Está en la página 1de 70

M-04: TRANSPORTE DE SEDIMENTOS Ing. César Terá n Guevara.

“HIDROLOGÍA PARA OBRAS


HIDRÁULICAS”

DIPLOMADO PRESENCIAL VIRTUAL – 2017

MÓDULO 04: TRANSPORTE DE SEDIMENTOS

DOCENTE:

CÉ SAR TERÁ N GUEVARA

Ingeniero hidrá ulico.


ingteran@outlook.com
+51 976009180
M-04: TRANSPORTE DE SEDIMENTOS Ing. César Terá n Guevara.

TRANSPORTE DE SEDIMENTOS

El movimiento de los sedimentos se puede dar mediante dos mecanismos


diferentes: escorrentía superficial sobre la cuenca de drenaje y trabajo del agua
en los cauces.

Los estudios sobre transporte de sedimentos se hacen con diferentes


propó sitos, entre ellos:

 Calibració n de coeficientes de rugosidad con datos de aforos y


levantamientos topográ ficos.
 Evaluació n de capacidad de transporte líquido y só lido de los cauces,
detallando características de los sedimentos.
 Calibració n de modelos de transporte para definir zonas de agradació n,
degradació n o equilibrio.
 Descripció n de la diná mica fluvial de los cauces, caracterizació n de
material de arrastre y suspensió n, perfiles de flujo para diferentes
caudales, capacidad de transporte líquido y só lido.

1. Transporte de sedimentos por escorrentía superficial

La mayor parte del agua de las crecientes que llevan las corrientes se origina
como escurrimiento y proviene de las laderas vecinas. Ademá s, el agua que se
mueve sobre sus superficies produce erosió n de los materiales de las
pendientes laterales del río y dan origen a parte del material que es
transportado en el cauce.

El escurrimiento o escorrentía superficial, que fluye como una lá mina de agua, o


en canales someros muy juntos entre sí, llamados arroyuelos o cá rcavas, es
algunas veces suficientemente poderoso para vencer la resistencia del suelo a la
erosió n y transportar una gran cantidad de material pendiente abajo hacia los
cauces de los ríos. El agua lodosa que escurre de un campo arado o de una
pendiente recién nivelada durante una lluvia abundante es un ejemplo familiar
de la fuerza erosiva de la escorrentía.

Aunque la importancia de la erosió n de las laderas a causa del agua que escurre
en la superficie pasa con frecuencia inadvertida, desempeñ a un papel
importante en el proceso general de erosió n.

La determinació n de los sedimentos en la cuenca se sale del alcance de este


texto y se deja para los especialistas en el tema.
M-04: TRANSPORTE DE SEDIMENTOS Ing. César Terá n Guevara.

2. Transporte de sedimentos en cauces naturales

El á rea total que es cubierta por los cauces de las corrientes es só lo una
proporció n muy pequeñ a de la superficie total del terreno drenado por tales
corrientes (puede ser < 1%), pero sin embargo, los mecanismos de transporte
de sedimentos en el cauce son los má s destacados.

El agua que fluye a lo largo de los cauces de los ríos realiza varios trabajos:
a) erosiona el cauce del río, profundizá ndolo y/o ampliá ndolo; b) transporta
sedimentos, y c) deposita sedimentos.

La naturaleza y extensió n de estas actividades depende de la energía cinética de


la corriente, y ésta, a su vez, depende de la cantidad de agua, de la forma y tipo
de cauce y del gradiente de la corriente. Una corriente gasta su energía de
varias maneras: la mayor parte se consume en la fricció n del agua sobre el
cauce y entre partículas del fluido. La energía de la corriente que queda para la
erosió n y transporte de material es relativamente escasa. La depositació n tiene
lugar cuando disminuye la energía y la corriente no puede mover por más
tiempo el material que ha estado trasladando.

El material que una corriente levanta directamente de su propio cauce (o que es


aportado por la escorrentía de las laderas, por sus tributarios o por los
movimientos en masa) se mueve corriente abajo hacia su meta final, el océano.

Tres clases de materiales se distinguen en un cauce natural considerando


ú nicamente la resistencia que ofrecen a ser transportados por una corriente:
materiales no cohesivos o granulares, materiales cohesivos y rocas.

El material granular está formado por partículas sueltas. La fuerza que un


líquido debe hacer para mover las partículas es funció n del peso de cada
partícula y del coeficiente de fricció n interna. El material cohesivo está formado
de partículas muy pequeñ as que ofrecen resistencia al flujo de agua. Se
necesitan velocidades de corriente más altas para erosionar partículas má s
pequeñ as del tamañ o de arcilla y limo ya que la fuerza de cohesió n que impide
el transporte de las partículas por una corriente es considerablemente mayor
que el peso de la partícula, pero una vez que esta fuerza es vencida, la partícula
se puede comportar como si fuera granular y es transportada fá cilmente en
suspensió n debido a su peso y tamañ o reducidos. El material rocoso
usualmente no es movido o rodado por una corriente de agua durante el tiempo
de vida de una estructura. El material rocoso puede comportarse como
granular si está fracturado y la energía del flujo es muy alta.
M-04: TRANSPORTE DE SEDIMENTOS Ing. César Terá n Guevara.

a) Degradación del cauce

Los materiales se degradan en diferentes tiempos: suelos granulares sueltos se


erosionan rá pidamente mientras que los suelos arcillosos son má s resistentes a
la erosió n. Sin embargo, la degradació n final de suelos cohesivos o cementados
puede ser tan profunda como la de suelos arenosos, variando el tiempo en el
cual se produce. Por ejemplo, bajo condiciones de flujo constante, la
degradació n má xima se alcanza en horas para suelos arenosos, en tanto que
puede tardar días en suelos cohesivos, meses en depó sitos glaciales, piedras
areniscas y pizarras, añ os en piedra caliza y siglos en rocas tipo granito. Es
posible que varias crecientes se requieran para que se produzcan las má ximas
pérdidas de material, especialmente en suelos cohesivos, (HEC-18, 2001).
La interacció n entre el flujo y el material granular aluvial ha sido má s
ampliamente estudiada debido a que es el caso má s frecuente asociado con
problemas en la hidrá ulica de ríos.

Los sedimentos tienen su origen en el lecho, en las laderas del río y en la cuenca
hidrográ fica. Una corriente puede transportar material de tres maneras:
1) en solució n, 2) en suspensió n y 3) por carga de fondo.

Debido al proceso de transporte, el sedimento presente en una determinada


secció n del canal, en un momento dado, ha experimentado cambios en cuanto a
su forma, tamañ o y distribució n de tamañ os; esos cambios se deben
principalmente a los fenó menos de abrasió n y al de selecció n hidrá ulica.

 Abrasión es la reducció n en tamañ o de las partículas de sedimento por


acció n mecá nica, tal como impacto, deslizamiento, frotació n (fricció n),
rotació n, salto, suspensió n intermitente o continua (dependiendo de la
intensidad del flujo).

 Selección o clasificación hidráulica. Consiste en el agrupamiento, por


la acció n del flujo, de las partículas de sedimento que responden al flujo
en una manera similar; al mismo tiempo, en la separació n de aquellas
partículas que responden al flujo en una forma diferente.

Por ejemplo, en un río de tamañ o moderado, la mayoría de los granos


superiores a 10 mm no pueden ser movidos y tienden a acumularse en las
partes altas de los valles aluviales (cuando D > 10 mm, los granos se deslizan).
M-04: TRANSPORTE DE SEDIMENTOS Ing. César Terá n Guevara.

Partículas entre 1 y 10 mm tienden a moverse por rotació n sobre los granos


má s abundantes (arenas) y pueden ser transportadas rápidamente (1 mm < D <
10 mm).

Arenas de tamañ o grueso a fino (0.0625 mm < D <1 mm) se mueven por
tracció n y suspensió n intermitente con depositació n temporal en dunas y
barras puntuales.

Limos y arcillas (D < 0.0625 mm) se mueven principalmente en suspensió n


continua (como carga de lavado) y pueden ser transportados rá pidamente
hasta la salida de la cuenca o pueden ser rá pidamente depositados en las
llanuras de inundació n.

El límite para las partículas finas es aquel tamañ o que la turbulencia de la


corriente no es capaz de levantar en suspensió n; el límite para las partículas
gruesas es aquel tamañ o que rueda difícilmente con la corriente.

Los procesos de suspensió n, transporte y posterior depositació n del sedimento


dependen no só lo de las condiciones del flujo sino también de las propiedades
del sedimento.

b) Mecanismos de transporte

Los mecanismos de transporte pueden ser tres: solució n, suspensió n y carga de


lecho.

Solución. En la naturaleza ningú n agua es completamente pura. Cuando cae el


agua y se filtra en el terreno, disuelve algunos de los componentes del suelo.
Después el agua puede infiltrarse a través de las aberturas, poros y grietas de la
roca y disolver materiales a medida que se mueve. Gran parte de esta agua
encuentra su camino hacia las corrientes, ubicadas a niveles inferiores. La
cantidad de materia disuelta contenida en el agua varía con el clima, la estació n
y la ubicació n geoló gica y se mide en términos de partes de materia disuelta por
milló n de partes de agua (ppm). En algunas ocasiones la cantidad de material
disuelto excede de 1,000 partes por milló n, pero por lo comú n es mucho menor.
Los compuestos que má s frecuentemente se encuentran en solució n en el agua
que escurre en la superficie, sobre todo en las regiones á ridas, son los de calcio
y de magnesio. Ademá s, las corrientes llevan pequeñ as cantidades de cloruros,
nitratos, sulfatos y quizá trazas de potasio.
M-04: TRANSPORTE DE SEDIMENTOS Ing. César Terá n Guevara.

Suspensión. Las partículas de materia só lida que son barridas por la corriente
turbulenta de un río constituyen el material en suspensió n. Este proceso de
transporte está controlado por dos factores: la turbulencia del agua y la
velocidad de caída de cada grano individual. La velocidad de caída es la relació n
que eventualmente alcanza un grano cuando la aceleració n causada por la
gravedad se equilibra con la resistencia del fluido a través del cual está cayendo
el grano. En este caso el fluido es el agua. Sí se deja caer un grano de arena en
un estanque tranquilo, se asentará hacia el fondo a una velocidad siempre
creciente hasta que la fricció n del agua sobre el grano equilibre este grado de
incremento; después se asentará el grano a una velocidad constante, que es su
velocidad de caída. Si se introduce una fuerza que iguale o exceda esta
velocidad, se logra mantenerlo en suspensió n.

La velocidad de caída aumenta con el tamañ o de la partícula, suponiendo que su


forma general y densidad permanecen iguales. Cuanto má s grande es una
partícula, más turbulento deberá ser el flujo que se necesita para mantenerla en
suspensió n; y puesto que la turbulencia aumenta con la velocidad de flujo,
resulta que la cantidad má s grande de material es movida durante la época de
avenidas, es decir, cuando las velocidades y la turbulencia son mayores, de
manera que solamente en unas cuantas horas o muy pocos días durante la
época de inundaciones, una corriente transporta más material que durante
períodos de flujo bajo o normal mucho má s largos.

Carga de lecho. Los materiales que se mueven a lo largo del fondo de una
corriente constituyen la carga de lecho de dicha corriente, en contraste con la
carga suspendida y la carga en solució n. Las partículas de la carga de lecho se
mueven hacia adelante de 3 maneras: por saltació n, rodamiento y
deslizamiento. Una partícula transportada por saltació n brinca de un punto a
otro del lecho de la corriente; primero levantada por una corriente de agua
turbulenta y despedida hacia adelante; a continuació n, si es demasiado pesada
para mantenerse en suspensió n, cae otra vez al fondo en algú n sitio, corriente
abajo. Algunas partículas son excesivamente grandes y pesadas para ser
levantadas, aun momentá neamente, por la corriente; pero pueden ser
empujadas y llevadas a lo largo del lecho de la corriente y, de acuerdo con su
forma, moverse hacia adelante, ya sea por rodamiento o por deslizamiento.
Las partículas se mueven generalmente rodando o deslizá ndose unas sobre
otras en velocidades bajas. Sin embargo, cuando las velocidades aumentan,
arenas e incluso gravas pueden ser transportadas en suspensió n.
M-04: TRANSPORTE DE SEDIMENTOS Ing. César Terá n Guevara.

c) Depositación

En cuanto la velocidad de la corriente disminuye por debajo del punto


necesario para mantener el material en suspensió n, comienza la corriente a
depositar su carga suspendida. La depositació n es un proceso selectivo.
Primero se asientan los materiales más gruesos; después, a medida que la
velocidad (y en consecuencia la energía) continú a debilitá ndose, se van
asentando materiales cada vez más finos.

Los sedimentos de un medio fluvial, presentan características diversas, segú n la


zona en que se hayan depositado, de manera que unos representan la
acumulació n en el canal, otros, la que tuvo lugar en sus má rgenes y también
existen otros sedimentos correspondientes a zonas alejadas del cauce. Como se
vio en la Parte I, las diversas formas de depó sitos son islas, barras, terrazas,
abanicos fluviales, deltas.

2.1. Distribución del transporte de sedimentos

El transporte de sedimentos desde el punto de vista de la hidrá ulica fluvial se


puede clasificar en dos grandes grupos de acuerdo con su origen: carga de lecho
y carga lavada (Figura 1). La principal diferencia entre el uno y el otro es que la
carga de lecho depende de las características hidrá ulicas del flujo y de las
características físicas de los materiales, en tanto que la carga lavada depende
má s de las condiciones de la cuenca hidrográfica. La carga de material de lecho
del cauce puede ser transportada sobre el fondo del río o en suspensió n en toda
la columna de agua; la carga lavada, corresponde al material má s fino,
usualmente arcillas y limos, con origen en la cuenca, o bien, pueden provenir de
la erosió n que el mismo río produce en sus má rgenes. Este material es
transportado en suspensió n la mayor parte del tiempo, excepto en zonas de
aguas tranquilas como embalses donde el material muy fino puede
sedimentarse, razó n por la cual no se considera para efectos de los cá lculos de
los procesos fluviales de agradació n y degradació n del fondo del río.

