izquierda

• Vena suprarrenal izquierda

7. Con tijeras, corte la vena renal izquierda cerca de la ve-na cava inferior. Doble la
vena renal izquierda hacia la izquierda. No separe la vena testicular (u ovárica) ni la
vena suprarrenal izquierda de la vena renal izquierda.

8. Identifique la arteria renal izquierda, que yace de-trás de la vena renal


izquierda. Siga la arteria renal izquierda hacia el hilio renal. La arteria renal casi
siempre se divide antes de penetrar en los riñones y con frecuencia existen arterias
renales accesorias.

9. Observe las ramas pequeñas de la arteria renal iz-quierda que se dirigen hacia el
uréter y la glándula suprarrenal izquierda.

10. Utilizando la arteria renal izquierda como bisagra, gire el riñón izquierdo hacia el
lado derecho. En la porción más posterior del hilio, identifique la pel-vis renal y su
prolongación inferior, el uréter.

11. Por medio de disección roma siga el trayecto del uré-ter en sentido inferior.
Observe que la porción abdomi-nal del uréter pasa por detrás de los vasos
testiculares (u ováricos) y cruza por la superficie anterior del músculo psoas mayor.
La disección de la porción pélvica del uréter se llevará a cabo con las vísceras
pélvicas.

133
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

12. Coloque de nuevo el riñón izquierdo en su posi-ción anatómica correcta.

13. Despeje la vena renal derecha relativamente corta. Advierta que carece de
tributarias.

14. Doble la vena cava inferior hacia abajo y ligeramente hacia la derecha.
Identifique la arteria renal derecha, que yace detrás de la vena renal derecha y la
vena cava inferior. Observe que la arteria renal derecha es más larga que la
izquierda. La pelvis renal derecha se en-cuentra por detrás de la arteria renal
derecha.

15. Siga el trayecto del uréter en sentido inferior y ob-serve su relación con los
vasos testiculares (u ová-ricos) derechos.

16. En una ilustración, repase las relaciones de los ri-ñones:

• La glándula suprarrenal se encuentra por arriba del riñón.

• A través del peritoneo, el riñón derecho se en-cuentra en contacto con la flexura


cólica dere-cha, la superficie visceral del hígado y la se-gunda porción del duodeno.

• A través del peritoneo, el riñón izquierdo se en-cuentra en contacto con la cola del
páncreas, la flexura cólica izquierda, el estómago y el bazo.

17. Divida el riñón izquierdo en una mitad anterior y otra posterior cortándolo en
sentido longitudinal a lo largo de su borde lateral. Abra ambas mitades del riñón
como libro.

18. Identifique las estructuras siguientes

• Cápsula renal – cápsula fibrosa que se puede separar de la superficie del riñón.

• Corteza renal – zona externa del riñón (33% de su espesor)

• Médula renal – zona interna del riñón que consta de pirámides y columnas
renales (aproxi-madamente 66% de su espesor).

• Seno renal – espacio dentro del riñón ocupado por la pelvis, cálices, vasos,
nervios y grasa renales.

• Papila renal – vértice de la pirámide renal que se proyecta dentro de un cáliz


menor.

134
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

• Cáliz menor – cavidad semejante a una copa que corresponde al principio del
sistema de conductos extrarrenales. Varios cálices menores se combinan para
formar un cáliz mayor.

• Cáliz mayor – dos o tres por riñón que se com-binan para formar la pelvis renal.

• Pelvis renal – extremo con forma de embudo del uréter que yace dentro del seno
renal.

• Uréter – conducto muscular que transporta orina del riñón a la vejiga.

GLÁNDULAS SUPRARRENALES

Las glándulas suprarrenales son frágiles y se rompen con facilidad. Se


encuentran muy cercanas a los polos superiores de los riñones. Son glándulas en-
docrinas muy vascularizadas.

1. Observe que la forma de la glándula suprarrenal derecha es triangular. Una


parte de esta glándula yace detrás de la vena cava inferior.

2. Observe que la glándula suprarrenal izquierda tiene forma semilunar.

3. La glándula suprarrenal recibe arterias múltiples. Identifique las estructuras


siguientes:

• Arterias suprarrenales superiores – se originan a partir de la arteria frénica


inferior.

• Arteria suprarrenal media – se origina a par-tir de la aorta cerca del tronco


celíaco.

• Arteria suprarrenal inferior – se origina a partir de la arteria renal.

