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"Buscad a YHVH mientras puede ser hallado, llamadle en tanto que está cercano." (Isaías 55:6).

"Ella [La Toráh] es más preciosa que rubíes’ (Proverbios II


Ciertamente en ella están ocultos innumerables tesoros, de modo que David, al considerar la Toráh en el espíritu de la Sabiduría y al comprender cuántas ve
maravillosas se despliegan desde ella, hubo de exclamar: ‘Abre tú mis ojos, para que yo pueda contemplar cosas maravillosas de Tu Ley’ (Salmos CXIX, 18)
Zóhar). “Rabbí Simeón dijo: No hay en la Toráh una palabra que no contenga sublimes y preciosas enseñanzas místicas…” (El Zóhar).

SHEMÁ YISRA'EL

Para entender mejor este estudio, rogamos al amable lector,


leer los estudios titulados: Amar a Dios por sobre todas las
cosas, y El Árbol de la Vida.

En el Santo Evangelio según San Marcos (12:29-34), está


escrito que nuestro Señor Jesús el Cristo da testimonio de que
la "Shemá Yisrael..." es el primero y el principal mandamiento
de todos:

"... El primer mandamiento de todos es: Oye, Israel


[Shemá Yisrael], el Señor nuestro Dios, el Señor
uno es. Amarás pues al Señor tu Dios de todo tu
corazón, y de toda tu alma, y de toda tu mente, y de
todas tus fuerzas; este es el principal mandamiento.
Y el segundo es semejante á Él: Amarás á tu
prójimo como á ti mismo. No hay otro
mandamiento mayor que éstos..."

El Verdadero y más antiguo Nombre de Dios: "IAO", está


escrito en un fragmento hallado en Qumrán, clasificado con los
nombres "4Q120 (4QpapLXXLevb) 4QSeptuagint Leviticusb").
En este Antiguo Texto Griego, de la Septuaginta, hallado en
Qumrán, del Libro del Levítico de Moisés (Levítico 4: 27),
datado del Siglo I anterior a nuestra era Cristiana, el Nombre
de Dios está escrito: "IAW" (IAO).

Este pequeño, pero a la vez, preciosísimo y valioso fragmento


del Libro del Levítico de Moisés, hallado en una de las cuevas
de los alrededores de Qumrán (en la Cueva 4: 4Q120,
fragmento 20, 4), a orillas del Mar Muerto, que tiene escrito el
Nombre Inefable de Dios "IAW" (IAO), es otra prueba
incuestionable de que el Nombre de Dios del Profeta Moisés es
IAO...

La pronunciación secreta del Santo Tetragrammatón YHVH o


IEVÉ es IAO (nuestro ELOHIM verdadero), que nunca se debe
de pronunciar en vano. Los Dos Nombres: IAO ELOHIM,
significan el Señor nuestro Dios, porque "el Señor es Dios"; es
decir, IAO es ELOHIM, porque "forman una unidad
indivisible", como está escrito:

"A ti te fue mostrado esto, para que supieses que


sólo el Señor [IAO] es Dios [ELOHIM]; ningún
otro hay fuera de él." (Deuteronomio, 4: 35).

"Conoce este día, y recapacítalo en tu corazón, que


el Señor [IAO] es Dios [ELOHIM[ arriba en el
cielo, y abajo sobre la tierra; no hay otro."
(Deuteronomio, 4: 39).

La pronunciación de la "Shemá" o "Schema", en Hebreo, es:

"ShemÁ Yisra'el, IAO ELOHIM, IAO EjaD".


("Oye, oh, Yisrael, IAO ELOHIM, IAO Uno es").

O, también:

"ShemÁ Yisra'el, IEVE ELOHIM, IEVE EjaD" (*)


("Oye, oh, Yisrael, IEVE ELOHIM, IEVE Uno es").

* (Shemá Israel YHVH Elóhim YHVH ejad).

Su respuesta en Hebreo, es:

"Barukh shem kevad malkhuta le-alam va-ed".


("Bendito sea el Nombre de la Gloria de Su Reino
por siempre jamás").

En la pronunciación de ambas recitaciones "está el resumen de


toda la Toráh".
El Árbol de la Vida de la Kabbaláh con Sus Diez Sephiroth o
Vasijas de Luz Espiritual. La Sephirah Oculta "Daath"
(Ciencia, Conocimiento, Gnosis) es el Alma Oculta de Tiféreth.