Figura N°1: Tipos de transporte de sedimentos. Maza J. A. 1987.


M-04: TRANSPORTE DE SEDIMENTOS Ing. César Terá n Guevara.

• Transporte de lecho total o carga de material de fondo ( Sb )

Los sedimentos tienen origen en el lecho del cauce y pueden ser transportados
como carga de lecho en el fondo ( Sbb ), o como carga de lecho suspendida ( Sbs ).
La carga de lecho es generalmente granular de tipo piedras, gravas, y arenas.

Sb =S bb+ S bs (1)

Sbb =carga de lecho en el fondo o carga de fondo


Sbs =carga de lecho en suspensió n o carga en suspensió n

• Transporte de lecho en el fondo o carga de fondo ( Sbb )

Es el material del lecho que es transportado en una capa pró xima al fondo ya
sea por deslizamiento, rodamiento o saltació n, y tiene un espesor aproximado
igual a dos veces el diá metro de la partícula considerada. La carga de lecho en el
fondo varía entre el 5% y 25% de la carga en suspensió n, aunque puede
representar porcentajes mayores en materiales gruesos.

 Transporte de lecho en suspensión o carga en suspensión ( Sbs )

Es el material del lecho que es transportado en suspensió n por el flujo de agua.


El líquido levanta las partículas debido a su velocidad y turbulencia. Las
partículas se mantienen en suspensió n hasta que caen nuevamente al cesar las
condiciones de velocidad y turbulencia.

Una muestra de agua tomada en ríos de cuencas muy bien conservadas que
aportan muy poca carga lavada es representativa de la carga de lecho en
suspensió n.

 Transporte de lavado ( S I )

Estos sedimentos tienen su origen por erosió n en la cuenca hidrográfica y


eventualmente en las laderas del cauce. Todo el sedimento lavado proviene de
aguas arriba y no es representativo del sedimento en el fondo del cauce. La
carga lavada está formada por partículas muy finas especialmente limos y
arcillas que son mantenidas fá cilmente en suspensió n y no intervienen en los
procesos de agradació n y degradació n del río. Solo en zonas de velocidades
muy bajas como embalses, las partículas pueden sedimentarse. Sin embargo,
dado que su velocidad de sedimentació n es muy inferior a las fuerzas
ascendentes debidas a la turbulencia del fluido, la carga lavada depende
M-04: TRANSPORTE DE SEDIMENTOS Ing. César Terá n Guevara.

bá sicamente de la erosió n y condiciones geoló gicas e hidroclimatoló gicas de la


cuenca y no del caudal del río. La carga lavada está formada por materiales con
diá metro menor que 0.062 mm, aunque otros investigadores toman el tamañ o
má ximo igual a 0.050 mm.

Una muestra de carga lavada se puede obtener en tramos del río con
velocidades muy bajas, y su cuantificació n debe hacerse en laboratorio a partir
de muestras tomadas en campo.

 Transporte de sedimentos en suspensión o carga total en suspensión ( Ss )

La carga de sedimentos en suspensió n está formada por la combinació n de


carga de lecho en suspensió n y la carga lavada.
Ss =S bs +S I (2)
Una muestra de agua tomada de una corriente natural es siempre
representativa de la concentració n de material só lido en suspensió n puesto que
incluye la carga lavada y la carga de lecho suspendida.
 Transporte total de sedimentos o carga total de sedimentos (St)

La carga total de sedimentos está dada por las siguientes expresiones:

St =S b + S (3)
St =S bb + Sbs +S I (4)

St =S bb + Ss (5)

2.1.1 Determinación del transporte de sedimentos

La determinació n del transporte de sedimentos en un río se puede hacer de dos


maneras: a) por medición directa y b) por medio de ecuaciones propuestas
por diferentes investigadores. En el mundo, las mediciones de sedimentos son
poco usuales debido a las dificultades de trabajo en los ríos por lo que toca
recurrir a ecuaciones que arrojan un alto grado de incertidumbre.

2.2. Propiedades de los sedimentos

Las características que definen los procesos de suspensió n, transporte y


posterior depositació n del sedimento, dependen no só lo de las condiciones del
flujo sino también de las propiedades del sedimento y por ello es necesario su
estudio. Entre otras propiedades se considerará n a continuació n el tamañ o, la
forma, la distribució n granulométrica, densidad, peso específico y
concentració n.
M-04: TRANSPORTE DE SEDIMENTOS Ing. César Terá n Guevara.

2.2.1. Tamaño

El tamañ o de una partícula de sedimentos es su característica más importante y


de allí que fue la ú nica propiedad que se utilizó en el pasado para caracterizar el
grano de sedimento. Sin embargo, cuando la forma, la densidad y la distribució n
granulométrica son semejantes, se podría considerar que la variació n del
tamañ o define la variació n del comportamiento del sedimento. A continuació n
se citan los diá metros característicos.

Diámetro nominal, Dn, es el diá metro de una esfera de igual volumen que la
partícula de que se trata.

1/ 3
6∀
D n= ( )
π
(6)

∀ = volumen de la partícula

El diá metro del tamiz y el diá metro de sedimentació n son los pará metros de
mayor uso. Normalmente las arenas se miden por su diá metro de tamizado y
los limos y arcillas por su diá metro de sedimentació n.

 Diámetro de sedimentación, Dw. Se define como el diá metro de una esfera de


la misma densidad que la partícula, que cae con la misma velocidad terminal
uniforme en el mismo fluido y a la misma temperatura.

 Diámetro del tamiz, Di. Es la apertura mínima de una malla de tamiz a través
de la cual pasa la partícula en una distribució n granulométrica.
Es má s comú n identificar el tamañ o del sedimento segú n la proporció n (en
peso o en volumen) en que se encuentre en la muestra, bien sea del lecho o en
suspensió n; por ejemplo, D50 =0.273 mm significa que el 50 % (en peso) de la
muestra tiene un tamañ o menor que 0.273 mm.

En general:
D n = diá metro tal que el n por ciento de la muestra en peso tiene partículas
menores que Dn.
Diá metros característicos muy usados en hidrá ulica fluvial que se obtienen
de una curva granulométrica son: D16, D50, D84 , Dm.

 Diámetro medio ponderado Dm, es una medida de la tendencia central.


M-04: TRANSPORTE DE SEDIMENTOS Ing. César Terá n Guevara.

Dm =
∑ D i Pi (7)
∑ Pi
D m= diá metro medio de la muestra
Di= diá metro medio de cada tamañ o de clase o fracció n
Pi= peso del material retenido en cada malla
Di=( D imax + D imin ) /2 diá metro medio aritmético
Di=( D imax∗D imin )0.5 diá metro medio geométrico
( Dimax∗Dimin )= valores extremos de cada clase

Diámetro medio aritmético, D50. Corresponde al diá metro del material


promedio en peso; es decir, el tamañ o del material en las abscisas de la curva
granulométrica que corresponde al 50% en las ordenadas.

D50= diá metro que representa la mediana de la muestra, en donde el 50% de la


muestra en peso tiene partículas menores que D50. Solo para distribuciones
simétricas Dm = D50

Usualmente, Dm ≅ 1.25 D50

La Tabla 1 presenta la clasificació n de sedimentos segú n su tamañ o, dada por la


American Geophysical Unió n.

Tabla 1 :Clasificació n de los sedimentos por tamañ o segú n la American


Geophysical Union.García F., M. y Maza A., J. A. (1998).
M-04: TRANSPORTE DE SEDIMENTOS Ing. César Terá n Guevara.

Las mallas o tamices se denominan de acuerdo al tamañ o del agujero. El


sistema de nomenclatura de mallas má s corriente en Sudamérica es el US
Standar. El nú mero del tamiz indica la cantidad de agujeros por pulgada de
longitud de la malla; por ejemplo, la malla 200 tiene 200 agujeros por pulgada
de longitud. Algunos de los tamices más corrientes que se emplean se dan en la
Tabla 2 (Boletín Vías, Unal-Manizales).

Tabla 2 Numeració n de tamices Sistema U.S. Está ndar.

Número Abertura (mm) Número Abertura (mm)

4” 101.60 16 1.19
2” 50.80 20 0.84
1” 25.40 30 0.59
¾” 19.10 40 0.42
½” 12.70 50 0.297
3/8” 9.52 60 0.25
3 6.35 70 0.21
4 4.76 100 0.149
6 3.36 140 0.105
8 2.38 200 0.074
10 2 270 0.053
12 1.68 400 0.037
M-04: TRANSPORTE DE SEDIMENTOS Ing. César Terá n Guevara.

2.2.2. Distribución granulométrica

Las características del material en un tramo de un río se determinan por los


promedios de varias muestras tomadas en diferentes partes de la secció n
longitudinal y transversal del cauce en la zona de estudio. Aná lisis
granulométricos con tamices se usan para determinar las fracciones de
material grueso como gravas y arenas y métodos hidrométricos se deben usar
para obtener las fracciones de materiales finos como limos y arcillas.

El aná lisis granulométrico en los cauces se realiza con dos objetivos


complementarios que son la determinació n de la rugosidad del cauce asociada a
la gradació n de los sedimentos presentes en el lecho y la distribució n
granulométrica del material transportado y disponible segú n las muestras
recopiladas en los aforos só lidos. Esto ú ltimo se hace para establecer y calibrar
modelos de transporte de sedimentos que mejor se ajustan a las condiciones
medidas en campo durante campañ as de aforo.

La distribució n de frecuencia de los tamañ os se hace usando procedimientos


estadísticos que relacionan el peso de la partícula retenida en cada tamiz y el
tamañ o de la malla del tamiz. Se representa usualmente en forma gráfica
(Figura 2) en donde las ordenadas contienen el porcentaje de la partícula en
peso que es má s pequeñ o que el tamañ o representado por la malla y las
abscisas contienen el tamañ o de la apertura de la malla. La curva
granulométrica de sedimentos naturales transportados por los ríos usualmente
presenta una distribució n log- normal.
M-04: TRANSPORTE DE SEDIMENTOS Ing. César Terá n Guevara.

Figura N°2: Curva granulométrica.

2.2.3. Distribuciones teóricas

Las observaciones de quienes se han dedicado al estudio de los sedimentos


llevan a la conclusió n de que los tamañ os de las partículas que constituyen
tales sedimentos no se distribuyen segú n una ley ú nica. Sin embargo, se ha
comprobado también que dependiendo de las condiciones en las que se
encuentren los sedimentos en el lecho de los ríos, se dan abundantes casos que
presentan una tendencia bastante definida hacia cierto tipo de distribució n; es
decir, existen sedimentos que se ajustan má s a una determinada distribució n
que a otra.

La concordancia entre una distribució n real y una teó rica difícilmente es


perfecta. Las discordancias se tienen casi siempre en los extremos o colas de la
distribució n: las fracciones de material muy fino o muy grueso son las que se
alejan de la distribució n. La mayoría de las veces estas colas representan só lo
una pequeñ a fracció n o porcentaje de material; en estos casos puede aceptarse
totalmente la validez del modelo teó rico, o bien se debe indicar el intervalo en
el que se satisface el modelo.

Distribuciones comunes en ríos son la circular para zonas de montañ a, la log-


normal para cauces formados por gravas y arenas y la normal para cauces de
planicie con sedimentos formados por granos finos como limos y arenas.
M-04: TRANSPORTE DE SEDIMENTOS Ing. César Terá n Guevara.

Distribución circular

Los cursos de agua en zonas montañ osas se caracterizan principalmente por el


fuerte declive que presentan en el perfil longitudinal de su cauce, por la relativa
estrechez de su secció n transversal y por la abundancia de los materiales
gruesos o fragmentos rocosos que yacen a lo largo de su lecho. En este tipo de
cauces, la distribució n de los tamañ os de las partículas tiende a seguir una ley
circular, ya que si se dibuja la curva granulométrica característica del cauce en
papel aritmético (Figura 3), adoptando escalas tales que las distancias
representativas del diá metro má ximo y del cien por ciento sean iguales, el
diagrama resultante tiende a ser un cuarto de circunferencia de radio igual al
diá metro má ximo en la escala respectiva. Si ello ocurre, los tamañ os de las
partículas se distribuyen segú n la siguiente ecuació n.
2 1/ 2
Dn=D max
{ [
1 − 1−
n
( )]
100 } (8)

Dmax = Diá metro má ximo


n = Porcentaje que pasa

Sin embargo, la manera de ver clara y rápidamente si una curva granulométrica


sigue una ley circular, es dibujá ndola en el papel para distribució n circular, ya
que si en dicho papel los puntos de la curva granulométrica quedan
exactamente alineados sobre una recta, significa que los diá metros de las
partículas se distribuyen conforme a una ley circular.

Figura N°3: Papel para distribució n circular. García F., M. y Maza A., J. A. (1998).
M-04: TRANSPORTE DE SEDIMENTOS Ing. César Terá n Guevara.

Distribución log-normal

Cuando los sedimentos de los cauces naturales está n constituidos por gravas y
arenas, como suele ocurrir en el lecho de los ríos en zona intermedia, se ha
comprobado que los tamañ os de sus partículas tienden a seguir una ley del tipo
log-normal de probabilidades. Para discernir rápidamente si la granulometría
efectiva se ajusta o no a una distribució n log-normal, se dibujan los puntos de
dicha curva granulométrica en papel log-probabilidad, (Figura 4). Si los puntos
quedan exactamente alineados sobre una recta, es evidencia de que los
logaritmos de los diá metros se disponen segú n una distribució n normal o
gaussiana de probabilidades. Cuando esto acontece, se dice que la distribució n
granulométrica es del tipo log-normal y puede describirse mediante la
siguiente ecuació n.
Dn=D 50 ( σ g )Z
n
(9)

Zn = variable aleatoria está ndar. Es una variable que tiene distribució n normal,
con media igual a cero y desviació n está ndar igual a uno. Esta variable puede
asumir cualquier valor en el intervalo −∝≤ Z n ≤ ∝.
σ g= Desviació n está ndar geométrica
M-04: TRANSPORTE DE SEDIMENTOS Ing. César Terá n Guevara.