4. Observe que la vena suprarrenal izquierda desemboca en la vena renal


izquierda. La vena suprarrenal derecha desemboca directamente en la vena cava
inferior.

5. Las glándulas suprarrenales reciben numerosas fibras nerviosas simpáticas.

135
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

AORTA ABDOMINAL Y VENA CAVA INFERIOR

1. En una ilustración estudie la aorta abdominal. Observe que la aorta abdominal


tiene tres tipos de ramas:

• Arterias impares hacia el aparato digestivo – tronco celíaco y arterias


mesentéricas superior e inferior

• Arterias pares hacia los tres órganos pares del abdomen – arterias
suprarrenales, renales y testiculares u ováricas

• Arterias pares hacia la pared abdominal – arteria frénica inferior y lumbar

2. Identifique cuando menos una arteria lumbar. Cuatro pares de arterias lumbares
irrigan la pared abdominal posterior. Siga el trayecto de una arteria lumbar hasta su
origen en la cara posterior de la aorta abdominal. Observe que las arterias lumbares
pasan profundamente debajo del músculo psoas mayor.

3. Observe la bifurcación de la aorta abdominal a nivel de la vértebra L4. En una


persona delgada, el ombligo se proyecta por arriba de la bifurcación de la aorta.

4. Identifique las arterias ilíacas comunes, que se originan en la bifurcación de la


aorta. Las arterias ilíacas comunes irrigan la pelvis y los miembros inferiores.

5. Examine la vena cava inferior y sus tributarias. Recuerde que un segmento de


la vena cava inferior fue extraído con el hígado. Advierta que la vena cava inferior
no tiene tributarias viscerales impares puesto que el sistema porta hepático recoge
sangre del aparato digestivo. Examine la vena porta hepática. Recuerde que la
vena porta hepática desemboca en el hígado y que las venas hepáticas
desembocan en la vena cava inferior.

PARED ABDOMINAL POSTERIOR

1. Aparte el riñón y la glándula suprarrenal hacia la línea media (no corte sus vasos)
y con las manos extraiga la grasa restante y la fascia renal de la pared abdominal
posterior.

2. Identifique el músculo psoas mayor. El psoas mayor se origina en las vértebras


lumba-res (cuerpos, discos intervertebrales y apófisis transversas). Se inserta en el

136
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

trocánter menor del fémur. El psoas mayor es un flexor poderoso del muslo y la
columna vertebral.

3. Busque el músculo psoas menor. El psoas menor no existe en cerca de 40 %


de los casos y algunas veces sólo existe en un lado del cadáver. El psoas menor
tiene un tendón plano largo que cruza de-bajo de la superficie anterior del psoas
mayor hasta su inserción en la eminencia iliopúbica y la línea arqueada del ilion.

4. Identifique el músculo ilíaco. El músculo ilíaco se origina en la fosa ilíaca. Se in-


serta en el trocánter menor del fémur. El músculo ilíaco flexiona el muslo. El
músculo ilíaco y el psoas mayor forman una unidad funcional y juntos se conocen
como músculo iliopsoas.

5. Identifique el músculo cuadrado lumbar. Se origina en la duodécima costilla y


las apófisis transversas lumbares. Sus inserciones son el ligamento iliolumbar y la
cresta ilíaca. El músculo cuadrado lumbar flexiona la columna vertebral hacia los
lados y fija el extremo inferior de la caja torácica durante la respiración.

6. Examine el músculo transverso del abdomen. Este músculo se forma en la


porción lateral de la pared abdominal posterior. Se ubica detrás del cuadrado
lumbar.

7. En una ilustración y en el modelo de disección, estudie las relaciones entre los


riñones y la pared abdominal posterior (fig. 4-46). Verifique que la superficie dorsal
de cada riñón esté relacionada, a través de la grasa y fascia renal, con el
diafragma, los músculos psoas mayor, el cuadrado lumbar y el transverso del
abdomen. El polo superior del riñón derecho se encuentra a nivel de la duodécima
costilla. El polo superior del riñón izquierdo es ligeramente más alto, a nivel de la
undécima costilla.

