Revelación.

Informe 7
Del libro Teología Fundamenta de César Izquiero, leer de la p. 159 hasta la p. 167. En
respuestas muy breves contestar:
1. ¿Qué es experiencia en el campo filosófico?
En el campo filosófico, experiencia designa el conocimiento sensible o empírico, que se
contrapone al conocimiento racional. Esta experiencia es trascendental, es decir, a
priori, ya que el conocimiento sensible es el conocimiento espacio-temporal; y el
espacio y tiempo son formas a priori de la sensibilidad.

2. ¿Qué es la experiencia religiosa y la revelación para Schleiermacher?

Este pensador alemán plantea que el único modo de captar la realidad divina es la
intuición encerrada en el sentimiento. La religión se caracteriza por el «sentimiento de
dependencia» y la experiencia del infinito. La experiencia religiosa es el sustrato de los
dogmas cristianos: la divinidad de Cristo, la gracia, la redención, la Iglesia, no son más
que formas en las que va evolucionando la conciencia religiosa en su búsqueda de una
relación con lo infinito y eterno.
La revelación no es transmisión de verdades, sino pura experiencia de comunicación del
sujeto con el Universo infinito.

3. ¿Cuál es la esencia del cristianismo y principio de la experiencia reveladora para

Sabatier?

La esencia del cristianismo consiste en una experiencia religiosa, en una revelación

íntima de Dios hecha por primera vez en el alma de Jesús de Nazaret; pero que se repite
y verifica, menos luminosa, pero no desconocida, en el alma de todos sus verdaderos
discípulos.
El principio fundamental de la experiencia reveladora es la emoción religiosa, que se
traduce primero en imágenes, y posteriormente en conceptos y juicios que la Iglesia
puede aprobar como dogmas. Estas expresiones dogmáticas, sin embargo, son
puramente simbólicas, y están sometidas a la ley de la evolución. El único elemento
permanente es la experiencia religiosa.

4. ¿A partir de la filosofía crítica de qué se ocupa la nueva mentalidad y qué

repercusión tiene esto en el conocimiento religioso? (último párrafo p. 162)
La nueva mentalidad se ocupa no tanto de los objetos o cosas como del sujeto que
conoce. La continuidad de la relación realidad-conocimiento-lenguaje ya no se admite y
el sujeto, con su ley de interioridad y libertad, es ahora el punto de partida necesario.
Este planteamiento, al llevarse al conocimiento religioso repercute haciendo que la fe
deje de ser considerada en su carácter noético para ser vista como experiencia religiosa
que no presupone o implica un conocimiento. Lo que importa ahora no son las vías
racionales que conducen al conocimiento religioso, sino la intuición, los movimientos
del corazón, la experiencia vital puramente inmanente.
 5. ¿Cuál es la actitud de la iglesia frente al modernismo?
La actitud de la iglesia fue una actitud de condena de toda su explicación de la
experiencia. El modernismo fue condenado por San Pío X en la Encíclica Pascendí
dominici gregis y en el Decreto Lamentabili sane exitu. A partir de estos documentos, la
teología renunció en gran medida a tratar de un tema que resultaba tan espinoso como el
de la experiencia. Pero la cuestión era insoslayable, así que la Constitución Dogmática
Dei Verbum introdujo de forma matizada la terminología de la experiencia.
6. ¿Qué tienen en común los 4 sentidos de los que habla Mouroux y qué dos
significados acaba incorporando la experiencia?
Lo común a estos cuatro sentidos fundamentales de la experiencia humana (general
constatación, conocimiento vivido, experimentación y conocimiento habitual) es que
todos ellos se refieren a un conocimiento inmediato de cosas concretas y a un
conocimiento unido a la vida.
La experiencia acaba incorporando fundamentalmente dos significados: experiencia
como contacto con un objeto, y experiencia como vida.
7. ¿Cuáles son los 3 elementos de la experiencia religiosa?
La estructura de la experiencia religiosa consta de tres elementos:
 el hombre que interviene en ella y que aparece como sujeto de la relación;
 el misterio de Dios, realidad trascendente y al mismo tiempo presente en el
centro de la persona, que es el término de esa experiencia;
 el tipo específico de relación del hombre con Dios, distinta de cualquier otra
relación, que se manifiesta en el hombre como adoración, confianza, entrega,
temor, etc.

8. Enumere los 3 niveles de la experiencia de la revelación. Esté claro de cada uno

de ellos para compartir en la clase.
La experiencia de la revelación se da en tres niveles:
 la experiencia de Jesús: Es única, sin comparación, porque es la experiencia del
Hijo encarnado de Dios, la del que ha visto y oído, la de quien es testigo porque
preexistía en el seno de Dios y ha venido a habitar entre los hombres. Jesús tiene
una experiencia absolutamente única de su relación con Dios. Se trata de una
experiencia inmediata de Dios, de su amor, de su paternidad, de su vida.
 la experiencia de los Apóstoles (y de los profetas, en el Antiguo Testamento):
Aunque reciben una comunicación inmediata de Dios, es de otro orden, porque
necesitan la fe para acoger lo que les es revelado. También es única, en cuanto
es la propia de los mediadores de la revelación elegidos por Dios. La experiencia
de los profetas tiene sentido de preparación; la de los Apóstoles tiene, en
cambio, un valor de insuperabilidad, porque tiene por objeto al mismo Verbo de
Dios encarnado, ellos son los receptores de la experiencia única de Jesús. Su
experiencia de Jesucristo, de su palabra y de sus obras, de su llamada a seguirle
y a vivir con Él, de la misión que de Él reciben, forman parte del momento
 original e irrepetible de la constitución de la revelación cristiana. Su experiencia
de Cristo forma parte de la misma revelación.
 la experiencia del creyente: Se da también en nosotros, los creyentes, en la
medida en que, no solamente confesamos nuestra fe, sino que la vivimos como
la realidad definitiva que compromete nuestra existencia. La autocomunicación
de Dios que da lugar a la experiencia cristiana es algo más que la mera
comunicación de un mensaje objetivo que el hombre debe aceptar sólo
intelectualmente. No sólo su asentimiento, sino la totalidad del hombre se ve
comprometida.

9. En resumen, ¿en qué consiste la experiencia de la revelación?

La experiencia de la revelación consiste en vivir la revelación recibida en la fe, que
depende esencialmente de la mediación de los Apóstoles y de la Iglesia, es una
experiencia vivida bajo el régimen de la fe, porque sigue a la fe con la que se acoge la
revelación ya constituida; y en cuanto tal fe, no es experiencia, sino entrega a la palabra
divina e iluminación de la inteligencia del creyente cuando recibe esa palabra.
Esta revelación desencadena una profunda y rica experiencia de fe en el creyente
cuando se acepta el compromiso personal y total de la relación definitiva con el misterio
de Dios, y se vive esa relación en la celebración litúrgica del misterio cristiano.