Figura N°4: Papel para distribució n log-normal. García F., M. y Maza A., J. A.
(1998).
Otros pará metros son:
D50=√ D84 D16 (10)

1
Dm =D50 [ 2
( lnσ g )
2
] (11)

1 D 84 D50
C g= ( +
2 D 50 D16 ) (12)

D m= Diá metro medio geométrico


C g= Coeficiente de gradació n

- Distribución normal

Los sedimentos constituidos por granos finos, como los limos y arenas finas que
se encuentran en el cauce de los ríos de planicie, tienden a seguir una
distribució n de tamañ os normal. Para saber rápidamente si la granulometría de
tales sedimentos es o no gaussiana, se dibujan los puntos de la curva
granulométrica en papel probabilidad, (Figura 5); si resulta que dichos puntos
quedan exactamente alineados sobre una recta, significa que los diá metros de
las partículas siguen una ley normal o gaussiana de probabilidad. Cuando esto
acontece, se dice que la distribució n granulométrica es normal, y puede
describirse por medio de la ecuació n:

D n=D 50+ Z n σ (13)


σ =Desviació n está ndar

Dado que la distribució n normal es simétrica, se cumple que Dm = D50.

2.2.4. Desviación estándar

Otro pará metro importante en la especificació n de una distribució n


granulométrica es la desviació n está ndar de la muestra, σ . Un valor de σ grande
indica que existe una variació n de diá metros muy amplia, mientras que un
valor pequeñ o indica mayor uniformidad en la distribució n.

 Partículas de sedimento con distribució n log-normal


M-04: TRANSPORTE DE SEDIMENTOS Ing. César Terá n Guevara.

1/ 2
D84 D50 D84
σ g= = =( )
D50 D 16 D16
(14)

σ g= desviació n está ndar geométrica. Si σ g > 3.0, la distribució n es extendida.

Figura N°5: Papel para distribució n normal. García F., M. y Maza A., J. A. (1998).

 Partículas de sedimento con distribució n normal

D 84−D 16
σ g=D 84 −D 50=D 50−D 16= (15)
2
σ g= Desviació n geométrica

2.2.5. Forma de la partícula

Es una característica que determina el modo del movimiento de la partícula


(granos de forma aplanada, en el lecho, difícilmente se mueven por rotació n,
pero sí se desplazan fá cilmente o, eventualmente pueden saltar). Normalmente
se define a través de la redondez, esfericidad y el factor de forma.

• Redondez. Se define por la relació n entre el radio medio de las aristas y


esquinas de la partícula y el radio de la circunferencia inscrita en la má xima
M-04: TRANSPORTE DE SEDIMENTOS Ing. César Terá n Guevara.

área proyectada de la partícula. Es una característica muy importante en los


estudios de abrasió n.
• Esfericidad. Es la relació n entre el área superficial de una esfera de
volumen equivalente al de la partícula y el á rea superficial de la partícula.
c b 2 3 bc
Ω=
√()√
3

b a
= 2
a
(16)

Ω = esfericidad
a = arista más larga
b = arista de longitud intermedia
c = arista má s corta. La esfericidad juega un papel importante en la
determinació n de la velocidad de caída- La esfericidad de la composició n
mineral de la partícula.
Factor de forma. Se define por la siguiente ecuació n.

c
FF= (17)
√ab
Para partículas de cuarzo, FF=0.7

2.2.6. Angulo de Reposo

Depende principalmente de la forma de la partícula.

Figura N°6: Angulo de reposo de una partícula. Cortesía Lilian Posada.

2.2.7. Densidad

Para una partícula só lida, es la relació n entre la masa que posee la partícula y
su volumen.
M
ρ s= (18)

M-04: TRANSPORTE DE SEDIMENTOS Ing. César Terá n Guevara.

ρ s= densidad de la partícula SI [ Kg/m 3 ] ST [ KgS2 /m4 ]


M = masa Kg
∀ = volumen m3
SI =sistema internacional de unidades
ST=sistema técnico de unidades

2.2.8. Peso específico

Es la relació n entre el peso de la partícula y su volumen, o lo que es igual, el


producto de la densidad y la aceleració n de la gravedad.

P
γ s= (19)

γ s =g ρs (20)

γ s =peso específico de la partícula SI [ Kg/s 2−m 2 ] o [ N /m 3 ] ST [ Kg/m3 ]


P= peso de la partícula [N]
G = aceleració n de la gravedad [ m/s 2 ]

Tabla 3 : Rango de valores del peso específico de partículas só lidas. Maza. J. A.


1987.

Material s [N/m3] SI s [ Kg /m3] ST

Piedras y guijarros 18,000 a 28,000 1,800 a 2,800

Gravas 21,000 a 24,000 2,100 a 2,400

Arenas 26,000 a 27,000 2,600 a 2,700

La mayoría de las arenas está n formadas por partículas de cuarzo, y por lo


tanto los valores característicos de densidad y peso específico son los que
figuran en la Tabla 4.

Tabla 4: Valores usuales de densidad y peso específico para arenas. Maza. J. A.


1987.
M-04: TRANSPORTE DE SEDIMENTOS Ing. César Terá n Guevara.

Parámetro SI ST

s 3 2 4
2650 Kg/m 270 Kg .s /m

s 26000 N/m
3 3
2650 Kg /m
SI = sistema internacional de unidades
ST = sistema técnico de unidades

2.2.9. Gravedad específica

La gravedad específica, G, se define como la relació n entre la densidad de la


partícula só lida y la densidad del agua a 4°C.
ρ s γs
G= = (21)
ρ γ
La mayoría de los sedimentos en ríos aluviales son cuarzos o feldespatos cuya
gravedad específica, es 2.65; sin embargo, G varía desde 1.35 a 1.70 para la
piedra pó mex; 2.3 para antracita o carbó n de piedra; hasta 7.6 para la galena
(sulfuro de plomo só lido).

2.2.10. Densidad relativa

ρs− ρ γ s−γ
∆= = (22)
ρ γ

∆= densidad relativa cuyo valor comú n para cuarzos es de 1.65.


ρ = densidad del agua (En SI, ρw =1000 Kg /m 3y en ST, ρw =102 Kg s 2 /m 4)
γ = peso específico del agua (En SI, γ w =9810 N /m3y en ST, γ w =1000 Kg/m 3

2.2.11. Peso específico sumergido

Se define por la diferencia entre el peso específico del sedimento y el peso


específico del agua.
γ s =γ s−γ (23)
2.2.12. Peso específico de la mezcla agua-sedimento (γ m)
M-04: TRANSPORTE DE SEDIMENTOS Ing. César Terá n Guevara.

Cuando el agua lleva material só lido en suspensió n, tal como limo, arcilla, etc.,
su peso específico difiere del peso específico del agua clara y se puede calcular
con la siguiente expresió n:

2.2.13. Concentración

Es la cantidad de partículas contenidas en el seno de un líquido, la cual se puede


calcular comparando pesos (concentració n en peso) o volú menes
(concentració n en volumen). En hidrá ulica fluvial se considera que la
concentració n de partículas en suspensió n no incluye materia vegetal ni só lidos
disueltos. Por ello, para separar las partículas de sedimentos, la muestra debe
decantarse o filtrarse y no evaporarse.

• Concentració n en peso

Existen varias formas de expresar la concentració n en peso, siendo una de ellas


la que relaciona el peso seco de los sedimentos con el volumen total de la
muestra

W s γ s ∀s
C s= = (24)
∀m ∀m

∀s = volumen de sedimento de peso específico γ s

∀m = volumen de la mezcla

C s = concentració n de sedimento en suspensió n (en peso)

La concentració n en peso se expresa en partes por milló n, teniendo para el agua


la siguiente equivalencia:

10−63 t⃗
1 ppm=
m3

• Concentració n en volumen

Se define como la relació n entre el volumen de los só lidos que hay en la


muestra y el volumen total de la misma.

∀s γ mW s
C s= =
∀m γ s W m

C s = concentració n de só lidos [ ppm]


(25)

M-04: TRANSPORTE DE SEDIMENTOS Ing. César Terá n Guevara.

∀s = volumen de só lidos

∀m = volumen de la muestra

W s = peso de só lidos

W m = peso de la muestra

γ s = peso específico de só lidos

γ ms= peso específico de la muestra

ppm = parte por milló n, es un pará metro adimensional

−6 m 3 ml
1 ppm=10 =
m 3 m3

2.2.14. Porosidad

Se define como la relació n entre el volumen de vacíos y el volumen de los


granos o volumen del sedimento.

Vv
n= (26)
Vs

V v = volumen de vacíos

2.2.15. Viscosidad cinemática del fluido ( v)

μ
v= (27)
g

μ= viscosidad diná mica

v= viscosidad cinemá tica =10−6 m 2 /s para agua a 20 ° C .

2.2.16. Velocidad de caída de una partícula

La velocidad de caída es la má xima velocidad que la partícula alcanza cuando


cae libremente en agua. La velocidad de caída tiene en cuenta el peso, la forma,
el tamañ o de la partícula, la temperatura y la densidad del agua. La Figura 7
presenta valores de la velocidad de caída en funció n del diá metro de la
partícula y la temperatura.
M-04: TRANSPORTE DE SEDIMENTOS Ing. César Terá n Guevara.

Figura N°7: Velocidad de caída (w) para partículas de arena. HEC-18. 1993.

Para obtener la velocidad de caída de partículas naturales, Rubey propuso la


siguiente ecuació n, García F., M. y Maza A., J. A. (1998):

1 /2
2 γ s−γ 36 v 2
w= [( )
3 γ
gD+ 2
D ] −
6v
D (28)

w = velocidad de caída (m/s )

v= viscosidad cinemá tica (m 2/s). Para agua a 18 ° C la es igual a 1.057∗10−6 m2 /s

D = diá metro característico (m)

2.3. Movimiento incipiente de sedimentos

El movimiento de una partícula de sedimento es funció n de las condiciones


instantá neas del flujo y de su resistencia a moverse. El inicio del movimiento de
las partículas se da cuando el flujo de agua está a punto de empezar a mover las
partículas de sedimento y depende del esfuerzo cortante que una corriente
produce sobre el lecho y de la velocidad media del flujo.

A medida que el líquido empieza a moverse sobre el lecho del cauce constituido
por partículas sueltas y sin cohesió n, de tamañ o uniforme, las fuerzas
hidrodiná micas empiezan a actuar sobre las partículas só lidas del lecho y en
todo el perímetro mojado. Un incremento en la intensidad del flujo produce un
incremento en la magnitud de esas fuerzas; llega un momento en que las
partículas del lecho son incapaces de resistir las fuerzas hidrodiná micas y
entonces empiezan a separarse y eventualmente inician el movimiento. Este
movimiento es instantá neo para todas las partículas de un tamañ o dado que
M-04: TRANSPORTE DE SEDIMENTOS Ing. César Terá n Guevara.

reposan en la capa superior del lecho; algunas empezará n a moverse mientras


que otras aú n no han iniciado el movimiento. La naturaleza del problema es
entonces aleatoria, confirmando el hecho de que el flujo tiene que ser
turbulento.

Si el lecho del cauce es de materiales cohesivos, no es apropiado hablar del


inicio del movimiento de partículas si no que es mejor referirse a la condició n
bajo la cual se produce erosió n del lecho o existe habilidad para transportar
fragmentos del suelo. Suelos cohesivos con alto peso volumétrico son más
resistentes al esfuerzo cortante que aquellos formados por suelos granulares o
sueltos. La resistencia al corte para suelos cohesivos es funció n de la relació n
entre los vacíos y el contenido de arcilla.

Definir con precisió n la iniciació n del movimiento es un problema bastante


difícil debido al gran nú mero de variables involucradas en el fenó meno. No hay
en la prá ctica un criterio ú nico que indique las condiciones bajo las cuales se
inicia el transporte de sedimentos. Existen muchas fó rmulas dadas por
diferentes autores y los resultados pueden ser bien distintos.

Un criterio que da una idea sobre la forma de transporte fue propuesta por
Raudkivi:

6.0> w/V∗¿2.0 Transporte de fondo, por deslizamiento y rodamiento

2.0> w/V∗¿ 0.7 Transporte de fondo por saltació n

0.7> w/V ∗¿ 0 Transporte en suspensió n

w = velocidad de caída

V ∗¿ = velocidad cortante

V ∗¿ √ gRI (29)
R = radio hidrá ulico

I = gradiente hidrá ulico

Para lechos formados por materiales granulares, las investigaciones


encontradas en la literatura permiten delimitar dos enfoques para definir el
inicio del movimiento: uno, que agrupa las fó rmulas o procedimientos para
hallar el esfuerzo cortante crítico y otro, que reú ne las fó rmulas o métodos para
hallar la velocidad, los que se tratan a continuació n.
M-04: TRANSPORTE DE SEDIMENTOS Ing. César Terá n Guevara.

2.3.1. Criterio basado en el esfuerzo cortante

Movimiento de partículas en suelos granulares existe si el esfuerzo cortante del


lecho ( τ) supera al esfuerzo cortante crítico ( τ c ).