PLEXO LUMBAR

Los nervios de la pared abdominal posterior se originan a partir de las ramas


ventrales de los nervios espinales T12 a L4. El plexo lumbar (L1 a L4) se forma
dentro del músculo psoas mayor y sus ramas se obser-van saliendo del borde
lateral de este músculo. El plexo lumbar se puede observar únicamente después de

137
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

ex-traer el músculo psoas mayor. Realice la disección del plexo lumbar únicamente
del lado izquierdo. Puesto que cada rama del plexo lumbar atraviesa el músculo
psoas mayor a una profun-didad distinta, es necesario seguir el trayecto de cada
nervio en sentido proximal hasta el psoas mayor, reti-rando el músculo fragmento
por fragmento. La rami-ficación de los nervios del plexo lumbar es variable. Utilice
las relaciones periféricas de los nervios (su re-gión de distribución o un punto de
salida a partir de la cavidad peritoneal) para su identificación positiva.

1. Identifique el nervio genitofemoral. Se ubica en la superficie anterior del psoas


mayor. Es el nervio motor del músculo cremáster (por-ción genital) e inerva una
pequeña porción de la piel situada en posición inferior y medial al liga-mento
inguinal (porciones genital y femoral). Las dos porciones del nervio genitofemoral se
dividen en la superficie anterior del psoas mayor por arriba del ligamento inguinal.

2. Separe por medio de disección roma la fascia ex-traperitoneal de la pared


abdominal posterior a un lado del músculo psoas mayor. Las ramas del plexo
lumbar se ubican en la fascia extraperitoneal, por lo que se debe tener cuidado al
mover el instru-mento para la disección paralelo al trayecto de los nervios .

3. Para encontrar el nervio subcostal, palpe la duo-décima costilla y busque el


nervio subcostal apro-ximadamente a 1 cm debajo.

4. Encuentre los nervios iliohipogástricoe ilioin-guinal. Descienden de manera


abrupta a través de la superficie anterior del músculo cuadrado lum-bar. Con
frecuencia estos dos nervios se originan a partir de un tronco común y no se
separan hasta llegar al músculo transverso del abdomen. Para identificar con
seguridad el nervio ilioinguinal, siga su trayecto hasta el anillo inguinal superficial.

5. Identifique el nervio cutáneo femoral lateral. Este nervio cruza debajo del
ligamento inguinal cerca de la espina ilíaca anterior superior. Este nervio inerva la
piel de la porción lateral del muslo.

6. Identifique el nervio femoral. Se encuentra en la porción lateral del músculo


psoas mayor en el surco entre los músculos psoas mayor e ilíaco. El nervio femoral
inerva estos dos músculos. Pasa de-bajo del ligamento inguinal y proporciona
ramas motoras y sensitivas a la porción anterior del muslo.

7. Para encontrar el nervio obturador, introduzca el dedo en la fascia


extraperitoneal en la cara medial del psoas mayor y muévalo paralelo al músculo,

138
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

creando un espacio entre el psoas mayor y los vasos ilíacos comunes. El nervio
obturador pro-porciona inervación motora y sensitiva a la por-ción medial del muslo.

8. Identifique el tronco lumbosacro. Es un nervio grande formado por la


contribución de los ramos ventrales de L4 y todos los ramos ventrales de L5. El
tronco lumbosacro llega hasta la pelvis para unirse al plexo sacro.

SEGMENTO ABDOMINAL DEL TRONCO SIMPÁTICO

1. Estudie la ubicación del tronco simpático en un corte transversal del abdomen.


Observe que el tronco simpático se encuentra en el cuerpo vertebral entre el pilar
del diafragma y el músculo psoas mayor.

2. Identifique los nervios esplácnicos lumbares que viajan en sentido anterior


desde el tronco simpático hasta el plexo aórtico de nervios autónomos.

3. Identifique los ramos comunicantes que viajan en sentido posterior desde los
ganglios simpáticos hasta los ramos ventrales lumbares. Observe que cada ramo
comunicante viaja en posición profunda entre el músculo psoas mayor y el cuerpo
verte-bral. Los ramos grises de la región lumbar inferior son los más largos del
cuerpo puesto que el tronco simpático cruza la superficie anterolateral de los
cuerpos vertebrales lumbares.

