Baby Heavens Is in Your Eyes 6

Baby Heaven's In Your Eyes [Taekook//Vkook] - TaekookMyFantasy 18/10/20 22:27
Baby Heaven's In Your Eyes [Taekook//Vkook]
Capítulo 6
Entonces podría ser que Jungkook fuera gay y podría estar en una crisis.
Podría.
Y estaba enloqueciendo porque uno, los invitados estaban a punto de llegar a la Festa de
su quinto aniversario con Miyeon y lo único que podía pensar era en besar a Kim Taehyung,
y dos, no estaba seguro de querer pasar el resto de su vida con una chica que había
engañado tres veces ya, con dos personas diferentes.
Así que sí, se podría decir que Jungkook estaba en una crisis y estaba a punto de tener un
ataque de nervios si alguien no le traía una copa de champán llena hasta el borde.
Jungkook le hizo una seña a uno de los camareros para que llevara la bandeja de copas de
champán hacia él. Tomó dos copas antes de decirle que se fuera, recostándose en el sofá.
Miyeon todavía se estaba preparando y sus padres dijeron que sólo se quedarían los
primeros treinta minutos, así su padre podría dar un discurso, antes de que viajaran a París.
Su padre tenía un evento de negocios allá y su madre tenía que ir con él, así él podía
presumir de ella, obviamente. A Jungkook no le importaba, y para su suerte, Seohyun
vendría y pasaría la noche con las chicas arriba así él quedaba fuera de la mira. Ellas no
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tenían permitido bajar donde la Festa se llevaría a cabo de todas formas, principalmente
porque servirían alcohol (sí, Jungkook sabía que todavía era menor de edad, pero a nadie
parecía importarle).
En el momento que el timbre sonó, Jungkook bebió su tercera copa de champán en un

lapso de diez minutos antes de levantarse del sofá, y caminar hacia la puerta. Una sirvienta
tendría que haberse hecho cargo de eso, pero él estaba cansado de sólo estar sentado.
—¡MIYEON! —Gritó, sus agudos gritos resonando por toda la casa.
Entonces la vio bajar por las escaleras, usando un vestido azul que parecía más una bolsa
de basura en lugar de un vestido de 6 mil dólares. ¿Desde cuándo insultaba su elección de
ropa? ¡Dios!
En la puerta ya había alrededor de cuatro personas de su escuela, y treinta minutos

