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INTRODUCCIÓN.

La revolución industrial fue un movimiento tecnológico y científico que permitió


al ser humano entrar en posesión de nuevos medios y elementos, que hicieron
más viable la producción, el desarrollo y superación cultural y económica del
hombre y de la sociedad en general.
El cambio que se produce en la historia moderna de Europa por el cual se
desencadena el paso desde una economía agraria y artesana a otra dominada
por la industria y la mecanización es lo que denominamos Revolución
Industrial. El término fue acuñado por el historiador Arnold Toynbee para
referirse al desarrollo económico británico entre 1760 y 1840, aunque luego se le
ha dado un significado más amplio.

LAS SOCIEDADES PREINDUSTRIALES.


Las sociedades Preindustriales presentaban los siguientes rasgos:
- LA ECONOMÍA ERA AGRARIA:
La principal fuente de riqueza provenía de la agricultura y la ganadería. La
industria tenía poca importancia y era de carácter artesanal. Los excedentes
alimentarios eran escasos.
La mayoría de la población trabajaba en el campo (Un 70% u 80% vivía de la
agricultura). La población se concentraba allí donde trabajaba, es decir, en el
campo, en pequeños núcleos urbanos: pueblos y aldeas. Las grandes ciudades
eran muy escasas.
Las técnicas eran deficientes, elementos precarios, escases de abono para
alimentar a la tierra; con una tecnología precaria, las formas de producción eran
el pequeño taller artesanal y el sistema doméstico o rural a domicilio.
Los suelos se abonaban con los excrementos de ganado, con lo cual los bueyes
y los caballos tenían una importancia vital en la agricultura. Estos animales se
alimentaban en la zona de barbecho y pastos o bien con plantas forrajeras que
eran precisos cultivar. El único modo de conseguir más abono era disponiendo
de más ganado, pero esto suponía ampliar los pastos o cultivados de forrajeras,
lo cual quitaba terreno a los alimentos humanos. Por el contrario, si se
extendían los cultivos, disminuían los prados. Conclusión: este círculo vicioso
explicaba que el abono de origen animal fuese escaso.
La producción de los alimentos era pequeña, no sólo por la baja productividad
de los campesinos, sino por la llamada Ley de rendimientos decrecientes,
enunciada por David Ricardo (1772-1823).
Ejemplo
Superficie: 25 hectáreas.
Rendimiento: 100 kg/hectárea.

N° de Superficie Producción Producción por


campesinos cultivada total de trigo campesino

1 10 hectáreas. 1000 kg 1000 kg

2 20 hectáreas. 2000 kg 1000 kg

3 25 hectáreas. 2500 kg 833 kg

4 25 hectáreas. 2500 kg 625 kg

CONCLUSIÓN: Lo lógico es que el 3º y 4º campesino abandone las 25


hectáreas para cultivar otras tierras donde lograr una mayor producción, pero
todo volverá a repetirse cuando tengan descendencia. Esto llevará a un aumento
en el que no habrá terrenos tan fértiles que produzcan 100 kg/hectárea, a la vez
que tampoco se podrán abonar ya que se ha reducido la superficie dedicada a
alimentar al ganado.
La ley de rendimientos decrecientes no es una mera teoría. Las agriculturas
preindustriales padecían esta ley por su atraso tecnológico. El crecimiento de la
producción por vía extensiva desembocaba en escasos rendimientos.

- LA POBLACIÓN CRECÍA LENTAMENTE:


Con una economía fundamentada en una agricultura de escasos rendimientos,
el crecimiento de la población estaba condicionado por las buenas cosechas.
Cuando eran malas, la mayoría de la población pasaba hambre (Periodos de
hambruna). Si éstas se sucedían en el tiempo, entonces la mala alimentación
debilitaba el organismo y muchos enfermaban. Al no existir una medicina que
curase las enfermedades epidémicas, la muerte se adueñaba de muchas
personas.
Las tasas de mortalidad eran muy elevadas, aunque se compensaban con altas
tasas de natalidad, aunque muchos niños morían en el parto o en los dos
primeros años de vida.
A principios del s. XVIII Gran Bretaña o Francia eran países con muy poca
población; la esperanza de vida de sus habitantes no superaba los 30 años, y, de
hecho, sólo un porcentaje de la población llegaba a esta edad.