4. En una ilustración repase la inervación autónoma de las vísceras abdominales.

DIAFRAGMA

1. Con disección roma, retire el peritoneo parietal y el tejido conjuntivo de la


superficie abdominal del diafragma

2. Identifique las porciones del diafragma:

• Tendón central – centro aponeurótico del dia-fragma, que constituye la inserción


de sus por-ciones musculares

• Porción esternal – formada por dos haces pe-queños de fibras musculares que
se adhieren a la superficie posterior de la apófisis xifoides

139
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

• Porción costal – las fibras musculares que se insertan en las seis costillas
inferiores y sus car-tílagos costales

• Porción lumbar – formada por dos pilares (de-recho e izquierdo)

3. Identifique el pilar derecho. Los oríge-nes del pilar derecho del diafragma son
los cuerpos de las vértebras L1 a L3. El hiato esofágico es un orificio ubicado en el
pilar derecho.

4. Observe el pilar izquierdo. Los orígenes del pilar izquierdo del diafragma son los
cuer-pos de las vértebras L1 a L2.

5. Identifique los ligamentos arqueados. Los liga-mentos arqueados son


engrosamientos de la fascia que sirven como origen de algunas fibras muscula-res
del diafragma.

• Ligamento arqueado lateral – forma un puente para la superficie anterior del


músculo cuadrado lumbar

• Ligamento arqueado medial – forma un puente para la superficie anterior del


músculo psoas mayor

• Ligamento arqueado medio (impar) – forma un puente para la superficie anterior


de la aorta y el hiato aórtico.

6. El diafragma posee tres orificios grandes. Identifique las estructuras siguientes:

• Orificio de la vena cava – atraviesa el tendón central (a nivel de la vértebra T8).

• Hiato esofágico – atraviesa el pilar derecho (a nivel de la vértebra T10).

• Hiato aórtico – cruza por detrás del diafragma (a nivel de la vértebra T12).

7. Los nervios frénicos derecho e izquierdo inervan el diafragma. Cada nervio


frénico proporciona iner-vación motora a una mitad del diafragma (un hemi-
diafragma). El nervio frénico proporciona la mayor parte de la inervación sensitiva
de las superficies ab-dominal (peritoneo parietal) y torácica (pleura parie-tal) del
diafragma. Las cubiertas pleural y peritoneal de la porción periférica del diafragma
reciben fibras sensitivas de los nervios intercostales inferiores (T5 a T11) y del
nervio subcostal.

140
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

8. Identifique el nervio esplácnico mayor en el tórax y siga su trayecto hasta la


superficie superior del diafragma.

9. Introduzca una sonda acanalada a través del dia-fragma paralela al nervio


esplácnico mayor. Advierta que este nervio penetra en el pilar hasta entrar en la
cavidad abdominal.

10. Observe que la porción principal del nervio esplác-nico mayor se distribuye
hacia el ganglio celíaco, donde establecen sinapsis sus axones simpáticos.
Además, el nervio esplácnico mayor también inerva la glándula suprarrenal.

11. Encuentre los ganglios celíacos. Se ubican en los lados derecho e izquierdo
del tronco celíaco cerca de su origen en la aorta. Los ganglios celíacos son los
ganglios simpáticos más grandes ubicados en la superficie de la aorta. 12. En una
ilustración o libro de texto examine la iner-vación autónoma del las vísceras
abdominales

REGION INGUINO – ABDOMINAL

DISECCION

Marquense los límites de la región como están indicados, con tinta. Además,
localícese por palpación y márquese con tinta la espina del pubis y la espina ilíaca
anterior y superior, ambas muy importantes en clínica.

Cortes:

Transversal que parta de la espina ilíaca hacia la línea media, que coincide con el
límite superior de la región. Interno vertical que parta déla espina del pubis y
ascienda hasta encontrar al corte transversal. Este corte coincide con el límite
interno de la región. La bisagra corresponde al arco femoral o sea a la línea que va
de la espina ilíaca anterosuperior a la del pubis.

Siguiendo a los cortes descritos y solamente de piel, levantamos a este plano que
es delgado, móvil o desplazable en toda la región, menos a nivel del arco femoral
en donde sufre adherencias. Está cubierta de pelo en su parte interna, que el
alumno debe cortar con tijeras para observar bien la superficie de la piel. En cirugía
es obligatorio rasurarla.

141
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

Levántese ahora al tejido celular, y se verá claramente que está formado por dos
planos, uno muy grasoso llamado areolar, que se continua con el del muslo sin
interrupción, y otro pobre en grasa, pegado a la aponeurosis, que forma la fascia
superficial, en el que corren vasos y nervios llamados superficiales.