después el salón se llenó de gente. Los padres de Miyeon estaban allí, charlando en un
rincón con los padres de Jungkook, todos los del 12 y algunos del 11 grado.
Jungkook ya había bebido cinco copas de champán y podía sentirlas hacer efecto. Estaba
un poco mareado y sus padres estaban a diez minutos de dar su discurso.
Encontró a Jin en la cocina, con su teléfono.
—¿Tu novio no va a venir? —Jungkook le preguntó.
—El no es mi novio y él... Sí, está justo en la calle.
—¿Te estás estás mensajeando con él en este momento?
—¿Sí?
—¿Con quién viene?
—Yoongi y Taehyung. Quiero decir, sé que dijiste que no querías a Taehyung aquí, pero... él
como que se invitó solo.
—No est.. eso está bien. Está bien.
Como si fuera una señal, el timbre sonó y él se apresuró a abrir.
Namjoon, Yoongi y Taehyung lo miraban, cada uno de ellos cargando diferentes botellas de
alcohol.
—Eh... no dejen que nadie vea eso. Vamos solo a… pónganlo en la cocina. —Dijo Jungkook
e hizo un giro de 360 grados, antes de llevarlos a la cocina.
—¿Estás borracho? —Namjoon le preguntó poniendo una mano sobre su hombro.
—No. —Dijo jungkook y dio un golpe a su mano para quitarla.
—Jungkook tus padres están a punto de dar un discurso. —Jimin dijo cuándo hizo su
aparición en la cocina. Sonrió cuando los vio, y se acercó a Yoongi para saludarlo con un
beso.
—Si... seguro.
Jungkook cruzó el pasillo hasta la sala de estar, donde sus padres estaban en un pequeño
podio junto a la chimenea, cada uno sosteniendo una copa de champán. Jungkook se
sentía como si fuera a enfermarse.
—Tomen asiento, tengo el tiempo limitado para dar mi discurso.
La habitación se quedó en silencio y Jungkook encontró el camino hacia el frente del podio,
junto a Miyeon, quien le sonrió y entrelazó sus dedos.
—Me gustaría proponer un brindis por mi hijo, y su encantadora novia Cho Miyeon, por
Fnalmente llegar a los cinco años juntos.
Un camarero apareció como si de una señal se tratara, entregándole a todos una copa y
Jungkook sabía que iba a vomitar. Su padre comenzó a parlotear sobre algo y Jungkook
miró a su izquierda para ver a Taehyung apoyado contra la pared, al lado de Namjoon y
Yoongi, también sosteniendo una copa.
«Probablemente esta es la primera vez que prueba el champán.»
—Y me alegro de que mi hijo mayor haya encontrado el amor de su vida, estoy seguro de
que ellos tienen un futuro brillante por delante. —Levantó su copa.— Por cinco años de
estar juntos, y cincuenta más. ¡Salud!
Todo el mundo aplaudió y Jungkook murmuro 'salud' en voz baja, antes de beberse la copa
en dos grandes tragos. Escuchó a Taehyung resoplar desde el otro lado y no quería nada
más que ir hacia él y simplemente golpear su cara. Porque hace cinco semanas, cuando
había tenido el placer (sarcasmo por favor) de conocerlo, estaba perfectamente contento
con su vida y Miyeon.
Y ahora, podría ser gay. Pecador. Todo lo que su madre le había advertido cuando era más
joven.
Sus padres los apartaron a ambos hacia el pasillo, felicitándolos y entregándole a cada uno
un gran y gordo sobre 'para el futuro'.
—Nosotros nos vamos al aeropuerto ahora, y estaremos de vuelta el domingo. Estoy tan
orgulloso de ti, hijo. —Su padre le dijo y le dio una palmadita en la espalda. Los padres de
Miyeon le hicieron saber que ellos también se iban, ya que eran los únicos adultos en la
Festa y no querían que se sintieran como si se estuvieran entrometiendo o algo por el
estilo.
En el momento en que estuvieron fuera de la puerta, Miyeon besó a Jungkook y le dijo que
ella era feliz en ese momento, lo único que podía hacer era besarla de vuelta.
La atmósfera cambió unos minutos más tarde, cuando Yoongi hizo estallar la música de
los altavoces desde su teléfono y Namjoon trajo sesenta vasos de shots de la alacena de la
cocina.
No había nada que Jungkook pudiera hacer de todos modos, estaba borracho; y lo único
que quería hacer era dejarse caer en el sofá y no tener que levantarse de nuevo.
—¿Estás bien Kook? —Yoongi le preguntó mientras se dejaba caer pesadamente en el sofá,
poniendo un brazo alrededor de Jungkook. Para este punto, al más joven ni siquiera le
importaba que Yoongi estuviera fumando un cigarrillo justo en frente de su cara.
—Sí. —Jungkook mintió y Yoongi apuntó su cigarrillo hacia la masa de gente que estaban
bailando.
—No pareces estar disfrutando el hecho de que tú y tu novia acababan de cumplir cinco
años juntos.
—Si, bueno... estoy a una copa de vomitar todo.
—Está bien, entonces. Voy a irme antes de que me vomites encima. Tengo que encontrar a
mi novio de todos modos. Probablemente está en la mesa de cupcakes.
Entonces Jungkook se quedó solo. Pero no por mucho, porque una pareja besándose se
dejó caer en el sofá a su derecha, y... oh genial. Kim Taehyung, lo encontró, sentándose a
su lado. Y el hecho de que Taehyung oliera tan bien no le estaba ayudando en absoluto.
—Hola Jungkook.
—¿Qué quieres, Taehyung? —Respondió y Taehyung sonrió, gustandole el hecho de que