- LOS INTERCAMBIOS COMERCIALES ERAN LIMITADOS:


Predominando los realizados a larga distancia, por barco. Las comunicaciones
terrestres eran malas y escasas. Los medios de transporte, eran lentos,
primitivos y muy costosos.
La falta adecuada de medios de transportes impedía paliar la carestía de
alimentos, lo que llevaba a los llamados “períodos de hambruna”, con lo que
aumentaba la mortalidad.
La baja productividad del trabajo hacía que la producción y el consumo por
habitante fuera escasa.

La unidad de producción industrial más numerosa era el pequeño taller


situado generalmente en la ciudad. En él trabajaban los artesanos a las órdenes
de un maestro (gremios).

- EL DESARROLLO URBANO ERA ESCASO:


Predominaba el hábitat rural y las ciudades grandes y medias eran poco
numerosas.

REVOLUCIÓN INDUSTRIAL.
Se denomina revolución industrial al proceso iniciado a mediados del siglo
XVIII e inicios del siglo XIX en Inglaterra-Gran Bretaña (1750-1850), por el cual
la humanidad paso de unas formas de vida tradicionales basadas en la
agricultura, la ganadería y la producción artesanal, a otras fundamentadas en la
producción industrial y la mecanización (Uso de máquinas para
producir), ello propicio un acelerado proceso de urbanización que altero
profundamente las estructuras económicas, sociales, así como la mentalidad de
los hombres.
Inglaterra en aquel entonces, era un país que estaba bien preparado para
generar un impulso industrial sin precedentes, ya que poseía una agricultura
prospera, un sector manufacturado desarrollado, un importante comercio de
ultramar, que le proporcionaba consumidores, materias primas y capitales y un
gobierno que apoyó la innovación técnica y el desarrollo de las industrias.
 Aunque el fenómeno se inició en la segunda mitad del siglo XVIII, se
extendería por otras áreas (Europa, USA y Japón) a lo largo de los siglos
XIX y XX.
La revolución industrial fue relativamente rápida, se produjo prácticamente en
tan solo una centuria. Su importancia es equiparable a la de la Revolución
Neolítica. Recordemos la trascendencia que tuvo para el hombre de la edad de
piedra el descubrimiento de la agricultura y la ganadería.
Tradicionalmente la Revolución Industrial se divide en dos fases:
A. La primera Revolución Industrial: Se da a mediados del siglo XVIII
y hasta mediados del siglo XIX.
B. La segunda Revolución Industrial: Se da a finales del siglo XIX y
principios del siglo XX, en ella aparecen la electricidad y el petróleo como
principales fuentes de energía.

A. PRIMERA REVOLUCION INDUSTRIAL (1750-


1850).
1.FACTORES DE LA REVOLUCION INDUSTRIAL.

¿Por qué en gran Bretaña? ¿Por qué a mediados del


siglo XVIII?

1. FACTORES POLÍTICOS.

Un régimen político estable, la monarquía liberal, que desde el siglo XVII es el


sistema político imperante en Inglaterra (Mientras que en otros países de
Europa se refuerza la monarquía absoluta), y que se mantiene libre de las
revoluciones que aquejan a otros países europeos. Las numerosas guerras en las
que se vio envuelto el reino unido durante los siglos XVIII y XIX no provocaron
daños en territorio británico. La insularidad actuó en este sentido como una
barrera de protección a la que se unía el desarrollo de una poderosa flota de
guerra que mantendrá su hegemonía mundial durante los siglos XVIII y XIX.

2. FACTORES SOCIALES Y ECONÓMICOS.

Abundancia de capitales, procedentes, en parte, del dominio comercial


británico, pues desde el siglo XVII la marina mercante británica en dura
competencia con los holandeses se ha hizo con el control de buena parte de los
intercambios comerciales de otros continentes con Europa. El comercio de
productos como el té o el tabaco, y el tráfico de esclavos, había permitido la
creación de enormes fortunas, en manos de comerciantes y banqueros. Este
comercio colonial proporcionaba a Gran Bretaña materias primas y mercados
donde vender sus productos manufacturados.
La existencia de una moneda estable y un sistema bancario organizado: el
Banco de Inglaterra fue creado ya en 1694. Estas condiciones no se darán en
otros países europeos hasta finales del siglo XVIII.