- Esfuerzo cortante medio sobre el lecho

Cuando el agua fluye en un canal, se desarrolla una fuerza que actú a en la


direcció n del flujo sobre el lecho del canal. Esta fuerza, la cual es simplemente el
jalar del agua sobre el área con agua, es conocida como la fuerza tractiva. Por
definició n, la fuerza tractiva, también llamada fuerza cortante o de arrastre o
tangencial, es la fuerza que actú a sobre las partículas que componen el
perímetro del canal y es producida por el flujo del agua sobre estas partículas.
En la prá ctica, la fuerza tractiva no es la fuerza sobre una partícula individual,
sino la fuerza ejercida sobre un área perimetral del canal, (Figura 8) Este
concepto aparentemente fue planteado por primera vez por DuBoys (1879) y
replanteado por Lane (1955).

Figura N°8: Fuerzas en el canal.

En un flujo uniforme la fuerza tractiva es aparentemente igual a la componente


efectiva de la fuerza de gravedad actuando sobre el cuerpo de agua, paralela al
fondo del canal e igual a

γALSenθ . Así, el valor medio de la fuerza tractiva por unidad de á rea mojada, o
la llamada fuerza tractiva unitaria, es igual a γALSenθ / PL=γRSenθ donde P es
el perímetro mojado y R es el radio hidrá ulico; para á ngulos de inclinació n del
M-04: TRANSPORTE DE SEDIMENTOS Ing. César Terá n Guevara.

canal bajos, él senθ es aproximadamente igual a la tangente e igual a la


pendiente del canal S, es decir:

τ o=γALS (30)

τ =γRS (31)
τ O = fuerza tractiva

τ = fuerza tractiva unitaria = esfuerzo cortante

γ =peso específico del agua

A = á rea mojada

R = radio hidrá ulico

L = longitud del tramo del canal

S = pendiente del canal

En flujo variado se debe trabajar con el gradiente hidrá ulico I y no con la


pendiente del canal

- Esfuerzo cortante crítico

Muchos métodos se han propuesto para evaluar el esfuerzo cortante crítico de


materiales no cohesivos de granulometría uniforme siendo la contribució n más
importante del siglo XX la propuesta por Shields, que se ilustra en la Figura 9.
M-04: TRANSPORTE DE SEDIMENTOS Ing. César Terá n Guevara.

Figura N°9: Curva de inicio de transporte de sedimentos según Shields.


García F., M. y Maza A., J.A. (1997).

El uso de la anterior figura para encontrar el esfuerzo cortante crítico


representa un proceso iterativo ya que el pará metro adimensional del nú mero
de Reynolds crítico es funció n de la velocidad cortante crítica y ésta del
esfuerzo cortante crítico.

V ¿C D (32)
R ¿C =
V

R ¿C = nú mero de Reynolds cortante crítico

V ¿C = velocidad cortante crítica

τC
V ¿C =
√ ρ
(33)

Por lo anterior, se ha deducido la figura derivada del diagrama de Shields


(¡Error! No se encuentra el origen de la referencia.), que relaciona el diá metro
medio del material ( D50) con el esfuerzo cortante crítico y la velocidad cortante
crítica.
M-04: TRANSPORTE DE SEDIMENTOS Ing. César Terá n Guevara.

Figura N°10: Curva de Shields para movimiento incipiente de sedimentos.

ρ s=2,650 Kg/m3 , ρ s=1,000 Kg/ m3 , v=10−6 m2 / s y T ° =20° . Breusers, H. N. C.,


1984.

Otros criterios basados en el esfuerzo cortante crítico para determinar el inicio


del movimiento son:

• Meyer-Peter y Muller

τ c =0.047 ( γ s−γ ) D m [ SI ] (34)

• Laursen

τ c =0.039 ( γ s−γ ) D 50 [ SI ]
(35)
γ s = peso específico del sedimento [ K ⃗g /m3 ]

2.3.2. Criterio basado en la velocidad del flujo

Otro criterio para determinar el inicio del transporte de sedimentos consiste en


comparar la velocidad media del flujo con la velocidad media crítica. Entre má s
pequeñ o sea el tirante de agua, menor es la velocidad media del flujo que se
requiere para empezar el transporte de sedimentos. Debido a las dificultades en
la determinació n del esfuerzo cortante de un cauce, el enfoque empírico para
determinar velocidades medias en ríos ha prevalecido a lo largo del tiempo.
M-04: TRANSPORTE DE SEDIMENTOS Ing. César Terá n Guevara.

Segú n este criterio, habrá movimiento de partículas si la velocidad media del


flujo (V ) supera la velocidad media crítica (V c ) para el inicio del movimiento. La
velocidad del flujo permisible depende de las características del material que
conforma el cauce y expresa la velocidad má xima admisible antes de que
empiece a erosionarse.

• Velocidad media del flujo

La ecuació n má s general es la de Chezy con coeficiente de resistencia al flujo


dado por Manning.

1
V =C √ RI = R 2/3 I 1/ 2 (36)
n

V = velocidad media en la secció n transversal del cauce [m/s ]

R = radio hidrá ulico [m]

I = gradiente hidrá ulico [m/m]


1 /2
C = coeficiente de resistencia al flujo [m / s]

n = coeficiente de rugosidad de Manning.

El gradiente hidrá ulico ( I ) es igual a la pendiente de la solera del canal ( S) en


flujo uniforme. En estas ecuaciones el esfuerzo cortante está expresado
implícitamente en el coeficiente C .

R 1/ 6 1/ 2 (37)
C= [m /s ]
n

Otra expresió n de C muy usada en hidrá ulica fluvial es:

12 R
C=18 log ( )
D90
[m1/2 / s] (38)

Por aproximació n, cuando el cauce es muy ancho ( B>40 h), se puede tomar el
radio hidrá ulico igual a la profundidad del agua, simplificá ndose las anteriores
ecuaciones.

La má s grande dificultad de la Ecuació n 36 radica en la estimació n de n pues no


hay un método exacto para seleccionarlo. El valor de n es muy variable y
depende de una cantidad de factores: rugosidad de la superficie, vegetació n,
irregularidades del cauce, alineamiento del canal, depó sitos y socavaciones,
M-04: TRANSPORTE DE SEDIMENTOS Ing. César Terá n Guevara.

obstrucciones, tamañ o y forma del canal, nivel y caudal, cambio estacional,


material suspendido y transporte del fondo.

Para estimar el valor de n hay cinco caminos: a) comprender los factores que
afectan el valor de n y así adquirir un conocimiento bá sico del problema y
reducir el ancho campo de suposiciones; b)consultar un cuadro de valores
típicos de n para canales de varios tipos; c) examinar y hacerse familiar con la
aparició n de algunos canales típicos cuyos coeficientes de rugosidad son
conocidos y está n registrados en fotos, por ejemplo; d) determinar el valor de n
a través de un procedimiento analítico basado en la distribució n teó rica de la
velocidad en la secció n transversal de un canal y sobre los datos de medidas de
velocidad o de rugosidad; e) uso de ecuaciones empíricas. (Moreno A. y Castro
F. 2003).

La Tabla 5 presenta valores de n para cauces naturales.

Tabla 5: Coeficientes de rugosidad de Manning. Chow V. T., 1982.


(Valores en negrillas son los generalmente recomendados para el diseñ o).
M-04: TRANSPORTE DE SEDIMENTOS Ing. César Terá n Guevara.

Los valores normales para canales artificiales son recomendados solamente


para canales con buen mantenimiento”, Chow, V. T., 1982.

El procedimiento general para estimar los valores del coeficiente n consiste en


la selecció n de un valor de coeficiente base para un cauce recto, uniforme y
suave, hecho de los materiales de interés (Tabla 5) y luego adicionar factores de
correcció n en la siguiente forma:

n=(n0+ n1 +n2 +n3 +n 4 )n 5 (39)


M-04: TRANSPORTE DE SEDIMENTOS Ing. César Terá n Guevara.

n0 = valor base para cauces rectos y uniformes. Se obtiene de la Tabla 5

n1= valor adicional por la irregularidad en la secció n recta

n2 = valor adicional por variaciones en el cauce

n3 = valor adicional por obstrucciones

n 4= valor adicional por vegetació n

n5 = factor multiplicador por sinuosidad

Valores típicos de estos factores de correcció n está n dados en la Tabla 6.

Tabla 6: Valores de correcció n para la determinació n del coeficiente n de


Manning. Richardson E. V., Simons D. B. y Julien P. Y., 1990.

Existen muchas ecuaciones que correlacionan el coeficiente de rugosidad de


Manning con el diá metro, entre las que existen para cauces de montañ a está n:

– Strickler (1923) “Ríos con lecho de grava en Suiza”


M-04: TRANSPORTE DE SEDIMENTOS Ing. César Terá n Guevara.

n=0.0152(D 50)1 /6 (D 50 en mm) (40)

– Strickler (1948) “Para mezclas de materiales de fondo con una


significativa proporció n de tamañ os granulométricos“.D90 tiene en cuenta el
acorazamiento.

n=0.038(D90 )1/ 6 (D 90 e n m) (41)


– Posada (1998) “Ríos de montañ a con lecho de grava, Antioquia y
Risaralda”

n=0.0487(D 50 )1/ 6 (D 50 en m) (42)


– Limerinos (1970). Ríos con materiales de lecho variando en tamañ o
desde gravas pequeñ as a bolos medianos.
1
0.113 . R 6
n= ( D84 R en m) (43)
R
1.16+ 2.08 log ( )
D84

– Jarrett R.D., (1984)

n=0.3224 Sf 0.38 R−0.16 (44)

– UNICAUCA, (2003)
1
0.113 . R 6
n= (45)
R
1.379 log ( )
D 90
+1.20268

Desviació n absoluta media ( DAM )=21 %

• Velocidad crítica para inicio de movimiento de partículas

La velocidad crítica se define como la velocidad mínima que requiere una


partícula del lecho de diá metro D , para iniciar su movimiento (bajo unas ciertas
condiciones de flujo). Las fó rmulas o tablas que evalú an ambos conceptos son
todas de tipo experimental. Muchos investigadores han tratado de cuantificar
esta velocidad crítica de iniciació n del movimiento y la mayoría de los autores
coinciden en afirmar:
M-04: TRANSPORTE DE SEDIMENTOS Ing. César Terá n Guevara.

– Las leyes de la hidrá ulica que gobiernan el movimiento de limo y materia


orgánica disueltos en el flujo está n poco o nada relacionadas con las leyes que
gobiernan el problema de socavació n del canal por lo cual no son directamente
aplicables.

– El material del lecho de un canal bien formado se compone de partículas


de diferente tamañ o y cuando los intersticios de las má s grandes se rellenan
con las más pequeñ as, la masa llega a ser más densa, estable y menos
vulnerable a la acció n erosiva del agua.

– La velocidad requerida para erosionar o degradar un canal bien formado


en cualquier material es mucho má s grande que la velocidad requerida para
mantener el movimiento de ese mismo material, una vez removido del canal.

– La presencia de coloides en el material del canal o en el agua que


conduce el canal tiende a cementar las partículas más finas (limos, arcillas,
gravas) de tal forma que la resistencia a las fuerzas erosivas se incrementa y el
canal permite má s altas velocidades medias de flujo antes de que presente un
efecto de socavació n apreciable.

Hjulströ m (1935) analizó el problema de erosió n, transporte y depositació n con


base en la velocidad media del flujo. Debido a que la velocidad del fondo es casi
siempre muy difícil de determinar, él asumió que para profundidades mayores
que 1.0 m, la velocidad en el fondo es 40% menos que la velocidad media del
flujo (V b <0.4 V ). Hjulströ m presentó el diagrama mostrado en la Figura 11,
donde demarca las zonas de transporte, depositació n y zonas donde se inicia el
movimiento. El diagrama indica que los granos má s sueltos (arenas) son los
má s fá ciles de erosionar; la gran resistencia a la erosió n de las partículas má s
pequeñ as depende de las fuerzas de adhesió n y cohesió n.
M-04: TRANSPORTE DE SEDIMENTOS Ing. César Terá n Guevara.

Figura N°11: Diagrama de Hjulströ m. García F., M. y Maza A., J. A. (1997).

Para calcular la velocidad crítica del flujo que da inicio al movimiento de


partículas, se usan entre otras, las siguientes ecuaciones:

– Maza-García
1
V c =4.71 ∆ 2 D0.15 R0.15 (46)

ρs− ρw γ s−γ w
∆= = (47)
ρw γw

∆ = densidad relativa cuyo valor comú n para cuarzos es de 1.65

D = Dm para cauces con material casi uniforme o para diseñ os conservativos

D = D90 para distribuciones de materiales bien gradados y si la distribució n


granulométrica es log-normal

D = D84 para cualquier otra distribució n

V C = velocidad crítica [m/s ]


M-04: TRANSPORTE DE SEDIMENTOS Ing. César Terá n Guevara.

* D y R en metros

– Ecuació n empírica (HEC-18, 1993)


1 1
V c =6.19 h 6 D50
3
(48)

V c = velocidad crítica por encima de la cual el material de lecho con tamañ o


D50 o má s pequeñ o es transportado.[m/s ]

h = profundidad del flujo [m]

D50 = diá metro de la partícula de lecho en una mezcla cuyo 50 % es menor [m]

– Ecuación logarítmica

h
V c =5.75 V ¿c log 5.53 ( D50 ) (49)

V ¿ =√ gRI (50)

τc
V¿ =c
√ ρw
(51)

V ¿ = velocidad cortante crítica para inicio del movimiento de sedimentos.


c

También se puede obtener de la Figura 10

H= profundidad del agua [m]

H=R=hm en cauces de secció n aproximadamente rectangular o muy anchos

D50 = diá metro de la partícula de lecho en una mezcla cuyo 50 % es menor [m]

A
h m=
B

h m= profundidad media del flujo = profundidad hidrá ulica

B= ancho de la superficie libre del cauce


M-04: TRANSPORTE DE SEDIMENTOS Ing. César Terá n Guevara.