podía conseguir una reacción de Jungkook fácilmente.
—Estás jodidamente borracho.
—No me digas como estoy.
Taehyung negó con la cabeza.— Tu seguro que sabes cómo tener diversión ¿No?
—Creo que hemos dejado claro el hecho de que nuestras ideas de diversión son algo
diferentes. —Dijo Jungkook, girando la cabeza para mirarlo adecuadamente.
Estaba usando una camiseta que decía ‘HIPSTA PLEASE' (qué diablos signiFcaba eso,
Jungkook no tenía ni idea), una camisa a cuadros que aparentemente se suponía iba a
servir como una chaqueta, jeans ajustados negros y esos Vans suyos.
—¿Y qué estás incluso haciendo en mi Festa? No fuiste invitado.
—Por favor, ésta Festa hubiera sido aburrida si nosotros no hubiéramos venido. Ustedes,
niños ricos deberían ser los que saben cómo hacer una Festa.
—Utilizamos nuestro dinero en cosas más importantes.
—¿Como relojes de 10 mil dólares? Puedo conseguir una rebaja por diez Won.
—Sí pero entonces no tendría un valor.
—¿Valor? Literalmente hacen lo mismo, muestran la hora.
—Lo que sea. No espero que sepas de lo que estás hablando.
—Tu cabeza está tan lejos de tu culo que ya no sabes nada. Y estás borracho.
—¡No estoy borracho! —Jungkook protestó y Taehyung puso una mano en su muslo, la cual
Jungkook sacó de un manotazo unos segundos más tarde.— No me toques.
—No tuviste problema las últimas dos veces que te toque.
—¡Cállate! —Jungkook siseó, mirando a su alrededor para ver si alguien había oído. Pero
estaban demasiado entretenidos bailando y pasando un buen rato como para prestarle
atención.
Jungkook quería atención. Le gustaba; le hacía sentirse bien consigo mismo.
—¿Por qué nadie me está poniendo atención? ¡Es mi Festa! —Jungkook se quejó.
—Yo te estoy poniendo atención. —Dijo Taehyung.
Jungkook puso los ojos en blanco.
—Necesito un trago. —Decidió.
—Eres un idiota. Necesitas recostarte…
—¡No me digas qué hacer! No eres nada comparado a mí!.
Taehyung suspiró y buscó algo en sus bolsillos, antes sacar una pequeña bolsa llena de
pequeñas pastillas de color blanco.
—¿Que es eso? ¿Drogas?
—Éxtasis.
—Eso suena... sexual. —Dijo Jungkook y sus mejillas se sonrojaron.
—No lo es. Bueno... tal vez. —Dijo Taehyung y le guiñó un ojo, sacudiendo un poco la bolsa.
—¿De dónde sacaste eso?
—De donde saco todas mis drogas.
—Así que las robaste. —Aseguró Jungkook. Él nunca lo admitiría, pero le encantaba
molestar a Taehyung y burlarse inocentemente de él.
Y si Taehyung se ofendía de verdad... a Jungkook en realidad no le importaba.
—Ja-Ja. Las drogas son la única cosa que nunca robaría.
—¿Qué estás haciendo? ¿A dónde vas? —Jungkook le preguntó cuándo vio a Taehyung
levantarse del sofá.
—A encontrar algunas personas para darles esto.
—¿Eso no costó dinero? ¿Por qué las estás regalando?
—Eso es lo que hago. —Respondió Taehyung y Jungkook frunció el ceño, inseguro de que
exactamente él quería decir con eso.
«¿Él no era un traFcante de drogas, o sí?»
Siguió a Taehyung a través de la sala de estar, viéndolo entregarle una píldora a Yoongi y a
Jimin quienes se la tragaron sin ningún líquido.
Jungkook decidió que no se iba a complicar con eso.
Encontraron a Namjoon y Jin haciéndolo en un rincón oscuro de la habitación, con la mano

de Namjoon en los pantalones de Jin; Jin, estaba enrojecido y jadeando, y Namjoon gruñía
al oído del otro chico.
—¿No tienes polvo? —Preguntó Namjoon y Taehyung negó con la cabeza.
—Salud de todos modos. —Los dos también sé tragaron la píldora extremadamente rápido.
No le sorprendía de Namjoon, probablemente él estaba acostumbrado a tragar...cosas,
¿pero Jin? Esto era nuevo para Jungkook. Estaba un poco celoso.
—¡Jungkook! —Miyeon le gritó sobre la música, apareciendo de la nada.
Ella estaba claramente borracha y olía a vodka mezclado con fresa. Jungkook iba a vomitar
en cualquier minuto ahora.
—¿Qué es eso? —Preguntó Miyeon, señalando la bolsa casi vacía de pastillas en la mano de
Taehyung
—Dulce mágico… MDMA. —Taehyung respondió y Miyeon extendió su palma.
Taehyung le dio una y ella le dio las gracias, antes de besar a Jungkook en la boca y darse
la vuelta, haciendo su camino de regreso a sus amigos.
—¿Qué hace esa... que hace esa cosa? —Preguntó Jungkook a Taehyung, quien se tragó
una también.
—Te hace feliz.
—Eso no puede ser verdad.
—Lo es. Inténtalo.
—¿Qué si muero?
—Morirás feliz. —Taehyung respondió y Jungkook puso los ojos en blanco, extendiendo su
mano.
—Lengua.
—¿Qué?
Taehyung repitió la palabra y Jungkook Fnalmente entendió, dudando un poco antes de