Incremento sostenido de la capacidad para producir alimentos por parte de la


agricultura británica que está conociendo un importante desarrollo, la
denominada revolución agraria, desde la aprobación de leyes que permiten el
cercamiento de las propiedades.

Existencia de una abundante mano de obra. La población británica crece a


gran ritmo a causa fundamentalmente de los cambios en la agricultura: el
suministro constante y creciente de alimentos va terminando con las crisis
demográficas; otra de las razones de este crecimiento se debieron
fundamentalmente al descenso de la tasa de mortalidad, gracias a los avances en
la medicina (Edward Jenner- Descubridor de la vacuna contra la
viruela-1796), en la higiene y en las mejoras de alimentación. Parte de esa
población en crecimiento emigrará a las ciudades y formará la masa de los
trabajadores industriales.

El panorama industrial era muy limitado, aunque existía ya la mentalidad


capitalista en los empresarios (máximo beneficio al menor coste posible e idea
de competencia).

La mayor libertad económica a causa de la debilidad relativa con respecto a


otros países de organismos como los gremios que suponían un freno a cualquier
innovación en las actividades industriales. No es casual que fuese un británico,
el escocés Adam Smith, autor de La Riqueza de las Naciones, quien
hiciese la más destacada e influyente defensa de la libertad económica: para
Adam Smith la mejor forma de emplear el capital para crear riqueza es aquella
en la cual la intervención de los gobiernos es lo más reducida posible. La mano
invisible del mercado asigna siempre de la forma más eficiente los recursos
económicos de un país. Abundancia de emprendedores entre los comerciantes y
los grandes propietarios de tierra.

Una aristocracia que permite y premia las innovaciones y la creación de


riqueza, en contraste con la nobleza de otros países, más tradicional, apegada a
la tierra y que desprecia cualquier forma de trabajo productivo.

Menor peso de los impuestos al comercio en el mercado interno: en Gran


Bretaña el peso de los impuestos interiores era muy reducido comparado con
otros países europeos donde era muy común encontrarse aduanas interiores
cada pocos kilómetros lo que convertía al comercio en una actividad poco
productiva. Puede decirse que en Gran Bretaña existía ya un mercado nacional
que en otros países sólo existirá cuando se eliminen las aduanas interiores y se
cree una importante red de ferrocarriles.
3. FACTORES GEOGRÁFICOS.
Abundancia de hierro y, sobre todo, de carbón. El hierro se encontraba en los
Montes Peninos, mientras que el carbón abundaba tanto en Inglaterra como en
Gales y Escocia. De hecho, después de tres siglos de explotación, Gran Bretaña
sigue teniendo enormes reservas de carbón.
En las proximidades de las minas de carbón se concentrará gran parte del
potencial industrial británico en especial con el nacimiento de una fuerte
industria siderúrgica básica para proporcionar metales baratos para la
construcción de máquinas, ferrocarriles, infraestructuras...
Fácil y constante suministro de agua como fuente de energía, pues el clima,
lluvioso, superando de promedio los 1.000 mm anuales y sin estación seca,
proporciona corrientes de agua numerosas y constantes. La energía hidráulica
desempeñará un importante papel en los años previos a la difusión de la
máquina de vapor.
El factor “insular”: abundancia de puertos que facilitan el comercio nacional e
internacional. Este factor unido a la existencia de muchos ríos navegables (y
canales que se construirán) favoreció la creación muy temprana de un mercado
nacional con las ventajas que supone contar con un mercado de gran tamaño a
la hora de acometer inversiones.

2. LA REVOLUCIÓN AGRARIA.
La utilización de maquinaria agrícola moderna: segadoras, trilladoras, etc.
Como consecuencia de estos cambios, se incrementó la disponibilidad de
alimentos, la mortalidad por hambrunas disminuyó, la población aumentó y se
produjo un éxodo de mano de obra desde el campo a la ciudad, lo que permitió
el desarrollo de la industria.

3. REVOLUCIÓN TECNOLÓGICA.
En Gran Bretaña en el siglo XVIII la actividad inventiva se desarrolló mucho
más que en cualquiera de los países del continente europeo. En ella se
patentaron la mayor parte de las máquinas que revolucionaron la industria y
más tarde los transportes, y la historia de la revolución industrial es en parte la
de los hombres responsables de esos inventos.