"Cuando Israel, con intención perfecta, proclama la Unidad,


misterio que la Shemá contiene, sale del oculto mundo superior
una luz que se divide en setenta luces, y estas setenta luces se
dividen en las setenta ramas luminosas del Árbol de Vida.
Entonces el Árbol y todos los otros árboles del Jardín de Edén
emiten aromas suaves y alaban a su Señor, porque entonces la
Matrona [La Shejináh] Se prepara para entrar bajo la sombra
del palio, para allí unirse con su Esposo. Y todas las potencias
superiores se unen en un anhelo y una voluntad de estar unidas
en unión perfecta, sin separación alguna. Entonces el Esposo se
prepara igualmente para entrar bajo el Palio a fin de unirse con
la Matrona. Por eso proclamamos en voz alta: “Oye, oh Israel;
prepárate, tu Esposo ha venido para recibirte”. Y también
decimos: “El Señor nuestro Dios, el Señor es uno”, que
significa que los dos se han unido en uno, en una unión
perfecta y gloriosa, sin ningún asomo de separación que la
frustre. Tan pronto como los israelitas dicen “El Señor es
Uno”, para suscitar los seis aspectos, estos seis se unen entre sí
y ascienden en un ardor de amor y deseo. El símbolo de esto es
la letra Vav, cuyo valor numérico es seis, cuando se halla sola
sin estar unida a otra letra. Entonces la Matrona se prepara con
alegría y se adorna con deleite y Sus ayudantes La acompañan,
y en silencio de quietud Ella se encuentra con su Esposo. Y sus
doncellas proclaman “Bendito sea el Nombre de la Gloria de
Su Reino por siempre jamás”. Estas palabras se dicen en un
susurro, porque así es como ella debe presentarse a su Esposo.
¡Feliz es el pueblo que percibe estas cosas, que ordena sus
plegarias de acuerdo con este misterio da la Fe! Cuando el
Esposo se une con la Matrona sale del Sud un heraldo, que
proclama: “¡Despertad, oh, vosotras huestes superiores, y
desplegad las banderas del amor en honor de vuestro Señor!”
Entonces, uno de los jefes de la formación celestial, ese cuyo
nombre es Boél (Dios es en él), se adelanta y en sus manos hay
cuatro llaves, que obtuvo una de cada uno de los cuatro
rincones de la tierra. Una de las llaves lleva grabado el signo
de la letra Yod; la segunda, la letra Hei, y la tercera, la letra
Vav. Y él coloca estas tres llaves debajo de las ramas de! Árbol
de Vida. Luego estas tres se vuelven una. Entonces, la cuarta y
última llave, que lleva la segunda letra Hei, se junta a las tres
que se volvieron una. Y todas las huestes angélicas entran, por
medio de esas llaves, en el Jardín de Edén, donde proclaman, a
una sola voz, la unidad Divina en el mismo momento en que
ella se proclama aquí abajo. Entonces, la Shejiná, la Novia, es
conducida al Palacio del Rey, Su Novio, porque ahora Él se
halla completo en toda su belleza superior y puede proveerla de
todo lo que Ella necesita. Así, sus ayudantes. La traen a Él en
silencio. ¿Por qué en silencio? Para que ningún “extraño”,
ninguna mala potencia, pueda participar en el júbilo de ella.
Así como Él se unió arriba de acuerdo a seis aspectos, así
también Ella se une abajo según otros seis aspectos, de modo
que la unidad pueda completarse, arriba y. abajo, coma está
escrito: “El Señor será Uno y su Nombre Uno” (Zacarías XIV,
9). Seis palabras arriba —Shemá Israel YHVH Elóhim YHVH
ejad, correspondientes a los seis aspectos, y seis palabras
abajo, baruj shem kevod maljutó leolam vaed (Bendito sea el
Nombre de la gloria de su reino para siempre), que
corresponden a los otros seis aspectos. El Señor es uno arriba,
y Su Nombre es Uno abajo. Decimos esta respuesta
silenciosamente, aunque es una triunfante expresión de la
“Unidad, a causa del “mal ojo”, que aún tiene poder bajo la
presente dispensación…"