En el tejido celular encontramos también el grupo ganglionar Inguinal que en


algunos cadáveres está muy desarrollado por los padecimientos que en vida
tuvieron y son perfectamente identificados. En otras ocas lonormalidad premortem.
Cuando existan, diséquense, y el alumno debe tomar alguno entre sus dedos y
apreciar su forma y volumen.

La fascia superficial se fija en el arco femoral.

Para disecar el conducto inguinal seguiremos una técnica muy parecida a la


quirúrgica. Comenzaremos por identificar a la espina del pubis para descubrir y
limpiar al pilar externo del anillo inguinal interno o subcutáneo del conducto inguinal.
Sobre este pilar encontramos en el hombre elcordónespermáticoy enla mujer el
ligamento redondo. Bien limpio el pilar externo que se inserta en la espina del pubis,
procederemos a limpiar al pilar interno que se inserta en la sfnfisis del pubis, y de
esta manera habremos localizado al referido anillo interno del conducto inguinal.

En el hombre este anillo tiene dimensiones variables, pero siempre se encuentra,


no asf en la mujer que pueden estar tan cerca uno del otro que ambos pilares
apenas dejan una hendedura para que pase el ligamento redondo. Se dificulta
encontrar a este anillo en estas condiciones, pero la espina del pubis es excelente
referencia para encontrarlo. Una vez disecado este anillo, el alumno debe observar
que la espina del pubis, repetimos, es una referencia preciosa para localizarlo en
clínica. Levantando al máximo el pilar interno, vemos unas fibras diagonales hacia
abajo y afuera, insertándose inmediatamente por fuera de la espina del pubis: es el
tercer pilar que entra en la formación del anillo inguinal, llamado pilar de Colles o
pilar posterior. El alumno debe poner su dedo índice en este anillo y familiarizarse
con su forma anular, que en clínica deberá apreciar a través de la piel del escroto
en el hombre y del gran labio en la mujer.

Primero recordemos que el conducto inguinal mide de 3 a 4 centímetros y que su


proyección corresponde a una línea que representa la bisectriz del ángulo formado
por el propio arco femoral y el borde externo del recto anterior del abdomen. Ahora
introduzcamos una sonda acanalada por el anillo inguinal ya disecado, y sigamos la

142
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

dirección del conducto en toda su extensión. Con la sonda así dispuesta, podemos
levantar la pared anterior del conducto o sea la aponeurosis del gran oblicuo o su
tendón de inserción, como también se llama. Esta pared anterior del conducto
representada, repetimos, por la aponeurosis del gran oblicuo, será incindida, tal
como lo hace el cirujano, para abrir el conducto. Tómese con una pinza de Pean o
de Kocher el labio superior de la incisión, levantándolo lo suficiente para dejar a
descubierto al borde carnoso de los músculos oblicuo menor y transverso, que al
seguirlos hacia adentro descubrimos e identificamos su tendón conjunto.

Tomemos también con pinzas el labio inferior de la incisión, y lo levantamos y


abatimos lo más que se pueda para despejar el tejido celular que envuelve al
cordón espermático, si el cadáver es masculino, o al ligamento redondo, si es
femenino, hasta llegar a descubrir la cintilla blanca, brillante y nacarada ilio-pubiana.
El borde carnoso de los músculos oblicuo menor y transverso, y su tendón conjunto,
forman la pared superior del conducto inguinal y la cintilla ilio-pubiana la pared
inferior. Sépalo el alumno y no olvide que el cirujano que no descubra estos
elementos no podrá llevar a cabo una correcta técnica de hernioplastfa o sea la
cura quirúrgica de la hernia inguinal. Tomamos al cordón espermático o al
ligamento redondo, según el caso, lo limpiamos, y con un gancho separador lo
rechazamos hacia abajo para dejar a descubierto a la fascia transversalis que forma
la pared posterior del conducto inguinal. Esta fascia transversalis, al reunirse hacia
abajo con la aponeurosis del gran oblicuo a nivel del arco femoral, forma
prácticamente la pared inferior del conducto inguinal, reforzada por la ya
mencionada cintilla ilio-pubiana. Esta fascia transversalis es delgada, pero
perfectamente identificable, y debemos recordar que está reforzada por los
ligamentos de Henle y de Hesselbach, que en disección no son identificables. 6o.
Una vez estudiadas las cuatro paredes del conducto inguinal, la anterior, inclndida,
representada por la aponeurosis del oblicuo mayor, la inferior por la cintilla ilio-
pubiana, la superior por los bordes carnosos del oblicuo menor y transverso, y la
posterior por la fascia transversalis, procedamos a disecar los vasos epigástricos
que limitan por dentro la fosita inguinal externa, que representa al extremo externo
o profundo del conducto inguinal. Esta fosita inguinal externa se proyecta por un
punto situado aun centímetro por arriba de la parte media del arco femoral
Tomando como referencia este punto, hacemos una incisión pequefia en la fascia
transversalis, e inmediatamente por dentro del cordón espermático o del ligamento
redondo encontramos a los vasos epigástricos que cruzan a manera de asa a los

