OBSERVA PERICIA PSICOLOGICA

Sr. Juez letrado:

EZEQUIEL IBAÑEZ en representación de TRIUNFO

COOP. DE SEGUROS LTDA., presentándome en estos autos Nº 303.084
caratulados “FLORES EZEQUIEL EMANUEL Y PACHECO
SILVANA BELEN c/ GONZALEZ LARA LUCAS RUBEN p/ D Y P”
a U.S. digo

1.- Que en tiempo y forma y en cumplimiento de expresas instrucciones de

mi mandante vengo a observar la pericia psicológica agregada en autos, en
mérito a las consideraciones que a continuación expondré:

2.- Se advierte en el informe de referencia una determinación infundada

injustificada y acientífica del nexo causal. En referencia a la respuesta
humana ante la adversidad, existe una distribución en forma de campana.
Es decir la mayoría después de un breve período de adaptación con
ansiedad y depresión, luego del que retorna a su funcionamiento previo no
desarrolla psicopatología. Existe un extremo menor (menos del 20%) que
desarrolla patología. Y existe otro extremo que desarrolla resiliencia y
nuevos recursos de afrontamiento. Farlane y Yehuda “Resilience,
Vulnerability, and the course of postraumatic reactions”. Traumatic Stress
(Nueva York: Guilford Press, 1996).
La respuesta frente a un evento traumático, tienden a evolucionar
favorablemente en el tiempo siendo rara las ocasiones en que se cronifican
sólo el 16.5% perdura más allá de un año. Se debe tener en cuenta que
muchas investigaciones muestran que uno de los factores de cronicidad del
trastorno es que los sujetos permanezcan en juicios por daños y perjuicios
(Ehlers, Mayou y Bryant, 1998)
Los datos de investigación advierten que el agente estresante por sí mismo
no garantiza el desarrollo del cuadro , el desarrollo de síntomas de estrés
postraumático esta influenciado no solo por la naturaleza del trauma sino
por características pre-existentes de personalidad y por la reacción de la
persona durante el evento y las experiencias subsecuentes. Tal es así que
ante el mismo evento ciertas personas desarrollan el trastorno y otras no.
Entre diversos factores que predisponen al desarrollo de trastornos estan las
experiencias traumáticas previas y la historia de desórdenes psiquiátricos
(Butler, Moffic y Turkal, 1999)
Diversas investigaciones afirman que aquellos sujetos que muestran niveles
elevados de ciertos rasgos de personalidad antes del accidente también

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tienden a mostrar más signos luego del mismo. Se sabe que los sujetos con
personalidades inseguras, temerosas, necesitados de afecto y con tendencia
a la culpa y represión de la agresividad tienen mayor riesgo de padecerlo.
Distintas variables como la capacidad de afrontamiento, el apoyo social, la
historia familiar, los antecedentes psicopatológicos y biográficos pueden
obrar como factores predisponentes o protectores según sea el signo de su
incidencia, determinando diferentes salidas o respuestas a la exposición
traumática (Jones y Barlow 1990).
Antecedentes que predisponen al desarrollo de la enfermedad: Una historia
familiar de ansiedad (Davidson, Smith, Kudler 1989). Una historia personal
de problemas comportamentales (Helzer, Robins, Mac Evoy, 1987). Una
historia por tratamiento de problemas psicológicos; disminución de las
aptitudes para las matemáticas y dificultades escolares (Pitman y cols
1991). Una historia de separación temprana de sus cuidadores o una
historia familiar de ansiedad y comportamiento antisocial (Berslau, Davis,
Andreski y Peterson,1991). Un elevado neurotisismo, una depresión o
trastornos de ansiedad pre-existentes son considerados de alto riesgo para
producir psicopatología (Berslau y cols 1999). Ciertas investigaciones
muestran que sólo aquellas personas con rasgos externalizadores
continuaban demostrando un estrés aumentado después de los 6 y 12 meses
después del accidente (Blanchard y Hickling, 1998). Todos estos factores
predijeron de manera significativa el desarrollo de TEPT luego de la
exposición a un agente estresante.
Además una vez ocurrido el suceso, ciertas estrategias de afrontamiento
que son propias de la persona influyen en el desarrollo de trastornos. Como
son la Interpretación negativa de pensamientos intrusivos, rumiación,
supresión de pensamientos, pensamientos de enojo y problemas
emocionales previos.(Ehlers, Mayou y Bryant, 1998).
En este punto se advierte la omisión por parte del perito para llevar a cabo
no solo una profunda y objetiva determinación de los rasgos de
personalidad básica, sino también el correspondiente deslinde de los
mismos y la adecuada etiología.- Tampoco se determina la incidencia de la
personalidad y demás factores concausales en el estado actual del actor.
Según el decreto 659/96 al determinar la presencia de una RVAN, “Hay
que evaluar cuidadosamente la personalidad previa. Se considerarán rasgos
importantes para la evaluación: la personalidad básica del sujeto, la
biografía, los episodios de duelo, la repuesta afectiva, las expectativas
laborales frustradas y sus relaciones personales con el medio.”
Se observa que el perito se basa en los dichos y referencias del actor para el
establecimiento de un nexo causal al realizar las siguientes
manifestaciones: “Los síntomas han sido ocasionados, desde el punto del