Está en la página 1de 9

El Mazizo Guayanez

El Escudo Guayanés (Guiana Shield o Guiana Highlands en inglés)


(Plateau des Guyanes o Bouclier guyanais en francés) (Hoogland van Guyana en
neerlandés) (Planalto das Guianas o Escudo Guianês en portugués), conocido
también como Escudo de las Guayanas, Macizo Guayanés o simplemente como
Guayana, es una región geográfica ubicada al noreste de América del Sur. Se
trata de una formación geológica muy antigua, siendo una de las zonas más
antiguas de la Tierra, que comprende las repúblicas de Guyana y Surinam, la
Guayana Francesa, la región venezolana denominada Guayana venezolana (que
incluye los estados federales venezolanos de Amazonas, Bolívar y Delta
Amacuro), los estados brasileños de Amapá (antiguamente denominado Guayana
Portuguesa), Roraima y territorio parcial de los estados de Pará y Amazonas, y el
departamento colombiano del Guainía y partes del de Vichada, si bien en
ocasiones se incluye también parte de los departamentos colombianos del
Vaupés, Caquetá y Meta.

Relieve del Escudo guayanés


Sus límites son el río Orinoco al norte y al oeste, y la selva Amazónica al sur.
Tiene una forma irregular y está constituido, desde el punto de vista geológico, por
un macizo o escudo antiguo de la era precámbrica, con una cobertura
sedimentaria también muy antigua, formada por areniscas y cuarcitas muy
resistentes a la erosión. Esta cobertura sufrió un levantamiento y plegamiento casi
desde el mismo momento de formación del planeta Tierra, lo cual ha originado
unas mesetas muy elevadas y de pendientes verticales, denominadas tepuyes, un
término de origen indígena (de la lengua pemón), que significa montaña.

Monte Roraima, en el borde de Venezuela y Brasil.


Aquí se encuentra la caída de agua más alta del mundo: el Salto Ángel o
Kerepakupai Merú, de 979 m. Los ríos de la zona a medida que el macizo
ascendía, fueron erosionando y profundizando sus cauces hasta formar
verdaderos cañones por los que hoy corren.

En estas mesetas predominan las sabanas y los bosques en galería a lo largo de


los ríos. Hacia el este, donde la altura es menor, se desarrollan selvas tropicales y
manglares sobre las costas del Atlántico. En algunos sectores las rocas están
cubiertas de sedimentos que contienen importantes depósitos de minerales, entre
ellos el hierro y la bauxita, que se explotan con intensidad.

Es una de las regiones con mayor biodiversidad del mundo. La Guayana cuenta
con más de 2200 especies de vertebrados. El escudo guayanés está cubierto por
la mayor masa forestal tropical inalterada del mundo.1
Venezuela, entre los 10 países mega-diversos del mundo, se enorgullece de tener
dentro de su región de la Amazonía-Guayana 29 áreas protegidas: 8 parques
nacionales, 19 monumentos naturales, 2 Reservas de Biosfera. El 60% del
territorio del país y el 10% de su población se encuentran en el área al sur del río
Orinoco, que es el hábitat de 23 pueblos indígenas y tribales.

Lo que hace única a la región amazónico-guayanesa de Venezuela, dentro de la


PanAmazonía, no es su tamaño, sino que comprende bosques tropicales de
tierras bajas y una amplia gama de ecosistemas a lo largo de un gradiente de
elevación de hasta 3.000 metros sobre el nivel del mar. Esta característica
asociada con el hecho de que Venezuela abarca la mayor parte del Escudo
Guayanés – una de las últimas reliquias del inicio de la historia de la Tierra (el
Periodo Precámbrico), mundialmente con el 3er número más alto de especies de
plantas, el 4to de especies de anfibios y el 6to de especies de aves – es lo que la
hace tan biodiversa. Una de las “joyas de la corona” de la región amazónico-
guayanesa de Venezuela es el Parque Nacional Canaima – la tierra de los
Mundos Perdidos – ampliamente celebrado como uno de los paisajes más
impresionantes del planeta, tanto así que fue reconocido como Sitio de Patrimonio
Mundial en 1994. Este parque nacional protege los ríos que suministran el 60% de
la energía eléctrica del país, de origen hidráulico.
Sofos de Mileto