sacar su lengua. El mayor presionó la píldora contra su lengua y Jungkook en verdad se la
pasó sin atragantarse.
—No me siento diferente.
—Ya verás.
—Oh mi.. —Jungkook comenzó y de repente sintió como si estuviera a punto de vomitar.
—¿Qué? —Preguntó Taehyung sus pupilas ya dilatadas.
—Necesito... voy a vomitar.
Jungkook logró correr escaleras arriba y llegar a su baño, antes de vaciar todo lo que había
en su estómago en el inodoro.
Olía horrible y arrugó la nariz mientras tiraba la cadena del excusado, antes de ir al lavabo a
lavarse las manos y cepillarse los dientes.
—¿Jungkook? ¿Todavía estás vivo? —Escuchó una voz en su habitación y él gruñó, saliendo
del baño.
Taehyung estaba parado en la puerta, rascándose la parte posterior de su cuello y

sonriendo.
—¿Qué?
—Estoy tan feliz ahora mismo. —Él respondió y Jungkook se sentó en su cama para
aplicarse un poco de perfume.
—Estas drogado.
—Tal vez. —Dijo Taehyung y bloqueó la puerta.
—¿Por qué bloqueas la puerta?
—En caso de que alguien entre. —Taehyung respondió, y rodeó la cama para sentarse al
lado de Jungkook.
—Fuera de mi cama, por favor.
—He dormido en ella antes.
—¿Y?
—No actúes como si no me quisieras en ella.
Jungkook puso el perfume de Gucci en la mesita de noche y se levantó.
—Por favor, sal de mi habitación. Es suFciente con que hayas irrumpido mi Festa, pero
estás invadiendo mi privacid....
—¿Tu llamas a eso de abajo una Festa?
—Oh Lo siento. Me olvidé de traer a la puta multitud y algunas otras drogas ilegales.
—Eres caliente cuando maldices. —Dijo Taehyung con los ojos vidriosos, los cuales
barrieron el cuerpo de Jungkook de pies a cabeza. Jungkook no sabía qué decir, se sentía
atrapado y sus pantalones se estaban sintiendo más apretados en un segundo.
—Bueno, me estás poniendo de los nervios en este momento así que por favor si
pudieras...
Jungkook se detuvo abruptamente cuando Taehyung lo jaló hacia él de las pretinas del
pantalón, causando que se tropezara con sus propios pies y callera sobre Taehyung en la
cama.
Luchó por levantarse, porque sus pechos se estaban tocando y sus narices chocaron
juntas por un segundo. Y el aliento de Taehyung olía a esos caramelos de licor que habían
sido servidos en la planta baja.
Jungkook ni siquiera podía levantarse adecuadamente, porque Taehyung estaba tirando de

él de nuevo, esta vez por la parte de atrás de sus rodillas así que Jungkook terminó a
horcajadas sobre su regazo. Se preguntaba si a Taehyung no le importaba su peso.
Puso sus manos en los hombros de Taehyung para equilibrarse y lo miró hacia abajo,
respirando pesadamente. Sabía que Taehyung estaba drogado por esa píldora, pero él no
porque probablemente la había vomitado.
Las grandes manos de Taehyung bajaron al culo de Jungkook, extendiéndose sobre su