143
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

referidos elementos. La arteria epigástrica lleva una trayectoria que se proyecta por
una línea que va de la parte media del arco femoral al ombligo. Cuando se trabaje
en el hombre, diséquense los elementos del cordón, sabiendo que está constituido
por el conducto deferente, las arterias deferenclal, espermática y funicular, dos
paquetes de venas, uno anterior formado por tres o cuatro venas y otro posterior de
cuatro a cinco v e nas, y filetes nerviosos en número de dos o tres que representan
al plexo simpático deferenclal y al nervio espermático del plexo renal. Que el
alumno palpe el conducto deferente y se dé cuenta de su forma, volumen y
consistencia, que no cambia gran cosa del vivo al muerto. En la mujer téngase
presente que a veces el ligamento redondo es un cordón grueso y visible, y otras
veces se disocia en pequeños haces y no es posible identificarlo. Que el alumno
haga la práctica de suturar el tendón conjunto con la cintilla ilio-pubiana, dejando
al cordón espermático por detrás o por delante, según las diversas técnicas. Este
ejercicio le dará una idea de la técnica operatoria de la hernioplastía.

REGION INGUINO - CRURAL

Triángulo de Scarpa.

DISECCION

Cortes: Superior de la espina ilíaca anterosuperior a la del pubis, o sea siguiendo el


arco femoral. Inferior horizontal que coincide con el límite inferior de la región o sea
a la prolongación del pliegue glúteo. Medio vertical sobre la línea media que
descienda de la parte media del arco femoral al corte inferior. Bisagras interna y
externa.

Levántese con limpieza la piel, tomando en cuenta que es delgada, móvil, excepto a
nivel del arco femoral, donde sufre adherencias. Está cubierta de pelo en la parte
interna, rica en glándulas sebáceas y sudoríparas.

El tejido celular se levanta con los mismos cortes. Es más grueso por dentro que
por fuera. Se encuentran dos planos: uno superficial o areolar, muy rico en grasa, y
otro profundo o laminar, en contacto con la aponeurosis en donde corren los vasos
y nervios superficiales. Ambos planos están separados por una laminilla celular que
es tersa y brillante. Al disecar este plano encontramos a la vena safena interna,
cuyo cayado se cruza sobre el borde superior del ligamento de Alian Burns y va a
desembocar a la vena femoral. Su punto de proyección arriba mencionado es
bastante preciso. La vena safena interna va acompañada a veces de una accesoria

144
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

que es posible tomarla como el tronco principal. Las dos se reúnen para formar el
cayado de la safena, que el alumno debe sisecar con esmero, así como a las venas
que en él desembocan, que son cuatro o cinco, tal como lo hace el cirujano que las
descubre, principalmente a la safena interna, para abrirlas, extraer coágulos y
ligarlas en caso de la flebotrombosis. Esta disección es un remedo quirúrgico. Fijar
bien el cayado de la safena, es recordar que sobre este punto se trazan dos líneas,
una horizontal y otra vertical, para dividir a los ganglios linfáticos de la región en
cuatro cuadrantes o grupos, siendo el superointerno el más importante porque a
estos ganglios superficiales van a desembocar los vasos linfáticos de los órganos
genitales externos. Su inflamación se llama vulgarmente incordios o bubones. su
forma y volumen. No siempre son identificables, pues depende de los
padecimientos remortem.

Levantado bien el plano grasoso, y respetando a la safena interna, descubrimos el


plano aponeurótico y buscaremos y limpiaremos el ligamento de Alian Burns en
inmediata relación con la parte inferior del cayado de la safena interna. Entre ambos
elementos se encuentra un ganglio linfático. Al limpiar el ligamento de Alian Burns,
el alumno debe recordar que marca el extremo inferior del conducto crural.