- Las segadoras mecánicas de Obed Hussey y Cyrus MC Cormick


fueron el complemento para los granjeros puramente comerciales y los
especuladores de la tierra que extendieron las fórmulas.

- Hubo dos sectores que experimentaron los primeros cambios


revolucionarios en la tecnología y la organización económica: la
industria del algodón y la del hierro.
- La industria del algodón, se presentaba mejor a la mecanización por
su resistencia, tenía un mercado de consumo más amplio y, la elasticidad
de la oferta de materia prima era mayor.

El invento que transformó más radicalmente a la industria algodonera


fue la hiladora hidráulica, patentada por Arkrwight.

- En los primeros tiempos de la revolución industrial, el sector metalúrgico


tuvo un crecimiento mucho menor que el del algodón, pero su peso fue
decisivo porque la creciente oferta de metal barato facilitó la
mecanización de las otras industrias, la difusión de la máquina a
vapor y la transformación de los medios de transporte.

http://www.slideshare.net/davidayasta/la-revolucin-industrial-presentation

http://catedravaldes.files.wordpress.com/2012/06/hobsbawm_eric_j-1968-
industria_e_imperio-c_03-la_revolucion_industrial_1780-1840.pdf

http://www.andragogy.org/_Cursos/Curso00194/Temario/pdf%20lectura%206/Consecuencias
%20de%20la%20revolucion%20industrial.pdf

http://apuntesdehistoria.wikispaces.com/file/view/LA+PRIMERA+REVOLUCI
%C3%93N+INDUSTRIAL.pdf
http://roble.pntic.mec.es/cgee0016/4esohistoria/quincena4/textos/quincena4pdf.pdf

http://bachiller.sabuco.com/historia/revolucionesindustriales.pdf

http://filosofiacoalamos.files.wordpress.com/2013/05/la-revolucic3b3n-industrial-material.pdf

http://www.ign.es/espmap/figuras_industria_bach/pdf/Industria_Fig_01_texto.pdf

http://biblioteca.cisde.es/wp-content/uploads/group-documents/4/1319205803-
larevolucionindustrial.pdf

http://es.wikipedia.org/wiki/Revoluci%C3%B3n_Industrial

http://www.claseshistoria.com/revolucionindustrial/innovacionestecnicas.htm

http://www.historialuniversal.com/2010/07/primera-revolucion-industrial.html

http://es.wikipedia.org/wiki/Constituci%C3%B3n_de_los_Estados_Unidos_de_Am%C3%A9rica

http://www.monografias.com/trabajos54/consecuencias-revolucion-industrial/consecuencias-
revolucion-industrial3.shtml

http://revolindustrial18.galeon.com/efectos.htm
REVOLUCIÓN Y DERECHO LABORAL.

El derecho laboral nace como una necesidad de regular las relaciones


obrero - patronales, y equilibrar las desigualdades existentes entre estas. El
nacimiento del derecho laboral como rama del derecho en general, tiene una
vida reciente, cuyos antecedentes inmediatos datan con el surgir de la
revolución industrial y el siglo XIX.
Hay que recordar, que durante muchos siglos, hasta antes del siglo XIX, el
trabajo del ser humano no tenía ningún tipo de protección por parte de quienes
detentaban el poder y eran beneficiados con él, ello era así, ya que no había la
necesidad de implementar este tipo de acciones de amparo a la clase
trabajadora, pues no existía una organización social como la que nació a partir
del surgimiento del Estado Moderno.
La economía capitalista e industrializada del siglo XIX, organizada en
torno a los principios del liberalismo, consagraba la existencia de dos clases
sociales:

- La trabajadora, desprovista de los medios de producción y forzada a


vender su fuerza de trabajo.