Se dice que era “El Mundo Perdido”. No es para menos. Podría compararse con el
Paraíso Terrenal. Zona de riqueza, de aventuras y de diversidad natural. Nacida
en el planeta desde milenios remotos. Los científicos han certificado que cuando la
Tierra se vio envuelta en un proceso de enfriamiento, terminó totalmente cubierta
de mar. Y de sus profundidades luego emergió la primera gran piedra: El Escudo
de Gondwana.
Luego de un complejo y lento proceso de separación de placas y continentes
hasta llegar a lo que hoy es Suramérica, surgen dos hijas de Gondwana: El
Escudo de Brasil y el Escudo de Guayana. Este último ocupa la región al sur del
Orinoco y el norte del río Amazonas; desde los llanos colombo-venezolanos al
oeste y el mar Atlántico al este, incluyendo a Guyana, Surinam, la Guayana
Francesa y una parte de Brasil. Esto quiere decir que el Escudo de Guayana es
una de las cinco hijas de Gondwana, la tierra más antigua del mundo.

Formación de la Guayana venezolana


Tiene una extensión aproximada de medio millón de kilómetros cuadrados,
Comprende los Estados Bolívar, Amazonas, parte de Delta Amacuro y la zona en
disputa de la Guayana Esequiba. Allí se encuentra el Escudo Guayanés, que
desde tiempos inmemoriales estuvo cubierto por una densa vegetación. Desde su
formación han transcurrido 4.000 millones de años y apenas 100 millones que los
árboles han cubierto la faz de la tierra. Se supone que los indígenas habitan la
región hace 2.000 a 3.000 años, luego de un gran éxodo desde el Amazonas
hacia el mar Caribe. Hoy está constituido por rocas cristalinas, tanto ígneas
incluido el granito, como metamórficas. Por ello se encuentra una gran variedad de
metales. Corren ríos con efectos de coloración sedimentario por los efectos de la
excavación de la base de los ríos de las arenas y arcillas de fondo. Pero también
se encuentran los tepuyes, relieves más elevados del paisaje, con mesetas de
bordes abruptos. Se aprecia que las cascadas que bordean los tepuyes tienen que
atravesar profundos desfiladeros y cortes, que tienen algunas veces varios
centenares de metros de profundidad, como sucede en el Auyantepui, en el cual
varias de las cascadas salen por una abertura al final de un río subterráneo, a una
altura intermedia en la pared del propio tepuy.

La mayor parte de Escudo guayanés está cubierto de selva. Su suelo es un


colchón de hojas y frutas en estado de alteración natural y donde asoman raíces y
troncos caídos resbaladizos, conformando la irregularidad de su superficie, donde
sólo la planta del pie indígena la ha podido recorrer con destreza. Es inescrutable
la diversidad de plantas y animales que la habitan, más de 2.000 individuos
vegetales menores de un metro, han podido contarse en 100 metros cuadrados;
más de 600 especies de aves registradas; un sinfín de insectos; un sin número de
orquídeas, aún por clasificar, y bromelias adornan los bosques y las selvas, y en
las cumbres de los tepuyes crecen numerosas plantas endémicas. Entre las
especies más interesantes se encuentran las plantas carnívoras que atrapan
insectos, para obtener los nutrientes necesarios para su alimentación. Es decir,
hay un inventario inmenso que desborda cualquier intento de taxonomía.
Cada expresión natural lucha por sobrevivir. Los matapalos, huéspedes de
talludos árboles, crecen hasta cubrir y matar a su receptor original. Numerosas
plantas desafían las alturas para alcanzar los rayos del sol, y sueltan extensas
lianas para alimentarse de la savia del suelo. Pero también está el contraste de la
inmensidad de las sabanas, inspiradoras de cuentos y mitos. Su aplicación ha
obedecido a numerosas quemas, siendo la más conocida La Gran Sabana.