La disección del plano aponeurótico nos obliga a tomar en cuenta que la


aponeurosis femoral tiene caracteres distintos por abajo y por arriba del ligamento
de Alian Burns. Por abajo es gruesa, fuerte, bien constituida; lo mismo que
afaductor mediano y el ligamento de Alian Burns es dependencia de la aponeurosis
femoral que va de la vaina del sartorio a la del aductor, condensada en fibras
arciformes, inmediatamente por debajo del cayado de la safena interna. Por arriba
del ligamento, la aponeurosis pierde su aspecto de lámina fibrosa, para asar por
delante de los vasos femorales, arteria y vena, formada por trabéculas fibrosas
dispuestas en distintas direcciones, dejando entre sí innumerables espacios u
orificios, lo que le vale el nombre de "fascia cribiformis", infiltrada de la grasa del
tejido celular subcutáneo.

Del cayado de la safena interna hacia el arco femoral, se incinde la fascia


cribiformis con mucho cuidado para descubrir a la vena femoral que se ve de color
moreno, un tanto aplanada. Inmediatamente hacia afuera se descubre a la arteria
femoral. Entre ambos vasos se diseca un delgado tabique llamado intervascular,
perfectamente identificable. La arteria se ve de color más claro que la vena,
cilindrica, y a la palpación presenta cierta consistencia que no tiene la vena. Se

145
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

limpian estos vasos desde el ligamento de Alian Burns hasta el arco femoral, y se
verá casi a nivel de este ligamento que la arteria se bifurca para dar nacimiento a la
femoral profunda, tan gruesa como la superficial.

Recordemos que el conducto crural tiene dos extremos y un trayecto. El extremo


inferior lo marca el ligamento de Alian Burns, el superior es el anillo crural. El
trayecto mide de dos a tres centímetros y tiene tres paredes: una anterior que es la
propia fascia cribiformis; una osterointerna representada por la aponeurosis del
pectíneo; y la posteroexterna por la aponeurosis del psoas ilíaco, llamada también
fascia ilíaca.

Disecadas la arteria y la vena femorales, debemos tener presente que el conducto


crural tiene tres compartimientos. El arterial o externo, el venoso o medio y el
espacio virtual o interno denominado iníundibulum crural, que es el recorrido de las
hernias. Rechacemos hacia afuera con un gancho separador a los vasos, y
dejaremos a descubierto a la aponeurosis del pectíneo, a la que haremos una
ventana para ver al músculo cuyas fibras van hacia abajo y afuera. Entre la vena y
la unión de la fascia cribiformis con la aponeurosis del pectíneo, vemos al
níundibulum crural que como ya se dijo es la porción vacía del conducto, y que por
arriba se continúa con el septum crural, o sea la porción desocupada del anillo
crural, que vamos a disecar a continuación.

Ahora separemos hacia adentro a los vasos femorales y descubramos a la fascia


ilíaca o sea la aponeurosis del psoas Ilíaco. Le abrimos una ventana y vemos al
músculo y también al nervio crural, cuyo tronco se divide en sus cuatro ramas a
este nivel aún agrupadas: safeno interno, músculo-cutáneo interno, músculo-
cutáneo externo y crural. Hemos visto, pues, las tres paredes del conducto crural
con sólo desplazar a los vasos hacia adentro o hacia afuera.

Disección del anillo crural o extremos superior del conducto. Con una pinza se
levanta el arco femoral lo más que se pueda. Con un gancho separador se
desplaza a la vena femoral hacia afuera. Con este dispositivoencontramos
inmediatamente sobre el lado interno de la vena al ganglio linfático de Cloquet,
envuelto en una atmósfera celulograsosa. Se quita

el ganglio y se limpia esta atmósfera, y queda a descubierto el ligamento de


Gimbernat, que representa al ángulo interno del anillo. Se introduce el dedo índice
en este espacio comprendido entre la vena femoral, el arco femoral y el ligamento

146
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

de Gimbernat, con el pulpejo vuelto hacia abajo con el objeto de palpar la cresta
pectínea forrada por fibras aponeuróticas que forman el ligamento de Cooper. Con
esto hemos hecho la disección del "septum crural", o sea el espacio desocupado
del anillo crural por donde se deslizan las hernias crurales. Despegúese el
ligamento de Cooper de la cresta pectínea mediante un pequeño corte transversal
rasando el plano óseo y tómesele con una pinza para apreciar su resistencia.