"Pero en la futura Edad Mesiánica [ahora, en estos tiempos de


"la última Generación", a partir del Año 2000, Año 5760 del
Calendario Judío], cuando el “mal ojo” haya dejado de existir
y no tenga dominio alguno sobre este mundo, proclamaremos
abiertamente y en voz alta la Unidad Divina y su pleno
cumplimiento. En el presente, como el “otro lado” aún adhiere
a la Shejiná, Ella no es enteramente Una, y, por eso, aunque en
el tiempo presente proclamamos la unidad, lo hacemos
silenciosamente, simbolizándola con las letras de la palabra
vaed (siempre), que por ciertas permutas, equivalen a las de la
palabra ejad (uno)."

"Pero en el tiempo que será, cuando ese otro lado sea apartado
de la Shejiná y desaparezca del mundo, esa unidad será
proclamada abiertamente. Cuando Ella entra bajo el palio y se
une con el Rey Superior, despertamos el júbilo de la Derecha y
de la Izquierda, como está, escrito: “Amarás al Señor tu Dios
con todo tu corazón”, etc., es decir, sin temor o presagio,
porque el “otro lado” no se acerca y no tiene poder aquí. Pero
mientras, Sus servidoras La traen al Rey, ellas deben mantener
un grande y solemne silencio. De esto es simbólico Jacob.
Antes de su muerte, cuando estuvo por hablar del “fin de los
días”, y la Shejiná lo abandonó, dijo a sus hijos: “Acaso
alguna mancha está pegada a mi o a mi simiente?”. Pero ellos
respondieron: “No, no hay tal mancha, ni hay falta alguna. Tu
corazón sólo el Uno lo posee, y, en cuanto nos concierne,
nosotros no tenemos contacto con el “otro lado o con alguno
de sus esbirros”. Al contrarío, nosotros, como tú, sólo estamos
unidos con el Rey, pues toda nuestra voluntad y propósito fue
separarnos del “otro lado”. Entonces dijo Jacob: “Bendito sea
el Nombre de la gloria de Su Reino por siempre jamás”. En
esa hora Jacob y sus hijos se convirtieron por un lapso en
retratos vivientes de la Shejiná aquí abajo. Jacob simbolizaba
los seis lados del mundo superior como un todo único, y sus
hijos fueron modelados a la semejanza de los seis aspectos
como se manifiestan en el mundo inferior. Ahora él deseaba
revelarles cierto “'fin”, porque, como lo hemos señalado antes,
en otra parte, hay un “fin de los días” (Ketz hayamim), que se
refiere al Reino Santo, al misterio de la Fe, al misterio del
Reino del Cielo. Y otro “fin de los días” (Ketz hayamim) que
es el misterio del Rey Culpable, del “otro Rey” gobernante de
los poderes de la oscuridad, y a este fin se lo llama “el fin de
toda carne”. Y bien, cuando Jacob percibió que la Shejiná se
retraía de él, interrogó a sus hijos en la forma que indicamos. Y
así Jacob y sus hijos proclamaron la unión del mundo de arriba
y del mundo de abajo, así también debemos hacerlo nosotros.
Bendito es aquel que concentra su mente y su voluntad, con
anhelo y humildad, en ese misterio. Bienaventurado es él en
este mundo y en el mundo por venir. Rabbí Jamnuna el
Anciano dijo: Esta promoción de la unidad en realidad ha sido
expuesta recta y justamente, y lo que acabamos de oír es
efectivamente muy verdadero. Y en el futuro, las palabras que
hemos pronunciado ahora se hallarán ante el Anciano de Días,
y de ningún modo avergonzadas." (El Zóhar).

Al pronunciar la "Shemá", hemos de hacerlo con devoción,


entregándonos totalmente a Dios, a nuestro Padre-Madre que
Es el Señor nuestro Dios interior, íntimo, individual, particular,
con todo nuestro corazón, y con toda nuestra alma, y con toda
nuestra mente, y con todas nuestras fuerzas.

"... hemos de concentrar nuestro Espíritu en el


principio de Unidad, en la unión de las dos
moradas; hemos de poner todo nuestro Ser, todos
los miembros de nuestro cuerpo, nuestra devoción
completa, en ese pensamiento de modo de elevarnos
y ligarnos a En-Sof (Infinito), y así alcanzar la
Unidad de los Mundos Superior e Inferior."