– Fortier y Scobey, 1926

Segú n se relata en R. H. French, (1988), a mediados de la década de 1920, se


comprendió que debía existir una relació n entre el gasto o la velocidad media,
las propiedades mecánicas del material de fondo y taludes, la cantidad y tipo de
material acarreado por el flujo, y la estabilidad de la secció n del canal. Es por
tanto que el Comité Especial de Riesgo Hidrá ulico de la Sociedad Americana de
Ingenieros Civiles encuestó a varios ingenieros cuya experiencia los calificaba
para producir opiniones autorizadas sobre la estabilidad de canales
construidos con varios tipos de materiales. La hipó tesis de este estudio era que
sí había una relació n entre la velocidad media del flujo, el material del
perímetro del canal, y la estabilidad de éste. El resultado de esta encuesta se
publicó en 1926 (Fortier y Scobey, 1926) y se convirtió en la base teó rica de un
método de diseñ o de canales, conocido como el método de velocidad má xima
permisible. Los principales resultados del informe de Fortier y Scobey (1926)
se encuentran resumidos en la Tabla 7.

Tabla 7: Coeficientes de rugosidad de Manning, velocidades má ximas permisibles


recomendadas por Fortier y Scobey y los correspondientes valores de la fuerza
tractiva unitaria dados por el US Bureau of Reclamation. French. R. H. 1988.
M-04: TRANSPORTE DE SEDIMENTOS Ing. César Terá n Guevara.

Con respecto a los datos de la Tabla 7, debe notarse lo siguiente:

a) Las cifras dadas son para canales con tangentes largas recomendá ndose
una reducció n del 25 % en la velocidad má xima permisible para canales con un
alineamiento sinuoso.

b) Las cifras son para tirantes menores de 3 ft .(0.91 m). Para tirantes
mayores, la velocidad má xima permisible debe aumentarse por
0.5 ft /s (0.15 m/s).

c) La velocidad de flujo en canales que acarrean abrasivos, como pedazos


de basalto, debe reducirse en 0.5 ft /s (0.15 m/s).

d) Los canales de derivació n de ríos con alta carga de arcillas como el río
Colorado deben diseñ arse para velocidades medias de
1 a 2 ft /s (0.30 a 0.61 m/s)mayores a las permitidas para el mismo material
perimetral si el agua no transportara sedimento.

– Lischtvan-Levediev

Lischtvan-Levediev presenta valores de velocidades má ximas que una corriente


puede tener sin que haya movimiento de partículas en el fondo. La Tabla 8
incluye valores de velocidades má ximas para suelos granulares en funció n del
diá metro medio de la partícula y de la profundidad del flujo y la Tabla 9 sirve
para suelos no cohesivos en funció n de la profundidad del flujo y el tamañ o de
la partícula.
M-04: TRANSPORTE DE SEDIMENTOS Ing. César Terá n Guevara.

Tabla 8: Velocidades medias no erosionables para suelos granulares (m/s )


segú n Lischtvan-Levediev. Maza J. A., 1987.

2.4. Acorazamiento del cauce

El acorazamiento de un cauce se produce cuando el lecho tiene sedimentos con


gradaciones extendidas de forma que el flujo de agua remueve las partículas
finas ocasionando un reacomodo de las partículas má s gruesas que forman una
coraza.

Un lecho acorazado y estable previene que la socavació n progrese. Las


condiciones críticas de acorazamiento son aquellas por encima de las cuales es
imposible el acorazamiento de cauces con sedimentos no uniformes, ya que la
coraza se rompería al estar sometida a altas velocidades del flujo (Melville, B.
W., 1988). Esta condició n representa el lecho acorazado má s estable para un
material dado y se caracteriza por una velocidad crítica de acorazamiento V ca.
M-04: TRANSPORTE DE SEDIMENTOS Ing. César Terá n Guevara.

Tabla 9: Velocidades no erosivas para suelos (m/s). Adaptada de Richardson E.


V., Simons D. B. y Julien P. Y. 1993.

La determinació n de las condiciones críticas para inicio de movimiento no está


bien definida cuando los sedimentos no son uniformes. En la prá ctica se admite
que la gradació n influye sobre el esfuerzo cortante crítico solamente cuando
D95 / D5 >5 segú n referencia que H. N. C. Breusers (1984) hace de Knoroz (1971).
Esto es debido a que las partículas grandes está n más expuestas y las pequeñ as
quedan ocultas y protegidas. Por lo tanto, se considera que D50 es una buena
medida para caracterizar el inicio del movimiento en la mayoría de los casos
tanto de sedimentos uniformes como no uniformes.

B. W. Melville ha presentado un procedimiento para determinar la velocidad de


acorazamiento como parte del método que propone para calcular la
profundidad de socavació n en pilas. Ver Parte IV.
M-04: TRANSPORTE DE SEDIMENTOS Ing. César Terá n Guevara.

2.4.1. Evolución de la velocidad de la corriente

Resumiendo algunos de los conceptos vistos en las secciones anteriores, se


concluye que a medida que aumenta la velocidad de la corriente, el movimiento
de las partículas pasa por diferentes situaciones durante el proceso erosivo tal
como se observa en la Figura 12.

1) Al aumentar el caudal en época de creciente, aumenta la velocidad media


del flujo en el cauce.

2) La velocidad del flujo es tal que se inicia el movimiento de las partículas


del lecho (V >V c ).

3) Se puede presentar el acorazamiento de cauces formados por partículas


no uniformes ya que el flujo de agua mueve partículas finas, reacomoda otras y
forma una capa resistente al arrastre (V >V a ).

V = velocidad del flujo

Vc = velocidad crítica para movimiento de partículas uniformes

Va = velocidad de acorazamiento

V ca = velocidad crítica de acorazamiento

Figura N°12: Evolució n de la velocidad de la corriente y movimiento de las


partículas. (SIPUCOL, 1996).

4) Se presenta remoció n del lecho acorazado debido al aumento de la


velocidad del flujo (V >V ca ).

2.5. Formas de transporte de sedimentos

Dos formas de socavació n se presentan en un cauce segú n que haya o no haya


movimiento de sedimentos desde aguas arriba: socavació n en lecho mó vil y
socavació n en agua clara.
M-04: TRANSPORTE DE SEDIMENTOS Ing. César Terá n Guevara.

2.5.1. Lecho móvil o lecho vivo

Se presenta cuando hay transporte de sedimentos del lecho desde aguas arriba
hasta el sitio de interés y por lo tanto parte de este sedimento queda atrapado
en el hueco de socavació n. En este caso, la degradació n alcanza equilibrio
cuando la cantidad de material que es transportado iguala la cantidad de
material que es removido. Se le conoce también como socavació n en lecho vivo.

2.5.2. Agua clara

Se presenta cuando no hay transporte de sedimentos del lecho desde aguas


arriba al sitio de interés y por lo tanto no hay reabastecimiento del hueco
socavado. En este caso, la socavació n alcanza equilibrio cuando el esfuerzo
cortante en el lecho es menor que el requerido para el inicio del movimiento de
las partículas, o sea cuando el flujo no puede remover más partículas del hueco
formado.

3. Muestreo de sedimentos.

El siguiente texto es adaptado de las conferencias que la Ing. Lilian Posada


impartió en el Curso

-Taller sobre Obras de Control Fluvial realizado en la Universidad del Cauca en


el añ o 2003, complementado con informació n extraída de los estudios
realizados por la Universidad del Valle para la Corporació n Regional del Valle
del Cauca –CVC- dentro del Plan de Modelació n del Río Cauca, -PMC-,
CVC/Corporació n Autó noma Regional del Valle del Cauca (2004).

Las muestras de sedimentos recogidas en una corriente, en una fecha


determinada, sirven para determinar la carga de sedimentos transportada en
ese momento. Para determinar los procesos de erosió n, transporte y
depositació n en esa corriente se requieren medidas sistemá ticas (perió dicas)
de la carga de sedimentos.

Las mediciones de las variables hidrá ulicas y de las características del material
del lecho y de las bancas sirven para determinar la capacidad de esa corriente
para transportar sedimentos. Las formas de recoger las muestras de sedimento
difieren, en principio, segú n el modo de transporte (en el lecho y en
suspensió n).

La carga de sedimento del lecho es difícil de medir por varias razones:


M-04: TRANSPORTE DE SEDIMENTOS Ing. César Terá n Guevara.

– Cualquier aparato colocado en el lecho o en su vecindad perturbará el


flujo y por lo tanto, la tasa del movimiento del sedimento.

– La medida de la carga de fondo puede no ser representativa de toda la


secció n del canal, puesto que la velocidad y el movimiento del sedimento varían
en espacio y tiempo.

– Es difícil distinguir entre la carga de sedimentos del fondo en


movimiento y el sedimento que se queda quieto.

– Es difícil diseñ ar un aparato que recolecte todos los tamañ os de granos


que hay en el fondo, especialmente cuando varían mucho en dimensiones.

“Ríos con amplio rango de tamañ os de los materiales del lecho presentan una
completa interacció n de partículas de diferentes tamañ os durante los procesos
de erosió n, transporte y sedimentació n, formando lechos espacialmente
heterogéneos, lo cual dificulta el muestreo de los sedimentos del fondo (Bunte y
Abt, 2001). Otros factores, tales como, la posible estratificació n de los
sedimentos del lecho, el régimen de caudales y las tasas de transportes
asociados, originan una gran variabilidad espacial y temporal en la composició n
del material del fondo. Se requiere, entonces, para los ríos de grava y guijarros,
un método de muestreo riguroso que permita caracterizar el amplio rango de
tamañ os de partículas que se pueden encontrar en el lecho. La variació n
vertical del tamañ o de los sedimentos en el lecho del río se manifiesta
generalmente por la presencia de tres capas distintas (Figura 13): i) una capa
superficial de material grueso, denominada comú nmente capa de armadura,
con un espesor aproximadamente igual al D90 (Diplas, 1992); ii) una capa
subsuperficial, generalmente conformada por sedimentos má s finos que los de
la capa superficial, con un espesor cercano a 2 D90 (de su propia distribució n
granulométrica); y, iii) la capa del fondo propiamente dicha sin un espesor
determinado (Diplas y Fripp, 1992) y compuesta por sedimentos de tamañ os
similares a los de la capa subsuperficial pero con menor contenido de finos
(Church, 1987). La diferencia en los tamañ os de los sedimentos entre la capa
superficial y las subyacentes depende en buena medida del régimen de
caudales y del aporte de sedimentos aguas arriba del sector en estudio (Bunte y
Abt, 2001). Debido a que las capas superficial y subsuperfícial en un río de
gravas y guijarros está n conformadas por material de diferentes tamañ os es
importante que las capas sean analizadas separadamente (Dalecky, 2001). Cada
capa está correlacionada a diferentes propiedades de la corriente (Fripp y
Diplas, 1993). La capa superficial está estrechamente ligada a las características
hidrá ulicas de la corriente. Por ejemplo, el diá metro D90 es usado generalmente
para calcular la rugosidad del cauce, mientras que el diá metro D50 es empleado
en el cá lculo de la estabilidad del cauce. La capa subsuperfícial se relaciona
M-04: TRANSPORTE DE SEDIMENTOS Ing. César Terá n Guevara.

estrechamente con la capacidad de1 cauce para servir como suelo de desove
para los peces y como há bitat para las comunidades bénticas (Waters, 1995). El
taponamiento de los poros debido a un exceso de finos en esta capa reduce la
cantidad y diversidad de organismos que en ella habitan o se reproducen, pues
los espacios para esconderse se limitan y el contenido de oxígeno se reduce. Por
esto, el contenido de finos en la capa subsuperficial se emplea en
investigaciones ecoló gicas (Fripp y Diplas, 1993) o como control de la calidad
de los suelos de desove (Adams y Beschta, 1980). También, una precisa
distribució n de tamañ os de la partículas en la capa subsuperficial puede
utilizarse para predecir las tasas de transporte de carga del lecho (Diplas,
1987). Para un río de gravas y guijarros, la técnica, la població n (estrato) y el
procedimiento de muestreo dependerán de los objetivos del estudio. Si se
adelanta un estudio del transporte de sedimentos del lecho se requerirá
muestrear la capa superficial, pero para un estudio de socavació n o de
degradació n se requerirá muestrear tanto la capa superficial como la
subsuperficial. Los diá metros D90 y D50 del material de la capa superficial son
comú nmente usados para estimar respectivamente la rugosidad y la estabilidad
de un cauce.”, CVC/Corporació n Autó noma Regional del Valle del Cauca (2004).

CAPA
SUPERFICIAL
ACORAZADA

CAPAS
SUBSUPERFICIA
LES

Figura N°13: Características de los materiales del lecho. Foto cortesía de D.


Powell. Parker G. (2004).
M-04: TRANSPORTE DE SEDIMENTOS Ing. César Terá n Guevara.

3.1. Procedimientos de muestreo

• Simons (1977) propone el siguiente procedimiento para recoger


muestras de material del fondo.

1. Si el lecho está seco:

– Remover el material superficial del fondo hasta un espesor de 2 D90;


eliminar el sedimento fino (por estar seco el lecho) y preparar la muestra
removida para el aná lisis granulométrico.

– Recoger muestras a una profundidad d, cuya magnitud se determina


considerando las características del lecho (pendiente, ancho, etc.).

– Determinar D90 y D65 de la primera muestra y D50 de la segunda muestra.

2. Si el agua está fluyendo en el cauce

– Tratar de localizar una porció n abandonada del canal para recoger


muestras con fines comparativos.

– Tomar muestras del material disponible en la capa superficial del lecho


para el aná lisis granulométrico y usar estos resultados para determinar tamañ o
y distribució n de las partículas.