Numerosos descubridores, conquistadores y aventureros, con no menos penurias,


se dieron a la tarea de explorar este vasto e intrincado territorio. Cada uno volvía a
Europa con la propagación de la leyenda de “El Dorado”. Ella suponía la existencia
de un reino indígena ubicado en el interior del continente que albergaba fabulosas
riquezas: piedras preciosas, calles, plazas y palacios de oro. En lagunas se
“criaba” el oro. Aunque los cartógrafos ubicaban este edén en varias partes,
incluso en la sabana bogotana, la mayoría sospechaba que más bien se
encontraba en territorio amazónico y concretamente en Manoa, poblado a orillas
del lago Parima. Uno de los personajes más controversiales de esta historia fue
Sir Walter Raleigh, quien estuvo dos veces explorando Guayana. Escribió algunos
libros sobre sus expediciones y búsquedas de “El Dorado”. En ellos afirmaba:
“Para concluir diremos que Guiana es un país que aún conserva su doncellez que
no ha sido violada ni saqueada, engañada o mancillada, su tierra no ha sido rota ni
desgarrada, ni la virtud y gracia de su suelo ha sido gestada, sus sepulcros no han
sido violados para buscar oro, sus minas no han sido rotas por las picas y barras,
ni las imágenes de sus templos han sido profanadas o robadas.”

Guayana: uno de los reservorios más ricos del orbe


El mismo Raleigh cuando regresó desde Guayana a Europa llevó estaño. Él tenía
igualmente conocimiento de los inmensos depósitos de hierro, cuya explotación
inician los capuchinos en 1724. Tiburcio Vera descubre en 1926 el rico yacimiento
de hierro en El Pao, a 35 Km al sur de la confluencia del Orinoco con el Caroní. La
faja de hierro se extiende desde la serranía de Imataca hasta las galeras del
Cinaruco. La producción a gran escala comienza en 1950 y en 1962, cuando
SIDOR inicia sus actividades. En 1850 son localizados aluviones auríferos del río
Yuruani, a 250 Km al sureste de Ciudad Bolívar. Pero el primer hallazgo de
importancia fue el de El Callao, en 1864, con el descubrimiento de un rico filón de
oro, considerado como una de las principales minas del mundo entre los años
1879 y 1881. Surgen los pueblos de Guasipati, Tumeremo y Upata. A ellos llegan
aventureros y explotadores ambiciosos. Aparece también un nuevo dorado: el del
caucho o balatá. El Sr Goodyear inventa la rueda de caucho para la naciente
industria automotriz. La Hevea guianensis, también conocida como purguey,
purvio, pendae y níspero, se convierte en el objetivo comercial. Se derriban
numerosos árboles, una verdadera deforestación se protagoniza en la Sierra de
Imataca y el Cuyuní, extendiéndose hasta las profundidades del estado
Amazonas. El balatá se transporta por el río en planchas de 50 kilos hasta Ciudad
Bolívar, donde están las casas comercializadoras.

Le puede interesar. Álvaro Uribe dio positivo para COVID-19


Pero como aún hay más riqueza, en 1913, en las orillas del Caroní, en la zona de
El Guri, hoy ocupada por la represa Raúl Leoni, se consiguen los primeros
diamantes. Nace Santa Elena de Uairén. Vendría la historia de Jimmy Ángel, otro
buscador de diamantes, quien aterriza con su Flamingo G-2-W sobre el
Auyantepui, destruyendo la avioneta en 1937, pero descubriendo la cascada más
alta del mundo. Un inventario de madera de 16 millones de metros cúbicos
comienza a sufrir irreparables consecuencias. La formación vegetal de este
territorio, que ha tomado 3.000 millones años, en 300 años el hombre ha dejado
su huella destructora demasiado visible. Siguen llegando garimpeiros abriendo
heridas como las de El Diamante, La Esmeralda e Imataca, envenenando los ríos
con diversos químicos y sin observar la prohibición del uso de materiales tóxicos y
de maquinarias hidráulicas, y causando lesiones en las hoyas hidrográficas de los
ríos Caroní y la Paragua. De tal manera que de fiebre en fiebre, en apenas tres
siglos, el ser humano “civilizado” ha ido convirtiendo el “infierno verde” en “desierto
rojo”.