***

"Si en tu corazón no arde una inquietud que te


abrase hasta la consumación de tu cuerpo, no podrás
invocar ni a Dios ni al Espíritu Santo. Y no sabes
pedir y por eso tu hora aún no ha llegado." (V.M.
Judas de Kariot, "El Vuelo de la Serpiente
Emplumada"):

La "Shemá Yisrael", incluyendo Su respuesta, debe de ser


recitada, elevando nuestro corazón a Dios como se ha
explicado, al despertarnos en la mañana, y antes de conciliar el
sueño en la noche.

¡El Sagrado Nombre de Dios IAO, que es la pronunciación


secreta del Santo Tetragrammatón YHVH, pronunciado
también IEVÉ, nunca debe de pronunciarse en vano!

Al pronunciar en Oración diariamente dos veces la Schemá con


ambas recitaciones, en la mañana y en la noche, con verdadera
devoción, como se ha explicado, proclamamos la Unidad del
Nombre de Dios IAO ELOHIM y aceptamos recibir "el Yugo
del Reino del Cielo", y la Sagrada Shejináh que es nuestra
Madre Divina Kundalini, descansa sobre la cabeza de quien
recita debidamente la Schemá Yisrael, bendiciéndole y
protegiéndole.

"Nunca se apartará de tu boca esta Torá [este Libro


de la Ley], sino que día y noche meditarás en ella
[en él]." (Josué, 1:8).

Orar, Vivir y Realizar, la "Schemá Yisrael" completa, es


aceptar y llevar "el Yugo" del Reino de los Cielos, del que nos
habla nuestro Señor Jesús El Cristo:

"Venid á Mí todos los que estáis trabajados y


cargados, que Yo os haré descansar. Llevad Mi yugo
sobre vosotros, y aprended de Mí, que soy manso y
humilde de corazón; y hallaréis descanso para
vuestras almas. Porque Mi yugo es fácil, y ligera Mi
carga." (El Santo Evangelio Según San Mateo 11:
28-30).

Orando, Viviendo y Realizando la Schemá Yisrael, adviene a


nosotros el Reino de nuestro Padre que está en los Cielos.
Realizar la Schemá, es realizar a las Diez Sephiróth del Árbol
de la Vida y elevarlas para que integradas en una Unidad se
absorban en el "Ain Soph", en el Sagrado Infinito, en el Reino
de nuestro Padre que está en los Cielos.

No basta, por lo tanto, solamente pronunciar la "Shemá",


porque debemos de realizarla dentro de cada uno de nosotros.
El estudio y comprensión de sus significados, meditando en
cada uno de ellos, y en el contenido de la Shemá completa, y la
recitación, son, obviamente de una gran ayuda. Sin embargo,
hay que vivirla y realizarla, y esto solamente es posible por
medio de la práctica durante toda la vida de Los Tres Factores
de la Revolución de la Conciencia: Negándonos a sí mismos
(que es la Muerte Mística de nuestros defectos psicológicos),
tomando nuestra propia cruz cada día (que es el Nacimiento
Alquímico por medio de la práctica del Tantrismo Blanco o
Magia Sexual Blanca), y siguiendo al Cristo (el Sacrificio
Consciente por la Humanidad), que es el Camino, y la Verdad
y la Vida.

El Segundo Factor de la Revolución de la Conciencia


solamente puede ser practicado entre un hombre y una mujer,
es decir, entre el esposo con su única esposa, de acuerdo a las
Leyes y Reglas de la Santa Alquimia Sexual.

La letra "Sh" (de la "Shemá") se pronuncia como la letra "Sh"


en Inglés; y la letra "h" (de "ELOHIM"), se pronuncia como la
letra "j" en Español.

La Realización del "Tikkún" (Restauración, Redención) de las


Diez Sephiróth del Árbol de la Vida dentro de cada Ser
Humano, es el propósito y el objetivo del llamado en la
recitación de la "Shemá".

La Restauración y la Unidad del Santo Tetragrammatón YHVH


(Yud Hei Vav Hei), dentro de cada Ser Humano que aspiramos
a ser un verdadero Israelita, uno de los "144.000" de "las Doce
Tribus de Israel", como está escrito en el Libro del
"Apocalipsis" o "Revelación" de San Juan de Patmos, es la
síntesis de la "Shemá Yisrael".