trasero y Jungkook podría llorar porque sus dedos eran tan largos que, literalmente,
cubrieron todo su trasero.
—Tu culo es literalmente tan jodidamente caliente. —Taehyung le dijo y se lo apretó, lo que
causó que Jungkook soltara un gritito en sorpresa y se sacudiera hacia adelante, porque en
realidad se sentía bastante bien.— Mierda Jungkook, estás tan ansioso por ello.
—¿Por… para que? —Preguntó Jungkook, su voz temblando un poco porque era consciente
de la erección de Taehyung presionando contra su muslo derecho.
—Por mi polla.
—¿Qu..?, no lo estoy.
—Tu sólo quieres a alguien que te haga sentir bien, ¿no? Que te haga gemir y gritar y
retorcerte hasta que explotes.
Jungkook sintió su estómago tensarse al oír las palabras de Taehyung. Su voz era
profunda y rasposa y Jungkook juró que podría correrse sólo con su voz. Nunca había
tenido a alguien hablándole así y le gustaba.
—Y estás tan duro para mí ahora... Casi puedo ver la cabeza a través de esos jeans tan
ajustados. —Taehyung susurró directamente en su oído, su cálido aliento enviando
escalofríos por la espalda de Jungkook.— ¿Alguna vez has sido tocado, Jungkook? —
Preguntó Taehyung y Jungkook no podía decir nada. Ya tenía los ojos cerrados y había un
calor burbujeante en su estómago.— ¿Lo has sido?
Taehyung se estaba poniendo impaciente porque estrujó el culo de Jungkook más fuerte
ahora.
—N-no.
—¿Ni siquiera por ti mismo? ¿Nunca te has tocado a ti mismo?
Jungkook negó con la cabeza y Taehyung maldijo por lo bajo, sus manos abandonado el
culo de Jungkook para dirigirse al frente de sus pantalones.
—¿Quieres que lo haga?
Tampoco respondió está vez. Él quería. Lo quería demasiado. Él quería que Taehyung lo
tocara y lo hiciera sentir bien y todo lo que Taehyung había mencionado. Pero no se atrevía
a decirlo porque estaba muy abrumado por todo lo que estaba sucediendo.
Se dio cuenta de que Taehyung seguía esperando una respuesta y mirándolo así que
asintió brevemente y Taehyung sonrió. Normalmente, esa sonrisa hubiera hecho que
Jungkook se enojara, pero su cerebro estaba nublado y no podía pensar recto (oh la ironía).
—Apuesto a que te vendrías en los pantalones solo si te sobo... porque eres un puto virgen.
Y por primera vez en su vida, Jungkook se sintió un poco avergonzado de ser inexperto. No
le gustaba el efecto que Taehyung tenía en él emocionalmente. Físicamente, lo amaba,
quería más.
—¿Eso es malo? —Preguntó en voz baja, casi inaudible.
—No. —Taehyung respondió brevemente, antes de que sus largos dedos comenzaran a
trabajar en los pantalones de Jungkook. Desabrochó el botón antes de bajar la cremallera.
Los brazos de Jungkook rodearon alrededor del cuello de Taehyung y miró hacia abajo para
ver lo que el mayor estaba haciendo.
El pelirrojo miró a Jungkook, antes de atraer sus rostros juntos por un beso húmedo que
Jungkook disfrutó demasiado. Sus lenguas se frotaron la una contra la otra un par de
lentas ocasiones, y mientras Taehyung chupaba el labio inferior, sus dedos trabajaban para
deshacer los tres primeros botones de su camisa.
Entonces se dejó caer de espaldas tirando de Jungkook con él, quien podía sentir sus
mejillas sonrojarse porque estaba recostado sobre y en Taehyung. No tenía idea de dónde
poner las manos, así que eligió por mantenerse a sí mismo con las palmas a cada lado de
la cabeza de Taehyung.
—Te puedes recostar sobre mí. —Le aseguró Taehyung y Jungkook lo hizo. Se inclinó, así
que su rostro estaba en la curva del cuello de Taehyung que olía increíble. Jungkook podría
o no tener una Fjación por la forma en que Taehyung olía. También se podía imaginar cuán
obsceno su culo debería verse al estar inclinado de esa manera, pero afortunadamente
nadie podía verlo.
Jadeó repentinamente cuando sintió la mano de Taehyung deslizarse en sus pantalones,