• La Comisió n Federal de Electricidad de México propone el siguiente


procedimiento:

Las muestras se toman del cauce mismo, procurando no alterar la


granulometría original y teniendo en cuenta los aspectos siguientes:

– Elegir un tramo recto del río después de realizar un recorrido de


inspecció n.

– Los lugares que se escojan deben estar secos o semi-secos, esto es, donde
no fluya agua.

– Deben elegirse por lo menos cuatro puntos en cada secció n, donde el


material sea representativo del depositado en el cauce, dos en las márgenes y
los otros dos cerca del centro.

– Una vez seleccionados los sitios de muestreo, se retira una capa


superficial del suelo y se coloca sobre la manta o lona. Luego se extrae material
subyacente y se deposita en otra manta.
M-04: TRANSPORTE DE SEDIMENTOS Ing. César Terá n Guevara.

– Para el caso de que existan depó sitos en los que prevalezca la arena, es
conveniente tomar muestras adicionales en las que no se retire la capa
superficial.

• La Universidad del Valle usó los siguientes conceptos para la toma de


muestras en el río Cauca, CVC/Corporació n Autó noma Regional del Valle del
Cauca (2004):

1. Navegació n con el GPS hasta encontrar las coordenadas de la secció n a


muestrear (previamente seleccionada en oficina).

2. Una vez ubicada la secció n se evaluó la conveniencia o no de realizar en


ella el muestreo. En algunas ocasiones los sitios no eran los má s
representativos por encontrarse en curvas, por lo cual la ubicació n se cambió
ligeramente hasta encontrar una secció n más representativa.

3. Sobre la secció n se ubicaba la embarcació n en la vertical de muestreo


(franja derecha, centro o franja izquierda).

4. Extracció n de la muestra por medio de la Draga Pettersen o el Tubo


Cilíndrico. En términos generales, el Tubo Cilíndrico fue utilizado para el
muestreo cuando se observaba que la draga no recuperaba un volumen
suficiente de muestra. Esto ocurría generalmente cuando se encontraban
materiales gruesos (gravas y arenas gruesas).

5. Empaque y rotulació n de la muestra para ser enviada al laboratorio. Fue


necesario utilizar doble bolsa con adhesivo externo para garantizar la
identificació n de la muestra en laboratorio, ya que en el proceso de
almacenamiento en la lancha, transporte y en general con la manipulació n, los
ró tulos se deterioraban por la humedad.” CVC/Corporació n Autó noma Regional
del Valle del Cauca.

3.2. Métodos de muestreo en ríos de gravas y guijarros

El documento de la CVC/Corporació n Autó noma Regional del Valle del Cauca


(2004), incluye lo siguiente:

“Los métodos de muestreo y aná lisis del material del lecho de río de gravas y
guijarros son variados. Debido a la gran variabilidad espacial y temporal en la
composició n de los materiales del lecho que normalmente presentan los ríos de
gravas y piedras, lograr una adecuada caracterizació n de los materiales del
fondo es una tarea bastante difícil. El investigador debe determinar los sitios de
muestreo, el período de muestreo, la(s) capa(s) a muestrear, el procedimiento
de recolecció n de la muestra y el tipo de aná lisis a efectuar para la muestra
M-04: TRANSPORTE DE SEDIMENTOS Ing. César Terá n Guevara.

tomada. Todo ello con el fin de garantizar la representatividad del material del
fondo del río.

El material del lecho de un río de gravas y guijarros se puede muestrear


bá sicamente de dos formas:

A. Muestreo volumétrico: se toma un volumen o masa de sedimentos de


una determinada capa o estrato del fondo del río.

B. Muestreo superficial: se colecta un determinado nú mero de partículas


o sedimentos de la superficie del lecho (capa superficial) en un á rea
determinada

El muestreo superficial a su vez puede realizarse de 3 maneras diferentes:

B.1 Muestreo de área: Se consideran para el aná lisis todas las partículas
que se encuentran dentro de un área predeterminada del lecho del cauce.
Existen diferentes métodos para tomar y analizar la muestra:

a) Muestreo por adhesión: las partículas son marcadas (con pintura, cera,
pasta de flú or, arcilla, etc.) y luego recogidas para su aná lisis. Este método es
recomendado para lechos con grandes cantidades de arenas y gravas.

b) Muestreo fotográfico: se toma una fotografía vertical de un área


determinada del suelo. La distribució n de tamañ os de los sitios es obtenida del
análisis posterior de la fotografía.

c) Muestreo manual: el técnico toma manualmente todas las partículas


dentro del á rea preestablecida. Es un método recomendado para lechos de
gravas gruesas, guijarros y piedras, ya que las partículas má s pequeñ as, como
arenas y gravas finas, son difíciles de colectar manualmente.

B.2 Muestreo de malla: Se establece una malla sobre la superficie del lecho
y las partículas que se encuentran debajo de los puntos de la malla constituyen
la muestra; ésta puede ser analizada como frecuencia por peso o frecuencia por
nú mero. También es posible tomar una fotografía vertical de la superficie del
lecho y medir los tamañ os de las partículas que se hallan bajo los puntos
coordenados de una malla sobrepuesta sobre la fotografía.

B.3 Muestreo de transectos: Se seleccionan y recolectan manualmente las


partículas que se hallan a distancias iguales a lo largo de una o má s líneas rectas
(transectos).”
M-04: TRANSPORTE DE SEDIMENTOS Ing. César Terá n Guevara.

3.2.1. Análisis de frecuencias

La muestra recolectada es dividida en clases o rangos de tamañ os, donde cada


clase contiene un porcentaje determinado de la muestra original. Estos
porcentajes se pueden también considerar como frecuencias de ocurrencia. Hay
dos modos de calcular estas frecuencias.

a) Frecuencia por peso: La frecuencia de cada rango o intervalo de tamañ os


se expresa como el porcentaje en peso de la muestra original que cae en el
intervalo. El tradicional método de aná lisis por tamizado corresponde a este
tipo de aná lisis.

b) Frecuencia por nú mero: La frecuencia de cada intervalo de tamañ os se


expresa como el porcentaje en nú mero del total de partículas de la muestra
original que cae en el intervalo.

3.2.2. Muestreo de transectos

Un procedimiento especialmente desarrollado para lechos de grava fue


propuesto por Wolman en 1954 y consiste en el conteo aleatorio de sedimentos
(frecuencia por nú mero). El procedimiento se puede resumir así:

1. Una vez seleccionada la secció n en el cauce se determina el ancho


promedio B de la secció n.

2. Se determina un á rea de ancho B a cada lado de la secció n de aforo; en


esta á rea se distribuye una retícula o malla de un ancho tal que contenga al
menos entre 70 a 100 interceptos.

3. En cada intercepto se mide el eje medio de las partículas que sean


susceptibles a ser retiradas del lecho (desde grava muy fina ¿2 mm hasta cantos
grandes < 180 mm). Para las partículas embebidas o las que son demasiado
grandes para ser movidas de su lugar, se mide la menor longitud de los ejes
expuestos.

4. Los valores medidos se agrupan por rango de tamañ os para con esto
preparar la curva granulométrica del material. En la ¡Error! No se encuentra el
origen de la referencia10, se indican los rangos de sedimentos utilizados y un
conteo aleatorio de partículas típico del estudio.

5. Se construye la curva granulométrica y se determinan los diá metros


característicos segú n las necesidades ( D90, D84 , D75, D65, D50, D16, etc.).

El conteo aleatorio de sedimentos es fá cil de implementar en campo y


proporciona una medida real y directa de los tamañ os medios presentes en una
determinada corriente. El tamañ o medio de las partículas así obtenido es usado
M-04: TRANSPORTE DE SEDIMENTOS Ing. César Terá n Guevara.

en fó rmulas para el cá lculo de la rugosidad y en fó rmulas de resistencia al flujo.

Tabla 10: Ejemplo de conteo aleatorio de partículas para el río Cofre, aguas
arriba del cruce con la vía Panamericana. Universidad del Cauca (2005).

3.3. Selección del método de muestreo

El documento de la CVC/Corporació n Autó noma Regional del Valle del Cauca


(2004), incluye lo siguiente:

El tradicional método volumétrico o másico es la ú nica técnica de muestreo


disponible que realmente no es sesgada, ni hacia los materiales finos ni hacia
los materiales gruesos. Sin embargo, este método tiene dos inconvenientes: (i)
no es prá ctico cuando se trata de ríos de grava y piedra, debido a que
generalmente se requiere recolectar muestras muy voluminosas y pesadas para
garantizar la representatividad de la muestra, ya que ésta debe ser
suficientemente grande para que sea independiente de los tamañ os de las
partículas individuales; y, (ii) el método no es aplicable para muestrear las
capas superficiales del lecho, por cuanto muestrear un volumen
predeterminado implica muestrear un determinado espesor del fondo del
cauce, es decir, muestrear partículas de sedimento que se hallan por fuera de
dicha capa. Esto es, una capa con espesor de una partícula no puede ser
muestreada volumétricamente.

Para la selecció n del método de muestreo de acuerdo con Kellerhals y Bray se


deben considerar tres aspectos: (i) debe muestrearse la població n correcta. Por
ejemplo, si se investiga la rugosidad del cauce, debe muestrearse la capa
superficial; (ii) el procedimiento debe ser eficiente, generando un má ximo de
resultados ú tiles para el tiempo y los recursos disponibles; y, (iii) la
distribució n de tamañ os de gravas obtenida debe ser comparable con los datos
M-04: TRANSPORTE DE SEDIMENTOS Ing. César Terá n Guevara.

en los se basan la mayoría de las teorías aceptadas sobre el transporte de


sedimentos e hidrá ulica fluvial. Estas teorías tratan generalmente con material
del lecho en el rango de arenas y utilizan habitualmente métodos de muestreo
volumétrico y aná lisis por peso (tamizado) para describir la composició n del
material del lecho y del sustrato. Todos los demá s procedimientos de muestreo
y análisis deberían ser equivalentes al muestreo volumétrico y aná lisis por
peso, o en caso contrario, los resultados deben convertirse a su equivalente
antes de usarlos (Kellerhals y Bray. 1971).

Diferentes métodos de muestreo y aná lisis aplicados al mismo lecho o depó sito
de materiales producen diferentes distribuciones de tamañ o de partículas
(Bunte y Abt, 2001). Debido a que las partículas grandes ocupan un mayor
volumen que las partículas má s pequeñ as para idéntica á rea superficial, el
muestreo por á rea tiende a ser distorsionado o sesgado hacia los tamañ os de
gravas má s gruesos (Fripp, 1991). Así, muestras superficiales (muestreo por
área) y analizados por frecuencia por peso producen distribuciones má s
gruesas que las muestras volumétricas analizadas por peso (Bunte y Abt, 2001).
En consecuencia, las muestras colectadas y analizadas por diferentes métodos
deben ser transformadas a una misma categoría.

Los diferentes procedimientos de muestreo pueden finalmente clasificarse en 3


tipos: volumétrico, por á rea y por malla. Los métodos de aná lisis de tamañ os
son de dos clases: frecuencia por peso y frecuencia por nú mero. Por lo tanto,
resultan seis posibles formas de muestrear y analizar la distribució n de
tamañ os del material del lecho de un cauce.

A veces es necesario combinar dos o má s métodos de muestreo para obtener


una distribució n de tamañ os de partículas representativa, éste se denomina
método híbrido. Algunos autores han propuesto diferentes métodos y modelos
para convertir las distribuciones de tamañ os de partículas entre las diferentes
categorías de muestreo y aná lisis. El proceso de conversió n es complicado
debido a que el sesgo hacia los materiales gruesos o hacia los finos no es lineal
y, ademá s, varía con el tamañ o de los granos.

El método o modelo de conversió n propuesto por Kellerhals y Bray (1971) es


uno de los más usados y permite convertir una curva granulométrica obtenida
empleando un determinado método de muestreo ( M 1) y una técnica de
análisis de tamañ os ( A 1) a otro método de muestreo ( M 2) y de aná lisis de
tamañ os ( A 2), segú n la siguiente expresió n:

PM 1 , A 1 D ix
P M 2, A 2= (52)
∑ ( P M 1 , A 1 Dxi ) (3-1)
M-04: TRANSPORTE DE SEDIMENTOS Ing. César Terá n Guevara.

P M 1 , A 1 = porcentaje de la fracció n de tamañ o Di, obtenido empleando el método


de muestreo M1 de aná lisis A1.

P M 2, A 2 = porcentaje equivalente de la fracció n de tamañ o Di, si se emplea el


método de muestreo M 2 y de aná lisis A 2.

Di = diá metro medio geométrico de la fracció n de tamañ o entrei e i+1.

X = exponente que depende de los métodos de muestreo y los tipos de aná lisis
(empleados y equivalentes).

En la Tabla 11: se presenta el valor del exponente X a utilizar en la expresió n


de Kellerhals y Bray para convertir la curva granulométrica obtenida por un
cierto método de muestreo y de aná lisis a una equivalente empleando otro
método de muestreo y de aná lisis.

Tabla 12: Valor del exponente X para conversió n de curvas granulométricas


entre diferentes métodos de muestreo y técnicas de aná lisis. CVC/Corporació n
Autó noma Regional del Valle del Cauca (2004).

3.4. Muestreo de la carga del lecho

Los muestreadores para sedimento de fondo pueden ser de varios tipos y su


escogencia depende en gran medida del tipo de material a muestrear.

El muestreador Helley – Smith (Emmett, 1979) se recomienda para lechos de


gravas y arenas (Figura 14). Consiste en una boquilla de secció n rectangular
unida a una bolsa permeable donde se recoge el material. El pó rtico que
asegura el muestreador contiene un dispositivo (aleta) para alinear el aparato a
la corriente. Tanto la boquilla como la malla que conforma la bolsa difieren en
dimensió n para lechos de grava o arena.
M-04: TRANSPORTE DE SEDIMENTOS Ing. César Terá n Guevara.