Las Letras "YH" (Yud Hei,) del Santo Tetragrammatón YHVH,


son el "Padre-Madre", nuestro Padre-Madre Divinal, íntimo,
interior, particular, individual, dentro de cada Ser Humano.

Las Letras "VH" (Vav Hei) del Santo Tetragrammatón YHVH,


son el Novio y la Novia, el Esposo y la Esposa, el Alma
Humana y el Alma Divina, dentro de cada Ser Humano.

"ShemÁ", esotéricamente se refiere a la Segunda Letra "H"


(Hei) del Santo Tetragrammatón YHVH, llamada "Maljut", la
"Reina", la Shejináh "Inferior".

"ScHeMá" ("Oye") está compuesta por las Letras Hebreas


"shin mem ayin".

En El Zohar, Simeón ben Yojai enseña que la Letra "mem


intermedia" ("M") de la palabra "Schemá", se refiere a
"Maljut"; es decir, a la Shejináh "Inferior", que es la Segunda
"H" (Hei) del Santo Tetragrammatón YHVH.

"Yisra'el", significa esotéricamente la "Belleza de Israel", es


decir, "Tiféret", la Letra "V" (Vav) del Santo Tetragrammatón
YHVH.

"ShemÁ Yisra'el" ("Oye, oh Israel"), significan la Unión de la


Esposa con su Esposo, la Unión de las Letras "H" (la segunda
"H", (Hei) y la Letra "V" (Vav) del Santo Tetragrammatón
YHVH; es decir, la Unión de "Maljut" o la Shejináh "Inferior",
la Bien Amada Esposa Espiritual con Su Bien Amado Esposo
Espiritual Tiféret. O El Matrimonio Místico de Tiféreth con
Maljhut.

"YHVH ELOHIM" (IAO-ELOHIM, IEVE ELOHIM) son El


Señor nuestro Dios, nuestro Padre-Madre, indicados asimismo
por las Letras "Y" (Yud, el Padre) y "H" (la primera Hei, la
Madre, la Shejináh "Superior", nuestra Madre Divina
Kundalini.), del Santo Tetragrammatón YHVH.

El Nombre ELOHIM está formado por Dos Nombres: "Mi" y


"ELeH".

"Mi" que significa "¿Quién?", es la Shejináh Superior, la


Madre Divina Bináh. "ELeH" que significa "Estos", es la
Shejináh Inferior, llamada "Maljút" personificada en Rajel. La
unión de los Dos Nombres forman el Nombre completo
"ELOHIM", que significa Dios, y en plural, "Diosas". Porque
es la integración de la Shejináh Superior y de la Shejináh
Inferior. Mas el Nombre completo de Dios es IAO-ELOHIM:
"El Señor nuestro Dios".

"Mi" o "¿Quién?" es también Leáh.

"EjaD", significa "UNO", el Santo Tetragrammatón


completamente Restaurado e Integrado y elevado en una
"Unidad" en el "Ain Soph" o Sagrado Infinito.

"EJaD" es el secreto de la unión e integración en una Unidad


del Alma Humana o Tiféret que es el "Hermano" ("EJ"), el
"Novio", el "Esposo", con Su Bien Amada Espiritual, Celestial,
el Alma Divina o Espiritual Guevuráh, el Buddhi, "Maljút", la
"Hermana", indicada por la Letra "Dalet" (D) de la palabra
"EJaD", que es el secreto del "Hermano" y de la "Hermana" o
del "Novio" y la "Novia", el "Esposo" y la "Esposa", dentro de
cada Ser Humano que los haya realizado e integrado en una
Unidad, como así está escrito en el Cantar de los Cantares del
Rey Salomón:

"He venido a mi huerto, hermana mía, novia mía; he


recogido mi mirra y mis aromas; he comido mi
panal con mi miel; mi vino con mi leche he bebido"
(Cantar de Cantares, 5:1).

El término "Hermana", está escrito en el significado de la


Esposa o Cónyuge aquí en el mundo físico en una de las
Epístolas del Apóstol San Pablo, donde dice:

"¿No tenemos derecho de traer con nosotros una


hermana por mujer [por Esposa] como también los
otros apóstoles, y los hermanos del Señor, y Cefas?"
(1 Corintios, 9: 5).

