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Mier García Paola

Primer ensayo

Para muchos la cuarentena les ha caído bien, a otros mal, para mi no ha sido ninguna
de las dos, al tener tanto tiempo libre he podido reflexionar sobre mi, sentimientos
que antes no había notado, mis pasiones y por supuesto mis miedos, esos pequeños
destellos en el alma que duelen, que en ocasiones no los vemos, pero son como una
llama muy pequeña, latente y silenciosa, pero ¿De donde viene ese dolor?

Todo el tiempo tuvimos la libertad de ir a cualquier lugar, mirar el rostro de las


personas, nos dábamos cuenta si nos sonreían o no. Ahora vemos por todos lados
gente sin gestos, solo con tela sobre el rostro, no podemos ir a cualquier lugar, no
somos libres. Puedo decir que las cosas que menos creía importantes las extraño todos
los días, una de ellas es cuando comía después de clase los tacos de canasta afuera de
mi escuela, el reír con mis amigos por cualquier tontería, compartir audífonos con mi
amiga cuando la clase se tornaba aburrida, en fin, jamás creí valorar cosas que en su
momento no creí que importaran.

Pero no todo ha sido malo, he aprendido a amar cada parte de mi, valorarme y lo mas
importante, perdonarme. Esta parte no fue fácil, a veces el tener muchos miedos nos
va haciendo pequeños, el truco aquí es saber como enfrentarlos para poder volver a
crecer de nuevo.

Tenemos de dos; tomar este encierro para bien o tomarlo para mal, todo es cuestión
de uno mismo, no precisamente debemos de ser las personas mas positivas y
productivas del mundo. El punto aquí es valorar el tiempo que tenemos, darnos cuenta
que es lo verdaderamente valioso en la vida. Habrá días grises, otros negros, muy pero
muy negros y aun así siempre habrá un arcoíris al final del túnel, suena muy cliché
¿cierto? Pero miremos a nuestro alrededor, no todo es tan malo.

Aprendí que cuando empezamos a agradecer lo bueno que tenemos ya sean personas,
o incluso cosas materiales, recibimos mas de eso, pero si todo el tiempo pasamos
siendo personas negativas, tendremos mas circunstancias desafortunadas. Yo no se lo
que vaya a pasar después de esta pandemia o después de esta clase de literatura, creo
que nadie lo sabe, así que solo disfrutare del presente y dejarme de preocupar de lo
que va a pasar en el mañana.

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