Figura N°14: Muestreador Helley - Smith.

El muestreador US-BM-54 (Figura 15) se utiliza para tomar muestras de


material del fondo (Bed material, 1954: BM-54). El dispositivo está hecho de
hierro fundido, equipado con aletas direccionales para el flujo y es mantenido
en posició n mediante un cable de acero desde la superficie (o desde la taravita).
El cable se distensiona automá ticamente cuando el muestrador toca el fondo e
inmediatamente se abre el dispositivo ubicado en la parte inferior del
muestreador para recoger la muestra de los primeros 5 cm del lecho; el
dispositivo se cierra inmediatamente para no permitir que la muestra sea
lavada mientras se sube el muestreador hasta la superficie.

Figura N°15: Muestreador US-BM-54.

Existe otro tipo de muestradores má s manuales, recomendados donde el


material del fondo sea má s fino que la grava. Ellos son del tipo draga, cucharó n
o almeja. El muestreador se deja llegar al fondo para recoger el material de las
dos primeras pulgadas del fondo. Ellos son similares excepto que, para su
operació n, el primero utiliza un cable y el segundo un eje.

Para el muestreo de la carga de fondo en el río Cauca, se usó una Draga tipo
Pettersen cuando el sedimento se trataba de arenas, limos, arcillas y gravas
finas, la cual se modificó para asegurar un cierre más hermético y evitar el
lavado de los sedimentos finos. También se usó un Tubo Cilíndrico de Boca
M-04: TRANSPORTE DE SEDIMENTOS Ing. César Terá n Guevara.

Có nica para extracció n de materiales tipo grava y arena. En cualquiera de los


casos la Universidad del Valle hizo varios intentos con ambos equipos hasta
obtener una muestra lo má s representativa posible, sin lavado de finos y en
cantidad suficiente para el aná lisis granulométrico, CVC/Corporació n
Autó noma Regional del Valle del Cauca (2004).

Los equipos se operaron desde una lancha que ofrecía una plataforma segura
para el muestreo y la potencia necesaria para la navegació n. También se usó un
equipo GPS para la navegació n y la localizació n de las secciones de muestreo.

3.5. Muestreo del sedimento en suspensión

La concentració n de sedimentos en suspensió n varía con la profundidad dentro


de una misma secció n. Al tomar la muestra se debe registrar la velocidad del
flujo, la profundidad y la descarga líquida. La velocidad generalmente se mide a
0.35 DC por encima del lecho; DC es el diá metro característico de la muestra.
Estos muestreadores pueden ser clasificados como instantá neos o integradores.

– Muestreadores instantáneos: captan un volumen de mezcla que pasa


en un determinado instante por el sitio de muestreo (y en cualquier
profundidad). El muestreador está provisto de vá lvulas que permiten la
apertura o cierre instantá neos y la entrada del sedimento puede ser horizontal
o vertical.

– Muestreadores integradores: son más utilizados que los instantá neos;


toman muestras sobre un período largo de tiempo para analizar fluctuaciones
en la concentració n de sedimento. Es el muestreador de mayor uso (Figura
16). Existen dos clases de muestreadores integradores; los que toman una
muestra en un solo punto y los que la toman mientras se desplazan en la línea
vertical una cierta distancia. En general, consisten de un recipiente, una
boquilla, un orificio para permitir la salida de aire o una vá lvula de control. La
boquilla de admisió n debe ser calibrada para que la muestra entre a una
velocidad aproximada del 3 al 5 % de la velocidad de la corriente.

N
QS =γ Q Ć=γ b ∑ C i V i hi
'
(53)
i

∀i
V i=
An T

(54)

C i = concentració n medida, igual a la relació n del peso del sedimento y el peso


de la mezcla recogida en el i-ésimo muestreo vertical
M-04: TRANSPORTE DE SEDIMENTOS Ing. César Terá n Guevara.

∀i = volumen de la muestra en el i-ésimo muestreo vertical

T = tiempo total para obtener la muestra i

An = área de la secció n de la boquilla de admisió n7

b = incremento en el ancho entre cada muestra

N = nú mero de muestras verticales

QS = descarga de sedimento
'

El USDH-48 (Figura 16), es un muestreador manual para corrientes vadeables


o en donde la profundidad sea menor de 5 m. El tamañ o de la boquilla es de 0.64
mm y recoge muestras desde 9 cm por encima del fondo. La velocidad má xima
de la corriente debe ser menor de 2.7 m ⁄ s.

Figura 16: Muestreadores integradores de profundidad para sedimentos en


suspensió n (Simons, 1977).

– El muestreador de bolsa plegable (Collapsible bag sampler) Figura 17,


consiste en un recipiente cilíndrico perforado con abrazaderas metá licas unidas
M-04: TRANSPORTE DE SEDIMENTOS Ing. César Terá n Guevara.

a un vástago para desplazar el muestreador en la vertical a través del flujo.


Dentro del cilindro se introduce una bolsa plá stica sin aire (plegada) que se
llena de agua y sedimento mientras el muestreador se desplaza a una velocidad
constante en toda la profundidad. El material ingresa a la bolsa a través de una
boquilla (existen aperturas diferentes dependiendo de la velocidad, ancho de la
corriente y profundidad del flujo) previamente seleccionada para las
condiciones de flujo con el fin de que el cilindro no se llene mientras se hace el
barrido en cada una de las verticales (las mismas donde se mide la velocidad)
de la secció n de aforo.

Para profundidades pequeñ as (menos de 5 m) el cilindro perforado se


reemplaza por un frasco plá stico (cilíndrico) al que se le colocan las mismas
boquillas; en este caso, las boquillas tienen un orificio para la salida de aire en
la parte superior. Cuando se le coloca al cilindro perforado, el orificio se tapa
antes de ingresar el muestreador a la corriente.

Figura N°17: Muestreador de bolsa plegable.

La velocidad de barrido (descenso y ascenso en cada velocidad) es proporcional


a la velocidad del flujo, por lo que el tiempo de barrido es de
t=2 h/0.2 V =10 h /V .

El sedimento en suspensió n se toma a lo largo de una vertical dada, barriéndola


en un tiempo total t en el cual t /2 será para bajar el muestreador hasta el fondo
y t /2 para subirlo hasta el punto de partida. El tiempo total se calcula con base
en la velocidad del flujo que puede medirse a partir del dato de aforo “in situ”.
La expresió n dada a continuació n fue utilizada para obtener el tiempo total por
vertical en el cual se debía tomar una muestra de la secció n analizada.

20 h́
t=

M-04: TRANSPORTE DE SEDIMENTOS (55)
Ing. César Terá n Guevara.

t = tiempo en cada vertical

h́ = profundidad media del flujo

V́ = velocidad media del flujo.

El tiempo obtenido se multiplica por el nú mero de secciones a evaluar y este


será el tiempo total. Con éste y la velocidad y mediante las curvas de la Figura
18, se escoge la boquilla apropiada para obtener la muestra en suspensió n.

Figura N°18: Boquillas para el método de bolsa comprimible.

4. Cuantificación del transporte de sedimentos.


M-04: TRANSPORTE DE SEDIMENTOS Ing. César Terá n Guevara.

Se han desarrollado y propuesto una gran cantidad de métodos para cuantificar


el transporte de sedimentos. Cada uno de ellos sirve para obtener alguno de los
componentes de la carga de sedimentos

El transporte se sedimentos por unidad de ancho de canal, o sea el transporte


unitario de sedimentos, se expresa en peso y se designa con la letra g x o en
volumen y se designa con la letra S x, tal como se ve en la Tabla 4.1. El volumen
obtenido con las ecuaciones de transporte es el ocupado por las partículas
só lidas sin dejar huecos entre ellas, por lo tanto la relació n entre g x y S xes:

gs =γ s + S x (56)

[ K ⃗g / s−m ]
g x= transporte unitario de sedimentos expresado en peso
[ N /s−m ]
S x= transporte unitario de sedimentos expresado en volumen [ m 3 /s−m ]

El subíndice depende del tipo de transporte de sedimentos, tal como se ve en la

Tabla12: Notació n para transporte de sedimentos. Maza A., J. A. y García F., M.


(1996).

El transporte total de sedimentos se obtiene así:

G x =g x B (57)

S x =S x B (58)

G x = transporte unitario de sedimentos expresado en peso


[ (K ⃗g )/s ]
[ N /s ]
S x = transporte unitario de sedimentos expresado en volumen [ m 3 /s ]
M-04: TRANSPORTE DE SEDIMENTOS Ing. César Terá n Guevara.

El volumen real ∀ x que ocuparía el material transportado, si llegara a


depositarse, se obtiene de la siguiente relació n:

sx B ∆ t gx B ∆ t S ∆t G ∆t
∀ x= = = x = x (59)
(1−n) γ s (1−n) (1−n) γ s (1−n)

B = ancho del canal

∆ t = intervalo de tiempo

n = porosidad del material depositado

∀V (60)
n=
∀S

Los métodos má s completos son aquellos con los que se obtiene el transporte
total, sin embargo, no en todos los problemas reales es necesario cuantificarlo.
En la Tabla 13 se ilustran algunas de las necesidades de calcular la carga de
sedimentos segú n el tipo de proyecto y de acuerdo con la siguiente
nomenclatura:

Tabla 13: Problemas hidrá ulicos y cá lculos de transporte de sedimentos


requeridos. Maza A., J. A. y García F., M. (1996).
M-04: TRANSPORTE DE SEDIMENTOS Ing. César Terá n Guevara.

4.1. Cálculo del transporte total de lecho o carga de material de fondo (


gb , Sb )

Dentro de este grupo se incluyen los métodos que permiten evaluar el


transporte total del fondo, sin distinguir qué parte es arrastrada en la capa del
fondo y qué parte es transportada en suspensió n.

Entre los métodos que han sido propuestos para evaluar la carga de material de
fondo está n los siguientes:

Laursen (1958); Colby (1964); Bishop, Simons y Richardson (1965); Engelund


y Hansen (1967); Graf y Acaroglu (1968); Shen y Hung (1971); Cartens y
Altinbilek (1972); Yang (1973); Ackers y White (1972 - 1973); Ranga-Raju,
Garde y Bhardwaj (1981); Karim y Kennedy (1981 -1990);

Brownlie (1982); Smart (1984); Pacheco-Ceballos (1989); y Mora, Aguirre y


Fuentes (1982).

A continuació n se presentan los métodos propuestos por Laursen y Engelund y


Hansen.

4.1.1. Método de Laursen

“En 1958, Laursen propuso su método para obtener el transporte de fondo,


mediante el cual y dentro de un cierto rango, también es posible conocer el
arrastre en la capa de fondo en suspensió n”. García F., M. y Maza A., J. A. (1996).

La ecuació n propuesta por Laursen se derivó de un aná lisis teó rico, que
concluyó que el transporte de fondo depende en gran medida de los siguientes
pará metros.

V ¿ σo
;
w σc ( )
−1 (61)

V ¿ =√ gRS (62)

Cuando B ≥ 40 hse acepta

V ¿ =√ ghS (63)

Criterio de Rubey, para partículas naturales, con factor de forma


aproximadamente igual a 0.7, se puede calcular con la relació n:

w=F 1 ( g ∆ D )0.5 (64)

(65)
M-04: TRANSPORTE DE SEDIMENTOS Ing. César Terá n Guevara.

0.5 0.5
2 36 v 2 36 v 2
F 1= ( +
3 g ∆ D3 ) ( −
g ∆ D3 )
γ s−γ
∆=
γ

τ o=τ 'o=γhS

τ c =0.039 ( γ s−γ ) D

La ecuació n propuesta por Laursen fue:

7 /6
Dm τ' o (69)
gb =γq ( )(
h τ cm )
−1 ∅ Lm [ k ⃗g /s−m ]

7/ 6
γ D τ' o (70)
Sb = q m
γs h ( )( τ cm )
−1 ∅ Lm [ m3 / s−m ]

Dm =
∑ D i pi
100 (71)
1 /3
γ V 2 D 50
'
τ o=
58g h ( )
(72)
τ cm=0.039 ( γ s−γ ) D m

V¿
∅ Lm=f ( )
w (73)

q=Q/ B
(74)

(75)
Convenciones

gb = transporte unitario total del fondo expresado en peso

Sb = transporte unitario total del fondo expresado en volumen

B= ancho del cauce

Dm = diá metro medio de la muestra


M-04: TRANSPORTE DE SEDIMENTOS Ing. César Terá n Guevara.

Di= diá metro medio de cada tamañ o de clase o fracció n

h = profundidad del agua

Pi = tanto por ciento de material retenido en cada malla

q = caudal unitario

Q = caudal

R = radio hidrá ulico

S= pendiente del cauce

V = velocidad del flujo

V ¿= velocidad cortante

w = velocidad de caída de las partículas con diá metro D

τ o = esfuerzo cortante producido por la corriente

τ cm= esfuerzo cortante crítico

∅ Lm= funció n denominada pará metro de transporte de Laursen

γ = peso específico del agua

γ s = peso específico de las partículas en suspensió n

v= viscosidad cinemá tica


M-04: TRANSPORTE DE SEDIMENTOS Ing. César Terá n Guevara.

Figura N°19: Valores de la funció n ∅ Lm segú n Laursen. García F., M. y Maza A., J.
A. (1996).

Comentarios

“Las Ecuaciones 67, 68 y 69 del método de Laursen son dimensionalmente


correctas, por lo que se pueden aplicar con cualquier sistema congruente de
unidades.