Y, si a la Esposa aquí en el mundo físico, San Pablo la llama


"Hermana", ¡cuánto más ha de ser llamada "Hermana", la
Esposa Espiritual, el Alma Divina, llamada en la Kabbaláh
"Maljút"!

En El Zohar se explica que las palabras "he comido mi panal"


hacen referencia a la recitación, a la oración de la Shemá:
"Oye, oh, Yisrael, IAO ELOHIM, IAO Uno es", y "con mi
miel", se refiere a la respuesta que se ora en silencio: "Bendito
sea el Nombre de la Gloria de Su Reino por siempre jamás".

Los Sabios de la Kabbaláh enseñan que una de las


permutaciones de las Cuatro Letras del Santo Tetragrammatón
es "HVYH": "HaVaYáH", el más Sagrado de los Nombres de
Dios.

Porque el Santo Tetragrammatón escrito con el orden de las


Letras "YHVH", es "su forma revelada"; y escrito con el orden
de las Letras "HVYH" (HaVaYáH) "es su forma oculta".

Isaac Luria enseña que la Letra "H" (Hei) del Santo


Tetragrammatón "es siempre doble"; es decir, las dos Hei.

Y las dos "Hei" están juntas, cuando los Dos Nombres "Mi",
"ELeH", están unidos en el Nombre ELOHIM.

En el orden de las Cuatro Letras del Sagrado Tetragrammatón


como Havayáh, la "V" (Vav) o el "Hermano" emana de la
primera "H" (Hei) que es la Madre Divina. Y la segunda "H"
(Hei) o la "Hermana", emana de la "Y" (Yud) que es el Padre.
Por lo cual el orden de las Cuatro Letras: HVYH. Entonces la
"Shemá" se pronuncia así:

"ShemÁ Yisrael, HaVaYáH ELOHIM, HaVaYáH


EJaD".

"Oye, oh Yisrael, HaVaYáH nuestro Dios,


HaVaYáH Uno es."

Al pronunciar la "Shemá" en Hebreo la palabra "EJaD" se


prolonga en la Letra "Dalet", por ejemplo: "EJaD-D-D").
Prolongar la Letra "Dalet" (D), es "aclamar a Dios como Rey
en lo alto y abajo y en las cuatro direcciones del mundo, como
verdaderamente Uno."

Isaac Luria haciendo una revelación se refiere a la permutación


del "Nombre HaVaYaH" leído "yud-hei-hei-vav" (YHHV), en
cuya permutación la segunda Letra "Hei" (H), está precediendo
a la Letra "Vav" (V).

Isaac Luria enseña, asimismo, que fue por causa del pecado
original que "la Hei posterior descendió abajo de la Vav..."

Es decir, la dos "Heis" (HH) o la "doble "Hei", que antes


estaban juntas, quedaron separadas.

En el "tikkún" o restauración, la segunda "Hei", asciende y se


integra en la primera "Hei", quedando entonces juntas y
restituidas las dos "Hei", la doble Hei: Yod Hei Hei Vav.

Las Diez Sephiróth del Árbol de la Vida son "un aspecto" del
"Divino Nombre HVYH".

La Letra "Y" (Yud) del Nombre Divino HVYH, es la Sephiráh


Kether y la Sephiráh Jojmáh. La primera Letra "H" (Hei), es la
Sephiráh Bináh, la Shejináh Superior. La Letra "V" (Vav), es la
Sephiráh Tiféret. Las seis Sephiróth: Jésed, Guevuráh, Tiféret,
Nétzah, Hod y Yesod, son llamadas en conjunto "Zeir Anpín" o
"el de Pequeño Rostro", cuyo centro o corazón es Tiféret, el
Esposo de la Shejináh. La Segunda y última Letra "H" (Hei),
es "Maljút", la Shejináh Inferior, la Esposa de "Zeir Anpín".

Al reintegrarse la última "H" (Hei) con la primera "H" (Hei),


dentro de cada Ser Humano que realice el Santo
Tetragrammatón, se forma, entonces, el Santo Tetragrammatón
en el Nombre "YHHV" (Yod Hei Hei Vav); es decir: Padre-
Madre-Hermana-Hermano. Esto es: el Padre Interno y la
Madre Divina, y el Alma Divina y el Alma Humana, integrado
todo en una Unidad: EJaD.