agarrándolo sobre sus boxers.
—Joder, Kookie estás tan duro, y ya estás goteando. —Taehyung susurró en su oído y
apretó dos de sus dedos contra el glande de Jungkook.
Jungkook gimió y se inclinó hacia adelante para crear más fricción.
—Ve despacio bebé, voy a ocuparme de ti. —Dijo Taehyung con voz áspera, y luego
Jungkook lo sintió acunar sus bolas y masajearlas. Estaba un poco avergonzado porque
sabía que se correría muy pronto.— Eres tan grueso, no lo habría imaginado.
Jungkook se sonrojó y Taehyung comenzó a acariciarlo a través de sus boxers,
presionando su palma contra la polla de Jungkook.
—Ah. —El más joven jadeó y ni siquiera reconoció su propia voz porque era aguda y
temblorosa.
Taehyung le dio un golpecito a la mejilla de Jungkook con su nariz, para que Jungkook
moviera la cabeza hacia el otro lado del cuello de Taehyung. Tan pronto como lo hizo,
Taehyung presionó sus calientes labios contra la piel de Jungkook, justo donde el cuello se
encontraba con su hombro. Y entonces empezó a succionar, morder y lamer, una y otra vez.
La combinación entre las frotaciones de Taehyung y la atención que le estaba dando al

cuello, envió a Jungkook sobre el borde, gimiendo 'Taehyung' en el cuello del pelirrojo
mientras de corría en sus boxers Armani.
Mientras bajaba de su orgasmo, Taehyung se mantuvo chupando su cuello y acariciando

su espalda, y con la otra mano su culo.
—Lo siento. —Dijo Jungkook y Taehyung se apartó de su cuello.
—¿Por qué?
—Por... uh. No durar mucho.
—Está bien, es normal para un virgen.
Jungkook se sonrojó y se sentó, así que ahora estaba a horcajadas sobre las caderas de
Taehyung, sintiendo su polla presionarse contra sus jeans.
—En serio, está bien. —Taehyung le aseguró y le palmeó el trasero una vez antes de rodar a
Jungkook fuera para poder ponerse de pie.
—¿A dónde vas? —Preguntó Jungkook.
—Al baño a terminar.
—Oh. No dejes un desastre.
—No lo haré.
Jungkook trató de bloquear los gemidos procedentes del baño mientras se subía la
cremallera de sus pantalones y los ajustaba. Se abotonó la camisa y se pasó una mano por
el pelo, todavía respirando pesadamente por lo que acababa de pasar.
Sus boxers se sentían pegajosos, pero sabía que tenía que lidiar con eso por otras dos
horas más hasta que todos se fueran. Taehyung salió del baño dos minutos más tarde y
sus ojos se posaron en el cuello de Jungkook.
—¿Qué? —Preguntó Jungkook.
—Tal vez deberías abotonarte toda la camisa.
—¿Por qué?
Taehyung señaló el espejo y Jungkook se levantó para ir a verse. Dejó escapar un sonido
raro cuando vio un gran moretón donde Taehyung había chupado previamente, el cual
estaba tornándose lentamente de rojo oscuro a púrpura.
—¿Qué es eso?
—Un chupetón.
—¿Me marcaste? ¿Cuándo se va a quitar?
—Como en dos o tres días. Cuatro, probablemente.
—¿Que? ¿Qué si alguien lo ve?
—Diles que te quemaste o algo así. Solo abróchatela hasta arriba, nadie lo notará.
Jungkook lo hizo, y para su suerte, no se veía. Volvieron a la planta baja y la gente todavía
estaba bailando y bebiendo, así que lograron pasar desapercibidos.
La gente empezó a irse alrededor de la medianoche, agradeciéndole por la Festa y pidiendo

otra igual pronto.
Yoongi, Namjoon y Taehyung fueron los últimos en irse. Jungkook y Miyeon los llevaron a
la puerta, y mientras Miyeon agradecía por asistir antes de invitarlos a la iglesia el domingo
(todos ellos sabían que ninguno de los tres irían, pero ellos la interrumpieron porque ella
estaba hecha un desastre, difícilmente podía decir palabras coherentes), Taehyung se
inclinó para susurrarle al oído a Jungkook:
—Pronto, Dios no va a ser el único chico por el que te arrodilles.
Jungkook observó su espalda hasta que desaparecieron detrás de las puertas

automáticas. Miyeon estaba sonriéndole alegremente y lo jaló para besarlo, antes de
pedirle que fueran a la cama y dejaran que las sirvientas limpiaran.
Esa noche, mientras Jungkook yacía en la cama de espaldas a Miyeon mientras ella lo
abrazaba en posición cucharita, todo en lo que podía pensar era en la forma en que
Taehyung lo había hecho correrse.
No le importaría si podían repetir eso, y en realidad se encontró preguntándose cuando

volvería a suceder.
Pronto, con suerte.
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Baby Heaven's In Your Eyes [Taekook//Vkook]

En el momento que el timbre sonó, Jungkook bebió su tercera copa de champán en un

—¡MIYEON! —Gritó, sus agudos gritos resonando por toda la casa.