En la Tabla 14 se observan dos curvas: una continú a para el transporte de


fondo y otra punteada para el arrastre en la capa de fondo. Si se toma el valor
de ∅ Lm dado por la línea continua y se sustituye en las Ecuaciones 68 o 69 se
obtiene el transporte total de fondo ( gb o sb , respectivamente). Si en cambio, se
toma el valor de ∅ Lm dado por la línea punteada, se obtiene solo gbb o sbb que es
el arrastre en la capa de fondo. Por diferencia se logra conocer el transporte de
fondo en suspensió n.
¿
En la misma figura se observa también que si V /wi ≤0.5 prá cticamente todo el
transporte de partículas de diá metro Di tiene lugar en la capa de fondo. En
cambio, si V ¿ /wi=10 el arrastre en la capa de fondo para partículas de
diá metro Di solo representa el 2 % del transporte total del fondo. Este
¿ ¿
porcentaje disminuye rápidamente al aumentar V / wi , por lo que si V /wi ≥10 ,
el transporte del material del fondo se produce casi exclusivamente como
transporte de fondo en suspensió n, gbS o sbs .” García F., M. y Maza A., J. A.
(1996).

Rangos probados y límites de aplicación

El método de Laursen solo se aplica a sedimentos naturales con peso específico


de 2650 k g /m3 aproximadamente, ya que todos los datos en los que él se basó ,
tanto de laboratorio como de campo, se obtuvieron para partículas con ese
peso específico.

Laursen utilizó resultados de otros investigadores así como los obtenidos por
él. Los primeros utilizaron un canal de 0.267 m de ancho por 12.20 m de largo;
mientras que Laursen utilizó un canal de 0.918 m de ancho y 27.4 m de largo.
Los diá metros de las partículas variaron entre

0.011 mm y 4.08 mm . Las pruebas se hicieron con mezclas desde bien graduadas
hasta casi uniformes.” García F., M. y Maza A., J. A. (1996).
M-04: TRANSPORTE DE SEDIMENTOS Ing. César Terá n Guevara.

4.1.2. Método de Engelund y Hansen

“Engelund y Hansen presentaron su ecuació n de transporte total del fondo en


1967. Ella está basada en los resultados de cuatro conjuntos de experimentos
en que utilizaron arenas.” García F., M. y Maza A., J. A. (1996).
1 /2
D50 (76)
gb =0.05 γ s V 2 τ ¿ 3/ 2 ( )
g∆
[ k ⃗g /s−m ]

1/ 2
D 50
Sb =0.05 V τ
2
¿
3 /2
( )
g∆
[ m3 /s−m ] (77)

τO RS
τ ¿= =
( γ s −γ ) D50 ∆ D 50
(78)

Para cauces anchos, B>40 m , se tiene:

hS (79)
τ ¿=
∆ D 50

( γ s−γ ) (80)
∆=
γ

τ o=γRS (81)

Convenciones

gb = transporte unitario total del fondo expresado en peso


sb = transporte unitario total del fondo expresado en volumen
D50= diámetro de las partículas de la mezcla, tal que el 50% en peso
respectivamente son menores que esos valores
h = tirante o profundidad de la corriente
R = radio hidrá ulico
S =pendiente hidrá ulica
V =velocidad media del flujo
∆ = densidad relativa de las partículas sumergidas
τ O = esfuerzo cortante que el flujo ejerce sobre el fondo
τ ¿= pará metro de Shields
M-04: TRANSPORTE DE SEDIMENTOS Ing. César Terá n Guevara.

γ S = peso específico del sedimento

Comentarios y límites de aplicación

“Como se indicó en el principio, Engelund y Hansen obtuvieron su ecuació n


basada en cuatro conjuntos de experimentos reportados por Guy en 1966, y
que fueron realizados en un canal de
2.44 m de ancho y 45.72 m de largo. Los diá metros medios de las arenas
utilizados en sus experimentos fueron de 0.19 mm, 0.27 mm, 0.45 mm y 0.93
mm, mientras que la desviació n está ndar geométrica de los diá metros fue de
1.3 para las arenas má s finas y de 1.6 para las restantes. Engelund y Hansen
recomiendan que el método se aplique para arenas, siempre y cuando D50 sea
mayor que 0.15 mm, y la desviació n está ndar geométrica de los diá metros sea
menor que dos (σ g<2).

Las Ecuaciones 75 a 81 se pueden utilizar en cualquier sistema congruente de


unidades, ya que son dimensionalmente correctas.” García F., M. y Maza A., J. A.
(1996).

4.2. Cálculo de la carga de sedimentos en el fondo ( gbb , sbb )

“Entre los métodos para evaluar el arrastre dentro de la capa de fondo, cuyo
espesor (aproximado es igual a dos veces el diá metro de las partículas”, se
encuentran segú n Maza A., J. A. y García F., M. (1996), los propuestos por:

“DuBoys (1879) y Straub (1935); Schoklitsch (1914, 1950); Shields (1936);


Meyer-Peter y Mü ller (1948); Kalinske (1947); Levi (1948); Einstein (1942) y
Einstein-Brown (1950); Sato, Kikkawa y Ashida (1958); Rottner (1959); Garde
y Albertson (1961); Frijlink (1962); Yalin (1963); Pernecker y Vollmer (1965);
Inglis y Lacey (l968) y Bogardi (1974)”.

“De la lista indicada, los siete primeros métodos fueron obtenidos y


presentados antes que Einstein estableciera el concepto de capa de fondo, y por
tanto, existía la duda razonable de si dichos métodos permitían valuar
ú nicamente el transporte en esa capa, o bien, si daban el transporte total del
fondo. Al analizar varias fó rmulas de transporte, Díaz y Maza (1986)
encontraron que las fó rmulas de Shields, Pernecker y Vollmer, Einstein-Brown,
Bogardi y Levi pueden dar el transporte del fondo”. García F., M. y Maza A., J. A.
(1996).

A continuació n se presentan los métodos de Schoklitsch y de Meyer-Peter y


Mü ller.
M-04: TRANSPORTE DE SEDIMENTOS Ing. César Terá n Guevara.

4.2.1. Método de Schoklitsch


Schoklitsch propuso en 1914, una primera ecuació n para evaluar el arrastre de
fondo, la modificó varias veces hasta que en 1950 fue dada a conocer en su
versió n final.

gbb=2500 S1 /3 ( q S7 / 6−2.351∗10−5 ∆5 /3 D 7/ 18) [ k ⃗g / s−m ] (82)

2500 1/3
Sbb= S ( q S 7/ 6−2.351∗10−5 ∆5 /3 D 7/ 18 ) [ m3 / s−m ] (83)
γs

( γ s−γ ) (84)
∆=
γ

Convenciones

gbb = transporte unitario de lecho en el fondo o carga de fondo expresado en


peso
sbb = transporte unitario de lecho en el fondo o carga de fondo expresado en
volumen
D = diá metro representativo

Cuando el tamañ o de las partículas no es uniforme, Schoklitsch recomienda que


se utilice como diá metro representativo de la mezcla el D40 .

D = D40
S= pendiente hidrá ulica del río
q = caudal unitario
∆ = densidad relativa de las partículas sumergidas
γ s = peso específico del sedimento

Rango de los datos y límites de aplicación

Schoklitsch propuso varias fó rmulas de transporte, para lo que utilizó los datos
obtenidos por Gilbert y resultados de observaciones realizadas en los ríos
Danubio y Aare. Por ello, no se dan límites de aplicació n a las ecuaciones
M-04: TRANSPORTE DE SEDIMENTOS Ing. César Terá n Guevara.

presentadas, aparte de los ya indicados en funció n del diá metro de las


partículas. García F., M. y Maza A., J. A. (1996).

4.2.2. Método de Meyer – Meter y Müller


Las fó rmulas de Meyer - Peter y Mü ller para calcular el arrastre en la capa de
fondo, fueron obtenidas a partir de experiencias realizadas de 1932 a 1948 en
el Instituto Tecnoló gico Federal de Zurich. Un resumen de todas ellas fue
presentado en 1948. Los autores mencionados efectuaron cuatro series de
pruebas, al final de las cuales propusieron una fó rmula para cada una, aunque
la ú ltima, abarca todos los resultados obtenidos y por tanto, es de cará cter
general, por lo que es la que se incluye en este texto. García F., M. y Maza A., J. A.
(1996).

Dichas pruebas se hicieron Ira material granular con las siguientes


características:

1. Partículas de diá metro uniforme con peso específico de 2680 Kg/m3.

2. Partículas de diá metro uniforme, pero usando en cada prueba, uno de tres
materiales con peso específico diferente.

3. Partículas de diferentes tamañ os; es decir, granulometrías má s o menos


graduadas, con peso específico de 2680 Kg/m3.

4. Igual que la 3, pero realizando ademá s pruebas para otros dos


materiales con pesos específicos diferentes.

3/ 2
' 3 /2
gbb=8 γ s ( g ∆ D 3 1 /2
m ) [( )
n
n
¿
τ −0.047 ] [ k ⃗g / s−m ] (85)

3/2 3/ 2
n'
sbb=8 ( g ∆ D 3 1 /2
m ) [( )
n
¿
τ −0.047 ] [ m3 / s−m ]
(86)

' D 901 /6
n=
26
(88)
R 2/ 3 S1 /2 (87)
n=
V

( γ s−γ ) (89)
∆=
γ

(90)
M-04: TRANSPORTE DE SEDIMENTOS Ing. César Terá n Guevara.

¿ τo
τ =
( γ s −γ ) D m
τ o=γRS

γRS RS
τ ¿= =
( γ s −γ ) D m ∆ D m

Para canales muy anchos, B>40 m , se tiene:

hS (93)
τ ¿=
∆ Dm

Convenciones

gbb = transporte unitario de lecho en el fondo o carga de fondo expresado en


peso
sbb = transporte unitario de lecho en el fondo o carga de fondo expresado en
volumen
D m= diá metro medio
g= aceleració n debida a la fuerza de la gravedad
n' = rugosidad debida a las partículas de sedimento en fondo plano.
n = coeficiente de rugosidad de Manning
∆ = densidad relativa de las partículas sumergidas
γ = peso específico del agua
γ s = peso específico del sedimento
τ ¿= pará metro de Shields

Rango de los datos y límites de aplicación

Mínimo Máximo
Tamañ o de las partículas ( D y Dm)
Uniformes y no uniformes en m 0.0004 0.030
Pesos específicos, en Kgf /m3 . 1,250 2,680 4,200
Pendientes 0.0004 0.020
Tirantes, en m 0.01 1.20
Gastos líquidos, enm3 /s 0.002 4.00
Secció n del canal en m 2.0 x 2.0
M-04: TRANSPORTE DE SEDIMENTOS Ing. César Terá n Guevara.

Longitud del canal, en m 50.0

Las Ecuaciones 82 y 83 conviene utilizarlas para cauces con arena con diá metro
mayor de 0.0002 m, hasta grava gruesa con diá metro ≤ de 0.030 m.

5. Referencias
1. Chow, V. T., Hidrá ulica de los Canales Abiertos. Primera edició n, Editorial
Diana. México. 1982.
2. Comisió n Federal de Electricidad. Manual para la toma y el Aná lisis de
Muestras de Sedimentos Transportados por las Corrientes. México. 1987.
3. CVC/Corporació n Autó noma Regional del Valle del Cauca (2000).
Caracterizació n de ríos tributarios del río Cauca. Tramo Salvajina – La
Virginia. Volumen IV. Universidad del Valle. Facultad de Ingeniería.
Escuela de Ingeniería de Recursos Naturales y del Ambiente (EIDENAR).
Santiago de Cali.
4. CVC/Corporació n Autó noma Regional del Valle del Cauca (2003).
Caracterizació n y modelació n matemá tica del río Cauca-PMC, Fase II.
Topografía y batimetría de ríos tributarios. Universidad del Valle.
Facultad de Ingeniería. Escuela de Ingeniería de Recursos Naturales y del
Ambiente (EIDENAR). Santiago de Cali.
5. CVC/Corporació n Autó noma Regional del Valle del Cauca (2004).
Caracterizació n y modelació n matemá tica del río Cauca-PMC, Fase II.
Muestreo sedimentoló gico del material de fondo del río Cauca y
principales tributarios. Tramo Salvajina-La Virginia. Volumen II.
Universidad del Valle. Facultad de Ingeniería. Escuela de Ingeniería de
Recursos Naturales y del Ambiente (EIDENAR). Santiago de Cali.
6. French. R. H. Hidrá ulica de Canales Abiertos. McGraw-Hill. México. 1988.
7. García F., M. y Maza A., J. A. (1997). Inicio de Movimiento y
Acorazamiento. Instituto de Ingeniería UNAM. México.
8. García F., M. y Maza A., J. A. (1996). Transporte de Sedimentos. Instituto
de Ingeniería UNAM. México.
9. García F., M. y Maza A., J. A. (1998). Origen y propiedades de los
sedimentos. Instituto de Ingeniería UNAM. México.
10. Maza, J. A., 1987, "Introduction to River Engineering", Divisió n de
Estudios de Postgrado, Facultad de Ingeniería UNAM.
11. Moreno A. y Castro F. Estimació n de la Resistencia al Flujo en Cauces
Naturales del Departamento del Cauca. Trabajo de grado. UNICAUCA.
2003.
12. Gary Parker, (2004). The Gravel River Bankfull Discharge Estimator.
13. Posada, L. (1994) “Transporte de Sedimentos”. Postgrado en
Aprovechamiento de los Recursos Hidrá ulicos. Universidad Nacional de
Colombia. Medellín: [s.n].
M-04: TRANSPORTE DE SEDIMENTOS Ing. César Terá n Guevara.

14. UNIVERSIDAD DEL CAUCA (2005). Evaluació n de las ecuaciones de


régimen en la zona Andina Caucana. IV Convocatoria de apoyo a
proyectos de investigació n y desarrollo tecnoló gico de la VRI.
15. Universidad del Cauca (2003). Memorias del curso-taller sobre Obras de
Control Fluvial.

También podría gustarte