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PRÁCTICA DE RECUPERACIÓN 2. DERECHO ONLINE.

Ideas plasmadas por el pintor propias de su epoca :

Nos situamos en el contexto histórico-artístico de los albores del Renacentismo, en concreto de la

escuela flamenca de pintura del S. XV, donde los grandes maestros holandeses de la pintura

plasmaban en las mismas sus creencias y sentimientos religiosos y humanísticos.

La Obra de Van der Weyden, uno de los precursores de dicho movimiento que se asocia con la

instauración del denominado "Humanismo en el arte", –principal manifestación del referido

movimiento del Rinascimento– que empieza a imponerse en la Europa cristiana.

Dicha obra muestra la inspiración religiosa del autor orientada a mostrar una escena clásica como el

"descendimiento de Jesucristo de la cruz" bajo un nuevo enfoque humanístico. Se presenta la escena

bajo una devoción cristiana pero la orientación de un Jesus-hombre, alejado de la idea suprema de

Jesus-Dios todopoderoso.

Descripción de la Obra:

La obra muestra a un Jesucristo crucificado, cuando es descendido de la Cruz por sus discípulos, y

en presencia de sus "familiares", que asistieron a su calvario. Se muestra la figura de un Jesus

yacente, iluminado por su bondad y condición humana, con el cuerpo herido solo por la lanza en el

costado pero no mancillado. Su rostro sereno y bondadoso es la imagen de un Jesus hombre que ha

superado el tormento de la cruz, en beneficio de los hombres.

De los personajes destacan la figura central de José de Arimatea, que es quien dirige la escena y

también la Virgen María, madre de Jesus, desfallecida por el sufrimiento de su hijo, y la existencia
de varias figuras más femeninas, entre las que destaca la Virgen María, desfallecida por el dolor y

María Magdalena, que tras un paño muestra las lagrimas y el rostro del dolor.

Figuran tambien Nicodemo y el Apóstol Juan en la figura que asisten a José de Arimatea en el

descendimiento del suelo, en una alegoría a la condición humana de Jesus, que abandona su estado

divino en la Cruz, para incorporarse de forma serena al mundo de los hombres, hasta llegar al

momento de su ascenso a los Cielos, mediante la Resurrección.

La composición cromática de la figura es alegre y variada, destacando las lujosas y coloridas ropas

de época del pintor, como la de Nicodemo y otros personajes –que representarían a algún personaje

importante de la sociedad de aquel momento–.

La luminosidad es otra característica del cuadro, una especie de luz que parece iluminar toda la

composición, que acompaña en todo momento a Jesus, quien irradia a los demás personajes dicha

"luz divina".

Pese a la aparente tristeza de la escena, con pesadumbre de los personajes femeninos –Maria Virgen

y María Magdalena–, se muestra cierto aire de triunfo, con el deber cumplido de Jesus en su

sacrificio por y para los hombres y el descenso de su cadáver para darle sepultura, hasta el momento

que Dios-hombre, asciende a la diestra de Dios-Padre, en compañía de la figura celestial que

acompaña a dicho descenso.

A modo de conclusión la idea del cuadro es representar a la figura de Jesucristo como un hombre

sacrificado que alcanza la serenidad de su destino, manifestando su carácter mortal, abandonando la

idea de un Dios encumbrado y todo poderoso, más propio del medievo, que del nuevo

Renacimiento de la figura del Hombre en el Renacimiento.


Referencia bibliográfica:

https://www.museodelprado.es/coleccion/obra-de-arte/el-descendimiento/856d822a-dd22-4425-
bebd-920a1d416aa7

Alumna: Nicoleta Madalina Ghimici

NIE: X 7611131-V.

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