En la puerta ya había alrededor de cuatro personas de su escuela, y treinta minutos

Encontró a Jin en la cocina, con su teléfono.

—¿Tu novio no va a venir? —Jungkook le preguntó.

—El no es mi novio y él... Sí, está justo en la calle.

—¿Te estás estás mensajeando con él en este momento?

—¿Con quién viene?

—No est.. eso está bien. Está bien.

Como si fuera una señal, el timbre sonó y él se apresuró a abrir.

—¿Estás borracho? —Namjoon le preguntó poniendo una mano sobre su hombro.

—No. —Dijo jungkook y dio un golpe a su mano para quitarla.

—Tomen asiento, tengo el tiempo limitado para dar mi discurso.

«Probablemente esta es la primera vez que prueba el champán.»

—Si, bueno... estoy a una copa de vomitar todo.

—¿Qué quieres, Taehyung? —Respondió y Taehyung sonrió, gustandole el hecho de que

—Estás jodidamente borracho.

—No me digas como estoy.

—¿Y qué estás incluso haciendo en mi Festa? No fuiste invitado.

—Utilizamos nuestro dinero en cosas más importantes.

—Sí pero entonces no tendría un valor.

—¿Valor? Literalmente hacen lo mismo, muestran la hora.

—Lo que sea. No espero que sepas de lo que estás hablando.

—No tuviste problema las últimas dos veces que te toque.

Jungkook quería atención. Le gustaba; le hacía sentirse bien consigo mismo.

—Yo te estoy poniendo atención. —Dijo Taehyung.

Jungkook puso los ojos en blanco.

—Necesito un trago. —Decidió.

—Eres un idiota. Necesitas recostarte…

—¡No me digas qué hacer! No eres nada comparado a mí!.

—¿Que es eso? ¿Drogas?

—Eso suena... sexual. —Dijo Jungkook y sus mejillas se sonrojaron.

—¿De dónde sacaste eso?

—De donde saco todas mis drogas.

Y si Taehyung se ofendía de verdad... a Jungkook en realidad no le importaba.

—Ja-Ja. Las drogas son la única cosa que nunca robaría.

—A encontrar algunas personas para darles esto.

—¿Eso no costó dinero? ¿Por qué las estás regalando?

«¿Él no era un traFcante de drogas, o sí?»

Jungkook decidió que no se iba a complicar con eso.

Encontraron a Namjoon y Jin haciéndolo en un rincón oscuro de la habitación, con la mano

—¿No tienes polvo? —Preguntó Namjoon y Taehyung negó con la cabeza.

—¡Jungkook! —Miyeon le gritó sobre la música, apareciendo de la nada.

—Dulce mágico… MDMA. —Taehyung respondió y Miyeon extendió su palma.

—Te hace feliz.

—Eso no puede ser verdad.

—Lo es. Inténtalo.

Taehyung repitió la palabra y Jungkook Fnalmente entendió, dudando un poco antes de

—No me siento diferente.

—¿Qué? —Preguntó Taehyung sus pupilas ya dilatadas.

—Necesito... voy a vomitar.

Taehyung estaba parado en la puerta, rascándose la parte posterior de su cuello y

—Tal vez. —Dijo Taehyung y bloqueó la puerta.

—¿Por qué bloqueas la puerta?

—Fuera de mi cama, por favor.

—He dormido en ella antes.

—No actúes como si no me quisieras en ella.

Jungkook puso el perfume de Gucci en la mesita de noche y se levantó.

—¿Tu llamas a eso de abajo una Festa?

Jungkook ni siquiera podía levantarse adecuadamente, porque Taehyung estaba tirando de

Las grandes manos de Taehyung bajaron al culo de Jungkook, extendiéndose sobre su