- La burguesa, dueña de esos medios e inclinada a incrementar sus


beneficios a costa de las condiciones salariales y laborales de la primera.
Cada vez más se extendió la percepción de que el capitalismo consagraba
unas injustas desigualdades que había que eliminar.
La Revolución Industrial dio origen a nuevas relaciones de trabajo pues los
trabajadores pasaron a desempeñarse en los establecimientos de propiedad de
sus empleadores en lugar de hacerlo en sus domicilios, sometidos a exigencias
de orden y coordinación con las máquinas y con sus compañeros de labor hasta
el momento desconocidas.
Esta nueva organización del trabajo los sometía a condiciones de esfuerzo,
horario, riesgos de accidentes, enfermedades, falta de descanso y remuneración
ínfima; se comenzaba a trabajar con seis u ocho años de edad, las jornadas
superaban las quince horas diarias y en las fábricas las condiciones eran
insalubres.
Tales problemas despertaron la conciencia de los trabajadores, quienes
protagonizaron el inicio del movimiento obrero a principios del siglo XIX.
Fueron surgiendo en forma espontánea y esporádica diversos tipos de protestas,
como las manifestaciones, la huelga, la ocupación de fábricas y
el sabotaje.

Las primeras manifestaciones fueron violentas y consistieron en la destrucción


de las maquinarias por partes de los obreros, que consideraban que estas le
quitaban los trabajos. A los seguidores de estas tendencias se les llamo ludistas,
pues imitaron al obrero Ned Ludd un trabajador británico del condado
de Leicestershire, quien en  1811 incendió varias máquinas textiles a modo de
respuesta a las represiones que el proletariado estaba sufriendo.

 Su acción constituiría la base del movimiento luddita, de oposición al


maquinismo y a toda forma de tecnología en la revolución industrial y en
el mundo moderno.
Pronto los obreros británicos reconocieron la necesidad de unirse para
conseguir mejoras laborales (mejoras salariales, de jornada y de condiciones de
trabajo). Sus asociaciones se consolidaron en 1825, cuando se reconoció el
derecho de asociación y, como consecuencia, la creación de sindicatos (las
Trade Unions). Estos eran asociaciones locales con obreros de un mismo
oficio: hiladores, tejedores, tintoreros, etc. Y el sindicalismo entendido como
un movimiento de resistencia contra el capitalismo.
Durante las décadas de 1830 y 1840 se fundaron asociaciones obreras en los
países del continente europeo, entre los que se encontraban Alemania,
Francia, España y Bélgica.
Este movimiento obrero se manifestó en la mayoría de países industrializados
mediante otras organizaciones (cooperativas).

En 1833 se aprobaron Las Leyes fabriles, en la Cámara de los


Comunes inglesa. Estas leyes prohibieron utilizar niños menores de 9 años para
el trabajo asalariado y fijaron la jornada laboral de 8 horas para los niños con
edades comprendidas entre los 9 y los 13 años, y la jornada laboral de 12 horas
para aquellos entre los 13 y los 16 años de edad. Además se estipuló legalmente
que los niños debían ir 2 horas al colegio.
Otro movimiento de los obreros ocurrió en 1834. Un grupo de trabajadores
presento ante el parlamento ingles sus demandas en las denominadas "carta al
pueblo"; por esto, el movimiento se le conoció con el nombre de cartismo.
Las peticiones eran de caracteres políticos; por ejemplo, ampliar la participación
de las clases trabajadoras mediante el sufragio secreto y universal de los
varones.
Durante el siglo XIX fueron naciendo diversas corrientes que desde ángulos
distintos exigieron la intervención del Estado en defensa de los trabajadores,
como las escuelas intervencionistas y las escuelas socialistas.

- Las escuelas intervencionistas quieren que el Estado proteja, por


medio de una política adecuada, a las clases sociales perjudicadas con la
libre distribución de la riqueza.