El Arco Minero: repartición de mafias


Esa depredación de las riquezas naturales de Guayana, específicamente de sus
minerales, se ha convertido en un instrumento del régimen para captar la ayuda de
mafias, de sectores terroristas, de grupos de delincuentes, con ansias muy
apetecibles, devoradoras y de extracción, en forma indiscriminada, del nuevo
“Dorado” venezolano. Se trata del Arco Minero, de más de 111 mil Km2, y que se
estima contiene 7 mil toneladas de oro, cobre, diamante, coltán, hierro, bauxita y
otros minerales de uso industrial. De acuerdo con el Global Forest Watch, al
menos cinco áreas protegidas en Venezuela están siendo deforestadas por las
actividades mineras ilegales. Siete monumentos naturales y cinco parques
nacionales se encuentran dispersos en todo el Arco Minero de Venezuela. En este
territorio conviven mafias, mineros ilegales, traficantes de drogas, junto con
indígenas que se han sumado a las labores mineras, así como militares y
exintegrantes de las FARC.
Uno de elementos explotados en el Arco Minero es el Torio, metal blando, para ser
utilizado como combustible nuclear, pues es más abundante en la corteza terrestre
que el uranio y es 90 % más poderoso en una explosión nuclear; además todo su
contenido es utilizable en un reactor. En Venezuela se ha informado que soldados
rusos e iraníes de Hezbolá están a cargo de su búsqueda. Particularmente existen
dos yacimientos de torio, uno en el cerro Impacto en Amazonas y otro más
pequeño en El Baúl, estado Cojedes. Venezuela es el quinto país del mundo con
mayores reservas de este mineral en el mundo.

Todas estas actividades ilícitas traen consigo pago de sobornos a militares y


policías, así como cupos o vacunas que se entregan a grupos criminales, además
de la presencia del narcotráfico. Esta es la realidad del saqueo del botín dorado de
Venezuela, un tesoro que en vez de traer bienestar para la población venezolana,
se ha convertido en objeto de crimen, corrupción, deforestación y muerte.

Traducción al inglés

Guiana: the golden loot


It used to be called “The Lost World”. It is no less. It could be compared with the
Earthly Paradise. A place of wealth, adventures and natural diversity. Born in the
planet millenniums ago. Scientist have certificated that when the earth was
involved in a cooling process, it ended up completely covered by the sea. And from
its depths later on then emerged the first great stone: The Shield of Gondwana.

After a complex and slow process of separating plates and continents until
reaching what is now South America, two daughters of Gondwana emerged: The
Shield of Brasil and The Shield of Guiana. This last one occupies the region at the
south of the Orinoco and the north of the Amazon river; From the Colombo-
Venezuelan plains to the west and the Atlantic Sea to the east, including Guiana,
Surinam, French Guiana and a part of Brasil. This means that the Guiana Shield is
one of the five daughters of Gondwana, the oldest land in the world.

Formation of the Venezuelan Guiana


It has an approximate area of half a million square kilometers, it includes the states
Bolívar, Amazonas, a part of Delta Amacuro and it include the disputed area of the
Guiana Esequiba. It is supposed that the indigenous people have inhabited the
region since 2.000 to 3.000 years ago, after a great exodus that went from the
Amazonas to the Caribbean Sea. Today cristaline rocks, both igneous including
granite, and metamorphic, form it. That is why a great variety of metals can be
found. The rivers run with a sedimentary coloration effect because of the effects
that come from the excavation of clay and sand from the depths of the base of the
rivers. However, you can also find tepuyes, highest reliefs of the landscape, with
tablelands with abrupt edges. It is appreciated that the waterfalls that border the
tepuyes have to cross deep gorges and cuts, and they have sometimes several
hundreds of meters of depth, like the Auyantepui. The major part of the Guayanes
Shield is covered by jungle. Its soil is made of a leaf mattress and fruits in its
natural alteration state also where roots and slippery fallen logs lie; forming the
irregularity of its surface, where only the indigenous foot has been able to walk it
with skill. The diversity of plants and animals that inhabit it is indecipherable, more
than 2,000 plant individuals under one meter, have been counted within 100
square meters. More than 600 species have been recorded; an endless amount of
insects; a numberless amount of orchids, still to be classified, and bromelias that
adornate the forests and the jungles. Also in the peaks of the tepuyes, numerous
endemic plants grow. Among the most interesting species are carnivorous plants
that trap insects, to obtain the nutrients needed for their feeding. Therefore, an
immense inventory exceeds any attempt of taxonomy.