Ampliando lo expuesto antes: Cuando el Alma Humana o


Tiféret, llamado esotéricamente el "Hermano" se integre
completamente realizado en Su Alma Divina o Guevuráh, el
Buddhi, (o "Maljút": es decir los "Pies" o la Esposa), llamada
esotéricamente, espiritualmente la "Hermana", estando dentro
de ambos el Padre y la Madre también integrados, y todo
integrado en una Unidad se integre en el "Ain Soph" o el
Sagrado Infinito, entonces IAO ELOHIM (el Señor nuestro
Dios) será UNO: EjaD. Realizando así el Primero y el
Principal y el Mayor de todos los Mandamientos, como está
escrito con las Palabras de nuestro Señor Jesús El Cristo:

"... El primer mandamiento de todos es: Oye, Israel


el Señor nuestro Dios, el Señor uno es. [Shemá
Yisrael, IAO ELOHIM, IAO EjaD] Amarás pues al
Señor tu Dios de todo tu corazón, y de toda tu alma,
y de toda tu mente, y de todas tus fuerzas; este es el
principal mandamiento. Y el segundo es semejante
á Él: Amarás á tu prójimo como á ti mismo. No hay
otro mandamiento mayor que éstos..." (El Santo
Evangelio según San Marcos, capítulo 12).

"No está lejos del reino de Dios", quien acoja estas Palabras de
nuestro Señor Jesús El Cristo, de todo su corazón, y de toda su
alma, y de toda su mente, y de todas sus fuerzas; y quien las
viva y las realice completamente, cabalmente, entrará entonces
en el Reino de Dios.

Para entrar al Camino que nos conduce al Reino de Dios es


necesario practicar "Los Tres Factores" durante toda la vida,
con la Ayuda permanente de nuestra Madre Divina Kundalini y
del Cristo Íntimo, Interior, que son El Camino del Árbol de la
Vida.

Esta Sabiduría no es mía, sino de nuestro Padre que está en los


Cielos, el Sagrado de los Sagrados Unos, el Anciano de los
Días, la Bondad de las Bondades, la Misericordia de las
Misericordias.
Esta "Sabiduría Oculta" ha sido expresada en Su más elevado
nivel, por intermedio de Su Hijo Unigénito nuestro Señor Jesús
el Cristo, y después, Él mismo hablando por intermedio de la
boca de Sus Profetas y de Sus Apóstoles, y en este final de los
tiempos, por medio de nuestros Venerables y Amados
Maestros, nuestro Venerable y Amado Maestro Samael Aun
Weor, nuestro Venerable y Amado Maestro Rabolú, y a quienes
todo se lo debemos, y de cuyas Enseñanzas da testimonios
fieles y verdaderos el V.M. Thoth-Moisés.

Mi persona no tiene ningún valor, "un vil gusano del lodo de la


tierra", "una sombra pecadora", que tiene que seguir Muriendo
místicamente todavía y siempre.

Soy solamente un estudiante de "la Sabiduría Oculta", "la


Sabiduría de Dios en Misterio", las enseñanzas Esotéricas
contenidas en la Sagrada Toráh. Mas estamos trabajando (y
cada Ser Humano que se lo proponga puede lograrlo) por la
realización y por la unidad de la "Shemá Yisrael", que son el
Alma Divina ("Shemá") y el Alma Humana ("Yisrael" o
"Tiféret"), y por la realización y la unidad del Señor nuestro
Dios (IAO ELOHIM) que son nuestro Padre-Madre Divinal,
interior y celestial. Y por la integración del Alma Humana y
del Alma Divina, y de todas las Partes del Ser del Pueblo de
Israel, interior, dentro de nuestro Padre-Madre interior y
Celestial: todo integrado en una Unidad: EJaD.

Víspera del Shabbath del Día Viernes


25 de Mayo del Año 2012
Amamos a todos los Seres, a toda la Humanidad.
Cada Ser Humano es también la Humanidad.

"¡Que todos los Seres sean Felices!"


"¡Que todos los Seres sean Dichosos!"
"¡Que todos los Seres sean en Paz!"

De todo Corazón,
Para toda la Pobre Humanidad Doliente,
Luis Bernardo Palacio Acosta
Bodhisattwa del V.M. Thoth-Moisés

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