- El socialismo, particularmente en su desarrollo formulado por Karl


Marx, procuraba sustituir la estructura capitalista por un régimen en
que no existiera la propiedad privada de los medios de producción ni la
explotación por unos seres humanos de la fuerza de trabajo de otros. El
objeto del socialismo es la emancipación de los proletarios por obra
revolucionaria de los mismos proletarios.
En el año de 1848, Karl Marx y Friedrich Engels dan a conocer su obra que llevó
por nombre “El manifiesto comunista” del derecho del trabajo que es el
antecedente oficial de lo que hoy conocemos como el derecho Laboral
moderno. En el año de 1850, se publica la obra “Contribución a la crítica de la
economía” de Karl Marx. En ella se da a conocer la teoría del materialismo
histórico, que es la base teórica en la que se fundamente la lucha del
proletariado.
Las doctrinas socialistas empezaron a crear partidos de clase, (de carácter
exclusivamente obrero) con el nombre de Partido social demócrata (con
personalidades como Kautsky en Alemania en 1890 o Lenin en Rusia en
1900).
Surge La Asociación Internacional de los Trabajadores (AIT) o
Primera Internacional, fue la primera gran organización que trató de unir a
los trabajadores de los diferentes países.
Fundada en Londres en 1864, agrupó inicialmente a los sindicalistas ingleses,
anarquistas y socialistas franceses e italianos republicanos. Sus fines eran la
organización política del proletariado en Europa y el resto del mundo, así como
un foro para examinar problemas en común y proponer líneas de acción.
Colaboraron en ella Karl Marx y Friedrich Engels. Se disuelve oficialmente en
1876.
Por otro lado la Iglesia católica a fines del siglo XIX se manifiesta en cierta
manera a favor de la clase proletaria obrera; lo que hoy se conoce como
"doctrina social de la Iglesia" entre sus principales Encíclicas tenemos:

-  Rerum Novarum (1891).
- Quadragesimo Anno (1931).
- Mater et Magistra (1961).
-  Laborem exercens (1981).

La Rerum Novarum (“De las cosas nuevas” o “De los cambios políticos”) es la


primera encíclica social de la Iglesia católica, promulgada por el papa León
XIII el 15 de mayo de 1891, abogó por la reglamentación de las horas de
trabajo, del trabajo femenino y de menores. Asimismo condenó la fijación de un
salario insuficiente, declarando un deber de estricta justicia del patrón pagar al
asalariado una remuneración que le permita vivir en condiciones humanas. En
ella, el papa dejaba patente su apoyo al derecho laboral de «formar uniones
o sindicatos», pero también se reafirmaba en su apoyo al derecho de
la propiedad privada. Las otras encíclicas complementaron y ampliaron la
primera.
En 1919, con el Tratado de Versalles que puso fin a la primera guerra mundial,
el derecho del trabajo adquiere respaldo internacional plasmado en la creación
de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
Es así como el trabajador que presta sus servicios subordinadamente ha pasado
de ser un esclavo en la Edad antigua, un siervo de la Edad
Media (conocido también como el siervo de la gleba), a un sujeto
con derechos y libertades en la actualidad. El Derecho ha venido a
regular condiciones mínimas necesarias para una estabilidad social.
Mucha confusión genera las definiciones de 'gremio' y sindicato',
términos aparentemente similares, pues agrupa a un grupo de
personas, pero con significados distintos.

Gremio: Son todos aquellos trabajadores que se dedican a una misma comunidad, que
tienen una misma profesión o estado social, que se unen para un bien común. 

Sindicato: Es la asociación de un grupo específico de trabajadores de un mismo gremio


que se unen para defender sus intereses. 

El objetivo de los sindicatos es asumir la representación y legítima defensa de sus


asociados, además de promover los intereses económicos, sociales y culturales de los
mismos.

Un mismo gremio puede tener varios sindicatos distintos, o bien pueden existir
trabajadores de un determinado gremio que no pertenezcan a sindicato alguno. 

En cada país se dan diferentes legislaciones y reglamentos acerca del funcionamiento de


los sindicatos, mientras que los gremios existen de hecho, sin necesidad de oficialización
alguna, estén o no asociados sus miembros.

La constitución de la OIT tuvo lugar en la conferencia de Washington celebrada entre el


29 de octubre y 29 de noviembre de 1919, en la que participó como representante de las
organizaciones obreras españolas Francisco Largo Caballero, secretario general de la
socialista Unión General de Trabajadores, resultando elegido miembro de su Consejo de
Administración y colaborando a partir de entonces muy estrechamente con el primer
director general de la OIT, el francés Albert Thomas.4

El Día Internacional del Trabajo


se conmemora el día internacional de la clase trabajadora en memoria de los
trabajadores anarquistas asesinados tras la revuelta de Haymarket, Chicago, tras luchar en
reivindicación de la jornada laboral de 8 horas diarias, pues fue el 1 de mayo de 1886 cuando
empezó la Huelga General en Estados Unidos por dicha reivindicación. El 1 de mayo,
sindicatos y partidos obreros de todo el mundo celebran mítines y manifestaciones.

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