Le puede interesar. Uslar Pietri destructor de la democracia


In addition, there is the contrast of the immensity of the savannas, inspirers of
stories and myths. Its application has been due to numerous burning, the most well
known being the Gran Sabana. Numerous discoverers, conquerors and
adventurers, with no less hardship, were given the task of exploring this vast and
intricate territory. Each one returned to Europe to participate in the spread of the
legend of “El Dorado”. This one supposed the existence of an indigenous kingdom
located inside the continent that was lodging fabulous wealths: precious stones,
streets, squares and golden palaces. In lagoons, gold was “raised”. Although
cartographers placed this Eden in several parts, including in the Bogotana
savannah, most suspected that it was rather in Amazonian territory and specifically
in Manoa, populated on the shores of Lake Parima. One of the most controversial
characters in this story was Sir Walter Raleigh, who twice explored Guiana.

Guiana: one of the richest reservoirs of the world


Raleigh himself when he returned from Guiana to Europe brought tin. He also had
knowledge of the immense iron deposits, whose exploitation was initiated by the
Capuchinos in 1724. The iron strip spreads from the mountainous range of Imataca
up to the galleys of the Cinaruco. Large-scale production began in 1950 and 1962,
when SIDOR initiated its activities. However, the first major find was that of El
Callao, in 1864, with the discovery of a rich gold strand, considered one of the
world leading mines between 1879 and 1881. The towns of Guasipati, Tumeremo
and Upata arise. To these towns the ambitious adventurers and exploiters come. A
new Dorado also appears: the rubber or balata. Mr. Goodyear invents the rubber
wheel for the rising automobile industry. Numerous trees are demolished; a real
deforestation takes place in the Sierra de Imataca and the Cuyuní, extending to the
depths of the Amazon state.

But as there is even more wealth, in 1913, on the banks of the Caroni, in the area
of El Guri, now occupied by the Raúl Leoni dam, the first diamonds are obtained.
Santa Elena de Uairén is born. Then there would come the history of Jimmy Angel,
another diamond searcher, who lands with its Flamingo G-2-W on the Auyantepui,
destroying the light aircraft in 1937, but discovering the highest cascade of the
world. An inventory of 16 million cubic meters of wood begins to suffer irreparable
consequences. The plant formation of this territory, which has taken 3 billion years
to form, in 300 years the man has left his destructive footprint too visible. So from
fever to fever, in just three centuries, the “civilized” human being has been turning
the “green hell” into a “red desert”.

The Mining Arc: A mafia distribution


This predation of the natural riches of Guiana, specifically its minerals, has become
an instrument of the regimen to capture the help of mafias, of terrorist sectors,
criminal groups, with very appetizing, devouring and extraction lust, in an
indiscriminate form, of the new Venezuelan “Dorado”. It´s about the Mining Arch,
more than 111 thousand km2, and is estimated to contain 7 thousand tons of gold,
copper, diamond, coltan, iron, bauxite and other minerals for industrial use.
According to global Forest Watch, at least five protected areas in Venezuela are
being deforested by illegal mining activities. Seven natural monuments and five
national parks are scattered throughout Venezuela’s Mining Arch. In these
territories mafias, illegal miners, drug traffickers, together with indigenous people
who have joined the mining work, as well as military and former FARC members,
live together. One of the elements exploited in the Miner Arch is the thorium, soft
metal, to be used as nuclear fuel, since it is more abundant in the Earth’s crust
than uranium and is 90 % more powerful in a nuclear explosion; moreover, all its
contents are usable in a reactor. In Venezuela, Russian and Iranian soldiers from
Hezbollah have been reported to be in charge of their search. All these illicit
activities bring with them bribes to military and police, in addition to the presence of
drug trafficking. This is the reality of the plundering of Venezuela’s golden loot. A
treasure that, instead of bringing welfare to the Venezuelan population, has
become the object of crime, corruption, deforestation and death.

También podría gustarte