Ahora rechacemos enérgicamente ala arteria hacia adentro para dejar descubierto
el ángulo externo del anillo crural, formado por la unión del arco femoral y la fascia
ilíaca, condensada por fibras que reciben el nombre de cintilla iliopectínea. El arco
femoral debe estar siempre levantado con la pinza para hacer más manifiesto este
ángulo. A un centímetro de esta cintilla iliopectínea estala abertura que hicimos en
la fascia ilíaca para ver el músculo psoas ilíaco y el nervio crural. Tomando con una
pinza a esta cintilla, vemos que se interpone entre la arteria femoral y el nervio
crural. En otras palabras, la cintilla iliopectínea separa al nervio de la arteria. Con el
arco femoral, la cintilla iliopectínea y el ligamento de Cooper, hemos disecado los
tres lados del anillo crural, y con el ligamento de Gimbernat su ángulo interno, que
es el más importante tor mediano o primer aductor de dentro a fuera, hasta llegar a
su borde interno, y abramos en toda la extensión de la región a la vaina del sartorio,
y veremos cómo ambos músculos se cruzan a nivel del límite inferior de la
preparación, formando el ángulo inferior o vértice del triángulo de Scarpa. El
sartorio o costurero es un músculo plano, acuitado, como de cuatro centímetros de
ancho y que se inserta por arriba en la espina ilíaca anterosuperior y abajo en el
cóndilo interno de la tibia, formando con el recto interno y el semitendinoso la "pata
de ganso". Sus fibras llevan una dirección oblicua hacia abajo y adentro, en sentido
contrario a la dirección que llevan las fibras del aductor mediano, que se inserta por
arriba en el pubis, en una pequeña extensión comprendida entre la sínfisis y la
espina, y por abajo en la línea áspera del fémur. Veremos ahora que el arco
femoral, el sartorio y el aductor mediano integran el triángulo de Scarpa, que
encierra a su vez otro triángulo formado por el mismo arco femoral, el pectíneo por
dentro y el psoas ilíaco por fuera, cuyas aponeurosis hemos ya abierto cuando
disecamos las paredes del conducto crural. El pectíneo se inserta por arriba en la
sínfisis del pubis y en su espina, en la cresta pectínea y en el igamento de Cooper,
y por abajo en la línea áspera del trocánter menor. El psoas ilíaco va a insertarse
por medio de un solo tendón en el trocánter menor y dentro de su vaina corre el
nervio crural, como ya lo vimos. Levantando por un lado la aponeurosis del aductor

147
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

mediano, y por el otro la del sartorio, vemos cómo se levanta el ligamento de Alian
Burns por debajo del cayado de la safe na interna, como ya lo vimos también. 12o.
Como ejercicio propedéutlco, abramos en su parte media y en sentido longitudinal
al psoas iliaco, y separando fuertemente los labios de la sección, veremos a la
cápsula de la articulación coxo-femoral a la que abrimos para ver la cabeza del
fémur y su cuello, cuya proyección ya marcamos y ahora nos resta ver su fidelidad.
Veremos también cómo al rotar el muslo hacia adentro, la cabeza casi se oculta, y
en cambio al rotarlo hacia afuera la cabeza se queda a descubierto y accesible a la
palpación. Observemos también la relación de la cabeza femoral con la arteria
femoral y con el arco del mismo nombre.

Separemos con un gancho hacia adentro al aductor mediano, y con otro gancho al
pectineo hacia afuera, y veremos al obturador externo cruzado por el nervio
obturador y vasos que los acompañan a su salida del conductosubpúbico.
Diséquese el nervio hasta el conducto ubpúbico.

Señalemos con pinzas el anillo interno del conducto inguinal, así como el
septum crural y el conducto subpúbico, y formaremos un triángulo que yo
llamo "triángulo hemiario", por corresponder a tres zonas hemiarias.

148
GUIA DE DISECCION - CATEDRA DE ANATOMIA UNA - PUNO

BIBLIOGRAFIA

 Negrete Herrera Jose, TECNICA DE DISECCIONES Y ATLAS DE


ANATOMIA HUMANA. Mendez Editores Decimo cuarta edicion - UNAM
Mexico 2008

 Tank W. Patrick. GRANT – MANUAL DE DISECCION. Universidad de


ARKANSAS EE.UU. 15va edicion 2008

149

También podría gustarte