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ESCUELA SUPERIOR DE ADMINISTRACION PUBLICA

PROGRAMA DE ADMINISTRACION PUBLICA TERRITORIALASIGNATURA:


TEORIAS DEL ESTADO Y DEL PODER
TEMA: ONTOLOGIA DE SANTO TOMAS DE AQUINO
PROF. MAGISTER CARLOS E. CAÑAR SARRIA

La doctrina de Santo Tomás de Aquino plantea una síntesis especulativa entre la fe y la razón, pone al
servicio de la Teología la síntesis más alta de aristotelismo y platonismo. Nacido en 1225, muere en 1274.
Sus obras más importantes son “Suma Teológica” y “Suma contra gentiles”. Planteamos a continuación
algunas de sus tesis principales que nos permitan entender antológicamente su pensamiento:
1) Existe un doble orden de conocimientos: natural y sobrenatural. El hombre con su propia
capacidad intelectual, puede llegar a un cierto conocimiento del mundo y de Dios; por la
elevación sobrenatural, el mismo Dios le infunde una capacidad superior-la fe-, por la que puede
conocer realidades reveladas por Dios, que excedan por completo su capacidad natural.
2) En el creyente, esos dos conocimientos están unidos sin confusión: la fe da sobrenaturalmente un
conocimiento cierto de realidades, que se integra con otros conocimientos naturalmente
alcanzados, mediante la noción misma de “realidad”.
3) La fe realiza una elevación del entendimiento, llevándole a conocer verdades a las que solo no
podría llegar. Pero, junto a esto, la fe opera además-respecto al entendimiento que la posee-una
obra de curación: como consecuencia del pecado original, la razón humana se encuentra
oscurecida, por debajo de su propia capacidad natural, oscurecimiento que se manifiesta
especialmente en relación a las verdades sobre Dios, a las que el hombre puede llegar con la sola
razón natural, pero a las que se hecho sólo llega con gran dificultad e imperfección; la fe también
nos da a conocer esas verdades naturales que se refieren a las relaciones del hombre con Dios y
restituye a la inteligencia parte de la luz perdida, sanado de algún modo la oscuridad infranatural.
4) La unión-sin confusión- entre fe y razón en el creyente significa, entre otras cosas, que la fe se
edifica sobre la razón; hay entre ellas una cierta continuidad: para creer es necesario un
conocimiento previo; no sería posible, por ejemplo, creer que dios es eterno, si la razón natural
no pudiese captar naturalmente, al menos en cierta medida, qué es dios y qué es la eternidad.
5) La teología es el conocimiento científico de la fe; es el desarrollo que el creyente hace de su fe
por medio de la razón que la posee. En consecuencia, la fe es el inicio, el fundamento y la regla
de la teología.
6) Tenemos una doble continuidad: de la fe con la razón natural; y de la teología con la fe. Y de ella
se desprende la necesidad de otra doble continuidad: de la teología con la filosofía; y de la
filosofía con el ejercicio espontáneo de la rabón natural.
7) El hombre ve el reflejo de Dios en este mundo. Para ello está dotado de un principio propio de
conocimiento: el intelecto. Este es el principio inmediato del conocimiento y no la iluminación
divina, que es más bien su presupuesto.
8) Los primeros principios del conocimiento no son innatos, sino fruto de una inducción a partir de
lo sensible.
9) El movimiento o el cambio, que la experiencia nos muestra, nos permiten ver que las cosas,
además de lo que son en cada momento, tienen capacidad real de ser “otro”, de adquirir
perfecciones o perderlas. Esa capacidad recibe el nombre de potencia: de hacer algo o “potencia
activa” y de recibir la acción de otro o “potencia pasiva”. Cuando se ejercita la capacidad de
obrar tenemos la “hacino”; cuando se realiza lo que estaba en potencia pasiva, tenemos el “acto”
correspondiente a esa potencia. De por sí “acto” dice perfección, realidad. Potencia y acto no son
dos estados sucesivos: Acto indica simplemente realidad; sin embargo, los actos que
observamos-por no ser puramente actos sino actos limitados-están limitados por su
correspondiente potencia, análogamente a como o recibido se limita por el recipiente. La
potencia, pues, no es sustituida por el acto, sino que recibe el acto siendo por él actualizada o
realizada. No es posible algo que sea simple y pura potencia. Sí es posible un Acto Puro, no
limitado por potencia alguna. El movimiento es algo real: el acto de un existente en potencia en
cuanto está en potencia. Es un acto imperfecto, todavía no terminado. En el mundo material
observamos cambios profundos, por los que un ente deja de ser lo que es y pasa a ser otra cosa.
10) Los accidentes son modos de ser de la sustancia. Los accidentes propiamente no son, sino que la
sustancia es según esos accidentes. El accidente recibe de la sustánciale ser; la sustancia recibe
del accidente el ser de un modo concreto. El ser del accidente en un “ser-en”.
EJERCICIO:
1) Argumenta la importancia de la fe en el encuentro y conocimiento de Dios.
2) Argumenta la relación entre la fé y la razón, es decir la unión entre la teología y la filosofía, lo
que ha implicado la tesis en el sentido que, en la Edad Media, la filosofía se hace esclava de la
teología. Comenta críticamente.
3) ¿Qué nos quiere expresar Tomás de Aquino cuando anota que “el hombre es el reflejo de Dios
en este mundo” Argumenta?
4) ¿Cómo el movimiento y el cambio Tomás de Aquino y en qué sentido se contrapone a la
dialéctica de la teoría marxista? Argumenta críticamente.
5) Resalta relaciones de semejanzas y/o diferencias con la ontología de San Agustín.

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